Estudio de Mercado Sector Editorial 2010 corregidofolcomuns.firabcn.es/S040010/doc_puerto_rico_informe_econ_es.pdf · 1 Estudios de Mercado Oficina Económica y Comercial ... El presente

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Oficina Económica y Comercial

de la Embajada de España en San Juan de Puerto Rico

El mercado del Sector Editorial en Puerto Rico

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El mercado del Sector Editorial en Puerto Rico

Este estudio ha sido realizado por Esther Vidal Sainz bajo la supervisión de la Oficina Económica y Comercial de la Embajada de España en San Juan Abril 2010

EL MERCADO DEL SECTOR EDITORIAL EN PUERTO RICO

Oficina Económica y Comercial de la Embajada de España en San Juan de Puerto Rico 3

ÍNDICE

RESUMEN Y PRINCIPALES CONCLUSIONES 5

I. INTRODUCCIÓN 6 1. Definición y características del sector y subsectores relacionados 6

II. ANÁLISIS DE LA OFERTA 9 1. Análisis cuantitativo 9

1.1. Tamaño de la oferta 9 1.2. Análisis de los componentes de la oferta 10

2. Análisis cualitativo 30 2.1. Producción 30 2.2. Obstáculos comerciales 30

III. ANÁLISIS DEL COMERCIO 35 1. Análisis cuantitativo 35

1.1. Canales de distribución 35

GRUPO SANTILLANA PUERTO RICO 36

EDICIONES SM 36

EDITORIAL PLAZA MAYOR 36

EDITORIAL CORDILLERA 36

ANISA, INC. 36

LA EDITORIAL UNIVERSIDAD DE PUERTO RICO 36

PUBLICACIONES PUERTORRIQUEÑAS 37

EDICIONES PUERTO 37 2. Análisis cualitativo 37

2.1. Estrategias de canal 37 2.2. Estrategias para el contacto comercial 38 2.3. Condiciones de acceso 38 2.4. Condiciones de suministro 38 2.5. Promoción y publicidad 39 2.6. Tendencias de la distribución 39

IV. ANÁLISIS DE LA DEMANDA 41 1. Tendencias generales del consumo 41

1.1. Factores sociodemográficos 41 1.2. Factores económicos 42 1.3. Distribución de la renta disponible 42 1.4. Tendencias sociopolíticas 44



1.5. Tendencias culturales 44 1.6. Tendencias legislativas 45

2. Análisis del comportamiento del consumidor 46 2.1. Hábitos de consumo 46 2.2. Hábitos de compra 47 2.3. Preferencias 48

3. Percepción del producto español 49

V. ANEXOS 50 1. Informes de ferias 50

2. Ley nº 75 de contratos de distribución 52

3. Comentario a la Ley nº 75 de contratos de distribución 55

4. LEY NÚM. 1 DE 1993 59

5. LEY NÚM. 116 DE 2004 62

6. LEY NÚM. 516 de 2004 64

7. Bibliografía 69



RESUMEN Y PRINCIPALES CONCLUSIONES

España ha pasado a ser el cuarto proveedor de libros de Puerto Rico por detrás de Estados Unidos (68,53%), de Colombia (13,67%) y México (6,98%). El valor de las importaciones pro-cedentes de España de libros fue en el 2008 de 3,5 millones de dólares, un 16% menos que en el año 2007. La cuota de mercado descendió a 5,28%.

El dominio de Estados Unidos en libros, folletos e impresos (partida 4901) es claro. Además de Estados Unidos, Colombia y México los principales competidores del producto editorial español son Perú, Argentina, Chile, China y República Dominicana. Aunque el grueso de las ventas españolas son los libros de texto, España se encuentra en segundo lugar en venta de Biblias y libros religiosos y diccionarios y enciclopedias.

La Ley 1 de 1993, declarando la cooficialidad del inglés junto con el castellano, no ha cam-biado el hecho de que la lengua vernácula sea el español y que la enseñanza en escuelas públicas es obligatoria en español. La enseñanza pública representa el 70% del total de estu-diantes de Puerto Rico. El Departamento de Educación, que provee los textos a las escuelas, es el principal comprador de libros de Puerto Rico.

Debemos distinguir enseñanza en inglés de enseñanza con libros en inglés. La enseñanza en inglés se ofrece en escuelas privadas que muchas veces combinan grupos en español con grupos en inglés. Aunque existe un ligero predominio de la enseñanza en español en las es-cuelas privadas, la enseñanza suele realizarse con textos en inglés (este fenómeno es común en la universidad). Las clases y exámenes son en español y los libros de texto en inglés.

La mejor manera de acceder a las escuelas tanto privadas como públicas es a través de un distribuidor local, por lo que hay que tener muy en cuenta la Ley Núm. 75 de Contratos de Distribución antes de tomar cualquier decisión acerca de un posible socio comercial.

Los libros de interés general también se pueden vender a través del distribuidor, pero necesi-tan más de apoyo a la hora de realizar la promoción y publicidad.



I. INTRODUCCIÓN

1. DEFINICIÓN Y CARACTERÍSTICAS DEL SECTOR Y SUBSECTORES RELACIONADOS

El presente estudio es una modificación del actualizado en 2007 por León Antonio García Martínez y su objetivo es ofrecer una visión general del sector editorial en Puerto Rico.

Para dar a conocer la situación del sector se analizan datos estadísticos comerciales, la ofer-ta y la demanda, los canales de distribución y los consumidores, para mostrar una panorámi-ca del sector editorial actualmente.

El ámbito territorial de los datos analizados es el Estado Libre asociado de Puerto Rico, que se encuentra bajo soberanía de Estados Unidos y en muchos aspectos, sobre todo legislati-vos, los datos serán los mismos para ambos territorios.

El ámbito temporal del estudio abarca principalmente el periodo de 2004 a 2008, si bien se dan apuntes sobra cifras disponibles de 2009. Pero el principal año de actividad en el que se centra es 2008.

En el ámbito funcional del producto materia de análisis se trata de uno nuevo, visto como susceptible de ser comercializado y no tanto de bien cultural. En cuanto a los soportes se in-cluyen libros en todo formato editado en papel.

En el ámbito de la actividad empresarial se analizan los circuitos de comercialización existen-tes y las figuras que lo integran.

Respecto a las cifras y datos que contiene el estudio, han sido elaborados por esta Oficina Económica y Comercial a partir de datos facilitados por la Junta de Planificación1. Las cifras de comercio exterior de Puerto Rico disponibles, contabilizan los intercambios atendiendo a la procedencia de la mercancía (y no al origen). Los productos que llegan a la Isla a través de Estados Unidos se contabilizan como estadounidenses, cuando en realidad pueden tener un origen distinto. En consecuencia, no se pueden conocer con exactitud las cifras de comercio exterior de Puerto Rico por país de origen.

1 Centro Estadístico y Órgano de Reglamentación en Puerto Rico



De todo el capítulo 49 dedicado a productos editoriales; de la prensa o de otras industrias gráficas; textos manuscritos o mecanografiados y planos; este estudio se centra en la partida 4901 libros, folletos e impresos similares, incluso en hojas sueltas. El arancel que se aplica en Puerto Rico a las mercancías y el utilizado en este estudio es el recogido en el “HARMONIZED TARIFF SCHEDULE OF THE UNITED STATES”(HTSUS) en función del “HARMONIZED SYSTEM NUMBER”, que coincide en sus seis primeros dígitos con la No-menclatura Combinada Europea que es la utilizada para establecer el Arancel Aduanero Co-mún.

Así, en este estudio se van a tratar las siguientes partidas arancelarias del HTSUS:

Partida Descripción de la partida arancelaria

4901100000 Libros, folletos impresos en hojas suelt as, incluidas plegadas

4901910000 Diccionarios, enciclopedias y publicacio nes por tomos

4901910020 Diccionarios

4901910040 Enciclopedias

4901990000 Otros

4901990010 Libros de texto

4901990020 Periódicos encuadernados

4901990030 Directorios

4901990040 Bíblias y libros religiosos

4901990050 Libros técnicos, científicos y profesionales

4901990055 Libros de arte y pintura (procedentes de EEUU)

4901990060 Libros de arte de menos de 5$

4901990065 Libros de arte de más de 5$

4901990070 Libros de pasta dura (Hardbound books)

4901990075 Libros de bolsillo (Rack size paperbound)

4901990091 Otros libros de no más de 4 páginas (carátulas excluídas)

4901990092 Otros libros de entre 5 o más páginas y no más de 48

4901990093 Otros libros de 49 o más páginas

El principal proveedor de libros y material editorial incluido en la partida 4901 a la Isla es Es-tados Unidos, debido a la asociación política entre ambos países, a la cercanía geográfica, a la existencia de cooficialidad del español y el inglés y a la presencia de las grandes cadenas de librerías estadounidenses.



En lo que al libro en español se refiere, España ha perdido gran relevancia en estos últimos años situándose en el cuarto lugar en el ranking de exportadores hacia Puerto Rico, favore-ciendo a países como Colombia y México, que aumentaron fuertemente su cuota de merca-do.



II. ANÁLISIS DE LA OFERTA

1. ANÁLISIS CUANTITATIVO

1.1. Tamaño de la oferta

La balanza comercial de Puerto Rico frente al resto del mundo arroja un saldo negativo en productos editoriales pertenecientes a la partida arancelaria 4901. El país es un importador neto en este sector.

Según se observa en la Tabla 1 el déficit comercial en este sector fue en aumento hasta el año 2006, en 2007 y 2008 disminuye este déficit debido principalmente a un descenso de las importaciones. En cuanto a la evolución de las exportaciones se incrementan paulatinamente del 2004 al 2008, excepto de 2005 a 2006 que tuvieron una subida algo más pronunciada.

Tabla 1. Balanza comercial de Puerto Rico con el resto del mundo para la partida arancelaria 4901 (dó-lares estadounidenses, años naturales)

Elaboración propia. Fuente: Junta de Planificación de Puerto Rico

Capítulo 4901 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08

Variación 2004 - 08

Exportaciones 5.794.721 6.867.774 9.436.428 10.245.702 10.876.644 6,16% 87,70% Importaciones 58.488.763 61.270.465 77.296.691 69.361.895 67.402.571 -2,82% 15,24%

Saldo comercial -52.694.042 -54.402.691 -67.860.263 -59.116.193 -56.525.927 -4,38% 7,27%



Según muestra el Gráfico 1 hay una gran diferencia entre importaciones y exportaciones, a pesar del crecimiento de estas últimas.

Gráfico 1. Evolución de las importaciones y exportaciones de la partida arancelaria 4901 del año 2004 al 2008


1.2. Análisis de los componentes de la oferta

Importaciones puertorriqueñas de libros

La Tabla 2 que muestra a continuación indica el total de importaciones de libros, folletos, im-presos y similares (partida arancelaria 4901) desglosado en los principales países de origen.

En 2008 el valor de las importaciones ascendió a 67 millones de dólares aproximadamente, cifra que representa un leve descenso con respecto al año anterior, alrededor del 3% menos. Esta disminución se debe principalmente al decrecimiento de las importaciones procedentes de tres de los cuatro principales países exportadores de estos productos a Puerto Rico: Esta-dos Unidos (con un 4% menos), México (un 12%) y España (un 16%). En cambio otros paí-ses aumentaron su actividad exportadora hacia la Isla, entre ellos el más importante es Co-lombia, que exportó un 6% más que en 2007, y se trata del segundo país más importante que abastece este mercado después de Estados Unidos.

Otros países que aumentaron sus ventas en Puerto Rico son Perú (un 62%), Argentina (2%) y Chile (149%). Cabe destacar que China, aunque vio minorado su comercio con la Isla de 2007 a 2008, ha ido cobrando importancia en el mercado sobretodo a partir del año 2005.

20042005

20062007

2008

0

10.000.000

20.000.000

30.000.000

40.000.000

50.000.000

60.000.000

70.000.000

80.000.000

Exportaciones Importaciones



Tabla 2. Importaciones de libros, folletos, impresos y similares por países en los últimos años (miles de dólares estadounidenses, años naturales)


Estados Unidos es el principal proveedor de productos editoriales a Puerto Rico, abarcando un 68,53% del valor total de las importaciones de libros, folletos e impresos similares. Este predominio en el sector se debe a que Puerto Rico es un territorio con soberanía estadouni-dense y existe una cooficialidad en los idiomas inglés y español; además, el sistema de en-señanza se apoya fuertemente en los textos en inglés.

El resto, un 31,47% lo ocupan principalmente países latinoamericanos y España, aunque co-mo se remarcó antes, China entró a ocupar el octavo puesto en origen de las importaciones.

Colombia se sitúa en segundo lugar del ranking de exportadores, con un 13,67% del merca-do. Hasta el año 2003 España ocupaba esta posición, pero durante los últimos años se ha visto superada por Colombia y México (con un 6,98% de las importaciones del sector puerto-rriqueño), pues estos países son más competitivos porque tienen costes de mano de obra y de impresión más bajos.

Las importaciones de México, tercer proveedor de material editorial, se han mantenido más o menos estables durante el periodo analizado (2001 - 2008) rondando su aportación entre un 6% y un 8% del total del sector.

2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 Var. 2007-08

Var. 2001-08

Estados Unidos 50.896,36 41.066,97 39.129,09 40.390,37 40.455,96 52.608,44 47.998,03 46.189,26 -3,77% -9,25% % s/Total 71,32% 66,43% 63,11% 69,06% 66,03% 68,06% 69,20% 68,53% Colombia 4.460,81 6.193,69 9.910,04 5.734,84 7.805,75 9.152,87 8.653,83 9.211,07 6,44% 106,49% % s/Total 6,25% 10,02% 15,98% 9,81% 12,74% 11,84% 12,48% 13,67% México 5.288,07 5.209,75 4.600,58 3.808,90 4.258,63 5.436,44 5.347,25 4.707,68 -11,96% -10,98% % s/Total 7,41% 8,43% 7,42% 6,51% 6,95% 7,03% 7,71% 6,98% España 8.058,55 7.139,79 6.465,67 7.135,70 5.900,83 6.759,60 4.252,67 3.558,74 -16,32% -55,84% % s/Total 11,29% 11,55% 10,43% 12,20% 9,63% 8,75% 6,13% 5,28% Perú 89,86 98,51 149,23 64,01 69,43 423,04 590,16 958,67 62,44% 966,84% % s/Total 0,13% 0,16% 0,24% 0,11% 0,11% 0,55% 0,85% 1,42% Argentina 935,10 676,14 429,09 470,64 792,42 960,89 652,28 668,46 2,48% -28,52% % s/Total 1,31% 1,09% 0,69% 0,80% 1,29% 1,24% 0,94% 0,99% Chile 94,54 74,20 13,53 28,36 376,70 22,99 195,68 486,35 148,54% 414,44% % s/Total 0,13% 0,12% 0,02% 0,05% 0,61% 0,03% 0,28% 0,72% China 99,60 148,17 100,93 49,09 142,52 273,09 631,56 470,62 -25,48% 372,52% % s/Total 0,14% 0,24% 0,16% 0,08% 0,23% 0,35% 0,91% 0,70% Rep. Dominicana 567,82 463,47 414,19 238,76 461,75 408,75 305,90 241,87 -20,93% -57,40% % s/Total 0,80% 0,75% 0,67% 0,41% 0,75% 0,53% 0,44% 0,36%

Subtotal 70.490,71 61.070,69 61.212,36 57.920,66 60.263,99 76.046,11 68.627,35 66.492,71 -3,11% -5,67% % s/Total 98,78% 98,78% 98,73% 99,03% 98,36% 98,38% 98,94% 98,65% Resto 868,55 753,62 789,35 568,11 1.006,48 1.250,58 734,54 909,86 23,87% 4,76%

% s/Total 1,22% 1,22% 1,27% 0,97% 1,64% 1,62% 1,06% 1,35%

TOTAL 71.359,26 61.824,31 62.001,71 58.488,77 61.270,47 77.296,69 69.361,90 67.402,57 -2,82% -5,54%



En lo que se refiere a España durante estos años fue perdiendo importancia en las importa-ciones puertorriqueñas. En 2008 vendió a la Isla unos tres millones y medio de dólares en productos editoriales, lo que supone un descenso del 16% con respecto al año anterior, y de casi el 56% con respecto al año 2001.

Otros países exportadores de la partida arancelaria 4901 a la Isla son Perú, con un fuerte crecimiento desde 2001 a 2008; Argentina, que a pesar de que sus exportaciones han des-cendido en el periodo sigue estando en el sexto lugar del mercado; Chile y China, que al igual que Perú han incrementado su aportación en gran medida con respecto a 2001; y República Dominicana, cuyas exportaciones descendieron en 2008 tanto con respecto a 2007 como a 2001. Aunque estos países están en el ranking, no representan en total una alta cuota de mercado debido a la supremacía de Estados Unidos.

Gráfico 2. Evolución de las Importaciones de libros, folletos, impresos y similares por países en lo últi-mos años


0

10000

20000

30000

40000

50000

60000

2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008

Estados Unidos Colombia México España Perú

Argentina Chile China Rep. Dominicana Resto



A continuación se analiza la oferta extranjera de libros, folletos e impresos similares por pro-ductos basándonos en datos estadísticos correspondientes a las diferentes subpartidas aran-celarias dentro del grupo 4901, y abarcando un periodo temporal de 2004 a 2008.

Importaciones de libros, folletos e impresos simila res por productos

Tabla 3. Importaciones de libros, folletos, impresos y similares por productos en los últimos años (dóla-res estadounidenses, años naturales)

Producto 2.004 2.005 2.006 2.007 2.008 Variación 2007 - 08


Libros de texto 17.389.857 17.588.167 25.013.655 17.840.381 20.406.139 14,38% 17,35% Libros, folletos impresos en hojas sueltas, incl. plegadas 16.006.150 10.752.204 15.158.704 17.472.374 16.674.511 -4,57% 4,18%

Otros de 49 o más páginas 10.785.302 11.885.051 14.669.502 15.270.141 11.090.293 -27,37% 2,83% Libros de bolsillo 212.955 1.113.520 1.206.646 3.310.620 5.052.942 52,63% 2272,77% Libros de pasta dura 2.127.116 8.652.699 7.715.666 3.787.147 4.502.891 18,90% 111,69% Libros técnicos, científicos y profesionales 5.024.066 2.947.127 3.118.285 6.364.076 4.000.422 -37,14% -20,37%

Biblias y libros religiosos 2.314.533 2.747.173 4.065.549 2.411.538 2.076.371 -13,90% -10,29% Otros de entre 5 o más pá-ginas y no más de 48 1.015.147 1.946.500 1.784.060 401.890 944.633 135,05% -6,95%

Otros de no más de 4 páginas 848.690 592.479 1.062.291 687.152 942.236 37,12% 11,02% Diccionarios 451.366 1.167.449 887.642 487.664 494.184 1,34% 9,49% Directorios 342.355 154.517 153.156 342.506 372.080 8,63% 8,68% Periódicos encuadernados 996.865 700.548 1.217.951 737.660 312.244 -57,67% -68,68% Libros de arte 623.821 64.247 89.072 84.046 304.978 262,87% -51,11% Enciclopedias 350.540 958.784 1.154.512 164.700 228.647 38,83% -34,77%

TOTAL 58.488.763 61.270.465 77.296.691 69.361.895 67.402.571 -2,82% 15,24%


Posteriormente se hará un estudio más detallado de la procedencia de cada producto, pero se puede afirmar de antemano que el 95% del total de importaciones lo componen siete sub-grupos: libros de texto (31%); libros y folletos impresos en hojas sueltas (25%); otros libros de 49 o más páginas (16%); libros de bolsillo (7%); libros de pasta dura (7%); libros científicos, técnicos y profesionales (6%) y Biblias y otros libros religiosos (3%). El resto de libros en con-junto representa alrededor de un 5% del total de importaciones.



