Mix:• El Aniversario fantasmal.

• No me des falsas predicciones.

• Página 37 del Diario de Malvado Tío.

Personajes. Tonta Bruja Sapita

Sapo Sapito

Sapote Espejo Malito

Espeja Malita Boo

Buma BO

Ba, Be & Bi Ojón

Lila Amy

Fantasma de Malvado Tío

El Aniversario Fantasmal.

Era una mañana típica en Quién Sabe Dónde, ya saben, de esas muy frías y muy oscuras. Sapita estaba en su cuarto guardando sus cuadernos, sus libros y sus útiles escolares dentro de su mochila. Su horario de entrada era luego del mediodía, pero esa mañana iría a una clase especial con su profesor de matemática ya que iba muy avanzada en el tema que estaban aprendiendo. Se dio un gran susto, dejando caer la mochila y todo su contenido al suelo, cuando vio que Boo la observaba fijamente a menos de un metro de distancia.

Boo era un pequeño fantasma de desconocida procedencia que apenas podía pronunciar algunas pocas palabras además de su común “boo” de espectro y tenía una peculiar forma circular con brazos muy cortos. Su esposa, novia o lo que sea, era Buma, con quien había tenido cuatro hijos, que en realidad eran desprendimiento de sus propios ectoplasmas. Bo, el mayor, se había desprendido de Boo hace unos cien años, en cambio, los trillizos Ba, Be y Bi se desprendieron de Buma hace unas cinco décadas.-¡Boo! Ya te dije que no hagas eso.-Siento.-Está bien, pero que no vuelva a pasar. ¿Qué necesitas?

El pequeño fantasmita no supo qué responder así que le señaló a Sapita uno de los libros que estaban en el suelo.-Sí, así es. Debo ir a la escuela a esta hora. Es sólo por hoy, no te preocupes.

Boo movió su cuerpo concéntricamente de derecha a izquierda varias veces intentando expresar un “no” pero Sapita decidió ignorarlo, guardar los libros dentro de su mochila y salir de la habitación despidiéndose amablemente de su amigo. Al haber sido ignorado por ella optó esconderse dentro de su bolsa sin que la niña se diera cuenta.

Cuando Sapita bajaba por las escaleras le deseó un buen día como siempre y la escalinata se lo devolvió muy amablemente. Al bajar por completo vio que su madre hablaba con el espejo adivinador del castillo acerca de Sapo y las estrellas, pero como no tenía tiempo de saludar se despidió con un grito y salió del castillo para ir directamente al colegio.

Una vez allí se cruzó con su compañera Amy en los pasillos e intentó evitarla escondiéndose detrás de una máquina expendedora de gaseosas, pero aun así fue vista.-¿Qué haces aquí, Amy?-Tengo una clase especial con mi profesor de Geografía. No eres la única avanzada ¿sabes?-Sí, lo sé. Hay otros tres monstruos en mi clase avanzada de Matemática. No me interesa ser la única.-¡Mentira! ¡Mientes! ¡Te encantaría ser la mejor! ¡Quieres arrebatarme mi puesto! ¿Es eso? ¿Verdad?-No sé por qué somos amigas. Sin embargo, nos vemos luego, Vimpi quiere que salgamos a tomar helado.-Nos vemos, Sapita. Suerte en tu clase- dijo y se marchó sonriendo y saltando.-La detesto- dijo Sapita cuando Amy ya no podía oírla.

Se dirigió sin más hacia su salón de clase y una vez allí notó que era la primera en llegar así que se sentó en su asiento favorito, colocó su mochila sobre la mesa y al abrirla Boo escapó volando de ahí dentro y comenzó a volar riendo por todo el lugar.-¡Boo! ¿Qué haces aquí?-¡Escuela!-No puedes estar aquí. Al último alumno que trajo un fantasma en su mochila lo acusaron por tráfico de ectoplasma. ¡Vuelve a la mochila!-¡No!-¡Qué vuelvas a la jodida mochila! Oh, cada día hablo más como mi madre. Quise decir ¿podrías volver a la mochila? Por favor.

Boo se compadeció de las palabras de la niña sapo y decidió obedecerla y volver a esconderse en su bolsa. Apenas unos

segundos después ingresaron al salón el profesor y los alumnos restantes.

