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Laboratorio de laboratoriosFRANCISCO RUIZ DE INFANTECuradora invitada: Nekane Aramburu

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Fundacin Telefnica

Espacio Fundacin Telefnica

Agradecimientos

Eduardo Caride Presidente Jos Luis Rodrguez Zarco Secretario general Mario E. Vzquez Tesorero Juan Waehner Javier Nadal Ario Francisco Serrano Martnez Carmen Grillo Federico Rava Manuel A. lvarez Trong Vocales Carmen Grillo Directora Fundacin Telefnica Bibiana Ottones Jorge Leiva Alejandrina DEla Gerentes

Alejandrina DEla Gerente Marcelo Marzoni Jefe de Montaje Julia Zurueta Asistente de Curadura Silvana Spadaccini Asistente de Programacin Josefina Pasman Cecilia Pitrola Equipo de Educacin Cecilia Paganini Christian Funes Equipo de Montaje Federico Demateis Asistente tcnico Miriam Mndez Asistente general Jazmn Collado Castro Victoria Rodrguez Aragn Recepcin Jos Trejo Jefe de Seguridad

Embajada de Espaa en Argentina Sociedad Estatal para la Accin Cultural Exterior de Espaa (SEACEX) Centro Cultural de Espaa en Buenos Aires (CCEBA) Le Centre des Rives / Autour de la Terre (Auberive-Vaillant, Francia) Csar Centre National de Cration Musicale (Reims, Francia) Atheneum de luniversit de Bourgogne (Dijon, Francia) Artium. Centro-Museo Vasco de Arte Contemporneo (Vitoria-Gasteiz, Espaa) Galera Elba Bentez (Madrid, Espaa) Sebastin Mirengo Leo Nez

Organizacin y produccin de la exposicin Nekane Aramburu Curadora invitada Alejandrina DElia Coordinadora general Julia Zurueta Marcelo Marzoni Produccin Marcelo Marzoni Diseo de montaje Federico Demateis Asistente tcnico Ezequiel Verona Pablo Lepiane Cecilia Paganini Christian Funes Montaje Allan Medina Roberto Jess Paladino Juan Cuello Asistencia de montaje Estudio Beccar Varela Asesoramiento legal

Esta muestra ha sido coproducida con SEACEX (Sociedad Estatal para la Accin Cultural Exterior de Espaa) y organizada juntamente con el CCEBA (Centro Cultural de Espaa en Buenos Aires)ISBN: 978-987-24475-5-7 de la presente edicin, Fundacin Telefnica de los textos, los autores de las fotografas, sus propietarios Prohibida su reproduccin total o parcial

CoN EL APoyo DE

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Contenido

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Presentacin Eduardo Caride Presidente del Consejo de Administracin de la Fundacin Telefnica

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Ruiz de Infante en la era BlueSky Nekane Aramburu Curadora invitada

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Motores y consecuencias (documentos relativos a algunos proyectos asociados a BlueSky) Francisco Ruiz de Infante

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Lo humano prisionero del cielo? Marie-Jos Mondzain

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Obras en exhibicin EFT BlueSky / Laboratorio de laboratorios

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Obras en exhibicin CCEBA BlueSky / Taller de Re:presentaciones

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Biografa del artista Versin en ingls / English version

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El Espacio Fundacin Telefnica inicia su agenda de exposiciones 2009 con una muestra del artista espaol Francisco Ruiz de Infante. Este proyecto denominado BlueSky / Laboratorio de laboratorios, y compuesto por una serie de instalaciones y numerosos trabajos inditos, en el que el artista ha venido trabajando desde 2001, se presenta por primera vez en Buenos Aires. La propuesta es el resultado de un intenso trabajo en conjunto entre la curadora Nekane Aramburu, el artista y todo el equipo del Espacio FT. Es de destacar la produccin realizada por el equipo de montaje del Espacio y su articulacin y trabajo con el artista, gran diseador de los mbitos expositivos en constante construccin, por lo cual las instalaciones aqu presentadas no sern mostradas de la misma manera en otro contexto. Este proyecto, iniciado en 2007, ha involucrado a la Sociedad Estatal para la Accin Cultural Exterior de Espaa (SEACEX), como coproductora, y al Centro Cultural de Espaa en Buenos Aires (CCEBA), como coorganizador y, a la vez, sede de una pequea parte del proyecto en su anexo de la calle Paran. Esta asociacin entre las tres instituciones ha resultado estratgica para el armado de la muestra, confirmando que es importante producir proyectos en alianza como forma de potenciarlos y sumar nuevos pblicos. Esperamos que esta muestra sea un nuevo referente en el campo de la produccin artstica en nuestro pas vinculada a las nuevas tecnologas, para el surgimiento de proyectos que faciliten la interaccin con otros espacios de trabajo interdisciplinario y sean inspiradores de distintas producciones artsticas. Eduardo Caride Presidente del Consejo de Administracin de la Fundacin Telefnica

The Espacio Fundacin Telefnica is pleased to announce launch its calendar of events for 2009 with an exhibition of works by the Spanish artist Francisco Ruiz de Infante. For his debut in Buenos Aires, De Infante has assembled BlueSky / Laboratory of Laboratories, a set of installations and pieces created by the artist over the last eight years, many of which have never been shown before. This artistic proposition is the result of many months of intensive work between the curator Nekane Aramburu, the artist himself and the Espacio Fundacin Telefnica (EFT) team. Special mention should be made of the task carried out by the EFT production crew and their cooperation with the artist, who is himself a designer of exhibitions on a grand scale which are permanently under construction, which also means that this particular series of installations will never again be displayed in the same way. The project, which began to take shape in 2007, has involved the participation of the Sociedad Estatal para la Accin Cultural Exterior de Espaa (SEACEX) as co-producer and the Centro Cultural de Espaa en Buenos Aires (CCEBA) in its role as co-organizer and host to a part of the project in its annex located on Paran Street. The association between these three institutions has been highly constructive at a strategic level for the set-up of this exhibition, proving the importance of forming alliances to produce and develop projects as a way of optimizing their potential and reaching new audiences. We very much hope that this exhibition will serve as a new benchmark for artistic production linked to cutting-edge technology in Argentina, with a view to creating projects which foster interaction with creativity from other disciplines, able to act as inspiration for future artistic productions. Eduardo Caride President of the Administrative Committee of Fundacin Telefnica.

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Ruiz de Infante en la era BlueSkyUn texto de Nekane Aramburu(con inoculaciones vricas de Francisco Ruiz de Infante)

Prlogo: Algunos puntos de inflexin y comprensin express para empezar

Una bruma blanquecina, hmeda y tan ubicua como las dudas y las sospechas enmaraadas en el software de nuestras vidas, cubre una extensa nave dividida en mltiples estancias y niveles unidos por tablones, precarias escaleras y puertas. En la trayectoria de Ruiz de Infante todo est interconectado. Ideas germinales, que aparecen como intuiciones en un momento, son desarrolladas como grandes temas en otros, hay caminos que se cierran, trenes de alta velocidad, pozos abiertos por la mano de un radiestesista pertinaz, charcos de aguas estancadas sobre los que flotan inertes hojas y bichos muertos, centrifugadoras, seres que estn sin estar. Las luces an permanecen encendidas. Veinte aos no es nada. Podramos situarnos en un nico tiempo, el de la creacin, o diseccionar en cuatro grandes perodos el trabajo de este artista fuera de formatoI que transita entre la instalacin, las acciones efmeras, el activismo pertinaz y el video en su estado ms experimental. Si consultamos su extensa bibliografa o los escritos que genera meticulosamente como un entomlogo tenaz, observaremos que la propia fluidez y transitoriedad del proceso creativo del autor, en apariencia serpenteante entre medios y mdulos ubicuos, se revela finalmente como si viniera a emerger de un minucioso plan preestablecido. La genealoga de sus trabajos se inserta en grandes proyectos temticos unidos por engranajes perfectamente sincronizados. Esta genealoga procesual engarzada por dispositivos invisibles de mecnica especular se divide en cuatro etapas: Castillos bajo el agua (1988-1992), Centro de trnsito para adolescentes (1992-1994), Los lobos (1994-2001) y, a partir de 2001, el Tronco ecosistemas. Unos momentos y otros se retroalimentan, como unidos a tubos de respiracin o redes elctricas pertenecientes a un mismo Tiempo, un tiempo donde la palabra Real ha perdido su significado. Antes de abandonar la pista de despegue es aconsejable comprobar los radares y las seales de la torre de control. Somos como nos hacemos, pero, sobre todo, somos de donde venimos y hacia donde intuimos que queremos ir. He nacido en el norte de un pas que se encuentra al sur. Pero al sur de qu?.II Una ciudad con poca luz y bastante agua. Pantanos, ros, lagunas, lluvia. La ciudad del aparente bienestar con una lengua extraa que, prohibida, apenas se hablaba, una situacin poltica convulsa, un perodo social concreto, un rea separada de la ciudad por el ro, la vida en familia, la televisin, muy tarde por la noche y muy pronto por la maana.8

I. Artes fuera de formato: las que difcilmente pueden medirse, pesarse, colgarse o guardarse; las que utilizan el tiempo, el cuerpo, el espacio, la imagen y el sonido como materiales maleables; obras en las cuales la presencia del espectador es a menudo un elemento sustancial del proyecto.

II. Gamarra Mayor, un pueblo situado a las afueras industriales de VitoriaGasteiz, Pas Vasco, en Espaa. Una carretera de 4 kilmetros bordeada de fbricas de industria pesada separa la ruralidad moribunda gamarresa de la ciudad que no era an la capital de Euskadi. Francisco recorri cientos de veces esta carretera fascinante y peligrosa cada vez que la noche hacia desaparecer los autobuses. Las luces intermitentes de las grandes forjas, las llamas en las chimeneas y los ladridos de los perros le acompaarn siempre.

