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S E R M O W

DE M A R I A SA N TX SSIM AE N E L M ISTERIO

D E SU P R E S E N T A C IO N A L T E M P L O ,

TITULAR DEL COLEGIO MAYOR

D E S A N T O T H O M A S B E V I L L A N U E V A DE LA CIUDAD DE VALENCIA,

P R E D I C A D O E N L A S O L E M N I D A D , que en el dia 21 de Noviembre de

C E L E B R Ó E L C O L E G IO E N SU C A P IL L A ,

P O R

JDo J O S E F P A S C U A L Z A L O N yL FON T COLEGIAL ÍDEL MíSMO , ÍDOTO^

Theologp^ i Catedrático de F ilofofia en /¿í U?i¡l?ey/¡dadde Valencia.

LO DAN A L A LUZ PUBLICA SUS HERMANOS LOS COLEGIALES, i lo dedican a fu gloriofo Padre, Fundador , i Arzobifpo,

S. THOMAS DE VILLANUEVA.

CON L A S L IC E N C IA S N E CESSAR IA S»

En V^encia ; Por Benito M onfort , ano 1 7 7 0 .

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A f ^ B A C l O K D EL ^ l O m ^ E S T E V E ,

Macero en Artes^ i T>otor Teologo en ejìa Uni'))er- fid a d, Catedrático que fu e de Filofofia eñ la mìfma

i anualmente Cura propio de la Parroquial Iglejia

de la Santlfsima Cru^ de la prefente Ciudad

POR COMISSION

D E L M . I. S. D . LU IS A D E L L , I F E R R A G U T , D o to r en ambos Derechos, C anon igo Preven- dado de nueftra M etropolitana , i V icario General de efte A rzobifpado.

M. I. S.

.jA^Gradezco a V . S. el honor, que recibo, en la con­fianza de encargarme la cen.fura del Sermón de Maria Santifsima en el Mifterio de fu Prefentacion al Templo, que predicò D. Jofef Pafcual Zalon, Presbitero , en la Iglefía de fu Colegio, i el gufío que efía comifsion me facilita en la agradable letura de una Oración , a mi corto entender, ajuftada a todas las reglas, i preceptos de la Oratoria chrifliana. Porque íiguiendo fìempre el hilo de la Oración , defcubre el efpirítu que anima al Miílerio 5 objeto de fu Elogio, con un eftilo el mas pro­porcionado para caufar en los corazones de fus Oyentes, i Letores las mas faludables imprefsiones, femejantes a las que hizo en muchos Santos la confideracion de efíe Mifterio. De manera : que quien leyere efta Oración encontrará con el gufto i elocuencia que manifìefìa el Autor, una fuerza fuave , que inftruye, i mueve a la imitación de Maria Santifsima en el miñeriofo hecho de

fu

fu Prefentacion ; o para efplicarme conforme a la idea del Sermon : en el facrlfìcio que de sì mifma hizo ella Soberana Señora, prefentandofe a Dios en el Templo, defcubrirà el que de nueftras voluntades devemos ofre­cer todos al Señor. I afsi : lejos de contener efte Pane­girico cofa alguna contra la F é , i buenas coftumbres, es bañante para excitar los mas vivos fentimientos de religiofa devocion a Maria Santifsima, i contribuye pa­ra animar a feguir los egemplos de nueílro Prelado San­to Thomas de Villanueva , que fundando el Colegio, monumento de fu zelo i pañoral defvelo, a la fombra de la que toda fe ofreció a Dios en las primicias de íu vi­da f quifo imprimir en los individuos de fu Diocefìs la mas cordial devocion a la Virgen Santifsima en eñe fan- to Miñerio. Por lo que foi de fentir, fa lv o fem p er S e , que conviene falga efte Sermon a la luz publica. Va- lencia a 28. de Noviembre de

D r. Diodoro E Jieve, Rr.

Imprimafe. Imptimafe.Dr, A dell, Vie. Gen, Eulate , Regente.

AVE

CJ/

A V E M A R I A .

VOS, SEÑOR, ROMPISTEISmis lazos; To os facrijicaré una Hojlia de alabanza.Vúabi2LS Ta­cadas del Salmo 115.

