View
218
Download
0
Category
Preview:
Citation preview
125
TALLER SOBRE
“Conservación del patrimonio natural y cultural, conceptos
básicos y definiciones”
Comité Académico sobre conservación de humedales latinoamericanos
ESTUDIOS DE LA ACADEMIA NACIONAL DE CIENCIAS DE BUENOS AIRES
122
2
“CONSERVACIÓN DEL PATRIMONIO NATURAL Y
CULTURAL, CONCEPTOS BÁSICOS Y DEFINICIONES”
Taller organizado por el Comité Académico sobre conservación de humedales latinoamericanos
Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires, el 15 y 16 de junio de 2016
Comité Académico sobre conservación de humedales
latinoamericanos
3
Fecha de catalogación:
Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires
Comité Académico sobre conservación de humedales
latinoamericanos
El presente trabajo se encuentra disponible sólo en versión
electrónica
© Academia Nacional de Ciencias de Buenos Aires
Av. Alvear 1711, 3º piso – 1014 Ciudad de Buenos Aires –
Argentina
www.ciencias.org.ar
correo-e: info@ciencias.org.ar
La publicación de los trabajos de los Académicos y disertantes
invitados se realiza bajo el principio de libertad académica y no
implica ningún grado de adhesión por parte de otros miembros de
la Academia, ni de ésta como entidad colectiva, a las ideas o
puntos de vista de los autores.
ISBN
ISBN EN TRÁMITE
4
ÍNDICE
Dr. Luis O. Bala: Taller Conservación del patrimonio natural y cultural conceptos básicos y definiciones……………………….......5
MSc. Alejandro Manuel Arias: La conservación in situ de la biodiversidad…………………….………………………………………7
Lic. Carlos Fernández Balboa: La vinculación entre el patrimonio natural y cultural para su gestión y conservación……...………..13
Mlgo. Claudio Bertonatti: Los bienes y servicios que brinda la biodiversidad a la sociedad………………………………………......30
Dr. Luis Oscar Bala: Conservación de aves playeras. Intereses económicos y el aporte de la ciencia………………………………..46
MSc. Obdulio Menghi: Conservación, Uso Sostenible y Tráfico Ilegal - La Vicuña como ejemplo…………………………………….58
Dres. Jorge V. Crisci & Liliana Katinas: El fin de las colecciones de historia natural en un tiempo de extinciones………………….80
Dres. L. O. Bala, M.N. Castex, A. Arias, C. Bertonatti, C.
Fernández Balboa: Reflexiones y conclusiones del taller “Conservación del patrimonio natural y cultural, conceptos básicos y definiciones”……………………………………………..….97
Galería de Imágenes del evento……………................................100
5
TALLER CONSERVACIÓN DEL PATRIMONIO NATURAL Y
CULTURAL,
CONCEPTOS BÁSICOS Y DEFINICIONES.
Por LUIS OSCAR BALA1
A partir de diferentes ópticas sobre Conservación, abordadas
mediante conferencias, el taller tuvo como propósito generar un
espacio de discusión para la elaboración de un documento que
describa algunos aspectos sobre el estado actual de la
conservación en la Argentina, sus modalidades y los conflictos
con las actividades humanas.
La elección del tema del taller fue producto de una amplia
consulta entre colegas, al considerar que el concepto de
Conservación está inserto en la sociedad, pero su definición y
alcances no siempre están lo suficientemente clarificados,
situación que no excluye a muchos profesionales. Muy
probablemente, lo planteado pueda estar asociado al uso casi
cotidiano del concepto de “Biología de la Conservación”, que sólo
interpreta a los procesos que involucra a los seres vivos.
La mecánica empleada se basó en el dictado de siete conferencias
que abarcaron un amplio espectro sobre la temática, y que
sirvieron como disparadoras para el intercambio de ideas que
involucró tanto a los conferencistas como al calificado público
1Académico Correspondiente. Instituto Diversidad y Evolución Austral,
CCT CENPAT-CONICET luis@cenpat.conicet.gob.ar
6
participante. Finalmente, se consensuaron las conclusiones, las
cuales se entregan al final de este cuadernillo.
Conferencias y expositores
“Ciencia y conservación”. Académico Dr. Mariano N. Castex
(ANCBA)
“La conservación in situ de la biodiversidad”. MSc.
Alejandro Arias (Fundación Vida Silvestre Argentina)
“Vinculación del Patrimonio Natural y Cultural: similitudes y diferencias”. Lic. Carlos Fernández Balboa (Fundación
Vida Silvestre Argentina)
“Los bienes y servicios que brinda la biodiversidad a la sociedad”. Mlgo. Claudio Bertonatti (Fundación de Historia
Natural Félix de Azara)
“Conservación de aves playeras. Intereses económicos y el aporte de la ciencia”. Académico Dr. Luis O. Bala (ANCBA)
“Conservación, uso sostenible y tráfico ilegal: la vicuña como ejemplo”. MSc. Obdulio Menghi (Fundación
Biodiversidad)
“El fin de las colecciones de historia natural”. Dr. Jorge
Crisci (Facultad de Ciencias Naturales y Museo, UNLP)
7
LA CONSERVACIÓN IN SITU DE LA BIODIVERSIDAD
Por ALEJANDRO MANUEL ARIAS1
Resumen:
El 12% del territorio nacional está bajo alguna figura de conservación
que abarca una gran diversidad de ambientes naturales. Fundación
Vida Silvestre Argentina hace más de 20 años que trabaja en
conservación dentro de la Península Valdés desde distintas aristas,
pero el salto significativo lo dio en el 2004 cuando compró la Ea. San
Pablo (establecimiento con ganadería ovina) y un año después crea la
Reserva de Vida Silvestre San pablo de Valdés cuyo principal objetivo
es el de conservar muestras representativas de ecosistemas terrestres y
costeros que contribuyan a los procesos ecológicos del Área Natural
Protegida Península Valdés, así como la protección del patrimonio
paisajístico, natural y cultural del área y a la promoción del desarrollo
de actividades productivas sustentables. La reserva se implementó con
una visión de planificación a 20 años fortaleciendo el programa de
investigación y monitoreo de la fauna y flora. Diez años de reserva
manejada con una visión de largo plazo, garantizando los monitoreos de
fauna y flora en el tiempo, impulsando la investigación científica y
sumando sinergias con distintas instituciones y actores, permitieron
llegar a las siguientes conclusiones: 1) el área protegida ha respondido
positivamente a la clausura de ganado, aumentando su biodiversidad y
la calidad de sus suelos; y 2) la información científica generada a través
de los monitoreos ha permitido corroborar la utilidad de las áreas
protegidas en la recuperación de la flora y fauna y es un insumo
fundamental para apoyar o contrastar medidas de manejo para la
región. Finalmente, esta valiosa información surge de una planificación
a largo plazo, garantía presupuestaria, el armado un equipo
permanente de profesionales y el planteamiento de objetivos claros y
consistentes en el tiempo.
1MsC.en Educación Ambiental. Fundación Vida Silvestre Argentina.
alejandro.arias@vidasilvestre.org.ar
8
Abstract
Twelve percent of the national territory is under some figure of
conservation that covers a wide diversity of natural environments.
Fundación Vida Silvestre Argentina has been working in conservation
in the Peninsula Valdés for more than 20 years from different angles,
but the significant step was made in 2004 when bought San Pablo, a
sheep ranch of 7360 ha, to create, a year later, the San Pablo de Valdés
Wildlife Reserve. Main goals were to conserve representative terrestrial
and coastal ecosystems that contribute to the ecological processes of the
Natural Protected Area Península Valdés, as well as, the protection of
the landscape, natural and cultural heritage of the area, and the
promotion of the development of sustainable productive activities. The
reserve is managed with a 20 year planning vision that strengths the
scientific research program and monitoring of the fauna and flora. After
ten years of management with this long-term vision, guaranteeing the
monitoring of fauna and flora over time, promoting scientific research
and adding synergies with different institutions and actors, we can
conclude that: 1) the protected area has responded positively to the
closure of cattle by increasing its biodiversity and the quality of soils;
and 2) the scientific information generated has allowed corroborating
the usefulness of protected areas in the recovery of flora and fauna, and
has become a fundamental input to support or contrast management
measures for the region. Finally, this valuable information was only
possible through a long-term planning, budget guaranteed, the
establishment of a permanent team of scientific professionals, and the
set of clear and consistent objectives over time.
En nuestro país se conservan aproximadamente unas 34
millones de hectáreas bajo distintas figuras legales: Parques
Nacionales, Reservas Provinciales y Municipales y Reservas
Privadas. Esto equivale al 12% del territorio nacional y abarca
una gran diversidad de ambientes naturales.
La Fundación Vida Silvestre Argentina desde hace más de 20
años que ve a la Península Valdés como un área prioritaria de
conservación y desde siempre apoya y participa en acciones y
9
proyectos que contribuyen a la investigación y la conservación de
la naturaleza, y al uso sustentable de los recursos naturales del
área. Pero el salto significativo dentro de Valdés, lo hace en el
año 2004 cuando compra un campo ganadero, la Ea. San Pablo.
Un año después, Fundación Vida Silvestre transforma ese campo
de 7360 has en la Reserva de Vida Silvestre San Pablo de Valdés,
cuyo principal objetivo de su creación es el de conservar muestras
representativas de ecosistemas terrestres y costeros que
contribuyan a los procesos ecológicos del Área Natural Protegida
Península Valdés, así como la protección del patrimonio
paisajístico, natural y cultural del área y a la promoción del
desarrollo de actividades productivas sustentables.
Mapa de la zona núcleo del Área Natural Protegida
Península Valdés, donde en color rojo se observa la
ubicación de la Reserva de Vida Silvestre San Pablo de
Valdés.
La reserva por su ubicación geográfica tiene una gran variedad
de ambientes naturales, una riqueza paleontológica y
antropológica única y una diversidad de fauna y flora autóctona
de patagónica. Pero el campo se encontraba en un proceso de
deterioro muy avanzado principalmente en los ambientes de
estepa y monte bajo, producto de la sobrecarga ovina durante
décadas.
10
En ese contexto, la primera acción que se toma es realizar el Plan
de Manejo (de cuatro programas) de la reserva con una visión a
20 años donde el primer programa que se pone en
funcionamiento es el Programa de Monitoreo de la Fauna y
Flora. Así, en 2005, se comenzó con los primeros monitoreos
donde el diseño de los mismos buscaba responder preguntas del
pasado del campo y obtener respuestas de cómo después de
retirar todo el ganado doméstico los ambientes, la flora y la fauna
silvestre reaccionarían a ese cambio. Los objetivos de este
programa fueron: a) Conocer cómo reaccionó el campo después de
la clausura del ganado, b) Generar información técnica-científica
que permita conocer cómo funcionan los diferentes ecosistemas
de la reserva, teniendo en cuenta sus componentes biológicos y
variables ambientales y c) transferir las lecciones aprendidas en
nuestra reserva al área protegida provincial.
Los resultados obtenidos en los siete monitoreos que se realizan
dentro de San Pablo de Valdés durante estos 10 años son
positivos y demuestran una gran resiliencia de los ambientes y la
fauna. Sólo a modo de ejemplo, el primer monitoreo propuesto fue
el de guanacos (Lama guanicoe) que en el año 2005, en el primer
censo, se registraron unos 280 guanacos mientas que en el año
2015, más de 3000 ejemplares (Fig. 1). Otro ejemplo es que no se
tenía la presencia de predadores tope dentro de la reserva y en
los últimos años se tiene registros de pumas (Puma concolor).
Grupo de guanacos (Lama guanicoe) dentro de la Reserva
San Pablo de Valdés.
11
Fig. 1. Densidad poblacional post-reproductiva dentro de la
RSPV (círculos negros) y en campos cercanos en la zona sur
de PV (círculos vacíos) durante el período monitoreado. Las
barras representan los errores estándar de las
estimaciones.
Desde el punto de vista del manejo de la reserva y del
cumplimiento de sus objetivos, los monitoreos particulares son
como fichas de un gran rompecabezas cuyos resultados sirven
como guía para tomar decisiones sobre el manejo de la reserva
año a año. Pero lo relevante son los resultados de los monitoreos
en el largo plazo, porque permite que cada pieza del
rompecabezas empiece a encastrar una con otra mostrando una
gran figura que es cómo funciona el ecosistema estudiado.
Diez años de reserva manejada con una visión de largo plazo,
garantizando los monitoreos de fauna y flora en el tiempo,
impulsando la investigación científica y sumando sinergias con
distintas instituciones y actores, permiten llegar a las siguientes
conclusiones: 1) El área protegida ha respondido positivamente a
12
la clausura de ganado, aumentando su biodiversidad y la calidad
de sus suelos. 2) La información científica generada a través de
los monitoreos ha permitido corroborar la utilidad de las áreas
protegidas y es un insumo fundamental para apoyar o contrastar
medidas de manejo para la región. Y 3) Esta valiosa información
surge de: Planificación a largo plazo; Garantía presupuestaria;
Armar un equipo permanente de profesionales y Objetivos claros
y consistentes en el tiempo.
Bibliografía
Codesido, M; A.M. Beeskow; P. Blanco & A. Johnson. 2005.
Relevamiento ambiental de la “Reserva de Vida Silvestre San
Pablo de Valdés”. Caracterización ecológica y evaluación de su
condición como unidad de conservación y manejo. Fundación Vida Silvestre Argentina, informe final, 47 pp.
Codesido, M; D. Moreno & A. Johnson. 2008. Plan de manejo
Reserva de Vida Silvestre San Pablo de Valdés. Fundación Vida Silvestre Argentina, Buenos Aires, Argentina. 87 pp
13
LA VINCULACION ENTRE EL PATRIMONIO NATURAL
Y CULTURAL PARA SU GESTION Y CONSERVACION.
Por CARLOS FERNÁNDEZ BALBOA1
Resumen:
Se propone y fundamenta una serie de acciones y gestiones para
vincular la naturaleza y la cultura tanto para la comunicación a la
sociedad, como también para gestionarla en aspectos políticos y legales.
Los ejemplos de otros países como Estados Unidos, España o más
cercano a nosotros Bolivia, nos permite ver que el modelo de
“Patrimonio integral” es clave para poder llevar adelante una gestión
que garantice el uso sustentable de los bienes culturales y naturales.
Parcializamos la realidad para poder comprenderla y estudiarla. Pero
para gestionarla y comunicarla creemos que es fundamental empezar a
trabajar inter-y multidisciplinariamente.
Abstract: Proposed and founded a series of actions and efforts to link the nature
and culture both for communication to society, as well as manage it in
political and legal aspects. Them examples of others countries as
United States, Spain or more close to us Bolivia, us allows view that the
model of "heritage integral" is key for to carry forward a management
that ensures the use sustainable of them goods cultural and natural.
We parcializamos the reality to be able to understand and study it. But
to manage it and communicating it believe that it is essential to start
working inter - and multidisciplinary.
Introducción
Uno de los problemas ambientales más importantes está
centrado en la falencia educativa y cultural: el hombre ha
olvidado que forma parte de la naturaleza y que depende de
ella, más o menos igual que hace miles de años. Si
partimos de conceptos como “Cultura” vemos que nace
también de otro que es “Cultivo”, a partir del cual se 1Licenciado en Museología, Fundación Vida Silvestre Argentina.
cfbalboa@gmail.com
14
comienza a vincular fuertemente lo natural con lo cultural.
Sin lugar a dudas nuestra realidad cultural es compleja:
La cultura de Argentina es diversa, debido a que es un país
multicultural, como consecuencia de la variedad geográfica
y la presencia y combinación de las muchas identidades
étnicas de los grupos que fueron contribuyendo a su
población, principalmente de Europa.
El escritor argentino Ernesto Sábato ha reflexionado sobre
la naturaleza de la cultura argentina del siguiente modo: “Fracturada la primitiva realidad hispanoamericana en esta cuenca del Plata por la inmigración, sus habitantes venimos a ser algo dual, con todos los peligros pero asimismo con todas las ventajas de esa condición: por nuestras raíces europeas vinculamos de modo entrañable el interior de la nación con los perdurables valores del Viejo Mundo; por nuestra condición de americanos, a través del folclore interior y el viejo castellano que nos unifica, nos vinculamos al resto del continente, .sintiendo de algún modo la vocación de aquella Patria grande que imaginaron San Martín y Bolívar” - La cultura argentina tiene como
origen la mezcla de otras que se encontraron durante los
años de las inmigraciones, esta complejidad si bien
enriquece, también problematiza a nuestra sociedad hasta
el objetivo de ponernos de acuerdo en formas de vida, en
cosas esenciales que hacen al bien común, entre otras el uso
de nuestros recursos naturales y culturales.
