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PERIODf SMO DE FILIRACIONY PERIODISMO DE INVESTIGACIÓN

10.1. La filtración periodistica

La acluación dc las fuentes de j¡formación puede rcspondcr a destacados intcrcscspropios. Una fuentc cuya identidad es manrenida en secreto por cl medio de comunica_

ción puede arroparse en el anonimato para suminislrar por iniciativa propia al periodista

unaintormaciór que Ie inlercsa directamente ycuya divulgación le benencia. Nos cncon_

tra os cntonces ante lo quccn lajerga periodística scdcnomina "6ltración" yquc Nüñez

Ladevéze (1991: 287) define como "el suminislro iülc¡csado o por encargo de sus supe_

ores de i¡Iormación por unaluentc que mantiene el anonimato no porque el contcnidode la inforÍación lc perjudique sino porque iúiinge la obligación de guardar sigilo".

Se trata de un matcrial informalivo pucfo a disposición dc un mcdio de comunicación a tmvés de una fucnte de infomláción que se manliene en sccrcto para el Público.Es una iáctica empleada habitualnerte por personas de relevancia quc ocupan lugarescstratégicos en empresas, instituciones, parlidos políricos, etc.

La definición ofrcclda por Nuñez Ladcvézc vincula 1a fillmcjóÍ con los datos suüinistrados por una fucnte anónima, desconocida tanto para el medio dc comudcacióncomo pam el pefiodista.

En rnuchas ocasiones, en el proceso dc una investigación pcriodísrica, el medio de

comunicación o cl periodista puede¡ rcc1bir anónimamenle documcnlos o datos que son

impo anles para su inveligación. En cse caso, sin duda alguna, nos sihramos ante una

filtración.Sin embargo, aunque una bnena parte de las filtraciones provienen de lucnlcs anó_

nimas, una fuerle no anónima -que es conocida Por c1 medio de comunicación o por clperiodis!¿ puede suministrar detenninadas informaciones al medio de comunicaciónpara su publicacjón. En este caso laúbién nos encontramos arle una filtración-

De ¿híque a la hora de hablar sobre las filtraciones consideremos oporluno rclcrir_ros la bión a la deiinición del periodista ürugu ayo yprotesorde periodismo dc la Uni-versidad dc Barcelona Héctor Borrat. La definición aporlada por estc autor sirve comoperleclo complemerto a la de Nuñcz Ladevéze. Héctor B¡rrr¿t (1989: 75) considera la

186 Peiodismo de tuyestigacíón. Teoría y pntctica

filtración como una "comunicación ptiblica que háce el periódico de una infomaciónprocedente de una fuente que ante el lccto¡ del periódico se mantiene en el más estric-

Lo que caracte¡izá á una fihación, ¡rn esta definición de Borat, no es que la fuentede información sea o no anónima, sino que el periódico la mantenga artc ei lector en clmás estricto secreto.

Este enfoque acerca de las tiltraciones nos lleva a la necesidad de distinguir entreuna filtración y las inlo¡macioncs con atribución rese ada. Si el periodista y el mediode comunicación conoceÍ la identidad de ta fucnte que filtra y publican sus revelacionesmanteniendo en seoeto su identidad, nos c¡conhamos ante una situaciór similar a laque conocemos como informaciól con aiibución reservada, tan frccuente en el pe¡io,dismo de investigación (PI).

Es necesario, por ta¡to, precisar que lo que caracteriza a la fucnte que filtra info¡,maciones aquello que define la propia esencia de ia f,ltráción es que la fucnte es siem-pre activa, sc di¡ige por iniciativá propia o, como afirma Nuñez Ladevézc, po¡ ercargode sus supe¡iores, al mcdio de comunicación. Se trata, por consiguienrc, de una fuenteque está muy interesadacn que sepubliquen sus revelaciones porque sabc que le bene-fician o porque peiudican a alguier a quien desea hacer daño.

E¡ las informaciones con at bución ¡eseNada un pe¡iodista puede dirigirse a unafuente de intormación y conseguir las revelaciores de ósta a cambio dc marterer ensecreto su identidad. La fuente no tiene que set, pues, nccesadamente activa, ni tienepor qué suministrar informaciones que le beneficiar. Tampoco tiene por qué buscarintencionadameflte hacer daño a nadie medianle Ia difüsión de esa información.

La filtración también tiene una clara frcntera con las informaciones obtenidas bajoIa iórmúa delaff the rcco¡d. En la filtración, cxisfe m irterés de la fuente para q ue apa-rezcan publicadas sus revelacio¡es. En el of lre /ecord,la fuente de inlormación sumi-nistra unos dalos al period¡ta a condición de que no aparezca¡ publicadas sus revela,cioncs. Só1o la confirmación a tmvés de otras fuentes podrá levantar esa resena_

Desde el punto de vista profesional,la posesió¡ de documertos filtrados es ün inme-jorable purto de partida para iniciar una investigación sobre la veracidad de los datosofrecidos y buscar más irformació¡, ya que ofrece impo antes pistas pam desarrollarun texto casi siempre de $an interés,

Los medios de comunicación lrabajan continuamente con 1iltraciones. Sin embargo,ei tmbajo con fuentes que ñhran infomació¡ no es una actividad exenta de peliglos. I_osdatos filtrados exigen una pe¡manente comprobación a través de otms fuentes, ya quesi no son p¡eviamente contrastados el medio dc comunicación cor¡e el riesgo de ser matri-pulado po¡la fuente. Un riesgo quepucde desembocar en la dilusión de mensajes desin-formativos que han llegado al medio camuflados como infomaciones filtradas.

Si se llega a es[e punto, aunquc la difusiór del mensaje haya sido involunraria, ctmedio de comunicación no puede srrstraersede una responsabilidad implícira, derivadadel hecho de que se ha prcstado a difundir noticias filtradas sin haberlas conl¡astado pre-viamente con otras fuentes de información. La difusión de mensajes desinformativosprocedertes de fillraciores intercsadas ro puede at¡ibuise nuncao casi runca a la inge-nuidad del medio. En estas circunstancias, cualquier medio dc comunicación sabe quepuede estar siendo intoxicado.

Capítulo 10: Peiodisüo defltmció¡ y Per¡odisno de iNesríg¡tc¡ón 18'7

Petra Mar'ía Sccanella se reficrc a la iiltración como a una técnica que utilizan todos

los sislemas pollticosi

"Filtrares u¡a polílicañuybicn pensadapo.los funcionarios que quieren iofluirsobre unadecisión polílica, promover un¡ lÍnea de actuación, persuadn alLcsisfativoy alertar a los país€s y gobiernos extranjcros La frlt.ación cs el aceile info.mativo de

lanáquinade sobernar. Requiere una sran dosis de expertici¿ p¿ra manejarla cor ¿xi

to" (Secánclla, 1986: 98).

Oua caraclerística de las filtraciones es que siempre aparccen en los momcntos de

crisis y conflictos. Los fillrado¡es comienzan su trabajo cuando lasposturas en conllictollcgan a su máximo grado de e¡frentamiento. El objetivo es claro: influir en la opiniónpública mediante infonnacio¡cs que, por un motivo u otro, no podrían dañe a conocer

oficialmerle.Las causas por las que una perona se presla a fi1trar datos a un medio de comuni_

cación son muy variadas. Sin embargo, las Iiltraciones más caractcrísticas en el pe¡io-

dismo de investigación son dos:

1) Laf,tú¡ición pot wfigarl¿d- Is ia filtración que sc rcaliTa con el evidcnte ánimoJc p. rjudicdr a ulrd p¡r:ñna o insrilucion.

2) Et globo -sonda.Es vna filtración quc tiene como objctivo desviar la atención de

los mcdia hacia aspectos que les alejan de la información que persiguen.

Puesto que en la mayoría de las ocasiores las fihraciones proviencn de fuenles que

no sc identifican. nos encontrar¡os ante una aclividad que podemos incluir en el "tla-bajo con fuenles anónimas". Lapublicación de lcxtos basados en info¡maciones Procc-dc¡¡es de esle lipo de fuentes suelc se¡ frecuenle en cl PI y tiene como incorvenientcquc se diluyen las f¡onteras ertre lo que es puramenlc una investigación periodística ylo qu< pucdc.cr siinplemenrc una fillraci,51.

