UNIVERSIDAD DE JAÉN Facultad de Ciencias de la Salud
Trabajo Fin de Grado
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Entrenamiento con restricción de flujo
sanguíneo y fisiología muscular
Alumno: Marín-Rubio, Alejandro
Tutor: Prof. D. Cruz-Díaz, David
Dpto: Ciencias de la Salud
Mayo, 2016
ÍNDICE
1. Resumen
2. Abstract
3. Introducción
4. Materiales y métodos
4.1. Estrategia de búsqueda
4.1.1. Bases de datos y fuentes de información
4.1.2. Criterios de inclusión
4.1.3. Criterios de exclusión
4.1.4. Variables de resultado
4.2 Evaluación de la calidad metodológica
5. Resultados
5.1. Diseño de estudios
5.1.1. Estudios que analizaban el entrenamiento de fuerza-resistencia
con restricción de flujo sanguíneo comparado con otro tipo de
entrenamiento
5.1.2. Estudios que analizaban el entrenamiento de resistencia
aeróbica con restricción de flujo sanguíneo frente a otro tipo de
entrenamiento.
6. Discusión
7. Conclusiones
8. Tablas
9. Gráficos
10. Referencias Bibliográficas
1. RESUMEN
OBJETIVO. El propósito de esta revisión sistemática fue analizar específicamente la eficacia del
ejercicio con restricción de flujo sanguíneo o método oclusivo como herramienta de
entrenamiento para mejorar fisiológicamente la musculatura implicada.
MÉTODOS. Se llevó a cabo una búsqueda bibliográfica en las bases de datos Scopus, PEDro,
PubMed, SPORT discus y Cochrane. Fueron incluidos ensayos clínicos aleatorizados que
utilizaban el entrenamiento de fuerza-resistencia y resistencia aeróbica con restricción de flujo
sanguíneo comparado con otro tipo de entrenamiento, cuyas variables de resultado
principales fueron la hipertrofia y fuerza muscular. Se seleccionaron artículos publicados entre
2007 y 2017 en inglés y español.
RESULTADOS. Fueron hallados un total de 2213 artículos, de los cuales 7 cumplieron todos los
criterios de inclusión. En ellos se cuantifica con pruebas de imagen (resonancia magnética o
ultrasonidos) la sección transversal muscular y con test (RM) la fuerza muscular.
CONCLUSIÓN. El entrenamiento de baja intensidad con restricción de flujo sanguíneo resulta
más eficaz para el incremento de la sección transversal y la fuerza muscular en la estructura
implicada que un entrenamiento de las mismas características sin oclusión añadida o
suplementaria.
PALABRAS CLAVE. Restricción de flujo sanguíneo, ejercicio, hipertrofia, fuerza, oclusión,
músculo.
2. ABSTRACT
OBJECTIVE. The purpose of this systematic review is analyze the efficacy of exercise with blood
flow restriction or occlusive method as a training tool to physiologically improve the involved
musculature.
METHODS. It was conducted a literatura search in databases Scopus, PEDro, PubMed, SPORT
discus y Cochrane. We included randomized clinical trials which uses strenght-resistance
training and aerobic resistance with blood flow restriction were included compared to other
training, whose main result variables were hypertrophy and muscle strength. Articles
published between 2007 and 2017 in English and Spanish were selected.
RESULTS. 2213 articles were found, of which 7 finally met all inclusion criteria. In the articles,
the muscular cross section was quantified by image test (magnetic resonance or ultrasound)
and with test (RM) the muscle strength.
CONCLUSION. Low-intensity training with blood flow restriction is more effective for increasing
cross-section and muscle strength in the involved structure than a training of the same
characteristics without supplementary occlusion.
KEY WORDS. Blood flow restriction, exercise, hypertrophy, strength, occlusion, muscle.
3. INTRODUCCIÓN
Se define hipertrofia muscular como un aumento o crecimiento del volumen del músculo
producido por un ensanchamiento de la sección transversal de las fibras musculares. Se logra
gracias a la síntesis de proteínas contráctiles (Mirella, R. 2006)1, a los numerosos procesos
catabólicos y la recuperación de la actividad realizada en unas condiciones elevadas de estrés
muscular. El trabajo de fuerza va a propiciar un incremento de la masa muscular, se requiere
un estímulo adecuado para que haya una síntesis proteica y una disminución del catabolismo
proteico. Durante la ejecución de los ejercicios, los procesos catabólicos predominan frente los
de síntesis, será en los tiempos de recuperación cuando se produzca una regeneración
proteica (Sáenz, G. C. 2006)2. Un agrandamiento en el tamaño muscular puede ocurrir como
resultado de (Badillo, J. J. G. 2002)3: incremento en el número y la talla de las miofibrillas,
incremento de tamaño del tejido conectivo y otros tejidos no contráctiles del músculo,
aumento vascular y del tamaño fibrilar.
American College of Sports Medicine, establece un criterio para alcanzar una hipertrofia
muscular y aumentar la fuerza máxima, se tiene que sobrepasar el 70% de una repetición
máxima (1RM) (Ratamess, N. A. 2009)4. Al realizar un entrenamiento con altas cargas se
diferencian dos fases, modelo adaptativo tradicional, (Campos, G. E. 2002)5: una primera fase
(adaptación neurológica), activación de la musculatura implicada e integración de las
informaciones sensitivas y motoras por el control del sistema nervioso central, y una segunda
fase (adaptación estructural) que dará lugar a la hipertrofia muscular en sí y a un aumento de
la fuerza.
El entrenamiento oclusivo o entrenamiento con restricción de flujo sanguíneo se origina en
Japón, estandarizado en 1983, donde se conoce como entrenamiento KAATSU. Consiste en
comprimir la extremidad superior o inferior en su zona proximal para restringir el flujo
sanguíneo (tanto aferente como eferente) con una carga de entrenamiento entre el 20-50% de
1RM, cuyo efecto principal es la hipoxia localizada (Manini, T. M. 2009)6.
En el entrenamiento con restricción de flujo sanguíneo se propone un modelo de adaptación
inverso al tradicional. Se producen cambios estructurales significativos en el músculo tras solo
cinco días de ejercicio de baja intensidad en oclusión. Mientras que las adaptaciones
estructurales son constantes a lo largo del período de entrenamiento con oclusión, las
adaptaciones en la fuerza muscular no alcanzan valores significativos hasta pasadas diez
semanas (Abe, T. 2006)10 y (Loenneke, J. P. 2012)11.
Figura 1. Modelos de adaptación funcional y estructural a una periodización de entrenamiento tradicional de
hipertrofia y a una periodización de entrenamiento con oclusión de baja intensidad. T-RT: entrenamiento
tradicional con resistencias. LI-BFR: entrenamiento de baja intensidad con restricción de flujo sanguíneo. Extraído
de (Hernández, J. M. 2012)9.
El entrenamiento oclusivo tiene una serie de efectos agudos (Hernández, J. M. 2012)9:
Activación electromiográfica. A la hora de realizar una actividad moderada las primeras fibras
en reclutarse son las fibras de tipo 1 o fibras de contracción lenta. A medida que va
aumentando la intensidad del ejercicio se reclutan las fibras de tipo 2 o fibras de contracción
rápida. En condiciones de isquemia o restricción de flujo sanguíneo, las fibras de tipo 2 son
reclutadas a intensidades bajas-moderadas (Takarada, Y. 2000)7 y (Moritani, T. 1992)8. Debido
a una disminución de la presión de oxígeno en el músculo hay un gran impacto en la eficiencia
del miocito, en condiciones normales de oxígeno (normoxia), un miocito, es capaz de generar
una tensión “x” con un coste metabólico “y”; en cambio, tras un descenso de la presión de
oxígeno, dicho estímulo generará una tensión inferior a “x” con un coste metabólico muy
superior a “y”. Extrapolándolo a la práctica, ejecutar un determinado gesto en hipoxia conlleva
una menor tensión muscular y un mayor consumo metabólico, en comparación con realizar
dicho gesto en unas condiciones normales de oxígeno. Por lo tanto se puede decir con
seguridad que la hipoxia modifica el patrón de reclutamiento, que se refleja en un aumento de
la actividad de las fibras rápidas.
