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 Tr anscr i  pción del Ar culo “En el  pr inci  pio John Hor gan, Investigación y Ciencia. ol.!"#  p$ginas %&'& ()'')*. E+ E, -. I  +CI-I/ . . . John Hor gan Hay  puntos de vista 0uy dis  par es so1r e cu$ndo, dónde y, so1r e todo, có0o e0  pe2ó la vida so1r e la Tierr a. ace ahor a()'')* tr einta y ocho a3os 4ue el 0ayor 0ister io al 4ue se han en5r entado  6a0$s los cien5 icos  7 el or igen de la vida  7  par ecía ha  1er 4uedado r esuelto con un 8nico y sencillo e9per i0ento. :tanley ;iller , un  6oven de <= a3os 4ue  pr e  par a  1a su doctor ado en la >niver sidad de Chicago en )'"=, recreó la tierr a  pr i0itiva en un  pe4u e3o ala0  1i4ue sellado. ,o lle con unos litr os de 0etano, a0onio e hidr ógeno(la at0ós5 er a* y un  poco de agua(los oc?anos*. Con un dis  positivo de descar ga si0uló una tor 0enta el?ctr ica, de r ayos 4ue 5 ul0ina  1an los gases@ con una r esistencia hi2o  1or  1otear  el agua. A los  poco s días, el agua y el cr istal a  par ecían te3idos de una sustancia r o  6i2a. Tr as anali2ar la co0  pr o1ó, con r egoci6o, 4ue la sustancia era r ica en a0ino$cidos, los co0  puestos or g$nicos 4ue se enla2a  1an par a 5 or 0ar las  pr oteínas, la  1ase 0ater ial de la vida. ,os r esultados de ;iller ,  pu1licados en un 0odesto ar culo de dos  p$ginas en la r evista :cience,  par ecían a  poyar la idea de 4ue la vida  podr ía ha  1er sur gido a  par tir de una sencillas r eacciones 4uí0icas en la sopa  pr i0or dial. ,os entendidos no tar dar on en  pr onosticar  4ue los cien5 icos, igual 4ue el r . Br anC esnstein de ;ar y :helley,  pr onto cr ear ían or ganis0os vivos en sus la  1or ator ios, y se  podr ía desentr a3ar el or igen de la vida con todo lu  6o de detalle. ,a r ealidad ha sido otr a. El  pr o1le0a del or igen de la vida ha r esultado 0$s co0  plicado de lo 4ue yo y 0uchos suponía0osr econoce el  pr opio ;iller , 4ue ense3a ahor a 4uí0ica en la >niver sidad de :an iego.  H

Joh Horgan

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origen de la vida

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Transcripcin del Artculo En el principio John Horgan, Investigacin y

Ciencia. Vol.75: pginas 8090 (1991). EN EL PRINCIPIO . . . John Horgan

Hay puntos de vista muy dispares sobre cundo, dnde y, sobre todo, cmo empez la vida sobre la Tierra.

ace ahora(1991) treinta y ocho aos que el mayor misterio al que se han enfrentado jams los cientficos el origen de la vida pareca haber quedado resuelto con un nico y sencillo experimento. Stanley Miller, un

Hjoven de 23 aos que preparaba su doctorado en la Universidad de Chicago en

1953, recre la tierra primitiva en un pequeo alambique sellado. Lo llen con unos litros de metano, amonio e hidrgeno(la atmsfera) y un poco de agua(los ocanos). Con un dispositivo de descarga simul una tormenta elctrica, de rayos que fulminaban los gases con una resistencia hizo borbotear el agua.

A los pocos das, el agua y el cristal aparecan teidos de una sustancia rojiza. Tras analizarla comprob, con regocijo, que la sustancia era rica en aminocidos, los compuestos orgnicos que se enlazaban para formar las protenas, la base material de la vida. Los resultados de Miller, publicados en un modesto artculo de dos pginas en la revista Science, parecan apoyar la idea de que la vida podra haber surgido a partir de una sencillas reacciones qumicas en la sopa primordial.

Los entendidos no tardaron en pronosticar que los cientficos, igual que el Dr. Frankesnstein de Mary Shelley, pronto crearan organismos vivos en sus laboratorios, y se podra desentraar el origen de la vida con todo lujo de detalle. La realidad ha sido otra. El problema del origen de la vida ha resultado ms complicado de lo que yo y muchos suponamos reconoce el propio Miller, que ensea ahora qumica en la Universidad de San Diego.Versin cientfica del gnesis: Arranca con la condensacin del sistema solar, a partir de una nube de polvo y gas, hace unos 4.500 millones de aos(a, b). Los compuestos qumicos orgnicos podran haber sido aportados por los impactos(c) o bien sintetizados en la atmsfera(d), masas de agua(e) o surgencias hidrotermales submarinas(f). Esos compuestos qumicos se combinaron y formaron sustancias orgnicas ms complejas, como protenas y cidos nucleicos(g). Los impactos y un sofocante efecto invernadero, causado por el dixido de carbono emitido por los volcanes, podran haber inutilizado la superficie terrestre hasta hace unos 3.800 millones de aos, 300 millones, poco ms, poco menos, surgieron unos microbios fotosintticos, parecidos a las cianobacterias, o algas verde azules(h). Estos primitivos organismos se concentraban a veces en densas formaciones, o estromatolitos, en las orillas de mares somero(i).

Stanley L. Miller ante una rplica del aparato que utiliz en su experimento de

1953, realizado en la Universidad de Chicago, con el que demostr cmo se pudieron formar los aminocidos

Cabe decir, sin embargo, que algunos progresos se han producido desde

1953. Ese mismo ao, por ejemplo, James D. Watson y Francis H. C. Crick descifraron la estructura del ADN (cido desoxirribonucleico), la hlice bicatenaria que contiene la informacin que las clulas necesitan para construir y organizar las protenas.

En las dcadas siguientes, experimentos similares a los de Miller demostraron las posibles vas de sntesis de los componentes primarios del ADN (los nucletidos) y de las protenas (aminocidos), en condiciones prebiticas. Estos compuestos orgnicos podran haberse acumulado en determinadas masas de agua: pequeas charcas templadas, como propusiera Charles Darwin, en remansos de marea o en mares someros.

