CRÁNEO

Para Tecnología Médica Autor: Leonel Hidalgo Acuña

CRÁNEO Es el esqueleto de la cabeza y consta de dos partes: neurocráneo y viscerocráneo (esqueleto facial). El neurocráneo es una caja que alberga el encéfalo, sus meninges, las porciones proximales de los nervios craneales y los vasos sanguíneos. Se compone de 8 huesos unidos por suturas fibrosas de conexión:

• Hueso Frontal (1) • H. Parietal (2) • H. Temporal (2)

• H. Occipital (1) • H. Esfenoides (1) • H. Etmoides (1)

El viscerocráneo es la parte anterior del cráneo, contiene las órbitas, las cavidades nasales, el maxilar y la mandíbula. Está compuesto de 14 huesos irregulares:

• Huesos lacrimales (2) • H. nasales (2) • Maxilares (2) • H. cigomáticos (2)

• H. palatinos (2) • Cornetes nasales inferiores (2) • Mandíbula (1) • Vómer (1)

Cara anterior del cráneo Los rasgos de la cara anterior del cráneo son los huesos frontal, cigomáticos, las órbitas, la región nasal, los maxilares y la mandíbula. La porción escamosa del hueso frontal forma el esqueleto de la frente y se articula inferiormente con los huesos nasal y cigomático. El hueso frontal articula con los huesos lacrimales, etmoides, esfenoides y nasales (esta última unión se llama nasión). La porción horizontal del hueso frontal forma el techo de la cavidad orbitaria, limitada por el borde supraorbitario (que en a veces consta de una escotadura supraorbitaria). Sobre el borde supraorbitario aparece el arco superciliar (en la profundidad de las cejas), cresta que suele ser mayor en los varones.

Dentro de las órbitas se encuentras las fisuras orbitarias superior e inferior y los conductos ópticos. En las caras inferolaterales de las órbitas se encuentras los huesos cigomáticos, los cuales forman la prominencia de las mejillas y los bordes


infraorbitarios (lateralmente). Inferiormente a los huesos nasales están los orificios piriformes (orificio nasal anterior). A través de ellos se puede observar el tabique nasal que divide la cavidad en 2 porciones, las que en su pared lateral constan de láminas óseas curvadas llamadas cornetes nasales. Los 2 maxilares forman el maxilar superior, unidos por la sutura intermaxilar. Sus apófisis alveolares contienen los alvéolos dentarios, constituyendo así el hueso de sostén de los dientes superiores. Los maxilares rodean la mayor parte de los orificios piriformes y forman los bordes infraorbitarios medialmente. Además tienen amplia conexión con los huesos cigomáticos y poseen un agujero infraorbitario. La mandíbula es un hueso en forma de U que forma el maxilar inferior, también posee apófisis alveolares y 2 agujeros (mentonianos). Consta además de una protuberancia mentoniana, una elevación triangular de hueso por debajo de la sínfisis mandibular (donde se fusionaron las mitades del hueso fetal) Cara lateral del cráneo La cara lateral del cráneo esta formada tanto por huesos neurocraneales como viscerocraneales. Las principales características de la porción neurocraneal incluyen la fosa temporal, que está limitada superior y posteriormente por las líneas temporales inferior y superior, anteriormente por los huesos frontal y cigomático, e inferiormente por el arco cigomático. Este último está formado por la unión de la apófisis temporal del hueso cigomático y la apófisis cigomática del hueso temporal. En la porción anterior de la fosa temporal, por encima del punto medio del arco cigomático, se encuentra el pterion, un punto en el cual los huesos frontal, parietal, esfenoides (ala mayor) y temporal están unidos por la formación de suturas con forma de H. El orificio auditivo externo es la entrada al conducto auditivo externo, que conduce a la membrana timpánica. La apófisis mastoides del hueso temporal se sitúa posteroinferior al conducto auditivo externo. Anteromedial a esta apófisis se encuentra la delgada apófisis estiloides del hueso temporal. La mandíbula posee una porción curva horizontal, el cuerpo, y una porción vertical, la rama. La unión del cuerpo y la rama es el ángulo de la mandíbula. Cara posterior del cráneo La cara posterior redondeada del cráneo u occipucio está formada por el hueso occipital, partes de los huesos parietales y las porciones mastoideas de los huesos temporales. La protuberancia occipital externa suele ser una elevación fácilmente


palpable en el plano medio. La cresta occipital externa desciende desde el inion hasta el agujero magno. La línea nucal superior se extiende lateralmente desde cada lado de esta protuberancia y marca el límite superior del cuello; la línea nucal inferior es menos clara. En el centro del occipucio, lambda indica la unión de las suturas sagital y lambdoidea. Cara superior del cráneo Habitualmente de forma ovalada, se ensancha posterolateralmente en las eminencias parietales. Los cuatro huesos que forman la calvaria son visibles desde esta cara: el hueso frontal anteriormente, los huesos parietales derecho e izquierdo lateralmente, y el hueso occipital posteriormente.