Encore je suis un enfant (serie Homenajes), 1990. Instalacin. Muestra de Arte Joven 90. Museo de Arte Contemporneo de Madrid

Homenaje: los falsos gemelos, 1990. Instalacin. Muestra de Arte Joven 90. Museo de Arte Contemporneo de Madrid

1991 (serie Homenajes), 1991. Instalacin. Germinations VI. Galerie Nationale. Budapest

El reformatorio (Falsos gemelos), 1992. Instalacion audiovisual, 2 canales de imagen (det.). Visionarios espaoles. MNCA Reina Sofa. Madrid

Constelacin de eclipses, 1995. Instalacin (det.). Los huesos blandos. Galera Elba Bentez. Madrid

Una etapa formativa volcada en la pintura, la escultura, la msica, el sper 8: sombros presagios, la memoria, inventar polisemias. Leer. A finales de los 80, las Atmsferas-FRI eran ya misteriosas e intrigantes; la exploracin de nuevas frmulas de construccin narrativa, un impulso tentador y necesario. El tiempo, una preocupacin. El capitn deja atrs Batalla naval (Primera parte: el campo y los navos), tcnica mixta, y hace girar la nave hacia trabajos en video como Hacia el agua (1988), donde aparecen la muerte y los lmites espacio-temporales. La fragilidad, siempre. El agua en todos sus estados. Del negro al blanco. Vapores y textos en una etapa muy literaria. Entre 1990 y 1991 se instala en Pars. An en la cole Nationale Suprieure des Beaux Arts frecuenta el taller de Christian Boltansky. De la pintura al muro. Fuera y dentro. Los estados efmeros. El muro puede ser intervenido, rasgado, horadado, injertado e incluso atravesado. Las ventanas y las puertas, tambin. El espritu de las cosas y algunos muebles. Los viajes son reales e irreales. Los mundos son lquidos. La sombra alargada de El Greco aparece de manera intermitente. Todo se acelera. El primer viaje: cuatro das (1992), CICV de Montbliard. Primer libro de artista, Jardin blanc-Jardin dhiver. Escritura manual y tachones de una mano que ejercita y dibuja sobre el papel todo lo que pasa por la mente. Surge una gran exposicin en la Sala Amrica, de Vitoria (1992), donde el trnsito es el motor: incubadoras e invernaderos translcidos, humedad, electricidad y calor. Tiempo de escayolas y desequilibrios, instalaciones de espacios dobles con recorridos de ida y vuelta. Tiempo para la bsqueda vana de fronteras: lo real y lo imaginario se estn fundiendo. El Greco de nuevo. Ha quedado claro que la infancia y la adolescencia son los momentos en los cuales las mentes mezclan realidad y ficcin. Aparecen ya el Juego de los errores y las Dualidades autosemejantes. La fragilidad lo invade todo. Algunos perros transitan por sus videos. En sus imgenes no vemos seres humanos, sino fragmentos de cuerpos. Los textos acompaan a casi todo, el lenguaje y la literatura son las maneras de empezar a entender y afrontar cuanto sucede alrededor aunque a estas alturas ya sabe que el texto es una quimera. Con la primera instalacin monumental (El reformatorio Falsos gemelos) se impone el deseo de construir una casa. A partir de ah, muchas construcciones efmeras. Las instalaciones son obras que denominar como trabajos de manos sucias. Escayolas y tiritas. En 1993 se instala definitivamente en Francia. Realiza el video Las cosas simples, cerrando un bloque, y tras l empieza a trabajar en el ciclo Los lobos. La instalacin audiovisual Los paseos nocturnos (Mnagerie de Verre, Pars, 1994) sincroniza por primera vez video, audio y luz; el espectador desorientado empieza a caer en trampas. Sus trabajos en blanco, poco a poco, se cargan de eclipses: La constelacin de eclipses (Galera Elba Bentez, Madrid, 1995). Las sillas vacas aumentan en nmero y tamao. Las ausencias cada vez se hacen ms pronunciadas. Las instalaciones de manos sucias adquieren, fabricadas en la improvisacin del in situ, vida propia segn van construyndose. Por otro lado, los trabajos de manos limpias son esos videos monocanal que se edifican lentamente con el vrtigo de verse cerrados irremisiblemente. Imgenes y sonidos dan lugar a historias plagadas de dobles sentidos. De nuevo los estados transitorios. Diez, nueve, ocho, siete, seis, cinco Hipnosis! En el video Las cosas simples, el lenguaje y la literatura, el sonido extrao e inquietante y los niveles del YO haban sido largamente desarrollados. Entre lo autobiogrfico y lo potico pasa lentamente del monlogo al falso dilogo (ese en el cual las voces hablan una detrs de otra sin escucharse realmente). As pues, aparece la multiplicacin de las voces en off de la banda sonora. Con Los paseos nocturnos (versin monocanal, 1994) la naturaleza es sospechosa y la telepata tambin; hay que desconfiar tras la aparicin por primera vez del T en los textos. Quin eres t? En 1995 se compra una cmara microscopio: el mundo puede verse de cerca. Con un abismo tan prximo y fcil de atrapar, aparece el peligro-atraccin de las imgenes abstractas.9

Nuevos dispositivos y lentes tentadores irrumpirn ms tarde como recursos-instrumentos para capturar-manipular la realidad. El sentido de viaje mental que acompaa a sus trabajos puede convertirse en un viaje real. Todo desemboca en un largometraje: Los lobos (1995), un viaje inicitico real-irreal donde el tiempo se diluye orquestado por unas ciertas reglas de supervivencia. Ver y entender sin ley entrando en un estado de observacin alucinatorio. La audiencia, es decir, el t/yo, tendr que someterse. Para sobrevivir es necesario aprender los mecanismos de la violencia?. Imgenes y textos dominan un complejo laberinto audiovisual del que deberamos de saber que sus dos personajes principales (el arquetipo de gua y el de aprendiz) son mltiples.Interludio Otras dos lneas paralelas, pero no menos importantes, se dibujan en las Trayectorias-FRI desde su llegada a Francia. A partir de 1993 se involucra en la asociacin de artistas Autour de la Terre, relacionada con el video independiente y la msica electroacstica. Con este grupo (reunido para la reflexin, creacin, difusin e invencin de nuevos contextos ligados a las artes audiovisuales experimentales) ir evolucionando hasta intervenir hoy, fundamentalmente, en entornos rurales. En 2003 las cosas en este campo de trabajo se concretan con la creacin de Le Centre des Rives (el centro del borde) en Haute-Marne, en colaboracin con Ermeline Le Mzo. Tambin desde 1993 empieza a trabajar en contextos ligados a la pedagoga (talleres, seminarios, workshops). Las escuelas de Pars, Burdeos y, especialmente, la ESAD de Estrasburgo (Escuela Superior de Arte en la que es actualmente profesor) sern caldo de cultivo para poner en prctica frmulas experimentales para la transmisin del arte. El acto pedaggico debe ser un acto de creacin en todos los sentidos del trmino incluso en los ms difciles de nombrar, apunta al hablar de su territorio de investigacin con el Grupo ART3 de Estrasburgo (fundado con los artistas Pierre Mercier y Elonore Hellio en 2000). La labor de maestro le ayuda tambin a interpretar y entender otras secuencias de la vida y la creacin.

Bestiario 1, 1998. Instalacin interactiva on-off. La habitacin de lenguajes. MNCA Reina Sofa. Espacio Uno. Madrid

A finales de los aos 90, aparece el deseo de organizar los modos de hacer (ya que las series temticas siempre haban estado presentes). Surgen as las obras construidas segn el mtodo, Banco de ensayos, que se inicia en el 97 en Madrid. Todo espectador es actor para los otros, la percepcin es puesta a prueba; el que mira es mirado. Distintos experimentos en el territorio de las artes escnicas son su nuevo campo de batalla. Comienza colaboraciones con el coregrafo francs Loc Touz: A menudo en el bosque (1997), Un bloque (1997), Si hubiera lugar (1999-2000). y ms tarde establecer frtiles dilogos de creacin con el msico Christian Sbille. Las instalaciones-exposiciones se hacen tentaculares. Los sonidos de supervivencia (CAC La Ferme du Buisson, Pars, 1997) ser una muestra clave en este nuevo terreno de trabajo. Recorrer los Espacios-FRI es ahora una experiencia fsico-sensorial en lucha necesaria con la percepcin intelectual. Dejarse llevar pero a dnde? Interactividades bsicas on/off. Relaciones complejas con el visitante de la sala de espectculos. Sonidos estridentes o amenazadores. Lo extrao cotidiano. Aceleradores del inconsciente. Empieza a aparecer profusamente el trmino laboratorio como modo de exponer (Un laboratorio debe estar por debajo de un granero y por encima de una bodega, dir Diderot en su Enciclopedia). Los trabajos desarrollados desde 2001 empiezan a abrir paso a nuevas ideas. Algo est pasando. Aparecen aqu algunas nociones amorales (malas hierbas, semillas inciertas, equilibrio, inestabilidad y un inters ms agudo por los sistemas de relacin vegetales, animales y humanos).10

Sil y a lieu, 1999. Espectculo con la Compana de 391 / Loc Touz. Scne Nationale La Ferme du Buisson. Noisiel. Pars.

La edad de las serpientes (detalle). MEIAC, Badajoz 2008. Instalacin audiovisual en evolucin permanente desde 2002.

Disco duro, 2001. Instalacin interactiva on-off. Gaur Hemen Orain. Museo de Bellas Artes de Bilbao

Se fragua el libro Carnet de terrain n 1 (2003) para dar un cuerpo atemporal a todo un programa de acciones que irn desarrollndose a lo largo del tiempo y el espacio en el nuevo ciclo temtico: el Tronco Ecosistemas. Al instalarse en 1998 en Auberive, un rea extremadamente rural (tres habitantes por kilmetro cuadrado) de la Haute-Marne francesa, sus trabajos sobre la relacin de escala empiezan a adquirir sentido y, sobre todo, comienza a pensar seriamente en la ficcin del saber enciclopdico. Con Ecosistemas emprende la organizacin de subsistemas dominados por la arborescencia y la hipertextualidad. Dentro de esta especie de organizacin de materias empieza a desarrollarse el Proyecto Index con una idea de por medio: Las cosas solo existen por el hecho de nombrarlas (Jean Piaget). Index ser el laboratorio experimental para la generacin y el control de interconexiones de significados que dar lugar a una serie de acciones expositivas, editoriales y audiovisuales. Es el momento de las traducciones, los lenguajes reales o inventados. Diccionarios y glosarios inspiran, ayudan, complican y colaboran para sistematizar una realidad densa, angosta, tremendamente furtiva. Durante este perodo, algunas constataciones se imponen: El tiempo real puede ser manipulado, como en la aceleracin y ralentizacin de Predador (Muse dArt Moderne de la Ville de Paris, 2000). Los juegos y las reglas tambin son maleables: La construccin del puzzle y Sabotaje n 2 (Guggenheim Bilbao, 2000), Explicando colisiones (EACC, Castelln, 2000; Miln, 2001), El placer de cazar-se (Donostia San Sebastin 2001). Los dispositivos-de-juego-FRI devienen un campo de entrenamiento y aparecen en su obra de manera intermitente. Las normas de seguridad (una de las principales reglas del gran juego del control) pueden ser saboteadas. Looking for a place (III Bienal de Santa Fe, EE.UU., 1999), Dobles juegos. Non lieu n 2 (Ro de Janeiro, 2001). En 2000 trama un largometraje (que l quisiera amoral) sobre el espinoso tema del terrorismo. Es la poca de la muestra Roble macizo (Galera Windsor, Bilbao). Pero el tiempo se acelera de nuevo, y en 2001 las Torres Gemelas se han cado. En octubre de ese mismo ao nace de manera abrupta el video Colisiones sin ttulo y abandona el proyecto de largometraje. La exposicin y el libro Black Sky (La Gallera, Valencia) se fraguarn entre 2001 y 2003: humo de trincheras, chapapote, bombas en estaciones. Un cielo negro y falso avanza de forma acelerada. Comienzan a aparecer evidencias claras de la existencia de los discos duros. El primero, en la muestra colectiva Gaur, emen, orain (Museo de Bellas Artes, Bilbao, finales de 2001). Dispositivos de vigilancia audiovisual para capturar las anomalas del tiempo y el espacio son utilizados a partir de ahora con prolfica asiduidad. Frontalidad, circunvalacin e inmersin. Fallas en el sistema. Flashback premonitorio? Un BlueSky / Red ExiT se ver en la exposicin Trembling (Museo de la Universidad de Houston, 2002). Aqu aparece la primera idea de cielo azul certificada por la pintada en la pared de la quinta sala. Tareas de alquimista.

