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DOCUMENTOS

DE TRABAJO

LA DIGNIFICACIÓN DE LA PERSONA EN LAS

DECLARACIONES DE PRINCIPIOS DE LOS PARTIDOS

POLÍTICOS EN MÉXICO

Carlos Castillo López

Septiembre de 2014

566

2

La dignificación de la persona en las declaraciones de principios de

los partidos políticos en México

Carlos Castillo López*

Agosto de 2014

Fundación Rafael Preciado Hernández A.C.

Documento de Trabajo No. 566

Clasificación temática: Política.

RESUMEN

Los tres principales partidos políticos de México (Partido Acción Nacional, Partido

Revolucionario Institucional y Partido de la Revolución Democrática) tienen por obligación

legal el deber de contar con una declaración de principios y un programa de acción

política que conduzca sus actividades, propuestas de trabajo y programas de gobierno. El

presente estudio busca ahondar en esos documentos para investigar la importancia del

concepto de “dignidad humana”, tal como la presenta el filósofo español Antonio Millán

Puelles y como aparece enunciado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Índice**

* Correo electrónico: [email protected]. Las opiniones contenidas en este documento corresponden exclusivamente al autor y no representan necesariamente

el punto de vista de la Fundación Rafael Preciado Hernández A.C.

** La estructura de este documento de trabajo se ajusta a los requerimientos establecidos

en el punto 2.3 del Reglamento para el Financiamiento Público de las Actividades Específicas que realicen los Partidos Políticos Nacionales como entidades de Interés

Público del Instituto Federal Electoral vigente a partir de octubre de 2005.

3

1. Introducción ......................................................................................... 4

2. Justificación de la relevancia de la investigación ................................... 4

3. Objetivo ................................................................................................ 7

4. Planteamiento y delimitación del problema ........................................... 8

5. Formulación de hipótesis ...................................................................... 9

6. Marco teórico y conceptual de referencia ............................................. 10

7. Desarrollo ........................................................................................... 15

8. Conclusiones ...................................................................................... 18

9. Bibliografía ......................................................................................... 39

Bases de datos consultadas ................................................................. 41

CARLOS CASTILLO LÓPEZ

4

1. Introducción

Como concepto filosófico, como punto de partida de la práctica política y

como factor indiscutible de cualquier programa de acción de los partidos,

la dignidad humana representa un objetivo básico y primordial para la

constitución, formación y desarrollo de cualquier sociedad.

Si bien las demoracias más longevas, estables y maduras han puesto

especial interés en la dignificación de la persona humana, sobre todo

atendiendo a los estratos más vulnerables de la sociedad, no ocurre lo

mismo en democracias en vías de consolidación, donde una suma de

pendientes, temas y asuntos, así como diversas tradiciones históricas o

ideosincráticas, tienden a dejar de lado la preeminencia de la persona para

anteponer intereses secundarios, lejanos o francamente ajenos esta

concepción.

En México, donde se centra el campo del presente estudio, los principales

partidos (Partido Acción Nacional, Partido Revolucionario Institucional,

Partido de la Revolución Democrática), como actores centrales de la

actividad política, a través de sus distintos documentos y declaraciones de

principios, refieren concepciones propias que determinan de manera

histórica el modo en que abordan el concepto de dignidad de la persona,

que a su vez se traducen en el modo en que cada uno ejerce su influencia

en distintos ámbitos como el Congreso de la Unión, las políticas públicas,

los Congresos estatales o las porpias plataformas de campaña.

LA DIGNIFICACIÓN DE LA PERSONA HUMANA EN LAS DECLARACIONES DE PRINCIPIOS DE LOS

PARTIDOS POLÍTICOS EN MÉXICO (PRI, PRD, PAN)

5

Si bien no existe en el Código Federal de Instituciones y Procedimientos

Electorales (Cofipe) cláusula alguna que oblige a incluir ése o algún otro

concepto en particular, salvo aquellos marcados en el Artículo 25,1 resulta

no obstante importante determinar cómo la presencia o ausencia de una

definición integral de la dignidad de la persona humana es un factor

determinante para el modo en que cada fuerza política convierte esos

principios en programas de actividades, y que se concretan en lo que el

artículo 26 de ese Código llama “Programa de Acción”.2

Un desglose cualitativo de estos documentos base de cada uno de aquellos

partidos, a la luz del concepto de persona como depositaria y eje de la

acción política, resulta pues de utilidad para establecer de qué manera

cada insituto asume, entiende y proyecta al ser humano como receptor y

agente de la actividad política, al tiempo que presenta una comparación de

los principios que abanderan y el modo en que asumen la actividad

política cotidiana.

1 “1. La declaración de principios invariablemente contendrá, por lo menos:

a) La obligación de observar la Constitución y de respetar las leyes e instituciones que de

ella emanen; b) Los principios ideológicos de carácter político, económico y social que postule;”,

consultado en el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales, disponible

en www.ine.mx, el 15 de agosto de 2014. 2 “1. El programa de acción determinará las medidas para:

a) Realizar los postulados y alcanzar los objetivos enunciados en su declaración de

principios; b) Proponer políticas a fin de resolver los problemas nacionales;

c) Formar ideológica y políticamente a sus afiliados infundiendo en ellos el respeto al

adversario y a sus derechos en la lucha política; y

d) Preparar la participación activa de sus militantes en los procesos electorales”,

consultado en el Código Federal de Instituciones y Procedimientos Electorales, disponible en www.ine.mx, el 15 de agosto de 2014.

http://www.ine.mx/

http://www.ine.mx/


6



7

2. Justificación

Analizar y comparar los documentos clave de los tres principales partidos

de México, a saber: Partido Acción Nacional, Partido Revolucionario

Institucional y Partido de la Revolución Democrática, a la luz de la

dignidad de la persona humana servirá como instrumento para determinar

tanto la preeminencia de este concepto en las declaraciones de principios

respectivas, como para señalar la importancia de que sea precisamente

este concepto el que conduzca la actividad política general del sistema

político mexicano, dada su centralidad como beneficiaria y receptora de

toda decisión que afecte al ámbito social y la necesidad de que la política

de nuestros días atienda de manera primordial las necesidades más

urgentes de la población mexicana.


8

3. Objetivo de la investigación

Con la presente investigación de pretende, mediante un ejercicio de

política comparada entre los documentos principales de los tres partidos

políticos más grandes del país, demostrar cómo la centralidad o no del

concepto de persona humana y su dignidad han afectado y afectan el

trabajo cotidiano de los partidos, postulando que a mayor distancia del

concepto señalado mayor será también la desviación de objetivos centrales

y determinantes para un auténtico mejoramiento de la calidad de vida de

las personas.



