Anibal silvero cenizas del tiempo

Cenizas del tiempopor Anibal Silvero

ISBN 987-43-0868-0

2001 Anibal SilveroTodos los Derechos reservados

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2001 Copyright http://www.copyright.limited.to/Por la presente edición electrónica

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Copyright Cenizas del tiempo

ILa angustia que reflejanlos versosque han tocado fondono es debilidadsino una fuerzaque habita en lo más hondoSi hoy convierteen cenizastus sueñosno me culpes en vanoLlámame amigoLlámame hermano

II

Toca a mi puerta, doncellasi conocerme ansíasmas prepara tus ojospues mi noche enceguececomo el día

III

Me consume las ansias de tenerteatrapada en mis desgarrados sueñoscomo pétalo azul beber tu cielomariposa que del cielo emergesCual noctámbulo gris sentir tu aromaen el mar espacial de mi universoAunque estoy convencido que no existesme consume las ansias de tenerte

2001 Anibal SilveroISBN 987-43-0868-0

Todos los derechos reservados

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IV

El tiempo y el amorson dos fuerzas divinasSi una de ellas matala otra resucita

V

El espacio es una curvael espacioSe encuentra en cada esquinaen cada cieloen las lejanas galaxiasa millones de años luzPero vuelve con nosotrosa encontrarse en cada esquinaen cada cielo interioren cada pasoCon el tiempo, su hermanosiempre vuelve

VI

Sólo una veztoca la oportunidada tu puertaNo debes dejar de abrirlamás que una vez



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VII

La mente es laberintosin fronterasSalirvolver a entrarescapar al más alláestar aquíestar alláabandonar la búsquedalucharo dormir con sueños blandosTodo eso está en la mente¿dónde más?

VIII

Un instante mássólo un instanteuna pequeñísima partícula de tiempoque nunca fue realNo esperes las cenizasEllas te cubriránen un instante

IX

Ah, Belleza perdidaya no me reconocesPasas frente a mí, desorientadacon tu sutil fragancia de melancolíacon tus ansias de amarAh, mi locura es inútilya no me reconocesBelleza perdida

X 2001 Anibal Silvero

ISBN 987-43-0868-0Todos los derechos reservados

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Morir asíde a pocoes peor que la propia muertePocos conocenen verdadla cita con su destinopara no llegar tarde

XI

Quisiera volver atrásel reloj de la corduray emplazar mi barca en el marde las fantasías perdidasConsulto a mi relojy me dice que allí estoyque aún no he escapadode mi débil fronterade sueños reprimidos

XII

Frontera hay en el bienfrontera hay en el malel límite asegurade aquí no pasarás

XIII

No existe el adiósen la curva del tiempoPartir es retornaren otra edady en otro tiempo

XIV 2001 Anibal Silvero


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Es fácilescribirlo que se vivelo difíciles vivirlo que se escribe

XV

Dudar no sólo pruebala existenciacomprueba la inquietudde nuestra esencia

XVI

Misterio hecho palabrashechizosen primavera azulo en crudo inviernoLa magia de la vidanos envuelvecon halos de misterios

XVII

Te presiento 2001 Anibal Silvero


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a cada instanteTe presientemuy adentroen mi angustia de vidaen mi angustiade corazón sediento de ambrosíaEn la tierra sin solCuando sueño el amory más que a nadiete presiento

XVIII

Querer y pretenderambicionar poderesdesear sin restricción¿Existirá el remediopara tanta ilusión?

XIX

Hace un momentoapenaséramos diferenteséramos otrosno éramos nosotroslos de ahoraPor un momentoquedamos fusionadosen el tiempoPero eso quedó atráshace un momento

XX

Tribulaciónintimidad del alma



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hermana heridahumana sensación

XXI

Nunca pudo serlo que anhelaba-a lo que fue-No pude ver la luzno supo de alas-por lo que fue-Jamás sintió el calorde una mirada-tan poco fue-No pudo ver el solmurió en la nadaAllí se fue

XXII

Infinito es el todoque el cero no logróCero es el vacíoque lo trascendió

XXIII

Una escalera blandaconduce a los secretosmás profundos



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jamás ellos saldránsobre la superficieCual dueño de la nochehilvana nuestra acciónde marionetasmas nadie lo verásobre la superficieEl código del sueñojamás comprenderáses el mantoque te escondey te cobijaJamás descifrarásuna poesía grisleída en superficie

XXIV

Si supieras quien te nombraen la profunda obscuridad del sueñosabrías del lejano brillode mi negro corazón

XXV

Buscan serNo lo sabenno lo ignoranvan de prisay buscan ser

XXVI

Sufre el cuerpohaciendo el biensufre el almahaciendo el mal



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¿parece mucho pediralgo de paz?

