Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

Embed Size (px)

Citation preview

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    1/109

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    2/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 1

    PO BAROJA

    COMUNISTAS, JUDOS YDEMS RALEA

    1 edicin 19382 edicin 19393 edicin 1993 - 500 ejemplares

    Distribuye: Librera EuropaAP 9169 E-08080 BARCELONA

    Se recomienda la difusin totalo parcial de la obra

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    3/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 2

    Reseas (no corresponden al libro impreso)

    Comunistas, judos y dems ralea (1938).

    Se trata de un libro formado por fragmentos de obras y artculos de Baroja anteriores a 1936 ydel tiempo de la propia guerra, en torno exactamente a lo que el ttulo dice. Es libro de bien curiosahistoria, que puede resumirse en que Jos Ruiz Castillo (antiguo director de Biblioteca Nueva) yalguien de la familia del novelista y con su aquiescencia probablemente su sobrino Julio CaroBaroja prepararon tal edicin, a la que se puso como prlogo un artculo de Gimnez Caballeroaparecido en 1934 en la revista fascista JONS: Po Baroja, precursor del fascismo espaol. No setrata, claro est, de buscar responsabilidades por la publicacin de este libro, mas parece claro que,en todo caso, el autor no fue Gimnez Caballero. El propio Baroja dira de tan famoso libro tiempodespus, simplemente, que el ttulo de la obra es lo que resulta algo detonante, pero no se lo puse

    yo, sino el editor de Valladolid. Sin embargo, aparte de todo esto, el libro es, en verdad, uno de losms completos compendios de racismo, antisemitismo, antiliberalismo y antirrepublicanismo, ascomo de elogios desmesurados hacia el nazismo alemn.

    (Julio Rodrguez Purtolas: Historia de la literatura fascista espaola. Madrid: Akal, 2008, vol. I,pp. 162-163. Modificada ligeramente la puntuacin.)

    http://www.cervantesvirtual.com/servlet/MuestraForo?autor=2945&comentario=4901

    [] Por lo dems, Baroja es seguramente el escritor espaol ms sepultado en prejuicios, tanto por sus amigos como por sus enemigos. Para los primeros, don Po era un vejete grun ycascarrabias, atornillado a una boina, que escriba libros entretenidos, aunque pasados de moda, yviva en su tonel como un Digenes moderno. Entre los segundos, los hay de varias clases: unos sonlos exquisitos de oficio, como Paco Umbral, que, a falta de un Baudelaire madrileo, da en colocarla pirotecnia de algunos ingenios menores, como Gmez de la Serna, por encima de los que llamatraperos de la literatura, como Baroja. Otros son los comisarios polticos, como RodrguezPurtolas, para quienes la nica vara de medir a un escritor es su fidelidad a las ideologas deprogreso y a la causa del proletariado; ya Tierno Galvn, en un estudio sobre la Generacin del98, la haba considerado sin matices como precursora del fascismo, con ese espritu reduccionistay ventajista que caracteriza a nuestros intelectuales. Los terceros son los gamberros como Gil Bera,

    cuyo libro no es ms que una secuela nacional del grotesco y rentable gnero americano de lasunauthorized biographies: hasta el hecho de que Baroja fuese uno de los primeros espaoles enoperarse de la prstata y sobrevivir a ello le produce una mezcla de hilaridad e indignacin (a partirde eso puede juzgarse todo lo dems).

    No hay por qu ocultar que Baroja era racista y antisemita, basado en supercherasantropolgicas de raz romntica; homfobo, como la mayora de sus contemporneos, que nisiquiera haban pensado en inventar esta palabra; misgino, aunque mucho menos de lo que dicenquienes no le han ledo o lo han hecho sin atencin e, ideolgicamente, lo que Garca-Posada hallamado con mucho acierto un liberal autoritario. De todas formas, Comunistas, judos y demsralea no es, como he ledo por aqu, un ensayo, sino una recopilacin oportunista y capciosa defrases espigadas en la obra de Baroja, siempre sacadas de contexto, que pergearon el escritor

    fascista Gimnez Caballero y el editor tambin fascista Ruiz Castillo; la historia de este libro, queCrculo de Lectores ha decidido incluir en sus Obras Completas, a mi entender de maneracompletamente abusiva, se puede leer en Los Baroja, de su sobrino Julio Caro. Del

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    4/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 3

    anticomunismo de Baroja no cabe dudar, pero tampoco de su repugnancia intelectual, esttica yhasta fsica por el fascismo, de la que hay muestras suficientes en sus memorias, sus ensayos ysus artculos periodsticos. Ledas hoy, sus diatribas contra el comunismo no pueden chocar comoen los aos 60 o 70; ahora ya sabemos lo que haba detrs de aquello y las podemos leer con muchams naturalidad. Algo que no puede extraar en quien, como reconocen Andrs Trapiello y AntonioMuoz Molina, fue uno de los espaoles ms cultos de su tiempo, quien, cuando casi nadie pasabade Pars, asom la boina por tierras tan hiperbreas como Dinamarca.

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    5/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 4

    Leer y entender es algo;Leer y sentir es mucho;Leer y pensar es cuanto

    puede desearse

    PIO BAROJA,

    EL ETERNO INCONFORMISTA

    Prologar una obra de Po Baroja puede llegar a ser una tarea ms o menos fcil o difcil,

    dependiendo del ttulo elegido; pero prologar la obra que nos ocupa, Comunistas, judos y demsralea, puede hasta cierto punto llegar a ser un trabajo realmente contencioso. Mxime si tenemosen cuenta que ya fue prologada en su da de estreno Y suficientemente bien prologada por elmismsimo Ernesto Gimnez Caballero!, y resaltando asimismo todos los visos de polmica quelevant en su da no slo dicho prlogo, sino el propio libro.

    Mucho se ha hablado de esta obra aparecida por primera vez en Valladolid el ao 1938, en plenaguerra civil espaola, Y una segunda Y ltima edicin, tambin en Valladolid, pero en 1939. Nuncams se volvi a reeditar, ni siquiera en las Obras Completas que la Biblioteca Nueva empezaraen 1946. As pues nos hallamos ante una verdadera primicia, si tenemos en cuenta que han pasadoms de 50 aos desde esa segunda edicin, Y es un texto ms que agotado (en las libreras) Y msfresco Y de actualidad que nunca, por su interesante contenido.

    El prlogo que haca de antesala a esta magna obra, Y escrito por el celebrrimo GimnezCaballero, tena por ttulo Po Baroja, precursor espaol del fascismo, Y en l, entre otras muydiversas cosas, afirmaba que Baroja haba exaltado el fascismo antes incluso que el propioMussolini, en su libro Csar o Nada, una de las obras cumbre del escritor vasco.

    Esta afirmacin puede o no ser discutible, pero indudablemente lleva bastante razn, pues endicha obra se plantean muchas directrices y disyuntivas que enlazaran despus en la prctica con elmovimiento fascista y por supuesto con el nacional socialismo alemn.

    Se ha de afirmar por ello que Po Baroja era un fascista o un nazi? Rotundamente, no. Barojacritic a Mussolini ya Hitler, ms al primero que al segundo, en algunas ocasiones no muchas,ciertamente, aunque no critic directamente al fascismo o al nacionalsocialismo, sino tan sloveladamente. Dnde est la clave del pensamiento barojiano?

    Probablemente estuviera en que l jams se cas con nadie. Fue el eterno inconformista, elanarquista en su estado ms puro, tanto que ni el anarquismo se salv de sus trasgresiones. Y porello, no se le puede tachar de ligado a ninguna ideologa.

    Pero esto tampoco significa que no tuviera las cosas claras sobre temas puntuales, de los cualesnunca tuvo apenas ninguna duda, ya los cuales mantuvo siempre en la picota. De este modo, y si serelee bien su obra completa, veremos concienzudamente visible que hay unos parmetros que va amantener inclumes, cuales seran, entre otros, su apasionado furor contra el cristianismo (dirigidomuy particularmente contra la iglesia catlica y los jesuitas), el comunismo (desde sus iniciossocialistas con Karl Marx, pasando por la teora prctica en Rusia), el judasmo (la nica raza con laque sistemticamente arremete en un porcentaje aproximado de un 85% del total de sus obras) , lademocracia, y algn que otro tema en menor porcentaje.

    As que fcilmente es presumible que cuando Gimnez Caballero tachara de precursor delfascismo en Espaa a Baroja, no andara muy desencaminado. Por cierto que esta afirmacin levali a Baroja una carta enviada por un viejo fascista italiano que se quejaba de que eso no era

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    6/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 5

    cierto, y que el fascismo era un invento italiano ya mucha honra.Cmo se gest Comunistas, judos y dems ralea. Mucha polmica hay tambin en la

    creacin de la obra, y nadie se pone de acuerdo: todo el mundo le echa la culpa al otro, y nadiequiere acarrear con la paternidad de la idea primaria. Podramos resumir el planteamiento del

    problema en cuatro piezas, en cuatro personas que tuvieron que ver con el alumbramiento de estaobra, hija al parecer bastarda. En primer lugar el propio escritor Po Baroja, en un segundotrmino el mencionado Gimnez Caballero, en tercera posicin el editor de la obra Ruiz Castillo, y

    por ltimo el sobrino de Baroja y magistral escritor Julio Caro Baroja.Qu dijo en vida el propio escritor de su propia obra? La verdad es que mucho no dijo, pero

    tampoco desdijo, y como, parafraseando a Baltasar Gracin, mucho ayuda quien no estorba, y elque calla otorga, podramos casi afirmar que Baroja nunca en ningn momento reneg de su obra. yes ms, Baroja, un ao antes de su muerte, en 1955, ya travs de dos obras suyas, paseos de unsolitario y Aqu Pars, habla muy sucintamente de la misma de la siguiente manera: Conmotivo de haberse publicado en Valladolid, zona nacional, un libro mo, en el que mi editor habareunido algunos artculos periodsticos aparecidos haca tiempo, antes de la guerra, y al que puso elttulo circunstancial y llamativo de Comunistas, judos y dems ralea....

    Qu se puede colegir de ello? Bsicamente dos cosas: una, que diecisis aos despus deaparecida la obra en cuestin, habla de ella como un libro mo, esto es importantsimo, puesreconoce su paternidad ntegramente; y en segundo lugar, coloca el muerto de tal gestacin aleditor Ruiz Castillo. Como vemos, no aparece para nada el nombre de Gimnez Caballero.

    La segunda prueba aportada por el propio Baroja en este juicio de valores sobre la obraprologada, la tenemos de nuevo de la mano de don Po en la segunda obra reseada, Aqu Pars,donde comenta: Algunos me achacan como si yo hubiera hecho algo terrible, el que se publicaraun libro mo con el ttulo de Comunistas, judos y dems ralea, en tiempos de la guerra civil. Estelibro no es ms que una recopilacin de artculos y de trozos de libros mos. El ttulo de la obra es loque resulta algo detonante, pero no lo puse yo, sino el editor en Valladolid, en 1938.

    De nuevo tenemos aqu que Baroja habla de un libro suyo, y reafirma que tal obra fue una

    recopilacin hecha a cabo por su editor. Retengamos estos datos en la memoria y vayamos por elsegundo testigo, el de cargo. Y As lo nombro pues es el que segn la tesis oficialista se ha tragadoel mochuelo, y ha cargado con la paternidad de la obra.

