6
EJERCICIOS SOBRE EL USO DEL SUSTANTIVO Y EL ADJETIVO EJERCICIOS DE APLICACIÓN 1.- Coloca la forma que corresponda del artículo determinado o del indeterminado (indefinido un, una, unos, unas) en el espacio en blanco de las siguientes oraciones. Precisa qué valor de significado aporta cada uno y explica la diferencia de uso entre ambos: ... día me compraré ... libro que me aconsejaste. Suele pasar ... vacaciones de verano en ... montaña. Sale ... sábados por la tarde. Han venido ... chicos que no conocía. Se ha comprado ... pantalones de pana. Se le ha roto ... pata a ... mesa del comedor. 2.- Coloca los demostrativos apropiados en las siguientes oraciones y explica por qué se ha elegido cada forma: Larca y Alberti son dos escritores de la Generación del 27, ... escribió Poeta en Nueva York. Allí, en ... árbol, hay un pájaro. Río de Janeiro tiene más habitantes que Brasilia; sin embargo, ... es la capital de Brasil. Como he aprobado todo, me lo pasaré bien ... vacaciones. 3.- Señala los determinativos que aparecen en las siguientes oraciones y precisa de qué clase es cada uno: Algún día de esta semana iré al cine. Dame dos vasos. En ninguna ocasión lo logró. El alumno cuyo apellido empieza por V figura en el último lugar de la lista. iQué día más caluroso! ¿Cuántos años cumples? Hay demasiados coches. Déjame, que ya tengo bastantes problemas. Solo he leído medio capítulo de este libro. Ha comido doble ración de tarta que sus hermanos. 4.- Indica si las palabras subrayadas en las siguientes oraciones son pronombres, determinativos o adverbios de cantidad: Se ha quedado con todo . Desprecia a todo el mundo. Hoy han venido demasiados . Tiene demasiados problemas. Sufre demasiado . Ponle más azúcar. Sube más arriba. Tiene poca sal, échale más . No ha venido nadie. No tiene nada de valor. No está nada cansado. Ese perro ladra mucho; este, en cambio, nada . Su equipo pierde en bastantes ocasiones. Este año ha llovido bastante . La película es bastante divertida. Vive bastante cerca. Aunque no estemos todos , ya somos bastantes. Viene algo retrasado el tren. El tren llega con algo de retraso. Tienes más aptitudes que ninguno pero menos suerte.

Ejercicios Sobre El Uso de Determinantes y Pronombres

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Ejercicios Sobre El Uso de Determinantes y Pronombres

EJERCICIOS SOBRE EL USO DEL SUSTANTIVO Y EL ADJETIVO

EJERCICIOS DE APLICACIÓN

1.- Coloca la forma que corresponda del artículo determinado o del indeterminado (indefinido un, una, unos, unas) en el espacio en blanco de las siguientes oraciones. Precisa qué valor de significado aporta cada uno y explica la diferencia de uso entre ambos:

... día me compraré ... libro que me aconsejaste. Suele pasar ... vacaciones de verano en ... montaña. Sale ... sábados por la tarde. Han venido ... chicos que no conocía. Se ha comprado ... pantalones de pana. Se le ha roto ... pata a ... mesa del comedor.

2.- Coloca los demostrativos apropiados en las siguientes oraciones y explica por qué se ha elegido cada forma:

Larca y Alberti son dos escritores de la Generación del 27, ... escribió Poeta en Nueva York. Allí, en ... árbol, hay un pájaro. Río de Janeiro tiene más habitantes que Brasilia; sin embargo, ... es la capital de Brasil. Como he aprobado todo, me lo pasaré bien ... vacaciones.

3.- Señala los determinativos que aparecen en las siguientes oraciones y precisa de qué clase es cada uno:

Algún día de esta semana iré al cine. Dame dos vasos. En ninguna ocasión lo logró. El alumno cuyo apellido empieza por V figura en el último lugar de la lista. iQué día más caluroso! ¿Cuántos años cumples? Hay demasiados coches. Déjame, que ya tengo bastantes problemas. Solo he leído medio capítulo de este libro. Ha comido doble ración de tarta que sus hermanos.

