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APROXIMACIN AL CONCEPTO DEL TARNEN LA CULTURA GRAFA DE LOS PEMN

Erma SulbarnUniversidad de Los Andes

Esta investigacin tiene el propsito de introducir el concepto de tarn, sus usos y formas dentro de la comunidad pemn, etnia perteneciente al grupo de los Caribe y habitan al sureste del Estado Bolvar y las reas vecinas de Guyana y Brasil, estn subdivididos en tres agrupaciones dialectales: Arekuna, ubicados al noreste de la cordillera del Roraima y en el Valle de Kavanayen; Kamarakoto al oeste del ro Karuay, regin del Caron, la Paragua y en el valle de Kamarata; y Taurepn al sur de la frontera con Brasil, abarcando la regin desde Santa Elena de Uairn hasta las cercanas del tepuy Roraima y del ro Kukenan. La palabra Pemn quiere decir gente, y es un trmino para distinguir a los miembros de este grupo tnico de los criollos, negros y otros grupos indgenas vecinos.

Ahora bien, antes de abordar el concepto de tarn har una breve resea sobre las creencias mticas-espirituales de esta etnia. Para el Pemn no existe un ser supremo, porque se guan por la intuicin, el sentimiento y la imaginacin. Sin embargo, ellos creen en Makunaim como creador de todas las cosas y de los pi (sus ancestros). Ellos tienen una fuerte creencia en los seres de la naturaleza que habitan en su comunidad, de hecho, han construido una cosmovisin, segn la cual la fauna est dividida en dos tipos de animales: los Yeken, que corresponden a los domsticos o domesticados, y los Enek, que

Corresponden a los animales salvajes, dainos, extraos, que causan enfermedades y representan el peligro de la muerte.

El Pemn, para protegerse de estos animales, o de cualquier amenaza de peligro que se les presente, utiliza el tarn, tarem o taremur en procura de la proteccin de la tribu.

Estos tarn estn relacionados con ensalmos u oraciones que se realizan en lugares donde se est en contacto con la naturaleza.

Bacoa. Revista Interdisciplinaria de Ciencias y Artes. ISSN 2343-5542. Ao 1. Vol. 1. N 1. Enero Junio, 2011.Universidad Nacional Experimental Francisco de Miranda (UNEFM).

Autora: Erma Sulbarn. Ttulo: Aproximacin al Concepto del Tarn en la Cultura grafa de los Pemn, p.p. 28 - 35.

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Los taren son invocaciones invariables que a pesar de no estar escritas tienen una manera particular de realizarse, dependiendo de la situacin. Estos ensalmos estn cargados de metforas, de palabras con sentido mgico que son transmitidas a travs del pensamiento, el sentimiento y la imaginacin.

El tarn consta de las siguientes partes:a) narracin de cmo comienza el mal o la enfermedad.b) presentacin del contrario a ese malc) Frmula con la que el contrario del mal se destin a ser remedio.d) Nombres que us en aquella ocasin para nombrarse.

Estas invocaciones se realizan en lugares lejanos, en los que nadie pueda perturbar el ritual, como los ros, los caminos solitarios, las montaas, los cerros, las nubes, las profundidades

Salto ngel. Kerepakupai Mer / Ven, en idioma pemn. Auyantepuy. Parque Nacional Canaima.



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de la tierra, con el propsito de alejar las fuerzas del espritu del mal representadas por los enek o animales salvajes. Y los imoron que representan las enfermedades.

Para que el tarn cause el efecto requerido, es necesario que quien lo recite no sea visto ni escuchado por nadie. A travs del tarn la persona ejecutante, establece una comunicacin con los elementos naturales, quienes como seala Cesreo De Armellada estn algo bajo la tierra, como los diamantes y cochanos, en los pozos profundos de sus ros, en los barrancos y socavones de sus torrentes o quebradas, los tarn o taremur se recitan en voz baja y misteriosa.1 Para que de esta manera causen el efecto deseado.

