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1
La Ascendencia de Joel Robert Poinsett en José Miguel Carrera1
Rev. Dr. David Muñoz Condell2
Proemio
Joel Robert Poinsett, fue el primer protestante preeminente en llegar a Chile. En 1810, es
comisionado por el Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica James Madison
como agente especial para Sudamérica, permaneciendo como tal de forma itinerante en
Santiago y en Buenos Aires respectivamente, donde participó activamente en el proceso
independentista de Chile y Argentina.
El 24 de febrero de 1825 se convierte en el primer cónsul en presentar sus credenciales ante
el General José Miguel Carrera, donde se le rinden los honores correspondientes a un
ministro penitenciario.
El protestantismo de Joel Robert Poinsett quedo de manifiesto al presentar el 11 de julio de
1812 un proyecto de constitución política, documento que postulaba el artículo relativo a la
religión, donde se decía “que la religión del Estado de Chile será la apostólica y católica” y
se omite la palabra “romana”. Con lo cual dejaba abierta la posibilidad del ingreso de otras
confesiones cristianas. La influencia de Joel Robert Poinsett llegó a tal grado que aconsejó
en la creación del escudo patrio y en el cual el cónsul demostró su influjo calvinista, pues se
coloca en el escudo de la patria vieja la inscripción de fe de los protestantes ginebrinos
“POSTA TTENEBRAS LUX-AUTOCONSILIO, AUTENSE” después de las tiniebla la
luz.
La amistad de Joel Robert Poinsett y el General José Miguel Carrera fue tal que cuando el
general chileno se reunió con el en Baltimore en 1815, no solo lo inicio en el conocimiento
da las doctrinas protestante y de los servicios religiosos presbiterianos, sino que también es
iniciado en las practicas y costumbres de la masonería del Rito de York3, siguiendo así con
la tradición de los libertadores de América que son parte de las llamadas logias lautarinas o
caballeros racionales.
1 Ponencia presentada en la XXX Jornada sobre Historia de la Iglesia en Chile, realizada en el Convento de
San Francisco los días 29 y 30 de septiembre de 2011. 2 Pastor bautista. Teólogo, Cientista Social. Doctor en el Estudio de las Sociedades Latinoamericanas,
mención Historia. Miembro de la Sociedad de Historia de la Iglesia en Chile. Socio Activo de la Sociedad
Chilena de Historia y Geografía y Miembro de Número del Instituto O’higginiano de Chile 3 Instituto Nacional de Estudios Políticos. Ver el sitio: http://www.inep.org.
2
Inicio del protestantismo
Una lectura crítica e interpretativa de las prácticas ideológicas y sociales del protestantismo
chileno a través de la historia, nos da la posibilidad de investigar mediante el análisis de los
actores sociales vistos como una minoría religiosa tipo que se constituirá en la de mayor
importancia relativa al interior del cristianismo de América Latina.
Conscientes de que el fenómeno religioso minoritario del protestantismo chileno se genera
a partir de un contexto socio-religioso-político complejo que determina, y que también es
determinado por ellas, las prácticas de los actores eclesiales y sociales, nuestra
aproximación al comportamiento de estos es un período específico debe incluir los
elementos históricos, mediatos e inmediatos, y la consiguiente lectura socio-religiosa para
hacerlo entendible.
Más allá de los esfuerzos no tradicionales como lo eran aquellos aventureros, dramáticos y
de los destacables esfuerzos de algunos pioneros, el protestantismo como fuerza social de la
comunidad chilena no había logrado entrecruzar el tejido social.4
Consideramos que, a lo menos dos son los factores preponderantes que obstaculizan esta
inserción en el panorama religioso criollo:
- El primero, la sólida presencia de la Iglesia Católica colonial, una Iglesia conectada
directamente al poder político del Estado. Estado que en su inicio necesitaba de la
legitimidad religiosa de la Iglesia oficial. Esto entendido como la bendición divina a
la autoridad civil.5
- El segundo, tiene que ver con la proclamación del evangelio. En el período colonial
fue al calor de la contrarreforma y el espíritu de cruzadai, donde se presentaron las
intolerancias hacia otros credos, por lo que la pertenencia a un grupo religioso
minoritario no tenía mayor relevancia y expresión pública de sus ideas.
Es en este caso en que los incipientes proyectos misioneros protestantes se relacionan con
sectores políticos liberales6 y masones para hacer frente común a una Iglesia Católica que le
impedía todo tipo de espacios públicos para proclamar su fe.7
A esto le hemos denominado como alianzas estratégicas en pro de un objetivo común:
promover las libertades individuales, tales como la libertad de conciencia, la libertad de
expresión, la libertad de educación laica, entre otras.8
4 MOUNTANT, F. Religión y lucha de clases en américa latina. Cetri Ottognes, Lovaina, 1979, p.23. 5 Carta de San Pablo a los Romanos Capítulo 12:1-2. Santa Biblia. Reina Valera 1960. Sociedades
Bíblicas Unidas s/f. 6 Ver el texto de JAKSIC, IVÁN. POSADA CARBÓ, EDUARDO, Editores. Liberalismo y poder
latinoamericana en el siglo XIX. Fondo de Cultura Económica. Santiago, 2011. 7 MUÑOZ CONDELL, DAVID. La Influencia de Diego Thompson en Bernardo O’Higgins, en Anuario
de Historia de la Iglesia en Chile. Volumen 28. Seminario Pontificio Mayor. Santiago, 2010, pp. 111-
129.
3
Estos grupos sociales eran notoriamente marginados por la Iglesia oficial. Un ejemplo de
esta situación lo constituye el testimonio histórico de aquellos extranjeros tildados de
herejes que no tuvieron acceso a cementerios católicos, y que eran considerados los
cementerios como terrenos santos, oficiales y que debieron ser sepultados
clandestinamente en las faldas del Cerro Santa Lucía.9
Aquellos hombres y mujeres fueron líderes liberales quienes estimularon la inserción del
protestantismo en el escenario religioso, como una forma de ir socavando la acción de la
Iglesia católica.10
Desde 1810, una serie de hechos se fueron dando, los que ayudaron a ir preparando el
escenario social, que a modo de ejemplo, autorizó la instalación en la ciudad de Valparaíso
de un cementerio laico para disidentes religiosos protestantes, mayoritariamente de origen
europeo.