El lrabajo con "fuentcs anónimas" obliga at pe odisla a múltiples reservas. de ahí

que Lawrcnce Beaupte, dircctor del diario Ir¿ CincinnaÍi Enquire.exponga una serie

de obligaciones que él personalmenle exige a los periodistas quc cstán a sus ó¡dencs para

ur correclo trabajo con este tipo de füenles:

1) La iniormación procedente de "fuentes anónimas" debc vcrilicarse con irdepen-dencia dc,afue[te encuestión o conf]rmarse almenos por otra fuente, salvo en el

caso de individuos que resulten ser los únicos posccdores de la in{ormación (te en

do en cuerla el ricsgo que esto conlleva) o cuya intcgridad esté {uera dc toda duda.

2) Hay que examinar con detalle los motivos que iú ducen a esas fuenles a cntregarla iDfomación, a fin de que el periodista no sca rtilizado como inslrumento en

luchas parliculares.3) No se utiliz án "Iuentcs de infomación anónimas" que cfcctúenjuicios de valor

opongan en duda la c¡edibiiidad de lelceras personas. Por ejemplo,no sería adc-

cuado citar ura fue¡tc anónim¿que afirme que alguien es "cstúpido".. Si alguic¡ticne ganas de alacar a otra persona, lo mejor es que firmc süs invectivas.

188 Períodismo de ¡nvestigació . Teoia y práctica

4) La información at buida a estas fuentes ha de ser televante y estar basada enhechos. Para dar infomacioncs complemeÍtarias o introducir "uÍa cita jugosa"no hace falta mantener el anonimato de la fuente.

5) Al igual que sucede er el caso de fue¡tes or?,¿ e rcco , deberá preva]e.Er la rcdade la fuente más frable. Tanto informadores como directorcs de peiiódico debe-flin asegumrse de qre la fuente sea adecuada y facilite la infomación deseada,asícomo de que ocupc un cargo que le permita acceder a esas info¡maciones.

6) Al utilizar "frentes anónimas", la i ormaciór deberá explicar las mzones delanonimato, al tiempo que se ofreceráIl tantas explicaciones como sean necesa-das pam dar a entender la importancia y autoridad de Ia fuente en relación co¡el objeto informativo.

7) No se püblicarán inforrnaciones qüe contengan "fueÍtes anónimas,, sjn haber sidoaprcbadas por el director o el subdirector.

La disponibilidad de filtraciones es uDa parte importante del trabajo del periodistacon las luertes de información. De ahí que, tal y como afirma Nuñez Ladevézc, sea inle-¡csante Ia distinción ertre fuente de información y filtmción. Er el p mer caso cl pe¡io-dista toma la iniciativa ybnsca a la fuente, o bien la fuente adopta la iniciativa y buscaal peiodista, pero sepermite su idertificación. De esta fo¡ma el lector puedc conocer elalcance exacto de la infomación puesta en sus manos.

10.2. La filtración y el pe odismo de inyestigación

Desde ünpünto de üsta estdcto, el periodismo de investigación (PI) ro tiene lladaque ver con las grandes ñlhaciones, sean interesadas o no, a los medios de comunica-ción. Sin embargo, las filtraciones son muy importantes en cl PI, ya que muchos temasslrlgcn a través de datos que han sido filtrados a través de uú¿ luente de infomación.

Es más, todos losperiodistas trabajan habitualmcnte con filhaciones y mucho máslos quc se dedicar a la investigación. Las filtraciones siemprc estár ahí. Llegan por todaspartes y cl pedodista puede analizarlas, comprobarlas y estudiarlas para vcr si tinal-mente conducen a algo o, simplemellte, Ilo interesame por ellas porque es conscientede que detrás existe una intencionalidad dcmasiado turbia. Jordi Bordon afirma que é1

apcnas trabajá cor filtraciones, pero iNiste también en que "hay pe odistas que sorpermanentes receptores de filtraciones y consiguen consolidar asf un dete¡minadopoder".

Antonio Rubio reconoce que los pe¡iodistas investigadores tmbajar habitualmentecon filtraciones, pero recalca que hay que tercr siempre presente que 1os primeús datosñltrados adquieren simplementc la consideración de un rumor, por lo que se ¿leben veri-ficar antes de ser publicados.

"El inicio de una investigáció. es como un gran embudo en el que cabe todo. Entreesos primeros datos en bruto aparecen enlremezcl¿dos daros verídicos con ruúores,filtraciones. etc. Es durantc cl p¡oceso de la investiSación donde se dcpuran los daros

C.tpít to I 0: Pet¡odisno de ¡htución v Püiodbmo de ¡ t'estigación 189

quennalmcnte acaban por püblicarse. No todo lo queeotr¡ inicialmcDle en esc embu

do cs fln almcnle Publicado."

De 1¿ jmportancia de las filtraciones en esta modalidad pcriodística da fe Ricardo

Arqués cuanilo se lamenta de no habcr cstado nunca en posesión de fiItraciones impor-

"La verda.l cs que hc tcnido muv mala suerte con cso de las filtraciones' Como

mucho he lenido p;queñas tiltracioncs, muv esporádicas, que mc han §ituado antc

pequeaas pistas- Én ocasioncs va me hubiera sulado estar dela¡tc de ese tipo de Iil

i.uiiones que te -locan ,n 'dorsier' dcl¿nle de lá mesa v qüe no tienes más que tesu

mirlo. A mí nunca mc ha p ado, por lo menos nunca be tenido filtracioñes así dc impo'

A pesar dc 1a reconocida impo ancia que tienen las fillraciones, ello no supone' en

coDlr;de una opiniún bastanr(] difundida, que cstar en posesión de Iillraciones incre-

menle cl presligio del pcriodista o de su medio dc comunicación Al fina1, cstar en pose-

.;¿n dc fiitraciáes o no es secundario. Si las filtraciones son correctas y aportan buena

informacjón puedcn aportar prestigio al profesional y al mcdio, pero el mayor o ñen-or

piestigio d".iro exclr"iuarncnt" ae c"tot Uicn n r"at informado' Sea o no a través de ill-

tracioies. "fstar cn posesiór de filtmcioncs -afi¡ma ADlonio Rubio- no tienc por qué

incremcntar el prcstigio de un pcriodista o de srr diado Lo que sí incrementa el prcsti_

gio es cstar en posesión de infon¡ación privilegiada."

Cuando la filt¡ación aporta pistas al redactor para i ciar una invcstigación o sirve

D! a !onnll.rar dalo. que previamenr¡ ha in\ cc.i8¿du. oo existcn probl(nar 'obrc 'u uli

iizacion. El nroblema cn ;l uso de lac fllr¿cionc. puedc 'Lrgir 'uanLlo un" [Lcnrc fillra

informacioncs completas y aporta almedio dc comunicación un trabajo acab¿do que ei

periodista se limita á rcsumir o pulir-Nos enc¡nllamos así ¿ntc url apartadomuy importante para dilercnciar entre el ver_

dadero y el falso periodismo de i;vestigación. EI vcrdadero Pl es aquélen cl que el

¡criodisia. a lravé.§ de su trabaio, su esluerzo. irluición y sus propias fuenles, descubrc'algo que cipúblico no conoce y es guarctado en secrcto. El falso PI es. por el contrario,

aq'uél en e1 que cl profesional no háce sino trabajar sobre unos datos complctos que lc

han sido suministridos por una única fuenie de información qüe exige permanecer en

cl anonimato. En estos últimos casos, el pcriodista püede convetirsc en una persona

influenciadapor grupos alc presión que intentan mancjarlo desde lasombra en bx§ca de

un inte¡¿s concreto, como pucde ser dcrribar a un presidente de Gobierno, obligar-a

.limitir a uDministro. destr;ar la imagen de un empresario, o libmne de la acciór dc la

Justicia.Estas frontcras enlrc Pl y "pcriodisno de filtraciór" adquieren una especial rele-

vancia sj se tiene en cüenta que en los úllimos alos se har prcsertado infomaciones

bajo la etiqueta dcperiodism; de investigación' cuando no se trataba más que de jnfor-

máciones que, con posteioridad, se ha comprcbado quc provenían de fill¡acionesPue§_

tas en circulación por una f[ente de infonnación qr¡e ponía a disposición del medio de

comunicación dossieres interesados.

9O Peno.lieno de inle$tiga¿ión. Teorísy prá.tica

Denominamos esla práctica periodística como "periodismo de filtración" o dossier.

Un tipo de periodismo al quc Miguel Ángel Aguilar calilica dc "periodismo de dosifi-cación", porque es la luente dc información la que dispone de la totalidad de los d¿tos

y se los sumjnistra al periodisla o al medio de comunicación de forma dosificada, con'lmlando todo el proceso de la inlomación. La fuente informa de Io que quicrc. cuando

quiere, como quierc y al itmo que considcra más oportuno.Carlos Yámoz considcra que er los ¡iltimo§ años de la investigación del caso "GAL"

eI diaño El Mundo ha publicado muchas informaciones quc han sido presertadas como

resultado de rm arduo trabajo irveslig¿dor, pero que en realidad no han sido más qüe

filtracioncs.