IC H O SA G eruíalen , afortu­nada S io n , Ciudad la mas íanta , la mas g lo rio ía , la mas feliz, enjuga yaj síj que ya llego el cumplim iento de tu gozo 5 enjuga las lagri­mas de tus o jo s ; echa lejos

de tu corazon los fo llo zo s , i los fufpiros 5 re- boía de jubilo , i de placer ; no fe oigan mas en tí Cánticos defapaciblcs, ni funeftos Trenos: reíuenen, sí, en toda tu R egión H im n o s, i Sal­m os de alegria. N o , no traigas ya a la m emo­ria , ni las terribles amenazas, con que Dios te afligió tantas veces, ni las lagrimas de Nehemias por la deíolacion de tus muros , ni los triíles íb llozos, i funeftas predicciones con que lamen-

A ta-

%tava Gercmias la ruina de tus E d ificio s, lo def- apacible de tus C a lle s , el defconfuelo de tus Ha­bitadores 5 i los ahullidos de tus M o n tes, i C a­m inos. Levantare 5 Ciudad ía n ta , leva n ta re ,te diré con el Profeta Ifaias, defpierta ya del peía- d o letargo de tanta p e n a , i dolor. R eviftete en buenhora de fortaleza , i llenare de gloria. C on voca a tus afortunadas H ijas, no ya para que cubiertas de ceniza arraílren defalínados facos, i m elancólicas vayetas, fino antes bien para que rozando viftolas galas te acom pañen con Pal­mas , i con Laureles en día de tanto go zo .

I fi pretendes inform arte llenam ente de los juftifsimos m otivos de tanto jubilo , fepas , o Sion íagrada, que íobre los Altares de tu fam ofo T em p lo fe ofrece hoi a D ios en Sacrificio la Palom a mas can d id a , la T o rto la mas inocente, q u e vieron jamas los Siglos : h oi, llenando de refplandores tus C a lle s , i Plazas,am anece deídc el O riente de la Cafa de fus P ad res, para reco- gerfe en la de D io s , aquella Aurora h erm o fa, i íipacible, por quien tanto íufpiraron los Patriar­cas , i Profetas ; aquella Luna fin m an chas, ni m enguantes, que ha de llenar de honras al Pue­b lo H e b reo , i de felicidades a todo el M undo: hoi hace v id im a de fu lib ertad , i de todas fus graciofas prendas aquella celebre H eroina , con

quien

quien no pueden cotcjaríe ni las Deboras , i Judites de los líraelicas, ni las Cañdaces de los Etiopes 5 ni las Semiramis de los AíTyrios, ni las P o rc ia s, i Lucrecias de los Rom anos , ni las Arcemiílas de los G rie g o s; hoi íe planta en la Cafa del Seiior el O liv o mas fecundo para dar a los mortales un fabrofifsim o fruto con que curen de todas fus dolencias ; lioi fe defprcnde de las comodidades de la Cafa de Joaquin 5 i A na , i del cariño de tan tiernos Padres, para preíentarfe a Dios en el T em p lo , aquella prodi- giofa N iñ a , que es la g lo tis de Gerufalen , la alegria de líra e l, i el honor de ííi dichoío Pue­b lo . Logra en buen hora,G eruíalcn,tanta gloria*

Y tú tam bién , 6 amado C olegio mió , llé­nate de plácemes, i parabienes en efte dia. Pues que correípondiendo a las altas id eas, i vaftif- fim os proyectos, con que nueftro amable Fun­dador , i Patriarca el Gran T h o m a s d e V i l l a -

n u e v a quiíb echar tus cimientos íbbre el M on ­te íanto de la P r e s e n t a c ió n d e M a r ía , procuras dar, a la fom bra, i abrigo de tan preciofo A rbol, dulciísim os frutos de honor , i honeftidad , i ofreces al M undo en cada uno de tus iluñrcs Joven es Individuos una glorioía m em oria de tan íbberano M ifterio. A h ! i que me haya de ha­llar Y o aora em barazado con el ineftim able ho-

A 2 ñor

ñor de D om eftico e H ijo tuyo , para no poder dem oftrar a mis O yentes eíla folida verdad ! Q u e el reconocerm e d iílinguido, i honrado con la apreciable divifa de tu Beca, haya de fellarmc tan violentam ente los labios, para no poder deí- hacerm e todo en tus elogios ! Q ue no me íea permitido el ponderar com o una de tus mas fobrefalientes glorias, cuantas, i cuan fuaves ben ­diciones eftás perenemente recibiendo del C ie­lo , por coníervar ficmpre v ivo en cada uno de tus Colegiales el efpiritu íagrado del M ifterio de la P refentacion!

