Upload
joao-p-grava
View
213
Download
1
Embed Size (px)
DESCRIPTION
Sobre verdade e método.
Citation preview
1
In R. CNSULO (dir.), A cinquenta aos de Verdad y mtodo: Balance y perspectivas, Editorial Unsta, Tucumn, 2011, 77-86.
El milagro del xito de Verdad y Mtodo
Jean GRONDIN
Nuestras vidas estn llenas de milagros, empezando con el milagro inmenso de
que el mundo sea y qu nosotros mismos existimos. Lo olvidamos demasiado, a
pesar de que los cientficos nos aseguran que se trata, en ambos casos, de
inverosimilitudes estadsticas increbles. Eso es verdad de pequeas cosas como de
los encuentros que orientan y cambian nuestra vida.
En este cincuentenario de la publicacin tan impactante de Verdad y mtodo,
quisiera hablar del pequeo milagro que constituye esta obra y su xito asombroso,
naturalmente en la modesta medida en que se pueda hablar de un xito en la
filosofa. Es seguro que no se trata de un best-seller que se pueda comparar con
obras de literatura, contempornea o clsica, tampoco con otras obras inevitables de
la filosofa. Se venden cada ao mucho mas ejemplares de la Republica de Platn,
de As hablaba Zaratustra o obras de Sartre y Camus. Sin embargo Verdad y
mtodo se ha establecido en los ltimos 50 aos como un clsico, que form
escuela y aliment numerosos debates filosficos hasta ahora.
Un libro redacto bajo presin
Lo nico que quisiera recordar aqu, tal vez en modo histrico, es lo
inverosmil de este xito inesperado. Es tambin un xito que el propio Gadamer no
esperaba. Como lo ha contado a algunos alumnos suyos reunidos por la ocasin de
su centenario en el ao 2000, y lo ha relatado varas veces en textos y entrevistas, el
2
libro naci casi por casualidad y de manera un poco forzada. Hasta la publicacin
de su libro en el ao 1960 Gadamer era un honorable, pero modesto profesor de
filosofa con buenos alumnos, pero que lamentaban que su profesor era
desconocido. Andaban en otras ciudades, diciendo que trabajaban con Gadamer,
pero todos preguntaban: Gadamer, quien es este? Entonces ejercieron una presin
sobre Gadamer afn que publica algo, cualquier cosa de mostrable, sin embargo
seguramente no una obra maestra del nivel de Ser y tiempo o de la Fenomenologa
del espritu. Nadie esperaba eso de Gadamer. Gadamer tampoco. Haba tambin
otra presin : la de su nueva y joven mujer. Diriga una revista, muy buena, la
Philosophische Rundschau, que Gadamer haba un poco creada para ocuparla1, una
revista dedicada a la discusin de publicaciones recientes en filosofa. Y le pareca
a la Seora Gadamer que su marido deba tambin producir algo, para establecer su
nombre (y por supuesto el suyo). Cherchez la femme, dice un proverbio francs,
que tal vez se verifica un poco en el caso de Verdad y mtodo. Durante diez aos,
de 1950 a 1960, el pobre Gadamer tuvo que pasar sus vacaciones escribiendo el
texto tan esperado, pero que le cost tanto. Con una inclinacin o pereza de
profesor, utiliz naturalmente sus notas de clases para redactar algo, especialmente
sus clases de Introduccin a las ciencias del espritu que daba desde 25 aos, en
Marburgo, Leipzig, Frankfurt y Heidelberg2.
