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Serie de Manuales de Teología Teología espiritua Saturnino Gamarra SL ,*** r-4 ; 1 # .L_ JSV fK. E- m * ' 4 E 7 - . .. <

07 Gamarra, Saturnino - Teologia Espiritual

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  • Serie de Manuales de Teologa

    Teologa espirituaSaturnino Gam arra

    SL

    ,*** r -4

    ;

    1 # .L_JSV fK. E -m * '4 E 7 -

    .

    ..

  • TEOLOGIA ESPIRITUAL

    POR

    SATURNINO GAMARRA

    BIBLIOTECA DE A U TO RES CRISTIA N O SMADRID 1994

  • Con licencia eclesistica del Arzobispado de Madrid (13-X-1994)

    Biblioteca de Autores Cristianos. Don Ramn de la Cruz, 57. Madrid 1994Depsito legal: M. 30.787-1994ISBN: 84-7914-144-1Impreso en Espaa. Printed in Spain

  • I N D I C E G E N E R A L

    Pgs.

    Presentacin ...................................................................................................... XVIIB ib l io g r a f a ........................................................................................................ XIXS iglas y a b r e v ia t u r a s .................................................................................... XXI

    C a p tu lo I. Identificacin de la teologa espiritual ........... 3I. La teologa espiritual en el plan de estudios ..................... 4

    a) Razn de su in tr o d u c c i n .................................................. 6b) Grado de a c e p ta c i n ............................................................ 7c) Razn de su m a n te n im ien to ............................................. 9

    II. Situacin actua l ............................................................................... 101. Panorm ica g e n e r a l ............................................................... 10

    a) Tratados g e n e r a le s ....................................................... 10b) D iccionarios, C olecc ion es de H is t o r ia 11

    2. T eologa espiritual y teologa d o g m tic a ................... 11a) La relacin no se reduce a la valoracin que la

    teo log a puede tener de la espiritualidad .......... 12b) La relacin no es de dependencia total o de p le

    na su b o r d in a c i n ........................................................... 12c) U na relacin propia. D ife re n c ia c i n ................... 13

    3. T eolog a espiritual y teologa moral ........................... 154. La com plem entariedad entre la teologa espiritual,

    la teo log a dogm tica y la teo log a m o r a l .................. 175. D efin icin de la teologa espiritual .............................. 186. Program acin de la teo log a esp ir itu a l........................ 21

    C a p tu lo II. Hay cabida para la espiritualidad hoy? 23I. La bsqueda actual de espiritualidad ................................. 24

    II. Reparos actuales a la espiritualidad .................................... 281. Reparos m s com unes ....................................................... 282. Reparos especiales ............................................................... 30

    a) Los reparos desde la psico log a ........................... 30b) Reparos desde la so c io log a y las teoras fun-

    cionales de la r e l ig i n ................................................ 32HIT Qu entendemos por espiritualidad ...................................... 33S 1. Punto de partida: V isin antropolgica de la espiri

    tualidad ...................................................................................... 33a) El cam ino hacia el interior. La interioridad . . . 34b) El cam ino a lo trascendente ................................... 34c) El cam ino hacia los otros ........................................ 35

  • X Indice general

    Pags

    2 Distintas formas de entender la espiritualidad 36a) Aproximaciones a la definicin de espirituali

    dad 36b) La espiritualidad como la estructuracin de to

    da la persona desde la vida teologal Sus implicaciones 38

    IV Los condicionamientos de un nuevo planteamiento de laespiritualidad 391 Antropologa y espiritualidad 39

    a) Antropologa humana 40b) Antropologa cristiana 42

    2 El contexto socio-cultural y la espiritualidad 43a) La mentalidad moderna y postmodema 44b) El compromiso por la liberacin 44

    3 El proceso evolutivo de la persona y la espiritualidad 45

    V Nuevo planteamiento de espiritualidad Sus caractersticas 461 Una espiritualidad integradora de la persona 472 Una espiritualidad que sea experiencia personal de

    la fe 473 Una espiritualidad vivida en el Espintu 484 Una espiritualidad que se desarrolla contando con la

    vida y con el mundo 485 Una espiritualidad gratificante y gozosa 496 Una espiritualidad de dialogo y, al mismo tiempo,

    una espiritualidad definida 497 Una espiritualidad profundamente realista 508 Una espiritualidad fraterna y apostlica 509 Una espiritualidad eclesial 50

    10 Una espiritualidad profundamente afectiva 5011 Una espiritualidad que entraa la relacin con Dios

    Trino 5112 Una espiritualidad pascual, que afronte la cruz 51

    C a p it u l o 111 La vida cristiana. La vida en Cristo 53I El ser en Cristo del cristiano 54

    1 Razn del planteamiento 54a) Base escnturistica 55b) El porque de la relacin con Cristo 56

    2 La autodonacion de Dios al hombre en Cristo Lainhabitacion 57a) La entrega de Dios 58b) La inhabitacion de la Trinidad 60

    3 Comunin con las tres Personas divinas La divinizacin 65

  • Indice general XI

    Pags

    a) Fundamentacion de la divinizacin 66b) La explicacin teolgica 68c) Implicaciones para la teologa espiritual 69

    4 Hijos en el Hijo 69a) Nos atrevemos a decir Padre 69b) Fundamentacion de la filiacin 70c) La aportacin de la explicacin teolgica 73d) Implicaciones para la teologa espiritual 74

    5 Hermanos en Jess 75a) La insistencia actual en la fraternidad 75b) Fundamentacion de la fraternidad 76c) Las implicaciones de la fraternidad a la espiri

    tualidad 77II El vivir en Cristo del cristiano 11

    1 La Vida nueva desde el ser en Cristo 782 El contenido del vivir en Cristo 79

    a) Vida filial 79b) Vida fraterna 80c) Vida de amor 80d) Vida cnstiforme 81e) Vida segn el Espritu 82f) Vivir en misin 83

    C a p it u l o IV L a v id a c r i s t i a n a . L a v id a e n la I g le s ia 85I El cristiano en la Iglesia 87

    1 La Iglesia Misterio 88a) Su significado 88b) Implicaciones en la espiritualidad cristiana 90

    2 La Iglesia Comunin 92a) Su significado 92b) La comunin eclesial en sus distintas realiza

    ciones 94c) Implicaciones en la espiritualidad cristiana 99

    3 La Iglesia Misin 101a) Su significado 101b) Implicaciones en la espiritualidad cristiana 104

    II La mediacin de la Iglesia 1061 La Palabra de Dios en la Iglesia 109

    a) Importancia de la Palabra de Dios 109b) La Palabra de Dios en la vida espiritual 111

    2 Los sacramentos en la Iglesia 113a) El valor de los sacramentos 113b) Los sacramentos en la vida espiritual 115

    3 El servicio fraterno en la Iglesia 117

    C a p it u l o V L a c a r i d a d /a m o r e n la p e r s o n a c r i s t i a n a 1 1 9I La perfeccin de la persona y la caridad/amor 120

  • XII Indice general

    Pags

    1 El hecho de la candad en la antropologa cristiana 1202 La peculiaridad del planteamiento de la perfeccin

    por la candad/amor 123II Naturaleza de la caridad 125

    1 La candad en Dios 125a) El termino candad 125b) La candad en la Trinidad 126c) La caridad de la Trinidad o candad descen

    dente 1262 La candad en nosotros 127

    a) Permaneced en mi amor 128b) La relacin de la candad con la fe y con la es

    peranza 130c) El amor a Dios y el amor al hermano Su rela

    cin 134d) La estructura de la candad/amor 137

    III La afectividad en la caridad 1391 Descripcin de la afectividad 1402 La afectividad en la Escritura 141

    a) En el Antiguo Testamento 141b) En el Nuevo Testamento 143

    3 La afectividad en la histona del cnstianismo 1444 El porque de la vigencia de la afectividad hoy 146

    C a p it u l o VI La oracin cristiana 1491 Aproximacin al hecho de la oracin una situacin

    contradictoria 151a) Se acepta la oracin 151b) Se margina la oracin 152

    2 La oracin y la persona cristiana 155a) La oracin y la antropologa humana 156b) La oracin y la antropologa cristiana 157c) Consecuencias para la oracin cristiana 159

    3 La oracin desde sus definiciones 162a) Distintas definiciones de la oracin 162b) A modo de sntesis 166

    4 Formas de oracin 167a) La situacin del orante 167b) Los contenidos de la oracin 168c) Caminos de oracin 170

    5 Pedagoga de la oracin 171a) Presupuestos pedaggicos de la oracin 172b) Puntos a subrayar 174

    C a p it u l o VII Llamados a vivir la vida cristiana en plenitud 177I El planteamiento de la llamada a la plenitud de la vida

    cristiana Su jundamentacion 181

  • Indice general XIII

    Pags

    1 El crecimiento de la vida cristiana crecer en Cristo 181a) Vida cristiana y crecimiento 181b) Un crecimiento integral en Cristo 183c) La dimensin eclesial del crecimiento cristiano 184d) El Espritu y el crecimiento de la vida cristiana 185e) El crecimiento en la vocacin 186

    2 La llamada a la plenitud de la vida cristiana 189a) La llamada en el Vaticano II 189b) La llamada, 6de quien9 191

    II Posibles planteamientos del ideal cristiano 1921 Santidad 193

    a) Expresin bblica 193b) Distintas acepciones del termino santidad 193c) Cualidades que avalan la utilizacin del termi

    no santidad 1942 Perfeccin 194

    a) Base bblica 195b) Significado de perfeccin 195c) Cualidades que avalan el uso del termino per

    feccin 1963 Union con Dios 196

    a) La razn de su planteamiento 196b) Cualidades que avalan el uso de este termino 198

    4 El cumplimiento de la voluntad de Dios 198a) Significado de este planteamiento 198b) Cualidades que avalan su utilizacin 199

    5 La imitacin de Cristo El seguimiento 199a) Base escntunstica 199b) Significado de su planteamiento 200c) Cualidades que avalan la mitacion/segui-

    miento 2016 La vida en Cristo en plenitud 202

    III Condiciones para el planteamiento 2021 Puntos de apoyo 2022 Peligros a evitar 204

    C a p itu lo VIII El pecado y la vida espiritual 207I Dificultades para la aceptacin del pecado y para la

    vivencia del perdn hoy 2111 Una nueva sensibilidad 2112 Una nueva cultura y una nueva sociedad 2123 Sentido de Dios sentido de pecado 2144 ^Perdida del sentido del pecado > 2165 La dificultad de identificar el pecado en la persona

    concreta 2176 La dificultad ante la conversin 218

  • XIV Indice general

    Pags

    II La vida cristiana y el pecado 2191 Experiencia de Dios y sentido de pecado 2192 Cuando eramos pecadores (Rom 5,8), El nos amo

    el primero (1 Jn 4,19) La gratuidad la Graciaen la vida cristiana 221a) La gratuidad en Dios 222b) La vida cristiana desde la gratuidad 224

    3 La realidad del pecado en el cnstiano 228a) Soy pecador 228b) El cristiano y el pecado estructural o social 229c) A la vez justo y pecador 230d) El cristiano ante el pecado la divisin interior

    o concupiscencia 232III El pecado en el dinamismo espiritual 235

    1 La aceptacin del pecado y la superacin en la vidacristiana 236a) Presupuestos 236b) Relacin existente 236c) Motivacin o punto de origen 236

