EL PODEROSO CONQUISTADOR

William Marrion BrahamMarzo 29, 1958

Middletown, Ohio. E.U.A.

ermanezcan de pie por un momento mientras oramos. Nuestro amado Dios, te damos gracias en esta noche por el tiempo y el privilegio de juntarnos nuevamente para servirte. No

conocemos el significado que esta noche tendrá para nosotros, pero estamos confiando en Tu Gracia para que nos supla de todo aquello que tengamos necesidad.

P2.- Te pedimos que tengas misericordia de los que están tan necesitados de salvación en esta noche, que puedan venir a esa Fuente llena de la Sangre de las venas de Emmanuel, que los enfermos y afligidos vengan también a las aguas curativas, dejando esta noche sus muletas, sus camillas, enfermedades y achaques en el estanque. Señor, remueve el agua y dale gracia a Tu pueblo para que crea Tu Palabra y Tu Presencia; y que cuando salgamos en esta noche podamos decir como los que iban a Emaús: “¿No ardían nuestros corazones dentro de nosotros, mientras Él nos hablaba por el camino?” Porque lo pedimos en el Nombre de Jesús, Tu Hijo. Amén. Pueden tomar asiento.

3.- Los muchachos ya tienen las cintas y ésta será la última noche en que podrán venderlas. Todo lo que se haya de vender tiene que acabar esta noche, porque no vendemos los domingos. Hacemos… Yo siempre he hecho de eso una regla, no vender los domingos. Todas las cintas… Ellos tienen unos quinientos Mensajes de las veces cuando no estábamos roncos en las grandes líneas de oración. El señor Mercier las tiene allá atrás en el lugar donde está. Yo dije allá atrás, en el frente. Uds. las pueden obtener, ellos las venden muy económicas.

4.- Hace cierto tiempo pedí las cintas de un evangelista y costaron unos nueve dólares, los muchachos venden las de ellos, creo que por tres, apenas hacen lo suficiente para poder permanecer en los servicios

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conmigo. Este señor Mercier y el señor Goad, uno de ellos era católico y el otro no sé, no creo que haya pertenecido a alguna iglesia, ése es Gene.

5.- Ellos formaron algo así como un FBI para investigar si esas visiones aparecían en casa o no. Uds. ven un solo lado, Uds. aquí ven el lado menor de esto; es en casa cuando las verdaderas visiones aparecen. Aquí es lo que Uds. hacen con su fe, pero en casa es lo que Dios hace. En algún lugar cuando estamos solos o pescando, en alguna parte cuando tomamos un poco de tiempo para despejarnos.

6.- Teníamos libros, pero yo nunca escribí uno sino que el señor Lindsay lo escribe o lo escribió, mejor dicho; y el señor Stadklev escribió el otro. Pero se nos agotaron completamente, pronto conseguiremos algunos más. Ahora, mañana es el Sabbath y aquí hay buenos ministros que creen en este tipo de ministerio, están patrocinando y cooperando en esta reunión, ellos estarían muy contentos de tenerlos a Uds. en sus iglesias. Les diré que asistan a algunas de esas buenas iglesias mañana, si están aquí de visita. Estoy seguro que tendrán una cálida bienvenida y tal vez ellos se han encargado de esto. Mañana en la tarde habrá otro servicio aquí a las dos y media; luego mañana en la noche será el servicio de cierre a las siete y treinta. Nos alegraría verlos nuevamente en esas oportunidades confiando y creyendo que mañana en la noche, como de costumbre, será la noche más tremenda para la sanidad. Porque siempre hay esa gran expectativa de la espera, a ver si se entra o no.

7.- Generalmente eso prepara… Algunas veces por lo general en la última noche son sanados veinte veces más, porque se prepararon, vigilaron, esperaron y entonces ejercitan su fe. Ahora, si en su iglesia hay culto mañana en la noche, Uds. que están enfermos díganle a su pastor, y yo estoy seguro que él los excusará para que vengan, si es que no entran a la fila o se ora por Uds. esta noche.

8.- Si se le puede dar algo de crédito a la familia Branham, es a mi esposa. Ella es la que se para entre el público y yo. Hoy fui a buscarla y pensaba que yo era tímido, ella es peor que yo. Hablaba con ella sobre lo que les dije a Uds. anoche, después de haber nacido en el año 1909, tendría unos veinticinco años, aunque creo que debo convertirlo en veintisiete porque he estado predicando veintisiete años, así los demás años ya no cuentan, sólo los que he predicado y servido al Señor.

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9.- Le dije a mi esposa: “Querida, ¿pasarías hasta la plataforma?” Y ella respondió: “Me desmayaría”. Pero le voy a pedir que se ponga de pie por un momento para que les permita a Uds. conocer a la mujer más dulce del mundo, a mi esposa, la señora Branham. Gracias. Ella es muy tímida. Más tarde tendré noticias de esto. El Hno. Vayle le dijo: “Quiero llamarla hasta la plataforma Hna. Branham”. Y ella dijo que todavía tenía miedo de venir al culto por temor a que él lo hiciera, entonces esperó para venir conmigo.

10.- Ahora, en esta noche queremos leer las Escrituras en el libro de Apocalipsis capítulo 6; y para tomar un texto quiero leer los dos primeros versículos.

Vi cuando el Cordero abrió uno de los sellos,Y oí a uno de los cuatro seres vivientes decir

Como con voz de trueno: Ven y mira.

Y miré, y he aquí un caballo blanco;Y el que lo montaba tenía un arco;

Y le fue dada una corona, y,Salió venciendo y para vencer.

11.- Quiero tomar como tema por unos momentos: EL PODEROSO CONQUISTADOR. Hace como tres años Billy y yo hicimos escala en Lisboa, Portugal; y fuimos a la galería de los esclavos. Algunas de las cosas que estaban allí escritas estaban en inglés de manera que podíamos entenderlo. Entonces vimos que allí había un gran héroe, en este momento no puedo recordar su nombre, que la tomó; después que los turcos la habían controlado durante años, llegaron los españoles y apareció otro héroe que la tomó y toda la gloria… Héroes y conquistadores, héroes y conquistadores, así ha sido durante siglos. La palabra conquistador significa: Uno que ha vencido. Ésa es una palabra tremenda, es una palabra sobresaliente.

12.- Hace cierto tiempo fui donde estuvo Constantino cuando iba camino a Roma y andaba preocupado por esa batalla que se aproximaba. Algunos de sus soldados eran desde luego Cristianos y los Cristianos estaban todos sometidos bajo el imperio romano. Aquella noche mientras él estaba dormido, el Señor debió habérsele aparecido y soñó que veía una cruz blanca y una voz le habló diciendo: “Por medio de ésta conquistarás”.

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13.- Cuando yo leí eso por primera vez me sentí entusiasmado. “Por medio de ésta conquistarás.” Entonces a la medianoche levantó a todos sus soldados y los hizo pintar cruces blancas sobre sus escudos, porque era por medio de la cruz que iban a conquistar y lo hicieron. Hace como tres años tuve el privilegio de estar en Bélgica, me detuve allí por un momento en Bruselas, no lejos de Waterloo. Allí tomé un libro y leí sobre Napoleón y el gran guerrero que fue. Realmente él no era Francés, más bien los despreciaba, él fue allá para tomar venganza de ellos y se convirtió en un gran soldado y conquistador. A pocas millas de donde yo estaba, quedaba parte de la antigua reliquia. Yo leí sobre su vida y de cómo deseaba y anhelaba hacer algo grande, él se dejaba guiar por las señales de la luna y las estrellas, y cuando era joven, era un prohibicionista.