Durante la clase, el profesor, el cual era un brujo con aspecto humanoide, ya que los únicos brujos y brujas que tienen piel verde o celeste son los familiares de Tonta Bruja, se tragó una tiza y al escupirla rompió una ventana. El pequeño fantasma comenzó a reírse, lo cual irritó al maestro y Sapita tuvo que aceptar la culpa.-Bien, niños- dijo el instructor en un momento-. ¿Quién podría decirme qué es una ecuación diferencial ordinaria de primer orden?-¡Yo!- dijo un monstruo cebra levantando su pata.-De acuerdo, Zebro, responde.-¿Qué cosa respondo? ¡Quiero ir al baño!-¿Estabas prestando atención?-¿Atención? ¿A qué? No tengo tiempo para esto, mi vejiga está exigiendo a gritos ir al baño o matará a mi hámster.-¿Por qué tu vejiga mataría un hámster?-¿Ve? ¡Mis ganas ya se han ido! ¡Mis ganas ya se han ido! ¡Mi hámster morirá por su culpa, profesor!-¡Esto es todo muy extraño! ¡Ve al baño!-Gracias- dijo Zebro levantándose y saliendo del salón justo cuando el timbre del final de las clases sonaba.

El profesor suspiró muy confundido y aliviado de que por fin haya terminado la clase así que rápidamente juntó sus cosas y se marchó. Cuando los demás estudiantes también salieron, Sapita sacó a Boo de la mochila y le exigió una explicación. El pobre fantasmita comenzó a volar por todo el lugar alegrado porque por fin pudo salir de la bolsa de la monstruo sapo y cuando se detuvo intentó pronunciar una palabra: “a-i-e-a-io”.-No puedo entender lo que dices, Boo. Intenta explicarme mejor.

El fantasma se acercó a ella, abrió el lado derecho de su ectoplasma y Sapita pudo ver dentro del cuerpo espectral de su amigo un trozo de papel. Lo tomó y pudo leer lo siguiente:

“Nunca pasó una estrella...No tiré una moneda...

Llegaste por casualidad...

No tengo un amuleto...No te pedí en mis rezos...

Pero llegaste y no te irás... “-¿Qué es esto, Boo?-Aniversario.-¿Aniversario? ¡Oh! ¡El aniversario! Tú y Buma ¿verdad?-¡Sí!- gritó el fantasma sonriendo alegremente.-¿Qué pretendes con este poema?-Leer. Quiero leer.-¿Quieres que te enseñe?-¡Sí!- volvió a gritar.-Bueno… Si pude enseñarle a mamá que el frisbee con el que jugaba papá no era un OVNI creo que puedo enseñarle cualquier cosa a cualquier monstruo. Veamos ¿sabes pronunciar la palabra “nunca”?-¡Oompa!-¡No! Eso no, Boo. Si esto fuera un dibujo animado ya estarían entrando Oompa Loompas a bailar y cantar.

Cuando Sapita terminó de decir eso los pequeños habitantes de Loompalandia que ingresaban al salón preparados para interpretar una pegajosa canción, se retiraron sin ser vistos.-Repite después de mí… Nuuuunnnnn…- Nuuuunnnnn…-Ca…-Pa…-¡Qué digas “ca”!-¡Ca!-Ahora di “nunca”.-Oompa.-Está bien. Esto va a costar bastante, pero no será imposible. Lo lograremos. Si no me equivoco tenemos una semana ¿verdad?-¡Sí!- volvió a gritar alegremente el fantasma.

De repente, uno de los compañeros de Sapita llamado Ojón ingresa al salón y ve a su compañera junto al fantasma muy sorprendidos. Él es un monstruo-ojo, es decir, un monstruo con forma de ojo, que está interesado en saber todo lo que sucede en la