El placer de cazar-se, 2001. Instalacin audiovisual interactiva, dos canales de imagen (det.). Arte y ciencia. Museo de la Ciencia. San Sebastin

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Sabemos contar hasta mil haciendo un agujero, 2004. Exposicion-performance 12 h (vistas generales). Nuit blanche. Hpital Saint-Lazare. Pars

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III. http://cvc.cervantes.es/ artes/p_corrientes/expo2. htm

En estos momentos sus performances-test (otro de los modos de hacer que haban comenzado como rodajes vagabundos vinculados a acciones del Proyecto Index) cobran ms importancia pblica como espacios probeta para verificar la relacin entre lo real y lo irreal. Las acciones-test se realizan en puestos de observacin compuestos generalmente por una mesa, una silla, una mquina y una lmpara. Entre 2003 y 2006 produce el net.art Index: Glosario-Atlas para el proyecto Palabras corrientes del Instituto Cervantes.III Muy cercano, en la Nuit blanche de Paris (2004) realiza su primera ficcin urbanstica: un environnement evolutivo y una accin colectiva que evidencia en su ttulo que Sabemos contar hasta mil en el momento de hacer un agujero. Todos sus proyectos presentan un carcter tentacular e inevitablemente tienden a las apropiaciones del espacio no-musestico como campo de pruebas. El acto artstico ligado a la construccin del Collge de la Rochotte (libro lbum de trayectorias, Chaumont, 2007) pone en relacin tiempo y espacio utilizando tcnicas semietnolgicas. Con el proyecto La piedra de Nueva York (2004-2005) logra traducir una misma obra a varios gneros: del video monocanal a la performance musical (con el compositor Christian Sbille) y, ms tarde, a la instalacin interactiva. Los espacios probeta para las ficciones urbansticas siguen desarrollndose: Empujaempuja, proyecto realizado junto con Pierre Mercier en las lneas abandonadas del tren que atraviesa la ciudad de Kinshasa (Repblica Democrtica del Congo, 2007), y Eje, polo y centro, performance y exposicin para Test Madrid en Matadero (Madrid, 2005). En estas obras, el lugar imaginario se mezcla con el anlisis de la percepcin de la realidad. El zoom. Los animales, materia prima y tema intermitente en su trabajo (en este momento, particularmente los insectos), son estudiados y analizados con precisin milimtrica; con ellos el texto vuelve a cobrar importancia. Un nuevo dispositivo como interfaz: las Mesas amplificadas aparecen en la exposicin del FRAC Champagne-Ardenne (Reims, 2007), evidenciando algunas constantes en sus prximos trabajos: las instalaciones de cuartos semiabiertos, pasillos, cmaras y tneles se vuelven ms complejas en recorridos labernticos a la vez tecnolgicos y orgnicos; las mezclas de sonido se hacen invasoras. Las instalaciones, donde los tendidos de cables y parches se multiplican, son dibujos habitables. Con la gran exposicin +Insectos (CA La Panera, de Lleida Lrida, 2007) la forma y el fondo sern sincrnicos, al evidenciarse en la suite de instalaciones interconectadas las tramas de los sistemas organizativos y las microcomunidades amorales e imperfectas de los insectos. La evolucin del proyecto La edad de las serpientes (MAMC de Estrasburgo, 2002; PTA de msterdam, 2003; MEIAC de Badajoz, 2008, y ZKM de Karlsruhe, tambin en 2008) muestra una vez ms su fascinacin por los elementos conectados entre s en el espaciotiempo ficcional del temor y las dudas en un mundo peligrosamente en red. Mientras preparamos esta muestra que abarca los ltimos aos de investigacin, se infiltran el azul y el complot. El Tronco Ecosistemas ha dado lugar a BlueSky. ya no hay puertas ni ventanas, solo el velo compacto y cristalino de las pantallas interconectadas. El error. El tiempo ha desaparecido porque en un instante estn todos los tiempos. La muerte se programa, los dilogos son polifnicos y desincronizados, la contaminacin es vrica, la naturaleza muta fagocitada por un mundo dominado por mquinas que dialogan entre s y el cuadro blanco de Malevich sampleado a lo largo de los frames de sus primeros trabajos adquiere vida propia en su estertor final. Todo es mentira, hemos entrado en la era BlueSky.

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Filtros BSoDEn el primer piso del Espacio Fundacin Telefnica, la empresa BlueSky ocupa zonas no habituales como lugar expositivo. Los cristales de las grandes ventanas han sido cubiertos con vinilos azules semitrasparentes impresos con el cdigotexto Blue Screen Of Death. Las grandes serigrafas filtran la luz del da y tien con su error azul todo el espacio. 14

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rase una vez en una galaxia muy, muy lejana... (algunas pautas para la teletransportacin)

BlueSky se va fraguando dentro del eje temtico Ecosistemas y evoluciona de forma paralela hasta que, en un momento impreciso, adquiere todo el protagonismo del proyecto porque sintetiza los resultados y las vas de investigacin creativas ms frtiles y sofisticadas surgidas a partir de 2001. La tinta azul Ro-Vo-B255 de un cartucho explotado en algn momento del muelle helicoidal espacio-tiempo poco a poco ha empapado e invadido todo. Por eso no es de extraar que, siendo una de las ramas ms inquietantes del Tronco Ecosistemas, retome la idea del Laboratorio de ficciones, un organismo que piensa y se piensa en un mundo alienado por la realidad subjetiva, la manipulacin, el miedo, la autosugestin y la caza del error. Desde este laboratorio mltiple, se empieza a idear un cierto complot donde uno puede imaginarse a cientficos, artistas, poetas, filsofos o incluso economistas trabajando para intentar detectar, a travs de extraas experiencias, los tneles que entrelazan polisemias vertiginosas. La historia de BlueSky podra empezar de la misma manera que el primer captulo de la novela Neuromante, de William Gibson, quien por otra parte acu el trmino ciberespacio: El cielo sobre el puerto tena el color de una pantalla de televisor sintonizado en un canal muerto.1 Salvo que en este caso el espacio en el que transitamos es una plataforma llena de trampas para la percepcin. En nuestro planeta, el nico cielo que se manifiesta es aquel que viene perfilado por los tonos pictricos y por las historias y leyendas mtico-religiosas. Claude Lvi-Strauss ha sido uno de los pensadores que ya analizaron esta separacin entre la capa atmosfrica y la corteza terrestre como eje de referencia fsico y simblico. Con la aplicacin de las leyes de la perspectiva lineal en la primera mitad del Quattrocento, las divisiones entre el arriba y el abajo quedaron acotadas, a la par que su forma, luz y color. Fsicamente, la tonalidad del cielo se debe sobre todo a la interaccin de la luz del sol con la atmsfera. Como color, el azul ha sido siempre un smbolo de representacin y metfora. La historia del arte lo sabe y lo hizo suyo. As, no son de extraar declaraciones como esta de Renoir: Una maana uno de nosotros, careciendo de negro, se sirvi del azul: el impresionismo haba nacido,2 o que la Fondation Cartier consagrara a ello, en 1993, una exposicin, Azur, con todas sus variaciones de pantones y nombres de artistas posibles.16

1. Gibson, William, Neuromante, Barcelona, Minotauro, 1989, p. 11.

2. Renoir, Auguste, citas recogidas por G. Coquiot, en Dictionnaire de citations franaises, t. 2, Les Usuels du Robert, Paris, Robert, 1993.

Cartel de la pelcula Pierrot le fou, de Jean-Luc Godard

El azul, a la par que se manifiesta ms intenso y claro en el cielo, hace incrementar proporcionalmente el grado positivo de la afirmacin-estado, por contraste con un cielo gris cargado de nubarrones. Un cielo azul es una terapia y una puerta al paraso. El uso dado por la publicidad, polticos, sectas religiosas, cadenas de televisin y bancos da buena cuenta de ello. Un envoltorio fro para arropar la ilusin. En el polo opuesto, algunos ejemplos destacados sobre todo por afinidad y sincrona con el propsito de Francisco Ruiz de Infante. En Pierrot le fou, de Jean-Luc Godard, una triste, brillante y crptica pelcula de transicin entre dos etapas del cineasta, la pantalla se vuelve de pronto monocromtica, toda roja o azul. El azul ya no es HappyBlue, sino que se transmuta en paradigma del drama al ser utilizado en diversas asociaciones a lo largo del film, especialmente cuando Ferdinand/Pierrot/Jean-Paul Belmondo se pinta el rostro de ese color con la idea del suicidio, vinculndolo as a la desesperacin absoluta y la muerte. Como algunos saben, los ordenadores tambin se pintan de azul antes de morir (http://es.wikipedia.org/wiki/Blue_screen_of_death). Todo se fabrica en nuestro cerebro, ya lo dicen en las consignas de los libros de autoayuda; nosotros creamos nuestra propia realidad, algo que ya en otro sentido nos transmiti el viejo sofista griego Protgoras de Abdera cuando afirmaba que el hombre es la medida de todas las cosas, de las que son y las que no son. Vivimos inmersos en un gran simulacro; eso es estar en el BlueSky, reconocer que nos rodea una gigantesca holografa de un mundo catico y atomizado pero por la que an podemos deslizarnos con menos riesgos si logramos entrenar nuestra percepcin y comprender. Platn proclam que caminamos entre ser y sombra, y quizs ahora ms que nunca ambos mundos estn mezclados. Hemos sido condicionados para acatar y asumir que el mundo exterior, sus giros y seales son reales, pero el sistema de suposiciones inculcadas y que creemos verdaderas puede no serlo. Hemos visto que, a travs de sus obras, Francisco Ruiz de Infante trabaja con la percepcin en el espectador y los mecanismos receptivos. El sistema subjetivo de valores que interesaba a Jung y el lenguaje alegrico de los sueos aparecen de forma reiterada en sus piezas. Alejandro Jodorowsky insiste en que la realidad funciona como un sueo. Segn esta teora, es posible actuar durante el sueo y trabajar sobre sus contenidos; es lo que llama entrar en el sueo lcido.3 Entre el magma de imgenes de los trabajos-FRI, el espectador busca fragmentos de realidad, anclajes para reconocer algo familiar y prximo que le ayude a entender. Sin embargo, sus estrategias le orientarn a vas insospechadas. En el formalismo, movimiento ruso de teora de la literatura y crtica literaria (19141930), se abordan la ruptura de automaticidad de la percepcin y los recursos literarios que la permiten. Uno de sus primeros tericos, el escritor Viktor klovskij, introdujo el trmino extraamiento. El extraamiento parte de la concepcin del arte como un medio de experimentar el devenir del objeto,4 es decir, que la dificultad y duracin de la percepcin de la obra artstica debe prolongar sus efectos, y, para ello, es necesario crear una percepcin particular del objeto, crear su visin y no su reconocimiento.5 Se trata de llegar a la desautomatizacin de la percepcin. Como ellos, FRI se propone hacernos extraos los objetos e imgenes cotidianas, incrementando la dificultad y la extensin de la percepcin de la realidad. Esto dar lugar a la inmersin en la desautomatizacin, un estado donde el ser y su representacin, significante y significado, el espectador o lo observado se confunden. El espacio expositivo se convierte en el lugar ltimo de la transmisin y la comunicacin de la experiencia. Wittgenstein sostena que la verdad es una representacin, y la forma ms adecuada de mostrar este BlueSky es darle el formato de una empresa, entre lo real y lo imaginario, con un gran nen por delante como el de cualquier corporacin multinacional.17

3. Jodorowsky, Alejandro, Psicomagia, Barcelona, Siruela, 2004, p. 73.

4. klovskij, Viktor, El arte como artificio, en Teora de la literatura de los formalistas rusos, compilacin de Tzvetan Todorov, tr. Ana Mara Nethol, Mxico, Siglo XXI, 10 ed., 2002, pp. 60 y 65. 5. Ibid.