    Ernesto Gimnez Caballero, escritor lcido y de afilada pluma, era un personaje muy conocido ycodiciado en el prefascismo espaol y en los tiempos primerizos de Falange. Colaboraba con susartculos en diversas revistas y especialmente en la clebre JONS perteneciente al movimientosusodicho. En esta revista, en el nmero 8 del ao 1933, escribira un artculo sobre Baroja titulado

    precisamente Po Baroja, precursor espaol del fascismo, que no era otra cosa que el celebrrimoensayo que cinco aos ms tarde pasara a ser el prlogo de la obra que nos ocupa.

    Tuve la ocasin de visitar en varias ocasiones a Gimnez Caballero en su domicilio madrileo, afinales de los 70 y principios de los 80, y recog de primera mano el testimonio suyo sobre toda la

    polmica que nos ocupa. Segn l, se enter por terceros que haban visto un libro de Barojaprologado por l, cosa que le dej asombrado: Un da, estando yo en Catalua con la IV Divisinde Navarra, con el General Camilo Alonso, me dijeron que haban visto un libro de Po Baroja

    prologado por m. Yo les dije que no tena idea de haber prologado ningn libro de Baroja, peropareca ser que era as. Lo busqu, lo encontr y descubr que haba sido obra de Baroja el poner eseensayo mo de 1933, sin duda para facilitar la entrada en Espaa con el aval mo...

    Como vemos, aqu hay una segunda versin de los hechos, en los que la gestacin de la obrapasa a manos ntegras de Baroja. Gimnez Caballero, adems, opinaba que mucha de la culpa latuvo tambin el sobrino Julio Caro, quien sabedor de la verdad de tal historia, nunca desminti elhecho, y se call sobre la tesis oficialista de que era l el culpable de todo aquel embrollo. En unautgrafo Qu guardo del propio Gimnez Caballero, que me hizo en la obra Comunistas, judos y

    dems raleaen mi propia biblioteca, resume bastante bien su propia y original tesis: Para JavierNicols, este falso prlogo que como tal insertara don Po y sobrino Julito, como salvoconductopara entrar ms fcilmente en la Espaa falangista y que era un estudio mo sobre Baroja en el ao

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    7/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 6

    34 (sic) en Jons. Despus ese falso prlogo vali para atribuirme a m el libro y zafarse Julito.Indigno. Gimnez Caballero, 1980.

    Ya tenemos ms lea para el fuego. Veamos Qu opina el tercer elemento en discordia, elsobrinsimo Julio Caro Baroja. El mantiene que si bien la idea original de hacer el libro fue deleditor Ruiz Castillo, la plasmacin de la teora corri a cargo de Gimnez Caballero, quien seencargara de seleccionar los textos. Esto me lo coment de viva voce el propio Julio Caro, conquien tambin tuve ocasin de charlar sobre el tema en diversas ocasiones. Tambin me comentque l Julio Caro al enterarse de que se estaba llevando a cabo tal seleccin pens que serauna antologa de fragmentos de las obras de mi to, ms o menos patriticas y nacionalistas, peronunca me imagin que sera eso.

    Aadi asimismo que Gimnez Caballero se aprovech de que Baroja estuviera entonces enPars y l dio el visto bueno Julio Caro a la misma, sin sospechar el contenido real de lamisma.

    Repasando, sin embargo, las memorias de Julio Caro tituladas Los Baroja, podemos all leerfragmentos interesantes sobre esta polmica. All dice que no sabe bien quin hizo la seleccin dellibro, pero que quien lo hiciera escogi lo ms desagradable sobre judos, comunistas, masones, etc.

    Con lo cual expurga automticamente a Gimnez Caballero como autor material de los hechos, tal ycomo me afirmara a m personalmente.Dnde se encuentra la veritas-veritae? Creo que en la ltima clave, el testigo nmero cuatro

    llamado al estrado, el as de la manga del defensor de Baroja, su propio editor, Ruiz Castillo. Estehombre, que iba a editar dicho libro bajo dos nombres editoriales, Ediciones Reconquista yEdiciones Cumbre, va a ser el porteador y portador de la antorcha que nos iluminar en estososcuros vericuetos de la intrincada historia de este libro, que usted, amable lector, tiene en susmanos.

    En primer lugar, y como primera prueba de este ltimo testigo, est una carta del mismsimoRuiz Castillo que obraba en manos de Gimnez Caballero, la cual vi y en la que el mismo le decaque estaba pidiendo libros a todos los escritores espaoles, y que ya Baroja le haba mandado uno

    titulado Comunistas, judos y dems ralea. La segunda prueba es otra carta del mismo editorRuiz Castillo, esta vez enviada al propio Baroja, y que transcribo ntegramente: Mi queridoBaroja: ah va un nuevo ttulo de gran xito, que se me ha ocurrido despus de cerrada mi carta:Comunistas, judos y dems ralea. No se Qu le parecer. A m me gusta tanto que, si no le llenadel todo, me atrevo a pedirle que transija y me lo apruebe. Creo que da idea del contenido del libro,y que sera difcil encontrar otro ms de editorial, ms de pblico. Lo que se dice un hallazgo, y...

    perdone la inmodestia. Le abraza su siempre amigo, Castillo.Bien, creo que con todos estos datos en la mano, podemos ya emitir un juicio bastante certero

    sobre quin y cmo hizo la obra. Soy de la opinin de que, efectivamente, el editor Ruiz Castillo seencarg de la seleccin de los textos, que dio cuenta de ello a Julio Caro Baroja ya Po Baroja, queescogi el prlogo aparecido en Jons de Gimnez Caballero sin avisarle antes, y que bautiz el libro

    de motu propio* con nombre tan original, y lo public en 1938.Pues esto que acabo de decir, y que aparentemente parece tan lgico para el que haya seguido mi

    anlisis detalladamente, no es lo que est aceptado oficialmente. Se han escrito varios artculos alrespecto, desde uno aparecido en 1974 en Tiempo de Historia por un tal Gmez Marn, dondearremete contra Gimnez Caballero al que acusa de haber prologado y hecho la seleccin del libro;

    pasando por escritores como el americano Peter G. Earle que afirma que Gimnez Caballero juntlos peores ensayos barojianos y los public estando

    Baroja en el destierro; y acabando con J. R. Bartrs gran barojiano y editor asimismo, quien en eldiario La Vanguardia jur solemnemente que Baroja no haba compuesto tal libro.

    Lo cierto es que y los hechos son tozudos, el texto, o mejor dicho, los diferentes textos, sonde la pluma de Po Baroja, esto es indiscutible, y que al margen de quien lo hiciera, aunque yo ya he

    dado mi particular versin de los hechos, la cuestin es lo que forma el caldo de cultivo de la obra

    * As en el original [Nota del escaneador].

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    8/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 7

    en s, yeso es incuestionable.De Qu se compone la obra en s? Ruiz Castillo escogi para la seleccin de la misma diversos

    artculos publicados por Baroja en mltiples diarios (recordemos que Po Baroja colabor con los peridicos espaoles ms importantes desde muy temprana edad literaria), As como de varioslibros antolgicos como El Tablado de Arlequn, Rapsodias, su discurso de ingreso en la RealAcademia espaola, novelas como Aurora Roja de su triloga La Lucha por la vida, LosVisionarios y otras.

    Uno podra tender a pensar que si efectivamente, y como nos quiere hacer creer la versinoficialista, Baroja no tuvo nada que ver con esta obra (cosa totalmente falsa como creo hemosvisto), hubiera, a partir de la publicacin de esa obra, de parar de criticar a toda esa ralea decomunistas, judos, etc... Pero nada ms lejos de su intencin, ya que fue precisamente en los aos40, con la efervescencia comunista en Rusia, cuando ms iba Baroja a arremeter contra todos ycontra todo, hasta el final, hasta en su ltima obra Decadencia de la cortesa y otros ensayos.

    Un crtico literario llamado Eutimio Martin, public un artculo sobre nuestra obra en cuestin,en Tiempo de historia, donde deca que difcilmente Goebbels y Streicher juntos hubieran

    podido mejorar esta prosa. Realmente hemos de sealar que Baroja senta autntica repulsin por

    el pueblo judo, a quien siempre hace aparecer como pueblo de granujas, estafadores, ropavejeros,banqueros, usureros, y un etctera. Y a los comunistas, como verdaderos usurpadores de la clasesocial, depredadores de la clase obrera y abocados al fracaso desde su mismsimo origen: Respectoal comunismo, no slo nunca he sido comunista, sino que he tenido una marcada aversin por esateora o sistema, escriba en 1935. De la democracia deca que estara bien si existiera, pero queera pura utopa, y que era la palabra ms insulsa que se haba inventado. Es como la pirueta delcmico de mi pueblo; la mayora ni sabemos lo que es democracia ni lo que significa, y sinembargo, nos sugestiona y nos hace efecto.

    Y esta es la gran ventaja con la que cuenta este gran escritor y que cautiva a todo el que le lee: susinceridad, su brutal sinceridad. Como hombre de pueblo, con su sempiterna boina y calzado conzapatillas, Baroja desglosa su prosa con cierta cazurra naturalidad, que desvela una inteligencia

    superior y una prodigiosa memoria cintica que asombra por la cantidad de datos que aporta en sulectura.Baroja es el errante individualista que no se encasilla en ningn sitio, pero que encasilla a todo el

    mundo. Lo destruye todo pero manteniendo una postura clara y concisa. Del tema racial va adesgranar gota a gota todas las tesis que van desfilando a lo largo de la historia, citando ycomentando a Vacher de Lapouge, Gobineau, Gunther ya su favorito, Houston StewartChamberlain, cuya fundamental obra Fundamentos del Siglo XIX tanto le iba a marcar. En susensayos y en sus novelas se desarrollarn las teoras de todos estos especialistas por boca de sus

    personajes, o en la suya propia en artculos de fondo y de interesantsimo contenido. No dejarresquicio sin tocar, desde el arrianismo primitivo, hasta el semitismo bblico, desde la teora racialde los crneos y sus medidas, hasta la gentica ms complicada. Todos estos temas van a ser

    diseccionados por su estilete pluma en forma de bistur.La filosofa va a estar omnipresente en su obra, tomando partido especialmente por Nietzsche, aquien va a adorar y del cual va a sustraer mucha de su fobia por el cristianismo, subyacente ya en sumemoria gentica como buen vasco ancestral. Kant, y Schopenhauer especialmente, van a marcar

    particularmente su visin del mundo, y la voluntad como forma de ser y de mover la actitudhumana, ser el norte que gue espiritualmente el sendero de su vida.

    Aborrecer el psicoanlisis y las teoras de Freud, a quienes acusar como gran fraude de laspostrimeras del siglo XIX y alborada del S.XX. Rehuir del socialismo de Lasalle y de Karl Marx,a quien criticar concienzudamente desde su laboratorio de antiguo mdico.

    Barrer a la iglesia catlica con sus dogmas bblicos y sus posturas falsamente cristianas.Aunque per se no atacar al cristianismo franciscano, sino a la degeneracin de los apstoles de

    la Iglesia por un lado y al gnesis del cristianismo por otro.A lo largo de su obra, Baroja forjar e impugnar al hroe como hombre libre y liberado de las

    barreras burguesas y religiosas, en pos del hombre de accin, aventurero, valiente, con coraje, que

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    9/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 8

    arrancar el alma de su iniquidad y lo impulsar hacia arriba, siempre elevndose por encima de lasmiserias de este mundo terrenal.