1 HGG, Selbstdarstellung, Gesammelte Werke, Band 2, p. 494. 2 Estara loco hablar de la pereza del autor de un libro de 500 paginas, pero Heidegger haca parte en los aos 20 de los que quedaron desilusionado por la falta de trabajo serio por parte de Gadamer. Como le escribi a Gadamer en una carta del 14 febrero 1925, publicada en la Jahresgabe der Martin-Heidegger-Gesellschaft, 2005/2006, p. 28 : Wenn Sie nicht gegen sich selbst hart werden und sich die Arbeit abringen knnen, dann tuschen Sie sich darber, was
Ihnen in der ernstgenommenen akademischen Laufbahn bevorsteht . Despus de esta carta, Gadamer dudo de su aptitud para la ciencia y la filosofa, como lo escribi a Bultmann (carta citada en Hans-Georg Gadamer. Una biografa, Barcelona, Herder 1999, p. 164-165). En una carta que escribi cuatro aos despus a Bultmann, el 9 de Avril 1929, entonces despus de la habilitacin de Gadamer, qued Heidegger desilusionado, porque comparando Gadamer con Krger dijo creo que mas va a salir de Krger que de Gadamer (trotzdem glaube ich, dass aus
3
Un tema bastante extico
Eso hace tambin parte del inverosmil del xito de Verdad y mtodo. Quin
hubiera pensado que un asunto como l de las ciencias del espritu hubiera podido
interesar tanto? Es un tema digno, pero bastante limitado en la filosofa preguntarse
sobre la justa manera de entender a las ciencias del espritu o las humanidades. Este
asunto haba interesado mucho a Dilthey, que haba publicado una famosa
Introduccin a las ciencias del espritu en el ao 1883, que hubo un pequeo
xito y una cierta posteridad en la filosofa europea (Misch, Rothacker, Wach,
Betti, Aron, Gusdorf), sin producir ningn terremoto filosfico. Se trataba adems
de una problemtica que el propio Heidegger, el maestro de Gadamer, haba
calificada de secundaria o derivada en Ser y tiempo, y quizs es lo que Heidegger
pudo pensar cuando encontr por primera vez el libro de su alumno Gadamer). Se
puede decir que la temtica de Gadamer haba prima facie algo de epigonal.
Es seguro que Gadamer brindaba mas, mucho mas que una epistemologa de
las ciencias del espritu. Propona algo como una hermenutica que trataba
tambin de la obra de arte, de nuestro entender histrico, del lenguaje. Sin
embargo, el termino de hermenutica tena por su parte algo de raro, en los dos
sentidos de la palabra: nadie lo conoca y sonaba un poco curioso (tiene tal vez
algo hermtico?). Por Dos, que es eso? Antes de Gadamer no haba mucha
gente que lo saba, o como lo ha dicho no s quien: antes de Gadamer nadie saba
lo que era la hermenutica, y despus de l nadie sabe lo que no es. Eso es tan vero
que el editor de Gadamer qued sorprendido cuando Gadamer le propuso un libro
ihm mehr herauskommt als bei Gadamer; Rudolf Bultmann / Martin Heidegger, Briefwechsel 1925-1975, herausgegeben von Andreas Grossmann und Christof Landmesser, V. Klostermann, Frankfurt a. M., 2009, p. 110).
4
bajo el ttulo Rasgos de una hermenutica filosfica3 Qu es eso, pegunt su
editor? Gadamer ha pensado, con su mujer (), a otros ttulos, entre otros
Entender y acontecer que suena mejor en alemn, Verstehen und Geschehen,
pero que recordaba tal vez demasiado el Creer y entender de Bultmann. Al final,
Gadamer hall Verdad y mtodo . El ttulo enigmtico qued, a pesar de que el
libro mismo hablaba muy poco de verdad y mtodo. Sin embargo eso no es la tarea
de un ttulo, deca siempre Gadamer. El xito de un ttulo tiene que ver con su
carcter misterioso y secreto: Ser y tiempo, Critica de la razn pura, Cien
aos de soledad.
Eso hace tambin parte del milagro del xito de Verdad y mtodo porque no
puede preguntarse si el libro espeso de Gadamer hubiera conocido un xito
comparable bajo el ttulo Rasgos de una hermenutica filosfica. No se puede
saber, pero se puede pensar que no. Como lo recordaba recin un alumno de
Gadamer de este tiempo, Dieter Henrich, l esperaba un libro de Gadamer bajo el
ttulo Hermenutica y dialctica, que son naturalmente temas muy discutidos de
Verdad y mtodo4. Tampoco pensaba Henrich que un tal libro hubiera conocido un
gran xito con un ttulo tan acadmico. Como se podra decir en la jerga de hoy, el
branding es todo, tambin en el mercado de las ideas. Se puede lamentar, pero es
as.
