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EL DAÑO Y EL PERJUICIO EN MATERIA PENAL

So11 múltiples los problemas q'l#3 en el terreno práctico se presentan dentro del proceso penal en relación con el dictamett pericial de daños y perjuicios.

No so11 pocos los casos de confusión e11tre daño y petjuicio; entre da7lo emergente y lucro cesante; entre daño moral objetivable y dm"io moral subjetivo.

YICIOR M·>NVEl (~APARRO fk)RO~'

Son frecuentes .aquellas siLuacioncs en Jas que el fundonario judicial no admite la pn•c­l>a que apuma ~t desvirwar b exiStenda del daño moral di! (ljea;ióm o ~quella,; en l~s

que el Jne·t h:1N. ~~se olf>iso del }u rameulo estf111atoriode la víctima o perjudicado sobre el monto de lo~ daños ma1eriales y momles: o aquellas en hs que, \~.ttindose d<!l llvah'io de P<'rft<ictos. e l Fundor>ario ]udki:tl 1o nu1 como t~l un pronunciamiento que (lo se ajusta " las condicione~ su.stan<:~;J.I~.s dr! !a pnleba periculf : o le ¡)ide al pe rilo •la pn1eb" de s11 e~timación pe1ic-ia\·: o le prohibe l~

1a~"clón del dHilo mor-.1 objetivado con e l argumeJllo de que ello •invade el arbittiunl

Doctor en Oetlécho ·.¡ CrencJCj.} Ponitenciorlos, ospedol!z_odo 01' lo tJnivetSidOd Nocional oc C-elcrnblo. p,cte-s.c! de lo Foculfc::c' de Oer~~o dé te tJn~.t~~V.d~<i MY,)~01 W'Ut""O G' <mcóo .ll..-é1 9" Peno! Ca, CYcufo dé Sontofé dt? 8c.gol6. D.C

s~NTAIE Df lloooTÁ Ct.:t. • Vol'JI.<~:N 5, No. 2 • lul.\0 ·l>lt'I"IM>U 1994 - ------- - .l3

iudlcis·; o lo determina para que utiliCe el Criterio que él considera el más acertado parJ eFcctQS de amJalizad6n del monto del daño; o le pide que no incluya en la peritación tales o ~'Uafes gastos. desembolsos u hono­rarios COI! el aJ8umento que -elloo sólo son pe~gttibles ante la Jurisdicción Civil·; o le <:>rdena que excluya el perjuicio futuro por­que ~.ste no es indenuuzable o porque la "(>ano Civil no apott6 la prueba del mismo: o sin agotar el tr.ltnice de la objeción, nombra otro perito para que haga un nuevo aval(Jo porque el rendido lo considera impreciso, errJdo o infund3do; o ~.gol<!do el trámite, declara fundada l:t objeción del perit:lje por -error grave• con el argt~tnento que •CI dano ma~rial no esrá prolxldo-; o le da tr4mite tncidenlal a una objeción cuando se trata simplemente de adanulo, eomplerncncuto o ad1dtm:ulo; o tira al perito a la "-udiencia Pública para qu~. v.gr. en un dictamen de peti<ticios pr>r el punible de l~sioncs perso. nal~s con amputación de pi~rna, explique ·por qué incluyó en la tasación el precio de las muletaS si tal valor no ~panxe ~crcdiudo denuo del pr~so ron las rcspecti"as fac­tura$•; o uno de las sujetas procesales alega la 111CXi~renda O /a nulidad {!e b prueba pericial de los perjuicios apoyado en que el perito tiene que 3parecer en la lista oliet:ú de ¡\uxiliares de la }uslicoa_

J. Elementos de la responsabilidad civil extracontroctual

('.cnforme ~ lo di~puesto en el An 2)~ 1 del Cóchgo ('jvil-el que ha cometido un delito o culpa. que ha inferido daño a otro, es ol.>hga· do :1 la ind~mnhación• y según lo dispueslO en el An. 10::1 tlcl C.P. -el hecho punible orig1na obligación de reparar los daños maJCriales y moral~s que de él pro,·cngan·. IX: aquí surge la ttilogla sin la c:ual no har rc&ponsabiJidad d•~l por el hecho p..mil>Je; acción htnnana prohibicb por e.l ordenamien­to penah el dafto y/o el perjuicio, y d nexo c~usal cnttc aquella y <!510$.

La acción oecesariamentc es aquella que se adedi3 cabalmcnre 3 una C'Wilquiera de las hipótesis de vi<>laci6n -Upos penales- que, en desarrollo del principio d~ legalidad V\rt. 29 ele l3 C.N.), el Legislador consagra en el Ubro ll del Código Penal.

La acción debe constituirse en causa gene­radora del daño y/o del perjuicio. la rela­ción de causalidad enue aquella y éstas está determinada legalmente por las expf(¡sioncs .que ~él prov<!nglU'I· y -que ha inferido ~no a ()UO-, utilizadas por el Código Penal y Civil, respectivamente.

Oe¡¡de la óptica de la repercusión del hc~ho puruble sobre el bien juñdicamente ampa­rado por el derecho penal, ~s¡e produce dm)o polltico y/o dmlo pñ..,ado. Y desde el ángulo de la repefC\l.~i6n de la acó6n punible en el p21Fimoflio <'conómic<l )'lo en la per­sonalidad moral de un determinado asocia· do, la misma acd()n produce Pi!IJUiclo mMetiaJ y/o nloral.

A. ELDAÑO

En sentido estric;tamcme jurídico-pena!, el cltU1(JCS el efecco >Jti/Jirtil!wicoo jurlcJicode una acci<Jn hOJmana y se nunlfiesta con la produccitón <:!el evento o re,;uhadv (fpiw.

Desde el punto de ,·iSta del objeto material (aquella persona o cos~ .;.obre la C\Jal rt.•cac la ncción hu n1ana) el evento típico es mare­r1al si la acción repecute ~n el mun(iO fcno­méniro y por ello el re.sul1.1do es pcrcibihl~ ficilmentc por loa sentidos. C'Omo ~n el caso del huno. el homicídto. o fas lesiones f'\!r.IO.

nale.s-o juñtlico -si la acción rcperc\lte so13-mente en el mundo juricijco y por ende el daño n<> es percibí() le sensotiaJmerHc, ~"mo en b injurhl, la calumrua, la fuga de pl'CSOS, o la tnasistencia alimentana. caso en el que se nabla de -delttQS de mer.t <:'Ofld<l<:t3 () de rcs\llt.1do formal~.

Si se ciene eo cuemn l.~ reperct1Si6n del com­ponamicnto hull\at10 sohre el objetn Jllrldico

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(el bieo, ~lor o imerés que la tey Penal pretende defender), el daño se mlnilies!JI coo la simple puesta en peligro o <:On 1~ \'Ulnerad()n o menoscabo del mismo y.1 sea: deslru~ulclo, <:omoen el c:~So del hornld· dio en que el bien juridíco <le la vida des­aparece pMa su ó!tllar; comprtmf(jndolo, si se obstaculiza transitorümcnre su clisfrule, ,-amo en el aiSO del secuestro y la privoclón 1/eg•l de la libertad en el que este derecho fundarnenl9.1 no desa¡:r.nece pero es tu.Vado tl"lnsitorianleO\e; o alterándolo, como en el caso de liiS lesiones petsonalcs con SC('uel:a.s lt:IOSilOriiiS o permanentes er1 <!Ue el bien jur1dico deJa integridad pc!'S()nal o la s~lud surre c:.:antb•o o m(>dificad6o.

l. Oal\1> P'úbUco y Dllño J'rlv:~do

I'>~~Lic el punro de vist~ de 1~ alatrn• que: en el grupo social necesatiarncnte produce el atenea do :1 lc)S bi<'nes ,urldicos considerados fundamem.~>les par.~ la co­e~l~ncia pacifica, la aeciórt riprca siem­pre produ«: da•Jo ptllJitco (o poliúco).

el d~ño poljlico ro es ''alor~fllc ni 1\:pJrJ.­hlc en 1ém1inos económim.s. É-'lC ll" re­para aplic;JnCIQ al c~usar\tc las cOI'l'~spon­dienLcs cQnse<:ueod~s juridic:•s -penas (pnvauv~s J<: l•liw•~«tl u JJ<.'Ltmi•rl•s) a 1~ irnpUIJvles y lll<.>didas de SCRuricJa<J a los lllimput;~bles·, ~ tra<-<!4 del e¡cn:icio eJe la a«ióo pcn.11 por parte ~l Esi:Klo.

Adem.is de daño politico, 1~ a<:t.~ón U pica produce datlo pti~ndo S> b titularidad dt~l bien jurid>co afe{1a<lo b tiene el indi· vit\no. l>len se trate de der<>Ches /}(11>0/UI·

1/.slmos -aquellos incscindihlcs eJe la p<!(· sona humat•a. como la libertad, el pud<>r

SC><Wl, el paUimonio moral, b rniCgridad f\Sica, ele ·, o perscmalf!S ·aquellos no consusranci,lcs al Strjero de derecho romo el pammorlio económico (h\11\\). est3fa, abu.~o di! <.'OnfianZI\, etc)-.

En CSlOS té <millOS, por el d3ñO pli/J/Im y por el <11u~o pHt•atfo responde peu(l/. memeút'lica }' exdu.siv<trnente el C'3u.~,1n· te del nlJsmo -elmfr~ctor del deber juri­diro perla f· en atención a que 1.1 ''-'• ponsabihdad penal es eminenu;menrc personal'

s, el tbñ<> puvado tiene que ,·t·r wn IJ. puesta en pcltgro o ron la lesión dd IJ(t>ll

}tl~ffcO (/{!{ {XIIri1TIOI1it> i.'COIIQIII/f(l, 1'' necesario dc(ermil\arlo é >\ t(•tminos cu4nlil~livos.

2. lmponanelaJuridJca de l:J CuanUflcacUm del Daño

ta cuanllfrcación ck>l daño er> e<to' C3,n

¡ue8J un p.rpd impottantedeoidc d ¡'l<mln de visw ¡urfdJco-penal p~ra efe<:loo. de·

" · D!llcrmlntlr lt1 cltiSe de hf'cbofJIII/{~11'.

En lo~ raso; de htmo simple. lf;llldo~ mf'rlianfl' dll:<¡ur .1h11~0 r.ll' r r¡nl '"!1' ,, apro''t'C'hamiemo de err<.>r ~jeno •> o.,o fortuiiO ~· d;u\o en bien ajeno, el hcdro «>n.<UlU)'C cwuronmci6•1 es¡Jfdtll < \rt. 1° le)• 2} de ll)<)l) si el daño al hicn jurídico no ~x~ede de die¿ »II,HiO> minJmo.• mcn,uafes lega/e;¡ (!'('Y S987.()(}().oo lenicndo en ~-ucnt;; l)tlí! el $alario m!t\im<) !\'1<!1\5'>>.1 es de $98./fliJ, >c.:g(on l)é1.rclr:> 2'<1¡1 del 20 de d•c,emhrt • 0(' 1'>93) y <'11 consecuencia; a) 1.1 ;\t·nl>n

'· •Lo Dflt'IO éS Pt''SOllO'f!SimO ( Oot 41~ f'O ~· plltl)'9tJQ!le .$00'8 k:>$ OOr*'lftt Ceol Cond&nOdQ. ni sotrq !'\~ Of.t<l PttSOnO. 01 COf'l!ro:So O& lo Qt;ff suc::.o. con m~~ ;>tt _,~, .. .,._.,..,.e~ sc:-a trOI"~ Dotq1,. hoc.9n DOtte~ tt'l~ QO:',.of!1"'()oo\QQ vDOt tonto,. pt~o.--. \Q;(le• 'ot.~OlOil~~ u.no DO"'• ,....,., ~<l<'~ ~DO~ q~ r&CI>e ~o.H:•~•• • • f" 101 ~p,-~i;.1e,l4JhQ de C<lflc_. QUe left~eotro 10 Oteter.(>c.ó:".Ce ~QeC"O_ o\O~t~rt• OAl P«JC.-ooo_ pora n.;> c!:ot sho QtJ~O.flol~autc,que •r.-l"guel'llo punlblloocr 1'10 C:Ot"'''lQfetvJ&n b 1-~ ... c.""'"'"' CJetiVOCI01 a.- d&llto, porqw so. eorrw; Ml\a ~. ~ ~oc.·ic•lles JUtVJ<fOS de 10 c.'t;JO JOo rtaASI'Tlfslb,ie$. 8$ e..,.lt2et'\le Q\lw 'ICI ti'IV8rt9 aer ptOC.$$OOC e:rr,f"'QuO 10 ~n.o.wctod oorcr.l'i M~~ t>()\~ -,.cul<Jf io peoo . .oero t:'luo no es oas~oeulo ptll<lq~foQb'ugo,~l'!! cMl se rron~o suc:"SOtOit'T'IEt.'l:o o QV!EU'~ t'ler~"ln fW sx:»:~o~ttn !o\l lr•'Bg.tdoo eon 'Os OC:IIvos y tx:IJNOs• t~snlo ~ C'CY~\On ?er,cn senrancb <1elonto 25 de IWj, e.rped¡Qnlf ~3 1. MP EQ.~' Soe-;1;jQ1o Rc)os)

Penal s()!o es viable sr exi.~lc querella (esta es condición po-~ttiv~ de pt«'e<libi­lid:ld) y sino hay cmrctliclc16n (esta es condición neg3li\'3 de procedtbilid:td): b) Puede bJber <lcsistimit:oto de la que­rella, bien porque 'e da ~~ condliadón; porque 1~ víctima es indcntni>:acll inle­sr:dmcnl~ o por la mera volun~ad del ofcnd•do: e) 13 <:ompetencia p:¡~ nnpo­ner fa rt'p.1ro<:ión del daño político y el daño priv~do -«m pena de arresto- la tienen los ú1spe<:ro«-s l'eoaJe,; di! Policía (lransuonamenle seQún lo <Jispuc<ro el!

el Att. 28 transitorio de la Consti!U~ión Politka); el) El proccdimiem<¡ ¡>al'a tm­poner !.1 r.x:~ es e! cornravencional espe­Cial consagpdo en <!l Decreto resl;¡men­l:lrio de 11 Ley Z3 de 1991 (0800 de 199l): e) L1 o\ cd6n Penal prc,cribc en dos año~ conUl.dos a p:;rlir de la ~.iccuci6n dt:l hecho y ll pem <·nws ront:ldo.. a patlir de la eje<:ul<:ma de 13 .scnrencAA.