    As nacer el personaje barojiano, tan tremendamente nihilista e inconformista a la vez,anarquista pero con ideas del orden csmico, sentimental pero prctico, romntico pero audaz.Zalacan, Shanti Andia, Paradox, Aviraneta, Laura, Susana, y tantos otros personajes tan netamente

    barojianos, que van a destilar el perfume y el sentir de este tan vilipendiado escritor vasco.Porque han logrado que Baroja sea un autor maldito, mal visto, incmodo, evitado... y por ello

    ha sufrido un boicot permanente y constante, pero que como otro personaje paralelo y del mismomodo odiado, Ricardo Wagner, ha sabido sobreponerse, y su obra ha superado a la iniquidad, y elgigante ha aplastado al enano, haciendo que su obra sea perenne frente a la caducidad de lahumanidad.

    Porque Baroja seguir leyndose en las escuelas y en las universidades. Porque aunque rebelde,tiene una causa comn muy justa y valedera, y la obra de Baroja, sino en su totalidad, s en una gran

    parte, est infravalorada y resto desconocida, y slo colosos como la triloga La lucha por la vida,El rbol de la ciencia y algunas novelas de accin son reeditadas, pero yacen en la inopiainteresantsimos libros de artculos y ensayos, bsicos para entender no slo perodos de la historia

    de Espaa como su perodo isabelino, las guerras carlistas, la poca de Primo de Rivera, el reinadode los Alfonsos, la guerra civil, la guerra de Marruecos, la posguerra, etc... sino la historia delpensamiento europeo y mundial.

    Y As obras como El Tablado de Arlequn, Rapsodias, Intermedios, Camino deperfeccin, Csar o Nada, Divagaciones sobre la cultura, Divagaciones apasionadas, y unlargo etctera, son de difcil lectura, pues no son reeditadas.

    En fin, no quisiera extenderme ms sobre esta maldicin de Judo errante que pesa sobre PoBaroja, y tan slo desear que esta obra sirva como acicate para que el inters por este autor seacreciente y no caiga en el olvido. De esta obra Comunistas, judos y dems ralea, existe unresumen publicado en el ao 1939 en Buenos Aires, Argentina, de ttulo an ms original: Los

    judos son unos corderos, de apenas una treintena de pginas, y totalmente inencontrable que opera

    en mi poder. En l, el prologuista sin firma hace un resumen muy hbil de Po Baroja, a quiencalifica de escritor natural, el cual nunca se desdice de la que ha escrito nunca. Y esta es la granenseanza de Po Baroja, que en el cambio de marchas de su automvil, no existe la marcha atrs, ysiempre se mantendr fiel a sus principios, pese a quien pese. Me gustara acabar este prlogo conun fragmento de Baroja de su obra Nuevo Tablado de Arlequn, escrita en 1917, sobre lafutilidad de la vida y la esperanza en un maana, quizs, mejor: Yo he vacilado muchas vecesqueriendo resolver, no ya si en el cosmos, sino en el interior del espritu, es mejor la fuerzaindiferente al dolor o a la piedad. Pensando estoy por la fuerza, y me inclino a creer que el mundoes un circo de atletas, en donde no se debe hacer ms que vencer, vencer de cualquier manera.

    As sea.

    JAVIER NICOLSMayo, 1993

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    10/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 9

    REPRODUCCIN DE LA PORTADA ORIGINAL DE LA EDICIN DE 1939

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    11/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 10

    PIO BAROJA, PRECURSOR ESPAOL DEL FASCISMO

    Estoy haciendo un libro sobre Espaa y Roma que considero basamental para sentarfirmemente el genio de lo espaol. Nadie se haba tomado el trabajo, entre nosotros, de seguir la mirada espiritual de Espaa, a

    travs de su historia. Y, sin embargo, haba gentes que pretendan conocer las intimidades delcorazn hispnico. Es como si a un corazn se le quisiese sorprender sin auscultar los ojos que esecorazn hace girar por el espacio, en busca de todo lo que busca un corazn a travs de unos ojos;un amor.

    Cual ha sido el objeto amoroso ms insistente y ardiente de Espaa a travs de su historia? Vedaqu un tema central y magnfico que no se haban planteado hasta ahora los investigadores del almaespaola.

    Nada ms fcil de descubrir. Bastaba repito seguir el mirar alucinado de Espaa a travs de

    los siglos:Roma.(Nada, sin embargo, ms arduo, ms delicado, ms til).Yo me he tomado esa pena, que ha sido un gozo. Y como todas las penas o esfuerzos que con

    gozo se hacen, encontr mis hallazgos y revelaciones. Algunas, sensacionales. Por ejemplo, esta quevoy a comunicar.

    *

    Espaa nunca dej de mirar polarizada hacia Roma. Bajo los Csares (Sneca, Lucano).Bajo el Cristianismo (Prudencio, San Isidro, Alfonso X, Berceo, Lulio). Bajo el Renacimiento(Nebrija, Encina, Gil Vicente, Garcilaso, Naharro, Guevara, Hurtado de Mendoza). Bajo la

    contrarreforma (Loyola, Santa Teresa, Cervantes, Quevedo, Gngora). Slo bajo la etaparacionalista del XVIII y la liberal del XIX, Espaa da la sensacin de volver su insistente mirada, deun modo estrbico, hacia una Europa nrdica y central. Hacia Pars, Londres, Berln.

    Y sin embargo, Espaa no deja de mirar por eso al misterio de Roma, alucinante paranuestro genio. En el siglo XVIII, aparte de otros testimonios menos interesantes, estn los de Luzny de Moratn. Y en el XIX, los de Alarcn, Castelar y Prez Galds. (Interesantsimo el de PrezGalds, quien llega a considerar al liberalismo y la Constitucin en Italia como psimos mecenas,como esterilizadores de la literatura y del arte. Quin lo hubiera pensado que Prez Galds pensabaas!)

    *

    Pues bien: en el primer cuarto del siglo XX, la poca ms alejada, en la Espaa espiritual, detoda atraccin romana: la poca que alcanza la mxima distanciacin del foco estelar de Roma, esaley romnica se da tambin. Se da, con fatalidad de ley, con sistematizacin ingnita, con un sentidoque hoy ya nos hace posible el afirmar el contacto de lo hispano con lo romano, como unaconstante histrica. Y se da, nada menos, que en uno de los ndices espirituales, aparentementems antirromanos, ms europeizantes, ms de lageneracin del 98: Po Baroja.

    Yo he descrito en otra parte la caracterstica de ese primer cuarto del siglo XX espaol. Bajo elinflujo del pangermanismo, por un lado; y de las corrientes demoliberales, por otro; lomediterrneo, era algo decadente; lo latino, una cursilera. Roma, un rincn olvidado, de

    barbarie y de reaccin.Los ndices espirituales de esa poca toda la poca de anteguerra sienten la admiracin poresa cosa vaga y rstica que llamaban Europa. Es decir, por las civilizaciones modernas de lofrancs, lo ingls y lo alemn.

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    12/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 11

    Era el ltimo estertor romntico de la Espaa moderna. La ltima expresin delromanticismo espaol. Entendiendo porromanticismo, el anhelo hacia lo remoto, lo extico, loalgeno, lo lejano a nosotros mismos. Un romanticismo que empez en el siglo XVIII con elafrancesamiento, en costumbres y en literatura. Que en el XIX tom un sesgo poltico hacia loingls. Y en ese cuarto del siglo XX, un carcter cientifista a lo alemn.

    Todos los hombres-ndices de tal poca se buscaban sus antecedentes rubios, sentimentales,arios, antiafricanos y antirromnicos.

    Baroja fue uno de los ms significativos en esa bsqueda. Archieuropeo, archieuropeo!,exclamaba en uno de sus libros, querindose definir. En otro libro, se complaca de que, enValladolid, cuando estudiante, le tomasen por extranjero, al ver su pelo rojizo. Baroja se afan,como ningn otro vasco, en indagar el fondo pagano y antirromano de su raza vasca, de la raza deJaun de Alzate. A su perro le llam Thor, como a un dios germnico. Y en las puertas de su casa yen las solapas de su chaqueta, se colg unasvstica, una cruz gamada, mucho antes de que Hitler lahiciese emblema del racismo alemn. Hoy esa cruz gamada es el smbolo del pas vasco; aparece eninsignias, banderas y guas de turismo local. Po Baroja ha sido, sin duda, uno de sus propagandistasms fervorosos. Y ello hace que el espaol inocente por muy antifascista que sea se encuentre,

    al llegar al pas vasco, bajo el signo del fascio, sin saber ante quien protestar. Pues el fascismovasco es antifascista. Va contra la unidad espaola. Esta es una de las tantas y divertidas paradojasdel fascismo espaol. (De los fascismos espaoles).

    Po Baroja, entronizador del sagrado racismo en Espaa, del fascismo alemn!Pero es mucho ms profunda y sustanciosa la otra paradoja del autor de Paradox: su

    exaltacin delfascismo romano, esto es, del verdadero Fascismo, antes de que el propio Mussolinilo inventara. Hacia los aos 1909 a 1910.

    *

    De toda la obra barojiana, hay un libro que ya desde el primer momento que lo le va para

    bastantes aos me sorprendi, me sacudi vivamente. Para mi gusto, la mejor novela de las deBaroja. Novela con un ttulo obsesionante y misterioso; y que tendra, al cabo del tiempo, unaindudable transcendencia: Csar o nada.

    Esa novela plante ante la Espaa liberal, modernista, europeizante y parlamentaria de haceveintiocho aos, nada menos que estas dos cuestiones alucinantes y sorprendentes: elantiparlamentarismo y el Cesarismocomo solucin.

    Esta novela, publicada primero en folletines en El Radical, de Lerroux (1909), es donde,mejor que en ninguna otra espaola, se describe el parlamentarismo desde dentro, desde un pueblode Castilla; con sus caciques, su inmundicia, sus tradiciones, su falsedad y sus crmenes. y frente alcual, un oscuro hroe, el protagonista de la novela, lucha cara a cara, soando en el ideal que Romala Cesrea y Papal, la de otro espaol Borja le enseara:ser Csar o nada.

    Ese hroe, antes de lanzarse a la lucha poltica en el parlamentarismo espaol, haba visitadoRoma. Muchas cosas, arbitrarias y magnficas, vio ese hroe en Roma. No es este el momento deanalizarlas todas: sino una. Una sola. La fundamental. La que forma la entraa del libro. La queforma toda su profeca. La que descubre el genio de Espaa y el porvenir de toda una polticafutura del mundo europeo: el fascismo.

    *

    Alguien que me lea quiz el propio Baroja creer que estoy hablando en broma.Deformando las cosas y tindolas a mi gusto.

    Pero el texto est aqu: limpio y potico, como todas las visiones certeras y lunguimirantes.

    Baroja (es decir, el hroe de la novela) reflexiona ante el mximo fenmeno de las relaciones deEspaa con Roma. (Pag. 175-177, segunda edicin de 1920).