9

4. Planteamiento y delimitación del problema

Si bien los partidos políticos son manifestaciones de la pluralidad y la

diversidad que enriquece a nuestro país, la centralidad de la persona como

objeto de su actividad no puede ni obviarse ni dejar de estudiarse como

factor que determina su actividad de cara a la sociedad.

Con base en lo anterior, la presente investigación busca responder a la

siguientes preguntas:

a) ¿Cómo se enuncia la dignidad de la persona humana en los

documentos básicos de cada uno de los principales partidos (Partido

Acción Nacional, Partido Revolucionario Institucional y Partido de la

Revolución Democrática)?

b) ¿En qué medida la presencia o ausencia del concpeto de persona

humana determina la actividad de los tres principales partidos en

sus respectivos programas de acción?

c) ¿Qué importancia tiene la claridad del concepto de dignidad de la

persona humana para el desarrollo de la democracia a través las tres

principales fuerzas políticas de México?


10

5. Formulación de hipótesis

La hipótesis que busca demostrarse es que a mayor claridad y presencia

del concepto de persona humana en los documentos básicos de cada uno

de los principales partidos políticos en México, mayor será también una

acción política que coadyuve a solucionar los problemas que afectan a

México a través de los respectivos programas de acción política.

Sin denuesto de los medios que cada fuerza política emplee para alcanzar

los objetivos planteados en sus documentos básicos y sus programas de

acción política, la claridad de la dignidad de la persona humana como

centro de la acción política se postula como determinante para dejar de

lado alcances parciales o incompletos y sostener una actividad donde el

bienestar de la sociedad sea siempre el fin último del trabajo político.



11

6. Marco teórico y conceptual de referencia

Para fines de la presente investigación se toma como base la definición que

hace el filósofo Antonio Millán Puelles3 respecto del término de persona

humana y su dignidad, que consiste en:

“La libertad, que capacita al hombre para obrar por deber y no

solamente por instinto, es también lo que la hace ser persona y no un

simple animal. Llamamos, en efecto, personas… a los seres que tienen

libertad.4

“…por el hecho de tener libertad –lo que supone poseer, también,

entendimiento– es el hombre “persona”. Ser persona es un rango, una

categoría, que no tienen los seres racionales. Esta presencia o

superioridad del ser humano sobre los que carecen de razón es lo que

se llama ‘dignidad de la persona humana’.5

“…la palabra ‘dignidad’ significa la superioridad o la importancia que

corresponde a un ser, independientemente de la forma en que éste se

comporte. Y así, cuando se habla en general de la dignidad de la

persona humana, no se piensa tan sólo en el valor de los hombres que

actúan rectamente, sino en que todo hombre, por el hecho de ser una

persona, tiene una categoría superior a la de cualquier ser racional”.6

De estos párrafos puede inferirse lo siguiente:

a) Cualquier ser humano, por el sólo hecho de serlo, cuenta con una

dignidad dada por la naturaleza misma de la especie;

3 Para las definiciones de este documento se considera el tomo Persona humana y Justicia Social, de Antonio Millán Puelles, edición de RIALP, 1978. 4 Ibid, p. 13. 5 Ibid, p 15. 6 Ibidem.


12

b) Esta dignidad trasciende cualquiera de las clasificaciones habituales

que la propia raza humana hace de sí misma, incluida nacionalidad,

clase social, sexo, raza, etcétera.

La condición de dignidad es la base para establecer la igualdad entre los

hombres, una naturaleza idéntica que, no obstante, y en tanto la persona

se encuentra por necesidad situada en sociedad, genera desigualdades que

a su vez se traducen en injusticias, frente a las cuales la labor del Estado

resulta de primer orden para paliar esas diferencias y velar por el óptimo

desarrollo de cada persona.

Sobre estas desigualdades que atentan contra la dignidad del hombre,

afirma Millán Puelles:

“Es verdad que [los hombres] tenemos una naturaleza esencialmente

idéntica; pero hay a la vez entre los hombres dos especies o clases de

desigualdades: una naturales o congénitas, y otras voluntaria o

involuntariamente adquiridas […]7

“[…] la efectivas diferencias que al mismo tiempo hay, es razonable que

las tengamos en cuenta cuando son naturales o si han sido adquiridas

de una manera lícita, pero nunca aplicarlas de tal modo que vengan a

ofender la dignidad de la persona humana, obligando a unos hombres

a vivir como si fueran de distinta especie.8

“Respetar y encauzar las desigualdades de forma que redunden en

beneficio de todos, en una norma de buena organización social…”9

7 Ibid, p. 33. 8 Ibidem. 9 Ibidem.



13

Es en los términos que Millán Puelles refiere como “organización social”

que los partidos políticos, sea cual sea la doctrina que abandere sus

causas –esto es, las ideas de fondo que sustenten su actividad pública–,

aparecen en la esfera pública de la democracia como agentes de cambio,

como instrumentos para promover una serie de ideales destinados a

mejorar la realidad de una sociedad y, posteriormente, acceder al poder

por la vía del voto para implementar los programas de acción que

asimismo han difundido entre el electorado.

La capacidad de responder a las necesidades reales de la sociedad de esos

programas de acción será a su vez reflejo de una declaración de principios

que se base también en postulados claros, cercanos a las necesidades de

la ciudadanía y realizables en el marco del ejercicio de gobierno;10 puede

concluirse, empero, que la cercanía con el concepto de dignidad de la

persona humana –del cual, como hemos visto, se desprenen los de

libertad, igualdad, desigualdad y organización social– será determinante

para tener en primer orden de importancia de la actividad política a la

persona como tal, libre, desigual, necesitada del Estado para subsanar las

diferencias y que en las distintas fuerzas políticas encontrará una ruta

para elegir entre una determinada cantidad de opciones de gobierno.

10 No obstante, y si como afirman Almond y Verba (1970), la capacidad de la sociedad de

involucrarse de manera activa, informada y responsable en las decisiones públicas depende del grado de cultura política de cada país, este factor será determinante para la

recepeción o rechazo de determinado mensaje y determinadas propuestas.


14

Cabe destacar asimismo que la universalidad de la dignidad de la persona

humana está garantizada en la Declaración de los Derechos Humanos de

la Organización de las Naciones Unidas, que refiere en sus tres primeros

artículos las bases sobre las que se sostiene la condición humana:

“Artículo 1) Todos los seres humanos nacen libres e iguales en

dignidad y derechos y, dotados como están de razón y conciencia,

deben comportarse fraternalmente los unos con los otros.