Un autor desconocido
Un xito no se poda verdaderamente esperar de la persona o de los asuntos de
Gadamer. De la persona porque no tena ni siquiera la fama de ser un pensador muy
3 GW 2, 493. Este titulo se ha vuelto en el subttulo que queda un poco escondido en la edicin catellana de Verdad y mtodo. 4 D. Henrich durante la discusin publica que tuvo lugar en el marco del congreso Text und Interpretation. Gadamers Hermeneutik und die Literaturwissenschaft (Marbach, 27 marzo 2010).
5
creador, que se podra comparar con su maestro Heidegger, o con Husserl o
Nietzsche. No haba sido tampoco un profesor muy productivo. Desde su tesis de
habilitacin del ao 1931 sobre Platn, un trabajo interesante sin ser trascendente,
no haba publicado ningn libro y bastante pocos artculos. En nuestro sistema
universitario, hubiera sido difcil para l conseguir la titularizacin. Se podra decir
que en estos das benditos se publicaba menos. Era mas o menos el caso para un
profesor de Heidelberg. En comparacin, el antecesor de Gadamer, Karl Jaspers,
haba publicado un montn de obras importantes, a veces polmicas, que suscitaron
discusiones, y el colega de Gadamer, Karl Lwith haba tambin producido obras
muy respetables, tambin bastante polmicas (como Heidegger: pensador en
tiempo de destreza en 1953). Los dos eran adems personajes pblicos. Gadamer
era del todo otro tipo de profesor. No quiero insistir demasiado en la pereza,
porque implica un juicio de valor que sera absurdo hacer, pero prefiera la
discusin libre, el dialogo, la lectura (era un lector muy abarcador, como Leibniz
que deca que aprobaba casi todo lo que lea5) y tomarse su tiempo. No le gustaba
tanto escribir, tena tal vez lo que llamamos en francs la angustia de la pagina
blanca (o el bloqueo mental del escritor), y, como lo confes, tena algn miedo de
la proximidad de su maestro: siempre tena la maldita conciencia que Heidegger
me miraba por encima del hombro6.
Gadamer no pensaba tampoco que su libro era tan original para ser tan
exitoso. Bajo la presin de sus alumnos solo esperaba describir su prctica del
dialogo con los textos, que es bsicamente para l la prctica de las ciencias del
espritu y de cada lector con ojos normales, sin pretensin de gran novedad.
5 GW 2, 492 : Ich hielt es mit Leibniz, der von sich gesagt hat, er billige fast alles, was er lese . 6 GW 2, 491 : Sonst blieb mir das Schreiben auf lange hinaus eine rechte Qual. Immer hatte ich das verdammte Gefhl, Heidegger gucke mir dabei ber die Schulter .
6
Gadamer se preguntaba si su libro no sala demasiado tarde y si no era superfluo7.
Demasiado tarde porque describa una practica de la interpretacin nutrida de los
clsicos, de la tradicin del humanismo que tal vez haban desaparecido de las
prcticas de interpretacin de la juventud que se orientaba mas haca las esperanzas
tecnolgicas o las sospechas de la critica de las ideologas8. Pero, como veremos
mas lejos, esa situacin ha posiblemente contribuido a su xito. Antes de hablar de
las condiciones de su xito qu pensar de la atraccin de sus anlisis?
Un libro complejo y sin ambicin iconoclasta
Ni el autor, ni el ttulo, como hemos visto, tenan algo de muy sexy. Y el
contenido? No se puede negar que hicieron al final el xito de la obra, pero tenan
por su parte algo de intimidante. El libro es espeso, difcil y supone una cultura
bastante desarrollada de la filosofa y de las discusiones alemanas: casi 600 paginas
en la edicin castellana, donde se discute, por ejemplo, de la frase especulativa en
Hegel, de la metafsica medieval de los universales y de debates hermenuticos en
el campo de la jurisprudencia. No es tan seguro que el lector comn tiene a priori
una buena idea de lo que son las aporas del historicismo o de lo que debe ser una
mediacin total o la trasformacin del juego en construccin9 (Verwandlung ins
Gebilde) en la obra de arte. Son materias bastante complejas y las referencias de
Gadamer (del resto raramente completas) no son tan familiares.