Francisco Ruiz de Infante crea una ficcin para hablar de ficciones en la era del storytelling. De los distintos bestsellers de storytelling se deduce una cosa: la gente no quiere informacin, lo que quiere es creer. Roland Barthes y la parisina Escuela de Altos Estudios insistan en que el relato es una de las grandes categoras del conocimiento para entender y ordenar el mundo Segn la teora del storytelling, el orden establecido, la realidad est ahora envuelta por un red narrativa que filtra las percepciones y estimula las emociones tiles [] el storytelling establece engranajes narrativos segn los cuales los individuos son conducidos a identificarse con unos modelos y conformarse con unos protocolos.6 De esta manera, las campaas publicitarias han sido sustituidas por las secuencias narrativas. Dos ejemplos claros. A partir de una ancdota de la vida de Kafka, Paul Auster retoma en su novela Brooklyn Follies la historia de una nia que haba perdido su mueca, y para la que acaba desarrollando toda una serie de aventuras con objeto de que olvide su pena y de darle a entender que, aunque lejos y con otra vida, an continua aorando a su duea. Mientras la historia sigue su curso, la realidad deja de existir. Ms prximo al mundo del arte, podemos recordar la conocida accin, en septiembre de 2003, del grupo 0100101110101101. oRG, integrado por Eva y Franco Matte, demandados por Nike, la multinacional de productos deportivos, al haber generado una alucinacin colectiva en una de las principales plazas de Viena, la Karlsplatz, donde, rebautizndola como Nikeplatz, simulaban que la firma estaba comprando los principales centros de las ciudades como operacin publicitaria. El marketing narrativo confiesa ser una empresa de sincronizacin de visiones del mundo que pueden ser antagnicas en trminos polticos o religiosos, pero que se reconcilian en el gran escenario del mercado mundial.7 La palabra propaganda es un trmino latino que alude a aquello que debe ser propagado, relativo a la fe y las creencias, misterios y milagros, no al conocimiento objetivo. Si vamos ms lejos, se reconoce como secuela estratgica de la tradicin oral de toda la vida, en las llamadas organizational storytelling, una frmula por la que la empresa viene a ser una organizacin narrativa generadora y propiciadora de relatos regulados y controlados y apoyada en la difusin viral de las historias. La ficcin se extiende por todo con las tramas ms insospechadas. Sharon GhamariTabrizi realiz un estudio sobre las convergencias y frecuentes relaciones del Pentgono, el Departamento de Defensa norteamericano, y Hollywood. Uno de los ejemplos ms conocidos se produce en el marco del Proyecto Camelot, en 1965, cuando el Departamento de Defensa encarga a Abt Associates de Cambridge, Massachusetts, un juego de simulacin destinado a prevenir y atajar una supuesta guerra civil en un pas imaginario de Amrica Latina. Este juego, llamado Poltica, se focalizaba en la figura de Salvador Allende, y en 1973 sirvi a la CIA para su accin en Chile. La idea de que la ficcin precede a lo real y de que la informacin propagada por los medios de comunicacin tambin es una realidad manipulada e inventada viene a ser algo muy extendido y asumido. La manera en la que, por ejemplo, trabaja Fox News no deja de ser un ejemplo curioso, puesto que empieza con una nota que la direccin enva a sus empleados por la que stos deciden qu historia contar como protagnica ese da. Pegan las noticias a la historia, invirtiendo el trabajo periodstico y produciendo narraciones para hacer felices a los telespectadores. Con la aparicin de nuevas maneras de narrar y transmitir como los SMS, youTube o los blogs surgen otras frmulas para crear fake news que se extienden en cadena planetaria, fabricando desde un nuevo poema indito de Neruda a informes del Vaticano sobre ovnis. Al ms puro estilo Fahrenheit 451, la sociedad infantilizada es controlada tanto por la publicidad, basada en historias de objetos y por objetos, como por los poderes fcticos que manejan con argucia el patrimonio mgico y fabulstico de los libros de J.R.R Tolkien,18

6. Salmon, Christian, Storytelling, La mquina de fabricar historias y formatear las mentes, Barcelona, Pennsula, 2008, p. 38.

7. Ibid., p. 63.

J.K. Rowling y los hermanos Grimm. Todos estos mitos y cuentos, desde El Golem a Superman, pasando por algunos tan prximos a los referentes-FRI como Alicia en el Pas de la Maravillas, Peter Pan o Pinocho, son el suero que alimenta la Gran Fbula. Como mximo exponente de todo ello ha surgido en poco tiempo un nmero incontable de series de pelculas y libros que, utilizando elementos de la fsica cuntica iniciada por Heisenberg y aderezadas con opiniones de cientficos y gurs, intentan promulgar un nuevo modelo de ciencia que induce al individuo a crear su propia realidad a travs de la voluntad. Con todos estos ingredientes, es preciso entender que los espacios expositivos del proyecto BlueSky se han configurado para convertirse en el lugar ltimo de la transmisin y la comunicacin de la experiencia, un lugar para las percepciones amplificadas. El Espacio Fundacin Telefnica, BlueSky / Laboratorio de laboratorios est constituido por una amplia serie de dispositivos que invaden las dos plantas de la Fundacin y algunos anexos insospechados. En el Centro Cultural de Espaa en Buenos Aires (CCEBA) de la calle Paran surge BlueSky / Taller de Re:presentaciones. Esta muestra acoge un gabinete de dibujos (en el sentido ms amplio, expandido y experimental del trmino) y una inquietante mediateca. El Taller del CCEBA complementa, en cierta medida explica y en todo caso da rplica a lo que ha sucedido y sucede en el Espacio Fundacin Telefnica. Todo ello constituye un recorrido de instalaciones en el cual es tenida en cuenta la dramaturgia de la visita, mediante el uso de varias estrategias: repeticin de elementos para crear ritmos y memorias visuales, utilizacin de los mismos materiales pero de diferente manera, presencia evidente y ostentosa de mquinas audiovisuales y distintos tipos de relacin con el espectador (participativa, frontal, inmersiva, discreta, espectacular). Pensemos que los componentes que la integran son: La serie de videos BlueSky, que supone un punto de inflexin en el trabajo en monocanal de Ruiz de Infante, con nuevos hallazgos e investigacin en las formas narrativas experimentales. Las instalaciones. Aunque cada una guarde independencia como laboratorio, la nocin de exposicin habitable las intercomunica (centro de mandos, biodme, banco de ensayos, banco de pruebas, acelerador de agitaciones, simulador de vuelo) y las controla entre s. Contaminacin audiovisual en espacios intermedios y residuales. Centro de documentacin, registro y divulgacin de la plataforma BlueSky (tienda, mediateca, espacios para la socializacin-compresin). Ediciones especiales, desde intervenciones en este catlogo hasta el desarrollo de salvapantallas, Internet y otros productos, como la huella-registro del proceso. Por toda la exposicin aparecen alusiones y anclajes a otras piezas realizadas con anterioridad, por ello no es una retrospectiva al uso sino un compendio de asociaciones y referencias trabajadas durante estos aos que culminan en un proyecto evolutivo. Por eso, nos sentiremos familiarizados con las frmulas de abordaje para capturar una realidad aliengena, los elementos tcnicos como recurso, su capacidad de comunicacin, la semntica de los cables o los materiales constructivos. El primer BlueSky apareci en 2002 como el reverso de Red ExiT, dos estancias contiguas en la muestra Trembling de la Blaffer Gallery del Museo de la Universidad de Houston. Un suelo negro, una pared a medio pintar, una mesa, una silla, una boca de refrigeracin (no olvidemos que es el momento de la psicosis por el ntrax), algunos focos portalmparas, una pintada en dos lneas en la pared, la sensacin de pases confrontados, perdidos y frgiles, como nuestras vidas. Con las nuevas obras, aun manteniendo constantes los estratos que activan sus sistemas de referencia y su proceso creativo, Ruiz de Infante introduce nuevos temas y recursos19

BlueSky. Espacio Fundacin Telefnica, 2009. Edificio original de la Central Juncal

BlueSky/Red ExiT. Instalacin (det.). 2002. Trembling, Blaffer Gallery. Museo de la Universidad de Houston

estilstico-visuales. Su inters por los estados transitorios (infancia/adolescencia, el agua y sus alteraciones fsicas) aparece ahora bajo nuevas inquietudes: la prdida de la energa y su transformacin, y el trnsito hacia la muerte con la idea de suicidio programado. Se denomina apoptosis al momento en el que una clula decide invertir el tiempo y reprogramarse para morir; se encoge, aniquila sus protenas bsicas y desmonta su propio ADN. Un acto de generosidad donde el suicidio da vida y que suele producirse cuando una clula detecta que su ADN est daado, es defectuoso o hay un error. Intuimos algo parecido en el trptico B.S.o.D. formado por tres videos sincronizados donde averiguaremos que tres pantallas hablan y se comunican entre s para caminar hacia su desactivacin total. La obra que se piensa, piensa, observa o es observada, se vincula a la paradoja de lo que representa y ve, aparecer diseminada por todas las estancias bajo diferentes formas, inoculando en el espectador la duda y las sospechas de que algo funciona de otra manera. En la historia del video de creacin recordamos otra pieza, Sumas y restas (1978), de Gary Hill, grabada en tiempo real, que presenta tres imgenes fijas que se alternan y cambian con los sonidos progresivamente, vibrando y superponindose. Ruiz de Infante comparte diversos puntos en comn con la obra de Hill, no slo por los experimentos en la sincronizacin de imgenes, textos y gestos o por los hallazgos relativos a la acstica y lo visual. En ambos, instalaciones y videos interrogan sobre la propia naturaleza de la percepcin; sus signos lingsticos y electrnicos se funden con aparente sencillez para indagar en las dimensiones de lo real, y a travs de ellos el video ser la herramienta de pensamiento y deconstruccin. Para Hill, el trabajo con video abarca un espacio de reflexin en el campo de la electrnica e incluye procesos de preguntas-respuestas.8 Con estos ltimos trabajos-FRI nos zambullimos, vulnerables, en el tiempo de cada obra con la nica arma de nuestros sentidos, atentos a las seales auditivas y a las pistas que pueda detectar la mirada. Nuestra retina tiene que aprender a ser rpida y reaccionar. Tal y como afirma Jacques Aumont respecto de la percepcin, estructuracin y rememoracin de la imagen: El tiempo ocular, por articulado que est en segmentos mensurables y, a veces, previsibles, no es un tiempo mecnico. Incluso las situaciones ms elementalmente experimentales demuestran que un ojo no vaga por la superficie de una imagen, sino que siempre hay una mirada que se dirige y que, las ms de las veces, es dirigida.9 Los videos (imgenes mentales reconstruidas) de la serie BlueSky son secuencias audiovisuales en el espacio, producidas especficamente para la muestra. Estos videos nos adentran en el complejo mundo de la ciberntica y se manifiestan con comportamientos formales que alteran el intra-frame, operan hipnticamente con cdigos criptogrficos y semntica en capas entrelazadas por misteriosos tneles. En esta etapa se mantienen las experiencias cotidianas, anclajes objetuales, metforas o signos entre lo onrico y lo real, pero profundizando con mayor intensidad en otras dimensiones de la percepcin de la realidad. FRI nos conduce a un estado donde intuimos que las mquinas pueden ser armas peligrosas, que atrapan con el ritmo vertiginoso de sonidos, bandas acsticas y balizas visuales. Las bandas sonoras, intensas y barrocas, incorporan ahora canciones de la cultura pop. Los textos son el canal verbal que dialoga entrecortadamente, o bien se presenta como el signo de error emisario de una historia a punto de extinguirse. Aparecen tambin con intensidad los cdigos de sonidos procedentes de sistemas de transmisin o interferencias y chasquidos emitidos por mquinas-seres que van adquiriendo protagonismo y dominando el espacio. Se interesa por estos sistemas de transmisin en un solo sentido como radares o sistemas morse donde un repetidor recibe la informacin y la transmite. Los nuevos medios de comunicacin electrnicos que se expanden tan aceleradamente desde mediados de los 90 han dejado en el olvido experimentos fallidos, a veces ocultados por la historiografa oficial, pero que abrieron20