escuela para luego subirlo a su blog y recibir más visitas. Esto hizo que la monstruo sapo se preocupara mucho.-Por favor, Ojón, sé que tu popularidad depende de tu blog…-No has empezado bien- interrumpió él.-Es verdad, lo siento. Pero no puedes contarle a nadie de él o te golpearé en el ojo.-Soy un ojo, tonta.-Pues, te golpearé en la parte más sensible del ojo.-No sabes cuál es.-¡Te golpearé en todas partes entonces!-Mira, prometo no subir nada en mi blog hasta el final de curso ¿de acuerdo?-Pero…-Eso o no hay trato.-Está bien… Está bien…-Podría jurar que conozco a ese fantasma de algún lado.-¡No! ¡No lo conoces! ¡Jamás lo has visto!-¡Está bien! Ya no me grites- dijo abriendo la puerta y saliendo.-Eso estuvo cerca- le dijo Sapita a Boo-. Pero ¿qué me está pasando? Le dije a un ojo que lo golpearía en el ojo y amenacé a alguien. Estoy comportándome como mi madre. Creo que debería tener más clases con la tía Bush.-No- dijo Boo.-Tú no entenderías, Boo. Estos son mis principios. No puedo ser como mis padres.

El fantasma miró tristemente a su amiga y luego la empujó hacia la mesita donde se encontraba el trozo de papel con el poema para que siguieran practicando.

Al día siguiente Boo había aprendido con muchísima dificultad el primer verso del corto poema: “Nunca pasó una estrella”. Todavía tenía muchos problemas con la pronunciación y además se distraía pensando en cosas que sonaban parecidas a las palabras que componen la frase. Sin embargo, Sapita fue paciente y estricta a la vez y logró que esa noche pronunciara el verso completamente bien.

Por la mañana, cuando terminó de darle la clase, bajó a la cocina para prepararse algo de comer y vio que su madre aún discutía con Espejo Malito. Sí, así es, ése es el nombre del espejo mágico del castillo. Prefirió ignorarla para no entrometerse en la discusión y además tenía mucha hambre.

Y al mediodía, Sapita intentó convencerlo de que se quede en el castillo pero Boo insistió hasta que ella se resignó a llevarlo con una condición: podrían ir juntos por el camino y podría hacerse visible cuando no haya nadie presente, pero durante el ingreso a la escuela y las clases debía permanecer dentro de la mochila.

Tomaron el camino del borde del Bosque de los Muertos Inútiles y luego de unos minutos caminando notaron la presencia de Ojón unos metros adelante. No se lo hubieran tomado tan mal si él no llevara una cámara en sus manos.-¡Debe buscar imágenes para su jodi…! Digo… ¡Para su blog! Debemos escondernos, Boo- dijo mientras tomaba a su amigo de su mano ectoplasmática y se adentraba en la oscuridad del bosque.-¡Te he visto, maldita monstruo sapo!- gritó Ojón comenzando a correr detrás de ella.

Una vez dentro del bosque Sapita y Boo decidieron esconderse en lo alto de un árbol y vieron como su perseguidor pasaba de largo.-Miedo- se atrevió a decir Boo.-No te preocupes, Boo. Los zombies de este bosque son completamente inofensivos. Pero mamá me dijo que no debía hablar de ello porque se tratará el tema en los siguientes cuentos. No sé de qué habla pero temo que haya puesto un micrófono o algo en mi sombrero y se entere.-Entendido.-¡Aquí están!- gritó Ojón desde abajo.-¿Qué quieres?- preguntó Sapita.-Necesito una foto de ustedes dos para subirla a mi blog.-¡Lo sabía! ¡Habías prometido no entrometerte!-Pienso romper mi promesa.

Sapita sacó su varita mágica de su sombrero y le disparó un rayo que noqueó a su compañero de escuela. Le dijo a Boo que

bajaran rápidamente porque el hechizo sólo duraba unos pocos minutos y comenzaron a correr hacia la escuela.

Durante los recreos se escondían en la biblioteca ya que ningún alumno la visitaba en ese momento y allí aprovechaban para seguir practicando el poema.

Toda esa práctica durante una semana logró que Boo por fin se aprendiera completa y perfectamente el poema que quería dedicarle a Buma. Así que cuando por fin llegó la noche del aniversario, organizaron una abundante cena para todo el castillo. La pequeña fantasmita estaba muy contenta con el evento así que dejó que Lila le pusiera un vestido rosa que había conseguido estafando a un local de ropa para fantasmas ovalados.