4.- Indica si las palabras subrayadas en las siguientes oraciones son pronombres, determinativos o adverbios de cantidad:

Se ha quedado con todo. Desprecia a todo el mundo. Hoy han venido demasiados. Tiene demasiados problemas. Sufre demasiado. Ponle más azúcar. Sube más arriba. Tiene poca sal, échale más. No ha venido nadie. No tiene nada de valor. No está nada cansado. Ese perro ladra mucho; este, en cambio, nada. Su equipo pierde en bastantes ocasiones. Este año ha llovido bastante. La película es bastante divertida. Vive bastante cerca. Aunque no estemos todos, ya somos bastantes. Viene algo retrasado el tren. El tren llega con algo de retraso. Tienes más aptitudes que ninguno pero menos suerte.

Page 2: Ejercicios Sobre El Uso de Determinantes y Pronombres

5.- Distingue los determinativos y pronombres que aparecer en el siguiente texto y precisa a qué subclase pertenecen:

En un lugar de la Mancha, de cuyo nombre no quie acordarme, no ha mucho tiempo que vivía un hidalgo de los de lanza en astillero, adarga antigua, rocín flaco y galgo corredor. Una olla de algo más vaca que carnero, salpicón las más noches, duelos y quebrantos los sábados, lentejas los viernes, algún palomino de añadidura los domingos, consumían las tres partes de su hacienda. El resto de ella concluían sayo de velarte, calzas de velludo para las fiestas, con sus pantuflas de lo mesmo, y los días de entresemana se honraba con su vellorí de lo más fino. Tenía en su casa una ama que pasaba de los cuarenta, y una sobrina que no llegaba a los veinte, y un mozo de campo y plaza, que así ensillaba el rocín como tomaba la podadera. Frisaba la edad de nuestro hidalgo con los cincuenta años; era de complexión recia, seco de carnes, enjuto de rostro, gran madrugador y amigo de la caza.

MIGUEL DE CERVANTES: Quijote, 1,1 6.- Señala los casos de laísmo, leísmo y loísmo que haya en las oraciones siguientes:

Siempre le están llamando por teléfono a tu hermana. No la comentes nada de eso. A sus primas no hay quien las aguante. Lo eligieron diputado. Al equipo se le recibió bien. Lo han pegado a tu hermano. Se rompió la jarra, pégala.

La han escrito a la profesora un anónimo. La queda muy bien ese sombrero. iQué le vamos a hacer! Tu hermana siempre dice que la sale mal el examen. Le hizo una caricia a su novia. La acarició a su novia. Invítales a todos.

7.- Los pronombres personales átonos mantienen siempre un determinado orden cuando aparecen varios juntos en una oración. Este orden es el siguiente: SE – 2ª persona – 1ª pers. – 3ª pers. Según esto, corrige los errores que haya en las siguientes oraciones:

No te me pongas impertinente. No me se ha roto el plato de milagro. Te se cae todo lo que coges.

¿Te se ha olvidado algo? ¡Cuidado, no te me caigas!

8.- Los posesivos se relacionan con las personas gramaticales, por lo que deben tenerse estas en cuenta para la concordancia. Corrige los errores de este tipo en las oraciones siguientes:

Siempre te sales con la tuya. Nos ha costado lo suyo. Les ha costado lo suyo.

A su vez, vosotros tiráis de ahí. Vosotros siempre vais a su aire. No le hagas caso; tú, a lo suyo.

9.- Los pronombres personales átonos la, las, lo, los, le, les han de concordar en género y número con su referente. Por su parte, los pronombres que tienen un significado reflexivo han de concordar con el sujeto en persona y número. Señala las faltas de concordancia que haya en las siguientes oraciones:

No les comentes nada a tus vecinos. Tras el golpe has tardado más de cinco minutos en volver en sí. A tus primos no los invitas nunca. La verdad es que no dais mucho de sí. Cuando usted volvió en sí, no sabía dónde se encontraba. No le puedo decir eso a ustedes. Usted se pone fuera de sí con demasiada frecuencia. ¿Por qué no le dices de una vez a tus amigos la verdad? Tú eres tonto de por sí. Nos llevaremos consigo a todos. A las cigüeñas todos los años las veo desde aquí. Decidle a los otros que mañana vendré. Hazlo por ti mismo. Ten cuidado, que no las tienes todas contigo. Estaban fuera de sí.

