8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
1/37
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
2/37
Iry'sp4*',{
-/n{C
t.3
t'l*
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
3/37
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
4/37
/"4
LUIS
EDUARDO
NIETO
ARTETA
El
caf
en
la
sociedad
colombiana
B
RAEr
Nco
DITORES
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
5/37
Primera
edicin:
Breviarios
de
Orientacin
Colombiana
Bogot,
1949
Quinta
edicin:
El
ncora
Editores
'
Bogot,
1981
Dcimo
primera
edicin:
El ncora
Editores
Bogoti,
1991
ISBN
84-89209-05-7
3nq6{
Portada:
diseo
de
Camila
Cesarino
Costa
llustracin:
fotografa
de
Diego
Samper
@
Derechos reservados: 1997. Claudia Nieto
El
ncora
Editores
Apartado
035832
Bogot,
Colombia
Composicin
y fotomecnica:
Servigraphic
Ltda'
Imprcso
en
los
talleres
de
Formas
e-Impresos
Panamericana
lmpreso
en
Colombia
Prlntel
in
(loktmbia
CONTENIDO
I.
Los
hechos
II.
La
formacin
de
la economa
nacional
III.
La estabilidad
i
JV.
La direccin,
poltica
V,
Humanistas,
poetas
y
empresarios
Vl.
Las
dos Colombias
*
*-
-VIl.
La
sociedad contra
el Estado
VIII.
Nueva
vida
y
nuevos
hombres
IX.
Todavfa
una
conciencia
coloniali
-
9
15
23
35
38
46
54
60
66
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
6/37
I
LOS
HECHOS
Condiciones
internas
y
externas
han
propiciado
en
(lolombia
la
hegemona
de
que disfruta
el
cultivo
del
caf.
Aquellas son
de
ndole
geogrfica. El
territorio
colombiano es
un territorio
de vertientes.
Tres
grandes
cordilleras
lo atraviesan
de Sur
a
Norte.
Descienden
suve
y
lcntamente hacia
el
nivel del
mar. Las
elevadas
alturas
no dcsaparecen
bruscamente.
Se
pueden
distin-
guir
seis
regioncs dc vertientes.
A cada
cordillera co-
rresponderan dos.
Hacia
fines del siglo
pasado y
prin-
cipios del
actual
el
cultivo del caf se extender en
las
sinuosas
y
onduladas
vertientes,
cuando stas sean ocu-
padas
y
colonizadas.
El
primer
momento
en el desarrollo
geogrfico
de la
economa colombiana
fue
la
ocupacin
de las
tierras
bien
altas, mesetas
y
altiplanicies.i
En
esas regiones
el
conquistador espaol encontr
grands-ma5as
iie
indios
cuya'evolucin
cultural
y poltica
era
muy
superior a la
de los
que
se hallaron en
las
costas
El
sistema
poltico
que
conocn
ts
inios del- tttplaitb
y
al cual estaban
sometidos
y
la cultura
dentro
de
la
cual
vivan fueron
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
7/37
10
Luis
Eduardo
Nieto
Arteta
factores favorables al conquistador.
Este
pudo
dominar-
los
sin
grandes
dificultades.
Los
hechos
mencionados
haban
preparado
a
los
chibchas
para
la
explotacin
de
que
seran vctimas.
Los
indios
salvajes
y
bravos de
las
costas
y
de los valles
interiores,
justamente
pot
gozar
de un menor
progreso
cultural
y
poltico, lucharan
con
heroicidad
y
moriran en
las*-rudas contiendas con los
conquistadores
peninsulares.
[ n
las
planicies
y
mesetas
el espaol
encontrara condiciones
climticas
muy se-
mejantes
a
las
de
Espail.
La vida
tropical
se
amortigua-
ba. Sus asperezas,
su hinedad, su avasallante
flora,
sus
endemias,
desaparecan.'Las
elevadas regiones
andinas
ofrecan
a
los espaoles condicQnes
adecuadas
para
una
existencia
normal
y
sedentariej Adems,
los
sumisos
indios
permitiran la creacin de una economa
tpica-
mente
colonial.
Durante ese
perodo,
las
costas seran
regiones desiertas.
En
ellas
se estableceran
puertos y
plazas fuertes
para
el ulterior
limitado
comercio
y
para
la
defensa.
En
las
tierras
bajas, calientes
e
insalubres, la
vida
sera lnguida.
La
economa
sera
predominante-
mente
minera.
Ser
la
regin de
la
esclavitud
de
los
negros
y
de
los mulatos.
El desplazamiento
del altiplano
a las
vertientes
ser
lento.
El motivo
es evidente: slo
el
crecimiento
vegetativo
proporcionar
los
habitantes
que
las ocupa-
rn.
No hay,
por
otra
parte, en aquellos
momentos
cul-
tivos
que puedan desarrollarse
en las
vertientes
y
que
ofrezcan
la
posibilidad
de
lucros cuantiosos.
Antes
de la ocupacin
de
las
vertientes,
hay un hecho
que
debe
ser
considerado:
la
colonizacin
de
algunos
valles
interiores,
calientes
y
bajoi.
Es
la poca
del
auge
de
la
produccin
de
tabaco, una
vez
que,
eliminado
el
monopolio
legado
por
la
Colonia
a la Repblica,
se
l;l
r
:rltr r:rr la sociedad colombiana
rlt'su'rollan
ampliamente
los
cultivos
de
la
hoja
-se-
irrrrda
mitad
del
siglo
pasado-.
,
(luando
el colono
llega
a las vertientes, Colombia
ha
vivido
ya-el
ciclo del
tabaco,
el del ail
-de
reducida
rrtonsidad-
y
el
de
la
quina.
Esos
productos, especial-
rrrcnte
los
dos ltimos,
quedan
ya
eliminados.
A los
t'olonos
se ofrece
el
caf como
nico cultivo
posible
en
lrr vertiente.
Ensayos
afortunados as
lo indicaban.
El
t'lf
no era
desconocido
en Colombia.
Desde
1830
y
run
en
aos
anteriores
se
haba exportado en
pequeas
cantidades.
En
1866-1867, durante
la primaca del
taba-
cro, se
haban enviado a
los
mercados exteriores
4.099.391 kilogramos.
iDespus
de
las
crisis
del
ail
y
clc
la
quina
no cra
posible
que
se
persistiera
en
el
cul-
tivo dcl
prirnero
y
en la extraccin de la segund4Pn las
vcrticntes
el
tabaco
no
se
poda
cultivat.lAdems, no
haba condiciones
favorables
para
la expansin de la
llroduccin
de tabaco en
los valles
interiores
y
clidos.
fln cl
mercado
internacional el
tabaco
colombiano
haba
sitJo
climinado
por
la competencia del
procedente
de las
iireas del
Pacfico.
I-a mayor
densidad
de
poblacin demoraba
en las
cordilleras oriental
y
centra(Los sectores centrales
de
las mismas son
los
ms ricos
en vertientes, en
esas
vcrtientes
suaves
y
sinuosas
que
caracterizan
el territo-
riu
colombiano.
El
departamento
de
Antioquia,
encerra-
rfo
en
sus
altas montaas, de
razablanca, un poco
semi-
tir,
se desplaza
h.acia el
sur,
al
territorio
del
que
luego
st'rr
departamento
de Caldas.
Se
fundan Salamina, Agua-
tlirs
y
Pcora. Es
el
norte
de Caldas, patriarcal
y
sose-
lirtkr.
En 1848 se funda Manizales.
Sus
pobladores
han
srgrriclo
los caminos zigzagueantes
de los labriegos,
sobre
lirs sicrras,
en
los
lugares
en
que
se inicia
la vertiente.
t1
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
8/37
l2
Luis
Eduardo
Nieto
Arteta
En
el departamento
de
Cundinamarca,
sus
viejas pobla-
ciones
coloniales,
buscando
la
proximidad
del
ro Mag,
dalena, ocupan
las
vertientes
de
la
cordillera
oriental;
Surgen
tambin nuevas poblaciones.
Ya en la
poca
fugaz
de los cultivos
de ail,
Cundinamarca haba
conocido
una rauda
ocupacin de
sus vertientes.
Antioquia,
que
haba
vivido en
las vertientes de
las
cordilleras
central
y
occidental,
se familiariza
pronto
con
la
produccin y
el
cultivo del
caf.
En
la regin
de
Fredonia
se haba
hecho
un
ensayo
feliz.
En
Ia cordillera
central
se ocu-
pan tambin las regiones
del Tolima.
Se fundan pobla-
ciones
que
luego
adquirirn
gran
progreso.
Surgen
las
ciudades de Fresno
y
del Lbano.
De Manizales
la onda
humana
se dirige al
Occidente. Se coloniza
el feraz
Quindo.
En esta regin
se dan
hechos que
jams
se
haban realizado
en Colombia. Hay poblaciones
que
rpidamente se transforman.
Pereira, Armenia,
Calarc,
etc.,
pocos
aos despus de haber
sido
fundadas,
ofre-
cen
un desarrollo impresionante.