XXVII

La vida es movimientocomo el ríoCuando haya concluidoeste poemamiraré hacia atrásy no me encontraréencontraré otra mente y otra fazEntonces quizá creaque mi intento ha sido en vanodeseando trascenderlo temporal

XXVIII

Si existe un diquepara el malincluso el bientendrá un final

XXIX

La vida humana es un filmeproyectando a un actordespués de la película volvemosa ser tú y a ser yo

XXX

Nuestra mente está en conflictopermanenteen la espiral discontinuahacia el ser



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Si avanzamos hasta un puntodecaemos al no ser

XXXI

En lo externo no hay verdadque pudiera llenar este vacíono-espacialY en lo interno Psiquis dice:imposible penetrar

XXXII

La represión es frenoque no sirvesino de contenciónmas nada sabede un nombre existencial:Liberación

XXXIII

Casualidades hija de la causano su hermanalo que deba sucedersucederáhoy o mañana

XXXIV

La tierra es escenariode numerosos actoresdefinimos el papelde acuerdo a los corazones

XXXV 2001 Anibal Silvero


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Señora Confusiónno te pedí opiniónde mis nostalgiasno te pedítrocar mis ansiedadesen pasiónNo te he rogado nadaSeñora Confusión

XXXVI

Cuando creímosencontrarde la verdad un hiloen nuestras cosas del mundoa menudola verdadse agudizacomo hebraSe doblega y se retuerceen espejismosSe desata y se retuerceen espejismosSe desata y nos anudaen fantasíasy aquellos que creímosen nosotrosnos perdemosresbalamoshuimos en la nochecual caracoles sonámbulosen esas playas tan desiertastan carentes de solque imaginamos very jugamos a llorary reímos sin razón



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y nos dormimos...Todavía el sol no llegó a la playame pondré mi disfraz de caracoly esperaré un mañanaOtra noche vendrá

XXXVII

Algo más que el pasadoalgo másque el sabor de un efímero presenteserá nuestro futuroalgo más que el destino entretejidopor vanas circunstanciasLo que pudo pasarlo que pasólo que sucederá en aquel instantecuando ese tiemponos hunda en su espiralCuando un ayer retorneen mi agoníay el mañana perezca en tu senderode rosas carcomidasEn la eterna espiralhabrá algo más

XXXVIII

Yo hablaré con ustedescomo en aquel principio-desprovisto de máscara-les contaré los hechosla historia sin finalque hubiera sucedidomas sólo escucharánlo que el oído sepa



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y volveré a olvidarla historia originalcomo en aquel principio

XXXIX

Ella vendrálo sépresiento su aromay su pazpresiento su vozen la nostalgiapor encima del sueñoella vendrá

XL

Un lugar en el espacioocupabaun lugaren un momento del tiempose encontrabaen un momentoFantasías de la menteél soñabafantasías



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Y creyó ser algo másde lo que eraY trasnochó en noches solasy alzó la voz al desiertoy no logró nada másque un lugary un momento

XLI

Sólo queda el recuerdoy la aparienciade un pasado realsólo dejos de olvidoe impresiónlo que fue ya pasósólo queda la huellade placer o dolor

XLII

Algono está aquíno es presencianada vuelvey me encuentraen soledad-ni conmigo ni sin mí-Es su ausenciaque me llena de vacíosu existencia



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que adormece mi ansiedadAlgo hayque no estáQuizá es el almaque aún no supeconquistar

XLIII

Mil veces repetimoslos errores del pasadomil veces desarmamos nuestro escudopor designios secretos de la mentey acabamos en el mismo pozo siempresolitariosintentando resurgir de las cenizasLa llama del amor nos sacarámás de mil veces

XLIV

La eternidadestá más allá del tiempono es el tiempomás allá del infinitono es el ceropor encima del pensarpor encimadel humano comprenderSólo ella valeSólo ella es



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XLV

Me fortalece amarme fortaleceporque muero en las manos de Cupidoy renazco en el valle donde amamoribunda de amorpor siglos muertami amante originalmi eterna muertemi suplicio inmortal:Inefable Libido

XLVI

La montaña está cayendosobre la torre erigidapor mil años adoradapor diez siglos mantenida¿es el fin o es el principioo es el principio del fin?Los mares han inundadolas ciudades asfaltadasLas plazas fueron ahogadascon sus dioses de metal¿es el fin o es el principioo es el principio del fin?



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El dios sol ha descubiertosu rojo manto de sangreLa tierra gime de espanto-en su falda el huracán-¿es el fin o es el principioo es el principio del fin?Ya no existen versos blancosen los desiertos raídosel hombre bueno se ha hundidosumergido en su verdad¿Será el final de un principioo el principio del final?