Page 3: Ejercicios Sobre El Uso de Determinantes y Pronombres

10.- No existen los grupos *con mí, *con ti, *con sí. Por otro lado, son incorrectas como reflexivas las expresiones con él, con ella, con ellos, con ellas. Teniendo esto en cuenta, corrige los errores que presenten las oraciones siguientes:

No te enfades tanto con ti mismo. Está contento con sí mismo. Se llevó con ella a su hijo. Se enfadó con él mismo. Últimamente me da por hablar conmigo mismo. Arrastraron con ellos a los demás.

11.- Corrige los usos incorrectos de los relativos e interrogativos en las oraciones siguientes:

Ha sido ese coche quien ha provocado el accidente. Los alumnos a quien he nombrado que salgan. Desconozco el con qué lo ha hecho. He conocido a un chico que su padre es inglés. La gente quien quiera puede venir. He visto un accidente, cuyo suceso me ha impresionado mucho. Había una gran multitud, quien no paraba de chillar. Dime el por qué no quieres venir. Los alumnos que sus notas sean superiores a notable recibirán un premio. Escribió una novela, por cuya obra se ha hecho famosa.

12. Señala y clasifica los pronombres del siguiente texto:

La afrenta viene de parte de quien la puede hacer y la sustenta; el agravio puede venir de cualquier parte, sin que afrente. Sea ejemplo: está uno en la calle descuidado; llegan diez con mano armada, y dándole de palos, pone mano a la espada y hace su deber; pero la muchedumbre de los contrarios se le opone, y no le deja salir con su intención, que es de vengarse; este tal queda agraviado, pero no afrentado. Y lo mesmo confirmará otro ejemplo: está uno vuelto de espaldas; llega otro y dale de palos. y en dándoselos, huye y no espera, y el otro le sigue y no alcanza; este que recibió los palos, recibió agravio, mas no afrenta; porque la afrenta ha de ser sustentada.

MIGUEL DE CERVANTES: Quijote, 11,32

Page 4: Ejercicios Sobre El Uso de Determinantes y Pronombres

EJERCICIOS DE PROFUNDIZACIÓN

1.- Cuando un sustantivo de género femenino empieza por a (o ha) tónica, ha de ir precedido por los artículos e indefinidos el, un, algún, ningún (aunque suelen usarse también alguna y ninguna). De esta manera, hay que decir y escribir el agua, un agua, algún agua, ningún agua, el hambre, un hambre, algún hambre, ningún hambre (no *Ia agua, *una agua, *alguna agua, *ninguna agua, *la hambre, *una hambre, *alguna hambre, *ninguna hambre). No obstante, han de tenerse en cuenta las siguientes observaciones: a) En plural han de utilizarse los femeninos las, unas, algunas, ningunas. Así, debe decirse las aguas, unas aguas, algunas aguas, ningunas aguas (no *los aguas, *unos aguas, *algunos aguas, *ningunos aguas). b) Aparte de los artículos e indefinidos el, un, algún, ningún, el resto de los determinativos (y también los ad-jetivos) presentan la forma femenina normal. Por tanto, lo correcto es esta agua, poca agua, mucha agua, clara agua, esta hambre, poca hambre, mucha hambre, verdadera hambre; no son correctos los grupos *este agua, *poco agua, *mucho agua, *claro agua, *este hambre, *poco hambre, *mucho hambre, *verdadero hambre. c) Si entre el artículo (o indefinido) y el sustantivo se inserta otra palabra, deben aparecer las formas femeninas. Por ello se dice la clara agua, la verdadera hambre, alguna clara agua, ninguna verdadera hambre; eso sí, se ha de decir el agua clara, el hambre verdadera, algún agua clara, ningún hambre verdadera. d) La palabra hache es una excepción. Se dice la hache (no *el hache). e) La regla afecta solo a los sustantivos. Delante de los adjetivos femeninos que empiezan por a (o ha) tónica se mantiene el artículo en femenino. De manera que debe decirse la ácida bebida, la agria melancolía. f) Tampoco se aplica la regla con los sustantivos femeninos que empiezan por a (o ha) átona. Por ello no tiene que decirse *el alameda, *el habitación. g) Cabe señalar que los determinativos el, un que preceden a los sustantivos femeninos que empiezan por a (o ha) tónica son históricamente femeninos, ya que tienen su origen en los pronombres femeninos latinos illam, unam. Se trata, pues, de formas solo aparentemente masculinas. En vista de todo lo anterior, dígase cuál es la forma correcta en las siguientes oraciones:

Este/Esta aula es muy espaciosa. Tiene un/una hambre que no ve. Hay que afilar el/la hacha. Tiene el/la ala rota. El/La asa de la taza se ha roto. No había ningún/ninguna ave en el huerto. Se cayó en el/la sucia agua del charco. Este/Esta acacia del parque se está secando. No ha visto ningún/ninguna hada buena. Le regalaron unos/unas habas verdes. Acércame el/la harina. Está sucia ese/esa agua. Le desagrada el/la áspera corteza. El/La azada se ha perdido. Padece un/una asma alérqica. He visto un/una águila perdicera. iCuánto/Cuánta hambre pasa! Todo/Toda el agua se ha contaminado. Los crímenes se cometieron con el/la misma arma.

2.- Señala qué expresiones de las siguientes son incorrectas y propón una redacción alternativa:

detrás nuestro al lado nuestro delante suyo enfrente tuyo de parte nuestra

al lado tuyo encima suyo debajo nuestro cerca de ti de parte suya

Page 5: Ejercicios Sobre El Uso de Determinantes y Pronombres

3.- El indefinido cualquier va precediendo al nombre; cuando va pospuesto, su forma es cualquiera: cualquier bebida, bebida cualquiera. Sus plurales respectivos son cualesquier y cualesquiera: cualesquier bebidas, bebidas cualesquiera. Teniendo en cuenta esto, corrige los errores que haya en las siguientes oraciones:

Desde cualquier posición se ve la torre de la iglesia. Trae un libro cualquiera. En cualesquiera tiendas que preguntes lo venderán. Dame cualquiera fruta. Me pondré unos zapatos cualquiera.

4.- En muchas ocasiones se emplea incorrectamente el numeral distributivo sendos. Hay que tener en cuenta que no equivale ni a dos ni a ambos, sino a «uno con cada uno», «uno para cada uno», «uno en cada uno»... Señala qué oraciones de las siguientes son incorrectas:

Cogió el balón con sendas manos. Juan, Luis y Pedro llegaron con sendas mochilas. Trajeron diez pájaros en sendas jaulas. Metió sus sendos pies en el charco. Metió sus pies en sendos charcos. María llegó con sendas amigas.

5.- Suele ser frecuente el uso incorrecto de los fraccionarios en lugar de los numerales ordinales. Sin embargo, sí es correcto el empleo del numeral cardinal por el ordinal, algo que resulta muy natural cuando se trata de números elevados. ¿Están utilizados correctamente los numerales en las siguientes oraciones? Corrígelos si no es así.

El corredor español llegó en el dieciseisavo lugar. En la catorceava edición del premio obtuvo un accésit. En el puesto seis figura un amigo suyo. Me quedé en el capítulo decimoséptimo. En la doceava ocasión lo consiguió. Le corresponde la onceava parte del total. El festival de cine celebra este año la edición veintidós.

6.- Cuando el imperativo, el gerundio y el infinitivo van complementados por un pronombre personal átono, este ha de ir enclítico (es decir, formando una sola palabra con él): Contésteme (no *Me conteste); Quiero dártelo (no *Quiero te lo dar). En los casos de perífrasis verbal los pronombres átonos pueden ir pospuestos o antepuestos a toda la perífrasis: Debes dárselo / Se lo debes dar. No obstante, cuando el verbo auxiliar es pronominal o es una locución verbal, no es posible la anteposición de los pronombres átonos: Te pones a hacerlo ahora (no *Te lo pones a hacer ahora); Has estado a punto de tirarlo (no *Lo has estado a punto de tirar). Cuando las formas verbales no constituyen una perífrasis, tampoco es correcta la anteposición de dichos pronombres: Lamento decírtelo (no *Te lo lamento decir); aunque hay alguna excepción: No sabes explicarlo bien / No lo sabes explicar bien. Teniendo en cuenta todo lo anterior, corrige en las oraciones siguientes los errores que haya por la incorrecta colocación de los pronombres.