Pero de que podrá fervir el que Y o calle, que til eres el devoto Santuario, donde, a im i­tación de M aria , íe preíentan, i ofrecen a Dios fervo ro fo s, i celofifsimos Sam ueles, fi lo eftán publicando a voces los C le ro s , i Parroquias de V alen cia , i fuera de e lla , governadas cafi todas por Paftores, que un dia fueron criados, i edu­cados en efta O ficina de virtud ? Q ue im por­tará que Y o no d ig a , que tu eres la Caía de la Sabiduría , i de la O ración, i el T aller de M inif- tros para la Caía del S e íio r, íi lo dirán perpe­tuamente tus íantas C on ftitu cion es, confirm a­das con el juram ento, que preñamos todos tus H ijo s , de aver de confagrarnos por medio del Sacerdodo, en obíequio de la Ig lcfia , i del ma­

yor

yor férvid o de Dios ? D e qué aprovechara el que Y o o m ita , que tu eres la Efcuela de la Elo­cuencia 5 que cada dia das al M undo Cliriftiano Tu lios com o R o m a , i Dem oftenes com o A te­nas 5 fi lo efta gritando efte m ifm o fagrado Pul­pito 5 ocupado tantas veces por otros Varones A p o íto lico s , capaces con íu dotrina, i egem plo de llenarm e a m í de confufion ? C óm o podré Y o ocultar , que tú eres la Fuente faiudable, de donde nacen caudalofamente dos criftalinos bra­zos de V irtud , i Letras, cuando lo publican por todo el M undo admiradas las Catedras , i los Teatros , iluftrados i enoblecidos los C abildos, i edificados los Clauftros ? Siendo tus iluftres Be­cas el egem plo de las Religiones , el honor de las Iglefias, i el aílbm bro de las Univerfidades. I fi entre tantas glorias no fe defcubre el eíplen- dor de las M itras, i Capelos, es tal vez,' porque nueftro hum ildifsim o Fundador, fabiendo prác­ticam ente, cuan fublimes ion las cumbres de tan {agrados h o n o res, no quiío deftinar a íus C ole­giales para Mitras j fino folamente para Báculos, i apoyos en que eftriven , i fe foftengan las Ig le fia s!

Tanta íolicitud , i paternal cuidado deves a tu Padre, i mió , ó C olegio fanto 5 i tantas h on ­ras, i eíplendores com o has oido, i faben cuan­

tos

tos me eícuchan, deves tam bién a tu Patrona, i M adre M aria Santifsima de la Prcfentacion. O bfequiala, pues, en buen hora, que m ucha ra­zón cienes para obfequiarla. C elebra, con la ib- lem nidad,i oftentacion pofsible,efte íagrado dia, dedicado por la Iglcfia a tan íoberano M ifterio, i haz chriftiano alarde de militar bajo tan g lo ­riofo E ftandarte, que Y o entre tanto procuraré deíem penar, íegun mis fuerzas, el honroíb en­cargo de O ra d o r , que te has dignado confiar­m e. Para ello he determ inado hacer ver a mi A uditorio la Prefentacion de M aria al T em p lo com o uno de los M ífterios mas m aravilloíos, i d igno délas mayores alabanzas entre cuantos nos acuerda la Iglefia íanta de efta gran Señora, Efte íera todo el argum ento de la preíente O ración, O id io , para vueftra inftruccion, en efta propoíl- cion íola, María preíentada a Dios en el T e m ­plo , bajo las apariencias mas h u m ild es, i íen- cillas, deja al M undo egem plos de la m ayor edi­ficación , i motivos de las mayores adm iracio­nes , i elogios : Maria prefentada a Dios en el T em p lo pudo juftam ente decir con el Profeta D avid ; V o s , S eñ or, rompifteis mis la z o s . Y o os íacrificare una H oftia de alabanza, Aísi pien- fo dem oftrarlo efta m añ an a, fi me oís atenta, i benignam ente.

I para q u e , ya dcfdc el p rin cip io , quedeis enteramente aíTcgurados de la ingenuidad, con que ven go a hablaros 5 os confieíTo abiertamen­te , que Y o tam bién convengo con el primer peníam iento 3 que os ha ocurrido , acabada de oir m i Propoficion, Si Señores. Afsi es pun­tualm ente , com o voíbtros lo aveis penfado. N o es el M ifterio de la Prefentacion de M aria al T em p lo alguno de aquellos mifterios ruidoíbs, i b rilla n te s , que al primer golpe de vifta for- p re n d e n , i arrebatan el e íp ir itu , llenan el en­tendim iento de aíTombros , i admiraciones , i le dan unas ideas fublim es de la mageftad , i gloria de la R eina del C icló , i de la Tierra. Porque acaíb fucede en efte adorable M ifterio, com o en el de la C o n c e p c ió n , adelantaríe la gracia a la naturaleza , para fantifícar, aun an­tes de fer , una pura Criatura hecha defde el principio , i antes de los Siglos ? Se admira en e l , com o en el de la Anunciación , una M uger vifitada en nom bre dcl Señor por un Arcángel, en el retiro de ííi ap o íen to , i elevada deíHe alli a la fuprema esfera de M adre de todo un Dios? Egercita efta Señ ora, com o en el a¿to de la Pu­rificación , el oficio efpecialiísimo de A bogada de los h o m b res, ofreciendo a Dios, por Reden­tor del M undo, al H ijo único del Padre Eterno ?