"Nadiepiensa aestasalruras quc tue producto de la cásualidad elhecho de quc I:sconversacioncs o negociacio¡es qoc Mario Coodc sosluvocon elGobicrno c¡1re el24de febrero y el l desetiembrc dc 1995 coiocidieran, cn los moñenros clavcs de las miemas, con ladifusió¡ dcescandalosas noticiás sobre los GAL y clCesid a través deldiar;o El Mukdo. -tañpoco r\adie se refu8ia cn f¿ casualidad cuando se comprueba que s6noticias corespondía¡ precisarlente con Iosdocu.rentos sufraídos hace años delC€sidpor elex age¡te JuaD AlberloPe¡ote, personaje ñuy lisado a Mario Conde'(CárlosYárnoz: co'fercnciaen la Casa de Cullurá de Laredo.30 dcjulio de I996).

Carlos Yárnoz rubrica cor un ejemplo concreto esta política informativa iunda-mentada en el uso dc liltraciones puesta en marcha por el periódico El Munrlo dtrantelos riltimos años dcl caso GAl.

"El 31 de mayo de 1995, Conde hizo llesar a Emilio Alonso Manglano, entoñces

director geretaldel Cesid. cl mersaje de que sc aluvieraa 1ar co¡secucncid¡ si, aldíasisuicnlc, no decla.abaantc cl Supreno queclfamoso informe Crillón -{ossier sobre

Mario Conde encargado por Roldán había sido Pagado por el Cesid. tal y coño tostcnía elpropio Roldán. M¡nglaro desoyó la advertencia. Once días dcsPués, r/ Mr¡¿o publicó docume.tos quc dcmofraban que cl Cesid hahía efado grabando entre19i14 y 1991 numerosas convcreaciones lelefónicas privádá§, incluldas varias del Rey.

El docunento erauoodc los surraídos por Pcrole y su difusión originó cl ccsc de Md'glano" (Confereñciacn la Casade Cultura de Laredo,30 dejülio de 1996).

Esta dile¡encia entre un tipo de peiodismo y olro es importantGima. El periodismo de

"dossicr" no es perioalismo de investigación: el pcriodismo de "chequc pagado" no es perio

dismo dc investigación; el pcriodismo de "filtración" no es periodismo dc investiSaciótr.

En su actividad investigadora, el pe odista, cn algunas ocasiones, pucde entrar etr

contacto con inlormaciores que, a pesar de estar clasiiicadas como "secrelas", llcgan a

sus manos a través de difcrc¡tes cauces, nomalmente pormcdio de una Iiltración Unejemplo caracteíslico en los últimos años Io encontramos erlas inlo¡maciones que estu'

vicron en manos de periodisras del dia o ¿l M¡r?d4 que ¿ccedieron a informacionesseoctas relacionadas con el caso "GAL".

En ocasiones, tal y como ha succdido últimamente, se interta culpar a1 pe¡iodistapor estar en posesión de seoetos oficialcs. Es más, el Partido Popular, a mediados de

1996, presentó un proyecto de Ley sobrc sccretos oficiales que preveía multas de hasta

un millón dcpesetas simplementc por estar en posesión de secretos oficiales

Capíhtlo l0: Periodismo dejltación y peño¡lisno.le kyesrigac¡ó,1 191

ESPAÑA

El CESID acoñseió conllatar mercenados Deresecueslrar y asesinar a miembrcs de EiA

rbd*ú@ úúú ta!ádd ldara\e tu

Fisura 10.1. Algunos periodislas i¡vetig¡dores afirmal su. Et Mundo tnbajó con ritÍracioncs qucpusicron e¡ sus manos informcs compteros sobre actividadcs det Ces . Uno de los documentos más

rclevanles fuc cl acta rund¿cio¡alde los GAL redacrada por el Ccsid.

Ln cualquier país democrático es el Gobiemo el cncargado de decidirqué temas scclasifican como sccretos para evitar alísu circulación, pero no hay quc olvidar que sonlos medios de comunicación y los periodistas los que pueden averiguar esos secietos ydecidir si deben rcvelane al púbtico o no.

Las razones utilizádas para clasifica¡ ur documerto como secreto pueden sc¡ muyvariadas. En algunas ocasioncs sepodrá clasificar un documento como aecreto para sai_vaguardar algunas decisiones que sípuede ser nccesado prcservar. perc en otras, se pue-dc clasificar como secretas decisiones arbitrarias, abusos dc poder, etc., con la única injen-c:dn Je quc nu sean cono.iLlas por el púhJico.

Elperiodismo de investigación es un vchículo adecuado para llegar a conoc$ temasclasificados como secretos- No se puede culpar a ios periodislas rJe estarcn posesión deellos, ya que los pcriodistas no se invcntan los secretos ypara llegar a conoierlos rieneque haber aiguicn que los lilue.

Howard Simons, ex direcfor del Washin7ton por¡, se rcfiere a laj Iiltmcioncs deli_beradas de secrctos oficiales y explica por qué se Ultra¡r esos documcntos:

lo) P. l¡¡d."q,' J, ¡.t..,¡9a,..a. t,ot¡a) l,o tr'

"[slas liltracionessc rcalizan, co¡ f¡ecuc¡cia, para ben.ficiar a algÚr r)olíticoo algú:

pari.lo politico. También,.n muchos c¿tos. I)ar¡ crcar problemas a oro politico A vcce!

par¡ enliar nn ¡ncns¡le alenenriSo. ED lañeyoría de los casos. clvc adctuñotivo¿:colocar en uDa siluáción dc dcsvenlaja a un cncmigo inierno. Y sólo e¡ ¡luv raras octi

siones se hacc c¡ bcneficio de los ciudadaros" (lIowárd Snno¡si¿11'arsl 1'1-5 80).

La publicación dc cstas filtracioncs. cn Las que una fuenle dc intormación irlcrc§a-dame¡lc pone en ¡ranos del periodisla un material completo y acabado, coloca sobrc .tapete algunas.le las polómicas más importantes acerca del trabajo con informacio¡c!flltradas en cl PL

lA 2-l- I n convpni,n, in,,t" pttbti.dr,,lluuno.ion,: ftrratlo,

La polémica sobre la conve¡icncia de publicar Ias filllacio¡es, tenienLlo cn cuent¿

que se lrala de un llabajo con luenlcs andninas quc tienen un inicrés especial cn qu'rc fublique cl "dossier" pucsto a disposición del pe odhta, ha suscilado no pocos dcba-

1cs ertre 1os propios plofcsionales dc cla modalidad pcriodíslica.

El único criterio quc sc debe erigir al pe odislilpara publjcar unas iltracjoncs. aun'

quc sean completas, es quc haya comprobado ia veracidad de los dalos 6ltmdo§ Si la fil';ación es cicrta, es legílimo publicar la. Éticamerlc no cxiste ouo obfáculo más que La

confrobación de su aulenticidad. Sól.r las fiitracioncs comprobadas. estén o no acom'

pañ;das de d.rcumentos, pueden ser publicadas El pcriodista v su medio dc comunica

ción asumen un ricsgo muy alto si publican filtraciones quc no han sido verilicadas a tra_

vés dc otras fuenles .

'l'odos los pedodilas irvesligadores insislcn ¿n la in]poriancia que llcne la ve fica-

ción de las flllraciores anlcs de proccder a su publicación Sin cmbargo, demasiado Irc

cuc¡temenle nos cnconlrarnos ante texlos pubLicados que har sido iotaln1enlc filtrados

-v sobrc los que no sc ha plocedido a una estricta verircación. Jordi Bordon ¡o duda en

aval¡r esta afirmación cuando dicc:

'l'n l, t ñ.. '.. 1" uel.nrJbli."rr_'uri'! ñ l'. I nrere'r' rrr rr''rci"'quc prclie¡.n dc lillra.iones y se publica¡ sin más. snr froccder a una vcrificación Yo

co¡ozco a colegas quc 1o hace¡ frccuenlementc. Los dalos .itlo proviencn dc una lillració¡ sólo po.liian scr plrb!icados c¡ cáso de quc lucran comprobados' Sólo sc Pue_

dc¡ publicar sise vcrifica¡."