    2 La purificacin afectiva 237a) Razn de su planteamiento 237b) Formas de purificacin 238

    3 La compuncin 2394 La experiencia pascual es experiencia de perdn 240

    a) La conciencia de pecado en el encuentro con elSeor 241

    b) La conversin en el encuentro con el Seor 2415 Situaciones especiales de conciencia de pecado

    dentro de una vida de fe y de amor (El pecado y lavida mstica) 242a) El pecado y la contemplacin 242b) Situaciones peculiares de la vivencia de pe

    cado 2436 El sacramento de la Penitencia y el dinamismo espi

    ritual 244

    C a p it u l o IX El proceso de la vida cristiana 247I Descripcin del proceso 248

    1 La existencia de un proceso 2482 La experiencia del proceso en la historia de la espi

    ritualidad 2513 La insuficiencia de las formulaciones dadas al pro

    ceso 253II Elementos del proceso de la persona cristiana \ su inte

    gracin 254

  • Indice general XV

    Pags

    1 La identidad cristiana, la realizacin socio-histonca y el momento bio-psiquico de la persona Relacine integracin 254a) Llamada a la integracin 254b) La identidad cristiana en el proceso Su funcin

    integradora 255c) La realizacin socio-histonca en el proceso 257d) El momento bio-psiquico en el proceso del

    cristiano 2582 Superacin de los planteamientos parciales y anti

    nmicos de la vida espiritual 261a) Los planteamientos parciales y su porque 262b) Distintos planteamientos parciales de la vida

    espiritual y la necesidad de su integracin 2633 La integracin de la persona cristiana en unidad por

    la candad 265a) La aspiracin actual a la unidad de la persona 266b) Acercamiento al hecho de la unidad de la per

    sona 267c) La unidad de la persona por la candad 269

    4 La experiencia religiosa en el proceso 271a) Caractersticas del proceso y la experiencia re

    ligiosa 271b) El hecho de la expenencia religiosa y su culti

    vo 2735 Momentos fuertes del proceso cristiano 276

    a) El encuentro con el Padre por el Hijo en el Espritu 276

    b) La conversin como momento fuerte del proceso 277

    c) La ascesis como lucha en el proceso cristiano 278d) La experiencia mstica cristiana 279

    \> C a p it u l o X La tensin espiritual en la vida cristiana (la as-cesis y los medios) 281

    I La ascesis en la vida cristiana 2821 Significados de la ascesis 2822 La ascesis en la Sagrada Escritura 2843 La fundamentacion de la ascesis 286

    a) Un punto de partida comn 286b) La valoracin de la ascesis y la aceptacin de

    los objetivos 287c) La valoracin del mundo creado 288d) La fundamentacion antropolgica 290

    4 La presentacin actual de la ascesis 291a) La valoracin integral de la ascesis 291

  • XVI Indice general

    Pgs.

    b) Una ascesis siempre presente y siempre en revisin ................................................................... 292

    c) La ascesis sobre la persona............................... 293d) El mundo como lugar de la ascesis ................. 294e) La ascesis en la experiencia com unitaria 295f) La ascesis en la m is i n ..................................... 296g) La ascesis en el compromiso histrico............. 297h) La ascesis en el sufrimiento............................... 298

    II. Los medios en la vida espiritual..................................... 2991. Los distintos reparos al uso de los medios ............ 3002. El sentido de los medios en la vida espiritual 3023. La presentacin de los m edios................................. 303

    a) Presupuestos que deben tenerse en cuenta parala presentacin de los m edios........................... 303

    b) La metodologa en la configuracin de los medios ....................................................................... 305

  • P R E S E N T A C I O N

    Es muy comn iniciar el estudio de la Teologa espiritual con una mezcla de sentimientos encontrados: de esperanza ante una panorm ica novedosa y actual, y de tem or por las exigencias que pueda reportar; de em patia con la dimensin espiritual del hombre, y de reserva con la definicin de vida que pueda implicar; de sentirse a gusto porque el temario es fcil de entender y no entraa riesgos acadmicos, y de incomodidad porque el contenido en su profundidad personal tiene carcter de misterio que no se puede dominar.

    La Teologa espiritual siempre compromete, aunque se estudie buscando una capacitacin teolgica completa o por mera exigencia acadmica. No puede perm anecerse indiferente ante ella. En el proceso de su estudio se suceden unas fases dentro del propio momento personal, que muy bien pueden ser stas: el desmonte de prejuicios; la experiencia de una llamada; el planteam iento de una definicin de vida; el reajuste de criterios; y la m otivacin de una respuesta.

    Al paso de esta compleja situacin quieren salir estas pginas. Como la elaboracin del manual ha tenido presente en todo momento la realidad del alumno y del lector, en consecuencia, un espritu de acom paam iento se har cercano en cada uno de los puntos que estudiemos. El carcter de acom paam iento es inseparable de este manual de Teologa espiritual.

    Tenemos un punto de partida de gran importancia: la valoracin que actualmente existe de la espiritualidad. Estamos cada vez ms lejos de una valoracin que en nuestro contexto est inducida por imposiciones o comportam iento sociolgicos; la valoracin actual radica en la misma antropologa. Por esta razn, la necesidad de la espiritualidad est ms al descubierto y se presenta con ms exigencia cuanto ms contrario sea el ambiente que la rodea. La espiritualidad y la antropologa no van por separado, son una misma realidad.

    La conviccin del gran valor que es la espiritualidad para el hombre de hoy ha sido la motivacin ltima para llevar a cabo la elaboracin del manual. Desde este convencimiento nace la confianza en el gran servicio que supone la presentacin de la espiritualidad al hombre de hoy. Como consecuencia, la valoracin tanto de la espiritualidad como del servicio de su presentacin es el testigo que se va entregando, de captulo en captulo, a lo largo de todo el tratado.

    La presentacin nos pide, adems, que indiquemos el espritu o tono con el que abordamos cada uno de los temas. Nos resulta ya anacrnico endulzar y m aquillar los planteam ientos de espiritualidad

  • XVIII Presentacin

    pensando en la acogida y en la aceptacin, y de form a directa planteamos los temas que consideramos ms fundam entales de la vida cristiana. Nos mueve a ello una doble experiencia de hoy: que la demanda de espiritualidad ya existe, a la que no cabe una respuesta encubierta sino clara y directa; y que los planteam ientos ms radicales son los que encuentran mejor acogida, porque la ambigedad no motiva la respuesta en radicalidad y term ina cultivando la insatisfaccin.

    Esta experiencia pastoral de la necesidad de planteam ientos fundamentales y difanos, que conlleven una respuesta concreta de la vida cristiana, est tan presente en el manual que incide hasta en la misma m etodologa de un estilo conciso y directo.

    Slo desde estos presupuestos el espritu de acom paam iento, la valoracin de la espiritualidad y la necesidad de planteamientos fundamentales y directos se pueden obtener las claves para poder comprender todo el entramado del manual: los tem as que se seleccionan, la metodologa que se sigue, los aspectos que se acentan y el criterio con el que se trabaja.

  • B I B L I O G R A F I A

    I. DICCIONARIOS Y ENCICLOPEDIAS

    A Dictionary of Christian Spirituality (London 1983).Bibliographia internationahs spiritualitatis (Roma 1966ss).Diccionario de espiritualidad (Barcelona 1984).Dictionnaire de spiritualit asctique et mystique (Paris 1932ss). Dizionario degli Istituti di perfezione (Roma 1974ss).Dizionario di Spiritualit dei laici (Milano 1981).Nuevo Diccionario de Espiritualidad (Madrid 1983).Praktisches Lexikon der Spiritualitat (Freiburg 1988).World Spirituality. An Encyclopedic History of the Religious Quest (Lon

    don 1986).

    II. OBRAS GENERALES

    AA.VV., La mstica (Bologna 1991).AA.VV., Peccato e santit (Roma 1979).A rzu b ia ld e , S. G., Theologia spiritualis. El camino espiritual del segui

    miento a Jess (Madrid 1989).A um ann, J., Sommario di storia della spiritualit (Napoli 1986). B a lth a s a r , H. U. vo n , Ensayos teolgicos. 1 Verbum caro (Madrid 1964). El problema de Dios en el hombre actual (Madrid 1960).B ern a rd , Cu. A ., Teologa spirituale (M ilano 1989). Thologie affective (Paris 1984).B o u y er , L., Introduccin a la vida espiritual (B arcelona 1964).B o y e r , L .-L ec le r cq , J .-V and en broucke, F .-C o g n et, L., Histoire de la

    spiritualit chrtienne I-I1I (Paris 1960-1966).C a p d ev ila , V. M., Liberacin y divinizacin del hombre (Salamanca 1984). C a s a ld a lig a , P .-V ig il, J. M., Espiritualidad de la liberacin (Santander

    1992).D e G u ib ert, J., Theologia spiritualis asctica et mystica (Roma 1952). E spfja, J., La espiritualidad cristiana (Estella 1992).F ra n k l, V. E., Presencia ignorada de Dios. Psicoterapia y religin (Barce

    lona 1980).G a rc a , C., Corrientes nuevas de teologa espiritual (Madrid 1971). G a rr id o , J., Educacin y personalizacin (Madrid 1990). G a rr ig o u -L a g r a n g e , D., Las tres edades de la vida interior (Buenos Aires

    1944).G o ffi, T., La experiencia espiritual hoy (Salamanca 1987).

  • XX Bibliografa

    G o ffi, T -Second in , B , Problemas y perspectivas de espiritualidad (Salamanca 1987)

    G o n z le z A r in te r o , J La evolucin mstica (Madnd 1959) G o n z a le z -C a r v a ja l, L , Ideas y creencias del hombre actual (Santander

    1991)G o n z a lfz Faus, J I , Proyecto de hermano Vision creyente del hombre

    (Santander 1989)G o zze lin o , G , En la presencia de Dios Elementos de teologa de la vida

    espiritual (Madrid 1994)G u tirrez , G , Beber en su propio pozo (Salamanca 1984)Jan, N , Hacia una espiritualidad de la teologa de la liberacin (Santan

    der 1987)Jerem as, J , Abbay el mensaje central en el Nuevo Testamento (Salamanca

    1989)Jim fnfz D uque, B , Teologa de la mstica (Madrid 1963)Jim enfz D uque, B -S a la B a lu s t , L , Historia de la espiritualidad 1-IV

    (Barcelona 1969)L adaria , L F , Teologa del pecado original y de la gracia (Madrid 1993) L egido, M , Misericordia entraable Historia de la salvacin anunciada a

    los pobres (Salamanca 1987)M a rtin V e la s c o , J , El encuentro con Dios Una interpretacin persona

    lista de la religin (Madnd 1976) Introduccin a la Fenomenologa de la Religin (Madrid 1978) M a ta n ic , A , La spintualita come scienza Introduzione metodolgica alio

    studio della vita spirituale cristiana (Tormo 1990)M a tu r a , Th , El radicalismo exangehco (Madrid 1980)R aguin , Y M , Caminos de contemplacin (Madrid 1971) La source (Pars 1988)R ah ner, K , Escritos de Teologa I-Vil (Madrid 1961-1967)R o y o M arn , A , Teologa de la perfeccin cristiana (Madrid 1955) R ivera , J -Irabu ru , J M , Espiritualidad catlica (Madrid 1982)Ruiz de l a Pena, J L , El don de Dios Antropologa teolgica especial

    (Santander 1991)Ruiz S a lv a d o r , F , Caminos del Espritu Compendio de teologa espiri

    tual (Madrid 1974)Secondin , B -G o ffi, T (eds ), Corso di spintualita Esperienza sistemti

    ca proieziom (Brescia 1989)Spidlik , T , La spintuahta dell Oriente cristiano (Roma 1985)Subdracic, J , La nueva religiosidad Un desafio para los cristianos (Ma

    drid 1990)T a n q u erey , A , Compendio de Teologa asctica y mstica (Paris-Toumai-