Dijimos antes que el hermetismo ideológico de la Colonia fue roto por la proliferación de
las ideas liberales europeas entre la burguesía criolla, preparando las condiciones para las
disputas independentistas, gracias a literatura que es traída desde Europa y de los Estados
Unidos de Norteamérica.
El mismo factor geográfico, constituido por la lejanía de Chile y por su aislamiento, que
facilitaría la permanencia de una mentalidad estrechamente unida a la metrópoli real en los
primeros siglos del coloniaje, deviene, a fines del siglo XVIII y comienzos del XIX, a un
caldo de cultivo para el ideario liberal independentista, incontrolable por el autoritarismo
español.
La inspiración de la independencia norteamericana y el contenido ideológico del siglo de
las luces, llamado así a la ilustración, inflaman los espíritus rebeldes del criollismo que,
oficialmente, en 1810 comienza las luchas independentistas, con sus características propias
económicas, lo que hace de Chile un proyecto republicano en curso.
Es sabido que la Iglesia a causa de su fidelidad a la corona española adquiría rango de
sospechosa ante los grupos dirigentes criollos independentistas. Pero las tensiones sociales
propias de la crisis liberacionistas se repetían al interior de la jerarquía de la institución
religiosa dominante que veía debilitarse su capacidad de influencia sobre lo político y
consiguientemente, sus posibilidades reproducción institucional.11
En esta crisis de hegemonía que comenzaba a poner fin al dominio ibérico, la Iglesia se
encontraba desconcertada. Por una parte, algunos sacerdotes participaban activamente del
proceso revolucionario (el caso del Fray Camilo Henríquez es demostrativo de esta actitud),
8 MUÑOZ CONDELL, DAVID. Sectas Religiosas y Campo Simbólico. Instituto de Criminología. Policía
de investigaciones de chile. Santiago, 2004. 9 Ibíd., p. 89. 10 Ver a LAGOS, HUMBERTO. Herejía en chile: evangélicos y protestantes desde la colonia hasta 1925.
Ediciones Sociedad Bíblica Chilena. Santiago, Junio 2009. 11 Ver a ARBIOL QUEZADA, MIGUEL ÁNGEL. Chile 1810-1830: una economía postcolonial.
Ediciones LOM. Santiago, Agosto 2010.
4
y por la otra, la mayoría del clero vivía la tensión entre su fidelidad a la corona española y
las presiones de la nueva contingencia política chilena.
Debemos reconocer a su vez, que los patriotas en relación con la institución religiosa
debían afrontar una problemática doble:
a) Reducir el ámbito de injerencia de la Iglesia Católica en el terreno político y, también,
en el económico.
b) Ganar el apoyo de la Iglesia católica como aparato hegemónico para legitimar el nuevo
orden rupturista del liberalismo.12
Los hechos históricos demuestran las dificultades reales encontradas por los patriotas para
obtener la colaboración católica al nuevo orden y, a partir de esta constatación que atentaba
contra el ideario liberal, las medidas anticlericales toman forman creando las primeras
condiciones objetivas para la instalación del pensamiento protestante en el país.
El 13 de febrero de 1812 se publicó el primer número de la Aurora de Chile, periódico
ministerial y político, que cumpliría una función importante en la difusión de la ideología
independentista. Esta publicación, que en abril de 1813 cedió pasó a su subtítulo: El
Monitor Araucano, era dirigida por el Fray Camilo Henríquez, miembro de la Orden de la
Buena Muerte.13
Un actor importante en las iniciativas afirmadoras del proceso independentistas fue el
cónsul norteamericano, para Santiago de Chile y Buenos Aires, Argentina don Joel Robert
Poinsett, que en la segunda década del siglo XIX llegaba para representar a su país en las
jóvenes repúblicas gobernadas por, también, jóvenes con escasa experiencia política y
manejos del poder.14
Este representante diplomático simbolizaba para los gobernantes chilenos el apoyo político
y militar necesario para hacer frente al aún no derrotado ejército español. Pero en el hecho,
don Joel Robert Poinsett debía cumplir una función que garantizara primero la obtención de
nuevos mercados para la pujante economía norteamericana, apoyando políticamente las
intenciones independentistas de estos países sudamericanos pero sin arriesgar una ruptura
de relaciones con la metrópoli española.
12 LAGOS SCHUFFENEGER, HUMBERTO. La función de las minorías religiosas: el caso del
protestantismo chileno en el período 1973-1981 del gobierno militar. Tesis Doctoral en Sociología.
Universidad Católica de Lovaina. Bélgica. 1983, p. 124. 13 Ver a VICUÑA MACKENNA, BENJAMÍN (ed.). Historia jeneral de la república de chile desde su
independencia hasta nuestros días. Imprenta Nacional. Calle de la moneda. Santiago. Chile. 1866. 14 Según el historiador JUAN WERLY, POINSETT fue “anciano gobernante” de la iglesia
Presbiteriana de Charleston, su ciudad natal. Citado en: El reverendo doctor don david trumbull, Su
influencia en el desarrollo de las libertades religiosas y pública en chile. Tesis para optar al grado de
licenciatura en historia, Universidad de Chile. Santiago, 1989, pp. 22-26.
5
El cónsul Joel Robert Poinsett, hombre polifacético y con una amplia cultura, comenzó una
intensa actividad de orientación ideológica del proceso independentista chileno. Su
influencia sobre don José Miguel Carrera quedó manifestada en numerosas iniciativas
como la adopción de una bandera nacional - presentada oficialmente en coincidencia con la
celebración de la independencia de los Estados Unidos de Norteamérica, el 4 de Julio de
1812, o como la obligatoriedad de portar, por parte de los funcionarios públicos, una
escarapela tricolor que representaba los colores de la bandera nacional.
La acción más importante de Joel Robert Poinsett para la ruptura del monopólico poder
religioso fue su influencia sobre los primeros proyectos constitucionales que se discutían
bajo el gobierno de don José Miguel Carrera, tertulias continuadas, muchas veces en la
casa del Cónsul norteamericano. El mismo diplomático redactó su propio proyecto que fue
sometido a la opinión de don José Miguel Carrera quien le propuso al parecer por el
requisito de la edad, que aquel proponía para el jefe del gobierno, 36 años, cuando José
Miguel Carrera tenía sólo 28 años.
