La biblioteca en las eest

Manual de Procedimientos Institucionales para Escuelas Secundarias Técnicas de la Provincia de Buenos Aires.

LA BIBLIOTECA EN LA ESCUELA SECUNDARIA TÉCNICA

Aportes para la construcción de un marco general de la Biblioteca Escolar

en la Modalidad

La biblioteca destinada a la educación universal, es más poderosa que nuestros

ejércitos.

José de San Martín

INTRODUCCIÓN

La biblioteca de la escuela es una necesidad indiscutible. Es la llave del amplio

mundo de la información.

“ Si la escuela debe ser viva, activa, también lo debe ser la biblioteca, no se

puede teorizar desde su interior con el elemento humano en el umbral; es

necesario practicar en ella todo aquello que haga cumplir la verdadera misión

para la que ha sido creada”

YUSPA, Ilda Nelly, La Biblioteca Escolar, 2da Edición, Bs. As., EUDEBA, 1970

Las nuevas concepciones del aprendizaje donde cada alumno es el

protagonista en la construcción de su propio conocimiento y la centralidad que

asume, en el mundo de hoy, el desarrollo en los estudiantes de capacidades

tales como la capacidad de aprender a aprender, la comprensión lectora y

la capacidad para tratar la información convirtiéndola en conocimiento,

ubican a la biblioteca escolar como uno de los lugares escolares claves para el

desarrollo del servicio que debe brindar toda institución escolar.

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Las bibliotecas son un valioso centro de divulgación al que se puede acceder

para realizar consultas de diversa índole en pos de diferentes intereses

lectores. Tanto los docentes como los alumnos necesitan documentarse. Hoy

día las bibliotecas escolares pueden entenderse como un recurso híbrido, es

decir en donde conviven articuladamente la tecnología analógica y la digital.

Siguen siendo (y lo serán por mucho tiempo…) la dependencia escolar

encargada de gestionar y administrar recursos, proveer los servicios

bibliotecarios y participar activamente en programas de actividades, sino que,

además, con la incorporación de las tecnologías digitales, evolucionan en el

sentido de convertirse en un verdadero medio, siempre disponible y al alcance

de todos los alumnos y docentes en cualquier momento y en cualquier lugar.

Las tecnologías digitales amplían enormemente el espacio de acción de la

biblioteca escolar.

Y esto la torna esencial en el aprendizaje. La biblioteca escolar ha dejado de

ser un recurso para el aprendizaje, convirtiéndose en un entorno de aprendizaje con un espacio real y un componente virtual, facilitado por la

incorporación de las nuevas Tecnologías de la información y la comunicación.

El inciso m) del artículo 16º de la Ley Provincial de Educación Nº 13.688

plantea como uno de los fines y objetivos de la política educativa en la

jurisdicción el “… formar y capacitar a los alumnos y docentes como lectores y

usuarios críticos y autónomos, capaces de localizar, seleccionar, procesar,

evaluar y utilizar la información disponible, propiciando las bibliotecas escolares

y especializadas en las instituciones educativas, en tanto espacios

pedagógicos que contribuyen a una formación integral”.

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El sistema educativo debe crear lectores y despertar la actitud crítica en los

alumnos, posicionando a la biblioteca escolar en uno de los lugares claves para

el logro de éste objetivo político-pedagógico.

La biblioteca escolar puede entenderse como un servicio de la EEST en el que

se reúnen, organizan y usan los recursos documentales necesarios para el

aprendizaje de los escolares en todos los campos formativos que atraviesan su

recorrido formativo; la adquisición de hábitos lectores y la formación en el uso

de la información. En este tipo de instituciones, la presencia de una buena

cantidad de bibliografía y material impreso especializado, vinculado a la o las

especialidades que se desarrollan en la institución es, básicamente, lo que le

da identidad como biblioteca de la escuela secundaria técnica.

Lamentablemente, en nuestro país y por mucho tiempo, la biblioteca escolar se

concibió, en su origen, como un servicio opcional y complementario a las tareas

docentes, ligado fundamentalmente al área de la lengua y la literatura;

limitándose, en muchos casos, a ofrecer una simple colección de libros más o

menos organizada, un pequeño almacén de libros que no merece el nombre de

biblioteca, unos pocos libros de consulta o lectura para reformar la transmisión

del profesor y el libro de texto. Y, en las escuelas técnicas, un recurso

vinculado a “teoría” que poco o nada tenía que ver con el “taller”. Pero, este rol

secundario fue cambiando progresivamente hasta llegar a hoy, en donde,

gracias a los recursos tecnológicos disponibles, la biblioteca se torna nuclear

tanto para la enseñanza como para el aprendizaje. Un entorno en donde, por

medio del uso de determinados recursos, se facilitan determinados procesos de

enseñanza y aprendizaje, así como el desarrollo de prácticas lectoras. La

irrupción de metodologías de enseñanzas basada en el diseño, en proyectos

técnicos, en la investigación, en la resolución de problemas, entre otras, ha

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posicionado a la biblioteca escolar como un entorno imprescindible dentro de

la escuela secundaria técnica.

Por todas estas razones, el presente trabajo recopila, transcribe, sintetiza,

documentación elaborada oportunamente en la DGCyE a efectos de brindar

pautas generales, orientaciones prácticas y lineamientos de acción;

especificándola si corresponde en la modalidad y buscando establecer una

unidad de criterio sin que se altere la autonomía institucional para la definición

del Plan Institucional de Biblioteca en sus Proyectos Educativos. Buscamos con

ello, respetar el marco general vigente y considerar las particularidades de

nuestra modalidad.

Sin embargo es necesario destacar que se conoce la complejidad de muchas

de las actividades que debe realizar el bibliotecario y se sabe de los altos

niveles de conocimiento que debe poseer el organizador de la misma. Por lo

tanto cada escuela, al organizar su biblioteca, estará imprimiendo una identidad

particular en donde se conjugan, entre otros elementos, la profesionalidad del

personal al frente de la misma, su compromiso institucional, la relevancia que

se da a la biblioteca en el desarrollo del PCI (a tal punto que la gestión

curricular va de la mano con la selección de textos y material bibliográfico

existente o a adquirir por la biblioteca escolar), la ambientación o

contextualización y la calidad de los procesos internos implementados en la

escuela.

La finalidad de este Documento es, entonces, brindar pautas que orienten la

organización, funcionamiento, gestión y promoción de las bibliotecas escolares

de las Escuelas de Educación Secundaria Técnica de la provincia de Buenos

Aires a efectos de que en ellas se comience a plasmar el Plan Institucional de

Biblioteca. Se ha confeccionado en el marco de la Resolución Nº 2245 de la

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DGCyE. A este efecto se prevé la realización de reuniones regionales con

los/as bibliotecarios/as que trabajan en las escuelas técnicas, a efectos de, a

partir de la lectura crítica del presente documento, y respetando el marco

normativo vigente, a efectos de consensuar la producción de un Documento

Marco que identifique a la biblioteca como entorno formativo imprescindible en

la Escuela Secundaria Técnica; identifique y jerarquice su rol técnico-

pedagógico y proponga líneas de acción que habiliten mecanismos para la

elaboración y concreción del Plan Institucional de la Biblioteca Escolar, en

nuestra modalidad.

Se pretende, además, que la versión definitiva del presente documento, una

vez que haya sido consensuado con personal especializado en bibliotecas

escolares con experiencia en el manejo del recurso bibliográfico, multimedial

y/o digital en las EEST, se constituya en material que permita caracterizar,

difundir y valorar estos entornos formativos imprescindibles para la correcta

formación del técnico en el nivel secundario.

Por último, el documento transcribe y adapta a la modalidad lo que al efecto, se

pauta en el Reglamento General de Instituciones Educativas de la Provincia de

Buenos Aires, aprobado por Decreto Nº 2299/11.

FUNCIÓN DE LA BIBLIOTECA ESCOLAR

La biblioteca escolar se concibe como una organización, un espacio educativo

abierto, un centro de recursos bibliográficos, documentales y multimediales,

que brinda servicios de calidad dando respuesta a las necesidades académicas

de todos los miembros de la comunidad educativa.

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La biblioteca es una parte fundamental del Proyecto Educativo de la institución,

su organización, funcionamiento y las actividades que realiza fortalecen la

práctica pedagógica, estimulan el acercamiento al libro y el desarrollo de

competencias comunicativas dirigidas a la formación de docentes, técnicos y

profesionales.

La biblioteca escolar opera también como espacio social, favoreciendo el

encuentro con otros sujetos e instituciones del entorno social, cultural y

productivo colaborando con otras bibliotecas escolares, populares, centros

culturales e instituciones del ámbito de la producción.

Mencionemos, además, que cualquier biblioteca escolar incluirá un espacio

destinado a la bibliografía pedagógico-didáctica de apoyo y fundamentación a

la actividad del docente, lo que exige acuerdos y posicionamientos hacia el

interior del colectivo docente, dado la diversidad de fuentes y autores

existentes.

La Biblioteca del establecimiento atiende prioritariamente los requerimientos de

alumnos y docentes. Sin perjuicio de ello puede revestir, además, la calidad de

biblioteca pública, biblioteca especializada o biblioteca popular conforme la Ley

Nº 23.351, el Decreto ley Nº 9.319/79 y la Ley Provincial Nº 13.056 o la

legislación que en el futuro las reemplace. En las escuelas técnicas puede,

además, actuar como centro de procesamiento de información y archivo de

documentación técnica específica, vinculada con los diferentes proyectos

técnicos y trabajos que se desarrollen en el establecimiento.

Cuando la Biblioteca Escolar se encuentre comprendida en el régimen

establecido en las citadas leyes, el Proyecto Institucional dispondrá las

articulaciones necesarias y los dispositivos de funcionamiento que satisfagan la

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planificación, la organización y el asesoramiento técnico según corresponda a

cada categoría de biblioteca.

Las articulaciones y los dispositivos que se adopten deben asegurar la

prioridad de alumnos y docentes en la utilización del material disponible en

tanto esta es la función esencial del servicio. Si correspondiera el ingreso de

terceros ajenos al Sistema Educativo deberán adoptarse las medidas que

aseguren el cumplimiento del deber de cuidado de los alumnos.

Las Escuelas de Educación Secundaria Técnica que no disponen de Oficina

Técnica deben decidir las formas en que se administrará la información técnica

específica (catálogos, folletos, manuales y hojas de datos, planos, soft

específico, etc.) correspondiendo a la biblioteca su administración si es esto lo

que se acuerda en el marco del Proyecto Institucional, siempre y cuando se

garantice el acceso responsable a este tipo de material en todos los turnos de

funcionamiento de la escuela.

Por otro lado, si la decisión institucional es que desde biblioteca se administren

los recursos audiovisuales (TV, sonido, etc.), entonces los mecanismos

adecuados a tal efecto se registrarán en el Proyecto Institucional para la

Biblioteca.

DESCENTRALIZACIÓN DE LA BIBLIOTECA:

La biblioteca escolar en la escuela técnica es una para toda la escuela, lo que

amerita la presencia del cargo de bibliotecario/a. Al existir material de cierta

especificidad, se necesita considerar normas precisas de funcionamiento y

registro. Por otro lado, el alumno puede requerir la ayuda del bibliotecario

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debido al tipo de consultas que puede hacer al desarrollar los proyectos

educativos en los que se involucre durante sus aprendizajes.

Sin embargo, en la escuela técnica, pueden existir sectores tales como el aula

de tecnología, la oficina técnica, el aula de diseño, el laboratorio de control de

calidad, el laboratorio de ensayo de materiales o el taller de mantenimiento en

donde resulte necesario disponer de la información técnica específica en el

mismo sector, en vez de tener que ir a consultarla en biblioteca toda vez que se

necesite. En tal caso, se requiere descentralizar un sector o sección de la

biblioteca (especializado) y asignarla a un aula específica, para facilitar una

consulta fluida, relacionada intencionalmente con los contenidos específicos y

con el tipo de actividad que se desarrolla en el sector, a fin de que los alumnos

y docentes puedan enfrentar en el mismo momento que surge, las dudas y/o

las necesidades de información necesaria para la concreción de las actividades

planificadas.

