Los fondos bibliográficos son abundantes en número muy usados algunos pese a que el esfuerzo constante del colegio los va reponiendo. Algunos títulos muestran el inevitable paso del tiempo que los vuelve algo obsoletos, menos atractivos por edición o temas para el alumnado actual.

Hay un apartado de biblioteca profesional destinado al profesorado cuya sede radica en la sala de profesorado. Asimismo radican en los laboratorios y aulas específicas fondos bibliográficos directamente relacionados con dichos espacios.

Existe un registro manual de todos los fondos; una pegatina recoge en cada libro la catalogación del mismo conforme a criterios iniciales de la biblioteca, siendo uno de los objetivos del Proyecto presente llevar a cabo la catalogación universal que facilite la custodia y el uso con el desarrollo y puesta en funcionamiento de programas informáticos como Abies.

Desde que nuestro recuerdo alcanza, es decir, durante toda la vida del colegio hemos tenido Biblioteca: de aula y de centro. Se fomenta la lectura y se lee en las aulas –una hora de lectura placer, por ejemplo, a la semana, en la que profesorado y alumnado leen, cada una y cada uno lo que quiera, por el placer de hacerlo, sin más control ni obligación que disfrutar leyendo- Durante algunos años, a la hora de entrada cada mañana, todo el colegio leía durante 15 minutos… A la lectura eficaz seguimos dedicando espacio, esfuerzo y tiempo. Y con la sensación a la vez de empezar cada año, ilusionadamente, y, al tiempo, con la de necesitar un espacio más adecuado, una biblioteca más completa, más compleja y mejor dotada, esperanzadamente poseedora de nuevas tecnologías. El colegio tiene luz, lectores y lectoras, profesorado deseoso de formarse en bibliotecnia… En ello estamos. De ahí este proyecto que muestra voluntad de hacer y cierta penuria de medios a los que de ser aprobado podremos hacer frente. Et nunc coepit: y ahora empezamos.

Hacer acogedor el espacio físico para la Biblioteca Escolar.

Inventariar todos los libros que ya tenemos en ella así como el resto de material impreso que hay repartido en las bibliotecas de aula; hacer lo mismo con los C.D. y las cintas de vídeo.

Informatizar este proceso con el programa ABIES. Incrementar el fondo bibliográfico con nuevas

adquisiciones. Facilitar el uso de la Biblioteca a todo el alumnado del

Centro. Seguir fomentando estrategias de animación a la

lectura utilizando el espacio de la Biblioteca como algo novedoso y especial.

Implicar a otros miembros de la Comunidad Educativa en este proyecto común.