En estc..;s "''.srnos cas<;s, si }a <."UatUiíl del daño al bien juñ<lico dd pam'nt(JniO cco­nónll<:() cx~de de diez \Ola nos mínimos mcnw3lc5 legales. constituye tleUlo.

b. Si 1!/ hcci.>D ci))JSJI/JJ )'e de/iltl:

1) ÍJetCill\IJl<lr la prvc-cdil>illdad de la I\Cct6n l'cn~L Cl (n:;wdc con cheque -ernl~i ón y lt~ns(C t'el\cia ilcg;rl de chc<¡ttC:s -, el aprovech~mi~nto de error a1<'no o ca~o fonuitn. e! abuso de <·onli:>n7..:¡ y el <laño en bten ajeno, consci<uyen ddito sl. en <-:ld.t caso. el valot· de! <:i'üo c.<t-edc los die~ sala­ri()s mínimo.~ men,uaJes. Sin crnl:mr­go, b Acción Pcn:.l sólo puede ejt:r­cerl.l el f-SI3do ~¡ ~xiMe lfttere/1(1.

Como ~<' re. IJ <klem1in:lci6n del \"~for ud darlo pennite qui' el f.stado supedite el CJ"f\"ido de la Acción Penal -Y en tonS<>~'\tenda b r<:pam­ción del d<tfto 1>olhito- a 13 v()lunC;td del titular del bicm ¡utídico )'io 3 la repctr.l<1ón del tbño pri\·ado

2) De termina r 1~ compeumda del Juez para efectos del jutdo. Si la cvuntia del daño e xcede los die<t salarios mínunos mensuales legalc.~ y ext~e q\ter<!lla de PlflC en los dehlos que la rt:quicr<-'fl· el ]wz « >mpc!Cntl' para tr.lmitar la eupa de !a Clllt.ltl es el )uí.':t Penal MuntCipal.

En Jos clelit01> contra el patriruonto ecQt>ómlco pcrsC.\j.<tibles de oficio, s i la CUJ ntia del d3hO no el< cede de dn­cucnu salarios mínimo51egal~s men­suales <noy S1.935.000.oo), 111 compc­ten<:ia pata adchtntar la etapa dd ¡ui· e lo l3 l ic.ne el )11e1. Penal M u rl>ripa!. En ~<O contf3rio. la tiene el Jue7-Penal del Circuico {Atts. i2 ~· 75 del C. de l'.P.).

C. Ú l i(IS(I((Óll tfe/tl perta E'l1 C011G'I>..'f0:

En los delito.< contra el p:;mmonio e<:o­nómico, ,,; l:l C\J:tntla del daño excede di! $100.000.on !a ('et\a, por voluntad legal (M. 372 del C.P.), se 2umcnu cle una tCrC'Ira parte :\la mitad. Y si el ••3l0f del d~ño es inferi\lr a SIO.QOO.oo. el l.csL<ladclf 1~ ton,~de al Ju·,'la<lor l;t larulra<i eJe disll'IJnuirJc 13 pen:t al inftac­lut Jc u11¡ ~., .. ,,, .. f'JI"Ie ~ 13 miJad.

Adi!01~s. en virtud \lcl principio tli! prv­/)OYCIOIWIId(lt/ tcot1sagrad<> r.1ciw.mentc en el An. 61 dd e P l la res¡>Qf\~abilid<'d pcn1l no sol:tmentc lt<'ne ~laciórt dore<.l.a con la ,c¡r~vt!d:ld del delito -la cual de­pende 1>bVr<tcnet>t<.' do l~ posición qttc el legislador le de a los bit'tle.~ juridic06 en la estrurutm de 11 parte es~i2! del Coo•so Penal-. stno con la m3gmrud del d~ño :11 bicm ¡t.trídico cspcd lko }' por e llo en <?l caso <Jel p.11rinxmio ct-onómico n<> ~:s !o n\isrno 13 <3Clción pora <¡uieo hurta Cien tllil ~ <1~ p;¡ra qut<.'fl hu.u die?. mtllones.

En el delito de peculado. Si b ien ~'1 objeto ¡uódi<':tmcnte rurelldo no es el palrímo-

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nio económico sino la admistración pública, específicamente el deber de fidelidad que el funcionario público le debe al Estado en atención a q ue éste le ha ~'Onfiado el manejo de la cosa púbUca, el daño o la puesta en peligro del interés amparado pcnaln1ente, ncccsariamen1e se lraduce en perjuicio m()netario para el E.st:tdo en atención a ')ue el ot¡;et<> mate-rial de la infracción "' un bien del Estado. En tal virtud, conforme a lo dis­puesto en el anículo 139 del C.P., el]uez debe disminuir la pena en la proporción que dcte:rmin~ la mtsml norma si el procesado repara lo daJia<:lo -repara el perjuicio- o reintegra lo apropiado, per­dido o exvaviado, o su valor, ames de que se profiera resolución dt> apertura de investigación o antes d() que se dicte sentencia de segund~ mst:\ncia.

B. EL PEBJl.JlOO

En sentido patn'monitú, la ac<ión típica gene­ra perjuicio tanto al litubr del b ien jurídico dañado como a quien o a quienes nn te­niendo esa tituhtidad. e,·entualmeme sufren dcrrimcmo e~onómico y/o rcsuJran afectados en su person~lichtd moral con el punible

f>or ende el pe1iuico es ''aiorable y re par" u le con d pago de u na e~ ntidad de c.Jincro q ue lo compensa, el cua l se obl1ene en v irtud del qcrckio de la ctcción rej)(lratoriu por parte del pel'jl.ldic:ldO, f}Uten pu~de opt:u por c¡crccria paralelamente denlm del proceso pena 1 o ante l:t Jurisdicción Ci\'i l (ArL ~3 del C. de P.P.). La repat·ación también se logm grad:" a la acwación ojlciOSttdei Estado en atcn<ión a que la Acción Pen<d busca igual­mente qt.Je fas cosas vuelvan :1f csrado en que se encontraban ames de que el autor

observara la acción ptmible, por ello la Ley Penal Adjetiva: incluye el perjUicio como objeto especial <leJa investigación (Alt. 334); obliga al Juez a condenar en concneto al pago de perjuidos (Arts. 55 y 180 m.uneral 8); cst.able('e medidas de aseguramiento en rcla­<ión con los bienes c.Jcl procesado como el embargo y el secuestro (An. S2): le impone la obligación al funcionario judicia 1 de orde­nar al fundona.rio del regislro impedir la cna¡cnación de los bienes del sindicado suje· tos a registro durante el año siguiente, contado a partir de su v in('\J iación jl~rídica (Art. 57): wndiciona b exc-arcelación al p«gO de la indemnización (Art. ·il5 numer:tl 7} y, además, consagra como principio rector eJ reswbleclmlemo del derecho (Art 14 C. de P.P.) el ~uai pcnnite una situación de equili­brio frente a la multipiiddad de derechos y de garantias que también consagra para el procesado Adkion:~ imen1e, la ley penal su~"Ca.rUi~·a supedica el owrg.1miento <k' los subrogados JJ<''Ilalc; -condena de ejecución condicional y libertad_ condicional- al pago de los daños y perjuicios (Art. 69 del C.P.). r establece me("tnismos jllfídicos para garan­ll7.ar el p«gO de la indemnización como la pre,·alt:ncia de Ja obligación (Art. IOj).

Púl' d perjuicio ~~}JV(tl:k:r~ ó~ fom 1a ~olida • l,·t tamo los autores o partícipes del hecho puni ble como los terreros civilmenle r<:~$p<Ht<i:l~

bies (:\J'tS. 105 del C .J>. y ,¡4 del C. de P P.) es decir, quienes conf()rnu: ::. h' LL"y Civil están ohlig~tdos a indo¿mnizar con fundamento en 1:. responsabil id3d dvil cxll'acomractual p<>r el brcho ajeno -en virtud <le la culpa in vigi­lando o la cui¡Y.l in eiigcndo C-'\n. 2347 del C. C.)- o por el hecho de la coso (Art. 2356 del C.C.), en el caso de los daños causados a ()¡'enes juñdic<.J.s en desarrollo de tlt:ti\'i&cdes re ligrosasl.

'2 Sin erri:¡otgo, dét>e JOf!Of$0 en~uento que. pese o lo v9enc!o oe.tomcuto ¿.t del Cacle-lo 2700 oo IWl , l,.if"' sect<;H ne lo Jurisprudencia rosllon& qv& .poro Ob·ener lo lndemnt:oc16n o cc·oo Cl~ u-o tercero cl'.,..llme.nle u~spco.sot.lo . Gl oomnlfl~ coco debe ocud!, V~omente 01 p:cceso clvf, sln cr.;e toedO to•mviOrlc Olr~tomente. en ést.J fOHI\0. oonuo oel proceso peno! .. "• El punto d& opo·;o de e~to postulo es b Sen!éi)CIO do 10 Soro Pleno de lo Co1té SIJp;Gmo ce JvsllciO <3 oe dlclemore de 1987) qué 00~1(:•6 in(IXE>qvlb.e el Arf 5e.aet Cucre:o C50 C1Q 1Q-8i' -or:ferfm C6c.go dé P?OCOd: -n1en· 10 Penol· on to QU$ ccnsiOOt6 Qt.:e :.:o.u.,,,.(l..,'f ;.1 _Mt~ .~

SA'ffAft oE BocerA COl. • VOLUMEN 5. No. 2 • Juuo- OtctEMIItf 1994 ----- --- -- 37

en materia penal, daño y perjuicio suelen tomarse como sinónimos. Sin embargo, ha de tenerse en cuenta qu<! aquel está en función de la vulneración del bien juñdico tutelado por la ley penal mientras éste está en función de la trascendencia que en la ó rbita del puirimotlloeconórnicoo de la per­sonalidad moml de un sujeto de derecho tiene la conducta punible; por esta razón si bien en 1~ renta/lva, <) en gene•·al en los deli­tos de peligro, no se le ocasiona daño al bien jurídico -solamente se le pone en peligro-, la acción punible sí puede oc;t.Sionar perjuicio materi<tl o moral a la victima o a un tercero. El dat\<1 e-~tá en f\\n<:\6\\ del titula~ del b\en jurídico n1icmras el perjuicio no; 6ste depen­de de qu ien sufre pérdid~ económica o resulta perturbado moralmente con el dano r no siempre lo es el titular del bien jwídico, nsí por ejemplo. en un punible de homicidio el d;u1o político o público lo sufre la cole(·ti­vidad por el impacto que le produce la elimi­nación de uno de sus miembros; el daño privado corresponde a la vulneración del derecho fundamental de la vida y el pcrjuido lo recibirá quien dependía económicamemc de la vktima yí o quien teni~J <.:on el rnis1110

una relación de parentesco con sólidos vín<l.J­Ios afectivOS: o quien, sin ser pariente, esmba un ido a el no solo por nexos materiales sino por fuertes y signific-:uivos lazos de conviven­cia afectiva, <·omo en el caso del campanero ,, compar1era pennanente. El dano penenece

al pasado mienlras el perjuicio puede ser futuro. El daño causado con la acción típrca es, obviamente, de naturaleza penal y por eso el autor responde con la pen<l, mientras que el perjuicio ocasionado con el mismo daño es de naruraleza emineotemente c;,,¡J y por eso el autor responde con 5\lS bienes. Adcm~s, quien ha sufrido el per¡uicio puede desistir, transigir, renunciar y transrnitirlo bajo los parámetros consagrados en la ley civil en todo lo que tiene que ver con los créditos y obligaciones; es por ello que el A.rt. 62 del C. de P.P. determina que ·la acciótl civil pro­veniente del hecho punible se elitingue en todo() en parte, por cualquier-~ tle los mooo:; cortSagrad05 en el Código Civil. El dmlo es legitimo cuando la ley autoriza la vulneración del bien jurídico si se dan las circ<u\Smncias claras y precisas previstas por el legislador en cada una de las causales dejw;tljlciacióll consagmdas ta~ativamente en el 3rticulo 29 del C.P. Si el daño se produce conforme a derecho el aulor queda exento de responsa­bilidad penal mas no siempre de responsa­bilidad civil por los perjuidos que con el mismo hecho se hubieren podido causar.