Te lo teme confesar. Te lo tiene que confesar. Me lo iba a decir ahora. Me lo decidió contar. Cuando vio el pastel, se lo puso a comer ansiosamente. Me lo explique usted, por favor. Ella siempre te lo prefiere decir a ti. Nos lo acaba de contar ahora mismo. Acaba de contárnoslo ahora mismo. Nos intentó atracar. Se nos puso a mirar descaradamente. Lo va detrás de comprar.

Page 6: Ejercicios Sobre El Uso de Determinantes y Pronombres

7.- Clasifica los pronombres y los determinativos que aparecen en este texto, indica si aparecen en función de núcleo o de modificador del sustantivo y explica el valor semántico que tiene cada uno:

La verdad sea dicha: cada vez entiendo menos a la gente. Ahí está mi primo Severiano: ocho años largos hacía que no nos veíamos -nada menos que ocho años-, llego a su casa, y aquella única noche que, al cabo de tantísimo tiempo, íbamos a pasar juntos, la emplea el muy majadero -¿en qué?- ¡pues en contarme la historia del manuscrito!, una historia sin pies ni cabeza que hubiera debido hacerme dormir y roncar, pero que terminó por desvelarme. Y es que estos pueblerinos atiborran de estopa el vacío de su existencia rutinaria, convirtiendo en acontecimiento cualquier nimiedad sin el menor sentido de las proporciones. La visita de su primo, con quien él se había criado, y en cuya vida y milagros tanta cosa de interés hubiera podido hallar, no era nada a sus ojos, parece, en comparación de la bobada increíble que había tenido preocupado al pueblo entero, y a Severiano en primer término, durante meses y años. Me convencí entonces de que ya no restaba nada de común entre nosotros: mi primo se había quedado empantanado ahí, resignado y conforme. ¿Quién lo hubiera dicho veinte años atrás, o veinticinco, cuando Severiano era todavía Severiano, cuando aún no estaba atrapado tan sin remedio en la ratonera de aquel almacén de herramientas donde ha de consumir sus días ... !

FRANCISCO AYALA: El mensaje 8.- Comenta, utilizando la terminología lingüística adecuada, el sentido de este breve relato:

Los negros del cabo Mesurado aprendieron portugués con alegre facilidad; este progreso

considerable se interrumpió, sin embargo, cuando acometí el capítulo de los pronombres. Si yo los trataba de "tú”, mis estudiantes no entendían y se enfadaban; cada uno de ellos era “yo” y yo era "tú”.

SIMAO VIDEIRA: O periplo africano

9.- En el siguiente texto aparecen algunas formas (determinativos, pronombres y adverbios) que tienen significado deíctico, y otras que adquieren su significación mediante relaciones anafóricas. Señala cuáles son y explica su significado en cada caso.

La noche en que colocan a Osvaldo (tres años recién cumplidos) por primera vez ante el televisor (se exhibe un drama británico de hondas resonancias), queda hipnotizado, la boca entreabierta, los ojos redondos de estupor.

La madre lo ve tan entregado al sortilegio de las imágenes que se va tranquilamente a la cocina. Allí, mientras friega ollas y sartenes, se olvida del niño. Horas más tarde se acuerda, pero piensa: “Se habrá dormido”. Se seca las manos y va a buscarlo al living.

La pantalla está vacía, pero Osvaldo se mantiene en la misma postura y con igual mirada extática. “Vamos. A dormir”, conmina la madre. “No”, dice Osvaldo con determinación. “Ah, no. ¿Se puede saber por qué?” “Estoy esperando”. “¿A quién?” “A ella.” Y señaló el televisor. “Ah. ¿Quién es ella?” “Ella.” Y Osvaldo vuelve a señalar la pantalla. Luego sonríe, candoroso, esperanzado, exultante. “Me dijo: querido.”

MARIO BENEDETTI: Despistes y franquezas