La sutura coronal separa los huesos frontal y parietal; la sutura sagital separa los huesos parietales y la sutura lambdoidea separa los huesos parietal y temporal del hueso occipital. El bregma es el reparo anatómico formado por la intersección de las suturas sagital y coronal. El vértice (vértex) es el punto superior más alto del cráneo y se encuentra cerca

del punto medio de la sutura sagital. Cara externa de la base del cráneo Muestra el arco alveolar de los maxilares (borde inferior libre con forma de ∩ formado por las apófisis alveolares que rodean y sostienen los dientes maxilares), las apófisis palatinas de los maxilares, y los huesos palatino, esfenoides, vómer, temporal y occipital. El paladar duro está formado por las apófisis palatinas de los maxilares anteriormente y las láminas horizontales de los huesos palatinos posteriormente, las que se proyectan en el plano medio dando lugar a la espina nasal posterior. Posterior a los dientes incisivos centrales se encuentra la fosa incisiva, por donde pasan los nervios


nasopalatinos. Posterolateralmente se hallan los agujeros palatinos mayor y menor. El borde posterior del paladar forma el límite inferior de las coanas (orificios nasales posteriores), éstas se encuentran divididas por el vómer, un delgado hueso plano que contribuye al tabique nasal óseo. Localizado centralmente, entre los huesos: frontal, temporal y occipital, se encuentra el hueso esfenoides, que consiste en un cuerpo a partir del cual se originan tres pares de apófisis: las alas mayor y menor y las apófisis pterigoides. Estas últimas, que consisten en las láminas pterigoideas medial y lateral, se extienden inferiormente a cada lado de la unión del cuerpo y las alas mayores. El surco para la porción cartilaginosa de la trompa auditiva está situado medialmente a la espina del esfenoides. Las fosas mandibulares, unas depresiones del hueso temporal, acomodan los cóndilos de la mandíbula cuando la boca está cerrada. La base del cráneo está constituida posteriormente por el hueso occipital, que se articula con el esfenoides central y anteriormente. Las porciones del hueso occipital rodean al agujero magno. Sobre las porciones laterales del hueso occipital existen dos protuberancias grandes, los cóndilos occipitales, mediante los cuales se articula el cráneo con la columna vertebral. La gran fosa entre el hueso occipital y la porción petrosa del hueso temporal es la fosa yugular, en cuyo fondo se encuentra el agujero yugular. Inmediatamente anterior a la fosa se encuentra la entrada al conducto carotídeo. La apófisis mastoides del hueso temporal tiene una cresta debido a los músculos que se insertan en ella. El agujero estilomastoideo se encuentra posteriormente a la base de la apófisis estiloides. Cara interna de la base del cráneo Posee 3 niveles similares a escalones formados por tres fosas craneales (anterior, media y posterior) que constituyen el suelo de la cavidad craneal. La fosa craneal anterior está en el nivel más alto, y la fosa craneal posterior, en el nivel más bajo. La fosa craneal anterior está formada por el hueso frontal anterior y lateralmente, el hueso etmoides centralmente, el cuerpo y las alas menores del esfenoides posteriormente. La mayor parte de la fosa craneal anterior está formada por las láminas orbitarias del hueso frontal, que sostienen los lóbulos frontales del encéfalo y constituyen los techos de las órbitas. La cresta frontal es una extensión ósea media del hueso frontal y la apófisis crista galli es una cresta media de hueso que se proyecta superiormente desde el etmoides. A cada lado de la apófisis crista galli se halla la lámina cribosa del etmoides con forma de tamiz. La fosa craneal media, con forma de mariposa está compuesta por depresiones profundas a cada lado de la silla turca, localizada sobre la cara superior del cuerpo del esfenoides. Los huesos que constituyen las porciones laterales más grandes de la fosa craneal media son las alas mayores del esfenoides, las pociones escamosas de los


huesos temporales lateralmente y las porciones petrosas de los huesos temporales posteriormente.

Las pociones laterales de la fosa craneal media son posterioinferiores a la fosa craneal anterior y sostienen los lóbulos temporales del cerebro. El límite entre las fosas craneales media y posterior está formado por las crestas petrosas de los huesos temporales lateralmente y el dorso de la silla turca medialmente. Los bordes posteriores agudos de las alas menores del esfenoides cuelgan de la parte más anterior de la fosa craneal media. Las alas terminan medialmente en dos proyecciones dirigidas hacia atrás, las apófisis clinoides anteriores.

El agujero rasgado se sitúa posterolateral a la fosa hipofisiaria. El conducto óptico se encuentra entre la raíz del ala menor, y la fisura orbitaria superior es un orificio entre las alas mayor y menor. En la imagen se pueden apreciar el resto de los agujeros de la fosa craneal media.

La fosa craneal posterior, la más grande y más profunda de las fosas craneanas, contiene el cerebelo, la protuberancia y el bulbo raquídeo. Está formada en gran parte por el hueso occipital, pero partes de los huesos esfenoides y temporal hacen contribuciones más pequeñas en ella. Los anchos surcos en esta fosa están constituidos por los senos: transverso y sigmoideo.

En el centro de la fosa craneal posterior e encuentra el agujero occipital (magno). Por detrás de este agujero, la cresta occipital interna es una referencia anatómica que divide la porción posterior de la fosa en dos fosas cerebelosas; la cresta termina superiormente en la protuberancia occipital interna.

En las bases de las crestas petrosas de los huesos temporales se encuentran los agujeros yugulares. Los conductos de los nervios hipoglosos se sitúan entre el borde anterolateral del agujero occipital y los agujeros yugulares. Para complementar el conocimiento básico del cráneo, es necesario que aprendan algunas estructuras que traspasan los agujeros de la base del cráneo, para ello es necesario que recurran a la página 3 del apunte Cráneo 4 de 4.

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