El hombre divide a las ciencias y las artes para poder
comprenderlas
Para estudiarlas, analizarlas y transformarlas en recursos
que generen una mejora en su calidad de vida. Sin
embargo la realidad no se encuentra parcializada, los
ambientes son un conjunto de relaciones entre lo natural y
lo cultural. Toda visión o uso que se haga de la naturaleza
15
es cultural. Se parte de conceptos utilitarios como el de
Recurso: Un recurso es una fuente o suministro del cual se
produce un beneficio. Normalmente los recursos son
material u otros activos son transformados para producir
beneficio y en el proceso pueden ser consumidos o no estar
más disponibles. Desde una perspectiva humana, un
recurso natural es cualquier elemento obtenido del medio
ambiente para satisfacer las necesidades y los deseos
humanos. Desde un punto de vista ecológico o biológico más
amplio, un recurso satisface las necesidades de un
organismo vivo. También a partir de las ciencias se estudia
desde distintos aspectos y algunos vinculan ambos términos
que nos convocan como cuando definimos Ambiente o medio
ambiente: Comprende el conjunto de valores naturales,
sociales y culturales existentes en un lugar y en un
momento determinado, que influyen en la vida del ser
humano y en las generaciones futuras.
Es decir, no se trata solo del espacio en el que se desarrolla
la vida, sino que también comprende seres vivos, objetos,
agua, suelo, aire y las relaciones entre ellos, así como
elementos tan intangibles como la cultura. Desde
movimientos como el Proteccionismo o el veganismo. O
desde el conservacionismo que comienza fuertemente en los
Estados Unidos. Con el nombre de conservacionismo se
designa al movimiento social que propugna esa manera de
manejar la naturaleza vinculada siempre al concepto de uso
racional. Una de sus vertientes es el movimiento ecologista.
Los debates entre Conservacionistas y Ecologistas aparecen
a principios del siglo XX.
16
John Muir Theodore Roosevelt
Los conservacionistas, liderados por el Presidente Theodore
Roosevelt y su estrecho aliado Gifford Pinchot, señalaron que la
mayoría de los recursos naturales en los Estados occidentales
debían pertenecer al gobierno federal y el mejor curso de acción,
argumentaron, era un plan a largo plazo ideado por expertos
nacionales para maximizar los beneficios económicos a largo
plazo de los recursos naturales.
Los ecologistas en cambio, liderados por John Muir (1838–1914),
predicaban que la naturaleza era sagrada y los seres humanos
son los intrusos que deberían mirar pero no desarrollarla,
responsable de definir la posición ecologista, en el debate entre la
conservación y el ecologismo.
Resta aun analizar –y gestionar – seriamente a la naturaleza
como un bien patrimonial (y si es posible analizarla desde el
patrimonio integral, considerando los bienes culturales muebles
e inmuebles, tangibles e intangibles y los naturales.
17
El Patrimonio Integral es entendido como un entramado de
productos naturales y culturales, en parte visibles y en parte
invisibles, pero aun así verificables en la cultura, a través de los
cuales se construye la Identidad y que incluye “los medios de
producción cultural, entendidos como las técnicas y procesos de la
misma” (Sarabia, 1994).
La biología de la conservación es una reciente disciplina
científica de síntesis que se consolidó en la década de 1980 como
respuesta a la pérdida de biodiversidad (Simberloff, 1988). Se
ocupa de estudiar las causas de la pérdida de diversidad biológica
en todos sus niveles (genética, individual, específica,
ecosistémica) y de cómo minimizar esta pérdida. Para ello
integra contribuciones de disciplinas muy diferentes, tales como
la ecología, la genética, la biogeografía, la biología del
comportamiento, las ciencias políticas, la sociología, la
antropología, etc. A pesar de su aparente abordaje inter-
disciplinario, continua con una visión centrada en la biología y
resulta complejo encontrar ejemplos donde se traten las
problemáticas de preservación desde un enfoque inter- tras
disciplinario.
18
Cuadro que establece las bases y objetivos de la biología de la
conservación.
Las políticas de conservación en el mundo se definen bajo
consideraciones culturales o políticas y no basadas en el
conocimiento científico.
El planteo central de nuestra ponencia es que las políticas
de conservación en el mundo (y Argentina no es una
excepción) se definen bajo consideraciones culturales o
políticas y no basadas en el conocimiento científico.
Presentamos algunos ejemplos de ello:
Los gastos y mayores inversiones para investigación y
conservación se asignan a especies “bandera” o
“carismáticas”: El panda, los grandes felinos, ciervos.
Mientras que otras especies igualmente importantes o
significativas para los ecosistemas y de comprobadas
interés desde el punto de vista ecológico no recibe igual
atención, ya que, culturalmente son considerados “feos”, o
19
poco importantes, no interesa los hallazgos e importancia
que se le brinde a los murciélagos como polinizadores o
“desinfectantes naturales” del ambiente, nunca recibirán la
misma consideración para su conservación que los felinos.
Lo mismo sucede con anfibios, reptiles, insectos (muchos de
ellos beneficiosos para el hombre) etc.
En la Argentina existen cerca de 500 especies de
vertebrados amenazados de extinción. La máxima categoría
de protección para una especie silvestre es la de
“Monumento Natural” esta la reciben cinco especies que –
sin discutir su nivel de extremo peligro- son consideradas
culturalmente bellas, carismáticas y “emblemáticas” por
distintos motivos.
El huemul, la taruca, el yaguareté y la ballena franca
austral. Lejos de esta categoría se encuentran la rana del
Chalhuaco o el bello Maca Tobiano, aun siendo que están
amenazadas seriamente de extinción y no sólo eso, sino que
son exclusivas de nuestro país. ¿A qué se debe esta fuerte
diferenciación? Lo asignamos al marketing, a la estética y a
una visión cultural que deja afuera de esta categoría de
protección extrema a –por ejemplo- el venado de las
pampas, considerado el ciervo más amenazado de América.
Sin embargo, aún el bagaje cultural y político no ha
comenzado su andamiaje para brindarle a este habitante de
las pampas argentinas la mayor defensa jurídica que la
ciencia establece que merece.
20
¿Porque el Huemul es monumento natural de los argentinos
y el Venado de las pampas no? Decisiones políticas
(culturales) alejadas de la ciencia ya que esta los ubica en el
mismo grado de grave amenaza
Con las áreas protegidas tenemos la misma falta de criterio
científico.
Esto también sucede con las categorías de protección que el
estado le asigna a las áreas protegidas lo que implica
diversos esfuerzos económicos y técnicos. ¿Qué determina
la categoría de parque Provincial al denominado Ernesto
Tornquist, enclavado en la zona central del Sistema de
Ventania?
El parque Tornquist por su biodiversidad y valor
patrimonial merecería tener otra categoría de conservación
mayor que la provincial.
Conocido por los aborígenes como Casuhati, protege grupos
plantas endémicas de Ventania, exclusivas de estas sierras,
21
entre las cuales se puede mencionar a Plantago bismarckii conocido como llantén plateado o pinito plateado, que por lo
general crece en los roquedales de pendiente suave. Se
trata de un arbusto leñoso que se desarrolla en forma de
"bola" y es la especie considerada "emblema del Sistema de
Ventania".
También hay gramíneas como el "pasto de las sierras”
(Festuca ventanicola). Otras especies endémicas son el
(Senecio ventanensis) y las margaritas de las cumbres
(Grindelia ventanensis), que se desarrollan a gran altura en
las cumbres y solo florecen en verano. El lupino pampa
(Lupinus aureonitens), endémico de toda la región
Pampeana, se desarrolla también en el parque, pero su
conservación se encuentra amenazada. Las "rosaditas"
(Olsynium junceum subsp. lainezii), de flores muy bonitas
en primavera, solo crecen en el sistema de Ventania y el
sistema de Tandilia, entre pastizales de las sierras. Otra
especie endémica es la malva de las sierras (Pavonia cymbalaria) que sólo crece en ambientes rocosos. La poa de
las sierras (Poa iridifolia), otra de las especies exclusivas.
El parque es el hábitat de las endémicas iguanas de cobre
(Prystidactylus casuhatiensis), que por lo general suelen ser
avistadas en primavera y verano y cuenta con al menos tres
especies vegetales. El Parque provincial Ernesto Tornquist,
como reserva, ha sido incluido entre las Áreas Valiosas de
Pastizal (AVPs) identificadas para Argentina, Uruguay y
sur de Brasil. Con estos endemismos y siendo una de las
pocas representaciones del pastizal argentino ¿no merecería
una categoría mayor de protección como la de Parque
Nacional? Si dejáramos que la ciencia nos dictara este
concepto seria lo correcto, pero la política y la cultura
establece que siga siendo muy baja su categoría de
protección y por lo tanto también los recursos económicos
que el estado le brinda para garantizarlo.
22
Las Misiones Jesuiticas son un buen ejemplo de un bien
cultural inserto en un paisaje natural, se requieren los dos
conceptos para conservarlas con eficacia.
Algunos sitios de valor universal
Cuando no todos, pero en algunos es más evidente)
requieren una mirada integradora e interdisciplinaria para
su efectiva conservación. Dos casos paradigmáticos lo
establecen las Misiones Jesuíticas y la cueva de las Manos
en el cañadón del Rio Pinturas (Santa Cruz). ¿Cómo
representar claramente la dificultad y los modos de vida de
la selva, escenario donde se produce el sincretismo cultural
esencial, del que las ruinas jesuíticas guaraníes son sólo
una parte del testimonio material encarnado por los
Jesuitas? Donde el territorio, los recursos naturales
condicionaron absolutamente la forma de vida de las
Misiones. ¿Se puede comunicar la historia obviándolo o no
considerando este factor en su justa dimensión?
23
Algo similar sucede con el Cañadón del Rio Pinturas y la cueva
de las Manos. Las pinturas rupestres son una consecuencia, un
rasgo de la forma de vida de esas comunidades de la estepa
patagónica que hace unos 11.000 años eran los dueños absolutos
del territorio. Abstraerse sólo a las pinturas sin considerar los
materiales con que se hicieron…el entorno y los motivos
(esencialmente naturales) no tendría sentido en cuanto a lo que
se espera transmitir o representar como una historia en la
actualidad. Queda manifestada la necesidad de presentar un
patrimonio integral.
Las instituciones oficiales dedicadas a la conservación también
están sectorizadas por tipo de patrimonio (cultural, por un lado,
natural por otro) perdiéndose importantes oportunidades de
poder conseguir una mirada integradora y política completa, ya
que, desde el punto de vista de la gestión, la comunicación y la
acción pública los bienes tienen una naturaleza integral. No es
casual tampoco la denominación de nuestros máximos
organismos de conservación patrimonial:
24
El símbolo cultural (una flecha) que identifica fuertemente a la
Administración de Parques Nacionales. Sin embargo, hay poca
importancia de los aspectos culturales en el máximo organismo
de conservación del nuestro país.
Por un lado, la Comisión Nacional de Sitios y Lugares Históricos
(una comisión es un conjunto de personas elegidas para realizar
una determinada labor en representación de un colectivo.) vale
aclarar que hasta hace no mucho tiempo la labor de la Comisión
era ad-honoren, con la importancia que eso puede brindar a un
cargo público (todavía algunos miembros lo siguen siendo de
hecho) Desde el lado natural, la Administración de Parques
Nacionales, es eso: un sistema Administrativo. Con mucho
prestigio y antigüedad pero que deja afuera al ciudadano común,
ya que administra los bienes a favor de otros. Tal vez haya sido
otro el pensamiento de Francisco P. Moreno, nos da la idea de
que sí. La APN data de 1934, cuando fue creada por ley federal
Nº 12 103/34 con el nombre de Dirección de Parques Nacionales.
Juntamente con ella se creó el segundo parque nacional del país,
el Parque Nacional Iguazú. El primero, el parque nacional del
Sud, llamado luego Nahuel Huapi, había precedido a la APN por
12 años; había sido creado en el terreno anexo a las 7500
hectáreas donadas a la Nación en 1903 por Francisco Pascasio
Moreno, junto al lago Nahuel Huapi en la provincia de Río Negro.
La gestión del patrimonio es un proceso dinámico y no puede
escapar a las necesidades de brindar un servicio a la sociedad.
Así lo entendió, justamente, el Servicio de Parques Nacionales
25
(National Park Service o NPS sus siglas en inglés) es la agencia
federal estadounidense encargada de la gestión de los Parques
nacionales, Monumentos Nacionales y otros lugares protegidos.
Se creó el 25 de agosto de 1916 a través de una Ley Orgánica del
Congreso, con el fin de "…Promocionar y regular el uso de los
parques nacionales, cuyo propósito es conservar el escenario y los
objetos naturales e históricos, así como la vida salvaje que
contienen y proveer el disfrute de los mismos de tal manera que
se mantengan en su estado para el disfrute de las generaciones
futuras). Pertenece al Departamento de Interior del Gobierno de
los Estados Unidos. No todas las áreas protegidas son
competencia del National Park Service, por ejemplo, la Isla Ellis,
considerada monumento nacional, pertenece al órgano gestor del
Monumento Nacional de la Estatua de la Libertad. En todos los
estados hay una oficina de representación del Servicio.
Las organizaciones no gubernamentales replican el sistema de
los estados y abordan sus esfuerzos de conservación separada y
temáticamente
Logos de instituciones no gubernamentales de alcance universal,
el World Monument desde lo cultural y el Fondo Mundial de la
Naturaleza en lo Natural.
Así, el World Monuments Fund (WMF) es una organización
privada, internacional, sin fines de lucro, dedicada a la
preservación de sitios de arquitectura histórica y
patrimonio cultural de todo el mundo a través de trabajo de
campo, promoción, concesión de subvenciones, educación y
formación. Fundada en 1965, la WMF tiene su sede en
26
Nueva York, y cuenta con oficinas y filiales en todo el
mundo, entre ellos Camboya, Francia, Perú, Portugal,
España y el Reino Unido. Además de la gestión práctica, los
afiliados identifican, desarrollan y administran proyectos,
negocian alianzas locales, y atraen apoyo local para
complementar los fondos aportados por los donantes, por su
lado el WWF (del inglés World Wildlife Fund; en español:
‘Fondo Mundial para la Naturaleza’) es la mayor
organización conservacionista independiente en el mundo.
Su misión es detener la degradación del ambiente natural
del planeta y construir un futuro en el que los seres
humanos vivan en armonía con la naturaleza: Conservando
la diversidad biológica del mundo. / Garantizando el uso
sostenible de los recursos naturales renovables.
/Promoviendo la reducción de la contaminación y del
consumo desmedido. World Wildlife Fund cuenta con unos 5
millones de miembros y una red mundial de 27
organizaciones nacionales, 5 asociadas y 22 oficinas de
programas, que trabajan en más de 100 países.
A nivel nacional contamos con más de 2000 organizaciones
(desde barriales hasta nacionales) que se ocupan del
patrimonio ya sea en sus formatos natural o cultural. Por
un motivo de extensión solo mencionaremos dos: La
Fundación Vida Silvestre Argentina, por el lado del
patrimonio natural y Basta de Demoler, en lo que hace a la
gestión activa de la preservación del patrimonio construido.
Insistimos en que falta todavía una mirada INTEGRAL a la
situación del patrimonio donde los abordajes puedan darse
desde lo emocional hasta lo técnico académico en igual
proporción e importancia.
Tal vez un camino a transitar sea los recientes abordajes
que la UNESCO realiza en virtud de los Paisajes
Culturales, en estos casos las declaratorias son
necesariamente integradoras a diversos factores. Aún, a
27
pesar de los comités y formas explicitas resultan necesarios
las diversas miradas que exige este tipo de sistema.
Los paisajes patrimoniales son un campo emergente en el debate
científico y los paisajes culturales de la Lista del Patrimonio
Mundial son un interesante objeto de reflexión, puesto que
poseen un relevante reconocimiento internacional y representan
una categoría en expansión de esta Lista. América Latina y El
Caribe, como región de Unesco, tiene una presencia en la Lista
relativamente por debajo de lo que significaría un registro
representativo de bienes culturales en la escala planetaria.
Ambas circunstancias representan oportunidades para
acrecentar sus paisajes culturales en la Lista, y, sobre todo, para
profundizar en el conocimiento y valoración de una figura que
sintetiza el acervo patrimonial de una comunidad y se erige en
una potencialidad para el desarrollo territorial y el incremento
de la calidad de vida de las poblaciones. La Argentina tiene dos
ejemplos de este formato: La Quebrada de Humahuaca y el
Camino Real Andino cuya complejidad está dada por su
estructura burocrática y la necesidad de que una diversidad de
países, desde Colombia hasta Argentina, se pongan de acuerdo
en las políticas de preservación.
28
El Camino real Andino es una demostración de la necesidad de
ponerse de acuerdo internacionalmente para conservar un
paisaje cultural (que tiene una implicancia natural intrínseca)
En resumen, muchas veces el conocimiento técnico o científico
específico no es utilizado por los agentes de conservación para
garantizar la preservación del patrimonio natural y cultural.
Decisiones políticas, oportunistas y arbitrarias tienen más peso,
y parece que así sucederá en los próximos años. Si queremos
tener más éxito en nuestros objetivos de preservación deberíamos
recurrir a la interdisciplinaridad (en serio) y a buscar todas las
estrategias posibles que garanticen la preservación a largo plazo.