El attkulo 8" de la ley 81 de 1993 -que refor­mó el Arl. 57 del C. de P.P.- determina que el ~r.,,w de la cu>a juzgada penal ab-solut(Hi<l con fundamenro en que el autor ·obr6 en estricto cumpUmiento de un deber legal o en legítima defensa· -causales la. y ·ía. de

•SI t>le!"'tls cierto QV& lo l&y puo® é.x.1ender lo competer.cJo OOIAI$l Peool o osun1oscMies reloclonooo~ con e! C!offo. !al como~ ononzo en los oreced&nles pófrotcs. 10 regutoelón de los articules M Inciso ptlmero. 59. 60. 62. 63_ 64, 6S v 66 dall)e)Creto 050de 1987 noct:~n de to lnrEJNGnclón del ferceso clvilmentf) fe~ro$CI)!é 00 QOrO!lUzo en formo efectl· va -él dePldo p~oce$0 v el ooréci'IO dé defensa que paro él tutolo Igualmente el ortlcvlo 76 de lo Cono Fonctamentol En efecto. 10 compctecenc.!o ot proceso penefdol clvn~n!e 1esponsob".oe le debe petm!Ur l'lOC-ér uso de los tccul1odes orocesol&~ qu& ooaño lnvocor en el proceso civil v que tesutron opuestos o fe no1utoleto propio del proceso penol ... Como )O qve grovllo10blé él tercero civilmente te$ponsat:llé no e.sobUgoclón que surJo (ltt-ectomonle dé! ~coo punlble .u~o O& ICI rell:::clón de rubord~ccl6n o dOPOI"défiCio en q\le se hoUo el outor ~ t'léChO punible con respecto o él. Stl Sl1üOCI6l'l nene qve venHIOrse Ot'l o! p!oCeso ci\lff Q~ es m6s ompi!O v !é bdnCc más oportvnldc::<:Ses poro- su dOf<II'ISO. permlflenc'o lncidomés o octuociones QVe no $0 puédén cumptk en el proceso ponol $In OIHUOI su eshur:-luro. toles como 10 démor'Cboe rec::>nvf>nc~. EH Romomlento en gorontlo.IO OOm.~nciO del p!elto, losnulloodes. yciros QOO por lo c-eler!doO del procoso penal v por s.:u noturolezo. prc:>k.l. sor. rehoctorios con st} tlnalkjod. rozóf'\ suflclonte -.:>OtO que w ousando afecte ev!den1omG:fl1é el derecl'1o de defemo C!-oJ rorcéro ... l o lmp·ocedenclo de es1::~s octvocJo~s oon· 110 del ~roceso penot. v dé ~r~ de lo mtsmo rndole -qVO PGFinliOn el omplk.l eJercidO 0&1 derechO d(l d.:tfénso del tercero. genero el oosrnedro dfJ los gorontlo~ qve 01 O(liC-uiO 26 de lo Constitución estot>l&co en su tt:t.JOF. pue~ no ouede octuor en condiCIOnés de pleno ¡guoldod con 1re1 vlettmo o ocurodor. oo p.;rmlte Q1 J-u-oz Penol 01Ct01 S(mlenclo tusfo•. <LO suCfayOdO es de b Solo). (Solo de Cosoctón Civil senlend o de er.eto 23 de 1992. ex:pédiGnJ& 3336. r...tP :Peoro to'onJ Plonello).

38 - - - - ----- IHVEsnoAc,tON y DtsAaltOLLO SoaAL • UNNUS!OA.O MIUTAR ~Nu~vA GRANAD.4 ~ •

justit)c.1dón- e.s la impn.sibilidad juñdica de ifliciar o pr·=suir la acción dvil indelll/'li~a­toria; esto si¡¡nifka que si el dano :\t bi<!JI ;urídico se produ<:e •( amrmo de Ctlalquier.t otra <:k las resta ores causaks de jvstificación previsr~s en el artículo 29 de! <:.1'., si b\¡,n e! a,ttor <l' 'ed<• exonerado ele rcsponsabiüd~d penal esto no es óbice para que responda civilmente por e! perjuiciv que ese daiio J)tldo ocasionar y por ende cs iurídicantente posible acudir a la acción inde»>>)Í>.lllOTia !U>te f!l ] \ ¡e<t Civil.

Enuc daño y perjuicj,J e:>:i$\C un~ reladón <le <:'l.usa efecto. El daf•o al ))ien juridíco gene­ra perjuicio)' por ello la base de la reSpol'l.%1-

bilidad dvil C>'ll'?.COnlfat:~tml por delitos es la dec-laratoria de existencia del daño (Art. 2341 del C. C.}.

1. ltnP<>rta.ocla jurídica de la Cuantlficaeión de1 Pe.rjtllclo

t.a cuanLiJlc;adón del pery·ttícíoüt~fle \rat>Cf$n .. de11ci:. p3ra efectos de:

a . E.\·tinclón de ia tt<:ci6u Penal por i•ldl?m· n~t:uclón ~·H~ral. E),\11. ;>.vdel C. de !~P.. mcxlilic~do par el :\fr. 7• c:k la ley 81 de ¡'1')~, ;;r,¡r•H$.'~ !;\ in~cmni~adón inrewal comv <·ausa) obJe11Víl de extinción de l.a. :\cdón t'(:nal en los ctsos <le hornidclio C\llpcr.,;¡o y le.< iones pcrson:tles culposas -siempre que no concurra<> las (;t\.ls:\!l'S

espedlkas de ·~vüciún punitiva ()lrL ;$30 V J•i l <ld C.P.)-, y a1enwdos COflWI

e l bÚm i111ídiro del p:UtÚ'I\Oni<>e<.'<)nómí­co, síe1n¡~re que b cuantía no exceda de do;;<:lcmos salarios miním~ leg~.les m~.n­suaks (l•oy ~l').7~Q.\\\)().oo} -c:<cepw huf\o C"aljficado y ex1orsión·.

Aqwi er tünCepr.o de 4\nd~n\nb:ad6n 1rr .. legt,ll•tomprcndc.: \;1 rcpatJdón del daño privado y el pago de lt;>S ~r¡nidos oc;,­sionao:los.

b. Ui e:\111/Ción de la .4cci<5n Fenalpor CoH­cilfl1t:ióu. e.n ot.l ..:~so de los dcHlos

qucre¡j;¡blcs y en el qso de los delitos que admile.fl indemnización imegr;~l (Arts. 38 y 39 de la Ley 81 de !993).

c. La excarcelaclém e,zlos delitos contra el patrimonio económico. ¡;:¡ NI. <115, f)U·

mera! 7. consagra como causal de cxcarcela<·ión. en Jos delitos ooncra e! patrimonio económico -~in importar 1~ t:Uanú~ del ctaño, la modalid~d del hecho ní la persc)l\aUd~d d~! <\1\\0r· 1~ indernni­l.ación (le. los pcljoicios ocasionados con el puru1>le.

d. La ¡,x:carc.¡,1acfóu en 1!1 delito de{;eculado. El numeral 8° dd Ar\. 41S ib(dem tlln. SS Le)' 81 de 1993) coosa¡¡r~ 1~ libenad ,:aucionada para el puoíble de pe<:U!·adc .$i se re.p<~.ra e! dañe> y los fJerjufclo.< cau­sados ames de que se di a e sentenda de prime~ lll$tzllCi~.

e. J.a atenu.ac,"ión de M {JI!I!a. len l<><l<>s k-s delitos, el hecho de que el autor rep;tre voiunturiitmentc el daño, almque sea et\ form~ parci:ll (Att. 64, <:a~•Sal 7a. del C.l'.). se cunstituye en cit<.·un..~r.ancia genél'k<t de atenu:Jción que el Juel. det>e l<'n~r en o ... !!'\ a P''~" efec\06 de 1:< tasación de h't pena en ¿_·oncrelo cor1forme , lrn: crí .. terios cmtsag.-ado.~ en los art!<:ulc.•> 61 }' (:,¡ibídem.

f. R,¡baja de /e¡ pena por reparación. En Jo., pu níb\c~ ~'Onlfa el patrimonio econ6nli­co, si ;ln!e.B de dictarse S(!n\es.Kia de pn­tner~ ins\-and:-c e~ autor rep~ra el dar)o príwdo e indemniza los per¡uicio> <><:~­sion~do~, dis('re{.:ion~h·;'tcnte. el Juez pueó<' rebajar~~ pena al autor de h mita. el 11 ¡,,~ ues CtJarta.• parte>

g. Enlri'!ICI dcjilll/il/(1 (fe ¡ ·ebículo.~ ,;¡WOII!<l·

1om rm I<Js ¡nmlb!es de I>P>nic íáiu cu/t)()sn y l<r.<lcmes personales culposas En estos eventos ros \·eftkttlos ~ot\)JTIO\Ores,

m\V<:.S. dt!,fOrt:n:e.b. o <..--u:.~lqu;er unklad IIIOnt;lda Sc>hre niCdilS C<>O ht que l;l:! h:.y\1

s,N\M!l.\E \;<::GQ!Á Cot . • VOlUMEN 5, No. 2 • Juoo. Dt~ltl>llU 1994 ------ - --

C'ausado el daiio al oien juridico, si el mismo es de propiec,!ad d~! aucor del he<:ho ~unible, una vez puesto a dispo­sición del funcionario ¡ucücial -o del fun· clon~rio de policía, ;:o el caso de las <:en· ~ravencioCl<':s especial~s·, este sólo puede devolvérselo en.fornttt defintlil!asiempre r t:u3ndo se p'\,~;uco o se garanticen los daños y perjuicios, fij3dG-$ mediante ava­lúo pericial; de to contr.uio, !a entrega se hil~ :¡¡ propiewio en c::alldad de dep6-slto -lo ('lll\1 tmpli<'3 Ul1 8f9vamen sobre el bien mu"'ble que. le iiilpide ejer.;er sobre él los ~cr.os normales de dontinio, y debe <eSper-u hasm. que h Jur~~dii'Ción decida $i tiene o no responsabilidad en el hech<> y, e:n c.\ SO po-~itivo el Juez debe, en la scot<:!lld;;, decom!sarcse bien para e.iect\'~ de la i11demn ización (Art. 338 dd C. de P.P., modifit,1do por el Alt. 43 de la Ley l':\1 de 1993).

en este CJSü, para eiect()S de p:lJl2< O ga­rantizar el pago .v.gr. medi:tn!>e póliz~ de seguro~ o medianLe e.l depó.~ito de una dctetrnirt¡¡@ C'Jntid;>LI de di.ncro- s-. re­quiere de la cuanlili~ciótt ctel pcrjt>icio.

h. Determirwreltr(lmlte, si e) perjt<ákado liecid& actutir a la jt1 rts.:licd,;n C/lJ/1. 5! el titubr d<:' J~ ac~i6n dvil inden>niza!Oria dedd.; ~i<'~>erl·3 ba¡o !a misma cuerda de.\ proceso pena! casu en d cual -<le un lado, la acóón civil ~$tá sujeta a las con­diciones y ,, !os términO$ del prt,cest> pcn<1l o rdinario y, ele otro, !a criSiaJiz;t­d<".m de ~a inde-mni.zad6n necesariamcnle s~ supedita a la dedar~toria dt• respon-

sabílidad perta! del autor del punible-, hl C'\lantla del petiulcio para nada incide eo la competencia que tiene e\ funcio­nario ju((i~ial para pronundarse sobre la prelensión c:ivil, pues la com.petertcla sisue derermin.><la s6Jo pot la naturafe· zll ctel beCIJO punible o por la cunmín. del dlllio al bien jurid\co -en el evento de delit\J5 comra el palrimonio e<:<>nb­mico-. Por esta razón, si se {(ata de un ¡>roeeso con1.ravenciona\ especial o de un proce~o de corlOCimienro de\ jue1. penal munidpal, confor01e a lo disp.1esto en el Arl. 33 d~.l Esta\ulo Forense (D~­creto 196 de J9íl), los esrucliMtes de derec:.h<> adscritos a !os C<>nsult>orios Ju­rí<Ucos de las llniversidades otkiafn)en­te t:e<:Onocida.s ptte<len rcpte-91:Jl1M iudi-6almetltft a \~ parte Ctl.>({ -quien está le· gitimado en cJusa pllr~ pe((ir la indern­niza<;ión-, sea cual fuere el monw del pe/juicio.