    Me ha extraado el paralelismo de la obra de Csar Borja y de ligo de Loyola; lo que intent

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    13/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 12

    uno en la esfera de la accin lo hizo otro en la esfera del pensamiento. Estas dos figuras espaolasgemelas, las dos odiosas para la mayora, han dado la direccin a la Iglesia; una, impulsndola alpoder espiritual, Loyola; otra, al poder temporal, Csar Borja.

    Se puede decir que Espaa dio a la Roma de los Papas el pensamiento y la accin, como a laRoma de los Csares, le dio tambin, pensamiento y accin, con Sneca y Trajano.

    Baroja saca una conclusin decisiva de ese fenmeno hispnico, de esa experienciaretrospectiva. La quiere actualizar, presentir, como si respondiese a una constante histrica, a ungenio nacional:

    Este bro espaol que en sus dos impulsos, espiritual y material, dio nuestro pas a la Iglesia...deba intentar hoy en beneficio de s mismo. La obra de Espaa deba ser organizar elindividualismo extrarreligioso.

    Qu entiende Baroja porindividualismo extrarreligioso?Pronto veremos la sorpresa:Somos individualistas prosigue. Por eso ms que una organizacin democrtica,

    federalista, necesitaramos una disciplina frrea, de militares...Planteada esa disciplina, debamos propagarla por los pases afines.

    La Democracia, la Repblica, el Socialismo, en el fondo no tienen raz en nuestra tierra.Familias, pueblos, clases, se pueden reunir con un pacto; hombres aislados, como somos nosotros,no se renen ms que por la disciplina.

    Adems, nosotros no reconocemos prestigios ni aceptamos con gusto ni rey, ni presidente, nigran sacerdote, ni gran mago.

    Lo nico que nos convendra es tener un Jefe...El Loyola del individualismo extrarreligioso es lo que necesita Espaa.Una filosofa fra, realista, basada sobre los hechos. Y una moral basada en la accin. Este es,

    sin duda, el primero de los textos fascistas, la primera profeca fascista lanzada en la Europa de haceveinticinco aos.

    Baroja intuye al fascismo como individualismo extrarreligioso. Y seala sus ms firmes

    caractersticas.Disciplina frrea de milicias, al frente de las cuales haya un jefe nico. Es decir, unDictador, el Hroe, el Csar.A Espaa y pases afines (sentido imperial, de expansin) es lo que le conviene. En Espaa

    no tienen races ni la Democracia, ni la Repblica, ni el Socialismo. Cul ha de ser la filosofa, la doctrina de ese sistema? Una filosofa fra basada en los hechos y

    una moral basada en la accin. (Es decir, el estoicismo fascista).En Qu antecedentes nacionales, tradicionales, bamos a apoyar tal poltica, tal espritu? Borja

    el Csar, y Loyola, el Santo, Sneca el Filsofo y Trajano el Emperador. Hace poco alguien eminente en Italia compar la figura de Mussolini, del Duce del

    fascismo, con un Loyola laico.Baroja ya haba previsto esa figura del nuevo tiempo que se avecinaba en Europa. El Loyola del

    individualismo extrarreligioso es lo que necesita Espaa.Es decir: el caudillo del Contrarreformismo, del Contramarxismo. En una palabra: el Fascismo.La cosa es tan evidente que no se necesita ingenio alguno para justificarla. Se justifica por s

    sola, teniendo en cuenta algo de que nadie podr dudar, ni el propio Baroja: Que el Baroja de 1910estaba sometido a las mismas corrientes espirituales profundas que estremecan las entraas de losmejores hombres de la poca. O sean: la corriente nietzscheana, que iba a derivar al Cesarismo.(Teora del Super-Hombre). Y la corriente soreliana, que iba a derivar al Sindicalismo heroico.

    Baroja expresa en literatura hacia 1910 lo que Mussolini comienza a realizar en la accin, diezaos ms tarde.

    Las cosas no se dan nunca arbitrariamente en la historia. Baroja, Mussolini entre otrosespritus estremecidos de aquella poca perciben esas ondas nietzscheanas y sorelianas, de modo

    agudo, el da que se ponen en contacto con Roma. (Mussolini no empez a realizarse hasta que nodescubri Roma).

    Lo que en el Duce fue toda una realizacin, en el hroe de la novela barojiana fue todo un sueo.

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    14/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 13

    El Csarde Baroja muere asesinado en unas elecciones. No llega a realizarse. Pero lo que srealiza el hroe barojiano es el tipo, la tendencia humana nueva, el nuevo hombre europeofrente al horno parlamentarius y al horno demoliberalis.

    Me place extraordinariamente haber mostrado este antecedente espaol precioso delautntico fascismo. Hay gentes en Espaa (acadmicas y putrefactas) que intentan enlazar la

    posibilidad de un fascismo espaol con Cisneros y no s quin ms...El antecedente inmediato del fascismo est en la corriente nitzscheana y soreliana: en los

    espritus llamados entonces disolventes, anarquistas y radicales. No en los colaboradores de laAcademia Espaola, de El Debate, ni de la Correspondencia Militar.

    Mientras en Espaa se crea que el fascismo habr de ser algo de sacristanes, seoritos yaristcratas del viejo tiempo, el fascismo se alejar cada vez ms de Espaa.

    Hay que ir al Loyola extrarreligioso!, como dijo ese buen vasco que es Po Baroja. Inventorde lasvstica racista y delHaz romano a la espaola en milicias frreas, con un Jefe al frente...

    Con un Csar.

    E. GIMNEZ CABALLERO

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    15/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 14

    I

    EL COMUNISMO, LOS JUDOS Y OTROS TEMAS DEHOY Y DE AYER

    I

    AMENIDADES COMUNISTAS1

    Oigo decir a la gente joven que este tiempo nuestro es de los ms interesantes de la Historia. Am, la verdad, no me lo parece. Creo todo lo contrario. El primer tercio del siglo XX lo encuentro

    pobre y mediocre con relacin a la misma poca del XIX.El principio del siglo pasado fue de una brillantez no superada hasta ahora. En la ciencia, en la

    filosofa, en la literatura y en las artes dio una serie de nombres sonoros que todava llenan elmundo.

    Se piensa en la guerra y surge la figura de Napolen; en la marina, Nelson; en la pintura, Goya;

    en la msica, Beethoven; en la filosofa, Hgel, Schopenhauer, Schelling; en la literatura, Byrn,Walter Scott, Vctor Hugo, Balzac, Dickens. En la ciencia, una plyade de iniciadores, de creadores.Nada hay parecido en nuestros tiempos.La poltica misma es mediocre en esta poca. No hay un TaIleyrand, ni un Metternich, ni un

    Disraeli.Se nos ha hablado durante mucho tiempo de Rusia como un pas de concepciones originales y

    grandiosas.Pasa el tiempo y no se advierte ni la originalidad, ni la grandiosidad, ni la eficacia. Muchas veces

    uno supone si la Rusia sovitica estar sometida a un rgimen de pedantera, inspirado por maestrosde escuela.

    He ledo ltimamente algunos folletos en pro y en contra del bolchevismo. No puede uno

    garantizar la exactitud de los hechos, ni aun siquiera de los textos; para eso habra que saber ruso.Los cuatro artculos primeros fueron publicados antes de la guerra actual, los siguientes han sido

    escritos despus.Leo en uno de los folletos una frase atribuida a Lenin como manifestacin de una audacia y de

    un atrevimiento inauditos.En la santa lucha por la revolucin social, las mentiras, la impostura hacia la burguesa, los

    capitalistas y sus Gobiernos son completamente lcitas.Esto no es muy original. Es la teora que se ha atribuido a los jesuitas, de que el fin justifica los

    medios. Eso de la santa lucha es completamente vieux jeu.Hay que reconocer que Nietzsche, pobre profesor alemn, hubiera hecho, de proponrselo, una

    frase ms extraordinaria y ms altisonante.

    Dice tambin Lenin:

    1 Los cuatro artculos primeros fueron publicados antes de la guerra actual, los siguientes han sido escritos despus.

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    16/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 15

    El bolchevismo no es un pensionado de seoritas. Los nios deben asistir a las ejecucionescapitales y regocijarse con la ejecucin de los enemigos del proletariado.

    Tampoco me parece esto nada de particular. Es la misma predicacin, el mismo consejo de losterroristas franceses de 1793 de presenciar el funcionamiento de la guillotina. Una frase parecida alas del Amigo del Pueblo, de Marat; del Orador del Pueblo, de Freron, y de El PadreDuchesne, de Hebert.

    En el folleto del que copio estos trozos se insertan otros para dar una impresin del terriblecinismo de los bolcheviques. Stalin dice:

    Nosotros, comunistas, no reconocemos ninguna tica que pueda poner lmites a la libertad deaccin de un cuerpo de revolucionarios.

    Ni l ni ninguno de los gobernantes han reconocido esa tica. No la reconoci Napolen, niBismark, ni Cavour, ni Clemenceau. Lo nico que hicieron stos es no confesarlo: al revs,disimularlo, porque eran ms hbiles como polticos que el dictador ruso.

    Otra cita terrible, segn el autor del folleto, es una de Lunacharski, ya muerto:Nosotros odiamos a los cristianos dijo este poltico. Es preciso considerar a los mejores de

    entre ellos como nuestros peores enemigos. Predican el amor y la misericordia hacia el prjimo.

    Nosotros queremos tener odio. Es necesario que enseemos el odio, porque a este precio podremosconquistar el mundo.Tampoco la frase es muy original. El elogio del odio parece tomado del libro de Zola Mes

    haines.Evidentemente, entre los bolcheviques no hay ningn escritor que maneje la alta retrica como

    Nietzsche, ni el sarcasmo y la irona como Reine, yeso que, por ser la mayora judos, podanparecerse en algo a este poeta alemn, que tambin lo era.

    Actualmente se dice en uno de esos folletos que para realizar el orden social comunista puro seha fundado una ciudad llamada Magnargorsk (la ciudad-imn). Esta ciudad pasa por ser el ideal delas concepciones soviticas. Est bajo el protectorado del Comisario de Cultos, cosa un tanto

    paradjica, porque las religiones estn absolutamente proscritas en ella y no parece que haya cultos.

    No son aceptados en la ciudad ms que los hombres y las mujeres que se han comprometido avivir bajo los principios del colectivismo comunista ms rgido. El pueblo cuenta ya con cincuentamil almas, dicho sin ofender a nadie, porque esto de almas debe sonar all mal.

    Las casas no tienen habitaciones familiares, sino salas para la vida colectiva, dormitorioscomunes, cuartos de bao comunes, cocinas comunes, y no se llega a las camas comunes, peroquizs se llegue dentro de poco.

    A m, como viejo individualista, todo esto me parece bastante balad. Est en contra de lanaturaleza del hombre.

    Cuando se construye un hotel pobre o rico en Inglaterra o en Marruecos, en el Norte o en el Sur,no se ponen los cuartos separados e individuales y el comedor y el saln colectivos por un capricho,sino porque este es el gusto general. Solamente cuando hay una necesidad perentoria la guerra, la

    miseria, la epidemia se llega a aceptar el dormitorio comn.A la persona que est sana le agrada comer, tomar caf, leer los peridicos, ver una funcin de

    teatro entre gente; en cambio, no le agrada acostarse cerca de otros. Esto le da la impresin decuartel, de hospital, de cosa triste y lamentable.