Se

Se deícubrc en é l , com o en el de la AíTancion, un Cuerpo refucitado prodigiofamence , elevado por los aires lleno de gloria, i rcfplandor, i con­ducido por ¡numerables Angeles , i Serafines, para colocarlo íobre las E ftrellas, i íobre codos los Bienaventurados del Em píreo? N o , C atóli­cos , no fucede afsi, a la verdad, en el M ifterio de efte dia. C uanto los ojos regiftran en él , i el entendim iento defcubre a primera v if ta , no puede fer ni mas hum ilde, ni mas fencillo. Dos venerables Ancianos acompañan por las calles de Gerufalén, i conducen a fu T em plo una N iñ a de tres años, para ofrecerla a D io s : entreganla por fus mifmas manos al Sumo Sacerdote ; i ella, haciendo el m ifmo Sacrificio, fe ofrece v o ­luntariamente al fervicio, i m inifterio de la C a ­fa del Señor. Efto es lo mas que los fentidos llegan a alcanzar en la Prcfentacion de Maria

al Tem plo.P e ro , oh ! Q ué de maravillas fe ocultan en

eñe adorable M ifterio I Q ué raígos de intrepi­d ez, i generofidad ! Q ué liciones tan faludables, para el M undo ! A mi me baftara, para creerlo ;ifsi , ver el empeño , con que íe aplican a iluf- trarlo , un S. Germán , Patriarca de Conftanti- n o p la , un S, G ero n im o , en una de íiis Cartas, a H eliodoro , un S. A guftin 5 en el L ibro de la

V ir-

Virginidad , un S. A m b ro fio , en el L ibro fe- gundo de las V írg e n e s , un S. G regorio N icen o, en la O ración de la N atividad de María , un S. Juan D am aícen o, un S. Bernardo , i otros de los Padres mas infignes de la Iglefia. I con efe- t o 5 Señores, en la Prefentacion íoberana de M a­ría al T em p lo , no fucede con la m ayor proprie- dad, que llega felizm ente a tomar puerto en él, aquella rica N ave, por quien tanto fufpírava Sa- lom on , i que ha de franquearnos para, nueftro confuelo el trigo mas precioío ? N o fe ve con toda verdad , que fe introduce, para anidar en los agugeros de la piedra del Santuario,la Palom a mas amable ? i que el Altar animado , fobre el cual el m ifmo H ijo de Dios ha de fer un dia ofrecido en h o lo cau fto , em pieza a difponeríc, para tan alto deftino, entre las llamas de la ca­ridad, i los perfumes oloroíos de todas las V irtu ­des ? N o es c ie rto , que prefentandofe Maria a D ios en el T em p lo , la Hija mas amada del Padre Eterno le coníagra todo fu am or, para no reco­nocer jam as, ni otro Padre, ni otra Madre íobre la tierra ? que la Madre del V erbo D ivino íe ha­ce digna de tan fupremo h o n o r , haciendoíe ía hum ilde Efclava ? i la Efpoía del Efpiritu Santo confirm a fu divina alianza , votando íblem ne- mente guardar una V irginidad perpetua ?

B N o

N o es afsi que fe retira a los filerícios del T em p lo , aquella celebre H ija de Sion, que m an- teniciidofe entre los h o n o res, i lucinnicntos de fu C a fa , uviera podido grangearfe los mayores aplauíos de fu figlo ? Aísi devemos creerlo cier­tamente , a pefar de los impios Herefiarcas L u ­tero , i C alvin o ; i aísi es fin duda alguna. N o , ;io era Maria Santifsima , por mas que ellos ha­yan intentado in u m a rla , i ofcurecer fus glorias, una deípreciable M uger , hija miferable de la infima plebe. Era hija de la R eal Cafa de D a­vid , i Salomon ; fe ballava adornada con los T rofeos de los m ayores C on qu iftad ores, i con las Purpuras de los m a s ihfignes Reyes del M un­do ; realzava tanta gloria el fum o Sacerdocio, que por mas de m il años gozaron fus Abuelos, i contava u n a N o b leza de mas de cuarenta ge^ neraciones. C om o heredera unica de Joaquín , i Ana , devia llegar un dia a fer Señora de los P alacios, que en Sefora , en Belen , en N a ­zareth , i en Gerufalén peitcnccian a fus n o- bles Padres 5 i confcrvava fus derechos a los Lugares , Cam pos , i Ganados , que , com o quieren N ic e fo ro , i EmiíTeno , com ponían la pincrue heredam iento. I fobre todo, adornada c o ñ u d a s las perfecciones del cuerpo , i del e - p iritu , i con todos los dones de la naturaleza.

i de la grácia 5 podia promcterfc en el M undo codo obfequio , i veneración.