Cerramos con una frase de R. Musil (1930), transcripta en su
obra “El hombre sin atributos”:
“Los últimos cien años nos han permitido aumentar infinitamente nuestro conocimiento de nosotros mismos, de la naturaleza y de todas las cosas; pero de ello resulta que todo el orden que ganamos en los detalles lo volvemos a perder en el conjunto, de modo que disponemos siempre de más ordenes (en plural) y siempre de menos orden (en singular)”.
29
Bibliografía Bertonatti, Claudio- Corcuera Javier: Situación Ambiental
Argentina 2000. Fundación Vida Silvestre Argentina. 2000
Brailovsky, Antonio. Memoria Verde. Historia Ecológica de la
Argentina. Editorial Sudamericana. 2000.
Carson, Rachel L: Primavera Silenciosa. Editorial Grijalbo 1980
Chebez, Juan Carlos: Los que se van. Vertebrados argentinos que
se extinguen. Editorial Albatros. 2011
Erize, Francisco y Otros: Los Parques Nacionales de Argentina y
otras de sus áreas naturales. Editorial El ateneo.1996
Erlich, Paul & Anne: Extinción: causas y consecuencias de la
desaparición de las especies. 2 volúmenes. Editorial Salvat. 1984.
Latour de Botas Olga E. Fernández De Barrantes Marta Silvia C
Ruiz. La búsqueda de la identidad Nacional Durante la Década
del 30. Fundación el Libro.1986
Munro, David. A (Coordinador) Cuidar la Tierra. Estrategia para
el futuro de la vida. Unión Mundial para la Naturaleza. PNUMA.
Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente WWF.
Fondo Mundial para la Naturaleza. 1991
Musil, R. El Hombre sin atributos. Editorial Rowohlt Verlag.
1930.
Ponting; Clive : Historia Verde del Mundo. Editorial Paidos.1992
Puigbro Raúl. La identidad Nacional Argentina y la Identidad
Sudamericana. Editorial Nuevo Extremo. 1988
Reig, Osvaldo: Excelencia o atraso, historia de la ciencia en la
Argentina. Ediciones Nuevo Extremo. 1984
30
LOS BIENES Y SERVICIOS QUE BRINDA LA
BIODIVERSIDAD A LA SOCIEDAD
Por CLAUDIO BERTONATTI 1
Resumen:
Es sabido que la Argentina cuenta con más de 12.000 especies de
plantas y vertebrados silvestres y autóctonos, muchos de ellos,
endémicos. Esa riqueza contrasta con la pobreza del conocimiento que
tiene la sociedad sobre su patrimonio natural. La enorme mayoría de
los argentinos es incapaz de nombrar 10 ejemplos de plantas y animales
autóctonos de su región. Y desconocen los bienes y servicios que ellos y
los ecosistemas silvestres les brindan. Esta situación, en buena medida,
explica la escasa valoración que se tiene de la naturaleza y el continuo
deterioro que experimenta. Pero también representa el desafío que la
sociedad tiene para reaccionar en favor de un desarrollo compatible con
la conservación de su patrimonio natural y cultural.
Abstract:
It is known that Argentina has more than 12,000 species of plants and
wild and native vertebrates, many of them endemic. This wealth
contrasts with the poverty of society's knowledge of its natural heritage.
The vast majority of argentines are unable to name 10 examples of
plants and animals native to their own region. And they do not know
the goods and services that they and the wild ecosystems give them.
This situation, to a large extent, explains the lack of appreciation of
nature and the continuous deterioration it experiences. But it also
represents the challenge that society has to react in favor of a
1Naturalista y museólogo. Fundación de Historia Natural Félix de
Azara.
31
development compatible with the conservation of its natural and
cultural heritage.
Inicialmente, es importante contextualizar lo que sigue dentro
del concepto de patrimonio. Y más específicamente, desde el
patrimonio integral. Es decir, del legado natural y cultural que
hemos recibido de las generaciones que nos precedieron, con su
conjunto de testimonios y bienes (escasos y de alto valor
simbólico) que conviven con nuestro presente. Este patrimonio
que integra “lo natural” con “lo cultural” es un producto o
construcción social que se valora e interpreta dinámicamente en
función del devenir de ideologías e intereses.
La biodiversidad no escapa a esa construcción social ni a ese
devenir. En los 80 Edward Osborne Wilson instala el concepto
(como una contracción de diversidad biológica) y en los 90 se
populariza (Wilson 1992). La Convención sobre la Diversidad
Biológica (CDB) -de la cual la Argentina es parte signataria- la
define como la totalidad de los seres vivos en sus diversas
manifestaciones, incluyendo las especies y los ecosistemas.
Reconoce, entonces, una diversidad genética, de especies y de
ecosistemas.
32
El largo proceso que llamamos evolución modeló ese conjunto de
formas de vida y en sus distintos niveles. Hay distintas formas de
ver esto porque la biodiversidad es un complejo biológico que en
una de sus múltiples facetas nos presenta a su vez una gran
variedad de bienes y servicios. Hay distintas perspectivas para
revisarlos: funcionales, estructurales y composicionales para
cada uno de los tres niveles de biodiversidad mencionados.
Esta riqueza biológica, como se ha dicho, nos brinda bienes y
servicios vitales para el desarrollo de la vida y de la humanidad
en particular. Sin embargo, la percepción sobre esta dependencia
es tan precaria que su conservación suele obedecer más a una
presión social que a una convicción que determine políticas de
Estado en esa dirección.
33
Pese a los miles de años de evolución humana nuestra
dependencia de los bienes y servicios de los ecosistemas
silvestres sigue siendo la misma.
Desde el Pleistoceno (iniciado hace unos 2,5 millones de años) al
Holoceno (10.000 para a nuestros días) hemos evolucionado sin
conciencia plena acerca de esa dependencia. Desde que nuestra
especie, Homo sapiens, puso sus primeros pies en la Tierra (hace
unos 200.000 años) necesitó de los bienes y servicios de la
naturaleza, tanto materiales como espirituales. La evidencia fósil
y arqueológica así lo demuestra.
Como si fuera poco, en la Argentina, al menos, todavía
convivimos con casi 39 pueblos originarios que históricamente
nos lo han recordado y nos lo recuerdan cada vez que los
visitamos o analizamos como viven. Pero nuestra sociedad
urbana no se muestra muy amante de la antropología, de la
arqueología ni de la historia y su memoria es frágil. Hasta no
hace más que unas pocas generaciones, esos recursos debían
tomarse de un modo directo. Las materias primas o recursos que
tomamos de la naturaleza se extraen lejos de donde hoy vive la
34
mayoría de las personas. Y esa provisión indirecta hace una gran
diferencia en el campo de la percepción, el sentido de pertenencia
y de dependencia.
En pocas generaciones no solo nos olvidamos de la importancia
de esos bienes y servicios, sino que modificamos el paisaje
amenazándolos. Hasta los espacios recreativos corren peligro.
Muchos recordarán que entre 1918 y 1950, en la Costanera Sur,
en el actual espacio ocupado por la Reserva Ecológica, funcionó el
Balneario Municipal, a donde iban los habitantes de Buenos
Aires para disfrutar de un día junto al Río de la Plata. Pero
cuando el deterioro de las aguas empeoró, los porteños fueron
dejando atrás este paseo y hoy la mayoría ni sabe de esa función
social del río (Wais de Badgen 2011)
Hemos demostrado una fuerte capacidad modeladora del paisaje.
No solo lo transformamos sino que olvidamos haberlo hecho,
perdiendo la memoria o recuerdos sobre sus beneficios.
35
Nos hemos aislado física y espiritualmente del mundo natural en
cápsulas de ecosistemas artificiales, casi parasitarios… Y los
bienes del mundo natural los tomamos de un modo “encubierto”,
en envases, comercios y supermercados ignorando en la mayoría
de los casos su origen. Y aunque vivamos cerca de lo que queda
de naturaleza y hasta de reservas naturales urbanas la mayoría
de las personas rara vez las visita. Le damos la espalda más que
el corazón y la razón.
En cada país parecieran existir muchos países, con
cosmovisiones, valores y circunstancias muy diferentes, con
asimetrías pronunciadas e injustas social y ambientalmente.
Sin embargo, desde que nos levantamos hasta que nos vamos a
dormir, desde que nacemos hasta que morimos, consumimos
bienes y servicios prestados por la biodiversidad. De un modo
básico, necesitamos lo mismo que el hombre del paleolítico: agua
potable, suelos fértiles, aire puro, plantas y animales. Pero
pareciera que creemos que lo que necesitamos en realidad es
dinero y supermercados. Así nos va. Pero en un mismo país hay
distintas realidades. Y si en un país como la Argentina (con un
36
tercio de pobres) no hay más pobres ni indigentes es porque
queda naturaleza y porque su biodiversidad los subsidia
silenciosa, generosa e ingratamente.
Si repasamos nuestras actividades cotidianas comprobaremos
con mucha facilidad nuestra dependencia de los recursos
naturales cuya calidad y abundancia no estamos cuidando
(oxígeno, agua potable, suelos fértiles, especies comestibles, etc).
La Argentina cuenta con 18 regiones ecológicas, más de 10.000
especies de plantas (el 17% endémicas) y cerca de 880 especies de
peces, 200 de anfibios, 330 de reptiles, 1.100 de aves, 370 de
mamíferos y miles de otros organismos con inventarios
incompletos y fragmentarios. Esta diversidad biológica se
traduce en una amplia oferta de bienes. Los bienes son productos
tangibles (componentes de un ecosistema) y los servicios son
beneficios intangibles (funciones o estructuras de un ecosistema).
Los ecosistemas naturales (sobre todo los climáxicos) nos brindan
bienes y servicios de un modo constante y gratuito (De Groot et
al. 2002).
37
Ejemplos de bienes:
Agua: para consumo o riego.
Plantas: comestibles, medicinales, textiles, tintóreas,
industriales, madera, leña, carbón.
Animales: cueros, pieles, plumas, huevos, carnes,
mascotas, medicinas, transporte o carga.
Suelos y minerales: para cultivos o aprovechamiento
minero.
La oferta de esos recursos ha generado hasta oficios tradicionales
(varios extintos y otros amenazados), como el de los
mariscadores, tigreros, pumeros o leoneros, hacheros, nutrieros,
iguaneros, junqueros, sabaleros, tareferos, loberos, balleneros,
pingüineros, guanaquero, chulengueador, vicuñero, pulperos,
pajareros, yunguero o vendedor de yuyos…
38
El uso sostenido y específico de algunos recursos naturales ha
generado oficios tradicionales como el de los vicuñeros, loberos,
balleneros, pingüineros, pulperos, sabaleros, etc.
La Organización Mundial de la Salud (2002) afirma que el 80%
de la población de los países en desarrollo se cura casi
exclusivamente con plantas medicinales silvestres. Sin embargo,
sólo se estudia una minoría de ellas para conocer sus principios
activos. En México representa el 5 % de las 4 mil especies
medicinales conocidas allí. La doctora Rosa Martha Pérez
Gutiérrez, investigadora de la Escuela Superior de Ingeniería
Química e Industrias Extractivas del Instituto Politécnico
Nacional de ese país, en más de 30 años de estudio sobre las
propiedades medicinales de una larga lista de plantas de uso
popular ratificó que alrededor del 95 % de las veces se confirma
el efecto curativo atribuido. En la Argentina y muchos países de
la región pareciera que la etnobotánica es una disciplina
marginal cuando debería ser central en los programas de
investigaciones oficiales.
39
Ejemplos de servicios:
Protección de cuencas hídricas: captación aguas, control o
amortiguación de inundaciones y sequías, retención de
sedimentos.
Protección de suelos: fijación de nutrientes, fertilidad.
Protección de la producción biológica: polinización,
descomposición, controles naturales de especies
problemáticas.
Protección atmosférica y regulación climática: generación
de oxígeno y fijación de Carbono.
Pero además de los bienes materiales y los servicios intangibles
(Wilson & Carpenter 1999), también hay bienes inmateriales.
Son valores espirituales, religiosos y artísticos, que generan
bienestar y salud. Recordemos la enorme cantidad de animales y
plantas silvestres que han inspirado canciones, poesías, mitos,
leyendas, supersticiones, cuentos y relatos que forman parte de
nuestra identidad.
¿Cuánto valoramos todo esto?
El valor de algo es un concepto relativo que depende del contexto
(Laterrra et al. 2011). Si su contexto cambia, el valor, también.
Es sabido que es mayor la valoración del uso directo (materias
primas, productos, cosechas) por sobre el indirecto (servicios
ambientales). A su vez, los valores de uso indirecto son mayores a
los valores opcionales (como los recreativos). Y por último, lo
menos “cotizados” son los valores de existencia (los estéticos,
artísticos, culturales, simbólicos, religiosos).
40
Los ecosistemas brindan bienes y servicios cuya valoración no
resulta obvia para la mayoría de los decisores de quienes
dependen. Gráfico basado en De Groot et al. 2002.
De un modo complementario pueden integrarse otros valores de
la biodiversidad: los ecológicos (dados por la sustentabilidad), los
socio-culturales (basado en la percepción comunitaria) y los
económicos (atribuidos a la eficiencia). Pero la valoración total
suele estar condicionada por las percepciones personales y el
contexto socio-político. Y a juzgar por los resultados ambientales,
la valoración que el Estado y la ciudadanía da a su patrimonio
natural ha sido escasa. En no pocos casos, se presentan los
síntomas del síndrome o efecto de Dunning-Kruger (Kruger &
Dunning 1999): los más incompetentes no sólo tienden a llegar a
conclusiones erróneas y tomar decisiones desafortunadas, sino
que su incompetencia les impide darse cuenta de ello. Por ello,
los problemas ambientales que parecen crónicos tienen origen en
unas pocas pero poderosas causas, como:
41
Los precarios valores sociales que se traduzcan en el
bien común, la solidaridad, la austeridad, el apego a
la ley, la justicia y la compasión por la naturaleza y
el patrimonio cultural.
El aumento de la presión demográfica.
La carencia de una visión y política que planifique un
desarrollo sostenible y sustentable.
La clara tendencia a aprovechar los recursos
naturales de un modo poco sostenible.
Estas causas desencadenan, por ejemplo:
- Deforestación sin control o ilegal.
- Expansión no planificada de las fronteras urbanas y
agropecuarias.
- Técnicas agropecuarias de alto impacto ambiental.
- Caza y pesca furtivas o descontroladas.
- Comercio ilegal de especies.
- Consumismo.
- Contaminación.
- Invasiones biológicas.
- Impactos no bien evaluados de las grandes obras de
infraestructura.
- Marco normativo deficiente e incumplido. Es decir,
impunidad.
- Insuficientes áreas protegidas y débilmente
instrumentadas en su mayoría.
- Educación y comunicación con objetivos
inapropiados, enfoques imprecisos o anacrónicos y
esfuerzos inconstantes.
A su vez, estos problemas acarrean estas consecuencias:
42
La reducción y fragmentación de la superficie de
ecosistemas silvestres.
Especies amenazadas y extintas.
El deterioro o pérdida de bienes y servicios
ecosistémicos (en cantidad y calidad).
Mayor pobreza, marginación y subdesarrollo (social,
económico, moral, ambiental).
Aunque cueste reconocerlo, nuestra capacidad de carga humana
sobre el planeta está saturada. Y no tenemos dos ni tres
planetas: hay uno solo y bastante maltratado. Lo conocemos poco
y lo cuidamos mal. Podríamos preguntar a quienes nos rodean en
este momento, ¿son capaces de mencionar los nombres de diez
especies de plantas y otras tantas de animales silvestres
autóctonos del área donde vivimos? Seguramente, la mayoría no
podrá hacerlo. Por consiguiente, esperar que esas personas se
preocupen y se ocupen de contribuir con la conservación de la
biodiversidad resulta incoherente, utópico o estúpido. Lo primero
es conocer. Lo segundo, valorar. Recién después de ello podemos
cultivar alguna pretensión o anhelo de conservación.
Ese aumento del conocimiento debe ser multidireccional,
comenzando por completar nuestros inventarios biológicos para
saber qué tenemos. Esa sería la primera medida de conservación:
el inventario. Por razones de “urgencia y necesidad”,
paralelamente debemos reforzar nuestros planes de conservación
in situ (a través de la creación y consolidación de las áreas
protegidas) integrándolos con los de la conservación ex situ
(desde los jardines botánicos, zoológicos, museos, bancos de
germoplasma, etc.), tal como lo estipula la Convención sobre la
Diversidad Biológica.
43
Museos, bancos de germoplasma, centros de rescate de especies,
zoológicos, acuarios y jardines botánicos debieran integrar sus
esfuerzos en planes formales para alcanzar sus objetivos de
conservación.
Esta visión es la que debería impulsarse como una cuestión de
Estado y no como el resultado de un conjunto de pasiones
personales que operan desde las fisuras del sistema. Tenemos
precursores y experiencias sobre las cuales gestar un cambio
profundo y positivo para conservar y administrar con
inteligencia, eficacia y eficiencia nuestra biodiversidad. Adolfo
Bioy Casares (1978) podría recordarnos que “El mundo atribuye
sus infortunios a las conspiraciones y maquinaciones de grandes
malvados. Entiendo que se subestima la estupidez”.