    Probablemente a nadie le gustara, aunque tuviera medios para ello, ver una funcin de teatrosolo, porque el pblico forma parte del espectculo. En cambio, muy poca gente ira a acostarse aun dormitorio comn si pudiera ir a otro particular.

    Al hombre, aun al ms despreocupado y cnico, no le parece bien presentarse en estado denaturaleza ante los dems. A la mujer, menos.

    No se muestra un eczema o un lobanillo como una flor; ni se exhibe un parche poroso o unbraguero como el Toisn de oro.

    En la nueva ciudad rusa, en la ciudad-imn, no existe la familia. Las palabras padre, madre, hijo,hija, hermano y hermana estn prohibidas. Como consecuencia natural, el incesto se permite. Loshijos se llevan a establecimientos comunistas de educacin hasta los diecisis aos, en que, sin

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    17/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 16

    duda, ya pueden comenzar a padrear.Esto, que los fundadores de la ciudad-imn han credo, sin duda, muy moderno, es muy antiguo;

    es la vida del clan primitivo. Es tambin el rgimen de los indios del Paraguay, establecido por losjesuitas. En la ciudad-imn, en vez de tocar la campana para marcar las faenas del da el reverendopadre o el fmulo jesutico, la tocar un judo discpulo de Karl Marx.

    A m este rgimen me recuerda una novela de Pigault-Lebrun que le de estudiante, que no s enfrancs como se llama, pero que en castellano tiene el ttulo de Monjas y corsarios.

    Tendra gracia que los bolcheviques, a fuerza de sociologa y de pedantera, resultasen discpulosde Pigault-Lebrun y de Paul de Kock.

    En la ciudad-imn, segn las pragmticas de la urbe, la mujer que tenga un hijo no ir a verle alestablecimiento, seccin de prvulos o de adolescentes, letra A o letra B, ni estar autorizada amirarle con ms inters que a los del vecino.

    A m me sigue pareciendo todo ello completamente balad.Puede suceder, y en la realidad se dan muchos casos, que la mujer no se ocupe gran cosa del

    padre de su hijo; puede suceder tambin que el hombre mire a su pareja ya su vstago con perfectaindiferencia; pero que la madre no se ocupe de su hijo es ms raro. El hecho del inters maternal no

    lo han inventado los reyes, ni la Iglesia, ni la sociedad capitalista, ni la Compaa de Jess, sino quees instintivo, y se da con tanta fuerza en la mujer como en la hembra de los animales; y paramuchos revolucionarios, imitar a los animales es lo mejor que puede hacer el hombre, y en parte, enlo primario de la vida, es verdad.

    Que el mozo joven no tenga afecto por su padre o por su hermano es cosa corriente; que no tengacario por su madre se da tambin; pero que la madre no sienta afecto por el hijo es rarsimo.

    Hay que suponer que las experiencias de la ciudad-imn no van a dar resultado.Mientras las realizan, si aparece algn Gogol o algn Dostoievski que probablemente no

    aparecern Qu novelas, Qu comedias y Qu sainetes no podrn escribir de esos dormitorioscomunes, si les dejan!

    La comedia del comunismo de las mujeres est escrita ya y no precisamente ahora. Se represent

    hace la friolera de cerca de cuatrocientos aos antes de Jesucristo en un teatro de Atenas. Es laAsamblea de las mujeres o Las arengadoras, de Aristfanes.En la obra, las mujeres atenienses, disgustadas al ver que sus maridos llevan tan mallos asuntos

    pblicos, toman el traje de los hombres, se presentan en la Cmara popular y, dirigidas por unadama impetuosa llamada Praxgora, instauran un rgimen comunista.

    Despus del golpe de Estado, Praxgora habla con su marido, Blpyrus, que, como no haencontrado en su casa su traje masculino, ha tenido que vestir las sayas de su mujer.

    Praxgora desarrolla su sistema de gobierno. Todos los bienes sern comunes en la nuevaRepblica. El pobre tendr pan, pasteles y garbanzos torrados a discrecin. Las mujeres sern de

    propiedad comn, y para evitar las injusticias, las ms bellas y atractivas se emparejarn con losms viejos y feos, y los rubitos barbilampios, con las ciudadanas ms desagradables y bigotudas.

    No habr dinero, ni usureros, ni prestamistas; tampoco habr ladrones, porque todo el mundotendr lo necesario, y los tribunales se convertirn en grandes restaurantes.

    Ya Atenas es comunista, como hoy Espaa es una Repblica de trabajadores.En uno de los cuadros de la comida vemos a dos ciudadanos: el uno, cndido y pobre, quiere

    llevar todos sus bienes al depsito general; el otro, rico, prendero y cuco, le aconseja que espere,porque dice que los decretos se olvidan pronto en Atenas. Este debe ser de la escuela de nuestrossocialistas domsticos.

    Luego, cuando el heraldo llama con su trompa a todos al banquete social, el prendero, elsocialista domstico, se indigna por la tardanza de su ingenuo compaero, que no tiene prisa porcomer en el banquete comunista.

    En otro cuadro hay dos mujeres asomadas a una ventana, dispuestas de buen grado a someterse a

    los nuevos decretos de socializacin femenina. Una es vieja, pintada y bien vestida; la otra es joveny guapa.

    Aparece un viejo dispuesto a emparejarse, y las dos, de comn acuerdo, le dirigen a una vecina.

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    18/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 17

    Supongamos que por caridad y altruismo.Se presenta despus un joven barbilindo, y aqu viene el grave problema. La vieja y la joven

    pretenden acapararle; pero la vieja con el nuevo decreto en la mano, demuestra su razn, y est apunto de llevrselo cuando aparecen otras dos ms viejas y disputan la presa con las primeras. Eldesgraciado se encuentra trado y llevado por las cuatro mujeres, hasta que la ms decrpita se lolleva.

    Se ve cmo la ciudadimn, novsima en Rusia, no es tan nueva como parece en el mundo,porque hace cuatrocientos aos antes de Jesucristo, un hombre de genio se burlaba de otra ciudad enproyecto algo parecida a sta.

    Los comunistas rusos quieren crear una nueva humanidad, probablemente an peor que la actual,con procedimientos parecidos a las mujeres independientes y arengadoras de Aristfanes.

    No se comprende para Qu el comunismo ruso hace experiencias tan cndidas y tan ridculas,propias de revistas cmico-lrico-bailables.

    Cualquiera dira que ese comunismo est dirigido por maestros de escuela despechados y porjudos rencorosos. Estas invenciones no pueden servir ms que para producir la risa y la burla detodo el mundo y levantar a gente torpe y cerril que intente erguirse sobre los dems adulando los

    sentimientos ms bajos y ms vulgares de las masas.

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    19/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 18

    II

    LA SABIDURA COMUNISTA

    Parece que algunos escritores tenemos la virtud o lo que sea de producir la exasperacin de partedel pblico con nuestros comentarios. Las Amenidades comunistas, me han valido la rplicaspera en varios peridicos y algunas cartas agresivas. Me llaman, en letra de imprenta y en letramanuscrita, ignorante, majadero, idiota y rencoroso. Otro dice que me vendo. No s a quin.

    Esta exasperacin procede de que no he hablado con el debido respeto de Rusia y delcomunismo, Sin duda, todo ello se ha convertido en tab.

    En Espaa, por lo que veo, hay mucha gente que considera el comunismo como algo cientfico,de una exactitud y de un rigor maravilloso. Naturalmente, Rusia, que lo ha implantado o lo ha

    intentado implantar, es el pueblo elegido, si no por Dios, por los profetas marxistas.El que diga algo poco halageo sobre Rusia que sea anatematizado. Todo lo que no es elogio esfalso, tendencioso y mal intencionado. Yo no s ruso, ni he estado en Rusia; no puedo enterarme delo que pasa all ms que por traducciones e informes en pro o en contra.

    Lo mismo me sucede con relacin a la mayora de los pases, y lo mismo le sucede al comunistaque me impugna. Por eso tengo la tendencia de hablar habitualmente de lo que conozco mejor, quees, naturalmente, Espaa.

    He tenido entusiasmo por algunos escritores rusos, como Gogol, Tolstoi y Dostoiewski. De ahno ha pasado mi rusofilia.

    Respecto al comunismo, no slo nunca he sido comunista sino que he tenido una marcadaaversin por esa teora o sistema.

    Yo pens, como muchos, si Alemania, despus de la guerra y como mira de revancha contra losaliados, se lanzara al comunismo y a la alianza con Rusia. En un pas de gran cultura y de unatcnica cientfica desarrollada se hubieran visto las posibilidades del comunismo mejor que en unatierra acostumbrada a la esclavitud como Rusia y con una mentalidad pobre.

    Se vio que Alemania prefera la humillacin y la mutilacin que el bolchevismo con la posiblerevancha.

    Uno de mis comunicantes cree que en Europa y en el mundo no se dan ms que el despotismofascista o el comunismo. Yo creo que no hay tal.

    En Europa hay pases que realizan el progreso de una manera ms noble, ms liberal y mshumana que Rusia, por ejemplo, los pueblos escandinavos.

    Dinamarca y Noruega no tienen apenas Ejrcito, ni Marina de guerra, ni aristocracia. En

    Noruega, la propiedad territorial est limitada. No se puede tener ms que una finca con veintetrabajadores como mximum. All se acab el latifundio. La enseanza es gratuita desde las

    primeras letras hasta la universitaria. Las bibliotecas envan los libros que les piden, a donde sea,dentro del pas, gratis. En los dos pases se entra y se sale sin dar explicaciones a nadie. No se notaall la Polica y hay un gran respeto mutuo dentro de la libertad.

    En Rusia es todo lo contrario. El Ejrcito es enorme; la Polica, terrible y amenazadora. No sepermite salir a la gente del paraso sovitico; se persigue a tiros al que quiere escaparse, y cuandomatan a un comunista del Gobierno, se fusilan setenta y seis hombres en represalias. Otros dicenque ciento diecisis. Como compensacin a esas inmundas carniceras, hay fiestas de baile y otrascachupinadas dirigidas por el Estado.

    Yo pienso con ms simpata en esos pocos millones de escandinavos que no en los ciento setenta

    millones de rusos, que antes eran esclavos de un zar y ahora lo son de Stalin.Me figuro lo que me contestara un comunista, o simpatizante del comunismo, de los que me

    escriben, si discutiera conmigo. Me dira:

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    20/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 19

    Esas ideas de usted son ideas de pequeo burgus.Esta pequea estupidez pasa por ser un argumento. Las cosas tienen algn valor en s. La

    libertad, la justicia, la cultura, el respeto a la vida ajena, cuando son hechos realizados y nopalabras, son lo ms importante de la vida social.

    No se puede comparar el resultado que han conseguido los pases escandinavos con los que haobtenido Rusia.

    Si en la prctica el comunismo marxista falla, yo creo que falla tambin en la teora. Algunosdicen: Hay que conocer el sistema bien en sus detalles, porque es complicado. Si es as, no sehar popular nunca, porque la teora de Einstein, por muy maravillosa que sea yo no s si lo es ono lo es, no llegar nunca al pueblo.

    Yo no he estudiado teoras comunistas, es cosa que no me interesa, pero he hablado conlabradores espaoles acerca de la socializacin de la tierra, uno de los principales dogmascomunistas, y he visto que no la consideran para ellos perjudicial, sino como una medida imposiblede llevar a la prctica por lo cara.