Luego de comer todas variedades de carnes, ensaladas y postres, Boo voló hacia el centro de la mesa y mirando a su amante comenzó a recitar lentamente la primera estrofa con un poco de tartamudeo. Entonces miró a Sapita, ella le sonrío y le dijo “Tú puedes, Boo” y apenas terminó de decir eso, él volvió a mirar a Buma y terminó el poema correctamente. Cuando terminó, ella voló hacia su amado para abrazarlo fuertemente y gritando de emoción y todos los monstruos invitados comenzaron a aplaudir y a gritar también, sobre todo Sapita.

Al día siguiente, la monstruo sapo volvió a tomar el camino del borde del bosque pero esta vez sin compañía. Después de un rato sintió que alguien caminaba lentamente detrás de ella e imaginándose quién era se atrevió a decir:-He venido sola, Ojón. No tengo nada que te interese.-En realidad… He venido por otra cosa.-¿Qué quieres ahora?- dijo ella deteniéndose.-¿Recuerdas que te dije que tu fantasma me resultaba conocido?- dijo él monstruo ojo acercándose con un libro en sus manos.-Sí ¿qué sucede con eso?-Pues, mejor averígualo tú misma. Toma- dijo entregándole el libro que al parecer era un diario personal-. Lee la página 37.

-No sé de qué pueda tratarse- dijo mientras buscaba dicha página-. No creo que haya nada que valga llegar tarde a clases- comentó mientras comenzaba a leer-. ¿Por qué mejor no…? ¡Oh, por Dios!-Sabía que te interesaría.-¿Dónde conseguiste este diario?-Estaba en las afueras del Monumento al Tren.-Debo… Debo mostrárselo a mi madre. ¿Puedo quedármelo?-Sólo si puedo fotografiarte con tu fantasma.-¡Eres tan insistente! ¡Está bien! ¡Tendrás lo que quieres! Pero ahora debo irme. Avisa que no pude asistir a clases por razones personales- dijo mientras comenzaba a correr de vuelta al castillo.

No Me Des Falsas Predicciones.

Era una mañana muy fría y muy oscura… Así es, como la del principio del cuento anterior. Creo que es la misma. Ya se enterarán supongo. Tonta Bruja había notado que Sapo estaba muy extraño últimamente. Ya no le decía “Amorcito” ni usaba ningún otro de sus apodos súper-cursis como “bomboncito relleno” o “vainillita amarga”. Así que comenzó a preguntarse qué sucedía con su esposo. Y entonces, como en todo matrimonio normal, decidió acecharlo y espiarlo antes que hablar directamente con él.

Esa misma mañana, el monstruo sapo se levantó a las seis de la madrugada y la bruja decidió seguirlo sigilosamente. Primero fue a comer algo dulce en la cocina y luego fue al baño. Allí dentro estuvo una media hora así que Tonta Bruja se entretuvo matando moscas. Pero después de su lectura diaria del único libro que había en el cuarto de baño, un diccionario, se dirigió hacia el ático, donde él escondía un pequeño televisor que daba las imágenes en blanco y negro. Él se sentó a mirar una vieja serie en un polvoriento sillón y ella se escondió detrás de unos maniquíes a observarlo.-¡Oh, Sherlock1! ¿Por qué sólo ponen tu programa a esta hora?-¿A Sapo le gustan los programas viejos? Espera un momento… Eso ya lo sabía. ¡Me levanté a las seis para nada!-¿Tonta Bruja? ¿Qué haces aquí?-¿Cómo diablos has podido oírme?-Bueno… El ático no es tan grande… Y estás gritando.-¡¿Qué sucede contigo?!-¿Qué hice ahora?-¡Nada! ¡Quédate con tu maldita y aburrida serie! ¡Me voy a dormir!-Está bien. Nos vemos en el almuerzo.

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Las aventuras de Sherlock Holmes es el nombre de una serie de televisión basada en las adaptaciones de algunos de los casos del detective Sherlock Holmes creado por Arthur Conan Doyle y producida por Granada Television entre 1984 y 1994.

