2
www.CATHOLICLIFEANDFAITH.NET © Catholic Life and Faith, 2016 Impacto Domingo Catequético 2016 Trayendo la fe a la vida. Encontrando vida en la fe. El impacto de la oración ABRE TU CORAZÓN Toma unos momentos cada día, un poco más si te es posible, para abrir tu corazón al amor de Dios. Piensa en los momentos en los que has sentido la presencia de Dios, ¡recuerda que Dios siempre espera por ti! ORA SOBRE TU VIDA ¿Qué es lo más importante? ¿Cómo tus actividades diarias, decisiones y enfoques muestran tu amor por Dios? ¿De qué formas tu fe dirige e influencia tu vida? Lleva todas estas cosas en oración a Dios. CRECE EN FE Y CONFIANZA Permite que Jesús toque tu corazón con paz, sanción, misericordia y amor. Confía en que Dios está contigo en todas las circunstancias. Comparte las bendiciones de esta relación de amor y confianza con la familia, amigos, con aquellas personas a las que enseñas, y con otros feligreses. ¿A quién o qué amas con todo tu corazón? Tu respuesta a esta pregunta lo dice todo. Alguna vez alguien te ha preguntado, “¿Qué hay en tu corazón?”, o dicho: “¿Este es el centro de nuestra discusión”? Cuando hablamos del corazón, llegamos a lo que es más importante, el centro, la esencia de la cuestión. Cuando se le preguntó cómo decidía qué historia elegir para producir, John Lassiter (director creativo de Pixar y Disney Animation Studios) dijo: “¿De dónde proviene el corazón?”. Es el centro de la historia, el fuerte vínculo emocional, lo que importa. Lo que está en el centro de nuestras vidas es lo que tiene mayor impacto. Cuando sabemos dónde está nuestro corazón, damos prioridad y ponemos las cosas en la perspectiva correcta. Al hacerlo, empezamos a ver cómo los muchos aspectos de nuestra vida encajan entre sí. ¿Está Dios en el centro de tu vida? Algunos podrían decir claramente que sí — y sus decisiones y acciones reflejan el corazón de Dios. Sin embargo, muchos dirán que su corazón no se encuentra ahí todavía. Al escuchar las lecturas sobre las historias de los primeros discípulos, es evidente que dieron a Jesús un lugar en sus vidas. Sin embargo, podemos olvidar, que antes de que los discípulos fueran enviados de dos en dos, antes de que pidieran a Jesús que les enseñara a orar, antes de que caminaran de ciudad en ciudad con Él, hubo un encuentro. Conforme fueron conociendo a Jesús, éste tocó los corazones; entonces experimentaron paz, sanción, misericordia y amor de una manera que nunca habían conocido antes. Para nosotros también, este encuentro es el punto de partida. Así debe ser. ¿Cómo llegamos a conocer a Jesús? La respuesta puede ser un poco diferente para cada uno de nosotros. No importan las circunstancias, sin embargo, el punto de partida es un corazón abierto. Cuando abrimos nuestros corazones al encuentro con Cristo, podemos estar seguros de que Dios está ahí, a la espera, listo para tocar nuestros corazones con un amor más allá de nuestra imaginación o comprensión. Un corazón abierto conduce a un corazón lleno de amor. ¡Y esto hace toda la diferencia!

Impacto - National Conference for Catechetical Leadership · Cuando sabemos dónde está nuestro corazón, damos prioridad y ponemos las cosas en la perspectiva correcta. Al hacerlo,

  • Upload
    others

  • View
    4

  • Download
    0

Embed Size (px)

Citation preview

Page 1: Impacto - National Conference for Catechetical Leadership · Cuando sabemos dónde está nuestro corazón, damos prioridad y ponemos las cosas en la perspectiva correcta. Al hacerlo,

www.CATHOLICLIFEANDFAITH.NET © Catholic Life and Faith, 2016

Impacto Domingo Catequético 2016

Trayendo la fe a la vida. Encontrando vida en la fe.

El impacto de la oración

ABRE TU CORAZÓN Toma unos momentos cada día, un poco más si te es posible, para abrir tu corazón al amor

de Dios. Piensa en los momentos en los que has

sentido la presencia de Dios, ¡recuerda que Dios siempre

espera por ti!

ORA SOBRE TU VIDA ¿Qué es lo más importante?

¿Cómo tus actividades diarias, decisiones y enfoques muestran

tu amor por Dios? ¿De qué formas tu fe dirige e influencia tu vida? Lleva todas estas cosas

en oración a Dios.

CRECE EN FE Y CONFIANZA

Permite que Jesús toque tu corazón con paz, sanción,

misericordia y amor. Confía en que Dios está contigo en todas

las circunstancias. Comparte las bendiciones de esta relación de amor y confianza con la familia, amigos, con aquellas personas a

las que enseñas, y con otros feligreses.

¿A quién o qué amas con todo tu corazón?Tu respuesta a esta pregunta lo dice todo.Alguna vez alguien te ha preguntado, “¿Qué hay en tu corazón?”, o dicho: “¿Este es el centro de nuestra discusión”? Cuando hablamos del corazón, llegamos a lo que es más importante, el centro, la esencia de la cuestión. Cuando se le preguntó cómo decidía qué historia elegir para producir, John Lassiter (director creativo de Pixar y Disney Animation Studios) dijo: “¿De dónde proviene el corazón?”. Es el centro de la historia, el fuerte vínculo emocional, lo que importa. Lo que está en el centro de nuestras vidas es lo que tiene mayor impacto. Cuando sabemos dónde está nuestro corazón, damos prioridad y ponemos las cosas en la perspectiva correcta. Al hacerlo, empezamos a ver cómo los muchos aspectos de nuestra vida encajan entre sí.