Clula en apoptosis

8. Morgan, Robert C. (ed.), Gary Hill, Baltimore, The Johns Hopkins University Press, 2000, p. 64.

9. Aumont, Jacques, El ojo interminable, Barcelona, Paids, Coleccin Comunicacin Cine, 1997, p. 63.

Nikola Tesla en el laboratorio de Colorado Springs. Foto: Tesla Memorial Society. Nueva york

IV. Desde 2007, varios artistas de generaciones y contextos creativos diversos (Christian Sbille, Fanny Chassot, Paul Guilbert, Anne-Lise Le Gac, Olga Mesa, Felix Ramon, Lidwine Prolonge y Paul Souviron)que trabajan individualmente o en colaboracin con Ruiz de Infante en la construccin de varias de las clulas BlueSky

10. Futurismo. Manifiestos y textos, Buenos Aires, Quadrata, 2003, pp. 110 y 111.

puertas a otras formas de pensar la comunicacin. El ejemplo ms claro es el misterioso y enigmtico trabajo de Nikola Tesla, quien, adems de inventar la corriente alterna, las primeras lmparas fluorescentes de nen, la fotografa con rayos X, aplicaciones de las ondas de radio y altas frecuencias y la transmisin inalmbrica de energa, entre otros, se anticip con sus hallazgos a la robtica y las comunicaciones sin red. Una red tentacular une todas las apariciones pblicas del proyecto BlueSky. Su principal estrategia para desarrollarla es inocular actos en espacios y tiempos diversificados: exposiciones, conferencias, Internet, publicaciones, aplicacin de un determinado marketing, alianzas con otros artistas,IV evolucin de las instalaciones mutando o realizando ecos en varios contextos. Las palabras contaminacin y complicidad activan su compresin y expansin. En BlueSky son puestos a prueba los sistemas emergentes aplicados a un grupo de personas. El yo social como exponente de la idea de pensamiento colectivo, que puede ir encaminado hacia una direccin comn o desviarse. Un secreto es un concepto social. ofrece la posibilidad de generar un mundo paralelo adherido como un siams al visible. Georg Simmel, en su libro La sociologa del secreto y las sociedades secretas, analiza cmo la sociedad evolucion porque, de alguna manera, ciertos elementos pasaron a tratarse de la popularidad a la clandestinidad y, al revs, acciones privadas comenzaron a desvelarse a la luz natural de las plazas pblicas. Todas las tcnicas de control de la realidad la deforman. La idea de vigilancia de las obras que miran y se miran, del espectador que traspasa dos espacios diferentes en tiempos que se alternan y superponen es muy evidente en las dos instalaciones, que contienen sendos discos duros, el de Fundacin Telefnica y el de la sala del CCEBA-Paran. Los lugares tampoco son inocentes. La Central Telefnica Juncal, el edificio donde se asientan las salas de exposiciones de Fundacin Telefnica, fue espacio dedicado a la telefona, testigo y protagonista del avance de las comunicaciones/tecnologas en Argentina, y an hoy permanece en funcionamiento como central, abasteciendo las lneas de Barrio Norte y Recoleta. Durante la reforma del edificio para adaptarlo a espacio cultural, se resolvi que los cables visibles que atravesaban el espacio quedaran a la vista. Justo a la vuelta se encuentra la sala del Centro Cultural de Espaa; basta con doblar la esquina y cruzar la calle para sumergirse en otra rea complementaria del proyecto. Al recorrer las diversas instalaciones del complejo BlueSky el espectador se siente sobrecogido por una extraa sensacin, un percepcin fsica y psquica de que algo parece estar en progresiva mutacin, que se ha llegado a un territorio inquietante donde se est produciendo un cierto error o desequilibrio delante de nuestros ojos, un proceso de hominizacin de las mquinas. No se trata slo de una intensificacin de la idea de videovigilancia y omnivisin; de una forma muy sinuosa, apenas imperceptible, nos adentramos en el misterio del revs orgnico de las cosas y las mquinas, para confrontarnos a una situacin donde la ausencia del ser humano es demasiado evidente. En sus optimistas manifiestos los futuristas exaltaban la pasin por la velocidad y todo cuanto tuviera motor o respondiera al artificio. En uno de ellos, El hombre multiplicado y el reinado de la mquina, revelan: Es preciso preparar la futura e inevitable identificacin del hombre con el motor, facilitando y perfeccionando un cambio continuo de intuiciones, de ritmos, de instintos y de disciplinas metlicas, absolutamente ignoradas hoy de la generalidad y adivinadas slo por los espritus videntes. Siguiendo la teora de Lamarck, aspiraban a la formacin de un tipo inhumano, en el que quedarn abolidos el dolor moral, la bondad, la ternura y el amor, nicos venenos corrosivos de la inagotable energa vital, nicos interruptores de nuestra potente electricidad fisiolgica.1021

Este ser inhumano construido para una velocidad omnipresente ser cruel y agresivo y estar dotado de rganos desconocidos adaptados a las exigencias de un ambiente hecho de choques continuos.11 Entre la fe ciega y la alienacin, la historia de la cultura visual ha utilizado las mquinas como instrumentos, en su software y su hardware, encumbrndolas al pedestal. Los videoinstaladores lo han tenido claro. Hasta Wolf Vostell, declarado adversario, reconoca que si Marinetti dijo que el coche de carreras es ms bello que la Victoria de Samotracia, l se haba dado cuenta de que el televisor, el coche, el avin son esculturas de la segunda mitad del siglo XX, los objetos que influyen en nuestro comportamiento, en nuestro pensamiento y forma de ser.12 Segn la Wikipedia (gracias, Jimmy): La vida artificial es el estudio de la vida y de los sistemas artificiales que exhiben propiedades similares a los seres vivos, a travs de modelos de simulacin. Christopher Langton fue el primero en utilizar el trmino a fines de los aos 1980, cuando se celebr la Primera Conferencia Internacional de la Sntesis y Simulacin de Sistemas Vivientes. En la ciencia ficcin, la vida artificial puede desarrollar autonoma de movimientos y razonamientos, imitando el pensamiento, lo textual y un cierto comportamiento. Turing ya lo plante, y en nuestra historia hay antecedentes como el trabajo del espaol Leonardo Torres Quevedo (1852-1936), constructor de vehculos areos, submarinos teledirigidos y autmatas. Sus ajedrecistas, realizados entre 1912 y 1920 para resolver y actuar segn las circunstancias, eran estructuras capaces de reproducir el comportamiento humano. El test de Voight-Kampff, que es el que aparece al comienzo de Blade Runner, se basa en la presunta reaccin fisiolgica de un androide, un ser creado artificialmente. El test de Turing es un prueba muy simple mediante la cual, colocando en dos habitaciones distintas a un hombre y una mquina, un juez externo sera capaz de detectar mediante preguntas concretas quin es el hombre y cul la mquina. Para que una mquina supere estas pruebas debera ser capaz de desarrollar una comunicacin fluida mediante el lenguaje, poder representar el conocimiento, responder automticamente, adaptarse a nuevas situaciones y manifestar la opcin de aprender. Sin embargo, si observamos la manera automtica de construir la poesa, los resultados son bien parecidos, con lo cual las preguntas y las pruebas frente a una pantalla podran quedar sin demostrar. En BlueSky la telepresencia nos sita en el espacio de la desmaterializacin, donde la acumulacin de los mensajes revela la ausencia de los mensajeros. En el territorio de las simulaciones, el espectador atento comenzar a descubrir y entender este mundo de vida sinttica y sus consignas. Luego, slo queda, como anuncia el manifiesto Desenfocar, de Lars von Trier, tomar posiciones y abrocharse los cinturones: Nos encontramos en busca de una cosa ficcional, no factual. Al estar la ficcin limitada por nuestra imaginacin, y los hechos por nuestra perspicacia, la parte del mundo que buscamos no puede delimitarse con una historia o enfocarse segn un ngulo.13 Las preguntas simples se transforman en complejas: El cielo es azul? Con BlueSky nos adentramos en una zona inexplorada, no slo el espacio ubicuo, efmero, polidrico y evolutivo de los laboratorios-instalaciones creados por Ruiz de Infante, sino en una sofisticada plataforma de libertad y ruptura, de cdigos y conjuros sin desvelar por los que el autor (y sus cmplices) avanzan y nos arrastran. To be continued

11. Ibid.

12. Wolf Vostell, para el programa de RTVE El arte del video, serie dirigida por Prez ornia, 1991.

13. Von Trier, Lars, Dfocaliser, Rageleje, 22 marzo de 2000 (www.films-sans-frontieres. fr/5obstructions/voila.swf).

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Nota de la autora: Estos textos son la primera y cuarta parte de un bloque denominado Ruiz de Infante en la era BlueSky (Anlisis y evolucin de su obra creativa), fueron escritos entre 2008 y 2009 y desarrollados a raz de diversos encuentros con Francisco Ruiz de Infante entre 2006 y 2009 en Vitoria-Gasteiz, Buenos Aires, Madrid, Reims y Auberive.

