El campamento una experiencia muy positiva

Los campamentos dirigidos a niños y jóvenes con diabetes, ofrecen la posibilidad de participar en una experiencia muy positiva, con el control y la garantía que ofrece un equipo de profesionales. Estos campamentos persiguen varios objetivos, en primer lugar que los niños tengan la oportunidad de poner en común sus experiencias y conocer a otros niños. En segundo lugar, y no menos importante, que desarrollen un buen aprendizaje de los métodos de autocontrol.

Para alcanzar el control

A su llegada al campamento los monitores revisan la situación de cada niño, prestando especial atención a sus dosis de insulina. Por eso es importante que disponga de su diario de autocontrol. La dosis de insulina se ajustará según la actividad física y la ingesta de alimentos, para que los niveles de glucemia se mantengan dentro de los límites recomendados. Para ello, se realizarán las determinaciones habituales, así como una serie de perfiles de glucemia. El personas sanitario del campamento, llevará a cabo un seguimiento de las glucemias y de las pautas de insulinización en función de los horarios de ejercicios y el plan alimenticio para que se puedan realizar los ajustes apropiados de insulina sin sufrir ningún desajuste.

Preparando la mochila

Es conveniente presentar un informe elaborado por el equipo médico que atiende al niño, con su historial y la pauta insulínica, de tallando la frecuencia, el número de unidades y la insulina empleada. Parte de esta información se recoge en el diario de autocontrol, que refleja la historia de su diabetes más reciente. Es mejor llevar un diario usado con 6 meses de historia que empezar uno nuevo en el campamento. A la hora de hacer el equipaje debe llevar consigo:

• Material de autoanálisis: medidor y tiras reactivas, pinchador y lancetas, diario de autocontrol.

• Viales de insulina y jeringas o plumas.

• Documentación Sanitaria: informe, tarjeta de asistencia sanitaria y carnet de diabético.

• La organización suele llevar siempre suplementos

alimenticios como fruta, azúcar y galletas, no obstante, es conveniente que el niño lleve consigo alguno de ellos. Algunas cosas como una gorra, una cantimplora y crema protectora solar son

imprescindibles en estas salidas.

Para mantener La insulina

El envase de insulina una vez abierto se mantiene a temperatura ambiente (20-25º C) más de 20 dias. Sólo se daña cuando se expone a temperaturas extremas, al sol o en el congelador. Todos los campamentos disponen de neveras para conservar la insulina que puede adquirirse directamente en el lugar de destino. Si la insulina está caducada, ha sufrido temperaturas extremas, tiene una apariencia cristalizada o no está transparente, no debe utilizarse.

Ten en cuenta que…

A la hora de elegir la ropa y el calzado debes tener en cuenta ante todo la comodidad. El zapato o zapatilla debe tener las siguientes características:

• Es preferible utilizar un zapato ligero y que proteja los dedos, que sea flexible y blando sin costuras interiores y

con puntera ancha para sujetar el pie sin oprimirlo. La suela debe ser antideslizante y no muy gruesa.

• El cuero es un buen material, algunos tejidos sintéticos

Transpirables también son aptos.

• Es recomendable cambiar de zapatos al menos una vez al día.

• En la playa o en los ríos, es conveniente utilizar un

calzado para agua o unas sandalias de goma que no tengan tiras entre los dedos de los pies. Caminar descalzo es siempre un riesgo. En las duchas comunitarias también debe utilizarse este tipo de calzado para evitar infecciones por hongos o heridas en la piel.

• Si se utiliza calzado deportivo debe cumplir las características mencionadas y deben utilizarse calcetines

gruesos que protejan al pie de pequeños golpes.

Refuerza con tu hijo las instrucciones para la higiene corporal y en especial de los pies, cómo debe cortarse las uñas y mantener la piel hidratada.

Bien alimentados

Una nutrición adecuada y sana es imprescindible para la prevención de complicaciones agudas y crónicas, por lo que el plan de alimentación estará controlado. En su elaboración participan dietistas con experiencia en diabetes y profesionales de la salud. El niño dispondrá de la alimentación adecuada con los nutrientes esenciales, que requiere su plan de alimentación. La dieta será flexible para cubrir las necesidades cambiantes en función del desarrollo y la actividad diaria. Se distribuirá a lo largo del día de un modo previamente planificado. En este marco, la educación que se imparte ayuda a los niños a identificar los alimentos por grupos y a dominar las equivalencias, mejorando su capacidad de organizar su plan de alimentación de una manera eficaz y saludable. El control de su plan de alimentación les ayudará a valorar el contenido de hidratos de carbono, proteínas y grasas, para comer bien y evitar desajustes como la hiperglucemia o la hipoglucemia. Generalmente se realizan tres comidas y tres aperitivos al día y en horarios establecidos. estas comidas y aperitivos serán equilibradas y su composición conocida por el personal y los niños. La supervisión de la ingesta de comida de los más jóvenes por los asesores asegura que todos reciban una nutrición adecuada.

Más deporte

El ejercicio físico es recomendable siempre ya que facilita La entrada de glucosa en las células. La naturaleza invita a practicar deporte. Los más Adecuados son los aeróbicos que ejercitan los grupos Musculares grandes, como caminar, correr, tenis, fútbol, baloncesto, nada,…. Los deportes que van a realizar les aportarán múltiples beneficios como:

• Aumento del tono muscular.

• Incremento de la fuerza y la flexibilidad.

• Mejora de la sensación de bienestar corporal y la calidad de vida.

• Disminución de los riesgos cardiovasculares y del colesterol en sangre. Antes y después de realizar ejercicio físico, los niños medirán su glucemia, ya que el ejercicio puede provocar hipoglucemias e hiperglucemias si no se toman las precauciones adecuadas.

Cada niño tiene una situación y una educación concreta, no obstante, los monitores adoptarán las medidas oportunas para prevenir estos desajustes, y si se producen, intervendrán para corregirlos. Hay que tener en cuenta, que en estos campamentos especializados todo el personal está familiarizado con estos signos.

Prevenir las Hipoglucemias:

• comer algo antes de empezar y en medio o al final del ejercicio.

• Dosificar el ejercicio para que no produzca

hipoglucemia.

• Ajustar la dosis de insulina.

Prevenir las Hiperglucemias:

• Medir la glucemia antes de comenzar.

• Comprobar también los cuerpos cetónicos en sangre.

Vuelta a casa Los monitores comentarán contigo o enviarán por correo toda la información obtenida con respecto a tu hijo durante el campamento. Es aconsejable que una vez en casa, tu hijo ponga en práctica todo lo que ha aprendido en el campamento y reajuste su pauta insulínica.

Para saber más.

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