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La Corte Interamericana de Derechos Humanos ha convocado a la audiencia pública del Caso N° 12.345 “CASO PUEBLOS INDÍGENAS KUNA DE MADUNGANDÍ Y EMBERÁ DE BAYANO Y SUS MIEMBROS VS PANAMÁ” que tendrá lugar en la sede de la Corte Interamericana, en San José Costa Rica, el miércoles 2 de abril del 2014 a las 9 a.m.
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COMARCA KUNA DE MADUNGANDI LEY 24 DEL 12 DE ENERO DE 1996, CARTA ORGANICA DE DJ-MGJ Nº 228 DE E DE DICIEMBRE DE 1998
HACIA EL FORTALECIMEINTO DE NUESTRA IDENTIDAD COMO PUEBLO KUNA DE ABYA
YALA – AMÉRICA
LOCALIZACIÓN: Madungandí (oficialmente Comarca Guna de Madungandí) es una
Comarca indígena de Panamá, creada por la Ley 24 del 12 de enero de 1996 a partir de
territorios segregados del distrito de Chepo, al este de la provincia de Panamá.
En esta comarca indígena habita la etnia Kuna. Su
superficie es de 180 mil hectáreas y colinda al
Oeste con el Corregimientos el Cañita, al Oeste con
la provincia de Darién, al Norte con la Comarca
Kuna Yala, al Sur con el Corregimiento de El Llano
y Torti
En la comarca se encuentran 14 comunidades: Akua Yala, Ibedí, Pintup, Icandí, Piria,
Cuinupdi, Nargandí, Ogobnawila, Diwar Sikua, Capandi, Wuagandi, Dian Wuardumad,
Narasgandi y Tabardi
ADMINSTRACIÓN: Su funcionamiento, administración y organización están sujetos a la
Constitución de Panamá a través del Órgano Ejecutivo. El Congreso General Kuna, es la
máxima autoridad tradicional de la comarca. La ley reconoce y garantiza, los congresos
regionales y locales de conformidad con su tradición y su carta orgánica; siempre y cuando
las decisiones que emanen de estos congresos, no sean contrarias a la Constitución y las
leyes. El cacique, que representa la autoridad superior tradicional de la comarca, es
escogido por el Congreso General.
En cada una de las poblaciones que conforman la comarca existe un saila, que es escogido
de acuerdo con los procedimientos que señala la carta orgánica.
Audiencia Pública sobre el caso de la Inundación de las tierras ancestrales kunas de
Madungandi por La Hidroeléctrica Bayano Ascanio Villalaz (Panamá)
La Corte Interamericana de Derechos
Humanos ha convocado a la audiencia
pública del Caso N° 12.345 “CASO
PUEBLOS INDÍGENAS KUNA DE
MADUNGANDÍ Y EMBERÁ DE BAYANO Y
SUS MIEMBROS VS PANAMÁ” que tendrá
lugar en la sede de la Corte
Interamericana, en San José Costa Rica, el
miércoles 2 de abril del 2014 a las 9
a.m.(Hora Tica), y 10 a.m. hora panameña
y se extiende hasta el final de la tarde. La Hidroeléctrica Bayano Ascanio Villalaz
(Panamá)
COMARCA KUNA DE MADUNGANDI LEY 24 DEL 12 DE ENERO DE 1996, CARTA ORGANICA DE DJ-MGJ Nº 228 DE E DE DICIEMBRE DE 1998
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Estaremos participando en la audiencia pública con una delegación de 56 kunas presididos
por sus caciques, autoridades tradicionales, líderes territoriales y Guías espirituales.
La audiencia se transmitirá en vivo por internet mediante el sitio:
http://www.corteidh.or.cr/
Después de la audiencia, a las 7 p.m, delegados kunas ofrecerán una conferencia de
prensa en las instalaciones de la Corte Interamericana de Derechos Humanos.
¿De qué trata el caso?
Los hechos de este caso se refieren específicamente a la violación continuada del derecho
a la propiedad colectiva de los pueblos indígenas Kuna de Madungandí y Emberá de
Bayano y sus miembros, como consecuencia del incumplimiento por parte del Estado de
Panamá del pago de indemnizaciones económicas derivadas del despojo e inundación de
los territorios ancestrales de las víctimas, a partir del año 1969, por la construcción de una
represa y la Hidroeléctrica Ascanio Villalaz sobre el río Bayano.