14.- A la edad de treinta y tres años había conquistado al mundo y como ya no había más que conquistar, se sentó y lloró. No había nadie más a quien sojuzgar, él había sojuzgado al mundo; había conquistado a la gente a tal punto que si tan solo se mencionaba su nombre la gente se desmayaba. Era tan temido, a tal grado que cuando las madres llevaban a sus hijos a la cama por las noches, en vez de decir: “Si no te portas bien, el coco te va a llevar”. Decían: “Si no te portas bien te va a llevar Napoleón”. Y ellos escondían sus cabezas debajo del cobertor inmediatamente. Él quería que todos le temieran, pero aún con todo eso y el temor, nunca conquistó la cosa correcta.

15.- Estoy recordando a otro gran héroe que a menudo queda olvidado en nuestras lecturas. Muchos de Uds. hombres y mujeres de mi edad podrán recordarlo, sucedió en Suiza hace muchos años. Suiza no era más que unos Alemanes que se fueron a las montañas, no querían guerras y se fueron allá para ser un pueblo amante de la paz. Todavía son un pueblo amante de la paz. Pero un día cuando llegaron los extranjeros e iban a quitarles sus tierras, los Suizos abandonaron sus hogares y bajaron al valle para enfrentarse con el ejército que se aproximaba.

16.- Oh, debió haber sido un espectáculo triste ver aquel día a un puñado de Suizos arrinconados contra las montañas, armados con palos, bastones, piedras, hojas de hoces para pelear. Para enfrentarlos venía un ejército tan enorme y perfectamente entrenado que parecían ladrillos en una pared, todos los hombres bien cubiertos por

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armaduras, con largas lanzas frente a ellos y cada hombre perfectamente marcando el paso.

17.- Acá estaban los Suizos parados sin saber qué hacer. Pero finalmente salió un joven llamado Arnold Von Winkelried quien dijo: “Hombres de Suiza, hoy voy a dar mi vida por mi país. Esta mañana allá entre las montañas me despedí de mi esposa con un beso y de mis tres pequeños hijos por última vez, nunca más los veré. Quiero que todos Uds. tengan cuidado de ellos, pero hoy debo dar mi vida por Suiza”. Le dijeron: “¿Qué vas hacer Arnold Von Winkelried?” Y él dijo: “Uds. síganme y peleen con todo lo que tengan”.

18.- Observó a su alrededor hasta hallar el punto donde había más lanzas, levantó sus manos hacia el cielo y gritó a toda voz: “Abran paso a la libertad”. Echó a correr y gritó de nuevo: “Abran paso a la libertad”. Mientras corría hacia el ejército con las manos levantadas y su pecho abierto para las lanzas, más de un centenar de lanzas lo alcanzaron, él las tomó con sus brazos y se las clavó en el pecho y allí murió con esas lanzas en su pecho. Tal despliegue de valentía y heroísmo acabó con los extranjeros que quedaron devastados, y los Suizos se apresuraron con sus bastones y palos y echaron al ejército de la nación, desde entonces no han tenido una guerra. Aquella fue una verdadera victoria, una verdadera conquista. Muy pocas veces se puede comparar y jamás exceder tal despliegue de heroísmo.

19.- Hoy, cuando al hombre le gusta hablar de héroes y le gusta adorar a los héroes, nosotros apreciamos eso pero, oh hermano, nunca ha habido un héroe como el Señor Jesús. Un día, cuando la raza de Adán estaba arrinconada, empujada por los poderes del diablo, todas las tremendas huestes espirituales y todo tipo de istmos tenían a la raza de Adán acorralada. Las enfermedades, las dolencias y todos los enemigos de la raza humana tenían a la raza de Adán acorralada; pero hubo uno que habló en el Cielo y dijo: “Descenderé a la tierra para dar Mi vida por la raza de Adán”. Vino a la tierra y buscó donde había más lanzas, la muerte; allí se precipitó y clavó la lanza de la muerte en Su precioso corazón en el Calvario. Él conquistó la muerte.

20.- Y cuando volvió de nuevo a la Gloria, envió de vuelta el bautismo del Espíritu Santo a Sus súbditos diciéndoles: “Tomen esto y luchen con todas sus fuerzas”. Oh hermanos, el hombre trata de tomar alguna otra cosa, tomemos lo que Cristo nos envió y peleemos con todo lo que tenemos por dentro. No tenemos que ser hombres

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entrenados, no tenemos que ser gente entrenada, tenemos que ser gente dispuesta, Dios quiere obreros dispuestos. A la edad de treinta y tres, Napoleón se había sentado y llorado, era un alcohólico derrotado y cayó antes que su reino. Pero a la edad de treinta y tres Jesús había conquistado la muerte, el infierno y la tumba. Oh, era el poderoso conquistador, cuando Él estuvo aquí en la tierra y la enfermedad se enfrentó a la raza de Adán.

21.- Un día inmediatamente después que Su ministerio había comenzado, llegó a la casa de Simón Pedro y la suegra de él estaba enferma con fiebre, solamente le tocó su mano y el poderoso conquistador había conquistado aquella fiebre y se fue de ella. En una ocasión un grupo de demonios llamado legión se enfrentó a Él en un hombre, se habían acostumbrado a derrotar a cualquiera y por eso nadie podía pasar por el camino de ellos. Salían y tenían tan poseído a este pobre hombre al punto que rompía en dos las cadenas, la ley no podía hacer nada por él. Cuando esos demonios entraban en él, podía aún romper cadenas porque el diablo le daba esa clase de poder.

22.- Yo me pregunto en esta noche y a Uds. que están en las camillas y sillas de ruedas: Si un hombre tan ungido por el diablo tiene tres o cuatro veces más poder que su propio poder humano, ¿qué podría hacer un hombre ungido con el Espíritu Santo? Él podría… cerrar esas sillas de ruedas y comenzar a andar para la Gloria de Dios, si la unción del Espíritu del Dios Vivo viene sobre él.

23.- Esta legión que poseía aquel hombre… “¿Dice Ud. entonces Hno. Branham que hay legiones que pueden venir a los justos?” La Biblia dice que los Ángeles de Dios acampan en derredor de los que le aman. Una vez en Dotán había un profeta llamado Eliseo. Su siervo Giezi despertó una mañana y todo el ejército sirio estaba a su alrededor, y dijo: “Padre mío, estamos acorralados por todo el ejército sirio”. Y aquel viejo profeta se despertó tan tranquilo como podía estar y mirando alrededor las tremendas decenas de miles de soldados, dijo: “Pues, más son los que están con nosotros que los que están con ellos”.