Gráfico 3. Importaciones de libros, folletos, impresos y similares por productos en 2008


Es precisamente en casi todos estos subgrupos que copan el 95% del mercado donde Esta-dos Unidos es líder de ventas: en libros de texto; libros y folletos impresos en hojas sueltas; libros religiosos; libros técnicos, científicos y profesionales y libros de bolsillo de pasta dura. El único subgrupo donde Colombia supera a Estados Unidos en exportaciones hacia Puerto Rico es en libros de 49 o más páginas, aunque este país está normalmente presente como segundo proveedor en casi todos los subgrupos. España tiene una aportación importante en los productos como diccionarios y enciclopedias, Biblias y libros religiosos y libros de bolsillo aunque no ocupa el primer puesto en exportaciones hacia Puerto Rico en ninguno de ellos.

Seguidamente se detallan las importaciones de cada subgrupo y los países que más contri-buyen en cada uno de ellos. Se analizan siguiendo el orden de subpartida arancelaria de ca-da uno de ellos dentro del grupo 4901 y tomando como referencia el periodo de tiempo 2004 - 2008.

2008

31%

25%

16%

7%

7%

6%

3%5% Libros de texto

Libros, folletos impresos en hojassueltas, incl. plegadas

Otros de 49 o más páginas

Libros de bolsillo

Libros de pasta dura

Libros técnicos, científicos yprofesionales

Biblias y libros religiosos

Otros



Importaciones de libros, folletos e impresos en hoj as sueltas, incluso plegadas (4901.100000)

Tabla 4. Importaciones de libros, folletos e impresos en hojas sueltas, incluso plegadas en los últimos años (dólares estadounidenses, años naturales)

País 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08


EE.UU. 15.772.573 10.622.337 14.957.327 17.360.880 16.366.433 -5,73% 3,77% % 98,54% 98,79% 98,67% 99,36% 98,15% Colombia 131.317 81.805 147.360 29.236 185.543 534,64% 41,29% % 0,82% 0,76% 0,97% 0,17% 1,11% Otros 102.260 48.062 54.017 82.258 122.535 48,96% 19,83% % 0,64% 0,45% 0,36% 0,47% 0,73%

TOTAL 16.006.150 10.752.204 15.158.704 17.472.374 16.674.511 -4,57% 4,18%


Estados Unidos es el proveedor con casi el total de importaciones (entre el 98% y 99%, lle-gando incluso a 99,36% en 2007) de libros, folletos e impresos, lo que supone una predomi-nancia absoluta. Ante esta situación la participación de otros exportadores es insignificante tal y como se ve en el Gráfico 4. No obstante, cabe destacar que Colombia vio incrementadas sus ventas en un 500% de 2007 a 2008.

En lo referente a las importaciones totales, este producto es el segundo con mayor volumen de importaciones en la Isla dentro del sector editorial con un 25% del total. En 2008 sus ven-tas decrecieron un 4,57% con respecto a 2007, sin embargo durante el periodo analizado se mantuvieron estables entre los 15 y 17 millones de dólares, exceptuando el año 2005 en el que sufrieron una caída alcanzando un volumen de importación de 11 millones aproximada-mente.

Gráfico 4. Importaciones de libros, folletos e impresos en hojas sueltas, incluso plegadas en los últimos años


0

5.000.000

10.000.000

15.000.000

20.000.000

2004 2005 2006 2007 2008

EE.UU. Colombia Otros



Importaciones de diccionarios y enciclopedias (4901 .910020 y 4901.910040 respectiva-mente)

La clasificación arancelaria HTSUS agrupa las importaciones de diccionarios y enciclopedias en la partida arancelaria 4901.91. Esta partida arancelaria se desglosa en otras dos: 4901.910020 (Diccionarios) y 4901.910040 (Enciclopedias). La Tabla 5 muestra un análisis conjunto de ambas subpartidas.

Tabla 5. Importaciones de diccionarios y enciclopedias en los últimos años (dólares estadounidenses, años naturales)

País 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08


México Diccionarios 55.653 29.371 51.053 120.325 86.505 -28,11% 55,44% Enciclopedias 94.000 37.253 387.283 64.714 165.743 156,12% 76,32% Total 149.653 66.624 438.336 185.039 252.248 36,32% 68,56% % 18,66% 3,13% 21,46% 28,36% 34,90% España Diccionarios 303.900 253.596 310.505 169.711 184.306 8,60% -39,35% Enciclopedias 28.570 27.256 332.242 49.273 43.561 -11,59% 52,47% Total 332.470 280.852 642.747 218.984 227.867 4,06% -31,46% % 41,46% 13,21% 31,47% 33,57% 31,52% Colombia Diccionarios 57.343 756.240 121.983 92.348 50.244 -45,59% -12,38% Enciclopedias 11.892 805.029 224.535 9.480 2.705 -71,47% -77,25% Total 69.235 1.561.269 346.518 101.828 52.949 -48,00% -23,52% % 8,63% 73,43% 16,97% 15,61% 7,33% EEUU Diccionarios 24.094 46.783 311.815 46.250 39.146 -15,36% 62,47% Enciclopedias 216.078 53.741 162.934 13.116 13.638 3,98% -93,69% Total 240.172 100.524 474.749 59.366 52.784 -11,09% -78,02% % 29,95% 4,73% 23,25% 9,10% 7,30% Otros Diccionarios 10.376 81.459 92.286 59.030 133.983 126,97% 1191,28% Enciclopedias 0 35.505 47.518 28.117 3.000 -89,33% - Total 10.376 116.964 139.804 87.147 136.983 57,19% 1220,19% % 1,29% 5,50% 6,85% 13,36% 18,95%

TOTAL 801.906 2.126.233 2.042.154 652.364 722.831 10,80% -9,86%


Las importaciones de diccionarios y enciclopedias fueron en 2008 de 722.831 dólares, casi un 11% más que el año anterior, pero una cifra muy inferior a las registradas en 2005 y 2006 para la misma partida, donde se llegó hasta dos millones de dólares en importaciones.

España fue líder en el aprovisionamiento de diccionarios y enciclopedias hasta el año 2007, en el 2008 ya se vio superada por México, en primer lugar en la actualidad, aunque no por mucha diferencia (México tiene un 34,90% del mercado y España alcanza un 31,52%). En lo que se refiere a diccionarios individualmente España sobrepasa a México en valor de las im-portaciones, es en las enciclopedias donde México obtiene mayores ventas. Aunque el cre-cimiento de las exportaciones españolas en este grupo fue positivo del 2007 a 2008 (un 4%), las mexicanas aumentaron en mayor medida (un 36%) logrando superar al producto español.



Durante el total del periodo España ha disminuido la exportación de estos productos hacia la Isla en un 31% (con respecto a 2004). En cambio México ha hecho todo lo contrario, aumentó cerca de un 69%, por lo que en el 2008 es el mayor proveedor de diccionarios y enciclope-dias.

Colombia por su parte, en tercer lugar, llegó a superar al resto de países en 2005 con un mi-llón y medio de dólares en exportaciones a Puerto Rico, su tendencia exportadora fluctúa mucho de un año a otro, suponiéndose ventas esporádicas en determinados años. En 2008 las importaciones procedentes de Colombia fueron de cerca de 53.000 dólares, un 48% me-nos que el año anterior.

Estados Unidos ocupa el cuarto lugar muy cerca de Colombia, ambos con una cuota del mer-cado similar (7,33% para Colombia y 7,30% para Estados Unidos).

Gráfico 5. Importaciones del total de diccionarios y enciclopedias en los últimos años


Importaciones de libros de texto (4901.990010)

Los libros de texto suponen la mayor parte de las importaciones del sector, con un 31% sobre el total de productos importados de la partida 4901, por consiguiente supone el mercado más importante dentro del conjunto editorial.

0

200.000

400.000

600.000

800.000

1.000.000

1.200.000

1.400.000

1.600.000

1.800.000

2004 2005 2006 2007 2008

México España Colombia EEUU Otros



Tabla 6. Importaciones de libros de texto en los últimos años (dólares estadounidenses, años natura-les)

País 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08


EE.UU. 12.523.455 14.007.210 20.427.643 13.141.383 14.808.048 12,68% 18,24% % 72,02% 79,64% 81,67% 73,66% 72,57%

Colombia 1.348.356 1.199.967 2.359.556 3.188.982 2.492.511 -21,84% 84,86% % 7,75% 6,82% 9,43% 17,88% 12,21%

México 2.062.191 1.376.719 952.057 590.402 1.335.824 126,26% -35,22% % 11,86% 7,83% 3,81% 3,31% 6,55%

España 1.353.860 375.033 837.525 523.389 887.031 69,48% -34,48% % 7,79% 2,13% 3,35% 2,93% 4,35%

Otros 101.995 629.238 436.874 396.225 882.725 122,78% 765,46% % 0,59% 3,58% 1,75% 2,22% 4,33%

TOTAL 17.389.857 17.588.167 25.013.655 17.840.381 20.406.139 14,38% 17,35%


Durante este periodo la compra de libros de texto alcanzó su máximo pico en 2006 con un va-lor de 25 millones de dólares para luego descender en 2007. En 2008 volvieron a crecer un 14% con respecto al año anterior (con un valor de 20 millones de dólares aproximadamente) pero no llegó a los niveles del 2006. El Gobierno de Puerto Rico es el principal comprador de libros de texto por lo que 2006 fue un año de fuertes adquisiciones por parte de éste.

Los libros son importados principalmente de Estados Unidos con un 72,57% de cuota de mercado en 2008 y un crecimiento del 12,68% con respecto a 2007. Pese a que la lengua vernácula es el castellano, es bastante común que las clases se impartan en español pero utilizando textos en inglés, por eso se entiende que Estados Unidos sea líder en este seg-mento.

A Estados Unidos le siguen Colombia, México y España como países exportadores con un 12,21%, 6,55% y 4,35% de cuota de mercado respectivamente. Las ventas de libro de texto procedente de España son irregulares, varían año a año sin una pauta concreta. En 2008 as-cendieron a 887.031 dólares, un 68% más que en 2007.

Gráfico 6. Importaciones de libros de texto en los últimos años


0

5.000.000

10.000.000

15.000.000

20.000.000

25.000.000

2004 2005 2006 2007 2008

EE.UU. Colombia México España Otros



Importaciones de periódicos encuadernados (4901.990 020)

Tabla 7. Importaciones de periódicos encuadernados en los últimos años (dólares estadounidenses, años naturales)

País 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08


EE.UU. 876.390 498.554 1.042.634 683.786 301.928 -55,84% -65,55% % 87,91% 71,17% 85,61% 92,70% 96,70% Colombia 120.475 89.209 39.065 31.321 5.986 -80,89% -95,03% % 12,09% 12,73% 3,21% 4,25% 1,92% Rep. Dominicana 0 78.840 125.831 20.216 4.330 -78,58% - % 0,00% 11,25% 10,33% 2,74% 1,39% Otros 0 33.945 10.421 2.337 0 -100,00% - % 0,00% 4,85% 0,86% 0,32% 0,00%

TOTAL 996.865 700.548 1.217.951 737.660 312.244 -57,67% -68,68%


Los periódicos encuadernados no tienen gran importancia dentro de la adquisición de produc-tos editoriales. En 2008 su valor en importaciones es de 312.244 dólares, casi un 60% menos que el año anterior. Así, 2008 es el año en el que menos se importó de esta partida desde 2004, que se mantenía en compras de entre setecientos mil y un millón de dólares, descen-diendo bruscamente este último año.

Una vez más, Estados Unidos es líder en el mercado con un 96,70% del total de las ventas, dejando a los países Colombia y República Dominicana (que tuvieron más participación en años anteriores) con un valor residual en las importaciones. Incluso en 2008 no hubo más que estos tres países exportadores hacia Puerto Rico.

Gráfico 7. Importaciones de periódicos encuadernados en los últimos años


0

200.000

400.000

600.000

800.000

1.000.000

1.200.000

2004 2005 2006 2007 2008

EE.UU. Colombia Rep. Dominicana Otros



Importaciones de directorios (4901.990030)

Tabla 8. Importaciones de directorios en los últimos años (dólares estadounidenses, años naturales)

País 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08


México 211.642 28.384 0 234.021 346.471 48,05% 63,71% % 61,82% 18,37% 0,00% 68,33% 93,12% EE.UU. 22.610 0 0 15.313 23.130 51,05% 2,30% % 6,60% 0,00% 0,00% 4,47% 6,22% Colombia 63.974 55.833 63.249 36.881 2.479 -93,28% -96,12% % 18,69% 36,13% 41,30% 10,77% 0,67% Otros 44.129 70.300 89.907 56.291 0 -100,00% -100,00% % 12,89% 45,50% 58,70% 16,44% 0,00%

TOTAL 342.355 154.517 153.156 342.506 372.080 8,63% 8,68%


La importación de directorios se mantiene de 2004 a 2008 entre 150.000 y 400.000 dólares, una cuantía muy pequeña del total de importaciones de productos editoriales. En 2008 alcan-zó el máximo de este periodo con 372.080 dólares, un 8,63% más que el año anterior.

En este caso México es el mayor exportador con una cuota que creció del 68% en 2007 al 93% en 2008. Por su parte, Estados Unidos alcanzó el segundo lugar en 2008, superando excepcionalmente a Colombia que siempre había mantenido sus exportaciones muy por en-cima de las estadounidenses. En 2008 ningún otro país participa en el mercado de los direc-torios como se observa en el Gráfico 8.

España exportó este producto en 2005 y 2006 pero no ha vuelto a tener presencia en este subgrupo.

Gráfico 8. Importaciones de directorios en los últimos años


050.000

100.000150.000200.000

250.000300.000350.000400.000

2004 2005 2006 2007 2008

México EE.UU. Colombia Otros



Importaciones de Biblias y libros religiosos (4901. 990040)

Tabla 9. Importaciones de Biblias y libros religiosos en los últimos años (dólares estadounidenses, años naturales)

País 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08


EE.UU. 1.367.949 1.685.380 1.779.187 1.006.962 978.394 -2,84% -28,48% % 59,10% 61,35% 43,76% 41,76% 47,12% España 382.578 511.361 644.709 562.123 393.130 -30,06% 2,76% % 16,53% 18,61% 15,86% 23,31% 18,93% Colombia 445.378 365.903 695.729 387.939 315.066 -18,78% -29,26% % 19,24% 13,32% 17,11% 16,09% 15,17% Otros 118.628 184.529 945.924 454.514 389.781 -14,24% 228,57% % 5,13% 6,72% 23,27% 18,85% 18,77%

TOTAL 2.314.533 2.747.173 4.065.549 2.411.538 2.076.371 -13,90% -10,29%


Las importaciones de Biblias y libros religiosos se mantuvieron estables de 2004 a 2008 en torno a dos millones de dólares, excepto en 2006 que dobló esta cantidad. En 2008 represen-tan un 3% del total de importaciones de libros, folletos e impresos similares (partida arancela-ria 4901).

En 2008 las importaciones ascendieron a 2.076.371 dólares, un 14% menos que el año ante-rior. El principal país exportador de libros religiosos es Estados Unidos con un 47% de cuota de mercado seguido de España con el 19%. Por lo tanto, España es el líder en exportaciones de tipo de productos a Puerto Rico dentro de los países de habla hispana, aunque sus ventas descendieron un 30% del 2007 al 2008. Muy de cerca le sigue Colombia, con el 15% de la cuota total de importaciones.

Otros países exportadores de esta subpartida a Puerto Rico, sobretodo en 2007 y 2008 son México, Perú y China, aunque su representatividad en el mercado es pequeña individualmen-te.

Gráfico 9. Importaciones de Biblias y libros religiosos en los últimos años


0

200.000

400.000

600.000

800.000

1.000.000

1.200.000

1.400.000

1.600.000

1.800.000

2.000.000

2004 2005 2006 2007 2008

EE.UU. España Colombia Otros



Importaciones de libros técnicos, científicos y pro fesionales (4901.990050)

Tabla 10. Importaciones de libros técnicos, científicos y profesionales en los últimos años (dólares es-tadounidenses, años naturales)

País 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08


EE.UU. 4.629.361 2.451.865 2.814.319 5.546.552 2.906.709 -47,59% -37,21% % 92,14% 83,20% 90,25% 87,15% 72,66% Colombia 134.529 117.210 41.591 355.071 405.571 14,22% 201,47% % 2,68% 3,98% 1,33% 5,58% 10,14% México 110.724 160.160 63.259 282.773 300.134 6,14% 171,06% % 2,20% 5,43% 2,03% 4,44% 7,50% España 98.379 187.876 128.534 134.044 226.972 69,33% 130,71% % 1,96% 6,37% 4,12% 2,11% 5,67% Otros 51.073 30.016 70.582 45.636 161.036 252,87% 215,31% % 1,02% 1,02% 2,26% 0,72% 4,03%

TOTAL 5.024.066 2.947.127 3.118.285 6.364.076 4.000.422 -37,14% -20,37%


Los libros técnicos, científicos y profesionales se adquieren mayoritariamente de Estados Unidos. En 2008 la participación en el mercado de este país fue de 72,66%, la menor desde 2004. En cambio Colombia, México y España han aumentado su cuota en 2008 (10,14%, 7,50% y 5,67% respectivamente)

Las importaciones totales varían cada año, siendo en 2008 de cuatro millones de dólares, un 37% menos que el año anterior. Este mismo año suponen un 6% del total de importaciones de productos editoriales.

Gráfico 10. Importaciones de libros técnicos, científicos y profesionales en los últimos años


0

1.000.000

2.000.000

3.000.000

4.000.000

5.000.000

6.000.000

2004 2005 2006 2007 2008

EE.UU. Colombia México España Otros



Importaciones de libros de arte (4901.990055, 4901. 990060 y 4901.990065)

En este grupo se procede a analizar tres subpartidas conjuntamente, debido al poco peso que tiene cada una de ellas individualmente en el total de importaciones.