Es
la "ciudad". Aveni-
das, asfaltos,
colegios, escuelas, servicios
pblicos,
efi-
caz administracin
municipal,
normalidad
poltica,
ele-
vados
presupuestos,
transportes,
almacenes, clubes.
Es
un modo de
vida
qlle
no
conocieron las viejas
ciudades
coloniales. En el departarnento del Valle
del
Cauca
se
contemplan acontecimientos
idnticos.
Hay una
pobla-
cin, Sevilla,
que
simboliza
el
progreso que
en esa re-
gin
produce tambin
el
caf.
A
los treinta
aos
de
su
fundacin ofrece un desarrollo
que
todava no
haban
alcanzado
las viejas
ciudades
vallecaucanas.
Slo
bgy'
un
producto que
se
puede
cultivar en
forma
lucrativa en las
vertientes andinas. Desde
luego, sera
p"lfl9*_Oducir
en
ellas otros cultivos,
pero
stos no
seran econmicamente
productivos.
As
concebida esta
I
I
r
,rlt' t'rr
la sociedad
colombiana
r
rrnrlici(rr
geogrfica
que
en Colombia
ha ocasionado
la
lrt'1',1'','t.,n'u
del cultivo del
caf, puede declararse que el
rrt'tkrrninio
de
la
produccin
del
grano
responde
a
una
I
rr{ll idad
geogrfica.
('ondiciones
externas
han
contribuido
tambin
a
im-
rorrer
la
primaca
del cultivo
del
caf.
Las economas
rrrcionales
de
Latinoamrica
siempre
han
cumplido,
en
lir rnundial,
una determinada
funcin:
producir
materias
r'irnas
y
alimentos.
T a
finalidad
de
la
poltica
colonial
luc
esa:
fomentar
la
extraccin
o
la
produccin de
nraterias
primas
y
el
cultivo
de
alimentos.
Obtenida
la
irrdependencia,
nuestras
economas
nacionales
continua-
lon
desempeando
idntico
cometido.
Se
vive
la
era
inglesa del
libre
cambio.
Alimentos
y
materias
primas
a
cambio de
productos industriales de
consumo
inmedia-
fo.
Para
ello
la
Gran
Bretaa
haba
contribuido
con di-
nero
y
hombres
(la
Legin
Britnica
que luch en la
guerra
de
Independencia
de Colombia).
La
Amrica
Latina cra
lihrc y
udcm/ts,
"inglesa".
Compraba produc-
tos
britnicos,
especialmente
telas
y
paos,
y
venda
a
Inglaterra alimentos
y
materias
primas.
La divisin
del
trabajo era
perfecta.
Adems,
desde
la
poca colonial
(remota
en
el
tiempo,
pero
espiritualmente
muy
prxi-
nrar, todava), en
todas estas naciones
hay un hecho
muy
rcculiar:
el
monocultivo o
la
monoexportacin.
La res-
rcctiva
economa
se dedica a
la
produccin
de
un
solo
irrtculo
y
a
la
exportacin
del
mismo.
En
el
Brasil
fue
cl
az(tcar
y
luego,
el
caucho.
Ms tarde,
el
caf.
En
('olombia,
el
tabaco,
posteriormente
la
quina
y
despus
,'l
caf. Cuando
se
exportan
y
producen
varios
artculos,
('slos
son alimentos
o
materias
primas
agrcolas
o
pe-
crrirrias
-la
Argentina-.
La
hegemona de
un
solo
pro-
rlucto
o la ndole
predominantemente agropecuaria de
t3
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
9/37
I4 Luis
Eduardo
Nieto
Arteta
las economas latinoamericanas
vigoriza la funcin
que
stas
han
cumplido
siempre en
la
economa
y
el
comer-
cio
mundiales.
As,
nuestra
Amrica
es
una
zona exte-
rior
no capitalista
para
la realizacin
comercial
de la
plrrsvala producida
en
las
grandes
naciones industria-
les.
Dentro de esas
condiciones, es
la
demanda
de
un
determinado
producto
-alimento
o materia
prima-
en
la
economa
mundial, el
hecho
que
ocasiona
la
amplia-
cin o
la
iniciativa del
cultivo
o
de
los cultivos
corres-
pondientes
en
estas
naciones. Es
el caso
del caf. Cuan-
do
se eleva su consumo
mundial,
en
el
Brasil
y
en
Co-
lombia, como
tambin
en otras
naciones de
Amrica,
se
aumenta
su
produccin.
Las circunstancias brevemente
analizadas en este ca-
ptulo
permiten
ver los hechos
que
explican
el
predomi-
nio del
caf en
la
economa
colombiana. Son
ellas la
vertiente andina
y
la funcin
que
en
la economa mun-
dial
han
cumplido
siempre
las
economas
nacionales
latinoamericanas.
Pero en
Colombia,
el
cultivo
del caf,
esa
realidad
que
aparentemente
es
tan slo
econmica,
ha suscitado
grandes
y
profundas transformaciones
his-
tricas. Describirlas
es el
objeto
de
la
presente
obra.
II
LA FORMACIN
DE
LA
ECONOMA
NACIONAL
Durante
_lp
-poca..
colonial-.no,
hay..
-e_n
.eolsm.hi
a
una
rutntica economa
nacional.
Hay
una
economa de ar-
chipilagos.
No se
dan
relacionei
permanentes entre las
viejas regiones
del
virreinato de
la Nueva Granada.
Hay
un conjunto
de
economas cerradas
y parciales.
Fen-
menos
locales de sobreproduccin
y
de escasez son
muy
frecuentes. Mientras
en
el litoral
atlntico
no
haba
tri-
go,
ni
harina de
trigo,
en
el
interior
se
perdan
cosechas
cuantiosas
de
ese
cereal.
La
economa
virreinal
es una
cconoma desencuadernada.
Las vas de comunicacin
son limitadsimas. El mercado exterior
no existe
para
csa
economa desorganizada. Se
envan a Espaa
el
oro
y
la
plata
extrados
de
las
minas.
Con
esos metales se
ragaban
las reducidas
importaciones
que
se
hacan
de
la
rcnnsula.
El
ro
Magdalena,
que
corre exactamente
de
srlr a
norte, no habra
podido
ser
transformado, bajo
r'sts
condiciones, en
supuesto
geogrfico
de una
inexis-
l('nte
economa
nacional.
'
l,ln
varios
momentos
se
intent
en
el
siglo
pasado
t'r'cirr
condiciones
adecuadas
para
la
formacin de
una
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
10/37
16
Luis
Eduardo
Nieto
Arteta
.4'
economa
nacional\
La
eliminacin
del
monopolio
del
-fabaco
fue
una e
llas.
La
libertad
del
cultidri"
ei
producto,
ocasionando
una inmediata
expansin
de
las
siembras
de
tabaco,
suscit
hechos que
modificaron
fundamentalmente
la
economa
colombiana.
Desapare-
ci la
inconexin,
la desorganizacin
de la
poca ante-
rior.
No es
posible
estudiar en
este captulo
minuciosa-
mente las
transformaciones
debidas
a la ampliacin
de
los cultivos
de tabaco.
Basta
advertir
que
se estabiliz
la navegacin
a
vapor
por
el ro
Magdalena.
El
tabaco
se
cultiva
especialmente
en
la
regin central
del
valle
del
bajo Magdalena,
en Ambalema.
Proporciona
la
car-
ga que
han
de transportar
los
barcos hasta
Barranquilla,
puerto
de la desembocadura
del
gran
ro. En
1864-1865
asciende
a
63.462
bultos
y
en
1872-1873
a
82.250.
El
tabaco
crea relaciones
estables
entre
la
costa del Atln-
tico
y
el
interior
-Ambalema,
San Juan
de
Girn-.
Pero sobre
I
gravitaban
varias
limitaciones:
se
cultiva
en
muy
reducidas regiones.
Las
dos
ya
mencionadas, el
Carmen de Bolvar y
Palmira,
en el
U trimo
Valle
del
Cauca. La
produccin
de tabaco no
es un hecho
general.
Est
circunscrita
a
esas
regiones.
Haba
otra
limitacin:
es un
cultivo
cuyo valor,
pecuniariamente
expresado,
no
es elevado. Alcanza
su mxima cuanta
en
1856-1857
y
1868-1869,
aos en los
cuales asciende
tan slo, respec-
tivamente,
a
$3.092.204
y
$3.019.931.
Son cantidades
inferiores a los
valores de la
exportacin
de
quina,
la
cual, en
1879-1880
y
1880-1881,
fue
de
$3.349.322
y
$5.1*23.814.
'
-o* cultivos
anteriores al
caf
no
fueron estables.