El tarn nos muestra la grandeza espiritual y la imaginacin de los Pemn, quienes lo hacen como una necesidad vital, pues a travs de l, estos aborgenes conjuran sus necesidades. De hecho, para estas invocaciones, no utilizan una sola palabra, sino utilizan diferentes palabras dependiendo del mal que se padezca.

Lyll Barcel Sifontes, seala que:

Este gnero literario nos introduce en un mundo tergico y mgico del pemn, quien lo utiliza como contra a algn hecho del cual tiene que librarse o, sencillamente, es una respuesta a la curacin de algn fenmeno natural; o sobrenatural del mundo que los circunda. 2

Las razones que llevan al Pemn a utilizarlos estn relacionadas con su cotidianidad, en la cual se presentan situaciones que deben ser abordadas con especficos tipos de tarn que suelen ser la contra para alejar los malos deseos o para prevenirse de ellos, son utilizados como preventivos para poder comer en compaa de saresn (familiar muerto) y de pikotn (piache y cazador que ha tomado ciertos preparados hechos con vegetales especiales); del mismo modo, sirven tambin para que los enamorados atraigan el afecto de la persona deseada. Ejemplo de esto, es el siguiente tarn.

Tarn para voltear el corazn de una mujer.

Hubo una moza en aqul tiempo antiguo de los pi, que era pues eso muy buena moza. Y en un cierto baile de juego, igual que el que nosotros tuvimos hoy, estuvo all aquella buena moza.

Y entonces uno de ellos le dijo a los otros: - Yo quiero a esa; de

1 Cesreo de Armellada. Pemontn Teremur (Invocaciones mgicas de los indios Pemn). Caracas. Editorial Arte.1972.p.11.2 Lyll Barcel Sifontes. (To Maip, To Eseruk, To patask). El espejo de los Pemontn. Su palabra, sus costumbres, su mundo. Caracas.Monte vila Editores. 1982. p.119.



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verdadpero los otros le dijeron, ya comenzando la envidia:- Ella no te hace caso; t no eres ningn buen mozo. Pero el les replic: -Aunque as sea y aunque yo no sea buen mozo, yo voy all, a su casa. Despus de los bailes, se haba regresado a su casa. Y voy a decir que el enamorado de la buena moza era un tepkoi, una especie de lechuza. Era en aquellos tiempos de los pi, cuando los animales eran gente y hablaban. Entonces l se pint y se puso sus adornos; sus zarcillos, sus collares, sus brazales y dems. Tambin prob su wasekpu o flauta de venado, compuso un puenn o cntico de amor, y se puso en camino. Y cuando lleg a un cerrito,se hizo su tarn diciendo: Aqu yo, aqu yo pobrecito; a esa buena moza hija de pi, yo la volteo hacia m, hacia m mismo, a mis cejas, a mis manos, a mis piernas, a mis pies, a mi coraznNo dej nada sin nombrar. Dicho eso, se puso de pie sobre lo ms alto del cerrito, sac la flauta de su bolsa y cant diciendo: - El corazn de esta mujer yo lo viro, el corazn de esta mujer yo lo reviro; hacia esta flauta, que fue hueso de una caza ma, yo volte su corazn de esta mujer yo lo reviro, yo pobrecito habitante sobre los troncos de rboles. Y terminaba con unas notas, que parecan decir: Word-wor, tekpop; Word-wor, watot, watot!. Entonces la mujer sali a mirar diciendo; quin ser el que viene, ella nunca sala. .. Pero ahora el corazn le dio un vuelco.3

Los taremur, por encontrarse basados en creencias originadas en los tiempos de Piatn Daktai, cuando todos los seres hablaban (los animales, y fenmenos naturales), y se relacionaban entre s, por ejemplo, los perros, los monos, los bhos eran yernos del pato, los tigres eran concuados de las ranas, las piedras eran curadas por la arena y la ceniza, el loro curaba a su amo ciego, un lagartijo conquistaba el amor de una buena moza con su flauta, el pequeo colibr desarmaba a los poderosos truenos.