La existencia de este tipo de sectores descentralizados de la biblioteca, a cargo

de otras personas (encargados, docentes, jefes) no exime al bibliotecario/a y al

equipo de conducción escolar de su responsabilidad sobre el material. Por lo

tanto, dicho material tendrá que constar en el inventario de la biblioteca,

correspondiéndole su control y administración. La biblioteca llevará la ficha con

el cargo que se hace al personal del sector en que se ubique el material (a

principio del ciclo lectivo) debiendo reingresarlo a la biblioteca al finalizar el año

escolar o cuando finalice el tipo de actividad que requiere la disponibilidad del

material especializado.

La finalidad de descentralizar la biblioteca es claramente pedagógica, a fin de

facilitar el desarrollo de las clases. La relación entre la biblioteca institucional y

el sector descentralizado debe ser funcional y solidaria.

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BIBLIOTECARIO/A:

El activo más importante de cualquier biblioteca se va a casa cada noche: su personal

Timothy Healy

Es el personal docente de base de la Institución educativa que tiene a su cargo

la organización técnico pedagógica del material bibliográfico, cartográfico,

informático, cualesquiera sea el tipo de soporte, con que cuente la Institución y

que co-participa con su tarea en el desarrollo del diseño curricular en contacto

directo con los alumnos.

Es “el miembro del personal que, con la debida formación profesional, se hace

cargo de la planeación y administración de la biblioteca escolar [...] en

colaboración con todos los miembros de la comunidad escolar [...]. Se ha

demostrado que cuando los/as bibliotecarios/as colaboran con los docentes, los

alumnos mejoran su nivel de conocimiento y manejo de la lengua escrita, sus

capacidades de lectura, de aprendizaje y de resolución de problemas” (1).

Para desempeñarse como bibliotecario/a es necesario cumplir con las

condiciones establecidas en el Estatuto del Docente y su reglamentación,

además de poseer las certificaciones que lo habiliten profesionalmente.

El servicio del/a bibliotecario/a se enmarca en la reglamentación vigente para el

trabajo docente, siendo sus obligaciones y derechos los establecidos al efecto

en las leyes y normativas reglamentarias vigentes. En consecuencia su

actividad se encuadra en las prescripciones generales que regulan el ejercicio

de la labor educativa.

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Su marco general de trabajo es el establecido por los artículos 36 y 37 del

Reglamento General de Instituciones Educativas; sus tareas son las

establecidas por los artículos 38 al 41 y por los artículos 78 y 79 de dicho

Reglamento.

El/la bibliotecario/a es un/a mediador/a entre libros y lectores, un puente que

posibilita que las demandas del lector sean satisfechas, un profesional

especialmente formado para orientar la búsqueda del lector y provocar el

encuentro entre este y los textos. Cuando se trata de textos técnicos o de

material impreso específico (manuales, catálogos, revistas, etc.), el bibliotecario

buscará ayuda en las Jefaturas de Área o de Departamento de Integración

Curricular que se correspondan con la especialidad en cuestión.

El bibliotecario lleva el inventario, catalogación y clasificación de los libros y

documentos que ingresan a biblioteca y organiza el sistema de préstamos.

Lleva el registro de entradas donde se anota la fecha de ingreso de cada obra,

procedencia, número de volúmenes de que consta y clases de encuadernación.

Al bibliotecario le corresponde:

1. La elaboración e implementación articulada del Plan Institucional de

Biblioteca, en el marco del Proyecto Institucional, privilegiando desde su

competencia la tarea pedagógica de propiciar la formación de lectores

autónomos.

2. Cumplir y hacer cumplir las previsiones del Plan de Prevención del Riesgo

3. Ejecutar las acciones necesarias para dar cumplimiento a las prescripciones

de naturaleza administrativa (incluida la confección y actualización del

inventario de biblioteca), socioeducativa y comunitaria establecidas en el

Reglamento General y en el Proyecto Institucional.

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4. Hacerse cargo de las acciones acordadas en el marco del Plan de

Continuidad Pedagógica.

5. Cumplir las tareas que se le asignen en el marco del Proyecto Institucional y

en tanto guarden relación con la naturaleza y competencia de su cargo y se

funden en razones de promoción de derechos de los alumnos.

Además de estas funciones, al/a bibliotecario/a escolar con funciones en la

Escuela Secundaria Técnica, le corresponde:

Actuar, en el ámbito de su competencia, con el fin de promover el

derecho a la educación en los términos establecidos por la ley 13688 y

los diseños curriculares vigentes.

Acordar con el Equipo de Conducción los criterios y pautas para el

ordenamiento metódico de los libros y la organización funcional del

sector, los que se explicitarán en el Plan Institucional de la Biblioteca.

El Decreto 5284/89 del Gobierno de la Provincia de Buenos Aires establece el

13 de septiembre como “Día del Bibliotecario”, correspondiéndole asueto al

personal técnico, administrativo y docente que se desempeña en las

bibliotecas.

Las escuelas que, por el motivo que fuere, aún no tienen su planta de

bibliotecarios completa (uno para cada turno en que funcione el servicio –

Resolución Nº 33/09 Anexo 2-) y designen personal no especializado en la

atención del servicio, lo harán únicamente para atender el movimiento diario del material y la consulta en el local. Se labrará un acta detallando las

funciones transitorias que éste personal, bajo acuerdo, que desempeñarán

hasta tanto se cubra el cargo. El relevo de funciones será parcial, es decir, el

personal asignado podrá seguir cumpliendo otras tareas inherentes a su cargo.

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El Equipo de Conducción, en compañía de un Bibliotecario, asesorará al

personal que transitoriamente se halle a cargo, específicamente en las tareas

que hacen al correcto manejo de los recursos para garantizar el mejor

desarrollo del Proyecto Curricular y las planificaciones previstas por los

docentes. Cuando, por razones de servicio y por existir personal que pueda

afectarse totalmente a tareas de la biblioteca, entonces el/la bibliotecaria

operarán como asesores de dicho personal, sin que ello implique atribuciones o

responsabilidades jerárquicas.

El/la bibliotecario/a debe velar por el buen estado del material a su cargo,

debiendo denunciar al Equipo de Conducción cualquier alteración, sustracción

o pérdida del material.

Relación de jerarquía y dependencia del bibliotecario/a en las escuelas

técnicas (Com. 5/91: Misiones y funciones del personal de Escuelas Técnicas)

En las cuestiones administrativas

Bibliotecario/a Secretario Vicedirector Director

En lo técnico específico y lo técnico-pedagógico:

Bibliotecario/a Regente (cuando exista en Planta) Vicedirector Director

El personal asignado a la biblioteca escolar depende jerárquicamente de la

Dirección quien coordina y supervisa las tareas y funcionamiento del sector a

través de la Vicedirección del establecimiento. En su calidad de personal del

establecimiento depende jerárquicamente de la Secretaría escolar en aquellos

aspectos administrativos propios de su condición.

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Debe tenerse en cuenta que no puede ingresar a biblioteca ningún libro ni

documento si no cuenta con la autorización previa del Equipo de Conducción.

El Equipo de Conducción es quién asume la responsabilidad por la naturaleza

del material bibliográfico existente en la Biblioteca, excepto si no está

debidamente informado, en cuyo caso la responsabilidad recae en el

bibliotecario. Queda prohibido cualquier tipo de censura, excepto con aquel

material que no resulte apropiado para incorporarse en la biblioteca escolar

(tales como material de naturaleza pornográfica, material que atente contra los

principios democráticos o bien, cuando afecten la moral y buenas costumbres,

etc.). Es decir, queda explícitamente prohibido cualquier tipo de censura,

excepto, cuando el material a incorporar no condiga con la finalidad propia de

la institución escolar y/o con los usos sociales admitidos.

Cuando no exista Oficina Técnica en el establecimiento, entonces se deberá

coordinar con la Jefatura de Área el manejo operativo de la información técnica

especializada, garantizando el acceso equitativo y funcional de alumnos y

docentes a la misma.

Como personal docente de base, el/la bibliotecario/a puede transitoriamente

ser asignado a otras funciones (pedagógicas o administrativas) dentro del

establecimiento y en el marco del proyecto institucional, siempre que el servicio

de la biblioteca escolar esté garantizado y, principalmente al iniciar y/o al

finalizar el ciclo lectivo escolar. Cuando ello suceda, se labrará el acta

correspondiente, dejando claro el tiempo de afectación, el tipo de tareas a

realizar, los mecanismos que garantizan el funcionamiento de la biblioteca y la

forma en que será evaluado su desempeño. Son ejemplos de tareas que

eventualmente pueden asignarse al/a bibliotecario/a la encuadernación de los

calificadores del año escolar, el apoyo pedagógico a alumnos que se hallen

desarrollando proyectos especiales o deban realizar tareas de recuperación de 13


contenidos, la colaboración con Secretaría en época de inscripción, el archivo

del material que los docentes elaboraron para ser trabajados en las horas

libres, etc.

Es importante que el equipo directivo y docente de la institución conozcan el rol

del/a bibliotecario/a escolar, pero resulta fundamental comprender que el rol

también se difunde, defiende y define a partir de su cumplimiento profesional.

Si los bibliotecarios “permanecen” en bibliotecas cerradas que no invitan al

usuario y no se integran a la institución de manera participativa y solidaria,

desaprovechan una gran oportunidad para difundir su verdadero rol y privan a

los alumnos de una herramienta fundamental de aprendizaje y crecimiento

personal.

En síntesis:

El/la bibliotecario/a es personal docente de base que tiene por encargo

la organización administrativa y técnico-pedagógica del material

bibliográfico, cartográfico, informático y multimedial, cualesquiera sea el

tipo de soporte con que cuente la institución y que coparticipe en la

concreción del Proyecto Curricular, funcionando como servicio tanto para

el/la estudiante como para el/la docente. Es el/la encargado/a de

implementar y ejecutar los procesos administrativos propios del sector,

coordinado con el equipo docente asignado a la biblioteca, los procesos

de comunicación entre los diferentes turnos en que funcione.

ASPECTOS COMPLEMENTARIOS DE LA FUNCIÓN

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Tener en cuenta que no puede ingresarse a biblioteca ningún libro ni

documento si no cuenta con la autorización previa del Equipo de

Conducción.

Actualizar el material bibliográfico y de consulta. Procurar el incremento

de volúmenes en función del número de alumnos.

Participar en proyectos de acciones del establecimiento como así

también en las reuniones y actos a la que fuera convocado. Participar en

las reuniones de personal y en las jornadas de perfeccionamiento,

capacitación y actualización docente.

El Equipo de Conducción, en el marco del Proyecto Educativo acordado,

puede asignar otras funciones al/a bibliotecario/a fundamentándolas en

las necesidades internas para garantizar la calidad del servicio y/o en

razones de promoción de derechos de alumnos. Obviamente, el servicio

de biblioteca debe ser garantizado durante el desarrollo del ciclo lectivo

y en época de exámenes ante comisión evaluadora. Es decir, entonces,

que las funciones que se le asigne al/a bibliotecario/a no deben alterar el

normal funcionamiento de la biblioteca escolar y deben guardar relación

con la naturaleza y competencia de su cargo.

Informar, toda vez que esté a su alcance, de eventuales inasistencias a

fin de que se tomen los recaudos institucionales necesarios para

garantizar el funcionamiento del servicio.

El/la bibliotecario/a debe velar por el buen estado del material a su

cargo, debiendo denunciar al Equipo de Conducción cualquier

alteración, sustracción, deterioro irreparable o pérdida del material.

Garantizar la disponibilidad del material al inicio de su turno y la

recepción adecuada al finalizar el mismo, instrumentando un mecanismo

adecuado para la atención de los docentes que cumplen funciones en 15


horarios especiales (quinto módulo, pre-hora, planes de terminalidad,

tutorías, etc.)

Administrar el museo escolar y colaborar en la organización del archivo

histórico y/o pedagógico de la institución.

