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Conviene no utilizar el recubrimiento completo en las
bocas con caries no controladas. La corona de
recubrimiento completo es una restauración que
reemplaza la estructura dentaria perdida, en cierta
manera, soporte estructural del diente. Pero no las
protege contra las causas biológicas de la caries.
INSTRUMENTAL
- Turbina
- Fresa de carburo # 171L
- Fresa de diamante cónica con el extremo redondeado
- Fresa de diamante tipo aguja corta
- Fresa de diamante tipo torpedo
- Fresa de carburo tipo torpedo
- Cera utily roja
La preparación para una corona de recubrimiento completo se
inicia con la reducción oclusal, creando un espacio de alrededor
de 1.5 mm en las cúspides funcionales y de 1.0 mm en las
cúspides no funcionales
Los surcos para determinar la profundidad del tallado se
realizan en la superficie oclusal para proporcionar una
referencia que permita saber fácilmente cuando la reducción
es suficiente.. Si la reducción se inicia sin marcas de
orientación, se perderá tiempo en repetidas comprobaciones
de un espacio adecuado
Para realizar los surcos sobre los
rebordes y los surcos principales de
la superficie oclusal se emplea una
fresa de diamante cónica con el
extremo redondeado. Si ya existe
cierto espacio con el diente
antagonista por mal posición o
fractura de diente a restaurar, no es
necesario que los surcos sean tan
profundos.
Se talla un bisel ancho sobre la cúspide funcional de nuevo
con la fresa de diamante cónica con el extremo
redondeado.
Los surcos para determinar la profundidad del tallado
también resultan útiles para obtener dicha reducción.
El no realizar este bisel, puede dar lugar a una erstauracion
delgada o a una morfología inadecuada.
Para comprobar el espacio oclusal, el paciente muerde una tira de 2.0
mm de grosor de cera utily roja entre la preparacion y el diente
antagonista. A continuación se vierte la cera a contra luz con el fin de
determinar la adecuación del espacio oclusal. Cualquier parte de la
preparacion que tenga un espacio oclusal insuficiente se detectará
rápidamente como una zona delgada de la cera.
Entonces hay que eliminar mas estructura dentaria de la zona
indicada y volver a hacer la comprobación
La reducción oclusal y el bisel de la cúspide funcional se pulen con
una fresa de carburo # 171L, bien sea en este instante o cuando se
utilice la fresa para tallar el surco de asentamiento. No deben
quedar ángulos ni rebordes afilados donde se unen planos o biseles.
Si los hay, deben de eliminarse con la fresa de carburo cónica de
fisuras.
Las paredes vestibular y lingual se reducen con una fresa de diamante tipo
torpedo. Sus lados producirán la reducción axial deseada, al tiempo que
su punta cónica formará una línea de acabado en chamfer.
Es necesaria la presencia de una línea de acabado definida y uniforme
que posibilite la fabricación de una restauración bien adaptada.
Los cortes proximales iniciales se realizan con una fresa de diamante tipo
aguja corta.
Se pasa el diamante delgado por la zona proximal con un movimiento
“Tipo sierra” oclusogingival o vestibulolingual, evitando los dientes
adyacentes.
Una vez obtenido el espacio suficiente para maniobrar, se
introduce la fresa de diamante tipo torpedo para aplanar las
paredes y crear, al mismo tiempo un chamfer como línea de
acabado gingival interproximal
Todas las superficies axiales se pulen con una fresa de carburo
torpedo de acabado.
hay que tener especial cuidado en redondear las esquinas desde las
superficies vestibular o lingual hacia las superficies proximales con el
fin de asegurar una línea de acabado pulida y continua.
El paso final en la preparación de recubrimiento completo consiste en
la realización de un surco de asentamiento.
Que impedirá la tendencia a la rotación durante el cementado y
ayudará a guiar la colocación de la restauración. Dicho surco se
construye con una fresa de carburo # 171L en la superficie axial mas
voluminosa.
Preparaciones para una
corona totalmente metálica
CORONAS METAL-CERÁMICA
Esta restauración consiste en una capa de cerámica
adherida a una cofia delgada de metal colado que se
adapta a la preparación del diente. Dicha restauración
combina la fuerza y el ajuste preciso de una corona de metal
colado con el efecto estético de una corona de metal
colado con el efecto estético de una corona de cerámica
Ya que es una combinación de metal y cerámica, no es
sorprendente que la preparación del diente sea, asimismo, una
combinación. Existe una reducción profunda de la superficie
vestibular que proporciona espacio para la cofia metálica y para
que la capa de cerámica pueda ser lo suficiente gruesa para
conseguir el efecto estético deseado.
