La Desigualdad Bajo La Lupa - Banco Mundial

7/23/2019 La Desigualdad Bajo La Lupa - Banco Mundial

1/12

Pedro Olinto y Jaime Saavedra

En las ltimas tres dcadas, el mundo se ha vueltoconsiderablemente menos pobre (grfico 1). En 1981, casilas tres cuartas partes de los ciudadanos de los pasesen desarrollo vivan con menos de US$2 al da. Esteporcentaje se ha reducido notablemente y hoy los pobres

representan un 43%. Asimismo, aunque la poblacin mundial se haincrementado un 35%, el nmero de personas que vive con menosde US$2 al da (2470 millones) es ligeramente inferior al de hace tresdcadas (2590 millones). La pobreza extrema disminuy an ms.El porcentaje de los que viven con menos de US$1,25 al da elnivel mnimo de consumo necesario para satisfacer las necesidades

humanas bsicas en los pases ms pobres se ha reducido ms dela mitad, del 52% en 1981 al 22% en 2008. Por lo tanto, 1290 millonesde personas viven en situacin de abyecta pobreza.

El progreso es innegable y las estimaciones preliminares para2010 muestran que la tendencia decreciente de la pobreza se hamantenido inalterada. Sin embargo, 2500 millones de personas

Introduccin a la serie La desigualdad bajo la lupa

BANCO MUNDIAL

Departamento de Reduccin de la Pobreza y Equidad : : www.worldbank.org/poverty : : Volumen 1, nmero 1 : : Abril de 2012

LA DESIGUALDADbajoLA LUPA

En el futuro, recordaremos 2011 como el ao en quelas cuestiones de desigualdad y equidad volvieron aocupar el primer plano. El debate sobre las crecientesdisparidades socioeconmicas y su incidencia enla estabilidad poltica y el crecimiento sostenible ha

transcendido el mbito acadmico para instalarse en las calles,los medios de comunicacin y el mundo de los blogs. Las

manifestaciones populares de frustracin con el statu quo, comolas de la juventud rabe que reclamaba mejores oportunidadeslaborales, los estudiantes chilenos que protestaban en favor deuna educacin universitaria ms barata y accesible para todos, yel movimiento Ocupa Wall Street, han motivado a los Gobiernosy las organizaciones internacionales a prestar ms atencin acuestiones como la equidad, la exclusin social y la democracia.

Ya es hora de que el Banco Mundial como lder en lageneracin y difusin de conocimientos sobre reduccinde la pobreza y cuestiones de equidad incremente suinteraccin con la comunidad internacional y ayude a

promover y enriquecer el debate en curso. Si bien elInformesobre el desarrollo mundial 2006 sobre equidad y desarrolloha contribuido significativamente al tema, existe una demandarenovada del liderazgo del Banco Mundial en materia desistematizacin y difusin del conocimiento actual.

Esta es la primera entrega de una nueva resea informativa:La desigualdad bajo la lupa. El objetivo general de esta serie

es orientar el debate de polticas pblicas sobre equidad,desigualdad de oportunidades y movilidad socioeconmica.Se incluyen artculos escritos por miembros del personal delBanco Mundial, as como investigadores y encargados de laformulacin de polticas de la comunidad del desarrollo ensu conjunto. El lenguaje y el estilo apuntan a transmitir losresultados de anlisis recientes en forma intuitiva y accesible. Laserie comienza con un panorama de la pobreza a nivel mundialy las tendencias de la desigualdad, un anlisis de la recientedisminucin de la desigualdad de ingresos en Brasil y unexamen de la desigualdad de oportunidades.

Tendencias mundiales de la desigualdad de ingresos: Panorama generalque viven en la pobreza y 1300 millones que viven en la pobrezaextrema siguen siendo cifras extremadamente altas. Por otra parte,significa este aumento considerable de los ingresos y el consumode los pobres que el mundo se ha vuelto un lugar ms equitativo?La distribucin de los ingresos en el mundo, es ms equitativa hoyque hace 30 aos?

La respuesta depende de cmo se midan las disparidades deingresos a nivel mundial. Por ejemplo, si suponemos que todaslas personas que viven en un pas ganan el mismo ingreso, unasuma igual al producto interno bruto (PIB) per cpita promediodel pas, podemos computar lo que se conoce como desigualdadinternacional de ingresos. Esto es precisamente lo que se muestra

en el grfico 2. Como se ha visto, la desigualdad internacionalde ingresos ha venido disminuyendo en forma constante desdecomienzos de los aos ochenta. En un principio, esta cada sedebi principalmente al acelerado crecimiento de China. Perodesde comienzos de la dcada de 2000, esta disminucin se observaincluso si no se incluye al gigante del este asitico. Casi todos los


2/12

2 : : Abril de 2012 : : La desigualdad bajo la lupa

pases en desarrollo, incluidos los de frica al sur del Sahara, han

registrado mayores tasas de crecimiento, lo que ha contribuidoa acelerar la cada de la desigualdad internacional de ingresos enla primera dcada del siglo XXI. Actualmente, los ingresos de unciudadano promedio en un pas pobre se asemejan un poco ms alos de un ciudadano promedio de un pas rico.