José María lruio afinna que sus comPañeros de proiesión publican frecuentcmenie

llliraci{»es )' rcconoce quc é1 también las ha publicado. aunque explica que sienrpre lor,'r. lro lL.pu,* dr '.JL a'r. 'rv(-il[r.i^r

"Nosolros recibimos en Drr¡nr 1ó un paquetc dc ci¡ias.on u¡as Cr.rbaciones que

le hizo ¡o sal'eños quión alluer B¿ltasar Carzón dur¡¡te la i¡sin¡cción delcaso GAL.Eren ochcnLa y lantas cirüas C.mProbamos su veracidad, hablamos coD eljnez Gar

zó¡. nos ertrevistamos con las peEo¡ds que hablaban cor Garzó¡. comprobanros qLre

las cintas era¡ ant¡nticas y nos dicron co n lddridad Para $ public¿ción. Era cvidcn!e.

\._

Capí¡ulo 10. Peñodisno de lilti tc¡ón y pet¡od¡s no de inrestigación 193

pateñte, obvio,que habia exislido ese espio¡¡je hacia nnapeBo¡alidad ioportanle delajudicalura y lo publicamos. Lo que luego no podemos hacer es ir a una radio o darura conterencia, dar una charla, o escribir un libro, o contestar a un cuestio¡ario, ydecir que el caso X que descubrinos es periodismo de irvestigación y efuvimos tr¡balardo duranlc 8 meses, p.'rquc es menlira y un iraude ¿llector. Siun ñedio de comu'nicición publica llllraciores cuyaleracidad ha conlprobado, Io que no puede hace¡des-pués es presenlaresos lexlos como sise lralara de una irvestigació¡."

José María Irujo aporta asi una clave esencial que debe predoúina¡cn cltrabajo confiltracioncs. No cxistcn problemas éticos o deontológicos para la publicación de 1il1t acio¡es sicmprc quc cl pcriodista haya comprobado la veracidad de los datosfillrados. Lo queno puede hace¡se nunca es p¡cscnlar csos lcxlos como producto de una investigación.

10.2.2. El reconocimienb público ¿e que se ttata de una filtración

En oc¿sioncs.los mcdios dc comunicación tienden a presenlar inlomacioncs quc hanrccibido íntcgramcntc filtradas como si se tratara de texlos depeiodismo dc invcstigación,elaborados a través dc un trabajo minucioso realizado por un equipo dc invcsligadorcs-periodistas. Se tlala,cn la mayoía dc los casos. dc infomaciones intercsadas, Iugas de inlbr-mación que se han presenlado postcriomcntc como si se tmtam de te)rtos de invssligación.

La publicación dc lnformacioncs filtradas que se presentan arle el público como 1cx-

tos procedenles del PI nos introducc dc llcno ante prácticas que atertan abiefl¿mcnlcconira las normas deonlológicas de la profcsión pcriodística- Antonio Rubio se mues-lra muy rotu¡do cuando afirma:

"En el periodnmo suc.dc lo misnoquc el la medicinao laabogacía. Haycorruplos ychorizos. Por lollnto. en el periodismo sí hay gcntc que publica nltaciones enmas-caradas co¡rc tcxlos dc invcstigación, pero es unapráctica antiética."

^ pcsar dc csras afirmaciones, los profesionales que pracllcan ci pcriodismo de inves-

tigación afirman quc los mcdios de comunicación publican en numcrosas ocasiones fil-traciones prcscnlándolas como tex¡os de investigación, aunque ninguno llustra estas afu-maciones con ejcmplos concrctos. Jordi Corachán y Eduardo Marlín de Pozuclo afirmanque el periodismo dc "dossicr" cs bastante frecuente. Un tipo de peñodismo cn el queel periodista recjbc cl lrabajo mascado, acabado, y en el que su irte¡¿ención se limita a

hacer un ¡esr¡men de los lo]ios quc tic¡c cn cl cajón dc su mesa de redaccióL PepeRodíguez, por su parte, se muestm categódco a ia hora de rcferirsc a csta prác1ica:

"Es absoluttunent. cierto quc todos y cada uno de los medios decoñuricación pre-scntan al públicograndcs liltracio¡cs omo sisc lrakra dc lextos de inveligación. ConoT-co casos de periodistas que han Iirmado como lrabajos dc invcstigación inlbrmcs hechospor la policia o por un dctcctive, y quc iambién mc habían llcgado a míy no utilicé."

En los úllimos años, en la hisloria del PI del Efado español, nos encontramos concasos palenles en los q ue se ha prelendido d¡fraTarcomoPI lo quc craperiodismo paga-

194 Periotlisno de i ve§tigació ' Teoría )' P ctí¿'t

alo a través de talonario, o lo que era um frItlación 'le

uÍ "dossier" completo al peiodis_

r^ inveslrsador. xro ouhlicado proücne de un -dos§iei nl-

siel;eriodislaoculta al püblico que el te

,,.; ::i;ü;;;."* un oaro muv imponante v :;:';:¡;;:ff:¡fl i:l:i""J :#;t.¡i.lo de Iá inlormación ya que. de alguna l

o',i1"01,",,",.0',rroraconh,a'ra pol f I:l1;ill:1',"t;:.':iil'T;;H :;i:;

cial en qr.re sean ditundidas Deahiqueseá'"",,i.i,.i"alü"nl,,*¡".oel resuha-cn cada i¡stante si el texto que (lene detarut

::;::;;;i;;;:iü;;, Dc'esrarorma errccroipuedevarorárcunexactiruderarc¿ncc

de la i.lormación' rlanteparaelpÚhlicoconocerquclosdalosJosé María Irujo afirma que es müy Impc

.rrii.^i"i "" ," á.t"t,inado texto provienen de uoa filrr¡cion' )a que sc lrala oe ütr

i;;:;';;.;;;;;;';'sa ar rexro ;na dimcnsión especiar'

-Hav csosbas anre parenresde hi( oiA durentica( fi::i::.1';'J;31:#§:

Je ñl,r¿crone' y que se deben pubricar v que vo m'-'l'",Li,l i,-¿ -" .r -,¡'. v

he ernuesto clcaso de lás cint¿s dc OarzÓn que P

l:;:1ü;"; ;-;";" "',ar rihÍJcione' ) ra( comp'lo[::,f;'¿"'jmffi l:#:;

podr; prc.enrar c'e traoajocomo pe rrodr\mo oe InN?""i,,.,." "i" "lpl.'

i¿-0i." "i,,¡" rcner la tronestidad de decir quc no§ han ¡rc

ii,l,i*i"i á"i l.*""no Ruiz üak"\ po¡que mc,¡\L::",:'[1:T"TiilliJlJ:;la D¿re de la historia tambidn es impola (que

i[.'f,'..*"0. *"" * L,na 'icaa

maniobra v há habrdo un inreris pata quc e'o se

ñ,,hloue \, e)o e( irpotrañre que 'e

scpa' .o.!eoqueparenrur.entoiquesehd' i. Fsoa¡a. recien¡emente ha habrdoca$s l

","iil#;;',;;;;.;." pEr odsmo de in\srrsac on

::.iff : ffi:I*'fl:fi:;".:I Lraves de talon¿rio o lo qu€ era lamanrobra oex

"'",'ü11i""; 0,,'.,,,. ""1.,.,:,*.t:'-.1:i*; il;i:.ü:: :::+:iil',.',Xl:",,ñ; se debi; hacer es dis[Íazarlu como perr^ü¡

o'"ñm J"."' +"'" "\o"a$§ no ha crnri'r'r'

Desde ra pefspecrrva der t,rbl*.:,11.:#:li:*"";: ;:'::::#:i:ii,.,'".':::$sobrc los que se suslenta un texto pulrllcao(

X;;;;;:;;;'."^'' se trara de rrna tor muia quc nuncd o cD muv raras ocasrones sc

llc\aalapraclica ,.. r.rmediode comuúicacion ditrcilflenle se pue-Desde ra Perspecriva Ller r*':',1":." "'l;l:;;rñi."iln .r ,.*ro putli.uao .i lo'

den (srdblec(r mccanism05 para oblrgdrresnq Y*"r¿"il-Ei ,ni.o *.rr..