Nuevos experimentos, realizados a principios de los ochenta, ayudaron a completar el panorama. Revelaban que el cido ribonuclico, o ARN, una molcula monocateriana que acta de intermediario del ADN en la fabricacin de las protenas, poda autocopiarse sin el concurso de enzimas. Para algunos, los primeros organismos contenan ARN: habra existido un mundo ARN precoz, que sirvi de puente entre la qumica sencilla y los prototipos de clulas complejas, basadas en el ADN, como las que poseen los organismos modernos. De acuerdo con el registro fsil, tales clulas surgieron a lo largo de los primeros mil millones de aos transcurridos desde la formacin de la Tierra: y esto ltimo ocurri hace cuatro mil quinientos millones de aos.

A pesar de que ese marco terico figura ya en los libros de texto, ha sido seriamente cuestionado. Los experimentos realizados para comprobar la hiptesis del mundo ARN han demostrado la dificultad de sintetizar ese cido nucleico en las condiciones que probablemente prevalecieron durante el origen de la vida, y que las molculas no pueden autocopiarse con tanta facilidad.Para complicar las cosas, los descubrimientos recientes que la vida surgieron en un ambiente bastante menos favorable que el del alambique de Miller. La atmsfera primordial pudo no contener metano ni amonio, como Miller supona, y, por tanto, no habra sido tan favorable para la sntesis de compuestos orgnicos, segn se desprenda de su experimento. Adems, los estudios de los crteres lunares indican que la Tierra estuvo sometida a un bombardeo incesante por enormes cometas y meteoritos. Da la impresin que la vida no se origin en una charca templada y tranquila, sino en el centro de una fuerte tempestad, asegura Christopher P. McKay, del Centro de Ames de investigaciones de la NASA en California.

A medida que el viejo paradigma se tambaleaba, surgan nueva teoras, algunas nuevas y otras remozadas. La presencia de compuestos orgnicos en meteoritos y cometas, han llevado a especular que las materias primas necesarias para la vida aterrizaron procedentes del espacio exterior. Las versiones ms extremas de esta lnea admiten que, del espacio, no solo llegaron los compuestos orgnicos inanimados, sino tambin organismos hechos y derechos. Algunos investigadores, a la vez que mantienen que la vida se produjo en la Tierra, piensan, sin embargo, que para entender mejor dicho evento seran necesario otros descubrimientos por ejemplo, encontrar vida en alguna otra parte, quizs en Marte o incluso en un sistema solar distinto.

Otros mantienen que la vida no comenz en el espacio, o en el agua, cerca de la superficie, sino en surgencias termales del suelo ocenico. Para los defensores de esta teora, esos humeros termales podran haber proporcionado la proteccin y el flujo constante de energa y nutrientes necesarios para producir la vida animada. Quiz la ltima teora, y la ms prometedora a los ojos de algunos veteranos investigadores del origen de la vida, sea la que propone un abogado alemn, cuya distraccin consiste precisamente en idear cmo pudo suceder. Explica que la vida comenz como una especie de pelcula chiclosa sobre la superficie de la pirita.

Ninguna de esas propuestas tiene apoyo suficiente para convertirse en un nuevo paradigma. Pero tampoco cabe excluir ninguna. Lo que no deja de molestar a Miller, tan riguroso experimentalista cuan severo crtico. Algunas teoras, propone, no merecen tomarse en serio. La hiptesis del origen espacial de la materia orgnica la considera una prdida de tiempo la de las sugerencias termales, basura la teora de la pirita, qumica de saln. Se queja de que tales trabajos perpetan la mala reputacin que tiene el campo del origen de la vida, siempre en el lmite de la ciencia.Otros, sin dejar de reconocer la debilidad de todas las teoras, contemplan este mundillo de una manera ms favorable. Es realmente excitante, comenta James P. Ferris, qumico del Instituto Politcnico Rennselaer y editor de la revista Origins of Life and Evolution of the Biosphere. Tenemos todo tipo de nuevos ingredientes en la olla. Antes y despus, aventura, surgir alguna explicacin convincente para el origen de la vida.Construir un boeing

Algunos han argumentado que, con tiempo suficiente, se pueden dar hechos de apariencia incluso milagrosos. Por ejemplo, la manifestacin espontnea deun organismo unicelular a partir de la unin aleatoria de ciertos compuestos qumicos. A esto, sin embargo Fred Holey, astrnomo britnico de temperamento iconoclasta, responde que tal cosa tiene la probabilidad de ensamblar un 747 por parte de un huracn que atravesase una chatarrera.La mayora de los investigadores estn de acuerdo con Holey en este punto(aunque en poco ms). Casi todos comparten que el proceso se aceler tras una sucesin de acontecimientos, ninguno de los cuales es una locura improbable. Como muchas cosas en biologa, este enfoque se remonta a Darwin, quien ya imagin que la vida pudo comenzar cuando algunas sustancias estimuladas por el calor, luz o electricidad reaccionaron una con otras y generaron compuestos orgnicos de complejidad creciente (Darwin tambin ofreci una explicacin para nuestra incapacidad de observar en la actualidad, la aparicin de vida a partir de barro inanimado: cualquier organismo poco experimentado, escribi Darwin, sera ahora inmediatamente devorado o absorbido por los ya existentes.)

La versin del origen de la vida propugnada por Miller y otros tambin se puede contemplar en trminos darwinianos. La vida comenz, dicen ellos, cuando algn compuesto o tipo de compuestos desarrollaron la capacidad de autorreplicarse por fuerza, deban ocasionalmente producir errores heredables. Esos errores originaban a veces generaciones de molculas que se replicaban ms eficazmente que sus predecesoras. Voila! La evolucin: y con ella, la vida.

