5
CoVER procesos colaborativos La vivienda colaborativa ¿Qué es? Una nueva forma de acceder a la vivienda, de gestionar su desarrollo y de usarla durante su vida útil, de forma cooperativa. Conocida también como cohousing, existe desde el siglo pasado (hace más de 40 años) con múltiples experiencias, sobre todo en los países del norte de Europa y de América. Este tipo de viviendas se gesta y desarrolla a través de una metodología específica basada en procesos participativos, donde son los propios usuarios quienes definen el conjunto de viviendas y son responsables, como colectivo, de las decisiones finales y de la gestión. Las decisiones se adoptan de forma democrática y en la mayoría de los casos, por consenso. Estas experiencias generan un nuevo sentido de la comunidad, porque son conjuntos de viviendas que se basan en grandes espacios compartidos donde se facilitan las relaciones de vecindad, es posible compartir y recibir ayuda mutua. A cambio, se reducen los espacios privados, permitiendo la independencia y la privacidad y el desarrollo de la vida en familia, pero de una manera más racional. En definitiva, las viviendas colaborativas o cohousing permiten desarrollar un modo de vida más sostenible. ¿Por qué ahora? La reciente crisis económica y social ha evidenciado la necesidad de un cambio de paradigma en el acceso y uso de la vivienda, porque ha generado un impacto tremendo en las expectativas y en las posibilidades reales, tanto de las personas como de las administraciones públicas de resolver las necesidades individuales y colectivas. La burbuja inmobiliaria ha tenido una terrible consecuencia a nivel individual: debido al empeño por mantener un modelo de propiedad individualizada ha llevado a muchas personas a depender de los bancos y a hipotecar por mucho tiempo nuestras vidas. La vivienda colaborativa permite replantear el modelo vigente hasta hoy pero desde una perspectiva novedosa: rescatando elementos significativos de formas de vida tradicionales mezclado con nuevas formas de acceso a la propiedad, a la financiación, a la creación de los espacios y a la gestión de todo el proceso así como al uso y disfrute de la vivienda. CoVER procesos colaborativos

CoVER Procesos Colaborativos

Embed Size (px)

DESCRIPTION

cohousing, vivienda colaborativa, cooperativa cesión de uso, arquitectura sana, inteligencia emocional, vecindarios intencionales

Citation preview

CoVER procesos colaborativos

La vivienda colaborativa ¿Qué es?

Una nueva forma de acceder a la vivienda, de gestionar su desarrollo y de usarla durante su vida útil, de forma cooperativa.

Conocida también como cohousing, existe desde el siglo pasado (hace más de 40 años) con múltiples experiencias, sobre todo en los países del norte de Europa y de América.

Este tipo de viviendas se gesta y desarrolla a través de una metodología específica basada

en procesos participativos, donde son los propios usuarios quienes definen el conjunto de viviendas y son responsables, como colectivo, de las decisiones finales y de la gestión. Las decisiones se adoptan de forma democrática y en la mayoría de los casos, por consenso.

Estas experiencias generan un nuevo sentido de la comunidad, porque son conjuntos de viviendas que se basan en grandes espacios compartidos donde se facilitan las relaciones de vecindad, es posible compartir y recibir ayuda mutua. A cambio, se reducen los espacios privados, permitiendo la independencia y la privacidad y el desarrollo de la vida en familia, pero de una manera más racional.

En definitiva, las viviendas colaborativas o cohousing permiten desarrollar un modo de vida más sostenible.

¿Por qué ahora?

La reciente crisis económica y social ha evidenciado la necesidad de un cambio de paradigma en el acceso y uso de la vivienda, porque ha generado un impacto tremendo en las expectativas y en las posibilidades reales, tanto de las personas como de las administraciones públicas de resolver las necesidades individuales y colectivas.

La burbuja inmobiliaria ha tenido una terrible consecuencia a nivel individual: debido al empeño por mantener un modelo de propiedad individualizada ha llevado a muchas personas a depender de los bancos y a hipotecar por mucho tiempo nuestras vidas.