Pero si el perjudicado opt-a ¡x¡r acudir ante el Juez Civil ¡:¡ara ejercer !a a.~ción

iodenmizt?toria -!o cual puede ha ter con ind(!pend~ncia de que exista proceso pena! o de que exista sentencia en este campo ptte:s !,¡ d<>claratoria M respon­~"'bilid<\d ~M( itO es IJI'\:Su¡)u~~~O !C{;:cl del ejerciciO de la acción civil y, ade· !l'láS, porque ·.11 Juez Cidl llO i>ln>mbe la responsabilidad penal sino la civi l par­(iendo de l;¡ rebelón de ~aus;1Hdad en­tre el perjuicio (<:<'efltO) y la conduc~a (causa) de \Ul sujeto de deredlo'-, debe tener en n•eflla la (1.tanúa del perjuicio. Si ~e tral~ de ''''~}Or cuamía, la acción

~- Pe~& O \o d Os\odoO {:¡\.>6 ~OO~fl af pqn/>:; <.J.ek;n tes nQIIT)CIS 61'1 moi erk:l Qé té$l)Ot'l$COI!IdOd o:.I·_.IJ Q:diOOOilfrOctva.'. a.lgt.mc-4 ttJ~f;i ctv'J)e$ SO nfeg<ln Q d>JrlqU.flrt~r1eoJo QCC'JÓI) epcr-o~OIIO CUOt'tdt) &\ P~l~diCOdO tl().l<.l DOt t1~U'4t(4/0 Ju;1$~!;ión, Civil y no o 1o Pel',d p..lt.7 to:(.Of lQ ~~rr!l'nC!ot,l') de IOt Ol:(}likJc$ cOUSQdQs coo ef t&eno oo~kJ. cáU;.'> (>(:N Jo (':oC\ f'IAJ0~11Q Cortl) Supr13rna C.e JuttJ(;to r.-o tefl_ldo Quoflf .OiéC~ot.

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" ·. er p>Jr;"4d'to-""d<> COl> $.1 óEalno oo ue"e neces.or!Orre>'lte Qlle ocudf1 Ci ~so Plflht::r&.'l9{:e.Jón oe JeY.lf<:imlel'lt<> oelOi a\¡fi~ Sufll®s. VO cy.Jok'ls ())1:~ulos ~3 y 45 de' C6o)Qo~ ~ce~J'~¡,to:J f>s¡lQlle d<l.f>de•()CJ')n C1 OClJHif dfteCtot"OEtnl& Q!'li~ et J<iez CJWI.. Jo C;ltJQ fi$CE&$000men1~ d900 nac&f WQOClO\lfhochoco(lCq<J&t/pJclrW.d ~('I<Ji.Re'() a~ \QCCI.uso del pat!lk:ki. E) CareeN::> o 'O!ie~oe irf.Jetrn'aoc\ón DOf te~ Otll\t$ Qotfgffl()dt)$ $rt '31 (j(/N!O no ~'6 sUJ;~OOitodo entoncoo oJ Je\'.Jit()ÓC) de fb t.N;CJ/)1) ;»n~ I'O~..?&CHIIO ti tl,ulor de kl OC:<::~ ctvl PWd\9 e-l.;)glt VM ~ ~ s~IEtl'l1e; opc:lot'o&'S pQro hacer éfe~~~ ~f f<:1scrcltr.l.()nto del 601\0: o) lnto()r).) occJó.rl otvN-.¡r.ll) la$ /<lee&~ ,e}..~ c:Ja~e el rfl()mgn1o {$n ~00 el h~ho 'upu.astCmi)Ole V.lcl1o m ~01'\s\IIT'IEI, i.ln ~u'to ca;o 'iO ~~l\."<lelo d6 14 acción .lll-."'!.e<:nn!ZO\orlo 9s !f'\d;c.pcntll&n1í) d.e& ~S*Jftoao <11:1 t;t occJbn

•

civil se tramita por el procedimiento ordi­nario (Ait- 396 y s.s. del C. de P.C.); si es menor cuantfa debe acudirse al proce­dfmfetJto tJbrevia<to (An. 408 y s.s. ibídem), y si es mfnima cuantfa el pro­ceso es 1terbal CArt. 427 y s.s. ib!dem)

En consecuencia, la competencia del Juez Civil, está supeditada a ese factor objetivo y por lo mismo los estudiantes de derecho adscritos a los Consultorios juñdic(>~ sólo pueden representar judi­cialmente al perjudicado si el asunto es de mínima cuantfa {hoy s¡?O.OOO.oo), según el Decreto 522 de 1988.

í. Detem1fnar la viabilidad del recwso ex­traordinario de C."asaci61'1. Si tiene como objeto únicamente lo ref~rente a la indemni7.adón de perjuicios.

Conforme a lo dispuesto en los artículos 221 del C. de P.P. y 366 del C. de P.C., el recurso de casación procede si el valor actual de la sentenda de segunda ins­tancia dictada por los tribunales supe­riores y que le es desfa\•orable al recu­rrente es o excede de Sl4.000.000.oo CAn. 3• Decreto 522 de 1988). Pa!1l este efecto el perjtiiCJo debe estar detenni­nado t:uantitalivarncmc.

2. características del Perjuicio

El perjuicio derivado del hecho punible debe ser:

a. Cierto. Lo <:ual implica que la situación de hecho en la que se fLU1da debe ser también ciena. En tal virtud, el perjuicio no puede depender de un hecho inde-

;·....,..,.,¡..{¡;¡~ 4()

tennínado o lupotf!tico; tiene que derivar de una drcunstanda conocida y concre­ta, como por ejemplo, en un caso de lesiones personales, la ocupación labo­ral y los ingresos que realmente tertia la víctima al momento del hecho o que ne~-esariarnente puede llegar a tener ''·W· porque la ley regula exptesamente ese aspecto (el caso del salario mínimo legal mensual) y no de la expectativa de una determinada profesión o los ingtesos a los que la misma aspira.

h. Actual. Esto significa que debe existir p.ara el momento en <¡uc se ejerce la ac­ción indemni~.atoria. La mera expe<.üliva de perjuicio hace improcedente la acción repa!1ltOri'l.

Sólo en forma excepciona 1 se admite la indemnización del perjuicio }Íiftlro: ello depende de que éste sea la reiteración de un perjuicio actrwl ocasionado con la acción punible que por ende perrmtc su cuantificación y el correspondiente rcconodmjento, con lo cuaJ se le (·vitl

al perjudicado tener que iniciar una nue­va acdón indemniz.atoria p~lr:l r~damar el pago del perjuicio que se presenta con posterioridad al fallo de rcsponsabilrdad F.n estos casos se habl~ de • fnd&rmliZ<l­cf6njwur~. Un ejemplo claro del per­juicio li.&nlfo lo plantea la Jurispn.,dencia nacional en un caso relacionado con el fucmcesamede la víct,-ma qu.:: nl) /abone para el tnom<. ... nto en que se le oc.:asiom: el daño al bien jurídico el mal, para mayor llusu·adón, tocaremos al ;.tbordar

el tema del lucro cesante corno pa 11e del pcriuicio rnatelial.

per.ot pero si lo acción civil «1 ln'MtQ vno vez t(fi!O(fo el ptoceso peno!, b s.entenc!o OICIOOO en é$te genero c.o~o jutgcco en el procesa c!Yil cuor\dO .sé hoyo rocof'I<>Ckfo qoo el h&eho cvusan~e del Oé'l~.oiCIO no "o ~ciiZóo que el $lndl~odo no ro co~116 o cue éste ortió en cump!lf'I"J.?r.to da un aebé~ o éfl iegíf.m de~onso b> lnh¡mlor lo occió."l e MI dén.trc dol O!OC&· SO 06001, SUPI.M!10 Gn 01 CUOI Ol OOI'O()r.Qon1e queoo sl4eiO O b c:(Lfé. $Q dOC-IdC on 61 No op.?rece PU85 ~ondlc!onooo, como 10 $0S!Ieno e1 cemondonte.to lndemn.zotl6n de JO~ PG!flke <:-s or!g1r<.t~ po1 e d.a~IO a lo OPGtfVIO de 10 lnvesuooclón, n1 al p:eno ejércício de 10 CCC!Ófl penal po1 porte del Eslodo (C.S. 00 J St:l!o Pleoo. W t110J'ICI<l dO MOI70 lb de 199()) .

SANTAFÉ OE BOGOTÁ COL • VOLUMEN 5, No. 2 • Juuo • DICif.M&Rl 1994 ---------- 11

c. Directo. El carácter directo del perjuicio a. PerjuiciO o da> lo materialEs el detrimento está determinado, de un lado, por la ne- del patrimonJo económico de la persona • cesaria IW11Ck1" de causalidad con el (natural o ~ridlca) causado por el hecho daño al bien jurtdico y. de otto, por lo punible. Este comprende, conforme a lo rolncl(m de ímnedlotez con el mismo preceptuado en los articulas 1613 y 1614 resultado t1pico. El periuicio tiene que del Código Civil:

ser producidO por la conducta punible en concre to -matar, lesionar, huttar, In- 1) El da•lo enwrse111e. Que corresponde cenclia r, dañar, etc.-. a la perdida económica por la vulne-

ración o puesta en peligro del bien Desde el punto de vista objetivo. el he- juñdico y todos aquellos gastos, ero-cho punible puede generar un perjuicio, gaciones o desembolsas que necesa· 6te a su ve< puede convertirse en causa namente una persona debe hacer generadora de otto, i!stc de 01t0 y así para atender todo lo relacionado con sucesivamente. Así por ejemplo, un ese daño, o las secuelas que éste deja. punible de homicidio le O<.'asion.1 al hijo St tomamos como ejemplo un punible de la víctima la pérdida de la concreta por lesiones personales inferidas a un cantidad de dinero que men.~ualmcnte meno•· d~ edad que le ameritan inca-recibía para súfragat 1~ gastos de manu- paddad dcCinitiva de 120 días con tendón: al est~r desprovisto de esa ayutla seruelas funcionales consistente en económica éste no puede hacer su es pe- perturbación fi.tncíonal pennanente ciali7Áición de medicina en el exterior, del órgano de la loc-omoción (micm-hecho éste que se constituy~ en un bros mfenores y conexiones ncr"io-obst:lrulo para una mejor coti>.aci6n de sas). el daño emergente corresponde sus serviC1os profesionales. f.n eSie ca.1o, a los gastos obligadas para 3tendcr el ú1Craetor de la Ley Penal quten vulneró todo lo relacionado con el daño y la el bien jurldico de la vida no esti obli- seruela , entre ottos los relacionados gado a responder por toda la cadena con: el tran$porte para erectos de causal de pe rjuicios sino únicamente por atención m~dica, de control y terapia el primerO puc> éste e> uircctO y lu> hasta el momento en que se sup<:rc dcmis son indirectos. la in<:apacidad ~die<:> l<!%al, los crl-

El car:lctcr dn-ectodcl peljuicio detemuna rncncs de laboratorio (rayos X, hema-tología, etc.); los honorarios nlédicos

la legitimidad del titular de la occ1611 In- (del nlédico gcnct:ll, del cirujano. del denmtmdom y. umhien. desde el punto onopedista, etec.), los servióos hospi-de viSta estrictamente penal, detem1ma ta lario:o (teniendo en <.u<.'tlta d tiempo la legitimidad del querellante cuando el de permanencia intrahospitalarm, los titular del bicnjuridicosc encuentra impo- servicios prestados, etc.); los 111edica-sisbiUwdo material o jurldicamcnte para mentos: llls elementos quiñlrgicos: los formultlr la qucrcUa, pues en estos casos elementos onopedicos (tales como el An. 30 del Código de Procedimiento prótesis. muletas, o silla de ruedas); Penal le da a tos perjudicados ti/recios la las terapias; el valor del tratamiento legitimidad para instaurarla pstcol()gico. etc

3. CI.ASIFICAOÓN DEL PERJUIOO El daño emergente total es entonces

Los aruculas 103, !05 y 107 del Código Penal, la sun>atoria de todos aquellos gastOS

nun11encn la división tradicivnol del perjuido necesarios para reparar el datio al btcn

en material y moral. juridtco y rcpMar sus conse.cuencias • 42 INvunoAc.tóN y DuAaaouo SociAL • UNtvO~DAO M1UTA' "NUN• GtANADA • •

•

Como el auror del hecho punible debe indemnizar a la vfctima o perju­dicado a partir de la recha en que ocaoiofle el daño al b ien jurídico. según lo establecido en los artículos 21 <lel C. de l'.P. y 161'5 del C.C., es deber de! j ue< proferir dect;i6n ju­risdiccional que declare la respon· s~biliad penal (en el e•·cnt<> de que la acción i!ldernnizatoria se adcl3nte dentro del proceso penal) y/o civil. en el evento de que la acción índem• nizaroria se adelarlte ~ntc el juez Civil, aCtualizar el valor del daiio emergente desde 1~ orurtencia ·del d;!iio h:LSra la fecha de la sentencia, pues resulra­ri~ incquir.ativo e inj<•st(> que el obli­gado sea condenad<> a p~gar sola­mente !¡¡ c9 ntidad nonlinal gast"-da pese a la evidenre pérdida del poder adquisito dd dineto.