Por eíTo com o arrebatado el D ivin o Efpoío, al contem plarla tan graciofam ente iluftrada,pro- ru m p e , entre adm iraciones, en aquellas dulces palabras del cap. 7 . de los C an tares: Cuan her- m ofos fon tus paíTos, o H ija del Principe del C ielo , i de la Tierra ! Cuan hermofos fon , Se­ñora 5 digo Y o tam bién figuicndo el m ifm o efpiritu de ü e ftro E fp o íb , en efte dia. Cuan her- ■mofos fon eíTos cus devotos paíTos, con q u e te encaminas , te introduces, i te prefentas en el

'.Templo ! Mas herm oíbs, i mas felices io n , que los paíTos, que dio Judith, para degollar a H a- .lofernes, Í librar a fu amada Patria Betulia; mas .que los que dio la Reina S ab a, para vifitar a Salomon ; mas que los que dieron los Sacerdo­te s , i L ev itas, para introducir el A rca dcl T e f- tam ento en la ca fi de O bededon , i en la Ciu-- <lad de David ; mas que los que dio Maria la herm ana de Moifes , para paíTar a pies enjutos el Mar R o jo , por entre m onees, i murallas de a g u a ; i mas que el buelo de la P a lo m a, que confoló a N oe con el verde ramo del O liv o , Porque V os deíde la figrada Arca del T em p lo , fereís el O livo v e rd e , i frondoíb, para anunciar a los Pueblos coda ferenidad ; V os m e jo r, que

B 2 la

la hermana ¿ c M oifes , os ocupareis defde el Santuario, en cantar al Dios de ifracl H im nos de alaban zas, con que lograreis las mas copio- fas bendiciones para todos los hijos de Adán , i los librareis de las furiofas o la s , que les eftan continuam ente am enazando en el mar del mun­do : V os com o los Sacerdotes, i Levitas en la Caía de O bededon , i en la Ciudad de D avid , bendecireis dulcemente al Señor ; com o la R ei­n a Sabá, publicareis las glorias del divino Salo­mon : i con m ayor valor que Judith , corta­reis gloriofam ence la cabeza a Holofernes , i librareis de to^a oprefsion al nuevo Pueblo de

Dios.Si Sacerdote fa n to , fi Levitas , i M iniílros

del Tem plo , fi devotifsimas D on cellas, com pa­ñeras afortunadas de Maria en el Santuario , fl. T a l es eíTa prodigiofa N iñ a , que hoi fe prefenta en la Cafa del Señor 5 tales, i aun mayores ion fus gracias; raneas, i tan fobrefalientes fon las prendas, que la adornan. Llenaos pues todos de un íanto ju b ilo , i dad mil enorabuenas a eíía nueva H e ro ín a , com o en la Caía de Batuel íc las davan a Rebeca fus herm anos, porque avien- dola elegido el criado de Abrahan para efpofa de Ifaac; la adornó m agnificam ente con las ga­las mas viílofas , i mas ricas, i con las joyas mas

pre-

preciofas : dadla mil enorabuenas, com o en la Cafa de N abal fe las davan a la prudente A bigail, por aver fabido grangearfe la gracia de D avid , i com o el Pueblo Jfudlo íe las dava a la Reina E íte r , porque con fus gracias, i herm ofura lle­go a triun& r de la indignación de A ílu e r o ,i de la tiranía fem entida de Am an : dadla mil enora­buenas , com o allá en Betulia , todas las claíTes, i edades de los Hebreos fe las repetían a Ju d ith , porque con íu elegancia , i diícrecion arrebato los o jo s , i el corazon de H o lo fern es, i libro a toda fu gente de la funeíla tragedia, que eílava ya para introducirfe por las puertas de la C iu ­dad ; dadla m il enorabuenas:;

Mas n o , fufpended , fufpended un tanto la a leg ría , om itid los aplaufos , i parabienes , o felices d om eílícos, i familiares del T em p lo fan- to de Dios. Mirad , que üeftras alegres voces ion otras tantas factas, que trafpaíTan los tiernos co­razones de J o a q u ín , i Ana, Reparad en la pena, i fentimiento de eíTos afligidos Padres. V ed en la turbación de fus femblantes el dolor con que fuben las gradas del T e m p lo , fe llegan al fumo Sacerdote, i le entregan por fus mifmas manos una hija, que es el unico objeto de todos fus ca­riños ; ved fus almas rafgadas, i divididas entre los fentimientos de la d e vo cio n , i de la piedad

na-

Hn atu ra l; la devocion los cftim ula a ofrecer de buena voluntad fu tierna h iju e la ; la piedad na­tural quificra obligarlos a retenerla en fu com - paíiia. J o a q u in , aviendo al cabo de tantos aiios llegado a fer Padre de la hija mas feliz , fe ve ya en el eílrem o de quedar privado de fus mas dul­ces delicias *, Ana tam bién, deípues de aver logra­do el fer la muger mas dichofa entre las M adres, e ftl para perder todo fu g o z o , i codo fu confue- lo. Joaquin fufpira de tern ura, i A na derrama lagrimas de dolor.

