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La persona es la variable más importante yrentable de la profesión y de la empresa. Laautoestima es una condición esencial paraser persona sana. El capital humano justa-mente valorado y utilizado es el primer fac-tor de éxito en la empresa. Para ello los suje-tos deben tener autoestima auténtica. Sesugieren ideas y acciones para lograrla.

Qué es la autoestima

Palabra de moda: tener baja autoestima, te-ner alta autoestima. La autoestima es esencial:

• Para el normal funcionamiento personal.• Es el final del camino recorrido en el desarro-llo evolutivo de la personalidad. Es un con-cepto dinámico.• La autoestima par te de la valoración deuno mismo en determinado contexto cultu-ral y profesional, y de la valoración de losotros que hacen de la persona.• La autoestima y la asertividad no depen-den tanto de la profesión o del status comode la propia persona. De aquí la necesidadde asumir la propia responsabilidad en todo

54 anales de mecánica y electricidad / julio-agosto 2007

Una señal de haber logrado la madurez personal desde la cual acceder a la

autoestima, es poseer la sencillez, la simplicidad: virtud de la inteligencia

que consiste en el arte de saber reducir lo complicado a lo escueto y sustan-

cial. Es preocuparse y saber lo que es esencial y accidental o superfluo. Es la

sabiduría que da la ciencia y la vida después de adquirirla y vivirla con hon-

dura y consciencia. Es serenidad, armonía, equilibrio y cierta indiferencia an-

te lo relativo, evanescente, pasajero. Es la “descansada vida del que huye del

mundanal ruido” de Fray Luis.

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La autoestima

Eugenio Ferreras Casado

Licenciado en Filosofía y Letras

(Salamanca, 1967). Diplomado en

Psicología y Psicotécnica (Madrid,

1974). Profesionalmente se ha

centrado en la docencia y la

psicoterapia.

La autoestima 24/8/07 09:58 Página 54

proceso constructivo. Un médico, ingeniero,abogado, profesor… pueden ser menosaser tivos (autoestima) que un taxista, unmecánico, un obrero… • La autoestima depende de los valores quecada uno vive o realiza en su vida de formapermanente, asertiva y consciente. No de-pende de la edad, de la cultura, del nivel eco-nómico, del status… • La autoestima es excelencia, calidad, com-petencia profesional, trabajo, esfuerzo perso-nal… que dan como resultado éxito, triunfo,equilibrio, serenidad, madurez.

La autoestima es un juicio objetivo, realistay positivo sobre uno mismo al haber conse-guido un desarrollo personal coherente, fun-dado en los elementos básicos del ser hu-mano:• Físicos• Psicológicos• Sociales/ profesionales• Culturales. Por cultura se entiende: “Com-plejo unitario de conocimientos, creencias,arte, moral, ley, costumbre y demás capaci-dades y hábitos adquiridos por el ser huma-no por su condición de miembro de una so-ciedad”. (E. B.Taylor).

Esto hace que vaya creciendo la propia sa-tisfacción, así como la seguridad ante unomismo y ante los demás.

El juicio personal implica dos operacio-nes complementarias: Haber (lo positivoque se tiene, lo conseguido hasta ahora) yDeber (lo negativo de uno mismo, lo quequeda por alcanzar). Esta valoración culmi-na en una afirmación positiva que se dibujacomo una gráfica ascendente, compensan-do las cualidades, lo positivo, a los defectos,lo negativo.

Aceptación de sí mismo, a pesar de las li-mitaciones de todo ser humano, lo cual pro-duce un estado de paz relativa, una sereni-dad que invade toda la persona. Porquepara estar bien con los demás es preciso es-tar bien con uno mismo. Nadie da lo que notiene.