La vivienda colaborativa permite replantear el modelo vigente hasta hoy pero desde una perspectiva novedosa: rescatando elementos significativos de formas de vida tradicionales mezclado con nuevas formas de acceso a la propiedad, a la financiación, a la creación de los espacios y a la gestión de todo el proceso así como al uso y disfrute de la vivienda.

CoVER procesos colaborativos

Un cambio cultural como punto de partida

Que la mayor parte de las experiencias exitosas de viviendas colaborativas se desarrollen el norte de Europa y de América, podría llevarnos a cuestionar: ¿Es posible una vida colaborativa satisfactoria en nuestro entorno?

Aunque no sea una elección mayoritaria, en nuestro entorno existen suficientes muestras de la capacidad para formar grupos creativos y una potente red de solidaridad y apoyo mutuo. Esto por sí sólo no es suficiente para abordar un proceso novedoso como el que busca la vivienda colaborativa, pero es un buen punto de partida.

Lo más importante que propone dicho cambio cultural es contraponer el valor y las ventajas de las dinámicas colaborativas frente a las soluciones individuales, para abordar un nuevo proceso de creación integral que tiene como objeto final, el acceso a la vivienda.

El gran reto al abordar un proceso colaborativo como el que se plantea, se traduce en la preocupación por los conflictos que pudieran surgir a través de la participación, la necesidad de consensos y la vida en colectivo. Planteamos formas organizativas basadas en la inteligencia emocional y en asumir los conflictos interpersonales como algo propio de la naturaleza de las relaciones humanas, pero buscando anticiparse y facilitar su resolución haciendo hincapié en los métodos y estrategias para su regulación, y convirtiendo el proceso en un aprendizaje más para la vida.

¿Cuáles son las nuevas formas de acceso a la vivienda?

En los países nórdicos el modelo más extendido es el Andel, que consiste en una forma de acceso a la vivienda situado entre el alquiler y la propiedad. Este modelo establece que todas las personas habitantes son copropietarias del total de un inmueble y disfrutan del derecho de uso sobre cada una de las viviendas en él desarrolladas.

Las entidades reguladas bajo el modelo andel se constituyen como cooperativas de viviendas privadas sin ánimo de lucro, de donde se desprende la fórmula de las Cooperativas en Cesión de Uso.

En España hay incipientes experiencias bajo estas fórmulas, principalmente en Cataluña y Madrid. La Legislación existente incluye fórmulas para la Cesión en Uso a través de cooperativas.

CoVER procesos colaborativos

Algunas ventajas de la vivienda colaborativa

Viviendas para la racionalización de recursos y la eficiencia económica

Estas viviendas, estructuradas con base en el binomio menores espacios privados - mayores espacios compartidos, permiten un significativo ahorro de los recursos facilitando y promoviendo el uso compartido de algunos bienes.

Convertir los espacios que hasta ahora han sido privados en elementos comunes tiene ventajas económicas. Como ejemplo: eliminar la pauta de una vivienda - una cocina completa, supone un gran ahorro de espacio y la racionalización de recursos.

Las experiencias de viviendas colaborativas están generando toda una cultura por el ahorro y la eficiencia, promoviendo el valor de uso de los bienes frente a las limitaciones de la propiedad individual.

Compartir el uso de bienes y/o servicios tan diversos como las herramientas, el acceso a internet o incluso los coches, supone tanto un ahorro en la inversión como una multiplicación de las opciones de acceso a ellos.

Viviendas para compartir cuidados.

Crecemos y nos desarrollamos gracias a la interdependencia con otras personas y por ello también necesitamos recibir cuidados y proveerlos. Las viviendas colaborativas son el modelo idóneo para compartir cuidados en diferentes etapas de la vida y muchas comunidades han surgido de las necesidades particulares de las personas promotoras de un cohousing.

Hay ejemplos de viviendas colaborativas que surgen a través de una necesidad específica, como una familia monoparental que busca personas en una situación similar a la suya, o personas mayores que buscan formar una comunidad con acceso a cuidados compartidos.

Uno de los intereses comunes en las personas que se plantean organizar y vivir en un cohousing está relacionado con compartir tiempos y espacios. Es el modelo más avanzado para corresponsabilizar y conciliar la vida personal, familiar y la laboral, el trabajo productivo con el reproductivo. En torno a este tema se ha desarrollado un concepto denominado “economía de los cuidados”.

