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Apolo y el Oráculo de Delfos

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Es el dios de la música, de la sabiduría, de la medicina, de la adivinación... Se le identifica a veces con Helios, el Sol (por conducir un carro de oro, al igual que a su hermana Ártemis se la identifica con la Luna, por llevar un carro de plata).

Los dos hermanos (Apolo y Ártemis) eran hijos de Zeus y de la Titánide Leto. Fue la última aventura que Zeus tuvo con una diosa inmortal, ya que por entonces ya estaba casado con Hera. Esta, celosa, la persiguió por toda la superficie de la Tierra, hasta que llegaron a la isla de Delos, donde la pobre Leto consiguió, exhausta, dar a luz a los dos gemelos.

M. Franchescini: Leto

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Cuatro días después de su nacimiento, Apolo mató a la serpiente oracular Pitón, que vivía en Delfos junto a la Fuente de Castalia, fuente que emitía los vapores causantes de que el oráculo de Delfos hiciese sus profecías.

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Apolo y la medicina

Apolo, dios de la salud y la medicina, transmitió sus facultades a su hijo Asclepio, que a su vez lo superó hasta tal punto que no sólo impedía que los hombres murieran, sino que además resucitaba a los muertos. Según dicen, esto no complacía a Zeus, ni, por supuesto, a la misma Muerte. Por eso fulminó a Asclepio con un rayo.

Apenado Apolo por la muerte de su hijo amado, y no atreviéndose a alzar la mano contra su padre, se vengó matando a los Cíclopes, que habían fabricado el rayo con que Zeus dio muerte a Asclepio.

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Apolo y la música

Hermes, recién nacido, robó a Apolo un rebaño de hermosas vacas blancas. Apolo descubrió al niño con una lira que había fabricado con un caparazón de tortuga y las tripas del animal, y le ofreció darle el rebaño a cambio del instrumento. A partir de ahí extendió su patronazgo a la música y las artes.

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Apolo se enfrentó con el sátiro Marsias, que pretendía tocar música mejor que él. El ganador podría tratar al perdedor como quisiera.

Marsias tocó mejor que Apolo, pero éste puso la lira boca abajo y tocó la misma melodía. Marsias no pudo hacer lo mismo con su flauta, por lo que fue vencido. Las Musas estuvieron de acuerdo con Apolo y le otorgaron la victoria.

El sátiro fue desollado vivo por su hybris, al atreverse a desafiar a un dios.

Giulio Carpioni: Apolo y Marsias

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Apolo y el amor

No tuvo suerte el dios en las lides amorosas. Su primera amada, DAFNE, lo aborreció hasta tal punto que prefirió trasformarse en laurel antes que ser tocada por Apolo. Desde entonces el laurel fue su árbol sagrado.

J.W. Waterhouse. Apolo y Dafne

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"A Dafne los brazos ya le crecíany en luengos ramos vueltos se mostraban;

en verdes hojas vi que se tornabanlos cabellos que el oro oscurecían;

de áspera corteza se cubríanlos tiernos miembros aún bullendo estaban;

los blancos pies en tierra se hincabany en torcidas raíces se volvían

Aquél que fue la causa de tal daño,a fuerza de llorar, crecer hacía

este árbol, que con lagrimas regaba.

¡Oh miserable estado, oh mal tamaño,que con llorarla crezca cada día

la causa y la razón por que lloraba!”

Soneto: Garcilaso de la Vega Escultura:Bernini, Apolo y Dafne

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MARPESA eligió como marido a Idas (un hombre mortal) en lugar de Apolo porque temía que el dios la abandonara al llegar ella a su vejez.

CORÓNIDE, con quien llegó a tener relaciones, prefirió a Isquis, su novio de toda la vida, en lugar de Apolo. Se enteró el dios por un cuervo que aquellos se habían casado. Apolo maldijo al cuervo, que de blanco se volvió negro, y dio muerte a Corónide, que estaba encinta, rescatando a su hijo Asclepio de la pila funeraria en que estaba siendo incinerada.

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También CASANDRA rechazó a Apolo, después de haberle prometido que consentiría en estar con él si le enseñaba el arte de la adivinación. Pero como luego de haber recibido lo que pedía, todavía lo rechazaba, Apolo la despojó del poder del convencimiento. Nadie la creía, así que de nada le sirvió su don.

Tuvo relaciones con un joven llamado JACINTO, a quien mató involuntariamente al arrojar un disco. En el lugar donde su sangre manchó la hierba, brotó una flor.

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Apolo y el arco

Apolo pidió a su padre Zeus, como regalo cuando este lo llevó junto con su hermana Ártemis al Olimpo, un arco de oro, con flechas y faretra del mismo material.

Los arqueros consideran a Apolo su señor, pues, como es sabido, este dios dispara desde la distancia.

Así mató a los hijos de NÍOBE, reina de Tebas, que alardeó de su superioridad sobre Leto porque había tenido catorce hijos, siete varones y siete mujeres, mientras Leto había tenido sólo dos. Apolo mató a sus hijos, a pesar de sus súplicas, y Ártemis a sus hijas.