Hay otra cosa que hay que destacar. Para una obra filosfica, no parece tan
ambiciosa (anspruchsvoll) o revolucionaria. Gadamer nunca dice que quiere
7 GW 2, 493 : Als das Buch erschien erst whrend der Drucklegung war mir der Titel Wahrheit und Methode dazu eingefallen , war ich mir gar nicht sicher, ob es nicht zu spt am
und eigentlich berflssig war . 8 GW 2, 493 : Denn dass eine neue Generation heranrckte, die teils technologischen Erwartungen, teils ideologiekritischen Affekten verfallen war, konnte man bereits ahnen . 9 H.-G. GADAMER, Verdad y mtodo, Salamanca, ed. Sigueme, 1977, Dcima edicin, 2003, p. 154.
7
fundamentar una nueva disciplina, digamos la hermenutica, o hacer un nuevo
inicio en la filosofa. Eso es raro para una obra exitosa en la filosofa. Si uno piensa
por ejemplo a las Meditaciones metafsicas de Descartes, a la Critica de la razn
pura, a las Ideen de Husserl o a Ser y tiempo, todas estas obras pretenden
revolucionar algo, lo que hace parte de su xito. Descartes duda de lo trasmitido,
Kant dice que solo el camino critico queda abierto y Heidegger propone una
destruccin de la tradicin occidental, nada menos. No hay nada de eso en
Gadamer, ningn nuevo inicio radical como Descartes, ninguna revolucin de la
manera de pensar como Kant, ningn gran pretensin fundadora la Husserl o
Heidegger. Como lo dira adems el prlogo a la segunda edicin: hace falta
fundamentar lo que de todos modos nos est sustentando desde siempre?10 (el
ttulo Rasgos, Grundzge, se debe entender de modo muy modesto y no como
una fundacin radical, Grundlegung). En que consista entonces su novedad y
inters? No era inicialmente tan evidente.
Una primera recepcin bastante discreta
De hecho, los alumnos de Gadamer, que fueron a su manera al principio del
libro, no han ledo el libro de su maestro como una nueva fundacin, pero tampoco
como un libro tan importante o original. Eso suena raro para nosotros, sin embargo
fue la impresin general cuando sali el libro. En mis investigaciones para la
biografa de Gadamer, he interrogado a muchos alumnos de esta poca (Henrich,
Bubner, Wiehl, Wieland, Cramer, Tugendhat, etc.) y todos me confirmaron que
nadie hubiera pensado que el libro andaba a conocer un tal xito. Konrad Cramer
ha contado, en el magnfico libro de homenaje para nuestro amigo Carlos B.
Gutirrez, que el libro fue visto por primera vez el da de los sesenta aos de
10 Verdad y mtodo, p. 20.
8
Gadamer, el 11 de febrero 196011. Haba una pequea fiesta en la casa de Gadamer,
donde Heidegger haba venido, lo que era un evento en si. El editor Siebeck era
tambin presente. Sali de su saco una Festschrift, un libro de homenaje para el
jubilado, bajo el ttulo La presencia de los Griegos en el pensamiento moderno,
donde se encontraba un texto de Heidegger, otro evento para un vates agorfobo
como Heidegger. Todo andaba muy bien. Pero Siebeck tena otra sorpresa en su
saco: la primera edicin de Verdad y mtodo que regal a Gadamer.