24.- El joven no pudo entender aquello y él dijo: “Dios, ábrele los ojos a este muchacho para que pueda ver”. Y cuando Dios le abrió sus ojos, las montañas estaban encendidas con las carrozas de fuego alrededor de aquel profeta; y el Espíritu del Señor Dios está esta noche en este auditorio para liberar y dar libertad, porque el poderoso

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conquistador ha pagado el precio y los hombres están en libertad para ser sanados y quedar libres. Oh, ¡cuán preciosa es Su Palabra para nosotros! Los demonios fueron conquistados, la enfermedad fue conquistada.

25.- Una noche en un tormentoso mar, cuando se habían perdido todas las esperanzas y la pequeña barca estaba a punto de hundirse, los discípulos vieron a Jesús venir caminando sobre las aguas y se asustaron, porque creyeron que era un espíritu, ¿no es eso igual a la gente de hoy? Él era lo único que podía ayudarlos, era su única esperanza y sin embargo ellos le temían.

26. Y hoy, oh, préstenme atención, la única esperanza que hay hoy es a la que la gente le tiene miedo, a un avivamiento a la antigua tipo San Pablo, y al Espíritu Santo de la Biblia de regreso nuevamente. No crean que eso los hará comportarse mal, el negocio del diablo es mantenerlo temiéndole a Cristo, pero ésa es la única salvación que le queda a cualquier país: El Señor Jesús y el poder de Su resurrección, pero la gente le tiene miedo. Pero, ¿se dieron cuenta Uds…? Sin importar cuánto oraron, lo bien que se organizaron para halar su barca, lo bien que pudieron poner las velas porque eran marineros y pescadores, cuando el poderoso conquistador entró a la barca, los vientos y las olas cesaron de inmediato.

27.- Algo cambia cuando Él entra, uno ya no es el mismo cuando Él entra, Ud. nunca sentirá algo que ocupe Su lugar; ni los placeres del mundo ni nada puede ocupar jamás el lugar del poderoso conquistador. Yo creo que Alcohólicos Anónimos está bien pero eso nunca ocupará el lugar de Jesucristo; yo creo que los médicos y los hospitales están bien, la medicina está bien, pero eso nunca ocupará el lugar de Jesucristo; yo creo que las iglesias y las denominaciones están bien, pero nunca ocuparán el lugar del bautismo del Espíritu Santo, no lo pueden hacer y no tienen con qué hacerlo porque son los hombres quienes lo hacen en su propio poder. Se necesita el bendito Espíritu Santo para hacerlo.

28.- Cuando Él estuvo en la tierra fue un gran conquistador, y conquistó algo más: La cruz. La cruz era la muerte, era un símbolo de ejecución pública. Y allí va Él, vamos a observarlo por un momento. Oh, Uds. mis amigos en esta noche, Uds. que están de pie hasta que sus pies les duelan, Uds. que han estado sentados aquí durante horas, vamos a echar un vistazo. Allí va Él hacia el Gólgota y hay un bullicio

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en la calle, puedo oír a algunos decir: “Allí va ese fanático religioso, el que acabó con nuestras iglesias”. Escúchenlos. Puedo verlo mientras va subiendo la colina, Su pálido rostro está todo hinchado y de Su barba cuelgan los escupitajos de burla. Una corona de espinas ha sido puesta sobre Su cabeza, la sangre y calientes lágrimas de dolor se desprenden por Sus mejillas. ¿No es esa una manera de conquistar?

29.- Los hombres y las mujeres no están dispuestos a sufrir para conquistar, pero sólo es por el sufrimiento que se puede conquistar. Allí va Él, cada vez que la cruz golpea contra las piedras del camino, le duelen Sus hombros. Me di cuenta que Su manto tiene pequeñas manchas rojas por todas partes, mientras más se aleja por la colina aquellas pequeñas manchas se hacen más y más grandes; al cabo de un rato todas se convierten en una gran mancha sangrienta. Su carga golpea contra Sus piernas, la abeja de la muerte ha comenzado a zumbar a Su alrededor, Él debe probar el aguijón de la muerte; cuando esa abeja comenzó a zumbar a Su alrededor, ya Él sabía que la muerte estaba delante de Él, pero tenía que conquistar, ése fue el propósito para el que nació, para conquistar. No con una bomba atómica sino con una vida sacrificada a Dios.

30.- Va subiendo la colina y la abeja comienza a zumbar más y más fuerte, finalmente hunde su aguijón en la carne más valiosa que ha vivido sobre la tierra. Él era Dios. Escuchen amigos, cuando una abeja o un insecto con aguijón… si esa abeja mete su aguijón muy profundo, saca su ponzoña pero ya no puede aguijonear más. Para eso fue que Dios fue hecho carne, Jesucristo fue más que un profeta, Él fue Dios manifestado en carne y el aguijón de la muerte reposó en Su carne, en el Calvario Él le sacó el aguijón a la muerte. Ya la muerte no tiene aguijón para el creyente porque el Poderoso conquistó la muerte en el Calvario.

31.- Hubo uno que más de treinta años después, cuando se aproximaba su muerte, dijo: “¿Dónde está oh muerte tu aguijón? ¿Dónde está tu aguijón?” Él le quitó el aguijón a la muerte, conquistó el aguijón en el Calvario. Bendito sea Su Santo Nombre. Él le quitó el aguijón a la muerte por ti y por mí. En Su muerte y en la nuestra ya no nos puede aguijonear más. Oh, puede zumbar y armar un alboroto, pero no tiene aguijón, su aguijón… yo puedo señalarle hacia el Calvario y decirle: “Allí fue donde tu aguijón fue conquistado en la carne del Señor Jesús”. Oh, yo le amo. Allí Él conquistó la muerte, no estaba acabado. Tomaron Su pequeño cuerpo con un aguijón en él y lo

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pusieron en la tumba de José, la Biblia dice que Su alma descendió al infierno, todavía tenía que conquistar, fue y le predicó a las almas encarceladas, las que no se arrepintieron en los días de Noé.

32.- Vamos a seguirlo Ud. y yo durante unos minutos. Ahora, ya Uds. tienen una panorámica de lo que Él fue, lo vemos en el Calvario conquistando la muerte y aquí va Su alma rumbo a las regiones de los perdidos, hombres y mujeres. Él abre las puertas de aquella oscura prisión y allí habían hermosas jóvenes que entraron a ese lugar bailando, allí habían predicadores que habían rechazado el Mensaje de Dios, habían miembros de iglesias, ateos, Gentiles y Judíos, todos estaban en aquella prisión, los que se negaron a oír el Mensaje de un hombre justo.

33.- Puedo verlo tocando la puerta y diciendo: “Yo soy aquel de quien habló Enoc, el que él dijo que vendría. Yo soy el Hijo de Dios nacido virginalmente, acabo de morir en la tierra y debo darle testimonio a Uds. de que Yo soy el cumplimiento de esa Palabra”. Ya no se concedía ninguna misericordia y las puertas estaban cerradas. Su alma descendió a los mismísimos infiernos insondables y allí se escuchó un llamado en la puerta. El diablo abre la puerta y le dice: “Oh, aquí estás. Creí que te había atrapado cuando hice matar a Abel. Estaba seguro que te tenía cuando acabé con los profetas; cuando le hice quitar la cabeza a Juan estaba casi seguro, pero finalmente has llegado”.