Mas ved al mifmo tiem po , para üeftra ed ificación , i co n fu e lo , la intrepidez , i gene- rofidad de Maria, Ella mira las la g rim a s, que fe defprenden de los ojos de fus P adres, i oye fus ciemos fy fp iro s, fin dar el m enor feñal de flaq u eza , o fcntimienco : los gem idos de aque­llos inconfolables ancianos llegan a fus oidos, pero no pueden llegar a perturbar fu valor. El m undo hace los últimos esfuerzos para m ante­nerla en el figlo 5 i ella cerrando los ojos a lo» aplaufos, i ventajas con que la brinda el m undo, i negando los oidos a las cernuras de fu P ad re , i a los halagos de fu M a d re , fe retira generofa- mence al T e m p lo , íe ofrece coda a íu D io s , i cual enamorada Palom a , no da enerada en fu corazon a otras fin ezas, que a los arrullos del

di-

divino Efpofo. A lli d.ulcemente unida a S. M . con los fuaves lazos de la caridad, le dice con la Efpofa de los C an tares; he hallado ya , Señor, a quien tan folicitamente iva buícando mi alma; centróos, i os tendrc perpetuanKnte en mi com ­pañía , i no os dejaré jamas. A lli le repite con D avid ; mas vale un dia en los atrios, i vefti- bulos de üeftra C a fa , que m il en los taberna- cu lo s, i pavellones engañofos del m undo. A lli penetrada intim am ente con el S eñ o r, todas fus po ten cias, todos fus fen tidos, todas las faculta­des de fa cu erp o , Í de íu a lm a , todas las emplea enteramente en Dios. N o hai peníamiento en íu efpiritu , no fe form a algún áfcóto en íii cora­zon , no íalen fufpiros de fu boca , nó dan mi­rada fus o jo s , que no vaya a parar a íu Dios. El d ia , la n o ch e , la v ig ilia , el fu eñ o , el deí^ caníb , el tra b a jo , todo lo coníagra a la g loria, i amor de fu Dios.

Santo D io s ! Q ue hoftia tan agradable a üeí^ tros ojos] Q ue viótim a tan preciofa i H uvieraii podido todas las criaturas de la tierra, i todos los A n geles, i Serafines del C ielo haceros un íncri- ficio igual al que os hace hoi lo!a Maria , hija de Joaquin , i Ana ? Vieron jamas los í ig lo s , a ex­cepción de la de üeftro U n ig é n ito , oblación fe- mejante ? Porque, qué tienen que ver con ella la

fan-

fangre de los B ecerros, i de los Corderos , la cfufion de los lico res, i el olor de los perfumes del v ie jo Teftam ento? Q u é , las ofrendas de A bel, d e N o e , i de los demas Patriarcas ? Q u é, las m ag­nificencias de David , i las fantas profufiones de Salomon ? Q u é , los facrificios que con tanta ge- nerofidad h ic iero n , Abrahan de Ifa a c , M anué de San fon , i Ana de Samuel ? Preciofas fueron ciertamente todas eftas o b lacio n es, i viótimas, pero ivan con todo acompañadas de muchas im ­perfecciones , que rebajavari confiderablem cnte íu valor. Sola Maria fue la hoftia im aculada, en quien no fe reconoce el m enor d e fe to , ni im ­perfección. Sola Maria fue la vi¿tim a agradable, digna de las complacencias de todo un Dios. So­la Maria fue la afortunada D o n cella , que mere­ció oir de boca de fu enamorado Efpofo aque­llas palabras tiern as, i amorofas : V en Efpoía mia , ven amiga m ia, ven defde el L ibano, ven i te coronaré con una hermofa corona de doce Ef- trellas. C on no menos cariñofas cxpreísiones re­cibió Dios en el templo la fincera o b lacio n ,q u c Maria Santifsima acabava de hacerle de fu liber­tad , i de todas fus graciofas prendas.