Tonta Bruja volvió a acostarse pero no pudo dormir y luego de dar vueltas y vueltas por casi dos horas en su cama decidió levantarse a hablar con Espejo Malito, el espejo mágico del castillo. Aunque creo que eso ya había quedado claro, desde ahora sólo lo llamaré por su nombre.-¡Necesito saber qué ocurre con Sapo!-Primero debo ver si las estrellas están de nuestro lado.-¡¿Las estrellas?! ¡¿Qué diablos tienen que ver las estrellas con Sapo?!-¡Adiós, mamá!- gritó Sapita.-¿Qué dijo esa niña?-¡Yo qué sé!-¿No es que lo puedes ver todo?-Ahh, cierto… Dijo que… Eres genial.-¡Ésa es mi hija!-Creo que las estrellas están de nuestro lado, Tonta Bruja.-¿Eso quiere decir que puedes responder mis preguntas?-Debemos intentarlo. Hazme la pregunta.-¿Cómo es que los argentinos tienen la posibilidad de elegir a sus políticos y luego se quejan de ellos? Esa pobre gente…-¡Concéntrate, Tonta Bruja!-Está bien.-¿Qué atormenta tu mente?-¿Qué le sucede a Sapo?-¿Quién es Sapo?-¡Mi esposo! ¡Hemos vivido aquí por años!-No lo sé, nunca me visitan ni me invitan a tomar el té.-¡Pero se supone que lo sabes todo!-¡Está bien! No grites. ¿Qué quieres saber exactamente?-¿Por qué me ignora? ¿Por qué ya no me llama con apodos cursis?-¡Oh, por Dios!-¿Qué? ¿Qué dicen las estrellas?-¿Qué estre…? Ahh… Ehh… Me han dicho que… Sapo tiene una amante.

-¡¿Qué?!- preguntó comenzando a reír-. ¿Qué clase de estúpida saldría con…? Mejor me callo. ¿Estás seguro de lo que dices?-Completamente. Las estrellas no se equivocan, bruja. De hecho esta misma tarde la verá y te pondrá la excusa de que debe comprar queso.-¡Maldito!-No sólo eso. No se presentará al almuerzo.-¡No te creo eso! Sapo dijo que nos veríamos en el almuerzo y siempre tuvo miedo de que yo lo golpee si rompe una promesa ¡ya verás! ¡Almorzará conmigo y lo obligaré a tragar mi tarta de arañas!

Pero no fue así, a la hora del almuerzo Tonta Bruja terminó comiendo sola con su bebé Sapote en el comedor. Sapo seguía con su serie, Sapita hacía tarea para la escuela y Sapito no sabía dónde estaba. Pero tampoco le importaba. Cuando terminó de comerse toda la tarta de arañas, Sapo apareció en la habitación y se dirigió al refrigerador.-¿Ya no hay queso?-Ahora entiendo por qué tu aliento huele a queso.-¿Qué dices?-Nada. Déjame adivinar ¿irás a comprar queso?-Pues, debería ¿no?-No lo sé ¿tú qué opinas?-Yo opino que sí ¿y tú?-Opino lo que tú.

De repente, Sapote empezó a eructar tan fuerte que la bruja y el monstruo sapo tuvieron que correr hacia el living antes de que algo se derrumbara en el comedor o se desmayaran por el olor. Una vez en el cuarto contiguo, Sapo le dijo a Tonta Bruja que usaría su escoba para ir a la ciudad. Apenas su esposo inició el vuelo, ella tomó un viejo escobillón arruinado y mágico para seguirlo.

Para su sorpresa, él realmente se dirigía al supermercado. “Debe comprar queso para su desquiciada amante. Maldito Sapo.” Pensó Tonta Bruja. Entró en el comercio sin ser visto por él, lo siguió a través de todas las góndolas pero su marido lo único que hizo fue tomar su queso favorito y dirigirse a la caja.

Una vez allí, saludó a la cajera muy amablemente y pronunció unas palabras que la bruja no llegó a entender. Acto seguido la mujer comenzó a reírse. “Ésa debe ser su amante. Obviamente hay una clara tensión entre ellos. Además, nadie se ríe de los chistes de Sapo. Seguro le contó el chiste del gordo que se muere. Y es feo.” Pensaba la bruja un poco alterada.

Pero lo único que hizo el monstruo sapo fue pagar e irse rápidamente a buscar la escoba mágica que había estacionado junto a un árbol fuera del supermercado. “Debe saber que lo estoy siguiendo. Necesito cambiar de estrategia. ¿Y si lo mato? No, luego debería dar explicaciones y odio dar explicaciones”. Seguía pensando Tonta Bruja hasta que un guardia de seguridad le dijo que debía comprar algo o retirarse.