34.- Le puedo oír decir: “Satanás, hiciste tu última fanfarronada. Yo soy el Conquistador, Mi sangre está todavía caliente sobre la cruz del Calvario y ya no los vas a engañar más. He venido a decirte que he pagado el precio por sus pecados y enfermedades, porque el profeta dijo que Yo sería herido por sus transgresiones y por Mis llagas ellos serían sanados. He venido a decirte que has perdido la batalla, la deuda ha sido pagada”. Le quita las llaves de la muerte y el infierno de su costado y lo devuelve al horno donde pertenece.

35.- Hay alguien más esperando: Hay un lugar llamado Paraíso donde estaban otras personas que habían muerto bajo la buena fe. Amaron a Dios pero no podían ir a la Presencia de Dios por estar bajo el sacrificio de los animales, pero la sangre animal no podía hacer expiación por la sangre humana. ¿Se han dado cuenta Uds. que cuando la vida se forma, hay un espíritu en la célula de sangre y

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cuando el adorador ofrecía la sangre del cordero y aquella célula era rota, eso sólo tomaba el lugar de lo verdadero? 36.- Cuando el adorador ponía sus manos sobre el corderito, le cortaba la garganta y sus manos quedaban teñidas de rojo, cuando el cordero pataleaba, agonizaba y finalmente se estiraba y moría, el adorador regresaba con el mismo deseo de cometer adulterio, mentir y robar que siempre había tenido. Porque la célula de sangre al romperse… la vida en la célula de sangre era una vida animal y no podía volver a la vida humana. Pero cuando el Hijo de Dios, cuando aquella célula de sangre fue rota, el Espíritu Santo que estaba en Él regresa al adorador y ya no hay más conciencia de pecado. Está perfectamente limpio y puesto en libertad. Él le dijo: “Satanás, Yo he vencido”.

37.- Va rumbo al Paraíso, vamos a observarlo por un momento. Tiene que conquistar el Paraíso, Abraham, Isaac y Jacob están corriendo por el Paraíso y al poco tiempo un extraño llama a la puerta. Abraham abre la puerta y se queda pasmado y dice: “Sara, ven acá un momento, ¿sabes quién es ese que está allí?” Ella le dice: “Abraham, mi señor, ése es el mismo Hombre que llegó aquel día a la tienda, el que estaba de espalda hacia a mí; yo me reí en mi corazón, Él se volteó hacia a mí y me dijo que yo me había reído”. Oh hermano, para aquel momento la curiosidad de Daniel ya no podía esperar más, se apresuró y miró por encima del hombro de Sara y dijo: “Allí está la piedra que yo vi cortada sin manos de la montaña”.

38.- Ezequiel ya no podía esperar más y preguntó: “¿Qué ocurre hermanos?” Miró por encima del hombro de Daniel y dijo: “Hermanos, allí está aquella rueda en medio de la rueda que yo vi girando en el aire”. Entonces Él dijo: “He conquistado, vayámonos. La próxima conquista que debo hacer es la tumba. Vamos, vengan conmigo hijos”. Puedo escuchar a Abraham decir: “¿Podemos detenernos un poquito?” Él le dijo: “Sí, voy a hablar con Mis discípulos durante cuarenta días”. La mañana de resurrección Él conquistó el sello romano, conquistó la tumba de José, rompió el sello, destruyó la corrupción y se levantó triunfante.

39.- Aquí va Él subiendo en el aire con Sus discípulos, los santos del Antiguo Testamento, más allá de la luna, más allá de las estrellas, más allá de las esferas y esferas; y después de un rato empiezan a ver la ciudad. ¿Qué creen Uds. que ocurrió? Busquemos en la Biblia y veamos qué ocurrió, voy a citar la profecía de David. Cuando los santos del Antiguo Testamento comenzaron a ver la ciudad, con Jesús

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al frente del ejército que marcha, los santos del Antiguo Testamento gritaron: “Alzad vosotras puertas eternas, Alzad vosotras y que entre el Rey de Gloria”. Todos los Ángeles comenzaron a reunirse encima del auditorio…

40.- Uds. saben, se dice que cuando Nerón conquistaba una ciudad la gente se desmayaba, gritaba y lo llamaba dios; cuando Adolfo Hitler entró a Francia se detuvo en el Arco del Triunfo, durante horas y el cielo se oscureció por completo debido a los aviones, los soldados marchaban… Cuando Stalin entró a Alemania después que Rusia ganó, decenas de miles de soldados rusos cruzaron sus piernas y le dieron el saludo de victoria, mientras Stalin se detenía durante horas. Oh, debió haber sido algo tremendo.

41.- No hace mucho hablaba con un soldado y él me decía: “Después de haber estado luchando por tanto tiempo, cuando nuestro buque llegó al puerto de Nueva York… Yo había estado en el extranjero durante cuatro años, todo lo que había visto había sido el infierno y la muerte. Algunos soldados estaban paralíticos, otros no tenían piernas y algunos no tenían brazos, nos llevaron a todos a la cubierta. Cuando yo vi la Estatua de la Libertad levantada allí, sabía que estaba debajo de su brazo y tras ella estaba todo lo que yo amaba: Mi mamá, mi papá, mi esposa y mis hijos. Los soldados caían postrados en la cubierta llorando”.

42.- Si eso hace que un hombre que tenía cuatro años en una batalla, se comporte así al volver a casa, ¿cómo será cuando pasemos debajo de la áspera cruz, cuando se haya peleado la última batalla y hayamos conquistado? Oh, ¡cómo será ese momento!

43.- Y mientras les gritaban respondiéndoles: “¿Quién es este Rey de Gloria?” Los santos del Antiguo Testamento gritaban: “El Señor de los Ejércitos, poderoso en batalla”. Uds. conocen las Escrituras. El gran Ángel Gabriel debió haber presionado el botón y aquellas enormes puertas se retiraron; y justo por debajo del arco de la rugosa cruz pasaron Jesús y los soldados del Antiguo Testamento, por las calles de Jerusalén pasaron cantando y gritando con los Ángeles. ¡Qué bienvenida a casa! Hasta el Gran Trono Blanco. Él dijo: “Padre, aquí están los que creyeron en Ti, he conquistado la muerte, el infierno y el sepulcro”. Puedo oír al Padre decir: “Siéntate aquí en Mi Trono Hijo, hasta que ponga al último enemigo como estrado de Tus pies”. Jesús

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subió a la diestra del Dios del Cielo, sobre Su trono en las alturas y allí está esta noche.

He aquí contemplad al varón de doloresHe aquí contempladlo en plenitud

Aquí está el poderoso conquistadorYa ha rasgado el velo en dos.

44.- Él corrió la cortina para que nosotros pudiéramos ver más allá de la cortina del tiempo. Él quitó todo engaño que el diablo tenía y pagó el precio completamente y esta noche es el Conquistador. Dice la Biblia que nosotros somos más que conquistadores, por Él quien nos amó. Así que los Cristianos que están aquí en esta noche tienen el asunto bajo control: Hemos conquistado el pecado, hemos conquistado la muerte, hemos conquistado el infierno, hemos conquistado el sepulcro y hemos conquistado la enfermedad, porque Jesús es nuestro poderoso conquistador. Esta Palabra es un perdón, esta Palabra fue escrita como un perdón; saber que Él es un poderoso conquistador es perdón para cada uno de Uds., si lo reciben como un perdón.