El
tabaco, el ail
y
la
quina
-que
no
era
propiamente
un
cultivo sino
una actividad
extractiva-
o desaparecieron
-el
ail
y
la
quina-
o
sufrieron
-el
tabaco-
una
I
|
,
rrlc t'n
la sociedad
colombiana
rrrrrlircable
crisis
debida
ala
victoriosa
competencia
de
rrl:,rrrras
regiones coloniales. Por
primera
vez en
la
his-
lorir
de
la
economa
colombiana
el caf es
un cultivo
(rcr
no
ha desaparecido
y
que no ha
disminuido.
Contra-
riiunente,
ha
gozado
de un
creciente
aumento.
Se
ha
rrrrrliado en
progresiva escala. No
es, tampoco,
un
he-
t'llo
aislado, como
el cultivo
del tabaco o
el
del
ail. Es
rnr cultivo
generalizado. Siendo
la
vertiente
la
realidad
gcogrfica
fundamental
del
territorio
colombiano
y
cul-
tivndose
el
caf en
las vertientes andinas,
se compren-
tlc
que
la produccin no
cese
de aumentar.
Hay
tambin
condiciones
externas,
distintas
de
las
analizadas
en el
captulo
anterior,
que
han
sustentado
y
vigorizado
la
cstabilidad
del cultivo
del
srano.
Se
describirn
en
el
captulo
siguiente.t
El
caf ha
ocasionado
el desarrollo
de
actividades
cconmicas
en
regiones
que
no
lo
producen
ni
lo po-
dran
cultivar
por
estar
al
nivel
del
mar.
Hizo necesaria,
primeramente,
la
construccin
de
vas
de comunicacin
a[ ro Magdalena.
De la cordillera oriental
y
de
la cen-
tral
descienden
los
caminos
hacia
el
gran
ro.
Algunos
rle
ellos
son
las
antiguas vas de
la
poca
colonial.
Si-
gLriendo
el
curso de
los mismos o mediante trazados
tliversos,
en la tercera
y
cuarta dcadas
de este
siglo
se
t'onstruirn
ferrocarriles
de
acceso al Magdalena
o se-
liin
terminados.
Los
de
Bogot
a
Puerto
Salgar,
Medelln
:r
Puerto
Berro,
Bucaramanga
a
Puerto
Wilches
y
Bo-
,otr
a Girardot.
De
Cali
a
Buenaventura,
puerto
en el
l.
Para
entender
el
contexto de estas afirmaciones
del
autor,
as
,,,nro
de
otras
que
aparecern
posteriormente,
tngase en cuenta
que
lir
rrirrcra
edicin de este
libro fue
publicada
en
1949
(Nota
de los
r'rltl0t('s).
l7
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
11/37
18 Luis
Eduardo
Nieto
Arteta
Pacfico,
se tender
otro
ferrocarril, en
el
Valle
del
Cauca.
El
caf estabiliza definitivamente
la navegacin
a
vapor en
el
ro
Magdalena,
la
ampla,
la
fomenta.
Actualmente,
a
pesar
de
la
competencia
que
hacen otras
vas
y
de ciertos
conflictos sociales
surgidos a
lo
largo
del
ro, la navegacin a vapor no ha desaparecido. La
alimentan los centenares de
miles
de
sacos
de caf
que
son
transportados a
Barranquilla
y
Cartagena.
As,
el
Magdalena
se
ha
transformado
en
un
supuesto
de
la
economa
nacional. Es
un hecho
geogrfico que
en vir-
tud
de determinadas
condiciones econmi.s
-produc-
cin
y
exportacin de
caf-
y
tcnicas
-los
barcos
que
lo
surcan- ha condicionado
la formaci_r-de la
economa
colombiana.
El desarrollo de
las
vas
de comunicacin
al
Magda-
lena
no
es
un
hecho
indiferente
para
la
creacin de la
economa
nacional.
Ha
establecido
relaciones
constan-
tes entre
las
varias
regiones de Colombia,
entre la Costa
del
Atlntico
y el
hinterland
colombiano.
Aquel
desa-
rrollo se
debe al
caf. Pero, adems,
la incesante expan-
sin
del cultivo del
grano
ha
propiciado
ocupaciones
regulares
y
estables a
los
colombianos
que
viven a
lo
largo del
ro
y
a
los
que
habitan
el clido
litoral
afln-
tico.
Los estibadores
de los
puertos
de Barranquilla
y
Cartagena
traba.jan constantemente
porque hay
sacos de
caf
que
transportar,
y
porque el caf
permite importar
apreciables
cantidades
de mercancas,
aun cuando
pos-
teriormente
se
desarrollen
las
industrias
nacionales.
Puede
afirmarse
que
casi todo el sistema
colombiano
de vas
de comunicacin
ha sido
condicionado,
en
su
expansin,
por
el
caf. Hay una
presencia
constante
del
caf.'
|
|
,
,rlr' r'rr llr socicdad
colombiana
Sorr lrcchos
simples
y
elementales
que
en
C,olombia
',r'
olvirlan. Hay
una errnea tendencia
a
prescindir
de
l,r:;
rrlrvirs
relaciones entre el caf
y la
economa
colom-
lrr:uur.
Mas
el caf
ha sido el
creador de una autntica
,',
r,llolna
naCiOnal.
Sc
le debe
tambin
otra
transformacin histrica:
el
,1,'srrlrollo
y
la formacin del mercado interno. Hay una
rt'r'uliaridad
colombiana:
no
hemos
tenido
que
realizar
rrrrrr especial
reforma
agraria
parala
creacin
o
amplia-
,
irin
de
ese
mercado.
En
otras
naciones americanas fue
rrccesario
eliminar el
feudalismo mediante
reformas
rurarias
leves o
fundamentales.
La
realidad colombiana
lrir
sido
distinta.
Mediante
el cultivo del
caf se obtuvov
una
mayor
capacidad
de consumo,
hecho
que
fue
posi-
lrlc
debido
a
las
condiciones sociales
de la
produccin
tlcl
caf. Es la
pequea propiedad
el eje del cultivo del
grrno.
El
colono
que
llegaba a la deshabitada vertiente
rundina ocupaba
la tierra libre
que
cultivaba. El
trabajo
y
la
ocupaci(rn
fueron los
ttulos
para
la
propiedad
en
las
regiones caf'eteras, especialmente
en
aquellas
que
surgieron
a la vida econmica
tan
slo a
fines
del
siglo
rasado
y
a
comienzos del
actual. En
virtud del
caf
las
rclaciones
entre 1a agricultura
y
las industrias urbanas
t'n
Colombia
han
sido
stas:
aqulla
ha
condicionado el
rlcsarrollo
de stas. Posteriormente, es la
situacin
que
rlrora
se contempla, la
fbrica de
la
ciudad
ofrece un
rrcrcado para determinada produccin agrcola
-algo-
tlrirr
y
semillas oleaginosas-. -Ha
ha"bido
un
mutuo
y
lrrncional
condicionamiento
de agricultura
y
de
indus-
trils
en
Coiombi.
Mas ha
sido
el
caf
el supusto ini-
t'irrl para
el desarrollo de las economas locales
de
las
,
rurlades
al crear
el
amplio
y
estable
mercado
interno.
l9
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
12/37
20
Luis
Eduardo
Nieto
Arteta
En
un
primer
momento
la
expansin
del cultivo del
caf
fomenta
las
importaciones.
Hay en los
puertos
martimos una mayor actividad. No era un hecho desde-
ado
para
la
formacin
de
la
economa
nacional
porque
haca ms
estables
y
amplias
las relaciones
entre
las
remotas regiones
productoras y
la
costa
Atlntica. El
destino
y
el desarrollo local de
la
ciudad de Barranquilla
estn
vinculados
al caf, como
antes,
pero
en
una
escala
menor, 1o estuvieron al tabaco
y
a
la
quina.
Las estads-
ticas
de
cualquier
ao as lo muestran. Cuando en 1945
ellas
nos
dicen
que
por
la
aduana
de
la
citada ciudad se
exportaron
1.708.45 1 sacos de caf, comprendemos
que
las
intensas
actividades
portuarias
de
la
capital del de-
partamento
del Atlntico estn condicionadas
por
el caf.
Observacin
idntica
puede
formularse
en
torno
a
Carfagena,
la
capital de
otro departamento del
litoral,
Bolvar.
En el
mismo ao se embarcan en
ella
129.087
sacos de caf.
En
ese
primer
momento
del
auge
de
las
importacio-
nes
se
conservan
inalterables
las caractersticas
colonia-
les
de
la
economa
colombiana. Hay un
consumo
impro-
ductivo
rle la renta nacional. La superior capacidad de
compra
ocasionada
por
el caf se
vierte
sobre las mer-
cancas extranjeras.
Colornbia
continuaba
siendo
un
medio exterior
no
capitalista
para
la realizacin comer-
cial
de la
plusvala
producida
en
otras
naciones.
Mas
la
creacin
del
mercado
interno
por el
caf
con-
ducira ulteriormente a
la expansin
y
desarrollo
de
las
industrias urbanas.
El mercado
cumpla
as
su autntica
funcin:
posibilitar la
transformacin de
la economa
colombiana.