Nekane Aramburu es historiadora del arte y mster en museologa. Desde 1992 trabajacomo gestora y comisaria focalizada en la cultura como laboratorio de exploracin y comprensin de los contextos sociales y el mundo en el que vivimos, a partir de proyectos tentaculares entre espacios no convencionales y el museo. Especializada en prcticas creativas transmediales y ecosistemas territoriales glocales. Entre sus proyectos destacan: Trasforma (1992-2003); Historias del dolor (1994-1995); Red Arte (1994-1998); Seminarios Arte Electrnico (1997-2002); Arquitectura industrial (1999-2001); Editarte, In & Out, Artium (2004-2005); Generacin digital (2003-2007); Territorios mutantes, Cendeac (2005); Primeros auxilios y cuidados intensivos, Montehermoso (2007); Simbiocity, Tabakalera (2008). Comisariados recientes: Otras resonancias, Estudio Abierto, Buenos Aires (2006); Sintopas/ Palabras corrientes, Instituto Cervantes, Pekn (2007), Nueva york (2008); Una larga y profunda mirada, Fotoencuentros, Murcia (2007); Sobre puentes, ventanas, calles y fantasmas, Arteko, Donostia (2008); Artistas noveles, Koldo Mitxelena, Donostia; Absolute Beginners, Sala Amrica, Vitoria-Gasteiz (2009). Diversos cursos y conferencias en centros privados, universidades y foros nacionales e internacionales (La Friche de Mai, Marsella; Southern Exposure, San Francisco; Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofa, Madrid; Festival observatori, Valencia; Museo de Antioqua, Medelln, etc.). Proyectos editoriales y colaboraciones como asesora y escritora. Libros: Encuentros de arte actual, Red Arte y colectivos independientes en el Estado espaol (Fundacin Arte y Derecho, 1997), Arte espaol y latinoamericano en el extranjero 1990-2006 (Plaza & Jans, 2006), Un lugar bajo el sol (CCEBA, 2006-2008), Historia del videoarte en Espaa (2009), entre otros. Paralelamente tiene a su cargo Espacio Ciudad. Centro de arquitectura y urbanismo para la ciudad contempornea del Ayuntamiento de Vitoria-Gasteiz (Pas Vasco).

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Lo humano prisionero del cielo?Marie-Jos Mondzain

Qu riesgo asumido, incluso qu pretensin, haber accedido a la propuesta de escribir acerca de una obra de Francisco Ruiz de Infante sin haberla visto an realmente en su emplazamiento, en su despliegue espacial, en su concrecin tcnica tal como los espectadores argentinos la vern aparecer en Buenos Aires! Sin embargo, la apuesta es estimulante, en el sentido de que las operaciones imaginarias que esta gran instalacin pone en marcha son sorprendentes ya desde la formulacin del proyecto. Como siempre, Francisco redacta y dibuja un verdadero plano de realizacin, de la misma manera que un arquitecto construye mental y grficamente el edificio que pronto ocupar un lugar en el espacio pblico. Pero tambin a imagen de la relacin que puede tener un director de orquesta con una partitura cuya lectura ya le da a entender lo que va a hacer escuchar. Por todas estas razones, me nutr tanto con el proyecto como con la memoria de las obras anteriores que hallaron su nuevo lugar en este dispositivo, sin embargo indito. El diseo del proyecto podra figurar fcilmente entre las abundantes producciones que componen BlueSky. Forma por completo parte de l. Los cuadernos preparatorios, los diarios de a bordo que prevn y disponen, las notas, los croquis son otros tantos testigos de que BlueSky es una produccin de manos creadoras activas. Esas manos y esos gestos de los dedos tienen una fuerte presencia en el corazn de las imgenes. Es la primera paradoja: el artista trabaja con sus manos y con sus ojos, se dirige a nuestra mirada, a menudo a todo nuestro cuerpo, en el momento mismo en que interroga la realidad y la necesidad de nuestra presencia en el centro de un dispositivo abandonado por la presencia de los cuerpos y la carne de las cosas. La verdadera dificultad est en otra parte: esta obra opera no como un objeto cuya realizacin final se prev, se espera y luego se acoge, sino, para hablar con propiedad, como un acontecimiento ininterrumpido. Hablo de acontecimiento no solamente porque toda verdadera creacin merece, en un sentido, ser recibida como el surgimiento en lo real de una materia sensible y de un pensamiento totalmente imprevisible, sino que entiendo aqu por acontecimiento lo que constituye la sustancia misma de los gestos que hacen que se torne visible una presencia definitivamente, intrnsecamente incontrolable, aleatoria. Si aqu hay acontecimiento, es en el sentido en que tiene lugar lo irrepetible, la modificacin. Es una combinacin sorprendente de la ciencia programadora y de la cultura de la perturbacin. Desde luego, la palabra laboratorio podra hacer creer que, fiel a los usos de la ciencia, lo que tiene lugar tiende a pasar de la experimentacin a la expresin de leyes universales e inmutables. Pero el terreno designado por ese trmino en BlueSky es el de las bodas de lo aleatorio con el universo electrnico de las mquinas, aquellas que cuentan, aquellas que informan, aquellas que hacen ver; en una palabra, todas las40

mquinas que las tecnologas y las industrias de la programacin utilizan a partir de ahora para producir y controlar lo real sin nosotros. Ahora bien, en BlueSky se trata ms bien de lo que no va a dejar de suceder en el tiempo y en el espacio de su despliegue. Debo, entonces, apelar a mi memoria tanto como a mi imaginacin, puesto que BlueSky rene varios aos de creacin y de reflexin acerca de un nmero definido de temas que forman una especie de espiral indita en torno de un ncleo de energa. En ese metalaboratorio que pone en crisis la lgica de todos los laboratorios se componen dos temporalidades: la de una realizacin de una pluralidad de propuestas y la inaugural de un punto de partida para un sistema no cerrado, porque es indeterminado e infinito. La espiral contina y los dispositivos se enredan, se responden o se repiten como los motivos de una composicin fractal que juega con las formas y con las escalas. Aqu la escritura, la ma, no podr sino ser infiel a lo que en esa creacin est marcado por la indeterminacin y la aventura de los encuentros, de las ocurrencias y de las conjunciones azarosas que son los posibles de esa vasta propuesta. La escritura va a pasearse, pues, entre la memoria de lo ya visto, las esperas cmplices y las fantasas de la anticipacin. Un ejercicio de asociacin libre que se sabe dirigida por una mano a veces imperiosa, otras imperceptible y como ausente. Es una mano astuta. La creacin producida bajo el ttulo de BlueSky / Laboratorio de laboratorios, opera un gesto cosmolgico. Esta formidable instalacin resume y vuelve a transitar, tornndolos ms complejos, muchos aspectos de las obras precedentes de Ruiz de Infante que han sido expuestas desde hace casi veinte aos en varios lugares del mundo. Sin embargo, este nuevo agrupamiento desplaza la problemtica obsesiva de esta gran obra: dnde estamos en el mundo que producimos cuando ya no somos ms que un producto de ese mundo? El reajuste de las partes, la invencin de conexiones nuevas y, sobre todo, el inmenso toldo impalpable del azul que se anuncia como el plano de inscripcin de lo visible y de su desaparicin componen la ambicin antropolgica y cosmolgica del proyecto. BlueSky se hace cargo, bajo una multitud de figuras, de las relaciones entre el estado presente del mundo y el destino ntimo del sujeto humano e incluso de todo ser viviente. La obra parece asumir un carcter de generalidad mundial. Tiende a hacer resonar los inconmensurables registros de una energa universal, tanto bajo el signo de una exploracin potica como de una alarma relativa a la supervivencia del sentido. Se asiste as a una escenografa compleja que parte de la vida ms elemental, de los microsistemas, testigos de la respiracin secreta de lo nfimo, hasta la puesta en escena de los mecanismos ms sofisticados de la produccin cientfica y de las tecnologas industriales. De lo colosal a lo microscpico, es como si una energa nica e invisible, diseminada por todas partes y, en cada caso, a pesar de todo, singular, inervara la totalidad del mundo, su historia y los enigmas amenazantes y prometedores del futuro. Un vaivn, una pulsacin de la que no se sabra decir si se origina en un cuerpo viviente o en una mquina sin alma. La energa de los electrones se torna flujo vitalista e, inversamente, las fuerzas invocadas de la vida, vegetal, animal o humana, son inseparables del flujo abstracto de las cifras, de los clculos y de los controles ms desencarnados. Extraa hibridacin de lo humano y de lo inhumano, de la vida y de la muerte. Se trata de una quimera, inventada como los monstruos engendrados por los sueos de la noche. Con la diferencia, paradjica y decisiva, de que el tiempo de los monstruos, el de los sueos, se despliega habitualmente sobre un fondo nocturno y tenebroso, mientras que aqu lo irreal del presente, como el fantasma, reluce en el resplandor opaco y vaco de un cielo de un azul intenso. El color del cielo ya no debe nada al aire y al sol. Puede un universo sin sombra albergar an el pensamiento? El color azul, portador de insondables promesas y de navegaciones aventuradas desde hace milenios, ese velo celeste del que se aduearon la astronoma, la metafsica y la teologa, todo eso se ha convertido en la tela, la pantalla y el sudario de nuestros sueos. El azul inhabitado es ahora el ndice cromtico de todas las desapariciones y de la muerte. El vaco es, por primera vez, hermano de la opacidad. BlueSky of death.41

Pero nada es tan simple, pues BlueSky nos embarca en una expedicin desbordante de cambios imprevisibles. El hilo del pensamiento est presente all en la maraa de los cables que transportan y transmiten el poder invisible de fuerzas contradictorias. La muerte y la vida dialogan sin fin y ninguna tiene la ltima palabra. Qu riesgo, deca, el de hablar sin haber visto! Ahora comprendo mejor la completa pertinencia de mi propio gesto: escribir forma parte, en la simplicidad artesanal del gesto, de esos incontables movimientos de las manos que pueblan el mundo, lo sufren y lo transforman. La escritura es hermana de todo movimiento, del que hace que se agiten los prpados de una vaca, del que hace ladrar a un perro, oscilar una tabla, transmitir corriente elctrica, producir ondas, emitir seales electrnicas. Todo movimiento, sea cual fuere, es a la vez fruto del azar, persecucin de un riesgo, consecuencia de una determinacin, a veces voluntaria, a veces totalmente sometida al control, o vuelta maquinal. Cuando uno se acerca a BlueSky desde al campo de la filosofa, no puede sino reconocer el espacio de una domiciliacin familiar. Pienso en una especie de gigantesca encarnacin aristotlica que hubiera captado de lleno la cuestin principal del aristotelismo: la articulacin de la metafsica con la fsica, pero aqu no ya como problema que recae en el discurso y la razn, sino en los gestos productivos que articulan las materias sensibles ms antiguas y ms recientes. Si todo saber es saber de una relacin, desde ahora las relaciones son abundantes e inciertas, puesto que la lgica de lo visible no es la de la necesidad. El mundo es movimiento, el espacio nace de la temporalidad de todos los desplazamientos Todo no es otra cosa que transformaciones, mutaciones, metamorfosis. Pero las figuras de la eternidad son perecederas y se sustituyen unas a otras a lo largo de los siglos. El mundo es slo la infinidad indeterminada de todos los desplazamientos determinados en una historia de las formas inseparable de la historia de las materias. La gran diferencia con la ambicin aristotlica es que todo eso no tiene lugar bajo la divina esfera de los astros fijos cuya celeste presencia daba testimonio de la matemtica universal, de la armona musical e inaudita de la bveda que nos gobierna. El azul del ter ya no es promesa de inmovilidad eterna. El azul del cielo est atrapado aqu en la misma violencia estocstica de todo lo que nos sucede y de todo lo que producimos. El principio de aparicin del mundo, la luz, no se convertira bajo nuestros ojos en la materia de su desaparicin? La mirada debe hacer el aprendizaje de la nueva elasticidad del universo, y BlueSky nos somete a la prueba de una inmensa maqueta del destino moderno. La muestra de Francisco Ruiz de Infante expone nuestra situacin actual en el cosmos, pero en el mismo movimiento pone en escena una cuestin ms amenazante: en qu ese mundo, precisamente, el nuestro, nos expone a nuestra vez? La aparicin del hombre en la gran aventura de los movimientos del mundo se vuelve brutalmente un elemento precario, tal vez provisional. Esa gigantesca movilizacin de los desplazamientos, de los choques, de los movimientos que nos vieron nacer y que quiz veremos desaparecer. Remplazar la antigua mitologa del cosmos por el imaginario electrnico, abrir ese imaginario como una obra en construccin, como un terreno de ensayos doblemente rondado por la vigilancia y por la incertidumbre, hablar de laboratorio; he aqu otros tantos indicios que transforman las cuestiones metafsicas: esas cuestiones ya no conciernen a la relacin de los hombres con los dioses o con el imperio de las ideas, sino que son un asunto estricto de conexiones, de transmisiones, de continuidades y de sncopas inscritas en el espacio de los cuerpos. y, sin embargo, esos cuerpos, los nuestros, siguen buscando entre los cielos vacos los espacios de tinieblas donde an murmuran sus deseos. De all la riqueza enigmtica de esas bandas de sonido donde voces, suspiros, ruidos familiares, frases, se deslizan como fantasmas irreductibles, huellas resistentes de la vida del sentido. Todos esos signos son la msica de la sombra. Pero cul es, entonces, nuestra msica hoy? La msica de nuestro mundo, nuestra msica, como la llama Jean-Luc Godard, ya no es la de las42