XLVII

Yo albergo la creencia de los saltosque atraviesan los montes encantadossumerjo mi creencia en ríos azulesy creo en un jardíntan sensitivoque parece de soles eclipsadocomo en el río azulYo creo en el jardínde una mujerllamada Primaveray en los saltos dorados que atraviesanel sensitivo origen de su ríotan lleno de color



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y de alma llenaque el alma irá a decirno me dejes tan solo, Primaveracreyendo en tu jardín

XLVIII

Esperanzas de ilusionesde quimeras de utopíasde soñar con fantasías:todo es vanidad

XLIX

Existe una sola realidadposible interpretar de mil maneraspero cuya llama brilla enteraen el abismo de la profundidad

Si quisieras hallarla en soledadde su ardiente verdad en esperaes inútil buscar allá afuerasi quien busca es tu real ansiedad

Si te inquieta una estrella idealque consume tu esencia inmortalprometiendo celeste ambrosía



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es que existe brillante luz díacuyo lustre se vela en la víaque trasciende a la mente animal

L

No habrá sepulcros sin cunano habrá cunas sin sepulcrosmas siempre habrás flores nuevasen nacimientos y lutos

LI

A la espera del tiempoestamos todoscon el tiempoque no promete nadasólo pasapara vernos pasarde cuando de cuandonos gusta creer en élcomo en la obscuridadque nos envuelveEl se distancia a vecespara vernos pasar

LII 2001 Anibal Silvero


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El camino es como el filode un cuchillosin principio ni fincomo un anillosin compáscomo el reversode un puntosin medidacomo un tiempoque clamaeternidad

LIII

Cuando esta vida culminecomo un soploforjaré tu recuerdoen mi memoria¿Dónde estará entoncesaquella mujer que divinizo?Entre las piedras quizásque de barro fuera su bellezaNo volverá a mí más que en memoria

LIV

Esperandoen la nocheaguardando



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solitarioel después-no ha llegadotodavía-calla el pénduloy detienesu mecánico motorTiempo es viday es cenizaen el relojsolitarioesperandotodavía

LV

Transitarpor este espacio comprimidosin saber adonde irni a quien amarni el porqué del dolor que sufre el almani la causa del errorde nuestros miedosy aún así transitarpor las piedras somnolientasde una esquina crucialdonde confluye el sueño y el deseoy un destinoque no se nombrapero que ha de llegary ante todocomo nadasin porqué ni para qué



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como sombrastransitar

LVI

Dormir es creerse hombre despiertofusionando la quimera con verdadhaciendo converger la realidadcuando los pies caminan en desierto

Soñar cual mentira lo que es ciertoconfundiendo multitud con soledadllamando a la nada inmensidadcon un brazo al aire y otro yerto

El espíritu que clama la bondadla carne que se aferra a la maldady el corazón que sufre tristemente

Dormir es vivir con algo ausentemientras el cuerpo huye del presentey el alma nos suplica eternidad

LVII

Tantos proyectos vanosnavegan por la mentetanto sueño imposibleilusiónque en vez de morir crecemas cuando al fin engrandecelo asesina la pasión

LVIII 2001 Anibal Silvero


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Renacerde las cenizasrenacerdel vacío del tiempode la nadaque nos hundeen la agoníadel no serEs precisorenacer

LIX

Mil años pasaránmás de mil añosy todo será igualel mismo nombrela misma casael mismo gusto a presenteinacababley el reloj marcaráuna vez másla hora de la siestaY soñaremos que nada sucediómás que mil años

LXJamás eterno es el tiemponunca el futuro es eternoel tiempo del hombre llegahasta el cielo o el averno



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LXISi los que hoy trabajany amargamente sufrenun día, tarde o tempranoal polvo volveránSi el oro es argumentopara matar el almay el oro queda en tierray el alma se nos va¿De qué sirve la vidacomprada por la gentecon fiestas exquisitascon pompa mundanal?si el oro queda en tierray el alma se nos va

LXII

Adiós, pasado, adiósmuy pronto te veréaunque me niegues hoymañana te tendré

LXIII

Si vuelves algún díaPresenteacuérdate de mítal como ahoraacuérdate de aquel instanteque perdí

LXIV

Presente continuo¿te crees eterno?yo veo tus cenizas



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más allá del tiempojunto a las míasy nuestro virtual futurograbada en la memoriadel recuerdo

LXVYa casi no recuerdolas cenizas del tiemponi el futuro, ni el presenteni el ayersólo recuerdo sombrashurgando en los escombrosde la fe

LXVI

Regresaral punto de partidaregresardonde tu alma descansa en mi ansiedadcomo al principioComenzartejiendo el tiempoen tus ojosque desde el fondo emergencomo un hazde silencios lejanosy contagiarme en tu estaciónde primaverapara volver a la imagenque confunde nuestros miedosde intentar retornarcomo al principioal mismo punto de partidahasta el silencio que tus ojos dan



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LXVII

El ayer pasó de prisaera yoMañana será otro díaseré yoPero el hoy me desconocemás que yo

LXVIII

Perder es encontrarel hilo de oromás alláSe ha extraviadoen la mentepor la menteel concepto nos llevamás alláBuscamos y su brillo palideceen la secreta cueva del recuerdoel corazón proyecta su anteimagenmás alláHemos perdido el hilode oro puroentre el bien y el malLo hallaremos en el almaaún perdidamás allá

LXIX

Eres poeta, policía 2001 Anibal Silvero


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tu uniforme no parece de poetaEres noble, policíasin tu insigniani tus botasni tu armaSi vistieras de poeta, policíaay, qué hazañahablarías del amor y buscaríasel idilio del que hablan los poetassometiendo en el grillo de los versoslos grilletes obscuros de la vidaSi te miras al espejo, policíaimagínate vestido de poetasin tu insigniani tus botasni tu armaimagínate desnudo en la poesíasin el celo fatal que te envenenay verás lo que tienes de mentirade la escoria impuesta por temoresde doctrinas prestadas y vendidasimagínate ante todo que eres poetaarrastrando la cruz de un policía