El bibliotecario debe tener presente que:

Le corresponde organizar visitas con los alumnos de primer año y los

ingresantes de otros cursos para explicarles el mecanismo del préstamo,

la variedad de fuentes, la disposición topográfica de los materiales, los

horarios de funcionamiento, etcétera. Además, estos son saberes

necesarios para que los/as alumnos/as puedan desempeñarse como

usuarios en cualquier tipo de biblioteca.

Está a cargo de la señalética en las bibliotecas: el reglamento de

préstamos, los horarios, las pautas de comportamiento y de uso

adecuado de los libros, los estantes con la clasificación o el tema de los

textos que contienen, etc. deben ser claramente expuestos, de modo

que todos los usuarios puedan “acceder” a ellos.

Le corresponde favorecer en la biblioteca un ambiente que invite a leer y

a estudiar, disponer el ambiente físico de modo tal que resulte cálido,

agradable, abierto y atractivo para quienes se acerquen a él. Tener en

cuenta que muchos/as alumnos/as no disponen en sus hogares de

espacios adecuados para el estudio y el trabajo extra-clase.

Está dentro de sus competencias el formar un fichero de “recursos de la

comunidad” con los datos para comunicarse con personas o

instituciones que aporten al desarrollo de los proyectos institucionales y

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áulicos: padres, madres, abuelos narradores, pobladores más antiguos

de la zona, trabajadores especializados en diferentes actividades,

profesionales, organizaciones no gubernamentales que funcionen en el

barrio o la localidad, empresas relacionadas con las especialidades de la

escuela, bibliotecas municipales, etc., y que resulten de interés como

fuentes de información primaria (por ejemplo, clubes, sociedades de

fomento, centros de salud, diversos organismos privados y estatales,

etc.).

Seleccionar el material adecuado para cada proyecto, lo que implica no

solamente conocer los diferentes proyectos que se llevan adelante en la

escuela, sino también tener un conocimiento preciso acerca del material

bibliográfico con que cuenta la biblioteca a fin de relevar el que pudiera

aportarse en cada instancia. Si es necesario, debe buscar el

asesoramiento del Jefe de Área, el Subjefe de Área a cargo de la OT,

los Jefes de Departamentos de Integración Curricular, los docentes

especialistas, etc.

Orientar a los alumnos en sus búsquedas bibliográficas abordando

actividades propias de la formación de usuarios: buscar, seleccionar,

clasificar, evaluar y utilizar la información encontrada.

EL PLAN INSTITUCIONAL DE BIBLIOTECA:

La planificación de tareas en el sector conlleva la elaboración e implementación

del Plan de Biblioteca, el que establecerá la coordinación del sector con la

actividad que desarrollan los docentes y las necesidades que demanden los

alumnos.

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El Plan Institucional de Biblioteca se integra y forma parte del Proyecto

Institucional siendo atravesado por las metas, fines, lineamientos generales y

actividades que la comunidad escolar haya acordado.

La elaboración del Plan institucional de Biblioteca requiere del consenso de

todo el personal designado en la función, la intervención activa del Equipo de

Conducción y la participación de los usuarios (docentes y alumnos).

La implementación del Plan de Biblioteca se coordina con los profesores,

directivos y las

organizaciones estudiantiles tales como el Centro de Estudiantes u otras. Esta

coordinación incluye la concurrencia de alumnos a contra-turno al

Establecimiento, circunstancia que obliga a la Institución a adoptar las acciones

para asegurar el cuidado integral del que concurra. Este plan se integra en el

Proyecto Institucional de la EEST y contiene, entre otras, especificaciones del

Plan de Continuidad Pedagógica, el AIC, los Proyectos Estratégicos

implementados que así lo requieran, el Plan de Autoevaluación Institucional y el

Plan de Prevención del Riesgo.

Como parte del Proyecto Educativo, el Plan debe convalidarse y/o reformularse

al inicio de cada ciclo lectivo y toda vez que se detecten inconvenientes en su

ejecución. En dicho Plan se asigna el tiempo semanal dedicado a las

actividades propias de la Biblioteca en orden a la catalogación, selección,

clasificación, conservación y confección de registro de materiales y demás

cuestiones específicas.

El Plan institucional de Biblioteca plasma en líneas de acción concretas estos

criterios:

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Articulación con el Plan de Continuidad Pedagógica y en concordancia

con el Proyecto Curricular Institucional, privilegiando desde su

competencia la tarea pedagógica de propiciar la formación de lectores

autónomos y garantizando el acceso a la información que precisen los

alumnos en su aprendizaje.

Construcción del Manual de Procedimientos en el que se incluyen

especificaciones del AIC y del Plan de Prevención del Riesgo,

asumiendo el personal asignado a la Biblioteca las responsabilidades

que se deriven en el cumplimiento de las normas y procedimientos

acordados. Ambas dimensiones, el AIC y el Plan de Prevención del

Riesgo, se integran de este modo en el Plan Institucional de Biblioteca y

serán conocidas por todo el personal asignado a la biblioteca y por los

usuarios, siendo responsabilidad del Equipo de Conducción el

cumplimiento de ésta prescripción.

Según se consigna en el Reglamento General de Instituciones Educativas de la

Provincia de Buenos Aires, el Plan de Biblioteca incluye, entre otros, los

siguientes aspectos técnico-pedagógicos:

1. Asignar el tiempo semanal dedicado a las actividades propias de la

Biblioteca en orden a la catalogación, selección, clasificación, conservación

y confección de registro de

materiales y demás cuestiones específicas.

2. Promover las acciones para fomentar los hábitos de lectura y estudio por

parte de los alumnos.

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3. Disponer de un servicio de lectura y de acceso a la información. Concretar

espacios de lectura dentro de la institución educativa (dentro y fuera del

espacio destinado a la Biblioteca).

4. Propender al aprovechamiento integral del Piso Tecnológico para extender

los alcances de la Biblioteca Escolar.

5. Desarrollar estrategias que contribuyan a la mayor autonomía de éstos en el

acceso y el manejo de la información en cualquier soporte, formato o medio;

teniendo en cuenta las formas de comunicación presentes en su comunidad

y otras.

6. Coordinar, cuando el Proyecto Institucional así lo requiera, la organización

de las Bibliotecas de aula o sector.

7. Proveer la información para orientar y facilitar la tarea del docente en todas

las disciplinas.

8. Dotar prioritariamente de material adecuado para atender los

requerimientos de alumnos y docentes.

9. Incrementar su material bibliográfico y otro tipo de soportes.

10.Administrar y coordinar, en caso de no existir el cargo de Encargado de

Medios de Apoyo Técnico Pedagógico, el uso de los equipos multimedios

como: grabador, retroproyector, tv, video, etc.

11.Organizar un servicio de préstamo a domicilio (*).

12.Organizar servicios de referencia y de extensión bibliotecarias en función de

las necesidades de usuarios y de la comunidad.

13.Contribuir a la construcción del catálogo escolar distrital.

14.Establecer relaciones de cooperación con otros tipos de bibliotecas.

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15.Articular las acciones y facilitar el material en relación con el Plan de

Continuidad Pedagógica.

16.Prever las acciones necesarias para la articulación interinstitucional con

otros

establecimientos, para su utilización por los alumnos de los mismos.

(*) Se excluye del sistema de préstamo a domicilio el material de biblioteca

asignado en otras secciones o entornos escolares y los libros de texto u otros

materiales definidos en el Plan Institucional de Biblioteca como de consulta

exclusiva en la escuela o bien, por su valor histórico institucional o su condición

de “coleccionable”.

Cuando la Biblioteca preste servicio al público en general – es decir, sea una

biblioteca abierta a la comunidad asumiendo la forma de biblioteca popular o

similar -, entonces se acordará un Estatuto para la misma en el marco de las

leyes vigentes.

En ningún caso se sacarán libros, documentos, material impreso y demás

recursos existentes en la biblioteca, sin recibo de quién lo lleva y la pertinente

registración en el instrumento implementado al efecto (planilla, ficha, programa

informático, etc.). La obra no puede ser retirada por más de quince días,

pudiendo el usuario renovar el retiro según definiciones adoptadas en el

Reglamento de Biblioteca, incluido en el Plan Institucional de la Biblioteca

Escolar.

La biblioteca debe funcionar durante el horario de clases, por lo tanto el horario

del bibliotecario/a será coincidente con el del turno que desempeña (artículo

38 inciso 11 del Reglamento General de Instituciones Educativas). Por ende la

carga horaria será de 4h 30m diarios, la que no podrá ser fraccionada. La

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comunicación entre bibliotecarios/as de distinto turno debe ser fluida y efectiva

y es un atributo propio de la profesionalidad del cargo, correspondiéndole al

Equipo de Conducción garantizar el buen funcionamiento de los canales de

comunicación entre los turnos.

En tanto el servicio básico que brinda la biblioteca como soporte para procesos

de enseñanza y de aprendizaje, debe garantizarse durante el desarrollo del

ciclo lectivo, la institución preverá los mecanismos necesarios a fin de que la

misma cumpla con esta finalidad ante eventuales situaciones de contingencia

(ausentismo, cargo vacante, etc.).

Es tarea del/a bibliotecario/a organizar e incorporar a la Biblioteca el material

que posea el establecimiento, correspondiente a mapoteca, filmoteca (filmes,

videos, CD’s, DVD, etc.), museo escolar, archivo de revistas y periódicos,

recursos audiovisuales (láminas, filminas, casetes, discos, diapositivas,

desarrollos informáticos interactivos o no, etc.), apuntes y guías elaborados por

personal de la escuela, colecciones musicales y todo material de apoyo a la

tarea docente; facilitándolos toda vez que sean solicitados.

La biblioteca colabora y participa en todos aquellos proyectos que se

desarrollen en el ámbito escolar y que involucren la participación activa de la

biblioteca con diferentes niveles de responsabilidad: periódico y/o revista

escolar, talleres literarios y/o de expresión, talleres y encuentros de arte, radio

escolar, atención de alumnos en horas libres, olimpiadas diversas, feria de

ciencias y tecnología, exposiciones didácticas, planes de terminalidad de

alumnos, proyectos de recuperación de aprendizajes, apoyo tutorial, etc.

La biblioteca presta especial colaboración a todas aquellas actividades

curriculares, extracurriculares y/o complementarias incluidas en el Proyecto

22


Institucional de la escuela toda vez que demanden la participación de esta

dependencia escolar como fuente de información (seminarios, tutorías,

proyectos didácticos específicos, desarrollos monográficos, investigaciones,

etc.).

Toda biblioteca escolar incorporará una sección especial destinada a las

publicaciones oficiales que son remitidas sin cargo a las escuelas. El

bibliotecario/a debe ficharla, catalogarla y difundirla a efectos de que el

personal docente pueda acceder a ella y utilizarla eficazmente.

Otro material escrito a ser tomado en cuenta son las producciones de alumnos, padres y docentes, editadas en la escuela. Libros de anécdotas,

recopilaciones de sueños, chistes, adivinanzas, revista y/o periódico escolar,

trípticos, canciones de la época de los abuelos, antologías de cuentos,

poemarios, fascículos temáticos de ciencias sociales y naturales, copia de los

informes de los desarrollos que los alumnos hayan hecho para su participación

en diferentes eventos tanto internos como externos (feria de ciencias y

tecnología, EACP, memorias técnicas de los proyectos desarrollados, ESCB,

etc.), diferentes curiosidades científicas… también deben formar parte del

acervo bibliográfico disponible

Señalemos, por otro lado, que el Manual de Procedimientos, parte muy

importante dentro del Plan Institucional de la Biblioteca, incorpora en sus

reglamentos y protocolos aspectos, especificaciones y definiciones del AIC,

debiendo existir la lógica correspondencia.

La DGCyE es responsable de disponer los mecanismos que garanticen el

funcionamiento de las bibliotecas escolares como espacios que aseguren la

plena utilización de sus insumos como recursos de apoyo y consolidación de

23


los procesos de enseñanza y aprendizaje. Para ello, en nuestro caso,

dispondrá los mecanismos de articulación específicos que aseguren la

interrelación de las actividades propias de las bibliotecas escolares con el Nivel

Secundario y la Modalidad Técnica.

