Sobre El Amor y Otras Vaguedades

PorYoel Hugo Suazo Hurtado

En la sociedad existen mucha opiniones, cada una de las cuales merece su respeto y consideración, lo que intentaré hacer en este pequeño espacio es juntar y poner a consideración algunas de estas ideas y dar mi apreciación personal, como persona común y corriente perteneciente a una sociedad, a una cultura y a un determinado espacio y tiempo histórico.

La LibertadTodos opinan que la libertad es el ideal máximo que perseguimos

para nuestra vida. Frases como “soy soltera y hago lo que quiero” o “a mí me importa muy poco lo que digan los otros de mi” suenan como gritos de libertad, y tal vez lo sean, pero el ser humano tiene mucho miedo a la libertad y esto me recuerda al hecho de que muchos ahora repiten las frases del facebook como si fueran propias, sin saber muchas veces el contexto, ya ahora se ve muy poco que alguien explore sus verdades ideas, pensamientos o sentimientos, más bien se preguntan ¿qué debemos creer?, ¿cómo debemos sentir?, etc. lo que me lleva a creer que la libertad en realidad más bien es lo menos que buscamos, y tal vez sea lo correcto para una especie que ha vivido por milenios en grupos, compartiendo momentos, emociones… es decir sus vidas mismas, uno al lado del otro, deseando obtener un lugar en ese grupo, donde sentirse cómodo, reconocido y recompensado aún a costa de su libertad.

El AmorVivimos en una época rodeada de libros de autoayuda que nos

dicen que lo más importante somos nosotros, nuestras opiniones, nuestros gustos, etc. En este contexto surge el ideal del amor que acepte todo de nosotros y a su vez nosotros no ceder nada ya que eso iría en contra de nuestra independencia, incluso de nuestra autoestima. La idea de “si me ama que me acepte tal y como soy” es la cúspide del pensamiento amoroso. Por otro lado olvidamos que toda la serie de libros de autoayuda surge a partir de considerar que tenemos un problema, y el problema surge cuando la realidad no corresponde a un modelo previamente instalado en nosotros. Creo que no existe la respuesta definitiva a la pregunta ¿cómo amar? ni a uno mismo ni a los demás. Amar es algo tan simple como la sonrisa en los labios, un paseo por cualquier lugar, es mirarse a los ojos y sentirse cálido, es dormir tranquilo sabiendo que todos están bien. Amar es más natural y no necesita tanto ideal.

La física cuántica lo explica todo No hace mucho estaba de moda “la ley de la atracción” donde

manifestaban que el universo se transforma de acuerdo a lo que tú deseas, si quieres algo con todas tus fuerzas el universo lo creará y ponen de fundamento científico a las leyes cuánticas. Algo que muy pocos saben es que la física cuántica es un conjunto de teorías que sirven para describir el comportamiento de partículas pequeñas, como los átomos, electrones, etc. comportamiento por demás no intuitivo como lo que ocurre con las cuerpos macroscópicos. Estas teorías se basan mucho en los cálculos de probabilidades, ya que se demostró que nuestra capacidad de medir a escalas muy pequeñas introduce demasiadas perturbaciones, solo nos queda calcular todas las probabilidades o “todos los caminos posibles” mas como dice Richard Feynman la materia a nivel microscópico se comporta tan extrañamente que no debemos cometer el error de asignarle dualismos en su comportamiento. Si bien a nivel microscópico la materia puede estar en dos sitios al mismo tiempo y en ninguno a la vez, en el mundo macroscópico por más que lo desees no desaparecerá la pared cuando intentes traspasarla velozmente, no importa que exista la probabilidad de que sí desaparezca.