Son varios los métodos o si.$temas -el del salario mínimo; el de las l!nl<lades de Poder Adquisiuvo Constante \UPAC); el dellmerés wmente; el del indi<:e cte. inlhción, \~ f6rnmla., ma­temáticas o finaru:icl"-S; e\ 1!\di<:e de Precios al Consumidor (lPG), e tc.· , que la Doctrinil y la Jui'!Spruden.cra han utilizado p~lr::t ncttmlizar el valor del tlario emergente. r.a ]uri.<pi'Uden­cia acrual se indina por el método de vari,.dún del lndicc de Precios al Consumióor (lPC) para lo cual se re­(j\li<:<e apli~.af la sig~lil'll\e fórmula qu" denW1da. <:.onocer presian'll.!n\e e\ lVC en la fech~ en que S1i'! prod>.«:e e l &"'lo y e l IPC en la fecha en que se ha<::e la ¡asación de Jos da1iOs y perjuicios -pues debe ten<~rse en cuenta que en la practica la tas~ción del daño r10 se hace en el monlent<> en que qu<'da e)ecu,oriada ~a sentencia sino mu(hO ~mes, en l<\ clapo del juidr>:

IPC final

JPC inicial

Es decir, Valor Presente VP, es \¡¡ual ~1 valor del daño emer¡>,ettte S, mu\t\­plicado por el cociente que resulte de dividir el fPC en la fecha de la tasación (o del fallo) entre el lPC en 1~ fecha del daño.

Z) lil Lucro Cesame. Corresponde a la gaw.ncL'l o al provecho e~on6rnico que dej~ <le percibir la persot\i\ a cau­sa del hecho punible. En el ejemplo que hemos p lateado en el páffafo inmediatamente anterior, en lo que hace al lucro ccsanre de la víctima, como se tr.ua de un~ persona menor de edad (JUC, por r:onsíguiente no e~1.ab-.1 en cap~ddad productiva par:• e l 1\\()!))<!n\O del hecht,, e,; bast<•ntc eloo.tente el pr<>nu<'tial1'\.iento qoc, sobre el particular, 1\a~e el C.onse)o de Estado en Sentencia del 22 de noviembre de 19')1 (M.J>.: Dr. Daniel Suárez 1 !em~ndct.. c.>:pediente 6843):

• .. , H» el caso presrmte, Edflh Maria Só•·Jcbc>z Cadapltf es una tle k1s perso­•UlS dema tt>'ÚUHe$ y t:l valor dC la In denmlzi.Jcl6n por tuero cesa•ue es para e/1,1, 110 para .;u.s prtdrtJS. ÚJs rlatíos quP la arcidentadu sufrt!í flsica y $icológlcanu;nte }il.ero>J tm1 grarleS qur> su lncapactdarl /r?boml presenJe yjuiUera es cfetta y absoluta.

En tates co>ut!,iot<es, si como jurls­pmdR11cialm~~¡te se ha preuislú, a los 18 años de edad. tos bljos se COJJSide­mt1 en capacidad di! proueer (1 sus propitJS necesutades, sin a~•·llfo eco­nómico r./e St¿f prog<>tlllore.{, ri!Sulta wuien1~ C» ~~ caso e;¡¡amlnwJo. que é"dllb Maria por ra:-6•1 etc Stt$ lesir>)les se enct~entra impos.lbl!ilar1« para des­emper/atse laboralmente. Ptlra sosll!­nerSe por sf tllisma. de donde swge el derec/,lo" sttlndemnlzac/6n.

Retteo·a e>1 t•sln (;fNrtunfdati la Sala. <?l cnte•io pltJSnsaao en J.>rt:ll>idi!>JC1a

43

«ef Z9 de junto de 1989; proceso 5225; actor: jaMer de jesús AJJSel He:rrem, donde, c:on ponencia del Consej<m> de Estr~do Gustavo ele Greijf J?eslre[.>O, cuando a/ resolver un e<lSo tlmilt<r al pre.<ente dijO:

..Oú;ld6 el se¡¡te><cir¡dor aqw; que 1<< vt:ctlma es ut<o de tos varios demtm­da fl(es y que él no es/ti Pfdlentlo itrdemn/zaclón para sus progenitores {J(lrque los SOóhll!lem er.o•Jómlcamen­te, s;,1o para éJ.

Elnl}hl> unos P<"1uictos 110 por jruu­ros menos ciertos. E11 Primer lugar tlmdnl qt4e usarptl5tesls que reemplt~­cel! los miembros ampurados y e/.\u tendrán que ser cami.Jia:k1.t a medi­da que >e de.turolle ft>ü:;m¡eme: en. segundo INgtlr, no fJDt1rr1 t,.abajar y sostenel$e cmmdo alcance la tnt!VO­ri/J. li$.tos pe/juicios $011 susceptibles de <~llaluarse y por ello se lm/)O•Ie la con.de•w a su pago•.

En el mismo feUlo se recomend6 como crit!:rio para calcular el tnon/<1 in­demnl'z-crtorio. el r;a/ar d11l saltJriO m{llil'foV!qt.te.P,'J.1•'fa babt?J' tlemmgruto el menorapm#J'ddc-,;; 18nt1osydu­mntu toda .su uf da probable si tuViera wpacfdad fl.stca .. ,._

Cousecueme,wme con el a11te>1or m· zoruw1iento, se proc~ae en ef sub-Me a l iquicta.r fos perjuicios mcuerlal(!$ sufridos por Edltb Marfa SánCJNJZ Cadat;id. así.·

La. fecha de su naclmia>¡toJr.te el2 de novtemb>-ede 1972 o~ .3.). esdl!<;tl: que alcanz<J su mayoría de edad el 2 de novtembr·e de 1.990./echa ésw a partir de l¿; cual la cobija ef veUor illaem­'liZtltorio, bllilta el wlllpltmfcmkl del término de su vida prolla&le, a<;tNttldo o dlsmlnuldo por r.w:6n de las /e;1o11PS

sufridas, a 65 orlos, de acuerdo cort el crllerlo pericial que obra a foliO 311 ael proceso, plazo a wmplirse el 2 de noviembre del ariO 203 7. Conw Ingreso se tonumi el ~;xlor del salariO minimc;le-,yrl. qti!!{J<lr¿~elmiode 195>1 era !51.720, de ot,uerdo con el Oecreto3074 de 1990 .

Se wmanin en Cll~llill aos periodos: el primero, ve11cido o consolfdaao. que va desde el 2 de novlemfJre de 1990 (mayoría t:Je ed(UO basta el 21 de noviembre de 1.991 (focha de esta se>1tellcia), y el st>gurtdo, desde el 2 de ttaf!(embre de J 991 bPst.4 eJ 2 de rwviembre de. 2037 (t:rmJ,t>fjmiento del JérmiJJo máximo probable ae JljfÚl).

Indemnización ~enclda

Se aplica jonnula:

S " Jt

Luego:

( 1 • 1) n - 1

dmrde: .1; e.< la suma que se buSCt4· fr es la ren/P memuaJ ($:S.1.72(ll; 1, es el lnumJs Jmm o l<!cnlco me11s¡w/ (0.001867~: 11, es eltnlt!wro de meses que compnmae <;1 periodo fmlemn.(­zutorio (12 mq;es).

(l .. 0.004867) 12 - l S • 51720

l1.0046(Ít

S ~ 51.720;.; 123264908 = <537.526 10

lndeu:uUzaclón futura S<: aplica la f6rmula:

{l+i) n - 1 S R-----

i ( l +l}n

•

•

•

donde: S, es la suma buscada; R, es la r;mta o trrsreso merrs11al esl(lb/eci/Jo en no11iembre ele 1991 ($51. 720); (, es el tmerés mensual ptJro o lécntco (0. 004867); n, es el número de meses que comprende el periodo fndemn IZa­torle (552 meses).

Luego:

(1 + o 004867) 552 - 1 13.5860754 5=51 .720 ------

0 004867 (1 • 0.004867)552 o 07():)<)0428

191.3789750 )( 51.720 $9.898.120.62

Indemnización futura: S 9.898.120.62 llldemllización vencida: 505.694.28

$10.403.814,90

F.s~1s fórmulas son utilizadas también por la Cone Suprema de justicia porque constJt\lyen un insLn•menro matemático elaborado por loo Financisws que permite conocer en forma acen~da. la primera. el valoracwalizadodc una suma de dinero dej3da de recibir por la tJicttma o por el perjudicado, dcsck: la é¡xx-a en que se ocasionó el dat1<> al bien jul'idico hasta el momento de In sentencia, lo cual.<e denomina lucro cesa me consolidado o ven­cido y, la segunda, la suma de dinero que debe pagársele en forma antidp~da a la víc-1/mao al pf!tjudicado teniendo en cuen.La el lapso comprendido entre el momento del fallo y la fecha limite de vigencia de la renta mesual del tirular del bien jurídico (vktima) o del perjudicado ((:n el evento de que un tercero reciba ayuda económica de la vícli · ma), lo c'Ual se denomina lucro cesa111eju1uro.

En Jas mismas rórmuJas financieras, l es una consta me. El "interés técnico· es la sumator1a del interés civil mesual legal (también deno­minado interés puro) o se~ «quel que fija

expresamente el Código Civil en los arúculos 1617 y 2232 en el seis por ciento anual (0.6% mensual) y el IPC que corresponde a un indicador estacrJStico que permite establecer las variaciones en el gasto del consumo final promedio de los hogares, atn'buido exclusiva­mente a los cambios en el nivel general de precios entre dos períodos de tiempo dé te r­minado, de un conjumo representanLivo de bienes y servicios adquiridos por la pobla· ción para su propio consumo. Esa swnatoria del interés puro más que ellPC involucra el mínimo de rentabilídad y el real poder ad­quisitivo del dinero.

r.IIK es determinado por el DANF. mediante certificación y como éste varía ~nualmente. (en 1988 fue de 28.12¡ en 1989 del 26.12: en 19'Xl del 32.36; en 19')1 del26,82; en 1992 del25,13 y en 1993 del 22,60), también vana e l interés técnico. circui\SW nda <'sw que dific'UII<l en cier­!3 íorrna el cákulo, en un caso concreto, ralón por la cual e n las compañías de seguro.~ y la doctrina' elaboraron tablas que pemlitcn cono­cer el -interés t6cnic;o. requierido para efectos de las fórmulas financieras emplead1s por la Jurisp•udcncia Nacional para actualizar el monto de la indemnización ..

Obsétvcsc que, <.k: no existir prueba sobJ'e lo.s ingresos de la víctima, para efectos de t. de­terminación del lucro cesante, se prsumc el salario minimo legal mensual. el cual varía a al\\..) t.al COl1V.) se <lbserva en ~a Sibruk\\tt·. \~\.)\·.:\ !

Aúo Decreto ($)Salario Mínimo Legal Mcn.<ual

1988 1545/87 Dic. 31 25.637,40 1989 2(l62i88 Dic. 24 32.5S9,6o 1990 3000/89 D>c. 22 41.025.00 1991 3074/90 Dic. 21 51.720.00 1992 2867/91 J)ic, 21 65. 190.00 1993 2061/ 92 Die 22 ll1.510.oo 1994 2548/93 Dic. 20 98.700.00

4. El'\ &S'O mote1lo hcsJdo de$toccdo e• frc1oo1sto polrb G!tbe1D Martfnoz Rov&qul&rtan susot>ros ,.Pfocedlmlento Pa:.ol CcZomolono.~ {Editorial Biblioteca Jurfclccz OU(é}, d&Ciica ccoilulos especbhn 50S cuo:és és ~bltgodo cnns.urtor

SANTAJE O< Boc-.orA COL • VoLuMEN 5, No. 2 • Juuo. OJCtlMII.t 1994 - - - - - - - - - 4S

En lo que hace al ténnino de vida probable, B. Perjuicio o daño moral Es !a perturba-puede conocerse también, por ejemplo, a d6n o menoscabo del patrimonio mOI"'Al

i través de la Resolución No. 0096 de marzo o mundo interior de la persona natural, de 1990 de la Superintendenda Bancaria cla- causado con el hecho punible. borada a patir de los estudios estadlsticos de l:tS compaiú:tS de Se¡¡uros: El patrimonio moral comprende un

doble aspecto: el social y el afectivo. Edad en el \ida Edad en l'lda Aquel tiene que ver con la trascendencia momento probable el momento 1>robable del e lemento moral en el mundo de re la·

de la muene (Supenivenda) de la muerte(SupeiVil-cncia) ción interpersonal e involucra t<Xlo lo

20 52.19 61 18.21 relacionado con la reputación, el buen nombre, el honor y la l1onra, los cuales

21 51.37 62 17.44 se constituyen en objeto de tutela penal

22 50.54 63 1668 23 49.72 64 15.93 con ftguras como la injuria y la calumnia.