“Artículo 2) Toda persona tiene todos los derechos y libertades

proclamados en esta Declaración, sin distinción alguna de raza, color,

sexo, idioma, religión opinión política o de cualquier otra índole, origen

nacional o social, posición económica, nacimiento o cualquier otra

distinción. Además, no se hará distinción alguna fundada en la

condición política, jurídica o internacional del país o territorio de cuya

jurisdicción dependa una persona, tanto si se trata de un país

independiente, como de un territorio bajo administración fiduciaria, no

autónoma o sometido a cualquier otra limitación de soberanía.

“Artículo 3) Todo individuo tiene derecho a la vida, a la libertad y a la

seguridad de su persona”.11

La dignidad de la persona se sostiene a sí misma como centralidad de

cualquier acción política ya que es sujeto y objeto de toda actividad

pública. Los documentos de los partidos políticos y sus programas de

acción deben dar esa prioridad y garantizar esa preeminencia en todo

momento.

11 Consultado en www.un.org/es/documents/udhr el 19 de agosto de 2014.

http://www.un.org/es/documents/udhr



15

7. Pruebas empíricas o cualitativas de la hipótesis

Según afirma el Insituto Nacional Electoral, “los partidos políticos son

entidades de interés público que tienen como fin promover la participación

de los ciudadanos en la vida democrática, contribuir a la integración de la

representación nacional y como organizaciones de ciudadanos, hacer

posible el acceso de éstos al ejercicio del poder público, de acuerdo con los

programas, principios e ideas que postulan y mediante el sufragio

universal, libre, secreto y directo.

“Los partidos políticos se regirán internamente por sus documentos

básicos, tendrán la libertad de organizarse y determinarse de conformidad

con las normas establecidas en el Código Federal de Instituciones y

Procedimientos Electorales y las que, conforme al mismo, establezcan sus

estatutos”.12

De este modo, y con base en el Marco teórico esbozado en el apartado

anterior, se analizan a continuación los documentos de cada uno de los

tres principales partidos políticos de México (Partido Acción Nacional,

Partido Revolucionario Institucional, Partido de la Revolución Democrática)

con la finalidad de determinar la centralidad o distancia que presentan

respecto del concepto de dignidad de la persona humana.

12 www.ine.mx, consultado el 15 de agosto de 2014.

http://www.ine.mx/


16

1) Partido Revolucionario Institucional

La Declaración de Principios del Partido Revolucionario Institucional13

consta de 34 enunciados, divididos en 4 apartados:

a) Preámbulo

b) Partido

c) Estado

d) Sociedad

e) Entorno mundial

El concepto “dignidad humana” aparece mencionado en dos ocasiones

(contando el preámbulo del documento), pero es importante destacar que

las referencias que de ésta se desprenden no apuntan a una concepción

clara ni precisa de su significado. Los numerales donde puede encontrarse

son:

“Preámbulo

“Los valores de nuestro origen son irrenunciables porque siguen

siendo aspiraciones de millones de mexicanos en un país todavía

escindido por la modernidad y el atraso; por el desfase entre las

condiciones del bienestar y pobreza que cancelan el legítimo derecho

de cada ciudadano, por ocupar un lugar de dignidad en la Nación.

13 Las referencias que se hacen de la Declaración de Principios y del Programa de Acción Política del Partido Revolucionario Institucional son tomadas de “Documentos Básicos”,

disponible en www.pri.org.mx, consultado el 15 de agosto de 2014.

http://www.pri.org.mx/



17

“Estado

“15. Exigimos un Estado comprometido con el combate a la pobreza,

que ofende la dignidad humana, debilita el tejido social y frena el

desarrollo del país. Queremos un Estado que, de conformidad con lo

dispuesto en el artículo 3o constitucional, refrende a la educación

pública de calidad con suficiente cobertura en todos sus niveles, como

el medio más importante para contrarrestar la desigualdad social.

Resaltamos también la trascendencia de la capacitación y la

investigación en ciencia y tecnología”.

Como puede constatarse, sólo el numeral 15 hace una referencia clara del

concepto de acuerdo con Millán Puelles y la propia Declaración de los

Derechos Humanos de la ONU. Llama la atención, por el contrario, que la

definición de “dignidad de la persona humana” se encuentra, en esta

misma Declaración de Principios, aglutinada en corporaciones que son, de

manera, sí, abiertamente explícita, la base de la estructura de este partido.

De este modo, el numeral segundo del documento de marras, señala:

“Partido

“2. Somos un partido político nacional de carácter federal, integrado

por mujeres y hombres libres, que conformamos una alianza de

ciudadanos, de organizaciones y de los sectores agrario, obrero y

popular, pilares fundamentales de nuestra vida política que reflejan la

heterogeneidad de la sociedad mexicana. Su carácter federal radica en

la fuerza integradora de estados y municipios”.

De acuerdo con Schettino (2007), lo que en el párrafo anterior se menciona

como una “alianza de ciudadanos, de organizaciones y de los sectores


18

agrario, obrero y popular”, no es precisamente un reflejo de la

“heterogeneidad de la sociedad mexicana”, puesto que:

El régimen de la Revolución,14 desde su construcción, es autoritario y

corporativo, lo que implica que organiza la sociedad en grupos

verticales que establecen una relación clientelar con el Estado, una

relación de intercambio en donde los grupos ofrecen sumisión y

reciben a cambio prebendas, privilegios… Es una forma de relación

más propia de la Colonia que del siglo XX, y por ello los procesos de

construcción del Estado y del capitalismo en México… son fósiles

vivientes que guardan gran parecido con los estados capitalistas

contemporáneos pero que, al verlos de cerca, mantienen

características muy remotas”.15

El corporativismo del que se ufana el PRI es, por el contrario, el

responsable de votos masivos, de coacción y anulación de la libertad, lo

que en síntesis representa una negación de la dignidad de la persona tal y

como ha sido definida anteriormente.

Por lo que respecta al Programa de Acción de este partido, el concepto de

dignidad aparece solamente en dos de los 422 numerales que integran este

documento:

“59. Diseñar un nuevo programa de combate a la pobreza que, con

una visión integral, estimule el desarrollo personal y colectivo de los

beneficiados; propicie una participación social amplia en la que las

comunidades sean parte activa de su propio desarrollo; y facilite su

14 Es importante resaltar que la Declaración de Principios del Revolucionario Institucional

inicia con el siguiente párrafo: “Somos un partido nacionalista que, orgulloso de los

principios ideológicos de la Revolución Mexicana, promueve la modernización de México

con democracia y justicia social. Por eso nos inscribimos en la corriente socialdemócrata de los partidos políticos contemporáneos”. 15 Schettino (2007), p. 271.