Pero así como existe la estupidez existe la inteligencia, la razón,
el estado de Derecho, la educación pública, la ciencia y las
personas de bien. Afortunadamente, también existen los
ecosistemas con gran capacidad de resiliencia y recuperación. Si
se imponen las fuerzas morales de la sociedad la combinación o
44
alianza con las fuerzas naturales será poderosa y esperanzadora.
A largo plazo no hay muchas opciones después de todo.
Y volviendo a la biodiversidad, si revisamos el funcionamiento de
un ecosistema recibiremos de él su máxima lección: la producción
constante de riqueza y sin dejar basura a su paso. Hay un
consumo constante de energías limpias, pero sin derrocharlas. Es
un círculo perfecto que nos debería inspirar para emular un
funcionamiento biomimético de nuestras industrias y ciudades.
Mientras tanto, la tierra nos sigue brindando su generosidad. Y
en silencio.
Bibliografía
Bioy Casares, Adolfo, Breve diccionario del argentino exquisito,
Emecé Editores, Buenos Aires, 1978, pp. 161.
De Groot, Rudolf S., Matthew A. Wilson & Roelof M. J. Boumans.
A typology for the classification, description and valuation of ecosystem functions, goods and services. Ecological Economics,
vol. 41 t. 3, 2002, pp. 393– 408.
Krugger, Justin & David Dunning, Unskilled and Unaware of it: Hoy Difficulties in Recognizing One´s Own Incompetence Lead to Inflated Self-Assessments, Journal of Personality and Social
Psychology, vol. 77, t. 6, 1999, pp. 1121-1134.
Laterrra, Pedro, Esteban G. Jobbágy & José M. Paruelo (Eds.),
Valoración de servicios ecosistémicos: conceptos, herramientas y aplicaciones para el ordenamiento territorial, Buenos Aires,
2011, pp. 740.
Organización Mundial para la Salud, Estrategia de la OMS sobre medicina tradicional 2002–2005, Ginebra, 2002, p. 1.
45
Wais de Badgen, Irene. La Reserva Ecológica Costanera Sur: Patrimonio natural y cultural de la Ciudad de Buenos Aires. Agencia de Protección Ambiental, Ministerio de Ambiente y
Espacio Público, Buenos Aires Ciudad, 2011, pp. 118.
Wilson, Edward O., The Diversity of Life, Harvard University
Press, 1992, pp. 440.
Wilson, M. A. & S. R. Carpenter. Economic Valuation of Freshwater Ecosystem Services
in the United States 1971-1997. Ecological Applications, vol. 9 t.
3, 1999, pp. 772-83.
46
CONSERVACIÓN DE AVES PLAYERAS. INTERESES
ECONÓMICOS Y EL APORTE DE LA CIENCIA
Por LUIS OSCAR BALA1
Resumen
En esta exposición se presentaron un par de casos que muestran las
diferentes realidades de dos poblaciones de aves playeras en función de
los intereses económicos que operan en los ambientes donde hacen
parada durante sus migraciones. En el primero de ellos, en el Valle del
Cauca (Colombia) los intereses afectaron positivamente a la población
del correlimos diminuto (Calidris minutilla) especie que se alimenta en
los arrozales durante sus fases inundadas. Aquí la población rural
consideraba a estas aves como plaga hasta que un grupo de científicos
demostró que no eran perjudiciales para el cultivo y que, por el
contrario, actuaban como controladores biológicos de los verdaderos
organismos plaga. Con ello, lograron que las aves utilicen los arrozales
para alimentarse y que los agricultores dejaran de utilizar
agroquímicos. Lo anterior, más la posterior generación del sello de
origen “Las Alas del Arroz” (arroz cultivado sin agroquímicos y amigo
de las aves) ha beneficiado económicamente a los productores por una
mejor cotización del producto en el mercado.
Como historia opuesta, tenemos el ejemplo del playero rojizo (Calidris canutus rufa) especie que, en una de sus paradas tróficas, en Bahía
Delaware (EEUU) se alimenta exclusivamente de las puestas del
cangrejo herradura Limulus polyphemus. Aquí, las presiones de las
industrias pesquera y farmacéutica, lograron que se autorice la captura
de cangrejos para utilizarlos como carnada en la pesquería de anguilas
y caracoles y para extraer su hemolinfa respectivamente. En definitiva,
pese a la postura de los científicos que anticiparon el problema a
desencadenarse, la extracción de cangrejos (ergo, la disponibilidad de
1Académico Correspondiente. Instituto Diversidad y Evolución Austral
(IDEAus) CCT CENPAT-CONICET luis@cenpat.conicet.gob.ar
47
huevos) provocó que la población de playeros tuviese un descenso tan
significativo que lo ha dejado al borde de su extinción.
Abstract
In this presentation, two populations of shorebirds under different
types of economic pressure operating on the sites where birds stop
during migration, were analyzed.
The first case in the Valle del Cauca (Colombia), economic interest
positively affected the least sandpiper (Calidris minutilla). This species
feeds on rice plantation during the flooding period of the crop. In this
place, local people considered the birds as plague. Scientific studies
demonstrated that birds were not harmful for the crop, but useful as
drivers of the control of the actual organisms responsible of the rice
crop plague. Then, when scientific advice was adopted, the birds could
freely feed on rice crops and farmers quit the use of agrochemicals. The
agrochemicals-free and bird-friendly production gave place to the
registered origin brand “Las Alas del Arroz” (Rice Wings) which gave
market and price benefits to the local farmers who could get a better
price for their produce.
On the other side, we have the opposite example with the red knot
(Calidris canutus rufa) a species that in one of the feeding stops in
Delaware Bay (USA) feeds exclusively on horseshoe crab (Limulus
polyphemus) eggs. Here, the fishing and pharmaceutical industries
pressured the authorities who allowed the capture of crabs to be used
as bait for eels and snails in order to extract their hemolymph. In spite
of the scientific point of view and recommendation anticipating the
conflict to come, the crab extraction (ergo, eggs availability) drove to a
significant reduction of the shorebird (red knot) population that is
about to become extinct.
Introducción
Las aves playeras se caracterizan por realizar grandes
migraciones. Como regla general, cada tramo de sus
desplazamientos une puntos de parada muy distantes entre sí,
en vuelos sin escala. El presente trabajo se basa en aspectos
48
biológicos y ecológicos de dos especies neárticas, el correlimos
diminuto (Calidris minutilla) y el playero rojizo (Calidris canutus rufa) y la influencia que tienen los intereses económicos en sus
historias de vida.
Las especies neárticas se caracterizan por reproducirse en el
Hemisferio Norte durante el verano boreal, para luego migrar
hacia el sur donde pasan el resto del año su etapa no
reproductiva.
Calidris minutilla se reproduce en la tundra subártica y en los
bosques boreales del norte de Norteamérica. Las poblaciones del
este realizan migraciones transoceánicas de 3.000 a 4.000 km,
viajando desde el Golfo de San Lorenzo y Nueva Inglaterra al
norte de Sudamérica, mientras que las poblaciones del oeste
viajan a través de Norteamérica por el Golfo y Centroamérica o a
través de la costa del Pacifico hasta el noroeste de América del
Sur.
Por su parte, Calidris canutus rufa se reproduce en la tundra
canadiense y migran hasta Tierra del fuego, donde pasan la
primavera y verano australes. Recorren aproximadamente
33.000 km cada año en sus viajes de ida y retorno. En estas
migraciones sólo hacen parada en menos de una decena de sitios
en todo el continente americano (diferentes según nos refiramos
a migración hacia el norte o hacia el sur) por lo que cada tramo
de sus vuelos ininterrumpidos, varía entre unos 3.000 y 8.000
km.
Para ambas especies, los sitios de parada son siempre los
mismos. Esta fidelidad a los sitios y a las especies presa que les
sirven como alimento en cada uno, los convierte en especies
altamente vulnerables: las condiciones de calidad ambiental de
49
cada parada deben ser excelentes, ya que actúan como cuello de botella donde las aves paran en una ventana temporal muy
estrecha y donde deben obtener la energía necesaria para poder
completar el siguiente tramo de su migración.
Calidris minutilla en los arrozales del Valle del Cauca, Colombia
De acuerdo con lo expresado por Cifuentes-Sarmiento (2014) el
cultivo de arroz, en muchos casos, se realiza en ambientes donde
previamente había humedales. Esta práctica agrícola presenta
ciclos alternos de drenaje e inundación, áreas de aguas someras,
heterogeneidad espacial y temporal, y modificación de sus
componentes fisicoquímicos. Los arrozales funcionan como
humedales temporales, siendo hábitat de una amplia gama de
organismos en los que se incluyen varias especies de aves,
especialmente acuáticas.
En el Valle del Cauca, el cultivo de arroz presenta diferentes
estadios. Las fases iniciales (preparación, inundación y plántula)
son bajo agua, mientras que las fases tardías (todo verde, espiga
madura, cosecha y barbecho) no reciben riego.
En los últimos años se ha vislumbrado que, ante el deterioro y
pérdida de humedales, los arrozales en estadios de desarrollo
iniciales pueden convertirse en humedales artificiales
proveyendo refugio, alimentación y zona de reproducción a aves
residentes y migratorias.
Colegas científicos observaron que en los arrozales del Cauca
había dispar presencia de aves en distintas fincas, y
comprobaron que dicha presencia ocurría en aquellas parcelas en
50
las cuales no se aplicaban agroquímicos ni insecticidas. El uso de
estos insumos no tenía una base histórica en la cultura local, sino
más bien una práctica impuesta a partir de 1960, cuando ocurrió
la “revolución verde”, que motivó la incorporación a los cultivos
de numerosas sustancias químicas (Cifuentes-Sarmiento, 2014)
Bajo este marco, se planteó realizar estudios para comprender la
interacción de los agroquímicos y los organismos que habitan los
arrozales. Así, en un primer paso se caracterizó a la comunidad
de organismos que habita en estos humedales y en una segunda
etapa se determinó la dieta de Calidris minutilla, la especie más
conspicua de la avifauna en dichos ambientes.
Respecto de la comunidad de organismos animales presente en
los ambientes de cultivo inundado, se determinaron
invertebrados distribuidos en nueve Clases: Aracnida, Bivalvia,
Clitellata, Diplopoda, Entognatha, Gasteropoda, Hirundinea,
Insecta y Ostracoda; 20 Ordenes y 90 taxones. Estos taxones, de
acuerdo a su actividad funcional, se clasificaron del siguiente
modo: depredadores (26), fitófagos (24), neutrales (35) y arañas
(5) (Cifuentes-Sarmiento, 2014). Bajo una visión más detallada,
se encontró que un tercio de las especies fitófagas son nocivas al
cultivo mientras que gran parte de los predadores se alimentan o
parasitan a lo anteriores. Asimismo, se ha demostrado que la
utilización de agroquímicos lleva a la resistencia y al
resurgimiento de los organismos nocivos (Hirai 1993) que son
relativamente más resistentes que los organismos benéficos.
Por otra parte, en la reconstrucción de la dieta de Calidris minutilla mediante análisis de regurgitados se encontraron 1410
elementos pertenecientes a 22 entidades taxonómicas de tres
Clases: Insecta (cuatro Ordenes y 15 Familias), Arachnida (dos
Familias) y Liliopsida (semillas y tallos de pastos y semillas de
Oryza sativa). Los insectos presentaron el mayor porcentaje
51
(91%) de presencia en los regurgitados, mientras los restos
vegetales y las arañas presentaron porcentajes bajos (8% y 1%,
respectivamente). Lo trascendente, es que en el 75,8% de las
muestras se encontraban larvas y adultos de Coleópteros,
organismos plaga en los cultivos de arroz. De este modo, el
correlimos diminuto es uno de los principales controladores de
estas especies nocivas para los cultivos. (Cifuentes-Sarmiento y
Renjifo, 2016).
Ante estas evidencias, los investigadores y una ONG local
plantearon la iniciativa “Las Alas del Arroz”, que propicia una
producción del cereal más limpia y amigable con el medio
ambiente, sin uso de insecticidas ni agroquímicos y con el control
biológico que ejercen las aves. Asimismo, se logró la certificación
Arroz Amigo de las Aves, sello que conlleva un valor agregado
para aquellos productores que utilizan estas prácticas.
La declinación poblacional del playero rojizo (Calidris canutus rufa) y del cangrejo cacerola (Limulus polyphemus).
El playero rojizo se caracteriza por sus enormes desplazamientos
migratorios, recorriendo unos 33.000 km al año. (Fig.1). Esta
especie se reproduce en la tundra ártica canadiense, durante los
meses de junio-julio (verano boreal). Su migración hacia el sur
presenta una primera parada en el Archipiélago de Mingan, en el
sur de Canadá; la siguiente escala se ubica en Surinam-Norte de
Brasil y desde allí, finalmente, se desplazan hasta Tierra del
Fuego adonde arriban a fines de septiembre-principios de
octubre.
52
En Tierra del Fuego pasan el verano austral (“invernada”, según
la literatura anglosajona) permaneciendo hasta fines de febrero,
concentrándose principalmente en Bahía San Sebastián y Río
Grande (Argentina) y Bahía Lomas (Chile).
En su desplazamiento hacia el norte, las primeras paradas
significativas se registran en costas de los golfos norpatagónicos
(golfos Nuevo, San José y San Matías) continúa en el sur de
Brasil (Lagoa do Peixe), para luego proseguir su vuelo hasta
Bahía Delaware (EEUU). Esta localidad es la última escala
previa a su llegada a los sitios de cría, en el Ártico. Se destaca
que el trayecto de unos 8.000 km entre Lagoa do Peixe y Bahía
Fig. 1: Ruta migratoria del playero rojizo. Explicación en el texto. SAO: San Antonio
Oeste; PV: Península Valdés.
53
Delaware constituye, a la fecha, el vuelo ininterrumpido más
extenso conocido para un ave por la ciencia (Niles et al. 2010).
La ruta descrita cita los puntos de mayor concentración de
individuos, pero no invalida que grupos menores puedan ser
observados en otros sitios de la costa. Por ejemplo, Río Gallegos,
Bahía Bustamante, Bahía Blanca y Punta Rasa son localidades
donde pueden observarse playeros rojizos. Un punto relevante
del proceso migratorio, es que los playeros deben arribar a cada
localidad de parada y alimentación durante una ventana
cronológica muy estrecha, durante la cual el recurso trófico reúne
estrictas condiciones de calidad, cantidad y accesibilidad. Por lo
tanto, cada uno de éstos sitios funciona como cuello de botella: si
en alguno de ellos el recurso trófico no es óptimo, las aves pueden
no acumular las reservas necesarias para completar la migración
y, con ello, se pone en riesgo la supervivencia de la especie.
Para comprender mejor la dependencia de los playeros rojizos por
el recurso trófico, hay que considerar que esta especie, previo al
inicio de cada desplazamiento migratorio reduce todos sus
órganos, con excepción del cerebro, para aligerar su peso y
reducir su gasto energético durante el vuelo. La expresión de este
proceso es máxima en el sistema digestivo, que queda
notablemente reducido (Piersma et al, 1999a).
Así, toda vez que arriba a un nuevo sitio reconstruye su tubo
digestivo, pero morfológicamente adecuado al tipo de alimento
que obtendrá en dicha parada según sean alimentos blandos o
duros (Piersma et al, 1999b). Este proceso, al que arribaron en su
evolución, convierte a estos playeros en dependientes de las
condiciones de la comida que debe consumir en cada parada. Su
fidelidad por la presa consumida está en directa correlación con
el tubo digestivo que reconstruyen en cada sitio.
54
Si bien los playeros rojizos son básicamente malacófagos, en
Bahía Delaware se alimentan de huevos del cangrejo cacerola1
Limulus poliphaemus que liberan las hembras en pequeños pozos
que excavan en la arena costera durante la primavera tardía.
La población del cangrejo cacerola ha sufrido, principalmente a
finales de la década del 90, una significativa disminución por
sobrepesca, en virtud de su extracción por industrias pesquera y
farmacéutica. Respecto de la industria pesquera, el cangrejo
herradura es utilizado como cebo en la pesquería de la anguila
americana (Anguilla rostrata) y del caracol Busycon sp. (Kreamer & Michels, 2009).
Los intereses farmacéuticos sobre Limulus poliphaemus se
centran en las propiedades de su hemolinfa, rica en hemocianina
y amebocitos semejantes a los leucocitos de los vertebrados, los
cuales reaccionan ante las endotoxinas bacterianas,
coagulándose. El litro de hemolinfa tiene un valor de mercado de
US$ 15.000 y su extracto, denominado LAL (Limulus Amebocyte
Lysate) se usa para verificar la presencia de endotoxinas en
inyectables parenterales. Cada medicamento certificado por la
Administración de Alimentos y Fármacos de Estados Unidos
debe ser probado usando LAL al igual que los implantes
quirúrgicos, tales como marcapasos y prótesis. De acuerdo a
Anderson et al (2013) si bien la práctica de extracción de
hemolinfa se realiza sobre animales vivos que luego son
devueltos al mar, la tasa de mortandad de los individuos
manipulados oscila entre el 10 y 30%, sin considerar los efectos
subletales.