¿Está Dios en el centro de tu vida? Algunos podrían decir claramente que sí — y sus decisiones y acciones reflejan el corazón de Dios. Sin embargo, muchos dirán que su corazón no se encuentra ahí todavía. Al escuchar las lecturas sobre las historias de los primeros discípulos, es evidente que dieron a Jesús un lugar en sus vidas. Sin embargo, podemos olvidar, que antes de que los discípulos fueran enviados de dos en dos, antes de que pidieran a Jesús que les enseñara a orar, antes de que caminaran de ciudad en ciudad con Él, hubo un encuentro. Conforme fueron conociendo a Jesús, éste tocó los corazones; entonces experimentaron paz, sanción, misericordia y amor de una manera que nunca habían conocido antes. Para nosotros también, este encuentro es el punto de partida. Así debe ser.

¿Cómo llegamos a conocer a Jesús? La respuesta puede ser un poco diferente para cada uno de nosotros. No importan las circunstancias, sin embargo, el punto de partida es un corazón abierto. Cuando abrimos nuestros corazones al encuentro con Cristo, podemos estar seguros de que Dios está ahí, a la espera, listo para tocar nuestros corazones con un amor más allá de nuestra imaginación o comprensión. Un corazón abierto conduce a un corazón lleno de amor. ¡Y esto hace toda la diferencia!

CATHOLICL I F E & FA I T H

Page 2: Impacto - National Conference for Catechetical Leadership · Cuando sabemos dónde está nuestro corazón, damos prioridad y ponemos las cosas en la perspectiva correcta. Al hacerlo,

www.CATHOLICLIFEANDFAITH.NET © Catholic Life and Faith, 2016

Impacto Discipulado. Corresponsabilidad. Evangelización.

¿Quién es tu prójimo?Podríamos decir que con la parábola del buen samaritano, Jesús eleva el estándar de lo que significa mostrar el amor al prójimo. Él eleva el estándar, y algo más: Se expone a la hipocresía de los líderes religiosos

cuya preocupación por el seguimiento de la ley pasa por encima de su preocupación por el hombre herido, y la compasión prevista en el espíritu de la ley. Al poner al samaritano como el prójimo de la víctima, Jesús desafía los prejuicios sociales de la época. Los samaritanos y los judíos se despreciaban mutuamente, sin embargo, este samaritano no sólo cuida de la víctima, él reflejó el amor de Dios a través de su espléndida expresión de compasión y misericordia. El que era odiado se convirtió en alguien admirado y respetado.

¿Quién es tu prójimo? ¿Hay individuos o personas de un determinado grupo étnico o social que evites o desprecies? ¿Cómo eres llamado a cumplir con el espíritu de los preceptos de Cristo de amar y servir? ¿Quién espera tu compasión, aceptación, compartimiento, desinteresado, o atención?

Discípulos agradecidosCuando llevamos nuestros corazones a Dios en oración, nos arriesgamos a ser cambiados, para mejorar. Esta apertura a la transformación requiere de humildad y confianza, las cuales aprendemos de Jesús, cuya propia vida de oración ejemplificó estas cualidades: “La oración de Jesús ante los acontecimientos de salvación que el Padre le pide es una entrega, humilde y confiada, de su voluntad humana a la voluntad amorosa del Padre”. (CIC, 2600). La gratitud es el núcleo de esa fe confiada y humilde. Gratitud: ¿Por qué estás agradecido hoy? Ofrece una oración de alabanza y acción de gracias por las muchas bendiciones que te han sido dadas. Dones: ¿Qué dones (talentos, amistades, tiempo, recursos, bendiciones de circunstancias) observas en tu vida en este momento? Dale gracias a Dios por estos regalos. Respuesta: Pregunta al Señor, “¿qué puedo hacer con todo lo que me ha sido dado?” ¿Cómo responderías a las bendiciones que percibes, dando de ti o de tus recursos? Haz un compromiso en oración para compartir de ti y de tus

recursos como una reflexión de tu compromiso de seguir a Cristo como un discípulo agradecido. Confianza: ¿De qué forma estás llamado a confiar en Dios de manera que puedas responder fielmente? Tu compartimiento puede incluir dar de tu tiempo o talentos en formas en las que puedas sentirte incómodo; puedes sentir la tentación de aferrarte a tu dinero, o tu tiempo, necesitas confiar que Dios estará contigo al compartir como discípulo agradecido. Ora por la fortaleza de permanecer firme a tu compromiso y de reconocer la presencia de Dios contigo mientras llevas a cabo tu compromiso.

Gratitud: Volvemos al punto de partida al reflexionar sobre el servicio, el cuidado o compartimiento que hemos ofrecido. ¿De qué maneras has reconocido la gracia de Dios en medio tuyo cuando has llevado a cabo aquello con lo que te comprometiste?

AMARÁS AL SEÑOR TU DIOS CON TODO TU

CORAZÓN, CON TODA TU ALMA, CON TODA TU

FUERZA, Y CON TODA TU MENTE; Y A TU

PRÓJIMO COMO A TI MISMO.

Lucas 10, 25-27