19

acceso a los procesos sociales y a las instituciones gubernamentales,

respetando su dignidad y alentando las potencialidades productivas.

“135. El Partido Revolucionario Institucional considera a la cultura

como un derecho humano universal inherente a la dignidad de las

personas y de los pueblos”.

Para el primer caso, la dignidad se refiere a la “instituciones

gubernamentales”, lo que excluye en absoluto la definición de acuerdo con

lo que se establece en el Marco teórico de este documento. Por lo que

refiere al segundo, si bien la cultura puede considerarse como una

necesidad espiritual (Millán Puelles, 1978) de las personas, no implica el

término tal y como aparece en la redacción una perspectiva completa de la

dignidad humana, sino, por el contrario, como un mero accesorio que se

añade a un ser que en ninguna parte aparece valorado y definido

plenamente desde una óptica filosófica o integral.

2) Partido de la Revolución Democrática

La Declaración de Principios del Partido de la Revolución Democrática16 se

divide en 8 apartados:

a) Democracia

b) Derechos humanos

c) Igualdad sustantiva y diversidad sexual

16 La referencias a la Declaración de Principios del Partido de la Revolución Democrática

fueron consultadas en www.prd.org.mx., consultada el 15 de agosto.

http://www.prd.org.mx/


20

d) Educación, Ciencia y Cultura

e) Economía

f) Justicia Social

g) Medio ambiente

h) Ámbito internacional

El documento de esta Declaración está precedido por una Introducción, un

desarrollo de la historia de este instituto político, un apartado titulado

“Nuestra identidad” y un desglose de los “Principios” que rigen el actuar de

sus militantes, que contiene un apartado titulado “Ética política”.

La enunciación expresa del concepto “dignidad humana” puede

encontrarse en cinco ocasiones, que se analizan a continuación:

1.- “Introducción17

- “Reconocemos nuestra diversidad étnica, sexual, cultural, religiosa y

de cualquier tipo, y nos pronunciamos por el respeto a nuestras

diferencias teniendo como principios la dignidad al valor de las

personas, la igualdad de derechos de hombres y mujeres así como el

rescate y conservación de nuestro medio ambiente. Nos declaramos

promoventes del cambio, el progreso social y a elevar el nivel de vida

de la sociedad dentro del concepto más amplio de libertad y justicia.

2.- “Principios. Ética política

- […] “Nuestro Partido exige a su dirigencia, representantes populares,

servidores públicos y militantes en general, el acogimiento de los

17 Los numerales de esta selección de principios son sólo para fines de ordenamiento de este apartado y no aparecen tal cual en la Declaración de Principios de este partido

político.



21

principios éticos de congruencia, justicia social, solidaridad, libertad,

honestidad, austeridad, tolerancia, fraternidad, cooperación,

responsabilidad, dignidad e igualdad; valores que permitirán

transformar y mejorar la calidad de vida de la sociedad a la que el

Partido aspira a representar mediante la toma de decisiones colectivas

en los diferentes ámbitos de la sociedad.

3.- “Fundamentación de principios

- “El México del siglo XXI se encuentra inmerso en grandes problemas

de desigualdad económica y social que estancan el desarrollo pleno de

la sociedad y afectan la libertad y convivencia democrática; fenómenos

como la corrupción, deshonestidad, ostentación e impunidad

fomentan el autoritarismo, despotismo, patrimonialismo y egoísmo; el

corporativismo en las organizaciones sociales, laborales y políticas

sujetas al clientelismo, sectarismo, intolerancia y nepotismo permite

que se preserven fenómenos de discriminación, machismo,

dogmatismo, violencia e inseguridad, donde se pierde todo el respeto a

la vida y la dignidad de las personas; afortunadamente, la mayoría de

nuestra sociedad rechaza estas prácticas y antivalores y se muestra

decidida a enfrentarlos mediante la educación y una revolución

pacífica de las conciencias, sobre todo en las nuevas generaciones.

4.- “Principios. 1. Democracia

- “El Partido lucha por una sociedad de iguales en el acceso a los

derechos constitucionales y humanos, de iguales en la aplicación de

leyes y normas jurídicas, de iguales en el acceso a las oportunidades,

de iguales en el ejercicio de nuestras libertades, de iguales para

acceder a una vida de bienestar y libre de violencia, una vida de

prosperidad y de dignidad, de iguales en el acceso a la riqueza y el

bienestar material.

5.- “Principios. 3. Igualdad sustantiva y diversidad sexual


22

- “Promovemos de manera permanente condiciones de igualdad entre

los géneros en todas las esferas de la sociedad en que se manifiestan

relaciones de poder patriarcal y machista que atentan contra la

dignidad de las mujeres, a través de acciones afirmativas, la sororidad,

que promuevan la ampliación de la igualdad entre los géneros dentro

de todas las estructuras de nuestro Partido”.

Por lo que refiere al primer numeral, y de acuerdo con Millán Puelles

(1978), el reconocimiento que hace el PRD de la diversidad y, utilizando los

términos del autor, de las diferencias tanto naturales como adquiridas,

son en absoluto acordes con las definiciones expuestas de “dignidad

humana”.

En el segundo numeral, el concepto “dignidad” se incluye dentro de una

serie de valores (justicia social, solidaridad, libertad, honestidad,

austeridad, tolerancia, fraternidad, cooperación, responsabilidad, dignidad

e igualdad) “que permitirán transformar y mejorar la calidad de vida de la

sociedad”, valores en sí universales y acordes con los que Millán Puelles

destaca en su obra y que son utilizados para sustentar el Marco teórico de

la presente investigación (dignidad, igualdad, organización social).

El tercer numeral refiere, en contrasentido del numeral anterior, aquellos

problemas que el partido busca resolver mediante su actividad pública, y

si bien el concepto “dignidad humana” aparece enunciado de manera

textual, es importante resaltar la siguiente frase:



23

“el corporativismo en las organizaciones sociales, laborales y políticas

sujetas al clientelismo, sectarismo, intolerancia y nepotismo permite

que se preserven fenómenos de discriminación, machismo,

dogmatismo, violencia e inseguridad, donde se pierde todo el respeto a

la vida y la dignidad de las personas”.