LXX

Nosotros, los esclavosde la balanza activaerrantes sin nombrede las noches ciegassabemos de locurasbuscamos arrecifesque adormecen la mente soñadorapara no oír el silenciodel corazón tranquilopara precipitarnosen la tormenta



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del no serBuscamos un presente imaginariono realun futuro que trueque la esperanzaen verdaduna esencia, una forma, un paradigmaque equilibre nuestra cruzmás allá del bienmás allá del mal

LXXI

La hora cero ha llegadoya no hay tiempoEl instante es un reflejodel ayerya no hay tiempoEl momento es el antesy el despuésya no hay tiempoEl pasado es el futuroprecederhoy, mañana, ahora o nuncaya no tienen validezpues llegó la hora ceroy nos dice:ya no hay tiempo

LXXIIMe recuerdasa una princesa muertaen el túnel del tiempoal tiempo en la distanciaque no llegaa la luz sin distancia de tus ojosque brillan desde el túnel



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¡Tan frágil que pareces y tan fuerte!que me recuerdasa una princesa neutracon alas de querube, coronadacon rosas de cristalComo el ave en desamparo, somnolientase cobija en la tibia madriguerami memoria intenta soñadoraabrigarse al recuerdo de tus ojosde princesaLXXIII

Final de los tiempos dice el vientoEn su andar de misterios profundosLa historia ha cesado un segundoIntentando capturar el momento

Cada vez que adormece su alientoEn los rincones obscuros del mundoSuena un eco, callado, profundoFeneciendo de amores sediento

Insistiendo en su marcha silenteEnvolviendo en su manto a la menteSube al sol que le ofrece guarida

Todo él se convierte en heridaAnte el tiempo, señal de partidaSuspirando en eterno presente

LXXIVPasajeros sin voztranseúntes mudos del espacioperegrinos sin fe, ni devocionesni patrón de medidas ni oracionesque lo excluyan del malnaciendo sin razón



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muriendo en vanosufriendo amarguras sin reclamosin escudo al dolormas soñandocon ser libres, felicesrealizadoscon un nombre un alma y un presentey algún cielo azul¿Qué han de hacerpasajeros sin vozy sin boletosin destino, ni origen, ni caminoni pasado realni futuro concretoni derecho a opinar sobre su suerteni cambiar su existenciani su muerteni su triste final?Pasajeros sin vozsoñando con un cielo azul

LXXVDespués de una existencia de conceptos¿qué nos queda,la verdad,nos queda el almao la paz de la conciencia tranquilaqué nos queda mi Señor?un manojo de recuerdosde ansiedades reprimidasde esperanzas, de ilusionesde confusión mentalde luchar por no sé quien y no sé cuantoy el miedo de morir y el breve encantode gozary creer que Dios existe y la carneque aún persiste en el mal



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y enfrentar el precipiciola frontera del avernoaún sabiendo que no hay tiempode cambiar¿qué nos queda de existir entre conceptos?Casi nadao más que nadaAcaso algún trasluz de eternidad

LXXVI

Donde confluye el marcon el horizontehay mensajesDonde el silencio resuenacon melodía eternay los ángeles se confundenen legionestras el místico vicio de las ánimasanhelando morirhay secretosDonde Libido reina soberanacon su mágica danza seductoray Afrodita persevera en su afánde tornarse en amorDentromuy dentrodonde el mal es sombraque el bien requierey Eros reprime el deseocon barrotes de sueñoshay misteriosCuando la luna oculta al solen la madrugaday el sol tiende un velo de luza las estrellasque ya no existen



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hay mensajesMensajes secretos

LXXVII

Te llamo distanciay acercas tu olvidoa los pensamientosTe llamo poetay rayas los cielosde heladas escarchasTe llamo arenaarena de estrellasy vuelve tu eco, resuenaen la bóveda inerte, pequeñade algún corazón¿Has visto un cometaque errante huyó en el espaciosoñando en la proa de un rayoallí floreció?¿Has visto una playa desiertacual tumba de reyesy un cuervo a lo alto sonriendocreyéndose sol?¿Has visto los maresque empañan con penas de ausenciael mágico sueño doradode algún faraón?¿No viste en la arena mis huellasni has visto la estelade mi caracol?Cuántas veces, a orillas del Nilorecé mi oración



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cuantas veces soycuantas veces erestantas veces doyy llega la noche y con ella el sueñoy con ella voya hundirme en la playade algún corazónYa llega la nochecon ella me voy

LXXVIII

Vacíocomo el cerocomo la inmensa nadanada soycomo el espejismo del ayercomo un canto sin vozSi el mundo tiene mi alma¿dónde estoy?