Antecedentes biográficos
Joel Robert Poinsett nació en 1779 en Charlestón Carolina del Sur de los Estados Unidos de
Norteamérica. Estudio humanidades en la Academia de Green Field en Connecticut,
después estudia medicina en la Universidad Presbiteriana de Edimburgo, Escocia. Estudia
ingeniería en la Academia Militar de Wooliwirch Inglaterra y se había incorporado en
algunas cátedras de derecho en su ciudad natal, Charleston.15
En 1810, es comisionado por el presidente de los Estados Unidos James Madison como
agente especial para Sudamérica, permaneciendo como tal de forma itinerante en Buenos
Aires, Santiago y Lima.
Sirvió como “agente especial” en los países de América del Sur desde 1810 a 1814 (fue
enviado allí por el Presidente James Madison en 1809 para investigar las posibilidades de
los revolucionarios en su lucha por la independencia de España), participando en la Guerra
de Independencia de Chile, en el ejército chileno al mando del general José Miguel Carrera
Verdugo, del cual fue amigo personal.16 Entre este prócer de nuestra Independencia y el Cónsul americano se establecieron vínculos
más fuertes de amistad y compañerismo, generando entre sí una empatía que los llevó a
trabajar juntos el diseño de una institucionalidad basadas en principios libertarios.
Aunque con el pretexto de las funciones diplomáticas, Joel Robert Poinsett traía una misión
confidencial, cual era de inquirir el estado de la colonia, no tardando en involucrarse en la
causa independentista, a favor de sus ideales de progreso.
15 RIPPY, J FRED. Joel R. Poinsett, versatil estadounidense. Duke University Press, Carolina del Norte,
1935. 16 BARROS ARANA, DIEGO. Historia general de chile. Tomo VIII, Editorial Universitaria. Centro de
Investigaciones Diego Barros Arana, Santiago, 2002, pp. 407- 409.
6
La vasta experiencia y formación liberal e ilustrada de Poinsett le habilitaba, por lo demás,
para servir de asesor irremplazable al gobernante de un país, que como Chile, aspiraba a la
autonomía del poder español e iniciaba su carrera de pueblo libre.
Volvió a su casa de Carolina del Sur en 1815. Se presentó a las elecciones allí y sirvió en la
legislatura estatal de Carolina del Sur de 1816 a 1820 así como en el Comité de Obras
Públicas de Carolina del Sur de 1818 a 1820. Desde 1821 a 1826 representó a Carolina del
Sur en la cámara baja del Congreso de los Estados Unidos de Norteamérica.
Simultáneamente ejerció como enviado especial en México desde 1822 a 1823 siendo el
primero en ser nombrado ministro estadounidense en México en 1825. Se vio implicado en
los tumultos políticos del país hasta su vuelta en 1830.17
Fue durante aquella época cuando visitó el área del sur de México llamada Taxco de
Alarcón y entró en contacto con la flor de noche buena o flor de navidad, más tarde llamada
en los Estados Unidos como poinsettia. Los aztecas se referían a esta planta que florecía en
invierno como “Cuetlaxocitl”, su nombre científico es “Euphorbia Pulcherrima”.
Joel Robert Poinsett ejerció como Secretario de Guerra desde el 7 de marzo de 1837 hasta
el 5 de marzo de 1841 y durante su presidencia se continuó la eliminación de los
Amerindios del oeste del río Misisipi, se produjo la Guerra de Seminola y se redujo la
fragmentación del ejército concentrando elementos en posiciones cercanas. Finalmente se
retiró a su plantación en Georgetown, Carolina del Sur, en 1841.
Fue cofundador del Instituto Nacional para la promoción de la ciencia y de las artes útiles
(“National Institute for the Promotion of Science and the Useful Arts”) en 1840, un grupo
de políticos que abogaba por el uso del “Smithson bequest” para un museo nacional que
albergaría reliquias del condado y sus líderes, y celebraría los avances de la tecnología
estadounidense. El grupo no consiguió sus objetivos, pues otro grupo deseaba que fueran
científicos y no políticos los que liderasen lo que acabaría siendo la “Smithsonian
Institution”.
Su relación con la masonería
Se tienen registros de Joel Robert Poinsett de haber pertenecido a la Logia N 31, Greenville
y Logia Nº 1 Salomón, de Charleston, Carolina del Sur.18 En 1821 fue elegido Diputado
Gran Maestro de la Gran Logia de Carolina del Sur, pero no pudo servir como Gran
17 GARCÍA LUNA, MARGARITA, ITURRIAGA DE LA FUENTE JOSÉ. Viajeros extranjeros en el
estado de méxico. Universidad Autónoma del Estado de México, 1999, pp. 201-204. POINSETT, JOEL
ROBERT. Notes on Mexico, made in the autumn of 1822: accompanied by an historical. Philadelphia. H.
C. Carey and i lea. Chessnut, strert, 1824. GUADALUPE CURIEL. La historia de texas en la biblioteca
nacional de méxico. 1528-1848. UNAM, 1994. 18 THOMPSON, EDWARD N., Joel Robert Poinsett: el hombre detrás de la flor. Boletín breve, charla,
Masonic Service Association de los Estados Unidos, 1984.
7
Maestro, debido a su nombramiento como Secretario de Guerra entre los años 1837 y 1841
bajo Van Buren, octavo Presidente de los Estados Unidos de Norteamérica.19
Joel Robert Poinsett fue uno de los principales promotores de la formación y legalización
de las logias masónicas del Rito de York,20 dependiente de la Gran Logia de Filadelfia. El
14 de octubre de 1825 en un comunicado Joel Robert Poinsett se enfrenta con el propósito
de contrarrestar el partido fanático en esta ciudad, y, si posible fuera, difundir los principios
liberales entre quienes tienen que gobernar al país, ayudo y animo a cierto número de
personas respetables, hombres de alto rango y consideración, a formar una Gran Logia de
Antiguos Masones Lorquinos... Vicente Guerrero, Miguel Ramos Arizpe y Lorenzo de
Zavala, quienes editaron en 1828 el “Manifiesto de los Principios Políticos del Excmo. Sr.