Por fin el libro estaba ah! Gadamer haba publicado su obra, esperada desde
tantos aos que algunos dudaban de su salida. Pero era claro que Gadamer andaba a
jubilarse dentro de poco12 y tal vez el libro habr sido considerado como un ltimo
y tardo resumen de lo que Gadamer deca en sus clases, sobre Platn, Aristteles,
Hegel o Heidegger. Buenos recuerdos pero nada mas que un libro apacible para
terminar su carrera universitaria en pace. Era mas un punto final que un nuevo
inicio. Gadamer tena en esto da 60 aos, que tal vez significaban mas en este
tiempo que hoy. Como se suele decir, el 60 de este tiempo es el 70, a lo mejor el
75, de hoy (tal vez se tratara de la mentira que mi generacin se conta). Como
recuerda por su parte Rdiger Bubner: Nosotros, los mas jvenes, no pensbamos
que el libro de Gadamer, a pesar de la riqueza de sus estudios particulares y de sus
observaciones sutiles, andaba a desarrollar una tal Lebenskraft (fuerza de vida) que
hiciera de este libro, y para algunas generaciones, un libro fundamental de la
filosofa traducido en muchos idiomas et que ha avanzado entre tanto en el estatuto
de un clsico. 13 Fue una sorpresa para todos. Y me recuerdo haber hablado con
11 K. CRAMER, Gedanken ber Hans-Georg Gadamer , in M. Cepeda et R. Arango (ed.), Amistad y Alteridad. Homenaje a Carlos B. Gutirrez, Bogot, Universidad de los Andes, 2009, 71. 12 K. Cramer, op. cit., 85. 13 R. Bubner, Laudatio auf Hans-Georg Gadamer, in Sinn und Form 49 (1997), 8 : Wir Jngeren haben damals nicht angenommen, da Gadamers Buch bei all seinem Reichtum an
Einzelstudien, phnomenologischen Evidenzen und feinsinnigen Beobachtungen eine solche
9
alumnos de Gadamer que expresan hasta ahora su sorpresa, sino su irritacin
viendo que este libro sea en el centro de discusiones filolgicas, estudios
especializados o de congresos. Fue el caso de Tugendhat, el cual haba alquilado en
los aos 60 un piso en la casa de Gadamer y que no vea en su casero un filsofo
del nivel de Heidegger, Wittgenstein o Aristteles.
Gadamer tampoco lo pens en estos aos. Haba por fin acabado con su libro,
lo que haba sido una verdadera carga para l, y quisiera volver a sus estudios mas
especializados sobre Platn o Hegel14. No tena la pretensin de ser un filsofo
como Heidegger, Kant o Hegel que tiene que presentar en cada nuevo libro el
estatuto de su pensamiento. Su libro era nada mas que una tentativa de justificar la
manera de trabajar de las ciencias humanas y pensar nuestra experiencia de la
historia o del lenguaje.
A la diferencia de Kant o Heidegger, el xito no fue de inmediato. En trminos
de hoy, se podra describir la lenta difusin de la obra como un sleeper, un libro
que nadie espera, que sin embargo se vuelve poco a poco en un xito. Como
explicar este lento xito? No cabe duda de que tenga todo que ver con sus mritos
intrnsecos, pero, como ocurre a menudo en la filosofa, el contexto puede haber
ayudado, si por supuesto milagros necesitan ayuda.
Lebenskraft entfalten wrde, da es ber ein Menschenalter hinweg und inzwischen in vielen
Sprachen der Welt unvermindert als ein Standardwerk des heutigen Philosophierens gilt. Es ist
selber lngst in den Rang des Klassischen aufgerckt. . 14 Vase la carta de Hans-Heorg Gadamer a Jakob Klein del 17 de agosto 1970 (Gadamer Archiv, DLA, Marbach) : Es ist in meinem eigenen Lebensaugenblick ein hnlicher Moment gekommen, an dem ich Hegel und Heidegger, Hermeneutik und Dialektik, dahingestellt sein lassen mchte, um mich ganz meinen Arbeiten zu Plato und Aristoteles zu widmen. Ich empfinde die Hermeneutik wie jene berhmte Eisenkugel, die man dem Sklaven an die Ferse band, damit er nicht davonlaufen kann. Wohin ich eilen werde, wenn man mich dafr einlde, lehrend ttig zu sein, wren die Griechen. Gerade auch meine Platostudien verlangen einen Abschluss, von dem ich hoffen wrde, dass er unsere gemeinsamen Anfnge ebenso wie unsere gegenwrtigen Standorte fruchtbar macht .