1 pese a ser denominados “cangrejos”, esta especie no está emparentada
con este grupo de crustáceos.
55
La suma de intereses económicos que impactan sobre la
población de Lymulus en Bahía Delaware es sin dudas muy
importante. De acuerdo a Niles et al (2009) la extracción de
cangrejos durante la década del 90 fue tan intensa que se redujo
en más del 90% la disponibilidad de sus huevos con los que se
alimenta el playero. Así, de los 150-180.000 individuos que
conformaban su población en la década del 80, al presente sólo
sobreviven unos 11.000 individuos.
Finalmente vale acotar que hacia mediados de los 90, la práctica
de utilizar cangrejos como cebo por la industria pesquera, motivó
a la comunidad científica internacional a expresar formalmente
su preocupación ante las autoridades locales, por el impacto que
esta actividad provocaría a las diferentes especies de aves que se
alimentan de sus huevos. Este petitorio fue desestimado y sus
consecuencias, evidentes.
Conclusiones
Tras la breve descripción de los dos casos expuestos, las
conclusiones son muy simples y lineales. Para el caso de las
arroceras, la sinergia entre estudios científicos e intereses
económicos ha beneficiado no sólo a las aves playeras y acuáticas
sino a la comunidad de agricultores que se ven favorecido por
mayores ingresos, sin menoscabar el valor agregado que surge de
volver a prácticas agrícolas sin utilización de agroquímicos. Por
otra parte, la suma de intereses económicos (pesqueros y
farmacéuticos) han puesto al borde de la extinción al playero
rojizo y amenazan la población de cangrejos cacerola. Las
acciones de la comunidad científica, pese a manifestarse antes de
que ocurran los hechos, no fueron suficientes.
Las acciones de conservación deben tener como base el
conocimiento científico. Sin embargo, este capital no siempre es
56
suficiente para garantizar el éxito de las políticas de manejo
donde, muchas veces se involucran intereses económicos,
caracterizados como actores con elevado peso específico.
Finalmente, el ejemplo de los arrozales también resalta el valor
de otras acciones esenciales para la conservación: la
transferencia del conocimiento científico a la comunidad. Esta es
una herramienta sumamente poderosa, aunque pocas veces
utilizada.
Bibliografía
Anderson, R, W.H. Watson & C.C. Chabot. Sublethal Behavioral
and Physiological Effects of the Biomedical Bleeding Process on
the American Horseshoe Crab, Limulus polyphemus. Biological Bulletin 2013. 225: 137–151.
Cifuentes-Sarmiento, Yanira. Ecología alimentaria de aves
playeras en arrozales orgánicos del Valle del Cauca-Colombia.
Tesis de Maestría en Conservación y uso de la Biodiversidad.
Pontificia Universidad Javeriana, Bogotá. 2014. 68pp.
Cifuentes-Sarmiento, Yanira y Luis Miguel Renjifo. Dieta del
correlimos diminuto (Calidris minutilla) en cultivos de arroz
orgánico de Colombia. Ornitología Neotropical 2016. 27: 89–96
Hirai, K. Recent trends of insecticide susceptibility in the brown
planthopper Nilaparvata lugens (Stål) (Homoptera:
57
Delphacidae). Applied Entomology and Zoology 1993. 28: 339-
346.
Kreamer, Gary & Stewart Michels. History of Horseshoe Crab
Harvest on Delaware Bay. En: J.T. Tanacredi et al. (eds.) Biology and Conservation of Horseshoe Crabs. Springer Science Business
Media. 2009. pp 299-313.
Niles, L.J, J. Bart, H.P. Sitters, A.D. Dey, K.E. Clark, P.W.
Atkinson, A.J. Baker, K.A. Bennett, K.S. Kalasz, N.A. Clark, J.
Clark, S. Gillings, A.S. Gates, P.M. González, D.E. Hernandez,
C.D.T. Minton, R. I.G. Morrison, R.R. Porter, R.K. Ross & C.R.
Veitch. Effects of Horseshoe Crab Harvest in Delaware Bay on
Red Knots: Are Harvest Restrictions Working? BioScience 2009.
59: 153-164.
Niles, L.J., J. Burger, R.R. Porter, A.D. Dey, C.D.T. Minton, P.M.
Gonzalez, A.J. Baker, J.W. Fox & C. Gordon. First results using
light level geolocators to track Red Knots in the Western
Hemisphere show rapid and long intercontinental flights and
new details of migration pathways. Wader Study Group Bulletin
2010. 117: 123–130.
Piersma, T, G.A. Gudmundsson & K Lilliendahl. Rapid changes
in the size of different functional organ and muscle groups
during refueling in a long‐distance migrating shorebird.
Physiological and biochemical Zoology 1999(a). 72: 405-415
Piersma, T., M.W. Dietz, A. Dekinga, S. Nebel, J.V. Gils, P.F.
Battley & B. Spaans. Reversible size-changes in stomachs of
shorebirds: when, to what extent, and why? Acta Ornithologica
1999(b). 34: 175-181.
58
Conservación, Uso Sostenible
y Tráfico Ilegal - La Vicuña como ejemplo
Por OBDULIO MENGHI1
“….El conflicto no es entre la Conservación y el Desarrollo, sino entre el Ambiente y la incorrecta explotación que el Hombre hace de la Tierra en nombre de la eficiencia. La historia nos dice que la era moderna comenzó con el deseo de libertad del individuo. Y el individuo llegó a creer que tenía solo derechos sin ninguna obligación de retribución…” Sra. Indira Gandhi-Primer Ministro, República de la India - Extracto de su Discurso de Apertura de la Primera Cumbre Mundial sobre el Ambiente, Naciones Unidas – Estocolmo, Suecia – Junio de 1972
Resumen: Un día, en realidad no hace demasiado tiempo, un extraño
animal se diferenció de sus congéneres: se extrajo de la Naturaleza, la
colonizó, la trascendió, la transformó. Inventó la pareja, la familia, la
sociedad, el poder, el amor, y la guerra. ¿Por qué? ¿De dónde le vino esa
necesidad de espíritu indagador? ¿Su sed de conquistas? Sí! ¿Por qué el
Hombre? ¿Cómo fue que nos hemos transformado en lo que somos?
Podríamos decir que nuestro transcurso consiste de tres etapas que nos
cuentan tres epopeyas: la del territorio, la del imaginario, y la del
poder: al extraernos de la Naturaleza y haber desarrollado una
inteligencia y un imaginario muchas veces nos empuja a tratar de
entender, comprender, usar y también destruir la casa que nos acoge. Y
es así que vamos a desarrollar muy someramente algunos conceptos de
los cuales oímos mucho hablar y citar sin a veces saber a ciencia cierta
lo que significan. Vamos a tratar de resumir lo básico de una ciencia
como la Ecología muchas veces citada y pocas veces comprendida. Pero
también hablaremos de la biodiversidad, de su conservación, de su uso
sostenible y de algunos otros factores que la afectan, como el tráfico
ilegal de especies, citando como ejemplo la situación actual de la
Vicuña, una verdadera amenaza que desde hace un lustro pesa sobre
este importante camélido sudamericano.
Abstract: One day, actually not too long ago, a strange animal differed
from his fellows: extracted itself from Nature, colonized it, transpired it,
and transformed it. He invented mating, family, society and power; as
1 Presidente Fundación Biodiversidad-Argentina -
omenghi@fibertel.com.ar
59
well as love, and war. Why? Where did that need to question come
from? Or his thirst for conquest? Yes! Why Man? How did we, mankind,
become what we are?
We could say that our course consists of three stages that tell us three
epics: the one of territory, the one of imaginary, and the one of power:
because we have extracted ourselves from nature and have developed
an intelligence and an imaginary, we often feel pushed to try to
understand, use and destroy the house that we inhabit. This way, and
with the help of these knowledge questions, we intend to develop very
briefly some concepts of which we hear talk about often, and sometimes
quoted without even knowing for sure what they mean. We will try to
summarize the basics of a science like ecology, often quoted and seldom
understood. In addition, we will talk about biodiversity, its
conservation, its sustainable use and some other factors that affect it,
such as the illegal trade of wild species- mentioning, as an example, the
current situation of the Vicuña, which, for at least five years, this
important South American camelid is suffering a real threat.
Introducción
Los seres humanos, situados en la cúspide de la pirámide
evolutiva, y que buscan el desarrollo económico y el uso sin
control de los recursos naturales, deberán enfrentar, finalmente,
la finitud de ellos y la de los ecosistemas que los albergan, y
deberán tomar conciencia sobre lo que les están dejando a las
generaciones que nos siguen en el camino de esta cortoplacista
aventura de vivir.
La conservación de la naturaleza se ocupa de proteger
poblaciones de especies vegetales y animales, así como los
ecosistemas en los cuales habitan y corregir/subsanar las
eventuales degradaciones que estos podrían haber sufrido. Uno
de los mayores desafíos que enfrentamos como sus custodios es
reducir y controlar la deforestación, que se lleva a cabo
ilegalmente en la mayor parte del mundo, y en porcentajes
alarmantes, ya sea por el valor intrínseco de la madera/leña o por
el aumento cada vez más significativo de la agro-ganadería que
avanza cada vez más en detrimento de los bosques nativos.
60
Eso ocurre en gran medida debido a que la mayoría de los países
carecen de lo que se denomina “Ordenamiento Territorial” que es
una de las formas de asegurarnos un uso sostenible de la
cobertura vegetal, fundamental para el normal desenvolvimiento
de nuestras sociedades.
El concepto de la Conservación de la Naturaleza tiene raíces no
demasiado lejanas en el tiempo, y se origina en la cultura anglo-
sajona. Sus objetivos primigenios fueron evolucionando
lentamente a partir de mediados del siglo XX: Desde la protección patrimonial, tratando por ejemplo problemas circunscriptos a
determinadas catástrofes ecológicas, hacia una ciencia
estructurada de acciones globales tendientes a prevenir esos
problemas de una manera más eficaz.
La conservación es lo que podríamos también equiparar a una
ética del uso de los recursos naturales, cómo utilizarlos (Uso
consuntivo y no-consuntivo) y cómo, llegado el caso,
preservarlos/protegerlos (Véase Gráfico). Las palabras
conservación y preservación, son términos que se confunden con
frecuencia fuera de las literaturas académicas, científicas y
profesionales. La conservación y preservación están
estrechamente vinculadas y de hecho pueden parecer significar lo
mismo. Ambos términos implican un determinado grado de
protección, pero la forma en la cual se lleva a cabo esa protección
es diferente. La preservación concierne más bien a la protección
de determinados bienes culturales, paisajísticos y/o faunísticos
(migración de aves hacia un determinado ecosistema para
invernar, el cual se protege totalmente de cualquier actividad
humana, o bien a los Parque Nacional, nos referimos entonces al
llamado uso no-consuntivo). La conservación tiene por objeto el
uso sostenible de la naturaleza, mientras que su preservación
busca protegerla precisamente del uso.
Durante el movimiento ambientalista de principios del siglo 20,
surgieron dos facciones divergentes: los conservacionistas que
abogan por la reglamentación del uso de la naturaleza por parte
del Hombre, mientras que los proteccionistas tratan de eliminar
por completo el impacto ocasionado por este.
61
La conservación de la naturaleza es la base de lo que hoy
también conocemos como Biología de la Conservación, ciencia
relativamente nueva que utiliza los principios de la Ecología, de
la biogeografía, del paisaje, así como la dinámica y la genética de
las poblaciones de las especies que habitan en los ecosistemas.
Mientras que la Antropología, las Ciencias Económicas y la
Sociología también contribuyen en su triple objetivo de
protección, restauración-protección y/o manejo de la
biodiversidad.
El biólogo Michel Soulé, uno de los fundadores de esta nueva
ciencia, describe a la Biología de la Conservación como “la ciencia de lo escaso y de la diversidad”. Esta disciplina trata la dinámica
y los problemas de las especies, las comunidades y los
ecosistemas perturbados, siendo su objetivo establecer principios
y herramientas para preservar la diversidad biológica. El mismo
científico también describe la Biología de la Conservación como
una ciencia de la crisis donde biólogos y administradores deben
aportar soluciones rápidas y eficaces a importantes problemas de
conservación como, por ejemplo, preservar una población de una
62
determinada especie en peligro de extinción. Los biólogos deben
encontrar entonces planes de manejo y/o respuestas a
determinados problemas de conservación sobre los cuales no se
poseen todos los datos necesarios, puesto que determinados
principios científico/técnicos se encuentran aún en fase de
elaboración, y para los cuales todavía no se dispone de toda la
información sobre una determinada especie que permita
reaccionar en consecuencia.
El Siglo XX fue el "siglo del crecimiento", pero también el de la
disminución de los recursos naturales. La Ciencia y la Técnica
tienen que crear una poderosa actividad económica, que ayude a
crear fuentes de trabajo, esencial para luchar contra la pobreza;
Sin embargo, para diseñar esa economía es necesario una
verdadera revolución, ya que, como decía Einstein:
"Un problema no se puede resolver dentro del marco mental que lo creó"
El Hombre gasta más que lo que el planeta puede ofrecerle. Va
agotando el capital natural de la Tierra, y no los intereses que el
mismo planeta podría producir.
El 60 % de los “servicios” vitales que le ofrecen los ecosistemas ya
han sido degradados o sobre explotados
La Evaluación de los Ecosistemas para el Milenio agrupó por
primera vez en forma global e integrada a todos los
conocimientos existentes en ese ámbito: antropólogos, biólogos,
ecólogos, y economistas trabajaron en forma conjunta
Los Expertos y sus dos Constataciones Claves
La primera: Durante los últimos 50 años, los humanos han
modificado los ecosistemas más rápidamente y más
profundamente que en cualquier otro momento de su historia,
para responder, fundamentalmente, a las crecientes necesidades
en alimentos, agua, madera y combustible. Desde 1945 hasta
hoy, la tierra que se ha utilizado para el cultivo es mayor que la
reconvertida para ese uso durante los siglos XVIII y XIX.
63
La segunda: Los cambios de los ecosistemas permitieron
aumentar el bienestar humano. ¡Pero el precio fue demasiado
elevado! Los cultivos, la ganadería y la acuacultura han conocido
un aumento espectacular que acompañó al crecimiento
demográfico, pero fue insuficiente para erradicar el hambre en el
mundo. La necesidad de recursos ya se traduce por la
disminución de los stocks de pesca (en mar y en agua dulce) a
niveles inferiores a las necesidades. Esa degradación debería
agravarse durante los próximos 50 años, lo que es un gran
obstáculo para los objetivos del milenio que adoptó la ONU en el
año 2000: ¡tratar de reducir a la mitad el número de personas
que padecen hambre en el lapso comprendido entre el 2000 y el
2015! Ese lapso ya pasó ! Sin embargo, importantes cambios
prácticos y de políticas pueden aún cambiar esa tendencia.
La Organización Mundial de Comercio (OMC), por ejemplo,
debería analizar los resultados de esa evaluación y sacar sus
propias conclusiones, habida cuenta de que la relación es cada
vez más estrecha entre el desarrollo humano y la gestión/manejo
de la naturaleza en general y de los ecosistemas en particular.
Pero el mensaje se dirige también a la sociedad civil, que puede
hacer presión sobre los Gobiernos. El informe precisa que los
cambios mayores indispensables no han comenzado. Peor aún, la
tendencia es hacia la agravación de la degradación.
El Desarrollo está en Bancarrota
Así no podemos continuar, y no continuará al ritmo en el cual
gastamos las joyas de la familia terrestre. A fuerza de hacer
sonar la alarma y producir informe tras informe, corremos el
riesgo de que nadie tome en cuenta nada, además no hay que
olvidar que la capacidad del Hombre a proyectarse en el futuro es
muy limitada.
64
Sin embargo, no podemos ignorar el problema. Debemos
terminar con la destrucción de los ecosistemas más frágiles de los
cuales dependemos para nuestra existencia (como un buzo
depende de sus botellas de oxígeno) pero utilizándolos, al mismo
tiempo, para asegurarnos nuestras necesidades siempre en
crecimiento: El uso sostenible!
Además, es necesario cambiar radicalmente la forma de calcular
la riqueza. Debemos aceptar la idea de que la riqueza y el
desarrollo no se miden solamente en dólares por habitante. Es
necesario integrarle el precio del “servicio” que nos ofrece la
Naturaleza.
¡La naturaleza o más bien su destrucción, tiene un precio! Tarde
o temprano pagaremos la factura. ¡Por el momento podemos decir
que la Humanidad está amenazada de quiebra! Nos alarmamos
del agotamiento de los recursos energéticos, pero no nos preocupa
en demasía la destrucción de los ecosistemas.
Un aspecto preocupante es la mayor probabilidad de “cambios sin
retorno”. Esta expresión significa que, a partir de un
determinado umbral de degradación, se produce un cambio
brutal en el ecosistema, que no solamente se ha debilitado, sino
que ya es incapaz de funcionar. Un buen ejemplo son algunas
pesquerías mundiales en las cuales numerosos stocks de peces
han disminuido tanto que ya no son más explotables.