En la superficie lingual y las zonas linguales de las
superficies proximales, la reducción es menor, similar a
la que se utiliza en una corona totalmente de metal.
Para conseguir un buen resultado estético, es esencial la adecuada
reducción. Si el espacio destinado para admitir el grosor del metal
cerámico es insuficiente pueden darse dos posibilidades:
1.- Que la restauración esté mal conformada, lo que afecta la estética
de la corona y la salud de la encía adyacente.
2.- el color y la traslucidez de la restauración no coincidan con los
dientes adyacentes naturales
CORONAS METAL-CERAMICAS ANTERIORES
ES necesaria una reducción uniforme de aproximadamente 1.2
mm sobre la superficie vestibular. Para conseguirla
adecuadamente sin invadir pulpa, conviene tallar la superficie
vestibular en dos planos.
Instrumental:
1.- Cuchillo de laboratorio con hoja del # 25.
2.- Silicona de masilla y acelerador.
3.- Turbina
4.- Fresa de diamante cónica con el extremo plano
5.- Fresa pequeña de diamante en forma de rueda.
6.- Fresa de diamante en forma de aguja larga.
7.- Fresa de diamante tipo torpedo
8.- Fresa de carburo tipo torpedo
9.- Fresa de carburo radial de fisuras H158-012
10.- Escopio biangulado RS-1
La realización de una guía antes la preparación permitirá
comprobar mas fácilmente la reducción producida por la
preparación. Si los contornos del diente existen son correctos, la guía
puede realizarse intraoralmente mientras se aguarda a que la
anestesia haga su efecto.
Se mezcla media cucharada de silicona de masilla con la
cantidad ade3cuada de acelerador y se amasa en la palma de
la mano hasta que haya desaparecido todo rastro del acelerador.
Haciendo uso del pulgar y del índice, se adapta entonces la
masilla sobre el diente a preparar.
Es preciso dejar que polimerice sobre el diente, proceso que
demorará durante unos minutos. La guía debe cubrir toda la
superficie vestibular y lingual del diente a restaurar, además
de las superficies correspondientes de un diente adyacente
como mínimo.
Despues, se retira la guía de los dientes. Con un cuchillo de laboratorio con
hoja #25. se corta a lo largo de los rebordes incisales, de las marcas de los
dientes con el fin de separar la guía en una mitad vestibular y otra lingual.
La otra mitad se deja aparte, mientras que la vestibular de la
guía se corta de medial a distal a través de las marcas de las
superficies vestibulares de los dientes para obtener una mitad
incisal y otra gingival.
La mitad gingival de la parte vestibular se coloca sobre los dientes para
asegurarse que se adapta correctamente a las superficies vestibulares.
Una vez retirada la guía vestibular debe, la guía lingual se
coloca en su posición y se comprueba su adaptación a los
rebordes incisales de los dientes.
Las guías vestibular y lingual se dejan a parte hasta que se haya terminado la
preparación. A continuación se posiciona la mitad gingival de la guía
vestibular y se comprueba que el espacio vestibular para la cofia metálica y
la porcelana es el adecuado.
Si la reducción no es apta, se retira la guía y se elimina una mayor
cantidad de estructura dentaria. Para comprobar el espacio incisal, se
coloca la guía lingual y se evalúa la distancia entre el reborde incisal del
diente preparado y el reborde incisal de la marca del diente en la guía.
El ultimo paso en la preparación de una corona metal-cerámica
consiste en la colocación de los surcos para determinar la
profundidad del tallado en las superficies vestibular e incisal por
medio de una fresa de diamante cónica de extremo plano. La
profundidad de la reducción puede medirse teniendo como punto
de referencia la superficie externa no tallada de la estructura
dentaria remanente.
Si la reducción se lleva a cabo sin estos surcos, se perderá tiempo en
comprobaciones repetidas de la reducción con la guía.
Los surcos vestibulares deben tallarse en dos grupos: uno paralelo a
la mitad gingival de la superficie vestibular y otro paralelo a la mitad
incisal de la superficie vestibular.
