UNIDAD EDUCATIVA

“JULIO PIERREGROSSE”

TEMA

INFANCIA MISIONERA EL FUTURO DE LA FAMILIA SPÍNOLA

INVESTIGADORES

ARIANNA MORETA RUPERTI Y JHON BRYANT TORO

GUÍA DE INFORME

ECONOMISTA SILVIA CARVAJAL

AÑO LECTIVO

2013-2014.

1. Introducción.

1.1. Desarrollo de la introducción.

2. Planteamiento del problema.

2.2. Desarrollo del planteamiento del problema.

3. Objetivos.

3.1. Objetivo general.

3.2. Objetivos específicos.

4. Experiencia.

4.1. Desarrollo de la experiencia.

5. Actividades.

6. Diseño metodológico

6.1. Cuadro de actividades

7. Conclusión.

7.1. Desarrollo de la conclusión.

8. Recomendaciones.

8.1. Desarrollo de las recomendaciones.

9. Anexos.

9.1. Fotos del grupo de infancia misionera.

Nació en Francia el año 1834, por iniciativa del obispo francés Forbín-Janson, que

invitó a los niños de su diócesis a colaborar con otros niños de China. La Obra se

fue extendiendo por el mundo. La Reina Isabel II la inició en España en 1852.

La Obra de Infancia Misionera es una institución de la Iglesia universal para

promover la ayuda recíproca entre los niños del mundo. Miles de niños de los

cinco continentes participan en esta Obra Pontificia, que tiene como lema "Los

niños ayudan a los niños".

Infancia misionera es un grupo conformado por niños, el profesor o profesora que

guía al grupo y los jóvenes colaboradores. Generalmente nos reunimos en la

Unidad Educativa Julio Pierregrosse, en un aula de la institución.

Conocemos más personas y nos ayudar a desenvolvernos mejor como personas,

saber decir la verdad y saber elegir. En sí saber ser católicos desde pequeños y

formarnos con valores que nos guíen por el buen camino, pero sobre todo saber

respetar a los demás para que en un futuro exijamos respeto.

La familia Spínola esta dispuesta a colaborar con los niños y la juventud que

quiera cambiar para bien, que este dispuesto a dejarse amar por la sociedad y dar

amor. Saber que siempre contamos con alguien que nos ama de verdad que nos

perdona y nos escucha, ese alguien es Dios.

En la ciudad de manta hay un gran problema que surge en la sociedad actualidad

ya es muy liberal debido al avance tecnológico y la falta de control de los padres

hacia los hijos, en si existen muchas razones por las cuales los niños, jóvenes e

incluso adultos no sabemos respetar esto se debe por la falta de formación en

valores ya que la primera educación se la recibe en la casa.

Hoy en día muchos niños son mal educados por muchos factores en sí como el

bajo nivel económico, social y la falta de comunicación con los padres, por no

tener una persona que los guie o sea su ejemplo a seguir, entre muchos otros.

Son problemas muy comunes que existen a nivel mundial y el principal factor

culpable es la pobreza que existe en el mundo, ya que las tazas de pobreza son

altas y esto influye mucho en los niños, y en la calidad de educación que reciben.

Hay que hacer conciencia de esto para mejorar el futuro del mundo que esta en

riesgo. Para incorporar el espíritu misionero al proceso formativo de los niños es

necesario buscar continuamente nuevos y atractivos recursos pedagógicos. Por

eso, el Secretariado de Infancia Misionera ofrece a los educadores y a los niños

materiales adecuados para tomar conciencia de la naturaleza, contenidos,

objetivos y medios de la misión. Se trata así de acercar a la experiencia y

mentalidad de los niños los fundamentos de esta dimensión esencial de la vida

cristiana, aprovechando además que la animación misionera es uno de los

campos donde la creatividad y la imaginación de los educadores mejor pueden

desarrollarse. 

OBJETIVO GENERAL:

Ofrecer los elementos catequéticos y pedagógicos necesarios para acompañar el

crecimiento personal, humano y en la fe, de los niños, con el objetivo de abrirles a

la dimensión universal de la fe en Cristo y de la Iglesia, y fomentar en ellos una

colaboración misionera a la medida de sus posibilidades, en el contexto de una

primera síntesis de la fe.

OBJETIVOS ESPECÍFICOS:

Lograr que más niños se animen a formar parte del grupo.

Buscar formas divertidas de conocer a Jesús, María, Dios, etc.

Guiar a los niños por el buen camino.

Enseñar a los niños a no mentir y a tomar buenas decisiones desde

pequeños.

Conocer y aprender sobre la vida de Jesús, los fundadores de la institución

y sus patronos; incluso relacionarnos con otras personas y acercarnos más

a Dios.

Nuestra experiencia a sido extraordinaria hemos aprendidos a convivir con niños

que nos brindan mucha alegría y felicidad. En esta celebración, mediante el

trabajo que se acaba de hacer, se los invita a buscar en lo más profundo de su

corazón y detectar aquellas cosas que “no son de Dios”, rencores, peleas,

envidias, pereza, etc. Todos podemos amar al estilo de Jesús, pero antes

tenemos que renunciar a lo que nos oprime; el Pecado.