Ella lo miró indignada y se fue muy ofendida del lugar. Subió a su escobillón que había sido destrozado parcialmente por un perro y siguió a su esposo con algunos problemas de vuelo, debido a las mordidas. No logró alcanzar una buena velocidad y unos minutos después perdió a Sapo de vista. No sólo eso, sino que en la ciudad comenzó a llover.-¡¡Esto es inaudito!!- gritó la bruja asustando algunas aves-. No merezco esto.

Tonta Bruja llegó al castillo toda empapada de pies a cabeza, estornudando, sintiendo escalofríos y fiebre así que decidió acostarse a comer pastel de chocolate y mirar Los Simpsons hasta quedarse dormida.

Pudo despertarse recién al día siguiente después de lograr despegar sus ojos y secarse toda la baba que había producido a pesar de que sus labios estaban cocidos2 desde que tenía memoria.

Se levantó furiosa y se dirigió directamente a hablar con Espejo Malito, el espejo mágico del castillo de Quién Sabe Dónde.

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A pesar de esto la bruja habla con normalidad y nadie jamás tuvo problemas para entenderla.

Ah, cierto. Había prometido ya no aclarar esto. El monstruo espejado la vio llegar y se preparó para la discusión.-¿Qué diablos sucede contigo?-¿De qué hablas, Tonta Bruja?-¡He seguido a Sapo hasta el supermercado sólo para pescar un jodido resfriado! ¡No fue a verse con ninguna mujerzuela de mal gusto!-¡Eres una tonta! Has cambiado los hechos y eso repercutirá en el futuro.-¿De qué hablas?-Sapo te ha visto y decidió fingir que iba a comprar queso.-¡Si me llegas a estar mintiendo, pedazo de…!- dijo mientras su hija se dirigía a la cocina intentando pasar desapercibida.-¡Tonta Bruja!- la interrumpió Espejo Malito-. Yo jamás te mentiría. Si quieres mi ayuda puedo ayudarte a no perder a tu esposo.-¡Eso no me interesa!-¿Estás segura?-Claro que sí. Pero… En caso de que me interesara ¿qué debería hacer?- dijo intentando sonar desinteresada en vano.-Debes mirar sus novelas con él…-¡Pero él mira las novelas de las tres de la tarde! Todas se tratan de zorras pobres que se vuelven zorras ricas. Y todos tienen nombres como “María Luisa” o “Juan Fernando”.-Si quieres recuperar a tu querido Sapo tendrás que dejar de lado tus prejuicios.-¡Ya te dije que eso no me interesa! Hasta luego, Espejo Malito.-Hasta luego, Tonta Bruja. Suerte conquistando a tu hombre.-¡Cállate!

Tonta Bruja decidió seguir los consejos de su amigo adivinador y luego de almorzar esperó que llegaran las tres de la tarde para sentarse con su esposo en el sofá para ver la novela “Amor, Amor, Amor”.-¿Por qué todas deben llevar indiscutiblemente la palabra “amor”?-¿Qué haces aquí, Tonta Bruja?

-¡¿Qué?! ¿No puedo ver una telenovela en mi propia casa sin que un renacuajo venga y me pregunte por qué?-Sí, claro. Sólo que es raro verte frente al televisor sin estar ese documental de mariposas que tanto te gusta.-Tengo gustos variados. A veces miro películas de mariposas también.-Entiendo.-Bien ¿qué está pasando ahora?- dijo señalando el televisor.-María Luisa está discutiendo con su padre porque se enteró que engañaba a la madre con la niñera de su nieto que en este momento entró en coma.-¿Y ahora qué está pasando?-Acaban de empezar los comerciales.-¿Y eso qué significa?-Que debemos esperar que terminen para seguir viendo la programación.-¿Y eso es legal?-Claro que sí- dijo riendo-. No te preocupes, los comerciales suelen tardar unos pocos minutos en este canal. Nadie lo mira así que ninguna empresa publicita algo ahí.-¿Ya comenzó?-No, eso es un comercial de jabón en polvo. Ponen a un montón de gente estúpida diciendo incoherencias sobre lo bueno que es un jabón cuando en realidad harías lo mismo con tus propias manos.-¿Y ahora?-Ya está empezando el programa.-¿Y qué sucede?-Está por venir una parte importante, deberías hacer silencio.-¡¿Cómo te atreves a gritarme?!-Pero Roberto Alejandro está a punto de confesarle a su mejor amigo, Francisco del Valle, que se acostó con su mujer y la dejó embarazada.-¡¿Qué diablos sucede contigo?!-Yo no he hecho nada… ¡Fue Roberto Alejandro!-¡No hablo de eso! ¿Tienes una amante, maldito renacuajo?