D. J. R. Poinsett”, estuvieron entre los hombres de alto rango que pertenecieron a esa
logia.21
Pero los masones escoceses comenzaron a crearle un ambiente muy adverso. Lo acusaron
de participar en el complot del Presbítero Arenas y supieron desatar la antipatía popular
sobre Joel Robert Poinsett, al grado de que la consigna ¡Afuera Joel Robert Poinsett!
pasaba de boca en boca por todos lados, hasta que dos legislaturas pidieron su expulsión al
Presidente Victoria.22
Joel Robert Poinsett publica en su defensa un panfleto titulado “Exposición de la conducta
política de los Estados Unidos para con las nuevas repúblicas de América”. No basta
porque se dio un motín y fue apedreada su casa. Poinsett desplegó sus enseñanzas diciendo
19 FERRER BENIMELI, JOSÉ ANTONIO. La masonería en madrid y en españa del siglo XVIII al XXI.
Gobierno de aragón, Departamento de educación, cultura y deporte. España. 2004. VIDAL
MANZANARES, GUSTAVO. Masones que cambiaron la historia: dieciocho semblanzas masónicas.
Editorial Edaf. S. A. México. 2007. GALLATIN MACKEY, ALBERT. LE ROY HAYWOOD,
HARRY. Encyclopedia of freemasonry. Volumen 3. Kessinger Publishing, 1946, pp. 1338-1339. 20 El de Rito York, también llamado Rito Americano o del Antiguo Gremio Masónico, es uno de los
ritos más importantes de la francmasonería. Es uno de los ritos más utilizados en los Estados Unidos de
América. Su nombre se deriva de la ciudad de York, donde según la leyenda masónica, se realizaron las
primeras reuniones de masones en Inglaterra. Fue descrito por Albert Mackey como el primer rito
utilizado en la Gran Logia de Inglaterra. Algunas de las obediencias del Rito Escocés, fuera de los
Estados Unidos y en países donde el Rito de York no está activo, pueden conferir algunos de sus grados.
Pero, la esencia es siempre la misma, tres grados simbólicos más otros grados capitulares. Ver a
FABO, JOSÉ ANTONIO El Secreto Masónico Desvelado. Libros libres, madrid. 2007. HURTADO,
ARMANDO. Nosotros los masones. edaf ediciones, méxico. 2005.
21 ZELDIS, LEÓN. La masonería. contribución a la independencia de sudamérica, un enfoque basado en
hechos. Ars quatour coronatorum. Volumen 11 (1998), publicado en 1999. FERRER BENIMELI,
JOSÉ ANTONIO. La masonería en madrid y en españa del siglo XVIII al XXI. Gobierno de aragón,
Departamento de educación, cultura y deporte. España. 2004. FERRER BENIMELI, JOSÉ
ANTONIO. La masonería española y la crisis colonial del 98: VIII Symposium internacional de historia
de la masonería española: del 3 al 6 de diciembre de 1997. Barcelona. 1999. CASSARD, ANDRÉS.
Manual de la masonería, ó sea el tejador de los ritos antiguo escocés. Macoy y Sickles, Nueva York.
1861. 22 HERNANDO PORTILLO, JORGE. El problema de las relaciones entre la iglesia y el estado en
méxico. Costa-Amic Editores. Universidad de California. Los Angeles. 1982.
8
esta es la bandera de la nación a cuyo ejemplo debe México su libertad; enseguida la
multitud fue dispersada por un piquete de caballería.23
A petición de masones mexicanos, apadrinó cinco logias masónicas, que fueron
reconocidas por la Gran Logia de Nueva York. Posteriormente, ayudó a establecer la Gran
Logia de México.24
La presencia de Joel Robert Poinsett en México, como la de H. G. Ward, representa la
avanzada de la presencia política de Estado Unidos de Norteamérica e Inglaterra.25 Poinsett
facilita los caminos y espacios para la aplicación de la Doctrina Monroe e inicia la
inserción de su país en la vida del naciente estado mexicano.26
Joel Robert Poinsett habló de la Doctrina Monroe, y en contra de la transferencia de los
territorios españoles (es decir, Cuba o Puerto Rico) a cualquier nación independiente en el
Nuevo Mundo fuera de los Estados Unidos de Norteamérica. (México o Colombia).
Parte de la oposición a su intriga política parecía venir de los elementos de trabajo para una
invasión mexicana de Cuba. A pesar de una invasión como tendría que ser una aventura
audaz, posiblemente absurdo, un régimen mexicano había hecho un reciente intento de
anexar América Central y México tomaron Chiapas de Guatemala.
Los límites entre las nuevas naciones de América española eran vulnerables a los cambios
militares. Murió cerca de Carolina del Sur y sus restos descansan en la Iglesia del Holy
Cross Episcopal Cemetery.
Su labor como agente especial
Para 1811 era el extranjero mejor informado de política europea, al tanto de las ambiciones
británicas y francesas sobre las posesiones americanas de una España decadente. En esa
misma carrera por el despojos de un imperio en desintegración, se encontraban los Estados
Unidos, cuya inminente guerra con Inglaterra y su creciente expansionismo, requerirán de
información estratégica de las colonias españolas y en su momento, hacerlas firmar a su
favor tratados de comercio con aquellas que se independizaran.
Cuando, obtuvo su nombramiento oficial de Cónsul y viaja a Chile en diciembre de 1811,
en donde logra establecer una amistad estrecha con José Miguel Carrera, Presidente de la
23 JOEL ROBERTS POINSETT. El estado actual política de mexico: un anterior informe confidencial
publicado in 1822 , ed. en 1822, ed. L. Smith Lee (1976) L. Lee Smith (1976) 24 MANNING, WILLIAM R. La misión de oinsett a méxico. Revista americana de derecho internacional
1913. Delgado de Cantú, Gloria M. Sánchez Córdova, Humberto. Romo Medrano, Lilia Estela.
historia de méxico. Volumen 1, 2002. 25 MUÑOZ CONDELL, DAVID. La alianza estratégica entre liberales, protestantes y masones en el siglo
XIX: un análisis comparado entre chile y perú. 1810-1930. Ediciones Sociedad Bíblica Chilena. Santiago,
2009. 26 FERNÁNDEZ CABRELLI, ALFONSO. Masonería y sociedades Secretas en las luchas emancipadoras
de la patria grande. Editorial América Una. 1975
9
Junta de Gobierno y pudo hacer que los chilenos proclamaran la Independencia de Los
Estados Unidos de Norteamérica el 4 de julio siguiente, para hacerla coincidir con la
norteamericana.27
Ahí aprende a hablar español y gana influencia entre los grupos independentistas, pese a la
pretendida neutralidad de los Estados Unidos en los conflictos de España con sus colonias.