Acumulación metabólica y respuesta hormonal. Se ha demostrado que el incremento de la
tasa metabólica glucolítica durante el entrenamiento en oclusión, unido a la restricción de
aclarado venoso, tiene como consecuencia una acumulación de metabolitos de desecho en la
zona ocluida. Así, se ha observado un incremento significativo de lactato y, con seguridad, de
adenosina, K+ y H+, tras una sesión de ejercicio en oclusión. Esto conlleva un descenso del pH
intramuscular que podría estimular un reflejo químico, mediado por las fibras aferentes III y IV,
que estimule la secreción hipofisaria de hormona del crecimiento.
Síntesis proteica. El estrés y el desequilibrio impulsados por la carga mecánica del ejercicio son
los responsables de originar un aumento en el transporte de aminoácidos dentro de la célula
muscular, que derivará en un incremento de la síntesis de los componentes proteicos
funcionales del músculo: actina y miosina.
Una vez conocidos que factores intervienen en el proceso fisiológico, pueden utilizarse
diferentes elementos para ocluir la extremidad: cintas velcro, bandas elásticas, torniquetes
neumáticos electrónicos o manuales, etc. La marca “Kaatsu” vende sus propios aparatos, que
controlan automáticamente la presión de oclusión. En la literatura científica, la presión de
oclusión se mide en milímetros de mercurio (mm Hg) y su valor se emplea para estimar la re-
ducción del flujo sanguíneo inducida por el manguito. Se aplican presiones que oscilan entre
los 50 y más de 200mmHg. Cuando se utilizan dispositivos que no facilitan información sobre la
presión del manguito, la medida de oclusión se polariza en oclusión total (la pulsación
desaparece por completo) y oclusión parcial (se detecta pulso en la zona distal de la cincha)
(Wernbom, M. 2006)12. Las sesiones llevadas a cabo con oclusión total generan dolor,
adormecimiento y pérdida considerable de sensibilidad en la zona distal de la extremidad du-
rante la ejecución de los ejercicios (Hernández, J. M. 2012)9.
Además de regular la presión que ejerce la cincha o manguito, hay otro factor que se debe
controlar para no provocar efectos adversos que puedan ocasionar una alteración o patología
en el individuo. Es imprescindible conocer la anchura que va tener la cincha debido a que va a
ser directamente proporcional a la presión en la oclusión. Hay que analizar las características
de los participantes, como por ejemplo el perímetro de la extremidad, para saber qué tipo de
anchura hay que emplear. Conocer el sexo y la raza del individuo ya que serán diferentes las
presiones y anchuras que se deben emplear, aunque actualmente no se conocen los valores
que hay que emplear de forma óptima (Jessee, M. B. 2016)13.
Se han realizado diferentes estudios acerca de la seguridad en el método oclusivo. No se ha
encontrado alteraciones en la coagulación sanguínea tras una sesión de ejercicio con oclusión,
los marcadores D-dimer (productos de degradación del fibrinógeno) y los tiempos de
activación de la trombina y la protrombina, no mostraron variaciones con respecto a sus
niveles basales tras la sesión en isquemia. A pesar de lo mencionado anteriormente, se deben
realizar más investigaciones para descartar que el entrenamiento con restricción de flujo
sanguíneo pueda inducir daño cardiovascular (Hernández, J. M. 2012)9.
No parece afectar a la producción de especies reactivas de oxígeno (medidas a través del
peróxido lipídico, glutatión y carbonilos plasmáticos) ni de marcadores de daño muscular,
como la creatinquinasa. Tampoco parece dañar al sistema nervioso (Hernández, J. M. 2012)9.
La ejecución de un programa de entrenamiento en un estado de isquemia puede inducir unos
efectos secundarios. En el estudio se observaron más de 30000 sesiones, y los efectos
adversos más comunes fueron: hematoma (13,1%), adormecimiento del miembro (1,3%) y
mareo ligero (0,3%) (Nakajima, T. 2006)14. Un efecto secundario más grave, como trombosis
venosa, se ha manifestado en muy pocas ocasiones (0,06%) (Manini, T. M. 2009)6.
Justificación y objetivos
Con la literatura científica revisada, la mayoría de los autores recomiendan el uso del
entrenamiento oclusivo ya que es un método factible en la puesta en escena, seguro,
económico, y aporta grandes beneficios con muy bajo porcentaje de efectos adversos.
Esta revisión sistemática tiene como objetivo principal:
Analizar específicamente la eficacia del método oclusivo como herramienta de
entrenamiento para mejorar fisiológicamente la musculatura implicada.
Como objetivos secundarios:
Equiparar el entrenamiento oclusivo con el entrenamiento tradicional para el aumento
de la hipertrofia y fuerza muscular.
Estudiar y comparar los diferentes entrenamientos con restricción de flujo sanguíneo
utilizados.
Elaborar un programa de entrenamiento oclusivo estándar que pueda emplearse en
población sana.
4. MATERIALES Y MÉTODOS
4.1. Estrategias de búsqueda
4.1.1. Bases de datos y fuentes de información
Fue llevada a cabo una revisión sistemática con su respectiva búsqueda en las bases de datos
Scopus, PEDro, PubMed, SPORT discus y Cochrane. Las categorías de búsquedas usadas fueron:
“Blood flow restriction and exercise”, “Blood flow restriction and muscle”, “Blood flow
restriction and hypertrophy”, “Blood flow restriction and strength” y “Occlusion and muscle”.
Estos términos fueron incluidos en una búsqueda inicial. Tras combinar dichas palabras claves
se obtuvieron un total de 2213 artículos (Tabla 1).
4.1.2. Criterios de inclusión
Los requisitos para que un estudio sea incluido en la revisión son los siguientes:
Tipo de estudio. Ensayos clínicos aleatorizados (ECAs).
Periodo de publicación. Todos aquellos estudios publicados entre 2007 y 2017.
Tipo de intervención. Cualquier tipo de intervención en la que se realizara actividad
física con restricción de flujo sanguíneo comparada con actividad física sin restricción
de flujo sanguíneo o con ninguna otra intervención.
Tipo de participantes. Pacientes que no presentaban ninguna patología que pudiera
poner en compromiso la salud del individuo. Población adulta y población anciana.
Personas no activas, activas, entrenadas y atletas.
Medidas de resultado. Sección transversal de la extremidad (hipertrofia muscular) y la
fuerza muscular (RM).
Idioma. Aquellos estudios disponibles en inglés y español.
Calidad metodológica. Estudios cuya calidad metodológica sea ≥5 en la escala PEDro.
4.1.3 Criterios de exclusión
Fueron excluidos otros tipos de publicaciones (estudios de cohortes, revisiones,
estudios piloto, protocolos de estudio y estudios sin intervención de la oclusión).
Los estudios que usaban otra herramienta que no era la oclusión para provocar
hipoxia.
Publicaciones en el que no había un control ni una medida eficaz de la hipertrofia y la
fuerza muscular.
Investigaciones que usaban la restricción de flujo sanguíneo con una patología
específica.
Estudios publicados antes del 2007.
Aquellas investigaciones que estuvieran en otro idioma que no fuera inglés o español.
Estudios con una puntuación inferior a la requerida en la escala PEDro.
4.1.4. Variables de resultado
Las principales medidas de resultado en esta revisión fueron la sección transversal del músculo
y la fuerza muscular.
La hipertrofia muscular fue medida a través de dos pruebas de imagen: resonancia
magnética y por ecografía (ultrasonidos).
La fuerza muscular fue controlada con diferentes test para conseguir el “1RM” del
individuo mediante dinamómetros y máquinas isotónicas.
4.2. Evaluación de la calidad metodológica
Para evaluar la calidad metodológica de los diferentes ensayos clínicos aleatorizados
escogidos, fue utilizada la escala PEDro y como resultado se calculó la validez interna (Tabla 2).