Por lo tanto se unen las partidas según el HTSUS: 4901.990055 que corresponde a la partida de libros de arte y pintura cuando proceden de Estados Unidos; la partida 4901.990060, que son los libros de arte de menos de 5 dólares cuando proceden de otros países extranjeros que no son de Estados Unidos; y la partida 4901.99065, que son los libros de arte de 5 dóla-res o más cuando proceden de otros países extranjeros que no son de Estados Unidos.

Tabla 11. Importaciones de libros de arte en los últimos años (dólares estadounidenses, años natura-les)

País 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08


EEUU 603.928 61.049 85.922 59.253 250.385 322,57% -58,54% % 96,81% 95,02% 96,46% 70,50% 82,10% China 0 0 0 0 46.870 - - % 0,00% 0,00% 0,00% 0,00% 15,37% Hong Kong 0 3.198 0 7.920 7.723 -2,49% - % 0,00% 4,98% 0,00% 9,42% 2,53% Otros 19.893 0 3.150 16.873 0 -100,00% -100,00% % 3,19% 0,00% 3,54% 20,08% 0,00%

TOTAL 623.821 64.247 89.072 84.046 304.978 262,87% -51,11%


La aportación de estas partidas al total de importaciones es pequeña e irregular a lo largo de los años. En 2008 fue de 304.978 dólares, lo que supone un aumento del 263% con respecto a 2008, y a su vez un descenso del 51% con respecto al 2004.

El principal exportador de libros de arte es Estados Unidos, con un 82,10% de cuota en 2008. China es el segundo este mismo año con 15,37% y se trata de una venta esporádica puesto que no se produjo ninguna otra en años anteriores. El tercer país es Hong Kong con un 2,53% de cuota.

Gráfico 11. Importaciones de libros de arte en los últimos años

0

200.000

400.000

600.000

800.000

2004 2005 2006 2007 2008

EEUU China Hong Kong Otros




Importaciones de libros de pasta dura, “hardbound b ooks” (4901.990070)

Tabla 12. Importaciones de libros de pasta dura en los últimos años (dólares estadounidenses, años naturales)

País 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08


EE.UU. 2.019.015 8.014.853 7.506.911 3.490.944 3.868.216 10,81% 91,59% % 94,92% 92,63% 97,29% 92,18% 85,91% Chile 0 337.620 0 100.425 331.857 230,45% - % 0,00% 3,90% 0,00% 2,65% 7,37% España 0 85.458 98.858 21.881 170.584 679,60% - % 0,00% 0,99% 1,28% 0,58% 3,79% Colombia 94.853 64.648 36.066 58.135 83.299 43,29% -12,18% % 4,46% 0,75% 0,47% 1,54% 1,85% Otros 13.248 150.120 73.831 115.762 48.935 -57,73% 269,38% % 0,62% 1,73% 0,96% 3,06% 1,09%

TOTAL 2.127.116 8.652.699 7.715.666 3.787.147 4.502.891 18,90% 111,69%


Los libros de pasta dura suponen en 2008 un 7% del total de las importaciones del sector edi-torial.

Durante los años 2005 y 2006 tuvieron un fuerte crecimiento de la mano de las importaciones de Estados Unidos que tuvo una tendencia a publicar libros en este formato durante esos años. En 2007 bajaron aproximadamente cuatro millones de dólares sus ventas en la Isla. En 2008 aumentó casi un 19% el total de importaciones de esta clase de libros. El principal pro-veedor es Estados Unidos con un 86% de cuota, pero países como Chile, España y Colombia han visto incrementada su importancia dentro del total.

Cabe destacar que España aumentó sustancialmente sus exportaciones de este producto en 2008 con respecto a 2007 en un 680%.

Gráfico 12. Importaciones de libros de pasta dura en los últimos años

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2.000.000

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6.000.000

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2004 2005 2006 2007 2008

EE.UU. Chile España Colombia Otros




Importaciones de libros de bolsillo, “rack size pap erbound” (4901.990075)

Tabla 13. Importaciones de libros de bolsillo en los últimos años (dólares estadounidenses, años natu-rales)

País 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08


EE.UU. 208.824 1.058.486 1.119.846 3.221.179 4.775.439 48,25% 2186,82% % 98,06% 95,06% 92,81% 97,30% 94,51% España 4.131 27.343 71.725 74.543 114.752 53,94% 2677,83% % 1,94% 2,46% 5,94% 2,25% 2,27% Colombia 0 2.340 0 0 105.187 - - % 0,00% 0,21% 0,00% 0,00% 2,08% Otros 0 25.351 15.075 14.898 57.564 286,39% - % 0,00% 2,28% 1,25% 0,45% 1,14%

TOTAL 212.955 1.113.520 1.206.646 3.310.620 5.052.942 52,63% 2272,77%


Las importaciones de libros en formato de bolsillo han aumentado considerablemente estos años alcanzando una representación del 7% del total de importaciones de productos editoria-les. En 2008 se alcanzó un valor importado de cinco millones de dólares, un 53% más que el 2007, sobre todo debido a las ventas de Estados Unidos, que es el primer proveedor con un 94,51% de cuota de mercado. España a pesar de que sólo tiene un 2,27% del mercado, ocu-pa el segundo lugar en origen de importaciones tras duplicar sus ventas de 2007. En tercer lugar está Colombia con un 2% de representatividad.

Gráfico 13. Importaciones de libros de bolsillo en los últimos años


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2004 2005 2006 2007 2008

EE.UU. España Colombia Otros



Importaciones de “otros libros” (4901.990091, 4901. 990092 y 4901.990093)

La clasificación arancelaria HTSUS separa las importaciones de “otros libros” en tres partidas arancelarias en función de su número de páginas y establece las siguientes categorías:

- 4901990091 Otros libros de no más de 4 páginas (carátulas excluidas)

- 4901990092 Otros libros de entre 5 o más páginas y no más de 48

- 4901990093 Otros libros de 49 o más páginas

A continuación se muestra en la Tabla 14 un análisis conjunto de estas subpartidas arancela-rias.

Tabla 14. Importaciones de otros libros en los últimos años (dólares estadounidenses, años naturales)

País Producto 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08


Colombia Hasta 4 pág. 0 0 0 4.990 0 -100% - De 5 a 48 pág. 68.969 156.342 18.248 16.928 98.672 482,89% 43,07% Más de 48 pág. 3.257.758 4.111.223 5.402.339 4.442.517 5.463.807 22,99% 67,72% Total 3.326.727 4.267.565 5.420.587 4.464.435 5.562.479 24,60% 67,21% % 26,30% 29,59% 30,95% 27,29% 42,86% México Hasta 4 pág. 0 0 0 0 0 - - De 5 a 48 pág. 169.992 356.291 214.212 57.543 87.335 51,77% -48,62% Más de 48 pág. 1.075.494 2.236.233 3.487.974 3.864.771 2.235.110 -42,17% 107,82% Total 1.245.486 2.592.524 3.702.186 3.922.314 2.322.445 -40,79% 86,47% % 9,85% 17,97% 21,14% 23,98% 17,90% EE.UU. Hasta 4 pág. 848.690 578.818 1.062.291 682162 444841 -34,79% -47,58%

De 5 a 48 pág. 375.832 1.172.629 852.894 182350 504251 176,53% 34,17% Más de 48 pág. 901.569 204.261 484.715 2547899 908704 -64,34% 0,79% Total 2.126.091 1.955.708 2.399.900 3.412.411 1.857.796 -45,56% -12,62% % 16,81% 13,56% 13,70% 20,86% 14,32% España Hasta 4 pág. 0 0 0 0 0 - - De 5 a 48 pág. 359.189 227.952 631.406 115.234 255.064 121,34% -28,99% Más de 48 pág. 4.584.018 4.135.316 3.693.677 2.571.312 1.250.158 -51,38% -72,73% Total 4.943.207 4.363.268 4.325.083 2.686.546 1.505.222 -43,97% -69,55% % 39,08% 30,25% 24,69% 16,42% 11,60% Otros Hasta 4 pág. 0 13.661 0 0 33.532 - - De 5 a 48 pág. 41.165 33.286 67.300 29.835 58.721 96,82% 42,65% Más de 48 pág. 966.463 1.198.018 1.600.797 1.843.642 1.636.967 -11,21% 69,38% Total 1.007.628 1.244.965 1.668.097 1.873.477 1.729.220 -7,70% 71,61% % 7,97% 8,63% 9,52% 11,45% 13,33%

TOTAL 12.649.139 14.424.030 17.515.853 16.359.183 12.977.162 -20,67% 2,59%


Dentro de esta partida de “otros libros” cobran especial relevancia los libros de 49 o más pá-ginas, que suponen un 16% del total de importaciones puertorriqueñas del sector editorial. La partida de “otros libros” en total representa un 19% de todas las importaciones de productos editoriales durante el 2008 y su valor ascendió a casi 13 millones de dólares.

El principal país exportador de libros bajo esta denominación es Colombia que acapara un 42,86% de la cuota de mercado y cuyas exportaciones crecieron un 25% del 2007 al 2008. El



subgrupo que más peso tuvo en las ventas colombianas fueron los libros de 49 o más hojas, y no realizó ninguna venta de libros de hasta 4 páginas.

México se encuentra en segundo lugar con un 17,90% del mercado, aunque sus exportacio-nes descendieron un 41% con respecto al año anterior. Al igual que Colombia, no realizó nin-guna venta de libros de menos de 4 páginas, y la mayor aportación a éstas fueron los libros de 49 o más páginas.

El tercer lugar lo ocupa Estados Unidos, que tiene una cuota del 14,32%, y realiza ventas de libros pertenecientes a todos los subgrupos de “otros libros”.

España está en la cuarta posición, y su cuota de mercado ha ido descendiendo progresiva-mente todos estos años pasando de un 39% en 2004 a un 11,60% en 2008. En 2006 supera-ba tanto a México como Estados Unidos en exportaciones a Puerto Rico de “otros libros”, fue en 2007 cuando sus ventas cayeron drásticamente y ocupó el cuarto lugar. España tampoco exporta libros de menos de 4 páginas a la Isla, y su mayor mercado en este grupo son los li-bros de 49 o más páginas.

Gráfico 14. Importaciones de otros libros en los últimos años


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2004 2005 2006 2007 2008

Colombia México EE.UU. España Otros



Exportaciones de Libros

Si bien Puerto Rico es un país principalmente importador de productos editoriales, también exporta a otros países aunque una cuantía muy inferior.

Exportaciones de libros, folletos e impresos simila res

La Tabla 5 indica las exportaciones de Puerto Rico bajo la partida arancelaria 4901 (libros, fo-lletos e impresos similares) desglosada por países y en el periodo que va de 2004 a 2008.

Tabla 15. Exportaciones de libros, folletos e impresos similares por países en los últimos años (dólares estadounidenses, años naturales)

País 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08


EE.UU. 5.200.176 5.251.980 7.924.684 8.240.112 8.823.950 7,09% 69,69% % 89,74% 76,47% 83,98% 80,44% 81,14% México 5.901 440.111 179.557 782.233 774.028 -1,05% 13016,90% % 0,10% 6,41% 1,90% 7,64% 7,12% Islas Vírgenes EE.UU. 143.389 510.966 219.718 344.331 366.689 6,49% 155,73% % 2,47% 7,44% 2,33% 3,36% 3,37% Rep. Dominicana 60.817 90.304 254.454 221.152 282.204 27,61% 364,02% % 1,05% 1,31% 2,70% 2,16% 2,60% Otros 384.438 574.413 858.015 655.867 627.765 -4,28% 63,29% % 6,63% 8,36% 9,09% 6,40% 5,77%

TOTAL 5.794.721 6.867.774 9.436.428 10.243.695 10.874.636 6,16% 87,66%


Como se aprecia en la Tabla 15 las exportaciones fueron en aumento durante estos años, creciendo un 87,66% en 2008 con respecto a 2004. El mayor incremento se observa en el año 2006 con respecto al año anterior. En 2008 subieron un 6,16% con respecto a 2007, si-tuándose en un total de 10.874.636 dólares.

Al igual que sucede con el origen de las importaciones, el principal país de destino de las ex-portaciones es Estados Unidos. En 2008 un 81% del total de las exportaciones puertorrique-ñas fueron a parar a este país, lo que supone un aumento del 7% con respecto al año ante-rior.

El segundo país de destino de las exportaciones es México, su valor aumentó exagerada-mente durante estos años pasando de tan sólo 5.900 dólares en 2006 a 774.000 dólares en 2008, abarcando ahora un 7,12% de la cuota de exportación de Puerto Rico.

Las exportaciones a las Islas Vírgenes estadounidenses representan un 3,37% del total man-teniendo una tendencia más o menos estable durante estos años. Son el tercer destino en 2008 y aumentaron un 6,49% con respecto al año anterior.



La República Dominicana es el cuarto país donde llegan las exportaciones puertorriqueñas con un 2,60% del total.

En cuanto al tipo de productos editoriales exportados, la Tabla 16 muestra los principales ti-pos de libros dentro de la partida 4901 que Puerto Rico vende en el exterior y su evolución en el periodo de 2004 a 2008.

Tabla 16. Exportaciones de libros, folletos e impresos similares por productos en los últimos años (dó-lares estadounidenses, años naturales)

Producto 2004 2005 2006 2007 2008 Variación 2007 - 08


Libros de bolsillo 9.986 10.440 57.855 1.611.656 4.368.319 171,05% 43644,43% Libros de texto 2.959.380 2.333.164 2.273.183 3.111.988 3.923.490 26,08% 32,58% Libros, folletos impresos en hojas sueltas, incl. plegadas 231.793 1.257.590 1.848.345 1.187.992 1.193.354 0,45% 414,84%

Otros de no más de 4 páginas 79.620 63.814 144.920 25.176 509.794 1924,92% 540,28% Libros técnicos, científicos y profesionales 2.102.452 548.349 414.321 457.570 252.770 -44,76% -87,98%

Enciclopedias 0 0 22.090 133.882 234.934 75,48% - Biblias y libros religiosos 3.407 100.000 29.451 48.839 153.850 215,01% 4415,70% Libros de pasta dura 343.061 2.484.380 4.303.812 3.275.175 124.266 -96,21% -63,78% Otros de 49 o más páginas 48.022 47.652 236.719 178.614 59.600 -66,63% 24,11% Libros de arte 0 7.580 42.359 57.425 36.288 -36,81% - Directorios 0 7.000 0 0 13.971 - - Periódicos encuadernados 3.000 7.805 45.973 0 4.000 - 33,33% Otros de entre 5 o más páginas y no más de 48 14.000 0 0 155.378 0 -100,00% -100,00%

Diccionarios 0 0 17.400 0 0 - - TOTAL 5.794.721 6.867.774 9.436.428 10.243.695 10.874.636 6,16% 87,66%


En primer lugar se encuentran los libros de bolsillo que representan un 40,17% del total de las exportaciones, y sus ventas aumentaron drásticamente de cerca de diez mil dólares en 2004 a cuatro millones de dólares aproximadamente en 2008.



2. ANÁLISIS CUALITATIVO

2.1. Producción

Puerto Rico es un país importador de productos editoriales, su saldo comercial es negativo. El principal motivo por el cual no se llevan a cabo impresiones a gran escala es el alto coste y dificultades de transporte que presenta la Isla respecto a otros países, por lo que se favorece la importación a la producción local.

Si bien es posible clasificar las actividades relacionadas con este sector según el sistema de clasificación norteamericano de industrias (North American Classification System –NAICS-), en dos grandes grupos:

3231 – Printing and related support activities (imprenta y actividades de apoyo relacionadas)

511 – Publishing industries (except Internet) (industrias editoriales, excepto internet)

Del primero de los grupos se obtiene la información en la Oficina del Censo de Estados Uni-dos (US Census Bureau) sobre los establecimientos que realizaron este tipo de actividades en Puerto Rico en 2007 (189) y el número de empleados en la industria durante el mismo año (2.521). Pero no se obtienen específicamente datos de producción, así como tampoco hay datos estadísticos del grupo 511 de Publishing industries.

2.2. Obstáculos comerciales

Normas técnicas de fabricación y homologación

No existe ninguna regulación especial que afecte al comercio del libro, pero se puede afirmar que, en la mayoría de los casos, a la hora de distribuir los libros se exija tener el código ISBN (International Standard Book Number).

El ISBN -International Standard Book Number- (Norma ISO 2108) es un número creado para dotar a cada libro de un código numérico que lo identifique. Este número permite coordinar y normalizar la identificación de cualquier libro, independientemente de su soporte, utilizar herramientas informáticas para localizarlo y facilitar su circulación en el mercado editorial.

El 1 de enero de 2007 pasó de tener una longitud de 10 dígitos a 13 dígitos. Este cambio ha afectado a todos los sectores de la producción y comercio del libro, y se ha producido para aumentar la capacidad del sistema ISBN y alcanzar la compatibilidad total con el código EAN-13 (European Article Number), usado para otros productos y otras cadenas de suministro.

Cada ISBN consta de 13 dígitos, agrupados en cinco bloques, y, al imprimirlo, ha de ir siem-pre precedido por las siglas ISBN.



Las cinco partes son las siguientes:

Prefijo: es un número de 3 dígitos que proporciona EAN Internacional e identifica el produc-to libro. Hasta el momento EAN Internacional ha asignado los códigos 978 y 979.

Identificador de grupo: identifica el grupo nacional, geográfico o lingüístico de las editoriales. A España se le asignó el 84.

Prefijo editorial: identifica a una editorial concreta de cada grupo nacional, geográfico o lin-güísitico.

Número de título: identifica el título específico o la edición de una obra publicada por una editorial concreta.

Dígito de comprobación: consta de un solo dígito, que garantiza la correcta utilización de todo el sistema.

Cada grupo de números debe ir separado del anterior con un guión, es necesario para poder leerlo correctamente.

La responsabilidad de solicitar el ISBN es del editor. Se considera editor a la persona indivi-dual o jurídica que manda imprimir obras propias o ajenas y cuyo nombre figura en las mis-mas como responsable de su difusión. Los editores han tenido que convertir sus ISBN de 10 dígitos al formato de 13, para ello la Agencia Española ISBN ha proporcionado listados do-bles a las casas editoriales para facilitar la conversión del formato, para saber los prefijos convertidos se debe contactar con la Agencia.

Cada editorial debe solicitar su ISBN en la Agencia del país al que corresponda su domicilio, así las editoriales españolas deberán solicitarlo en la Agencia Española del ISBN con la si-guiente dirección:

Agencia Española del ISBN

C/ Santiago Rusiñol, 8

28040 Madrid

Tel.: +34 91 536 88 00

Fax: +34 91 553 99 90

E-mail: [email protected]

En cambio las editoriales puertorriqueñas, con domicilio en territorio estadounidense y que publiquen ahí sus títulos deben solicitar a la Agencia Estadounidense del ISBN:

U.S. ISBN Agency

630 Central Avenue

New Providence, NJ 07974

Tel.: +1 877 310 7333

Fax: +1 908 219 0188




Para información adicional se puede contactar con la siguiente dirección de correo electróni-co: [email protected].