El periódico ministerial y político La Aurora de Chile, en una edición extraordinaria, en sus
páginas 3 y 4 del lunes 2 de marzo de 1812, comenta la llegada del Cónsul Joel Roberts
Poinsett , diciendo que con mucho fervor y entusiasmo, el redactor de la Aurora destaca la
llegada de Joel Roberts Poinsett, como Cónsul de Estados Unidos en Chile. Sin embargo de
su paso por nuestra nación no quedan rastros en sus múltiples biografías, ni si quiera en la
preparada por el Congreso de Estados Unidos de Norteamérica donde lo recuerdan por
haber sido Cónsul en México y haber introducido la flor de la víspera de Navidad.28
Este día fue de gran complacencia para los verdaderos amantes del país, por el solemne
recibimiento del Señor Coronel Don Joel Roberts Poinsett Cónsul general de los Estados
Unidos de la América Septentrional, nombrado por Jaime Madison su actual su actual
Presidente cerca del gobierno superior de Chile. Asistieron todas las corporaciones, cuyo
voto unánime había precedido.29
“El Señor Cónsul ocupó su lugar, y dirigiéndole la palabra el
Señor Presidente, dixo: CHILE, Señor Consul, por su govierno, y
sus corporaciones reconoce en V. S. el Cónsul general de los
Estados Unidos de Norte América. Esta potencia se lleva todas
nuestras atenciones, y nuestra adhesión Puede V. S. protextarla
seguramente de nuestros sinceros sentimientos. Su Comercio ser
atendido, y no saldrán de nosotros sin efecto las representaciones
de V. S. que se dirijan su prosperidad. Este es el sentimiento
universal de este pueblo por quien hablado V. S.”30
Por su parte la respuesta de Joel Robert Poinsett a las palabras del gobierno fueron:
”EL Govierno de los Estados Unidos me encarga sta
comision cerca del Exelentisimo Govierno de Chile, para dr
una prueba nada equivoca de su amistad, y deseos de
establecer con este reino unas relaciones comerciales
reciprocamente ventajosas. Los Amricanos del norte miran
generalmente con sumo interes los sucesos de stos paises, y
desean con ardor la prosperidad, y la felicidad de sus
27 GALLARDO, GUILLERMO. Joel roberts poinsett, agente norteamericano, 1810-1814. Emece
Editores. Buenos Aires, 1984. 28 AURORA DE CHILE. 2 de marzo de 1812. Llegada del cónsul joel roberts poinsett.
www.auroradechile.cl. Fecha de Acceso: sábado 16 de julio de 2011. 17:30 horas. 29 GAZERA DE WASHINGTON 25 DE junio 1812. 30 Ibíd.
10
hermanos del Sur. Hará presente al Gobierno de los Estados
Unidos los sentimientos amigables de V. E. Y me felicito de
haber sido el primero, que tuvo el cargo honorifico de
establecer relaciones entre dos naciones generosas, que
deben mirarse como amigas y aliadas naturales”.31
Su influjo en José Miguel Carrera
Bandera de la patria vieja
En el periodo del gobierno de Jose Miguel Carrera, fue decretada la creación de la primera
bandera nacional que tuvo el país, la cual pasa a denominarse de la Patria Vieja.
La bandera fue izada por primera vez el 4 de julio de 1812 durante la celebración del
aniversario de la independencia estadounidense, hecho de enorme influencia entre los
partidos criollos. Poco tiempo después, el 3 de septiembre de ese año, el escudo y la
bandera de la Patria Vieja fueron adoptados con solemnidad, aunque su establecimiento no
llega ser un acontecimiento nacional ni fue dictado un decreto al respecto.
Para el Fray Camilo Henríquez, el pabellón patrio representaba a los tres valores del
Estado: Majestad, Ley y Fuerza. Sin embargo, esta bandera no sobrevivió a la Patria Vieja
y en mayo de 1814, a raíz de la firma del Tratado de Lircay, el Director Supremo y
enemigo de Carrera, coronel Francisco de la Lastra, la manda a retirar, siendo reemplazada
nuevamente por la bandera española. Fue así como se usa por última vez el 1 y 2 de
octubre de 1814 en la batalla de Rancagua. Este hito marcó el inicio de la Reconquista,
periodo en el cual Chile no tuvo bandera propia. De hecho, el Ejercito Libertador,
organizado en Argentina, pelea en la Batalla de Chacabuco bajo la bandera argentina.
Este episodio, ocurrido el 12 de febrero de 1817, significa el fin del dominio realista y el
comienzo de la Patria Nueva, donde los emblemas adquirieron mayor significación. Desde
entonces, no se usa más la bandera española. Los colores de la Patria Vieja, según la
simbología heráldica representaban el azul, la justicia; el blanco la autoridad real (pabellón
de los Borbones); y el amarillo el poder o la fuerza. Ahora bien, estos colores, que se
interpretan en conformidad a la ciencia feudal de la heráldica, en lenguaje republicano
correspondieron, según la explicación dada por el Fray Camilo Henríquez, a la ley, la
soberanía popular y a la fuerza.
En cuanto al significado político antes aludido, el blanco, situado entre el azul y el amarillo,
representa el fundamento espiritual de la soberanía, que antes se hallaba en el carácter sacro
de la realeza; la soberanía desacralizada en la racionalidad democrática, se traspasó al
pueblo, de donde deriva el principio constitucional que reza: La sobreaña reside
esencialmente en la nación. A ambos lados de esa soberanía nacional, aparece la justicia
encarnada en la ley (color azul) y el sabio ejercicio del poder encarnado en la ley (color
amarillo).
31 Ibíd.
11
Ahora bien, la desacralización de la autoridad real que engendra la sobreaña nacional, al
permanecer siempre simbolizada en el blanco, color de lo trascendente, sitúa
implícitamente a la democracia en un espacio der sacralidad que siempre ha estado latente
en los ideales modernos y reactualiza las más antiguas y nobles concepciones republicanas.