A h ! Q ue no tenga yo elocuencia para fig- nificaros aora la fantidad, i religión de Maria en el inflante de fu Prefentacion! Q ué defprecio

con-

concibió al m u n d o , i íiis riquezas ! Q ue olvido de las criaturas ! Q ue am or para con fu Dios! C on que generofidad fe refolvió a votar folem - nemence una virginidad perpetua, en un tiem ­po en que no avia m ayor o p ro b io , que la efte- rilidad , i en un figlo , en que las Matronas mas infignes de los Hebreos creian com o precifo, el aver de deftinarfe al eftado del M atrim onio, pa­ra contribuir afsi a la defeada venida del M efias, a quien efperavan para Libertador general de la Judca ! C ¿ e no fepa Y o deciros tam poco el fo- bcrano com ercio, que en. el retiro del Suntuario -entabló M aria con fu D io s , i los celeftiales gu f- to s , i confu^los, con que el Señor regalava a efta adorable N ii ia , a quien por tan (eguros caminos iva conduciendo a la dignidad fuprema de M a­dre fuya ! H acedlo faber a mi auditorio , o gran G ero n im o , vos que allá en la ío lcd ad d e la cue­va de Belen meditafteis de eípacio , i efcriviñcts con tanto acierto fobrc efte punto. Pero ni aun G eronim o pudo raftrear del fino algunas conge- turas. Decídnoslo pues vo fo tro s, o fintos A n ge­les , efpiritus confidentes de Maria , que deftina- dos por el Altiísim o para fu cuftodia , i la del T em p lo , prefentavais a Dios fus oraciones, i fus cán ticos, ! bajavais también de parre del Seiior a recrearla con muficas fu aves, i deliciofas. Pe-

C ro

ro a i i ! Q u e liaña los m ifmos Angeles llenos de aílom bio confieílan , que la corrcfpondcncia am oroía de M aiia con Dios es uno de los m iíle- rios refervados a S. M , Pues que fulo el Señor llega a penetrar vivam ente el corazon de la San- tifsima V irgen prefentada al T em p lo . Solo Dios com prende lo fino de íu am or , lo am orofo de íus extafis, i arrobam ientos, i lo fervoroío de íii voluntad. Solo Dios íabe las dulzuras, en que íe anegava íu alma , las delicias de fus poten cias, i fen tidos, i los favores del C ic lo , con que era fre­cuentem ente recreada.

V ed ya pu es, o amados Catolicos , que me cícu ch ais, fi os dige con ra z ó n , que el M iíterió de la prefentacion de M aria al T em p lo es uno de los M iílerios mas m aravillofos, i d igno de las m ayores alabanzas, entre cuantos la Iglefia ían­ta nos acuerda de cita gran Señora, V ed fi M a­ria pudo juílam ente decir con el Profeta D avid: vos Señor rom piíleis mis la z o s ; Y o os facrificaré una H oftia de alabanza. I qué mas eficaces ar­gum entos , que mas robuftos teftim onios de efta verdad podré Y o daros , que los que os dejo propueftos , i aveis oido en el diícuríb de m i O ración ?

N o aveis vifto empeñados en iluftrar efte foberano M ifterio , i dar alguna idea de fus ma-

ra-

ravillas a un G erm án , un G eronlm o, un Auguf- t in o , un A m b ro fio , un G regorio N icen o , un C h rifo fto m o 5 un B ern ard o, i otros fancifsimos, i erudidísimos Padres de la Iglefia? N o aveis vif- co cambien coda la T rinidad Beacifsima recibien­do en el T em plo entre divinas com placencias, el Padre a fu H ija , el H ijo a fu Madre , i el Ef- piricu Santo a fu felicifsima Efpofa ? N o aveis ad­mirado la gencrofa reíblucion^con que volun ta­riamente fe encerró en el retiro del T em p lo la iluftre defcendiente de D avid , i Salom on , hija de Joaquin , i A n a , univerfal heredera de un ri- quiísim o patrim on io, i de los Palacios de Sefo­ra 5 de N azareth , de Belen , i de Gerufilen? N o aveis oido las ciernas expresiones, con que el Ef- poíb divino encarece los primeros paíTos, que dio M aria acia el T e m p lo ? PaíTos ciertam en­te mas fe lices, que los que dio Judith , para degollar a Holofernes j la Reina Sabá para vi- íitar a Salomon j los Sacerdotes, i L evitas, pa­ra introducir la Arca del Teftam ento en !a C a­fa de O bededon, i en la Ciudad de David j i M a­ria la herm ana de M oifes, para paíTar el mar ro­jo? N o la aveis contem plado digna de mayores plácemes, i parabienes, que Rebeca en la Caía de B atu el, A bigail en la de N a b a l, Efter en el Pala­c io de AíTuero, i Judith en la Ciudad de Betu-

lia?