    Hace unos meses hablaba con un labrador de un pueblo de la montaa de Navarra. Era hombretodava joven, propietario de un hermoso casero con maizales, prados, manzanal y helechales en el

    monte.Este hombre no haba estudiado ms que las primeras letras, pero era inteligente y despierto. Lehaban nombrado concejal.

    Si viniera un cambio en el rgimen de propiedad y les convirtieran a los labradores en obreroslo aceptaran ustedes? le pregunt.

    No s en Qu consistira eso.Cuntos trabajan ustedes en casa?Pues todos: mi mujer, mi suegro, mi hijo mozo, uno ms pequeo y yo.Y todos trabajan con el mayor esfuerzo?Todos.Qu jornal pagan en el pueblo a un oficial de albail o de carpintero?

    Unas ocho pesetas lo menos; al pen se le paga cinco y al aprendiz, dos o tres.Bueno. Pues figrese usted que a usted le pagaran ocho pesetas, a su suegro cinco, al hijomayor otras cinco, a la mujer tres y al pequeo dos. Seran veintitrs pesetas de jornal al da y ochohoras de trabajo. Lo aceptaran ustedes?

    No lo bamos a aceptar!No ganan ustedes ahora tanto?No Ca!El casero y los campos son suyos?S.Qu representarn de capital?Hoy no lo dara nadie, pero yo me figuro que se podran tasar en siete mil duros, treinta y

    cinco mil pesetas.Cunto rentan?El capital en tierras lo ms que renta aqu es el dos o el dos y medio por ciento al ao. As,

    su finca, como mximun, rentara ochocientas setenta y cinco pesetas. Ponga usted que cada dosaos saquemos quinientas pesetas de manzana.

    Es decir, doscientas cincuenta al ao que, unidas a la cifra anterior, son tres mil doscientasveinticinco pesetas anuales. Quitando los domingos, en que se supone que no trabajan, gananustedes, entre todos, cada da hbil diez pesetas. De la otra manera ganaran veintitrs, en dinero osu equivalente en vales, y en vez de trabajar doce, catorce o diecisis horas al da, trabajaran ocho.

    Es evidente. Y usted cree que si el Ayuntamiento se apoderara de todas las propiedades del trmino

    municipal podra convertir a los campesinos en obreros pagndoles como tales?Imposible. Se arruinara en menos de un ao. Si nosotros, con un trabajo constante ya veces

    con jornadas de sol a sol, no le sacamos a nuestra tierra ms que diez pesetas al da, cmo le iba a

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    21/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 20

    sacar el Ayuntamiento con ocho horas veintitrs pesetas, por lo menos, para pagarnos a nosotros?Aun suponiendo que nosotros trabajramos con el mismo ahnco que ahora.

    Y no se podra hacer un trabajo ms intenso o ms sabio?No creo. Aqu empleamos las mismas mquinas que usan en los caseros en Francia; usamos

    abono y sacamos a la tierra tres y cuatro cosechas al ao.Tampoco se podra hacer un trabajo colectivo?Tampoco. Las tierras estn muy esparcidas.Este hombre, en una posicin de propietario privilegiado, que gana el producto ntegro de su

    trabajo, considera ms beneficioso el jornal corriente, pero supone que no habra Ayuntamiento quepudiera realizar sin arruinarse la socializacin de la tierra. Claro que sera posible dar jornales mspequeos, pero entonces la transformacin no tena ventaja ninguna. Supongo que en casi toda lazona del Norte de Espaa pasar lo mismo que en el pas vasco. En esos pases lo revolucionariosera dar el casero al que vive en l.

    La misma pregunta que al campesino vasco-navarro, le haca hace unos meses a un labradorcastellano, de tierra de Burgos, propietario de heredades. Se quejaba de la inseguridad de la vida, dela falta de lluvia, de los pedriscos, de la tasa del trigo.

    Usted dejara sus tierras al Municipio para que se encargara de ellas a condicin de que a sushijos ya usted les dieran un jornal seguro por trabajar ocho horas al da? le pregunt.Hombre, eso sera Jauja me dice l. La agricultura es cosa muy mala; por eso, todo el

    mundo que puede se va a las ciudades.Casi todos los que tienen oficios rurales creen que si en vez del producto del trabajo les dieran un

    jornal seguro, como a los dems obreros, saldran ganando, pero nadie supone que esto podra serun buen negocio para el Estado o para el Municipio.

    Lo extrao es que en Andaluca y en Extremadura, pases de tierras frtiles, pasa algo parecido, yse oye decir a los trabajadores del campo:

    No queremos tierras, sino jornales.Convertir en obreros a los campesinos, asignndoles un jornal suficiente para vivir

    medianamente me parece imposible en Espaa. No creo que el pas d para tanto ms que enalgunas pequeas zonas, como la huerta de Valencia, la de Murcia y en algunas minas, fbricas yelectras.

    As como los trabajadores del campo ven el jornal como una magnfica solucin, los obreros dela ciudad de algunas industrias aspiran a la participacin en los beneficios.

    Es lgico, pero es porque esas industrias de ciudad son resultados de monopolios, de privilegiosy de plusvala. Naturalmente, el empleado del Banco, de la gran Empresa, el mozo del hotel de lujo,del cabaret elegante, del caf frecuentado, prefiere el tanto por ciento de los beneficios al jornal oal sueldo, pero es que ese tanto por ciento es el de una industria que nace al calor de un privilegio.Acabado el privilegio, se acaba la ventaja. El que crea que en todo puede pasar lo mismo que enesas industrias excepcionales de ciudad, se engaa de medio a medio.

    El comunismo se podra implantar en una gran zona fabril: de hecho est implantado en muchaspartes; naturalmente, no el marxista. En un pas como Espaa sera la miseria absoluta.

    Yo he ledo poco de socialismo, comunismo y anarquismo. Esos futuros parasos no meinteresan. Es usted un egosta, me dir alguno. S, es uno un egosta en teora, pero en la prcticamenos egosta que muchos socialistas, que son hormiguitas para su casa y saben agenciarse delEstado burgus sueldos, pensiones, comisiones, forzar el escalafn con ganza para ascender ycolocar a los parientes y amigos. Estos, como deca un cafetero, que los conoca bien, tienen losojos en el ideal y la mano en el cajn.

    Algunos han comparado a Darwin con Karl Marx. No se pueden comparar. El uno es el hombrede ciencia puro, que no tiene ms ansia que la averiguacin de la verdad; el otro es el judo hbil yaparatoso, que juega con las ideas como un buen discpulo de Hegel y que lleva guardado un fondo

    de rencor. Aunque la teora de la evolucin de Darwin tenga sus fallas, como toda cosa humana,est comprobada por la paleontologa, la biologa y la antropologa.

    No pasa esto con las teoras marxistas. La interpretacin materialista de la historia no tiene valor.

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    22/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 21

    Es una hiptesis no demostrada. La revolucin social comunista se implantar en las zonas fabrilesde Inglaterra ms cultas, dijeron los marxistas hace aos. Se ha implantado en un pas decivilizacin pobre, como Rusia. Las fortunas se irn automticamente acumulando en pocasmanos. Ha pasado eso en unas partes y en otras no. La mayora de las predicciones socialistas hanresultado fallidas. Sin embargo, se quiere llamar a eso ciencia. Es como querer llamar ciencia a loslibros de Flammarin o al Calendario Zaragozano.

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    23/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 22

    III

    LA INSENSATEZ Y LA CUQUERA

    En estos das pasados me han escrito algunas cartas, unas con firma y otras sin ella. Si tuvieraque darles fe, me haran pensar que soy un insensato y, al mismo tiempo, un cuco que cambia deopiniones por inters. Tan pronto aparezco acusado de impulsivo y de terco como de taimado ymaquiavlico, dos cosas que no pueden armonizarse bien (compadecerse bien, diran los castizos).

    Muchas veces me han motejado de insensato por afirmaciones que no han parecido despus tanabsurdas ni tan locas. Con relacin a los vascos, yo he dicho hace tiempo que el nombre envascuence de Dios Jaungoicoa tiene toda la apariencia de ser moderno, que parece unaadaptacin de la idea catlica de Dios y he aadido que la cristianizacin de Vasconia debi de ser

    muy tarda.El afirmar esto me atrajo algunas frases iracundas en papel impreso y en papel manuscrito.Hace das, un sabio investigador en cuestiones de historia eclesistica, el padre Garca Villada, al

    estudiar la organizacin de la Iglesia espaola y la fundacin de la dicesis, en su discurso de laAcademia de la Historia, afirmaba, segn me han dicho, que la cristianizacin del pas vasco datadel siglo XI. Es decir, que es la ms tarda de Espaa. Esta implantacin del cristianismo sera en laciudad (en la civitas); pero, en el campo, en la aldea, en el vicus? Probablemente sera muchoms tarda.

    Habiendo sido tan lenta la penetracin de la cultura latina en el pas, se puede asegurar quetodava en el siglo XIV y en el XV habra paganos en Vasconia.

    No andaba yo tan descaminado al afirmar lo que afirmaba sin muchos datos histricos, pero con

    alguno que otro psicolgico.El hablar del comunismo, al parecer, con poco respeto, me ha producido quince o veinte cartas,la mayora insultantes, a excepcin de algunas atentas y corteses, como la de unos presos de Gijn,firmada por varios de ellos.

    Tambin pareci insensato a muchos polticos, que me manifestaron su desdn, el que yoafirmara que los republicanos actuales tienen una mentalidad idntica a los del 73, la misma que lade los liberales del perodo constitucional de 1820, aunque inferior en entusiasmo y en bro.

    Nuestros jvenes polticos barajan teoras de manuales al alcance de cualquiera; pero no soncapaces de hacer observaciones personales, originales, sobre lo que tienen delante de los ojos. As,estn preparados para pedantear en el Ateneo, pero no para hacer alguna vez algo til.

    El partido socialista, despus de cuarenta aos de existencia organizada, al llegar al Poder con

    los republicanos no tena un plan mediano de reforma agraria.Los comunistas del tiempo saben mucho, al parecer, de lo que hicieron Lenin y Trotsky y de lo

    que pasa en Rusia; pero de lo que ocurre en Cuenca o en Teruel y de las condiciones geogrficas yeconmicas de las distintas comarcas y regiones de Espaa, ni palabra.

    Me dirn a m: A usted le pasa lo mismo. Cierto, pero yo no soy poltico. Yo s o intentosaber lo que es del oficio del novelista.

    Por afirmaciones de menos fuste que stas me han escrito cartas indignadas, por decir que elGuadalquivir no es claro, sino amarillento y de color de oro; por asegurar que Chopin es msico

    poco inspirado.Una cosa bastante cmica me ocurri hace aos en Granada, adonde fui en compaa de J.

    Ortega y Gasset y de otros amigos Domingo Barns, Moreno Villa y Dantn Cereceda, si mal no

    recuerdo. Ortega dio una conferencia en el teatro. Al da siguiente por la maana fuimos a laAlhambra. Haca mucho fro.

    Qu le parece a usted? me preguntaron algunos.

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    24/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 23

    Todo esto es muy bonito; pero estos reyes rabes de Granada, viviendo aqu sin cristales, semoriran de fro.