La escala PEDro es un recurso muy utilizado en las investigaciones y los ensayos clínicos de
intervenciones en fisioterapia, que clasifica los ensayos de la base de datos Physiotherapy
Evidence Database o PEDro, ayudando a juzgar la utilidad y la calidad de los ensayos clínicos.
Formada por once ítems que valoran los aspectos metodológicos críticos que pueden afectar a
la validez de un ensayo clínico. Hace hincapié en dos aspectos del estudio: la validez interna y
si dicho estudio contiene suficiente información estadística para su interpretación. Cada
criterio es puntuado como presente o ausente, el resultado final es obtenido por la sumatoria
de las respuestas afirmativas o positivas, que serán un máximo de diez puntos. El ítem 1 no se
puntúa ya que se refiere a la validez externa del estudio.
Dentro de los diez puntos valorables, si se hallan investigaciones cuya puntuación final sea
cinco o mayor, estaremos ante un estudio de gran calidad para introducirlo en una revisión
con una bajo riesgo de desviación o error (Moseley, A. M. 2002)23. El artículo de Olivo, S. A. y
Maher, C. G (Olivo, S. A. 2008)24 (Maher, C. G. 2003)25 confirman que la escala PEDro es una
herramienta eficaz, fiable y segura para llevar a cabo la valoración metodológica de los
estudios científicos.
La validez interna se evalúa con los criterios 2, 3, 5, 6, 7, 8 y 9 de la escala PEDro. Los estudios
con un final de puntuación de validez interna ≥6 se considera que tienen una calidad
metodológica alta, una puntuación 4-5 se considera que tienen la calidad metodológica
moderada y una puntuación ≤3 representa un estudio de calidad metodológica limitada (Ellis,
R. F. 2008)26.
5. RESULTADOS
De la búsqueda realizada en las diferentes bases de datos fueron encontrados un total de 2213
artículos: 664 en PubMed, 22 en PEDro, 772 en Scopus, 548 SPORT Discus y 207 en Cochrane.
Después de realizar un filtro por límites de búsqueda en las bases de datos, fueron extraídos
429 estudios. A dichos artículos se les realizó un descarte mediante un análisis de duplicados y
títulos entre bases de datos, resultando 84 investigaciones. Posteriormente, se llevó a cabo el
estudio del Abstract (tipo de estudio, población dirigida y recursos utilizados) dando como
resultado 32 artículos para el análisis a texto completo. Se descartó un total de 25
publicaciones por no cumplir criterios de inclusión, presentar algún criterio de exclusión, falta
de información y no utilizar medidas de resultado correctas. Un total de 7 artículos fueron
incorporados en esta revisión para su análisis (Figura 1).
Los ensayos clínicos aleatorizados seleccionados puntuaron un máximo de 6 sobre 10 ítems
puntuables en la escala PEDro, todos por igual. En ningún estudio hubo cegamiento ni por
parte de los individuos estudiados, fisioterapeutas y evaluadores. Además en ninguno de ellos
se confirma el ítem análisis por intención de tratar. Todos mostraron una puntuación de
validez interna limitada ≤3.
Dentro de la revisión realizada se puede diferenciar dos tipos de intervenciones según el
ejercicio ejecutado. Por lo tanto propongo dividir los artículos verificados en dos grupos:
Ejercicio de resistencia aeróbica con método oclusivo donde el entrenamiento se
realiza en una cinta de correr o tapiz rodante, ajustando la sesión a las características
fisiológicas del individuo (17, 18).
Ejercicio de fuerza-resistencia con método oclusivo donde el entrenamiento se realiza
con una carga externa, adaptando la resistencia a las posibilidades del sujeto (15, 16, 19,
20, 21).
El enfoque principal de esta revisión fue evaluar los beneficios de los diferentes
entrenamientos con restricción de flujo sanguíneo resaltando los marcadores de hipertrofia y
fuerza muscular. Por lo tanto, las investigaciones que no incluían una medición apropiada de la
sección transversal del musculo y de la fuerza muscular fueron descartadas por no asegurar
unos resultados correctos.
5.1 Diseño de los estudios
La Tabla 3 muestra las características de cada artículo seleccionado aportando autor y año de
publicación, objetivos del estudio, número de participantes de ambos grupos y la intervención
a la que se ven sometidos durante el estudio, las variables de estudio e instrumentos de
medida, los resultados obtenidos y las conclusiones.
En cinco estudios se analiza el entrenamiento de fuerza-resistencia con restricción de flujo
sanguíneo:
En dos de ellos se compara un entrenamiento similar utilizando en un grupo material
oclusivo y en el otro no, (Fujita, T. 2008)15 (Madarame, H. 2008)16 la población
destinada eran hombres jóvenes sanos.
En el artículo de Vechin, F. C. 2015(19), se emplea el entrenamiento oclusivo frente a
sesiones de alta intensidad sin restricción de flujo sanguíneo y con un grupo control
que mantiene su actividad diaria. Población dirigida a adulto mayor.
La investigación dirigida por Fahs, C. A. 2015(20), se utiliza método oclusivo en una
extremidad inferior mientras que en la otra extremidad se utilizaba el mismo
entrenamiento pero sin ocluir. Destinado a individuos de mediana edad.
En el estudio de Yasuda, T. 2014(21), se aplican sesiones de oclusión frente a actividades
de la vida diaria. Sujetos adultos mayores.
En las dos publicaciones restantes se utiliza el entrenamiento de resistencia aeróbica con
manguitos de presión empleando un tapiz rodante o cinta:
Abe, T. 2010(17) lo equipara con actividad física diaria mientras que Ozaki, H. 2011(18)
utiliza el mismo entrenamiento pero sin ocluir. Población dirigida a adulto mayor.
5.1.1. Estudios que analizaban el entrenamiento de fuerza-resistencia con restricción de flujo
sanguíneo comparado con otro tipo de entrenamiento.
Incluimos en este grupo 5 estudios:
En este estudio (Fujita, T. y cols, 2008)15 tienen como objetivo examinar el efecto de una
mayor frecuencia de entrenamiento con el método oclusivo, 12 sesiones en 6 días. 16 hombres
jóvenes sanos de edades comprendidas entre 20-23 años, 6 de ellos realizando diariamente
actividad física, fueron divididos en dos grupos aleatorizados:
Un grupo experimental donde se realizó el entrenamiento de baja resistencia con oclusión y un
grupo control donde se hizo el mismo entrenamiento pero sin restricción de flujo sanguíneo,
fueron utilizadas las extremidades inferiores.
Dos tipos de experimentos. Uno de ellos consistía en investigar los diferentes parámetros de
coagulación sanguínea con y sin restricción de flujo. En el segundo se realizó el entrenamiento
que constaba de extensiones bilaterales al 20% de 1RM, 30 contracciones con 30 segundos de
descanso, seguido de 3 series de 15 contracciones con 30 segundos de descanso entre series.
Un total de 75 contracciones que requieren alrededor de 8 minutos. La contracción individual
fue de 4 segundos. Controlado por un metrónomo. En la primeria sesión al manguito se le
añadió una presión de 160 mm Hg y aumentó 20 mm Hg cada día hasta llegar a un máximo de
220 mm Hg (4 día).
Se realizaron diferentes evaluaciones antes y después de la intervención. La sección
transversal del músculo, fuerza máxima isométrica e isocinética y biomarcadores de sangre:
mioglobina, creatina quinasa e interleucina 6. Estos últimos se tomaron antes, durante y 60
minutos después del ejercicio. Se hallaron diferencias estadísticamente significativas
favorables al grupo experimental tanto en hipertrofia como en fuerza. Todos los sujetos
mostraban unos marcadores sanguíneos correctos. Dato a destacar es que no hubo daño
muscular apreciable asociado con el entrenamiento isquémico.