Es necesario voluntad política para responder a ese desafío. Los
gobiernos deben ser conscientes de la urgencia del problema pero
solamente actuará, bajo la presión de la opinión pública. Como
no se cuenta con instrumentos que traduzcan en términos
económicos el daño a los ecosistemas, los políticos no se ven
incitados a tomar medidas que preserven el Ambiente. El
problema es que los métodos de evaluación económica de los
servicios naturales son muy imperfectos o inexistentes.
¡Es absolutamente indispensable, integrar las riquezas ligadas a
los ecosistemas en las cuentas económicas de los países! Como
bien sabemos el ingreso per cápita (PBI) sigue siendo la medida
65
utilizada para determinar el progreso económico. Sin embargo,
no es satisfactorio utilizar los ingresos medios como medida de
bienestar, ya que no reflejan la degradación del ambiente ni la distribución de la riqueza.
Los 12 “indicadores”, que podrían marcar la tendencia mundial
que se registra en el camino hacia la construcción de la “eco-
economía” se los puede agrupar en tres categorías: los motores;
las tendencias negativas y las tendencias positivas.
A - Los Motores
1 – El crecimiento de la población
2 – El crecimiento económico
B - Las tendencias negativas
3 – Agotamiento de las pesquerías
4 – Desaparición de los bosques nativos
5 – Aumento de las emisiones de CO2
6 - Déficit en la recolección de cereales
7 – Falta de agua potable
8 – Aumento de la temperatura terrestre
9 – Retroceso de los glaciares
C - Las tendencias Positivas
10 – La Energía Eólica
11 – La Energía Solar
12 – Otras Energías Alternativas
Se puede lograr mediante cambios en el comportamiento y
también en el uso de tecnologías y en la elección de políticas
económicas no convencionales.
Quizás habría que suprimir los subsidios que favorecen una
utilización excesiva de los servicios dados por los ecosistemas.
Sin embargo se trata de cambios muy importantes, y las
tendencias actuales no van en ese sentido.
La Biodiversidad
Tierra, Aire, Agua, Fuego: Principio de la Vida
66
Diversidad Biológica: Principio de la Riqueza de la Vida
La “Diversidad Biológica" se refiere a la variabilidad de los
organismos vivos de cualquier fuente u origen, incluidos, entre
otros, los ecosistemas terrestres y marinos y otros ecosistemas
acuáticos y los complejos sistemas ecológicos de los que forman
parte; comprende la diversidad entre los ecosistemas, entre las
especies y dentro de cada especie.
Adaptaciones que favorecen a la Diversidad Biológica:
1. Morfológicas: Se trata de estructuras anatómicas que
garantizan al individuo una relación armoniosa con su
ambiente: Las plantas que poseen espinas para evitar la
pérdida de agua
2. Fisiológicas: Cuando se modifican funciones orgánicas del
ser vivo que le permiten adaptarse mejor al ambiente: La
temperatura corporal y la maduración de los frutos; y de
3. Comportamiento: Se trata de la respuesta de los seres
vivos a las condiciones ambientales en las cuales viven:
Las aves migratorias, por ejemplo, que migran hacia otros
climas para invernar
Variaciones de la Biodiversidad
La Genética: Variación genética dentro de una misma especie;
La de Especies: Número total de especies que se encuentran en
un determinado ecosistema o región; y
La de los Ecosistemas: Las especies no viven aisladas, sino que
forman parte de un complejo sistema de interrelaciones entre
ellas y su ambiente
El Uso Sostenible - Desarrollo Sostenible
Conviene recordar el Informe Brundtland (1987), que analiza y
compara la postura del desarrollo económico de esos años con el
de sostenibilidad ambiental. Labor llevada a cabo por una
Comisión conformada por expertos de diferentes países y
67
presidida por la ex-Primera Ministra de Noruega Gro Harlem Brundtland. Su finalidad era replantear el desarrollo económico,
haciendo hincapié en el hecho de que por aquel entonces el
desarrollo social se estaba llevando a cabo a un costo ambiental
muy alto.
El informe se llamó Nuestro Futuro Común (Our Common Future). En dicho informe, se utilizó por primera vez el término
desarrollo sostenible, definido como aquel que satisface las
necesidades del presente sin comprometer las necesidades de las
futuras generaciones. También puso de manifiesto la necesidad
de llevar a cabo una nueva conferencia a nivel mundial, habida
cuenta de que los objetivos propuestos en conferencias anteriores
no habían avanzado. Es por eso, que en 1992 las Naciones
Unidas, 20 años después de la Cumbre de Estocolmo, convoca la
Conferencia Sobre Ambiente y Desarrollo en Río de Janeiro. El
concepto de Desarrollo Sostenible elaborado en esa Cumbre pone
el acento en la duración: se trata de la perennidad del desarrollo,
de su capacidad a replicarlo y perpetuarlo.
En realidad, este tipo de Desarrollo nos impone, una vez más, la
adopción de una nueva cultura económica que deberá dotarse de
nuevas herramientas de trabajo.
Algunas Herramientas Disponibles
En la primera cumbre mundial de la ONU sobre Ambiente,
Estocolmo-1972, la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN) lanzó una preocupada advertencia a los
países allí reunidos sobre los estragos que un comercio
internacional sin control estaba provocando en miles de especies
de fauna y de flora. Ese llamado prosperó y un año más tarde un
número importante de los países presentes en la Cumbre de la
ONU en Suecia, se reunieron en Washington DC, EE.UU., en
1973 y redactaron uno de los tratados más importantes para
detener el desastre ecológico que la caza y/o recolección sin
68
control de especies silvestres estaba produciendo. En efecto allí
nació la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres, también conocida por
su sigla en inglés CITES.
La CITES cuenta actualmente con más de 180 Estados Parte. En
cada país hay una o más Autoridades Administrativas que son
las encargadas de expedir y controlar los permisos y especímenes
que salen y entran por sus fronteras y puertos. También puede
contar con una o más Autoridades Científicas que asesoran en
principio a las Autoridades Administrativas sobre cuestiones
relativas a las especies incluidas en los Apéndices de la CITES (I
y II: según el grado de amenaza que pesa sobre ellas).
Existe una alternativa muy válida que es la explotación controlada de ciertas poblaciones de fauna y flora. Aunque, en
muchas ocasiones, este tipo de actividad también origina fuertes
controversias entre grupos conservacionistas de países
desarrollados y los gobiernos de los países que pretenden utilizar
de esa forma sus recursos de fauna y de flora. Sin duda existen
iniciativas exitosas, que garantizan una distribución más
equitativa de los beneficios entre los habitantes locales, asó como
la conservación del hábitat de la especie en cuestión.
Otras posibilidades interesantes son las granjas de reproducción
y cría de diferentes especies, que pueden ser alternativas a tener
en cuenta, si se llevan a cabo bajo un estricto control tanto
científico como operativo.
El Uso Sostenible de la Vicuña
La especie vicuña (Vicugna vicugna, Molina 1872) es un
mamífero herbívoro de la familia de los camélidos, que se
alimenta de pastos perennes, raramente comen pastos duros y
ocasionalmente ramonean la “thola” (Parastrephia spp.), arbusto
propio de la región andina.
Tiene un ciclo de vida de 20 años y un periodo de gestación de 11
meses, la época principal de parición es entre febrero y abril. Es
el camélido silvestre sudamericano más pequeño y frágil, hoy
69
recuperado de la extinción, perfectamente adaptado a regiones
alto andinas de elevadas altitudes: En los Altos Andes del
sudeste peruano, oeste boliviano, noroeste chileno, noroeste
argentino y noreste ecuatoriano, en altitudes que varían entre los
3.800 y 4.600 msnm y con temperaturas que fluctúan entre 15 C°
y
- 18 C°, con humedad variable: muy reducida en época de estiaje
y muy alta en temporada de lluvias.
En cuanto a la organización social, las vicuñas viven en grupos
que constan de un macho, cuatro a cinco hembras y las crías del
año, defendiendo un territorio que puede alcanzar una superficie
variable de 8 a 40 hectáreas, el tamaño más frecuente del grupo
familiar es de 15 animales.
Si bien la evolución de los Camélidos en América del Sur a partir
de ese ancestro proveniente de América del Norte es poco
conocida, pues se dispone de registros fósiles incompletos,
actualmente se cuenta con dos camélidos sudamericanos
silvestres, la vicuña (Vicugna vicugna) y el guanaco (Lama guanicoe); y dos camélidos domesticados: la alpaca (Lama pacos)
y la llama (Lama glama).
Los camélidos fueron elementos estratégicos para las culturas
precolombinas (Imperio Inca), ya que se los utilizaba ya sea como
alimento, se aprovechaba su finísima fibra y para transporte de
carga.
Se calcula que durante el imperio incaico existía una población
de dos millones de vicuñas. Los pobladores de esta región
practicaban cada tres años una actividad que denominaban
“chaccu”, palabra quechua que significa área o corral de encierre,
dentro del cual esquilaban y realizaban una saca controlada de
animales. La fibra obtenida se destinaba al Inca, la autoridad, y
la carne era destinada a las comunidades para su alimentación.
Desde hace poco más de 20 años se viene organizando de manera
continua esta actividad, en la que participan los habitantes de
70
las comunidades humanas del Altiplano Andino y que
reproducen la ceremonia del Inca.
Recuperación de Chaccu Incaico por la Comunidad de Lucanas -
1995, Perú
Desde mediados de la década de 1970 se ha retomado con gran
éxito esta actividad en pos de lograr:
i) la conservación de la especie vicuña, cuya situación la llevaba
indefectiblemente a su extinción y su aprovechamiento sostenible
por parte de los pobladores andinos a través de la esquila de
animales vivos;
ii) el incremento de los ingresos económicos para las poblaciones
andinas a través de la comercialización de la materia prima
obtenida (fibra) y de las artesanías confeccionadas con esta
finísima fibra; y
iii) conservar el frágil ecosistema andino incentivando el
aprovechamiento de la fauna endémica, cuyo impacto ambiental
es nulo o muy bajo si es manejado adecuadamente.
71
Foto. O.Menghi 1995 - Chaccu en Pampa Galeras - Comunidad
de Lucanas - Perú
Dr. Rudolf Hoffman, GTZ-1974
72
Situación legal de la vicuña en el contexto internacional
Son dos los marcos legales que rigen la conservación y el manejo
de la vicuña: i) la Convención (CITES); y ii) El Convenio para la
Conservación y Manejo de la Vicuña.
La Convención Internacional sobre el Comercio Internacional de
Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES):
Entró en vigor en 1975 y se aboca al control del comercio
internacional de fauna y flora silvestres amenazadas de
extinción. En el marco de este Convenio, la vicuña, por ser una
especie silvestre, se encuentra sujeta al control por parte de las
autoridades CITES, las cuales establecen normas para el control
y la comercialización de su fibra y de sus productos.
En su Artículo II, el Tratado CITES, establece las diferentes
categorías en las que se clasificarán las especies según el riesgo
de peligro que pesa sobre ellas, a saber: En el Apéndice I, se
incluyen todas las especies en peligro de extinción que son o
pueden ser afectadas por el comercio. El comercio en
especímenes de estas especies deberá estar sujeto a una
reglamentación particularmente estricta a fin de no poner en
peligro aún mayor su supervivencia y se autorizará solamente
bajo circunstancias excepcionales.
En el Apéndice II, se incluyen todas las especies que, si bien en la
actualidad no se encuentran necesariamente en peligro de
extinción, podrían llegar a esa situación a menos que el comercio
en especímenes de dichas especies no esté sujeto a una
reglamentación estricta a fin de evitar una utilización
incompatible con su supervivencia.
Desde 1994 la Convención CITES fue autorizando la
reclasificación/ transferencia de poblaciones de vicuñas al
Apéndice II, con lo cual determinadas poblaciones, bajo estrictos
programas de manejo sostenible y por medio de la esquila en
vivo, obtenían sus vellones, los transformaban (limpieza,
descerdado e hilado) y así los comercializaban o los
manufacturaban como artesanías de gran valor, habida cuenta
del valor de la fibra.
73
No así las materias primas: carne, cuero o vellones provenientes
de animales muertos los que continúan en el Apéndice I o sea que
su comercialización se encuentra totalmente prohibida.
La Vicuña en los Apéndices I y II de CITES
Apéndice I Apéndice II
Vicugna vicugna [Excepto las
poblaciones de: Argentina (las
poblaciones de las provincias
de Jujuy y Catamarca y las
poblaciones en semicautividad
de las provincias de Jujuy,
Salta, Catamarca, La Rioja y
San Juan), Chile (la población
de la Primera Región), Ecuador
(toda la población), Estado
Plurinacional de Bolivia (toda
la población) y Perú (toda la
población), que están incluidas
en el Apéndice II]
Vicugna vicugna [Sólo las
poblaciones de Argentina (las
poblaciones de las provincias
de Jujuy y Catamarca y las
poblaciones en
semicautividad de las
provincias de Jujuy, Salta,
Catamarca, La Rioja y San
Juan) Chile (la población de
la Primera Región),
Ecuador (toda la población),
Estado Plurinacional de
Bolivia (toda la población);
Perú (toda la población); las
demás poblaciones están
incluidas en el Apéndice I]
Extraído de los Apéndices de CITES en vigor – 2016
(Enmendados en la CdP 17- septiembre 2016, Sudáfrica,
entrando en vigor 90 días más tarde de terminada la Conferencia
de las Partes 17)
Es importante recalcar que la comercialización, si se lleva a cabo
como producto terminado debe llevar en el orillo de la tela la
marca “Vicuña – País de origen” si es industrial y una etiqueta
“Vicuña – País de origen – Artesanía” si es un producto
artesanal.
74
Convenio para la Conservación de la Vicuña
Este Convenio se crea en 1969, debido a la inquietud de conservación de las poblaciones de la especie que venían siendo diezmadas en Perú y Bolivia por la caza furtiva, y con el objetivo de evitar su extinción. En 1979, fecha de renovación del Convenio, se suman a éstos los demás países poseedores del recurso: Argentina, Chile y Ecuador.
Los compromisos asumidos fueron: i) uso sostenible de las
poblaciones con control estatal; ii) prohibición de la caza y
comercialización de la fibra, sólo permitido en lugares de alta
densidad; y iii) prohibición de exportar vicuñas fértiles en pie,
semen o cualquier material reproductivo.
Como resultado de este Convenio y al esfuerzo de las
comunidades campesinas se pueden mencionar: i) la
recuperación significativa de las poblaciones de vicuñas
alcanzando un tamaño que posibilita su manejo sostenible;
desarrollo de numerosos trabajos de investigación que posibilitan
el mayor conocimiento de la especie; el ingreso de los cinco (5)
países en el mercado internacional legal de fibras.
75
Foto: O. Menghi
El Tráfico Ilegal
El acuciante problema del comercio ilegal debe ser resuelto para
no aniquilar 40 años de esfuerzos de parte de las Comunidades
Alto-Andinas, de muchos científicos de numerosos países, del
Convenio sobre la Conservación y Manejo de la Vicuña y de la
Convención sobre el Comercio Internacional de Especies
Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres - CITES/PNUMA.
Desafortunadamente, durante más de 6 años todo el trabajo
puesto durante tanto tiempo se corre serio peligro debido al
significativo aumento del tráfico ilegal de vicuñas esquiladas de
animal muerto.
Nos encontramos ante un grave desafío que deben afrontar tanto
los países del área de distribución de la especie como los países
importadores, para evitar regresar a la segunda extinción masiva
76
de una especie tan importante en América del Sur por su valor
intrínseco y por el importante valor económico que su fibra
esquilada de animal vivo representa para las comunidades alto-
andinas de los cinco (5) países que conviven con este importante
Camélido Sudamericano.
Vicuña Esquilada Viva: Vicuña
Foto:E.Mamami
77
Salvada
Foto: Hernán Torres
Referencias
Baquerizo, Maite, Trejo, Wilder, Palacios, Gloria, Evaluación del
diámetro, longitud y rendimiento al lavado de la fibra de vicuña
en el Patronato del Parque Las Leyendas. Tesis Universidad Nacional Agraria La Molina. Lima, Perú. 2000
Brown, Lester R. y Otros. El Informe Worldwatch y las opciones
para el restablecimiento de la salud de nuestro planeta, Buenos
Aires, Ed. Sudamericana, 1991
78
Brundtland Repport. Our Commun Future. ONU, 1987
Cabrera, Ángel, Sobre los camélidos fósiles y actuales de la
América austral. Revista del Museo de La Plata. 1932. 33:89-117
CITES-PNUMA Convención sobre el Comercio Internacional de
Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (CITES) –
PNUMA. Washington DC, 1973
Convención sobre la Conservación y Manejo de la Vicuña - Argentina, Bolivia, Chile, Ecuador y Perú. Lima, 1979
Cruz, Arturo y Sánchez, Manuel. La vicuña peruana. Lima, 2010
Cruz, Arturo. Plan de manejo Multicomunal Picotani. Puno.