    Roma 1930)Thils, G , Santidad cristiana (Salamanca 1960)T r u h la r , C V , Structura theologica vitae spiritualis (Roma 1958) V e r g o te , A , Psicologa religiosa (Madrid 1967)W eism ayer, J , Vida cristiana en plenitud (Madrid 1990)Zubiri, X , El hombre y Dios (Madrid 1984)

  • S I G L A S Y A B R E V I A T U R A S

    AAS Acta Apostolicae SedisAG C o n c V a t ic a n o II, Decr Ad gentesC San Juan de la Cruz, CnticoCC Santa Teresa de Jess, Cuentas de ConcienciaCCL Corpus Chnstianorum Senes Latina (Tumhout)CD C o n c V a t ic a n o II, Decr Christus DonunusCEE Conferencia Episcopal EspaolaCEI Conferencia Episcopal ItalianaCFC Conceptos fundamentales del cristianismo (Madrid 1993)CFP Conceptos fundamentales de pastoral (Madrid 1983)CFT Conceptos fundamentales de la teologa (Madrid 1966)CP Santa Teresa de Jess, Camino de PerfeccinDBS Dictionnaire de la Bible, Supplement (Pars 1928ss)DE Diccionario de Espiritualidad (Barcelona 1984)DIP Dizionano degli Istituti di Perfezione (Roma 1974ss)D S D e n z in g e r - S c h o n m e t z e r , Enchiridion symbolorum defim-

    tionum et declarationum de rebus jdei et morum (Barcelona 1967)

    DSp Dictionnaire de spiritualit ascetique et mystique (Pars1932ss)

    DTD Diccionario de Teologa dogmtica (Barcelona 1990)DTDC Diccionario teolgico El Dios cristiano (Salamanca 1992)DThC Dictionnaire de Theologie Catholique (Pars 1930ss)DTI Diccionario teolgico interdisciplinar (Salamanca 1982)DTVC Diccionario teolgico de la vida consagrada (Madrid 1992)DV C o n c V a t ic a n o II, Const dogm Dei VerbumF Santa Teresa de Jess, Libro de las FundacionesGE C o n c V a t ic a n o 11, Decl Gravissimum educatiomsGLNT Grande Lessico del Nuovo Testamento (Brescia 1965-

    1992)Gr Gregonanum (Roma)GS C o n c V a t ic a n o II, Const past Gaudium et spesGuL Geist und Leben (Wurzburg)IM C o n c V a t ic a n o II, Decr Inter mirificaL San Juan de la Cruz, Llama de amor vivaLG C o n c V a t ic a n o II, Const dogm Lumen gentiumM Santa Teresa de Jess, Libro de las MoradasMySal Mystenum Salutis Fundamentos de la dogmtica como his

    toria de la salvacin (Madrid 1969ss)N San Juan de la Cruz, Noche oscuraNAe C o n c V a t ic a n o II, Decl Nostra aetate

  • X X II Siglas y abreviaturas

    NDE Nuevo Diccionario de Espiritualidad (Madrid 1983).NDL Nuevo Diccionario de Liturgia (Madrid 1987).NDM Nuevo Diccionario de Mariologa (Madrid 1988).NDMC Nuevo Diccionario de Moral cristiana (Barcelona 1993).NDT Nuevo Diccionario de Teologa (Madrid 1982).NDTB Nuevo Diccionario de Teologa bblica (Madrid 1990).NDTM Nuevo Diccionario de Teologa moral (Madrid 1992).NRTh Nouvelle Revue Thologique (Louvain)OT C o n c . V a t ic a n o II, Decr. Optatam totius.PC C o n c . V a t ic a n o II, Decr. Perfectae caritatis.PDV Exhortacin ap. de Ju a n P a b l o II, Pastores dabo vobis.PG Patrologa Graeca (Paris).PL Patrologa Latina (Paris).PO C o n c . V a t ic a n o 11, Decr. Presbyterorum Ordinis.RAM Revue dasctique et de mystique (Paris).RevE Revista de Espiritualidad (Madrid).RThL Revue Thologique de Louvain.S San Juan de la Cruz, Subida del Monte Carmelo.SC C o n c . V a t ic a n o II, Const. Sacrosanctum Concilium.SCh Sources Chrtiennes (Paris).SM Sacramentum Mundi. Enciclopedia teolgica (Barcelona

    1972-1976).UR C o n c . V a t ic a n o II, Decr. Unitatis redintegratio.V Santa Teresa de Jess, Libro de la Vida.

  • CapItulo I

    IDENTIFICACION DE LA TEOLOGIA ESPIRITUAL

    BIBLIOGRAFIA

    AA.VV., De Theologia spirituali docenda, en Seminarium 26 (1974) 1-291; B e r n a r d , C h . A., Teologa spirituale (Milano 1989), 54-97; D u p u y , M .- S o l ig n a c , A., Spiritualit, en DSp XIV, 1142-1173; G a r c a , C ., Corrientes nuevas de teologa espiritual (Madrid 1971); Id ., Qu es la teologa espiritual? Intentos de nueva recalificacin, en Burgense 34/1 (1 9 9 3 ) 303-319; H u e r g a , A., El carcter cientfico de la teologa espiritual, en Teologa espiritual 36 (19 9 2 ) 41-63; M a t a n ic , A., La spiritualit come scienza. Introduzione metodolgica alio studio della vita spirituale cristiana (Torino 1990); M o io l i, G ., Teologa espiritual, en NDE, 1349- 1358; Q u e r a l t , A., La Espiritualidad como disciplina teolgica, en Gregorianum 60 (19 7 9 ) 321-375; R uiz S a l v a d o r , F., Temtica de la teologa espiritual, en Seminarium 26 (1974) 191-202.

    Intentamos en este prim er captulo situar el tratado de teologa espiritual dentro del cuadro actual de los estudios teolgicos, y teniendo muy presente que toda program acin acadm ica tiene como trasfondo unas necesidades concretas de formacin, que debe atender. A qu necesidades responde la teologa espiritual?

    Sabiendo, adems, que todo el desarrollo va a estar condicionado por los objetivos que se sealen, com enzam os presentando los objetivos que perseguimos desde el comienzo de este estudio.

    a) Garantizar el acercamiento del alumno o del lector a la espiritualidad. Puede parecer que el acercamiento a la espiritualidad debe darse por supuesto, como previo al estudio de la teologa espiritual; pero la realidad es otra: no siempre se encuentra entre los alumnos una actitud abierta a la espiritualidad. Como los reparos hacia ella no siempre desaparecen a lo largo de los estudios de la teologa, hay necesidad de un acercamiento sin prejuicios a la espiritualidad y a su cultivo. Actuamos desde la ctedra de teologa espiritual, pero sin perder de vista las experiencias del acompaamiento espiritual.

    b) Clarificar lo que es la espiritualidad. Todo acercamiento a la espiritualidad pide como prim er paso una clarificacin convincente. Si pretendemos un acercamiento con garanta debemos responder a las cuestiones que estn en el ambiente y que preocupan. Estos son los interrogantes ms habituales: Qu se entiende por espiritualidad? Puede hablarse hoy de espiritualidad? Hay cabida para la espiritualidad en nuestro mundo actual?

  • 4 C. I Identificacin de la Teologa espiritual

    c) Identificar la espiritualidad cristiana. No nos es suficiente abrim os a la espiritualidad en general; necesitamos dar el paso a la espiritualidad cristiana, que es un paso cualificado. La identidad de la espiritualidad cristiana tiene su especificidad. Como el cristianismo tiene su especificidad, tambin la tiene su espiritualidad.

    d) Situar la teologa espiritual. El tema es complejo. Cabra hablar de espiritualidad cristiana sin que por ello tuviera que dedicrsele un tratado propio. Nosotros hablamos de teologa espiritual como tratado, y con ello debemos responder a una serie de preguntas que se hacen: el porqu del nombre, su relacin con la teologa dogmtica y con la teologa moral, su naturaleza, su mtodo y sus fuentes. El tema, despus de aos de tanteos y de confrontaciones, est muy estudiado; ofreceremos una sntesis, la ms objetiva posible.

    La teologa espiritual, que cuenta con el desarrollo de sus contenidos doctrinales, no puede perder de vista su vertiente existencial. Ms que detenem os en las discusiones doctrinales, buscaremos su incidencia en la vida espiritual cristiana.

    1. LA TEOLOGIA ESPIRITUAL EN EL PLAN DE ESTUDIOS

    El plan de estudios de las facultades teolgicas y de los seminarios incluye la asignatura Teologa espiritual. Qu lectura hacemos de este hecho?

    La implantacin de la teologa espiritual como asignatura especial es reciente; no aparece en la enseanza teolgica hasta el siglo xx *. Su itinerario es breve:

    En el ao 1919 fue creada en la Pontificia Universidad Gregoriana de Roma una ctedra de Teologa asctica y m stica2. Al ao siguiente, la Sagrada Congregacin para los Seminarios y Universidades, en cartas dirigidas al episcopado italiano y alemn, puso de relieve la importancia del estudio de la teologa asctica y mstica para la formacin sacerdotal3.

    Las Ordinationes relativas a la constitucin apostlica Deus scientiarum Dominus de Po XI hablan de la Teologa Asctico- Mstica como complemento de la teologa moral, y ponen la teo-

    1 Cf H u e r g a , A., Teologa espiritual y teologa escolstica, en Revista espaola de Teologa 26 (1966) 11-15 A mediados del siglo XIX, algunos concilios provinciales, cuando tratan los estudios en el seminario, sealan la importancia que tiene la teologa mstica y asctica: D e G u ib f r t , J , Documenta ecclestastica christianaeper- fectioms studium spectantia (Roma 1931), n.553 y 554.

    2 Esta iniciativa fue alabada por Benedicto XV en carta dirigida a la Universidad Gregoriana Cf A AS 12(1920)29-31.

    1 Cf Enchiridion Clencorum Documenta Ecclesiae sacrorum alumms instituen- dis, n .l llO y 1135 (Roma 1938), 572 y 591

  • I La teologa espiritual en el plan de estudios 5

    logia asctica como disciplina auxiliar y la teologa mstica como disciplina especial 4.

    El decreto Optatam totius del Concilio Vaticano II no incluye a la teologa espiritual entre las disciplinas teolgicas, aunque lo tena previsto en los esquemas prelim inares. Sin embargo, el decreto pone de relieve la dimensin espiritual de toda la formacin sacerdotal y del estudio de la teo lo g a5. Pero s aparece la teologa espiritual como asignatura en la constitucin sobre la liturgia (SC 16).

    La Ratio fundamentalis institutionis sacerdotalis (6-1-1970) de la Sagrada Congregacin para la Educacin Catlica, que contiene las directrices concretas para la actualizacin del decreto Optatam totius, presenta en el curriculum de la formacin teolgica la theologia spiritualis como com plem entum de la teologa m o ra l6.

    El Documento de la Sagrada Congregacin para la Educacin Catlica La formacin teolgica de los candidatos al sacerdocio (22-11-1976) incluye la teologa espiritual entre las materias auxiliares y recom ienda con insistencia que todos los tratados teolgicos tengan en cuenta que la espiritualidad ha de ser como una dim ensin interna de la teologa 7.

    Las Normas de actuacin de la constitucin apostlica Sapientia christiana de Juan Pablo II (15-1V -1979) enumeran entre las disciplinas obligatorias en el primer ciclo de las Facultades teolgicas la theologia moralis et spiritualis 8.

    En Espaa contamos con el Plan de formacin de los Seminarios mayores, en cuyo Anexo dedicado al plan de estudios se incluye la teologa esp iritua l9.

    Tenemos, pues, la asignatura Teologa espiritual dentro del plan de estudios; pero cul ha sido la razn de su implantacin?, qu aceptacin tuvo?, cul es la razn de su mantenimiento actual?