Como aquella
vieja
economa de archipi-
lagos ha desaparecido,
fbricas situadas
geogrficamente
en
regiones
no
productoras
de caf
y
a
gran
distancia
de
r'rr
lt
sot it'rlittl colombiana
,rrrr.'lllrs e:n
lts cuales
se cultiva,
tendrn asegurado
un
ur',(
ir(lo
cn
la
zona
interior
cafetera. Cuntas industrias
,1,'
l;r t'irrclail
de Barranquilla
vendern
sus
productos
en
I
;rlrl;rs, Cundinamarca,
Antioquia
y
Norte de Santander.
I
,r lrlrlica
es
el abandono
del
improductivo
consumo de
l,r
rt'rrtr
nacional
creada
por
el
caf. Posteriormente,
es
l,r
srlrracin
actual,
la
industria
se
concentrar en
los
rlr'rrrf
amentos
que
producen las
mayores
cantidades de
,
,rlt::
Antioquia, Caldas,
Valle
del
Cauca,
Cundinamarca.
Si
bien es
innegable
que
el caf
crea
la economa
rurcional
y
suscita
la
formacin
del
amplio
mercado
urt('r'no
para
la ulterior
produccin nacional,
no
es
posi-
lrlc
cxpresar
cuantitativamente
esos dos
hechos.
Se ig-
rrolir
cul
es
el valor total
de los
jornales
pagados
a los
lstilladores
que
en
los
puertos del ro Magdalena
y
en
Ios de
Barranquilla,
Cartagena
y
Buenaventura, en el
f
'rcfico,
embarcan
los sacos
de caf en
los
barcos
flu-
viulr:s
y
martimos.
Naturalmente, los
procedimientos
rlc
la tcnica
conternpcrrnea
limitan
la
intervencin
del
lrornbrc
cn la
labor de
colocarlos en las bodegas
de
los
lrrrclues
martimos. Pero en
los
puertos
del
ro Magdale-
nrr
la
situacin todava
es
distinta.
Adems, tampoco
es
rrrsible
descuLrrir
el
dato
de
la cuanta
de
los
salarios
{l('vcngados
por
los
obreros
que
en
los ferrocarriles
y
en
lrrs
carreteras trabajan
para
llevar el caf hasta
los
puer-
t,rs
f'luviales
y
martimos. Solamente
se conoce,
y
en
lolnra
aproximada,
el valor
total
de
los
jornales
pagados
,r
los
hombres
y
mujeres
que recolectan
el
caf
y que
lo
l)r('l)aran
en
las trilladoras. Hay
solamente
un
procedi-
nu('nto
para intuir
el
significado
que
tienen
los dos
lr,'r'hos
mencionados, creacin del
mercado
interno
y
de
l,r
t'r'onorna nacional.
Es comparar
el
valor
de
la
pro-
rlrrccirin
de caf con
los datos de la
produccin
de taba-
2l
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
13/37
22
Luis Eduardo
Nieto
Arteta
co
y
quina
en
el
siglo
pasado,
relacionndolos
con
la
poblacin
de las
respectivas pocas.
En
1856-1857
y
1867-1869,
con
una
poblacin que
fluctuaba
entre
2.500.000
y
3.000.000,
la
exportacin de tabaco
ascen-
di
respectivamente
a
$3.092.204
y
$3.019.931.
En
1879-1880
y
1880-1881,
cuando
la poblacin
era
lige-
ramente
mayor,
la
quina
enviada
al
exterior
tuvo
correspondientemente
un valor
de
$3.349.322
y
$5.123.814.
Ahora bien,
en
1945,
con
nueve millones y
medio
de habitantes,
la
exportacin de caf ha
ascendido
a $182.114.461.
No
creo
necesario
hacer
consideraciones
y
deducciones en torno
a esos hechos. Baste
observar
que
intuitivamente
se comprende
que
el
caf
ha
suscitado trans-
formaciones histricas
en
Colombia
que
anteriormente
ningn otro
producto
haba
ocasionado.
i
IL
I
III
LA
ESTABILIDAD
l,:r historia de la economa colombiana hasta la apa-
rr'ron
tlel
caf
tiene un
sentido
muy
peculiar.
En
ella
se
vivt'
lo precario,
la
cgntingencia, el ensayo. Un determi-
rrrrlo
producto
adquiere
primaca
y
posteriormente
es
rustituido
por
otro.
No hay estabilidad.
Slo
hay
uilZ,
rr'rlirlad permanente:
hay
siempre
un
predominio
de
un
i
*,olo
producto
y
un hecho
constante: la
inextinguiblg-j.
'rllrrcc:in
de metales
preciosos.
Primeramente,
es
el
lrrlrrt'o
e:l artculo
que
disfruta
de hegemona.
Una crisis
r
r,,t
irrncdiata
1o
elimina
o disminuye
grandemente
su
Ittorlut'r'it'tn
y
exportacin.
Lo
reemplaza
el
ail. Tuvo
urril nruy limitada
importancia.
Sus
ventas al exterior no
Irt'r'orr
cuantiosas. Las mayores fueron las
de 1870-187
1
v
vrlitrron
f;528.575.
Se
vive
luego
el ciclo
de
la
quina.
\u
rrris
clcvldr cxportacin es
la
de
1880-1881
por
1,'r
l.ll.l{14.'l'irlrrhitr
la cuina
desaparece.
La
compe-
t{'n('rit rh'
lits rcgiorrcs
coloniales del Pacfico
la elimina.
l'rr
t'l
lt'r't'cl
irrfirrl
rrrirrkr cnsayo
en
la desencuadernada
('olorrrhir
tlcl
silo
lirslrlo.
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
14/37
24 Luis
Eduardo Nieto
Arteta
Aquella historia,
antes de
la
primaca
del cultivo
del
caf,
tuvo
otra significacin:
la
produccin de
los
res-
pectivos
artculos
no
era cuantiosa
y
estaba
circunscrita
a
unas
pocas
regiones. Reducido
valor
y
limitada ubica-
cin
geogrfica.
En tales condiciones la economa co-
lombiana
no
poda
disfrutar
de
estabilidad
ni
ser vigo-
rosa. En las restantes regiones,
no
beneficiadas
por
el
cultivo o extraccin de
la quina
o
del
respectivo
pro-
ducto, haba una
grave penuria
econmica.
En
aquellas
que
o lo
cultivaban
o
extraan
no
puede
hablarse
for-
malmente de
un
gran progreso
econmico.
Esa inestabilidad
econmica
produca
la
anarqua
poltica, la
cual era
agudizada
en virtud
del
hecho
ya
analizado:
el cultivo o
extraccin
del
producto que go-
zara
de
primaca
tena
una muy inferior cuanta.
Hay
una
evidente
vinculacin entre
la
inestabilidad
econ-
mica
y
la anarqua
poltica.
Un
lcido
colombiano del
siglo
pasado,
don Juan
de
Dios
Aranzazu,
Ministro de
Hacienda
en
1838,
enla
Memrria
que ese
ao
present
al Congreso
de
la
Nueva Granada
as
lo
reconoce. Es-
cribe:
"La pobreza
es inquieta
y movediza
de
ordinario,
y
el
que
tiene una
heredad
y
la cultiva,
une
su suerte
a
la del Estado
que
le da
proteccin y
seguridad, adquiere
la
virtud
que
el
hbito del trabajo
inspira
y
el senti-
miento de su
propia
l'uerza
y
dignidad,
que
le
har opo-
nerse a las agresiones
externas
y
a las conmociones
del
interior".
La inestabilidad
econmica
ocasionaba
la
anar-
qua
poltica
y
sta
haca ms
intensa
y
aguda
a aqulla.
Un
ef'ecto
se haca causa o condicin
de
la causa
que
1o
haba
producido. E.sa
es
la historia
de
Colombia
hasta
la
aparicin
del caf..
La mnima creacin
de
riqueza, dentro
de las condi-
ciones analizadas,
ofieca
circunstancias
favorables
para
(-
/
t |,.rl,
,
rr |.r',,'r rr'tl:rrl trllrltltlliltlllt
1,r,,
l,r.l{)n, unlr brillante eclosin,
del
absolutismo
ideo-
lrr,rr
.
Mt'
cxllicar.
Se puede
prescindir
de
la
discu-
t,'il
(l('
l0s
r'0blemas
econmicos concretos.
Cuando
rf
rrr
f 'lrrlt'lrtirro
(ionztlcz
propone
hacia
1847 la crea'
'
r,,rr
(l('
tnl llrnco
Naciontl,
una
fra
indiferencia rode
,
I
lrrcrrltcchor prcyccto. Era vitalmente
ms
gozoso
para
lrr',
nt'r)granadinos
polemizar en torno a
Bentham
o
a
Lrrrrrr'
llalmes.
Podan
no
tener
preocupaciones econ-
nr( lrs:
crr
tan reducida,
casi inexistente
la creacin de
nrlu('z:r.
llr produccin
de mercancas.