El método oclusivo durante 6 días (12 sesiones) produce cambios en la masa y la fuerza
muscular. Un entrenamiento con y sin material oclusivo no produce signos de coagulación
sanguínea. Se necesita restricción de flujo sanguíneo para producir respuestas comparables al
efecto de varias semanas de entrenamiento de alta intensidad.
En el estudio de Madarame, H. (Madarame, H. y cols, 2008)16 tiene como objetivo investigar si
el entrenamiento de resistencia con restricción de flujo sanguíneo provoca hipertrofia
muscular. 15 hombres jóvenes sanos de edades comprendidas entre 19-26 años, sin realizar
actividad física diaria, fueron divididos en dos grupos aleatorizados:
Un grupo experimental donde se realizó el entrenamiento de baja resistencia con oclusión y un
grupo control donde se hizo el mismo entrenamiento pero sin restricción de flujo sanguíneo.
Fueron utilizadas tanto las extremidades inferiores como las superiores. Las sesiones de
entrenamiento se desarrollaron 2 veces por semana durante 10 semanas. La presión oclusiva
se fijó en 160 mm Hg durante las primeras 2 semanas y esta se aumentó en 20 mm Hg por
cada 2 semanas de entrenamiento.
En la extremidad superior se realizó 3 series de diez repeticiones al 50% de 1RM con un
período de descanso de 180 segundos entre series. Este entrenamiento fue ejecutado en dos
de los cuatro grupo divididos: OCC-T, brazo entrenado del grupo de entrenamiento oclusivo;
OCC-C, brazo no entrenado del grupo de entrenamiento oclusivo; NOR-T, brazo entrenado del
grupo de entrenamiento normal; NOR-C, brazo sin entrenamiento del grupo de entrenamiento
normal.
En la extremidad inferior se aplicó 3 series de 15-30 repeticiones al 30% de 1RM, el periodo de
recuperación entre series fue de 30 segundos.
Se realizaron diferentes evaluaciones antes y después de la intervención. La sección
transversal del músculo, fuerza máxima isométrica e isocinética y biomarcadores de sangre:
hormona del crecimiento (GH), testosterona y noradrenalina. Estos últimos se tomaron 10
minutos antes, al terminar, 15 y 30 minutos después del ejercicio. Se hallaron diferencias
estadísticamente significativas favorables al grupo experimental. La concentración de GH
aumentó de una manera significativa a los 15 minutos después del ejercicio en ambos grupos
en comparación con sus concentraciones en reposo, pero no se observaron diferencias
significativas en la concentración-tiempo de GH entre el ejercicio oclusivo y el grupo control.
Tampoco hubo cambios significativos en la concentración de testosterona en ninguno de los
grupos. La concentración de noradrenalina después del ejercicio mostró aumentos
significativos en ambos grupos, el valor más alto fue en el grupo con restricción de flujo
sanguíneo.
El método oclusivo produce cambios en la masa y la fuerza muscular con una resistencia
externa más baja a la requerida.
En el artículo publicado por Vechin, F. C. (Vechin, F. C. y cols, 2015)19 tiene como propósito
comparar los efectos del entrenamiento de baja resistencia con oclusión y entrenamiento de
alta intensidad sobre la fuerza y masa muscular del cuádriceps. 23 individuos sanos de edad
avanzada (59-71), 14 hombres y 9 mujeres fueron divididos en tres grupos aleatorizados:
Un grupo experimental donde se realizó el entrenamiento de baja resistencia con oclusión, un
grupo control el cual mantuvo sus actividades de la vida diaria sin ejercicio adicional y un grupo
de entrenamiento de alta intensidad. Las sesiones de entrenamiento se desarrollaron 2 veces
por semana durante 12 semanas. La presión del manguito se fijó en el 50% de la presión
arterial tibial máxima, los sujetos repitieron el test una vez a la semana para ajustar la
compresión del brazalete. La presión media del manguito durante el período de
entrenamiento fue de 71 ± 9 mm Hg.
Tanto un grupo como otro hicieron el ejercicio de prensa. El grupo experimental realizó un
total de 4 series, 1 serie de 30 repeticiones y 3 series de 15 repeticiones, con una carga
correspondiente al 20% 1RM en las primeras 6 semanas de entrenamiento, 1 minuto de
descanso entre series para ambos grupos. A continuación, se aumentó la carga hasta un 30%
1RM durante las siguientes semanas. La fase concéntrica y excéntrica se desarrolló en 2
segundos. El grupo de alta intensidad realizó 4 series de 10 repeticiones con una carga
correspondiente al 70% 1RM en las primeras 6 semanas de entrenamiento. La carga se
incrementó a 80% 1RM durante las semanas restantes.
Se realizaron diferentes evaluaciones antes y después de la intervención. La sección
transversal del músculo y 1RM. Ambos entrenamientos fueron eficaces en el aumento de 1RM
y la masa muscular del cuádriceps, sin embargo no hubo cambios significativos en el grupo
control.
El entrenamiento oclusivo constituye un importante método sustitutivo del ejercicio de alta
intensidad para inducir aumentos en la fuerza y masa muscular en la población adulta mayor.
En la investigación realizada por Fahs, C. A. (Fahs, C. A. y cols, 2015)20 tiene como objetivo
determinar las adaptaciones musculares al entrenamiento de baja resistencia realizado hasta
llegar a la fatiga con y sin restricción de flujo sanguíneo. 18 individuos sanos de mediana edad
(42-62 años), 12 hombres y 6 mujeres acabaron el programa de entrenamiento que consistía
en:
A una extremidad inferior se le aplicaba ejercicio de resistencia con oclusión, mientras que a la
otra extremidad realizaba el mismo entrenamiento sin restricción de flujo sanguíneo (libre de
flujo). Se desarrollaron 18 sesiones de entrenamiento a lo largo de las 6 semanas que duraba
el programa. La presión del manguito en la primera semana es de 150 mm Hg o 50% de
presión oclusiva arterial. De la segunda a la sexta semana aumentó la presión a un 80% de
presión oclusiva arterial pero no mayor de 240 mm Hg.
El entrenamiento consistió en extensiones unilaterales de rodilla usando una carga al 30% 1RM
hasta llegar a la fatiga. El entrenamiento oclusivo tuvo lugar en las sesiones impares mientras
que el entrenamiento libre de flujo en los días pares. La fase concéntrica y excéntrica se
desarrolló entre 1 y 5 segundos (20 repeticiones por minuto). Descanso de 1 minuto entre
series. Durante las dos primeras semanas los participantes completaron dos series con cada
miembro, el volumen de entrenamiento fue aumentando y en la semana 3 y 4 completaron
tres series con cada miembro. La semana 5 y 6 los sujetos realizaron cuatro series de ejercicio
con cada miembro.
Se realizaron diferentes evaluaciones antes y después de la intervención. Con respecto al 1RM,
potencia muscular, y fuerza-resistencia aumentaron significativamente en los dos grupos. Cabe
destacar a la hora de medir la sección transversal del cuádriceps, el recto anterior aumentó
significativamente en la extremidad con y sin material oclusivo, mientras que el vasto lateral
solo hipertrofió en la extremidad bajo restricción de flujo sanguíneo.
El entrenamiento de resistencia de baja carga hasta llegar a la fatiga con y sin BFR son
opciones viables para mejorar la función muscular en individuos de mediana edad. Sin
embargo, el ejercicio oclusivo aumentó el efecto hipertrófico y redujo el volumen de ejercicio
necesario para provocar una mejora en la función muscular.
El estudio de Yasuda, T. (Yasuda, T. y cols, 2014)21 tiene como finalidad examinar los efectos del
entrenamiento oclusivo sobre el tamaño del músculo y la rigidez arterial. 19 sujetos sanos de
edades comprendidas entre 61-84 años, 5 hombres y 14 mujeres, fueron divididos
aleatoriamente en los siguientes grupos:
Un grupo experimental donde se realizó el entrenamiento de baja resistencia con oclusión y un
grupo control el cual mantuvo sus actividades de la vida diaria sin ejercicio adicional. Las
sesiones de entrenamiento se desarrollaron 2 veces por semana durante 12 semanas. El
primer día de entrenamiento la presión del manguito se ajustó a 120 mm Hg. En cada sesión se
fue aumentando un 10-20 mm Hg hasta que se alcanzó una presión máxima de 270 mm Hg.