    4 S a g r a d a C o n g r e g a c i n d e S e m in a r io s y U n iv e r s id a d e s , Ordinationes AAS 23 (1931)271 y 281.

    s C f OT 4 8 16, R a m b a l d i , G , Sollecitazioni del magistero per lo studio della teologa spirituale, en Seminarium 26 (1974) 19-40

    6 S a c r a C o n g r e g a t i o p r o I n s t i t u t i o n e C a t h o l i c a , Ratio Fundamentalis Institu- tioms Sacerdotalis 79 AAS 62 (1970) 371.

    7 S a g r a d a C o n g r e g a c i n p a r a l a E d u c a c i n C a t l i c a , La formacin teolgica de los candidatos al sacerdocio 114, en Ecclesia 36 (1976) 894.

    8 S a c r a C o n g r e g a t i o p r o I n s t i t u t i o n e C a t h o l i c a , Normas en orden a la recta aplicacin de la Sapientia Christiana 51 AAS 71(1979) 513

    C o n f e r e n c ia E p is c o p a l E s p a o l a , El plan de formacin de los Seminarios mayores La formacin para el ministerio presbiteral (Madrid 1986), 130.

  • 6 C 1 Identificacin de la Teologa espiritual

    a) Razn de su introduccin

    Si nos atenemos a los documentos en los que se recom ienda y se justifica su introduccin, salta a la vista que lo que se busca de la teologa espiritual es la com plem entariedad que puede ofrecer a la teologa y a la moral dentro del plan de estudios Benedicto XV, en la carta dirigida a la Universidad Gregoriana, dice

    D e hecho, sucede con frecuencia que, no existiendo una consi deracion de tal genero de estudios (m as arriba se refiere al estudio cientfico y practico de las principales cuestiones concernientes a la perfeccin cristiana) en los cursos ordinarios de teologa dogm tica y moral, el clero joven , m ientras se forma en vanadas disciplinas sagradas, perm anece ignorante de los verdaderos principios de la v ida espiritual, cuyo fino y sano discernim iento le es indispensable tanto para su propia perfeccin com o para el fruto del m inisterio sagrado a que D ios le llam o 10

    En esta poca, despus de la prim era guerra mundial, ha existido una mentalidad 11 reacia al divorcio entre teologa y espiritualidad, esa reaccin ha ido a mas La existencia de tal separacin era manifiesta la teologa se presentaba como el estudio critico de la fe y en su vertiente de dato objetivo, y en cambio la espiritualidad se diriga a la misma vida de fe 12 De igual manera se poda hablar de la separacin entre la moral y la espiritualidad mientras la moral se planteaba, y de forma casustica, el estudio de los m andamientos y de las virtudes en cuanto obligatorias, la espiritualidad trataba de los consejos, de la perfeccin cristiana, de todo lo que es de supererogacin 13

    La separacin era tan m anifiesta que se explica que se buscara la complementariedad, y se busco por medio de la teologa espiritual

    10 AAS 12 (1920) 29 3011 La individualizacin de esta mentalidad esta en relacin con el importante feno

    meno de vivacidad interior del mundo catlico de fines del siglo xix llamado movimiento carismatico que se caracteriza por un lado por la exigencia de retomar los fundamentos y los horizontes teolgicos de la vida interior y por otro por la atencin a la experiencia contemplativo mstica en la perfeccin cristiana Cf M o io l i G a c 1351

    12 Cf M o io i i G a c 1 3 5 0 V a n d e n b r o u c h e , F , Le divorce entre theologie et mystique ses origines, en NRTh 7 2 ( 1 9 5 0 ) 3 7 2 - 3 8 9

    n Cf G ar c a , C Corrientes nuevas de teologa espiritual 73 9 9

  • I La teologa espiritual en el plan de estudios 7

    b) Grado de aceptacin

    No basta con que se institucionalice la enseanza de un tratado, nos hemos de preguntar por su aceptacin Para valorarla nos fijamos en estos datos la proliferacin de tratados de espiritualidad la abundante bibliografa sobre el tema, y la aceptacin en el campo de la teologa

    Son muchos los profesores que en esta poca anterior e inmediatamente posterior al Vaticano II se han dedicado a la teologa asctica y mstica, y han publicado sus tratados 14 Sin intentar presentarlos a todos, sealamos los que consideram os mas significativos, teniendo especialmente presentes los de lengua castellana

    T a n q u e r e y , A , Precis de Theologie Ascetique et Mystique (Pans-Roma 1923) Trad cast Compendio de Teologa Asctica y Mstica (Paris- Toumai-Roma 1930)

    Z im m e r m a n n , O , Lehrbuch der Aszetik (Freiburg 1929) Trad cast Teologa asctica (Buenos Aires 1952)

    H e e r in c k s , J , Introductio in theologiam spiritualem asceticam et mysticam (Tormo-Roma 1931)

    D e Je s s S a c r a m e n t a d o , C r is o g o n o , Compendio de asctica y mstica (Avila 1933)

    S t o l z , A , Theologie der Mystik (Regensburg 1936) Trad cast Teologa de la mstica (Madrid 1952)

    D e G u ib e r t , J , Theologia spiritualis asctica et mystica (Roma 1937) H e r t l in g , L , Theologia asctica (Roma 1939)G a r r ig o u -L a g r a n g e , R , Les trois ages de la vie interieure (Pars 1938-

    39) Trad cast Las tres edades de la vida interior (Buenos Aires 1944) S c h r u v e r s , J , Principios de vida espiritual (Madnd 1947)N a v a l , F , Curso de teologa asctica y mstica (Madrid 1955)R o y o M a r n , A , Teologa de la perfeccin cristiana (Madrid 1955) G a b r ie l f d i S a n t a M a r a M a d d a l e n a , Teologa della mstica en

    AA VV , Problemi e orientamenti di Teologa Dommatica (Milano 1957)

    T h il s , G , Saintete chretienne Precis de theologie ascetique (Tielt 1958) Trad cast, Santidad cristiana (Salamanca 1960)

    T r u h l a r , C V , Structura theologica vitae spiritualis (Roma 1958) G o n z l e z A r in t f r o , J , La evolucin mstica (Madrid 1959)M a r t n e z B e l ir a c h , J , Lecciones esquemticas de espiritualidad (Santan

    der 1960)B o u y e r , L , Introduction a la vie spirituelle Precis de theologie ascetique

    et mystique (Toumai 1960) Trad cast Introduccin a la vida espiritual (Barcelona 1964)

    14 Cf G a r c a , C , o c Para conocer la bibliografa general de la espiritualidad hasta el ao 1974 es importante el articulo de S im e o n e P , Per lo studio della teologa spirituale en Seminarium 26 (1974) 271 -291

  • 8 C 1 Identificacin de la Teologa espiritual

    J im n e z D u q u e , B , Teologa de la mstica (Madrid 1963)D a g n in o , A , Teologa de la vida espiritual (Florida, Buenos Aires 1964). Ju a n e s , B , Espiritualidad cristiana hoy (Santander 1967)J u b e r ia s , F , La divinizacin del hombre (Madnd 1972)Ruiz S a l v a d o r , F , Caminos del Espritu Compendio de Teologa espiri

    tual (Madrid 1974)

    En esta m ism a poca aparecen por primera vez vanas publicaciones importantes dedicadas a la temtica de la espiritualidad.

    1) D ic c io n a r io s :

    Documenta ecclesiastica christianae perfectioms studium spectantia (Roma 1931), Dictionnaire de spiritualit ascetique et mystique (Pars 1932ss), Bibliographie thronologique de la htterature de spiritualit et de ses sources (1501-1610) (Pars 1952), Dictionnaire des mystiques et des crivains spintuels (Pars 1968), Encyclopedie des mystiques (Pars 1972), Lessico di spirituahta (Brescia 1973), Dizionario degh stituti di perfezione (Roma 1974ss), Dizionario enciclopdico di spiritualit (Roma 1975) Trad cast Diccionario de Espiritualidad (Barcelona 1984)

    2 ) R e v is t a s

    Etudes Carmelitaines (191 lss), La Vie Spirituelle (1919ss), Revue d ascetique et de mystique (1920-1971), Revue d'histoire de la Spiritualit (1972-1977), La vida sobrenatural (192lss), Zeitschrift fur Aszese und Mystik (1925-1947), Manresa (1925ss), Chnstus (Mxico) (1935ss), Revista de espiritualidad (1942ss), Chnstus (Pars 1954ss), Teologa espiritual (1957ss), Revista agustimana de espiritualidad (1960ss), Bibhographia in- ternationahs spirituahtatis (Roma 1966ss)

    La razn de complem entariedad que se aduce en los documentos para introducir la teologa espiritual es una provocacin a la teologa dogmtica y a la teologa moral. La teologa espiritual llega para cubrir campos que no son atendidos desde la dogm tica y desde la moral Se dejaba entrever la acusacin de una teologa objetivista y fra, y de una moral casustica y minim alista Cul ha sido la reaccin de los telogos9

    Sin duda la estima de la asignatura Teologa espiritual en cada Facultad de Teologa y en cada Centro de Estudios Teolgicos habr sido muy diversa En muchas ocasiones la ctedra de espiritualidad ha pasado bastante inadvertida y al telogo dedicado a la espiritualidad se le ha considerado menos telogo o telogo de segundo rango 15, con honrosas excepciones

    15 C f B l a z q u e z , R , La relacin del Presbtero con la comunidad, en C o m is i n E p is c o p a l d e l C l e r o , Espiritualidad del presbtero diocesano secular Simposio (Madrid 1987), 286 287

  • I La teologa espiritual en el plan de estudios 9

    Pero hay otro dato importante que debe ser subrayado la teologa dogm tica y la teologa moral no tienen en el m omento actual los fallos de los que se les acusaba y en los que se basaba la justificacin de una teologa espiritual

    Los mismos telogos han jugado un papel decisivo en la incorporacin de la espiritualidad en la teologa Entre los autores que han tenido una aportacin ms incisiva, sealamos a H U. von Baltha- sar, que, adems de m arcar un camino el ao 1948 con su trabajo Teologa y Santidad 16, ha mantenido tan estrecha la relacin entre Teologa y Espiritualidad que ve en la espiritualidad el rostro subjetivo de la dogmtica 17 Ha sido muy valiosa la aportacin de K Rahner, por todos reconocida 18 Citamos a W Kasper, quien llega a afirmar No hay teologa sin apropiacin personal de la fe, lo cual quiere decir que no hay teologa sin espiritualidad 19 Y recordamos a Ch Duquoc en su artculo Teologa y E spiritualidad20 Y no puede olvidarse la aportacin de los telogos de la liberacin, que en sus planteam ientos teolgicos incluyen a la espiritualidad, como veremos mas adelante Todos los autores ms significativos de la teologa de la liberacin tienen su libro o artculo sobre la espiritualidad, citamos por ahora a G. Gutirrez, en su libro Beber en su p top io pozo 21

    No hay, pues, ningn enfrentamiento entre teologa y espiritualidad, sino que son los mismos telogos quienes no entienden su reflexin teolgica sin la vertiente espiritual.

    c) Razn de su m antenimiento

    Hemos visto las razones con las que se justific la implantacin de la teologa asctica y mstica o espiritual en el plan de estudios, hemos sido tambin testigos de una renovacin de la teologa dogmtica y moral; ahora surge la pregunta La razn para mantener hoy la teologa espiritual es la misma que la que sirvi para introducirla? Las razones de la com plem entariedad concreta que se adujeron, sirven hoy para mantenerla?