Régimen Fiscal

Puerto Rico forma parte del territorio aduanero de los Estados Unidos, toda mercancía proce-dente de terceros países queda sometida a un doble gravamen: por una parte, el arancel que se aplica a todo producto que se introduce en territorio estadounidense; y por otra, el impues-to sobre las ventas y uso del territorio de Puerto Rico.

En lo que respecta al arancel federal del gobierno de los Estados Unidos, se utiliza como re-ferencia el sistema de clasificación de mercancías HTSUS (Harmonized Tariff Schedule of the United States). En este caso, los productos editoriales, como se vio anteriormente, corres-ponden a la partida arancelaria 4901 (capítulo 49) y el arancel aplicable a éstos para mercan-cías procedentes de España responde a los criterios de MFN (Most Favoured Nation) y se trata de un 0% en todos los subgrupos de la partida 4901. Por lo tanto, los libros y otro mate-rial editorial procedentes de España están exentos de pago en la Aduana Estadounidense.

El arancel se puede consultar por Internet a través de la página web de la Comisión Nortea-mericana de Comercio Internacional (United States International Trade Commission): www.dataweb.usitc.gov; o accediendo a la página web “Market Access Database”: www.mkaccdb.eu.int.

El impuesto sobre las ventas y el uso (IVU) se implementó en Puerto Rico en el año 2006 con el Reglamento 7249 del IVU de 14 de noviembre de 2006. Se trata de un impuesto fijado so-bre toda transacción de venta al por menor, uso, consumo o almacenamiento de un partida tributable en Puerto Rico. La tasa impositiva estatal es del 7% sobre el precio total de venta al consumidor (correspondiente a una tasa contributiva estatal del 6% y otra municipal del 1%).

Según la Ley Núm. 117 de 4 de julio de 2006, toda persona que lleve a cabo negocios en Puerto Rico como comerciante deberá presentar al Secretario de Hacienda una solicitud de certificado de Registro de Comerciantes. Este certificado autoriza la venta de partidas tributa-bles, que incluyen artículos y servicios sujetos al IVU. Son los comerciantes los encargados de remitir la recaudación al Departamento de Hacienda. Está sujeta al impuesto la venta de todos los bienes muebles tangibles, los derechos de admisión y los servicios, aunque también existen algunas excepciones entre las que no se encuentran los libros.

En caso de que una empresa desee establecerse en Puerto Rico obtendrá la información necesaria para operar con el IVU en la página web del Departamento de Hacienda: http://www.hacienda.gobierno.pr/Ivu/.

Protección de los derechos de autor

Cada país tiene sus propias normas de protección de derechos de autor (copyright). Asimis-mo, hay tratados internacionales, como el Tratado de Berna, a los que están adheridos mu-chos países para complementar tales derechos. Los creadores suelen vender los derechos



sobre sus obras a particulares o empresas más capaces de comercializar sus obras, por el pago de un importe, y es lo que sucede en el caso de los autores obras literarias y sus edito-riales.

El derecho de autor como tal no depende de ningún procedimiento oficial. Se considera que, por su mera existencia, toda obra creada queda protegida por el derecho de autor. El Conve-nio de Berna para la Protección de las Obras Literarias y Artísticas establece que las obras li-terarias y artísticas quedan protegidas sin ninguna formalidad en los países parte en dicho Convenio (tanto España como Estados Unidos se encuentran dentro del marco del Convenio de Berna). La Organización Mundial de la Propiedad Intelectual (OMPI) no ofrece, pues, nin-gún sistema de registro para el derecho de autor.

No obstante, muchos países cuentan con una oficina nacional de derecho de autor y algunas legislaciones nacionales permiten el registro de obras, por ejemplo, con el propósito de identi-ficar y distinguir los títulos de las obras. En algunos países, el registro también puede servir como prueba irrefutable ante un tribunal de justicia en el caso de controversias relacionadas con el derecho de autor, es el caso de Estados Unidos.

Para registrar una obra literaria es necesario contactar con la oficina de copyright en Estados Unidos y abonar unas tasas que pueden variar cada año. Para más información y obtener las solicitudes a enviar se puede visitar la página web: www.copyright.com.

En Puerto Rico existe un Registro de la Propiedad Intelectual en el Departamento de Estado que ampara los derechos de autor bajo la Ley Núm. 96 del 15 de julio de 1988. Para acceder al registro visitar la página: www.estado.gobierno.pr/prop.intelectual.

Conviene inscribir las obras en ambos registros aunque la Oficina de Copyright de Washing-ton ofrece más seguridades jurídicas.

Embalaje

Los libros se transportan habitualmente embalados adecuadamente en pallets de madera.

En materia de embalaje es aplicable la normativa establecida por la Aduana Federal de los Estados Unidos. Los embalajes en madera con destino al país deben estar tratados (fumiga-dos) y marcados según lo previsto en la Publicación nº 15 de las Normas Internacionales para Medidas Fitosanitarias (NIMF).

En esta normativa se incorporan los estándares internaciones de la International Plant Protec-tion Convention (IPPC)/FAO, lo cual supone el tratamiento de pallets y embalajes de madera sólida previo a la exportación a Estados Unidos (y por ende a Puerto Rico), por procedimien-tos térmicos o de fumigación de metil-bromuro estandarizados y el marcado de los productos así tratados.

La IPPC/FAO ha publicado una guía para regular los embalajes de madera en el transporte internacional (Internacional Standards for Phytosanitary Measures 15; ISPM 15) sobre la que se ha desarrollado la resolución de APHIS, y que exige que cualquier material de embalaje de madera sea adecuadamente tratado y marcado de acuerdo con un programa oficial desarro-llado y supervisado por el organismo nacional encargado del control de plagas en el país de origen de la mercancía.

Para más información puede consultar la página web de APHIS:



www.aphis.usda.gov/ppq/swp/import.

Transporte

El transporte de libros de interés general normalmente se lleva a cabo por vía marítima, más económica que la aérea. Desde los distintos puertos de España legan al Puerto de San Juan varios buques de carga al mes, por lo que las comunicaciones son bastante extensas.

En el caso de producto procedente de Estados Unidos se deben tener en cuenta las particu-lares Leyes de Cabotaje que se aplican en el transporte marítimo entre Estados Unidos y Puerto Rico y que obligan a que en el transporte de mercancías interestatal se utilice exclusi-vamente la marina mercante estadounidense. Al ser la flota más cara del mundo, el sobrecos-te (estimado en más de un 20% de los precios internacionales).

Para los libros de texto, el barco también es el principal medio de transporte. No obstante, si el pedido es urgente y la rapidez en que este llegue a San Juan prima sobre el coste, el en-vío se hace por vía aérea, utilizando una compañía aérea u otra, dependiendo del lugar de procedencia y las tarifas vigentes.

En estos momentos, algunos importadores puertorriqueños ven como una traba el alto coste del transporte aéreo. Iberia Cargo por ejemplo aplica las siguientes tarifas en su transporte aéreo:

Tarifas (Euros)

Mínima 51,09

Kg desde Tarifa/kg

1 5,26

100 3,16

300 2,38

500 2,07

Medios de pago

Todo depende de lo estipulado por las partes. Por lo general, cuando las relaciones entre el suministrador y el distribuidor puertorriqueño están comenzando, se exige el pago al contado, ya sea por medio de transferencia bancaria o cheque. Esta situación podría variar si el sumi-nistrador cuenta con buenas referencias del distribuidor, en cuyo caso puede ofrecerle unas condiciones de pago menos onerosas.

Cuando existe una relación de confianza, se pueden dar diversas fórmulas de pago. Una po-sibilidad es el pago del 50% al contado y el resto a 90 o 120 días.



III. ANÁLISIS DEL COMERCIO

1. ANÁLISIS CUANTITATIVO

1.1. Canales de distribución

El esquema en términos generales de la cadena de distribución cuenta con tres eslabones: editorial, distribuidor y librería / cadena de librerías.

La primera, es la casa editora o empresa dedicada a la impresión y publicación de libros u otro tipo de impresos, y posterior distribución. Sus funciones varían dependiendo de la com-pañía, existen editoriales que tienen sus propias imprentas y otras que externalizan esa fun-ción. También están las que utilizan distribuidores para la difusión de su producto y las que se saltan esa fase de la distribución y acuden directamente al minorista o cliente final.

El distribuidor local sería un importador que actúa como representante de la marca. Compra normalmente en firme la mercancía y se encarga de la comercialización y venta del producto. Su beneficio depende de los márgenes que aplique como sobreprecio y de los descuentos que le conceda la casa editora. Esta figura, en ocasiones también deja de lado al minorista para vender al cliente final como se comentará más adelante.

La librería tradicional tal y como se conoce es el último eslabón de la cadena y el que menos poder de negociación tiene. Se trata de aquellos establecimientos y espacios en los que el principal producto en venta son los libros aunque los mismos pueden estar complementados por revistas, diarios y, como sucede en la actualidad, por otros materiales multimedia.

La cadena de librerías presente en Puerto Rico (Borders) es el concepto de librería tradicional pero con unos volúmenes de producto a la venta mucho mayores. Normalmente compra su producto a la matriz, que a su vez adquiere los libros directamente de las editoriales, por lo que obtienen un mejor precio y sus establecimientos resultan más competitivos.

En el sector editorial puertorriqueño coexisten las cuatro figuras y se dan distintas combina-ciones de distribución hasta que el producto es vendido.



Cabe destacar que el principal comprador de libros del país es el propio Gobierno de Puerto Rico a través del Departamento de Educación. Por lo tanto, los mayores esfuerzos de las edi-toriales y distribuidoras irán dirigidos a la promoción de libros de texto, que, como se comentó en el apartado de la oferta del sector, es la partida arancelaria con mayor número de importa-ciones dentro de los productos editoriales.

A las escuelas públicas bajo el mando del Departamento de Educación hay que sumarle las escuelas privadas que existen en Puerto Rico que también demandan libros de texto.

La figura del distribuidor toma relevancia en este contexto, sobre todo al dirigirse a escuelas privadas. A pesar de que existen colegios privados que compran directamente a la editorial, el 70% elige al distribuidor como proveedor. De este modo el distribuidor combina dos nego-cios: la representación de casas editoriales, tiene que lograr que el colegio elija para la ense-ñanza el manual que el distribuidor le presenta; y por otra parte, como detallista para conse-guir la venta de los libros al cliente final que son los padres de los alumnos.

La distribución al Departamento de Educación difiere de los colegios públicos y requiere ma-yor esfuerzo en tiempo y promoción. El Gobierno publica listas con las necesidades de libros y el distribuidor le ofrece los productos que cree que resultan más convenientes.

Principales editoriales presentes e Puerto Rico que publican libros en español:

GRUPO SANTILLANA PUERTO RICO Editorial especializada en libros de texto y del profesor y literatura infantil y juvenil. www.gruposantillanapr.com

EDICIONES SM Ubicado en una posición de liderazgo en la industria del libro de texto y de literatura infantil y juvenil. www.ediciones-smpr.com

EDITORIAL PLAZA MAYOR Libros de texto escolares y de literatura general. Literatura de Puerto Rico y Cuba. Distribu-ción de libros en Iberoamérica y Estados Unidos. www.editorialplazamayor.com

EDITORIAL CORDILLERA Editorial Cordillera se ha destacado en la edición, publicación y distribución de obras literarias en español, materiales educativos y obras clásicas puertorriqueñas. www.editorialcordillera.com

ANISA, INC. Libros y materiales educativos distribuidos en Puerto Rico, Estados Unidos y Latinoamérica. www.anisapr.com

LA EDITORIAL UNIVERSIDAD DE PUERTO RICO La Editorial Universidad de Puerto Rico se creó con el propósito de fomentar, enriquecer y di-fundir ampliamente los conocimientos que se generan en la Universidad. www.laeditorialupr.com



PUBLICACIONES PUERTORRIQUEÑAS Editorial especializada en el Libro para el profesor, editor y autores puertorriqueños. www.publicacionespr.com

EDICIONES PUERTO

El fondo editorial incluye mayormente libros sobre la historia de Puerto Rico. www.edicionespuerto.com

2. ANÁLISIS CUALITATIVO

2.1. Estrategias de canal

Para una empresa editorial extranjera, en principio, lo mejor sería acceder al mercado a tra-vés de un distribuidor local que pueda promocionar sus productos.

La normativa que regula la distribución a nivel local es la Ley Núm. 75 sobre los Contratos de Distribución, se trata de una regulación muy proteccionista con el distribuidor local.

El espíritu de la Ley pretende nivelar las condiciones de contratación de dos grupos económi-camente dispares, ya que existe un desequilibrio entre las dos partes. La Ley Núm. 75 pre-tende proteger a los distribuidores frente a aquellos productores que, una vez han conseguido un hueco en el mercado, eliminan arbitrariamente los contratos de distribución.

De acuerdo con la ley, la única razón por la que puede darse por terminada la relación es jus-ta causa (entendida como incumplimiento de algunas de las obligaciones esenciales del con-trato de distribución por parte del distribuidor, o cualquier otro tipo de acción u omisión que afecte negativamente al principal). Si no mediara justa causa, el fabricante tendría que in-demnizar al distribuidor por el tiempo, dinero, energía e instalaciones consumidas. La ley pre-tende con esto incentivar la continuidad de los contratos.

Las principales condiciones que se deberían tratar con el distribuidor son: plazos de cobro de los pedidos, obligatoriedad de distribución del catálogo completo, porcentaje de devoluciones sobre ejemplares servidos, límites o plazos máximos en caso de devoluciones, compromisos reposición en plazo determinado, obligatoriedad de pedidos mínimos, proporción mínima compra en firme, etc.

El segmento principal y de mayor demanda son los libros de texto y de apoyo escolar y uni-versitario. Aunque existen nichos de mercado como los libros religiosos o los libros de lectura de bolsillo que podrían ser interesantes teniendo en cuenta en qué tipo de productos esté es-pecializada la editora.

Otras estrategias para la entrada en el país es crear joint ventures con otra editora para facili-tar la distribución conjunta de los productos. No obstante esta fórmula suele terminar con la ruptura de la relación o la absorción de una empresa a la otra.

Por otra parte el editor puede seguir una estrategia de diferenciación frente a competidores basada en el tipo de contenidos (especialización en una determinada materia); en una calidad superior de la edición (mejores materiales, diseño, etc.); en conseguir autores conocidos para los libros de interés general; en resolución de incidencias correctamente y una política de de-volución aceptable; en ampliar información de la oferta editorial al distribuidor y a las propias librerías; ofreciendo facilidades de financiación; etc. O bien puede declinarse por obtener un liderazgo en costes a través de los precios y descuentos y la eficacia comercial.



2.2. Estrategias para el contacto comercial

Las relaciones entre editoriales y distribuidores se entablan principalmente en ferias y por medio de contactos y referencias. Las ferias permiten el contacto personal entre ambas par-tes y llevan a la negociación preliminar.

Las referencias son también un buen medio. De esta manera, la editorial, antes de contactar con un posible distribuidor en Puerto Rico, ya tiene conocimiento de su forma de trabajar, si cumple adecuadamente con los pagos y si va a promocionar y distribuir el producto adecua-damente.

2.3. Condiciones de acceso

Como ya se comentó anteriormente Puerto Rico es un territorio bajo la soberanía de Estados Unidos, por lo que los libros tienen la protección de los derechos de autor, como en el resto de países firmantes del Convenio de Berna para la Protección de Obras Literarias y Artísticas de 9 de septiembre de 1886.

En Puerto Rico una editorial puede tener los derechos para un libro en español, mientras que otra editorial distinta puede tener los derechos para ese mismo libro pero en inglés. Es impor-tante que quede bien delimitado si la editorial tiene los derechos para Estados Unidos inclu-yendo Puerto Rico, o si Puerto Rico se considera de forma separada. Para ello es necesario consultar las oficinas de Copyright tanto de Washington como de Puerto Rico.

2.4. Condiciones de suministro

En el caso de los libros de texto, las ventas son muy estacionales. El comienzo del curso es-colar concentra prácticamente la totalidad de las ventas. En Puerto Rico, el curso escolar va de agosto a mayo. Esto implica que la venta se realiza entre mayo y julio, por lo que los pedi-dos deben llegar a Puerto Rico previo a esta fecha.

Los libros de lectura de interés general y demás productos editoriales objeto de estudio no están sometidos a tanta estacionalidad en las ventas. Las ventas se suceden de forma regu-lar a lo largo del año, con algunas épocas de mayor venta como Navidad (lo que englobaría los meses de noviembre a enero).

Desde que el distribuidor ordena el pedido, hasta que este se materializa, pueden pasar entre dos y tres semanas, más el tiempo de transporte (vía marítima), por lo que la mercancía se suele demorar en torno a un mes desde el pedido hasta su recepción.



2.5. Promoción y publicidad

La promoción y publicidad del producto editorial dependerá de lo pactado por las partes. Si la editora vende la mercancía sin ningún tipo de material promocional de apoyo le aplicará un descuento mayor al distribuidor en la transacción. Normalmente la editorial siempre aporta muestras, carteles, etc; aunque en ocasiones el distribuidor tiene que encargarse igualmente del soporte publicitario debido a las adaptaciones que se deben hacer para este mercado.

Generalmente, en Puerto Rico es el distribuidor en ocasiones junto a las librerías, el que se encarga de llevar a cabo el esfuerzo promocional. Envían muestras a los principales medios de comunicación (sobre todo periódicos), organizan presentaciones de libros, convocan con-cursos en los que se regalan libros y otros esfuerzos de relaciones públicas.

Las librerías colaboran por medio de la promoción en el punto de venta.

En Puerto Rico, los distribuidores demandan más colaboración por parte de las editoriales, demandando material promocional (pósters, stands, etc.).

En cuanto al libro de texto, la situación es similar. La promoción está en manos del distribui-dor, o en su caso, la casa editora en Puerto Rico. Algunos incluso cuentan con presupuestos anuales para organizar talleres y seminarios para los maestros. El proceso de promoción se extiende de octubre hasta febrero o marzo, momento en que los colegios eligen los libros pa-ra el próximo curso escolar.

En 2006 se creó la revista Signos, que recoge artículos sobre libros, autores y cultura en ge-neral y que pretende promocionar el libro en Puerto Rico. Al mes se lanzan 30.000 ejempla-res y se distribuye gratuitamente en librerías, centros culturales, museos, etc.

Otras de las revistas de literatura presentes en Puerto Rico es El Sótano 00931, que nació en el año 2000 en la Universidad de Puerto Rico y recoge obras de nuevos autores. La mayoría de las ediciones de esta revista se encuentran disponibles en su página: www.elsotano00931.com.