Estos surcos deben tener una profundidad de 1.2 mm. Los
surcos incisales deben tallarse a través de todo el reborde
incisal y extenderse 2.0 mm hacia gingival.
La reducción incisal se hace mediante la fresa de diamante cónica de
extremo plano, de tal modo que quede paralela a la inclinación del
reborde incisal no preparado.
La reducción de la parte incisal de la superficie vestibular se realiza con la
misma fresa cónica con el extremo plano. Se talla toda la estructura dentaria
con la profundidad de los surcos de orientación.
Igualmente con la fresa de diamante cónica de extremo plano se reduce la
parte gingival de la superficie vestibular hasta alcanzar la profundidad de los
surcos.
Tal reducción se lleva a cabo alrededor de los angulos de la línea
vestibuloproximal hasta un punto de 1.0 mm lingual a los contactos
proximales.
La superficie lingual se reduce con una fresa pequeña de diamante tipo
rueda hasta obtener un mínimo de 0.7 mm de espacio con los dientes
antagonistas.
Estas partes de la superficie lingual que después se recubrirán con cerámica
deben tener un espacio de 1.0 mm
Se emplea una fresa tipo diamante de “Aguja larga” para completar el
acceso a través de las zonas proximales y minimizar las posibilidades de dañar
los dientes adyacentes.
En este punto del proceso, gran parte de la reducción axial en la región del
contacto proximal ya se habrá realizado con la fresa de diamante cónica de
extremo plano.
Componentes de una
preparación metal-cerámica
anterior.
Coronas de metal-cerámica
posteriores.
Instrumental:
1.- Cuchillo de laboratorio con hoja del # 25.
2.- Silicona de masilla y acelerador.
3.- Turbina
4.- Fresa de diamante cónica con el extremo plano
5.- Fresa de diamante en forma de aguja larga.
6.- Fresa de diamante tipo torpedo
7.- Fresa de carburo tipo torpedo
8.- Fresa de carburo radial de fisuras H158-012
9.- Escopio biangulado RS-1
Antes de iniciar la preparación, se adapta silicona de masilla a las
superficies vestibular, lingual y oclusal del diente a preparar, así
como de los adyacentes al mismo. Una vez que la silicona ha
polimerizado, puede formarse una guía medio sagital cortando la
silicona en dos partes a lo lago de la línea media vestubulingual del
diente a tallar
La masilla vuelve a colocarse sobre el diente para asegurar su
correcta adaptación. si la corona clínica del diente a restaurar
esta seriamente dañada, la guía se realizará apartar de un
encerado diagnostico.
Se traza una guía vestibular cortando a través de la silicona, a
lo largo de las cúspides vestibulares de los dientes.
La pieza vestibular se divide a través de un trazo, a medio
camino entre líneas cervicales de los dientes y las puntas de
las cúspides vestibulares. Se descarta la parte oclusal,
mientras que la gingival se usa como guía.
Con una fresa de diamante cónica con el extremo plano, se inicia la
reducción oclusal con los surcos para determinar la profundidad del
tallado, en aquellas zonas que van a recubrirse con cerámica la
reducción debe ser de 1.5 a 2.0 mm.
Esta reducción oclusal se completa eliminando las tiras de esmalte intacto
entre los surcos de orientación con la misma fresa. Esta debe tener ya la
forma de planos definidos que reproduzcan la morfología oclusal general, ya
la forma geométrica básica de la superficie oclusal
Se emplea una fresa de carburo 171-L para pulir los planos de la
reducción oclusal y eliminar cualquier irregularidad u hoyo que
pudiese interferir con el asentamiento completo de la
restauración acabada. Debe redondearse cualquier esquina o
borde afilado de la preparación que pudiera causar problemas
durante el vaciado de la impresión, el revestimiento, el colado, y
finalmente la colocación de la corona finalizada
La fresa de diamante cónica de extremo plano se alinea con el segmento oclusal
de la superficie vestibular. Después se cortan tres surcos verticales en la parte
oclusal de la superficie vestibular. Éstos poseen prácticamente todo el diámetro
del instrumento que desaparece hacia gingival.
Con la fresa de diamante cónica de extremo plano se elimina toda la
estructura dentaria que queda entre los surcos para determinar la
profundidad de tallado en el segmento oclusal de la superficie
vestibular.