    16 B a l t h a s a r , H U v o n , Skizzen zur Theologie, en Wort und Wahrheit 3 (1948) 881-897 (Teologa y santidad, en Ensayos teolgicos I [Madrid 1964], 235-268)

    17 B a l t h a s a r , H U v o n , Espiritualidad, en Ensayos teolgicos I (Madnd 1964), 270, c f I d , Theologie und Spintualitat, en Gr 50 (1969), 571-587

    18 Cf R a h n e r , K , Espiritualidad antigua y actual, en Escritos de teologa VII (Madrid 1969), 13-35

    19 Tomado de W e is m a y e r , J , Vida cristiana en plenitud (Madnd 1990), 1620 D u q u o c , Ch , Teologa y espiritualidad, en Concihum 19 (1966) 269 28021 Cf G u t i r r e z , G , Beber en su propio pozo (Salamanca 1984)

  • 10 C 1 Identificacin de la Teologa espiritual

    Est claro que la teologa espiritual ante una teologa renovada no puede justificarse por la m era prestacin de los servicios que anteriormente ofreca, su situacin ha cambiado, y si se define como ciencia teolgica, debe precisar su naturaleza y su mtodo, superando toda ambigedad en su relacin con la teologa dogm tica y con la teologa m o ra l22 En qu mom ento se encuentra actualmente la teologa espiritual?

    II SITUACION ACTUAL

    1. Panormica general

    Es larga la andadura que la teologa espiritual ha vivido dentro del plan de estudios desde la encclica Deus scientiarum Dominus (1931) En los primeros aos tuvo que abrirse camino y ganarse un reconocimiento, como hemos visto mas arriba Ahora se observa un cambio la espiritualidad goza actualmente de consideracin y la teologa espiritual puede en estos momentos consolidar su identidad 23 Basta ver las publicaciones que estn continuam ente apareciendo, y no tanto su nmero cuanto sus caractersticas 24

    a ) T r a t a d o s g e n e r a l e s :

    R iv e r a , J - I r a b u r u , J M , Espiritualidad catlica (Madrid 1982)A A VV , Vita cristiana ed esperienza mstica (Roma 1982)W e is m a y e r , J , Leben in Fulle (Innsbruck 1983) Trad cast Vida cristiana

    en plenitud (Madrid 1990)B e r n a r d , C h A , Teologa spirituale (Roma 1983)G o f f i, T - S e c o n d in , B , Problemi e prospettive di spirituahta (Brescia

    1983) Trad cast Problemas y perspectivas de espiritualidad (Salamanca 1986)

    G o f f i, T , L 'espenenza spirituale oggi (Brescia 1984) Trad cast La experiencia espiritual hoy (Salamanca 1987)

    Ja n , J , Hacia una espiritualidad de la teologa de la liberacin (Santander 1987)

    AA VV , The Study oj Spirituahty (London 1986)

    22 Cf Q u e r a l t , A , La Espiritualidad como disciplina teolgica, en Gr 60 (1979) 321-375 Es un buen trabajo sobre el tema

    23 Cf G a r c a , C , ^Que es la teologa espiritual7 Intentos de una recalifica cion, 303 319, H u e r c a , A , El carcter cientfico de la Teologa espiritual, 41-63, Q u e r a l t , A , a c

    24 Para conocer la bibliografa sobre la espiritualidad hasta el ao 1990 es impor tante el libro de M a t a n i c , A , o c

  • II Situacin actual 11

    F e r l a y , Ph , Abrege de la vie spirituelle (Pars 1988) Trad cast Compendio de la vida espiritual (Valencia 1990)

    A r z u b ia l d e , S G , Theologia spirituahs El camino espiritual del seguimiento a Jess (Madrid 1989)

    G o z z f l in o , G , Al cospetto di Dio Elementi di teologa della vita spirituale (Tormo 1989) Trad cast En la presencia de Dios Elementos de teolo gia de la vida espiritual (Madrid 1994)

    S e c o n d in , B -G o f f i, T , Corso di spirituahta Esperienza-sistematica proieziom (Brescia 1989)

    M a t a n ic , A G , La spirituahta come scienza Introduzione metodolgica alio studio della vita spirituale cristiana (Tormo 1990)

    C a s a l d a l ig a , P - V ig il , J M , Espiritualidad de la liberacin (Santander1992)

    E s p f j a , J , La espiritualidad cristiana (Estella 1992)

    b) D ic c io n a r io s , C o l e c c io n e s d e H isto r ia

    No aducimos las revistas, diccionarios y colecciones anteriores al ao 1976, y todava en curso de publicacin Nos referimos a las publicaciones nuevas

    Nuovo Dizionario di Spirituahta (Roma 1979) Trad cast Nuevo Diccionario de Espiritualidad (Madrid 1983), Dizionario di Spirituahta dei laici (Milano 1981), A Dictionary of Christian Spirituality (London 1983), Praktisches Lexikon der Spiritualitat (Freiburg 1988), AA VV , La spiri- tuahta cristiana Storia e testi (Roma 1981), A u m a n n , J , Sommario di sto- ria della spirituahta (Napoli 1986), AA VV , World Spintuahty An Ency- clopedic History of the Rehgious Quest (London 1986)

    Se observa que el inters por la teologa espiritual, en lugar de haberse estabilizado m anteniendo las muchas publicaciones iniciadas en la poca anterior, ha ido a mas su presencia se ha extendido a otras zonas geogrficas 25 y las obras en colaboracin mterdiscipli- nar son ms numerosas

    A esta literatura especializada se suma la publicacin de muchos libros de temas espirituales

    2 Teologa espiritual y teologa dogm tica

    Nos preguntamos por la relacin entre la teologa espiritual y la teologa dogmtica, sabiendo que en este punto est en juego el ca-

    s La lengua alemana, que siempre ha preferido el termino (Fiommigkeit) piedad, ha aceptado recientemente u^ar Spirituahtat y con xito en el lxico ya indicado Cf W e is m a y l r , J o c 16

  • 12 C I Identificacin de la Teologa espiritual

    rcter propio de la teologa espiritual. Intentaremos presentar en sntesis la lnea que la reflexin teolgica ha seguido en este punto.

    a) La relacin no se reduce a la valoracinque la teologa puede tener de la espiritualidad

    Es un paso importante que la teologa llegue a valorar a la espiritualidad; pero la mera valoracin de la espiritualidad no basta para el reconocimiento de la identidad de la teologa espiritual. Caben varios tipos de valoracin, que juzgam os insuficientes:

    Una forma de valorar a la espiritualidad es considerarla como un dato cualificado, importante, que la teologa debe tener en cuenta. La espiritualidad se convierte en objeto de estudio necesario para la teologa, del que no puede prescindir.

    Esta valoracin es insuficiente, porque de lo que se trata no es tanto de valorar la espiritualidad como objeto de estudio cuanto de reconocer la teologa espiritual en su identidad.

    Otra forma de valorar la espiritualidad consistira en que la teologa reconociera su dimensin espiritual superando la distancia que la mantiene lejos de la vivencia cristiana, de la que tantas veces se la ha acusado. La valoracin consistira no slo en aceptar la yuxtaposicin teologa y espiritualidad, sino en reconocer que no hay teologa sin espiritualidad.

    Esta valoracin de la espiritualidad como dimensin necesaria de la teologa, aun siendo importante, resulta tambin insuficiente. Porque la pregunta no va dirigida a la espiritualidad en la teologa sino al reconocim iento de la teologa espiritual dentro de una teologa rectamente entendida; la cuestin central est en si la teologa espiritual tiene sentido precisamente dentro de una teologa que ya es ella misma esp iritua l26.

    b) La relacin no es de dependencia total o de plena subordinacin

    Es cada vez ms comn la postura de rechazar la relacin de dependencia total o de subordinacin plena de la teologa espiritual a la teologa dogmtica. Pero no resulta fcil encontrar el punto exacto de la relacin entre ambas dentro de la teologa que es una. Comencemos por denunciar las posiciones deficientes por extremas.

    26 Cf N i c o i a s , H., Que faut-il entendre par spiritualit?, en Vie Spirituelle 65 (1985)526-536

  • Una posicin extrem a es la de una teologa espiritual que se dedica a llenar con consideraciones edificantes y con recetarios espirituales el lugar que la teologa dogm tica le deja. Los planteam ientos de espiritualidad correran paralelos con los de la reflexin teolgica del momento, sin contar con ellos.

    Por el extremo contrario, ha sido frecuente considerar a la teologa espiritual tributaria del dogma. A ste le correspondera presentar el m isterio de salvacin, y a la teologa espiritual solamente acogerlo y plantear su integracin en la persona cristiana.

    Pero la praxis se ha resistido a repartos tan fijos y tan predeterminados. En alguna ocasin la espiritualidad se ha presentado como contestacin a la teologa dominante, como ocurri con la Devotio moderna en relacin con la teologa nominalista. Hoy se dan casos en los que el dogma se hace tributario de la teologa espiritual, alimentndose de los planteamientos que se hacen desde la espiritualidad, como ha sucedido con la teologa del Espritu Santo, deudora en parte del movimiento carismtico.

    No se puede negar la dependencia de la teologa espiritual de la teologa dogmtica; pero hay que rechazar la dependencia total o la absoluta subordinacin como algo propio de la teologa espiritual. Dentro de la teologa, que es una, debe funcionar una dependencia interdisciplinar, pero en todas las direcciones 27.

    c) Una relacin propia. Diferenciacin

    Hay algo que es comn en los tratados actuales de espiritualidad. Cuando plantean la identidad de la teologa espiritual quieren subrayar la unidad de la Teologa 28; y lo hacen desde una doble perspectiva: a) en razn de la misma reflexin teolgica porque no se concibe la teologa espiritual sin la estrecha relacin con la Escritura y con todo el dogma y sin tener a la Iglesia como el sujeto de la espiritualidad 29 ; b) por una motivacin pastoral: la de favorecer la unidad de la teologa, que puede dar la impresin de estar muy dispersa 30.

    27 Cf. B e r n a r d , Ch A , o c , 5928 Es una idea muy repetida entre los autores, y lo estudia directamente M o r e t t i ,

    R., Lunit della conosccnza teolgica e il compito della teologa spirituale, en Seminarium 26 (1974) 41-58

    29 Cf. A r z u b ia l d e , S G , Theologia spirituahs El camino espiritual del seguimiento a Jess (Madrid 1989), 19

    30 Cf. Rui7 S a l v a d o r , F., Caminos del Espritu Compendio de Teologa espiritual (Madrid 1991), 29-31.

  • 14 C 1 Identificacin de la Teologa espiritual

    Son varios los puntos que deben tenerse en cuenta en el m om ento de estudiar la diferenciacin de toda ciencia, y en nuestro caso de la teologa espiritual* objeto, mtodo y fuentes.

    Objeto de la teologa espiritual Hay una gran coincidencia entre los autores en hacer resaltar que el objeto material es el comn a toda teologa la existencia cristiana.