El acceso al material existente en la Biblioteca Escolar de la EEST es un

servicio que brinda la institución a docentes y alumnos directamente vinculado

a los derechos de enseñar y de aprender, por lo que está expresamente prohibido el cobro de cualquier tipo de “cuota”, “bono”, “erogación”, “arancel” o

“contribución voluntaria” para acceder al material que allí se encuentre, siempre

que se haga en la forma pautada en el Reglamento de la Biblioteca. El solo

hecho de ser alumno o docente de la institución habilita al uso de la biblioteca

en calidad de socio. Conviene aclarar que esto no invalida el hacho de que el

usuario de la Biblioteca deba asociarse a la misma, a efectos de que en la

misma se registren los datos necesarios para la instrumentación del sistema de

préstamo diseñado.

Recordemos que en el Manifiesto de la UNESCO para las bibliotecas escolares

se establece que a sus servicios deben tener acceso por igual todos los

miembros de la comunidad escolar, sin distinción de edad, raza, sexo, religión,

nacionalidad, lengua, condición social y situación profesional. Y también que se

deben ofrecer servicios y materiales específicos y/o diferenciados a los que no

están en condiciones de utilizar los servicios y materiales corrientes de la

biblioteca.

Hoy en día predomina el concepto de biblioteca como espacio y como proceso, por lo que es un concepto que refleja el dinamismo de Internet e

Intranet. Lo digital tiene que ver con el propósito y la flexibilidad del sistema de

medios de la biblioteca para poder articularse flexiblemente y responder a

24


diversas demandas. Lo digital, en este contexto, se relaciona con el hecho que

la biblioteca es relativa en espacio y tiempo, porque sus fronteras no las marca

su geografía y su disponibilidad temporal es instancia de la demanda de quien

la consulta.

Es un concepto que subraya la importancia del trabajo en red y los atributos de

ubicuidad, sincronía, asincronía e hipermedialidad de Internet. Es la biblioteca

como espacio compartido que preserva las funciones específicas de una

colección sistematizada de documentos, pero que las incrementa a través de la

flexibilidad que ofrece el uso de las tecnologías de la información y la

comunicación. Es por tanto un concepto abarcador e incluye tanto a la

biblioteca digital como a la electrónica que son modalidades anteriores en el

tiempo.

DIMENSIÓN DIGITAL DE LA BIBLIOTECA:

En términos históricos el concepto de biblioteca ha acompañado a las

tecnologías y ha

estado muy condicionado por las mismas. Así se habló de bibliotecas como

colecciones de tablillas de arcilla, o de papiros en la antigüedad, o como

bibliotecas electrónicas cuando se automatizaron determinados procesos y

servicios, o biblioteca digital cuando las colecciones de documentos

comenzaron a soportarse en soporte digital. Se llega al concepto de biblioteca

digital cuando las colecciones y servicios bibliotecarios en sus diversas

modalidades comienzan a integrarse en un espacio en red. La biblioteca

escolar en las escuelas técnicas, avanzan progresivamente hacia el concepto

de biblioteca virtual o digital, en tanto su funcionamiento se adapta muchísimo

mejor a las necesidades de los diferentes usuarios que acceden a ella.

25


Una biblioteca digital o biblioteca virtual es una biblioteca en que una

proporción significante de los recursos de información se encuentran

disponibles en el formato digital (pdf, doc, ppt, etc. o microforma), accesible por

medio de las computadoras. Es importante considerar que en el concepto de

biblioteca digital está presente el efecto de la integración de la informática y las

comunicaciones cuyo exponente esencial es Internet. La gran ventaja que

presenta este tipo de biblioteca es, entre otras, la interactividad que permite

con el usuario, facilitando de manera flexible el aprendizaje de los alumnos, sin

un tiempo estricto ni una ubicación determinada.

La implementación del plan “CONECTAR IGUALDAD” en las escuelas

técnicas, al distribuir una computadora a cada alumno, abre a las bibliotecas

escolares un abanico de posibilidades para llevar su servicio hasta el hogar de

cada alumno/a y potenciarlo enormemente. Si las bibliotecas escolares pueden

conectarse en red y el alumno acceder a ellas desde su net-bock entonces las

producciones que cada docente elabore pueden estar disponibles para todos

los alumnos del sistema educativo.

Para hablar de una biblioteca digital es necesario que las fuentes de

información estén disponibles de alguna manera y su acceso sea ubicuo, es

decir, no importe dónde residan físicamente ni quién se encargó

específicamente de su procesamiento y almacenamiento.

Destaquemos que en las bibliotecas escolares digitales podemos encontrarnos

fundamentalmente con tres tipos de herramientas informáticas, las que

describimos solo a título informativo:

Herramientas cerradas, diseñadas para el aprendizaje autónomo: La

información se estructura de manera lineal, es controlada por la computadora y

26


responde a una determinada estrategia pedagógica. Por lo general incluyen

actividades de autoaprendizaje, pero todo ello en un espacio cerrado, sin

conexión a la información disponible en el exterior del entorno programado.

Herramientas y programas que establecen un entorno de simulación y

entrenamiento. Son altamente atractivos tanto para los docentes

(principalmente del campo de la FTE) como para los alumnos ya que permiten

de manera rápida, mediante elementos preconfigurados, estructuras y sistemas

que en el taller llevaría días fabricar. Posibilitan analizar el correcto

funcionamiento de todas las partes, ayudan a la construcción de una visión

sistémica del conjunto y permiten la sustitución de partes que no se ajusten a

un plan previamente establecido. Estos entornos virtuales facilitan la

comprensión del funcionamiento de cada componente en el con junto y

permiten al alumno; mediante ensayo y error, adquirir las competencias

necesarias para construir sistemas eléctricos, mecánicos, neumáticos,

electrónicos, etc., y corregir las fallas, a la vez que interpretar resultados de los

parámetros involucrados (velocidad, intensidad, fuerza, resistencia, etc.).

Herramientas basadas en el hipertexto, hipermedia y programas cooperativos:

El uso de estos entornos tienen la gran ventaja de incorporar una organización

no lineal a la hora de mostrar la información. El hipertexto permite crear una

estructura de información asociativa que posibilita organizar la información

mediante diferentes jerarquías y facilita la vinculación de las ideas con los

textos. La hipermedia añade a la información textual imagen, video, sonido,

gráficos, estructuras temporales, etc. Esto impacta sustancialmente en la

manera de enseñar del profesor, ya que el docente tiene en la biblioteca

escolar integrada toda la información para los distintos niveles, lo cual le

permite adaptar sus explicaciones a los distintos grupos de aprendizaje, las

motivaciones de sus alumnos, elegir el grado de dificultad de las actividades

que va a plantear, etc. Por otra parte, al ser entornos a disposición de los

alumnos, por estar la información en la web, pero tenerla el profesor (o el grupo

de profesores) estructurada y disponible desde la biblioteca escolar, se facilita

27


su consulta, análisis y estudio de manera atemporal y en cualquier lugar. Por

otro lado, al añadirles herramientas gratuitas y colaborativas del tipo blog,

wikis, editores de texto, etc., también permiten el desarrollo del trabajo en

equipo, la investigación en grupos y la presentación de resultados, lo cual

aporta para el debate on-line con otros alumnos de la clase o con alumnos de

otros cursos, o de otras escuelas, etc. Las ventajas del hipertexto es que el

lector elige en cada momento su camino, sin que exista una lectura

preestablecida, aunque sí orientaciones por la estructura creada por el equipo

de profesores y que la resolución de actividades sea pública, ya se trate de

respuestas a preguntas, conclusión de actividades cortas, proyectos de taller o

trabajo más elaborados de investigación y profundización, facilitándose de éste

modo el aprendizaje cooperativo, el aprendizaje colaborativo y el debate

colectivo como elementos de expresión de puntos de vista, de puntualizaciones

a casuísticas específicas y, en general, como un elemento más del aprendizaje

al que se accede por siendo socio de la biblioteca escolar (o lo que es lo

mismo, por ser alumno regular del servicio escolar). Por último mencionemos

aquí que este tipo de herramientas son de gran ayuda en las tutorías, en los

programas de terminalidad y el desarrollo de actividades extracurriculares y

complementarias.

DIMENSIÓN MULTIMEDIAL DE LA BIBLIOTECA

Corresponde a la Biblioteca administrar y coordinar el uso de los equipos

multimedios como: grabador, retroproyector, TV, video, etc. cuando ello no

haya sido asignado al Encargado de Medios de Apoyo Técnico Pedagógico de

la especialidad Informática u otro, en el Proyecto Institucional acordado.

Además del material impreso el/la bibliotecario/a incorporará a la biblioteca,

como vías de acceso al conocimiento, la TV, videos, diapositivas, casetes, discos compactos, DVD, etc. El sonido, la imagen, la música, el movimiento y

28


la información digitalizada se transforman en alternativas diferentes para leer e

interpretar la realidad, por lo tanto es conveniente disponer para ellos de un

espacio adecuado en donde conservarlos y un registro adecuado para facilitar

su administración.

Estos bienes culturales tienen el valor agregado de ser elementos con los que

niños, adolescentes, jóvenes y adultos interactúan espontáneamente en la vida

cotidiana. En consecuencia, su uso en la escuela crea vínculos que, a modo de

puente y en forma similar a los textos, posibilitan vislumbrar universos distintos

y acceder a experiencias culturales diversas.

Obviamente que la disponibilidad del material en cada institución así como su

infraestructura, condiciona la inclusión de los medios audiovisuales en salones

de clase, aulas-taller, laboratorios, gabinetes, plantas y similares.

ORGANIZACIÓN DE LA BIBLIOTECA

La biblioteca debe organizarse adecuadamente para que su uso sea efectivo.

La organización que se plantee debe ser racional y flexible a efectos de permitir

adaptaciones, debiendo además ser lo suficientemente amplia y sólida a

efectos de minimizar las improvisaciones, homogeneizar los procedimientos en

todos los turnos y potenciar su efectividad.

La biblioteca en la escuela secundaria técnica tiene que permitir que los

documentos se encuentren cuando el alumno o el docente necesite

consultarlos. Para ello debe responder dinámicamente a partir de su red de

fuentes de información.

29


La biblioteca escolar debe estar incluida en los circuitos comunicacionales y de

calidad en los procesos escolares internos,

La incorporación de medios y tecnologías digitales en la biblioteca escolar

determina, en muchos casos, la necesidad de vincular las tareas relacionadas

con la gestión de recursos digitales con el o los EMATP’s del Área Informática,

trabajando coordinadamente el personal de la biblioteca escolar con el personal

idóneo en el uso y aprovechamiento de las TIC’s existentes en la planta

funcional de la institución.

La desaparición de la Oficina Técnica en muchas de nuestras escuelas ha

obligado a los bibliotecarios a incorporar a la biblioteca recursos que

tradicionalmente se manejaban en esta dependencia:

Elementos de consulta y documentación: Catálogos comerciales,

Folletos. Manuales (de uso, de servicio, etc.) Revistas y libros técnicos.

Tarifas, Boletines, y Normas. Hojas de información técnica y hojas de

datos. Planos, esquemas, etc.

Elementos de trabajo: archivo general, proyectos, legajos y

documentación técnica producida en la institución, originales, copias y

correcciones. Soft específico. Planos y bocetos

Esta inclusión, fundamental como recurso en la Formación Técnica Específica

y de altísimo valor en el desarrollo de algunos formatos de Prácticas

Profesionalizantes, obliga a la biblioteca escolar en la escuela técnica a

coordinar acciones con la Jefatura de Área. Implica, además, incorporar en el

entorno de la biblioteca escolar, algunos elementos que históricamente

formaron parte de la Oficina Técnica: ficheros, dispositivos de reproducción,

etc. Es fundamental que se garantice el acceso a este tipo de material en todos

los turnos de funcionamiento de la escuela.

30


En relación con la documentación y el material impreso de naturaleza técnica,

la biblioteca incorpora los siguientes objetivos:

Ofrecer al usuario la documentación necesaria para hacer un trabajo

específico.

Permitir un acceso rápido a la documentación relacionada con el trabajo.

Guardar la documentación es tiempo que sea útil.