45.- Hace algún tiempo iban a fusilar a un hombre que había cometido un crimen militar, había sido sentenciado a morir; pero cierto buen amigo fue con Abraham Lincoln quien era presidente de los Estados Unidos para el momento y le imploró misericordia para su amigo. El señor Lincoln, como andaba deprisa, tomó un pedazo de papel y una pluma y escribió: “Yo, Abraham Lincoln, perdono a este hombre”. El hombre le agradeció y salió apresuradamente hacia la prisión. Pero aquel dijo: “Oh, yo no creo eso, no se ve bien, debería ser algo clásico, debería tener los sellos de oro puestos, yo no creo que eso sea un perdón”. No se le pudo persuadir para que lo creyera, no lo pudo creer. El día siguiente murió fusilado. Aquí está un hombre muerto y el nombre del presidente firmado en un papel, un día antes que había sido perdonado. Aquello fue llevado a la Corte Federal y la decisión fue: “Un perdón no es un perdón a menos que se reciba como perdón”.

46.- Puede que el Espíritu Santo no llegue a los lugares clásicos, puede que no venga a través de las grandes denominaciones, puede que no venga por medio de predicadores bien entrenados y pulidos, pero es un perdón, es salvación que liberta del pecado, es un boleto para el Cielo y es sanidad para los enfermos, para los que los reciban

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como perdón. Ahora, si Ud. nunca lo ha hecho, quiero que mediten en eso los próximos minutos, mientras inclinamos nuestros rostros reverentemente en la Presencia de Dios.47.- Mis confundidos amigos, ¿no han probado Uds. nunca la bondad del Señor hacia Uds.? ¿No saben Uds. que eso es algo que no pueden hacer por sí mismos? Si la salvación fuera por las obras, entonces en vano murió Jesús. Ud. podría pertenecer a la mejor iglesia de Ohio y aún así estar tan lejos de Dios como el borracho que está tendido en el piso del bar, es sólo un pecador religioso. Y, ¿qué significa la palabra pecado? Incredulidad. El que no cree ya es condenado.

48.- Ud. Podría estar en Presencia del Espíritu Santo y decir: “Esos son unos aleluyas; Oh, si eso fuera algo de Dios vendría por medio de los católicos, los presbiterianos, los metodistas, los bautistas o alguna gran denominación”. Muy bien. Esto es un perdón y sanidad para Ud., si Ud. quiere creerla. Esto es enviado por Dios el Padre y Satanás ha sido despojado de todo poder que alguna vez tuvo, en esta noche todo le pertenece a Ud., ¿no lo quiere recibir?

49.- Ahora, aquí no tenemos espacio para hacer un llamado al altar, pero me gustaría saber en sus corazones, con cada rostro inclinado, cada ojo cerrado… mientras los Cristianos oran, Uds. que saben que no están bien con Dios, ¿quisieran levantar sus manos a Dios y al hacerlo decir: “Dios, ten misericordia de mí. Quiero ahora que me perdones y yo te acepto como el Conquistador de mi propia vida, mis pecados y mi desobediencia?”

50.- Dios le bendiga joven señora. Dios le bendiga a Ud. joven. Dios le bendiga allá atrás señor. ¿Alguien más en el piso inferior? Allá atrás, sí, muchos de Uds. Allá atrás, ocho o diez manos. Aquí por la izquierda… Sí. Dios le bendiga aquí señor, Ud. Por acá. Nuevamente allá muy atrás… Sí. En el balcón, el primer balcón a mi izquierda. ¿Cuántos allí dirían: “Hno. Branham, yo sé que estoy mal. Pues todavía amo al mundo tanto como antes, todavía me gustan las cosas del mundo?” Mi amigo, la Biblia dice que el amor de Dios ni siquiera está en Ud.

51.- “Pero Hno. Branham, yo pertenezco a una iglesia”. Eso no importa. Satanás también perteneció a la iglesia más grande que haya existido. Judas perteneció a una verdadera organización, una verdadera iglesia y era el tesorero en la Iglesia del Señor Jesucristo;

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pero su corazón no estaba bien con Dios. ¿Por qué no confesó su pecado? Porque Satanás lo tenía vencido.

52.- ¿Está Ud. en esa situación esta noche mi desgastado amigo? ¿Quiere levantar su mano y decir: “Dios, ten misericordia de mí”? Balcones de la izquierda, Dios los bendiga; allá arriba en el balcón superior, Dios los bendiga a todos allí. Muy bien. Solo levanten sus manos y vean la diferencia. Es Dios hablándoles, no rechacen Su Espíritu. Dios los bendiga. Muy bien. Unos treinta o cuarenta allá arriba…

53.- Los balcones de la parte posterior, tanto el balcón inferior como el superior, ¿quisieran levantar sus manos mientras todos están en oración? Digan: “Dios, ten misericordia”. Dios les bendiga. Muy bien. Allá arriba, muy bien. Dios ve sus manos allá atrás aún en las sombras.

54.- Muy bien, los balcones de la derecha, tanto el superior como el inferior, ¿quisieran levantar sus manos y decir: “Dios, ten misericordia”? Dios le bendiga a Ud. aquí arriba. Muy bien. Dios bendiga por aquí a toda la fila completa. “Hno. Branham, yo sé que no estoy bien y Dios conoce mi corazón. No estoy bien y por eso le estoy pidiendo a Dios que tenga misericordia de mí”. 55.- Los que están de pie en los vestíbulos y los pasillos allá atrás, ¿quisieran levantar sus manos y decir…? Dios les bendiga. Eso es bueno. Muy bien. Allá afuera, Dios los ve aún allá afuera del auditorio, Él lo verá, no es necesario que lo haga yo sino Él. “Ahora acepto mi perdón”. Ud. Dirá: “Hno. Branham, ¿de qué sirve que yo levante mi mano?” Oh mi amigo, esta religión del Señor Jesús ha sido tomada muy a la ligera. Si Ud. realmente lo expresa desde su corazón, ahora mismo ha pasado de muerte a vida. Permítanme citar las Escrituras. Jesús dijo: “El que oye mis palabras y cree en el que me ha enviado tiene vida eterna; y no vendrá a condenación, mas ha pasado de muerte a vida”. Eso es lo que significa esto.

56.- ¿Habrá alguien más que quisiera levantar sus manos? Dios le bendiga señor. Dios le bendiga. Eso es bueno. Si, alguien que todavía no haya… Dios los bendiga allá arriba en el balcón nuevamente. Eso es bueno. “Ten misericordia de mí, Dios. Ahora acepto a Cristo. Él es el Conquistador. Yo no puedo hacerlo, tengo hábitos y cosas que no puedo vencer, pero estoy esperando que Él lo haga por mí ahora”. Él

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lo hará, sólo dele una oportunidad, ¿quiere levantar su mano? Dios lo bendiga allá atrás. Muy bien. Uno…

57.- ¿Cuántos aquí en realidad han recibido a Cristo como su Salvador personal, pero nunca han podido vencer la carne? ¿Quieren levantar sus manos diciendo: “Dios ten misericordia de mí”? Muy bien. Dios los bendiga. Oh sí. Muchas manos por todas partes, Dios ve cada una; si Él conoce al gorrión que cae en el mar, ¿cuánto más sabe que Ud. está levantando su mano?