Uno es objetivo, realista, está de acuerdocon su propia persona cuando asume las ap-titudes –aquello de lo que uno está dotado–y las limitaciones –las carencias de todo ti-po–. Para lograr un alto nivel de autoestimaes preciso integrar la vertiente física en el es-quema de la personalidad: morfología corpo-ral (tipo, belleza externa…) y característicasfisiológicas (enfermedades físicas y psicoló-gicas, congénitas o adquiridas). Hay discapa-citados físicos y psicológicos amargados,

desesperados, acomplejados y felices y exi-tosos…

La respuesta personal ante los estímuloses el secreto, la clave…• La dimensión o patrimonio psicológicoforma una estructura que es percibida glo-balmente como positiva: la sensopercepción,la memoria, la voluntad, los instintos, la vidaafectiva, el lenguaje verbal y no verbal, etc.forman una estructura que dibujan, un estilopersonal con el que uno se siente a gusto ysatisfecho.• El plano sociocultural también es positivoya que en él se desarrollan los recursos parala comunicación interpersonal y lo que deella se deriva.• Saber relacionarse es uno de los indicado-res más claros de la persona madura y auto-rrealizada y por tanto de que existe unabuena autoestima.• La dimensión cultural es capital en la auto-estima. Ella nos informa, nos enriquece, noshumaniza, nos defiende y consuela. Hoy espoco frecuente encontrar personas con unacultura sólida y comprehensiva, debido a es-tos factores:

– La TV, que tiende a llenarlo casi todocon su presencia, debido a que no exigeesfuerzo, con contenidos de ínfima calidadhumana, social, cultural, estética y ética.Deshumaniza, empobrece.– La falta de tiempo para leer, informarse,culturizarse. La trepidante y acelerada vidamoderna que no deja espacios más quepara el trabajo.– La competitividad, además, exige una lu-cha enorme para no quedarse atrás pro-fesionalmente.– La falta de formación integral y la forma-ción cultural deficitaria. Sin esfuerzo, sin cri-terios, sin disciplina… generando personasignorantes, acomplejadas y “atrevidas”El trabajo, el esfuerzo, el anhelo de perfec-

ción, la autorrealización, la creatividad, la re-muneración… generando productividad,confianza en sí mismo y a partir del trabajoatender las necesidades personales y familia-res… es una variable esencial para la autoes-tima. Es sentirse selecto. Por eso el paro esdestructor.

Lo importante es que uno se identifiquecon aquello que hace, que lo haga con pro-fesionalidad, con competencia, amándolo. Noconsiste en estar en el vértice de la pirámideprofesional, sin estar contento con mi puestoy desempeñarlo sin amor, dedicación y res-ponsabilidad.

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Las tres variables de la felicidad: amor, tra-bajo (Freud) y cultura forman un entramadobásico para la autoestima y dan coherencia ala conducta. Con estas variables cualquier serhumano puede aspirar a lo máximo, a encon-trarse a sí mismo y dar lo mejor que tiene alos demás y por ahí se llega a la felicidad, quees la consecuencia lógica de la autoestima.

La autoestima no es una comparación conlos demás. Es un error que incide negativa-mente en la autoestima, porque la autoesti-ma tiene que surgir de nosotros mismos. Esestar contentos con nosotros mismos, funda-dos en los valores realizados. La satisfacciónque implica sentirse autorrealizado significaque la trayectoria vital personal es ascenden-te, que los distintos componentes del pro-yecto van saliendo y que a pesar de las difi-cultades, hay motivos para que uno se sientacon una valoración, mezcla de satisfacción yconfianza por lo conseguido.

Lo sabio ante la comparación con los de-más, es conver tir la envidia en emulación,que es la capacidad de imitar las cosas positi-vas que vemos en los demás, que actúan co-mo modelos de identificación en un campoconcreto. Son los “maestros” a los que positi-vamente quedamos “fijados” para, sobreellos, ascender.

Para tener seguridad en uno mismo –auto-estima, asertividad– es importante tener unaactitud comprensiva, indulgente y tolerantehacia uno mismo y hacia los demás. Com-prender es aliviar, disculpar, ser benévolo, po-nerse en el lugar del otro –empatía– y a lavez ser clemente con los fallos y errores per-sonales.Tener conciencia clara de todo ello.

Hay dos tipos de conciencia: Ética (se re-fiere a la moralidad de nuestros actos, actuarbien/ mal, ser bueno/ malo. Saber y distinguirel bien del mal) y Psicológica (darse cuentade los actos, acontecimientos, captar la reali-dad en toda su complejidad). Un signo demadurez de la persona es tener capacidadpara saber perdonarse y perdonar a los quenos rodean. Los que tienen dificultades o in-capacidad para ello desarrollan una hipercrí-tica demoledora, que destruye la confianzaen uno mismo, la autoestima. Un sentimientode malestar va invadiendo la valía personal ya continuación miedo al fracaso, al rechazode los demás, a no dar la talla en determina-das circunstancias… La psicoterapia se hacenecesaria para desenmascarar ese flujo des-tructor.