    Sin duda, esto pareci a los granadinos que nos acompaaban una ofensa, y al da siguienterecib un paquete con unos calzoncillos de punto, unos calzoncillos pequeos, como de nio, sinduda calzoncillos simblicos. Yo los guard en la maleta, y al llegar a Madrid se los regal a unaasistenta de casa, que se los llev para su hijo con gran entusiasmo.

    Por opiniones literarias, mucha gente se ha considerado ofendida conmigo, por si no admiraba aPereda ni a Anatolio France, cosas que en todas partes son perfectamente lcitas.

    Jos Mara Junoy ha escrito en La Vanguardia, de Barcelona, un artculo muy amable acercade un libro mo de artculos titulado Vitrina pintoresca. Al final dice as:

    Po Baroja, en muchos de estos momentos, que no son los mejores ni tampoco, a pesar de lasapariencias fciles, los ms giles e independientes de su obra, suele ser ms bien una vctima de lams sutil de las ruinas, de la ms engaosa de las tiranas: la paradoja crnica o, lo que podramosllamar quiz mejor, el contratpico continuo.

    Yo no creo esto de m mismo. Creo que soy un hombre de buen sentido y que intenta ver lo quetiene delante de los ojos con el mximum de claridad. No lo conseguir, pero mi intencin es esa:

    no ir en contra de la opinin general de una manera deliberada. Si hubiera tenido esa tendencia a loextravagante, hubiera defendido con entusiasmo el cubismo, el dadasmo, etc., etc., en suscomienzos. No lo he hecho, y por eso para algunos soy un reaccionario.

    Tampoco estoy muy aferrado a las teoras y me siento dispuesto a cambiar.Hace aos me preocupaba la pintura y tena la devocin por los realistas espaoles, por los

    primitivos italianos y por los flamencos. Rafael, Miguel ngel, el Tiziano, no estaban entre misadmiraciones. Fui a Roma y, con un ingls del hotel, estuve en el Vaticano, y al ver los frescos deRafael me rend y me inclin a: pensar que era el mejor pintor del mundo.

    No tiene uno sistema o doctrina. Es cierto. Para m describir, explicar lo que tengo delante, estoda mi doctrina.

    Yo he defendido muchas veces hace aos hablando con pintores valencianos, la idea de que el

    paisaje meridional de Espaa a pleno sol tiene poco color, que hay ms color en el Norte. Solaaadir que yo, de ser pintor y vivir en pases de luz tan violenta, pintara en las proximidades delcrepsculo. Al decir esto me miraban como paradjico y extravagante; pero ahora veo que hay

    pintores que creen lo mismo que yo crea entonces. No convencer a nadie diciendo que no soy un insensato, ni un partidario, por sistema, del

    contratpico; pero yo As lo creo.Otros no me acusan de insensatez, de paradojismo y de vesania, sino de ser un cuco y estar

    vendido. No s a quin.He aqu el final de la carta de un comunista de San Sebastin:Para terminar: cun lejos estar el comunismo, Qu idiotez ser esa doctrina, cuando el

    capitalismo, para defenderse de l, necesita que escriba en su contra hasta don Po Baroja, hombre

    de ideas muy avanzadas? Siga, siga usted, que, aunque en el artculo por usted escrito quieredecir que no simpatiza con el fascismo, no tardaremos muchos das en enterarnos que ha cenadousted con Primo de Rivera, que ha escrito algn folleto fascista u otra cosa por el estilo. Siga usted,don Po, siga, que, al fin y al cabo, no hace usted ms que defender a sus amos .

    Si yo le dijera a este comunista que hace treinta y cinco aos publiqu un artculo en El Globodefendiendo la dictadura, artculo que luego publiqu en un libro titulado El tablado de Arlequn,no le parecera extraordinario que yo pudiera mirar un Gobierno dictatorial como posible y hastacomo plausible. Para m, la dictadura es el procedimiento de convertir en hechos los deseos de lamayora del pas.

    Del mismo carcter de esta carta del comunista de San Sebastin he recibido otras, de gustoperfectamente melodramtico. El capitalismo traidor se acerca a m, y viene a mi casa, y deja en la

    mesa de mi cuarto un fajo de billetes. Por eso, sin duda, puedo ser yo fajista o fascista.La verdad es que el capitalismo traidor se acuerda tanto de m como de los cuentos de brujas y le

    parecen mis artculos tan eficaces como la carabina de Ambrosio. El capitalismo traidor piensa ante

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    25/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 24

    las obras de los literatos: No hay que hacer caso de eso.Son fantasas de cuatro desharrapados. En toda mi vida literaria no he recibido una carta de

    algn propietario o de algn rico que me haya dicho: Estoy conforme con usted.Adems de los comunistas, tengo otros contradictores en la acera de enfrente, entre ellos un

    fraile de Lecaroz que no acepta que yo afirmara y siga afirmando que el padre Coloma tena unespritu adulador. Para demostrar lo contrario trae textos del padre Blanco Garca, que a m me

    parece un embolado y de Fitzmaurice-Kelly, que era un pedante ingls que no le conoci a Coloma.Yo conoc al jesuta, habl con l, le algunos libros suyos y trat con gente que le conoci en laintimidad.

    El fraile de Lecaroz da a entender que si al padre Coloma le gustaba andar en coche y huir de lagente del pueblo, a m me pasa lo mismo. Bien; pero aunque eso fuera cierto, que no lo es, hay ladiferencia de que yo no soy de una Compaa que lleva el nombre de Cristo ni he hecho voto dehumildad ni de pobreza.

    El fraile de Lecaroz, para dar una nota de malicia frailuna, dice que yo afirmo la adulacin deColoma para adular a mi clientela. A Qu clientela? No ser la de los comunistas, que me insultan,ni la de los anticleristas, ni la de los socialistas.

    Adems, el padre Coloma sabemos todos que viva en el palacio de un aristcrata. Yo, no; yovivo en mi casa de poner letras en unas cuartillas, lo que no es siempre fcil cuando el cerebro se vahaciendo viejo y acorchado.

    Escrib hace dos o tres aos una impresin sobre Nakens, que me pareca y me sigue pareciendosoberbio, vanidoso y endiosado, y me dijeron: Est usted vendido a los clericales.

    No se comprende cmo se puede estar vendido a los jesuitas ya los antijesuitas, a los fascistas yalos revolucionarios. Yo sospecho que en Espaa no gusta que el escritor sea independiente.

    La independencia molesta a los de un lado ya los del otro. El espaol de hoy es un resentido aquien todo le ofende. Ms exacto seria decir que el hombre actual es un producto del resentimientoy del rencor. Hay una irritabilidad en todas partes, en el ambiente poltico y literario, bastanteabsurda.

    Esto se comprende en los crculos estrechos y muy limitados, en el Pars de Boileau o deDiderot, en el Madrid de Lope de Vega o de Moratin; pero en los pueblos de hoy es raro. Cuando el periodista se encasilla en un grupo o en el contrario y est dispuesto a entrar en la gran batutapoltica, hay ya una tregua y se le respeta. Al franco tirador no se le quiere, y yo soy franco tiradorpor naturaleza. Disparo lo mismo contra la mira del obispo y el tricornio del gendarme como contrael gorro frigio del republicano cuando me parece que no estn en su sitio.

    Me dicen que esto lo hago por ambicin o por inters. Fantasa. Yo no aspiro a nada. Ni aspiro niespero.

    Se ha hecho uno viejo y no tiene ambiciones. Quizs no las he tenido nunca.Mis ideales se reducen a no tener dolores reumticos, a dormir lo ms posible, a tener un sitio

    agradable donde hablar ya comprar de tarde en tarde un libro curioso.

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    26/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 25

    IV

    LA INFLUENCIA DEL 98

    Yo siempre he afirmado que no crea que existiera una generacin del 98. El invento fue deAzorn, y aunque no me parece de mucha exactitud, no cabe duda que tuvo gran xito, porque seha comentado y repetido en infinidad de peridicos y de libros, no slo de Espaa, sino delextranjero.

    El concepto vena a llenar un hueco, como se deca antes con un clich periodstico, un tantodesgastado a fuerza de uso.

    Una generacin que no tiene puntos de vista comunes, ni aspiraciones iguales, ni solidaridadespiritual, ni siquiera el nexo de la edad, no es una generacin.

    La fecha no es tampoco muy autntica. De los incluidos en esa generacin no creo que lamayora se hubiera destacado en 1898. Benavente deba de ser ya conocido en ese tiempo, quiz

    tambin Unamuno. Los dems me figuro que no. Yo, que aparezco en el elenco, no haba publicado por esa poca ms que algunos articulitos en peridicos de provincias. Andaba por entoncesluchando como pequeo industrial en trabajos que no tenan nada de literarios.

    Tampoco se sabe a punto fijo quines formaban parte de esa generacin: unos escriben unosnombres y otros otros. Algunos han incluido en ella a Costa, y otros, a J. Ortega Gasset, que se dio aconocer ya muy entrado este siglo.

    Yo creo que hay en todo ello un deseo de reunir, de dar aire de grupo a lo que naturalmente no lotiene, como si se quisiera facilitar las clasificaciones y divisiones de un manual de literatura.

    Espaa nunca ha sido pas de escuelas literarias, pero, aun as, ha tenido sus pocas de tendenciasclaras: los afrancesados, con Moratn y sus partidarios; los romnticos, capitaneados porEspronceda y Larra, y aun los mismos novelistas realistas, que sin formar un grupo compacto tenanuna orientacin comn en arte: Pereda, Galds, la Pardo Bazn, etc.

    En esta generacin fantasma de 1898, formada por escritores que comenzaron a destacarse a principios del siglo XX, yo no advierto la menor unidad de ideas. Haba entre ellos liberalesmonrquicos, reaccionarios y carlistas.

    En el terreno de la literatura exista la misma divergencia; haba quien pensaba en Shakespeare yquien en Carlyle; haba quien tena como modelo a DAnnunzio y otros que vean su maestro enFlaubert, en Dostoievski y en Nietzsche.

    Como casi siempre en Espaa, y quizs fuera de Espaa, las influencias predominantes eranextranjeras.

    Se ha dicho que la generacin segua la tendencia de Ganivet. Yo, entre los escritores que

    conoc, no haba nadie que hubiese ledo a Ganivet. Yo, tampoco. Ganivet, en este tiempo, eradesconocido.En la Espaa actual, el escritor que muere se hunde con su obra en el silencio y en el olvido.Lo extranjero priva. No me chocara nada que entre los escritores jvenes actuales no se haya

    ledo nada de Galds, ni siquiera para encontrar que no les gusta y que, en cambio, se comente aalgn escritor parisiense que en Pars no lo conozca ni la familia.

    Haba algo de comn en la generacin del 98? Yo creo que nada. El nico ideal era que todosaspirbamos a hacer algo que estuviera bien, dentro de nuestras posibilidades. Este ideal no slo noes poltico, sino casi antipoltico, y es de todos los pases y de todos los tiempos, principalmente dela gente joven.

    Muy difcil sera para el ms lince sealar y decir: Estas eran las ideas del 98.

    El 98 no tena ideas, porque stas eran tan contradictorias, que no podran formar un sistema, niun cuerpo de doctrina. Ni del horno hegeliano, en donde se fundan las tesis y las anttesis, hubierapodido salir una sntesis con los componentes heterogneos de nuestra casi famosa generacin.

