Dios les dice a los israelitas que construyan el tabernáculo Lección #37- Edifiquemos Sobre Cimientos Firmes (Ampliado)

Bosquejo 1. El Señor planeó darle a Moisés dos tablas de piedra en las

cuales Dios había escrito los diez mandamientos (Éxodo 24:12-18).

2. Dios le ordenó a Moisés que hiciera que los israelitas construyeran un tabernáculo (Éxodo 25:1-8).

3. El tabernáculo debía ser construido exactamente como Dios le había ordenado a Moisés (Éxodo 25:9).

4. El tabernáculo debía ser portátil. 5. El tabernáculo debía tener dos habitaciones. 6. El arca y el propiciatorio debían ser hechos y puestos dentro

del lugar santísimo (Éxodo 25:10-11,17-22). 7. Una cortina o velo debía colgar entre el lugar santo y el lugar

santísimo (Éxodo 26:31-33). 8. El tabernáculo debía tener un atrio (Éxodo 27:9). 9. El altar de bronce debía ser puesto dentro del atrio (Éxodo

27:1-2; Levítico 1:1-5). 10.Dios escogió a Aarón y a sus hijos para que le sirvieran

como sacerdotes (Éxodo 28:1; Levítico 16:2-3,15).

1. El Señor planeó darle a Moisés dos tablas de piedra en las cuales Dios había escrito los diez mandamientos.

Éxodo 24:12-18 “Entonces Jehová dijo a Moisés: Sube a mí al monte, y espera allá, y te daré tablas de piedra, y la ley, y mandamientos que he escrito para enseñarles. Y se levantó Moisés con Josué su servidor, y Moisés subió al monte de Dios. Y dijo a los ancianos: Esperadnos aquí hasta que volvamos a vosotros; y he aquí Aarón y Hur están con vosotros; el que tuviere asuntos, acuda a ellos. Entonces Moisés subió al monte, y una nube cubrió el monte. Y la gloria de Jehová reposó sobre el monte Sinaí, y la nube lo cubrió por seis días; y al séptimo día llamó a Moisés de en medio de la nube. Y la apariencia de la gloria de Jehová era como un fuego abrasador en la cumbre del monte, a los ojos de los hijos de Israel. Y entró Moisés en medio de la nube, y subió al monte; y estuvo Moisés en el monte cuarenta días y cuarenta noches.”

1. El Señor planeó darle a Moisés dos tablas de piedra en las cuales Dios había escrito los diez mandamientos.

Cuando Dios entregó por primera vez Sus mandamientos a los israelitas en el monte Sinaí, ellos lo escucharon hablándoles. Dios no quería que los israelitas olvidaran Sus leyes, así que decidió escribir Sus diez mandamientos en dos tablas de piedra.

Moisés obedeció al Señor y subió a la montaña. Josué, ayudante de Moisés, subió con él.

Ellos permanecieron en la montaña durante cuarenta días y cuarenta noches.

Mientras Moisés estaba en la montaña, el Señor le dio los diez mandamientos, escritos en dos tablas de piedra. El Señor también le explicó a Moisés otras normas y costumbres que Él les ordenó a los israelitas. Dios era su Rey, así que les dijo lo que Él quería que ellos hicieran.

2. Dios le ordenó a Moisés que hiciera que los israelitas construyeran un tabernáculo.

Éxodo 25:1-8 “Jehová habló a Moisés, diciendo: Di a los hijos de Israel que tomen para mí ofrenda; de todo varón que la diere de su voluntad, de corazón, tomaréis mi ofrenda. Esta es la ofrenda que tomaréis de ellos: oro, plata, cobre, azul, púrpura, carmesí, lino fino, pelo de cabras, pieles de carneros teñidas de rojo, pieles de tejones, madera de acacia, aceite para el alumbrado, especias para el aceite de la unción y para el incienso aromático, piedras de ónice, y piedras de engaste para el efod y para el pectoral. Y harán un santuario para mí, y habitaré en medio de ellos.”

Recordemos que el Señor prometió bendecir a los israelitas si obedecían perfectamente Sus mandamientos.

Los israelitas obviaron su naturaleza pecaminosa, y creían que podían cumplir lo establecido por Dios.

El Señor sabía que los israelitas le desobedecerían porque eran pecadores.

Dios proveyó la forma para que los Israelitas se acercaran a Él, ya que no podrían escapar del castigo por su desobediencia.

El Señor le dijo a Moisés que hiciera que los israelitas construyeran un lugar especial donde Dios viviría con ellos. Los israelitas traerían sus sacrificios y lo adorarían a Él en esta edificación especial.

El propósito por el cual Dios les ordenó hacer esta construcción no era porque necesitaba una casa, Dios es Espíritu, y no depende o necesita algo para vivir.