Durante cierto tiempo, despus de los experimentos de Miller, las protenas fueron las candidatas mejor colocadas para constituir las originales molculas autorreplicativas crease, en efecto, que posean capacidad de reproducirse y organizarse. A finales de los aos cincuenta, Sidney Fox, hoy en la Universidad de Illinois, realiz experimentos que consolidaban ese punto de vista. Calentando repetidamente aminocidos y disolvindolos luego en agua, induca su coagulacin en diminutas esferas compuestas de breves cadenas protenicas.

La explicacin de Fox fue, y sigue siendo, que esos protenoides constituyeron las primeras clulas. Pero sus trabajos han perdido atractivo para muchos. Para Gerald F. Joyce del Instituto de Investigaciones de la Clnica Scripps, una vez que se han producido los protenoides, ah se acaba todo. No pueden reproducirse o evolucionar. Otros investigadores, en particular Cyril A Ponnamperuma de la Universidad de Maryland han seguido el trabajo donde Fox lo dej, empendose en desarrollar protenas que puedan autoensamblarse y reproducirse sin el concurso de los cidos nuclicos.

El h ue vo o l a ga ll in a?

Muchos investigadores atribuyen a los cidos nuclicos la primaca temporal en la autorreplicacin, desde el origen. Los trabajos de Watson y Crick y otros han demostrado que las protenas se fabrican siguiendo las instrucciones dadas por el ADN. Pero hay un problema. El ADN no puede desempear su trabajo, ni siquiera su propia replicacin, sin el concurso de protenas catalticas, o enzimas. En pocas palabras no se puede fabricar protenas sin el ADN, nitampoco el ADN sin protenas. Es el clsico problema del huevo o la gallina

qu fue primero? El ADN o las protenas?

Los experimentos realizados a principios de los ochenta por Thomas R. Cech de la Universidad de Colorado en Boulder y Sydney Altman de la Universidad de Yale, parecan ofrecer una respuesta: el ARNCon anterioridad se haba especulado con la posibilidad de que este cido nuclico fuese la primera molcula autorreplicativa, pero nadie haba podido demostrar cmo podra hacerlo eficazmente, sin el concurso de enzimas. Cech y Altman descubrieron que ciertos tipos de ARN se comportaban como enzimas: se autofragmentaban en dos y se volvan a unir posteriormente.

El descubrimiento, que mereci el premio Nobel para Cech y Altman en 1989, pas enseguida ser explotado por los investigadores del origen de la vida. Si el ARN poda comportarse como una enzima, razonbase, podra tambin autorreplicarse sin la ayuda de protenas. El propio ARN hara de gen y de enzima, de huevo y de gallina.

Walter Gilbert, bilogo de la Universidad de Harvard, acu la expresin mundo de ARN en 1986, y sigue siendo un entusiasta defensor de la teora. Segn l, el primer organismo estara formado simplemente por molculas de ARN autoreplicativas (ver dibujo).

A medida que evolucionaban aprendieron a sintetizar protenas que le ayudaban a replicarse ms rpidamente, y lpidos que formaban una pared celular. Por ltimo, el organismo de ARN dio origen al ADN, una molcula mejor preparada para almacenar la informacin gentica. Los bilogos han podido reproducir algunos actos de este drama molecular en el laboratorio. Jack W. Szotack y otros, del hospital general de Massachusetts, han construido molculas de ARN que actan una y otra vez como enzimas, cortando y pegando molculas, incluidas ellas mismas. En un principio el ARN enzima se limitaba a realizar procesos sencillos, Szotack intenta ahora demostrar que tales molculas pueden encapsularse en una membrana a imagen de clula. U n Mu nd o de A RN

Manfred Eigen, del instituto Max Planck de qumica biofsica, de Gotinga, ha examinado lo que se piensa es un estado tardo de evolucin del ARN, a tenor de sus experimentos, el ARN, estimulado por enzimas y otros aditamentos suministrados por el experimentador, puede adaptarse y evolucionar. Este fenmeno denominado evolucin dirigida, encierra una enorme potencialidad como generador de nuevos compuestos.Pero mientras ms se profundiza en el concepto en el concepto de mundo ARN, mas

problemas surgen, Cmo se origino el 1 ARN? Si no resulta fcil sintetizar el ARN y sus componentes en el laboratorio, ni siquiera en las mejores condiciones, cuanto menos en las condiciones prebiticas que se suponen. El proceso mediante el cual se crea azcar ribosa, componente clave del ARN. Origina tambin una serie de azucares que pueden inhibir la sntesis del ARN. Adems nadie explica satisfactoriamente pro que el fsforo, una sustancia de abundancia limitada en la naturaleza, es un ingrediente esencial del ARN (y del ADN).Una vez sintetizado el ARN, solo alcanzara a autorreplicarse si el experimentador se lo facilita bastante dice Joyce, de la Clnica Scripps, un especialista en ARN. Es una molcula inepta, aade. Especialmente si se le compara con las protenas. Leslie E. Orgel, del instituto Salk de estudios biolgicos. Reputado experto en las condiciones del mundo del ARN. Esta de acuerdo con Joyce. Los experimentos que simulan las etapas tempranas del mundo del ARN son demasiado complicados para considerarlos replicas verosmiles del escenario donde se desarrollo el origen de la vida, afirma tajante Orgel. Y aade, es preciso conseguir que muchsimas cosas funcionen bien. Y que no haya ningn error .Orgel ha llegado a la conclusin de que alguna molcula ms sencilla muy distinta quiz, pudo haber preparado el terreno al ARN identificar dicho compuesto no ser fcil. La qumica de los cidos nucletidos, seala, descansa sobre una slida base de conocimientos y aventurarse a salir de ella supone volver a empezar. Pero algunos han acabado por sumergirse en lo desconocido. El verano del ao pasado. El grupo dirigido por Julius Rebek. J, del Instituto de Tecnologa de Massachusetts arm un considerable revuelo al anunciar que haba logrado crear una molcula orgnica sinttica con capacidad de autorreplicativa. La molcula, el ter tricido de la aminoadenosina (ETAA), consta de dos compuestos que, por su estructura qumica recuerdan a las protenas y a los cidos nucleicos. Las molculas de ETAA, en cloroformo y con los correspondientes sustratos, sirven de molde para la formacin de nuevas molculas de ETAA.Los experimentos de Rebek presentan dos inconvenientes. Segn Joyce. La replicacin se produce en condiciones muy artificiales. Poco naturales, y lo que es ms importante aun. Con demasiada fidelidad. Sin mutacin, la molcula no puede evolucionar en sentido darwinista. Orgel abunda en esta idea. Lo que Rebek hace es muy ingenioso, dice, pero no veo el que inters puede tener en el problema del origen de la vida.