58.- ¿Cuántos de los que todavía no han recibido el Espíritu Santo, les gustaría recibirlo en esta noche? ¿Quisieran levantar sus manos y decir: “Dios tenga misericordia de mí”? Sí, centenares por todas partes. Ahora oremos.

59.- Misericordioso Dios, ahora traigo a Ti en presencia de los Ángeles de Dios y esta compañía, literalmente miles de manos que están necesitadas en esta noche, muchas de ellas aceptando a Cristo por primera vez. Muchos de esos quienes se han metido a una iglesia pero nunca han podido vencer o crucificar la carne; y necesitando el bautismo del Espíritu hay muchos aquí. Ruego Padre que Tú suplas todo lo que ellos necesiten. Yo soy sólo Tu siervo y yo te los entrego ahora a Ti Señor. Tú los conoces a todos. Perdónalos de sus pecados y llénalos con Tu Espíritu.

60.- Y ahora, que sus preciados ojos sean abiertos para contemplar al Varón de Dolores, para contemplarlo en plenitud. Ahora Él es el poderoso Conquistador, que ha conquistado las edades, ha conquistado la muerte y todavía está vivo y lo estará por siempre. Que ellos puedan verlo en el poder de Su resurrección, parado allí glorioso en Su majestad como lo hizo en Galilea. Que Él pueda llevar a cabo y hacer las cosas que hizo hace muchos años.

61.- Oh Señor Dios, Creador de cielos y tierra, Autor de Vida Eterna y dador de todo buen don, envíanos esta noche a esta agonizante edad y esta agonizante nación a la que le quedan sólo unos pocos respiros, dale a estos hijos en esta noche el Pan de Vida, que ellos puedan ver que Tu todavía estás vivo y eres el Poderoso Conquistador. Concédelo Señor.

62.- Ahora, ellos son los frutos del Mensaje y Tú dáselos a Tu Hijo como regalos de amor. Nadie puede arrebatarlos de Tu mano. Que

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hallen una buena iglesia y sean bautizados en el bautismo Cristiano y que luego vivan para Ti fielmente, hasta que se encuentren contigo allá en la gran venida de Cristo. Concédelo Padre. Son tuyos ahora en el Nombre de Tu Hijo, el Señor Jesús. Amén.

Yo le amo… (Levante su mano)Yo le amo, yo le amo

Porque Él a mí me amóY me compró mi salvación

Allá en la cruz

63.- Oh, ¿no produce eso algo en Ud.? Hagámoslo de nuevo y levantemos nuestras manos. Todos ahora, todos:

Yo le amo (fíjense en eso) Yo le amoPorque Él a mí me amó

Y me compró mi salvaciónAllá en la cruz

64.- Con nuestros rostros inclinados ahora, todos juntos en la oración modelo: “Padre nuestro que estás en los cielos, santificado sea Tu Nombre. Venga Tu reino, hágase Tu voluntad, en el cielo como en la tierra, el pan nuestro de cada día dánoslo hoy. Perdona nuestras ofensas como nosotros perdonamos a los que nos ofenden. No nos dejes caer en tentación, mas líbranos del mal, porque Tuyo es el reino, el poder y la gloria por siempre. Amén”.

65.- …Yo soy aquella Columna de Fuego que estuvo en la zarza ardiente; y si Él salió de allá y regresó allá, si salió de Dios manifestado en carne para conquistar la muerte en la carne y volvió a Dios, sería de nuevo una Columna de Fuego, ¿cuántos saben eso? ¿Ha sido probado por la Biblia?

66.- Cuando Pablo iba camino a Damasco, ¿qué fue lo que cegó sus ojos? Una luz que resplandecía como el sol en su fuerza, ¿cuántos lo saben? Y Pablo no sabía quién era aquel y le dijo: “¿Quién eres?” ¿Qué le dijo Él? “Yo soy Jesús”. ¿Es cierto eso? Entonces es el mismo de ayer, hoy y por siempre. “¿Cómo lo sabe Ud. Hno. Branham y podría estar tan seguro de eso?” Si fuera el Espíritu, que sabemos es, para mí lo es; si es un Espíritu

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producirá la vida de Cristo, sino lo hace entonces no es la vida de Cristo. Eso convierte a Jesús en el mismo de ayer, hoy y… ¿Cuántos saben que Jesús dijo: Yo no hago nada sin que el Padre me lo muestre primero?

67.- Pase señora. Ahora, Uds. que están en la audiencia y no tienen una tarjeta de oración, ¿quisieran orar ahora y creer? ¿Cuántos allí saben que la Biblia (el Nuevo Testamento) dice que Jesucristo es un Sumo Sacerdote que se compadece de nuestras necesidades? Muy bien. Si Él lo hizo y es el mismo de ayer, hoy y por siempre… Cuando Él hizo eso, una mujer tocó Su manto y Él se volteó y dijo: “¿Quién…? (Pregunta) ¿Quién me ha tocado?” Y nadie dijo nada; pero Jesús la encontró y le dijo cuál era su problema. Le dijo que su fe la había salvado, ¿es cierto eso? Él es el mismo hoy: Un Sumo Sacerdote. Si es el mismo, tiene que actuar igual. Entonces oren. Todos Uds. allí, permanezcan quietos y sean reverentes.

68.- Ahora, aquí está una dama como de la edad de mi mamá, supongo yo; y hasta donde sé, nunca en mi vida he visto a esta dama. ¿Somos desconocidos el uno para el otro, señora? Si, somos desconocidos. Ahora, de nuevo esto es un cuadro de San Juan 4: un hombre y una mujer que se encuentran por primera vez. Si esta Biblia es la Palabra de Dios que dice: “Jesucristo es el mismo de ayer, hoy y por siempre”. Él dijo: “Las obras que yo hago, vosotros también las haréis”. Y lo declaró a los judíos cuando le dijo a Felipe donde estaba Natanael… o a Natanael, que estaba debajo de un árbol cuando Felipe lo llamó. Él se lo declaró a Pedro al saber quién era, cuál era su nombre y cuál era el nombre de su padre. Se lo declaró a la mujer junto al pozo al decirle… ella era samaritana, al decirle que había tenido cinco maridos; y ella fue a la ciudad y dijo: “¿No será este el Mesías, el Cristo?” Pero nunca hizo eso con un gentil, ni siquiera una vez, ¿por qué? La copa de iniquidad de los gentiles todavía no estaba llena. Ahora es el tiempo de los gentiles.

69.- Si Él se dio a conocer tanto a judíos como a samaritanos de esa manera, tendrá que hacer lo mismo con los gentiles o no es

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el mismo. Recuerden ahora, entonces es en presencia de Cristo. Sean reverentes, oren y Dios los bendiga ahora.

70.- Ahora, Uds. que están aquí en la línea de oración, cada uno de Uds. que no me conocen levanten sus manos como señal que no los conozco, los de la línea de oración. Muy bien. Allá estén en oración y crean.