Esferas, sino una rapsodia azulada cuyo color ya no proviene de algn estado del cielo o del alma, sino de una respiracin tcnica producida por un gran cuerpo de metal y de hilos. Ese cuerpo arrastra al nuestro a un laberinto de corredores, hacia cmaras nupciales sin lecho, salas de espera llenas de pantallas que distribuyen todas las declinaciones de la seal. Nuestra msica es todava audible? La seal de ajuste, el azul, indicacin emitida desde la nada hacia la nada, ubica de pronto al espectador en una expectacin sin porvenir, un suspenso del sentido, una catstrofe indolora. Cuntos pensadores y poetas elogiaron en otros tiempos el desperfecto para reconocer en l las posibilidades de la libertad, las figuras de la turbulencia? Retenido o expulsado, fascinado o excluido, hoy el visitante se bambolea en un mundo del cual es ora el demiurgo, ora el perturbador o aun la pieza sobrante, incluso intil. El azul del cielo es el azul de la inmersin. Si se corre, como caro, el riesgo mortal de ir a las alturas para volar, no es sino para conocer el naufragio asfixiante de las profundidades del ahogamiento. Pero Ddalo, su padre, ingeniero tan sabio como prudente, conoca el arte de atravesar el cielo sin hallar en l la muerte. BlueSky es, pues, tambin el nombre de una tentacin milenaria que engendra tanto la felicidad como la desgracia. Quin no asocia el azul con la fantasa del vuelo? El azul, deca una vez un bilogo, es el color de los venenos. Ahora bien, es sabido que los venenos tambin curan: los griegos llamaban pharmakon tanto al veneno como al remedio, de all vienen las dos cabezas de la serpiente hipocrtica. Es el color del vuelo o el del naufragio? Qu sucede entonces con ese azul del cielo que aqu hace referencia a todo lo que se vuelve la materia del sueo y a todo lo que puede convertirse sbitamente en la tela ms venenosa tejida por nuestras pesadillas? Cul es la pesadilla que devora al hombre moderno? Uno tiene, por cierto, la sensacin de que en el ambicioso proyecto de BlueSky est en juego, como se ha dicho, algo eminentemente metafsico, a condicin de precisar tambin que la esencia misma de las grandes empresas metafsicas est ausente all, e incluso como resueltamente expulsada. La edad de la tcnica ha puesto al hombre al margen de sus propias empresas, y esta comprobacin melanclica ha alimentado muchas filosofas que no hallaron a esto otro remedio que rehabilitar las retricas de la salvacin. All est el dato decisivo de la nueva distribucin de los poderes. Creyendo ver la desaparicin del hombre, se convoca a los dioses para hacerlo reaparecer. En la creacin contempornea, y particularmente en el campo audiovisual y plstico, reina una especie de inquietud y de alarma que no obedece nicamente a la dificultad para los artistas de asegurar su supervivencia y asumir su vocacin. La mundializacin econmica o la globalizacin de la informacin parecen deshumanizar el mundo y provocar, a causa de ello, una movilizacin neohumanista. Habra que salvar al hombre de un naufragio, incluso de su desaparicin. El lxico del salvamento en todos los mbitos de la actividad cultural y cientfica es el recurso ms pobre de quienes se creen desde ahora impotentes. Inversamente, quienes denuncian a esos nuevos salvadores de la humanidad, los entusiastas de la nueva situacin, consideran a los primeros cobardes reaccionarios, incapaces de asumir las alegras y los sabores del nuevo mundo. Habra, al contrario piensan, que acoger jubilosamente ese advenimiento glorioso de una nueva especie antropolgica liberada de todos los arcasmos que la estorban. Los films de ciencia ficcin anticiparon esta visin futurista, adoptando ya el tono de la catstrofe, ya el de la embriaguez y el triunfo. Revoquemos esa doble ingenuidad. Las cosas son, en realidad, mucho menos simples, y es un efecto importante de BlueSky el ponernos en presencia de un cuestionamiento desprovisto de todo maniquesmo, de todo triunfalismo ingenuo pero tambin de todo alegato en favor de una regresin salvadora. Es ms bien una navegacin incierta en el centro de todos los cuestionamientos. Lo real que hoy nos pone a prueba es esencialmente contradictorio. BlueSky nos permite considerar la intrincacin reticular de todos los niveles del gran laboratorio de la vida y del43

mundo moderno. Se trata de un estado de situacin que considera, sin oponerlos, tanto los movimientos ntimos e nfimos de los organismos vivos como los movimientos ordenados y desordenados de las cosas en medio de las cuales se despliega esa vida bajo la mirada de los hombres y de sus mquinas. El movimiento de las cosas, como el de los seres vivos, est explcitamente cautivo de nuestros instrumentos, pero contina estando habitado por el pensamiento, por la palabra, aunque tambin por el deseo y las fuerzas sin palabras. El maestro de obras parte de un tema que da el tono: pongamos un cabello, hormigas, moscas, una serpiente, o bien un lavabo, una mano, un objetivo, un time code, un huevo, poco importa, pues lo real nace en cualquier instante en cualquier cosa, sin discriminacin ni jerarqua. El montaje elige cada vez un tempo que organiza la tonalidad y el ritmo de las percusiones, de los centelleos, de las precipitaciones, y el ojo del espectador es arrastrado en un torbellino existencial, regocijante y amenazador. El artista opera como un director de orquesta que se apropia a cada instante de las propuestas presentadas por la vida de las cosas y por el flujo tecnolgico que las hace aparecer y metamorfosearse en una pantalla. BlueSky es tambin cuestin de odo. El espectador penetra en jaulas que no lo encierran, atraviesa corredores que no imponen ningn destino, puede sentarse para asistir a un momento de la vida del mundo o bien negarse a detenerse; es ms bien una envoltura sonora que rodea su ruta, pero que tambin va a despistarlo. Los recorridos son errticos entre mdulos rigurosamente configurados, entre estrpito y murmullo. Cit antes a Aristteles. Ahora pienso en esa descripcin del mundo de Epicuro de la cual Lucrecio hizo un magnfico poema, De natura rerum, de la naturaleza de las cosas. La cosas designan todo lo que se mueve en el cielo, en la tierra y debajo de ella. Res, en latn, da a entender el peso compacto de lo real y el universo de las causas necesarias o accidentales. y nosotros tambin somos cosas entre esas cosas; nuestros movimientos son los de nuestros tomos que caen como lluvia sin verticalidad. La inclinacin de las cadas, el azar de los choques, la bondad de los encuentros, la enemistad de las colisiones: ah est el mundo que es el nuestro y del cual formamos parte. Visin materialista que no se preocupa por la soberana del azul, como tampoco el azul se preocupa por nosotros. BlueSky retoma, a su manera, ese materialismo al pie de la letra, pero aqu hay que captar la nueva tonalidad poltica. Caemos bajo el poder atmico y tcnico de las cosas o sabremos, por nuestra sola presencia, modificar su curso, resistir al dominio industrial de una economa desubjetivizada? La era atmica ha tomado a partir de ahora un sentido muy diferente para designar nuestra capacidad de hacernos desaparecer a nosotros mismos. Esa comprobacin est en el centro de la meditacin del filsofo Gnther Anders cuando habla de la obsolescencia del hombre despus de Hiroshima. En dnde estamos hoy? Sobre qu frgil hiptesis reposa nuestra perennidad? BlueSky nos hace oscilar irnicamente entre las propuestas ldicas y el anuncio del desastre. Nos incumbira, pues, reapropiarnos de nuestro poder sobre lo real. Es justamente de lo que se trata en el paseo que nos hace atravesar la exposicin. Es una escenografa de nuestra aniquilacin o una oferta de emancipacin? Existen futurologas que nos privan de todo porvenir. No es ste precisamente el caso aqu. La exposicin slo se sostiene con el desplazamiento del espectador, y nadie est obligado a permanecer. Cada uno acumula experiencias cuyo sentido le queda por componer y cuyos encadenamientos debe hacer o deshacer. En tiempos ms antiguos, cuando uno se liberaba de los dioses, era casi siempre para devolver al hombre los poderes de los cuales lo privaba la creencia en las divinidades. Hoy es muy distinto. Un mundo sin dioses parece conducir a encarar en adelante un mundo sin hombre. Si el cielo est vaco, si el hombre est ausente, tenemos que afligirnos por ello o convertirlo en el fermento de una nueva emancipacin? Volvamos a BlueSky: ninguna nostalgia, ninguna sacralizacin de lo visible ni de la tcnica. Nada ms en el cielo, nada44