Un recurso muy eficaz para elevar la auto-estima es hacer conscientemente algo positi-vo por los demás. Algo concreto, que no se



quede en palabrería, ni en un voluntarismo(tendencia a buscar la actuación más en losdeseos que en las condiciones reales) estéril.En esa donación se encuentra una buenadosis de paz y de alegría interior. Si tenemosuna personalidad equilibrada, somos más fe-lices al dar que al recibir y eso nos lleva auna armonía interior. Así se hace uno fuerte,elimina la hipocresía y surge la mansedum-bre y la dulzura, eliminando los aspectos ne-gativos y se entra en una ética, cuyo impera-tivo es alcanzar una felicidad razonable yrealista, expresada en el lema de los clásicos:caritas, diligere, amare (amor de donación,amor afectivo, amor de voluntad). Un trípticode valor permanente y universal.

La autoestima puede valorarse desde dosdimensiones:• La propia personalidad: Cristal con el queuno ve y valora su historia. El balance depen-de de muchas variables: infancia feliz, sentirsequerido; experiencias de abandono, soledade incomprensión; tensiones familiares que re-sultan traumatizantes; recibir de los educa-dores mensajes que insisten más en lo nega-tivo que en lo positivo, etc. Pero no hay quevivir encarcelados y bloqueados en el pasa-do.Ya no existe, y favorece la evasión paracentrarse en el presente. Es un obstáculo pa-ra autorrealizarse aquí y ahora y proyectarseen el futuro.• La situación concreta actual: El yo y su cir-cunstancia.Todo lo que nos rodea nos afectao marca de alguna manera. Pero sólo en lamedida en que le dejemos nosotros. De ahíla responsabilidad que hay que asumir sobrenuestra personalidad y el éxito o fracaso deuna vida personal. La TV, el cine, la radio, lacalle, la prensa presentan modelos con de-masiada frecuencia negativos (sin valores, in-cluso contravalores). Los modelos sanos ypositivos se deben descubrir en la familiacon sus valores, preferencia, estilos (modosde ser), que luego se incorporan a la perso-na lenta e inconscientemente.También en losCentros Educativos, donde existen personasque encarnan valores, ideales, coherencia…

La imagen de uno mismo

Es la fotografía hecha por uno mismo. Có-mo nos vemos. Pueden darse dos respues-tas: psicológica (aptitudes psíquicas, abierto,comunicativo, expresivo) y física (aptitudes fí-sicas, tipo, etc.). Cuando uno trata de expre-sarse como es, suele corresponder a uncriterio presente, real, cómo es ahora. Yotro como le gustaría ser : futuro, lo ideal.

La persona que tiene una autoestima alta sesiente bien consigo misma, independientemen-te del lugar y situación en la que se encuentre.

