Algún Aeropuerto, 8 mayo 2012.

Gracias de permitirnos venir una vez y otra vez y continuaremos a venir

cada año. Todas tus semillas te piden perdón y a los benditos que han lastimado y

perdón también para esos seres de los dos países vecinos. Tierra amada y odiada.

Odio por el rencor y el odio que existe, que viven y que mantienen. Amada porque

es la cuna de la humanidad.

Gracias Tiberiades, Bendito seas Maestro que nos permites aún a estos

miserables humanos guardar un poco de humanidad, de amor y sobre todo de

mucha esperanza que un día pueda haber la paz en nuestra Madre la Tierra.

Maestro hemos subido en Tu Barca, Pablo, Omar y Elhoir te recitaron un

canto y un ode a tu amor, a lo que Eres y Seràs. Contigo hemos compartido la

alegría en esta barca. Contigo hemos compartido esas piedras que tocabas y que

estabas junto a tus amigos de corazón. Ojalá la humanidad quisiera hacer un

mínimo de lo que nos Enseñaste, Dar es Recibir.

El egoísmo nos tapa los ojos ¿Qué esperamos? Hay una semilla en este

curso que no ha sido feliz porque estaba esperando los reconocimientos, estaba

esperando los aplausos, estaba esperando ser el número uno y ha vuelto triste y

apagado. ¿Por qué quiere reconocimiento esa semilla si La Jardinera ya se lo dio

todo? Y el único reconocimiento del Universo solo su Alma lo tiene que

reconocer.

Maestro ponle la mano en su corazón, vacíaselo de los celos, de las

envidias, de la prepotencia, del ego y llénaselo de humildad, llénaselo de amor que

hasta hoy no lo conoce, de compasión y de compartir.

Semillas estoy en el aeropuerto vía de vuestros países, pero mi Alma se ha

quedado en Tiberiades, esperando volver de nuevo.

Os deseo un feliz día y que todas las semillas que han hecho este

Peregrinaje, trasmitan la Riqueza, la Abundancia, el Amor y la Generosidad.

¡Aleluya, Aleluya, Aleluya!

¡Gracias Tierra Santa!

Con todo mi amor

La Jardinera