Sin embargo, esta forma de medir la desigualdad mundial nopermite registrar la dinmica de la desigualdad dentro de cadanacin. Por ejemplo, segn los datos disponibles, la desigualdad deingresos en China se ha incrementado significativamente en losltimos 25 aos y ha disminuido en Brasil en los ltimos 15 aos.Solo estos dos pases representan casi el 25% de la poblacinmundial, de modo que la falta de comprensin de la desigualdadinterna de los pases puede dar lugar a un panorama incompleto dela disparidad de ingresos que existe entre los ciudadanos del mundo.Pero gracias a que hoy se cuenta con una mayor disponibilidadde datos sobre los hogares, se pueden tener en cuenta estasdisparidades. Milanovic (2012) calcula la desigualdad mundial deingresos combinando encuestas nacionales de hogares realizadasen 122 pases y alineando los ingresos individuales con el tipo decambio del pas en cuestin, ajustado segn la paridad del poderadquisitivo. Luego se computan una nica distribucin mundial deingresos y el correspondiente coeficiente de Gini. En esta medicin,se tiene en cuenta a todos los ciudadanos.

Como se muestra en el grfico 3, la desigualdad mundial deingresos aument ligeramente entre finales de los aos ochenta yla mitad de la ltima dcada. No obstante, la diferencia entre loscoeficientes de Gini de 2005 y 1988 (70,7 y 68,4, respectivamente) noreviste importancia desde el punto de vista estadstico (Milanovic,2012). Las estimaciones preliminares tambin muestran que este

indicador no sufri muchos cambios posteriormente. Ello sugiereque hoy en da la desigualdad mundial es casi la misma que afines de la dcada de 1980 y que no est disminuyendo como ladesigualdad internacional.

Cmo se puede conciliar la abrupta cada de la desigualdadinternacional de ingresos con las cifras relativamente estables de ladesigualdad mundial? Debemos prestar atencin a los cambios queregistran las disparidades de ingresos en los pases. Recordemos

que, en el caso de la desigualdad internacional, se asigna a cadaciudadano el ingreso promedio de su pas de residencia, mientrasque, para calcular la desigualdad mundial, se tienen en cuenta losingresos de cada persona. Si bien el PIB per cpita promedio delas naciones en desarrollo est cada vez ms cerca del nivel de lasnaciones ricas, el crecimiento de los ingresos puede ser dispar en los

pases. De este modo, se observa un patrn de convergencia entrelos pases y de divergencia entre los ciudadanos de estos.

Qu est sucediendo, entonces, con la desigualdad de ingresosen los distintos pases del mundo? Como se ve en el grfico 5, noexiste un patrn claro entre los pases en desarrollo. En todaslas regiones, hay casi tantas naciones en que la desigualdad estcreciendo como lugares donde est disminuyendo. En Asia oriental,la desigualdad registra una leve tendencia decreciente en Filipinas yTailandia, y una tendencia creciente en China, Indonesia, Mongoliay Viet Nam. El aumento ms sostenido de la desigualdad se observa

en China. El coeficiente de Gini de ese pas aumentde alrededor de 30 a principios de la dcada de 1980 aaproximadamente 45 en 2005 (Banco Mundial, 2009;Banco Mundial, 2012, China 2030). Debido al tamao de

su poblacin, China es probablemente uno de los pasesque ms contribuyen a la divergencia observada entre ladesigualdad internacional y mundial.

En Europa oriental y central, la mayora de laseconomas en transicin ha experimentado incrementosen las disparidades de ingresos, en particular tras lacada de los regmenes comunistas. Pero la desigualdadha disminuido recientemente en Armenia, Bulgaria,Kazajstn, Moldova y Serbia, entre otros. En AmricaLatina, la mayora de los pases ha experimentadoreducciones en los niveles de desigualdad (en el prximoartculo de esta edicin, se brindan detalles sobre las

causas de la disminucin de la desigualdad en el caso

Grfico 1. Tasas de pobreza del mundo en

desarrollo, 19812008ndice de recuento de la pobreza (% por debajo de la lnea

de la pobreza)

Fuente:Chen y Ravaillon, 2012..