Para formarse una imagen veraz de unomismo hay que analizar una serie de variablesque pueden funcionar como verdadero testde la autoestima. Entre otras pueden ser estas:• Aspecto físico:Talla, aspecto general, estéti-ca, cara, ojos, forma habitual de vestir, tipo,enfermedades, defectos, aseo y cuidado per-sonal, templanza… Valoración de 0 a10.• Aspecto psicológico: Sensibilidad, capaci-dad de percibir, simpatía, empatía, carácter,voluntad, ser manipulable, aceptación de símismo, reaccionar siempre en positivo, gozarde la vida, amigos, arte, naturaleza, capacidadamorosa… Valoración de 0 a l0.• Aspectos de conducta: Activo, laborioso,capacitación, profesión, amistades, relacionesinterpersonales y con el entorno, satisfechode lo que hace, autónomo, independiente,capacidad de trabajo… Valoración de 0 a 10.• Aspectos éticos: carácter, coherencia, sa-ber valorar el bien y el mal, autocrítica, capa-cidad para rectificar, tener principios convin-centes y sólidos… Valoración de 0 a 10.• Aspectos cognitivos: Concepción del hom-bre y del mundo, capacidad intelectual y me-moria, saber razonar, saber asimilar lo positi-vo de la información, enriquecerse conlecturas, estar abier to a nuevas ideas, per-cepción clara y eficiente de la realidad, capa-cidad del sentido del humor sin herir, creati-vidad, originalidad, tener un porqué y unpara qué capaces de motivar… Valoraciónde 0 a 10.• Aspectos sociales: Conflictividad, habilidadpara relacionarse con los demás, participa-ción, disponibilidad para darse y ayudar, ge-nerosidad,Tolerancia, comprensión… Valora-ción de 0 a 10.• Aspectos culturales: Curiosidad por saber,aficiones, lecturas, prensa, radio,TV, cine, arte,literatura, pintura, exposiciones… Valoraciónde 0 a 10.• Inteligencia emocional: Conocer las pro-pias emociones, dirigirlas, motivarse a sí mis-mo, reconocer las emociones de los demás,saber mantener relaciones sociales. Capaci-dad de controlar los impulsos y aplazar lasrecompensas… Valoración de 0 a 10.

Se suman los resultados y se divide por 8.El resultado será el nivel aproximado de au-toestima que poseemos.

Para tener una verdadera, clara y buenaautoestima es necesario fundamentarla en laestructura del ser humano, concentrando en

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cada nivel los valores que dan origen a lamisma. Gráfica y esquemáticamente se pue-de representar según la figura de arriba:• Valores Espirituales: Religiosos, éticos, cien-tíficos, cultura, arte, personalidad…• Valores Sociales: Sentimientos, emociones,éxito, prestigio, simpatía…• Valores Materiales: Belleza física, edad, sa-lud, riqueza, bienestar…

Explicación del gráfico: El triángulo simbo-liza la estructura de la personalidad y éstatiene tres niveles:• Zona vital: Procesos orgánicos, instintos,tendencias…• Zona endotímica: Sentimientos, emocio-nes… • Zona Superior : Inteligencia, voluntad…

Estos niveles no están aislados. Se interre-lacionan de abajo hacia arriba y de arriba ha-cia abajo. Incluso con el medio físico, las afue-ras de la personalidad. Sería la patria terra delos romanos… Esta estructura, por la iz-quierda recibe estímulos del mundo, en cadauno de los niveles, que al pasar por dicha es-tructura los filtra y dan origen a las distintasreacciones o conductas. Par te derecha deltriangulo.Y se proyectan en el mundo. Lapersona selecciona libremente los estímulos.Naciendo así la responsabilidad de la con-ducta personal y los distintos tipos.

La autoestima siempre se fundamenta envalores físicos, psíquicos, espirituales, sociales,éticos, culturales… concienciados por el su-jeto. Es esencial al ser humano saber y enconcreto saberse a sí mismo. Es el saber desalvación, porque es el saber guía que le lle-vará a la autoestima y esta a la autorrealiza-ción, a la plenitud del ser humano para serverdaderamente hombres (Gracián). El tradi-cional desarrollo integral del hombre. Mu-chos hombres, como Andrenio, tienen queconfesar : “Yo no sé quién soy, ni quien me ha

dado el ser, ni para qué me lo dio” (Gracián.El Criticón). Es decir, Cultura.

La cultura –cultivo de la persona– es unelemento esencial para la autoestima, comose ha afirmado antes. Implica conocimientosteórico–prácticos para no dejarse manipularpor informaciones sesgadas, sectarias y fala-ces sobre el hombre, el mundo, religión. Nipor la interpretación de los hechos o mani-festaciones aparentemente buenas. Es un sal-vavidas para no hundirse, naufragar, en elmar de la confusión que nos rodea. Es unadefensa y consuelo (Consolación de la Filo-sofía. Boecio) ante los conflictos psíquicos, fí-sicos, laborales, y sociales. La cultura es laapologética de los grandes valores eternos– Dios, religión, vida, familia, dignidad de lapersona, justicia, solidaridad, responsabili-dad…– que nos enseña a qué atenernos. Lacultura es el sedimento de todo lo vivido, elsubstrato de lo sabido, leído, experimenta-do, anhelado, pensado…La Cultura es un sa-ber de salvación, que humaniza al hombre ylo mejora en dos ver tientes esenciales: laÉtica (normas morales, hacer el bien y evitarel mal) y la Estética (belleza, elegancia, bue-nas formas).