    Pero el mismo objeto material puede verse desde distintas perspectivas, es decir, tiene diversas razones formales

    Existe tambin una convergencia en sealar el objeto formal de la teologa espiritual o la perspectiva desde la que aborda la existencia cristiana, aunque las formulaciones de los autores sean distintas con acentos peculiares. El objeto de la teologa espiritual es la vida cristiana no tanto en lo que ella es en s, sino en cuanto que es asumida, apropiada y vivida por cada uno. Citamos algunas afirmaciones:

    La originalidad consiste precisamente en ser la teologa de la apropiacin personal del dato cristiano universal, o, si se quiere, la teologa de la fe en el sujeto 11

    Lo propio de la Theologia Spiritualis no es otra cosa que la dimensin de misterio de la Dogmtica eclesial-objetiva, en cuanto tal, asimilada y vivida por el creyente, es decir, el contenido de la revelacin que entra y penetra en la subjetividad emparentndola con ella, y la manera humano-subjetiva de comportarse frente a la verdad cristiana o de experimentar el misterio 12

    En resumen el fundamento ontologico nico de la vida cristiana, que es el objeto especifico de la teologa dogmtica, es distinto de la conciencia que el sujeto toma de l a travs de la experiencia, que constituye la materia de estudio de la teologa espiritual 33

    Theologia spiritualis es la doctrina eclesial-objetiva acerca de la apropiacin de la palabra de revelacin en la vida de fe, candad y esperanza 34

    Se ve que el centro del objetivo de la teologa espiritual esta en la experiencia cristiana, que es concebida como un particular expe- nencial religioso que tiene una propia tipologa 35 El hecho es tan claro que se afirma que la teologa espiritual no es otra cosa que una teologa de la experiencia cristiana, y se cita a H U von Balthasar,

    31 G o z z e l in o , G , En la presencia de Dios Elementos de teologa de la vida espiritual (Madrid 1994), 21 Preferimos mantener la expresin original appropna- zione a la utilizada conquista por la traduccin

    32 A r z u b ia l d e , S G , o c , 2133 B f r n a r d , Ch A , o c , 6334 H a n s U r s v o n B a l t h a s a r , Espiritualidad, en o c , 27135 Cf M o o l i, G , a c , 1354, M o u r o u x , J , L experience chretienne (Pars 1952)

  • U Situacin actual 15

    que ve en la teologa espiritual, adems del rostro subjetivo de la dogmtica, una especie de hagiografa teolgica 36.

    Este planteam iento tiene ya una consecuencia la experiencia espiritual entra de lleno en la teologa espiritual, adquiere una categora teolgica. F Ruiz Salvador, adems de ofrecem os una descripcin de la experiencia espiritual como la participacin total y consciente de la persona, conocim iento-afecto-accin, en esa comunin de vida en que Dios se da como inmanente y trascendente, advierte que este hecho debe ser muy atendido por la teologa esp iritua l37 Actualm ente ste es el tema que est polarizando ms la atencin

    Mtodo de la teologa espiritual Despus de largas discusiones se ha llegado a aceptar para la teologa espiritual el mtodo integral 38. Se comprende fcilmente que el mtodo de la teologa espiritual sea inductivo y deductivo. Es inductivo porque se mueve en el plano de la experiencia espiritual, a la que debe prestar una singular atencin La realidad de fe que vive el sujeto es el material base para la reflexin posterior.

    Pero es tambin deductivo porque la experiencia espiritual se registra como cristiana, es decir fundam entada en la objetividad de la obra de Cristo, y debe verse como antropologa teolgica

    Fuentes de la teologa espiritual Las fuentes de la teologa espiritual son principalmente las siguientes: la Palabra de Dios, la Iglesia como mediacin y como comunin de vida, la liturgia, los sacramentos, la historia vivida por el pueblo cristiano, los documentos eclesisticos, la historia de salvacin del cristiano, la experiencia personal, las experiencias interiores extraordinarias, las formas del compromiso cristiano, la realidad del que sufre y del pobre. Estas fuentes, que le son comunes a la teologa espiritual con otros tratados teolgicos, estn contem pladas y estudiadas por la teologa espiritual desde su objetivo propio

    3. Teologa espiritual y teologa moral

    Puede parecer que, despus del estudio hecho, est de ms seguir buscando la identidad de la teologa espiritual Pero, aunque es ver-

    16 Cf G o z z e l in o , G , o c , 22 No esta de mas que se subraye el decisivo influjo que von Balthasar ha tenido en la nueva concepcin de la teologa espiritual al entender la santidad como teologa vivida y ver a la misma teologa espiritual como una feno menologia teolgica

    17 Cf Ruiz S a l v a d o r , F , o c , 37, Ai v a r e z , T , Experiencia cristiana y Teologa Espiritual, en Seminanum 26 (1974) 94-109

    18 Cf H u f r g a , A , El mtodo de la teologa espiritual, en Seminai nim 26 (1974) 231-249, J im n e z D u q u e , B , Teologa de la Mstica (Madrid 1963), 21-22

  • 16 C i identificacin de la Teologa espiritual

    dad que el camino est ya ms despejado, es necesario recorrerlo por doble motivo.

    Primero, porque hay autores que plantean la relacin de la teologa espiritual con la teologa partiendo de la teologa moral sin plantear su relacin directa con la teologa dogm tica39 La relacin con la teologa moral existe y es afum ada en los mismos documentos del M agisterio que hablan de la teologa espiritual en el plan de estudios, como ya vimos Pero no se puede reducir la relacin entre la teologa espiritual y la dogm tica a la que le puede llegar a travs de la teologa moral

    Segundo, porque existe una dificultad para establecer la diferencia entre la teologa espiritual y la teologa moral: las dos se refieren a la vida concreta y al lado prctico de la existencia cristiana La dificultad aum enta desde el momento en que los moralistas han insistido en que la teologa moral debe estudiar el ideal de la vida cristiana en su totalidad y en conformidad con el ideal evanglico Cul es, pues, la identidad de la teologa espiritual?

    La diferenciacin entre teologa espiritual y teologa moral

    Al igual que hacamos en el apartado anterior, tambin deberemos tener en cuenta el objeto y el mtodo

    La diferenciacin por el objeto 40 La teologa espiritual y la teologa moral no se diferencian en el objeto material Las dos tienen como objeto la antropologa sobrenatural que considera al hombre en su m ovimiento hacia la plenitud de la vida divina La diferencia est en el objeto formal o aspecto desde el que se contem pla el objeto.

    La teologa moral tiene como propio tanto la estructura de la accin como las leyes que la regulan, su objeto es la relacin correcta con Dios (ordo caritatis). Es verdad que ante las acciones sopesa todas las circunstancias, pero siempre lo hace bajo un aspecto universal

    La teologa espiritual, en cambio, tiene ms bven en cuenta la evolucin existencial de la vida cristiana, estudia la resonancia que la relacin con Dios tiene en la conciencia y su desarrollo (commei- cium caritatis), y debe m antenerse atenta a la repercusin psicolgi-

    Cf M a t a n k , A , o c , 36, D e l l a T r i n i t a , B , Teologa espiritual en DE 467-471

    40 Seguimos en este punto a B e r n a r d , C h A , o c , 64-66

  • II Situacin actual 17

    ca que produce en el sujeto la evolucin progresiva de su vida espiritual

    Estos aspectos, presentados de forma tan diferenciada, responden a la realidad y deben tenerse en cuenta, pero no debe forzarse su separacin. La teologa espiritual y la teologa moral no pueden funcionar por separado, se necesitan mutuamente

    La diferenciacin poi el mtodo El mtodo de la teologa espiritual no puede prescindir de la experiencia ni la de los que llegaron a la plenitud, ni de la historia concreta de quienes tienden a la perfeccin, ni de la experiencia general desde la que se puedan sacar ciertas reglas de la actuacin de Dios en las personas, tampoco puede prescindir de la situacin interior de la persona en su proceso de vida cristiana

    El mtodo de la teologa moral, en cambio, es ms racional, parte ms de los principios, y sus leyes son universales La experiencia en teologa moral recibe otra consideracin, aunque sirva para valorar las circunstancias concretas.

    4 La com plem entariedad entre la teologa espiritual, la teologa dogm tica y la teologa moral

    Aunque haya sido necesario para especificar a la teologa espiritual marcar bien sus diferencias con la teologa dogmtica y la teologa moral, no pueden olvidarse sus relaciones de complementarie- dad

    a) Es impoitante la aportacin de la teologa espiritual la teologa espiritual ofrece a la teologa en general algo ms que meras intuiciones o sugerencias piadosas, le ofrece campos sobre los que debe reflexionar

    Le ofrece tambin nuevas sensibilidades de receptividad y de acogida, sin las cuales la teologa se vera fcilmente bloqueada La teologa espiritual facilita la comprensin de los planteamientos de la teologa dogmtica La vivencia del misterio cristiano dispone al sujeto para la profundizacin de la teologa

    Pero la teologa espiritual, al mismo tiempo que facilita a la teologa su quehacer, se convierte para sta en una referencia obligada. Como la teologa tiene incidencia en la misma vida cristiana, no puede estar ajena a lo que la teologa espiritual trata y plantea. La teologa espiritual termina siendo para la teologa un test de confrontacin y de evaluacin

    En relacin con las disciplinas teolgicas la teologa espiritual tiene una funcin integradora La garanta de la integracin de las distintas aportaciones de la teologa est en la aceptacin y vivencia

  • 18 C 1 Identificacin de la Teologa espiritual

    del m isterio de Cristo. No es extrao que haya autores que vean la teologa espiritual como el lugar de encuentro entre praxis y teora, entre lo que se vive y su racionalizacin J. Sudbrack la presenta como una ciencia panormica: La teologa espiritual tiene la tarea de sintetizar todo lo que las otras ciencias proponen como en una lente focal y recogerlo en funcin del punto focal del encuentro del hombre con Dios 41.

    Sealamos como ltimo punto que la teologa espiritual aporta tambin al mismo teologo actitudes nuevas para llevar a cabo la reflexin teolgica La vivencia espiritual es una base irrenunciable para el quehacer del telogo: Si eres telogo, orars; y, si oras, sers telogo de verdad 42

    b) A su vez, la teologa tanto dogmtica como moral le ofrecen a la teologa espiritual una rica com plementanedad

    De ellas recibe el apoyo de la objetivacin, tan propia de la dogmtica y de la moral, y tan importante para la teologa espiritual

    Ellas le ofrecen la garanta de una profundizacin especializada, la aportacin de la Iglesia sobre los distintos temas desde la larga historia de su vida y las directrices del magisterio As se evita el peligro siempre presente de una interpretacin demasiado subjetiva del Misterio

    5 Definicin de la teologa espiritual

    Puede ofrecerse como dato previo la serie de nombres con los que se ha presentado de hecho esta ciencia teolgica 43 Recordemos el abanico de nombres o de ttulos que encabezan los tratados de teologa espiritual Introduccin a la vida interior, Introduccin a la vida espiritual, Asctica y mstica 44, M stica, Asctica, Teologa asctica y mstica, Teologa espiritual asctica y mstica, Teologa de la perfeccin cristiana, Espiritualidad, Espiri

    41 S u d b r a c k , J , Kann man Spiriiuahtat lehren Eme theologische Reflexin en GuL 5 3 ( 1 9 8 0 ) 4 4 6

    42 E vagrio Pon i ico, Tractatus de oratione 7 0 (PG 7 9 , 1 1 7 9 )43 Cf G arc i a , C , Comentes nuevas de teologa espiritual 5 9 -7 144 Conviene recordar que las expresiones Teologa asctica y teologa mstica

    tienen mucha solera cristiana La expresin Mystica Theologia se hizo usual en latn en las numerosas traducciones de las obras del Pseudo Dionisio Areopagita (s v ), quien utilizo mucho dicha expresin para indicar el conocimiento mas intimo de Dios, superior al conocimiento del mero raciocinio

    La expresin Asctica Theologia se encuentia por primera vez en la obra de D obro sibLSKi, C , Summarium asceticae et mysticae theologiae ad mentem D Bonaventurae (Krakau 1 6 5 5 ) (cf D e G uibe rt , J , La plus ancienne Theologie ascetique, en RAM 1 8 ( 1 9 3 7 ) 4 0 4 - 4 0 8 )

  • II Situacin actual 19

    tualidad catlica, Vida cristiana en plenitud, La espiritualidad cristiana, Teologa espiritual. Cada uno de los nombres anuncia los contenidos del correspondiente tratado y las orientaciones que van a dirigir las reflexiones del autor

    Entre todos los nombres que se han utilizado, el que parece que ms se usa actualmente es el de Teologa espiritual, y es el que adoptamos. Adems de ser la denominacin ms comn y parecer apropiada, deja ver dos aspectos que querem os que consten expresamente que se trata de una disciplina definidam ente teolgica, y que el objeto directo de ella es la espiritualidad cristiana.