71.- Padre Celestial, el resto del servicio tendrá que ser llevado a cabo por Tu divino poder, Tu siervo no puede decir nada de sí mismo sino que dependo de Tu Espíritu Señor, como lo ha recibido esta gente en esta noche. Estos niños aquí que acaban de nacer en el reino, hay docenas de ellos, déjales saber que Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios Viviente y que no estás muerto. Tú conquistaste la muerte, Tú eres el Poderoso Conquistador que todavía sigue en medio nuestro, el mismo de ayer, hoy y por siempre. No hay reino, no hay César, no hay Hitler, no hay Napoleón ni ninguno de ellos que pueda resistir. Ellos conquistaron por medio del pecado, murieron y perecieron, pero Tú has conquistado por medio de la justicia, has conquistado la muerte para vivir para siempre y por cuanto Tú vives nosotros también vivimos. Danos esa seguridad en esta noche Señor, de que Tú eres el gran y poderoso conquistador, estando vivo después de estos dos mil años, todavía eres el mismo para hacer lo mismo, para hacer lo mismo que siempre hiciste. Me encomiendo a Ti y tomo todo espíritu aquí bajo mi control en el nombre de Jesucristo. Amén.

72.- Mi hermana, si el Señor nuestro Dios me revelara por qué está Ud. aquí; o algo que Ud. sabe que yo no sé, ¿le haría eso creer con todo su corazón que recibirá lo que pide? Ahora, Ud. podría ser cualquiera. Si Él le dice algo de lo que Ud. sabe que yo no sé nada… desde luego yo no la conozco y por lo tanto no sabría nada. Si yo dijera que Ud. está enferma, eso sería adivinar, podría ser; y aún si pongo mi mano sobre Ud. y le digo: “Ud. mejorará”, Ud. tendría que tomar mi palabra. Pero si Él le dice lo que Ud. ha sido o cuál es su problema, entonces Ud. sabrá si eso es verdad o no. Eso sería Él. Y si Él conoce lo que ya ha sido, ¿cuánto más conoce lo que será? ¿Entiende?

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Entonces no hay sombra de duda. Que Dios no permita que yo me pare aquí en esta plataforma profesando ser siervo de Cristo y que diga otra cosa que no sea algo que la ayude. La única forma en que yo puedo ayudarla tiene que provenir de Él. 73.- Ahora, si la audiencia todavía oye mi voz después de haberle hablado a la dama, ella parece irse alejando de mí, ella está profundamente interesada en algo, está sufriendo, ella está perturbada por una condición nerviosa. Además, está teniendo problemas en su pecho, como si se le apretara el pecho. Pero yo la veo de rodillas cerca de una vieja silla y aquí está lo que dice: “Señor, ¿me darás el Espíritu Santo?” Ella está buscando el bautismo del Espíritu Santo. Así dice el Señor, eso es cierto. Levante su mano en señal de que eso es la verdad. ¿Quién sabe lo que Ud. es y lo que está deseando sino sólo Dios? ¿Cree Ud. que recibirá lo que ha pedido? Oremos.

74.- Amado Dios, al ver sus débiles manos levantarse en el aire, te ruego que tengas misericordia de ella y le concedas esas cosas que ella está deseando. Lo pido en el Nombre del Señor Jesucristo. Amén. Dios le bendiga hermana. Reciba ahora (lo hará) lo que ha pedido.

75.- Supongo que Ud. y yo somos desconocidos el uno para el otro. Es la primera ocasión que nos encontramos, pero el Señor nos conoce a ambos. Nosotros, Ud. y yo, vamos a pararnos algún día ante el lugar de juicio de Cristo, respondiendo por nuestras vidas. Ud. está consciente de eso, ¿verdad? Ud. es cristiana porque su espíritu parece ser bienvenido y Ud. sufre de una condición nerviosa. Eso es cierto. La veo tratando de salir de una habitación o un escalón y cae con facilidad. Es artritis, Ud. tiene artritis. Hay alguien que sigue apareciéndoseme, es una persona mayor muy nerviosa, es su mamá, ella es extremadamente nerviosa y tiene problemas cardíacos. Parece que puedo ver un río o algo así; oh, ella está cerca de una ciudad llamada Covington en Kentucky, en algún lugar por allí donde ella ha estado. El Señor Dios le conceda el deseo de su corazón. Ahora siga su camino, gócese y recibirá exactamente lo que ha pedido.

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76.- ¿Cree Ud. en el Señor Dios? ¿Cree Ud. que Él puede darle las cosas que está pidiendo? Ud. está representando a alguien más y ese alguien se está muriendo. Es alguien… veo a dos niños, son niñas. Oh, es su hermana, Ud. representa a su hermana con la que acostumbraba jugar, se toman de las manos y saltan juntas. Eso es cierto. Luego veo un… digamos que está en un hospital aquí y tienen la sombra de la muerte, muerte doble. Tiene la sombra de la muerte física por una operación de un cáncer que acaba de tener; y no es salva. Ella necesita a Cristo como su Salvador. ¿Cree Ud. que Dios le concederá las cosas que pide? Oremos. Oh Jehová eterno y misericordioso, concédele a esta mujer las cosas que ha pedido. Concédelo Señor. Que Tus bendiciones reposen grandemente sobre ella, en el nombre de Jesús. Amén. Dios le bendiga señora.

77.- ¿Están creyendo Uds.? Tengan fe en Dios. El niño… no, se está abriendo de nuevo. Es un hombre que está sentado orando justo allí en la fila del frente, sufriendo con presión sanguínea alta. El caballero del traje gris y una corbata pequeña; señor, Ud. estaba orando que el Señor me hiciera hablarle a Ud., si eso es cierto póngase de pie. Muy bien. Su presión sanguínea alta se ha ido, ahora está sano, siga su camino y sea sano. Yo no conozco al hombre, nunca lo he visto. Si somos desconocidos vuelva a ponerse de pie señor, si no nos conocemos. Yo no lo conozco a Ud., cierto, mueva su mano así. Ud. tocó algo, ¿qué tocó Ud.? Al Sumo Sacerdote. Ahora siga, está sano, su fe lo ha sanado. Si pueden creer todo es posible, sólo tengan fe.

78.- Percibo que somos desconocidos el uno para el otro, ésta es la primera ocasión en que nos encontramos. El Señor Dios sí nos conoce a ambos. Ahora todos sean muy reverentes. Oh, ¿no es eso maravilloso? ¿No es eso…? Oh, no lo puedo expresar. Estar en presencia del Señor Jesús, pensar que el Alfa y Omega está presente, el Lucero de la Mañana, el Poderoso Conquistador. Si pueden creer.

79.- Ud. está sufriendo con problemas femeninos, es un desorden femenino y eso la ha hecho estar muy nerviosa. El

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problema de esa dama es un tumor y está en una glándula femenina. Ud. no proviene de esta ciudad, es de una ciudad junto a un río grande, es Cincinatti. Allí hay alguien más en quien Ud. está muy interesada y por quien ha estado orando. Es un niño. Es un bebé que tiene problemas con la ingestión de alimentos. Lo han operado y ese bebé pertenece a un familiar suyo, una prima. Los padres del niño también están orando, pero no oran como Ud., tienen un rosario en sus manos, son católicos. Señorita Judy Braun, regrese… (ése es su nombre) regrese a Cincinatti y reciba lo que ha pedido en el nombre del Señor Jesucristo. Tenga fe en Dios.