El entrenamiento consistió en extensiones bilaterales de rodilla y ejercicio de prensa. La
intensidad y volumen de entrenamiento se establecieron entre un 20-30% 1RM, con un total
de 4 series de 30-20-15-10 repeticiones y descansos de 30 segundos entre series. Descanso de
90 segundos entre ejercicios. La fase concéntrica y excéntrica se desarrolló en 2 segundos para
el ejercicio de extensión de rodilla mientras que para el ejercicio de prensa fue de 2,6
segundos. Las cargas de entrenamiento se ajustaron cada 3 semanas.
Se realizaron diferentes evaluaciones antes y después de la intervención. La sección
transversal del músculo, 1RM, test funcionales, muestras de sangre y test para comprobar la
función arterial. En la musculatura tanto glútea, aductora y cuadricipital aumentaron de
tamaño pero no fue así en los isquiotibiales (grupo experimental). Los valores de frecuencia
cardíaca fueron ligeramente superiores en el ejercicio de prensa que en el de extensión de
rodilla. Sin embargo, las puntuaciones en la sensación de esfuerzo percibido fueron más
pronunciadas en el ejercicio de extensión de rodilla. Mejoró significativamente la fuerza
muscular en los ejercicios en el grupo con material oclusivo. No hubo cambios en la frecuencia
cardíaca, sistólica y diastólica, rigidez arterial, índice de tobillo-brazo, degradación de fibrina,
dímero-D y creatina quinasa entre el pre y post entrenamiento en ambos grupos. La dilatación
mediada por flujo tuvo una mejora significativa e incrementó la puntuación del test funcional
de silla en el grupo experimental.
Por lo tanto el entrenamiento con restricción de flujo sanguíneo aumentó la masa y fuerza
muscular, no afectando negativamente a la rigidez arterial y a factores de coagulación en el
adulto mayor.
5.1.2. Estudios que analizaban el entrenamiento de resistencia aeróbica con restricción de
flujo sanguíneo frente a otro tipo de entrenamiento.
Incluimos en este grupo 2 estudios:
En este estudio (Abe, T. y cols, 2010)17 tienen como finalidad investigar los efectos que tiene
caminar combinado con método oclusivo (KAATSU) sobre el tamaño muscular, la fuerza, la
capacidad funcional y aeróbica. 19 individuos activos y sanos de edades comprendidas entre
60-78 años, 4 hombres y 15 mujeres, fueron asignados al azar en los siguientes grupos:
Un grupo experimental donde se realizó el entrenamiento de resistencia aeróbica con oclusión
y un grupo control el cual mantuvo sus actividades de la vida diaria sin ejercicio adicional. El
entrenamiento se ejecutó una vez al día, 5 días a la semana, durante 6 semanas. El primer día
de entrenamiento la presión del maguito fue de 160 mm Hg, se incrementó 10 mm Hg cada
semana hasta que se alcanzó una presión final de 200 mm Hg.
Los participantes caminaban en un tapiz rodante a 67 m/min durante 20 minutos. La rapidez
de la cinta era similar al ritmo de marcha que tenían los individuos en su vida diaria. Tanto la
velocidad como la duración de la caminata eran constantes durante todo el programa de
entrenamiento. La frecuencia cardíaca y la intensidad estimada del ejercicio durante el paseo-
KAATSU fueron de 104 latidos / min y 45 (9%) de la frecuencia cardíaca máxima de reserva
(frecuencia cardíaca máxima, 220-edad). El flujo sanguíneo de las extremidades inferiores fue
restringido durante un tiempo total de aproximadamente 23 minutos (20 minutos andando y 3
minutos de proceso de preparación). La cincha fue retirada nada más acabar la sesión.
Se realizaron diferentes evaluaciones antes y después de la intervención. En sección
transversal del músculo, masa muscular, fuerza máxima isométrica e isocinética y pruebas
funcionales hubo un cambio significativo de mejora en el grupo experimental. Mientras que en
el volumen máximo de oxigeno no hubo cambios significativos en ninguno de los dos grupos.
Los resultados del presente estudio indican que 6 semanas de entrenamiento KAATSU-walk
pueden producir aumentos en la fuerza y el tamaño muscular, así como la capacidad funcional
de los adultos mayores. Sin embargo, no hubo cambios en la capacidad aeróbica durante el
período de estudio. Se necesitan más investigaciones para determinar si combinar el ejercicio
aeróbico de diferente intensidad y duración con la restricción de flujo sanguíneo, mejoraría
simultáneamente la capacidad muscular y aeróbica.
La investigación realizada por Ozaki, H. (Ozaki, H. y cols, 2011)18 tiene como objetivo examinar
los efectos del ejercicio de marcha con restricción de flujo sanguíneo sobre el cumplimiento de
la arteria carótida, el tamaño del músculo y la fuerza muscular en los adultos mayores. Un total
de 23 individuos sedentarios de edades comprendidas entre 57 y 76 años, 5 hombres y 18
mujeres, fueron divididos aleatoriamente en los siguientes grupos:
Un grupo experimental donde se realizó el entrenamiento de resistencia aeróbica con oclusión
y un grupo control el cual se aplicó el mismo entrenamiento pero sin restricción de flujo
sanguíneo. Se aplicó 4 días a la semana durante 10 semanas. El primer día de entrenamiento,
la presión del manguito fue de 140 mm Hg. A medida que los participantes se adaptaron al
estímulo oclusivo durante la fase temprana del entrenamiento, la presión se incrementó en 10
mm Hg cada semana hasta que se alcanzó una presión final del manguito de aproximadamente
200 mm Hg.
Los participantes realizaron una caminata de 20 minutos a una intensidad del 45% de la
frecuencia cardíaca de reserva predeterminada. Una semana antes del comienzo del estudio
de entrenamiento, se ajustó la velocidad de la marcha y fue constante durante todo el período
de entrenamiento. Se predijo la frecuencia cardíaca máxima (220 menos la edad) para
determinar la frecuencia cardíaca de reserva de cada participante.
Se realizaron diferentes evaluaciones antes y después de la intervención. En la sección
transversal del músculo y fuerza máxima isocinética hubo un cambio significativo de mejora en
el grupo experimental. El cumplimiento arterial carotideo mejoró en los dos grupos.
El entrenamiento con reducción del flujo sanguíneo y marcha puede mejorar el tamaño y la
fuerza del músculo. A diferencia del ejercicio de alta intensidad, el cumplimiento de la arteria
carótida mejoró después de 10 semanas con el entrenamiento experimentado.
6. DISCUSIÓN
La evidencia científica disponible sobre el entrenamiento con restricción de flujo sanguíneo en
la mejora de la hipertrofia y fuerza sugiere que el método oclusivo tiene beneficios en la
mejora fisiológica muscular. Se han obtenido varios trabajos que han logrado cumplir los
criterios de elegibilidad impuestos para su admisión. Se realizó una búsqueda en diversas
bases de datos en la que se encontraron 7 artículos válidos.
En la relación a la calidad metodológica, se ha mostrado una evidencia mayoritaria en los
artículos incluidos en la misma, pues no existe una gran variedad en la calidad en los diferentes
artículos.