LXXX

A los indios de los pueblosun peregrino cantaba:Ellos prefieren las coplasgimiendo en las madrugadasprefieren llorar las penasque enceguecen las miradasprefieren playas desiertasa veredas cementadasfurioso sol del estíoa tenue luz enfrascadaprefieren baños de arcillaa toallas perfumadasdormir en selva de abrojosa espumas negras de cama



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noche de estrellas fugacesa vanidosas veladassendero angosto del bosquea cien rutas asfaltadasellos son gotas de lluviacayendo por la quebradason gemidos de los gauchosexpirando sus payadasson ecos de los galopesresonando en las estanciashuella del potro indomablecamino al rayo del albasemilla de girasolesesparcidas en las chacrasson aire, fuego y arroyotierra, rumor y nostalgiaspensamiento, luz, leyendarayo, viento y esperanzasSon nuestros indios, paisanosesencia de nuestra saviarazón de la sangre rojaque nos brota en las entrañasSon nuestros indios, la puchaque cuesta entender el almade los hijos de este pueblode nuestros padres, ¡malhaya!

Así cantaba el paisanosin que nadie lo escucharaasí moría su cantoen la ciudad apagadaun camión robó el mensajede sus últimas palabrasse las llevó hacia otras rutasperdiéndose en la distanciaQuizá otros pueblos entiendanlo que aquí nadie escuchaba



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LXXXI

¿Quién abarca todoquién conoce el límitedel mal, la tenue líneade moral e inmoralejaen la divina comediadel dolor humanoquién sufre por nosen las aciagas horaso acaso el vil demonioque sumergido tieneeste cerebro entre tinieblas?La respuesta subconscienteoculta estácomo todo lo demás

LXXXII

Verso rápidofugazsin rimasi lo lees dos vecesperderá su mensajesi lo lees una sola vezjamás conocerássu esencia

LXXXIII

Condenado a soñar eternamenteperdido en la neblina de la dudailuso de escapar a la batalla



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esclavo de la errante fantasíaatrapado en las tinieblas del recuerdoinquietado en lo inútil de la vidaCondenado por siempre, condenadoa soñar, soñar, seguir soñandodespertar un día quizáo seguir soñando

LXXXIV

Estrellas benditasque el cielo atesorarescatad mi almaque se pierde ahoraCometas errantesque en lunas tornáisvolvedme cenizasde la eternidadPozos abismalesque la luz atrapadevorad mi almatragadme en la nada

LXXXV

Alguna vezte encontraréen tus propios sueñoscomo antes de nacery brindaremos de amorpor nuestro amor perdidoalguna vez



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LXXXVI

Las burbujas que surcan airosasel espacio venciendo la alturaen su vuelo encantado parecentan sutiles, tan bellas, tan purasson de espuma, mi amorson de espumaEsos ídolos que al cielo sometenpoderosos con báculo sacrodoblegando a los hombres al sueñovanidad sustentada en lo vanoson de barro, mi solson de barroEsas hojas que mecen los vientoscautivantes, sutiles, serenasen su andar sin destino parecentan felices, tan libres, tan plenasestán muertas, mi vidaestán muertas

LXXXVI

Secretosguardados como tesorosRecuerdosprisionerosde la menteMisteriosocultos tras el velode la concienciaTemoresjamás reveladosni a uno mismoIntimidades de la obscuridad



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sólo secretos

LXXXVIII

Yo sé a quienes elijopara amarmas si me equivocasevolveré sobre mis pasosy limpiaré mis huellashasta que el tiempo borre tu nombre

LXXXIX

Si es en vanola muerte por la vidasi es en vano rezarsi inútil fueranlas estrellas del cieloo el abismoen que emerge el vendaval¿dónde estaría el sentidode las guerras que luchan por la pazde las estrellas flamígeras que abrazana la negra obscuridad?Si crees en el sol serás aurorasi crees en el tiempo eternidadsi crees en tu ser serás poesíau oleaje del maro brisa que suspira en el ponientegolondrina quizáNo has perdido el hechizodel recuerdo ni has perdidoel concepto del doloraunque las fuerzas agoten sus recursosaún brilla la luz de la ilusión



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XC

Nos falta el infinitola nada ya no contentael cero ya no nos tientacon su abismo de vacíoNos hastiamos de ser númerossin sumar en cantidadAunque digan lo contrariocréanme, porque es verdadnos falta el infinito

XCI

Vientre de ensueños¿de qué estás hechoquizá de gemas de oroengarzadas en la alquimiamedioeval?Vientre de seda¿quién te formóte hicieron acasolas trémulas mariposasen su vuelo nupcialtal vez los dioses del Olimpoen su condena carnal?Vientre de arenasol y palmerasnaufragio del corazón¿quién te creó?

