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El Misterio Pascual:
Pasi n, muerte y resurrecci n de Jesucristoó ó
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TEXTO: Redenci n significa rescateó
Derrotar el mal: esto es la Redenci n. Ella se realiza en el sacrificio de Cristo, gracias al cual el óhombre rescata la deuda del pecado y es reconciliado con Dios.
El Hijo de Dios se ha hecho hombre, asumiendo un cuerpo y un alma en el seno de la Virgen,
precisamente por esto: para hacer de s el perfecto sacrificio redentor. í La religi n de la Encarnaci n es la religi n de la Redenci n del mundo por el sacrificio de ó ó ó ó
Cristo, que comprende la victoria sobre el mal, sobre el pecado y sobre la misma muerte.
Cristo, aceptando la muerte en la cruz, manifiesta y da la vida al mismo tiempo porque
resucita, no teniendo ya la muerte ning n poder sobre El.ú
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La Redenci nóUna obra de la Trinidad
Santsima que se atribuye al íHijo.
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Corredimir con Cristo
La Redenci n es universal pero debe aplicarse a cada uno.óNuestro Se or es el nico mediador entre Dios y los hombres, 1Tm 2,5.ñ úInvitaci n a tomar la Cruz y seguirle.ó“Para que sigamos sus huellas…” 1P 2, 21.
San Pablo escribe:
“Con Cristo estoy crucificado... Cristo vive en mi...” Ga 2, 20; “Completo en mi
carne lo que falta a los sufrimientos de Cristo en beneficio de su cuerpo, que es la
Iglesia” Col 1,24
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El sentido del dolor: corredimir con Cristo
Las penalidades de la vida nos merecen la vida eterna:
El dolor, la enfermedad: nos unen a Cristo, e identifican con …l.
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El Sacrificio del Calvario
Lo que confiere todo el valor
redentor al Sacrificio de Cristo es su
“amor hasta el extremo” (Jn 13,1).
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Jesucristo en la Cruz
En la Cruz, Cristo nos da ejemplo de todas las virtudes:
Caridad: Da la vida por sus amigos Jn 15,13.
Obediencia: hasta la muerte y muerte de Cruz… Fp 2,8
Humildad, mansedumbre y paciencia: como manso Cordero Jr 11, 19
Desprendimiento de todo lo terreno: el expolio.
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Mara y la pasi ní ó Nadie m s ntimamente unida al misterio del á í
sufrimiento redentor que Mara. í Lc 2, 35: y a tu misma alma la traspasar una «¡ á
espada! .»
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Jesucristo fue
sepultado
Dios dispuso que sufriera el estado de muerte, es
decir, la separaci n entre el alma y el cuerpo. ó Tanto su alma como su cuerpo permanecieron
unidos a la Persona divina.
El cuerpo no sufri corrupci n. ó ó
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Resucit al tercer daó í Su alma volvi a unirse al cuerpo.ó Esta es verdad de fe.
“Si Cristo no resucit , es vana nuestra fe” (ó 1 Co 15, 17).
Cristo mismo lo haba anunciado: í“Tomando consigo a los Doce, les dijo: Mirad, subimos a Jerusaln, y se cumplirn todas las « é ácosas que han sido escritas por medio de los Profetas acerca del Hijo del hombre: ser áentregado a los gentiles y se burlarn de l, ser insultado y escupido, y, despu s de azotarlo, á é á élo matarn, y al tercer da resucitar ”. (Lc 18, 31-33)á í á»
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La Resurrecci nóLc 24, 5-6: “les dijeron: Por qu busc is entre los «¿ é ámuertos al que est vivo? No est aqu, sino que ha á á íresucitado; recordad c mo os habl cuando an estaba ó ó úen Galilea.»
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Un acontecimiento trascendente
Es un acontecimiento histrico demostrable por la se al del: ó ñsepulcro vaco y ípor la realidad de los encuentros de los ap stoles con Cristo resucitado.ó
Sin embargo no por ello la Resurrecci n es ajena al centro del ó Misterio
de la fe en aquello que trasciende y sobrepasa a la historia.
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Caractersticas de la resurrecci ní ó
Resucita por su propio poder; y para no morir jam s.áTodos resucitaremos por …l y en …l.
Confirma la verdad de su Divinidad.
Confirma la esperanza de nuestra propia resurrecci n: ó“primog nito de entre los muertos” (é Col 1,18).
El sacramento de la Penitencia nos hace resucitar a la vida sobrenatural.
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“Subi a los Cielos y est sentado a la diestra de Dios Padre ó áTodopoderoso”
La Ascensi n completa la glorificaci n de la Humanidad Santsima de Cristo, ó ó íHch 1, 9-10.
“Y dicho esto, fue levantado en presencia de ellos, y una nube le ocult a sus ojos. óEstando ellos mirando fijamente al cielo mientras se iba, se les aparecieron dos
hombres vestidos de blanco...”
Cristo est ahora en el Cielo como Abogado nuestro delante del Padre. á“En el cielo, Cristo ejerce permanentemente su sacerdocio” (CEC , 662; cfr. Hb
7,25).
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Jesucristo, Juez supremo
Juicio universal "que revelar lo secreto de los corazones" á CEC 682.
Es conveniente el Juicio Universal:
Para la gloria de Dios: que todos le tributen alabanza por su justicia y providencia.
Para Gloria de Jesucristo, injustamente condenado.
Para gloria de los santos: que recibirn el premio merecido por sus obras. Se restablecer la á ájusticia.
En el Juez: Justicia, Sabidura, Poder y Misericordiaí El juicio es una llamada a la conversi n, mientras an hay tiempo: ó ú CEC 1041.
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Juez supremo
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«[...] en el D ía de Cristo, porque no habré corri-do en vano ni en vano habré trabajado »Flp 2, 16
«He competido el noble combate,
he alcanzado la meta, he guardado
la fe. Por lo dem s, me est á áreservada la mere-cida corona que
el Se or, el Justo Juez, me ñentregar aquel da; y no s lo a m, á í ó ísino tambi n a todos los que han édeseado con amor su venida»2 Tm 4, 7-8.