"" apelar a la

¡lák's han sido 6ltrados o. por el contrarlo rl

:i:;i:i;;.i:i;;;* qr.re no di'rrace com^ '''d-ucro cre ra invesrisacióñ un texto cuva

iliiJiií.. il:, .l' o' os ñlrrado' v que en üso de quc sean daros riltr ádos io expon-

ea claramenle al pÚblico' .micnro. -lus úedio. cle comuoicación ha_n' A travé§ dc esla práctha de enmascara-',*;

in;;s;;inado y casi co'idiano ,lclñrrado acoslumbrar a süs audiencias aL c(

iniorm¿cjone. ñltrad¿§ que no se prescntancnmo tales sino como simples componenle§

¿"i Ári. i"i"*,,i* "'rmal (Borrat l9Eo:72)'

Capihtlo l0: Period¡sno defltración y periodisno de inyestísación 195

Aún recorocierdo la impot¿ncia quc liene para elpúblim corocer si el texto qucpublican dedva de una filtración, algunos pedodistas invcstigadores no se muestran par-tidarios dc poner en práctica fómulas para que elpúblico diferercie entre un texto cla-borado con datos iiltrados y otro de invcstigación.

Asl, José María Itujo no conside¡a importante que aparezca en el texto la cspecifr-cación de si los dalos sonproducfo de una frltmción, aunque insiste en que públicamen-te no debe oculta¡se nunca.

"Cuando lás historias que se publisn so. imporLantes, son relevantes, en ocasiones,prácticamenle sicmpre.los aulores de la información son llamados a la ¡adio. a la tetevi-sión,concedcn entrevistas, publican artículos, publican libros, e1c., y ese es et momentoen quc dcbe¡ tener Ia hoorádcz y honesrid¿d d€ decir que los datos prúeden de una riltración intercsada, o de ur señor al qüe pagamos una antidad porque no había olra for-ma de consesuir sus revelácioncs, para que el lector conoza rodos los elcnentos de ta his-loria, no solañente uno. Si el periodista micnre e. esro,si no licnc la honestidad y lahonradez para coniár la vcrdad sobre la procedencia de 1os datos cuando se Io pregunlan,pucs ¿cuál es su credibilidád? Esa es la pregunra qüe dejo ahí en el ane.,,

Otros pedodistas, si¡ embargo, conside¡an que el Iector tiene de¡echo a corocer silos datos prcüenen de una investigación o son prcducto de una fihración. Ricardo A¡quéscoñparte este üite¡io, pero afirma que los medios de comunic¿ciórson los menos inte-Ésados en hace¡lo.

"Al mcdio de comunicación Ie inte.csavender los textos como resutrado de unainvcfisación. como resultado de un gran esfuezo dcl mcdio y delperiodisra, yno pre-scntado comoque nos han puefo encima de lá mcsa y Io heños publicado.,'

Vislas asílas cosas, podemos afirmar quc cs p¡áclicamente imposiblc que los mediosde comunicación accptefl especificar en sus textos si se tmta de informaciores filtradaspor una fuente de información. Se t¡ala, simplemente, dc unamedida que entraría afo¡mal parte del campo dc la ética periodística.

10.2.3. El pago por las ínfomac¡ones lilttadas

Er numerosas ocasiones, sobre todo en la práctica dcl periodismo de inve$igación,la luenle de ilrformación puede solicitar al periodista üna cantid¿d económica como con-dición para poner a su disposición la información o documentos que posee. Algunosmedios de comunicación, y alguros periodistas también, afirman que nunca pagan a lasfuentes de info¡mación por conseguir los datos que persiguen. Es más, en ocasiones sedefiende este punto de vistacomo si de un prjncipio se tralam, afirmando incluso que eIpago por informaciones es una práctica contrarja a la éÍica pedodística.

Ouiencs defierder a ultranza estc punto de vista ro quieren reconocer que en elmarco dc la empresa periodística Ia infomación siempre tiene un precio ecoDómico. Laemprcsa paga al periodista, a través dc su salado, porcomegüü info¡maciones a travésde sus fuenles y paga a las agencias por suministrarles informaciones diariamente- Elmismo público paga para estar informado a través de los medios de comunicacióD.

196 Periodisno de investígación. Teoríd , Ptáctica

La infomación tiene un precio y, en ocasiones, hay que pagar a una fuente de infor_

maciól para consegui¡ sus revelaciones. No se trata, Por 1o tanto, de una norma mntra_

ria a la ética periodística, siro más bien una faceta más de las reglas del mercado. Con_

sideramos por lo tanto ético pagar a una fuente de infornación si sus revelaciones me¡ecen

la pena, si va a aportar unos datos que soD fidedignos y que el público tiene derecho a

conocer porque afectan a la dimensión pública de la sociedad. A estc ¡especto recoge

mos la frase de Melchor Müalles refiriéndose al pago de informaciones por pa e deldíario EI Mundo er:' cl caso "GAL": "No sé si -Al M ndo ha pagarlo a Arnedo y Domín-gr¡ez, peroyo, penonalmerte, hubiera pagado cualquier precio por co¡ocer la verdad "

Otlacosa difereflte es que los textos elaborados a través de documentos comprados

se presenlen posteriormente como resultado de um investigación. Una Práctica que en

la actualidad es habitual en algunos medios de comunicación-A modo de resumen, podemos concluiI que en el trabajo de invesligación, la filtm-

ción es útil para obtener relerc¡cia§ o pistas que los pe odistas usarán paia ratificar o

desmentir el carácter de la filtración. La filtracióD ofrece así pistas y se convierte en una

buenabase para que cl medio pueda investigar los datos qúe se han püesto a su alcan-

ce, busque más inlormaciórL la coñpruebe y elabore.Como ejeúplo característico de esta fómula tenemos la ielación en el caso "Watcr_

gate" entre los pedodistas investigadores Robert Woodward y Carl Berstein y una fuen_

ie ile información denomi¡ada "Gargaflta Profunda" que, a través de liltraciones, o¡ien_

taba el trabajo investigador de 1os periodistas.

La fihación juega un papcl importante es esta modalidad pe odíslica, pero hay que

tener en cuenla que cor la información flll¡ada se incrementa el esgo dc ser manipu-

lado por la fuente.El periodistaliene que tener mucho cuidado cuando trabaja con filtraciones. E¡ oca_

siones nos podcmos encontrar con falsas filtmciones, dcnomimdas también porHéctorBorrat como "filtraciones simuladas" y quc se producen cuando todo un colectivo dcsig-

na a uno de sus ñicmbrcs pala que filtle datos a ur medio de comunicación y obse ar

así delerminadas rcacciones. Muchos "globos_sonda" dedicados a er?lorar las reaccio

nes de aliados o adve¡sarios han sido lanzados a tmvés de una falsa filtració¡.También Mar Fontcuberta (1993: 33) alefa del pcligro que repo a para el pe o-

dista el trabajar con filtraciones. Así, para e§ta autora, "u¡a de las calacte¡ísticas más

comunes cn Iás [oticias basadas erl el no acoñtecimiento es que suelen nútliñe de infor_

maciones fillradas"1.Er el trabajo de iÍvesÍigación el periodisla necesitará cortrasta¡ siempre, desde

diversos puntos devislay con már de um fuentc.la veracidad de los dalos. El periodista investigador debeú t¡abajar cor otras fuentes y verilicar los dalos filt¡ados antes de

publica¡los.Ur medio de comunicación utiliza fundamentalmentc tres formas pam tener accc_

so a informaciones consideradas seqetas: el de la i¡tormación filtrada sin que exista unairvestig¿ción posterior para Ia vedficación; el de la información filtrada que poste¡ior_

merte es investigada por el pe¡iodista y el de la inlormación entcramente investigadapor cl medio de comunicación. Solamente cuardo el pe ódico ha reco¡rido los dos últi-mos caminos nos encontramos arte Io que podemos denomilrar pe¡iodi§mo de investi_

gación.

Iibr-

delín-J,"krs

l¡

Capit¡tlo 10. Peiorl¡siro defltrución I per¡o¿ismo rle ¡n|estiBac¡h 197

El scgundo de estos dos caminos es cl más lrccuente en el trabajo investigador. "Setrala dc cnsamblar la;nlormación filtrada y la información invcstigada (...) un proccsoquc exigc investigarpor métodos cientÍficos a l¿r propia infornación invcstigada que s;rvc de arranque" (Borrar, 1989: 86).

10.3. El rumor cn el periodismo dc invesligeción

Los ,umores no soD noticia. l'or lo tanto, no forma parle dcl campo de la ética y ladeonlología de Ia profesión periodística la publicación de "hcchos" quc se suslentanexclusivamc¡le on rumr)rcs. Eso no quicre deci¡, desafo unadamenlc. que en ocasio-nes los mcdios dc comunicación no publiquen inlormaciones apoyadas €n el rumor.