ms en los cielos. La materia celeste es industrial y su uso semntico ratifica el vaco de toda eternidad en el ter. Nos resta hallar al hombre, aun cuando sea sin intencin de salvarlo. Sobre todo con esa condicin. Descubrir a travs de todas las instalaciones la pulsacin del deseo, sus incertidumbres, sus metforas secretas, no es descubrir la omnipresencia irrecusable de una energa pensante y deseante a la vez? Una silla de madera en bruto delante de una pantalla que centellea con propuestas inestables, una mezcla de cables que recorren en forma visible lugares de estimulaciones, de temblores, de deslumbramientos orgnicos basta con abandonarse como un paseante sorprendido y encantado con las sorpresas metaforizadas de su propia anatoma. As se construye para el espectador el campo de experimentacin de un mundo del cual est ausente y que, al mismo tiempo, opera como la visita de su cuerpo en movimiento. El afuera y el adentro se interpenetran y las pantallas forman una pelcula receptiva como una epidermis electrnica. Nosotros mismos somos verdaderos laboratorios, espacios alqumicos donde las cosas y sus imgenes se transforman sin cesar en funcin de nuestras apariciones y nuestras desapariciones proyectadas en forma pulstil en todo el espacio de la muestra. Que por momentos funciona como un espacio endoscpico. De all la extraa y fascinante paradoja de ese gran cuerpo que es la exposicin misma. El espectador se convierte en su elemento excedente en el mismo movimiento que hace de l la materia prima de una experimentacin relativa a las nuevas figuras de su existencia. En el universo tecnolgico e hipersofisticado de las industrias de la comunicacin y de la informacin, el hombre es una seal entre otras, y cuando produce la seal azul de su ausencia, de toda ausencia, lo que est en juego es como una risa a la vez inquieta e inquietante. Una inquietante extraeza, Unheimlich, impensada por Freud, que abandon a los dioses por la omnipotencia del lenguaje y por la liberacin del deseo de los sujetos. Aqu el lenguaje no goza de ninguna prerrogativa. La imagen toma el poder, la pantalla plantea sus condiciones, la visin no disocia en ninguna parte lo visible de lo legible. La ausencia del hombre es la condicin de su desplazamiento invisible, subrepticio y clandestino. La excedencia del espectador, su contingencia, abre justamente todos los encuentros con esa presencia clandestina. Desde ahora, bajo las luces espectaculares de las nuevas industrias celestes, el hombre es un paseante irreconocible, un pasajero irnico o rebelde, una resistencia en el circuito de los impulsos controlados y previstos. La distribucin de los espacios de desplazamiento del visitante hace de ese laboratorio de laboratorios un itinerario experimental. La dimensin dramtica es all crucial: las iniciales B.S.o.D. (blue screen of death), que aparecen en una cierta cantidad de propuestas visuales y sonoras, significan, como se nos recuerda a modo de lema, que ese azul de la pantalla es desplegado por el sistema de explotacin cuando ste no puede recuperarse de un error o cuando est en un punto crtico de error fatal. Ese punto de partida es el dato decisivo a partir del cual van a declinarse todas las figuras del placer y del terror. A veces los dedos que sostienen una pequea serpiente la pasean por espacios heterogneos: el de la naturaleza, el de la captura, el de la experimentacin, el de la domesticacin o el de una tierna atencin. Esa vida minscula parece soportar la presin de una fuerte dominacin y a la vez resistir el borrado de su especificidad imprevisible. El animal, bajo los dedos de su manipulador, disfruta imperturbablemente de su irreductible autoafirmacin. Est por cierto all, sinuoso y sensible, entre indiferencia y vigilancia, entre libertad y servidumbre. Aparicin indecidible que resiste a todo borrado. Ahora bien, ese breve guin nos hace caer de golpe en la atmsfera legendaria de un romance muy humano: la voz que canta Qu ser, ser transforma el extrao episodio en drama de la vida, en enigma biogrfico, en cantinela casi infantil. Qu mano nos sostiene as sobre el vaco, nos conduce al encierro o nos devuelve a la tierra? Nos convertimos en pequesima serpiente. Es en tales puestas en escena donde BlueSky adquiere de pronto y repetidas veces su dimensin alegrica, en breves dramaturgias del devenir humano del animal o del vegetal, a menos que se trate,45

inversamente, del devenir animal o planta del propio humano. En otro lugar, es en presencia de perros; en otro ms, en la fuga de un pjaro. En esos juegos de confusin de las especies y de los gneros, la atencin dirigida por el artista a los insectos ya ha sido, desde hace varios aos, objeto de creaciones e instalaciones. Los pequeos organismos vivos construyen un mundo, lo organizan a su vez y se desplazan en l segn el orden de un saber invisible. Ese saber orgnico hiperactivo est habitado por el rigor y la precisin que exige la supervivencia. Sbitamente, bajo el ojo del objetivo, esta agitada actividad adquiere una dimensin antropolgica. El laboratorio de la vida y el de la muerte de los humanos son atrapados en una contigidad desconcertante: el espacio en el cual esas vidas minsculas estn cautivas y condenadas es tambin el lugar artificial de su observacin paciente y respetuosa. La interrogacin de la mirada ya no sabe dnde situar el placer de su asombro, entre el disfrute de lo heterogneo y la angustia de la confrontacin con nuestra propia imagen. Las manos que manipulan y hacen ver parecen pertenecer a un universo de gigantes. En una gran cantidad de films, estn presentes esas manos que imponen una presencia tctil, interrogadora, simultneamente todopoderosa y torpe; no cabe duda de que la marca de ese impresionante laboratorio consiste en introducirnos como una pieza maestra y contradictoria de un vasto ecosistema donde se juega a cada instante una figura de nuestra identidad y de nuestra contingencia. Al ver esos insectos, yo pensaba en el mundo arcnido descrito por Fernand Deligny cuando quiso caracterizar el espacio de circulacin y de expresin de los nios autistas. En su silencio de naturaleza casi animal, esos nios sin palabra trazan, en sus vagabundeos en el espacio, una madeja de lneas que forman una red arcnida de referencias y trayectorias. Inscriben as en sus desplazamientos y su repeticin lneas de deambulacin, el tejido viviente del cual ellos mismos constituyen las fibras intrnsecas, el rgano indisociable y operante. As, en BlueSky el espectador se convierte, en medio de sus desplazamientos silenciosos y atentos, en el creador de trayectorias y de redes significantes a la vez programadas e imprevisibles. Tal es la propuesta fecunda y paradjica de esta exposicin que nos exige seguir o no las previsiones del creador, perturbarlas con nuestra presencia sin dejar de sentir intensamente la escenografa de nuestra elisin, incluso de nuestra expulsin. En la pelcula titulada Apprendre compter (Aprender a contar), las cosas se tornan brutalmente explcitas mediante la dramatizacin crtica de las palabras que se oyen y la resonancia humorstica de su estribillo: Todo debe ser perfecto, Lo conseguir y, finalmente: Algo no funciona. La mecnica cuchicheante del desafo contable es acosada por turno por la ambicin del triunfo y por la comprobacin de la inadecuacin indefinida de esa misma ambicin al murmullo del deseo. Ren Char escribi en una ocasin: Nmero, sombra negada. La numeracin frentica es invadida sbitamente por la sombra. Son las mquinas humanas las que producen la noche. BlueSky me parece enteramente atravesado por esa atmsfera ssmica donde el imperio industrial y cientfico de las conexiones es, incesantemente y tal vez para siempre, inseparable de la violencia pulsional del deseo que empuja a los sujetos humanos a explorar para conquistar, a ponerse en peligro para saborear las alegras infantiles e inalterables de la desaparicin y la aparicin. La rtmica que atraviesa todas las propuestas no deja de evocar las turbulencias del free jazz, donde se combinan los juegos sabios de las propuestas temticas y las explosiones improvisadas que hacen de cada interpretacin una forma deducida y una hiptesis frgil. Lo mismo sucede, sin duda, con el paseante espectador, quien en cada visita redescubrir un mundo en el que an no haba pensado y del que va a apropiarse. Esa apertura indefinida de los dispositivos otorga al conjunto su dimensin poltica, la que remite a cada uno de nosotros a su capacidad de apropiacin y de distanciamiento del mundo que quiere compartir sin correr el riesgo del naufragio o de la inmersin.

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Marie-Jos Mondzain es directora emrita de Investigaciones del Centre National de la Recherche Scientifique (CNRS), Institut Marcel Mauss, Grupo de Sociologa Poltica y Moral; miembro del Consejo Cientfico del Collge International de Philosophie y de la asociacin de estudios teatrales Sans Cible, y directora del grupo de investigacin sobre la imagen oBI (observatoire des Images Contemporaines), Francia. Trabaja en el anlisis de la imagen y de las producciones visibles como problema especfico de la filosofa en sus implicaciones especulativas y polticas. Partiendo de una investigacin histrica y filolgica en el mbito bizantino y esencialmente patrstico (hasta la crisis de la iconoclasia), desarroll progresivamente la problemtica de lo visible y de la imagen hasta la poca contempornea, incluyendo el campo de las nuevas tecnologas de la imagen. El punto fundamental, circunscrito a partir del anlisis de la economa patrstica, es la gestin y la administracin de las visibilidades por el poder poltico dentro de las comunidades. As se perfil la exigencia tica y poltica propia de todo rgimen pasional puesto en movimiento por la imagen. Mondzain sigui sus etapas desde la Edad Media y el Renacimiento hasta los umbrales del siglo XXI para determinar los efectos de continuidad y de ruptura. Los ejes actuales de su labor se relacionan con nuevas vertientes; una de ellas se refiere a las fuentes arcaicas de la representacin (anlisis de los documentos prehistricos relativos a la imagen y trabajo orientado al campo del psicoanlisis). En ese sentido, procura inscribir las operaciones con la imagen en la filognesis y la ontognesis de un terreno antropolgico libre de toda referencia teolgica y religiosa. otra vertiente se vincula a los problemas de educacin de la mirada frente a las producciones plsticas y audiovisuales. Realiza esa tarea en colaboracin con maestros y en contacto con los nios. A ello se agrega una colaboracin regular con realizadores de cine y directores de teatro (seminario de formacin para actores teatrales). Su seminario observatorio de las Imgenes Contemporneas tiene lugar en los Talleres Varan (escuela del documental). Es autora de numerosos libros; entre los ms recientes, Quest-ce que tu vois? (2008), Homo spectator (2007) y LArche et lArc-en-ciel: La Vote de la Chapelle Sixtine (2006).

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Obras en exhibicin en EFT BlueSky / Laboratorio de laboratorios

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Seal Nen BlueSky / AiresBuenos 01Escultura luminosa. 2009. Dimensiones: 250 x 250 x 70 cm. El tamao de la pieza (demasiado grande con respecto al lugar donde est situada), sus ruedas y el hecho de que an puedan verse elementos de madera de su caja de transporte permiten dudar respecto del carcter, definitivo o no, de su emplazamiento. El video silencioso proyectado en la parte superior de la obra crea un ritmo nervioso, pero lento, que inunda la entrada de la exposicin al mismo tiempo que la menciona.

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Laboratorio de sincronizaciones BlueSky (B.S.o.D.) Training attitudeInstalacin audiovisual interactiva on-off. Tres canales de imagen sincronizados / dos canales sonoros, 2008-2009. Duracin on: 12 min. Dimensiones variables. Imagen-sonido y montaje: F. Ruiz de Infante. Msicas adicionales: Found footage y re-remezcla de Elektro (versin The Cube Guys Delano Remix, 2006), Outwork Feat. Mr. Gee. Espacio iluminado por un trptico de proyecciones azules en las cuales pueden leerse cifras y textos en varias lenguas. Dichos textos indican que los proyectores no logran la conexin para comenzar el programa (estado off).

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Cinco sillas de madera invitan al espectador a instalarse. Un botn rojo en el centro del espacio permite sincronizar las proyecciones (estado on) y dar comienzo a la triple proyeccin del film B.S.o.D. La triple proyeccin propone, a partir de ese momento, la batalla de un ltimo viaje. Los tres protagonistas de la ficcin (las tres pantallas) representan y realizan el corto trayecto que separa la imagen de su desaparicin: su pantalla azul su ausencia de seal. La pantalla azul de l