Tema 13 fundamentos del cine

Preview:

DESCRIPTION

 

Citation preview

Cultura audiovisual 1º Bachillerato Artes Plásticas

I.E.S. Severo Ochoa

1.- Representar y conservar el movimiento de la realidad. Este ha sido el anhelo del ser humano. Se desarrolló a finales del siglo

XIX a partir del conocimiento de la fotografía y la óptica humana.

La capacidad de registrar imágenes en movimiento abrirá nuevas posibilidades para la difusión de ideas, la creación artística y el conocimiento humano.

En su centenario se ha convertido en el arte más genuino del siglo XX y ha alumbrado numerosas obras maestras.

La imagen cinematográfica es una ilusión óptica que se genera a partir de un doble movimiento:

El movimiento de grabación: La cámara de cine capta la realidad y descompone el movimiento en una sucesión de imágenes estáticas.

El movimiento del proyector: La sucesión de fotogramas se ilumina y proyecta a gran velocidad, lo que permite la reposición del movimiento.

La novedad del cine es crear en la pantalla la sensación de movimiento y superar a la imagen fotográfica.

2.- Orígenes del cine. La ilusión del movimiento.

Hito cultural de la era industrial. El 28 de diciembre de 1895 los hermanos Lumiére presentaron en París su cinematógrafo, el mundo ya no sería igual.

En sus inicios, el cine era una atracción de feria.

Pero con el paso de los años se consolida como espectáculo de masas, y la mayor industria cultural del siglo XX.

Técnicamente, el cine fue posible gracias a la combinación de tres fenómenos.

El descubrimiento de la persistencia retiniana.

El desarrollo de la fotografía.

El invento del cinematógrafo.

2.1.- La persistencia retiniana. ¿Por qué percibimos en movimiento un torrente de fotografías

proyectadas a gran velocidad?

A los primeros espectadores de la Historia del Cine, este nuevo invento les pareció un acto de magia.

Sin embargo, esta sensación de movimiento se debe a una característica de nuestra visión que se denomina “persistencia retiniana”.

Cuando el ojo percibe las imágenes de la realidad, se graban en nuestra retina y de allí pasan a nuestro cerebro en forma de impulsos.

Las imágenes no se borran de nuestra retina hasta pasados 1/5 de segundo. Es tan breve que en la vida normal no lo percibimos.

Podemos hacer la prueba de la linterna en movimiento en la oscuridad. No vemos la luz en cada posición y sí una estela continua.

Aplicamos este principio al cine: La cámara toma fotos sucesivas a

gran velocidad, Cada fotograma capta un instante determinado.

Durante la proyección los fotogramas pasan a gran velocidad por el proyector. La “persistencia retiniana” impide que nuestros ojos perciban el salto de fotograma y percibimos una imagen constante que recrea la ilusión de movimiento.

Si utilizamos un proyector de manivela y no le damos la velocidad adecuada vemos los saltos entre los fotogramas, porque damos tiempo a que cada imagen se borre en nuestra retina.

16 fotogramas por segundo son los necesarios para que se produzca la ilusión. Actualmente se rueda con 24 fotogramas por segundo.

2.2.- La descomposición del movimiento: Fotografías de exposición rápida. Durante el siglo XIX se consigue reducir el tiempo de exposición de la

imagen en el celuloide hasta décimas de segundo.

Ese adelanto se produce al mejorar la velocidad de respuesta química de la película al ser expuesta a la luz. Fue esencial para realizar instantáneas de objetos en movimiento.

Valiéndose de este avance, el inglés Edgard Muybrige experimentó en 1870 con la fotografía en fases, en 1877 publicó un libro con más de 20.000 fotos consecutivas.

Descomponía el movimiento de animales y actividades humanas.

Sus series de fotografías son todavía de gran ayuda para realizadores de dibujos animados.

3.-Los hermanos Lumiére inventaron el cinematógrafo. Los hermanos Lumiére en Francia, así como Edison en EE.UU.

inventan casi a la vez sus respectivos aparatos: el cinematógrafo y el kinetoscopio.

La gran diferencia entre ambos ingenios radica en la forma de exhibición:

Los Lumiére optaron por una pantalla grande para la proyección de sus películas, ante un numeroso público.

Edison no supo ver las posibilidades comerciales y habilitó una máquina de monedas con un sistema de visionado individual.

Las primeras películas tenían una mínima duración, que se limitaban a tomas de la realidad.

Los Lumiére instruyeron a numerosos operadores que viajaron por todo el mundo para obtener imágenes y remitirlas a París. Documentos de gran valor histórico.