24 48-1!9 65 15.20 El aspecto afectivo del patrimonio moral

25 48.C6 66 14.48 alude a los sentimientos intimos del ser

26 47.23 67 13.77 humano; ~';mpreadc lodo lo relacionado 27 46.40 58 13.~ con el aprecio y el amor para con las 28 45.56 (¡} 12.41 personas con quienes se tiene r<'lación 29 44.73 70 11.74 o vínculo de parentesco, e l amor propio, 30 43.89 71 11.(:9 la dignidad. el dolor en sentido moral, 31 43.05 72 10.44

el temor, el miedo, la angustia, L1 intran· 32 42.20 73 9-79 33 4136 74 9.16 quilidad y, en general todo aquello que

34 40.51 75 8.54 acontece en el alma de quien sufre la i 35 39.66 76 7.9·1 lesión del bien jur'ídico. 36 38,81 77 7.37 37 37,$6 78 6.79 El perjuicio moral está siempre en fun-38 37.10 79 6.23 ci6n del mundo interno que constituye 39 3625 Wl 5.71 la esencia de la persona humana y de la 40 35.39 81 5.20 rclnci6n de afecto enrrc 6sta y sus demás 41 34.53 82 4,71

congéneres. Esto es lo que justifica, de 42 33.66 83 426 13 32.80 8·1 3.85 un lado, la existencia del perjuicio moi"'Al,

44 ;1.94 85 5Ai bien a la ''kli1JlJl o a un tercero, en delitos

45 31.08 86 3.16 que vulne.ran o ponen en peligro bienes 46 3Q.23 87 286 juñdicos consustaodales o personalísi· 47 29.38 B8 2.58 mos como la vida, la integridad anatómi· 48 28.53 89 2.32 ca, fisiológica y estética; la libena<l fisica, 49 27.i0 <;() 2.08 re ligiosa, sexual; el pudor sexual y el 50 26.87 91 1.86 patrimonio moral en sentido social. Esta 51 z6.o6 92 1.65 52 25.25 93 1.46 rnis1na línea de pensamiento perrnite. de

53 24.46 94 1.28 otro lado, acatando el sentido común y

54 23.67 95 1.11 las reglas de la experiencia, sentar el su-

55 22.89 96 0.95 puesto de que en !Oda persona produce

36 22.11 97 o .so afección moral e l daño ocasionado a sus 57 2134 98 0.6·1 seres más queridos y por ende a sus pa-58 20.56 99 o. so rientes más próximos; por ello l¡, Juris-59 19.78 1()0 0.00 prudencia y la doctrina nacional hao 60 18.99 aceptado, para efectos probatorio~ del •

46 INvtsnoAct6N y Ouuaouo SociAL • UNIVfRSIDAO MllllAR "'NUtvA G~ANAOA" •

•

•

daño moral, la pres..tn<:ión j\>Oicial o de hombre de que entre cónyuges y entre padres e hijos se presume el JX'~ukio moral por el sblo hecho del paremesco y en vintld de ésta ~)S heredetos, acre ­ditando su calidad de tal, quedan libera­dos de demosU'ar el hecho preswnido; pero dad:t la naturak?:a de la prc5unóón -·iuris tanlum~ la misma puede ser des­virtuada por cualquier medio probatorio que apunte a den1ostmr que si bien exis­tía parentesco eolre la vktilwa y quien p re tende constiwitse o se constituvó

~ ' como parte civil dentro del proceso pe-n~J. éste no sufrió daño moral pues no le unía a él ningún v·tnculo afectivo.

Si lo que ¡ustifica el daño moral son las relaciOnes afe(\ÍV~. «!SU\\a u\\ldn>\sible la existencia de un perjuicio de la misma naturaleza en el caso de daños a bienes jutúclicos no consustMdales como el patrimonio económko ¡Jues el afecto M es predicable entre hombre y cosa. Por la rnisn1a razón, resLIIta jurídicamente insosten\bl~ la prodtKti6n áel áaiio moral a la5 personas ¡urídicas.

fle, de e\ punto de vist~ de la posibilid~d de cuanrlRcar d d"t\Q mor«!, l\l. do<:ulll'A

y la Jur~~pnJdencia en nuestro medio h;¡n dabot<ldo dos categorías:

1) Petjuicio moml Stlbjetiuo (también denominado •preliun> dolons-, •precio de las lágrimas•. ·daiio moral de afec­ciórt•. ·dañ<J pt.ro o d~,\o n'oOr·AI pro­p tamcnte dicho). E.~ aquel que, pese a e;dstir. no se manifiesta exlelior­n,enle y po1· \o ffd:smo no es cu~ntifi­cable. razón por la <"al no es posible repararlo P''cs el dinero no ricne el poder de restablecer el orden espiri· rualturl1(tdo. &\\pe.t<), C<'>mo e l \l\\¡:.e.­mtivo ético si oien no demanda la fCparación -ya que no es reparable \\.) que no es detcrmin<Jb~e en cérmi-­r1os ecónomicos· si im¡)On<! uM

satisfacdón que, por t'lzones de equi­dad y de justicia, depende del •artJi­trium iudicis-.

Si el daño moral no es cuamificat>le, la ley penal sustantiva (artículo 106) concede gl Juzgador la fa~ultad de establecer, der1U'o de crite!rios objeti­vos que la misma ley pre:vee - modali· dad del hecJ1o punible, las condióo­nes del ofendido y J~ narur:~Jeza y conse~ueocia del agmvio sufrido­un~ cantidad •hasta el equinle"te, en moned:l nacior1al, de un mil gra­mos OI\>· que simbólielmente ~puma a n'\h'nr:rri"laJ e\ mconme.n.surable daño espiritual que puede om~•onarte al ser humano el daño de los bienes juñdicos propios o los de las perso· nas más cer<:3.rtas 'l su.s af€.('\OS.

No ex~u.· medio técnico ni descubri­miento cienlífico, ni ser humano capaz de medir <J(..sde t!l punto de vista económico 13 afección Jillerna de la persona a quien, por ejemplo, te mataf' un hijo lt>ego de ;ecuestr•r­lo. N el perito. ni el Jue~ pueden derem>inar en esre caso el grado de "'<lflic:dúiJ p.t.(jq~,,j(a U<: lu.s ¡..>;;td•e;:.5: pOI'

ello el Juzg<~dor, dentr<J de los par~­metro.s que b ley determin;t, tiene la facul tad de estimar 13 cantid~d de dinero <:J~ en cien>\ forma ,ni\1$>1 ese sufrimiento; estimación judicial que, por más alta que sea, puede resuiClt irl.';ufici¡,ntc clado que no eltisre can­tidad de oro que petm\t;t e liminar la inLuna sensación de dolor que pade­cen los padres por la des~parición del ,;er qt>erido

Si el dañ() Jll()raJ subjetivo no lntscien­óe en la órbiw económica del penudJ­cado. se repite, S'" t.:i;úm~c:ión pcrn\a nccerá dentro del -arbitrium iudicis.- y por ello no puedc:scrobjetodel dict3· 11len ¡'>l!ric.hll ele daños )' pe~uici01>

S•mAFt oE BooorÁ COt. • VotvMtN 5, No. 2 • JvuQ • Dt<t,..UI 1994 - - - - - - - -- 41

i8

2) I>Ptjuic-in moral objetirable <tamb1én llamado <1b¡ctivadol. Es aquel que se puede tasar o medir en términos ero­nómicO$ en r:tt6n :l que se <'<)llStituyc en causa inmediata de detrimento ecunórnico de la <ic<irn.t o del perju­dicado. Su cu:tntifiC3ción se h:~ce necesariamente a pan.r de los ele· meneos olljeci<'C>-< m~'Cii3me los CIJa les se pu~d~ t'OI'IStatar que la aflicción psicológica -cau,ada !)Or ~1 h~cho punible- se condelte a su ve¿ en t-ausa que le •mpi<.le al per¡udicado dest,nvolverse t!n su acthict\d econ6-nliC<t con el mismo ·rentlimícmo que te rúa ;une• dt producirse e l da 1\o al hien jurídico)' por ende el resultado es un:t mc·rma dt: su <4pa!'ldad pro­ducti<'a que ne<-csariamcntc se n:llcja monetari3mente

Para ~onoct·r <:1 v:llor del darlo ru:tte­riaJ O~>jetivat>lc. d ftmcionuio )tlclkial req\•ierc •ecurrir. en vinud del princi­pio de :-eccs•dad de 1:1 Prueba con..<a­grado en el Jl'!i<u!Q :?46 dd C. de 1' P.. al dinamcn pcncial el ctCII sólo pue­de. rend•r el perito en la medida en que denuo (Id pn •:·eso ol>tí'n e-le meo. tos de juido •uf.ciente, v.¡¡r ¡,obre la C:.J"l<:iclad pmducti<-:t del ~rjudJC:ldo; su .:~cti•'idJd tTO!>ómica: sus in~re~ cm lll1 dctcrm•nado lapso y en general todos aquellos que pcrmit~n cstable­rer que su patrimonio menguó dehi­\lo a su cont'I'Ct:t allkción espiruual producto del hecho purublc.

En <:1 e¡emplo planteado sobre la mvcne cid l»)o .<erue.<!nldO, ;~se esta· blcce que el ~ufrimieruo que natural­mente prodtKC eMe hecho origllló aderms una dismmución en la acti\·•· ct\d económic:l. ncce~~rian\l'l'ltC esa pérdida de~ repa~Jn<e <">11 1 .. Ctc!CI­

dad de dinero q11e lo compense.

Sólo el ¡>er'i<liC'II) moral r;bjcJiv:~ble ¡,s del resone del perito y por dio al

dictaminar sobre el monto de los daños y perjuicios causados con el hecho punih.lr debe precisar si existe o no.

El ooño moral Objetil:able se dífercn­oa del lucm cesa me en su orillen pues el de éocc <:s la acción punible; es decir. un fen6meno de orden tna­terial fádlmentl! perdbible por los senúdos (púre;cmp!Q, la incap:¡cid:ld fJSica para trabajar), en IJUlto que el de aquel es de ca~crer mtcmo (la sen.'ldón de angustia, de dolor o de allicción, etc).

11. El monto de los Daños y Pe~uicios

Ala luz de la tcot l:! de las oblig~doncs. 1~ ley le lrnpcm~ al asociado el deber juridíco de no realizar ntng\ma de las

<'Onducm de$Cn!a.~ en la parte especial del cóchgo penal; en otros término.~. le impone una obli&a,i6n de 110 b(ICer -no ocasionar daño ni poner en l)<'l~s¡m los bienes jurldico<>. Si un asocia\lo incumplo esta obigación, surge una relación jurídica particular de <:stc frc-ntf' al sujeto pa~ho del hecho punible y/ <> al afectado patrimonial o moralmente, en talÓ!\ de la ettal 1<: pu«le ~ter exigid" 1~ obli ~aci6n de no hacer en forma ind~tccta. l'~ta fo l'ma de n•mplin1icnto indirecto de la obli­g,aci~n de rlo hacer. en m:ueri.a pen.'l l st: dcnonuna i>rdenmrzacl611 roparatorta en virtud de la C(lal, por ficción l;;g;~l, el dinero reCftlplna 13 oblig;¡ción que el infractor ya no puede <umplir en forma direCta debido ~que el punible es \Jn hecho híst6n'co irre­••efiiible.

Para dcll!rnlinar IJ c.tntidad de dint•ro que se c()!l.$tituye en indimniZJCión reparatOriJ se rcqtllcre ten<:r n>neza no sólo sobre b id<:!n­tid:ld dd ¡/(U/(1 ;11 OiCn jundiCO.~ino .<O))ft' e)

monto ~ klentkhd del [!t't'ju lelo que con el he~ho punible "' hubiere podido oca~ionar.