La dilusión dc un rumor conduce incvitablcmenle a la elaboración de lextos cuyaveracidad cs imposible do comprobar -por la propia escncia dcl rumor . La utilizacióndc ur rumor como única base dc la información dilundida ol,liga al rcdactor a ulilizarcn el texlo exprcsiones como "al pareccr", "podría", "no se dcsca a" u otras similarcsque no hacen sino poncr en evidercia que los datos publicados no han sido contrastados o que se trala simplcmentc dc hipólcsissin corfirmar, quc no se sustentan pormcdiode hcchos objelivos y contrast¡dos.

En ocasiones, y dcntro de la actividad pcriodistica, el rumor pucde ser ulilizado poralguna persona o grupo como arma arrojadiza. Irn csc caso, el medio de comunicacióD"podrá denunciar estc hecho. pero sin citar las acusacioncs Llifundidas mcdiantc cslaatgücia" (El País, L¡bro de Ení|a,1990, p: l'7) ya quc si uo, involuntariamcnle, podriad¿ñar la irnagcn dc ]a pcrsona descalificada a través de esc rumor-

Se puede cncontrar alguna similitud entrc cl rumor y las inlormaciones que provic'ncn de fucnres confusas, cs decir fue¡tcs de infonnación quc no se pueden cspecificarniconcrelar. Nu¡lez Ladovézc aclara cslas similitrdcs y establece una clara disiinciórenlrc cl lumor y la luenle confusa. Para cslc autorl

''Con relación al mcdio inlormativo que prcscnla la jnlorña.ión Ia tuorle coniu'srr se car¡cteri¿a porque cl medio asegura su exislc¡cia aurque oo da prucbas de cllonilacilila ¡lderináta¡iodc Iaintornación ni¡8ún.i.to quo perinila rdenlificarla tlrcn-1c. En cl caso dci rumor l¡l fuenlc sc p¡escnla eÍ si mism¿ inidenlilicablc i¡cluso porpurle dc ¡luien ofrcce la noticiá. En elprimcrcaso. clque inloma ¡o duda de la fLren'lc o 1a prcsc¡ta corno no dudosa aunque i¡ presenla de máncraco¡lusaa en cl seguodo caso- la fue¡le sc prescnt¡ como dudos¡" (Nnñcz Ladevézc. 1991:290).

La bibliografía sobrc clrumor esmuy exte¡sa. En uno de los p mcros trabaios sobrcel tcma, publicado cr 1926. Emil Dovitat (1980:404) dcnne cl rumor como "(...) i¡l'oFmcs talsos o invcnt¡dos que se diiundcn nlaiiciosamentc por gcnle malintencionada, siDconlinnación, con mala i¡lcnción o quizás por gr¡slo o placer".

ParaEmilDovilat(1930:404),'losrumorcssonnoticiasconcontonidocargadodctcnsión, pucstas cn circulación sin garanlía, incrcmentan su scntido cmocio¡al. reduccrel taclual y se legitiman con una autoridad aparcn1e... En épocas de agitación provocanaccioncs emocionalcs. DiriBidos dc forma planilicada dcspie¡tan el odio y la caiunnia,o fantásticas esperanzas dc victori¡".

198 Petioáísno de inlteltígació -Teoríd))p ctíca

Cltalouiefsiruacióntensa.cualquiersitUacióndeconflictosocialdalugarineüla..,J;1"';;r#.* i.

',,o"""1u'" *' *prado por alsuien v rransl'*"d9'-1:'

:;;;;;,;.;;;;;;';" comuoicado de torma sorapada' sin prucbas de orisen v sÚ run-

i,","" i,"ir..^," *rf. _Su luer/a consiste en que no es averiguable y si lo luesc cesarla

E" ".,

**or,."rlu n"L;.ia o menlrs (Fraguasde Pahlo lqSS: /5)'"-'"irlr..'

¡.n","n¿e0cia a la generalizdcion Los defeclos de una personu pasan a

* rá"J", "

i.ao a g'upo al cu j pcrtenece cla"e raTaonacion Fl Iumor' iunro con

.i.rt ir.i^, * ,* .1" las ticnicas frecucntemenle ulilizadas por las personás que,difun-

;:il:;.;;'ñrl;uiiuo'. Ls. ad'm¿" un uehrculo iddneo para ladilusión dcesos

Ll"ll'.i"i-. ",^"rt

a" .onflicros socialcs la difusion de Iumores incluso conrradiclo-

;l;.:.,jl,^";;;;;;;;,. más para crear dc'oricntacio0 eDtre el publico'"""Ü1.,..., p* .r *i'-., ;"

": "_i::1p-:::i;ii,f "ff:inTf.X'iiit#:::,ffi1l":,tentadas únicamente en rumores es srempre

i'#,ili"i, á..,,rq,1"r pruta o norma der hrrPn ouehacer oeriod'stico'

Si el rumor no es intormacrdn pará nrnguna de Ia§ aclitidades,pr ohsionales-de.lo'

p"riáaiu".. iu.po* ro .s para el investigador' srn embareo en el campo de penoors-

--,lp iñvé{ ioacidn el rumor adqurere una especial Icle!ancia no para §u simplc diJu_

ti-.ii"" r",á *' uliliTaJocomopuDlodearranqueoparlidaparaundrnveslrg¿rorr'" il ,i"i.. ,,...r" el oeriodismo de invc\tigación pucde olorgar al rumor e§ el 0e P§_

t^ i"i1li. Ei'r..i'¿lo "pora un pequeio hilo nara i¡iciar una invelrsacrÓn tn mucnas

ó.asiones. las qrandes rnlUrmaciones 'urgcn dc eso§ peque'ios.hilos que acaban por con_

¡""i.,," i"r.i irr"""nrc. Ese es en deñniti!a su único valor''"''i^" ,ii,", i r[

"¡rma quc la invesligación llevada a cabo por su per'ódico y que

.".#;;1, i;;;"::;.üi'-: "'*'J ¿i '" '* or que corra por Tar agoza sesún er

"rái iála¿, utX" r.".aalo una graÍ fotuna en los últimos años'

"Ahí tedemos un ejenplo claro de cómo a veces un rumd puede conaertirs€ on

""" oil;;;.ii;, ;*' ;irregra generar ramavoria de ros rumores son raisos'"

Por sü paÍe, Ricardo Arqués ilustra co¡ uII ejer¡plo la posibilidad de armncar una

irvestigación desde el rumor'

''De'de hacc I rempo crrcula por Mrdrid v por rodai pi":t ':Ib'é": :l',ll:: 1:

que una a .s ma pesoru i,",: : :,i."x,"Jx::::':l:l'f ;,'..""."X';;,1ñ::::i,::medta Colombia. Es un rumor que t

"r"' "" i" .lii" q," ,' "' le das ninpún rator' incru'o en er o§o dc qk tuem verdad'

Hr! cicros indicio\ que apunlan a que puede ser verdal pero h¿bna que ir a Colom,,

ti"'p-u .". ptot*lt. ptbarlo v dPmorrar que e' cieno para poder puDlcar arsu'

10.4. La desinformación

La¿lesinformacióndevadirectamentedclautili¿ladquetieneelusodela.infol-.r.i¿, ."1" ," ,-".

"sencial-rncDte polflicá para buscar unos dcrermin'Í9::lle.l:l:'

";;ñ;;;;,¡,.""ralrnentc de conllicto Es en la bu\queda de esre obrerrvo cuaÚ

do surgen los actos de desinformación2

Caphulo l0: Pe orlisño de fttación y periodisno de inyestigación lgg

Para María Fraguas dc Pablo (1985: 11), desinformación es ..la acción del emisor queproccdc al ensamblajc de los signos con la intención de disminuir, sup mir o imposibi-Iitar Ia correlación entrc la rcprcscntación del receptory la realidad áel original;.

Elpcriodisla francósJear.Fcffó (Filato Magazine, 2G11-82) detine ta desinfonnacióncomo uná ¡'t¿cnica qüe consislc cn p¡oporcionar a lerceros i¡formaciones erróneas lle-vándoles a comclcr actos colectivos o a difundir opiDiones que corrcspondan a las inten-ciones del desinfonnador",

..'lalycomoafirmaMarfaIrraguasdcpablo,Ia.,teo a dc la dcsintbrmación,'surgede la interconexión enlrc la ,,teorfa dc Ios conflictos,, con la ,,teorla de la info¡mación:,.Las lócnicas de desinlormación I¡orecen fündamcntalmcnlc en aqucllas siluaciones enlas que se plantcan confljctos, sean dc la naturaleza quc scan. Allfdonde se dcsarrollansituaciones conllictivas proliteia la dcsinformación.