Es con gran alegría que ponemos a disposición de todos ustedes el trabajo

concreto del proyecto pastoral de la Pontificia Obra de la Infancia y Adolescencia

Misionera.

Aquí pues encuentran ustedes el fruto de un gran esfuerzo que llega a sus manos

para que lo aprovechen, les recuerdo que la pertenencia a la Obra no es solo el

“uso” de un nombre, o el aprovechamiento de algunos signos o materiales.

Con este aporte desarrollamos y profundizamos en nuestra identidad como Obra

Misionera Pontificia, fiel a su historia, su carisma y su misión.

Por último, les invito a vivir la comunión misionera en la aplicación de esta

propuesta y en el compartir experiencias enviándonos sus aportes y experiencias

que a todos nos enriquecen.

En la Jornada, la celebración de la Eucaristía y las oraciones y ayudas

económicas que los niños ofrecen para ayudar a otros niños expresan valores que

van interiorizando, como que ellos también son cristianos y misioneros, y que su

“granito de arena” es importante para anunciar el Evangelio y construir un mundo

mejor para todos.

Esta Obra subvenciona proyectos sociales, educativos y pastorales que tienen

como únicos destinatarios a los niños que son víctimas del hambre y la

enfermedad, que sufren las consecuencias de las guerras, y que son explotados

en trabajos impropios de niños o en la prostitución.

Realizamos muchas actividades como pintar, crucigramas, completar frases,

dibujar, entre otros. También jugamos para compartir entre todos, jugamos fútbol,

básquet, voleibol y muchos más; nos reunimos y participamos en todas las

actividades que a lo largo del curso se realizan. Además disponemos de

numerosos materiales educativos para que los niños crezcan con espíritu

misionero.

Carpeta con pautas y sugerencias que los responsables de la formación

misionera de niños pueden ir desarrollando durante el curso escolar. Oraciones

del Niño Misionero, Librito que ofrece a los niños un material sencillo para la

oración en clave misionera, cuando comienza su andadura en el camino de la fe.

Los cuadernillos se estructuran en cinco etapas Octubre Misionero, Adviento-

Navidad, Infancia Misionera, Cuaresma-Pascua y Mayo-Vacaciones, para poder

desarrollar cada “gesto” con arreglo al calendario misionero y litúrgico, e incluyen

materiales de apoyo como historietas y juegos, y tres páginas finales con un guión

de celebración litúrgica, otro para video fórum y una canción misionera.

ENERO

FEBRERO

MARZO

ABRIL

MAYO

JUNIO

JULIO

AGOSTO

SEPTIEMBRE

OCTUBRE

NOVIEMBRE

DICIEMBRE

Semanas

1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 1 12 2 2 2 2 2 2 2 2 2 2 23 3 3 3 3 3 3 3 3 3 3 34 4 4 4 4 4 4 4 4 4 4 4

Lunes

Martes

Miércoles

Jueves

Viernes

La infancia misionera es un grupo de animación de jóvenes a niños de la

comunidad que ha servido de mucho en la formación religiosa ya que es una

buena experiencia tanto para los niños y los animadores ya que hablar de Dios es

hablar de salvación y es donde los niños se interesan por la vida de Jesucristo

quien dio la vida para salvarnos y es muy bueno que desde pequeños ellos

busquen su misión en la vida ya que nosotros estamos aquí y tenemos una misión

que cumplir siempre acompañado con la ayuda de nuestro Señor Jesucristo.

Esta misión que los animadores realizan es para que los niños tomen conciencia

de pertenecer a la iglesia que es por naturaleza y mandato, misionera y por esto

colaboran con las misiones como consecuencia de su compromiso bautismal.

Aquí en infancia misionera, los niños se proponen a compartir su fe y amor a

Jesús con los niños de todo el mundo que va a servir para que en el mundo exista

la paz ya que los niños son el futuro, son la nueva generación que deben

compartir y conocer la vida del Señor Jesús con sus enseñanzas a quienes más

lo necesitan.

Una de las primeras recomendaciones es la formación misionera de los niños y de los animadores consiste, ante todo, animar a los niños misioneros para que cada día aprendan más sobre la vida de Jesús.

La mejor pedagogía, la más útil y la más eficaz, en la que estamos llamados a colaborar, es la pedagogía de Jesús, nuestro Maestro-Amigo.

En la formación misionera podemos ayudar a que se realicen progresivamente actividades que influyan más al niño por el interés de Dios.

Hay que dar prioridad a la formación de los animadores misioneros de los niños.

Es necesario hacer con los niños una formación misionera sistemática. Para ello, conviene adoptar un plan definido de formación misionera, conforme a la pedagogía de Jesús, y facilitarles los materiales adecuados para realizarlo, entre otras actividades.