La solucin del origen de la vida parece estar mas lejos que nunca. La bacteria ms elemental es tan condenadamente complicada, desde el punto devista qumico, que resulta casi imposible imaginar como ha surgido. Resume Harold P. Klein, de la Universidad de Santa Clara, presidente de una comisin de la Academia Nacional de las Ciencias que ha revisado recientemente las investigaciones sobre el origen de la vida.(Su conclusin es que hace falta investigar mucho ms.)Aun cuando los cientficos consigan crea algo en el laboratorio con propiedades similares a la vida, habr que seguir preguntndose: sucedi as en realidad? Dar respuesta a esa pregunta ser extremadamente difcil, ya que las placas tectnicas, el vulcanismo y la erosin han borrado la mayora de las seales de los primeros miles de aos de existencia de la Tierra. Para estimar la edad del planeta, por ejemplo, Los investigadores deben recurrir a los meteoritos. Presuntas reliquias de la poca en la que el sistema solar se condens a partir de una nube de gas y polvo. Las mediciones de radioactividad en los meteoritos apuntan a que su origen, y por lo tanto el de la Tierra, se remonta a unos cuatro mil quinientos millones de aos.

E l Ve rd n d e la T ie rr a

Para establecer las condiciones en las que se gener la vida, es necesario saber cuando se produjo tal acontecimiento. Los cientficos pensaban en un principio que debieron pasar miles de aos antes de que la materia inerte adquiriese vida.

FOSILES DE 3.500 MILLONES DE AOS, entre los que cabe mencionas una hilera de clulas semejantes a las cianobacterias, o algas verde azules y estromatolitos encontrados en el oeste de Australia. Hay estromatolitos en ese y otros continentes.(Fotos equivalentes al artculo original)

La razn de esa postura radica en el registro fsil de los organismos pluricelulares, desde los trilobites hasta el Neandertal, que datan slo de unos 600 millones de aos. (Homo Sapiens apareci hace menos de un milln de aos). En las ltimas dcadas, sin embargo, los paleontlogos han precisado que antes de que surgiesen los organismos pluricelulares, la Tierra estuvo probablemente poblada durante miles de millones de aos por criaturas sencillas, como las algas, o verdn de charcas, segn dice J. William Schopf, de la Universidad de California, especialista en protofsiles.Schopf y otros han acumulado lo que ellos creen pruebas inequvocas de que la vida existi hace por lo menos 3500 millones de aos. Entre dichas pruebas estn dos series de fsiles encontrados en determinados puntos de Australia y Sudfrica, cuyas edades han sido establecidas por mtodos radiactivos. Uno de esos fsiles son unas masas rocosas de color pardo verdoso, que revelan la antigua presencia de estromatolitos, densas formaciones de microbios que an se pueden encontrar en algunos lugares del mundo, creciendo en aguas templadas poco profundas. Los otros fsiles muestran la impronta microscpica de hileras de clulas que recuerdan a las modernas cianobacterias, tambin llamadas algas azul verdosas. Schopf defiende que los organismos primitivos, igual que las cianobacterias en la actualidad, utilizaban probablemente la fotosntesis y liberaban oxgeno como subproducto.

Manfred Schidlowski, del Instituto Max Planck de Qumica en Maguncia, ha encontrado pruebas de que en tiempos muy remotos existieron tales organismos fotosintticos. Las pruebas proceden de unas rocas sedimentarias parcialmente fundidas, y con una antigedad de 3800 millones de aos, halladas en Isua, Groenlandia. Son estas las rocas parlantes terrestres ms antiguas. (Las que tienen el rcord absoluto, con 4200 millones de aos, son los cristales de circn, descubiertos en Australia, aunque son mudos con respecto al pasado). El hecho de que las rocas de Isua sean sedimentarias revela la pasada presencia de agua, un pre requisito para la vida. Segn Schidlowski, la presencia de carbono en las rocas indica tambin que estuvieron contaminadas con organismos fotosintticos, quienes muestran preferencias por ciertos istopos de carbono.

Este intento de viajar por el tnel del tiempo a golpe de registro fsil ha sido acogido con cierto escepticismo. David J. Des Marais, del Centro Ames de la NASA, opina que la huella de carbono en las rocas de Isua es demasiado dbil para extraer conclusiones. Roger Buick, paleontlogo australiano que ensea en Harvard, opina que el escepticismo debe ampliarse tambin a los estromatolitos y microfsiles de 3500 millones de aos, sobre cuyo origen biolgico, sin embargo, no existe discusin, a diferencia de lo que sucede con las rocas de Isua. Segn Buick, los estromatolitos podran ser sedimentos deformados por procesos geolgicos, y los microfsiles pequeos rastros de excrementos. Dudofsiles, los llama l. Los fsiles que muestran con claridad una estructura celular datan de 3100 3200 millones de aos, sostiene.

Otros expertos en fsiles arquanos, entre ellos Donald R. Lowe, de la Universidad de Stanford, piensan que Buick y quizs incluso Des Marais, pecan de exagerado escepticismo. Aunque uno por uno los fsiles se prestan a interpretaciones discrepantes, dice Lowe, cuando se suman sugieren que la vida era amplia, diversa y harto compleja hace 3500 millones de aos, y probablemente estaba ya en marcha antes de los 3800 millones de aos. Si el escenario es correcto, la vida tuvo que evolucionar y sobrevivir en circunstancias poco agradables, con periodos de autntico infierno.Despus de analizar los crteres lunares, que a modo de escritura Braille conforman un registro de la cadencia de impactos en el joven sistema solar, grupos dirigidos por los geofsicos David J. Stevenson, del Instituto de Tecnologa de California, y Norman M. Sleep, de Stanford, han concluido, hace un par de aos, que los meteoritos y cometas, a fuerza de chocar contra la Tierra, podran haber impedido la emergencia de vida durante cientos de millones de aos. Muchos de los proyectiles habran sido bastante mayores que los objetos, de unos 10 kilmetros de anchura, que se cree acabaron con los dinosaurios en la transicin entre los periodos Cretcico y Terciario, hace unos 65 millones de aos.