Escriban
poemas
rrrr'rrlr'rs la nacin
se
hunda en
la
pobrezay
en
el des-
,'rrlt'rr
roltico.
Pero
si la realidad
econmica
tena un
r.rn
linlitado mbito
de
vigencia,
no era tan
vigorosa
r
(|til()
l)ilI-a
exigir
que no se
la
desconociera.
Hay una
r'\(('l)cin:
Miguel
y
Jos Mara Samper
y
Salvador
t',rrrcho
Roldn s se entregan
a una
objetiva
conside-
r,rr'itin
de los
problemas de la economa neogranadina
y
rlrrrrlcan
con objetividad
la
necesidad histrica
de
la
,'lrrinacin de
la
economa
colonial
-monopolios,
vie-
o:r
irnpuestos,
etc.-. Se
discuten
frenticamente
todos
l,r;
lroblemas
polticos
-sfsrns
de
las
constitucio-
rr,'r,
vigentes,
separacin
de
la
Iglesia
y
el
Estado, siste-
rn,r
t'lcctoral,
forma del
Estado, atribuciones
de munici-
l'r{)s
y provincias-.
Hay
tremendas
luchas
ideolgicas.
l
.r;
tlos
partidos
colombianos,
el
liberalismo
y
el
,
'rst'rvatiSmo,
cuyos
programas
adquieren
un conteni-
'lr'
l)r'cciso
y
concreto
hacia
1845,
se transforman
en
,rrtt'nlicas
concepciones
del
mundo
y
de
la
vida
que
se
,
r,
lrrycn
y
se oponen. Es lo
que
luego se denominar el
,
rvrlisrro"
colonlbiano, No hay caudillismos,
Los
ge-
ru r.tl('s
tuc intervicllcn
en las
pugnas
polticas
-Jos
\l.rr:r
Ohundo,
.los
Hilario
Lpez,
Toms
Cipriano
de
[\lr':,11'',
son
acattdos,
obedecidos
y
llevados
a
la
25
,
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
15/37
26
Luis
Eduardo
Nieto
Artera
presidencia
de la repblica
en cuanto
son
jefes
de
uno
cualquiera
de
los
dos partidos
polticos.
Esa
realidad
poltica
oculta
una lucha
entre los
artesanos
o
manufac-
tureros
y
los
comerciantes.
por
una
parte,
y
los propie-
tarios
territoriales
por
la
otra
(incluyendo
en stos
a lai
comunidades religiosas que
posean
haciendas
y
latifun-
dios).
Las
divergencias
de
intereses
econmicos
entre
esos
grupos
sociales
se
expresan
en las
pugnas
polticas
entre liberales
y
conservadores.
Se crean as los
supues-
tos
para
una lucha ideolgica
de alto
estilo
y
de egregio
li
contenido,
se
definen
y
se contraponen
opuestas
con-
cepciones
del mundo
y
de
la
vida. Es el
absolutismo
ideolgico.
Son visiones
del
mundo
y
de
la
vida
que
tienden
a
realizarse plenamente.
Si
bien
toda
concepcin
del
mundo
y
de
la vida
ha
de insertarse
en la vida histrica
del
hombre,
.debe
realizarse
en la
existencia
social del
hombre.
Nunca,
como en la frentica y
anarquizada
Nueva
Granada
de
1850, ese
sentido de las visiones
de
la
vida
y
del
mundo
es tan evidente,
tan
difano.
Aun
cuando la
economa neogranadina
se hunda,
aun cuando
desaparezcan
sus
industrias
textiles
del Oriente
-de-
partamentos
de
Santander del
Sur
y
del Norte-,
aun
cuando
la
Nueva
Granada
deba
entregarse
a
la
pura
produccin
de alimentos
y
materias
primas,
ha de
rea-
lizarse
con
desafiante
plenitud
la
concepcin
liberal
del
mundo
y
de
la vida.
Es
la
orga ideolgica,
es
el
frenes
poltico.
Imponen el libre
cambio. Piensan
y
proponen
-Murillo
Toro
en
1850-
la supresin
de
las
aduanas.
Juegan
con la
economa
neogranadina
porque
la
crea-
cin de
riqueza es todava
muy limitada.
Son
lricos
y
romnticos
porque
no
pueden
entregarse
a
una
produc-
cin
incesantemente
mayor. Es
la
infancia.
Es el
juego.
I
f
:f
1l:
'
ll
.,or'lrtlitrl
t:olotllbiana
21
l'l
r
rlt'
sclii lt
cdad
adulta
y
la seriedad.
No
permitir
rrrr'
lus t'rlonrbianos sigan
entregados
a
la
labor,
irres-
rnrrr;rfrlr'
(trca,
de
jugar
con
la ya
creada
economa
nrrr r(lilirl.
l)csaparecer
el
absolutismo
ideolgico.
Se
Itrrr
rr'r lir poca
de
la
mesura
y
de
la sobriedad.
Sern
llr'rlirtlrrs Ias discusiones,
estriles
polmicas,
puramen-
t+'
trh'olrigicas.
Arlvt'r't
antes
que
los cultivos
que
preceden
al del
caf
t'l
tirbaco,
el
ail,
la
quina-
estn
geogrficamente
rrlrrcrrtltls en
pequeas
y
aisladas
regiones.
As
se
da la
lrrrrrlriliclad histrica
de
anarquizar
ala
nacin
desde las
rr'\tultcs,
desde
aquellas
que
por
sufrir
la
penuria
eco-
rrorrricr
pueden
ser
vctimas
del
desorden
poltico.
No
r'.,
rosible
extender
a
toda
la nacin
el
sosiego
y
la
r
rlrur
que predominan
en las
regiones ricas,
relativa-
lrrcrrlt'
ricas.
S1o
en ellas
el
afn
productor
de
riqueza,
rfl rrrcrcancas,
puede
gozar
de
primaca.
Pero aun
en
tirlt's
regiones el auge
econmico es
transitorio.
Cuando
rl
c'oncluido el
ciclb
del tabaco, la ciudad
de
Ambalema,
r
rrrtro de
la
regin iabacalera
de
mayor
importancia,
rrrr'tlir sumida en la
pobrezay
en una vida
primitiva.
No
,'.,
tlil'cil
mostrar
cmo
las
guerras
civiles, con alguna
t'rlt'rcin,
se inician en
regiones
pobres.
La
penuria
rr
ontir-nica produca
en ellas
la anarqua
poltica
y
sta
nrvrrrla
las islas de
fecunda actividad econmica
que
Irrlrir
cn
la nacin,
las
islas
de
tranquilidad
y
de
mesura
rlu('
cr'rn
barridas
por
el
huracn desatado
en las
provin-
r
t;rr
tituprrimas.
l,irs
cspeciales
crisis
econmicas
-la
nacin
viva en
uu
p('r'rnanente
estado
de inseguridad
y
de
penuria
eco-
f
f
f
rlul('ir-
suscitan transformaciones
polticas.
La
de
la_-,
rurrr;r
ocasion
la
Regeneracin,
nombre
que
ha
recibi-
rlr
crt
lir historia
colombiana
el
movimiento
orientado
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
16/37
28
Luis Eduardo
Nieto
Arteta
por
Rafael
Nez,
un
antiguo
radical,
y
que produjo
la
derrota
del
partido
liberal
en
1885.
Naturalmente,
en
la
poca
contempornea
se
ha
conservado
esa conexin
entre
la
crisis
econmica
y
la
realidad
poltica,
ya
no
a
travs
de
la
anarqua
-el
caf es
incompatible
con
la
anarqua-,
sino expresada
en
cambios
polticos
electo-
ralmente realizados.
Haba
otro
hecho que
agudizaba
la
anarqua
poltica
en
los
das
que
preceden
a
la
hegemona
del
caf. Era
la
pugna
entre los propietarios
territoriales
-partido
conservador-
y
los
manufactureros
o
artesanos
y
los
comerciantes
-partido
liberal-.
A
ella me
he
referido
ya.
Es necesario que
nos
detengamos
en ese
nuevo
he-
cho
histrico.
En la poca
anterior
al
caf los
propieta-
rios territoriales
tienen
una
psicologa
conservadora.
La
explica el origen
de la
propiedad.
Las
mercedes
del mo-
narca,
la
adquisicin directa
en
pblica
subasta
o
las
viejas
encomiendas
son
el
origen
de
la
propiedad.
Se
forma
as
el
latifundio.
Esa economa agrcola es
una
economa
para el consumo
inmediato, que
no
conoce
amplios
cambios
comerciales
y
mucho menos
la exis-
tencia
del
mercado
internacional.
Tan
slo con el taba-
co la
agricultura
neogranadina
se orientar hacia
el
mercado exterior.
El
origen de
la
propiedad
y
las aludi-
das
caractersticas
de
la
economa agrcola
explican
el
sentido
conservador
de
los
propietarios
neogranadinos.
Estos
son indiferentes
a
la
desaparicin
de
la
economa
colonial.
No
tan slo
indiferentes.