---- - --- IHVEST10ACI<>N T 0UAUOUO 5ocYAt • UM~t!.'O><!> Mtn.At •NJ!V,o Gt.-NAI).4 • •

i

•

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'

Tanto el dlllloc:omo el perjt.JtcioS!:. acredi\:3. en na!Utaleza y magnitud, sel!lÍil el principiO de la libertad probaJoria (Att. 253 del C. <le P.P.). con a1alquie ra de los mcd•os p!Ol>).IO­riOS. La cuan !ia del daño 3J bien jurfdico del patrimor>io económico -d~ño priv~do- y del perjuicio se a,·reditan también con el ¡ura­tr/(11110 O$fflllatorlo y/o con la pnteba pericial. según lo dbpues¡o en lo.< artículo.~ 55 y 295 ibídem y en el inciso 3" dd Art. 7" de la l.ey S'! de 1993.

~ ti jurmtumto estimatorio consagr:¡do en el An. 29S del C. de v.r .. según el (llalla cuanlla del d:lño al patnmonio ccorló­m rco puede ser l~ qtrc fije el pcr¡udicado b~jo j\lramcnH) siempr'C y <\rancio no sea hiiP\Il-\t'<Kia por c"alquiera ele los strjeros proccs~\cs.

la at\cm:ltión del sujeto p-.1$ivo del dchto hace pnteb--tdel '~or ,\e\ rl;r>l(> al bit'Tl JUrídico del cu:!.les\\tu~r 'i de 13 ruamía del petjulciQ rni.entr:7.5 -.:..:a (UIIIIIfn n.:> sea objetada por el sindicado. el ~poderaclo dt•l sindicado o el Agente del Mll>islcno /'ú i)lico, por e¡crnplo p<>< <' rt'Of ~'"'"e o rnal:l r.:. Sin embarg<J. e tt vi<l~rd del prit)­dpio de la prevalenci:r del <l<!r~.<:ho s"~­t.li>Clal -cl cual obhga a r.Je¡JI'C<> un ¡llano scc,rndario al aspccw rormal·, .~i el t'un­donario ,dvicrte error, dolo, rllrude o rnarufies13 injusti~1a t>n 1.1 olimución del \'alor del daño por part<" de la \'Íctima, de ofooo. debe ordenar la prlctic:a de hr., ¡>rucbiiS ne~'esari;•s para demoslrar •·~e )l"cho De lo conlr;trro debe anrdir al juramento c~rin1a10ri0 corno medio pMa <'onocer la <.1Janúa del dario y/o del prr¡uicio.

h. El d ictamen periclal

l'lantca<b b <>hjeción de la manlia dd daño , ¡o del !)<!rjl.•icio '>fitmad• por la •·ídima -r>by~ción q~.e debe haccrs<' en forma cscriu <!Xpr'C . ..:.lt\<lo en f<>rm:> d-~m )' f~<·Ó<3 b f:l ZÓO

d<'l "'paco- <• d<:\cm\ina<l~ pur d fLJndon:uio

j\ld\oal la necesidad de acudir al a\'21úo perici2l, ~lt debe ordenarlo con d frn (le Qb\enef. por este medio, el conOCin>rento sobre el \'3lot aCtualizado del da río y/ O (le los perjuicios. segün tl caso.

l) El Av/litiO rlt'l Objeto Material de l<l 111· f rafctt}n. En el cvcmo <W po.milll~s ~)\\\m el p:llrimonio emnórnic(J (hurto, esl<lfo<. abuso de conftMza, etc.). la detcrmin~ dón del valor del daiio ;e hace ;r. 1ft\·~, tlel av:alúo del objeto matcnal de IJ in­fracción. e; decir. <le la ··aloradón d.: IJ cosa muellle sobre la cual rcoe l;o con· dU<"ta y sobre la cual se ~·ristalro IJ vulneración dd bien jurídico

,\vah•arel objeto rmrtcrial de la inlra<'(i(Jr> <:>s <llf~r<:nte '' cuarJiificar pericialmente 1\'lll d~•'ros y perjuióos o'a."onados cor1 el he~ho punlblc

IJJccr el \'~hio ~titial del objeto m~t<·· rial de IJ rnlraetión sisni(ka dclomrnnar cuál es ~~ ,·alor cea\ de lo.< bieoc~ ~o!>rc 10$ (\tiC ret·a.., el componam.icnl<> prohi­bido pcnalmcntc. en rnon~~ nat•nw~l lt!fliCJldO CJl cuenta únlcatll.<:.t\lt.! r~<:l(')\C~ objetivo$ ta les <'Om o sus caracW<i~i~as cspecillcas (l ¡~mDO de u., o, C>lad<l d-.: conservación, dimensiones. P..,.".\0. canlt dad. mc<lid.l. materi;tl del que est;i Wt~~­

ouido. pr<x-cden<'3 -n3cional o '"'""' . ladO·. cte. l 1.1 époc:-J de 1~ hech'"· <"1 Jugar en donde se cometió. En lo' punrblcs wr>rr:r el p:urrmoruo t>Conúnu . t.·o, <:omo rase dijo atrás. cJm.i~m<J a,·;:~)(I<J se: cotl,IHU>''-' en presupuesto nctc:.;lno tlel di(1:lnK·rl perici;rl sobre d monto dt• 1• rfldcmn rt~crbn ya que en esto.S ~.JsQ,, e\ v!\lo1 l\cl d~rño al bien ¡uñdrco e' IJetor \mp~.lf\.\1''\\l" f.J;l n1 efectos de ha t.;&Saclón del P"IJ\'i'"' rn~lt:tk~l <'OO.Stiturdo por~~ daño emerscn1e y "\lucro ce,ante

El d\'altlo dd ObielO material de la mlrac dón ncC'Cslri:unenle se aju.•·;,t.a a. b!. t!Mf\l<:'"" 1ura. rt'<fllJ:"~ItOs y ptincipíos que m!t.l~ l\\í\t\ todo dictamen pericia l.

SAN!AI~ DE 8oc;c•; Cot. • VotUMf' 5, NO. 2 • Juuo · PrcrfA(Ul 1 qq4 ---------

2) ])tctamen Perictal de lll butemnlzacfé•t A quien es desi¡¡nado ¡;ctiro pata que El dictamen pericial de la indemnización haga l¡ esú=dlm de loo danos y per·

i es la estimación clara, precisa, detallada juicios o<:asionados v.gr. con un punible y fundamentada que hace una persona de lesiolles personales no se le puede ~ quien el funcionario judicial designa eJdgir que 1cmga coo(lcirnjeotos <!Speda· para que le sumíníslre el <:OOocimienco ~ en el icea de la medicina pero sí qUe actualizado so() ce el valor de los perjoi· e.<ll' ~n capacidad de comprender el cios materiales y morales o<:asion:>dos contenido del dictamen medico roren.'le, con et hecho punible. requísito condición para poder realízar

Como se ve, el dictamen pericial en esle su trabajo pues en esa rnedída tendrtl claridad sobre la naturale?.a y la entidad

c:Jmpo se ajusta a la trilogía que carac· del daño al bien juridie<>: la íncapaeidad; ¡eriza la esm•ctura de todo m~edío de las secuelas, e t<:. y en consecucnci~ pn•cba: sujeto, objclo y procesalidad. El p<ldr~ detenuinar ace rtadamente lo$ sujet() u 6r~ano de pru~ba es la persona gastos que el daño y !as secuelas impli-na rural e¡uc por tener los conocimientos. can: la merma en la capaddld adquL~lU••3 la preparación y la el<periencia indí$pen- y pot ende el lucro o::sanre. sable es designado perito por el rtSCa! o por ~1 Jue7 según la etapa del proceso, El oü¡eto del dtc:tamert p¡mciaJ es Ja Jrifor· mediante una detisl6n de si m¡* rtácnire. rtllleidtt que el funciorurio judicial no 1::n mat<:ría de ~<:ión de petjuieios el conoce: el valor actualizado de los díetamen debe «:nd..rlo una petSOrul con pet)tlidos tanto materiales como mot:~lcs e<>nocimu:ncos <:sp«ia/es. Esros conocí- ocasionados a la víctima y/ o al perju• micnros son (un<tunem:~lmenre rodos los dicado con un determinado hecho rc:;laeioo3dos con el tema que trtltamos

put>lbl~. en esta~ págiMS ya que qmen no díslin· gue la n;Huralc>.a ju•ícbca del perjuicio ú1 ¡>roci!Safltlad o la ritualidad como ele· 1111ller;a¡ y deJ¡x-rjuicio 1\lOral no puede

Jl'l(~r\10 estructural de este rn~diO de pr~lC· ptOJlrllldar~e sobre su valor: quien no ba ~:st~ comput:sta por la desigM<;-ión distin.11nc r.ntrc d~í\o emergen\~ y lucro 'OIIlU pt:citv f'VI IJ~O~ del fuJleiOillri() cesante no podrá cuanlificatlo: quien no sal~ qu~ es el d<tíio moral objetivado,

judicial, la posesión a m~: el mismo fun-

tampoco podri ~sumarlo monemria· ciona11o prestando juramento de wmplír

mente: en sínteois ~on coooomieocos en bien y flelmcnte la tarea que se le

mlteria de derecho. Por est3 r:t~ón !as encarga y 13 precisión por panc del mi.~-

peiOO!\~ dcsignJdás CQrno $ut(:r0fs de mo funcionario del ob¡.,ro dé !a pé'rir;, -

pruetn para escc efe<.'o son !o5 abogad<'.s dón.

y (()S escucli,•nres de !3.5 farulrades de :S} Req1Hsftos dd Dfctanum Periei11J Las derecho qui<:l'l<ls por!;~ natu13lel!a de la

profesión rk-nen además conocimientos cond1ciones son de orden form~l >' de

Msicos que b mi.>Jn;1 tarea requiere en car:lct~r suscll!l<.i3l.

marcria clif<·rent~ al derecho -realizar Desde el pun1o de vista formal el dkta· o¡.>er~cioncs matcmáütas elementales:

sobre l¡)s p,astos que, seg(l n el sentido n><m pcrid~l d~be conwner por lo menos:

comCu1 y las reglas ele la experiencia. "··El cnc-al'X"7.:1mlento. En e l que &e dcsig-

dcmand<•la pmducción de un de\ennina· n~ t>l flllld\>nalio. la rererenda del pro-

do dai\o o un bieo )uñdko: el valor de ceso y la identificación del perito: b.- f.!

determinados obíctos; el cosro dr: <>bjeto del dk1amen. En cuyo acá pite el

determinados servido.~. e¡c.·. sujeiO de prueba debe precisar la tarea • 50 1Nvi5110A<tó" v Du.u•ouo Soa•' • u .... ~._o MM-<.x • N>JEV• ew....[)A· •

•

•

de la que se va a ocupar;<:.- E! acipl\<t sobre los elementos de juicio que le se1Virán de base para hacer la tasadón. v.gr. el dictamen médico forense, el jurá­mento estim~torio del denunciante sobre la cuant!a dd daáo al bien j"ñdim, ele.; d.- Un titulo en el que se precisa en fonna d111\\ la e~'\imación económica de los pcljuidos dístingtJiendo los capitulas de: 1. PerjUicios ma/eria/es y ~quí: a) Daño Emergente; b) Lucr<i .ccsame y e) i.a acwaliz.tción del valor de uno y otro; y 2. I..os perjuicios morales en cuyo acá pite debe precisar si ex'/ste o no daño moral objetivado.

El dk1a1nen pericial puede Ulcluir tJJm· b;~ wn capítulo reladcmado con los ¡;as· tos que dem~ndó el proceso conocidos como ·las costas y Jas 3&encias en derecho ...

E! \\cd>o de que la accibn in,1erl1J)izatoria por la conducta punible se adelatlle b~jo la misma cuerda del proceso penal no significa que quede tarnbié.n tol.;llmc<'le amparada por el principio de grc1tuidad ()\le 1ige la actuadón penal tAn. 19 C.'P.) pues de todas ma11cras se !l'ata de una <l1..dÓJ'e dviJ qut: ~ tt!g-ula fJO' l tt~ 1~0nu~1> del Código de Procedimie<>to C:ivil en cuanto ~.;tas no se opongan a la¡; previ­siones del CMi¡¡o de l'rocedimienlo Penal (An. 21 C. de P.P.). 'En conse­cuencia, este hecho no es óbice para que el j uez, en el evento de sentencia condenatoria e n Jo que haC<' estricta­mente a \\\ •~dón civil, de ~¡)\kación a )OS /HtS, .392 y 39,3 del C. de P.C. QLIC

regulan todo lo relacionado (:Un l~s costas y l~s agencias e11 derecho en el proceso civil,

Las costa~ apu.nran a c:c>mpensar todos los ga.,c:;lQS en que nece.sariafOcnte innr· rre la pane civil denrro del procese pcn:ll para lograr la demostración de su pretcnción, C<)tno el <'\\lor dd tf':lnspor·

le de la Víctima, del perjudicado o de los testigos en rat.ón de las diligencias que, para efectos de ~creditar Jos per­iuicios, se p<"\c\iq\le" deml'o del proce­so; el costo de fotocopias, 1~ correspon­dencia; la constitución de pólizas; el pago de secuestres, etc. Las agencias en derecl•o corresponden al valor de Jos honorarios de los apoderados judkiales de 13 parte dvil. Tamo las costas como las ~gencias en derecho deben ser liquidadas por el .secretario del Despa­cho Judicial y aprobadas por el Juez; unas y otraS debe1\ ser pag~das por el condenado a favot del demandante de h' indemnización.