Sin duda esta interpretación de los colores de la Patria Vieja, puede no corresponder a la
mentalidad chilena de hoy, pero si sabemos que emana del bagaje filosófico de los padres
de la patria, particularmente de don José Miguel Carrera y de la avanzada revolucionaria
del siglo XVIII y del pensamiento libertario que se promovía desde el mundo anglosajón y
de las logias lautarinas.32
La bandera de la patria vieja lleva consigo a dos araucanos que los divide una columna.
Esta columna central se define como árbol de la libertad, según la denominación de la
época. Sobre ella el mundo realza el valor de la libertad como supremo bien.
La lanza y la palma son símbolos de la guerra y el triunfo respectivamente, aunque pueden
interpretarse también como el binomio guerra y paz.
Sobre ellos, la estrella de Chile surge como un símbolo luminoso de buen augurio. Bajo el
lema de “Post Tenebras Lux”, viene a ser el lucero de la mañana, anunciador del nuevo día,
símbolo del nuevo orden, libertario, igualitario y fraternal.
El escudo nacional
El primer escudo fue creado en reemplazo del emblema Real Español vigente en la época.
Fue dado a conocer por el gobierno del Presidente de la Junta Provisional Jose Miguel
Carrera el 3 de septiembre de 1812, durante una celebración en la Plaza de Armas de
Santiago en conmemoración de la Primera Junta Nacional. El nuevo escudo, expuesto en un
lienzo colgado en la portada principal de la Casa de Moneda, fue además incorporado al
centro de la bandera tricolor chilena.
Aunque una representación real y oficial del emblema no existe hoy día, el fraile realista
Melchor Martínez describe su diseño en su obra. l pie de este lienzo estaba colocado otro
de figura ovalada, cuyo centro ocupaba un grande escudo, y en l se vea retratada una
robusta columna, en cuya áspide aparece un globo, y en su cumbre una lanza y una palma
cruzada; sobre todo esto se descubra una radiante estrella encumbrada con alguna
distancia.33
32 EYZAGUIRRE, JAIME. La logia lautarina y otros estudios sobre la independencia. Editorial
Francisco de Aguirre S.A. Santiago, 1973. EYZAGUIRRE, JAIME. Hispanoamérica del dolor y otros
estudios. Ediciones de Cultura Hispánica del Centro Iberoamericano de Cooperación, Santiago, 1979. 33 PADRE MARTÍNEZ, MELCHOR. Memoria histórica sobre la revolución de chile desde el cautiverio
de Fernando VII hasta 1814. Escrita por Orden del Rey por Fray Melchor Martínez, Valparaíso, 1848,
12
A la siniestra de la columna estaba un gallardo joven vestido de indio, y a la diestra una
hermosa mujer con el mismo traje; la inscripción superior decaPost Tenebras Lux (Despus
de las tinieblas, la luz); y la inferior Aut Consiliis Aut Ense (O por consejo o por espada).
Ambos lienzos estaban interior y exterior graciosamente iluminados, para que desde lejos
pudieran ser vistas y notadas claramente todas sus particularidades, y con mayor cuidado, el
nuevo y característico escudo adoptado en la reciente Republica Chilena.
Post tenebras lux influye logrando que un lema calvinista apareciera en el primer escudo de
armas de la Patria Vieja “Post tenebras lux” (despues de las tinieblas la luz, acuñado en la
suiza calvinista del siglo XVI). Este escudo dejó de existir con el advenimiento del período
conocido como la Reconquista Española (1814 - 1817).
Escarapela tricolor
Por medio de un bando el gobierno explica que debido a la adopción del sistema de la
libertad, no haber distinción entre civiles y militares, lo cual se graficar en el uso por parte
de toda la población de la escarapela tricolor.
El emblema de la patria debe señalar al ciudadano virtuoso estamos obligados
indistintamente comprar su existencia todo costo en el sistema de la libertad civil cada
hombre es con la fuerza de la expresión soldado de su país se acabaran felizmente las
odiosas diferencias del estado; los militares son ciudadanos armados, y cada ciudadano es
un guerrero para sostener los derechos de la sociedad.
Desaparezca enteramente la humillante idea de los mercenarios, que vio el despotismo
como los promotores de la tiranía. Para decidirlo usaron todas las clases del estado secular
la escarapela tricolor, que se dispensa al Ejercito con la diferencia de no traer las presillas
de oro y plata, que han sido privativas de los militares. Publíquese por Bando dese en la
orden, imprimase.
Reglamento constitucional provisorio de 1812
Una de las primeras normas dictadas por la Junta de 1810, es el reglamento para el arreglo
de la autoridad ejecutiva provisoria de Chile de 1811, del 14 de agosto, considerado como
unos de los primeros ensayos constitucionales del país. Éste, como primer intento de
ordenamiento constitucional, establecía un gobierno Ejecutivo de tres miembros, y un
Congreso unicameral, establecido el 4 de julio de 1811, que desde el momento de su
instalación, la Junta queda disuelta, por lo que el congreso ejerce las funciones ejecutivas y
legislativas, con una marcada tendencia conservadora leal al Rey de España.
No conforme con estos acontecimientos, el 4 de septiembre de 1811, José Miguel Carrera
encabeza un golpe contra el congreso, el cual es disuelto el 2 de diciembre de 1811. Junto
con la creación de una bandera y una escarapela nacional, una de las importantes tareas
impulsadas por Carrera es el reglamento constitucional provisorio de 1812, sancionado el
13
26 de octubre, que deroga el reglamento de 1811 y que establece un poder ejecutivo de tres
personas y un legislativo unicameral de siete (Senado Consultivo).34
Redactado en parte por el cónsul norteamericano Joel Robert Poinsett, y presentado por
José Miguel Carrera, este reglamento de 27 artículos, que se asemeja mucho a una
Constitución, se destaca por ser el primer reconocimiento a la soberanía de Chile y a la
autonomía de sus gobernantes, por proteger las libertades públicas, por consagrar la libertad
de imprenta, establecer la garantía de los derechos individuales, y por poner límites a los
gobernantes, entre otros.35
Sin embargo, las circunstancias políticas y militares, marcadas por el enfrentamiento entre
patriotas y realistas, hicieron que don José Miguel Carrera fuera destituido, y que este
reglamento constitucional fuera reemplazado por otro, el reglamento para el gobierno
provisorio de 1814.