-¡¿Qué?!- preguntó sorprendido-. ¿De qué estás hablando Tonta Bruja?- agregó luego de apagar el televisor.

Tonta Bruja miró hacia el suelo un poco avergonzada por dicha escena pero luego miró a su esposo y se atrevió a decirle.-Es que ya no me dices apodos cursis y entonces le pregunté a Espejo Malito qué sucedía y él me dijo que tenías una amante.-¡No digas tonterías, Tonta Bruja! ¡Yo te amo sólo a ti!-¡¿Y por qué diablos ya no me dices “Naricita de Conejito”?!-Porque tú me vives diciendo que eso te molesta.-Pero… Pero… Pero…-¿Quieres que vuelva a llamarte con mis apodos cursis?-Sólo un poquito ¡no te abuses!-Lo prometo. Dame un abrazo.

Ambos se dieron un fuerte abrazo y luego se dirigieron rápidamente a hablar con Espejo Malito. Como había prometido no aclaré nuevamente que es el espejo mágico del castillo. Ups. Se quedaron parado frente a él con las manos en sus cinturas y mirándolo de mala manera hasta que el mueble monstruo hecho de madera, vidrio y azogue mágico se atrevió a hablar:-¿Qué predicciones esperan el día de hoy?-¡Eres un maldito mentiroso!- gritó Tonta Bruja-. ¡Juro que voy a romperte en tantos pedacitos de una mega-patada tan fuerte que en unos segundos estarás prediciendo estupideces en China y en Argentina al mismo tiempo!-Calma, caramelito de melón…-Oh, ya empezó…-Primero debemos saber por qué lo hizo.-Está bien.-¿Por qué le diste predicciones falsas a mi esposa?- preguntó Sapo.-Yo no hice nada.-Vamos, Espejo Malito.-¡Está bien! Es que últimamente he tenido problemas con mi novia.-Pero si tu novia es otro espejo que está en el baño del sótano. Sueles verla muy poco.

-Ése es el problema. No sé si pueda continuar con una relación a larga distancia.-¿Sabes?- preguntó Tonta Bruja-. Si nos hubieras dicho, nosotros hubieras traído a Espeja Malita junto a ti.-¿Harían eso por mí?-¡Claro que sí! Sapo… ¡Ve a buscar al espejo hembra!-Pero el sótano me da miedo.-¡Te he dicho que vayas!-Enseguida, amorcito.

Sapo obedeció las órdenes de su esposa sin quejas, colocaron a Espeja Malita junto a su novio y él nunca más volvió a dar falsas predicciones… Durante una semana, cuando le dijo a Tonta Bruja que ese día no recibiría noticias interesantes.

Sin embargo, ese mismo día Sapita había vuelto muy temprano de la escuela con un viejo diario en sus manos.

Página 37 del Diario de Malvado Tío.11 de Marzo de 1324.

Se acerca lo inevitable.Han tomado el tren, estamos perdidos.Escribo esto con mis últimas fuerzas.He sido herido tras defender a mi amada de uno de los monstruos mafiosos.En esta hoja quiero pedir perdón a la familia Loco.Sé que he sido siempre la oveja negra, pero nunca creí llegar tan lejos.Le haré el hechizo “Vivificabit” a mi novia.Está embarazada y perderá a su bebé si el tren se estrella.El bebé volverá en forma de fantasma.Familia… Por favor… Háganse cargo de él.Dibujaré la forma que debería tener su fantasma.Y arrojaré este diario por la ventana.

Adiós, mundo cordial con el que he sido cruel.Malvado Tío3.

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Hermano de Brujo Loco, el padre de Tonta Bruja. Se unió al ejército del mal cuando era muy joven, por eso su piel era humanoide. Cuando murió lo condenaron con una maldición eternamente. La maldición decía: “Deberás servirle durante tres días a cualquier idiota que te despierte de tu descanso en el infierno”.