Este 2010 se celebrará por primera vez el Festival de la Palabra del 5 al 9 de mayo en el Cuartel de Ballajá en el Viejo San Juan al que asistirán 64 escritores internacionales y más de un centenar de autores puertorriqueños, que participarán en debates, conferencias y lecturas de poesía (www.festivaldelapalabra.net).

2.6. Tendencias de la distribución

La distribución de libros en la Isla está llegando a todo tipo de comercios.

Ahora se venden libros hasta en los supermercados y farmacias2 como la cadena Wallgreens, lo cual los acerca al consumidor. Estos comercios normalmente realizan las compras a un so-lo distribuidor que les proporciona todo el catálogo de las distintas editoriales.

2 Las farmacias en Puerto Rico no sólo venden productos farmacéuticos. Entre su oferta hay productos de dro-guería, papelería y alimentación.



Sin embargo, influido por Estados Unidos, Puerto Rico se está convirtiendo en una Isla de grandes centros comerciales en detrimento del comercio tradicional. En los años 80, las libre-rías de los centros urbanos comenzaron a reubicarse en los centros comerciales, donde el coste operativo es muy alto, por lo que tuvieron que diversificarse y subir los precios.

Además, la entrada de grandes librerías como Borders que trabajan con costes operativos muy inferiores a los de las pequeñas librerías ha llevado a muchas de éstas a la quiebra. Las pequeñas librerías que quedan han tenido que reinventarse y añadir valor añadido a sus loca-les mediante la oferta de eventos como charlas, lecturas de cuentos y poemas o presentacio-nes de libros. Entre las librerías locales que han sabido adaptarse a la entrada de los grandes grupos estadounidenses destacan las librerías La Tertulia.

Es de gran relevancia destacar el desarrollo de las nuevas tecnologías y su impacto en el sector, sobre todo en el sistema de distribución. Desde hace tiempo ya existen formatos co-mo el CD o DVD que las editoriales ya ofrecen habitualmente como complemento de sus li-bros. Cada vez tiene más importancia el uso de formatos digitales tanto en la enseñanza, como en lo que a profesional y también personal se refiere.

Las editoras tendrán que adaptarse a los nuevos soportes como los libros electrónicos o los e-readers, saber cómo comercializarlo y proteger sus derechos a la vez. Las que consigan innovar en este aspecto tendrán una clara ventaja competitiva frente al resto.



IV. ANÁLISIS DE LA DEMANDA

1. TENDENCIAS GENERALES DEL CONSUMO

1.1. Factores sociodemográficos

La población total de Puerto Rico asciende a 3.966.213 (Julio 2009 Est.) y la tasa de creci-miento fue del 0,298%, un crecimiento cada vez más ralentizado.

La densidad de población es muy alta alcanzando los 438 habitantes / km², siendo la pobla-ción urbana un 98% con un ratio de urbanización anual estimado del 0,8%. Los municipios más poblados del país son, por este orden: San Juan, Bayamón, Carolina, Ponce, Caguas, Guaynabo, Arecibo y Mayagüez.

Por sexos el 48% de la población son hombres y el 52% mujeres. Se estima que la población en 2009 mayor de 65 años representa un 14,1% de la población, y según las proyecciones para 2025 este porcentaje llegará al 26%. También existe un 19,8% de población menor de 15 años, que en 2000 era del 23,8% y en 2006 del 21,34%. Además la población entre 15 y 65 supone el 66,1% del total y la media de edad es de 36,2 años en la población puertorri-queña, lo que muestra un país con población adulta y con tendencia a envejecer.

Los principales grupos étnicos de la Isla son un 80,5% de población blanca de origen espa-ñol, un 8% de población afroamericana, un 0,4% de indios americanos, un 0,2% de asiáticos y un 10,9% de otras razas.

En el periodo 2006 – 2008 había 1,2 millones de hogares en Puerto Rico. El tamaño medio de los hogares era de 3,2 personas en cada uno. Las familias componen el 75% de los hoga-res en el país. Esta cifra incluye tanto parejas casadas (45%) como otro tipo de familias (29%). Hogares no familiares representan el 25% del total, la mayoría personas viviendo so-las.

Entre la población que llevaba al menos cinco años viviendo en Puerto Rico en 2006 – 2008, el 95% habla español en casa, y el 85% indicó en el censo que no hablaban inglés “muy bien”.



En lo que a educación se refiere, en el periodo que va de 2006 a 2008, el 66% de la pobla-ción mayor de 25 años se había graduado al menos de la escuela superior (high school) y el 21% tenía una carrera universitaria o estudios superiores. El 34% abandonaron los estudios, no estuvieron matriculados en el colegio o no se graduaron de la escuela superior.

El total de matrículas en Puerto rico fue de 1,1 millones de 2006 a 2008. La enseñanza ele-mental tuvo un total de 109.000 matrículas, las escuelas intermedia y superior tuvieron 723.000 estudiantes matriculados. Y en la universidad en estudios de grado o de postgrado hubo unos 281.000 estudiantes.

1.2. Factores económicos

Puerto Rico tiene una de las economías más dinámicas de la región del Caribe. Un sector in-dustrial diverso ha superado a la agricultura como foco de la actividad económica y de los in-gresos. Las compañías estadounidenses han invertido fuertemente en Puerto Rico desde los años cincuenta, animados por el acceso libre de impuestos a Estados Unidos y por beneficios fiscales. El turismo ha sido tradicionalmente una importante fuente de ingresos con una esti-mación de la llegada de 3,6 millones de turistas en 2008. El crecimiento cayó de 2001 a 2003, se recuperó en 2004 – 2005, para luego caer de nuevo en 2006 – 2008.

La moneda oficial es el USD (dólar americano). El tipo impositivo al que tributan las socieda-des oscila entre el 22% y el 39%, excepto en el caso de las empresas acogidas a incentivos fiscales que tributan a tipos que oscilan entre el 2% y el 7%.

El PIB en el año 2009 asciende a 86,24 billones de dólares a precios corrientes, lo que supo-ne un decrecimiento del 4,5%. La economía puertorriqueña se encuentra en una fase de re-cesión, en 2007 obtuvo un crecimiento negativo del 1,8% y en 2008 de 2,5%.

El PIB per cápita en 2007 fue de 18.500 dólares, bajando a 18.000 en 2008 y aún más en 2009 hasta llegar a 17.100 dólares. Se trata de otra señal de la crisis que está atravesando el país. Aunque se espera que algunas medidas adoptadas por el gobierno para reactivar la economía den sus frutos para conseguir un crecimiento de la renta positivo.

La aportación al producto interior bruto de cada sector económico es del 1% procedente de la agricultura, el 45% de la industria y el 54% de los servicios.

La fuerza laboral se estimó en 2007 en 1,479 millones de personas, la mayoría de ellas ocu-pados en el sector terciario. La tasa de paro se estima en el 15,5% en 2008. El salario míni-mo/hora es el mismo que en Estados Unidos: 7,25 dólares / hora fue el fijado en 2009.

1.3. Distribución de la renta disponible

En Puerto Rico la distribución de la renta es bastante desigual. Según la Oficina del Censo de Estados Unidos (US Census Bureau) un 41,4% de la población puertorriqueña se encontraba bajo el nivel de pobreza en 2008.



El índice de Gini es una medida de dispersión estadística. Cuanto menor es el índice, menor es la desigualdad en la distribución del ingreso; de igual forma, cuanto mayor es el índice, mayor es la desigualdad; y donde 0 es total igualdad y 1 total desigualdad. El último dato en-contrado para 2007 el índice de Gini fue de 0,57. Este índice en Puerto Rico muestra una desigualdad en el reparto de la riqueza mayor que en su socio comercial Estados Unidos, donde el índice de Gini es de 0,466 La distribución del ingreso anual en Puerto Rico es más desigual que en Estados Unidos. En Puerto Rico el 5% de los hogares con más ingresos reciben el 25% del total, en Estados Uni-dos reciben el 22% (el 20% con más ingresos reciben el 56% en Puerto Rico y el 49% en Es-tados Unidos). En el otro extremo, el 20% de hogares en Puerto Rico con menos ingresos re-cibe el 2%, en Estados Unidos recibe el 4%.

La gráfica a continuación muestra el total de hogares puertorriqueños y sus ingresos corres-pondientes totales durante 2008:

Fuente: Oficina del Censo de EE.UU.

Del total de 1,2 millones de hogares en Puerto Rico en el año 2008 el 30% tuvo unos ingre-sos menores de diez mil dólares, en cambio tan sólo el 7% de los hogares obtenían unos in-gresos igual o mayores que 75 mil dólares.

Hoy en día, los precios de los libros de texto son realmente elevados. Así, según Patricia Gu-tiérrez, propietaria de Editorial Plaza Mayor en declaraciones para el periódico El Nuevo Día, “un presupuesto de 600 dólares en libros por estudiante no es tanto, si se toma en cuenta que es para todo el curso escolar y usualmente son libros para seis asignaturas. Esa factura de 600 dólares equivale a 60 centavos diarios por asignatura, que es menos de lo que cuesta una lata de refresco hoy en día”. Pero el problema está en que los padres deben hacer frente a ese gasto “de golpe”.

En cuanto a los estudiantes universitarios la mayoría reciben ayudas federales del Fondo Fe-deral de Becas durante sus estudios de grado lo que les facilita la adquisición de libros y otro material complementario. De hecho según el Consejo de Educación Superior de Puerto Rico, el 80% de los alumnos de primer año en instituciones públicas recibió ayuda federal, eleván-dose este porcentaje al 91% para estudiantes de universidades privadas.

0 100.000 200.000 300.000 400.000

1

$200,000 or more

$150,000 to $199,999

$100,000 to $149,999

$75,000 to $99,999

$50,000 to $74,999

$35,000 to $49,999

$25,000 to $34,999

$15,000 to $24,999

$10,000 to $14,999

Less than $10,000



1.4. Tendencias sociopolíticas

El Estado Libre Asociado de Puerto Rico es un territorio no incorporado de Estados Unidos, lo que le confiere la facultad de elegir al Gobernador, los miembros de la Asamblea Legislativa y los cargos de la Administración local. A pesar de estas facultades, Puerto Rico carece de so-beranía propia, la cual reside en el Congreso de Estados Unidos.

El Estado Libre Asociado de Puerto Rico es la forma política de gobierno de este territorio au-tónomo no incorporado de los Estados Unidos emanada de la Ley Pública 600 del Congreso de Estados Unidos. Esta forma de gobierno otorga competencias políticas a la administración insular similares a cualquier Estado de la Unión, si bien, le concede un mayor grado de auto-nomía en materias culturales (la lengua vernácula de la isla es el castellano y el bilingüismo real se cifra en el 11%) y fiscal principalmente. Sin embargo, no son consultados a la hora de elegir a los miembros de la Cámara de Representantes, Senado y Presidente de los Estados Unidos, si bien, tienen derecho a la figura del Comisionado Residente, el cual se encarga de exponer y atender los asuntos de interés para la Isla en Washington, con voz, pero sin voto. El Gobierno federal norteamericano se reserva el control de aduanas, comercio exterior, sis-temas monetario, defensa, justicia, correos y política exterior.

El Sistema Político local descansa en tres pilares: la figura del Gobernador, la Asamblea Le-gislativa y la Administración Local. La Asamblea Legislativa se compone de una Cámara de Representantes y un Senado, en la cual asistimos a un bipartidismo de facto, con dos fuerzas mayoritarias (PPD y PNP) y un tercer partido (PIP) que representa a un pequeño porcentaje de la población. Las tres fuerzas políticas basan sus diferencias de manera primordial en sus concepciones respecto al “status” político de la Isla. El Partido Popular Democrático (PPD) es favorable al mantenimiento y desarrollo del actual sistema político que se recoge en la formu-la de “Estado Libre Asociado”. El Partido Nuevo Progresista (PNP) es favorable a la plena in-tegración de la Isla en la Unión norteamericana como estado 51. El Partido Independentista Puertorriqueño apenas representa al 5% del electorado y no gobierna en ningún municipio.

Pese al predominio de los partidos PPD y PNP en el panorama político y su alternancia en el poder, debido a la prolongada crisis económica que atraviesa Puerto Rico hay una gran des-contento ciudadano respecto a políticos y gobernantes lo que deja un gran porcentaje de ciu-dadanos con derecho a voto sin una preferencia clara de partido.

En la actualidad el partido en el poder desde el 2 de enero de 2009 es el Partido Nuevo Pro-gresista con el Gobernador Luis Fortuño al frente.

1.5. Tendencias culturales

La Isla de Borinquen fue descubierta por Cristóbal Colón en su segundo viaje al nuevo conti-nente el 19 de noviembre de 1493 y fue rebautizada con el nombre de Puerto Rico. En 1897 España concedió a Puerto Rico su autonomía y los isleños celebraron la elección libre de su primer gobierno, pero algunos meses más tarde, la Isla fue invadida por el Ejercito Americano y fue cedida a los Estados Unidos mediante el tratado de París, que daba fin a la guerra his-pano-norteamericana de 1898.

La presencia española en la Isla dejó huella, de modo que tanto en el campo de la música como de las letras, los títulos españoles son muy apreciados, puesto que el español es len-gua vernácula en la Isla.



En cuanto a la religión el 85% de los habitantes son católicos frente al 15% restante que son protestantes u otros.

1.6. Tendencias legislativas

Existen varias leyes que afectan directa o indirectamente al sector editorial.

La Ley Núm. 1 de 1993 que declara la cooficialidad del inglés y el español, pero la mayoría de la población habla español, y en los colegios públicos se imparten las clases en este idio-ma, aunque los textos que se utilizan son mayoritariamente en inglés.

La Ley Núm. 116 de 2004 para la Compra de Textos Escolares, que establece que toda es-cuela privada autorizada a operar en el Estado Libre Asociado de Puerto Rico deberá contar con el consentimiento de la Asociación, Consejo de Padres y Maestros o una asamblea de padres para determinar el presupuesto máximo aplicable a cada grado para la compra de los libros de texto requeridos en cada año escolar.

La Ley Núm. 516 de 2004 para establecer como política pública del Estado Libre Asociado de Puerto Rico la promoción, fortalecimiento y desarrollo integral de la industria del libro; esta-blecer los incentivos a la referida industria y los requisitos para acceder a los mismos. Esta Ley del Libro se encarga de ofrecer incentivos contributivos a los distintos agentes que parti-cipan en la industria: autores, editores, libreros, diseñadores y traductores. Deja fuera a los distribuidores como tal.

Según dice esta Ley, toda persona natural o jurídica que opere como editor y esté incorpora-da en el Estado Libre Asociado de Puerto Rico o autorizada para hacer negocios en esta ju-risdicción, y que su actividad económica y objeto social sea la edición de libros, y cuya oficina central, matriz o sede principal de la compañía esté localizada en Puerto Rico, gozará de una exención de un cincuenta por ciento del pago de contribuciones por un periodo de diez años respecto: por una parte al ingreso neto proveniente de las ventas o publicación, según sea el caso, de libros; y por otra, a las contribuciones sobre la propiedad mueble e inmueble, siem-pre que las mismas sean utilizadas para la edición de libros. A su vez, toda empresa que opere como editor pero que su oficina central, matriz o sede principal no esté localizada en Puerto Rico, gozará de una exención de un diez por ciento del pago de contribuciones por un periodo de diez años con respecto a los mismos conceptos an-teriores.



2. ANÁLISIS DEL COMPORTAMIENTO DEL CONSUMIDOR

2.1. Hábitos de consumo

Según datos de la Junta de Planificación de Puerto Rico el gasto en consumo bajo la deno-minación de libros y mapas durante los últimos años (a precios corrientes, en miles de dóla-res) fue:

2004 2005 2006 2007 2008 2009 146.816 145.773 160.048 176.437 178.466 154.446

Se observa que hubo una tendencia al aumento en el consumo hasta el 2009 en el que des-cendió un 13%.

Como se comentó antes el Departamento de Educación es el principal comprador de material editorial para las escuelas y bibliotecas públicas. En Puerto Rico los alumnos no tienen que comprar los libros de texto, se los facilita el gobierno para su utilización en el aula. El alumno tiene la posibilidad de comprarlo o de adquirir material complementario voluntariamente.

Existen tres planes de compra dentro del Departamento de Educación: los programas de for-mación (son los libros de texto básicos que los alumnos utilizan en el aula y que normalmente se adquieren con fondos federales); los programas curriculares (material de apoyo a los tex-tos básicos); y el fondo editorial para las bibliotecas públicas.

En el primero de los casos, los libros para los programas de formación, el proceso de compra se realiza por Licitación que se publica en el periódico y en el cual se convoca a los provee-dores a una reunión en el Departamento de Educación en la que se les entregarán los requi-sitos exigidos para los libros de texto en cada área académica y se establece una fecha lími-te para la presentación y entrega de las recomendaciones de cada editorial o distribuidor.

Posteriormente, un comité reclutado por cada área académica evalúa el material y selecciona a tres proveedores por materia otorgándoles una puntuación. Por último, la Administración de Servicios Educativos comienza la negociación con el proveedor de mayor puntuación para determinar: precio, cambios a realizar, entrenamiento y entrega de textos (que generalmente se realiza directamente a las escuelas).

Es en los programas curriculares y bibliotecas públicas donde el distribuidor o editor tiene más libertad para elegir y promocionar los productos que desea vender, pues se trata de ofrecérselos sin ningún listado o requisito base, dependiendo de lo que a su criterio más le conviene al cliente (que sigue siendo el gobierno a través de la Administración de Servicios Educativos para los libros escolares y del Servicio Bibliotecario y de Información para las bi-bliotecas públicas).

El nacimiento de las escuelas de la comunidad, que gestionan sus propios presupuestos de compras, ha originado la descentralización de parte de las compras estatales ya que cada escuela elige los textos de sus alumnos y compra con “vales educativos” del Departamento de Educación. Este sistema de paulatina descentralización de compras permite participar a más empresas en la venta de textos a escuelas públicas y a la vez obliga a las empresas a contar con una red de vendedores que visiten las escuelas una por una. En la práctica, las escuelas de la comunidad funcionan como si fueran escuelas privadas.



En Puerto Rico existen 1.523 escuelas públicas y en el curso 2008 / 2009 hubo un total de 489.232 alumnos matriculados en ellas.

En las escuelas privadas, reunidas en el Consejo General de Educación, el proceso de com-pra se basa en la promoción por parte del distribuidor o editorial en la escuela, para luego más tarde proporcionar los libros al propio colegio o a una librería. El colegio tiene la obliga-ción de publicar las listas de los libros de texto que se utilizarán durante el curso para que los padres puedan elegir dónde comprarlos.

El número de instituciones de enseñanza privada no universitaria asciende a 748 y en el cur-so académico 2008 / 2009 hubo 212.049 matrículas de alumnos en ellas.

Los colegios tanto públicos como privados no deben cambiar de libros de texto en cada curso por lo menos en cuatro años según una normativa que se impuso por el Departamento de Asuntos del Consumidor (DACO).