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La desconsolada Níobe huyó al monte Sípilo en Asia Menor y se convirtió en piedra sin cesar de llorar.

Sus lágrimas formaron el río Aqueloo.

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El Oráculo

Se ha descrito el sitio del oráculo como una cueva profunda en la tierra con una apertura angosta por la que subía el aliento que inspiraba a la pitonisa, que se sentaba sobre un alto trípode, Así, al recibir el aliento divino, pronunciaba los oráculos, en prosa o en verso.

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Se dice que sólo cuatro días después de su nacimiento, Apolo fue al Monte Parnaso y mató a Pitón, el dragón que pronunciaba oráculos y que había perseguido a su madre, Leto, para matarla.

Fue así que Apolo se hizo cargo del oráculo de Temis en Delfos, designando a unos marineros cretenses, cuya nave navegaba de Cnosos a Pilos, como los primeros sacerdotes del santuario. El dios, al divisarla, se convirtió en un delfín y trajo la nave al Golfo de Crisa (en la costa norte del Golfo de Corinto). Los sacerdotes llamaron a la ciudad Delfos, porque cuando el dios se les apareció con la figura de un delfín, les había dicho:

«Así como yo al principio, en la brumosa mar semejante a un delfín, salté sobre la veloz nave así, llamadme Delfinio al invocarme; y Delfinio será el propio altar...» [Apolo a los marineros cretenses. Himno a Apolo Pítico 493]

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Según la leyenda, Zeus mandó volar a dos águilas desde dos puntos opuestos del Universo. Las águilas llegaron a encontrarse en Delfos, donde una piedra cónica llamada ónfalos muestra el lugar. La piedra, en forma de medio huevo, fue encontrada durante las excavaciones cerca del templo de Apolo. Por eso el santuario se convirtió en el ombligo o centro religioso de toda Grecia.

Se dice también que el ónfalos fue la piedra que Rea entregó a Crono en lugar de su hijo Zeus, y que el Titán vomitó junto con el resto de sus hijos.

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La consulta

Peregrinos de toda Grecia y muchos extranjeros acudían al oráculo caminando desde Atenas o en barco hasta el puerto llamado Itea en la actualidad.

Al llegar al magnífico templo de Apolo, se purificaban en las aguas de la fuente de Castalia. Entonces salpicaban una cabra con agua fría y si temblaba con todo el cuerpo se sacrificaba y se autorizaba al peregrino a hacer su pregunta.

Luego pagaba su tarifa y esperaba a ser atendido. La pitonisa recibía la pregunta escrita en una tablilla y entraba en trance para responderla.

Un sacerdote interpretaba luego sus balbuceos y escribía la respuesta en verso para entregarla al peregrino.

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Las respuestas

Las respuestas solían ser más consejos que verdaderas predicciones, y en el caso de serlo resultaban ambiguas De todas formas, la fama de sus aciertos no sólo elevó a Delfos a la consideración del oráculo más fiable, sino que lo hizo mantenerse en todo su esplendor durante cientos de años.

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El escéptico CRESO, rey de Lidia, quiso asegurarse de la fiabilidad del oráculo antes de confiar en él, y así envió emisarios a varios oráculos para preguntarles en el mismo momento qué estaba haciendo el rey.

Solo Delfos dio una respuesta correcta: hirviendo una tortuga y un cordero en un caldero de cobre. Creso recompensó al oráculo con valiosos regalos y se atrevió a una pregunta crucial: ¿qué sucedería si se decidía a atacar a los persas? La respuesta fue que destruiría un gran imperio. Y así fue. Pero el imperio que destruyó fue el suyo propio.

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Delfos estuvo presente con sus predicciones durante toda la historia y la mitología de los griegos:

CADMO fundó Tebas siguiendo sus directrices.

EDIPO conoció la realidad de su tragedia investigando en el oráculo, pregunta tras pregunta...

ORESTES recurrió a él para saber si era lícita su venganza.

ACRISIO buscó su ruina y la de su hija Dánae por querer saber más de lo que convenía.

TIESTES perpetró la más terrible venganza de que se tiene noticia de acuerdo con sus instrucciones.

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El oráculo fue oficialmente clausurado por Teodosio hacia 385, pero algunos años antes había dejado clara su situación ante una consulta del emperador Juliano, el Apóstata, aquel soñador que intentó restablecer el culto de los antiguos dioses:

"Dile al rey esto: el templo glorioso ha caído en ruinas; Apolo ya no tiene techo sobre su cabeza; las hojas de los laureles están silenciosas, las fuentes y arroyos proféticos están muertos."

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Presentación elaborada por1ºB Bachillerato (2010-2011)

Departamento de Lenguas ClásicasIES Azahar, Sevilla

Web: Lais en Atenas

Imágenes: Wikimedia Commons

Chiron CC, imágenes del mundo clásico