10
El contexto filosfico de 1960, trasformado por Verdad y mtodo
El libro sali a finales de los aos cincuenta. Lo que quisiera sostener es que el
libro, sin esperarlo, ha revolucionado del todo la situacin filosfica de su tiempo
con su carcter tan inesperado. Cmo se presentaba la situacin filosfica en estos
aos en Alemania? De modo asombroso la filosofa de Heidegger haba dominado
de nuevo un campo importante de la filosofa durante los aos cincuenta (fue su
segundo xito despus del xito de Ser y tiempo). Heidegger era el pensador mas
famoso de Alemania, quizs con Karl Jaspers, pero lo super en los aos 50 cuando
public una sucesin de libros exitosos y ambiciosos. Sin embargo Heidegger, y su
xito, era de manejo difcil para un Alemn, tanto ms que las discusiones sobre su
pasado poltico, y l de Alemania en general, que se haban encerrado en los aos
cincuenta, haban vuelto a empezar con un vigor feroz. Aquellos que atizaban estos
procesos hacan parte de las dos otras principales escuelas filosficas de ese
tiempo, pero que no atraan todava mucho a los profesores de filosofa, la Escuela
de Francfort (Horkheimer, Adorno, Marcuse, sin olvidar a la filosofa de la utopa
de Ernst Bloch) y la filosofa con orientacin mas epistemolgica, influida por los
restos del neo-kantianismo, el positivismo lgico (Carnap, Schlick), el racionalismo
critico de Popper (Albert, Stegmller, Kamlah, Lorenzen) o de la filosofa analtica
que algunos Alemanes redescubran, o reimportaban en la discusin alemana en el
caso de Wittgenstein.
Haba entonces los Heideggerianos (un poco insoportables con su imitacin del
maestro), los de Francfort y los epistemlogos. La teora critica de Francfort
gozaba de una atraccin creciente, especialmente por parte de los estudiantes,
siempre ms inclinados a la rebelin. Sin embargo quedaba un poquito mirada con
malos ojos por parte de los profesionales, eso es los profesores porque pareca
demasiado poltica, sociolgica, panfletaria. En este tiempo esa actitud inquisitoria
no le encantaba a muchos filsofos (la situacin ha cambiado mucho desde aquel
11
tiempo, pero el xito de la Escuela de Francfort es por su parte una creacin tarda
de los aos sesenta). Haba del otro lado la filosofa analtica que empezaba a
contratar adeptos (ella tambin tiene hoy da mucho mas). Sin embargo era
evidente que ella preconizaba igualmente una ruptura demasiado radical con la
tradicin. Era adems obvio que era (re)tomada de modo un poco servil de la
manera de practicar la filosofa en Oxford o en los Estados Unidos y que no
apeteca todava a Alemania y su sentido por las tradiciones, especialmente
considerando su fuerte tradicin filosfica. Haba de verdad que reemplazar la
filosofa con la semntica?
En este contexto, el libro de Gadamer caa de las nubes. No era tan fcil ubicarlo
polticamente en el paisaje filosfico del tiempo. No se trataba de una represa
pura y sencilla, o imitadora, de Husserl y Heidegger, aun cuando su presencia era
sensible. Pero no tena nada del pathos fundador de los dos. No propona un nuevo
inicio o una concepcin ms radical de la filosofa. Al contrario, brindaba y
realizaba una fusin feliz del presente y del pasado, sosteniendo que no haba
cesura entre los dos, sino continuidad. Eso era nuevo para un filsofo! En el
mismo tiempo avanzaba tesis originales y audaces sobre el lenguaje, el entender, la
historia, pero sin ninguna ruptura con la tradicin. Por el contrario, Gadamer
rehabilitaba expresamente a la tradicin! Y se autorizaba de ella de manera
ingenua, refrescante, sin complejos. En su libro haba algo de Heidegger y Hegel,
ma non troppo, como se dice en la msica. Si hablaba del historicismo, como
Nietzsche o Heidegger, no deca nada del nihilismo y apoyaba su pensamiento
histrico sobre el socratismo y la docta ignorancia de Platn.