Establecer un archivado organizado de forma sistemática, de toda la

documentación empleada y necesaria.

Incorporar un sistema eficaz de reproducción de documentos.

Archivar en conformidad con las normas, leyes y disposiciones legales.

Este aspecto de la documentación técnica, para el cual los bibliotecarios

normalmente no están preparados, obliga a trabajar articuladamente con la

jefatura de área y aquellas jefaturas de departamento de integración curricular

vinculadas con las especialidades que se dictan en la escuela, a consensuar

líneas de trabajo conjuntas y a incorporar protocolos específicos, en el

reglamento interno de la Biblioteca Escolar, en el marco del Proyecto

Institucional.

Consideramos las actividades mínimas que en una biblioteca escolar aseguren

su buen funcionamiento. Para ello dividimos las tareas en cuatro áreas de

intervención con propósitos específicos, cada una de ellas compuestas por

sub-áreas con tareas diferenciadas:

1. Área de Procesos Técnicos.2. Área Pedagógica3. Área Comunitaria4. Área de gestión, organización y administración.

31


La definición de estas cuatro áreas y sus sub-áreas no refiere a una disposición

espacial sino a la dimensión organizativa de la biblioteca, es decir al conjunto

de tareas que se realizan desde cada una de ellas para cumplir con los

propósitos y objetivos de la biblioteca escolar.

Este documento presenta los propósitos y tareas que conforman las tres

primeras áreas, sobre la cuarta área, que refiere a los aspectos organizativos

propiamente dichos de la biblioteca, sólo se establecen las sub-áreas que la

conforman. Las tareas inherentes a cada una de ellas las determina cada

institución, de acuerdo a la dinámica de funcionamiento propia de la realidad

institucional.

Áreas Subáreas

1- Procesos Técnicos

1.- Organización de la documentación

2.- Difusión de los materiales

3.-Descentralización: asignación y distribución de

recursos bibliográficos en los diferentes entornos

formativos.

4.- Distribución de materiales

2.- Pedagógica A.: Servicios

1.- Atención al usuario: referencia, consulta y

préstamo.

B.: Servicios de Extensión

2.- Formación de usuarios.

3.- Asistencia Técnica

32


4.- Promoción del trabajo intelectual

5.- Articulación bibliotecaria

3.- Comunitaria1.- Trabajo en red

2.- Extensión Técnica y Cultural

4.- Administrativa

1.- Manual de procedimientos, reglamentos.

2.- Ambiente

3.- Estadística e informes

4.- Registros y archivos.

ÁREA PROCESOS TÉCNICOS

Entendemos por procesos técnicos aquellos que se realizan en una biblioteca

para poner en condiciones de ser usados todos los materiales que posea y los

que vaya recibiendo a medida que la institución crece y amplía sus servicios.

Requieren de idoneidad profesional y conocimientos específicos por parte del

personal que los lleva a cabo.

Propósito: Organizar y gestionar los recursos de información en cualquier

soporte y formato, poniendo los materiales de la biblioteca a disposición de la

comunidad de usuarios (alumnos, docentes, profesionales, ex alumnos,

investigadores, entidades y organizaciones afines a la especialidad de la

institución) de manera rápida y eficiente.

Subáreas

1- Organización de la documentación: En esta subárea, el bibliotecario realiza

los procedimientos técnicos apropiados para la organización de los materiales 33


que constituyen el acervo tanto cultural como técnico-pedagógico de la Escuela

Técnica.

La descripción de cada una de las operaciones de los procesos técnicos, se

detallan en el manual de procedimientos.

Son inherentes a esta subárea las siguientes tareas:

Selección, adquisición y registro de los materiales.

a) Selecciona los materiales a incorporar con la colaboración de los consejos

regionales

de directores, el equipo directivo y los docentes de las distintas áreas y/o

especialidades. Considera las necesidades de los

alumnos/docentes/comunidad y los requerimientos del diseño cunicular.

La selección es un conjunto de decisiones que toma el bibliotecario/a para

establecer si un material debe o no formar parte del fondo de la biblioteca.

Este procedimiento técnico es el más difícil y delicado de todos, ya que de

su éxito dependen en buena parte el valor de la colección y la eficacia de

los servicios. Debe ser un trabajo llevado a cabo cuidadosamente, con gran

inquietud por la actualidad social, cultural y científico-tecnológica. Debe

tenerse en cuenta además los intereses de la comunidad educativa a cuyo

servicio está la biblioteca.

Distinguimos en ella dos modalidades:

I. Selección positiva para incorporar el material.

II. Selección negativa para descartar el material.

El bibliotecario instrumentará canales de comunicación con los

Departamentos de Integración Curricular y la Jefatura de Área a efectos de

tener conocimiento de las necesidades y sugerencias de los docentes, en el 34


marco del Proyecto Curricular de la Institución. También instrumentará

encuestas, entrevistas y técnicas similares a fin de llevar una estadística de

las necesidades, intereses e inquietudes de los alumnos y docentes. Por

último realizará estadísticas acerca de los niveles de uso de los materiales

existentes en la biblioteca. Sobre esta base fundamentará sus decisiones.

El material seleccionado para su incorporación se informará al Equipo de

Conducción para su aprobación.

b) Adquiere los materiales a partir de los procedimientos de canje, compra o

donación.

c) Registra y formaliza el ingreso de los materiales a la colección de la

biblioteca asigna de manera correlativa, un número de registro en el libro

inventario, con los datos relacionados a ese ejemplar como: autor, título,

procedencia, bajas, otros y coloca el sellado correspondiente.

El ingreso del material en la biblioteca se produce por canje, compra,

donación o por provisión oficial (transferencia de otros servicios,

asignaciones presupuestarias, plan de mejora, distribución de ejemplares,

etc.). En el primer caso los bienes son patrimonio de la Asociación

Cooperadora de la escuela y en el segundo caso forma parte de los bienes

patrimoniales del Estado.

d) Revisión: Consiste en examinar cuidadosamente que el material ingrese en

las debidas condiciones, asegurándose de su buen estado (sin páginas en

blanco o faltantes, copias imperfectas, impresión defectuosa, errores de

compaginación, etc.).

Destaquemos que la clave para una buena selección de recursos está en poner

el acento en el para qué y no únicamente en su accesibilidad o disponibilidad.

La biblioteca escolar debe disponer y facilitar materiales muy filtrados y

específicos que puedan responder a unos determinados usos didácticos y 35


tengan vinculación directa con el currículum vigente. Como centro de recursos,

la biblioteca es colar ha de ofrecer un servicio pensando siempre en la utilidad

práctica de los mismos.

Política de descarte/Expurgo

Selecciona los materiales de descarte según criterios acordados en la

institución.

Tratamiento Documental:

a) Para el nivel de análisis documental externo o formal, utiliza:

Normas vigentes: ISBD y AACR2 para la catalogación.

Normas ISO 690 y 690/2, para las referencias bibliográficas.

b) Para el nivel de análisis documental interno o de contenido, utiliza:

CDU y/o CDD para ubicación física de los documentos.

Lista de Encabezamiento de Materias, Tesauro de la educación Unesco-

OIE, UNBIS o Tesauros específicos para la indización de los materiales

en cualquier formato y soporte.

Automatización:

Automatiza los procesos bibliotecológicos, utilizando el programa Aguapey.

Sellado:

Cada libro o documento en existencia de la biblioteca llevará el sello del

establecimiento.

Sellar un libro consiste en aplicarle una marca que, llegado el caso, sirva para

atestiguar que es propiedad de la biblioteca. Corrientemente se utilizan sellos

36


de goma, pero también se pueden usar sellos de metal, a seco, por

perforación, en relieve, etc.

En la biblioteca se distinguen las siguientes clases de sellos:

Sello oficial: Establece que la obra pertenece a la biblioteca,

haciéndose difícil o imposible que se la confunda con similares de otra

pertenencia. Su tamaño es de 2,5 cm de diámetro, forma circular, con el

nombre de la biblioteca en letras claras y legibles.

Lugares de aplicación: el sello oficial se coloca en:

i. la portada: en el corte superior o inferior derecho. Es el único que

va en la portada.

ii. Páginas clave: en caso de que sea necesario establecer la

pertenencia de la obra, un sello que aparezca en varios lugares

dilucida cualquier duda. Por ello es necesario elegir páginas

clave. Se llama así a la página impar inferior al N° 50. Por ejemplo

si la biblioteca ha elegido como página clave la página nº 35, se

sella ésta y todas las que surjan de ir sumando 100 a la anterior

(35, 135, 235, 335, 435, etc.)

Sello numerador: De carácter administrativo se lo utiliza para asignar el

número de inventario, signatura topográfica.

Lugares de aplicación: se coloca en la dorso/portada y en la última

página del texto (donde termina el contenido del libro).

Inventario:

37


El registro de inventario o adquisiciones es el libro donde se asientan los

volúmenes de la biblioteca por orden de recepción con una sucinta descripción

bibliográfica y con datos esenciales para su inmediata identificación.

Es un libro de carácter administrativo, documenta la propiedad de la obra y

contabiliza sus existencias bibliográficas.

Nos permite saber en cualquier momento qué cantidad de volúmenes posee la

biblioteca y cuántos libros han sido incorporados en determinado periodo. Se

puede llevar en libro, ficha o en hojas movibles que se archivan en una carpeta.

Esto último es lo más conveniente ya que pueden utilizarse los recursos

informáticos al efecto, lo que permite un trabajo más cómodo, prolijo y seguro.

En este caso, se llevará siempre copia impresa firmada y sellada por el

responsable de la biblioteca y se hará un archivo de seguridad o back-up de la

información. Cuando alcanzan un número determinado se mandará

encuadernar, para mayor seguridad, evitando que se extravíen las hojas.

Los datos básicos a consignar en el inventario son los siguientes:

1. Fecha de alta: la fecha de entrada del libro a biblioteca.

2. Número de inventario: el que corresponda, según el orden de llegada

(cronológico).

A cada volumen o unidad física se le asigna un solo número de

inventario.

Éste número no se repite.

En el caso de las colecciones, cada libro de la misma lleva un

número distinto. En el libro, éste número se coloca en la

dorsoportada y en la última página del texto (sello numerador).

38


3. Autor: Es ideal seguir el criterio de las reglas de catalogación para

ingresar el o los autores de manera uniforme.

4. Título: En el caso de que se indique título y subtítulo adoptar el siguiente

criterio de consignarlo siempre:

Si el título está escrito en otra lengua debe transcribirse tal cual se

consigna en la portada (idioma original)

En el caso de una colección se indica el tomo o volumen a

continuación.

5. Edición: Si en la hoja o planilla de inventario no figura este casillero, se

agrega la edición correspondiente a continuación del título.

6. Pie de imprenta: Contiene los datos de lugar, editor y año de

publicación.

7. Procedencia: Se anota si el libro ingresó a la biblioteca por compra,

canje, donación o provisión oficial.

8. Precio: en el caso de compra se indica su valor real (de la factura); y si

se trata de canje o donación un valor estimativo.

9. Encuadernación: consignar el tipo de encuadernación (cuerina, rústica,

media pasta, tela, etc.).

10.Signatura topográfica: Se consignan signaturas de clase y librísticas.

11.Observaciones: Se indica toda situación irregular que el libro puede

sufrir.

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Cuando el fichaje de las existencias en la Biblioteca se realice por medios

informáticos, se llevará copia impresa firmada por el bibliotecario y rubricada

por la Vicedirección, realizándose periódicamente una copia de seguridad de la

información guardada.

1. Selección

2. Ingreso

3. Revisión

4. Sellado

5. Inventario

6. Catalogación

7. Clasificación

8. Programación para el préstamo y ubicación en el

estante.

2- Difusión de los materiales: Fortalece el vínculo con los usuarios/asociados

promoviendo a través de diferentes acciones la comunicación con el adentro y

afuera del instituto. Es tarea del/a bibliotecario/a promover los recursos

didácticos que posee.

Tareas:

Diseña materiales gráficos y multimediales para la difusión de

actividades propias de la biblioteca.