XCII 2001 Anibal Silvero


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Soneto de una noche de veranoflotando en la ola de la penaacunando, pacífica, serena,la luna apresada en una mano

Tristeza de pasados soberanosen tránsito pesar entre las venasnostalgia socavada, honda y plenaCorazón vencido de antemano

Martirio circulando por acasoarrastrando recuerdos a su pasocual tobogán de la melancolía

Nocturna herida agonizantesu bálsamo es llaga desangrantefloreciendo en pura poesía

XCIIIVen a mí, soledad, que tú adormecesel bullicio infernal que me rodeaque pernoctas conmigo en los rasguidosde las notas fluctuantes de la vidaVen a mí, soledad, sal de tu cuevay asiste al peregrino que te invocaque sólo vive con la esperanza locade tus noches de dulce compañíaSi el reo derrumbado en tu ventanaencuentra libertad de sus cadenassi el sabio extraviado en sus teoríasa tu luz halla la fe de sus ideasven a mí, mujer incomprendidasin tus brazos de tul me desvaríofresca sombra de azules horizontesven a mí, soledad, que en tí confío

XCIV 2001 Anibal Silvero


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Claudicarásen el seno del solobsesión fatal de los titanesabdicarás al fango de los reyesenvuelto en el dilema del fracasoy en el viscoso rayo del olvidopronunciarán tu nombre¿y preguntas por mí, exclamarás,por qué preguntas?Bajo el lodo no he vistomás que sombrasy entre sombras vivícomo un fantasmasobre el cieno abneguémis esperanzasque tornaron en polvo las ideasen cenizas forjé mis ilusionescreyendo intentar seguir la marchacuando volví mi vista eran quimerasgimiendo por estelas de recuerdosy en el seno del sol claudicastey el eco de tu voz envolvióla cúpula sagrada¿y preguntas, por míse escuchópor qué preguntas?

XCV

Sol del cielo tus cabellos 2001 Anibal Silvero


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mar del tiempo como el ríotras mi sombra con el vientosurca el cielo en mi espaciopor el aire deja el sol tu arco irisen mi mente se desprende de la sombratras el viento cae al mar desde el cielocual cometa se sumerge en mis sueñoscomo fuego las cenizas de tu ser en mi santuarioen el templo levedad de tus cabellos

XCVISomos circunstancias de un presentedeambulando por calles sin salidasin conocer la hora del regresosin atisbar el punto de partidasomos marioneta de un pasadoque no tiene edadDicen que algún día volveremosa transitar el tiempo hasta su origenllamado eternidad¿dónde parten las huellas de mis pasos?preguntan a la vera del caminoDe un lugar que las almas sean realesy no sombras que arrastren tu destino

XCVIIEl tiempo no existe en el plano realse halla en el débil miedo que mirahacia atrásen el deseo ciego de querer másPero el tiemponuestro tiempono existe en el plano real

XCVIII



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Fascinaciónes el nombre que te encierrainquieta mariposaque a la luz te arrojascomo al vacío inertey buscas, sin embargode amor los remolinosLa luzhizo de tíuna amalgama extrañade ideas inconexascapricho del querery como en ilusiónimpregnas lo que tocasde un brillo transitoriode una apariencia locaque empaña el pensamientoEs el nombre que tú encierrasbajo la cúpula grisde la angustia de existirtrocando lo que tocasen el don de soñarfascinación

XCIX

Cuando duermesenvuelves el misterio de la vidaen tus alas de ángelCuando sueñaste llevas en tu vuelo los secretosdel alma de las cosasCuando duermesnavegas en el mar de mis recuerdosde grises primaveras

Los vientos han callado 2001 Anibal Silvero


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Tu corazón es mi temploprincesa soñadora

C

Mañanapalabra sin fronterastu horizonte se asemejaa vecesal mañanaSi te perdieraspor el mundo un díarecuerda en tu mundoal mañanaque espera silenciosoy creyeras que tu amorse ha perdidomi voz trasnocharáen tu corazónde niña soñadoracon la fuerza del tiempoque has perdidoen el mundo sin vozvolviendo a repetiren tu horizonte azulque existe todavíael mañana

CI

Tu amor, mi bien, es luz del tiempotu luz, mi sol, un fuego fatuoEs brisa pasajera de una estrellaes polvo de cometas del espacio



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Un raudo devenir de los momentosun eterno presente de los ratosdestello de lejanas alboradaspestañeo de flores del ocasoSin tu amor, mi bien, que es luz del tiempomi destino, quizá, torne sus pasos

CII

La noche que te hallé oí en secretoel ritmo de una voz que repetíadestino es el extremo de una ruedapresente es una estatua que caminaLa noche que en secreto me decíatu voz que en el silencio yo sentíael eco del recuerdo de otros tiemposlas luces de neón que repetían¿Quién eres capullo veraniegoa qué has venidode tu latido el eco es diferenteves acaso la sombra de mi almaoyes tu corazón entre la gente?El día que te ví hallé un misterioen el inmenso mar de mi agonía¿a qué has venido, nocturna mensajera?repetirá la voz del alma mía

CIII

Si los cuerpos se visten de lutooscuros, enjutostras breve latirmejor no existirSi las rosas deshojan sus vidas



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de espinas heridasen un suspirarquisiera no estarSi los bosques se tornan desiertosgimiendo sedientoshasta perecermás vale no verSi las almas agotan su encantotras penas y llantossoñando gozarprefiero no amar

CIV

Me acompañasdonde voyinnegablevengo a tiSi pudiera convergeren tus sentidosy escaparsi quisiera retornarvengo a tíAún si muerodesprendidodel dolorvoy en tírenaciendodía a día