No la
desean. Se opo-
nen
a ella.
Son
los pequeos productores
del
Oriente
neogranadino
-departamentos
de
Santander
del
Sur
y
del
Norte- el
grupo
social
que
impone
la
eliminacin
revolucionaria
de la mencionada
economa. El
gran pro-
pietario
es
esclavista.
Cuando cultiva su hacienda
lo
r'(
rr,rllrrl r'ololnllirttut
Ir,r,
, rrlrlrrrrrkr
cl traba.io
no libre de
los
esclavos. Se
illilrilr'
ltrt('s.
ll
lr
crxtincin
de
la
esclavitud,
postulado
rrrr,r;rrrrrlit'o
rlcll
partido
liberal.
|
,r,,
(
onrr'r'ciirulcs,
los
pequeos productores
agrcolas
'll
I lrrt'rrlt'
y
los
artcsanos o
manufactureros
quieren la
rL
,,itlr;tilt'i
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
17/37
30
Luis
Eduardo
Nieto Arteta
zacin
que
emanaba
de esa tremenda
pugna
entre
gru-
pos
sociales
cuyos
intereses econmicos
eran
irreducti-
blemente
inconciliables.
Pero el caf,
al
posibilitar
los
motivos
y
hechos que
se
explicarn luego,
la
formacin
histrica de unos
propietarios
territoriales
que
sern
li-
berales
-los
grandes
y
pequeos productores
de caf-
y
de unos
industriales
conservadores,
crear otra condi-
cin
para
la estabilidad
poltica
de Colombia.La nacin
adquirir
as definitivamente la sobriedad
y
la madurez
de
que
careci en
las
pocas anteriores.
iPor
qu
el caf
es
la
estabilidad econmica
y,
por
ende. la normalidad
poltica?
Son
varios los hechos
que
explican
esta
circunstancia. Hay uno
puramente geogr-
fico:
imposibilidad de
cultivar en
las vertientes
andins
otro
producto que
sea econmicamente lucrativo. Ade-
ms,
no
es de temer una competencia
colonial tan rui-
nosa
como
la
que
lqfrieron
el
tabaco
y
tambin la
quina
en
el siglo
pasadol
En
sus colonias,
las
naciones euro-
peas
no
pueden
ampliar
an ms
el cultivo
del
caf.
Es
esa una
posibilidad
que
no
se
puede
realizar. Hay
una
tercera
condicin: no hay una
sobreproduccin
de los
cafs de
la calidad
que
cultiva
y
exporta
Colombia
(ca-
fs suaves).
La
poltica
de
"valorizacin"
del
Brasil
cre
circunstancias
ms favorables
plra
una ampliacin
del
cultivo
de
esos cafs.
Estos se exportan
a
los Estados
Unidos
de Amrica,
naci(rn
que
no tiene colonias
en las
cuales
cultivarlos
y
que
por
su
ubicacin geogrfica
no
podr producir
cal'
suave ni
de
ninguna otra calidad en
su
territorio
metropolitano.
Son esas las condiciones
que
han ocasionido
la e stabilidad econmica en Colombia a
raz
de
la iniciacin
y
auge creciente
del cultivo del
caf.
Es
una estabilidad
que
debe
comprenderse,
sin
embargo, cum
grano
salis.
No hay
plena
estabilidad
|
|
,
,,t.
,
, Lr r,r,r'it'rl:ttl coltlntbiana
.
u,,nu(
ir
('n
cl
lnllndo
capitalista
contemporneo.
La
,
r
rl,rlr,lrrrl
rlcl
caf
es
una estabilidad
con
crisis
peri-
,lr,.r.
(
rsis
(lc
baia
de
los
precios,
no
crisis
de
sobre-
g,r,,,1u,,
irjtt. No
se debe
prescindir de
la
posibilidad,
un
I','
"
rcrrrota
por lo
dems,
de una
elevacin
lenta
de
la-li
,,,,1rr,
itin
de
caf
a
medida
que
se
vayan
ocupando
y'
, ,l
rr.rn(lo
regiones
de
vertientes
todava
desiertas
o
ilt illl;t5.
l',
o
cl
caf
no
es
solamente
la estabilidad
econmi-
r llrry otra
significacin
en
el auge
del
cultivo
del';':
r,r.ur().
tistc no
se
produce
en pocas
y
aisladas regiones.
I I
r
rrllivo clcl
cal es
un
hecho
general
porque
la
reali-
,l,rrl
;'1'1p,'lil'icir
l'unclalltcnttl
del
territorio
colombiano
,rr,
tit'rrr'
nuryot'
tlcnsidad
de
poblacin
es
la
vertiente
rr,lnrir.
As, cl
cale
ha
eliminado
la circunstancia
ante-
rr,r
vir
cxplicada,
a
saber,
la
existencia
de
regiones
ri-
'.r'.
,)
l)rogresistas
rodeadas
por
la
penuria de
las restan-
rr'.
ll:r tlesaparecido
la
precedente
disparidad
en
el
,l
n,,llo
cconmico
de las regiones,"pero
ha
suscitado\
,
|
,,rl(
unt
realidad
ms
peligrosa:
la industria
y
la
r
t
t,trr{ /l sc
han concentrado
en el
Occidente
colombiano.
I
I
I t;rltl
ha
sido tambin
en
la historia
de
la economa
.
, r ri,n.rl
lrr
ocupacin
permanente
y
regular.
Ha absor-
l,r,l,,
l.r
'oblacin
aptapara
1a
produccin.
Eso en
regio-
',
,lr'
rllil
densidad
de
poblacin era
muy valioso
y
r,l.r
rntlil'crcnte
para
el
destino histrico
de
la nacin.
|
.
unrr
cslabilidad
econmica
que
ha
producido
la
,
r.rl,rlrtl:rtl
rollit'1.
[istlt
es
un
hecho
histrico
que
ha
r,1,, t
rrrtlir'ionlrrlo
lot
tlos
I'actores:
el econmico,
ya
.rr
rlr.rrl',
y
t'l
rtorirtrtlctttc
poltico,
de
una
menor
in-
r,r
l,,rr
t'lt't'lo. t'rr
('olorlbia
siempre
han existido
.rrr,lcs
y
vil,orosos
xtltidos
polticos.
Desde
1830
l;r
r'rot
ir
(
()nl('lrl)()l'iillca
el
cttnservatismo
y
el
li-
-)t
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
18/37
Luis Eduardo
Nieto
Arteta
beralismo
han
sido
los nicos
partidos
que
han funcio-
nado y
disfiutado
de
estabilidad
-una
analoga
con
Inglaterra hasta
la
aparicin
del
laborismo
britnico-.
El
supuesto
de
la
estabilidad
del
Estado liberal
de
dere-
cho
es
justamente
la
existencia
de fuertes y
bien
orga-
nizados
partidos
polticos.
La
atomizacin
de
la
vida
poltica
debilita
al
Estado
y
lo
lanza
a una
crisis
defi-
nitiva.
En la
historia
colombiana los
momentos
de crisis
poltica,
anteriormente
expresada
en las peridicas
gue-
rras
civiles,
han
estado
siempre unidos
a una
situacin
interna de
crisis
en uno de
los
dos
partidos,
el
que
est
disfrutando
de hegemona gubernamental.
Esa
condicin
poltica
de
la
estabilidad del Estado
liberal
de derecho
en
Colombia no
pudo
impedir
que
antes
de
obtenerse,
con el
caf,
la
estabilidad
econmica,
la anarqua
y
el
desorden
poltico
desaparecieran.
E,l
supuesto
ms vigo-
roso
para
la normalidad
en
el
funcionamiento
de la vida
poltica
colombiana ha sido la
consecucin
de una
pe-
culiar
estabilidad econmica.
El
caf
la
ha
producido y
con
ella
el
sosiego
y
la mesura.
La
formacin histrica
de unos
propietarios
territo-
riales liberales ha
sido otra de las
creaciones debidas
al
caf.
Los
viejos
dueos
de
la
tierra, descendientes
de
familias
que
se hrban
adjudicado a s mismas
orgenes
aristocrticos, cuyos
antepasados
haball
explotado
a los
indios
en las encomiendas, integraban
un
grupo
social
reaccionario,
afiliado al
partido
conservador.
Eran pro-
pietarios que
estimaban denigrante
y
vil
el
trabajo ma-
nual.