Promulgado el 7 de mayo, crea un Ejecutivo unipersonal, con el nombre de Director
Supremo, al cual se asignan amplias atribuciones con el objeto de hacer frente el problema
bélico existente, y que mantiene al mismo tiempo, un senado integrado por siete personas.
Como director supremo, es nombrado el coronel Francisco de la Lastra, gobernador de
Valparaíso.36
Es indudable que don José Miguel Carrera estudió esta materia con detenimiento en
conjunto con su amigo Joel Robert Poinsett, y que aceptó la proposición que éste le hiciera
de redactar el mismo un proyecto constitutivo.
El hecho es que el cónsul norteamericano le entrega el 11 de julio a don José Miguel
Carrera su trabajo, acompañado de una carta donde explica los alcances de este proyecto.
Este reglamento constitucional provisorio de 1812 fue el texto constitucional que rigió en
Chile entre el 27 de octubre de 1812 hasta el 6 de octubre de 1813. Fue promulgado por
don José Miguel Carrera y elaborado con una importante participación del cónsul
estadounidense Robert Poinsett.
Constaba de un preámbulo y 27 artículos. Aunque en su prefacio declara la fidelidad del
país a la monarquía española, durante la ausencia del rey Fernando VII debido a su captura
por las tropas de Napoleón Bonaparte, es considerado como el primer texto oficial que
manifestaba una velada declaración de independencia de Chile.
34 BIBLIOTECA DEL CONGRESO NACIONAL DE CHILE. Breve historia constitucional de chile.
www.bcn.cl. Fecha de Acceso: sábado 16 de julio de 2011. 17:15 horas. 35 FUENTES, JORDI; CORTES; Lia; Castillo; Fernando; Valdés, Arturo. Diccionario histórico de
chile. 5ª edición. Editorial del Pacífico. Santiago, 1978. 36 VALENCIA, LUIS. Anales de la república. 2º edición. Editorial Andrés Bello. Santiago, 1986.
14
Este texto plasma las ideas de los llamados "exaltados" liderados por don José Miguel
Carrera y son el primer indicio de un movimiento emancipador, contrario a aquellos que
creían en un gobierno provisional hasta la restauración monárquica. Al comienzo del texto
se presenta una fuerte crítica al gobierno colonial: “Los desgraciados sucesos de la nación
española [...] obligaron a sus provincias a precaverse de la general ruina a que las
conducían las caducas autoridades emanadas del antiguo corrompido gobierno.
Chile, con igual derecho y necesidad mayor, imitó una conducta cuya prudencia ha
manifestado el atroz abuso que han hecho en la Península y en la América los depositarios
del poder y la confianza del soberano [...]”.
Respecto a la religión dice este Reglamento Provisorio en su artículo primero: “La religión
Católica Apostólica es y será siempre la de Chile”. La simple omisión de una palabra en la
fórmula Católica Apostólica Romana, indica una forma de ser independientes, guardando
las apariencias para no incomodar a la mayoría católica del país.37
En la sociedad católica de comienzos del siglo XIX “la supresión del adjetivo romana para
designar a la Iglesia dominante provocó conmoción y las indignadas reacciones de la
jerarquía eclesiástica”38. Diego Antonio Navarro Martin de Villodres, Obispo de la
Concepción de Chile, en oficio enviado al Intendente de la ciudad, plantea, entre otras, la
siguiente interrogante: “¿será casualidad?, yo así lo creo, i lo atribuyo a falta de
imprenta…”39
El obispo de Concepción, Diego Antonio Navarro Martín de Villodres, en una extensa
pastoral para los eclesiásticos y fieles de la diócesis pretendía advertirles los peligros que
significaba la nueva ideología de Voltaire y Rousseau y, al mismo tiempo, exhortaba a los
creyentes a su unión con la "madre patria". "Pero, todo fue en vano... a las reflexiones de
vuestro pastor nada respondíais"40
El obispo reconocía el fracaso de contener la filtración de las nuevas ideas y la fuerza de
sus avances entre los jóvenes que ponían en peligro el predominio del bando tradicional.
Todo este proceso revolucionario, el obispo, se lo atribuía en su origen a la influencia
determinante de Juan Martínez de Rozas, señalando que todos los manejos clandestinos
37 La expresión "romana" figuraba en la copia del Reglamento que se presentó al obispo de Concepción
Diego Antonio Navarro Martín de Villodres, quien juró adhesión "sin perjuicio de las facultades y
autoridad del Romano Pontífice...". Reclamó, más tarde de la supresión: Campos Harriet, Fernando,
Diego Antonio Navarro Martín de Villodres 1758-1806-1827, en Episcopologio Chileno 1561-1815 T. IV
(Santiago Ediciones Universidad Católica de Chile, 1992), pp. 503-506. El vicario capitular de Santiago
y obispo electo, José Santiago Rodríguez Zorrilla se excusó de prestar juramento pretextando
enfermedad: Bravo Lira, Bernardino, José Santiago Rodríguez Zorrilla 1752-1815-1832, en
Episcopologio Chileno 1561-1815 T. III (Santiago, Ediciones Universidad Católica de Chile, 1992), p.
213; Briseño, op. cit. (n. 2), pp. 59-60. Se refiere al tema Galdames, op. cit. (n. 10), pp. 326-327. 38 LAGOS SCHUFENEGGER, HUMBERTO. Crisis de la Esperanza. Religión y autoritarismo en chile.
Ediciones Presor-Lar. Santiago, Agosto 1988, p. 44.e 39 Ibíd. 40 LA AURORA DE CHILE. Jueves 16 de julio de 1812. Tomo I. Nº 10.