0,50

0,55

0,60

0,65

1980 1985 1990 1995 2000 2005 2010

Desigualdad internacional sin China

Desigualdad internacional

CoeficientedeGini

Grfico 2. Desigualdad internacional de ingresos

Fuente: Milanovich, 2012.

20

25

30

35

40

45

50

55

60

65

70

1981 1984 1987 1990 1993 1996 1999 2002 2005 2008

US$2 al da

US$2 al da (menos China)

US$1,25 al da

US$1,25 al da (menos China)

Fuente:Chen y Ravallion, 2012.


3/12

La desigualdad bajo la lupa : : Abril de 2012 : : 3

especfico de Brasil), pero algunos se han vuelto

ms desiguales, entre ellos Costa Rica, Guatemala yHonduras. En algunas economas de Asia meridional,se observa una reduccin de la desigualdad, mientrasque en India el crecimiento urbano ha tendido afavorecer a los ricos y, al parecer, han aumentado lasdisparidades entre los ingresos de la poblacin ruraly la urbana (Banco Mundial, 2012).

Las cambiantes dispersiones de los ingresos en lospases ricos tambin afectan la medicin de la desigualdadmundial. Un estudio reciente muestra que son muchosms los pases de la Organizacin para la Organizacin y elDesarrollo Econmicos (OCDE) que han registrado un aumentode la desigualdad que aquellos en los que esta ha disminuido. Seobservan importantes incrementos en Finlandia, Alemania, Nueva

Zelandia, Suecia, Reino Unido y Estados Unidos (OCDE, 2011).Grecia, Irlanda y Turqua registran ligeras reducciones.En sntesis, si bien la pobreza mundial especialmente la extrema

pobreza se ha reducido significativamente en las ltimas tresdcadas, las disparidades de ingresos entre los ciudadanos de todoel mundo parecen haberse mantenido inalteradas a pesar de lareduccin de la desigualdad internacional (entre pases). Lo que esms importante, este aumento de la brecha entre la desigualdad inter-nacional y la mundial parece derivar del incremento de las dispari-dades de ingresos en los pases sobre todo en las grandes economasemergentes de Asia como China, India e Indonesia, as como muchospases de la OCDE y no de las diferencias entre ellos.

El mundo en el que hoy vivimos,es mejor que el de hace 30 aos?

Cuando los economistas piensan en hiptesis alternativas, suelenbasarse en el principio de que un cambio es bueno cuando mejoralas condiciones de alguien sin que nadie resulte perjudicado. Esaidea, sugerida por primera vez por el economista italiano VilfredoPareto, se conoce como el principio de Pareto. Segn dichoprincipio, si el mundo se ha vuelto menos pobre y ms desigualdebido a que se ha mejorado la situacin de algunos, aunquesean pocos, y nadie est peor, entonces y solo entonces uneconomista dira inequvocamente que, en efecto, vivimos en unmundo mejor.

Por qu deberamos preocuparnos, entonces, por la desigualdadde ingresos cuando la pobreza disminuye? Los ciudadanos y losresponsables de la formulacin de polticas se preocupan, en

igual medida, por las crecientes disparidades de ingresos. Porejemplo, segn la encuesta de opinin pblica de la Unin EuropeaEurobarometer, el 52% de las personas estn de acuerdo en quelas diferencias de ingresos en los pases son demasiado elevadas.

Casi el 90%, al menos, tiende a coincidir con esa afirmacin. Aspues, aun cuando el crecimiento de los ingresos est beneficiando atodos, los encargados de formular las polticas deberan preocuparsepor el aumento de la desigualdad cuando existe una percepcingeneralizada de injusticia que conduce a la inestabilidad polticay termina socavando el crecimiento y el bienestar general.

Por qu, entonces, es tan importante la desigualdad en eldebate sobre el desarrollo? En primer lugar, es muy probable que,efectivamente, algunos grupos se hayan visto perjudicados o hayanquedado rezagados por los procesos econmicos mundiales quedieron lugar a un crecimiento ms acelerado y a la consiguientereduccin de la pobreza. Si esto es as, los encargados de laformulacin de polticas debern prestar atencin al diseo delas polticas destinadas a compensar a aquellos cuya situacin sehaya deteriorado durante dichos procesos. Respetar el principio dePareto implica que los ganadores compensarn a los perdedores, demanera tal que nadie resulte perjudicado.