Sin emba.go, en la práctica eljue~ Penal rlO se pt·ünuocia sobtc el panku\'J.r. razón por la cual t•a hecho carrero la i\Kiusión de lo$ g'dSlOS procesales en que incurre la parw dcrnandante dentro del ('.a píl!llo del dtJ•io emergrmte, lo GUal, si bien no se a¡u~l.:l esuictamenle al esque­ma c¡t•e hemos planteado en atención a ()\>e ~s gastos no constituyen perjui­cios directos derivados del hecho punible. pues éste no es causa inme­diata sino Olccü:ua, excepcionalmeme &e aCt:JJ{<\ lhlda la • daú(m dt!' (át.~~JiU..td que B">l'thn esos óesembolsos con lo acción típica y porque desde el punto ele vista de la c'<juid;~d y de la justicia no c~ste motivo de objeción, a m:i.; ql•l! permile definir en la sentencia con· d<!nalolia el mon1o \()1:1\ q\le <lebe pa­gar el condenado 3 ravor de la pane civil }' el restablecimiento integr~ l del derecho.

l)e&.!e el pun\Q ae ,i:\1~ su~\t\ncial. el dictamen pcrlci:tl det.x: ser rund:<menl;l­do, esto quiere deC'if. que cada u no de los titulas. C'apítulos o acápites que lo conJOrman deben aparecer daros, pre­dsos y C(>n la eJ<posiciÓ\'1 de >a>.o"es o de mocivos suficientes.

SANrAf1 or !looorÁ CO<. • Vo.uMEN S. No. 2 • Juuo • D!<lfMUE 1994 - - - - - - --- 51

S2

l.a fundamentación del dictamen pcn~ paree nl!\.--esartumeme de la dislmctót\ conceptual en1re los di[erenles aspecws que compon~n la indemnización; no e6 suficiente que el pen1o cxpr~se la canti­dad en la que 1asa, pot ejemplo, el lucro cesante, requiere adernás que precise qué entiende por lucro cesan1c. la fun­damenl;ld6n alude también a 1~ cxpli­cati6n sobre la técnica o el mé1odo empleado p~r3 lll!gar a utla dclermi~­da conclusión: las fu~tes que consuh6. la asesoña <¡ue requirió. eJe.

Para dal>orar el diccamen en forma fun­damentada ~n wdo aquello que no sea materia de <lcrccho, el An, 237 del C. de! P.C. -el ettal e;, aplicable en ma.tena ptnal en vinud del OtUOOioui de tnlcgra­ci(>n (Are 23 del C. de !>.P.). le cb l1l>cnad para infornnrsc, cons\tltar y a.scsomrse.

La cslirnacibn del perito hace pt'lleba del ho:d1o que irl!eresa !.1 proceso s6Jo en la rned"la en que rontenga la su.~tentación de cada una de las valoradone' qu<: en térmtnú5 e,;trictal'tl<.'nle económicos hace. 1-a eficacia eh: cs1c m<:dío prohatorio es detc1·minada en el momento en qu~ el 1\tnetonano ¡uciiCtallo ,-aJora y dctemtlna >i lo acoge o no. en atención a que, de un lado, d dtCiamen penda! dehc ser llpteóado por rl funcionario ¡udicial frente al conjunlo dt: las dem~s pruelras que obr:m en el f?ftX'DSO .0~ ~Cttt·•·do con la; reglas de la sana cntica- (An. 251 del C. de P.P.) r. de orro, la ter Pen2l Ad¡ctiva (An. 273) consagn 13 ·firm<:a.. prccis16n y calidad de los fund1mencos­~omo critcr1o de v:tlontc6n del dic:nmen pericial.

Ahora bien. es de la esencia del c.licu­men la fund~ci6no e&o es muy distmto a qu<! el pento deba •probar su cstlroa­crór"'. Pedirle al ¡:eriJo que pruebe el run· da mento <le su vai<Jl'acibn. por ejemplo exigiéndole que ¡tp<Jn" fr.ctura<, cOtiz.?-

ciones o cosas semejantes, o prohibirle que incluya determinadCts gast06, signi­lka desconocer la run~i6n del perno como sujeto de pt'lleba. Si éste incluye y valora romo parte del dafto emergente, en un caso de hOI)ucidio, la caja mor· 1uoria es porque la parte civil no apenó la prueba corre5pondi<'nle; porque el funciona rio judicial requiere de esa inCorrnación par:< poder cumplir con el Imperativo le¡¡al de condenar el pago en concreto de la indemni>.ación y porqtre ese gasto tiene ncccsana relación con el daño al bien j\1ñdlco de la ·~da, por ende no tiene ningún scmido qu~ el funcio­nario judicial o los s ujetos procesales r~·paren sobre el p;¡rtin•lar con el argu. mento de que ese hecho no está probado dc:ntro dct proceso -en lo que ,..; ruede reparar es en el ''alor del objelo- pues dcsc<moccr <~e (;4SIO eqtú•·alc :1 negar la ~xistencia del m~1cno. Pedirle al perito que pruebe cllundumento de su valor•­ci6n es tanto como pedirle al testigo que pruebe el fundamento de sus afirmado· m.·s. FJ pent<>. al igual que <:1 ICSiigo, es órgano de prucha y por ello, si d~ las rM;oncs en !:.~.9 que funda $\J petitadón, el funcionario ¡uchcial debe valorar el •Jú.'ltull~ll r d~~rtain.tr si le oftct..v: o no t>l ronoeími~nro ,obre el hecho. el dato o la infonna<,ón que <-orlS!;cure ob~'to d~l proceso.

4l f'rlJJctpios quo lnfoml(ln lo Prueba l'rtriclaL Son los ntisn>06 que informan !Oda la aC11vidaC! probatoria. P.mpero. dehe hacerse énfasis en aquellos que se constituren en e;pc.'<'iales dada la nalu­raleza jurídic:t del dic1amen de perjui· el os.

a Necesidad de ltt Pme/xl En •·irrud de éslc. el functonano Judicial sóbo puede <kcfar.lr 1.1 <!xiscencia ~ moneo dt: los perjuicios SI aqu<ólla y és1c h:m sido acredil~dos dentro del proct:so rol\ IM pntcb:~' ·l~gal. rcguhr y opor-

•

•

wnamente 9Jlcgadas a la aCtuación• (i\n 246 deJ C. de PP.). F.sto un plica que el conocinliemo de hombre del Fundonano Judidal no C5 .~uf.acme

par¡¡ determinar la natucatcu y wantía de la indemnta<:v~n. El titu­lar de la Juri~diccióll ¡l\lede tener c<moc-hn ientD dar o sollte tO<IO~ ~(\\le ­

llos !(asws que pueden <:onstiluir d.1ño emergente en un ¡~1n\bk de­termirudo: empero. M den11o de la acrwción no obr:l 1~ proeba. bocn P<"<l'·'e la \'Í<:\im~ o t~ perjvclica.:lo no lo estimaton en 1~ tt:rmino.s del 1\rt. 29"> il>\dem, o porque la parte ~i~il nr, la aponó. o porque las prac­tkad:~s p(}f el mismo funcionario no artl>j~n d;triclad sohrc ~l punto, el \mr.~t"rativo. conforme :1 lo d.ispuCMú en el Ast. 55 dd C de JI P es que orócne la prueb a rx-tidal P~'" acf­quinr por medio de t<t~ el conoci­mocnto sobre todo.' y c-adl uno de los aspectos que ¡)ueden coosdrwr el perjuicio mawnal. el p<·rjuicio moral y el corrcsrorJdt(' nte monto ;tc-tualizado.

t::n tal virtud, teniendo <'ll cucr\U que 1~ nlllll':lle~ \' b cua.ulí:l. d~ lm. ¡'ler• ¡uicios se pueden "''r>:dll1r ¡><n u<&!­qui~r medio pr.>balorto S<:gún el principio de la Lr~c\:14 <1\, Pl\lcba con:>a¡;rado en el .\tt 2~~ 1hide•n. b pruelhl peridal se con.-.1•1\IYC bi••n l.'1"l

pmCb3 compt~nv..:nt~\r,,\, t.:n \.,_,-.lnto roh•J.SV!C<;: 1-~s den1.1s o l'n pnl(:ln . supk·torb.. en b nwd•tb t·n que llene ~( \'~<;\O pn)\)·,no~·{o sr>hl l' b n;Hura­lcu y monl<> de los pcr)uici"s.

s, o<<lenada b poueha pericial el )'Crho no haiiJ dentrO clcl J(ervo proOOiorio los elemento,< de juidos m.rumos que reqwere pll"d war los pcr¡uicios dc.:bc. <m lornm cs"ita, m~ nife>t:lr esa ''i"un.;t:tnna JI Punciorlario, tndtC:trl<IO cuál !.'·' la

infocl\ución que requiere p~ra el efeao: en e~ta f01ma el r-unc,onano Judicial puede, ~¡ la oportunidad p!O(:~al ~e lo ¡x:rmire, ordenar y practicar las pi\Jebas que con.liderc pcrt.inernes y una ,-e¡¡ evacuada!> pe­dir~ ~l perito hac,;r 1> tasación con ba~e en ellas.

Asl l~s cosas. el ·•rbitriurn iudkt5· con.~a8r:<dc> en el ArL 107 del C. P. para efecto de los pcrjuit'OI< 1/latl'­

rlaii'S sólo opcr:t en lomu rc,idual; ••ale dcCJr en la medid:! en c¡ut- no sea pos1bk ras;~rlos pericialmente potqu~ •00 ('Xi;tC dCniTO <fel pCO<:C.'O

t>ase .wlktcntc-.

Al i¡;u:1 l qut: en cl caso de! arbitriunl iudi<·i,¡ para efectos del rer),.,<:\t) moral 'Uhjetivo, ct arbillio <:\el juL'? p21'3 det~:rm•Mr <1111\0!\lO ~ los per­jOicoo> ma~nales esli son'lt:IIÓU <k: un !ad<l. ~ los Critcn<xs que ll m"n~:• le)' csub!ccc --l)atunleza del hed1o. l:< oc-.•¡Y•cit'm hlbitua! del olcnclido. 1~ &\>pr.!~i(m o Jo rnem1:1 de l~ C;lp;t<'t•

dltd prt><.h>cliYa y los ga.,tos oc:>sion:.­cl<.)~ por razón del hecho pu niblc-- y. d~ ovo, lll limite máximo de ~ ()(¡() ¡¡10mo; oro.

h . llllf><trclttlldllfi Conforme a .:-,te, el pcnw de~ •er tD!almenre ajeno J

106 ~u¡<•to.' proces91e., ¡• al i'C'ult.o.:lcl del proc·e.<o -.:o puede s.:r peroto Cfttt<'rl, en form;o dttecta o inditt·cla . llene lmcró en el pi'(>C.,so. Pam 111:. 11· t<:'rll'rla d,4lcncüt de <:sw pnn, •pit> ht Ley ('Onsa¡¡ra. e n relnción <'011 c.~l<'

•ujt't<• de.' prud >a. las m•~m:.s <'atJ<:W'-S de J01¡>e'dln1cnto y reC1JS~ci6n prc:"''" !lis parJ el furlciOn;lriD Judici;JI 1 ;\ru. ro_:¡ r Z65 del c. el<: P.P).

c. Pu/)ll<'l<i<lll &gún este pnn<'ip<o. IOI> suietn5 proce.<w.lcs <"e be\\ \el~{ 1>¡)\.'11'·

runtd:rd de conocer el contenido d¡,

S4

fa peritación. La pub!ici\lad se da a partir del momento en que el Fun­cionario judicial, previa ~onsta¡,¡dón de que el <lictamen reúne los requi­sitos de fondo y de forma cJcigidos por la Ley, c<:>rre traslado por e! tér­mino de: cinco días a lit\ de que los sujetos procesales puedan pedir la aclaración, aropliaüón o adición del dictamen.

d. Cmuradicctót~ En virtud de este prin­cipio, los sujetos procésales pueden rt:>rar de demosLrar que el perito incurrió en error grave al hacer la eslimaciónl!c(mórnlca de los perjui­CiO$ y en conset:nenCia oponerse a que esa estimación .se tenga con'o medio de ptuet>a.

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·-.