    C ada autor presenta su definicin de la teologa espiritual. Espigamos las que consideramos ms significativas:

    J. de Guibert.

    $ Puede definirse la Teologa espiritual como la ciencia que deduce de los principios revelados en qu consiste la perfeccin de la vida espiritual y de qu manera el hombre viador puede tender a ella y conseguirla 45

    A. Royo M arn'

    Es aquella parte de la Sagrada Teologa que, fundndose en los principios de la divina revelacin y en las experiencias de los santos, estudia el organismo de la vida sobrenatural, explica las leyes de su progreso y desarrollo y describe el proceso que siguen las almas desde los comienzos de la vida cristiana hasta la cumbre de la perfeccin 46

    F Ruiz Salvador:

    * Teologa espiritual es la parte de la teologa que estudia sistemticamente, a base de la revelacin y de la experiencia cualificada, la realizacin del misterio de Cristo en la vida del cristiano y de la Iglesia, que se desarrolla bajo la accin del Espritu Santo y la colaboracin humana, hasta llegar a la santidad 47

    Ch. A. Bernard.

    Teologa espiritual es una disciplina teolgica que, fundada sobre los principios de la revelacin, estudia la experiencia espiritual cristiana, describe su desarrollo progresivo y da a conocer sus estructuras y sus leyes 48

    45 Df G u ib e r t , J , Theologia spintuahs 1146 R o y o M a r n , A , Teologa de la perfeccin cristiana (Madrid 1958), 3 447 R u iz S a l v a d o r , F , o c , 3348 B e r n a r d , Ch A , o c , 70

  • 20 C. 1. Identificacin de la Teologa espiritual

    G. Rodrguez-M elgarejo:

    A quella d im ensin y parte de la T eologa que estudia la e x is tencia cristiana tanto en su dim ensin personal cuanto com unitaria , en s m ism a y en los dinam ism os de la vocacin bautismal desarrollada histricam ente 49.

    B. Secondin y T. Goffi:

    Es la disciplina teo lg ica que explora sistem ticam ente la presencia y la accin del m isterio revelado en la vida y en la conciencia de la Iglesia y del creyente, describiendo su estructura y las leyes de su desarrollo hasta lo ms alto, es decir a la santidad, en cuanto perfeccin de la caridad 5.

    En las definiciones que acabamos de presentar encontramos unos elementos que son comunes a todas ellas, pero tambin observamos un corrimiento de acentos y de matices que indican una sensibilidad propensa a nuevos planteamientos.

    Son elementos comunes:a) El carcter teolgico del tratado. Cuando la teologa espiri

    tual estudia la experiencia cristiana no lo hace al margen de la teologa, sino en cuanto que es teologa y con la garanta de que lo es. As se explica la insistencia de presentarla como parte de la Teologa y actuando desde los principios de la revelacin.

    b) El objetivo de la teologa espiritual es la vida cristiana. Todas las definiciones se centran en lo que es la vida en Cristo del cristiano.

    c) El dinamismo de la vida cristiana. No puede concebirse la teologa espiritual si no se aborda el proceso del vivir en Cristo.

    d) La santidad, y no como exigencia extrnseca, sino como elemento esencial del vivir en Cristo.

    Pero, desde la definicin de De Guibert a la de Secondin-Goffi, existe un amplio arco, en el que caben acentos y aspectos nuevos:

    a) Hay un cambio en relacin con el sujeto de la vida espiritual: se pasa de slo el individuo al individuo en la Iglesia.

    b) La valoracin teolgica de la misma experiencia espiritual puede ser el cambio ms significativo. Se pasa de tener la vida cristiana como mero objeto de estudio a descubrir la misma experiencia como lugar teolgico, y vivirla como tal. No se trata de una teologa sobre la experiencia espiritual del cristiano, sino de una teologa des

    49 RoDRiGLbz-MFi (i^rfjo, G., Qu se entiende por Teologa Espiritual Sistemtica?, en Teologa (Buenos Aires), 22 (1985) 79.

    s,) S f c o n d in , B . - G o f f i, T., Corso di spiritualit. Esperienza-sistematica-proiezioni (Brescia 1989), 14.

  • //. Situacin actual 21

    de la experiencia cristiana. Este cambio supone aceptar la nueva valoracin de la experiencia espiritual cristiana.

    c) La referencia explcita al Espritu Santo, factor fundamental de la vida espiritual.

    d) Un acercamiento mayor de la teologa espiritual a la persona, que es sujeto de la experiencia espiritual, y a la historia, como lugar en el que se hace experiencia viva.

    No presentamos una nueva definicin de teologa espiritual porque consideram os que son vlidas las que se nos han ofrecido; pero insistimos en los puntos que acabamos de subrayar: que sea teologa de la experiencia espiritual de la Iglesia y de la persona cristiana en ella bajo la accin del Espritu; y que se atienda al proceso de la persona cristiana dentro de la historia contando con la llamada a vivir la vida en Cristo en plenitud.

    6. Programacin de la teologa espiritual

    En la programacin de los contenidos y en su desarrollo se m anifiesta cmo se concibe la teologa espiritual. Cada planteamiento de espiritualidad descubre su contenido en la programacin 51. Nosotros seguiremos estas lneas:

    a) Es obligado para una programacin contar con el destinatario. Y aunque intentamos tambin servir a todo el que busque una fundamentacin de la espiritualidad, el destinatario directo es el estudiante de teologa que se encuentra con la asignatura de teologa espiritual. Tendremos presente el carcter interdisciplinar de la teologa espiritual para no detenem os en las explicaciones que son ms propias de otros tratados.

    h) Partimos de la perspectiva antropolgica de la espiritualidad. Es verdad que contamos con la necesidad de crear o de reforzar la actitud favorable a la teologa espiritual, y sabemos que con la presentacin antropolgica favorecemos la acogida a nuestra disciplina; pero la razn bsica de este planteamiento es que la espiritualidad es vida de toda la persona. La espiritualidad cristiana es antropologa cristiana. La referencia antropolgica nos acompaar del principio al final.

    c) El planteamiento de la espiritualidad del cristiano en referencia a la identidad cristiana nos lleva a detenem os en el estudio de lo que entraa para el cristiano la vida en Cristo y la vida en la Iglesia.

    M Son valiosas las observaciones y las sugerencias que sobre el tema hace Rui/ S a i v a d o r , F., Temtica de la teologa espiritual, 191-202; cf. Gozzturso, G., o.c., 26-27.

  • 22 C.l. Identificacin de la Teologa espiritual

    El ser y vivir en Cristo bajo la accin del Espritu en la Iglesia es el elemento bsico y vertebrador de la vida espiritual cristiana.

    d) La expresin de la vida en Cristo es la caridad/amor, que informa la relacin con Dios y la relacin con los hombres. La rela- cionalidad propia de quien es criatura nueva en Cristo se expresar en la caridad/amor y en la oracin, que ocuparn un lugar central en nuestra programacin.

    e) No puede faltar la presentacin del dinamismo de la vida cristiana hasta su plenitud. Desde los primeros pasos del vivir en Cristo debe estar muy presente que estamos llamados a la plenitud de la vida cristiana.

    f) Supuesto que hemos de atender a la vida cristiana hasta su plenitud, entran necesariamente en el estudio unos puntos irrenun- ciables: la realidad del pecado, que est presente en la travesa de la vida; el proceso que sigue la vida cristiana en su contexto socio-histrico concreto; y la necesidad que tiene la espiritualidad de una ascesis y de unos medios.

    Estos son los puntos que consideramos fundamentales de la teologa espiritual y que, dentro del espacio de que disponemos, vamos a tratar.

  • C a p t u l o II

    HAYCABIDA PARA LA ESPIRITUALIDAD HOY?

    BIBLIOGRAFIA

    B r o c k w a y , A. R .- P a j a s h e k a r , J. P., Religious Movements and the Churches (Genve 1987); D e F io r e s , S., Espiritualidad contempornea, en NDE, 454-475; F r a n k l , V . E ., El hombre en busca de sentido (Barcelona 1982); G a r c a H e r n a n d o , J., Pluralismo religioso (Madrid 1981); G a r r id o , J., Educacin y personalizacin (Madrid 1990); G ir a r d , R., El misterio de nuestro mundo. Claves para una interpretacin antropolgica (Salamanca 1982); G o n z l e z - C a r v a j a l , L., Ideas y creencias del hombre actual (Santander 1991); G o r d o n M l l t o n , J., The Encylopedia of American Religions (Detroit 1989); M a r t n V e l a s c o , J., La religin en el hombre, en Communio 2 (1980) 323-336; S u d b r a c k , J., La nueva religiosidad. Un desafio para los cristianos (Madrid 1990); V e r g o t e , A., Psicologa religiosa (Madrid 1967); Z u b ir i , X., El hombre y Dios (Madrid 1984).

    Despus de haber justificado en el captulo anterior la teologa espiritual como disciplina teolgica, parece que est de ms la pregunta de si hay cabida para la espiritualidad hoy. Si acabamos de defender la identidad de la teologa espiritual, por qu dudamos ahora de su objetivo inmediato en la vida real?

    La contestacin es obvia: Aunque la teologa espiritual tenga sentido entre los telogos, es del todo necesario conectar con la postura que se adopta actualmente ante la espiritualidad. Con la pregunta Hay cabida para la espiritualidad hoy ? buscamos sintonizar con las personas que dudan hasta de si existe hoy la posibilidad para la espiritualidad, y cam inar con ellas.

    Esta duda, cuando no es metdica sino expresin de la propia actitud ante la espiritualidad, tiene un doble efecto en la persona:

    En primer lugar, la incapacita para valorar las manifestaciones de espiritualidad que se dan en su entorno; y, aunque se encuentre ante situaciones claramente favorables a la espiritualidad, proyectar sin ms sus interrogantes: Qu validez tiene en nuestro mundo la espiritualidad? No depende de la forma de ser, de la educacin, de la formacin, del contexto cultural en el que uno ha vivido o vive? No es un hecho que va a menos? Y lo que an queda, no es fruto de manipulaciones interesadas? Tiene, pues, todava futuro?

    Pero, adems, esta duda paraliza a la persona en su respuesta religioso-espiritual. Slo sern posibles el cultivo espiritual en uno mismo y la oferta de espiritualidad a los dems cuando uno llegue a clarificar el sentido de la espiritualidad y a valorarla.

  • 24 C.2. Hay cabida para la espiritualidad hoy9

    Para responder a la pregunta Hay cabida para la espiritualidad hoy?, seguim os este itinerario: partimos del conocimiento de los vientos que corren, en parte favorables y en parte contrarios a la espiritualidad, para responder seguidam ente al problema, esclareciendo lo que es la espiritualidad y sealando las condiciones y las caractersticas de un nuevo planteamiento. Estos son los puntos que estudiamos: 1) la bsqueda actual de espiritualidad; 2) los reparos que se ponen hoy a la espiritualidad; 3) el significado de la espiritualidad; 4) los condicionam ientos que estn haciendo posible un nuevo planteamiento de la espiritualidad; 5) las caractersticas de este nuevo planteamiento.

    I. LA BUSQUEDA ACTUAL DE ESPIRITUALIDAD

    El punto de partida ante los interrogantes que existen es presentar una serie de hechos que nos hablan de espiritualidad. Qu demanda hay de espiritualidad en nuestro contexto?