No es ningún secreto ni hace falta investigar demasiado para

constatar que buena parte del corporativismo mexicano fincado en la

Ciudad de México se encuentra hoy alimentando las bases del Partido

de la Revolución Democrática. Ese corporativismo es de corte similar

al que Schettino (2007) pone como base del Partido Revolucionario

Institucional, y posee los mismos cortes autoritarios, antilibertarios y

demagógicos, y al que pueden sumarse las apreciaciones de Rincón

Gallardo (2008):18

“[…] la persistencia de estructuras clientelares del poder con las que el

PRI gobernó durante más de 70 años. El autoritarismo mexicano

heredó a nuestro país un modelo de sindicalismo corporativo y

antidemocrático que todavía mantiene mucho del poder acumulado

durante décadas”.

Esto, aunado al análisis que realiza Aguilar Camín19 en el mismo

sentido:

“[…] no hay un proyecto reformista de igualdad social en la izquierda

mexicana. Tampoco hay un compromiso moderno con el mundo del

trabajo. En el discurso de la izquierda el mundo del trabajo no ocupa

18 Rincón Gallardo, Gilberto (2008). Entre el pasado definitivo y el futuro posible. Ejercicios de reflexión política en clave democrática. Fondo de Cultura Económica, México, p. 24. 19 Aguilar Camín, Héctor, “Caminos de la izquierda democrática”, en Nexos, núm. 438,

junio 2014.


24

el lugar prominente que tuvo siempre en la tradición socialista. Ese

lugar lo ocupan los pobres y los marginados, los sindicatos públicos

afines, las comunidades indígenas y diversas causas y actores de la

sociedad civil, todos sujetos fundamentales de nuestro presente pero

ninguno con la universalidad, la representación y la fuerza material

del mundo del trabajo”.

Para el numeral cuarto, es importante considerar el argumento expreso de

“acceder a una vida de bienestar y libre de violencia”. Si bien el resto del

párrafo podría suscribirse como parte integral de las premisas establecidas

por Millán Puelles, la práctica política del Partido de la Revolución

Democrática no goza de ese atributo que excluye la violencia de la vida

social. Conviene referir de nuevo para este caso el análisis de Aguilar

Camín:20

“Hay temas del pasado con los que una izquierda que aspira a

gobernar debe ajustar cuentas. El fundamental de esos temas es el

paradigma todavía imantado de la revolución: la poderosa idea de que

el cambio social profundo sólo puede lograrse mediante una revolución

o un cambio radical equivalente”.

Rincón Gallardo añade a este respecto:21

“Durante mucho tiempo, en este país se ha creído que es políticamente

más valiosa la estrategia del enfrentamiento o la ruptura que la del

consenso, pues se piensa que el consenso es subordinación, ausencia

de criterio propio o negación de los principios políticos que

proporcionan identidad a un proyecto. Se tiene la idea del consenso

como entrega, declinación o vasallaje”.

20 Op. Cit. 21 Rincón Gallardo, Gilberto (2008). Entre el pasado definitivo y el futuro posible. Ejercicios de reflexión política en clave democrática. Fondo de Cultura Económica, México, p. 210



25

El quinto numeral busca compensar entre la militancia y estructura de ese

partido un igual acceso a espacios de decisión internas, lo que coincide

plenamente con los postulados de Millán Puelles.

Por lo que refiere al Programa de Acción Inmediata del Partido de la

Revolución Democrática, éste consta de 16 apartados, que preceden un

documento que contiene 115 objetivos precisos de acción política.

Los 16 apartados primeros son:

1. La reforma del Estado para el fortalecimiento de la democracia,

atención de la desigualdad y del crecimiento sustentable.

2. Fortalecimiento del combate a la corrupción. Rendición de cuentas y

transparencia.

3. Seguridad pública para todos y todas, y verdadera seguridad del

Estado mexicano.

4. Democratizar los medios de comunicación.

5. Desarrollo sustentable y cambio climático.

6. Construir un modelo de desarrollo sustentado en una economía

generadora con empleos y distributivos del ingreso.

7. Una nueva política para el campo.

8. Combate a los monopolios y defensa de los intereses de los

consumidores.

9. Reforma energética integral, una nueva política soberana.


26

10. Desarrollo social basado en el combate a la pobreza y la

desigualdad. Universalización de la atención de la salud y de las

pensiones.

11. La educación pilar del desarrollo nacional.

12. Etnias, pueblos originarios y afromexicanos

13. Jóvenes, actores estratégicos del cambio.

14. Derechos de las mujeres.

15. Diversidad sexual.

16. México en el contexto de la geopolítica mundial. Una política

exterior soberana.

Las menciones a la dignidad humana aparecen en 4 ocasiones, expresadas

de la siguiente manera:

a) “Para la programación en servicios de radiodifusión, se establecerá

un tiempo máximo que podrá ser destinado a la transmisión de

publicidad. La transmisión de publicidad, se deberá identificar como

tal y diferenciarse claramente del programa. La propaganda que se

presenta al público como parte de contenidos informativos de la

programación debe ser identificada como inserción pagada mediante

un texto superpuesto. Se deberá actuar contra la publicidad que

atente contra la dignidad de la persona, vulnere los valores y derechos

reconocidos en la Constitución. Velar por el derecho de la audiencia

contra la publicidad engañosa y los ‘productos milagro’

b) “La Carta de las Naciones Unidas y La Declaración Universal de los

Derechos Humanos, así como los Tratados Internacionales, que ha

suscrito y aprobado México como estado parte, que incluyen preceptos

básicos que la humanidad ha configurado para garantizar el respeto a

la dignidad humana y obligan a la adopción de medidas, hasta el



27

máximo de recursos de que disponga, encaminadas a lograr

progresivamente y por todos los medios apropiados, la plena

efectividad de los derechos humanos.

c) “El Estado debe garantizar a niñas, niños y adolescentes los

derechos de protección, promoción, provisión, participación y

prevención para incidir correcta y adecuadamente en el respeto de su

dignidad humana, en el desarrollo de su personalidad y la

construcción de su ciudadanía, así como una vida libre de violencia y

con bienestar pleno.

d) “Los miembros de la Policía estarán preparados para hacer uso de la

fuerza, de manera tal que ésta no se constituya en un medio para

afectar la dignidad de las personas”.

Si bien el inciso a) no se ajusta a las definiciones expuestas por

Millán Puelles, el b) no sólo lo hace sino que, además, incluye el tema

de los Derechos Humanos tal y como los enuncia la declaración de

las Naciones Unidas, aunque cabe señalar que la propia práctica

política del PRD, de acuerdo con la información de Aguilar Camín y

Rincón Gallardo (2008), y al menos en lo que respecta al tema del

corporativismo, es ajena a este pronunciamiento.