La parte gingival de la superficie vestibular se reduce
entonces extendiéndola bien hacia la superficie proximal.
Si la reducción vestibular es menor de 1.2 mm para una
corona de metal base-cerámica o de 1.4mm para una corona
de metal noble-cerámica. La restauración quedará opaca o
sobre contorneada.
La reducción axial proximal se inicia con una fresa de diamante de aguja corta.
Su diámetro estrecho permite la disminución interproximal sin lesionar los
dientes adyacentes. El instrumento puede utilizarse ya con un movimiento hacia
arriba y hacia abajo sobre la parte vestibular de la estructura dentaria
interproximal, ya sobre la parte oclusal con un movimiento vestibulolingual
La superficie vestibular y las partes de las superficies proximales que
se recubrirán con cerámica se pulen con una fresa de carburo de
fisuras radial H158-012. En la extensión mas a lingual de la reducción
vestibular, lingual al contacto proximal, la transición de la reducción
vestibular mas profunda a la reducción axial relativamente más leve
a dar lugar a una pared vertical o “ala” de estructura dentaria. Las
alas no deben crear retenciones con las paredes axiales vestibular o
lingual de la preparación
La corona totalmente de cerámica difiere de otras restauraciones de recubrimiento cementadas al no realizarse un colado en oro o en otro metal. De todas las restauraciones dentales, es la que puede conseguir un mejor resultado estético. Pero resulta mas susceptible a la fractura.
Cuando se plantea la posibilidad de una corona totalmente de cerámica para una restauración, conviene sopesar la posición del diente en la arcada, los factores relacionados con la oclusión y los rasgos morfológicos del diente. Las coronas totalmente de cerámica están especialmente indicadas en incisivos. Si se usan en otros diente de advertirse al paciente la existencia de un mayor riesgo de fractura
Debe evitarse el empleo de estas coronas cuando los dientes antagonistas ocluyen en la quinta parte cervical de la superficie lingual, pues se produciría una tensión que podría derivar en una fractura en “media luna.
Instrumentos:
1.- turbina2.- Fresa de diamante cónica de extremo plano.3.- Fresa de diamante pequeña en forma de rueda.4.- Fresa de carburo de fisuras radial H158-012.5.- Cincel iangulado RS-1
Antes de llevar a cabo cualquier reducción, con una fresa de diamante cónica con el extremo se realizan surcos en las superficies vestibular e incisal plano para determinar la profundidad del tallado.
Sin ellos resulta imposible valorar con precisión la profundidad de la reducción realizada en la superficie vestibular.éstos tienen una profundidad de 1.2 a 1.4 mm. En la zona vestibular y de 2.0 mm en la parte incisal
Con el objetivo de conseguir un espacio adecuado para tener una buena estética sin invadir la pulpar, la superficie vestibular de una preparación totalmente de cerámica se realiza en dos planos. La reducción incisal se hace utilizando una fresa de diamante cónica con el extremo plano. De esta manera, en los dos pasos subsiguientes los instrumentos podrán llegar a la línea de acabado de la preparación. Se eliminan de 1.5 a 1.4 mm de estructura dentaria.
Se talla la estructura dentaria que quede entre los surcos de orientación sobre la parte incisal de la superficie vestibular.
La parte gingival de la superficie vestibular se reduce con la fresa de diamante cónica con extremo plano hasta alcanzar una profundidad de 1.2 a 1.4m. Esta reducción se extiende alrededor de los ángulos de líneas y vestibuloproximales , disminuyéndose en las zonas linguales de las superficies proximales
El hombro debe tener una anchura mínima de 1.0 mm. La reducción lingual se realiza mediante una fresa de diamante pequeña tipo rueda, intentando no reducir excesivamente la unión entre el cíngulo y la partes lingual.
Acortar excesivamente la pared lingual disminuirá la retención de la preparación
Con la fresa de diamante cónica de extremo plano se procede a la reducción de la superficie axial lingual.
La pared debe formar una escasa conicidad con la parte gingival de la pared vestibular. El hombro radial tiene como minimo 1.0 mm de anchi t debe consistir en una continuación suave de los hombros radiales vestibular y proximal.
Las coronas totalmente de cerámica realizadas sobre líneas de acabado en hombro son mas fuertes que las que se realizan sobre chamfer.Conviene pulir todas las paredes axiales con una fresa de fisuras radial H158-012,