80.- Supongo que somos desconocidos. Si puede creer ahora, todo es posible. Tengan reverencia. Una dama que está sentada justo aquí orando, con un problema del estómago; crea que el Señor Dios la sanará señora. Ése que está justo detrás de Ud. es su esposo y está orando por un hombre tullido, ¿creerá Ud. con todo su corazón que recibirá lo que ha pedido? Si lo cree junto con ella señor, entonces puede recibir lo que pide. La dama que está detrás de Ud. también está orando por… Oh, ella tiene diabetes de lo cual quiere ser sanada. ¿Cree Ud. que el Señor la sanará? La del vestido a cuadros, levante bien su mano para que la gente pueda ver. Muy bien. Puede irse a casa esta noche, crea con todo su corazón y reciba lo que ha pedido. ¿Qué tocó Ud.? Ud. está muy lejos de mí, a unos nueve o doce metros; pero Ud. tocó al Sumo sacerdote que puede compadecerse de nuestras debilidades. Si pueden creer, todo es posible. Los reto a que crean. 81.- Supongo que no nos conocemos el uno al otro. Tengo que seguir esa Luz a donde vaya. Lo siento, siga de pie allí, pero tengo que seguirla. ¿Se fija? Es alguien que está orando allá. Oh, ¡que podría ocurrir si tan sólo… si creyeran una sola vez! Ahora, la dama que está aquí es paralítica; ella ha venido delante de mí, si Ud. tuviera suficiente fe, señora, podría levantarse de esa camilla e irse a casa. ¿Ve? Así que tenga fe ahora. Se va oscureciendo más y más. No haga eso. Sigue… deje que aclare. Si el Señor me dijera por qué está Ud. aquí, ¿lo creería Ud.? Ud. sabrá si es verdad o no, entonces sabrá que

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algo sobrenatural tuvo que decírmelo. ¿Creería Ud., como los fariseos, que esto es Beelzebú? Entonces recibirá su recompensa; si creyera que es Cristo, recibirá la recompensa de Cristo. Pero desde luego, eso queda en sus manos. Ud. no es de esta ciudad, Ud. es de Hamilton. Eso es cierto. Ud. tiene un problema femenino, es la matriz ulcerada. Cierto. Si Dios me dijera quien es Ud., ¿la haría eso gozarse? Patty Bratt. Eso es. Regrese por su camino, gócese y sea feliz. No dude, sólo crea con todo su corazón. ¿Están creyendo Uds.? 82.- Si el Señor le revela cuál es su problema, ¿lo cree Ud.? Está nervioso y tiene problemas con sus ojos, se le están apagando, está quedando ciego; para que Ud. pueda saber que yo soy siervo del Señor Dios, Ud. tiene un crecimiento en su cuerpo que está escondido de mí, es un crecimiento en su hombro izquierdo. Cierto. Levante su mano. Ahora, siga y crea, Ud. recibirá. Amén.

83.- Ponga su mano sobre la mía, señora; si Dios me revelara cuál es su problema, ¿creería Ud. que yo soy Su siervo? Es su espalda, siga su camino ahora, su problema de la espalda se ha ido. Amén. Si pueden creer. ¿Cree Ud. señora? Si Dios le revelara su problema, ¿creería Ud. que yo soy Su siervo? Es su corazón. Siga su camino gozándose, quede sana. Si Dios me revela cuál es su problema, ¿creería Ud. hermana? Ud. está tosiendo, es asma. Siga su camino y quede sana. 84.- ¿Cree Ud. señora? Si Dios revela cuál es su problema, ¿le creería Ud. con todo su corazón? Entonces el cáncer no la matará y estará bien. ¿Lo cree? Siga su camino y gócese. 85.- El problema cardíaco se fue de Ud. mientras estaba sentado en la silla. Siga, gócese y sea feliz. 86.- La artritis se irá de Ud. si se mantiene gozándose y creyendo en Él con todo su corazón.

87.- ¿Están creyendo Uds.? Un momento. Tengan fe ahora. Algo acaba de suceder aquí en la audiencia. Si pueden creer.

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Sucedió algo. …Por favor no crean que eso fue una imitación, pero una debilidad me ha cubierto súbitamente y algo ocurrió. Estoy seguro. La dama que está sentada allí mirándome… si señora, Ud. tiene una hernia y tiene hemorroides. Eso es totalmente correcto. Ud. se está esforzando por creer. Póngase de pie por un momento. ¿Soy yo un desconocido para Ud.? ¿No la conozco? Si eso es cierto levante su mano. Pero Ud. estaba orando. ¿Qué es eso que la está mirando directamente, una niña? ¿Es suya? Míreme. Ud. cree que yo soy Su siervo, Ud. también quiere la oración por esa niña. Si Dios me revela cual es el problema de la niña, ¿creería Ud. que yo soy Su siervo? La niña en realidad sufre de una condición nerviosa. Le diré cómo se comporta ella: La veo a Ud. intentando forzarla para que coma, ella no quiere comer y Ud. le sigue dando todo tipo de tónicos y demás para hacerla comer, ¿si eso es cierto levantaría su mano? Ponga su mano sobre ella, tenga fe en Dios y ese será el mejor tónico que haya tomado alguna vez. De ahora en adelante ella comerá, en el nombre del Señor Jesús. 88.- Señora, ¿no es extraño? Cuando yo mencioné lo de la niña comiendo, una sensación extraña pasó sobre Ud., cuando mencioné lo de la niña; porque Ud. tenía problemas del estómago. Correcto. Levante su mano si eso es cierto. El suyo también se ha ido, así que ambas pueden irse a casa y ser sanas. 89.- ¿Cree Ud.? ¿Cree Ud.? Ahora, ¿qué tal eso allí? ¿Qué tal Ud. acostado en ese catre o camilla? ¿Cuántos de Uds. por aquí quieren creer con todo su corazón? ¿Es Él todavía el Poderoso Conquistador? ¿Está Él vivo en esta noche como el mismo de ayer, hoy y por siempre? Ahora, todos Uds. son más que conquistadores en Él, ¿lo creen? Entonces pongan sus manos sobre otro y oren unos por otros y se levantarán de sus camillas… algunos de Uds. predicadores, vayan por allí… eso es. Oh Señor Dios, Creador de cielos y tierra, en el nombre del Señor Jesús reprendemos toda potestad. Sal fuera Satanás, tú has sido conquistado, el Poderoso Conquistador te ha conquistado. Estás… y… +

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Nº 167EL PODEROSO CONQUISTADOR

COLECCIÓN LA PALABRA HABLADA VENEZUELAEste Mensaje fue predicado por el Hno.

William Marrion BranhamEn Marzo 29, 1958, en Middletown, Ohio. E.U.A.

Traducción íntegra del Inglés al Español en Enero 2011, en elTabernáculo de Cabimas, Venezuela.

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