Realiza difusión selectiva de la información (DSI), preparada para dar

respuesta a las necesidades del usuario, respondiendo a sus

requerimientos académicos y de investigación, previo estudio de su

perfil.

40

PROCESOS TÉCNICOS


Un recurso muy interesante es utilizar el correo electrónico para difundir las

novedades de la biblioteca entre los alumnos y docentes. Esta difusión puede

hacerse de manera pública o bien direccionada hacia usuarios puntuales o

bien, grupos de usuarios.

3.- Descentralización: Cuando el Plan de Biblioteca incluya descentralizar

material asignándolo al aula o a un entorno formativo específico (laboratorio,

taller, gabinete, aula, etc.) por tratarse de material cuya utilidad derive de la

naturaleza de los contenidos a enseñar y las estrategias implementadas, la

biblioteca podrá asignar al dicho sector los materiales didácticos a su cargo,

por un tiempo definido (que nunca será mayor a la duración del ciclo lectivo).

En este caso, el Plan de Biblioteca incorporará los procedimientos para la

asignación y control de los materiales asignados, así como las condiciones de

uso, el personal responsable, los plazos de devolución y todo aquello que se

estime como variables a considerar en esta tarea.

Los diferentes espacios didáctico-productivos que caracterizan la escuela

técnica necesitan, en muchos casos, incluir materiales a cargo de la biblioteca

(revistas, planos, catálogos, manuales, textos, vademécum, etc.) para potenciar

su valor como entorno formativo. Estos materiales, a cargo de la Biblioteca (e

incluidos en su inventario) se asignan por acta a la Jefatura de Área,

dependencia que se ocupará de su distribución, custodia y optimización. Los

Jefes de Área operan como garantes de la accesibilidad del material a todos

aquellos que lo necesiten, tanto para la enseñanza como para el aprendizaje.

La distribución temporal para el uso de cada recurso (es decir, ¿cuánto tiempo

estará fuera de la biblioteca?) se ajustará a la planificación didáctica del área o

sector, siendo el máximo tiempo en que el recurso estará fuera de la biblioteca,

la duración del ciclo lectivo.

41


Los controles del estado de estas existencias por parte del personal de

biblioteca serán periódicos, debiendo como mínimo efectuarse dos

verificaciones al año. Estas instancias se incluyen en el Plan de Biblioteca, el

que será avalado por el Equipo de Conducción.

Corresponde al bibliotecario o bibliotecaria el organizar y coordinar, si están

previstas en el Proyecto Educativo, las bibliotecas áulicas y/o las bibliotecas

especializadas en aquellos sectores donde convenga disponer de bibliografía

de consulta en cualquier soporte y formato, por ejemplo en laboratorios

específicos, talleres de mantenimiento, aulas tecnológicas, etc.

4.- Distribución de materiales: Cuando se reciba de Nación o Provincia,

bibliografía para ser distribuida entre los alumnos, compete al/a bibliotecario/a

organizar y registrar la distribución de los ejemplares, en el marco de los

lineamientos y directivas recibidas. La Dirección de la escuela asumirá la

responsabilidad por el cumplimiento de las directivas que al respecto

acompañen el material.

ÁREA PEDAGÓGICA

Propósito: Acompañar el proyecto pedagógico institucional aportando

información y documentación pertinente y actualizada para la formación

docente y/o técnica, fortaleciendo la relación de estudiantes y docentes con el

conocimiento.

Es importante tener presente que los recursos disponibles en la biblioteca:

Actúan en los procesos de enseñanza y aprendizaje, con una función de

apoyo a las metodologías didácticas.

42


Son utilizados como elementos mediadores del proceso de enseñanza-

aprendizaje.

Hacen referencia a materiales (físicos o virtuales) como a herramientas

(tradicionales o digitales)

Favorecen o contribuyen a la participación activa de los estudiantes.

SERVICIOS

Sub-área

1.- Servicio de atención al usuario: Esta subárea comprende los servicios de

referencia, consulta y préstamo

Servicio de referencia al usuario en general: Orienta de manera personalizada

la búsqueda de información según la temática solicitada por el usuario.

Tarea:

Selecciona materiales y confecciona listados según temática

solicitada.

Servicio de referencia específica al docente: Orienta de manera personalizada

a los docentes sobre distintas fuentes de información que facilitan su tarea

pedagógica.

Tareas:

Selecciona materiales vinculados a las temáticas tratadas en los

distintos proyectos.

43


Procesa y divulga información sobre links/páginas web, y actividades

culturales relacionadas con las temáticas abordadas por los

proyectos áulicos.

Servicio de consulta y lectura en sala: Posibilita al usuario la consulta del fondo

documental en el ámbito de la biblioteca según las especificaciones de

funcionamiento que la institución establece en el área organizativa.

Tarea:

Brinda las condiciones ambientales necesarias y adecuadas para la

consulta del fondo documental.

Servicio de Préstamo: Los aspectos referidos a este servicio son los

establecidos por la institución y desarrollados en el área organizativa.

· Servicios de extensión

Subáreas

2- Formación de usuarios como lectores de textos académicos, técnicos y

literarios : Esta subárea promueve las capacidades vinculadas al acceso y

selección de información y documentación, existentes en distintos soportes,

privilegiando las temáticas de la formación docente y/o del campo técnico

disciplinar.

Tarea:

Implementa actividades propiciando el desarrollo de habilidades para el

uso de la biblioteca por parte de alumnos y docentes, considerando los

requerimientos de la formación docente y sus prácticas y la especificidad

44


de las orientaciones técnicas, promoviendo la construcción de saberes

en torno a:

Confeccionar monografías e informes de carácter científico citando con

corrección las fuentes consultadas.

Elaborar dossier de prensa sobre temas de actualidad.

Consultar y manejar catálogos colectivos, abstracts, información en

línea.

Seleccionar recursos de información especializada, consulta experta.

Usar eficazmente la información para resolver el problema específico

diferenciar fuentes primarias y secundarias.

Recuperar información procedente de una variedad de sistemas y en

varios formatos.

Diferenciar entre vocabulario, palabras claves y lenguaje controlado para

su uso eficaz en las estrategias de búsqueda.

Utilizar con sentido crítico los servicios de la web, (webquest, blogs, lista

de discusión).

3- Promoción de la lectura: Desde esta subárea, la biblioteca valoriza la

lectura como una actividad, recreativa, educativa y formativa. Las acciones /

proyectos que se planifican desde este espacio propician en los alumnos el

desarrollo del pensamiento crítico y reflexivo tendiente a la formación de

lectores que sean responsables de su propia preparación y que estén

capacitados para aprender durante toda su vida, adquiriendo el hábito de

aprender a aprender, y utilizándolo en su quehacer cotidiano con objetivos

profesionales y personales.

Tarea:

45


Implementa proyectos de promoción de lectura y de marketing

acordados, elaborados y llevados a cabo dentro y fuera de la biblioteca

en coordinación con otros actores institucionales (equipo directivo,

profesores).

El/la bibliotecario/a debe propiciar, favorecer y facilitar en los alumnos el

contacto con diversidad de textos, esto es, contribuir a que los lectores, de

acuerdo con el acervo de la biblioteca, utilicen distintos tipos de texto según

sus necesidades e intereses: manuales, enciclopedias, novelas, poemas,

revistas de divulgación científica, revistas técnicas especializadas, historietas,

bibliografía especializada, libros de textos, artículos periodísticos, etc.

4.- Promoción del trabajo intelectual: Esta subárea brinda a la biblioteca la

posibilidad de generar actividades que promuevan en los alumnos la

adquisición de competencias cognitivas para el trabajo intelectual fortaleciendo

el pensamiento crítico y reflexivo como soporte para el desarrollo del

pensamiento científico.

Tarea:

Acompaña proyectos de carácter científico, colaborando con los

docentes de las distintas carreras.

5- Articulación bibliotecaria: Establece relaciones con otras bibliotecas

escolares con la finalidad de optimizar sus funciones pedagógicas.

Tarea:

Participa en el desarrollo de proyectos interbibliotecarios.

El uso de las herramientas tecnológicas disponibles actualmente facilitan el

acceso a los recursos y posibilidades locales, regionales, nacionales y 46


mundiales para que los alumnos tengan contacto con ideas, experiencias y

opiniones varias; para organizar actividades que estimulen la concientización y

la sensibilización en el plano cultural, ambiental, económico, laboral y social;

trabajar con el alumnado, el profesorado, el personal no docente y las familias

en la realización del proyecto educativo que sustenta el servicio escolar;

proclamar la idea de que la libertad intelectual y el acceso a la información son

fundamentales para ejercer la ciudadanía y participar en una democracia con

eficiencia y responsabilidad; potenciar y diversificar la investigación y difundir

planes vinculados con el desarrollo local o regional; fomentar la lectura y

promover los recursos y servicios de la biblioteca escolar dentro y fuera del

conjunto de la comunidad escolar.

Por tal motivo, la biblioteca no solo debe articular con otras bibliotecas sino

también con organizaciones públicas y/o privadas que coadyuven a los

objetivos pedagógicos que se persiguen.

6.- Promoción de la biblioteca digital: Implementar, coordinar y administrar la

biblioteca digital de la escuela.

Asesora y supervisa el uso de la Biblioteca Digital por los alumnos y

docentes.

Son recursos digitales, que progresivamente ganan su lugar en las bibliotecas

escolares, los siguientes:

Obras de referencia. Enciclopedias y diccionarios en línea. Vademécum

y manuales de datos. Atlas y mapas.

Colecciones digitales. Objetos digitales: obras digitalizadas a texto

completo (libros y artículos), audiovisuales, imágenes, recursos sonoros.

Material específico técnico: catálogos comerciales, hojas de

características, etc.

47


Directorio de recursos web. Sedes web y portales especializados

clasificados temáticamente. Programas para cálculo y dimension

amiento especializado.

Contenidos educativos digitales. Materiales didácticos web y objetos

digitales de aprendizaje. Software educativo.

Catálogos de biblioteca y base de datos. Catálogo de la biblioteca

escolar y de la biblioteca pública, base de datos de información

educativa y literatura juvenil.

Publicaciones periódicas. Revistas y periódicos digitales. Publicaciones

docentes (apuntes, guías, etc.).

Herramientas digitales: Traductores, correctores ortográficos, alertas,

mapas, buscadores, simuladores, graficadores, etc.

ACTIVIDAD TÉCNICO-PEDAGÓGICA DEL/A BIBLIOTECARIO/A:

Promover las acciones para fomentar los hábitos de lectura y estudio por

parte de los alumnos, Guiar y asesorar a los alumnos en la consulta

bibliográfica. Concretar espacios de lectura en la Institución Educativa.

48

SERVICIOS DE LA

BIBLIOTECA

1) Préstamo

2) Referencia

3) Extensión bibliotecaria

a domicilioen salaal aula y espacios didáctico-productivosinterbibliotecario

Extensión de los serviciosExtensión cultural


Proporcionar el material bibliográfico y de apoyo a solicitud de los

docentes y/o alumnos, dotando el material adecuado para atender sus

requerimientos Promover el movimiento y aprovechamiento de recursos

didácticos en la comunidad escolar.

Difundir en la comunidad docente las existencias de bibliografía y el

material de apoyo didáctico disponible en el sector a fin de orientar y

facilitar la tarea del docente en todas las disciplinas.

Organizar e incorporar a la Biblioteca el material que posea el

establecimiento, correspondiente a mapoteca, filmoteca (filmes, videos,

CD’s, DVD’s, etc.), museo escolar, archivo de revistas y periódicos,

recursos audiovisuales (láminas, filminas, casetes, discos, diapositivas,

desarrollos informáticos interactivos o no, etc.), apuntes y guías

elaborados por personal de la escuela, colecciones musicales,

muestrarios, maquetas y todo material de apoyo a la tarea docente y al

aprendizaje de los alumnos; facilitándolos toda vez que sea solicitado,

cuyo manejo se asigne al sector en el Proyecto Educativo.

Desarrollar estrategias que contribuyan a la mayor autonomía de los/as

alumnos/as

en el acceso y el manejo de la información en cualquier soporte, formato

o medio; teniendo en cuenta las formas de comunicación presentes en

su comunidad y otras.