En 5 de los estudios se compara el entrenamiento de fuerza-resistencia con restricción de flujo
sanguíneo con otro tipo de entrenamiento (Fujita, T. 2008)15, (Madarame, H. 2008)16, (Vechin,
F. C. 2015)19, (Fahs, C. A. 2015)20 y (Yasuda, T. 2014)21.
En cuanto a estas tres intervenciones (Vechin, F. C. y cols, 2015)19, (Yasuda, T. y cols, 2014)21 y
(Madarame, H. y cols, 2008)16 periodizan el entrenamiento de una forma similar, los dos
primeros aplicaron 2 sesiones de entrenamiento a la semana durante 12 semanas mientras
que Madarame, H. (16) , lo hizo en 10 semanas. La dosificación y cargas en el entrenamiento
fueron similares en Vechin, F. C. (19) (4 series, 30, 15, 15, 10 repeticiones al 20-30% 1-RM, 1 min
descanso) y Madarame, H. (16), (3 series, 15-30 rept al 30% 1-RM, 30 seg de descanso) mientras
que en la investigación de Yasuda, T. (21), la sesión era más larga ya que contaba con 2
ejercicios y el número de repeticiones era mayor (2 ejer, 4 series, 30, 20, 15, 10 rept al 20-30%
1-RM, 30 seg de descanso entre series y 1 min entre ejercicio).
En el artículo (Fahs, C. A. y cols, 2015)20 el periodo de entrenamiento fue de 6 semanas, la
mitad con respecto a los anteriores estudios, pero se aplicaron en total unas 18 sesiones (3
sesiones por semana). Utilizaron el ejercicio oclusivo hasta llegar a la fatiga controlando el
tiempo de la fase concéntrica y excéntrica con un máximo de 5 segundos en la ejecución al
30% RM con descansos de 1 min entre series. El total de series fueron de 2-3-4 cada dos
semanas de entrenamiento.
En la investigación de (Fujita, T. y cols, 2015)15 destacar como dato relevante la corta duración
de la intervención. 6 días con 12 sesiones de entrenamiento. Un gran número de
intervenciones en un espacio de tiempo muy reducido (2 sesiones al día). 4 series, 30, 15, 15,
15 repeticiones al 20% 1-RM, 30 seg descanso.
En los cincos artículos citados se observan pequeñas diferencias en las variables de resultado,
hipertrofia y fuerza muscular:
En la sección transversal del músculo la mayor ganancia post-entrenamiento se refleja en el
artículo de Vechin, F. C. (19) con un total de 4 cm². Seguido de Madarame, H. (16) (3,6 cm²),
Fujita, T. (15) (2,5 cm²), Yasuda, T. (21) (1,5 cm²) y Fahs, C. A. (20) (0.5 cm). Se puede apreciar
como las dos investigaciones que tienen una carga similar y duración bastante parecida son los
que más hipertrofia han conseguido. Destacar que en el estudio de Madarame, H. (16) la
población destinada son hombres jóvenes, no incluye mujeres, por lo tanto la capacidad para
hipertrofiar y desarrollar una fuerza muscular será mayor. Yasuda, T. (21) tiene un protocolo
muy parecido a los dos estudios anteriores pero los valores de volumen muscular son
menores, puede ser debido a que la carga de trabajo es más alta y los individuos hayan
entrado en un síndrome de sobreentrenamiento o “burnout”. En la publicación de Fujita, T. (15)
se consigue un gran aumento de la sección transversal comparado con el poco tiempo de
entrenamiento total (6 días), el motivo puede ser que la población destinada fuera a hombres
jóvenes. Fahs, C. A. (20) ha sido catalogado como el artículo con menor hipertrofia conseguida,
la causa puede ser debida a la forma de entrenamiento programado, hasta llegar al fallo
muscular más 6 semanas de entrenamiento. En todos los estudios se consigue aumentar la
sección transversal del músculo, se sugiere que al incrementar las semanas de entrenamiento
se va a lograr o alcanzar una mayor hipertrofia siempre y cuando las cargas sean las
adecuadas.
Con respecto a la fuerza muscular los tres artículos con una mayor cantidad de semanas de
entrenamiento han dado los mejores resultados en el incremento del RM, Vechin, F. C. (19),
Yasuda, T. (21) y Madarame, H. (16), 13,1 kg, 14 kg y 18,5 kg respectivamente. Esto se debe al
modelo de adaptación funcional y estructural inverso, se requiere un alto volumen de
entrenamiento para que el sistema neural pueda tener una mejoría considerable. Tanto las
publicaciones de Fujita, T. (15) y Fahs, C. A. (20) tienen un aumento del RM (4 kg, 5,1 Kg) pero no
tan acentuada como las anteriores. Con los datos obtenidos se puede plantear un
entrenamiento con un periodo de tiempo reducido y con unas ganancias considerables en
fuerza muscular.
Las investigaciones escogidas para la revisión coinciden en que la intensidad de entrenamiento
sea entre el 20-30% RM ya que es suficiente para inducir cambios en la fisiología muscular. No
tendría mucho sentido usar cargas más elevadas porque un entrenamiento de alta intensidad
por si solo va a inducir una constricción vascular similar a la producida en un entrenamiento
oclusivo, y lo característico de este método es que se puedan utilizar intensidades bajas.
Además un entrenamiento oclusivo de fuerza de máxima (85-95% RM) realizando un máximo
de 2-3 repeticiones no tendría apenas efecto ya que habrá una mayor solicitación neurológica
que metabólica, pero aún no se ha estudiado (Wernbom, M. 2006)27.
En dos de los estudios se compara el entrenamiento de resistencia aeróbica con restricción de
flujo sanguíneo frente a otro tipo de entrenamiento (Abe, T. 2010)17 y (Ozaki, H. 2011)18.
En la intervención (Abe, T. y cols, 2010)17 se realizan 5 sesiones de entrenamiento a la semana
durante 6 semanas. Los participantes caminaban en un tapiz rodante a 67 m/min durante 20
minutos.
En el artículo (Ozaki, H. y cols, 2011)18 se observa un protocolo de entrenamiento de 4 días a la
semana durante 10 semanas. Los participantes realizaron una caminata de 20 minutos a una
intensidad del 45% de la frecuencia cardíaca de reserva predeterminada.
Hay una gran diferencia en el tiempo de la intervención de los estudios (6 semanas y 10
semanas). La intensidad y tiempo de duración es similar en los dos casos.
También en estas dos publicaciones se observan pequeñas diferencias en las variables de
resultado:
Abe, T. (17) y Ozaki, H. (18) tienen un aumento de la sección transversal de 5,8% y 3,2 %
respectivamente. Mientras que la fuerza muscular tanto en un estudio como en el otro es de
10 N/m. No hay grandes diferencias, posiblemente el aumento más pronunciado del volumen
muscular sea porque a las 6 semanas ya el músculo ha llegado a la cima y no tenga capacidad
de seguir agrandando.
La mayoría de los entrenamientos están dirigidos a la población adulta mayor, por lo que se
puede considerar un método seguro, fiable y con muy buenas capacidades de adaptación. Así
como cambios fisiológicos producidos a nivel muscular. Además de diferenciar en los estudios
la población destinada, tendrían que separarlos por sexos. La fisiología y el nivel de adaptación
entre uno y otro son totalmente diferentes y podría causar una confusión y errores a la hora
de obtener y registrar los datos. Este entrenamiento estará destinado a la mayoría de la
población, haciendo hincapié en aquella cuyo objetivo sea hipertrofiar y ganar fuerza muscular
sin utilizar elevadas cargas. Una población excelente sería encamados o individuos con
programas de rehabilitación.
La percepción subjetiva de dolor, medida 24 horas después de una sesión de restricción de
flujo sanguíneo hasta el fallo muscular, alcanza valores de 2.8 y 2.9 en una escala de dolor
percibido de 10. Otro estudio en el que se aplicó material oclusivo no registró un incremento
significativo de la percepción subjetiva de dolor 24 horas tras el entrenamiento (Hernández, J.
M. 2012)9.
La presión del manguito es algo muy relativo. Los estudios incluidos en esta revisión coinciden
en que la compresión sea > 120-140 mm Hg hasta llegar a un máximo de 240- 270 mm Hg. Solo
un artículo aplica un empuje de media 71 mm Hg y funciona. Otro elemento a incluir sería la
anchura del manguito. Un extenso manguito con una presión similar a uno más delgado hará
que este primero aumente aún más la restricción de flujo sanguíneo ya que retrasa el flujo de
sangre a la zona expuesta. Hay diversos factores que no se tienen en cuenta como la edad, el
sexo, el nivel de condición física, el estado de entrenamiento, la fuerza basal y el tamaño
muscular. Investigaciones futuras tendrán que estudiar estas variables para conseguir una
presión del manguito óptima.