Sus temas haban sido discutidos et preparados por pensadores como Dilthey
las ciencias del espritu, la hermenutica , pero Gadamer les otorgaba una nueva
12
dimensin contempornea, viendo en ellas una forma de resistencia al modo de
pensar tcnico o metdico, como lo llamaba, y para oponerla otra verdad15.
El libro era abarcador, como suelen serlo los grandes libros sistemticos de los
profesores alemanes, pero la nueva sntesis que propona Gadamer era conducida
en el nombre de la finitud insuperable del ser humano y de su inacabamiento o
incompletud esencial. De esa finitud, entendida desde Heidegger como de Platn y
su recuerdo de que no somos dioses, solo seres humanos, Gadamer sacaba nada
menos que una nueva tica, el tema olvidado por Heidegger, que nunca quiso
tocarlo. Esa tica redescubra la antigua virtud de la phronesis, la prudentia, que
haba perdido toda amplitud en las huellas del kantismo. La prudencia se reduca en
el mejor de los casos al cuidado del automovilista que conduce despacio cuando
hay hielo o nieve. No, deca Gadamer, la phronesis significa mucho mas: es el
saber-hacer, el saber practico (praktisches Wissen), que es en el fundamento de
toda praxis y que se caracteriza por su sentido por el hable (das Tunliche) o el
realizable. Eso era un acento totalmente nuevo, y deseable, en el contexto del
utopismo emblemtico de Heidegger y de la Escuela de Francfort, que queran
cambiar el mundo del todo. No es demasiado esperar de nuestra finitud? Saliendo
de la docta ignorancia que seala nuestra finitud Gadamer defenda el juicio por el
hable y el sentido comn que nos viene de la educacin y de la costumbre (Sitte).
En este marco, Gadamer celebraba y practicaba las virtudes de la apertura al otro y
del dialogo. Nuevas pautas para un libro germnico pero que consonaba con la
nueva humildad que se esperaba en aquellos aos de Alemania.
Todo eso era del todo inesperado, una rehabilitacin de la tradicin, de la
autoridad y del hable en un contexto donde todos los filsofos clamaban la
destruccin del pasado, como era evidente en el caso de Heidegger, de la Escuela
15 Verdad y mtodo, p. 23: La presente investigacin toma pie en esta resistencia, que se afirma dentro de la ciencia moderna frente a la pretensin de universalidad de la metodologa cientfica.
13
de Francfort o de la filosofa analtica. Hay otra relacin posible con el pasado de la
filosofa, enseaba Gadamer, la del dialogo, de la apertura y de la apropiacin por
el presente, aplicacin que hace parte segn su tesis esencial de la comprensin
finita misma. No haba entonces que acabar con la filosofa y reemplazarla con la
sociologa, las ciencias o la semntica. Con estos mritos discretos de su obra
quiero decir que Gadamer ha salvado la filosofa de la tentacin de su
autodestruccin. Gadamer nos ha aprendido o reaprendido a dialogar con el
pensamiento filosfico. Esa discreta, pero importante salvacin hace parte, a mi
parecer, del milagro del xito de Verdad y mtodo.
Recepcin milagrosamente creciente
Una poca que no esperaba eso, porque haba abandonado casi toda esperanza de
la filosofa, se ha reconocido en la obra milagrosa de Gadamer, tejada de elementos
del pasado y del presente, como es el caso de cada entender siguiendo su tesis
central. El xito de la obra necesit la pequea productividad de la distancia en el
tiempo, de cual la obra misma haba tratado16. La historia misma tuvo que hacer su
propia obra (le travail du temps), confirmando el juicio de Gadamer sobre la
sabidura de la historia.
