View
214
Download
1
Category
Preview:
DESCRIPTION
G
Citation preview
POESIAS
VIDA
Vivir como una isla,lleno por todas partesde ti, que me rodeas
ya presente o distante
con un temblor de luzprimera, sin pulir,sin arista de tarde,ni sombra de jardín.
Y ángeles en espejosguardando tu mirada
para hacerse verdadesy noches estrelladas.
AUTOR:Jorge Rojas
LA PRIMAVERA BESABA...
La primavera besabasuavemente la arboleda,y el verde nuevo brotaba
como una verde humareda.
Las nubes iban pasandosobre el campo juvenil...
Yo vi en las hojas temblandolas frescas lluvias de abril.
Bajo ese almendro florido,todo cargado de flor
-recordé-, yo he maldecidomi juventud sin amor.
Hoy en mitad de la vida,me he parado a meditar...
¡Juventud nunca vivida,quién te volviera a soñar!
Autor del poema: Antonio Machado
TÁCTICA Y ESTRATEGIA-Mario Benedetti
Mi táctica es mirarte
aprender como sos quererte como sos
mi táctica es hablarte
y escucharte construir con palabras
un puente indestructible
mi táctica es quedarme en tu recuerdo
no sé cómo ni sé con qué pretexto
pero quedarme en vos
mi táctica es ser franco
y saber que sos franca y que no nos vendamos
simulacros para que entre los dos
no haya telón ni abismos
mi estrategia es en cambio
más profunda y más simple
mi estrategia es que un día cualquiera
no sé cómo ni sé
con qué pretexto por fin me necesites.
REMORDIMIENTO PÓSTUMO-Charles Baudelaire
Cuando en el fondo duermas, mi bella tenebrosa,
de una bóveda en mármol oscuro trabajado,
y ya no tengas más por alcoba y morada
que una llovida cueva y que una hueca fosa;
cuando la tierra oprima tu carne perezosa
y tus flancos que el ocio con encanto a pulido,
ni haya en tu corazón el amor, ni el latido,
ni tus pies puedan ir tras de ninguna cosa,
la tumba, confidente de mi sueño infinito,
en esas noches de las que el sueño está proscrito
—la tumba y el poeta son hermana y hermano—
te dirá: "Cortesana de atractivos inciertos,
¿de qué te vale ahora ignorar a los muertos?"
Como un remordimiento te roerá el gusano.
TUS OJOS-Julio Flores.
Ojos indefinibles, ojos grandes, como el cielo y el mar hondos y
puros,
ojos como las selvas de los Andes: misteriosos, fantásticos y oscuros.
Ojos en cuyas místicas ojeras se ve el rostro de incógnitos
pesares, cual se ve en la aridez de las
riberas la huella de las ondas de los
mares.
Miradme con amor, eternamente, ojos de melancólicas pupilas,
ojos que semejáis bajo su frente, pozos de aguas profundas y
tranquilas.
Miradme con amor, ojos divinos, que adornáis como soles su
cabeza, y, encima de sus labios
purpurinos, parecéis dos abismos de tristeza.
Miradme con amor, fúlgidos ojos, y cuando muera yo, que os amo
tanto ¡verted sobre mis lívidos
despojos, el dulce manantial de vuestro
llanto!
UN SUEÑO-Edgar Allan Poe
¡Recibe en la frente este beso! Y, por librarme de un peso antes de partir, confieso que acertaste si creías
que han sido un sueño mis días; ¿Pero es acaso menos grave que la esperanza se acabe
de noche o a pleno sol, con o sin una visión?
Hasta nuestro último empeño es sólo un sueño dentro de un
sueno.
Frente a la mar rugiente que castiga esta rompiente tengo en la palma apretada
granos de arena dorada. ¡Son pocos! Y en un momento
se me escurren y yo siento surgir en mí este lamento:
¡Oh Dios! ¿Por qué no puedo retenerlos en mis dedos? ¡Oh Dios! ¡Si yo pudiera salvar uno de la marea!
¿Hasta nuestro último empeño es sólo un sueño dentro de un
sueño?
LA PLEGARIA DE UN PAGANO No dejes morir tus llamas;
Caldea mi sordo corazón,
¡Voluptuosidad, cruel tormento!
Diva! supplicem exaudî!
Diosa en el aire difundida,
Llama de nuestro subterráneo,
Escucha a un alma consumida
Que alza hacia ti su férreo canto,
¡Voluptuosidad, sé mi reina!
Toma máscara de sirena
Hecha de carne y de brocado,
O viérteme tus hondos sueños
En el licor informe y místico,
¡Voluptuosidad, fantasma elástico!
Autor del poema: Charles Baudelaire
MORIR NO DUELE MUCHO
Morir no duele mucho:
nos duele más la vida.
Pero el morir es cosa diferente,
tras la puerta escondida:
La costumbre del sur, cuando los
pájaros
antes que el hielo venga,
van a un clima mejor. Nosotros
somos
pájaros que se quedan:
Los temblorosos junto al umbral
campesino,
que la migaja buscan,
brindada avaramente, hasta que
ya la nieve
piadosa hacia el hogar nos empuja
las plumas.
Autor del poema: Emily Dickinson
Recommended