Limitaciones
En ninguno de los estudios introducidos en esta revisión tienen “intención de tratar” por lo
que la calidad metodológica se verá disminuida. Hay una puntuación menor en la escala PEDro
y en la validez interna. Además al ser estudios cuyo entrenamiento es observado por los
sujetos experimentados no puede haber en ningún momento cegamientos de los
participantes.
La unidad de medida (RM) de las investigaciones en la que se realiza ejercicio de fuerza-
resistencia es diferente al entrenamiento de resistencia aeróbica. No ha supuesto una gran
limitación ya que al diferenciar los dos grupos cada uno emplea su propia medición Kg y N/m
respectivamente.
El artículo (Fahs, C. A. y cols, 2015)20 la sección transversal del muslo se mide en cm en vez de
cm², podría ser por un fallo del artículo o simplemente utilice otra unidad de medida. En el
trabajo se ha dado el valor como si fuera cm²
La publicación (Vechin, F. C. y cols, 2015)19 obtiene el RM mediante el ejercicio de prensa y no
extensión de rodilla, por lo tanto es distinto al resto de los artículos. He extrapolado dicho
resultado final de prensa al ejercicio de extensión rodilla y lo he introducido en el texto.
7. CONCLUSIONES
El entrenamiento de baja intensidad con restricción de flujo sanguíneo resulta más eficaz para
el incremento de la sección transversal y la fuerza muscular en la estructura implicada que un
entrenamiento de las mismas características sin oclusión añadida o suplementaria.
Un entrenamiento usando un manguito de presión (120-240 mm Hg) a bajas intensidades (20-
30% RM), con una carga de entrenamiento de 3-4 series entre 10-30 repeticiones, dos sesiones
a la semana, con un total de 6 a 12 semanas de trabajo sería suficiente para inducir cambios
fisiológicos en la musculatura y provocar un aumento en la hipertrofia y la fuerza muscular.
El método oclusivo a baja intensidad puede utilizarse como alternativa al entrenamiento de
resistencia de alta intensidad.
El entrenamiento oclusivo es un método seguro ya que no parece afectar negativamente a la
salud de los sujetos expuestos. Por lo tanto destinado a sujetos sanos sedentarios, activos y
deportistas así como en personas mayores e individuos en período de rehabilitación.
La evidencia sugiere que empleando material oclusivo, el entrenamiento de resistencia causa
unos valores más altos en el tamaño y fuerza del músculo que el entrenamiento aeróbico. Esta
diferencia está probablemente relacionada con el aislamiento y especificidad del trabajo
muscular elaborado en el ejercicio de resistencia.
8. TABLAS
Tabla 1. Resultados de la búsqueda bibliográfica.
PubMed PEDro Scopus SPORT Discus
Cochrane
“Blood flow restriction”
exercise
232 8 241 184 90
“Blood flow restriction”
muscle
216 7 250 165 61
“Blood flow restriction” hypertrophy
77 1 112 74 13
“Blood flow restriction”
strength
139 6 169 125 43
Total 2213
Tabla 2. Calidad metodológica según escala PEDro y Validez Interna.
Ítem Fujita, T. (2008)15 Madarame, H. (2008)16 Abe, T. (2010)17 Ozaki, H. (2011)18 Vechin, F. C. (2015)19 Fahs, C. A. (2015)20 Yasuda, T. (2014)21
1. Criterios de inclusión Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí
2. Asignación aleatoria Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí
3. Asignación oculta Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí
4. Comparabilidad inicial Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí
5. Cegamiento No No No No No No No
Participantes
6. Cegamiento terapeutas No No No No No No No
7. Cegamiento No No No No No No No
evaluadores
8. Seguimiento adecuado Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí
9. Análisis por intención No No No No No No No
de tratar
10. Comparación entre Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí
Grupos
11. Medidas puntuales y Sí Sí Sí Sí Sí Sí Sí
de variabilidad
Puntuación total 6/10 6/10 6/10 6/10 6/10 6/10 6/10
obtenida escala PEDro
Validez Interna (PVI) 3/7 limitada (Li) 3/7 Li 3/7 Li 3/7 Li 3/7 Li 3/7 Li 3/7 Li
Tabla 3. Descripción de los artículos incluidos.
ESTUDIOS QUE ANALIZABAN EL ENTRENAMIENTO OCLUSIVO AÑADIENDO EJERCICIOS DE RESISTENCIA AERÓBICA.
AUTOR Y AÑO OBJETIVOS PARTICIPANTE E VARIABLES DE ESTUDIO RESULTADO CONCLUSIONES
INTERVENCIÓN E
INSTRUMENTOS DE MEDIDA
Abe, T. (2010)17.
Ozaki, H. (2011)18
Investigar los efectos que
tiene caminar combinado
con KAATSU sobre el tamaño
muscular, la fuerza y la
capacidad funcional, así
como la capacidad aeróbica.
Un total de 19 hombres y
mujeres activos, de 60 a 78
años, fueron asignados al
azar a un grupo de
entrenamiento KAATSU-
caminar (K-walk, n=11), y un
grupo control con actividad
física diaria(n = 8). El grupo
K-walk realizó caminata de
20 minutos en cinta (67 m /
min), 5 días / semana
durante 6 semanas.
En el estudio se midió:
-Sección transversal de la
extremidad inferior.
-Fuerza máxima isométrica e
isocinética.
-Consumo máximo de
oxígeno.
-Capacidad funcional con dos
test.
La prueba isométrica e isocinética, el
tamaño musculo esquelético aumentaron
en el grupo K-walk pero no en el grupo
control. La capacidad funcional también
aumentó significativamente solo en el
grupo K-walk. Sin embargo, no hubo
cambios en el consumo máximo de
oxígeno estimado (absoluto y relativo a la
masa corporal) para ninguno de los dos
grupos.
Los resultados del estudio indican
que 6 semanas de entrenamiento
KAATSU-walk no mejoraron
simultáneamente la aptitud
cardiovascular y muscular de los
participantes mayores.
Sin embargo, aumentó
significativamente el tamaño
muscular y la fuerza, así como la
capacidad funcional de los
individuos mayores activos.
Examinar los efectos del
ejercicio de marcha con
restricción de flujo sanguíneo
sobre el cumplimiento de la
arteria carótida, el tamaño del
músculo y la fuerza muscular
en los adultos mayores.
Tanto los grupos de
entrenamiento oclusión-
caminar (BFR-W, n=13, 66 ± 1
años) como de control (CON-
W, n =10, 68 + 1 años)
realizaron 20 minutos de
caminata con una intensidad
de 45 % de reserva cardíaca, 4
días / semana durante 10
semanas.
En el estudio se midió:
-Compromiso de la arteria
carótida.
-Fuerza muscular.
-Hipertrofia.
La fuerza máxima en la rodilla
(15%) y el área transversal del
muslo (3%) aumentaron en el
BFR-W, pero no en el CON-W.
Mejora del cumplimiento arterial
carotídeo tanto en los grupos BFR-
W (50%) y CON-W (59%).
El entrenamiento con reducción
del flujo sanguíneo y caminar
puede mejorar el tamaño y la
fuerza del músculo del muslo, así
como el cumplimiento de la
arteria carótida en los ancianos.
ESTUDIOS QUE ANALIZABAN EL ENTRENAMIENTO OCLUSIVO AÑADIENDO EJERCICIOS DE FUERZA-RESISTENCIA.
AUTOR Y AÑO OBJETIVOS PARTICIPANTE E VARIABLES DE ESTUDIO RESULTADO CONCLUSIONES
INTERVENCIÓN E
INSTRUMENTOS DE MEDIDA
Fujita, T. (2008)15
Madarame, H. (2008)16
Examinar el efecto de una
mayor frecuencia de
entrenamiento con el
método oclusivo, 12 sesiones
en 6 días.