Es importante sealar, que los pemones son culturas grafas; por lo tanto, sus tradiciones y cultos han pervivido en el tiempo, porque se transmiten de generacin en generacin a travs de la oralidad.

Lyll Barcel Sifontes, en su afn de circunscribir a los tarn dentro de la literatura, ha dicho que el tarn se nos presenta como un gnero mixto: Panton+ Eremuk (leyenda y canto) ejemplo de esto, es el siguiente tarn para voltear el corazn de una mujer, en el que estn presentes ambos elementos.

3 Cesreo de Armellada. Pemontn Taremur (Invocaciones mgicas de los indios Pemn). Caracas. Editorial Arte. 1972. p.246



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Hubo una moza en aqul tiempo antiguo de los pi, que era -pues eso- muy buena moza. Y en un cierto baile de juego, igual que el que nosotros tuvimos hoy, estuvo all aquella buena moza.

Y entonces uno de ellos le dijo a los otros: - Yo quiero a esa; de verdadpero los otros le dijeron, ya comenzando la envidia:- Ella no te hace caso; t no eres ningn buen mozo. Pero el les replic: -Aunque as sea y aunque yo no sea buen mozo, yo voy all, a su casa. Despus de los bailes, se haba regresado a su casa. Y voy a decir que el enamorado de la buena moza era un tepkoi, una especie de lechuza. Era en aquellos tiempos de los pi, cuando los animales eran gente y hablaban. Entonces l se pint y se puso sus adornos; sus zarcillos, sus collares, sus brazales y dems. Tambin prob su wasekpu o flauta de venado, compuso un puenn o cntico de amor, y se puso en camino. Y cuando lleg a un cerrito,se hizo su tarn diciendo: Aqu yo, aqu yo pobrecito; a esa buena moza hija de pi, yo la volteo hacia m, hacia m mismo, a mis cejas, a mis manos, a mis piernas, a mis pies, a mi coraznNo dej nada sin nombrar. Dicho eso, se puso de pie sobre lo ms alto del cerrito, sac la flauta de su bolsa y cant diciendo: - El corazn de esta mujer yo lo viro, el corazn de esta mujer yo lo reviro; hacia esta flauta, que fue hueso de una caza ma, yo volte su corazn de esta mujer yo lo reviro, yo pobrecito habitante sobre los troncos de rboles. Y terminaba con



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unas notas, que parecan decir: Word-wor, tekpop; Word-wor, watot, watot!. Entonces la mujer sali a mirar diciendo; quin ser el que viene, ella nunca sala. .. Pero ahora el corazn le dio un vuelco.4

Existe otro tipo de tarn que cumplen con una finalidad preventiva, es decir, que no slo sirven para alejar un mal, sino tambin para prevenirlo. Ejemplo de este tipo de ensalmo es el siguiente:

Versculo 5, del tarn: Contra el maleficio del pato en aquellos antiguos tiempos, uno de los pi o progenitores comi sin ningn cuidado de un pato, pues era uno ms entre los pjaros. Pero he aqu, que su hijo cay con la enfermedad del pato. Y entonces los patos les llevaron el alma a los hijos de los que fueron nuestros pi o progenitores.5

Este tarn sealado por Barcel Sifontes tiene un significado culturalmente establecido, en cuanto a las prohibiciones alimenticias que tiene el Pemn antes del nacimiento de un nio, las cuales tienen por objeto proteger el alma del infante. Mientras la mujer est embarazada ninguno de los cnyuges puede comer peces grandes o especies de aves, tampoco puede consumir dantas, picures, vquiros, venados, patos o las palomas werusi, como una manera de prepararse y limpiar el cuerpo de impurezas para el nacimiento. Sin embargo, pueden comer todos los peces pequeos y la palomita wakuna, que se supone trae el alma del nio. La razn de estas prohibiciones como lo seala Koch-Grmberg es la siguienteque el pato podra llevarse el alma del nio al cielo en la noche.6