Hacerse cargo de las acciones acordadas en el marco del Plan de

Contingencia Pedagógica que le sean asignadas, articulando las mismas

con la labor docente y facilitando el material que sea requerido.

Prestar especial colaboración a todas aquellas actividades curriculares y

extracurriculares de la escuela y que demandan una fuerte participación

49


de la biblioteca como fuente de información (seminarios, tutorías,

proyectos, desarrollos monográficos, concursos, olimpiadas, etc.).

Colaborar con todos aquellos proyectos que se desarrollen en el ámbito

escolar y que involucren la participación activa de la biblioteca con

diferentes niveles de responsabilidad: periódico y/o revista escolar,

talleres literarios y/o de expresión, talleres y encuentros de arte, radio

escolar, atención de alumnos en horas libres, olimpiadas, feria de

ciencias, exposiciones didácticas, planes de terminalidad de alumnos,

proyectos de recuperación de aprendizajes, atención de alumnos en

riesgo pedagógico, etc.

Observación: Conviene hacer alguna referencia en relación con los libros de

texto. El libro de texto escolar suele ser usado para favorecer, apoyar,

complementar, sostener procesos de enseñanza y de aprendizaje. Según las

concepciones explícitas o implícitas referidas a qué es enseñar y qué es

aprender, aparecerán distintas posibilidades de utilización de los libros de texto.

Así, si consideramos que enseñar es transmitir información, un buen texto

escolar será aquel que pueda brindar la mayor cantidad de información para

que el alumno asimile. Pero si consideramos al alumno como constructor de los

aprendizajes, ¿qué libro elegir? E incluso, ¿conviene elegir libro?

Toda decisión con respecto a la adopción de un material curricular tiene un

efecto didáctico: todo texto supone una concepción de alumno como sujeto de aprendizaje y una concepción de enseñanza que el texto ofrece

en su materialidad. Así como en las prácticas de enseñanza y evaluación

pueden rastrearse distintas concepciones sobre el aprendizaje, también

podemos plantear que las distintas producciones editoriales no siempre coinciden en cuanto a cómo aprenden los sujetos, qué papel juegan los

50


conocimientos con referencia a los aprendizajes, cómo influyen los contextos sociales y culturales, que aspectos de un mismo contenido se destaca o que alcance y nivel de profundización se pone en relevancia, qué incidencia tienen quienes enseñan, etc.

Por lo expuesto, resulta conveniente que la selección de textos a incorporar en

la Biblioteca tenga presente la pertinencia didáctica del texto, es decir que

necesita acomodarse a las siguientes consideraciones:

Con respecto a los alumnos, el texto debe:

ayudar a ver y comprender la realidad;

ayudar a investigar y reflexionar;

ayudar a expresar la realidad y exponer;

ayudar a construir la identidad dentro del contexto social;

ofrecerse como un medio alternativo de aprendizaje;

suscitar el manejo de otras fuentes de información.

Con respecto a los docentes, el libro de texto:

debe ser un apoyo y no un sustituto de su labor pedagógica;

debe ser, en ocasiones, un instrumento para aprender dentro del

contexto escolar;

debe tener un enfoque coherente con la concepción de educación que

se maneje en la política pedagógica vigente y en el proyecto curricular.

Con respecto al proyecto curricular:

51


Debe satisfacer las demandas del currículum vigente o de una parte del

mismo.

Debe atender a diferentes aspectos del Proyecto Curricular que la

institución lleva adelante

Debe ser consensuado, en lo posible, por el equipo docente en el marco

del Departamento de Integración Curricular

AREA COMUNITARIA

Propósito: Planificar y fortalecer acciones tendientes a iniciar, mantener y

optimizar las relaciones y el trabajo con otras instituciones del ámbito

educativo, cultural y productivo del ámbito local/regional.

El rol del bibliotecario frente a la comunidad es, fundamentalmente, constituirse

en agente cultural, a cargo de desarrollar actividades de extensión bibliotecaria.

Por ejemplo, presentaciones y ferias del libro; charlas y conferencias sobre

temáticas emergentes; invitaciones a especialistas en tareas de interés para la

comunidad; exposiciones y muestras; cine debate, etcétera.

Corresponde al bibliotecario/a:

Ejecutar las acciones necesarias para dar cumplimiento a las

prescripciones de naturaleza socioeducativa y comunitaria

reglamentarias y del Proyecto Educativo, propiciando la apertura de la

biblioteca a toda la comunidad y la integración de la misma al trabajo en

redes con otras bibliotecas escolares, particularmente con aquellas del

mismo nivel y modalidad.

52


Prever las acciones necesarias para la articulación interinstitucional con

otros establecimientos, para su utilización por los alumnos de los

mismos. Establecer relaciones de cooperación con otros tipos de

bibliotecas y asociarse/integrarse en redes virtuales de bibliotecas.

Subáreas

1- Trabajo en Red: El desarrollo de actividades desde esta subárea genera

acciones cooperativas que enriquecen los servicios que las bibliotecas brindan

a los jóvenes y adultos de la comunidad.

Tarea

Realiza préstamos inter-bibliotecarios con diversos centros del ámbito

educativo, cultural y productivo del ámbito local/regional.

Promociona la lectura y la formación de usuarios acorde a la

especificidad de cada biblioteca.

Cada biblioteca escolar es una interlocutora esencial en las redes locales,

regionales y nacionales de bibliotecas e información.

2- Extensión cultural: La biblioteca planifica actividades culturales, vinculadas a

los intereses de la comunidad.

Tarea

Difunde materiales gráficos y multimediales (afiches, boletines, páginas

web, guías de uso, blogs), con información sobre actividades realizadas

por instituciones cercanas a la escuela (bibliotecas populares y centros

culturales).

53


Organización de jornadas, exposiciones, debates, conferencias, charlas,

audiciones musicales, teatrales, proyecciones de videos.

AREA ORGANIZATIVA

La definición de esta área responde a las normativas que cada institución se da

para el funcionamiento de la biblioteca escolar, en el marco de la dinámica y

contexto institucional del que forma parte. Las sub-áreas referidas al manual de

procedimientos, ambiente y estadísticas e informes constituyen este espacio de

la biblioteca.

Subáreas:

1- Manual de procedimientos:

Es una guía para el buen funcionamiento de la biblioteca, en el que se

especifican cada uno de los procesos que se llevan a cabo para la organización

de la biblioteca y los servicios. Refleja la organización de la biblioteca como

institución y las políticas que se utilizan para el desarrollo de las distintas áreas

y tareas. El manual de procedimientos es un instrumento dinámico y flexible

pues debe reflejar los cambios que se producen. Son componentes del manual

de procedimientos:

Personal de la Biblioteca: Establece:

a) El registro del personal de la biblioteca, nivel de formación.

b) La distribución horaria de las tareas que realiza.

c) Personal de reemplazo, para el caso de contingencia.

Procesos Técnicos: Establece:54


a) Los procesos que se llevan a cabo para la organización de la

documentación.

Fondo Documental: Establece:

a) La caracterización de la colección.

Reglamento de uso de la biblioteca: Establece:

a) Los requisitos para ser usuario/socio de la biblioteca.

b) Los tipos de usuarios: internos y externos.

c) Los servicios que ofrece la biblioteca.

d) Los horarios de atención y de uso de Internet.

e) Las pautas de comportamiento en el ámbito de la biblioteca.

Reglamento de consulta y préstamos: Contempla:

a) Los tipos de préstamo (en sala, en el aula, a domicilio) según tipo de

usuario.

b) Las condiciones para acceder al préstamo de los recursos de la

biblioteca.

c) La aplicación de instrumentos que garantizan la devolución del

material (constancia de libre deuda).

d) El régimen de sanciones, derechos y obligaciones de los

usuarios/asociados.

Equipamiento y soporte técnico : Incluye:

a) El registro de todo el mobiliario que tiene la biblioteca, indicando su

procedencia.

b) El registro y detalle de los soportes tecnológicos indicando sus

características y procedencia.

55


Mantenimiento y soporte técnico: Incluye:

a) El diseño de planilla que registre las visitas o la asistencia de

técnicos, indicando la periodicidad.

2- Ambiente:

Iluminación: La luz es factor clave que cambia totalmente el aspecto y el

confort de la biblioteca. La iluminación debe ser prevista en función de las

actividades que se realizan en cada espacio.

El ideal es que la biblioteca cuente con luz natural, de lo contrario la luz

artificial para utilidad del lector debe enfocar el campo de trabajo y deben

resguardarse de ella a los documentos para evitar su deterioro.

Señalización: la señalización refuerza la identidad de la biblioteca ya que

facilita la orientación de los usuarios/asociados, la ubicación de los textos,

los servicios que se brindan, los horarios.

La biblioteca utiliza tres tipos de señales:

Señales de ubicación y orientación.

Señales normativas (donde se informa sobre horario de atención,

requisitos para ser socios, normas).

Señales de contenido. Facilitan el encuentro con la

documentación ya que informan sobre las colecciones y su

organización en las estanterías.

Conservación y preservación de los materiales: Son los procedimientos y

técnicas que se utilizan para la conservación y preservación del material

librario y no librario, indicando periodicidad y elementos utilizados.

Seguridad la biblioteca: Se contemplan las medidas básicas de seguridad

(matafuego, instalaciones eléctricas seguras, salida de emergencia), y se

registra su uso.56


Higiene de la biblioteca. Se describe el procedimiento y frecuencia de

limpieza del espacio físico de la biblioteca.

3.- Secciones:

La biblioteca, en la escuela secundaria técnica, incorporará las siguientes

secciones:

Se dispondrá de una sección por cada especialidad técnica que cuente

la escuela, pudiendo éstas hallarse centralizadas y/o descentralizadas

en los diferentes entornos formativos.

La biblioteca tendrá una sección especial destinada a las publicaciones

oficiales que son remitidas sin cargo a las escuelas. El bibliotecario/a

debe ficharla, catalogarla y difundirla a efectos de que el personal

docente pueda acceder a ella y utilizarla eficazmente.

Se organizará un espacio en la biblioteca destinado a la bibliografía

pedagógico-didáctica de apoyo y fundamentación a la actividad docente.

Corresponde al bibliotecario implementar, coordinar y administrar la

biblioteca digital de la escuela. Asesorar y supervisar el uso de la misma

por los alumnos.

Contará con una sección para la consulta de bibliografía digital, dentro

de la Biblioteca.

Organizar servicios de referencia y de extensión bibliotecaria en función

de las necesidades de usuarios y de la comunidad.

Se organizará una sección con copia de los materiales didácticos

(apuntes, guías, etc.) preparados por los docentes, el que servirá luego

como base para el museo didáctico de la institución.

57


3- Estadística e informes:

Esta subárea lleva el registro estadístico de las actividades realizadas por la

biblioteca desde todas sus áreas, controla y sistematiza los movimientos de los

materiales y documentos. A su vez, desde este espacio se informa a la

comunidad educativa los resultados obtenidos luego de la puesta en marcha de

los diferentes proyectos.

Corresponde al Bibliotecario realizar los estudios estadísticos propios del área,

particularmente llevará la estadística sobre el número y clase de libros

consultados y de los lectores.

El análisis de las estadísticas permite localizar las limitaciones y restricciones

de funcionamiento a fin de realizar las correcciones pertinentes de lo actuado,

en pos de asegurar la eficacia y eficiencia del servicio bibliotecario.

Teniendo en cuenta esto, aquí se explicitarán los tipos de registro que utiliza la

biblioteca como así también la periodicidad de los informes realizados.

Para la elección de los indicadores apropiados se podrá tener en cuenta:

Cantidad de préstamos al aula.

Cantidad de préstamos a domicilio.

Cantidad de préstamos en sala.

Cantidad de préstamos interbibliotecarios.

Índice de satisfacción del usuario con los materiales.

Índice de satisfacción del usuario con la atención recibida.

Índice de tipos de usuarios.

Razones de no uso de la biblioteca.

Libros más consultados por materia/carrera.

58TAREAS DE

ORGANIZACIÓN Y ADMINISTRACIÓN

a) las que complementan procesos y servicios

b) las exclusivas y específicamente administrativas.