A
ste se dcdicaban los indios
y
posteriormente,
,-
los
esclavos
negr()s
trados del frica. Mas
el
caf,
que
.,sst
vinculado a
la
pequea
propiedad
adquirida
me-
diante
el
cultivo
directo de la tierra
por
los hombres
que
luego
se
harn
propietarios
de
1a misma,
crea
el
propie-
)/
| ,,,
r, rrt,r
lrl
lilrelirl.
lil colornbiano
qLrc
ht crlortizir-
,1,'
lr
ir
1'rr)il('s
l|orlrrclo|irs dc
cAf,
el
ColOnrbiUlo (lUs
l'.r
'rltrr.rrlo
t'st' plorlucto
tlcsdc cl
primer
montento
al
1,,,1',
ll,
r';rrlo ir ltr
vc:rticnlc, hr
descuujado la
sclva,
ha
.,i',
rrr.r
t'lltr
unos
claros
y
ha
totttado
posesin
de
la
r,'
rr I I
ut'rr.o
sc
currrpliran los
procedimientos
norma-
i'
I'
rr.r l:r
;rtl.judicaci(rn
de la
propiedad,
de acuerdo con
t, l,,.,,l.rr
itirr sobre
baldos. Ha vivido
el
trabajo fecunl
,1.,
i
rr,':ttlol'.
No
es un
hombre
ocioso,
ncl
lo
ha sido..)
,'rrt
.r
l
,os
horlbres
de
vida
ociosa eran
los
propietarios
,,
lr,',('rirt
inntensas extensiones
sin cultivar, los
latiri.,
trrrir',t;ts
(luc
tllllbin
cran
propietarios
de
esclavos
y.
't,r
r()
l)()(llln
l)ollcr
a
ltroducir
en
su
totalidad
las
ha-
.r,
u,l.r\
trrt'roscirn:
sLr gran
superficie
se
los impeda.
I
r
rr
l.s
lorictarios
esclavistas
del Valle del Cauca en
lr
'rr1'1
lltitad del
siglo
pasado,
de Cundinamarca
y
,1,
I
l,'lrrrir
cn
la
misma
poca.
El
productor
de caf ha
r,
r'lt,
unir
cxistencia
econmica
distinta.
Su conciencia
t,.,iir,,r
lr;r
todido
ser
distinta.
Ello
no quiere
demostrar
,rrr
rrrr
l;,y',
tambin
productores
de caf afiliados
al
'rrrr,l,'
t,'llscrvador.
Los ejemplos de
Antioquia
y
Cal-
,lr
nilrr';ul
que
hay igualmente
cultivadores
de caf
.,r,
r\.rrloles.
Pero
la
realidad
peculiar
debida
al
caf
I r
,1,'
lr;rbcr
posibilitado
histricamente
la fbrmacin
',
'r,'r1'{'is
territoriales liberales.
La
anterior
dura
i','
1,,, r
rrtrt'
la aldea
y
la
ciudad, entre
los
propietarios
r,
Jut',rr:rlt's,
trrcclti
amortiguada,
desvanecida.
El
caf
l,
il,
rrotltrcitlo
L:st
transformacin.
Surge el
,,t,rl'lr(
illsll()",
t.s tlccir',
l-rn
movimiento que,
dndo-
(
il(,ilt1)t('.
l)t'()l)utilit
tilt
ilcefCamientO
entfe IOS dOS
i,
rrr,l"
rolrtit
os.
(Jrricrc
borrar las
viejas diferencias,
l.'
'rr'
I r()rt's
rnolivos
pala
la
lucha
-el
caf se
haba
,rrr
tl.rrlo
:t
lttl'l igttarltls,
a
deSdibuj.trlOS-.
El
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
19/37
l
en Antioquia,
departamento
contempl
los
primeros
cafe
lla
incesante
expansin
del cultivo
del caf
vigori
.ala
estabilidad
poltica y
econmica
de
Colombia.ri
denominada
"democracia
colombiana"
se
va transf
/
mando
en una
democracia de
pequeos
productor
1.
( agrcolas. Habr
entonces
una evidente hostilidad
a to
1
modificacin
fundamental.
Los colombianos
sern
un
I
hombres moderados
y
sobrios. No
podrn
jugar
con
--conoma
nacional como
los
frenticos
radicales
-l
glgotas-
del
siglo
pasado, ni
lanzar
a la nacin
a I
anarqua como los ingenuos
constituyentes de Rionegro
que
le
dieron a Colombia una
Constitucin
que
intensi-
fic an ms
el desorden
v
la
descomposicin
de 1863
S.
a
1885.
T
a mesur_a,
la proporcin, la
regla,
el
orden,
(
sern
el
contenido de
la vida
colombiana. El caf haba
"
producido
la
seriedad.
No
se
poda ya
jugar
con
la re-
cientemente
formada
economa
nacional.
Los
millo
de
sacos
de caf
que
Colombia exporta
no lo
permiten.
Las fbricas
desarrolladas en
el res.azo
de
esa
econom
cafetera
tampoco
aceptarn ese
juego
infantil
que
en el
siglo
pasado
solamente
produjo la
desaparicin
de las
reducidas manufacturas
del Oriente
-libre
cambio-.
pero que
en el
umbral
suscitara
graves
consecuencias
Del radicalismo
al
orden, de
la
infancia
a
la
ed
madura,
del
desorden
a
la
estabilidad,
de
la
anrquic
subjetividad a
la mesuraday fra objetividad,
he
ah
I
transformaciones
histricas
que
el
caf
produce
en
Coi
lombia.lLos
pequeos productores,
los
propietarios
q
han Cultivado, ellos mismos, latielra, han triunfado.
paz y
la
tranquilidad
reinan
en Colombia.
34
republicanismo
se
inicia
con
el
de
Cundinamarca
en
el
siglo
pasado.
Luis
Eduardo
Nieto
A
I'il
IV
I,A I)IRECCIN POLTICA
I
rr
horrrbres
que
en el
siglo
pasado
dirigen
a Colom-
hllr
ulr
rlcl
Oriente
-departamentos
de
Santander del
Nul
l.
y
del
Sur-, del
Centro
-Boyac
y
('unrlrrruntrca-
y
del
inmenso Cauca
-Popayn-.
El
{lttitlltr lruha disfqutado de
un
envidiable
progreso
du-
lHttlr
ll
('olonia.
No
conoci
el.latifundio,
no sufri
la
er
l+tvtltttl.
liue
un
pas
de
campesinos
libres,
de
colo-
rrrr
r.sriuiolcs.
Hizo
con la insurreccin de los Comune-
I
ur | 7ti l- el
primer
movimiento revolucionario
con-
ltrt
lt
ct'onoma
colonial. Los
colombianos
del
Oriente
erlrll
rrcrr)rc presentes
en todos
los
decisivos
y
gran-
rle
rt'ortccimientos
de
la
vida
poltica
nacional. Santa
I'c
rk'
llogotir
-nombre
inicial
de
la
capital de
Colom-
hlr
lirnrroco
es
pasiva.
Son
santafereos
Antonio
Nfrlflu
y
Accvcdo
y
G6mez, el primero
autor de
una
r
rltlrf
rfe
lir
cconona
colonial
-Ensayo
de un nuevo
Itltt,t
tl'
tttltttittislru
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
20/37
36
Luis
Eduardo
Nieto A
en el
siglo
pasado.
El
extenso
Cauca dara
al
ge
Jos
Mara
Obando,
al
general
Toms Cipriano
Mosquera, presidentes
ambos,
e
iniciador
el
segundo
la
era
de las
reformas
anticoloniales.
Caucano
fue
tam
bin
Julio Arboleda,
hombre
contradictorio, poeta
mntico eminente,
conservador,
pero
adversario
de I
jesuitas.
As
se mantiene
el
equilibrio poltico
en
el
si
pasado.
El litoral
atlntico,
Antioquia y
el
departamen
que
luego se llamar
el
Valle
del
Cauca
-Caldas
era e
realidad
una regin
desierta-,
el
remoto
Sur, Tolima
el
Huila
sufran
la
direccin poltica.
Antioquia conti-
nuaba
encerrada
en
sus
altas
e
inaccesibles
montaas
-pureza
raciaT,
patriarcalismo,
honestidad
de costum-
bres, naturalidad y
espontaneidad
en el
desarrollo
his-
trico-.
(Hay
una
paulatina
ascensin
poltica
de
las
principa-
les
regiones
productoras
de caf.
Caldas, Antioquia,
Valle
del Cauca
y
Tolima
dan
presidentes y
ministros
de Estado.lEl "republicanismo",
ya
se
advirti,
surgi
en Antioquia.
En
este
siglo los
antioqueos
Carlos
E.
Restrepo, Marco Fidel
Surez, Pedro Nel
Ospina
y
Mariano
Ospina Prez han
sido
presidentes
de
la
Rep-
blica. Alfonso
Lpez
y
Daro Echanda,
tolimenses,
han
ocupado tambin
la
presidencia.
Los
banqueros,
los in-
dustriales,
los financieros
que
han
orientado
a los
go-
biernos han
sido de
esos departamentos
cafeteros.
Antioqueos,
caldenses
y
vallecaucanos
han vivido
siempre
pensando
en los
problemas
todos de
la
econo-
ma
nacional.
No
es el caf
el
creador de
esa econo.
ma?