En cuanto a la educación superior en Puerto Rico operan hoy en día 42 universidades priva-das y 6 públicas, reconocidas y autorizadas por el Consejo de Educación Superior.

Cada universidad se organiza por recintos (campus) que funcionan con autonomía, implica que las decisiones de compra se tomarán de manera descentralizada. Además, cada profe-sor, en el uso de su libertad de cátedra decide qué libros deben utilizar los alumnos.

En el caso de los libros de interés general, Alfredo Torres, dueño de las librerías La Tertulia, “en Puerto Rico, que tiene menos población que otros países latinoamericanos, hay más ven-tas proporcionales y se lee mucho más que en América Latina porque hay mayor poder ad-quisitivo”. Él mismo señala que hay dos tipos de lectores: los obligados, un grupo grande que lee lo que les mandan en sus clases y que podrían convertirse luego en buenos lectores. También están los que leen por placer y por inquietud.

El perfil del consumidor responde a una persona mayor de 25 años, de clase media o media-alta. Por lo general, las mujeres compran más libros que los hombres.

2.2. Hábitos de compra

Puerto Rico es un territorio bajo la soberanía de Estados Unidos, por lo que la influencia de este país sobre la Isla es muy alta. Las megatiendas y los grandes centros comerciales están desplazando el comercio tradicional. Así, la gente prefiere ir a comprar a los centros comer-ciales, donde puede encontrar de todo, antes de acudir a las tiendas tradicionales de la calle. El problema, como ya se ha comentado, es que el alquiler de los locales en los centros co-merciales es muy alto y algunas librerías no pueden hacer frente al mismo y cierran.

Las compras de libros se reparten de forma regular a lo largo del año, destacando los meses de noviembre a enero, en los que las compras de libros aumentan coincidiendo con el perio-do navideño.

Según Franciso Vázquez, director de Editorial Cultural, la industria de libros de texto vende cada año unos 85 millones de dólares en Puerto Rico, y el 70% de esa cifra se genera entre junio y agosto. Existen alrededor de quince puntos de venta de textos escolares en la Isla. No obstante, el 40% de estos libros lo vende la cadena americana Borders, mientras que el res-tante 60% se reparte entre los demás distribuidores.



Ya hemos comentado el alto coste de los libros de texto. Esto ha llevado a la formación de un mercado de segunda mano, al que recurren muchos puertorriqueños con el fin de poder ali-viar sus bolsillos al comienzo del curso. Los libros se suelen vender al 50% de su precio ori-ginal y en algunos casos, esta actividad es incluso apoyada por el propio centro escolar.

2.3. Preferencias

Según Alfredo Torres, dueño de las librerías La Tertulia, en una entrevista para el periódico de tirada nacional El Nuevo Día, se lee mucho de autoayuda, pero también se venden gran-des cantidades de novelas de Vargas Llosa, Gabriel García Márquez e Isabel Allende.

Ese mismo medio publicó que Neeltje Van Marissing, de Ediciones Santillana, confirmaba esos datos informando que de los libros que han editado en los últimos años, los más vendi-dos fueron: Domesticando tu dinosaurio de Silverio Pérez, La fiesta del chivo de Mario Vargas Llosa, El amante turco de Esmeralda Santiago, la edición conmemorativa de El Quijote, Deli-rio de Laura Restrepo y Son de almendra de Mayra Montero.

Los libros de política también se venden bien. De algunos, como los de Luis Dávila Colón, se hicieron segundas y terceras ediciones. Elidio La Torre Lagares, de Terranova Editores, co-mentó a El Nuevo Día que puede haber una relación entre las ventas de libros de política y los libros de autoayuda. “Tal vez el énfasis en la política denota la necesidad de la autoayu-da”. Según él, “la política es el deporte nacional en Puerto Rico y satura tanto a los isleños que requieren lecturas ligeras y amenas que les saquen del ritmo”.

Otro género que vende, aunque a un grupo selecto, es la poesía. De los libros publicados por Terranova, los más exitosos hasta ahora han sido los poemarios de Noel Luna, Kattia Chico, Javier Ávila y Etnairis Rivera. De todos ellos se publicaron segundas ediciones.

Un mercado que ha crecido mucho en los últimos años, principalmente por la llegada de las librerías Borders a la Isla, es el de los libros en inglés. Según la directora de Ediciones Santi-llana, los que más se venden son los llamados “thrillers” o novelas de suspenso. También hay una creciente demanda por “revistas y libros técnicos y especializados”.

En lo que al formato del libro se refiere, por su precio, la más comprada es la edición de bolsi-llo.



3. PERCEPCIÓN DEL PRODUCTO ESPAÑOL

El producto editorial español es muy apreciado por el consumidor puertorriqueño, principal-mente por su calidad. España tiene una larga tradición en el mundo del libro, que unido a sus lazos con la Isla, favorecen su producto.

Para el distribuidor puertorriqueño, el libro español, además de por su calidad, es apreciado porque las editoriales españolas trabajan muy bien, tanto en el ámbito de la venta, el empa-que, la entrega, etc.

Pero existe un problema que está debilitado las exportaciones españolas de libros a la Isla en favor de las colombianas, mexicanas o argentinas. Esto es la apreciación del euro frente al dólar, lo que supone un perjuicio para las exportaciones españolas que pierden competitivi-dad.

El consumidor puertorriqueño mira mucho el precio, por lo que los distribuidores puertorrique-ños están buscando alternativas al libro español en Colombia, Argentina, México, donde los libros tienen un precio más bajo, debido a sus costes de producción más bajos, además del tipo de cambio.

Otro problema que han resaltado algunos distribuidores puertorriqueños es el de la no devo-lución. Al no poder devolver el producto sobrante, el distribuidor no se quiere arriesgar a comprar más producto español y opta por la opción conservadora de hacer un pedido menor.



V. ANEXOS

1. INFORMES DE FERIAS

Las ferias en la Isla son de carácter local y tienen escasa repercusión internacional. En este sentido, las ferias en la Isla no son más que instrumentos de promoción de los importadores y distribuidores locales frente a los detallistas y consumidores.

La Feria Internacional del Libro de Puerto Rico , es una organización sin ánimo de lucro creada en el año 1993. La I Feria Internacional del Libro de Puerto Rico tuvo lugar en sep-tiembre de 1997, con 210 exhibidores y 1.200 profesionales del libro.

La Feria Internacional del Libro de Puerto Rico es un evento anual que por su naturaleza convierte a Puerto Rico en el punto de encuentro entre editores, distribuidores, libreros, escri-tores y educadores del libro en español.

El primer objetivo es crear un espacio para la venta, distribución y promoción del libro en es-pañol hacia el mercado de los Estados Unidos, Centro y Sur América. El segundo objetivo es fomentar el amor a la lectura, por medio de las actividades educativas y recreativas dirigidas a la población escolar y público en general que visita la feria.

No obstante, el hecho de estar en manos privadas le impide alcanzar el auge que debiera.

La última edición tuvo lugar el pasado octubre de 2009 y no tuvo mucha relevancia. No hubo gran afluencia de gente y los expositores eran en su mayoría librerías y minoristas puertorri-queños intentando vender su producto al público. Faltaban tanto editoriales como distribuido-res de la Isla e internacionales.

Para más información:

Feria Internacional del Libro de Puerto Rico

Sr. José Carvajal, Presidente

Calle Hoare # 658, Miramar

San Juan, Puerto Rico 00907

Tlf.: (787) 721-0844

Fax: (787) 725-0861


Página web: www.filpuertorico.org



En la Isla también se celebra la Feria Internacional del Libro Infantil, Juvenil y E scolar , que ofrece un componente educativo tanto para los estudiantes y profesores, como para el público en general.

Dada la escasa repercusión de las ferias en la Isla, los profesionales del sector participan y acuden a otras ferias internacionales como la Feria Internacional del Libro de Guadalajara , en el Centro de Exposiciones Expo Guadalajara. Se trata de una feria abierta al público en general, si bien reserva tiempo y espacios para los profesionales.

La XXIV edición tendrá lugar del 25 de noviembre al 5 de diciembre de 2010. Para más in-formación:

Feria Internacional del Libro de Guadalajara

Centro de Exposiciones

Expo Guadalajara

Av. Mariano Otero 1499

Col. Verde Valle

Guadalajara, Jalisco

C.P. 44560 México

Tlf.: (52 33) 3343-3000

Fax: (52 33) 3343-3030

[email protected]

www.fil.com.mx

Otra de las ferias importantes es la celebrada en España. Todos los años la Federación del Gremio de Editores de España (FGEE) invita a ciertos distribuidores puertorriqueños a la Fe-ria Internacional del Libro (LIBER) , además de otros que acuden voluntariamente y cos-teándose el viaje. Se trata de una feria exclusivamente para profesionales del libro y es una de las más significativas entre las de lengua española. Durante la misma, los distribuidores puertorriqueños aprovechan para concretar los pedidos con vistas al periodo navideño.

La próxima edición será del 29 de septiembre al 1 de octubre de 2010 en Barcelona.

Más información: http://www.liberbcn.com/

Los distribuidores puertorriqueños también visitan la Exposición Feria Internacional de Buenos Aires, “El Libro - Del Autor al Lector” , es una verdadera ciudad de libros, un catá-logo nacional e internacional de industrias editoriales y una fiesta de la cultura. Está organi-zada por la Fundación El Libro que reúne a las Cámaras de editores, a los autores, a libreros y distribuidores, a la industria gráfica y a los exportadores e importadores de libros. Desde 1975, año en que se realizó por primera vez, fue adquiriendo importancia creciente, hasta convertirse en la muestra más importante de Latinoamérica y destacado referente a nivel mundial, convocando a más de un millón de asistentes.

Está convocada para los próximos: 22 de abril al 2 de mayo de 2010. Más información:



Fundación El Libro

Hipólito Yrigoyen 1628, 5º Piso

C1089AAF Buenos Aires

República Argentina

Tel: (54-11) 4374-3288

Fax: (54-11) 4375-0268

E-Mail: [email protected]

http://www.el-libro.org.ar

En el marco de los Estados Unidos, los profesionales puertorriqueños visitan la Feria Inter-nacional del Libro de Miami . La misma tiene como objetivo la promoción de la lectura y animar a la escritura, entre otros, y es uno de los eventos literarios más importantes de Esta-dos Unidos. La misma comenzó en 1984, como una feria de dos días en la calle, y hoy en día se ha convertido en un festival al que acuden cientos de miles de personas.

La próxima edición tendrá lugar del 14 al 21 de noviembre de 2010.

Para más información, consultar la página web: www.miamibookfair.com/index.htm

De carácter estrictamente profesional, Book Expo , es otro de los eventos a los algunos dis-tribuidores puertorriqueños acuden. Organizada por la American Booksellers Association, la BookExpo America, que acogerá el Jacob K. Javits Convention Center de la ciudad de los rascacielos del 25 al 27 de mayo de 2010, es una oportunidad para los profesionales de la in-dustria del libro español de ampliar y diversificar sus relaciones comerciales así como los contratos por las ventas de derechos de autor. La BEA es la feria del libro más importante de las que se celebran en Estados Unidos y reúne a más de 1.500 expositores de cerca de 40 países entre editores, distribuid res, libreros y bi-bliotecarios. Además, hay que destacar la presencia de empresas y profesores interesados en la edición y el aprendizaje del castellano. Para más detalles consultar la página web www.bookexpoamerica.com

2. LEY Nº 75 DE CONTRATOS DE DISTRIBUCIÓN

278. Definiciones.278. Definiciones.278. Definiciones.278. Definiciones.

Para los propósitos de este Capítulo, los siguientes términos tendrán el significado que se expresa, excepto cuando el contexto claramente indique un significado diferente:

(a) Distribuidor: persona realmente interesada en un contrato de distribución por tener efecti-vamente a su cargo en Puerto Rico la distribución, agencia, concesión o representación de determinada mercancía o servicio.



(b) Contrato de distribución: relación establecida entre un distribuidor y principal o conceden-te, mediante la cual, e independientemente de la forma en que las partes denominen, carac-tericen o formalicen dicha relación, el primero se hace real y efectivamente cargo de la distri-bución de una mercancía, o de la prestación de un servicio mediante concesión o franquicia, en el mercado de Puerto Rico.

(c) Principal o concedente: persona que otorga un contrato de distribución con un distribuidor.

(d) Justa causa: incumplimiento de alguna de las obligaciones esenciales del contrato de dis-tribución, por parte del distribuidor, o cualquier acción u omisión por parte de éste que afecte adversamente y en forma sustancial los intereses del principal o concedente en el desarrollo del mercado o distribución de la mercancía o servicios.

278a. 278a. 278a. 278a. Terminación de la relación.Terminación de la relación.Terminación de la relación.Terminación de la relación.

A pesar de la existencia en un contrato de distribución de una cláusula reservándole(s) a las partes el derecho unilateral a poner fin a la relación existente, ningún principal o concedente podrá dar por terminada dicha relación, o directa o indirectamente realizar acto alguno en menoscabo de la relación establecida, o negarse a renovar dicho contrato a su vencimiento normal, excepto por justa causa.

278a-1. Justa causa para la terminación; excepciones; presunciones.

A los efectos de este Capítulo, y particularmente a los efectos de la sec.278a de este título:

(a) No se estimará que constituye justa causa la violación o incumplimiento, por parte del dis-tribuidor, de cualquier disposición incluida en el contrato de distribución para impedir o res-tringir cambios en la estructura de capital del negocio del distribuidor; o cambios en el control gerencia de dicho negocio, o en los medios o forma de financiamiento de la operación, o para impedir o restringir la libre venta, transferencia o gravamen de cualquier acción corporativa, participación, derecho o interés que tenga cualquier persona en dicho negocio de distribución, a menos que el principal o concedente demuestre que tal incumplimiento pueda afectar o real y efectivamente ha afectado, en forma adversa y sustancial, los intereses de dicho principal o concedente en el desarrollo del mercado, distribución de la mercancía o prestación de los servicios;

(b) se presumirá, salvo prueba en contrario, que un principal o concedente ha menoscabado la relación establecida en cualquiera de los siguientes casos:

(1) Cuando el principal o concedente establece en Puerto Rico facilidades3 para la distribución directa de mercancía o la prestación de servicios que previamente han estado a cargo del distribuidor;

(2) cuando el principal o concedente establece una relación de distribución con uno o más distribuidores adicionales para el área de Puerto Rico, o cualquier parte de dicha área contrario al contrato existente entre las partes;

(3) cuando el principal o concedente rehúsa u omite servir injustificadamente al dis-tribuidor las órdenes de mercancía que éste le envía, en cantidades razonables y dentro de un tiempo razonable;

3 Del inglés facility: instalaciones



(4) cuando el principal o concedente unilateralmente y en forma irrazonable varía, en perjuicio del distribuidor, los métodos de embarque, o la forma o condiciones o términos de pago por la mercancía ordenada.

(c) No se estimará que constituye justa causa la violación o incumplimiento, por parte del dis-tribuidor, de cualquier disposición incluida en el contrato de distribución fijando cánones de conducta, o cuotas o metas de distribución, por no ajustarse a las realidades del mercado de Puerto Rico en el momento de la violación o incumplimiento por parte del distribuidor. El peso de la prueba para demostrar la racionabilidad del canon de conducta o de la cuota o meta fi-jada recaerá sobre el principal o concedente.

278b. Daños.278b. Daños.278b. Daños.278b. Daños.

De no existir justa causa para la terminación del contrato de distribución, para el menoscabo de la relación establecida, o para la negativa a renovar dicho contrato, el principal habrá eje-cutado un acto torticero4 contra el distribuidor y deberá indemnizarle en la medida de los da-ños que le cause, cuya cuantía se fijará a base de los siguientes factores:

(a) el valor actual de lo invertido por el distribuidor para la adquisición y la adecuación de lo-cales, equipo, instalaciones, mobiliario y útiles, en la medida en que éstos no fueren fácil y razonablemente aprovechables para alguna otra actividad a que el distribuidor estuviere nor-malmente dedicado;

(b) el costo de las mercaderías, partes, piezas, accesorios y útiles que el distribuidor tenga en existencia, y de cuya venta o explotación no pueda beneficiarse;

(c) la plusvalía del negocio, o aquella parte de ésta atribuible a la distribución de la mercan-cía o la prestación de los servicios de que se trate, a ser determinada dicha plusvalía toman-do en consideración los siguientes factores:

(1) número de años que el distribuidor ha tenido a su cargo la distribución;

(2) volumen actual de distribución de la mercancía o prestación de los servicios de que se trate y la proporción que representa en el negocio del distribuidor;

(3) proporción del mercado de Puerto Rico que dicho volumen representa;

(4) cualquier otro factor que ayude a establecer equitativamente el monto de dicha plusvalía.

(d) el monto de los beneficios que se hayan obtenido en la distribución de la mercancía o en la prestación de los servicios, según sea el caso, durante los últimos cinco años o si no llega-ren a cinco, cinco veces el promedio de los beneficios anuales obtenidos durante los últimos años, cualesquiera que fuesen.

278b-1. Remedio provisional.

En cualquier pleito en que esté envuelta directa o indirectamente la terminación de un contra-to de distribución o cualquier acto en menoscabo de la relación establecida entre el principal o concedente y el distribuidor, el tribunal podrá conceder durante la pendencia del pleito, cualquier remedio provisional o medida de naturaleza interdictal para hacer o desistir de

4 Culposo



hacer, ordenando a cualquiera de las partes o a ambas a continuar, en todos sus términos, la relación establecida mediante el contrato de distribución, y/o a abstenerse de realizar acto u omisión alguna en menoscabo de la misma. En todo caso en que se solicite el remedio provi-sional aquí provisto el tribunal considerará los intereses de todas las partes envueltas y los propósitos de política pública que informa este Capítulo.

278b-2. Interpretación de conformidad con las leyes del Estado Libre Asociado

Los contratos de distribución a que se refiere el presente Capítulo se interpretarán de con-formidad con, y se regirán por las leyes del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, siendo nu-la toda estipulación en contrario.

Se considerará igualmente en contravención a la política pública que informa este Capítulo, y por ende nula e inexistente, toda estipulación que obligue a un distribuidor a dirimir, arbitrar o litigar fuera de Puerto Rico, o bajo leyes o reglas de derecho foráneas, cualquier controversia que surja en torno a su contrato de distribución.

278c. Renuncia de derechos.278c. Renuncia de derechos.278c. Renuncia de derechos.278c. Renuncia de derechos.

Las disposiciones del presente Capítulo son de orden público y por tanto los derechos que ta-les disposiciones determinan no pueden renunciarse. Este Capítulo, por ser de carácter repa-rador, deberá interpretarse liberalmente para la más eficaz protección de tales derechos; en la adjudicación de las reclamaciones que surjan a su amparo, los tribunales de justicia reco-nocerán los referidos derechos a favor de quien efectivamente tenga a su cargo las activida-des de distribución, no empece las estructuras o mecanismos corporativos o contractuales que el principal o concedente pueda haber creado o impuesto para encubrir la verdadera na-turaleza de la relación establecida.