En segundo lugar, aun cuando haya crecimiento econmicoy nadie resulte perjudicado, en algunos casos se podra lograr elcrecimiento incluso reduciendo la desigualdad de ingresos. Unejemplo claro es Brasil, donde la reduccin de la pobreza fue posibleen gran medida, gracias al rpido incremento del ingreso laboral delos pobres. Como seala Ricardo Paes de Barros, los ingresos de laspersonas ubicadas en el decil ms bajo de la distribucin de ingresosestn creciendo a tasas chinas, mientras que el ingreso del decil msrico crece a tasas alemanas.

Pero lo que es ms importante para el diseo de las polticas,cuando la desigualdad de ingresos es persistente, puede limitar el

50

55

60

65

70

75

80

1988 1993 1998 2002 2005

CoeficientedeGini

Grfico 3. Desigualdad mundial, 19882005

Fuente: Milanovich, 2012.

Grfico 4. Desigualdad en algunos pases en desarrollo

Fuente:Banco Mundial. Indicadores del desarrollo mundial y Banco Mundial, 2012.China 2030.

20

25

30

35

40

45

50

55

60

65

1981

1982

1983

1984

1985

1986

1987

1988

1989

1990

1991

1992

1993

1994

1995

1996

1997

1998

1999

2000

2001

2002

2003

2004

2005

2006

2007

2008

2009

2 0 1 0

CoeficientedeGini

Brasil China India Mxico Indonesia


4/12


potencial para el futuro crecimiento econmico y obstaculizar asla reduccin de la pobreza. Las investigaciones sugieren que ellopuede ensombrecer de varias formas las perspectivas de desarrollo

de un pas. Por ejemplo, puede conducir a una asignacin ineficazde recursos que reduzca la tasa de crecimiento econmico. Ladesigualdad tambin puede generar un efecto importante en elacceso al crdito, los bienes, el acceso a los servicios de salud yeducacin, la infraestructura bsica, las oportunidades de empleoy la representacin poltica. Asimismo, los grupos de poderpueden crear instituciones que perpeten las desigualdades en lascondiciones sociales y la distribucin de la riqueza, lo que a su vezdesalienta las inversiones, la innovacin y la asuncin de riesgos(Banco Mundial, 2006). En Asia oriental, existe la preocupacinde que el aumento de la desigualdad (si bien es ms baja queen Amrica Latina y frica) pueda polarizar las sociedades,incrementar las tensiones sociales y menoscabar el crecimiento.En Amrica Latina, generan creciente inquietud la falta de

oportunidades para muchos ciudadanos y el conflicto social quepodran traer aparejado las grandes diferencias en los niveles de vida.Si bien las diferencias polticas e ideolgicas podran impedir

que se logre consenso acerca de la importancia o conveniencia degenerar polticas adecuadas para reducir la desigualdad de ingresosen forma directa, existe un acuerdo casi unnime en que la creacinde condiciones equitativas para todos, mediante la promocin de laigualdad de oportunidades, constituye un objetivo deseable para lasociedad. Para lograr dicha igualdad, es necesario que factores comoel gnero, la casta, la etnia, el lugar de nacimiento y los antecedentesfamiliares, no influyan en el acceso de las personas a los serviciosbsicos predeterminando las posibilidades de desenvolverseexitosamente en la vida. No obstante, si la desigualdad de ingresosque se observa en una generacin puede vincularse a la faltade igualdad de oportunidades en la siguiente como sugierenalgunos resultados referidos a Estados Unidos (Krueger, 2012), obien como podra temerse en China o como preocupa claramentea los responsables de formular las polticas en Amrica Latina yAsia, el inters en las polticas destinadas a mitigar la desigualdadde ingresos puede justificarse alegando que generan mayoresoportunidades y promueven la movilidad social.

De hecho, muchos pases actualmente se muestran msinteresados en las polticas que fomentan la igualdad deoportunidades y la movilidad social (vase el tercer artculo deesta entrega) como un elemento clave para que todos puedanbeneficiarse. Si bien la combinacin de polticas especficas paramejorar la igualdad de oportunidades vara segn el pas, entre lasintervenciones ms comunes se incluyen la ampliacin del accesoa los servicios de salud y educacin, la infraestructura, la tierra

y la justicia, con especial atencin a las regiones y comunidadesdesatendidas. Otras polticas importantes apuntan a mejorarla eficacia redistributiva de los impuestos y la estructura de lastransferencias, fortalecer la rendicin de cuentas de las institucionesde gobierno y crear incentivos por buen desempeo para losproveedores pblicos y privados de servicios bsicos, as comoampliar el acceso de los pobres a las redes de proteccin social ylos servicios financieros.

Todos los montos expresados en dlares corresponden a dlaresde Estados Unidos, salvo indicacin en contrario.