Una de las vertientes fascinantes de esa recepcin es que Gadamer nunca acab
de discutir con ella. Normalmente los filsofos pretenden que no habrn sido bien
entendidos y se desinteresan de su recepcin con gran vanidad (Kant public una
fra Declaracin contra Fichte y Husserl como Heidegger siempre pensaron no
haber sido bien ledos). No fue as en el caso de Gadamer. Raramente dijo que
haba sido mal entendido. Por el contrario, saludaba como un jovencito, en los
muchos prlogos o Nachworte de las nuevas ediciones, las recepciones productivas
16 Vase el capitulo decisivo sobre El significado hermenutico de la distancia en el tiempo , en Verdad y mtodo, 360-370.
14
y a veces las equivocaciones (como las de Betti) porque le permitan precisar y
afinar su pensamiento. Eso es otro milagro: no conozco otro filsofo que ha sacado
tanto provecho de la recepcin de su obra, y tambin de la recepcin la mas critica,
hasta que ha dado en el ao 1986 al segundo libro de sus Obras completas,
dedicado a los desarrollos mas tardos (Weiterentwicklungen) de su pensamiento,
en dialogo con su recepcin, el ttulo Verdad y mtodo II. De la recepcin naci
milagrosamente una nueva obra.
En ella se destaca la recepcin providencial de Habermas. Providencial porque
no contribuy poco en hacer conocer a la hermenutica de Gadamer que quedaba
hasta el debate con la critica de las ideologas una cosa de filsofos. Tal vez fue una
casualidad, la historia rebosa de ellas, pero el debate con Habermas hizo de
Gadamer un personaje publico (las primeras entrevistas de Gadamer datan de 1970
y han crecido desde este ao de manera exponencial). Todo el mundo usaba de la
palabra hermenutica en los debates de las ciencias del espritu (como se ve en la
Festschrift de 1970, Hermeneutik und Dialektik, que tuvo un xito tal que necesit
una secunda edicin en el ao 1973, una raridad para una Festschrift17), sin
embargo tambin en la poltica. Eso fue un resultado, por gran parte, de Habermas
que critic muy duramente a Gadamer. El xito milagroso de Verdad y mtodo
aprovech de la cualidad intelectual de los interlocutores que ha suscitado como
Habermas o Apel.
As respondi Gadamer al desafo de Habermas, despus haberlo salvado de
Francfort, con textos que hacen parte de los mejores que ha escrito. Habermas
mantuvo un gran respeto por Gadamer y le atest, cuando otorgaron el Premio
Hegel a Gadamer en 1978, que haba practicado una urbanizacin de la provincia
heideggeriana. La parola estuvo en boga, irritando muchos, pero gust a Gadamer.
Es ist etwas dran, tiene algo, reconoca siempre Gadamer. 17 Vase K. Cramer, op. cit.
15
Con eso se deslizaba por supuesto que Gadamer haba lentamente sucedido un
poco a Heidegger como el filsofo estandarte de Alemania, especialmente despus
de su muerte en el ao 1976. No tena el pasado de Heidegger, ni sus lados
crpticos o neopaganos, y propona una nueva apertura, que prometa una
internacionalizacin a la filosofa. Poco a poco Gadamer lo reemplazo como la mas
grande figura intelectual de su pas y su prestigio creci. Un otro milagro,
biolgico, ayud en eso: l de su longevidad increble. Vivi hasta 102 aos con
una presencia espiritual bastante inalterada. No haba solo su filosofa o su
hermenutica que interesaba el publico, haba el hecho de que exista todava y
poda contar historias de un pasado remoto. Ha experimentado no solo los
atentados del 11 de septiembre 2011, pero tambin el inicio de la primera guerra
mundial! Si eso no es un milagro, nunca hubo uno.
Nuevos debates, entre otros con Derrida y Koselleck, lo mantuvieron actual,
como la publicacin de sus Obras completas y sus aniversarios redondos que
fueron siempre celebrado con mas solemnidad. Entre tanto, Gadamer haba
empezado a viajar despus de su jubilacin. Fue un docente apasionado en el nuevo
mundo, y tuve el milagro de encontrarlo durante unos de sus viajes. En el mismo
tiempo se export su hermenutica, siempre mas reconocida como otro nombre de
la filosofa, al mundo entero, incluso en Tucumn donde estamos reunidos gracias
al milagro del xito de Verdad y mtodo. El milagro sigue sucediendo y somos
parte de su acontecer.