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La Montaña, 1 de marzo de 2014. Mis queridas semillas, En un planeta muy lejano, venía de nacer y para habitarlo los Dioses dijeron “Tenemos que llenar este planeta de seres extraordinarios” igual que en la Tierra, estuvieron de acuerdo; y así nacieron esos seres maravillosos. Uno de los Dioses dijo “¡Cuidado! Si son a nuestra semejanza, un día puede ser que se crean que son superiores, así que tenemos que quitarles algo”. Todos se pusieron de acuerdo, “Pero ¿el qué?” y uno de ellos dijo: “les quitaremos la Felicidad” “¡¿la Felicidad!?” “Síii”, “Bueno, vamos a quitárselas”. Y esos seres empezaron a poblar ese planeta, a crecer, se multiplicaron y todos tenían un problema, habían oído hablar de la felicidad, se pusieron a buscarla, pero los Dioses antes habían previsto que no podían esconderla en la montaña más alta, pues saben muy bien que el hombre está preparado y tiene una fuerza para subir hasta el Himalaya, las montañas más altas. Entonces dijeron: “Si lo escondemos en el fondo de los mares, el hombre está muy bien hecho y llegará a encontrarla” “Pero, ¿dónde podremos esconderla?” “¡Es muy sencillo! En donde menos irán a buscarla, dentro de ellos, en su interior”. Sí mis semillas, siempre es la misma leyenda cambiando de colores, de formas, así los Dioses decidieron de esconderla, deeentro de ellos mismos, de esos seres que eran perfectos, pero les faltaba la felicidad. Buscaron y buscaron y no la encontraban.

La Montaña 1 marzo 2014 - La Felicidad

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La Montaña, 1 de marzo de 2014.

Mis queridas semillas,

En un planeta muy lejano, venía de nacer y para habitarlo los Dioses dijeron “Tenemos que llenar este planeta de seres extraordinarios” igual que en la Tierra, estuvieron de acuerdo; y así nacieron esos seres maravillosos.

Uno de los Dioses dijo “¡Cuidado! Si son a nuestra semejanza, un día puede ser que se crean que son superiores, así que tenemos que quitarles algo”. Todos se pusieron de acuerdo, “Pero ¿el qué?” y uno de ellos dijo: “les quitaremos la Felicidad” “¡¿la Felicidad!?” “Síii”, “Bueno, vamos a quitárselas”.

Y esos seres empezaron a poblar ese planeta, a crecer, se multiplicaron y todos tenían un problema, habían oído hablar de la felicidad, se pusieron a buscarla, pero los Dioses antes habían previsto que no podían esconderla en la montaña más alta, pues saben muy bien que el hombre está preparado y tiene una fuerza para subir hasta el Himalaya, las montañas más altas. Entonces dijeron: “Si lo escondemos en el fondo de los mares, el hombre está muy bien hecho y llegará a encontrarla” “Pero, ¿dónde podremos esconderla?” “¡Es muy sencillo! En donde menos irán a buscarla, dentro de ellos, en su interior”.

Sí mis semillas, siempre es la misma leyenda cambiando de colores, de formas, así los Dioses decidieron de esconderla, deeentro de ellos mismos, de esos seres que eran perfectos, pero les faltaba la felicidad. Buscaron y buscaron y no la encontraban.

Un día decidieron viajar a otros planetas para ver donde la escondían los habitantes, al llegar a la Tierra, vieron que los humanos estaban muy preocupados, pero no era por la Felicidad, unos por los problemas económicos, otros por la belleza, otros porque querían adelgazar, otros porque quería volar, otros porque querían silicona, otros porque tenían tantos juegos, tanta riqueza que ya no tenían ningún deseo. Habían acumulado tantos tesoros que nada les faltaba, vieron que la

Tierra es bella, que tiene unas riquezas naturales sin igual, que hay gran variedad de vegetación, de minerales, de animales y sobre todo, esos seres especiales que son sus habitantes.

¡Cómo es posible que teniendo todo, tampoco fueran felices! Y les preguntaron: “¿No tenéis felicidad?” Los miraron y les contestaron: “¿Qué es eso? No sabemos lo que es” “¿No habéis sido nunca felices?” Algunos pensaron y recordaron cuando eran pequeños que sí lo habían sido, que habían sido amados, que habían tenido alimentos, que

los habían lavado. Otros dijeron, “Conocí también la felicidad, efímera, cuando me casé, cuando viví en pareja, cuando entraba en casa y me recibían mis padres, mi familia, también la conocí en un grupo de amigos, otros dijeron, algún día en el trabajo”. Fueron

a otros continentes y encontraron unos lugares muy pequeñitos de la India, del Sahara, de Etiopía, y allí vio a

gente que verdaderamente era feliz, los contemplaron, ya no hicieron la pregunta, porque vieron en sus rostros la sonrisa, la alegría y se dieron cuenta que no tenían nada y que la verdadera y auténtica Felicidad la habían encontrado dentro de ellos, los niños jugaban con una pelota hecha de lana, las niñas con unos huesitos, los adultos trabajando el huerto, el jardín, las madres preguntándose que iban a hacer para alimentarles y los padres pidiendo a Dios y dándole Gracias que hoy ya se habían alimentado.

Concluyeron que la Felicidad está en nosotros, porque esos Seres eran felices y no tenían nada y daban Gracias a Dios, eso es la Felicidad, contentarse con lo que tenemos, agradecer cada día, tener la visita de unos amigos, recibir un sms, un correo y saber que alguien te quiere.

Aquí en la Montaña hemos creado este Rincón del Universo, muy precioso para todas vosotras mis semillas, esa es la Felicidad, que cuando vengáis, podáis reconocer ése Rincón de Felicidad, compartirlo y que donde está lo más pequeño, vive lo Más Grande y donde está lo Más Grande vive lo más pequeño.

¿Por qué buscamos siempre ir a la Luna? Solucionemos primero ese gran paso que vamos a dar Hoy y Ahora aquí en la Tierra y guardemos

en el libro de la historia el gran paso que dieron para la humanidad, pero hoy miremos nuestros pies y seamos felices.

¡Os amo tanto mis semillas! Y tenéis una Fuerza tan Grande, ojalá estuvierais conscientes cada día que podéis utilizarla para el bien y os devolverá la Felicidad.

Con todo mi amor,La Jardinera