278d. Pr278d. Pr278d. Pr278d. Prescripción de la acción.escripción de la acción.escripción de la acción.escripción de la acción.

Toda acción derivada de este Capítulo prescribirá a los tres años a contar de la fecha de la terminación definitiva del contrato de distribución, o de la realización de los actos de menos-cabo.

3. COMENTARIO A LA LEY Nº 75 DE CONTRATOS DE DISTRIBUCIÓN

Aprobada el 24 de junio de 1964 y sus posteriores enmiendas -Ley Nº 106 de 23 de junio de 1966 y Ley Nº 81 de 13 de julio de 1988- protegen la figura del distribuidor en Puerto Rico.

«Un distribuidor es un empresario mercantil independiente que ha establecido una relación de continuidad y duración, fija o indeterminada, con otro empresario principal para la distribución de un producto o servicio. Esta relación se caracteriza por la cooperación, estabilidad y con-fianza mutua que genera. Su finalidad es la creación, desarrollo y coordinación del mercado y la obtención de nueva clientela»5.

5 Roberto, Inc. vs. Oxford Industries, opinión del 30 de junio de 1988, 88 Jurisprudencia del Tribunal Supre-mo 107.



En el espíritu de la ley subyace la idea de que entre fabricante (principal o concedente) y dis-tribuidor existe un indudable desequilibrio en la fuerza negociadora de las partes y acude pa-ra "nivelar las condiciones de contratación de dos grupos económicamente dispares en fuer-za"6

La Ley nº 75 sobre Contratos de Distribución fue creada para evitar los perjuicios surgidos como consecuencia de la práctica seguida por algunos fabricantes de eliminar arbitrariamente a los distribuidores locales tan pronto éstos creaban en Puerto Rico un mercado favorable pa-ra los productos y servicios del principal, a pesar de que el distribuidor hubiese cumplido efi-cientemente con sus responsabilidades bajo el contrato. Se trataba de evitar, como quedó claro en San Juan Mercantile vs. Canadian Transport -108 DPR 211 (1978)-, que un principal se apodere de la plusvalía de un negocio, una vez que el distribuidor local ha conquistado un mercado y clientela a través de su gestión empresarial. No es de extrañar, por tanto, el carác-ter sumamente proteccionista en favor del distribuidor que impregna todo el texto legal.

Basta leer en la Exposición de Motivos de la ley el siguiente párrafo, para comprobar el espíri-tu de la ley:

«El Estado Libre Asociado de Puerto Rico no puede permanecer indiferente al creciente nú-mero de casos en que empresas domésticas y del exterior, sin causa justificada, eliminan sus distribuidores, concesionarios, o agentes, tan pronto como (éstos) han creado un mercado fa-vorable y sin tener en cuenta sus intereses legítimos».

La definición que la ley ofrece de la figura del distribuidor es la siguiente: «Persona realmente interesada en un contrato de distribución por tener efectivamente a su cargo en Puerto Rico la distribución, agencia, concesión o representación de determinada mercancía o servicio».

La amplitud y poca precisión con que la ley define al distribuidor fue el primero de los proble-mas que se plantearon. Esta imprecisión obligó a los tribunales a ir delimitando el significado con el transcurso del tiempo.

La función principal de un distribuidor es la de crear un mercado favorable y ganar clientela en favor del principal. La conquista de clientela y mercado para el producto o servicio del fa-bricante obligan al distribuidor a realizar una serie de gestiones, entre las que podemos citar (como bien expone la jurisprudencia en Roberto, In y Roberto Colón vs. Oxford Industries, In-c) las siguientes: la publicidad, la coordinación y desarrollo del mercado, las entregas de las mercancías, realización de cobros, mantenimiento de inventario, y principalmente la promo-ción y la conclusión de contratos de venta.

En la comercialización de un producto, pueden intervenir distintos intermediarios comercian-tes, mayoristas, minoristas, agentes distribuidores, concesionarios por franquicias, represen-tantes de fábrica, etc., pero aunque todos pueden considerarse integrantes de la cadena de distribución, no todos ellos pueden denominarse distribuidores a los efectos de la Ley Nº 75.

Para los propósitos de la Ley de Contratos de Distribución (Ley Nº 75) una persona que no asuma responsabilidad al gestionar las ventas y no invierta en promoción o inventario, no es-tá real y efectivamente a cargo de la distribución del producto, por lo que no puede definirse

6 Radamés Cobos Liccia y su esposa, etc. vs. Dejean Packing Co., Inc. (89 JTS 104)



como distribuidor. En todo caso, podrá tratarse de un representante de ventas a comisión u otra figura, pero no de un distribuidor.

Los representantes de ventas no están protegidos por la Ley nº 75 sino por la Ley nº 21 de 3 de mayo de 1990. Los representantes de ventas son intermediarios del comercio, que asu-men gastos operacionales de ventas (Vg. oficina, automóvil, personal de oficina, teléfono, electricidad, gastos de viajes, materiales de oficina, etc.) pero no controlan ninguna de las va-riables comerciales para realizar el negocio del principal (Vg. precios, entregas, crédito, ajus-tes, términos de pago, comisiones, términos del contrato, devoluciones, cuotas,...). Así pues, los representantes de ventas forman parte de la cadena de distribución, pero no pueden defi-nirse como distribuidores.

Por otra parte, la exclusividad en la distribución de un producto o prestación de un servicio no es atributo indispensable en la figura del distribuidor, como tampoco lo es el que la actividad del mismo cubra todo o parte del territorio de Puerto Rico7.

Los factores a considerar para determinar si estamos ante la figura de un distribuidor a los efectos de la Ley Nº 75 son los siguientes:

* Si realiza o no, activa promoción y/o conclusión de contratos.

* Si ejerce control sobre los precios.

* Si tiene discreción en cuanto a pactar los términos de las ventas.

* Si tiene responsabilidad por la entrega y cobro de la mercancía y autoridad para conceder crédito.

* Si lleva gestiones independientes o conjuntas de publicidad.

* Si ha asumido el riesgo y responsabilidad en la gestión que realiza.

* Si compra el producto.

* Si posee instalaciones físicas y ofrece servicios relacionados con el producto a sus clientes.

La jurisprudencia ha establecido que ninguno de estos factores es determinante ni tiene ma-yor peso que el resto.

Los agentes de seguros se consideran distribuidores y por tanto la Ley de Contratos de Dis-tribución extiende su protección a los mismos8.

Justa causa, como define la ley, es el «incumplimiento de alguna de las obligaciones esencia-les del contrato de distribución por parte del distribuidor, o cualquier acción u omisión por par-te de éste que afecte adversamente y en forma sustancial los intereses del principal o conce-dente en el desarrollo del mercado o distribución de la mercancía o servicios».

La relevancia de la justa causa es indudable si como la ley expone, «ningún principal o con-cedente podrá dar por terminada dicha relación, directa o indirectamente, realizar acto alguno en menoscabo de la relación establecida o negarse a renovar dicho contrato a su vencimiento normal, excepto por justa causa».

7 En este sentido se expresa la jurisprudencia en J. Soler Motors vs. Kaiser Jeep International.

8 Córdoba y Simonpietri Insurance Agency et al. vs. Crown American Company of Canada



Queda por tanto patente que la justa causa se limita a actos atribuibles al distribuidor, salvo como quedó establecido en Medina & Medina vs. Country Pride Foods, Ltd., la situación en que el principal, de buena fe y existiendo un contrato indefinido en el tiempo, decide abando-nar el mercado de Puerto Rico (tras no alcanzar acuerdo en precio y crédito con el distribui-dor) sin intención alguna de apropiarse de la plusvalía o clientela ganada por el distribuidor. Hasta entonces, la justa causa sólo era atribuible a actos imputables al distribuidor.

La ley dispone la imposición de una indemnización sustancial por daños, en el caso de in-cumplimiento de las obligaciones contractuales, para proteger el tiempo, dinero, energía e instalaciones en que ha invertido el distribuidor.

La concesión de indemnizaciones se establece cuando el principal da por terminado el con-trato de distribución no mediando causa justa, causando por ello daños al distribuidor. Las in-demnizaciones cubren no sólo el daño emergente, sino también el lucro cesante. No resulta extraño que un contrato, donde quede bien especificado los hechos que las partes conside-ran causa justa para dar por finalizado un contrato, es de notable importancia.

El artículo 278b-1 sobre remedio provisional establece que «en cualquier pleito en que esté envuelta, directa o indirectamente, la terminación de un contrato de distribución o cualquier acto en menoscabo de la relación establecida entre el principal o concedente y el distribuidor, el tribunal podrá conceder durante la pendencia del pleito, cualquier remedio provisional o medida de naturaleza interdictal (...) ordenando (...) continuar la relación establecida median-te contrato de distribución, y/o abstenerse de realizar acto u omisión alguna en menoscabo de la misma».

En definitiva, este artículo sigue la política seguida por la ley de propiciar la continuación de los contratos. La Asamblea Legislativa de Puerto Rico, ha dejado claro que la razonable es-tabilidad en las relaciones de distribución es vital para la economía general, interés público y bienestar general. Por esta razón, en cualquier momento del pleito, los tribunales podrán emi-tir el denominado injunction preliminar o pendente lite cuya finalidad no es otra que mantener el status quo.

A modo de resumen, podemos definir el contrato de distribución como un contrato de dura-ción o tracto sucesivo, inspirado en el principio de confianza. El principal concluye el contrato en base a las cualidades profesionales y económicas del concesionario (distribuidor), sus co-nocimientos del mercado, su capacidad comercial y su crédito. No es sino un pacto intuitu personae.

Las disposiciones de la ley son de carácter imperativo y por tanto, los derechos dispuestos por ley son irrenunciables. No cabe pues, la renuncia de derechos.

En otro orden de cosas, las estipulaciones legales respecto al sometimiento de los contratos de distribución a las leyes del E.L.A. de Puerto Rico y la declaración de nulidad de cualquier disposición contractual en contrario, abrían un interrogante acerca de las cláusulas de arbitra-je. La misma ley expone que se considerará nula e inexistente toda estipulación que obligue a un distribuidor a dirimir, arbitrar o litigar fuera de Puerto Rico.

Podemos sin embargo decir que, las disposiciones sobre arbitraje de esta ley, ceden ante la ley federal que establece la validez y aplicación de los convenios de arbitraje. «En tanto en



cuanto esta sección conflija con la aplicación de la Ley federal de Arbitraje, prevalecerá esta última»9

4. LEY NÚM. 1 DE 1993

EXPOSICION DE MOTIVOS

Para establecer que el español y el inglés serán los idiomas oficiales del Gobierno de Puerto Rico, y que ambos se podrán utilizar indistintamente; y para derogar la Ley Núm. 4 de 5 de abril de 1991

En 1898 se estableció mediante la Orden General Núm. 192 del Cuartel General del Ejército, Despacho del Ayudante General, en Washington, D.C., que el idioma oficial a utilizarse en el Gobierno de Puerto Rico sería el inglés. El 21 de febrero de 1902 se aprobó una ley, que au-torizó a emplear indistintamente, los idiomas español e inglés en el Gobierno de Puerto Rico.

Ochenta y nueve años más tarde, la Ley Núm. 4 de 5 de abril de 1991 declaró el español co-mo idioma oficial de Puerto Rico para usarse en el trámite de los asuntos oficiales de todos los departamentos, municipios u otras subdivisiones políticas, agencias, corporaciones públi-cas, oficinas y dependencias gubernamentales de las Ramas Ejecutiva, Legislativa y Judicial del Estado Libre Asociado de Puerto Rico. Según la exposición de motivos de esa ley, el pro-pósito de la misma es reafirmar nuestra condición histórica de pueblo hispanoparlante, a la vez que expresa el compromiso de adquirir el pleno dominio del inglés como segundo idioma, sin rendir ni su lengua ni su cultura.

El preámbulo de la Constitución del Estado Libre Asociado de Puerto Rico expresa, entre otras cosas, que "consideramos como factores determinantes en nuestras vidas la ciudadanía de los Estados Unidos de América, la lealtad a los postulados de la Constitución Federal; (y) la convivencia en Puerto Rico de las dos grandes culturas del hemisferio americano...". El Pueblo de Puerto Rico, además, ha manifestado una y otra vez a todo lo largo del siglo XX su voluntad de mantener y fortalecer su relación con los Estados Unidos de Norteamérica. El progreso político, económico y social del Pueblo de Puerto Rico está íntimamente ligado al propósito de que tanto el idioma español como el inglés sean los idiomas oficiales en esta ju-risdicción. La Ley Núm. 4 de 5 de abril de 1991 no ha llenado las expectativas del Puerto Rico de hoy que aspira a participar activamente en las iniciativas de desarrollo en la Cuenca del Caribe, Latinoamérica, Norteamérica y a nivel internacional. Se necesitan vehículos prácticos para que el Gobierno de Puerto Rico pueda continuar comunicándose en forma efectiva con su propio pueblo y el mundo exterior. El inglés constituye el idioma que más frecuentemente se utiliza para llevar a cabo las comunicaciones internacionales hoy día. Por razones históricas, nuestro Pueblo ha venido utilizando indistintamente el español y el inglés por más de nueve décadas sin que ello haya significado que hemos postergado o abdicado nuestro vernáculo, el idioma español, ni que hayamos rendido nuestra lengua ni nuestra cultura. Por el contrario, nuestros ciudadanos se encuentran en la posición privilegiada de haber estado expuestos y tenido la oportunidad de aprender y hablar dos idiomas importantes.

Tanto el español como el inglés pueden convivir como lo han hecho hasta ahora en armonía y conforme a las necesidades del pueblo puertorriqueño, sin que uno desvalorice al otro.

9Mitsubishi Motors Corp. vs. Soler Chrysler-Plymouth.



Nada de lo expresado en esta ley significa un retroceso linguístico o una imposición cultural al Pueblo de Puerto Rico. Cualquier referencia a un intento de asimilación cultural es cosa del pasado. El propósito de esta medida es corregir los efectos adversos y los contratiempos de naturaleza práctica creados por la Ley Núm. 4 de 5 de abril de 1991, al declarar y establecer que el español e inglés serán idiomas oficiales a usarse indistintamente en todos los depar-tamentos, municipios, u otras subdivisiones políticas, agencias, oficinas y dependencias gu-bernamentales de las Ramas Ejecutiva, Legislativa y Judicial del Estado Libre Asociado de Puerto Rico. En esta forma se hace justicia y se valida una realidad existente en nuestra so-ciedad desde hace aproximadamente un siglo.

A propósito de despejar dudas sobre la intención legislativa referente a esta medida reitera-mos lo siguiente:

Esta medida permite utilizar el inglés nuevamente en gestiones de Gobierno en Puerto Rico. Como norma general, el uso del inglés en diligencias gubernamentales se proscribió aquí en 1991, cuando se legisló para darle categoría de idioma oficial sólo al español. Hasta ese mo-mento, el inglés también había sido idioma oficial en Puerto Rico. En resumen, con la apro-bación de esta medida restablecemos, sin quitar ni añadir nada, la situación jurídica que exis-tía en Puerto Rico con anterioridad a la aprobación de la ley de 1991.

A través de esta medida, la Asamblea Legislativa no pretende establecer, por fiat legislativo, una condición de bilinguismo, extraña a la realidad cotidiana del pueblo puertorriqueño. Nos limitamos a reconocer otra realidad: que la relación de Puerto Rico con Estados Unidos, cada vez más estrecha en lo político y lo económico, lo mismo que la aspiración a perpetuar esa relación expresada en las urnas por los votantes de los dos partidos principales - que congre-gan más del 90 por ciento del electorado - multiplica las instancias en que es preciso que nuestro gobierno reciba y conteste comunicaciones en inglés y tramite asuntos oficiales en ese mismo idioma. Proscribir el uso del inglés, por puro fiat legislativo, como se hizo en 1991, entorpece y encarece el funcionamiento de nuestro gobierno innecesaria e injustificadamente. Ninguna disposición de esta medida da amparo o valida la infundamentada especulación de que, al aprobarla, la Asamblea Legislativa estaría abriendo puertas a que pueda utilizarse un lenguaje que no sea el español como vehículo de enseñanza en las escuelas públicas de Puerto Rico. Este proyecto de ley no deroga, ni cambia, ni enmienda el Artículo 1.02 de la Ley Orgánica del Departamento de Educación - Ley 68 de 28 de agosto de 1991 - que, en lo pertinente establece "que la educación se impartirá en el idioma vernáculo, el español. Se enseñará el inglés como segundo idioma". Reiteramos aquí la política pública a esos efectos. Ninguna disposición de este proyecto de ley da amparo a la infundamentada especulación de que, al aprobar el mismo, la Asamblea Legislativa estaría autorizando o validando el uso de un idioma distinto al español en procedimientos judiciales en los tribunales del Estado Libre Asociado de Puerto Rico. La cuestión del idioma judicial fue resuelto por nuestro Tribunal Su-premo en el caso de Pueblo vs Tribunal Superior(1965) y lo establecido allí no sufre cambio alguno con la aprobación de esta medida. La misma tampoco altera la Regla 8.5 de Procedi-miento Civil a efecto de que "las alegaciones, solicitudes y mociones deberán formularse en español" en los Tribunales de Puerto Rico.



Decrétase por la Asamblea Legislativa de Puerto Rico: Artículo 1

Se establecen el español y el inglés como idiomas oficiales del Gobierno de Puerto Rico. Ambos se podrán utilizar, indistintamente, en todos los departamentos, municipios, u otras sub-divisiones políticas, agencias, corporaciones públicas, oficinas y dependencias guberna-mentales de las Ramas Ejecutiva, Legislativa y Judicial del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, conforme a lo dispuesto en esta ley, o lo que por ley especial se dispone. 1 L.P.R.A. 59 Artículo 2

Cuando ello fuere necesario se harán traducciones e interpretaciones orales o escritas, de un idioma al otro, de modo que las partes interesadas puedan comprender cualquier procedi-miento o comunicación en dichos idiomas. 1 L.P.R.A. 59a Artículo 3

Los departamentos, municipios, y otras subdivisiones políticas, agencias, corporaciones pú-blicas, oficinas y dependencias gubernamentales de las Ramas Ejecutiva, Legislativa y Judi-cial del Estado Libre Asociado de Puerto Rico emplearán, cuando fuese necesario, intérpre-tes y traductores competentes para llevar a cabo las disposiciones de esta ley. 1 L.P.R.A. 59b Artículo 4

No podrá anularse ningún documento público o privado por razón de que estuviese expresa-do en uno o el otro de los idiomas oficiales de Puerto Rico, conforme a lo dispuesto en esta ley, o lo que por ley especial se dispone. 1 L.P.R.A. 59c Artículo 5

Los departamentos, instrumentalidades y corporaciones públicas, municipios u otras subdivi-siones políticas, agencias, oficinas y dependencias del Gobierno de Puerto Rico podrán utili-zar en sus trámites idiomas que no sean los oficiales cuando ello fuere conveniente o necesa-rio. 1 L.P.R.A. 59d Artículo 6

La Asamblea Legislativa y la Rama Judicial adoptarán, de ser necesario, las disposiciones reglamentarias que cada una entienda apropiadas y convenientes para dar eficacia en sus respectivos procesos internos a la política pública dispuesta en esta ley. 1 L.P.R.A. 59e Artículo 7

Las disposiciones de esta ley no limitan en modo alguno los derechos constitucionales de ninguna persona, por razón del idioma que le sea vernáculo o que utilice como medio de ex-presión. 1 L.P.R.A. 59f Artículo 8

Se deroga en su totalidad la Ley Núm. 4 de 5 de abril de 1991.