15
eran justificados o respaldados por sus actores al recurrir frecuentemente a la autoridad
intelectual de Rozas, utilizando para ello una frase muy socorrida entre la juventud de la
ciudad "lo dijo el Maestro", y que bajo la misma influencia de ese maestro se habían
separado un grupo de diputados de la augusta asamblea.41
El historiador Miguel Luis Amunategui, interpreta este “desatino legal”, diciendo:
¿Se querrían conjuntamente i de un modo solapado, la
emancipación política i la emancipación eclesiástica?... tal vez…
¿se aseguró que aquella supresión había sido aconsejada por el
cónsul norteamericano Mr. Joel Robert Poinsett. Camilo Henríquez
era amigo íntimo de este extranjero protestante o descreído?42
Percibiendo, además, otra omisión grave en el proyecto que catalogaba como “abominación
de las abominaciones, el mencionado historiador afirmaba: “…Ella no prohibía
expresamente, como se pensaba, debía hacerlo, el ejercicio público de los cultos
disidentes…”43
En este contexto político de grandes tensiones sociales y religiosas, los patriotas al
eliminar el adjetivo “romana” a la Iglesia Católica y al no prohibir expresamente las
manifestaciones públicas y/o privadas de otras variantes religiosas, daban una respuesta
nacionalista, impregnada de liberalismo independentista, buscando romper los lazos de
relación entre la institución católica y la corona ibérica para ponerla al servicio del proyecto
político patriota y de los intereses de la nueva república. Estamos, ni más ni menos, en el
intento de nacionalizar a la Iglesia Católica Apostólica y Romana.44
En las acciones que realizó don José Miguel Carrera en Estados Unidos en 1816, con la
ayuda de su amigo Joel Robert Poinsett, a fin de recolectar recursos financieros entre los
empresarios del país del norte, para adquirir una flota de barcos, contratar tripulación,
oficiales y adquisición de armamento,
En las afortunadas gestiones que hiciera don José Miguel Carrera pudo tomar contacto con
los poderes masónicos de Estados Unidos de Norteamérica, con el patrocinio de su
“hermano” Joel Poinsett.45
El Archivo de don José Miguel Carrera nos da a conocer el acta de la tenida de la Logia St
John”s Nº 1 de Nueva York, celebrada el 24 de febrero de 1816, cuyo texto es el siguiente:
“En tenida especial de la Logia St John”s, realizada en el
Samary Hall, el 24 de febrero de 1816 A.L. estuvieron
presentes: G. Carroll, Venerable Maestro; Seymour, Primer
Vigilante; J.H. Davids, Segundo Vigilante; W.C. Sparks,
41 LA AURORA DE CHILE. El aporte de la elite intelectual al proceso de 1810: la figura de Juan
Martínez de Rozas. Jueves 16 de julio de 1812. Tomo I. Nº 10. 42 AMUNATEGUI, MIGUEL LUIS. Camilo Henríquez. Imprenta Nacional. Santiago, 1889, p. 97. 43 Ibíd, p.98. 44 LAGOS SCHUFENEGGER, HUMBERTO. Op. Cit, p. 45. 45 IBÁÑEZ VERGARA, JORGE. Op. Cit.
16
Tesorero; John B. Spicey, Secretario. Y los hermanos
presentes. Se abrió la sesión en Logia de Primer Grado, de
acuerdo al Ritual. Se decidió que no se leyera el Acta de
nuestra última Tenida Especial anterior y se otorgó la
dispensa necesaria.
En atención a que el Comité de Investigación emitió su
favorable respecto de Don J. M. Carrera y Don Phillipi L.
Hoffman y que se ha obtenido la dispensa necesaria para
otorgar a Don José Miguel De Carrera y Phillipi L. Hoffman
los grados masónicos de Aprendiz, Compañero y Maestro. Se
resuelve que la Logia proceda en consecuencia.
Don José Miguel De Carrera, estando debida y
adecuadamente preparado, fue conducido hasta el Altar y
recibió el Primer Grado de la Masonería de acuerdo al Ritual
Antiguo.
Fue clausurada la Logia de Aprendices y se abrió una Logia
de Compañeros. Al ser el Hermano Carrera, valioso y estar
bien recomendado, fue conducido hasta el Altar donde
recibió el Grado de Compañero.
Fue clausurada la Logia de Compañeros y se abrió una Logia
de Maestros Masones. El Hermano Carrera que ha servido
como Aprendiz y ha permanecido algún tiempo como
Compañero, fue conducido hasta el Altar donde recibió el
Sublime Grado de Maestro Masón.
La logia se abrió nuevamente en el grado de aprendiz. P. L.
Hoffman, estando debida y adecuadamente preparado fue
llevado hasta el Altar y recibió el Grado de Aprendiz –
Fue clausurada la Logia de Aprendices y se abrió una Logia
de Compañeros. El Hermano Hoffman recibió el Grado de
Compañero - Se clausuró la Logia de Compañeros y se abrió
una Logia de Maestros. Al ser Hermano Hoffman valioso y
estar bien recomendado recibió el Sublime Grado de Maestro
Masón de acuerdo al Ritual Antiguo. No habiendo más
materia que tratar, la Logia se cerró hasta la próxima Tenida
Regular”.46
En cuanto a su permanencia y acción en la masonería se tienen escasos registros al
respecto. Se cree que por el tipo de actividades que realizara don José Miguel Carrera al
regresar de su viaje a los Estados Unidos de Norteamérica se mantuvo ajeno a este tipo de
encuentros.
46 Archivo del General José Miguel Carrera. Tomo XVII. Santiago. 1817, pp. 359-360.
17
A modo de conclusión
Es necesario mencionar un hecho importante en la relación entre Carrera y Poinsett y es
que aunque no hay elementos de prueba que aseguren que José Miguel Carrera, por la
influencia de Poinsett, hubiera abrazado la fe evangélica calvinista.
No es menos cierto que en un momento tan delicado como el que precedió a su muerte,
haya dado testimonio de su actitud anticatólica romana, frente a los testigos que sostienen
que en este acto ocurrido en la plaza de Mendoza, al patriota chileno “…se le conminó a
que mirando el crucifijo se arrepintiera de sus pecados, y lo besara, a lo que él, en forma
desdeñosa respondió: qué padre tan afligido, a Cristo, señor, lo llevo en el corazón y no en
los labios”.47
Esta opinión de José Miguel Carrera responde, a nuestro juicio, a una lectura crítica de la
Iglesia oficial, más que a la fe personal que él tenía como católico.
La influencia de Joel Robert Poinsett va por el lado de la puesta en escena de una nueva
manera de ver la coyuntura histórica de su época. Esta lectura se nutre de una lectura
teológica calvinista, de un liberalismo político, desde un punto de vista epistemológico
centrada en el meliorismo y el eclecticismo masónico y normado por una estructura
geopolítica norteamericana de influir en las incipientes repúblicas americanas.
47 Fusilamiento de los Carrera, referidos por el fray Benito Lamas.
http://es.wikisource.org/wiki/Portada.