Por lo que refiere al inciso c), la concepción del Estado como ente

encargado de paliar las desigualdades sociales coincide de lleno con

la de Millán Puelles; el inciso d), por otra parte, asegura de igual

modo que ese Estado y la autoridad a su cargo respete la integridad

de la ciudadanía en casos extremos.


28

3) Partido Acción Nacional

La Proyección de Principios de Doctrina del Partido Acción Nacional,22

modificada en el año 2002,23 se encuentra dividido en 13 apartados:

a) Persona y Libertad

b) Política y Responsabilidad Social

c) Familia

d) Cultura y Educación

e) Nación y Mundialización

f) Desarrollo Humano Sustentable

g) Humanismo Económico

h) Trabajo

i) Medio Ambiente

j) Ciencia e Innovación Tecnológica

k) Humanismo Bioético

l) Campo y Ciudad

m) Municipio y Sistema federal

Continuando con el análisis de la presencia del concepto de “dignidad

humana” tal y como se desarrolla en Millán Puelles (1978), destaca que el

primer apartado de la Proyección de Prinicpios panista subraye como

22 Las referencias a este documento, así como al Programa de Acción Política, fueron

tomadas del www.pan.org.mx, consultado el 20 de agosto de 2004. 23 El Partido Acción Nacional ha realizado revisiones y actualizaciones de sus Principios de Doctrina en 1965 y en la fecha mencionada. El documento original data del año de su

fundación, en 1939.

http://www.pan.org.mx/



29

obejto de su acción política una concepción que coincide de manera plena

con el filósofo español:

“1. Persona y Libertad

“El Partido Acción Nacional centra su pensamiento y acción en la

primacía de la persona humana, protagonista principal y destinatario

definitivo de la acción política. Busca que el ejercicio responsable de la

libertad en la democracia conduzca a la justicia y a la igualdad de

oportunidades para la consecución del bien común.

“Como persona libre el ser humano es un sujeto ético y social, por lo

tanto, responsable ante sí mismo y ante los demás. Tiene deberes y

derechos propios de su naturaleza. La libertad no puede ser

constreñida arbitrariamente por el Estado y no tiene otros límites

jurídicos que los impuestos por el interés nacional, por las normas

sociales y por el bien común. La libertad de cada persona ha de

coexistir creativa y solidariamente con la libertad de los demás. Los

medios deben estar adecuados al fin. Un fin éticamente valioso no

justifica la utilización de medios éticamente inadmisibles.

“Toda persona tiene derecho y obligación de ejercer responsablemente

su libertad para crear, gestionar y aprovechar las condiciones

políticas, sociales y económicas, con el fin mejorar la convivencia

humana. Construir un orden social justo es deber individual y

colectivo.

“La vida y la dignidad del ser humano deben protegerse y respetarse

desde el momento de su concepción hasta su muerte natural.

“Toda forma de discriminación o desigualdad de oportunidades por

razones de sexo, edad, capacidad física, etnia, religión, convicción,

condición económica o cualquier otra, debe ser rechazada, corregida y

en su caso sancionada.


30

“Acción Nacional reconoce plenamente las consecuencias prácticas de

la común dignidad de las mujeres y los hombres, y de su común

carácter de sujetos y agentes responsables y colaboradores en la

construcción, animación y dirección de la sociedad.

“La equidad de género significa que mujeres y hombres deben

desarrollarse plena, libre y responsablemente. La discriminación

existente contra la mujer en la familia, el trabajo, la política y en las

demás esferas sociales es inaceptable. Los hombres y mujeres deben

reconocer mutuamente su valor propio, y responsabilizarse el uno del

otro, compartiendo las tareas que les corresponden dentro y fuera de

la familia, sobre la base de igualdad de derechos y de obligaciones.

“Los derechos humanos alientan la vida de una auténtica democracia.

Son expresión concreta de la dignidad humana. Sin respeto cabal a los

derechos humanos, no hay democracia. De su pleno reconocimiento y

protección jurídica depende la existencia de un Estado democrático de

derecho”.

No es asunto menor que, solamente en este primer apartado, el concepto

“dignidad humana” aparezca mencionado en tres ocasiones; esta primacía

permanecerá en buena parte del documento, tal y como se muestra a

continuación.

“2. Política y Responsabilidad Social

La democracia, como sistema de vida y de gobierno, se funda en la

igualdad de todos los seres humanos, condición esencial para

responsabilizar a las personas del cuidado y procuración del bien

común. Es la forma superior de organización del poder político y el

sistema óptimo para respetar la dignidad humana. La democracia y la

responsabilidad social deben fomentar el pluralismo, que es la

convivencia de distintas maneras de pensar y actuar en diversos

centros de decisión, poder e iniciativa.



31

“5. Nación y Mundialización

La Nación mexicana amplía su existencia más allá de las fronteras del

Estado y, por ello, abraza a los millones de mexicanos que por diversas

razones, algunos en circunstancias de dolor, viven en otro país. La

decisión de migrar es un derecho fundamental de la persona. La

conciencia de pertenecer a la Nación por parte de los mexicanos en el

exterior debe ser admitida por el Estado, en todas sus dimensiones

jurídicas. Que no exista en el extranjero un mexicano sin Nación, sin

respeto a su dignidad y a sus derechos humanos”.

Conviene, en este sentido, detenerse en la concepción que este partido

tiene de los asuntos internacionales, sobre todo en lo que atañe al tema de

la globalización. Acción Nacional enfrenta a esta definición el concpeto de

“mundialización”, esbozado por primera vez en español por Carlos Castillo

Peraza24 y que refiere que el “globo” es simplemente un planeta al que

unen los temas financieros y económicos, mientras que “mundo” incluye a

los seres humanos, a la “persona humana”, como elemento central en

torno al cual debe girar cualquier política exterior.25

De este modo, el principio de doctrina, también incluido en el apartado 5,

resalta:

“Para la globalización no hay personas ni comunidades con historia,

cultura, necesidades y proyectos, sino entes económicos dentro de un

mercado global. La mundialización, en cambio, es protagonizada por

24 Cfr. Castillo Peraza, Carlos (2006). El porvenir posible. Fondo de Cultura Económica,

México, en particular “De la globalización a la mundialización”, pp. 528-537. 25 Sobre el desarrollo de la concepción internacional de Acción Nacional, véase Cortés Jiménez, Rodrigo Iván (coord.) (2013). Humanismo Internacional. Elementos de la proyección internacional humanista de Acción Nacional. Fundación Konrad Adenauer,

México.