Artículo 9

Si cualquier parte, sección, párrafo o cláusula de esta ley fuere declarada inconstitucional por un tribunal de jurisdicción competente, la sentencia a tal efecto dictada no afectará ni invalida-rá el resto de la misma, sino que su efecto quedará limitado a la parte, sección, párrafo o cláusula de la ley que hubiera sido declarado inconstitucional. Artículo 10

Esta ley comenzará a regir inmediatamente después de su aprobación.

5. LEY NÚM. 116 DE 2004

LEY NUM. 116 18 DE MAYO DE 2004 Para crear la “Ley para la Compra de Textos Escolares” a fin de establecer que toda escuela privada autorizada a operar en el Estado Libre Asociado de Puerto Rico deberá contar con el consentimiento de la Asociación, Consejo de Padres y Maestros o una asamblea de padres para determinar el presupuesto máximo aplicable a cada grado para la compra de los libros de texto requeridos en cada año escolar. EXPOSICIÓN DE MOTIVOS Los padres y madres de estudiantes matriculados en las escuelas privadas de Puerto Rico, al inicio de cada año escolar, tienen que enfrentarse al creciente costo de los libros de texto que cada colegio les requiere para la enseñanza de sus hijos. Ello, sin considerar los costos por concepto de matrícula, y otras cuotas que exigen dichos colegios. En adición a esto no se cuenta con la participación de los padres en el procedimiento para determinar el impacto presupuestario de la compra de determinados libros de texto para sus niños. En consecuencia cada año escolar le toma por sorpresa a los padres el alto costo de los libros de texto que son exigidos por los colegios privados para el uso de sus niños. Enten-demos que los padres que matriculan a sus hijos en colegios privados deben tener la oportu-nidad real de participar en la toma de decisión y no ser un mero recipiente de una determina-ción unilateral y poco participativa. Habida cuenta de lo anterior es de suma importancia para los padres de estudiantes matricu-lados en colegios privados que, en consenso con la Asociación o Consejo de Padres y Maes-tros, se establezcan unas pautas para la adquisición de los libros de texto con el propósito de implantar criterios que ayuden a contener los altos costos de los mismos. DECRETASE POR LA ASAMBLEA LEGISLATIVA DE PUERTO RICO: Artículo 1.-Título Esta Ley se conocerá como “Ley para la Compra de Textos Escolares” Artículo 2.-Definiciones. Para propósitos de esta Ley, los siguientes términos tendrán el significado que a continuación se expresa:



a. Asociación o Consejo de Padres y Maestros significa agrupaciones de pa-

dres y maestros pertenecientes a escuelas privadas autorizadas a ope-rar en el Estado Libre Asociado de Puerto Rico.

b. Escuela privada significa toda institución educativa privada, con o sin fines

de lucro, religiosa o secular, que se dedique a la educación preescolar, elemental, intermedia y/o secundaria, o superior a la educación espe-cial, dentro de los límites territoriales del Estado Libre Asociado de Puerto Rico.

c. Libros de textos escolares significa todo libro de texto, diccionario, libro de referencia, manual, folleto cuaderno o material de estudio requerido o sugerido por una escuela privada para uso de su programación acadé-mica y/o curricular.

d. Padres significa padre, tutor o cualquier otra persona que tenga bajo su res-ponsabilidad la vida académica o escolar del estudiante.

Artículo 3.-Participación de los Padres y Maestros. Toda escuela privada acreditada por el Consejo General de Educación que exija la compra de libros de textos escolares a sus estudiantes deberá contar con el consentimiento de la Asociación o el Consejo de Padres y Maestros o una asamblea de padres para determinar el presupuesto máximo aplicable a cada grado para la compra de dichos libros requeridos en cada año escolar. Artículo 4.-Aplicabilidad Esta Ley aplicará a toda escuela privada autorizada o que deba estar autorizada a operar en el Estado Libre Asociado de Puerto Rico y acreditada por el Consejo General de Educación. Artículo 5.-Asamblea Ordinaria; requisitos y condiciones En Asamblea Ordinaria debidamente constituida, celebrada por la Asociación o Consejo de Padres y Maestros o por una asamblea de padres no más tarde del 1ro. de mayo de cada año escolar, la escuela privada recomendará a la Asociación o al Consejo de Padres y Maes-tros o a la asamblea de padres el presupuesto máximo aplicable a cada grado para la compra de los libros de texto requeridos en cada año escolar. La escuela privada ilustrará a la Asociación o Consejo de Padres y Maestros sobre los bene-ficios del presupuesto recomendado y dicha asociación aprobará junto a la escuela el mismo.



Artículo 6.-Obligatoriedad del presupuesto aprobado El presupuesto máximo aprobado aplicable a cada grado para la compra de los libros de texto requeridos en cada año escolar será obligatorio para cada escuela privada. No obstante lo dispuesto en los artículos precedentes en el caso de escuelas que impartan doctrinas religio-sas nada de lo dispuesto en esta Ley autoriza a la asociación, consejo o asamblea de padres a limitar o inferir en forma alguna en cuanto a libros o textos de contenido religioso. Artículo 7.-Vigencia Esta Ley comenzará a regir inmediatamente luego de su aprobación.

6. LEY NÚM. 516 DE 2004

LEY NUM. 516 29 DE SEPTIEMBRE DE 2004 Para establecer como política pública del Estado Libre Asociado de Puerto Rico la promoción, fortalecimiento y desarrollo integral de la industria del libro; establecer los incentivos a la refe-rida industria; establecer los requisitos para acceder a los mismos; enmendar leyes relacio-nadas; entre otras cosas. EXPOSICIÓN DE MOTIVOS El poder que emane de la confianza en nosotros mismos será fundamental a la hora de en-frentar los nuevos retos y oportunidades que nos brinde el nuevo milenio. A nivel colectivo, estas cualidades están íntimamente ligadas a la fuerza con que afirmemos nuestra identidad, nuestra personalidad como pueblo, nuestra puertorriqueñidad. La cultura es el elemento que nos define, que nos hace únicos y valiosos ante el mundo. El libro es uno de los canales más efectivos para acceder a la cultura, la investigación y el conocimiento; elementos indispensables en el proceso de desarrollo de toda sociedad. El li-bro sigue siendo uno de los principales depositarios del acervo cultural de la humanidad. En él se manifiestan nuestras inquietudes y aspiraciones; la razón y la emoción que integra la creación humana. En Puerto Rico no ha existido una política pública relacionada con el desarrollo integral de la industria del libro. Se ha ignorado el hecho de que la industria del libro tiene el doble efecto de preservar y potenciar la identidad cultural e influir en el crecimiento económico de nuestra sociedad. Otros países latinoamericanos, conscientes de esta realidad, han fomentado el de-sarrollo de esta industria y hoy cuentan con un sólido sector que aporta empleos a sus res-pectivas economías. En Puerto Rico, teniendo un lugar preferencial respecto a nuestras rela-ciones con el mundo angloparlante y nuestra afirmación del idioma castellano, no hemos sa-bido aprovechar estas oportunidades.



Resulta imperativo apoyar a nuestros autores, a los traductores, diseñadores, editores, im-presores y libreros brindándoles las herramientas para convertir a Puerto Rico en un centro editorial capaz de competir eficazmente en el mercado internacional del libro. Este esfuerzo debe ser integral, impactando positivamente cada uno de los eslabones que componen esta industria. Con la adopción de un régimen contributivo preferencial para todas las partes en-vueltas en el proceso de producción de libros se garantizará el incremento en la creación inte-lectual, el aumento en los empleos y el mejoramiento de la producción editorial en nuestra Is-la. De esta forma, se satisfarán los requerimientos culturales y educativos de nuestro país en condiciones adecuadas de calidad, cantidad, precio y variedad y se asegurará la presencia de nuestro libro en los mercados internacionales.

DECRÉTASE POR LA ASAMBLEA LEGISLATIVA DE PUERTO RICO: Artículo 1.- Título Esta Ley se conocerá como la “Ley de Incentivos para el Desarrollo Integral de la Industria del Libro en Puerto Rico”. Artículo 2.- Definiciones Para propósitos de esta Ley, los siguientes términos tendrán el significado que a continuación se establece:

A. Autores: Son las personas naturales que realizan o crean una obra literaria, científica o artística que se publique como libro.

B. Autores Puertorriqueños: Son los autores nacidos en Puerto Rico o de ascendencia puertorriqueña hasta la cuarta generación.

C. Código: Es el Código de Rentas Internas de 1994.

D. Código Penal: Es el Código Penal de Puerto Rico.

E. CRIM: Es el Centro de Recaudaciones de Ingresos Municipales, Ley Núm.80 de 30 de agosto de 1991, según enmendada.

F. Diseñadores: Son las personas naturales o jurídicas que respondan profesionalmente por el diseño global de impresos, carátulas, formatos, diagramación interna, ilustracio-nes y otros aspectos de composición y presentación de libros.

G. Editores: Son las personas naturales o jurídicas que por cuenta propia eligen, realizan o encargan los procesos industriales para la transformación de las obras creadas por autores en libros.



H. Gobierno: Gobierno del Estado Libre Asociado de Puerto Rico.

I. Impresores: Son las personas naturales o jurídicas que, además de ostentar la titulari-dad de una empresa de artes gráficas, posean las instalaciones industriales y los me-dios necesarios para la producción de libros.

J. Libreros: Son las personas naturales o jurídicas, debidamente autorizadas, que se de-dican exclusiva o principalmente, a la venta de libros en establecimientos comerciales de libre acceso al público y aquellas otras que vendan libros directamente al público a través de sistemas de créditos, suscripción, correspondencia y otros análogos.

K. Libro: Se considera toda publicación unitaria impresa, no periódica, que se edite de una

sola vez o a intervalos, en uno o varios volúmenes o fascículos de carácter científico, cultural o artístico.

L. Traductores: Son las personas naturales o jurídicas que respondan profesionalmente por la traducción de una obra.

Artículo 3.- Política Pública Se reconoce en el libro y la lectura, instrumentos idóneos e indispensables para el enriqueci-miento y transmisión de la cultura. Se declara como política pública del Estado Libre Asocia-do de Puerto Rico la promoción y difusión de la creación intelectual a través del desarrollo in-tegral de la industria del libro. Artículo 4.- Incentivos Contributivos a los Autores Estarán exentos del pago de contribuciones los ingresos que reciban, por concepto de dere-chos de autor, los autores puertorriqueños por sus obras, hasta la cantidad de diez mil dóla-res ($10,000.00). Los autores puertorriqueños deberán presentar al Secretario del Departamento de Hacienda toda la documentación que éste por reglamento requiera para verificar y/o certificar que ha cumplido con lo dispuesto en esta Ley. Artículo 5.- Incentivos Contributivos a los Editores Toda persona natural o jurídica que opere como editor y esté incorporada en el Estado Libre Asociado de Puerto Rico o autorizada para hacer negocios en nuestra jurisdicción de confor-midad con lo dispuesto en la Ley Núm. 144 de 10 de agosto de 1995, según enmendada, co-nocida como Ley General de Corporaciones de 1995, su actividad económica y objeto social sea la edición de libros, y cuya oficina central, matriz o sede principal de la compañía esté lo-calizada en la jurisdicción del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, gozará de una exención de un cincuenta por ciento (50%) del pago de contribuciones por un periodo de diez (10) años respecto:

A. Al ingreso neto proveniente de las ventas o publicación, según sea el caso, de libros.



B. A las contribuciones sobre la propiedad mueble e inmueble, siempre que las mismas sean utilizadas para la edición de libros.

Sin embargo, toda empresa que opere como editor, según dispuesto en esta Sección, pero que su oficina central, matriz o sede principal no esté localizada en la jurisdicción del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, gozará de una exención de un diez por ciento (10%) del pago de contribuciones por un periodo de diez (10) años con respecto a los anteriores inciso A y B de este Artículo.

Los editores deberán presentar al Secretario del Departamento de Hacienda y al CRIM toda la documentación que éstos por reglamento requieran para verificar y/o certificar que ha cumplido con lo dispuesto en esta Ley. Artículo 6.- Incentivos Contributivos a los Impresores Toda persona natural o jurídica que opere como impresor y esté incorporada en el Estado Li-bre Asociado de Puerto Rico o autorizada para hacer negocios en nuestra jurisdicción, de conformidad con lo dispuesto en la Ley Núm. 144 de 10 de agosto de 1995, según enmenda-da, conocida como Ley General de Corporaciones de 1995, y cuya actividad económica y ob-jeto social sea la impresión de libros, gozará de los siguientes beneficios contributivos:

A. La importación de papel destinada exclusivamente a la impresión de libros producidos en Puerto Rico, estará libre y exenta de toda clase de derechos arancelarios. La im-portación de originales, fotografías, grabados, ilustraciones, cartones, planchas y tin-tas litográficas, películas procesadas, cuando sean exclusivamente para la impresión de libros en Puerto Rico, estarán exentos de cualquier cargo arancelario. La importa-ción de maquinarias y equipos destinados a la impresión de libros estará exenta de cualquier cargo arancelario.

B. Tendrán derecho a una exención contributiva de un diez por ciento (10%) del pago de contribuciones del ingreso proveniente de la impresión de libros en Puerto Rico por un periodo de diez (10) años.

Los impresores deberán presentar al Secretario del Departamento de Hacienda toda la do-cumentación que éste por reglamento requiera para verificar y/o certificar que ha cumplido con lo dispuesto en esta Ley. Artículo 7.- Incentivos Contributivos a los Libreros Toda persona natural o jurídica que opere como librero y que destine un treinta por ciento (30%) del espacio de su librería u ofrecimiento al público a la exhibición y venta de libros de autores puertorriqueños gozará de una exención de un quince por ciento (15%) del total de las contribuciones por los ingresos de la venta de libros impresos en Puerto Rico o de autores puertorriqueños en sus comercios por un periodo de diez (10) años a partir de la vigencia de esta Ley. Los libreros deberán presentar al Secretario del Departamento de Hacienda toda la documen-tación que éste por reglamento requiera para verificar y/o certificar que ha cumplido con lo dispuesto en esta Ley.



Artículo 8.- Incentivos Contributivos a los Diseñadores y Traductores Estarán exentos del pago de contribuciones los ingresos que reciban, los diseñadores y tra-ductores por su trabajo en la preparación de libros, hasta la cantidad de seis mil dólares ($6,000.00).

Los diseñadores y traductores deberán presentar al Secretario del Departamento de Hacien-da toda la documentación que éste por reglamento requiera para verificar y/o certificar que ha cumplido con lo dispuesto en esta Ley. Artículo 9.- Contabilidad Las personas naturales o jurídicas acogidas a la exención provista por esta Ley deberán mantener en Puerto Rico un sistema de contabilidad, que refleje claramente el ingreso bruto, gastos y otras deducciones referentes a los incentivos aquí dispuestos. Además, deberán in-cluir con su planilla de contribución sobre ingresos y en las planillas de contribución sobre la propiedad mueble en forma de anejo un estado de pérdidas y ganancias de las operaciones exentas por esta Ley y un desglose de todas las propiedades muebles, que por efectos de esta Ley quedan exentas. Artículo 10.- Reglamentación Se faculta al Departamento de Hacienda y al CRIM a preparar y promulgar aquellas reglas y reglamentos que contengan los mecanismos necesarios para velar por la adecuada y diligen-te implantación de los beneficios y requisitos establecidos por esta Ley. El Departamento de Hacienda y el CRIM consultarán con el Departamento de Estado, el Instituto de Cultura Puer-torriqueña y con el Departamento de Educación con anterioridad a la presentación de los re-glamentos aquí dispuestos. Toda persona natural o jurídica acogida a los beneficios de esta Ley deberá radicar anual-mente ante el Departamento de Hacienda y/o al CRIM, según sea el caso, en o antes del úl-timo día de su año contributivo, una certificación y/o verificación, según dispongan mediante reglamento dichas agencias, que establezca que ha cumplido con los requisitos de esta Ley. Artículo 11.- Penalidades Toda persona natural o jurídica que provea información falsa con el propósito de acceder a los incentivos provistos en esta Ley, publique o reproduzca de manera no autorizada libros, o violente o incite a violentar lo provisto aquí, será sancionada con pena de reclusión que no será menor de treinta (30) días ni mayor de seis (6) meses o pena de multa que no será me-nor de quinientos (500) dólares ni mayor de mil (1,000) dólares, o ambas penas a discreción del Tribunal. No obstante, se faculta al Secretario del Departamento de Hacienda a establecer mediante reglamento, conforme a las disposiciones de la Ley Núm. 170 de 12 de agosto de 1988, se-gún enmendada, conocida como la Ley de Procedimiento Administrativo Uniforme del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, aquellas multas administrativas u otras penalidades que en-tienda pertinente.



Artículo 12.- Relación con otras Leyes La presente Ley establece la política pública tributaria y contributiva sobre la Industria del Li-bro en Puerto Rico, por lo que regirá sobre cualquier otra ley o legislación relacionada a esta materia. Tanto el Código de Rentas Internas de 1994, como cualquier otra ley aplicable, de-berán enmendarse acorde a lo aquí dispuesto. Sin embargo, podrán utilizarse de manera su-plementaria en todo aquello que no contradiga lo expresado por esta Ley. Artículo 13.- Separabilidad Si cualquier parte, inciso, oración o sección de esta Ley fuera declarada inconstitucional por un tribunal competente, la sentencia a tal efecto dictada se limitará a la parte, inciso, sección u oración declarada inconstitucional, y no afectará ni invalidará el resto de las disposiciones de esta Ley. Artículo 14.- Vigencia Esta Ley comenzará a regir inmediatamente después de su aprobación.

7. BIBLIOGRAFÍA

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Compañía de Comercio y Exportación; www.comercioyexportacion.com

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Departamento de Educación de Puerto Rico; www.de.gobierno.pr

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Departamento del Trabajo de Puerto Rico; www.dtrh.gobierno.pr

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