Los impactos de grandes objetos, dice Sleep, habran generado calor suficiente para poner en ebullicin la superficie de los ocanos si no para convertirlos enteramente en vapor. Las colisiones habran tambin arrojado a la atmsfera enormes nubes de polvo y rocas fundidas. La implicacin de todo esto es dramtica: como mnimo los impactos habran destruido la vida incipiente en tierra firme o en cualquier sitio prximo a la superficie de los ocanos, hasta hace unos 3800 millones de aos. La vida que dependiera de la fotosntesis habra sido la ms sensible.Segn parece, adems la composicin de la atmsfera durante ese periodo podra no haber sido tan favorable a la sntesis de compuestos orgnicos como se haba pensado. Ese tradicional punto de vista se debe a Harold C. Urey, de la Universidad de Chicago, laureado con el premio Nobel de qumica. Propuso que la atmsfera tenia un carcter reductor, rica en gases hidrogenados, como el metano y el amonio, que vemos abundan en Saturno, Jpiter y Urano. El trabajo de Urey inspir a Miller, alumno suyo, quien realiz su famoso experimento en1953. Con todo, durante los ltimos diez aos han crecido las dudas sobre las hiptesis de Urey y Miller acerca de la atmsfera. Experimentos de laboratorio y reconstrucciones computarizadas de la atmsfera realizadas por James C. G. Walker de la Universidad de Michigan en Ann Arbor, y otros, sugieren que las radiaciones ultravioletas procedentes del Sol, hoy frenadas gracias al ozono atmosfrico, habran destruido las molculas hidrogenadas de la atmsfera: el hidrogeno libre habra escapado al espacio. Segn esos experimentos, el principal componente de la atmsfera fue el dixido de carbono y el nitrgeno liberado por los volcanes. Una atmsfera as no habra sido la ms conveniente para la sntesis de aminocidos y otros precursores de la vida. De acuerdo con los recientes clculos de James F. Kasling de la Universidad estatal de Pennsylvania el dixido de carbono podra haber creado tambin un efecto de invernadero de tal calibre que las temperaturas de la superficie de la Tierra habran alcanzado casi el punto de ebullicin del agua.

El modelo de atmsfera reductora sigue contando con sus defensores. Miller entre ellos, seala que los humos y nubes habran protegido de las radiaciones ultravioletas, a los delicados gases hidrogenados. Hay un montn de gente haciendo modelos matemticos que niegan la existencia de metano", seala, "pero no tienen pruebas reales". Un informe reciente de investigadores de la Universidad Nacional de Yokihama apoya la postura de Miller. Los japoneses argumentan que la rotura de molculas de agua por accin departculas solares y rayos csmicos podra haber estimulado la sntesis de hidrgeno libre, y por tanto, de metano y amonio

No obstante las investigaciones de los impactos y la atmsfera, junto con la creencia de que ya existan organismos primitivos hacen 3.800 millones de aos ha llevado a algunos a sospechar que la vida no se incubo en remansos trbidos de mareas, sino en el fondo de los ocanos. A finales de los aos setenta, se descubrieron varios humeros o surgencias hidrotermales en fondosmarinos cerca de las islas Galpagos.

Loshumeros alojaron florecientes comunidades deorganismos como gusanos

almejasy bacterias cuya fuente primaria de energano es la luz sino los

compuestos azufrados emitidos por las surgencias. De entonces ac se han descubierto docenas de humeros similares, generalmente cerca de las cordilleras submarinas que se crean en las zonas de confluencia de dos placas tectnicas.

Uno de los principales defensores de las surgencias como fuente de vida es John B. Corliss del Centro de Vuelos Espaciales de la NASA miembro del equipo que identific una de las primeras surgencias. Los humeros pudieron haber aportado, seala, la energa y nutrientes necesarios para crear y mantener la vida. El interior de las surgencias, prosigue, habra proporcionado tambin proteccin contra los efectos nocivos de buena parte de los impactos extraterrestres. (Segn el propio Corliss las modernas especies de las surgencias, que viven en las aguas de sus alrededores, ms fras en comparacin, son probablemente colonos recientes y no descendientes directos de los habitantes originales)

Un apoyo importante a la hiptesis de los humeros procede de uno de los estudios sobre organismos unicelulares, dirigido por Carl R. Woese, de la Universidad de Illinois en Urbana Champaign. Comparando la composicin gentica de dichos organismos, Woese ha identificado un tipo de microbios o arquibacterias, que parecen haber sufrido menos cambios evolutivos En que cualquier otra especie viva. Todas las arquibacterias prefieren ambientes clidos. Algunas aguantan temperaturas de hasta 120 grados Celsius. Ciertas especies prefieren un ambiente acdico, anxico, con flujo estable de azufre. Precisamente las condiciones que se encuentran en los humeros hidrotermales.