Es un
mirar
constantemente
esos
problemas
a tra-
vs de
la
ancha
y
segura
perspectiva
que
suministra
el
caf.La
poca del caf es la
poca de los banqueros,
de
los
industriales,
de
los
exportadores
del
grano,
de los
i:l
i
afr
r
r lrr
,,lr
ir'rlrtrl r
llolttlrirttt
v
f,llrrt"lllr
rk'
lllrt'ir'lttllr
(lr,rc
no
lucdcn
dcsconocer
los
flrrlrle=,,'
rrrt' srrscilir
e
I
c:rl'.
(klntrariamente,
han
de
pelilrli'ulu:
y
rlirrrlciu'los
con
scricdad
y
acierto.
En
va-
lltl
nr
r\rrf
n('s
tttt
('ottgrcso
clc Cal'eteros ha tenido
ms
Itllrrlr
\,
pr'r(iut'ir1')lc
ittl'lucttcit
que
el mismo
Congreso
{rrr
lnrrl
Al
llirttcro
lsislen
los
hombres
que
estn siem-
pf r'
\rirtrrlos hircia
lar
excluyente consideracin
de las
tttlnlrl",
(
rr'('unstancias
y
de los
problemas
de
la
econo-
nrtrr
nrr
r,rrrrl,
los
colombianos
que
saben de las inciden-
r
lrl'
rlr'
lr
t't'onoma
y
del
comercio mundiales.
ll'l
r rlc.
rlilcctor
de
Colombia,
ha entregado
la prima-
r lrr
lrrlrlrr'lr
lr cuienes
lo
producen y
han
creado
con
l
Irt
lr
rrtornrrr
rracional.)
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
21/37
V
HUMANISTAS,
POETAS
Y
EMPRESARIOS
I
En
lur
pocas
que preceden
al
auge
y predominio
de
la
produccin
de
caf, la cultura colombiana
es
una
cultura
humanista
y
abstracta.
La
hacienda del
altiplano
y
concretamente,
la
de
la
Sabana
de
Bogot,
es el am-
biente en
que
se desarrolla
esa cultura.
Hay una
reposa-
da
vida
econmica.
Se
cultiva
y
se
produce
lo
necesario
para
el
consumo
familiar
-trigo
y papa-
y para
un
limitado
comercio
loca[
Hay
mansedumbre
y
sosiego.
Hay
costumbres
coloniales
-sincera
devocin
religio-
sa,
misa diaria
y
dominical,
hbitos
sencillos-.
La
cultura
que
se forma
renuncia
deliberadamente
a
la
aprehensin
del mundo
que
rodea
al
hombre.
Est
Ver-
tida
hacia
1o interior,
vuelve al
pasado,
a
un
pasado
que
no
se
quiere
superar.
Un
fillogo,
Rufino
Jos Cuervo,
y
un
hombre universal,
Miguel
Antonio
Caro, simboli-
zan esa
poca de
la cultura colombiana.
No se
quiere
modificar
la realidad, bien sea
la
hist-
rica
o
la natural, el
paisaje que
ofrece el
contorno
fsico
de
la
existencia
ntima
y
quieta
de
los
santafereos.
Se
ama
la
estabilidad,
aun cuando contradictoriamente
ello
rr
irlrlrl
r
llltttlrt,tttt
r
rrllrlrr
rlrt',r' r'l
l;tr
r'ottrllr'loltt's
ltistti'icls
quc
en ese
rttrtilt
illr'
rrt\'rlilr
solrt'
('(}l0ilrlrit.
sc
tcnlen los
cam-
irll.: lr, lrrrir',lurr;rt'iont's.
rot
lr'vcs
tuc
cllas sean.
l-n
r
I
t
ln'lrlt'
lr
sllrrrr'lrlt
t'ullulrl
cra idntica.
Aqu-
ll.l ,' rl,r
r('11r()r
(('.
irtn
no
ltitbicnclo
conocido una
frtr'nlr
rr
cr
()n('rrir
t'olotiirl, no
rlisl'rutr
jams
de un
lftlr'rral
rlt",rr
rollo
cconrlr)lico," l,a
pintoresca poltica
lilrir
r
rrrlrr,,l;r rrrc
inrrusioran los radicales
-glgotas-
'.1ltrrrrr,'
l,r',
lrrrnul'itcturas,
las
nacientes manufacturas.
|:r
rlr,ritt,ilrt'iorr
tlc
la economa
colonial
desplaz la
l,,rlrr,,
r'r
rlt'
t'itucza
y
de
mercancas
a
las
regiones
lirlr,r llr'r;lr, Arnlrtlema,
especialmente.
Extinguido
el
ltnnllrnlr,r
tlt'l
labaco,
la citada
poblacin, puerto
sobre
t'l
r t,,
Nli'l:rlt'nu,
entregse
a una intensa
pero
transito-
r
Irr
,r'
ltr
t,l,trl
('c()nmica.
f'.ll 'rr
r'l
()'iente
ni
en Bogot
se
poda
formar
una
,:rr
rrl.rr;r
t'olornbiana.
Eran
preocupaciones
ajenas a los
' urr\r=,,
lrrrrrlrrristas
que
crearon el prestigio intelectual
rl
I
nlr,rlrrr
llogot,
la
Atenas
Suramericana-.
Los
r
r
rrrlrrr,',, tlt'
la
sociologa colombiana
son
hombres
rrrtrrrrrhr,,
rlt' olras
regiones.
Son Miguel
y
Jos
Mara
'lrlnlrr'r,
nrrlrrrales
de
Guaduas,
poblacin
cercana
a
\rrrlrrlrnr;r.
tuienes pudieron
contemplar
las
transforma-
,l,nr',
lr:.trilicas
ocasionadas
por
la
eliminacin
del mo-
l,rlr,lr.
r'ololrirl
del tabaco,
adquiriendo as una concien-
,
r,r lrr',lot
rtl
y
sociolgica
de
la
cual
carccan
casi todos
,il,
'
ilrl('rtll)O[iittctts,
COn
algunas
exCepCiOneS
-Salva-
'l,r
{
,;1'lro
lloldn, Anbal
Galindo,
etc.-.
"r
lr,', ;rrlit'irlcs podan
jugar
con
la
economa
colom-
rr
1,,:.
lrrnanistas
-gramticos,
fillogos,
filso-
rnrlr;lll
l'cscindir
de
la
consideracin y
del
estu-
,ir
rn,r:; rt'rrlidades
econmicas que
no
eran
imperio-
lr'rrIrr'
olrr'tlccan
a una
provincianamente
limitada
8/11/2019 NIETO Arteta Luis Eduardo-El Caf en La Sociedad Colombiana
22/37
40
Luis Eduardo Nieto
Art
produccin
de bienes.
La
expansin
y
el auge
del
cul-
tivo
del
caf
modifican
totalmente
esa
situacin.
La
cons-
tituida economa
nacional
se inserta en la
econom
mundial.
Desaparece
la
produccin para
el
consum
inmediato o
familiar,
para
un mercado local. La
produc-
cin del caf,
una
produccin
creciente,
busca en el
mercado internacional
remotos
y
desconocidos consu-
midores.
Se
impone la
consideracin
de
unos hechos
nuevos,
pero
simples
y
elementales.
Colombia no
puede
ser
indif'erente
a las condiciones
que predominen
en
el
mercado
del
caf. Las
cotizaciones del grano
enlaplaza
de Nueva
York
deben
ser inmediatamente
conocidas
y
telegrafiadas
a
los
centros
productores;lLas
vicisitudes
del comercio exterior de
Colombia
-ndole
y
origen
de
las
importaciones,
la
relacin cambiaria
del
peso
con el
dlar
y
aun
con la
libra, las
fluctuaciones
de los
precios
del
caf,
la
poltica
de
"valorizacin"
del Brasil, la li-
mitacin
de
la
demanda del caf en los mercados inter-
nacionales-
eran hechos
que
no
se podan
mirar
con
indif'erencia, eran realidades
que
no se
podan
ignorg)
Desde las
pocas del tabaco
y
la
quina
los
colombianos
haban
olvidado
que
exista
un
lejano mercado interna-
cional.
Adems,
la
ampliacin de
la
capacidad
interna
de consumo
y
de compra haba ocasionado
la
transfor-
maciln
de
la industria
nacional. Eran
otros
los
proble-
mas econmicos
que
deban ser cuidadosa
y
objetiva-
mente conside;ados.
El
juego
infantil
del
siglo
pasado
haba cesado.[Una
modificacin
de los
precios
del caf
suscitaba
inntediatamente varios hechos en la
creada
economa nacionajj Si sta
ya
exista,
los
colombianos
no
podan
mirarla
con indiferencia
y
con
desdn.
La
economa nacional
Cuntas
exigencias
impona
Era
necesario, en ese
primer
momento, abandonar el estudio
:r
r ,. l,
.,,
,.lr,i.,rlrrtlrr,l.1
|
i,,r
,
l
I
,'1,
,,'
,1,'l ,;r:;lt'llltllo
tlcl
Siglo
clc C)rtl,
I i,
l1,,
,rlr.
r't(
nn(
,,:rt'r:t
tosilllc ttltit
f
iltlsofa
pe-
',
n