32

personas, comunidades y naciones que se relacionan entre ellas con

libertad y dignidad, las cuales, al lado de la estructura tecnológica y

económica mundial, construyen leyes e instituciones responsables y

solidarias, que brindan un marco de acción conocido, construido y

aceptado por todos, con pleno respeto a la cultura, tradición, valores y

creencias de cada pueblo.

“La mundialización es acompañar la formación de un mercado global,

con la expansión del Estado de Derecho para arribar a un Mundo de

Derecho. La mundialización es globalizar valores fundamentales del

hombre, como los derechos humanos y la responsabilidad solidaria.

Es necesario promover estrategias de renegociación y alivio de la carga

financiera de nuestros pueblos, sin que su ejecución implique un

agravamiento en la condición económica de las naciones que la sufren.

Es tarea del humanismo el colaborar en la construcción de un nuevo

orden financiero internacional basado en la justicia y en la ética, en el

reconocimiento de la interdependencia entre países, en la prioridad del

desarrollo humano sustentable, en especial de las economías más

pobres, y en el respeto a la soberanía de las naciones.

“La mundialización supone la convivencia pacífica, ordenada y justa

de las naciones y los estados. Obliga a todos los actores del mundo a

conducirse de acuerdo con el derecho internacional para asegurar la

paz y la seguridad”.

En lo que respecta a la economía, el apartado “7. Humanismo económico”,

señala:

“El humanismo económico impulsa una economía eficiente y moderna,

equitativa en la distribución de oportunidades, responsabilidades y

beneficios; una economía social de mercado, sustentada en el trabajo

libre, respetuoso de la dignidad humana y del medio ambiente, que

tenga su raíz en la libertad y en la iniciativa de las personas; una



33

economía que busca construir un México más próspero, más libre y

más humano.

“Una política económica humanista subordina sus decisiones a la

ética y parte del hombre, su dignidad y sus derechos. En

consecuencia, afirma la prioridad del trabajo sobre el capital y busca

el acceso del mayor número posible de personas a la propiedad de los

medios de producción. La economía humana impulsa el espíritu

emprendedor y promueve la participación responsable de quienes en la

empresa aportan su trabajo, talento administrativo o su capital a la

generación de bienes, e impulsa la participación justa en los frutos de

la productividad.

“Una política económica humanista subordina sus decisiones a la

ética y parte del hombre, su dignidad y sus derechos. En

consecuencia, afirma la prioridad del trabajo sobre el capital y busca

el acceso del mayor número posible de personas a la propiedad de los

medios de producción”.

Así, el modo en que Acción Nacional concibe la economía no sólo da

preeminencia a la “dignidad humana” sino que, además, busca paliar las

diferencias sociales a través de un ordenamiento acorde con el concepto de

Millán Puelles sobre la organización social. Lo mismo ocurre, y este Partido

es el único que se pronuncia expresamente al respecto, con el tema de la

Bioética, donde se desarrolla la expresión de respeto a la vida que, si bien

ha sido polémica en la opinión pública, es congruente en absoluto con una

concpeción de la dignidad humana que se mantiene firme en los preceptos

que dicta una definición integral.


34

“11. Humanismo Bioético.

“Acción Nacional afirma el valor de la vida humana desde la

concepción hasta la muerte natural y el derecho de cada persona a

que su vida sea respetada de manera total.

“Cada mujer y cada hombre es un ser indivisible corporal y

espiritualmente; un ser único, singular, irrepetible, con identidad

propia y una dignidad intrínseca.

“El derecho a la vida es inviolable. Por ser fundamento de todos los

demás derechos, debe ser respetado, garantizado y protegido por el

Estado, de acuerdo con las normas, principios y valores del derecho.

Nadie es dueño de la vida, ni de la muerte.

“El embrión humano es persona. Tiene dignidad y derecho a la vida, a

la identidad, a la protección por el Estado y la sociedad. No puede ser

objeto de manipulación ni de las agresiones que conducen a su

destrucción y eliminación. Toda vez que el ser humano es en sí mismo

un fin y no un medio, la clonación de seres humanos por cualquier

razón debe ser prohibida. En la procreación puede ayudarse a la

naturaleza, respetando la vida y la dignidad de las personas.

“Todo tratamiento, investigación y manejo realizado sobre seres

humanos y su patrimonio genético debe ser certeramente responsable

para respetar la dignidad humana. El genoma humano es patrimonio

de la humanidad. Todo ser humano tiene derecho a conocer su

filiación genética y a que tal filiación sea protegida por las leyes que

tutelan la privacidad y la intimidad. No se puede discriminar a una

persona a causa de su patrimonio genético”.

La última mención que aborda el tema de la persona humana de manera

explícita en los Principios de Doctrina de Acción nacional se refiere a:



35

“12. Campo y ciudad

Las comunidades del campo, en especial las que se encuentran en

extrema pobreza, deben ser el centro de una política integral capaz de

generar una nueva sociedad rural, fundada en la solidaridad de sus

miembros y en la promoción de la dignidad de las personas, es decir

en la humanización integral del campo y sus habitantes”.

El Programa de Acción Política del Partido Acción Nacional –titulado

“Acción Nacional de cara al Siglo XXI”–, por otra parte, presenta siete

menciones textuales del concpeto “dignidad humana”, en sus cinco

apartados principales:

1) Pensemos México

2) Por un Desarrollo Humano Sustentable para México

3) Oportunidades para las Personas

4) Fortalecimiento de Nuestra Comunidades

5) La Nación que queremos

Se transcriben a continuación estas referencias:

a) “Pensemos México

“Acción Nacional piensa en México. El reto más importante de nuestro

país consiste en crear las bases para un desarrollo económico y social

sustentable que revierta las condiciones de pobreza extrema en las que

viven muchos mexicanos, de manera que accedan a las oportunidades

que les permitan vivir libremente y con dignidad.