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    27/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 26

    Y, sin embargo, a pesar de la falta de ideal comn, por una especie de transmutacin misteriosa,vemos que ese 98 fantstico toma, al cabo de algunos aos, un aire importante, no slo en el terrenoliterario, sino en el poltico y en el social.

    El 98 es el causante de la muerte de la Monarqua y del advenimiento de la Repblica. Segnalgunos, el 98 produce la efervescencia republicana y socialista del 14 de abril.

    El hecho es inusitado. Yo creo que no haba entre los escritores que figuraron en la supuestageneracin del 98 ninguno que fuera republicano ni socialista.

    Adems, Qu influencia pudieron ejercer nuestras obras si tuvieron una expansin tan escasa?Recuerdo que el periodista Luis Morote, hablando, hace tiempo, en un artculo de los escritores

    del espectral 98, deca que no habamos sabido escribir obras que llegaran al pblico, y luego aadaque nuestro influjo en el pueblo haba sido funesto.

    Cmo se puede ejercer una accin funesta en el pblico, sin llegar a l, es cosa bastante difcil decomprender. Habra que pensar en un efecto cataltico de presencia.

    En las relaciones del 98 con la cada de la Monarqua, se quiere encontrar un paralelismo con laRevolucin francesa. Voltaire, Rousseau, Diderot, DAlembert, etc., engendran, segn los autores,la gran Revolucin; aqu, para producir nuestra revolucin, no muy grande, tena que haber, aunque

    fuera en pequeo, otros Voltaire, Rousseau, etc.En dnde estaban los escritores parecidos, de tan inmensa fama e influencia? Creo que nadie losvio. La verdad es que la generacin del 98 era muy exigua y nadie le daba importancia. QueUnamuno influyera en el descrdito de la Dictadura y en la cada de la

    Monarqua es evidente; pero tambin es evidente que lo hizo de una manera personal, poltica yms bien nueva con relacin a sus tendencias anteriores. Esta tendencia nueva creo que naci con la

    poltica francfila iniciada durante la guerra.Viene el movimiento revolucionario de Asturias, el ms fuerte, feroz y brutal que ha habido en

    Espaa; movimiento que marcar el ascenso de la tendencia comunista y el descenso delsocialismo, y, sobre todo, de sus jefes, que no saben ms que huir del peligro, y ve uno, consorpresa, que este movimiento tambin est engendrado, segn algunos, por las ideas del 98. El 98,

    que no tena ideas, es el que da ideas a las agitaciones sociales. Se ve que sigue la accin cataltica.Eugenio Montes deca hace poco en el ABC:Porque la Espaa actual es obra de la generacin del 98, que fue y an es, por paradjico y

    hasta monstruoso que parezca, una especie de F.A.I. intelectual, una generacin o asociacinbiolgica de anarquistas.

    No veo dnde podrn estar esos anarquistas.Si el anarquismo, como quiere suponer este escritor, es el subjetivismo, el predominio del

    sentimiento sobre el concepto, del paisaje sobre la ciudad, de lo privado sobre lo pblico y delcarcter sobre la razn, la poesa lrica y la novela son ntegramente anarquistas. Desde Ovidiohasta Paul Verlaine, pasando por San Juan de la Cruz y Fray Luis de Len, todos los poetas sonanarquistas. A los novelistas les ocurrir lo mismo. Cervantes ser el primer anarquista de Espaa, y

    Dickens, Balzac y Dostoievski, los primeros anarquistas de sus respectivos pases.Respecto a los filsofos, no digamos. Berkeley, Hume, Kant y Schopenhauer seran

    terriblemente anarquistas.No creo que nadie haya dado esa latitud al concepto anarquista.El subjetivismo de poetas y de novelistas se ha llamado individualismo, misticismo,

    romanticismo.El punto en que se sita uno con relacin a las ideas influye en dar unos nombres a otros. A

    Eugenio Montes le parece que el subjetivismo y sus afinidades sentimentales, amor por el paisaje,gusto por lo privado y lo caracterstico, es anarquismo.

    A m, colocado en el extremo opuesto, el amor por la ciudad, por la ceremonia y por el conceptome parece retrica, es decir, oquedad.

    Suponiendo que el grupo de escritores de mi tiempo fuera una generacin, habra entre ellosalgunos que hubiesen podido influir en la parte formal de la literatura; otros, por su tendenciaradical, podan haber influido algo en las ideas de crtica social. Yo no he visto tal influencia.

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    28/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 27

    Colaboraron, ms o menos oscuramente, en el advenimiento de la Repblica, la Institucin Librede Enseanza, la masonera, las Casas del Pueblo, el catalanismo, la Prensa, la Banca... Nuestra

    pequea y astral generacin del 98, como generacin, no influy nada.Se vio que los polticos republicanos no tenan simpata por los escritores de ese tiempo, y

    Marcelino Domingo, Albornoz y otros escribieron en contra de ellos porque no eran republicanos.Los polticos nunca han querido nada con los escritores, a quienes llamaran con gusto, como Primode Rivera, los autointelectuales.

    Al instaurarse la Repblica, se not claramente que los escritores ya viejos, de mi poca, nofiguraban en la trinca, estaban descartados de las dulzuras del presupuesto. Si alguno consigui undestino fue porque lo pidi, no porque se lo ofrecieran.

    A m no se me ocurri la idea de que pudieran darme un cargo. Ocho o diez das despus de laRepblica me encontr con un conocido en la calle de Alcal:

    Qu anda usted haciendo? me dijo.He salido a tomar los billetes para el tren.Pero, cmo? Se va usted?S; me voy al pueblo, como todos los aos.

    Pero no se va usted a presentar al Gobierno?Yo al Gobierno! Para qu?Pero no es usted republicano?Muy poco republicano.Pues Qu es usted? Monrquico?No. Hasta ahora he sido de los del individuo contra el Estado. Despus no s... Pues yo

    crea que era usted republicano y hasta que le daran un cargo.Y por qu? Si yo no he hecho nada para traer la Repblica?Ni nadie. La Repblica ha venido sola.Bien. Seguramente hay gente que cree que puede hacer algo til en un Ministerio de director o

    de empleado. Yo no creo en la poltica ni en los Gobiernos. Para m un poltico es un retrico, a

    quien no hay que tener en cuenta, y el Gobierno que no haga nada es el mejor.Veo que es usted un hombre absurdo.Y el seor conocido se alej de m un tanto indignado.Si un escritor como yo no tena el menor prestigio poltico entre los republicanos, tampoco lo

    tena entre socialistas, comunistas y anarquistas. El peridico El Socialista varias veces se meticonmigo y celebr que estuviera olvidado y asfixiado.

    Cuando me invitaron a acudir a una reunin del Ateneo para una crtica que llamaban de masasde una novela ma (Los visionarios), la sala, llena de comunistas, estuvo chillando contra m,

    porque un novelista, segn aquella gente, era un tipo vendido a la burguesa. Unamuno, que estabaen el saln, fue todava ms abucheado que yo.

    Respecto a los anarquistas, crea yo que tendran cierta lejana simpata por la parte individualista

    de lo que yo haba escrito, pero no. Se mostraban tan hostiles como los dems. En la crcel deSevilla, donde estuve para visitar a alguno que otro preso que haba conocido y me haba dado datosen Barcelona, me encontr tambin con que los anarquistas me atacaban furibundamente y concierta saa, y tenan un profundo desprecio por los escritores de mi tiempo.

    Dnde est, pues, nuestra influencia? Quizs se ha influido algo en la burguesa; pero en losdems sectores sociales, nada.

    As, pues, joven profesor, si piensa usted publicar un manual de literatura espaola, puede usteddecir al hablar de la mstica generacin del 98, sin faltar a la verdad, primero, que no era unageneracin; segundo, que no haba exactitud al llamarla de 1898; tercero, que no tena ideas suyas;cuarto, que su literatura no influy, ni poco ni mucho, en el advenimiento de la Repblica, y quinto,que tampoco influy en los medios obreros, a donde no lleg, y si lleg fue mal acogida.

    Al escritor, aunque no tan fantasmn como el poltico, le gusta, por vanidad, pensar que suliteratura es eficaz, que tiene resonancia en el mundo, pero cuando no lo es y cuando no resuena porninguna parte, tiene que reconocerlo as, ms o menos alegremente.

  • 8/8/2019 Comunistas, Judios y Demas Ralea - Baroja Pio

    29/109

    Po Baroja Comunistas, judos y dems ralea 28

    V

    EL FONDO DEL MARXISMO

    Cuando se observa la importancia y la generalizacin que ha tenido el marxismo en el mundo,hay para quedarse sorprendido. Antes de Karl Marx exista en Europa el socialismo tematizadodesde el tiempo de Platn. Los profetas modernos de esta teora poltica, algunos evidentemente degran talento, como Saint-Simn, Fourier y Owen, fueron poco a poco olvidados. Si qued algo tilde su crtica social, sta se aprovech, pero sus sistemas dogmticos y cerrados desaparecieron. Encambio, el socialismo de Karl Marx ha quedado ntegro como un credo inmutable.

    Muchas explicaciones se han dado para explicarlo. Se ha dicho que el marxismo era elsocialismo cientfico. El colaborador y heredero de Marx, el alemn Engels, public una obra que se

    titula:Progreso del socialismo desde el estado de utopa al de ciencia. Es incomprensible cmo sepuede creer que una teora poltica pueda ser cientfica. Toda ciencia poltica y experimental estsiempre en constante evolucin porque no puede ser exacta.

    Cuando fueron dos expediciones cientficas de mdicos franceses y alemanes a estudiar el cleraa Egipto y Roberto Koch descubri el bacilo originario de la enfermedad, los sabios franceses, a

    pesar de sentirse rivales de los alemanes, reconocieron que el bacilo exista, y discutieron su accin.Nunca se ha visto que los adversarios polticos hayan reconocido las verdades de los enemigos.Tampoco ha habido rias sangrientas por la teora de Newton o por la de Coprnico. La ciencia

    pura, no ha producido jams ni revoluciones ni complots.Segn los fieles del marxismo, ste es una aplicacin cientfica de las doctrinas econmicas a la

    vida. La afirmacin es una pura fantasa. Tambin los socialistas consideran que la dialcticaheredada de la filosofa de Engels es una ciencia. La dialctica dice Engels es la ciencia de lasleyes generales del movimiento, tanto del mundo exterior como del pensamiento humano. Esabsurdo creer que la dialctica es una ciencia, al menos teniendo de la ciencia el concepto actual. Ladialctica, ni la de Engels, ni la de nadie, es una ciencia experimental de certeza y de evidencia.

    Nadie ha visto que, por la dialctica, los individualistas se hayan convertido en comunistas, o alcontrario, ni los espiritualistas en materialistas, ni los monrquicos en republicanos.

    Se ve que Karl Marx era un metafsico, ni muy grande ni muy original.En la doctrina suya hay una porcin de afirmaciones que han perdido todo su valor para los

    cientficos, y hay otras que se haban hecho antes por distintos economistas, sobre todo por losingleses.

    Dos grandes descubrimientos tenemos que agradecer a Marx dice Engels, la concepcinmaterialista de la historia y la divulgacin de la produccin capitali