Si no cumple estos fines, no es verdaderacultura. Es sólo un montón informe de con-tenidos librescos e insustanciales. Cuandose posee una verdadera cultura se tienenmuchas posibilidades de tener una alta yverdadera autoestima. Esta consiste básica-mente en valorar y reconocer lo que unoes y lo que puede llegar a ser. La ociosidades un peligro para la autoestima. Lo mismoque el paro y la jubilación, si no se sabenllenar de contenido humano, porque apare-ce el vacío existencial del ser humano yqueda al descubierto la pobreza en valoresde la persona.

Los demás y la autoestima

No se puede tener autoestima, si no con-tamos con los demás. Son un referente paravalorarnos positiva o negativamente… El serhumano está abier to y orientado hacia elotro. Es un ser social, político (Aristóteles). Lacomunicación es una condición esencial paraser persona. En la mayoría de los trastornosde la personalidad hay serias dificultades derelación interpersonal. Unas veces porqueemerge el complejo de inferioridad o la inse-guridad; otras porque se busca quedar siem-pre bien o se teme el rechazo; otras porqueel hombre es un lobo para otro hombre, elmobbing…


Figura 1. Estructura de la personalidad y proceso de la conducta y los valores

Culturadel SER

Cultura del TENER

Cultura del TENER

Valores Espirituales.Permanentes

Patria Terra

Valores Sociales.Pasan

Con

duct

a

MU

ND

O E

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MU

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Valores Materiales.Se destruyen

ZONA SUPERIOR

ZONA ENDOTÍMICA

ZONA VITAL


La biografía personal y la autoestima

Es una raíz importante de la autoestima. Pa-sado, presente y futuro forman un tejido bio-gráfico en el que se ubican las vivencias alma-cenadas. El pasado es inamovible. Nopodemos actuar sobre él. El futuro no existe,tampoco podemos manejarlo. Podemos pre-pararlo o planificarlo y poner los cimientos delo que queremos que sea. Sólo nos queda elpresente, al que tenemos que enfrentarnosresponsablemente. ‘Por mí que no quede’ (Ju-lián Marías). Es el carpe diem de los clásicos. Elpresente, el aquí y ahora, lo próximo son elcampo de trabajo del yo sano y asertivo. Fue-ra del presente sólo hay evasión, excusas, arre-glitos sociales (Adler)

Autoestima e interpretación de la realidad

Las personas con baja autoestima inter-pretan patológicamente la realidad.T. Beck(1990) destacó la denominada tríada cogniti-va de la depresión:• Visión negativa de uno mismo• Tendencia a la interpretación negativa dela realidad personal y del entorno• Visión negativa acerca del futuro

Estas personas sólo atienden selectiva-mente a estímulos nocivos para sí mismos.Esto les lleva a construir modelos cognitivos(moldes de pensamiento) erróneos, pero es-tables, que desbaratan el procesamiento dela información.

Teorías que pueden favorecer y crear autoestima

• H. MaslowLo que hace rica a la persona, lo que la va-

lora, no es el dinero, sino alcanzar, dentro desus posibilidades, la cima de sus aspiracionese ideales acordes con la naturaleza humanaque además es sensible a todo lo que le ro-dea, llenando el corazón de solidaridad y deamor. Básicamente son necesarias unas míni-mas condiciones económicas que deben degarantizar las autoridades políticas, pero lafelicidad, la autoestima, la autorrealización re-ducidas a bienestar y a nivel de vida es unapobre interpretación de lo máximo a lo quese puede llegar.“Y así muy pocos son los quellegan a ser persona” (Gracián).