Perú, 2005.
Gould, Stephen, J. La igualdad humana es un hecho contingente
de la historia, Pp. 157-168, en: La sonrisa del flamenco. Editorial Crítica, Barcelona,1995. 398 pp
Hofmann, Rudolf y Otte Kai. Utilización racional de la vicuña
silvestre. Lima, 1976
Hofmann R. GTZ. El Manejo de la Vicuña Silvestre. Lima, 1983
Jacquard Albert, Le Compte à rebours a-t-il commence?, Ed. Calmann-Lévy. Paris, 1995
Jacquard Albert. J'accuse l'économie triomphante. Ed. Calmann-Lévy, Paris. 1998
López Aranguren DJ. Camélidos fósiles argentinos. Anales de la Sociedad Científica Argentina. 1930. 109: 15-35, 97-126.
Menegaz Adriana, Goin Francisco y Ortiz Jaureguizar Edgardo.
Análisis morfológico y morfométrico multivariado de los
representantes fósiles y vivientes del género Lama (Artiodactyla,
79
Camelidae). Sus implicancias sistemáticas, biogeográficas,
ecológicas y biocronológicas. Ameghiniana. 1989. 26:153-172.
Menghi Obdulio. Report on Vicuña Project in Perú, 1984-1995.
CITES/PNUMA. 1996
Norambuena M. Cecilia y Paredes Marcos. Variabilidad y
estructura genética en dos poblaciones de Vicugna vicugna (Camelidae) del norte de Chile. Revista Chilena de Historia Natural. 2003. 76: 99-104.
Injante, Víctor y Rivera, D. Guía de capacitación para la
conservación y manejo de la vicuña en comunidades campesinas.
CONACS, Santiago, 2006
Sarno Ronald J, Villalba Lilian, Bonacic Cristian, Gonzalez
Benito, Zapata Beatriz, Mcdonald David W, O'Brien Stephen J y
Jonson Warren E. Phylogeography and subspecies assessment of
vicuña in Chile and Bolivia utilizing mtDNA and microsatellite
markers: implications for vicuña conservation and management. Conservation Genetics 2004. 5:89-102.
Sahley Catherine., Torres Jorge, Sánchez Jesus, Cruz A., Umasi
M. y Márquez A. Gestión Ambiental de la vicuña. Arequipa, 2004
Vilcanqui, Hugo. Efecto de la edad y el sexo sobre las
características de la fibra de vicuña en la Provincia de
Castrovirreyna – Huancavelica, Tesis Universidad Nacional Agraria La Molina. Lima 2007.
Wheeler, Jane. Evolución y origen de los camélidos domésticos,
(www.alpacaregistry.net/Journal), Journal. Lima, 2004
80
EL FIN DE LAS COLECCIONES DE HISTORIA NATURAL EN
UN TIEMPO DE EXTINCIONES
Por JORGE V. CRISCI1,2 & LILIANA KATINAS2
Resumen: Las colecciones de historia natural son un documento de
cambio, el archivo fragmentario sobre el cual se basa nuestro
conocimiento del mundo natural. En esas colecciones está el pasado de
nuestro planeta, la forma en que interactuamos con el mundo natural y,
de alguna manera, el código para descifrar el futuro de la biodiversidad,
incluyendo a nuestra propia especie. Estas colecciones permiten a los
científicos entender la historia evolutiva de la vida, monitorear el
cambio climático y las extinciones de especies. Muy especialmente, las
colecciones de historia natural contienen en sí mismas una parte
importante de la memoria colectiva de la humanidad, y la desaparición
o deterioro de una de ellas es la pérdida de parte de esa memoria, e
incapacita a la sociedad para documentar el pasado, comprender el
presente y prepararse para el futuro. Desde hace unos años, quienes
tienen a su cargo las colecciones de historia natural están alertando
sobre el cierre de instituciones y diversos centros de investigación que
hospedan colecciones. Se discute aquí el valor de las colecciones, los
cuidados que requieren, las controversias actuales en cuanto a la
necesidad de aumentar las colecciones, y las amenazas que atentan
contra su preservación. Todo ello en el contexto de una época signada
por extinciones masivas de especies.
Abstract: The natural history collections are a document of change, the
fragmented file on which our knowledge of the natural world is based.
These collections are the history of our planet, the way we interact with
the natural world and, somehow, the code to decipher the future of
1Académico de Número, Academia Nacional de Agronomía y
Veterinaria, Argentina. crisci@fcnym.unlp.edu.ar
2División Plantas Vasculares, Museo de La Plata, Paseo del
Bosque s/n, 1900 La Plata.
81
biodiversity, including our own kind. These collections allow scientists
to understand the evolutionary history of life, monitor climate change
and species extinctions. The natural history collections contain in
themselves an important part of the collective memory of mankind, and
the disappearance or deterioration of them is the loss of part of that
memory, and incapacitates society to document the past, understand
the present and prepare for the future. In the last years, who are
responsible for the natural history collections are warning about the
closing of institutions and various research centers that host
collections. The context of biodiversity in a time of extinctions, the
value of collections, the care they require, the current controversies
regarding the need to increase collections, and the threats against its
preservation are discussed here.
Introducción
Las colecciones de historia natural son un documento de cambio,
el archivo fragmentario sobre el cual se basa nuestro
conocimiento del mundo natural. En esas colecciones está el
pasado de nuestro planeta, la forma en que interactuamos con el
mundo natural y, de alguna manera, el código para descifrar el
futuro de la biodiversidad, incluyendo a nuestra propia especie.
Estas colecciones permiten a los científicos entender la historia
evolutiva de la vida, monitorear el cambio climático y las
extinciones de especies. Muy especialmente, las colecciones de
historia natural contienen en sí mismas una parte importante de
la memoria colectiva de la humanidad, y la desaparición o
deterioro de ellas es la pérdida de parte de esa memoria, e
incapacita a la sociedad para documentar el pasado, comprender
el presente y prepararse para el futuro.
El objetivo de esta contribución es reflexionar acerca de las
colecciones de historia natural en relación a: 1) el contexto de la
biodiversidad en una época de extinciones; 2) el valor que tienen;
3) los cuidados que requieren; 4) las controversias actuales en
cuanto a la necesidad de aumentar las colecciones; y 5) las
amenazas que atentan contra su preservación. El título fue
elegido como una ambigua profecía que no sólo expresa propósito,
sino también puede expresar un severo pesimismo acerca del
futuro. Es nuestra intención dilucidar ese dilema.
82
La biodiversidad en un tiempo de extinciones
La biología ha definido la biodiversidad como la variedad y
variabilidad de los seres vivos y de los ecosistemas que integran.
La biodiversidad es un recurso vital para la humanidad, ya que
provee alimentos, combustibles, medicinas, agua y aire limpios y
placer estético, entre otros múltiples beneficios. Se está
perdiendo biodiversidad en todo el mundo por una masiva
extinción de especies.
La tasa natural de extinción (para unas 10 millones de
especies) es unas cuatro especies por año. Sin embargo, las
extinciones documentadas para el período 1930-1990 para las
especies conocidas de aves y mamíferos (sobre un total de 13.000
especies) fue de 19 especies de aves y 14 especies de mamíferos,
es decir unas 100 veces la tasa natural de extinción. Las
predicciones de tasas de extinción basadas en número de especies
x área, teniendo en cuenta la pérdida de bosques tropicales
(aproximadamente 1/3 en los últimos 40 años) sugieren que a
finales del siglo XXI habrán desaparecido 2/3 de las especies.
Esto significa unas 10.000 veces la tasa natural de extinción y un
5 % (del total de especies) por década. Muchas de las especies que
desaparecerán aun no son conocidas por la ciencia. Algunos
autores consideran que aún faltan por conocer más de 13
millones de especies (Stork, 1999), mientras que cifras más
conservadoras rondan los 7 millones de especies (Mora et al.,
2011) (Fig. 1).
83
Figura 1. Número estimado de especies que habitan el planeta.
Para evitar la extinción de una especie, el primer paso es
conocerla científicamente incluyendo en ese conocimiento:
ubicación sistemática, distribución geográfica y ecológica. Esta
información está contenida en las colecciones de historia natural.
El valor de las colecciones
Las colecciones depositadas en los museos documentan el
pasado de nuestro planeta. La única manera de aprender sobre
una especie ya extinta es estudiar un espécimen de un museo. La
única forma de aprender sobre los cambios que ocurrieron en el
tiempo es mediante las colecciones, como lo muestra el caso del
águila calva (Fig. 2). El águila calva o águila americana es un
ave rapaz que habita América del Norte y es el símbolo nacional
de los Estados Unidos de América, su imagen figura en el escudo
nacional de ese país. En la década del ’60 los científicos y los
ambientalistas comenzaron a notar que las poblaciones del
águila estaban descendiendo y que la supervivencia de la especie
estaba en peligro. Algunos sospecharon que había una conexión
entre su desaparición con el aumento del uso del pesticida DDT.
Los científicos fueron entonces a las colecciones y analizaron los
84
huevos del águila calva colectados antes y después del uso de
DDT. Los huevos más antiguos poseían cáscaras más gruesas sin
DDT, mientras que los más recientes estaban severamente
contaminados con DDT y sus cáscaras eran tan delgadas que no
soportaban el peso de sus padres al empollarlos. En cuanto se
suspendió el uso del DDT, el águila calva aumentó rápidamente
sus poblaciones.
Figura 2. Águila calva (Haliaeetus leucocephalus), el ave nacional de los Estados Unidos de América, estuvo a punto de extinguirse a fines del siglo XX (fotografía tomada de Wikipedia).
Este ejemplo demuestra el enorme valor que poseen las
colecciones de historia natural en las diferentes disciplinas
científicas, entre ellas la Arqueología, la Biogeografía, la
Anatomía, la Agricultura, la Biomecánica, la Biotecnología, la
Climatología, la Dendrocronología, la Ecología, la Epidemiología,
la Biología Evolutiva, la Genética, la Paleontología, la
Estratigrafía y la Sistemática.
Todas estas disciplinas requieren que los ejemplares sobre los
que basan su investigación, llamados también ejemplares
testigos o vouchers, estén identificados por un experto y se
hallen depositados y conservados en una institución (como los
museos de historia natural) a la cual los científicos puedan
acudir para examinarlos. Los resultados del trabajo científico
85
sobre los vouchers representan una gran contribución para la
sociedad, por ejemplo: 1) en la identificación de especies: nocivas,
tóxicas, medicinales; 2) educación: para que los estudiantes
analicen cómo se ven realmente los especímenes en lugar de que
sus maestros se lo expliquen; 3) economía: por ejemplo, el
descubrimiento de semillas de una nueva especie de tomate en
una colección permitió establecer un nuevo cultivo híbrido que
generó una ganancia en los Estados Unidos de millones de
dólares por año; 4) reconocimiento de especies invasoras: las
colecciones son un registro para determinar la actual distribución
de especies invasoras, identificar la fuente de poblaciones
introducidas, reconstruir la tasa de diseminación, y calibrar el
impacto ecológico de los invasores); 5) contaminación ambiental:
por ejemplo, el análisis de depósito histórico de mercurio en peces
para evitar su consumo; 6) cambio climático: la comparación de la
distribución actual de ciertas especies con la distribución en las
colecciones históricas permitió estimar tasas de extinción debido
al cambio climático global; 7) salud pública: las colecciones de
virus y bacterias se utilizan para comparar con enfermedades
emergentes; 8) pesca: permiten, por ejemplo, reconstruir cómo
era la biodiversidad cien años atrás y compararla con su estado
actual; en el ámbito oficial, aportan valiosa información para
establecer vedas y leyes pequeras; 9) uso farmacéutico: la mitad
de los productos farmacéuticos se obtienen directamente de las
plantas; por ejemplo el análisis de 150 ejemplares de
Leguminosas depositados en el herbario de Kew, reveló una
nueva droga contra el virus HIV; 10) legislaciones, uso y manejo
de la tierra: las colecciones permiten documentar el ritmo de la
fragmentación y degradación de hábitats; 11), control de pestes:
las colecciones son el recurso para determinar cuándo y de dónde
una peste, patógeno o vector fue introducido; 12) toxicología: las
colecciones biológicas proveen una rápida identificación para
pacientes que han sido mordidos por animales venenosos, o han
comido plantas u hongos que se sospecha son venenosos; 13)
medicina forense: las colecciones se utilizan para la identificación
de fragmentos de plantas, semillas, polen, pelos de animales
hallados en personas sospechosas o escenas de crimen; 14)
agroquímicos, y muchos usos que todavía no han sido
anticipados.
86
El cuidado de las colecciones
El manejo y cuidado de las colecciones de historia natural debe
ser gobernado por el respeto a la integridad científica, histórica,
física, cultural y estética de los especímenes. La preocupación por
el futuro de éstos incluye la protección contra el daño innecesario
y la pérdida o alteración que pueda afectar su potencial uso en
investigación, educación y exhibición. Asociado con la
responsabilidad de su uso científico y educativo, es obligación de
las instituciones donde los especímenes se hallan depositados
incrementar el valor de cada ejemplar para su uso futuro. Esto se
aplica no sólo a los datos asociados a cada ejemplar (etiqueta o
labelo que acompaña a cada ejemplar y que posee toda la
información de la fecha, el lugar de colecta y la persona que lo
colectó), sino también a la integridad física y química del
ejemplar (Katinas, 2001) (Fig. 3).
87
Figura 3. Ejemplar de herbario con diversos labelos que indican los datos de colecta, su nombre científico y la descripción original de la especie.
Algunos factores a tener en cuenta para la preservación de los
ejemplares son: el tipo, tamaño y diversidad de la colección y su
documentación; los tratamientos recibidos -y por recibir- por los
especímenes; las pestes que suelen atacarlos (insectos, hongos);
el espacio y ambiente para almacenarlas y estudiarlas
(temperatura, luz, humedad, etc.); los materiales acompañantes
(frascos, cartulinas, gomas adhesivas, agujas, etc.); los recursos
humanos dedicados al cuidado y la formación de los mismos
(curador, preparador, administrador, digitalizador); realizar
investigaciones sobre la preservación de colecciones; tener un
diálogo interdisciplinario sobre la preservación de ejemplares;
mantener un balance entre uso y preservación, evitando el uso
destructivo; conservar los labelos de los ejemplares y comprender
su importancia; hacer uso de nuevas tecnologías; incluir la
información de los ejemplares en bases de datos; establecer una
88
complementariedad con colecciones de otras instituciones
cercanas.
Otro factor importante a tener en cuenta en el cuidado de las
colecciones es que ciertas técnicas y protocolos son más efectivos
que otros. Es por ello que se han desarrollado guías
(“guidelines”), estándares (“standards”) y prácticas
recomendadas (“best practices”). Las guías son recomendaciones
de adhesión voluntaria presentadas por una sociedad o agencia
gubernamental. Los estándares son medidas a cumplir
presentadas por una sociedad (para sus adherentes) o una
agencia gubernamental. Las prácticas recomendadas son
estándares que alcanzan un consenso amplio.
La responsabilidad del cuidado y preservación de las
colecciones de historia natural está compartida entonces entre
las instituciones, el personal a cargo de las colecciones, los
usuarios y la comunidad. Una comunidad educada en el valor de
las colecciones puede colaborar en el cuidado de las mismas, por
ejemplo siendo miembro de sociedades como SPNHC (The Society For The Preservation of Natural History Collections;
http://www.spnhc.org/). SPNHC es una sociedad internacional
cuya misión es mejorar la preservación, conservación y manejo de
las colecciones de historia natural para asegurar su valor
continuo para la sociedad. Esta sociedad celebra encuentros
anuales, dicta cursos y publica libros y revistas científicas
relacionadas a cuidado, desarrollo y manejo de las colecciones.
Controversias
Los científicos tradicionalmente han colectado especímenes en
el campo para confirmar la existencia de nuevas especies,
estudiar caracteres, registrar nuevas distribuciones, etc. Esta
práctica continúa hoy día pero hay quienes sugieren que esto
podría magnificar el riesgo de extinción de poblaciones pequeñas
y aisladas de algunas especies. La disponibilidad de métodos
alternativos de documentación, que incluyen por ejemplo
fotografía de alta resolución, grabación de audios y muestreo no
letal, han generado controversias entre los científicos en relación
89
a la necesidad real de extraer los ejemplares de su hábitat
natural, disecarlos y guardarlos en una colección.
Algunos científicos sugieren que estas prácticas juegan un rol
muy significativo en la extinción de especies. Citan el caso de un
ave extinta, el alca gigante (Pinguinus impennis), avistado en
1844 en la isla Eldey de Islandia. Años de explotación del ave
como fuente de comida y plumas tuvo un gran efecto en la
disminución de las poblaciones, pero según ciertos científicos
(Minteer et al., 2014), el exagerado entusiasmo por colectar
también juega un rol importante en la extinción. Un caso muy
sonado y que desató una apasionada polémica en los medios
científicos y de difusión fue el del alción o martín pescador
bigotudo (Actenoides bougainvillei) (Fig. 4). Esta ave no había
sido avistada durante cinco décadas, hasta que un ornitólogo del
Museo Americano de Historia Natural encontró y mató un
espécimen en la isla de Guadalcanal en Oceanía, con el fin de
ingresarlo a una colección. Algunas de estas acciones trajeron
como consecuencia que las autoridades de algunos países,
especialmente en los Neotrópicos que contienen la mayor
biodiversidad, hayan establecido rigurosos límites a las colectas,
y más especialmente con las colectas de aves. Muchas veces estas
regulaciones también intentan reducir el comercio de animales
salvajes para su uso como mascotas.