CV

Busqué tu corazóny fue vacíotu mirada indaguéfue obscuridaden tu alma de cristal



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sólo brillabami luminosidad

CVI

El sol enrojecíalas nubesEn fuego embravecíael ocasoDe oro revestíanlos cielosEn fiebre se tornabanlos vallesY tu piel, amorarena ardienteplaya y solY tu amor, beldadcampo celesteprado y florY el sereno estilodel poemaensoñación

CVII

Después de mívendrá el silencionada más que el silencioBuscará el corazón la barcade rescateen los abismos profundoscasi en vano



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Tendrán aroma de marmis palabrasen el confín del silencio

CVIII

A veces el miedoperfora la menteobstruye las venasde su corazónA veces las joyasde su real coronaincendia el cerebrocomo una explosiónobscurece el mantoque cubre su espaldaincinera el vientrede la gestaciónimpregna la sangrede un veneno ardientepenetra en su estirpecomo un aguijónA veces los celosconfunden su esenciatrastocan su imagencual camaleóny muere su graciay expira su encantoy vuela su almacomo un ventarrón

CIX

No te marchessin volverla vista atrásSin recordar



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tus pasos en la nochepropagando el eco de tu nombresobre el asfalto dormidoEl relojcansadoestáde escuchartu ronca voz en el olvidode templar su recuerdoen nostalgias del ayerY aunque vibres mil vecesy te impongassobre el maltu voz no detendrála oscilación del péndulo fatalhasta su inicioquimérica sombra del mañanaen movimiento¡ay! cuánto sufre el corazónque conoce su destinoy no lo ven flotarsonámbulo de amorcon el suspiro ahogadomarchito de emocionesdesangradode la Palabraque sana sus heridasCuán triste los erroresdel pasadoY cuán incierto el presenteque parececolgadoen vanidadque aparentaenvueltoen la ilusión efímera del tiempoen su vaivén



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No te marchessin grabar tu memoriaen los pasillosy firmar los poemasque has labradoa la madre soledadY aunque digan que te has idoque has perdido la luz de tu extravíoque se paró el reloj de la esperanzaun poema vendráde la espesuraobscura de los tiemposdiciendo no te marches...

CX

Con tristeza y dolor marchó Harapientosin edad, ni trabajo, ni familiani un centavo de sucias monedillasni una pobre ilusión en sus haraposEn el pueblo la cosa es diferentenadie sabe por qué pero se correnadie sabe por qué pero se ríenadie sabe por qué pero se sabeque no existe lugar para harapientosEn un fino discurso entretejidocon las mejores técnicas de cívicaun pedante funcionario concluíael trabajo lo encuentra quien lo buscasu problema es la holgazanaríaY un mediocre actor cómico reíaLa suntuosa catedral brillaba osadacon imágenes sacras y oracionesalguien dijo en sermón de anacoretapide a Dios que resuelva tus cuestionesY un mediocre actor cómico reía



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En los jardines mansos de la estanciael poeta adornaba sus ideasdel amor, la pasión, las mariposasel sosiego, la paz y la esperanzaObservad flores y rosasme estremezco ante el clavelpero el hambre es poca cosaY un mediocre actor cómico reíaHarapiento optó guardar distanciadel lujoso confort de la gran tiendapor no manchar aliento y repugnanciael más fino cristal de la vidrieraen su interior los artículos burlabanal infeliz canciones lastimerasTonto y retontopobre lacayono eres siquieraun espartajono tienes lenguapara opinarni tienes pesopara votarno vales nadamenos que nadaestos placeresjamás tendrásnunca tu oídodeleitaremosni tus sentidosmasajearemosni tu presenciaalardearemosnunca tu nombrepronunciaremossueña y deseasueña alcanzarnoscuando despiertes



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serás harapos

Y en el centro la pantalla gigantescaen multicolores brillos traslucíaun mediocre actor cómico de circoy era un trágico actor que se reíaAquel cómico actor sólo reía

CXI

Escribirdonde brota el sentimientocomo flordonde la plumase llama corazónescribirsobre el tiempoante el templodonde oigocomo un vientotu oraciónde princesa encantadade aquel puente del amorque las gentes no conocenmás que en sueñosdel amor de los profetascuyos nombres he olvidadode tu mentede tu almade la extraña sensaciónde conocernoshace tiempoa la espera del relojque nos une desde entoncesy escribircomo siempresobre el tiempo que pasa



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y el amor que perdí

CXII

Del cielo cayó un cometay el sol lo desintegrótornó su cuerpo volátilvolvió polvo su interiorPartículas del pasadoel sol tácito observóCenizas del tiempo, dijocenizas del tiempo son¿Y la dulce primaveraa cuyos pies los rosalesdoblegan al ruiseñor?Cenizas del tiempo, dijocenizas del tiempo son¿Y mi corazón rebeldesuplicio de la razónque ha empuñado el fuego altivoque forjó la reflexióny mi mente soñadorasuplicio de la emociónque ha inspirado las ideasque forjó la reflexiónQué son acaso o entoncesla mente y el corazón?Cenizas del tiempo dijoapenas cenizas son