Dios amaba a los israelitas, no quería destruirlos. Por lo tanto, les dijo que construyeran un sitio especial donde Él pudiera vivir con ellos y donde ellos pudieran acercarse a Él para recibir perdón y misericordia del castigo que merecían por quebrantar Sus leyes.

El tabernáculo sería otra ayuda visual, a través de la cual Dios dejaría claro cuáles son elementos necesarios para ser aceptados por Él: Fe a la manera de Dios, sacrificio y sangre.

2. Dios le ordenó a Moisés que hiciera que los israelitas construyeran un tabernáculo.

3. El tabernáculo debía ser construido exactamente como Dios le había ordenado a Moisés. Éxodo 25:9 “Conforme a todo lo que yo te muestre, el diseño del tabernáculo, y el diseño de todos sus utensilios, así lo haréis.”

La estructura del tabernáculo no tiene ninguna relación con el local de la Iglesia.

Los israelitas tenían que construir el tabernáculo y todo su mobiliario exactamente como el Señor había instruido a Moisés cuando él estuvo en la

montaña. Recordemos

Caín rehusó traer el sacrificio que Dios le dijo, y por lo tanto, Dios no lo aceptó.

Noé le creyó a Dios, por eso construyó el gran barco exactamente de la forma que Dios le había dicho, y Dios lo salvó del diluvio.

No podemos decirle a Dios cómo nos acercaremos a Él. Debemos acercarnos a Dios de la manera que Él nos enseña en la Biblia.

4. El tabernáculo debía ser portátil.

Como los israelitas iban a caminar muchos kilómetros para regresar a la tierra de donde habían venido sus antepasados, no podían cargar una casa hecha de materiales pesados. El Señor les dijo que construyeran casi todo el tabernáculo con materiales hechos de pieles de animales y de pelo de cabra. Los israelitas vivían en carpas mientras estaban viajando, y sus carpas también estaban hechas de los mismos materiales.

Durante sus paradas en el viaje, el tabernáculo debía ser levantado en el centro del campamento de los israelitas.

5. El tabernáculo debía tener dos habitaciones.

El Lugar SantoEl Lugar Santísimo

6. El arca y el propiciatorio debían ser hechos y puestos dentro del lugar santísimo.

Dios les ordenó a los israelitas que hicieran una caja.

Éxodo 25:10-11 “Harán también un arca de madera de acacia, cuya longitud será de dos codos y medio, su anchura de codo y medio, y su altura de codo y medio. Y la cubrirás de oro puro por dentro y por fuera, y harás sobre ella una cornisa de oro alrededor.” Dios les ordenó a los israelitas que construyera

una tapa para la caja. Éxodo 25:17-20 “Y harás un propiciatorio de oro fino, cuya longitud será de dos codos y medio, y su anchura de codo y medio. Harás también dos querubines de oro; labrados a martillo los harás en los dos extremos del propiciatorio. Harás, pues, un querubín en un extremo, y un querubín en el otro extremo; de una pieza con el propiciatorio harás los querubines en sus dos extremos. Y los querubines extenderán por encima las alas, cubriendo con sus alas el propiciatorio; sus rostros el uno enfrente del otro, mirando al propiciatorio los rostros de los querubines.”

6. El arca y el propiciatorio debían ser hechos y puestos dentro del lugar santísimo.

Dios ordenó a los israelitas que colocaran la caja y la tapa en el lugar santísimo

Éxodo 25:21-22 “Y pondrás el propiciatorio encima del arca, y en el arca pondrás el testimonio que yo te daré. Y de allí me declararé a ti, y hablaré contigo de sobre el propiciatorio, de entre los dos querubines que están sobre el arca del testimonio, todo lo que yo te mandare para los hijos de Israel.”

7. Una cortina o velo debía colgar entre el lugar santo y el lugar santísimo.

El Velo o Cortina

Éxodo 26:31-33 “También harás un velo de azul, púrpura, carmesí y lino torcido; será hecho de obra primorosa, con querubines; y lo pondrás sobre cuatro columnas de madera de acacia cubiertas de oro; sus capiteles de oro, sobre basas de plata. Y pondrás el velo debajo de los corchetes, y meterás allí, del velo adentro, el arca del testimonio; y aquel velo os hará separación entre el lugar santo y el santísimo.”

8. El tabernáculo debía tener un atrio.

Éxodo 27:9 “También harás un velo de azul, púrpura, carmesí y lino torcido; será hecho de obra primorosa, con querubines; y lo pondrás sobre cuatro columnas de madera de acacia cubiertas de oro; sus capiteles de oro, sobre basas de plata. Y pondrás el velo debajo de los corchetes, y meterás allí, del velo adentro, el arca del testimonio; y aquel velo os hará separación entre el lugar santo y el santísimo.”

