El Gorro de Cascabeles

Embed Size (px)

Citation preview

El gorro de cascabeles, la irona de la emocin juan martins

Discurso y continuidad es lo que entendemos de la experiencia de la Compaa Regional de Teatro de Portuguesa con su espectculo El goro de cascabeles de Luigi Pirandello en versin y direccin de Anbal Grunn. Se establece una continuidad porque se dispone, como en otras oportunidades hemos sealado, de un dominio de lo que para stos ha significado la representacin teatral: disposicin sobria del dispositivo escnico, donde cada elemento escenogrfico est creando su relacin sgnica con el espacio: tres sillas simtricamente dispuestos hacia la composicin metafrica del poder: la casa, el hogar y la familia (la madre en su sentido matriarcal y de dominacin) como (de)construccin de los valores, de una moral que slo se sostiene de su relacin antpoda con la sociedad. La aparente homogeneidad familiar ser el condicionante para sostener la mentira, el engao y la traicin. Nada se rescata entonces de aquellos valores burgueses de la familia los cuales pretenden sostenerse. La emocin de los personajes no es ms que el sentido simblico para la definicin de lo que se nos descompone: la sociedad. Y, en la versin que nos hace Anbal Grunn, el pas. El pas desde la otredad que impone el relato teatral es una constante (de)construccin de valores y de su propio ritmo ideolgico que atiende a su vez aquellas emociones a las que hago referencia. Las emociones (tanto en la representacin como en los personajes) formalizan este orden de la familia. Y a partir de aqu es fcil comprender que el signo, con el cual se representa el cuerpo escnico (la estructura actoral del espectculo) de esta emociones. Y como tal, corresponden a una definicin de la alienacin del individuo sobre aquel cuadro figurativo de la familia o el arquetipo con el que se sustenta: la mentira, identidad del poder. Por tal razn, Grunn se vale de este nivel del discurso dramtico para aprehender de Pirandello aquellos aspectos conceptuales con los que se identifica para decir hasta dnde adquieren vigencia tal discurso dramtico en la trayectoria de la Compaa Regional de Teatro de Portuguesa y su inherencia en un sistema esttico dada las condiciones y sociales y polticas del pas. Esto es, un constructo esttico de compromiso con el teatro venezolano. Cada signo ha subrayado por igual a cada instancia emocional con la

que ahora se han compuesto el sistema ideolgico del pas. En este sentido estamos ante un teatro poltico. Pero considrese tal afirmacin en el mejor acoplo esttico de la palabra riesgo, discurso y tensin dramtica sobre la representacin. A los espectadores se nos va recreando aquellos niveles emocionales de los personajes dentro de una visin consciente de lo que significa el dolor, la traicin y, como trato de definir, la mentira. Adquieren ahora, en la interpretacin que hace el pblico un estado consciente de lo real. Puesto que el dolor no solo es del otro que lo representa sino del que lo ve: la imagen que estar representada es una figura mental del espectador, pero tambin, es un estadio de conciencia. As que cada espectador ejercita su racionalidad, sabr que al rer se encuentra ante una realidad de s mismo. Todos los signos aqu dispuestos apuntan hacia funcin poltica del discurso. Nos guste o no. De all su provocacin. Sobre este nivel de riesgo, el elenco sostiene con gran responsabilidad los niveles de actuacin a los que nos tiene acostumbrado: proyeccin de voz, dinmica del movimiento y ritmo en el desplazamiento. Podran existir algunos aspectos altisonantes en el uso de la voz, pero esto no es determinante en la estructura actoral. Es muy sencillo de comprender, el ritmo y la dinmica de la puesta en escena se enriquecern en una funcin detrs de la otra. Una noche de funcin nunca es igual a la otra. Lo que no ser fcil de conseguir es con lo que aqu nos encontramos: capacidad histrinica, ritmo y fuerza dramtica. Cada actor y actriz desempea su relacin con el espacio y con lo que est simbolizando. La simetra del espacio est relacionada con aquella metfora del poder y su sistema de alienacin a la arriba hacia mencin. Cada dispositivo escenogrfico en su lugar, sin excesos, mostrando lo que se tiene que hacer cuando al teatro de texto nos referimos. La dinmica de su representacin fue adquiriendo un ritmo con el que nos bamos identificando: la gestualidad, los giros del movimiento corporal construyen sus arquetipos, por ejemplo, la representacin que hace Carlos Arroyo de Snchez: la condicin del dolor, de la prdida de la condicin humana por la sustitucin de sus valores: el anciano se construye en el gesto, pero al mismo tiempo, desalinea al espectador de la emocin que le produce: la conciencia y el uso racional de estas emociones. Lo sarcstico, lo ridculo, la pasin son todas emociones que se dispone de un personaje en otro. Y cada actor y actriz as lo componen sobre el ritmo de la representacin, con lo que el espacio escnico queda definido. En este sentido hay que destacar el uso de lo sarcstico por parte de Jess Plaza en su rol de Delegado Espaa, mediante cierta caracterizacin gestual que nos induca a fortalecer el sitio ridculo que despea los lmites de la ideologa del Estado como escenificacin del poder y ello exige una disposicin actoral que ya forma parte del discurso del actor.

2

Algo importante: las actuaciones se mantienen sobre un mismo nivel de la interpretacin verbal del relato teatral, otorgndole estructura en el orden de la comedia. Un ejemplo de ello, es la interpretacin sobria que hace Elizabeth Prato de Ramona, confiriendo contenido al gesto para el placer del espectador, adems de un uso correcto del espacio. En estos momentos podra desglosar un anlisis en torno a los actores de la Compaa, pero el lmite de estas pginas no me lo permite. Prefiero, en cambio, asignar aquellos alcances discursivos de la obra. A mi juicio, una obra de riesgo que tanto est necesitando nuestro teatro, la cual la suscribe en un compromiso y pasin por el teatro por parte de Anbal Grunn. Siendo as, este riesgo esttico me ha producido regocijo espiritual ante el hecho creativo. Guanare, 9 de octbre. de 2010 Emociones Caricaturesco Fantoche

3