El caso también se relaciona con la falta de reconocimiento, titulación y demarcación
durante un largo periodo de las tierras otorgadas
al pueblo indígena Kuna de Madungandí, así como
con la falta de reconocimiento, demarcación y
titulación, hasta el día de hoy, de las tierras
otorgadas al pueblo indígena Emberá de Bayano.
El incumplimiento de estas obligaciones estatales
en materia de propiedad colectiva de los pueblos
indígenas estuvo acompañado a su vez de un
sistemático desconocimiento de múltiples compromisos legales asumidos por el Estado,
incluso hasta el año 2010. Además de lo anterior, en el presente caso el Estado panameño
incumplió con sus obligaciones de prevención frente a la invasión de colonos y la tala
ilegal de madera como corolario de su obligación de protección efectiva del territorio y los
recursos naturales de los pueblos indígenas Kuna de Madungandí y Emberá de Bayano y
sus miembros. Esta situación se recrudeció a partir de la década de 1990.
¿Por qué la Comisión elevó el caso ante la Corte Interamericana de Derechos Humanos?
El caso se envió a la Corte Interamericana de Derechos Humanos el 26 de febrero de 2013,
porque la Comisión Interamericana de Derechos Humanos consideró que el Estado no
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cumplió con las recomendaciones contenidas en su Informe de Fondo sobre el caso. En
dicho informe, la Comisión Interamericana recomendó al Estado concluir prontamente el
proceso de formalización, delimitación y demarcación física de los territorios de estos dos
pueblos y sus miembros; cumplir con otorgarles una pronta y justa indemnización por el
traslado, reasentamiento e inundación de sus territorios ancestrales, cuyo monto
adeudado sea determinado a través de un proceso que asegure su participación, acorde
con su derecho consuetudinario, valores, usos y costumbres; adoptar las medidas
necesarias para proteger efectivamente el territorio de estos dos pueblos con el objeto de
garantizarles su supervivencia física y cultural, así como el desarrollo y continuidad de su
cosmovisión, para que puedan continuar viviendo su modo de vida tradicional, y
conservar su identidad cultural, estructura social, sistema económico, costumbres,
creencias, tradiciones distintivas y sistema de justicia.
La Comisión también recomendó al Estado adoptar las medidas necesarias para asegurar a
ambos pueblos el acceso a programas de salud y educación culturalmente pertinentes;
detener la entrada ilegal de personas no indígenas en sus territorios y trasladar a los
actuales colonos ocupantes a territorios que no pertenezcan a pueblos indígenas.
Asimismo, garantizar el consentimiento libre, previo e informado de los pueblos Kuna de
Madungandí y Emberá del Bayano de los planes, programas y proyectos que se pretendan
desarrollar en sus territorios; establecer un recurso adecuado y eficaz que tutele el
derecho de los pueblos indígenas de Panamá a
reivindicar y acceder a sus territorios tradicionales, así
como a proteger sus territorios y recursos naturales
frente a terceros, incluyendo el respeto del derecho
de los pueblos indígenas a aplicar sus normas
consuetudinarias a través de sus sistemas de justicia.
La Comisión solicitó además reparar en el ámbito
colectivo e individual las consecuencias de las violaciones a los derechos humanos
determinadas, en especial, la falta de protección de los territorios ancestrales, la falta de
respuesta eficaz y oportuna por parte de las autoridades y el trato discriminatorio al que
fueron sometidos; y adoptar las medidas necesarias para evitar que en el futuro se
produzcan hechos similares.
¿Cuál es el potencial aporte de este caso a la jurisprudencia internacional en derechos
indígenas?
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YALA – AMÉRICA
El caso presenta una oportunidad
para que la Corte analice el alcance y
contenido de la obligación de
reparación de los pueblos indígenas
cuando se ha determinado que no es
posible la restitución de las tierras y
territorios ocupados y usados
ancestralmente. Además, el presente
caso es representativo de la relación
intrínseca entre el cumplimiento
efectivo y oportuno de las
obligaciones de reconocimiento, titulación, demarcación y delimitación de las tierras y
territorios de los pueblos indígenas, y la situación de vulnerabilidad y desprotección frente
a actos de terceros con impactos profundos en los medios de subsistencia tradicional y en
la vida social y cultural.