Hombres jóvenes sanos
realizaron entrenamiento
de resistencia de baja
intensidad con método
oclusivo (n = 8, LIT-BFR) y
sin (n = 8, LIT-CON) dos
veces al día durante 6 días.
El entrenamiento involucró
4 series de ejercicio de
extensión de la rodilla (75
contracciones totales) al
20% 1-RM.
En el estudio se midió:
-Sección transversal de la
extremidad inferior.
-Fuerza máxima isométrica e
isocinética.
-Biomarcadores en sangre.
-Coagulación de la sangre.
Los cambios en la masa muscular y la
fuerza después de 6 días (12 sesiones) de
entrenamiento de resistencia de baja
intensidad requieren BFR para producir
respuestas comparables al efecto de varias
semanas de entrenamiento de resistencia
de alta intensidad.
Se observó hipertrofia muscular
significativa sólo en el grupo LIT-
BFR (2,4%). Aumento de la
fuerza de extensión de la rodilla
1-RM (6,7%). No hubo aparente
daño muscular asociado con el
entrenamiento en los niveles
sanguíneos de creatina quinasa,
mioglobina e interleucina-6.
Investigar si el entrenamiento
de resistencia con restricción
de flujo sanguíneo provoca
hipertrofia muscular.
Quince hombres jóvenes no
entrenados fueron asignados al
azar al grupo de
entrenamiento oclusivo (OCC,
N = 8) y el grupo de
entrenamiento normal (NOR, N
= 7).Se realizó el ejercicio de
pierna con restricción de flujo
sanguíneo (30% de 1RM, tres
series, 15-30 repeticiones),
mientras que NOR realizó el
mismo ejercicio de pierna sin
oclusión. Dos veces por
semana durante 10 semanas.
En el estudio se midió:
-Sección transversal de la
extremidad inferior.
-Fuerza máxima isométrica e
isocinética.
-Biomarcadores en sangre.
Hubo un aumento de la sección
transversal del músculo y de la
fuerza muscular en el grupo con
entrenamiento oclusivo.
La concentración de noradrenalina
mostró un aumento
significativamente mayor después
del ejercicio de la pierna con
oclusión. Las concentraciones de
hormona de crecimiento y
testosterona no mostraron
diferencias significativas.
Los resultados indican que el
entrenamiento de resistencia de baja
intensidad con restricción de flujo
sanguíneo aumenta el tamaño
muscular y la fuerza. Se sugirió que
cualquier factor circulante estaba
involucrado en este efecto muscular.
ESTUDIOS QUE ANALIZABAN EL ENTRENAMIENTO OCLUSIVO AÑADIENDO EJERCICIOS DE FUERZA-RESISTENCIA.
AUTOR Y AÑO OBJETIVOS PARTICIPANTE E VARIABLES DE ESTUDIO RESULTADO CONCLUSIONES
INTERVENCIÓN E
INSTRUMENTOS DE MEDIDA
Vechin, F. C. (2015)19
Fahs, C. A. (2015)20
El propósito de este estudio
fue comparar los efectos del
entrenamiento de baja
resistencia con oclusión y
entrenamiento de alta
intensidad sobre la fuerza y
masa muscular del
cuádriceps en ancianos.
23 individuos de edad avanzada, 14
hombres y 9 mujeres, realizaron 12
semanas de entrenamiento, 2
veces por semana. Se asignaron
aleatoriamente a uno de los
siguientes grupos: (a) grupo control
(n=8), (b) HRT (n=8): 4 x 10
repeticiones, 70–80% una
repetición máxima (1RM), y (c) LRT-
BFR (n=8): 4 series (1 x 30 y 3 x 15
repeticiones), 20-30% 1RM.
En el estudio se midió:
-Sección transversal de la
extremidad inferior.
-1RM.
LRT-BFR constituye un
importante método de
entrenamiento sustituto
del TRH para inducir
aumentos en la fuerza
muscular y la masa en los
ancianos.
Ambos entrenamientos fueron
eficaces en el aumento del 1RM
(HRT: 54%, p < 0,001, LRT-BFR:
17%, p = 0,067) y sección
transversal cuádriceps (HRT: 7,9% p
< 0,001; LRT - BFR: 6,6%, p < 0,001).
Determinar las adaptaciones
musculares al entrenamiento
de baja resistencia realizado
hasta llegar a la fatiga con y
sin restricción de flujo
sanguíneo (BFR).
Individuos de mediana edad
(42-62 años) hombres (n = 12)
y las mujeres (n = 6),
completaron 18 sesiones de
entrenamiento con resistencia
a la extensión de rodilla
unilateral durante 6 semanas.
Una extremidad entrenada
bajo BFR, y la extremidad
contralateral entrenada sin BFR
[flujo libre (FF)].
Antes y después del
entrenamiento, se evaluó la
hipertrofia, fuerza, potencia y
resistencia en cada miembro.
El volumen de entrenamiento total fue
significativamente mayor para la
extremidad FF en comparación con la
extremidad BFR. El grosor del cuádriceps
anterior y la función muscular
aumentaron tras el entrenamiento en
cada extremidad, sin diferencias entre
los miembros. El vasto lateral aumentó
significativamente más en la extremidad
entrenada bajo restricción de flujo
sanguíneo.
El entrenamiento de
resistencia de baja carga hasta
llegar a la fatiga con y sin BFR
son opciones viables para
mejorar la función muscular
en individuos de mediana
edad. Sin embargo, el BFR
aumentó el efecto
hipertrófico y redujo el
volumen de ejercicio
necesario para provocar una
mejora en la función
muscular.
ESTUDIOS QUE ANALIZABAN EL ENTRENAMIENTO OCLUSIVO AÑADIENDO EJERCICIOS DE FUERZA-RESISTENCIA.
AUTOR Y AÑO OBJETIVOS PARTICIPANTE E VARIABLES DE ESTUDIO RESULTADO CONCLUSIONES
INTERVENCIÓN E
INSTRUMENTOS DE MEDIDA
Yasuda, T. (2014)21
Examinar los efectos del
entrenamiento oclusivo
sobre el tamaño del músculo
y la rigidez arterial en adultos
mayores.
Hombres y mujeres (edades 61-84
años) se dividieron en BFR-RT (n =
9) y grupo control sin
entrenamiento (CON; n = 10). El
grupo BFR-RT realizó los ejercicios
al 20-30% de 1-RM, formado por
extensión de rodilla y prensa. 2 días
/ semana durante 12 semanas.
En el estudio se midió:
-Sección transversal de la
extremidad inferior.
-1RM.
-Test funcional.
-Test arterial.
-Analítica.
BFR-RT aumenta masa
muscular así como la fuerza
máxima. No afecta
negativamente a la rigidez
arterial o a factores de
coagulación en adultos
mayores.
Hubo un aumento del tamaño del
músculo de los cuádriceps (8,0%),
aductores (6,5%) y glúteo mayor
(4,4%), mejora de la fuerza en la
extensión de rodilla, prensa (26,1%
y 33,4%) y rendimiento en el test
de silla (18,3%) (P <0,05) en el
grupo BFR-RT, pero no en el grupo
CON.
9. GRÁFICOS
Figura 1. Diagrama de flujo
Artículos encontrados en diferentes bases de datos
TOTAL: 2213
Número de artículos tras
exclusión por límites de
búsqueda (artículos >
2007, inglés y español y
ensayo clínico)
N=429
Número de artículos
tras exclusión por título
Abstracts y duplicado
N=84
No hay
ensayo clínico
aleatorizado
Población
destinada
excluyente
No hay
focalización en
hipertrofia y
fuerza
Artículos incluidos para análisis a texto completo
N: 32
Artículos incluidos en la
revisión
N=7
Falta De información
No se utilizan correctas
medidas de resultado
Abstracts
10. REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1. Mirella, R. (2006). Las nuevas metodologías del entrenamiento de la fuerza, la resistencia, la
velocidad y la flexibilidad (Vol. 24). Editorial Paidotribo.
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