Norman R. Pace bilogo de la Universidad de Indiana, encuentra sugestiva la teora de las surgencias. Su visin de la corteza de la tierra primordial es la de una capa rocosa, delgada y turbia, acribillada por miles de humeros hidrotermales. Sin embargo a diferencia de Corliss, quien insiste en que la vida se origin en las surgencias, Pace sostiene que los primeros organismos pudieron engendrarse en otros lugares. Quizs en la superficie de la tierra o en su vecindad, durante los intervalos entre impactos ms tarde se desplazaran hasta encontrar la relativa seguridad de las surgencias, en aguas profundas. Impactos posteriores pudieron eliminar a todos los organismos, salvo aquellos que permanecieron ocultos en las surgencias. Esos organismos hidrotermales, aunque no fuesen los primeros pobladores de la tierra, podran haber sido ancestros de todos los organismos vivos. Pace cree que todava hoydeben existir grandes comunidades de bacterias colonizando verdaderas redes de grietas y cavernas, que se esconden bajo las cordilleras centro ocenicas. En zonas donde la temperatura del agua es alta.(Fotografas equivalentes al original)

H is to ri as a zu fr ad as

A Miller no le gustan las fuentes termales, al menos como sede original de la vida. Sostiene que las modernas surgencias duran poco. Unas dcadas, para taponarse despus. Adems, l y Jeffrey L. Bada, tambin de la Universidad de California en San Diego, ha hecho experimentos que sugieren que el agua supercaliente del interior de los humeros, que a veces sobrepasa los 300 grados Celsius destruira ms que creara compuestos orgnicos. Si la superficie de la tierra fuese una sartn, dice Miller, la sugencia hidrotermal sera elfuego.GENESIS DEL SILICIO

No obstante, la hiptesis de los humeros ha operado a favor de tres teoras dos nuevas y otra un poco trasnochada, que ofrecen alternativas al ARN (o a sus precursores). La ltima y ms inslita se la debemos a Gnter Wchtershuser. Un fenmeno algo inslito l mismo.

Abogado en ejercicio, Wchtershuser fund y dirige una empresa en Munich especializada en patentes. Antes de dedicarse a esos menesteres, se doctor en qumica orgnica, de donde le viene un apasionado inters por el origen de la vida.Ya como simple observador, empez a desarrollar sus propias

Aunque los mtodos tradicionales de comprobar la veracidad de las teoras sobre el origen de la vida mezclan compuestos qumicos reales en tubos de ensayo no menos reales, algunos investigadores intentan remendar la creacin en la redoma del ordenador. Stuart A. Kauffman, bilogo a caballo entre la universidad de Pennsylvania y el instituto de Santa Fe de Nuevo Mxico, es una los pioneros de esa vida artificial .

Sospecha que la vida puede depender de un principio que genere orden a partir de interacciones qumicas aleatorias. Para someter a prueba dicha hiptesis, l y sus colegas de Instituto de Santa Fe simulan en el ordenador interacciones entre polmeros genricos con una actividad cataltica genrica.

Sea, por ejemplo, un caso simple en el que monmeros sencillos (cuadrados) con cierta actividad cataltica (flechas blancas) disparan una cascada de reacciones qumicas (lneas negras y crculos amarillos) entre los polmeros (crculos verdes), que a su vez catalizan nuevas reacciones. Segn Kauffman, las simulaciones demuestran que, si a un sistema se le proporciona un nmero suficiente de polmeros de ese tipo, experimentar una transicin de fase

ideas hace unos cinco aos. Mientras la mayora de los investigadores dan por sentado que la vida comenz cuando ciertos compuestos relativamente sencillos adquirieron la capacidad de auto replicarse en solucin. Wchtershuser defiende que la vida empez siendo un proceso metablico, esto es, una reaccin qumica cclica dirigida por alguna fuente energtica, que tuvo lugar en una superficie slida.Aunque la idea no es nueva, s lo es en la forma en que la propone Wchtershuser. Como superficie slida aboga por la pirita, un mineral metlico formado por una molcula de hierro y dos de azufre. La pirita se ha encontrado tambin en las surgencias, lo que no encierra ningn misterio, pues se halla por todas partes. Segn su hiptesis, la pirita ofrece tambin una superficie cargada positivamente donde pueden engarzarse compuestos orgnicos sencillos. La continua formacin de pirita a partir de hierro y azufre produce energa, en forma de electrones, necesaria para conseguir que los compuestos orgnicos reaccionen unos con otros y aumenten su complejidad.

La primera clula, segn esta hiptesis, pudo haber sido un grano de pirita rodeado por una membrana de compuestos orgnicos. Dicha clula, podra auto reproducirse si fuese capaz de producir yemas cristalinas que, una vez englobadas en su correspondiente membrana, quedasen libres.

El qumicoabogado public sus ideas en revistas del prestigio de los Proceedings of National Academy of Sciences, Microbiology Reviews y Nature. Experimentos realizados por un grupo de la Universidad alemana de Regensburg apoyan tambin en cierta medida ese papel de batera para la pirita. El propio Wchtershuser admite, sin embargo, que su teora es todava en su mayor parte una pura especulacin.

Sus ideas, sin embargo, han fascinado, entre otros, a Pace, Woese y a Karl Popper, filsofo de la ciencia. Pace dice que el modelo de Wchtershuser, basado en un protometabolismo superficial, podra dejar obsoleto el viejo paradigma de la autorreplicacin en solucin.

Otros no estn tan fascinados. Joyce sospecha que Wchtershuser se ha valido de sus habilidades como hombre de leyes para granjearse una aceptacin mayor de la que en realidad merece su teora. Es un excelente abogado de su propia causa, observa Joyce. Admite, no obstante, su perplejidad ante el paralelismo entre Wchtershuser y otro cientfico alemn que no dejaba de crear mientras trabajaba en asuntos relacionados con las patentes: Albert Einstein. Dado el precedente, seala Joyce con cierta sorna, sospecho que lo mejor que podramos hacer es tomarlo en serio.

Christian R. De Duve, profesor emrito de la Universidad Rockefeller, premio Nbel en 1974 por sus trabajos sobre estructura celular, ha propuesto un modelo que guarda cierta similitud con el de Wchtershuser. En dicho modelo, descrito en el libro Blueprint for a Cell, desempean un papel importante los tiosteres, unos compuestos azufrados. Los tiosteres, fundamentales en el metabolismo celular, pudieron constituir, opinan algunos, la fuente de energa en las clulas primitivas.