9. El altar de bronce debía ser puesto dentro del atrio.

Éxodo 27:1-2 “Harás también un altar de madera de acacia de cinco codos de longitud, y de cinco codos de anchura; será cuadrado el altar, y su altura de tres codos. Y le harás cuernos en sus cuatro esquinas; los cuernos serán parte del mismo; y lo cubrirás de bronce.”

9. El altar de bronce debía ser puesto dentro del atrio.

Levítico 1:1-5 “Llamó Jehová a Moisés, y habló con él desde el tabernáculo de reunión, diciendo: Habla a los hijos de Israel y diles: Cuando alguno de entre vosotros ofrece ofrenda a Jehová, de ganado vacuno u ovejuno haréis vuestra ofrenda. Si su ofrenda fuere holocausto vacuno, macho sin defecto lo ofrecerá; de su voluntad lo ofrecerá a la puerta del tabernáculo de reunión delante de Jehová. Y pondrá su mano sobre la cabeza del holocausto, y será aceptado para expiación suya. Entonces degollará el becerro en la presencia de Jehová; y los sacerdotes hijos de Aarón ofrecerán la sangre, y la rociarán alrededor sobre el altar, el cual está a la puerta del tabernáculo de reunión.”

9. El altar de bronce debía ser puesto dentro del atrio.

Cuando un israelita traía un animal al altar de bronce, debía poner su mano sobre la cabeza del animal ofrecido, el hombre se identificaba a sí mismo con el sacrificio. La mano en la cabeza simbolizaba el pecado del individuo cuya culpa era transferida al animal. Por tanto el animal cargaba el pecado del hombre y, como consecuencia, debía morir. La muerte es lo que se cobra por el pecado. El que ofrecía el sacrificio degollaba la víctima y al hacerlo reconocía que era su pecado lo que causaba la muerte del animal. La enseñanza importante era que el inocente moría en lugar del culpable, como un substituto. La Biblia dice que Dios aceptaba este sacrificio en favor del hombre.

El sacrificio era un cuadro que representaba lo que era necesario para que el pecado fuera perdonado.

10. Dios escogió a Aarón y a sus hijos para que le sirvieran como sacerdotes.

Éxodo 28:1 “Harás llegar delante de ti a Aarón tu hermano, y a sus hijos consigo, de entre los hijos de Israel, para que sean mis sacerdotes; a Aarón y a Nadab, Abiú, Eleazar e Itamar hijos de Aarón.”

Dios dijo quién podía entrar al lugar santísimo.

Levítico 16:2-3 “ Y Jehová dijo a Moisés: Di a Aarón tu hermano, que no en todo tiempo entre en el santuario detrás del velo, delante del propiciatorio que está sobre el arca, para que no muera; porque yo apareceré en la nube sobre el propiciatorio. Con esto entrará Aarón en el santuario: con un becerro para expiación, y un carnero para holocausto.”

10. Dios escogió a Aarón y a sus hijos para que le sirvieran como sacerdotes.

Aarón debía llevar la sangre de un animal al lugar santísimo.

Levítico 16:15 “Después degollará el macho cabrío en expiación por el pecado del pueblo, y llevará la sangre detrás del velo adentro, y hará de la sangre como hizo con la sangre del becerro, y la esparcirá sobre el propiciatorio y delante del propiciatorio.”

10. Dios escogió a Aarón y a sus hijos para que le sirvieran como sacerdotes.

Antes de que Aarón pudiera entrar al lugar santísimo, tenía que matar un animal y recoger su sangre en una vasija. Luego, debía llevar la sangre detrás de la cortina gruesa que colgaba entre las dos habitaciones. Allí, Aarón tenía que rociar la sangre sobre el propiciatorio.

Dios prometía perdonar los pecados que el pueblo de Israel hubiera cometido durante ese año que terminaba. Pero Él sólo los perdonaría si Aarón hacía todas las cosas exactamente como el Señor había instruido a Moisés.

¿Podía la sangre de animales que Aarón llevaba al lugar santísimo pagar por los pecados? ¡No! La sangre de los animales no podía pagar por sus pecados. El castigo por el pecado es la muerte, y esto incluye el hecho de que el pecador sea separado de Dios para siempre en el lago de fuego.

El pecado debe ser pagado en su totalidad. Sin embargo, Dios prometía aplazar el juicio que ellos merecían y perdonar los pecados que habían cometido ese año si acudían a Él con fe y de la manera que les había dicho. Dios sólo aceptará a los que se acercan a Él de la manera que Él dice en la Biblia.

Dios sólo aceptará a los que se acercan a Él de la manera que Él

dice en la Biblia.