36

“Uno de los principios básicos de la economía social de mercado y que

son expresión de la dignidad humana es la libertad económica que

implica entre otras cosas, la competencia, la libertad de elección de las

personas, la garantía de sus derechos patrimoniales, incluido el de

propiedad, y el trabajo como un espacio de realización humana. La

ausencia de competitividad en México señala graves deficiencias en el

proceso de crecimiento económico, lo cual se demuestra cuando uno

considera que el ingreso de los mexicanos es casi igual al que había en

1980.

b) “Por un Desarrollo Humano Sustentable para México

“Acción Nacional asume un nuevo compromiso. Queremos un México

donde hombres y mujeres vivan con dignidad. Aspiramos al

fortalecimiento de nuestras comunidades y a la construcción de una

Nación sólida. Gobierno y sociedad deben asumir sus

responsabilidades sociales en la generación de un Desarrollo Humano

Sustentable acorde con las necesidades del país. Este es el

compromiso de Acción Nacional.

c) “Oportunidades para las Personas

“13) Acción Nacional sustenta su acción política en el respeto a la

dignidad de la persona, donde la defensa y promoción de los derechos

humanos y el ejercicio de la libertad responsable, ocupan un lugar

preponderante. El derecho a la vida desde la concepción hasta la

muerte natural, a la igualdad, a la propiedad y a la seguridad jurídica

deben destacar en un sistema democrático. Toda autoridad legítima se

debe fundamentar en ellos. Su violación quebranta el Estado de

Derecho y restringe la libertad. La Constitución debe reconocerlos

plenamente y, frente a los abusos del poder, garantizar su defensa.

“20) Las políticas de salud deben abatir las enfermedades ligadas al

subdesarrollo y enfrentar los problemas asociados a la

industrialización, a la urbanización y a la contaminación. El

envejecimiento de la población y el aumento de la esperanza de vida,



37

nos obligan a invertir en servicios especializados en padecimientos

característicos de los adultos mayores. De igual forma, promovemos

programas de salud reproductiva que respeten la dignidad humana y

el bienestar de las mujeres.

“41) El respeto a la dignidad humana implica acciones especiales para

la creación de leyes, instituciones y políticas públicas que permitan a

las personas con discapacidad de todas las edades acceder a

oportunidades equitativas para su desenvolvimiento, ayudándoles a

superar las barreras culturales, físicas y sociales que les impiden vivir

con dignidad. Esta política debe centrarse en acciones que promuevan

su ingreso al mercado laboral, a la educación y a los servicios de

salud, así como de adaptación de la infraestructura urbana a sus

necesidades.

d) “La Nación que queremos

“121) La miseria atenta contra la dignidad humana y denigra la vida

pública. Debe ser combatida con una política económica adecuada y

con políticas sociales transversales e integrales con perspectiva de

familia, que amplíen las capacidades de las personas y les asegure

igualdad de oportunidades, la generación de un patrimonio digno y

una protección social adecuada”.

Siguiendo con la definición trazada de Millán Puelles, puede observarse el

modo en que el Programa de Acción Política recoge el concepto “dignidad

humana” descrito en los Principios de Doctrina y lo traduce en acciones

específicas, destinadas, siguiendo con el autor, a paliar las diferencias, a

optimizar los organismos sociales y a construir un desarrollo sostenible en

el tiempo.


38

Objetivos como “paliar la pobreza”, que apunta directamente a la

desigualdad adquirida, y enunciado en los incisos a) y d) de esta síntesis;

como la libertad económica que favorezca la libre iniciativa, es decir, el

establecimiento de condiciones para que las personas sean capaces de

construir por sí mismas un patrimonio y una riqueza propias, enunciados

en el apartado a), párrafo segundo; como la adhesión explícita a los

objetivos descritos en la Declaración de los Derechos Humanos, expreso en

el inciso c); como el equilibrio justo y equitativo entre Estado y sociedad,

mencionado en el inciso b); son todos, en suma, una manifestación clara

de unos principios que sustentan la actividad política en una concepción

precisa de “dignidad de la persona humana”.



39

8. Conclusiones y nueva agenda de investigación

Luego del análisis pormenorizado de los docuemntos y programas de

acción de los tres principales partidos políticos de México, así como de la

reflexión respecto de sus aciertos y contradicciones tanto en la parte

teórica como en la praxis política, se confirma la hipótesis de este

documento, en el sentido de lo que sigue:

a) El Partido de Revolucionario Institucional basa sus principios en un

modelo que hereda los valores de la Revolución mexicana, mismos

que resultan cada vez más incompatibles con el desarrollo

democrático del país e incluso lo obstaculizan. Estos principios y

esta práctica política se encuentran, asimismo, lejanos a la

concepción de “dignidad humana” expresa en el Marco Teórico.

b) El Partido de la Revolución Democrática, si bien toma como base de

sus postulados una definición de “dignidad humana” acorde con los

postulados de Millán Puelles, en lo que se refiere al programa de

acción se contrapone a buena parte de esos postulados, incluso de

manera francamente contradictoria.

c) La claridad de la definición del concepto de “dignidad humana” en

los documentos de principios del Partido Acción Nacional, le lleva no

sólo a transportar ese principio con la misma claridad a su

Programa de acción política, sino además a proyectar nuevos

elementos que complementan los postulados originales del filósofo.


40

Por otra parte, la nueva agenda de investigación que se propone versará

sobre el análisis de plataformas políticas, de propuestas de ley y de

políticas públicas a la luz del concpeto de “dignidad humana”, de tal suerte

que se pueda extender el estudio hacia documentos partidistas que se

desprenden de las declaraciones de principios de los tres principales

partidos politicos de México.



41

9. Bibliografía

Almond, Gabriel y Verba, Sidney (1970). La cultura cívica. Estudio sobre la

participación política democrática en cinco países. Euramérica,

Madrid.

Castillo Peraza, Carlos (2006). El porvenir posible. Fondo de Cultura

Económica, México.

Cortés Jiménez, Rodirgo Iván (coord.) (2013), Humanismo Internacional.

Elementos de la proyección internacional humanista de Acción

Nacional. Fundación Konrad Adenauer, México.

Millán Puelles, Antonio (1978). Persona humana y Justicia social. RIALP,

Madrid.

Rincón Gallardo, Gilberto (2008), Entre el pasado definitivo y el futuro

posible. Ejercicios de reflexión política en clave democrática. Fondo de

Cultura Económica, México.

Schettino, Macario (2007). Cien Años de confusión. México en el siglo XX.

Taurus, México.

Páginas de internet consultadas (Declaraciones de principios y

Programas de acción política):

- Partido Acción Nacional: www.pan.org.mx

- Partido Revolucionario Institucional: www.pri.org.mx

- Partido de la Revolución Democrática: www.prd.org.mx

- Instituto Nacional Electoral: www.ine.mx

http://www.pan.org.mx/

http://www.pri.org.mx/

http://www.prd.org.mx/

http://www.ine.mx/

42

Documentos de Trabajo es una investigación de análisis de la Fundación

Rafael Preciado Hernández, A. C. a petición del Partido Acción Nacional.

Registro ante el Instituto Nacional de Derechos de Autor en trámite.

Fundación Rafael Preciado Hernández, A.C.

Ángel Urraza No. 812, Col. Del Valle, C.P. 03100, México, D. F.

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