En un sistema de convivencia comunitario se produce un enriquecimiento mutuo, tanto de las familias como de las personas a través de la interacción positiva con el grupo, a la vez que se facilita la promoción social y se potencia la prevención de procesos de exclusión social.

CoVER procesos colaborativos

Viviendas para conciliar y compartir la vida profesional

La dotación de más espacios comunes como complemento de los espacios privados, facilita una mejor conciliación de la vida personal con la laboral.

Los espacios comunes pueden contener despachos o salas de trabajo, o un diseño polivalente que permita el uso unas horas para el trabajo y otras para el ocio.

Si la comunidad decide dotar de espacios específicos para el trabajo, se puede convertir también en un centro para el “coworking” donde se puedan compartir sus redes de relación y establecer sinergias laborales tan importantes hoy en cualquier actividad, sea esta productiva o no.

Compartir bienes inmateriales como los conocimientos técnicos, experiencias personales o profesionales, valores estéticos, artísticos o incluso culinarios, es facilitar una sinergia cultural que genera conocimientos colaborativos.

Vecindarios intencionales en viviendas sostenibles

La vivienda colaborativa se conforma en vecindario intencional ya que las personas son conscientes y se comprometen a vivir en una comunidad y como tales, toman las decisiones sobre el diseño de los espacios y la forma y calidad de la construcción.

Los espacios comunes no serán sólo las salas para compartir las diferentes actividades de la vida diaria, sino que el propio diseño del exterior, de los accesos, las escaleras y los pasillos, debe animar y facilitar el contacto social para enriquecer y ampliar los nudos de relación y la red social.

Como vecindarios conscientes, se edifican bajo los mayores estándares de sostenibilidad y mediante las mejores prácticas ambientales, para que sean construcciones sanas.

Estas prácticas están basadas en la utilización racional de recursos naturales, empezando por el uso y mejor aprovechamiento del tan escaso y costoso suelo, hasta los recursos que hacen eficiente el consumo energético de la edificación en toda su vida útil.

La bioconstrucción es la premisa básica: desde una concepción bioclimática de los edificios y su relación con el entorno, hasta la prescripción de materiales y sistemas para construcción de procedencia natural, tanto en obra nueva como en rehabilitación.

CoVER es vivienda colaborativa. Facebook. [email protected]. colectivocover.wordpress.com

CoVER procesos colaborativos

CoVER procesos colaborativos

¿Quiénes somos?

Un grupo de profesionales, hombres y mujeres de diversas especialidades y disciplinas, que nos une un interés común por investigar, plantear, proponer y promover alternativas de acceso a la vivienda desde una perspectiva colaborativa.

¿Qué ofrecemos?

Creación y desarrollo de proyectos de viviendas colectivas, a través de:

• Asesoramiento (social, legal y técnico) a personas o colectivos, instituciones y empresas, en el desarrollo de experiencias innovadoras de vivienda.

• Generación de redes de interés común entre personas, instituciones y empresas (búsqueda del lugar, subvenciones, financiación, etc.) para el acceso a la vivienda.

• Coaching para la convivencia colaborativa; aplicación de Inteligencia Emocional:

o acompañamiento a los diferentes agentes durante todo el proceso de gestación del nuevo modelo de vivienda

o formación del grupo

o regulación positiva de los conflictos (gestión de emociones, estrategias de afrontamiento de los conflictos, habilidades para la comunicación, mediación…)

• Soluciones espaciales y constructivas de vivienda colaborativa, tanto en rehabilitación de pisos y casas como en nueva construcción.

• Adecuación de proyectos a la normativa vigente y asesoría legal en todos los ámbitos, en especial en la creación de la cooperativa.

• Producción social del conocimiento mediante la divulgación de cada experiencia colaborativa.

Nuestros objetivos:

• Promover nuevas formas de acceso a la vivienda.

• Plantear alternativas al modelo de propiedad de la vivienda.

• Proyectar y construir viviendas sanas y sostenibles.

• Facilitar la convivencia en nuevos “vecindarios intencionales”.

CoVER procesos colaborativos