4.- Registros y archivos:

Documentación de biblioteca: Según Resolución Nº 22/85 – Guía de la Labor

Administrativa -.

N°Estado administrativo de la

bibliotecaTiempo Responsable Llevado por:

1 Inventario PermanenteDirector /

VicedirectorBibliotecario

2Catálogo por autor y/o coautor

y/o ilustradorPermanente

Director /


3 Catálogo por títulos PermanenteDirector /


4 Catálogo por materia PermanenteDirector /


5 Catálogo de libros PermanenteDirector /

Vicedirector Bibliotecario

6 Ficha principal PermanenteDirector /


7 Fichero de libros PermanenteDirector /


8 Fichero de socios PermanenteDirector /


9 Tablas de C.D.U. PermanenteDirector /


10 Tabla de encabezamiento de Permanente Director / Bibliotecario

59


materias Vicedirector

11Ficheros de

multimedios

Hemeroteca (revistas, diarios,

etc.)

PermanenteDirector /


Diapoteca /

filminas /

láminas

Mapoteca

Planoteca

Videoteca /

filmoteca

Biblioteca

digital o virtual

Otros

EL MUSEO ESCOLAR:

El museo escolar o gabinete tecnológico está a cargo del/a Bibliotecario/a. Su

organización se contempla en el Proyecto Educativo de la escuela como una

extensión de la misma, puesto que su naturaleza debe ser prioritariamente

pedagógico-didáctica.. Se constituye con aquellos elementos técnico-

pedagógicos que exige la enseñanza del campo de la FTE correspondiente a

cada una de las especialidades vigentes en el establecimiento de educación

técnico-profesional. También pueden incorporarse objetos tecnológicos que

coadyuven al logro de los objetivos propios del taller en el ciclo básico.

60


Asimismo, pueden agregarse en el Museo, secciones que reflejen aspectos

culminantes de la evolución, material con valor histórico o científico-

tecnológico, material relacionado con la actividad educacional desarrollada por

la escuela, aspectos vinculados con la zona o región en donde la escuela

desarrolla su actividad, que le sean atingentes. Estas piezas pedagógicas se

integran formando parte de colecciones específicas.

El Museo puede concentrar variedad de contenidos a partir del tipo de objetos

que definan su centro de interés y servir de apoyo didáctico para el desarrollo

de temas en distintas áreas curriculares.

Los elementos que lo constituyen son didácticos y racionalmente expuestos

con leyendas explicativas, pudiendo ser originales, facsímiles o reproducciones

(maquetas, gráficos, fotografías, etc.) y, seleccionados de manera tal que el

museo alcance a reunir características que lo hagan de verdadera utilidad para

la formación integral de los/as alumnos/as y muestre con criterios prácticos y

actualizados, los aspectos propios de las especialidades que se desarrollan en

la escuela.

Cuando por razones de orden técnico-pedagógicas se estime conveniente, la

dirección de la Escuela podrá, previa autorización del Inspector Areal, permutar

elementos del Museo por los de otros establecimientos de enseñanza, públicos

o privados.

Algunas secciones del museo pueden localizarse en estantes y/o vitrinas

expositoras localizadas en sectores accesibles al público en general.

También pueden asignarse, según el Proyecto Institucional implementado, en

secciones del taller o en los diversos laboratorios de los que dispone la

escuela. En este último caso el/la bibliotecario/a llevará las fichas de asignación 61


del cargo a las personas que tendrán la obligación de cuidado (EMATP,

profesores de taller, sub-jefe de OT, etc.) detallando el listado de los elementos

que pasarán a formar parte del haber en el sector o sección.

Los elementos que pertenecen al Museo no pueden ser retirados del

establecimiento, pudiendo en cambio, facilitarse en préstamo para su

exhibición o estudio, fuera de la misma, solo en casos excepcionales y bajo la

responsabilidad del Equipo de Conducción del establecimiento.

Los objetos que integran el museo escolar deben registrarse en un libro

inventario habilitado a tal fin bajo un número y en el orden en que ingresen,

consignando la fecha de incorporación, las características generales, su

procedencia y costo, su baja y causa, sin perjuicio de efectuar las respectivas

anotaciones en el inventario general de la escuela.

La entrada y salida de los elementos del Museo se comunicará al Equipo de

Conducción a través de la Vicedirección, labrándose el acta correspondiente.

El/la Bibliotecario/a organizará y llevará un fichero alfabético y otro

sistemático/funcional, cuyas fichas contendrán las características, procedencia,

lugar en donde se halla expuesto, estado del material y, si corresponde, el

personal con cargo, de todos los objetos físicos o virtuales que constituyen el

Museo. Se llevará una ficha individual por cada objeto de la colección del

Museo, en la que se registra toda la información referente al objeto. El/la

Bibliotecario/a consultará con especialistas dentro o fuera de la institución, en

caso de ser necesario, para que la ficha refleje fidedignamente el valor del

objeto en cuestión. Es evidente que el desarrollo de este fichero llevará tiempo

y dedicación, por lo que debe incluirse en el Plan de la Biblioteca.

62


Todos los objetos deben ir enumerados y marcados en alguna parte que no

sea visible.

Si la Escuela no tiene una colección, el bibliotecario tiene la obligación de

motivar a los estudiantes a iniciarla. A partir de un objeto antiguo, un elemento

histórico, una escultura, un mura, etc., surgen ideas de concentrar elementos

coleccionables que aporten conocimiento a los miembros de la comunidad

educativa. Promover el interés a que los estudiantes donen a la Escuela

objetos que sirvan para ampliar la colección.

La atención a los diversos trabajos correspondientes al Museo, previa orden de

trabajo, estará a cargo de los EMATP y/o del Subjefe de Área a cargo de la

Oficina Técnica que se designen al efecto, quienes las desempeñarán como

parte integrante de las tareas y actividades que les correspondan, en el marco

de los acuerdos construidos dentro del Proyecto Educativo en el que se

encuadra la actividad del establecimiento de Educación Técnico-Profesional. La

Jefatura de Área será la encargada de emitir las Órdenes de Trabajo

pertinentes y, puesto que la Biblioteca está a cargo directamente de la

Vicedirección, le compete al Vicedirector/a el acordar los criterios generales

para su organización.

A través del Museo Escolar se motiva la conservación y protección del

patrimonio cultural, tecnológico, histórico, cultural, institucional, científico y

artístico desde el ámbito escolar y se refuerza la identidad comunitaria de la

Institución

Obviamente, el Museo Escolar al igual que la Biblioteca, puede tener una

dimensión digital o virtual que estará a cargo de la Biblioteca o del EMATP del

63


área informática, según definiciones tomadas en el marco del Proyecto

Institucional.

Un último aspecto a considerar en el Museo se refiere a organizar una

colección de objetos vinculados a cuestiones referidas con el nombre de la

Escuela: personaje histórico, país, etc.

En el marco de las actividades previstas en relación con el museo, el/la

bibliotecario/a puede involucrarse en el armado del guión museográfico que

acompaña la colección.

EL ARCHIVO HISTÓRICO DE LA INSTITUCIÓN:

Corresponde al/a Bibliotecario/a, bajo la supervisión de la Vicedirección,

organizar y llevar el archivo histórico de la institución. Para ello llevará el

archivo de los diferentes elementos que lo conforman: archivo de documentos

escritos, artículos periodísticos, distinciones, menciones, premios, álbunes

fotográficos, copia de videos, el libro de actos escolares, copia de los posibles

convenios, contratos y/o acuerdos con otras organizaciones públicas y/o

privadas, microfilmes, archivo fónico, etc. También se integrarán en el archivo

las menciones a alumnos y docentes, el registro de actuaciones destacadas de

los mismos, las fotos de cada promoción de egresados, su participación en

eventos diversos y todo material que se estime valioso para la institución y la

comunidad escolar.

Los objetivos de este archivo permiten que el mismo preste los siguientes

servicios:

Búsqueda de la información referida a la institución

64


Reproducción de fuentes, obtención de antecedentes y referencias,

fundamentaciones

Material de apoyo para visitas guiadas para las familias, alumnos

ingresantes, autoridades, etc.

Muestras itinerantes en otras instituciones educativas y similares

Archivo de documentación valiosa para la historia institucional con más

de diez años de antigüedad.

Sala de consulta para alumnos de institutos superiores de formación

docente y similares

Museo escolar con fotos, maquetas, láminas, planos, etc. de los

diferentes trabajos y proyectos que los alumnos realizaron en épocas

anteriores.

Implementación del laboratorio de reproducción fotográfica analógica y

digital

Lectora de Microfilm de 35mm

Asesoramiento gratuito en conservación de documentos

BIBLIOTECAS POPULARES: Ley Nacional 23.351/1.986:

Ley vigente para Bibliotecas establecidas o que estén por establecerse; por

asociaciones particulares en el territorio de la Nación y que presten servicios de

carácter público, las que podrán acogerse a los beneficios de la misma.

Para acceder a estos beneficios deben ser reconocidas como bibliotecas

populares y adjuntar los estatutos a las normas que determine la respectiva

reglamentación.

65


Las Bibliotecas Populares se constituyen como instituciones activas con

amplitud y pluralismo ideológico y tienen como misión canalizar los esfuerzos

de la comunidad tendientes a garantizar el ejercicio del derecho a la

información, fomentar la lectura y demás técnicas aptas para la investigación,

la consulta y la recreación y promover la creación y difusión de la cultura y la

educación permanente del pueblo.

Las Bibliotecas se clasifican por categorías, atendiendo a las siguientes pautas:

a) La cantidad de títulos de obras.

b) El movimiento diario de los mismos;

c) La cantidad de personal capacitado en funciones.

d) La calidad de las instalaciones y equipamiento técnico;

e) El método de procesamiento de materiales;

f) Las actividades culturales que desarrollen.

Las Bibliotecas Populares, simultáneamente a los trámites de su

reconocimiento pueden depositar sus fondos en efectivo, los que serán

duplicados por la Nación y afectados para la compra de los bienes necesarios

para su instalación y o funcionamiento todo ello con ajuste a la respectiva

reglamentación

Las Bibliotecas Populares reconocidas gozan, sin perjuicio de otros que

obtengan o que les sean otorgados, de los siguientes beneficios:

a) Franquicia postal;

b) Liberación de todo gravamen establecido en la ley de impuesto de

sellos 66


c) Tarifas reducidas en los servicios prestados por empresas del

Estado; que resulten imprescindibles para el mantenimiento de las

mismas:

d) Liberación de todo gravamen fiscal nacional que recaiga sobre la

propiedad privada;

e) Subvención para el mantenimiento de las instalaciones, aumento del

caudal bibliográfico remuneración y perfeccionamiento del personal

bibliotecario-profesional, auxiliar y de maestranza- modernización del

equipamiento y actualización del procesamiento técnico de materiales;

f) Concesión de préstamos de fomento;

g) Contratación de Seguros de la Caja Nacional de Ahorro y Seguro, sin

costo.

A los efectos de la asignación de los beneficios establecidos en e), f) y g)

se toma en consideración la categorización del artículo 3ro de la Ley y se

tiene en cuenta:

a) La necesidad social de los servicios en la zona de influencia de la

Biblioteca Popular:

b) Las necesidades específicas para el crecimiento de las bibliotecas

más carenciadas:

c) El mayor esfuerzo acreditado en la prestación de sus servicios.

La ley crea en el ámbito del Ministerio de Educación de la Nación la Comisión

Nacional protectora de Bibliotecas Populares. Esta comisión tiene por objeto

orientar y ejecutar la política gubernamental para la promoción de la lectura

popular y el desarrollo de las Bibliotecas Populares. Para ello tiene a su

67


cargo la administración y distribución de los recursos asignados por el

Presupuesto General de Gastos de la Nación y aquellos que integren el

Fondo Especial para Bibliotecas Populares.

DIRECCION PROVINCIAL DE EDUCACIÓN TÉCNICO-PROFESIONALDIRECCIÖN DE EDUCACIÓN TÉCNICA

68

Education

La biblioteca en las eest