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Charla Shulgin en Barcelona - Ruiz Franco
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PIHKAL Y TIHKAL, los dos libros de los Shulgin que hemos traducido al castellano y vamos a publicar
Droguería, es decir “establecimiento donde se venden drogas”, de los años 20, Estados Unidos
Universidad de Harvard, la primera donde Shulgin probó suerte, pero sin éxito, por ser
demasiado elitista para él
Fotografía de un barco de guerra de los Estados Unidos, durante la Segunda Guerra Mundial
Dow Chemicals, donde Shulgin trabajó diez años y obtuvo el primer insecticida biodegradable, el
Zectran
Caja del famoso Zectran, creado por Shulgin y que supuso millones de dólares
para Dow Chemicals
Un Shulgin muy joven, en su laboratorio. Por la edad, debía de ser de la época en que aún trabajaba en la compañía Dow Chemicals
El gran escritor y psiconauta Aldous Huxley
Portada de una de las ediciones en castellano del famoso “Las puertas de la percepción”, donde Huxley
narró sus experiencias con la mescalina
Las drogas psiquedélicas son una excelente puerta de entrada a nuestro cerebro, según
Shulgin
Cuadro con un antiguo alquimista: experimentando, estudiando y
reflexionando, todo a la vez
El cerebro como objeto de conocimiento, y como fuente del árbol del conocimiento
El ser humano como microcosmos, cuyo conocimiento permite el conocimiento del
macrocosmos, gracias a que hombre y universo tienen la misma estructura (isomorfismo)
Un Shulgin ya maduro, en su mejor época, cuando decidió dejar Zectran y dedicarse a
sintetizar sustancias a montones.
Ann Shulgin, muy joven, antes de la época en que conoció a Sasha
Ann y Sasha ya maduros. Se conservan muchas fotos en las que salen juntos, y casi siempre en
actitud cariñosa
La feliz pareja, paseando por el campo
Una de las típicas fotografías en que la pareja aparece sonriente
De nuevo sonriendo, aquí ya con cierta edad
Y otra más
Aquí están serios y pensativos, seguramente hablando sobre algún
tema importante, por la cara de Sasha
En esta fotografía ya se les ve bastante mayores
Ann Shulgin, aquí sin Sasha
Ann Shulgin, una fotografía de hace pocos años
Siempre sin perder su buen humor
Una fotografía de sus últimos años
La DEA, la policía de drogas estadounidense. Todo un pelotón entró en la casa de los Shulgin para registrarla por
completo, en busca de pruebas para incriminarle
PIHKAL, publicado en inglés en 1991, el primero de los dos grandes libros de los Shulgin, que estamos a punto
de lanzar en castellano. Tiene 1000 páginas en su versión inglesa; en la nuestra será aún más extenso
TIHKAL, publicado en 1997, y cuyo primer capítulo cuenta la entrada a saco de la DEA en la
casa de los Shulgin, tiene un cariz más político
Posando, en su laboratorio
El genio, trabajando
¿Qué nueva sustancia habrá descubierto?
Shulgin, entre cactos. Un simpático dibujo de Pablo Casares, hecho para
nosotros
El montaje que hicimos para nuestra página web, www.shulgin.es
Entramos en el laboratorio de Shulgin. Algunos de sus frasquitos, repletos de
sustancias milagrosas
Más frasquitos. En las etiquetas, en lugar del nombre, la fórmula química
Los dos maravillosos y enormes libros que hemos traducido. Una labor de muchas
personas durante todo un año
Fórmula química de la MDMA, bautizada como “éxtasis”, aunque
Shulgin hubiese preferido el apodo de “empatía”. Es evidente que el primer nombre vende más que el segundo
Pastillas de éxtasis
Más pastillas de éxtasis. Es evidente la gran imaginación de sus fabricantes
Un bonito dibujo con diversas pastillas de MDMA, y en el bote la dosis media:
120 miligramos
Fórmula de la 2C-B, también conocida como “nexus”, invención de Shulgin y una de sus sustancias
más conocidas y preferidas del público en general
La 2C-D, otra de las favoritas del público, a la que Shulgin llamaba “tofu
farmacológico”, porque, además de sus propiedades, combina bien casi
con todo e intensifica la experiencia de esa otra sustancia
Fórmula de la 2C-E, una sustancia psiquedélica
bastante potente
Fórmula de la 2C-I, otra de las favoritas del público
Fórmula de la AL-LAD, una sustancia psiquedélica bastante popular actualmente
La DMT, o dimetiltriptamina, la llamada “molécula espiritual”, presente en la
ayahuasca, en la que se mezcla con un IMAO para que sea activa por vía oral
La ibogaína, una sustancia con propiedades psiquedélicas y
estimulantes que es muy estudiada por servir para tratar la dependencia a
opiáceos
La LSD, también estudiada por Shulgin en TIHKAL, para la cual ofrece un proceso de síntesis distinto al utilizado por Hofmann
Un simpático dibujo de Pablo Casares: un corazón hecho de fórmulas y la dirección de
nuestra web en el centro
Antonio Escohotado conoció bien a Shulgin y participa en nuestra edición con un
emotivo artículo en su recuerdo
Jonathan Ott también participa en la edición en castellano de PIHKAL y TIHKAL, con un proemio
para cada uno de los libros
La cantante Alaska conoció a Shulgin y fue introducida por él al consumo de la MDMA. También aporta su
testimonio para nuestra edición
José Carlos Bouso es el autor del prólogo a PIHKAL, edición en castellano
El doctor Fernando Caudevilla también escribe un artículo en honor a Shulgin
El filósofo José Carlos Aguirre aporta a nuestra edición un erudito artículo sobre
Shulgin y sus sustancias
Manuel Guzmán, catedrático de química, también colabora con nosotros
Los dos libros originales en inglés, junto a la dirección de nuestro portal en Internet
Montaje con pastillas de éxtasis con la dirección de nuestro portal en Internet