La desinformación precisa sicñpro de intenciona¡idad. El emisorde mensajes desin-lbrmativos lo hace conscientemente para crear confusión. Si no cxhtc intención no haymensajc desinformador. Puedc existir falta dc profesionalidad o cicrta dcsidia del pro-fesional que difunde un mcnsaje sir conlrasta¡ peíectamente sus fucntes de infor-mación, pcro no hay inlencjón desinformadora aunque los efectos finalcs puedan sersimilarcs.

Los emisorcs de mensajes desinformadores tratan de ..prcvocar e¡ ci rcccptor cam,bios dc opinión, de actitud o de actuación favorables al objetivo táctjco o cstratégicopropio'(Fraguas de Pablo, 1985: 5)- Encontramos así elementos qucscconfiguran comopuntos importantes en la "guera psicológica", cn Ia que la caráctcrística esencial delmensajc no cs que sea veraz, sino que sea crelble.

Para quc un mensaje desinlormador consiga electos debe ser creíble. Es dccir. nodebe ap¿rcccr dc forma manificsta la intención de¡ emisor. La veracidad sc susriirveentonoss por la crcdibilidad subjetiva. Lo importante no cs que un mensaje sca o no ci;r-to, sino que sca crcíblc. De ahí que Ia pcrsuasión se convicrta cn Ia principal prcocupa-ción dcl cmisor de mensajcs dcsinformativos, siemprc bajo las premisas dcl adágio,,cin-venccr cs vcnccr". Un mensajc dcsinlormador eD el quc sc contemple una c¡araintencionalidad sólo con Sran dillcultad podrá conseguir eleclos cn cl receptor. Desinformati-vamentc hablando, es un mal mcnsajc dcsinformado¡.

Con la djfusión dc mc¡sajes desinformadorcs el emisolno sóloconsigue que el rcccp-torsc oúentc hacia rcaccionos prcvisiblcs, prcviamente pensadas y cstudiada§, sino quchacc que el rec€ptor caminc cn la dirección quc cl cmisor pretende cstablccer.

llasta este momcnto nos hcmos refcrido a una desinformación claramente inten-cional y conscicnte. El enisor, con pl€na consciencia, cñitc un mensaje falso para bus-car efectos en cl leccptor. Sin cmbargo, Ia desinformación pucde ser también sub-conscicnte. La propia lbrmáción ideológica dcl cmisot, su posicionamiento polftico y supropia percepción subjctiva de la "realidad" pucden provocar quc cñita mcnsajes cla-rameflte marcados por una percepción pcrsonal determinada por su propia ideologfa.Sin cmbargo, lo que caracteriza a la desinlormación en un sentido estricto cs la inten-ción dc cmitir un mensaje incieflo con el objetivo dc provocar delerminada rcacción enel público.

Utilizamos aqul el término incierto porquc consideramos que es el más adecuadopara hablar del mensa.ie desinformador. Lo quc da valor al mensajc dcsiDformativo es

2OO Periodismo de investigdció¡. Teoría y púctica

§u üedibilidad. Por consiguiente, estsmos ante un mensaje que no siempre es rotalme e

falso, siro que, en muchas ocasiones, cilcula po¡ la ftontera de Io cierto y lo incierto'

recog.rendo;spectos de ambos para dal así cuerpo a url mensaje complcjo en el que la

mentira se da la mano con la verdad.La ¿lesinformación [ascierde a la ética v su única nolma es la efectividad y el éxito

mediantc la conlusión del adversario y el debilitamiento de su resistencia Con meffa-

ies coNtiuidos hábilmente el emisor co¡sigue englobar al rcceptor en su sisteml Pg aní

que pueda presenlarse dentro de un abanico tan amplio queva desde la Ialsegad abso-

lutaiasta,tnu uproxi-u,rión tal con la informaciór veraz que el límite es dilicilmetrte

perceptible.' Li desinformación cs uno de lo§ recusos más importantes del poder político para

milla¡ la resistcncia de sus adversa¡ios. Es porello por lo que elpoder político es preci

samente el máximo difusor de mensajes desinforrnativos. Para que el mensaje desinfor-

mativo sea eficaz prccisa de un calculado y constantc goteo en la difusión' La elecciótr

dcl momento es un aspecto e§encial para la eficacia del mensaje No es casual, po¡ tan-

lo, que sea casi siempre elr determhados contextos cuando los emisores ponen ell manos

dc los medios de comunicación iúoúnaciores con un claro cadz desinformativo'

La difDsión conscienle de mensajes desinformativos cs solamente posible con la com-

plicidad de los mcdios de comunicaciór. Aparcce así en ocasiones una estrecha y clara

ielación ent¡e Ios medios y lar Iuentes ale irllomacióD oficiales que participan del poder

político y emiten mensajes desinformadores. Una relación tarl estrccha que hace quc se

ileguen á publicar informaciones de düdosa veracidad sir citar Ia fuente de procedencia

o sin contrastar suflcientemente las fuentes de i ormaciórltn ocasioDes cl medio de comunicaciór puede ser "viclima Inocenle de los men_

s¿tcs desinlorm¡livo( que Iccibe de una tueDle guberoamcntal' En csle caso cl medro

rie comunicacióir aparece cor¡o la pdmera víctima de Ia desinforrnación'

Pero Ios medios de comunicación tambiénpueden ubicarse de fo¡mas difercntes etr

las eslrategias de la desinfomación.

"Puedc ser ya óo víctima, sino 'cómplice o coautor'de una estralegia desintor_

m¿liva puesta en marcha por el Gobierno o por cualquier oÚa fuenle ded4informa-ción. Puede se¡ 'autor principal' v por tanto elprincipal respo¡sable de los nensajes

desinfomativos que pübtica" (Borral, 1989: 89).

Pára evitar ser desinformados. los medio§ de comunicación deben mantene¡se siem'

pre alertas y ser conscientes dc que alguicn por dctrás puede estar intentadomanipu

ia¡los. Más arin cuando la totalidad de losPeriodistas invesligadores han rccibido algu-

na \er Disla\ talsas que buscaban Ia de5informacion ) el error.

Paio detenderse contra la desintormaciÚn y la in(oxicaciÓn intormativa lo\ medios

de comuricación deben apostar por ün periodismo de investigación er el quc el perio_

dista sea mucho más protágonista que sus fuentes, que tome Ia iniciativa;un pedodismo

en el que es él quien descubre las historias y ¡o son fuentes anónima§ las que se las faci-

liran acahadas y dispueslas ya para publicar'AntonioRubio afuÍa qüe han intentado desinfornarle ermuchas ocasiones' irclu

so con documentación preparada y falsificada.

s totalmentclo ircierto,

cn el quc la

ad y el éxitoCon mensa-gma. De ahíscdad abso-lificilmente

olítico paraico es preci-Ljc desinfor-La eieccióntal, por tan-

itivo.

:cha y claran del poder

lc los men-to el medio

lo manipu-ibido algu-

)eriodismosc las faci

Ca?itulo I0: períadismo deittt.tcíón y peñodisna de í yest¡sa.ióñ 201

"Por ejemplo,le puede llesar una información, u¡.dossicr,, con un80% dc infor-mación válida y un 20óló de inforñación que no es cicfa y que ha sido manipulada i¡tencionalñente por atgún,ninitcrio o atgún scricio con rainLnción de inducirre al eror..,

La lillración procedente dc una fuente desinformadora no ticne por qué ser tolal-menle falsa. sino qüejunto con datos que son reales pueden aparec€; desiizadas lalse-dadcs intencionadas. En esos casos, como en cualquier otra infoimación fil¡ada.la desin_formacion solo \e puede eludir Duliendo Ia intoll¡¿cidn. cumprob¿ndota con rigor )publicándola solamente cuando no cxisle ninguna duila acerca de su ve¡acidad.

Josó María Irujo relata cóüo cn plena investigaciór en el caso ..Rolalán,, intentaro¡intoxicarles poniendo en circulación intbrmaciores falsas:

"Se iñte¡ró vender¡os ta cspecie, en la que otrcs cayeron, dc que Roldáó no se habíae¡riquccido cobra.do mmisioDes. que no era un delinoente, que .obraba un sobrcsueldoyque su fortu¡a prove¡ía dc ese sobrcsueldo. Eso es unaintoxicación como t¿ copa deun pino. No c¿ímos c¡ esa rampá porque teníamos la información suricie¡te para ;aberque el 99olo de su enriqueciniento procedia de unas actividades itícitas quc derivaban delcobro de comisiones a los co¡structores y suminisrradores dc Ia Guar¡ia Civil y que elsob¡esueldo. aunqucexistía, ya quecomprobamos que sí cxisría, era u¡acandd;d insig,ifcantc comparándolacon tos ineresos oblenidos á iravés de jas mmisiones y quc mei-dÍan a miles deúittones. ¿Alsuicn se pucdecreer cn esle país que Roldá;1i;nc 5.000millones en Suira provc¡ienfes de sobresueldos?