De Duve propone que los tiosteres de la sopa primordial podran haber desencadenado una cascada de reacciones qumicas parecidas a las que se producen en el moderno metabolismo celular. Las reacciones habran sido catalizadas por protoenzimas, formadas tambin a partir de los tiosteres. Estas reacciones acabaran en la sntesis de cidos ribonuclicos, en el mundo de ARN. La sntesis de tiosteres precisa un ambiente cido y caliente, que segn de Duve pudo ser suministrado por las surgencias hidrotermales. Me gustara ver las pruebas experimentales, replica Miller. H ec ho s de b ar ro

A. G. CairnsSmith, qumico de la Universidad de Glasgow, dice tener una buena razn para dudar de la teora de Duve tal teora se basa en una propuesta avanzada por l mismo y David C. Mauzerall, de la Rockefeller, sobre cmo una reaccin qumica en la que intervienen hierro y agua pudo haber enriquecido de hidrgeno la atmsfera primordial. Lo que de Duve omite, apunta CairnsSmith, es que, como consecuencia de ese proceso, los ocanos son sitios poco idneos para la sntesis de molculas orgnicas.

Durante ms de una dcada, CairnsSmith ha estado promocionando su propia teora. Igual que Wchtershuser, propone que la vida se origin sobre un sustrato slido, habitual en las surgencias y en casi cualquier otra parte, aunque l prefiere los cristales de arcilla a la pirita. Todo cristal est formado por unidades autorreplicativas, apunta CairnsSmith, pero los cristales de arcilla tienen suficiente complejidad como para mutar y evolucionar de forma parecida a como lo hace la vida. Algunas arcillas pudieron mejorar su potencial reproductor, desarrollando la capacidad de atraer o sintetizar compuestos orgnicos, como cidos nucleicos o protenas. Con el tiempo, los compuestos orgnicos llegaron a ser tan refinados que comenzaron a replicarse y evolucionar.

A diferencia de algunos tericos del origen de la vida. CairnsSmith admite gustosamente los puntos dbiles de su hiptesis ni nadie ha detectado nunca arcilla en algo que pudriera considerarse evolucin, en experimentos de laboratorio, ni nadie ha encontrado tampoco nada parecido a un organismo arcilloso en la naturaleza. Lo que no le obsta para sostener que, de todas las teoras basadas en la existencia de compuestos orgnicos que se organizan y replican sin ayuda externa, esa es la mayor. "Las molculas orgnicas son demasiado escurridizas cuando van por ah sueltas."

I nv as or es

Hay otra escapatoria para esa suerte de callejn sin salida a la que se ha llegado con las teoras. Si ni la atmsfera ni las surgencias han proporcionado el habitculo idneo para la sntesis de compuestos orgnicos complejos, por qu no pensar, que estos han venido de otra parte, por ejemplo, del espacio exterior? Juan Or, de la Universidad de Houston, plante ya esa posibilidad en los aos 60. La idea parece haber cobrado un nuevo impulso ahora que los astrnomos han descubierto espectros reveladores de la presencia de una gran variedad de compuestos orgnicos alrededor de ciertas estrellas, y en los espacios interestelares.

Se han encontrado tambin aminocidos en ciertos meteoritos, las condritas carbonceas, que representan aproximadamente el 5% de los meteoritos que se estrellan contra la tierra. Las observaciones del cometa Halley, que pas por la tierra hace unos 5 aos, sugieren que los cometas pueden tener un contenido en compuestos orgnicos an mayor que el de las condritas carbonceas. Las condritas, contienen tambin hidrocarburos, alcoholes y otros compuestos grasos, que podran haber participado en la formacin de las membranas queprotegieron a las clulas primitivas. David D. Deamer, bioqumico de Universidad de California en Davis, ha fabricado membranas esfricas, o vesculas, con compuestos obtenidos de un meteorito que call cerca de Murchison, Australia, en 1969. Esas vesculas dice Deamer, pudieron haber proporcionado un ambiente adecuado para que los aminocidos nucletidos o cualquier otro compuesto orgnico sufriese las transformaciones necesarias para que se produjese la vida.La hiptesis segn la cual los impactos pudieron haber creado el escenario para la vida, y retrasado tambin su puesta en marcha, gan fuerza en 1989 la causa: los descubrimientos de aminocidos por encima y por debajo de una capa arcillosa depositada en la transicin CretcicoTerciario. Bada y Meixun Zhao, tambin de San Diego, determinaron que los aminocidos no eran de tipo biolgico, encontrados hasta entonces solo en los meteoritos.Sus conclusiones parecen apoyar la teora del impacto para explicar la extincin de los dinosaurios, amn de mostrar que los grandes impactos pudieron fertilizar la tierra con compuestos orgnicos.Hay que dar, no obstante, respuestas a ciertas preguntas. Por qu se encontraron aminocidos por encima y por debajo de la capa del Cretcico Terciario, y no en la misma capa Cmo pudieron soportar el enorme calor generado por el impacto?. Clculos realizados por Christopher F. Chyba, estudioso de los planetas, de la Universidad de Cornell, y otros apuntan a que cualquier objeto extraterrestre de tamao suficiente para proporcionar cantidades notables de material orgnico a la tierra generara tanto calor durante su impacto, que quedara convertida en cenizas.En noviembre del ao pasado, Kevin J. Zahanle y David Grinspoon, del centro Ames de la NASA, propusieron una salida a ese problema. Segn ellos los aminocidos provienen de uno o ms cometas que no se estrellaron en la tierra, sino que simplemente pasaron muy cerca, dejando una estela de restos orgnicos, antes y despus del Cretcico Terciario. De esa manera, aseguran, los cometas pudieron rociar la Tierra de compuestos orgnicas, en las fases ms tempranas de su historia.Chyba habla de formas posibles que tendran los impactos de contribuir al suministro de materias primas para la vida. El calor y las ondas de choque procedentes de un impacto podran desencadenar las reacciones qumicas en la atmsfera que sintetizan compuestos orgnicos. El objeto extraterrestre podra romperse hasta el punto de que la atmsfera frenara su carrera y aterrizar casi intacto.