Como características de hombre autorre-alizado, del que tiene una buena autoestima,del que llega a cierta madurez son está satis-fecho, se acepta a sí mismo y no tiene senti-mientos negativos, tiene una percepción

clara y eficiente de la realidad, está abierto alas experiencias nuevas, es espontáneo y ex-presivo, natural y sencillo, piensa en los de-más, ama la soledad y reflexiona, es autóno-mo e independiente, goza de la vida y labelleza, de la naturaleza, el arte, las relacionesinterpersonales son profundas, pero selecti-vas, tiene principios morales propios o asu-midos personalmente: distingue el bien y elmal, es de talante democrático –tolerante,respetuoso, comprensivo–, tiene seguridaden sí mismo, por eso tiene sentido del hu-mor, sin ser agresivo ni hiriente, es creativo,original, laborioso, y tiene gran capacidad pa-ra amar. “¿Piensas tú que valen poco unosojos claros, una lengua verdadera, un hom-bre sustancial… una persona que lo sea?Créeme y estima el serlo, que es un prodigiode fénis” (Gracián).• V. E. Frankl

Manifiesta que para lograr la autoestimahay que centrarse en la trascendencia (salirde sí mismo, pensar en los otros…) y en bus-carle y darle sentido a la vida, que básicamen-te consiste en saber el porqué y para qué detodo. De ahí brotan los valores que nos per-miten huir del vacío existencial –núcleo delos trastornos mentales, como la neurosis–de la sensación de vivir absurdamente.

Formulaciones del sentido:“El sentido es laposibilidad más valiosa de cada situación”.

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“Lo decisivo para conformar una vida plenade sentido es, por tanto, la respuesta – preci-samente aquella respuesta– que me sea po-sible y me parezca la mejor, la más positiva”.• C. R. Rogers

Piensa que la autoestima es un efecto y selogra en el proceso de convertirse en personaque culmina en un funcionar inteligentemente.Estos son los pasos que tiene que dar el serhumano: dejar de utilizar máscaras, dejar desentir los debería, dejar de satisfacer expecta-tivas impuestas, dejar de esforzarse por agra-dar a los demás.

Después de dar estos pasos: comienza aautoorientarse, comienza a ser un proceso,comienza a ser toda la complejidad de serYo, empieza a abrirse a la experiencia, co-mienza a aceptar a los demás y comienza aconfiar en sí mismo.

Autoestima y felicidad

Los trastornos de la personalidad alteranla armonía, el equilibrio del ser humano yson un impedimento serio para alcanzar laaspiración natural del ser humano a la feli-cidad. Todos desean ser felices. Pero, ¿es lafelicidad una realidad única y universal, igualpara todos? ¿en qué consiste la felicidad? Lafelicidad absoluta no existe, por eso deber-nos buscar una felicidad razonable en laque existe una buena proporción de obje-tivos y medios. La felicidad es la suma ycompendio de esta tetralogía: equilibrio dela personalidad, vida afectiva, trabajo y cul-tura. La felicidad es el resultado de lo quehemos ido haciendo con nuestra existencia

personal. Descansa sobre una actitud men-tal positiva (hacer, desarrollar valores), unesfuerzo consciente de vivir en armoníacon uno mismo. Nada es gratis. A últimahora de la vida, al hacer el balance existen-cial, sale a relucir la verdad de lo que he-mos sido. “Las cosas difíciles son las másbellas” (Platón).

Poner el bienestar y el placer como metasabsolutas de la conducta supone un graveerror, que aboca al fracaso, puesto que lamejor biografía personal está surcada deproblemas, luchas, fracasos de distinto signo,errores, retrocesos en el propio camino. Paramuchos la felicidad queda reducida al nivelde vida, a una economía saneada y a unabuena salud. Da origen a pobreza humana,insatisfacción. No dependen de uno sola-mente.

La felicidad y la autoestima pasan por ha-ber ido resolviendo el fondo conflictivo queexiste en nosotros. ¿Cómo? Las páginas ante-riores pueden dar respuesta a este angustio-so interrogante. La felicidad y la autoestima–y todos los conflictos psicológicos– no de-penden de la realidad objetiva, sino de la in-terpretación personal, de la reacción indivi-dual a esos estímulos de esa realidadobjetiva. Por eso no hay que ser victimistas,un papel muy bien representado para eludirla realidad. Mucho menos descargar en losotros la responsabilidad de lo que nos acon-tece. Es esencial saber lo que se quiere (co-nocimiento, cultura). La felicidad y la autoes-tima son el resultado de la vida auténtica: sery actuar como personas.



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