Han habido otras o.¡sione( Én l.rquealguien te llama pa¡a ofrec€rae alSo y que lüe_gocompruebas que era absolurámcnte fatso. Te dascuenraasírlc que re han in;rtadonunipuhr, intoxica¡, dcsinformar. por cso es úuy imporra¡1c .liferenciar cuando 1a ini-ci¿tiva parre dctpcriodista o cuando pa.te de una fuente. Aso es importanrisimo. porquecuando Ia iniciariva pate dctperiodista et¡rabajo es nrucho más limpio, objetivo y;ero.,,

I'Iáy quc ser conscie le dc qu( e.r ld práclica del fcriodijmo de inveslig¿c,.ir (l pro-L"ioral irresrigador siemnrc (s intoyicado cn JIguna ocasion. l-s mas. cuorro mrr."r-ca est¿ d¡ veri-ficar alguna inrorm¿cjon imporjante. má, l¿ic;Je( qu< en cl enLorno Je larn\e\lrgacrón alguicn e\te inl(nl¿ndo desintbmr¿,lc con

"lgo.

10.5. Técnicas de desinfomación

VladinirVolkofl en una novela litulada Elmrr?ld¿ ambientada en la sedc ce¡r¡,1del l(CB'cr \ rciu de irr(ligencia Lle l" c inLr t rn.t;n soviilicá ¿rios JDte\ dc ta ca.dadel "Muro dc Berlín", proponc un reccrario para cl buen hacer dcsidormalivo de losagentes de inleligencia rusos. Sc lrata de la puesta en práclica de tácticas desinforma_doras que se alcjan de lás aclitudcs éticas ydeontológicai que deben primar cn cualquierlmbajo periodíslico. Volkoffcita como lácricas desinformarivas las siguicnles (Mu;oz,1994:58,59):

7) La cohtruveftlud. Colsiste en contar lo cortrarjo de lo que ha suceciido cuandono errslen rciligos o medio( acce,ihlcr de comtrobacidn.

202 Petiodisno de inves¡iSacih' Teoría t Prá¿ricd

7\ M¿l.lar lo ve adcto con tofatso'tJnsolodalocierto y lácilmcntecomprob¿-- ii. n.r¡r . o.rlr olros mucho' tal(os de imposible comprobacroo l a eros'

len;ia dc ese dalo ciefo d¿ imagen de uerosimiÜlud a todo el mensalc'

tr'i)i",-", t" urt¡¿ra Cuando un hecho que no con! iene quc §e conozca es.la¡

;vi;cnte oue no se pucde ocultar' 'e puede dcformar o despreslrgrar anaoreÚ'

¿.i. á""ii"t ^¡*.,i"t rr in{erpretaciünes exlravagaole§ o inoportuna§

4t -Modifrcdr

et ont"xto 5. ¡n"n¡¿¡ ¡6¡ivos o juslifcaciones para quc lo que se

""""t * aiu.re a la con\enienciá del dcsioformador '

st'oir.¡^1i'i-"r¡i",,¡¿ Cuaodo existe un apabullanle numero de dálos v prue-

ha; de lo ouc se prelende ocullar' se pueden mczclar prolrlamente ouu5 u¿'ui

;i"',".: i;H;;;i;;i;,'u. J' o.oao qu" a r"' centrar qüeda diruido ante ra

avalancha de datos que se ponen a dicñÓsición del lector'

6\ anñvrrP Pn el comenrario' Sr no sc priede modrñcar lo suslancial dc la nolicia'"' .I"í.r" ""r.""r..n normalidaJ'lerosacandoconclusiones a convenrencra

¿.i¿."inl"r.uaot, u."nluando ademas la imporlancia de la5 conclustones

,,i') ii,,""r¡¿" s¡"o,s viable la modific¿cidn u oculracidn de lo§ hcchus se expo-

nen con clariclad, pero acompañados de ejemplos o iluslraoone§ que coDtrao)

ganlas tesis que se pretende mantencr ocultas'

stTi i"nera¡,ir¡¿,. tonsi're en pa'ar de lo parliculara lo general Para ello §e

' .l"..rtr" rno. *riosdetalles' aunque scan secundarios p¿mconstruir loda

,"." t""J..ritrai.'.¡a con los hechos sobre Io§ que se desrnform¿

q t,; seku¡¿n, enta¡osa. cuaDClo se quiere informar sohre asurtos polemrco' pero-'

,"iü""á" i, al,iá;macion se pueacn 'eleccionar

la'opiniones' roi sondeos'

L...n"o""tu.. lr. "u,tu,

u los mcdios informativos o cualquier otra rcacciór del

p,ltil¿i p"."'á".ü""t aesproporcionadamente Ia versiór que corvenga a los

desinfomadores.,o, t "',,r")**¡, a" ¡.parcÍttidad se prr.dc encargar a una per§ona dc sobrado

rcco;ocimienlo y presligio o bien quP sea aprcciada popülarmentc que oerrc¡'

,l^ 1.. o,¡¡ro.diuisru y la§ lc§isque con!icneo a lo( desrnlormadores' lln cse

;l;;[;,". ;" i, úaÜdad de jnnemenrar el clecro' se puedc conrrasrar esra

:.i;;;;;;,;;;;ria rormurada por una pcrsona 'rc

e'ca'o pre'tisio'

cuut,lui.ra O" estus p.acficas desinlorrna¿loras son exte¡sibles a lodas las especia_

lidades del lrab¿io inlomatr\o y por supueslo ¿ lo' proPios texlos de invcstig¿cion En

iilil'-", i"i.";.¿l'rn ¿e inu'"tiÉaii¿n la ¿c'inrormación cobra un papcl Llc esPe-

:1J;:,;"ffi i,;;;; i"*' """i''u q'"

"rperiodi§mo de invesrisacidn es una pr¿ic'

tica informativa de "Poder"''''" ;i; ;;.'.r" ,i"rierc el periodisla a con§ecuencia de su acceso a daros que des

*"í j" JL'.lliJüir*' v"'l i"'.'¿' ¿' '^ prorasonista5 por manrenerlos oculros:

".i".i.i..¿1" ¿"..í"unicacion para cnfrentane con esos daros en la mano á rnslrlu

H;'":;;;;;;;"";;Ju'. pu,ri¿o' poli'i'o' ^ociacroneq

cullurales economicas' crc

ir" i"l", ,." a" ,'¿.icas ¡unitivaJo cuando menos' reprochable''.

tn la actividad periodi(lic¡ invesÚgadorá precisajnenle Poresla omett]:i',::P:::'de la oue habl¿mos, es de imPorlancia ülal manlener en (u má)Jma exlensron ros Pr rr_

.ipi"J.,i.* q* 4"t., nred;minar en la protesion period§tica'

Capítulo l0: Perio¡l¡sno ¡le Íhración )' per¡odismo de inwstisación 203

l,os hechos rcvelados debeD hablar por sí solos. Sóio Ia comprobaciór pormeno -zada de los datos y su explicación da una especial dime¡sión al PI. Las técnicas de manipu-lación, denostadas eÍ cualqoier trabajo periodístico, deben brillar por su ausencia enesta especialidad iÍformativa.

El ?I no se debe ejercer como venganza, sino como u¡ instrumento de contml públi-co- Sólo asípodrá reva¡ida¡ permanenlemenle el papel de prestigio que la sociedad leotorga.

Notas al Capítr¡lo 10

Según Mar Fontcuberta, un¿buenaparte de las noticias que publican 16 medios de informa-ción se básafl en no ácontecimientos. Es decir, roticid quese corstruyen, produceo y ditun'den a partir de hechos que ¡o han su@dido y que sisnifim una clara tendeacia para mi¡ar lasbases sobre las que se há surontado tradicionalmcntc cl discurso penodístico: realidad,veracid¿d y actualidad. Para profürdiz& en efos corceptos se puede estudiar Ia obra ¿a Nrr¿c,r.Pisras paru percibirel nunlo. Paidós, Barcelona, pásinas 26-34.Para estudiai eÍ profotrdidad cl fcnómeno de Ia desirformació. es impresindible consultar elIibro de María Fraguas de Pahlo t;,fülado T@Ía de In desinfotñación, Edttor;at Athañbra.Madrid.1985.