CXIII

Quien camina en el desiertoaprende a extraer agua de las piedrasYo sé de llanos y desiertossé de caminar sobre la arenasé de las ignotas nubes más allá



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del horizonteDel extraño silencio de los cuervosmás extraños que el vientoDe los mediodías sofocantesdonde se respira el alientode las arenas calcinantesdonde la luz del sol es el rayo de la muertelenta y dolorosaDonde la atmósfera de vaporesse compenetra con los cuerpossedientos y fatigadosy los vientos de las estepasgimen el nombre del olvidoSé de caer al vacíosin otro consueloque el mismo precipicioSupe de mitos ancestralesLos fabulosos dragonesdepositaron en mílas salamandras del fuegoMe forjé ante las visionesde la tierra prometidatierra donde mana leche y miely de los profetas condenadospor las multitudesy de las ciegas multitudesvenerando al barro de los diosesrindiéndole culto al pasadoConozco el misterio que se escondedetrás del espejismodel espejo de ilusionesque es la vidade la vida de ilusiones de las gentesque ignoran la realidad del desiertoSupe de montañas lejanasdonde el águila reinasoberana



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sobre el sacro firmamentodonde las praderas se arrodillanante los viajerosy los cristales del lagosonríen al caminante extraviadoreflejando en la alboradala luz de los corazonesOí por las nochesla secreta voz de los fantasmasel llanto sepulcral de los muertos vivosde los errantes sin tumbade las noches ciegasSé de todo esto y mucho másLas cenizas del tiempo reflejanen mis huellasla palidez del camino

CXIV

Lenguaje obscurodel poeta del misteriodonde el poema esconde los enigmasdel ayerdonde las huellas muestran el ocasodel quererdonde el presente escapapara nunca más volver

CXV

Madre Eternay olvidadaDiosa Madrelapidada por la mente



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¿dónde estás?

CXVIEn un pueblo lejano y polvorientosobre el pasto, a orillas del esterode la raza de cérvidos rumiantesuna tarde de abril nació AlmizcleroDe pequeño Almizclero trabajabacon afán y estudiaba con esmerosin dudar jamás de las leccionesque decían guiaban su senderoPero un día al pequeño lo sacudeun perfume tan claro como esenciatan dulce y sensitivo y agradableque creyó la razón de su existencia¿Qué es ese aroma?, preguntóa las gentes del pueblo motivadoEs almizcle, le dijeron, ¿ves qué suave?En verdad que así es, dijo embriagado¿pero dónde lo encuentro,en qué lejana isla o en qué cieloen que paraje, lugar o apartamiento?No sabemos, respondierones misterio de misteriosNadie sabe su lugar de procedenciani su color, ni su forma, ni su alquimiatampoco su ignorada consistenciaPero decidme al menos si hay un hombreun quijote, un sabio o un maestroque me dé alguna idea de su origende su aspecto parcial o de su espectroEn el pueblo del norte, dijo alguiense encuentra aquel perfume tan buscadoAlmizclero partiócomo de un rayo disparadoy buscó de punta a punta en la comarcamas no halló nada



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Así pues, confundido como estabadecidió irse al surAllá estará, pensóla fragancia codiciadaMas en el sur todo el mundo asegurabaque en el este encontraría aquel almizcleY de nuevo almizclero dirigíaotro rumbo con ilusión latentepero una vez allá, decía la genteque el almizcle se hallaba en Occidente¡En Occidente!, exclamó, si de allí vengo yo¡qué tonteríacómo he perdido el tiempo inútilmente!Y así, con total desilusióndecepcionadola búsqueda olvidóy fue uno más dentro del pueblosólo uno entre el montónaunque por momentos presentíaaquel perfumeendureció al fin su corazónY envejecióY un díade esos tantosya viejo y amargadodel almizcle olvidadoa una montaña altísima subióy de lo altoresbalóy cayó como un trompo en la pendientey en la ciega caída estrepitosauna piedra fatal rasgó su vientrede cuyo interior brotó el almizcleen su más pura esencia conocidaEl perfume empapó su cuerpo blandoy el aroma sacudió su alma dormida¡Ay, qué tremendo error he cometido!



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dijo Almizclero ya sin esperanzasprecipitándose y rodando hacia el vacíoEl almizcle que tanto había buscadosiempre existió y estuvo dentro mío

CXVIIAhoraque has regresadoal presente inciertovuelvo a soñarte como antesDespués de tantas horasconsumidas por el tiempodebo alejarme como antesSi preguntas el espaciopor mi esenciami reloj te dirá:ven a buscarme

CXVIII

La poesía vive en mícomo en el mar la mareacomo en el mar el reflejode la luna de tu cuerpovive en míCuando presientes tu imagenflotando entre la mareala palidez de tu auravive en míSi trasnocha tu hermosurasuspensa sobre las aguasel resplandor de tu almavive en míCuando te alejas ingratadotada de mi poesíala belleza que aparentassigue en mí



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Education

Anibal silvero cenizas del tiempo