    Es comn a los nuevos movimientos eclesiales el acento de la espiritualidad. Abrimos una enumeracin que debe ser estudiada de cerca y completada ': Los movimientos de espiritualidad y de apostolado familiar; el scoultismo catlico; el m ovimiento oasi; los focolares; la renovacin carismtica; el seoro de Jess; las comunidades de base; los movim ientos misioneros; los cursillos de cristiandad; las com unidades neocatecum enales; fe y justicia; adsis; opus Dei; Schnstatt; los encuentros de Taiz; las nuevas fraternidades; nuevo eremitismo; comunin y liberacin; etc.

    Los telogos de la liberacin estn muy interesados por la espiritualidad. Puede considerarse com o punto de partida el nmero extraordinario de la revista mexicana Christus, diciembre 1979-ene- ro 1980, dedicado a la espiritualidad de la liberacin, en el que intervienen personas cualificadas en esa teologa.

    Desde esa fecha se ha m ultiplicado la literatura a favor de la espiritualidad: cada telogo de la liberacin tiene su artculo o libro escrito sobre espiritualidad, como: Leonardo Boff, Ignacio Ellacura, Segundo Galilea, Bautista Gonzlez Buelta, Gustavo Gutirrez, Nstor Jan, Jon Sobrino y Jos M.d V ig il2. Para los telogos de la libe-

    1 Cf AA.VV., Dizumario degh Istituti di perfezione (Roma 1974); AA.VV , Mo- vimenti ecclesiah contemporanei Dimensiom stonche, teologito-spintuah edapostla he (Roma 1980), B a r c f l o n , F., Las asociaciones y movimientos laicales en la vida y misin de la Iglesia, e n Teologa Espiritual (1992) 171-206, G a r c a , C . - C a s t fi i a n o , J , Com entes y movimientos actuales de espiritualidad (Madrid 1987), L f n o ir ,F., Les communauts nouvelles Interviews de fondateurs (Pars 1988).

    2 Cf B o F r , L., Contemplativos in liberatione, en Christus 529 (1979), 64-68, C a s a l d a l k i A, P - V k . i l , J M , Espiritualidad de la Liberacin (Santander 1992), E l l a

  • /. La bsqueda actual de espiritualidad 25

    racin la espiritualidad debe ser atendida; sus aportaciones son de apoyo claro a la espiritualidad.

    El influjo espiritual del Oriente en Occidente es otro dato a tener en cuenta para com prender las distintas posturas que entre nosotros se adoptan ante la espiritualidad. Nos limitamos a sealar algunos cauces de su influjo actual.

    a) El Oriente cristiano est influyendo por medio de las publicaciones 3. Es cada vez ms frecuente ver las firmas de sus telogos especialistas en obras teolgicas de Occidente en colaboracin 4; y sus puntos de vista son siempre de rica complementariedad. Constatamos una mayor cercana a la teologa y a la espiritualidad de las Iglesias de Oriente.

    b) Sealamos el influjo de los telogos y escritores que presentan la teologa y la vida cristiana desde el contexto del Oriente asitico. Est el dato significativo de la acogida que han tenido los libros de Anthony de Mello 5.

    c) Es un hecho patente que las sesiones de zen y de m editacin trascendental estn ya afincadas en O ccidente; y se ha buscado la aplicacin de m todos de inspiracin oriental a la oracin cristiana 6. El influjo es tan real que fue objeto de la Carta de la Congregacin para la D octrina de la Fe, con fecha del 15 de octubre de 1 9 8 9 , sobre A lgunos aspectos de la m editacin cristiana 7.

    c u r ia , I., Fe y Justicia, en AA.VV., Fe, justicia y opcin por los oprimidos (Bilbao 1980), 71 -78; G a l il e a , S , La espiritualidad de la Evangehzacin (Bogot 1979), Id , La insercin en la vida de Jess y en la Misin (Bogot 1989), Gonzai fz B u lla , B , Bajar al encuentro de Dios Vida de oracin entre los pobres (Santander 1988); I d ., El Dios oprimido Hacia una espiritualidad de la insercin (Santander 1988), Gu herrf z,G., Beber en su propio pozo (Salamanca 1984); J a n , N , Hacia una espiritualidad de la teologa de la liberacin (Santander 1987); S o b r in o , J , Liberacin con espritu Apuntes para una nueva espiritualidad (Santander 1985)

    3 Citamos la Collection Thophanie, dirigida por O l iv ie r Ci f m f n t , en Descle de Brouwer, que tiene como objetivo ser lugar de encuentro con el Oriente cristiano

    4 Cf. A n d r o n ik o f , C., Dogma e mstica nella tradizione ortodossa, en A A VV., La mstica (Bologna 1991), 143-164, S p id l ik , T , Espenenza spintuale deirOnente cristiano, en S e c o n d in , B -Gorn, T , Corso di spiritualit Espenenza-sistematica- proieziom (Brescia 1989), 210-221

    5 C f De M fli o , A , El canto del pjaro (Santander 1982); Id , ^Quin puede hacer que amanezca ? {Santander 1985); Id , Contactos con Dios (Santander 1991), V a l l e s , C G , Ligero de equipaje Tony de Mello, un profeta para nuestro tiempo (Santander 1987). Entre los autores que escriben sobre la espiritualidad cristiana desde el Oriente asitico citamos a R ac,u in , Y .Caminos de contemplacin {Madrid 1971), Id , Espritu, hombre, mundo (Madrid 1976), Id , Atencin a Dios (Madrid 1979), Id , La Source (Pars 1988).

    b Cf. J o H N sro N , W , La msicacallada La ciencia de la meditacin (Madrid 1980); L a s a l l e , E , El zen entre los cristianos (Barcelona 1 9 7 5 ) , Id , Zen, un camino hacia la propia identidad (Bilbao 1 9 9 0 )

    7 Carta de la Congregacin para la Doctrina de la Fe a los Obispos de la Iglesia

  • 26 C 2 Hay cabida para la espiritualidad hoy?

    Otro exponente de la espiritualidad actual es el fenmeno de los nuevos movimientos religiosos. Estamos ante un hecho que es com plejo, porque no es fcil ni definirlo ni precisar sus causas, y, a su vez, extenso, porque se da en los pases ms diversos y en las culturas ms dispares 8.

    a) Los nuevos movimientos religiosos que han surgido en las religiones autctonas de pueblos del tercer mundo. El nmero es grande; slo en Africa aparecen censados seis mil movimientos 9.

    b) Los nuevos movimientos religiosos dentro de las grandes religiones del Hinduismo, Budismo y del Islam. En el interior del Hinduismo son conocidos: la m isin de la luz divina, Ananda Marga, Har Krishna y la meditacin trascendental. En el Budismo los movimientos estn ligados a la extensin del zen como mtodo de meditacin l0. Y dentro del Islam se han producido grupos religiosos de reforma, entre los cuales se encuentran el bab o babismo y el Bahaullah ll.

    c) Los grupos dentro del cristianismo, a los que ms propiamente se aplica el trm ino de sectas 12. C abe citar la fam ilia p ietista-m etodista; la fam ilia pentecostalista; las Free churches europeas y americanas: menonitas y cuqueros; la familia bautista; la adventista; los testigos de Jehov; etc. La fuerza que hoy tienen las sectas es una clara interpelacin a las Iglesias.

    d) El ocultismo, que supera las fronteras de lo religioso y que comprende fenmenos como el espiritismo, la astrologa, la adivinacin en todas sus formas, etc., cuenta con una aceptacin que va a ms l3.

    Catlica sobre algunos aspectos de la meditacin cristiana, en AAS 82 (1990) 362-379 (Ecclesia 50 (\990) 82-90).

    8 C f AA.VV , Nuevos movimientos religiosos, en Concihutn 181 (1983) 1-184, B e c k f o r d , J. A , New Religious Movements and Social Rapid Change (London 1986); B r o c k w a y , A R - P a j a s h e k a r , J P , o.c., G a r c ia - H e r n a n d o , J , o c , G o r d o n M e l t o n , J., o c., G u e r r a , M., L o s nuevos movimientos religiosos (Pamplona 1993), J M a r t in V e l a s c o , El malestar religioso de nuestra cultura (Madrid 1993), 53-79; P u e c h ,H. Ch , Historia de las religiones XII Movimientos religiosos de la aculturacin (Madrid 1982), S u d b r a c k , J , o.c

    9 Cf P u e c h , H Ch , o.c10 Cf G o r d o n M e l t o n , J., o .c , 161-167, A r e v in d S a r m a , New Hind Move

    ments n India, en B e c k f o r d , J A., o.c , 220-23911 Cf AA V V , El Islam Un desafo para el cristianismo, en Concilium 253

    (1994) 389-558, G o r d o n M e l t o n , J , o.c., 158-159, S a id A m in A r j o m a n d , Social Change and Movements o f Revitalization in Contemporary Islam, en B e c k f o r d , J A , o c., 87-112

    12 Cf. G o r d o n M e l t o n , J., o c , M o r a l e d a , J , Las sectas hoy, Nuevos Movimientos Religiosos, en Cuadernos Fe y Seculandad 20 (Madrid 1992), S ai v a t ie r r a , A , Las sectas, desao a la Nueva Evangelizacin, en Surge 50 (1992) 20-43, Wu s o n , B , Sociologa de las sectas religiosas (Madrid 1970)

    n Cf. Di o l a , A., Occultismo ed esotensmo, en Enciclopedia delle Rehgiom IV (Firenze 1972), 1175-1179, P i k a z a , X , Esotensmo, en DTDC, 451-474.

  • I. La bsqueda actual de espiritualidad 27

    e) Una de las formas ms difundida actualmente de los nuevos movim ientos religiosos es la conocida con el nombre de New Age o Nueva Era 14.

    Otro claro exponente de la bsqueda actual de espiritualidad es el aumento de publicaciones sobre el tema religioso, en sentido amplio. Las editoriales catlicas ms importantes tienen su coleccin de espiritualidad. Entre las de Espaa, Descle tiene la coleccin Biblioteca catecumenal; PPC, Pastoral Aplicada; Sal Terrae, Man- resa, El Pozo de Siquem, Servidores y Testigos; San Pablo tiene Betania, Tabor, Clsicos cristianos, Por el Reino, Remanso, Testigos, Vidas breves, Fermentos, Alba; San Po X, Oracin y celebracin de la fe; Secretariado Trinitario publica M undo y Dios, Hombre interior, Trinidad y vida, Testigos; Sgueme edita Pedal y El rostro de los santos; Sociedad de Educacin Atenas tiene Aldaba, Edelweiss; y Verbo Divino, Caminos al andar y Surcos. Otras editoriales, como la BAC, tienen una gran parte de su produccin dirigida a la vida cristiana y a su espiritualidad.

    Se m ultiplican las iniciativas de bsqueda o fom ento de espiritualidad: cursos de form acin religiosa perm anente; grupos de form acin y de cultivo espiritual en las parroquias; dem anda actual de ejercicios espirituales de m es y de los ejercicios de ocho das: su aceptacin y la form a en que se practican; proliferacin de las casas de oracin o de espiritualidad; experiencias en los m onasterios; experiencias m isioneras; cursos de profundizacin bblico-teolgica.

    La actualidad del tema se m anifiesta tam bin a nivel de organizacin de estudios de espiritualidad. Los distintos cursos de Formacin Permanente de los sacerdotes y de los religiosos dedican cada vez mayor atencin a la espiritualidad. Las Universidades y las Facultades teolgicas, en sus Semanas y Congresos, prestan creciente inters a las inquietudes de la espiritualidad 15. Los programas que se ofrecen desde los secreta