90
Figura 4. Carpintero bigotudo (Actenoides bougainvillei), la captura de un ejemplar luego de muchos años de no haber sido avistada la especie, generó una acalorada controversia en cuanto a la necesidad de colectar ejemplares (imagen tomada de Wikipedia).
Otros consideran que estas regulaciones son exageradas y que,
aunque bien intencionadas, generan grandes dificultades para
los científicos al momento de obtener permisos que involucren
colecta de ejemplares para desarrollar sus proyectos
(Vuilleumier, 1998). Algunos de los argumentos sostenidos en
favor de las colectas son por ejemplo que aún si las colecciones
mundiales de aves en un año llegaran a diez mil especímenes (el
cual es un número exagerado según Vuilleumier, ibid.), esta cifra
sería mucho más baja en varios órdenes de magnitud que el
número de aves capturadas o matadas cada año por contrabando,
caza legal e ilegal, atropello de autos y camiones, y destrucción
de su hábitat por deforestación, urbanización y cultivo.
Numerosos autores (Rocha et al., 2014) también enfatizan que es
importante distinguir entre proteger la vida de los individuos y
91
proteger la vida de las poblaciones y las especies. Los individuos
se pierden cada día por depredación, muerte natural y factores
antropogénicos, mientras que son las poblaciones las que se
deben salvar. Mencionan como ejemplo, el descubrimiento y
descripción de una pequeña ave endémica de Nueva Guinea,
indetectable sin la presencia de un espécimen de colección, que
resultó en la creación de áreas protegidas en esa región.
Amenazas
Desde hace unos años, quienes tienen a su cargo las
colecciones de historia natural están alertando sobre el cierre de
instituciones y diversos centros de investigación que hospedan
colecciones. Los científicos que estudian, preservan y curan las
colecciones han sido despedidos, han sufrido reducciones de
personal o forzados a jubilarse. La razón que comúnmente se
aduce es el déficit presupuestario y, desafortunadamente, las
colecciones son el blanco más fácil. La pregunta que muchos se
hacen es ¿es esto una tendencia o es una coincidencia? (Funk,
2014). Algunos hechos pueden echar más luz a esta cuestión.
En el año 2005, el Museo Público de Milwaukee de los Estados
Unidos (fundado en 1882) eliminó la investigación y despidió a la
mayoría de su staff. El Jardín Botánico Tropical Fairchild (1936),
USA, decidió en 2007 cambiar su modelo de funcionamiento
poniendo el énfasis en la ecología y en detrimento de las
disciplinas que trabajan con las colecciones. Actualmente hay un
solo científico trabajando en la colección de 165.000 especímenes.
El Jardín Botánico de Brooklyn (1910), USA, cerró su herbario de
300.000 ejemplares en 2013, todo el personal fue despedido con
excepción de un asistente que fue transferido. El INBIO
(Instituto Nacional de Biodiversidad, fundado en 1989) en Costa
Rica era uno de los centros de referencia de biodiversidad más
importantes de Latinoamérica con la colección más
representativa de especies tropicales. En el año 2011 anunció que
culminaba su actividad con el herbario y la investigación y
vendió el edificio. El herbario del Museo de Historia Natural,
conocido como Field Museum, de Chicago (1892) con 2.700.000
92
ejemplares, ha visto cómo se reducía gradualmente el personal
desde 2009. Actualmente hay sólo dos curadores para proteger
esa importante colección que incluye muchas plantas
sudamericanas. El Real Jardín Botánico de Kew, Reino Unido,
que posee uno de los herbarios más importantes del mundo con
7.000.000 de ejemplares, está bajo un serio ataque. Algunas de
sus unidades administrativas sufrieron cambios drásticos con
una reducción significativa del personal, del que se pretende que
busquen otras posiciones de investigación o abandonen el Kew.
Los pocos científicos que aún quedan deben ocuparse de los
trabajos técnicos y dejar la investigación debido a la pérdida del
staff que realizaba estas tareas. Nature en un editorial de 2014
(volumen 515) estableció que situaciones similares ocurren en
Europa, por ejemplo en Italia y Alemania, con colecciones de
aves, de insectos, de antropología y de arqueología.
Las acciones llevadas a cabo en estas y otras instituciones no
han tenido en cuenta que para que las colecciones sean útiles y
relevantes deben continuar creciendo a medida que se realizan
nuevos descubrimientos. Las expediciones a lugares poco
conocidos son críticas para completar los huecos de información y
para colectar nuevo material. De esta manera se protege al tejido
del cual se obtienen los genomas con los cuales se realiza gran
parte de la investigación. Parecería que cuando el mundo está
antes una crisis por la pérdida de la biodiversidad y necesita del
estudio de las colecciones para hallar posibles respuestas, las
instituciones que atesoran estas colecciones están siendo
forzadas a cerrar sus puertas.
Causas que originan las amenazas
Entre las posibles causas de esta erosión en las colecciones se
pueden mencionar una sociedad colonizada por la lógica del
mercado y el reduccionismo científico.
Bajo una lógica de mercado extrema, todas las esferas de la
vida se deben adaptar al modelo de acción del intercambio de
93
mercancías y toda actividad debe rendir frutos económicos en
forma directa. En este contexto, las colecciones de historia
natural son (equivocadamente) vistas como un gasto inútil. Por
otro lado, dentro de esta lógica del mercado, los científicos han
pasado a ser sujetos calculables donde el logro científico se mide
a través de las citas que sus trabajos obtienen. El factor de
impacto (que mide el impacto de revistas), el índice “h” o el
Google Scholar (que miden el impacto de trabajos individuales)
son ejemplos de estas técnicas estadísticas.
Algunas de las consecuencias de la aplicación de estas políticas
a la ciencia son: 1) Una “economía de mercado”
(¿industrialización?) de la ciencia, donde el número de
consumidores del producto determina el valor del mismo; 2)
cosificación del concepto “logro científico”; 3) ignorancia de la
calidad de la cita (¿fue citado por un aporte original? o ¿por un
error que cometió?); 4) serie lineal de valores (A = 4 significa que
es el doble de B = 2: ¿Es A dos veces mejor científico que B?); 5)
números como reflejo de objetividad, donde el cálculo es sustituto
del discernimiento y la precisión es sinónimo de verdad; 6)
establecimiento, por parte de las revistas de mayor impacto, de
las temáticas prioritarias de la ciencia “moderna”; 7) los
curadores de colecciones son vistos como individuos sin citas y
por lo tanto reemplazables (Crisci, 2008).
Las críticas que esta difundida costumbre ha recibido son
serias y variadas (por ejemplo, Lawrence, 2007) pero a pesar de
ello sigue siendo utilizada como forma de evaluación de los
científicos. Tal vez la crítica más contundente vino de un reciente
informe de la Internacional Mathematical Union, el
International Council of Industrial and Applied Mathematics y el Institute of Mathematical Statistics. Su informe analiza
técnicamente estas medidas y expresa, entre otras conclusiones,
que la objetividad de estas estadísticas es ilusoria (Adler et al.,
2008).
Estas amenazas a las colecciones de historia natural se ven
agravadas por un paradigma reduccionista que domina
actualmente en la biología, donde el nivel molecular
(fundamentalmente ADN) recibe mucha más atención que el
organísmico e indirectamente que las colecciones de historia
natural. Un programa reduccionista significa que se deduce un
94
conjunto de leyes a partir de otro conjunto de un nivel inferior de
organización, como cuando se deducen leyes químicas a partir de
leyes físicas. El reduccionismo en biología es la descripción de la
vida en términos de sus componentes físicos y químicos (como el
ADN). No hay duda que el valor de los datos moleculares es
enorme ya que los caracteres moleculares permiten no sólo
reconstrucciones filogenéticas entre taxones cercanamente
relacionados entre sí, sino también entre taxones lejanamente
relacionados (por ejemplo bacterios y mamíferos). Sin embargo,
esta hegemonía molecular ha provocado una disminución del
valor de las colecciones para la ciencia y la sociedad. Los
laboratorios biológicos han centrado sus investigaciones en esta
visión molecular, desplazando a las colecciones como objeto de
estudio. No es un tema menor la formación que se le está dando a
las jóvenes generaciones de biólogos con un gran énfasis
molecular en detrimento del organísmico. El resultado de una
formación desbalanceada es la generación de científicos que
conocen profundamente la mecánica de colectar datos
moleculares y analizarlos con métodos computacionales, pero
carecen de conocimientos organísmicos profundos del grupo que
estudian.
Conclusión
La ambigüedad que encierra el título de este trabajo podría
definirse hacia un sentimiento de pesimismo acerca del futuro.
Esperamos haber demostrado la negación de ese pesimismo, a
través del énfasis en el propósito. Propósito que conlleva la toma
de conciencia del valor que estas colecciones tienen para la
humanidad toda (Fig. 5).
95
Figura 5. El propósito que conlleva la toma de conciencia del valor que poseen las colecciones de historia natural es fundamental para el futuro de la humanidad.
Los especímenes que constituyen las colecciones de historia
natural permiten nuestra comprensión de la naturaleza. Por lo
tanto, la colección, preservación y estudio de esos especímenes es
de enorme valor para la ciencia y para la sociedad.
Desde la creación, hace 2300 años, de la biblioteca de
Alejandría con su “Museion” o Templo de las Musas, las
colecciones han sido la memoria colectiva de la civilización,
reflejando para ello las historias del universo, de la Tierra, de la
vida y de las culturas. Recordemos que la biblioteca de
Alejandría fue quemada por las turbas enceguecidas de
superstición anticientífica en el año 415 después de Cristo y que
ese hecho aletargó el progreso de la ciencia por un milenio.
Las colecciones de historia natural están lejos de ser el objeto
recreacional de los científicos, por el contrario, tienen un papel
vital en el esfuerzo por comprender cómo y por qué somos lo que
somos y cómo llegamos a serlo.
La pérdida o deterioro de una colección es una forma de olvido.
Tal como lo ha sugerido Homero en su Odisea, olvidar es una
manera de perder la identidad. Ulises enfrenta la amenaza del
olvido primero con las invitaciones de los lotófagos, después con
las pociones de Circe y más tarde con el canto de las sirenas. En
cada caso Ulises debe abstenerse si no quiere olvidar, pero...
¿Olvidar qué? Olvidar el hogar, el camino y, en última instancia,
el sentido del viaje.
96
Nuestro hogar (el planeta Tierra, su flora y su fauna), nuestro
camino (la historia de la especie humana) y el sentido del viaje
(la posición del hombre en el cosmos) están de alguna manera
cifrados en las colecciones de historia natural. Como Ulises,
evitemos olvidar la forma de nuestro destino.
Referencias
Adler, Robert, John Ewing, Peter Taylor, Citation statistics: A report from the International Mathematical Union (IMU) in cooperation with the International Council of Industrial and Applied Mathematics (ICIAM) and the Institute of Mathematical Statistics (IMS), 2008, pp. 1-26,
www.mathunion.org/fileadmin/IMU/Report/CitationStatistic
s.pdf.
Crisci, Jorge, La barbarie del “especialismo” en un tiempo de
extinciones, Anales de la Academia Nacional de Agronomía y Veterinaria, Nº 62, 2008, pp. 97-107.
Funk, Vicki, The erosion of collection-based science: Alarming
trend or coincidence?, The Plant Press, Nº 17, 2014, pp.1, 13.
Katinas, Liliana, El herbario: Significado, valor y uso,
PROBIOTA Serie técnica y didáctica, Nº 1, pp. 1-11.
Lawrence, Peter, The mismeasurement of science, Current Biology, Nº 17, 2007, p. 583.
Minteer, Ben, James Collins, Karen Love, Robert Puschendorf,
Avoiding (Re) extinction, Science, Nº 344, 2014, pp. 260-261.
Mora , Camilo, Derek Tittensor, Sina Adl, Alistair Simpson,
Boris Worm, How many species are there on Earth and in
the ocean?, PlosBiology, Nº 9, 2011, e1001127.
Rocha, Luiz (y 123 autores más), Specimen collection: An
essential tool, Science, Nº 344, 2014, pp. 814-815.
Stork, Nigel, The magnitude of biodiversity and its decline. En:
Cracraft, Joel, Francesca Grifo (eds.), The living planet in
crisis: biodiversity, science and policy, pp. 3-32, Columbia
University Press, New York, 1999.
Vuilleumier, François, The need to collect birds in the
Neotropics, Ornitologia Neotropical, Nº 9, 1998, pp. 201-203.
97
REFLEXIONES Y CONCLUSIONES DEL TALLER
“CONSERVACIÓN DEL PATRIMONIO NATURAL Y
CULTURAL, CONCEPTOS BÁSICOS Y DEFINICIONES”
Por L.O. BALA, M.N. CASTEX, A. ARIAS, C. BERTONATTI,
C. FERNÁNDEZ BALBOA
Consideraciones finales
El Taller puso de relieve la amplitud de conceptos, ideas y
enfoques que se involucran con la Conservación y otros aspectos
indisociables a la misma, como el de Patrimonio. ¡Y vaya que el
concepto de Patrimonio es amplio! Patrimonios natural y
cultural, con todas sus divisiones; material e inmaterial y una
visión del patrimonio integral; con su presente, pasado y futuro.
A lo largo de las conferencias se abordaron temas absolutamente
diferentes que, sin embargo, tuvieron el común denominador de
poner de relieve similares necesidades, falencias y fortalezas
comunes sobre el significado de la Conservación.
Pese a la diversidad temática de las exposiciones, existe una
transversalidad de conceptos comunes. Se resalta la generalizada
opinión sobre la importancia de encarar la Conservación a partir
del conocimiento científico como punto de partida para la toma de
decisiones. Muchas veces las decisiones son tomadas sin la
suficiente base de conocimientos, lo que deriva en la aplicación de
políticas de conservación que pueden resultar deficientes o
erróneas.
Ya que hablamos de políticas de aplicación, es una realidad que
el poder político y de gestión, presenta una dinámica de cambios
alta; así, pese a las mejores intenciones que puedan tener los
administradores, generalmente sus gestiones son corta duración
y las acciones, por lo tanto, pueden resultan efímeras o
discontinuas. Por ello, los grandes (o pequeñas) políticas de
Conservación deben tener amplio consenso y deben encontrarse
98
mecanismos para que las mismas puedan trascender a las
diferentes gestiones. Lo anterior es tan aplicable a cómo definir
un área a conservar, como así también para apuntalar las
políticas sobre las colecciones de historia natural.
Otro punto que se rescata es la amplitud del concepto
Patrimonio. Tal como se describió brevemente las
categorizaciones entre “natural” y “cultural” no son conjuntos
disjuntos: “toda visión o uso que se haga de la naturaleza es
cultural” expresó uno de los conferencistas. Las categorizaciones
o clasificaciones son construcciones sociales de suma utilidad,
pero pueden no ser estrictas.
No faltó en este taller la mención a los intereses del poder
económico, con puntos a favor y también en contra de acciones
conservacionistas.
Independientemente de las exposiciones, este Taller tuvo el valor
agregado de los asistentes al mismo. Gran parte de los
participantes fueron colegas que interactuaron
permanentemente y enriquecieron los debates.
Conclusiones
Sumariamente, las conclusiones a las que se arribaron mediante
consenso son las siguientes:
-El concepto de Conservación es tan amplio, que no se puede
gestionar ni analizar con una única mirada. La conservación está
íntimamente ligada al concepto de patrimonio natural, cultural e
intangible que deriva en una mirada integral. Representan un
abanico tan diverso y heterogéneo que imposibilita un
tratamiento común a todos y requiere de un abordaje inter y
multidisciplinario para agotar sus aspectos de investigación,
gestión y educación o comunicación.
99
-Los procesos biológicos, ambientales y culturales son procesos de
largo plazo. El manejo y la política de gestión de éstos también
deberían ser acordes a su escala temporal.
-Las decisiones de medidas de conservación deben tomarse en
base al conocimiento científico, que dejara supeditado los
aspectos políticos.
-Existe una necesidad imperante en nuestro país de realizar el
inventario de especies silvestres a fin de contar con un caudal de
conocimientos que nos permita administrar adecuadamente
nuestra biodiversidad.
-El avance científico debería considerar fortalecer las políticas de
mantenimiento y generación de nuevas colecciones.
-Se considera necesario realizar un diagnóstico de la situación
actual de los humedales en la Argentina a fin de conocer sus
estados de conservación.
100
GALERÍA DE IMÁGENES DEL EVENTO
101
102
103
Recommended