Cesreo de Armellada, quin convivi con estos aborgenes, aproximadamente durante veinte aos, seala que:

Los indios de esta regin saben y creen que los Makunaim fueron los inventores de los tarn, pero despus algunos otros encontraron sus tarn siempre siguiendo el camino por ellos trazado. Nosotros no omos decir que el padre o la madre de los Makunaim inventaron los tarn; pero descendientes de los Makunaim s se dicen que inventaron los tarn.7

4 Cesreo de Armellada. Pemontn Taremur (Invocaciones mgicas de los indios Pemn). Caracas. Editorial Arte. 1972. p.2465 Ibd..,p.1346 Ibd..,p.1347 Cesreo de Armellada y Carmela Bentinvenga de Napolitano. Literaturas Indgenas vene-zolanas. Visin panormica actual de las literaturas indgenas venezolanas. Caracas, 4ta. ed. Monte vila Editores, 1991. p. 335.



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Makunaim aparece dentro de esta etnia como el creador de todas las cosas. Como mito representa la creacin y el origen del Pemn. Las invocaciones de los Makunaim, tambin se inician con otros nombres, como Tuenkarn, Mawar, Amariwak, en fin, con todos los nombres de los espritus malignos que habitan en el cerro, aguas profundas y selvas.

Cesreo de Armellada seala: Un tarn, Donde la vieja sapo, mujer del tigre envenen a la madre de los Makunaim.

Aquel da los Makunaim se fueron a jugar, a flechar pajaritos con su cerbatana. Y estando en esto, el menor de los Makunaim oy al pjaro kachipe, que deca la vieja sapo envenen a vuestra madre entonces el menor de los Makunaim Chik, le dijo a su hermano mayor cmo nos nombraremos para escondernos?- Y se dijeron vamos a nombrarnos como moscas, e inmediatamente se fueron como moscas a esconderse en el vientre de su madre. Y ellos invocaron de la siguiente manera: All estoy yo y dijeron: Darewuima- pi. Como quien dice: El primero de todos los que tienen resuello. Y para reforzar el tarn dijeron luego: Makunaim Pi, Anchikirn Pi, Anik-Pi, T-enu paru-kok-pi8

Debido a que los Pemn no pueden explicar los fenmenos de la naturaleza a travs de la ciencia o de la religin, intentan comprenderlos a travs de la magia; es decir, que le atribuyen a la naturaleza poderes mgicos en lugar de analizarla, razn por la cual le otorgan caractersticas antropomrficas a los animales y vida a los seres inanimados que los circundan. Ellos creen en su intuicin y de esta forma logran sobrevivir en ese universo mtico que crean. Al respecto 9Briceo Guerrero seala que: Tanto el mito como la ciencia y la filosofa son formas simblicas, elevan la catica experiencia inmediata al plano de la representacin para organizarla y manejarla en funcin de necesidades humanas y con el recurso humano por excelencia: el signo en todas sus formas.

Podemos concluir que los taren de los pemon han pervivido hasta nuestros das, gracias a la transmisin oral que ha estado arraigada a esta etnia desde sus orgenes. La importancia de estos taren est en que a travs de ellos podemos entender mejor la cosmovisin de los pemones, y por lo tanto, entender su cultura y valorarla. Adems como qued demostrado en esta investigacin, es un tema que puede abordarse desde diferentes perspectivas o campos del conocimiento, por ejemplo, la literatura, y la antropologa, pues sta apenas es una aproximacin a este interesante tpico que pretende abrir el camino a futuras investigaciones.

Recibido: 3 de febrero de 2010.Aprobado: 25 de marzo de 2010.

8 Ibd. p.149 Jos Manuel Briceo Guerrero. El Origen del Lenguaje. Monte vila Editores c.a., Cara-cas, 1970. p.123.



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