P an sp er mi a

Otros reputan de inverosmil cualquier modelo de impacto. Es como man llovido del cielo, dice Sherwood Chang de la NASA, experto en compuestos orgnicos extraterrestres. Segn Chang hay que dedicar mayor esfuerzo a investigar cmo se pudieron sintetizar compuestos orgnicos en la Tierra, en vez de dar por supuesto que los cuerpos celestes hicieron el trabajo. Las teoras que dan a los impactos una participacin en el origen de la vida estn ahora muy de moda aade, pero carecen de solidez observacional.La versin ms extremista del man del cielo es la panspermia. Esta teora fue propuesta a fines del siglo XIX por el qumico sueco Svante A. Arrehenius, sostena ste que los microbios que pululaban por el universo hicieron de semilla de la vida en la Tierra. Ms recientemente Holey y un antiguo alumno suyo, el astrnomo N. Chandra Wickramanshinghe de Sri Lanka(conocido tambin por su oposicin a la teora de la gran explosin), siguen promocionando la misma idea, y van ms lejos, esos microbios extraterrestres son la causa de la gripe, el SIDA y otras enfermedades.

La mayora de los cientficos rechazan de plano estas ideas, por la sencilla razn de que nunca se han encontrado microbios en el espacio, y es muy improbable que se encuentren, dado su carcter de ambiente hostil para la vida. Ello no obstante, los experimentos realizados por J. Mayo Greenberg, astrofsico de la Universidad holandesa de Leiden, presta cierta credibilidad a la panspermia. Segn Greenberg, una clula desnuda podra sobrevivir durante cientos de aos en el espacio, y hasta 10 millones de aos si est protegida de las radiaciones por una fina capa de hielo.

Greenberg opina que es todava difcil imaginar cmo los organismos pudieron abandonar otros planetas o llegar intactos hasta el nuestro. En sintona con la mayora de los cientficos, cree que la vida empez en la Tierra. Pero reconoce que la hiptesis de la panspermia, aunque improbable e incomoda para muchos, no puede ser descartada, a la vista de sus resultados experimentales.

Hace unos 10 aos Orgel y Crick se las arreglaron para provocar al pblico y a sus colegas, especulando con la posibilidad de que las semillas de la vida fuesen enviadas a la Tierra en un ingenio espacial por seres inteligentes de otros planetas. Orgel comenta que la propuesta, conocida como panspermia dirigida, fue una especia de broma, pero aade que tena una intencin seria, llamar la atencin sobre las carencias de todas las teoras sobre el origen terrestre de la vida. Lo escribi Crick en cierta ocasin. El origen de la vida parece casi un milagro, tal es la cantidad de condiciones que deberan haberse cumplido para que se pusiese en marcha.

Es ta mo s so lo s?

Otros, sin embargo piensan que la gnesis d la vida, lejos de ser un milagro, constituye quizs un fenmeno ms que comn. De hecho. La aparente rapidez con que surgi la vida en la Tierra y la abundancia de molculas orgnicas en el espacio sugieren que la vida pudo originarse enCualquier otra parte del universo, razona John D. Rummell, director del Programa de Exobiologa de la NASA. Encontrar pruebas de dicha vida, seala, adems de ser un hecho histrico en s mismo, aclarara muchos aspectos relacionados con el comienzo de la misma en la Tierra.

La NASA est ampliando su programa SETI, de bsqueda de inteligencia extraterrestre, con la que se rastrea el espectro electromagntico en bsqueda de seales que puedan ser emitidas por otras civilizaciones. Durante la prxima dcada. Los investigadores de la NASA estudiaran las seales de radioprocedentes de todo el cielo, centrndose en unas 700 estrellas bastante cercanas, en las que se sospecha la existencia de planetas. La NASA ha desarrollado equipos que permitirn a un solo radiotelescopio rastrear miles de millones de canales simultneamente y seleccionar las seales sospechosas.

Se investiga de nuevo la posibilidad de vida en nuestro vecino ms prximo, Marte. El investigados McKay, de la NASA, dice que Marte y la Tierra compartieron rasgos comunes en sus primeros cientos de millones de aos. La existencia de antiguos causes y lodazales sugieren que el agua fluy alguna vez por el planeta rojo. Este hecho da a entender que Marte estuvo rodeado por una atmsfera templada de dixido de carbono.

La nave espacial Viking, que se pos en ese planeta en los aos setenta, no encontr restos de vida. No obstante, segn McKay la posibilidad de hallar indicios positivos, en forma fsil o viva, en una futura misin ha aumentado con el descubrimiento de firmas microbianas en lugares insospechados de la Tierra. McKay y otros han observado densos mantos microbianos en el fondo de lagos permanentemente helados de la Antrtida, cuyo clima glacial y seco se parece al de Marte. Se han encontrado tambin bacterias en rocas sedimentarias y depsitos de petrleo a miles de metros de profundidad, en depsitos salinos y, por supuesto, en hmeros profundos.

Segn McKay, Marte es el sitio ideal para buscar fsiles. Est congelado hace cuatro mil millones de aos. Y no tiene placas tectnicas. Compendia el sueo de todo paleontlogo. Reconoce, sin embargo, que le falta una de las caractersticas potencialmente significativa de la Tierra: una gran luna. Si se acepta que la vida evolucion en masas de agua sometidas a la accin de las mareas, falla la analoga con Marte. McKay opina que el descubrimiento de vida extraterrestre dara un nuevo impulso a las investigaciones sobre el origen de la vida, como ocurri en 1965 con el de la radiacin de fondo de microondas, que vino a legitimar los estudios cosmolgicos. Necesitamos una base de conocimientos similar a la proporcionada por la radiacin de fondo de microondas, para hacernos respetar.

Miller, quien despus dems de tres dcadas contina an en la brecha tras el misterio de la vida, coincide en que el campo necesita un descubrimiento espectacular, para acabar con la imaginacin desbocada. Pero es de los que piensa que tal descubrimiento saldr de los laboratorios que buscan la respuesta en la Tierra. Lo que hace falta ahora, comenta, es menos teora e inquisiciones extraterrestres y ms experimentos. Se me ocurre una docena de ideas al da y las rechazo todas.

Ha considerado alguna vez la posibilidad de que la gnesis de la vida fuese un milagro, no reproducible por el hombre? Nunca, contesta Miller. Creo ms bien que no hemos dado todava con el truco correcto, agrega. cuando encontremos la respuesta, ser tan condenadamente simple, que todos nos preguntaremos Cmo no se me ocurri antes?.