So

lia? N o os aveis llenado de aíTombro, al oir la intrepidez de M aria, que en la tierna edad de tres anos 5 fe deíprendio llena de g o zo de la com pa­nia de unos afligidos P adres, de quienes era to­das fus delicias, huyo los aplaufos dcl f ig lo , i votò una virginidad perpetua en un tie m p o , en que entre los Hebreos no avia cofa mas dcfpre- ciada , que una muger infecunda ? N o aveis que­dado con ven cid os, de que con el Sacrificio, que Maria hace de si mifma , prefentandofe a Dios en el T e m p lo , no pueden com pararfe, ni la fan- gre de los Becerros, i de los C ord eros, ni la efu- fion de los lico res, ni el olor de los perfumes del viejo T e íla m e n to ; ni los facrificios de A b e l, i de N oe 5 ni las magnificencias de D avid , ni las fantas profufiones de Salomon?

C o n c lu id ,p u e s , cambien c o n m ig o , i con- fcílad la verdad de m i propoficion. Si, publicad, a vo z en grito , que Maria prefentada a Dios en el T e m p lo , bajo las apariencias mas hum ildes, i íen cillas,d eja al m undo egem plos de la m ayor edificación , i m otivos de las mayores adm iracio­nes , i elogios. Mas no os contentéis con aver form ado unas ideas fublimes de efta verd ad , pe­ro efteriles, i fin fruto. ConfeflTemos en buen- ora la grandeza del M ifterio , que adoramos en efte dia 5 pero íea al m ifino tiem po , preíentan-

do-

donos todos a D io s , a lo menos con cl cfpiritu. Prcientad , M adres, en el T em plo üeftros niiios, i niñas 5 que Dios os los b en d icira , com o ben­dijo a la afortunada hija de J o aq u ín , i Ana. H om ­bres 5 m u geres, pobres, ricos, nobles, plebeyos, m o zo s, i n iñ o s, acudid a com petencia a ofrece­ros todos al Señor, que Y o en fu nom bre os af- fe g u ro , que fi lo hacéis a ís i , os llenará de feli­cidades , com o lo h izo con M aria Santifsima en prem io de fu generoío Sacrificio,

I a voíotros feñaladam ente, amantifsimos C o le g ia les, .que podre y o deciros en eíle dia ? Sino lo m ifm o que en M acedonia digeron al grande Alejandro aquellos Em bajadores, que fa- ludandole en nom bre de fu Soberano : Gran­de e s , le digeron , o Alejandro üeílra felicidad; m agnifico üeílro Palacio ; íin limites üeílro Im ­perio , i defpotico üeílro dom inio íobre toda la tierra : celebre ibis por üeftras conquiílas, i loa­ble por üeílra generofidad ; incom parable es ciertamente la dicha de mirar bajo üeílros pies a todo un M u n d o , i tener pendientes de üeílro arbitrio los Reinos , i los Imperios mas flore­cientes del O rbe. Pero entre tantas glorias acor­daos de que fois hijo de un M onarca tan gran­de , com o Filipo Rei de M acedonia. O amados Señores, i hermanos m io s , con cuanta mas ra­

zón^

t zz o n , os puedo Y o hablar defde efte Pulpito con femejance eílilo. Llenaos de un go zo f i n t o , os digo refuclcamente a to d o s , i a cada uno de v o - íotros 5 porque entre las arrieígadas olas de la juventud os ha cabido la dicha de tomar puerto feguro en efte prodigiofo C o le g io : eftimad por honra no pequeña el veros adornados con eífas Becas, capaces de honrar a todo un m undo : lle­naos de jubilo, al oir el honor con quehafta los mas definterefadoSji Eftrangeros hablan de efta in- figne Cafa ; feame permitido el d eciro s, que os lleneis también de una complacencia chriftiana, c u a n d o , contemplándoos todos jovenes , i pe­queños Sam ueles, podeís dar egemplos de ma­d u rez , i diícrecion , a los Onias, i Eleazaros mas prove£los: íirvaos de aplaufb, i de confuelo el buen o l o r , que con los continuos egercicios de virtud 5 i letras hacéis exalar por dentro i fuera de eíle Santuario. Militad gozofos bajo el glo- rioíb Eftandarte de la Presentación de M akia al Tem plo . Pero entre tantas glorias acordaos de que ibis hijos no menos que dcl gran T h o m a s d e

V i l l a n u e v a ; acordaos, de que la caridad fue la virtud mas diftinguida, i amada de nueftro ama­ble Padre : acordaos, de que el monumento mas in íig n e , que de fu ardentiísima caridad dejo al M undo, es efte Iluftre Colegio, Continuad, pues,

co-

com o haíla aora 5 en procurar íus aumentos , i eíplendor ; que el Santo os continuará tam bién fu protección , i bendiciones defde el C ielo .

Afsi fea.

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