Pedro Olinto es economista superior y Jaime Saavedra es director delDepartamento de Reduccin de la Pobreza y Equidad, Banco Mundial.

disminuye la desigualdad

aumenta la desigualdad

25

35

45

55

65

ndice

de

desigu

aldad

a

finesde

la

dcada

de

2000

25 35 45 55 65ndice de desigualdad a comienzos de la dcada de 2000

Europa y Asia central Asia oriental y el Pacfico

Amrica Latina y el Caribe Oriente Medio y Norte de frica

Asia meridional frica al sur del Sahara

Grfico 5. Cambios en los niveles de desigualdadde los pases en desarrollo

Fuente: Banco Mundial. Indicadores del desarrollo mundial y BancoMundial. 2012. China 2030.

BibliografaBanco Mundial. 2011. Perspectives on Poverty in India: Stylized Facts

from Survey Data. Washington, DC: Banco Mundial.Banco Mundial. 2006. Informe sobre el desarrollo mundial 2006:

Equidad y desarrollo.Oxford University Press.Banco Mundial. 2009. From Poor Areas to Poor People: Chinas Evolving

Poverty Reduction Agenda. An Assessment of Poverty and Inequality inChina. Washington, DC: Banco Mundial.

Banco Mundial. 2011. Una ruptura histrica: Quince aos de reduccinde la desigualdad en Amrica Latina. Washington, DC: Banco Mundial

Banco Mundial. 2012. China 2030: Building a Modern, Harmoniousand Creative High Income Society.Washington, DC: Banco Mundial.

Banco Mundial. 2012. Indicadores del desarrollo mundial. WashingtonDC: Banco Mundial.

Chen, Shaohua y Martin Ravallion. 2012. Briefing Note: An Updateto the World Banks Estimates of Consumption Poverty in the DevelopingWorld.Washington, DC: Banco Mundial.

Krueger, Alan. 2012. The Rise and Consequences of Inequality in theUnited States, http://www.whitehouse.gov/sites/default/files/krueger_cap_speech_final_remarks.pdf.

Milanovich, Branko. 2012. Global Inequality Recalculated andUpdated: The Effect of new PPP Estimates on Global Inequality and2005 Estimates,Journal of Economic Inequality, 10:1-18.

OCDE. 2011. Divided We Stand, Why Inequality Keeps Rising. Pars:OCDE.

Sharma, M., G. Inchauste y J. Fang. 2012. Perspective in EastAsia: Rising Inequality With High Growth and Falling Poverty.Washington, DC: Banco Mundial.


5/12


Luis F. Lpez-Calva

Segn los datos ms recientes, la pobreza mundial estdisminuyendo a pesar de que el mundo se ha vuelto msdesigual. Este patrn de movilidad superadora de la pobrezay mayor concentracin de ingresos se repite en todas laszonas, salvo en una: Amrica Latina y el Caribe. Esta regin

ha mostrado una tendencia positiva, puesto que en la ltima dcadaha logrado reducir tanto la pobreza como la desigualdad, incluso trasel impacto de la crisis mundial. Un ejemplo notable es Brasil, el casoatpico del grupo BRICS (Brasil, Rusia, India, China y Sudfrica).La movilidad que ha permitido a millones de brasileos superar

la pobreza ha venido acompaada de la reduccin de la brecha deingresos entre ricos y pobres. Entre 2002 y 2009, la participacin del

50% ms pobre de la poblacin en los ingresos totales se incrementun 15%. Esta tendencia de cambios relacionados con la desigualdadcontrasta con lo que experimentan los dems integrantes del grupoBRICS: Rusia, China, India y Sudfrica.

Si bien los niveles de desigualdad de Brasil an son elevadossegn los estndares mundiales, han venido disminuyendo en formasostenida durante los ltimos 15 aos. La slida tasa de disminucin,que ha superado la de Amrica Latina en su conjunto, amerita unexamen ms detenido de algunos de sus principales factores deter-minantes. La estabilidad macroeconmica, la expansin educativa yel mejoramiento de las polticas sociales han desempeado un papelimportante. Se pueden extraer varias enseanzas.

Desigualdad en Brasil: Pasado y presente

Brasil ha venido nadando contra la corriente debido a susraces histricas y la persistencia de la desigualdad de ingresos.La desigualdad de ingresos de 1960, que ya era elevada segn losestndares internacionales, como lo indicaba un coeficiente deGini de 0,504, continu aumentando en las dcadas siguientes.Se increment durante el perodo de expansin econmica deBrasil en los aos setenta y en los aos de bajo crecimiento y altainflacin de la dcada de 1980 (el coeficiente de Gini pas de 0,561en 1970 a 0,592 en 1980 y alcanz 0,607 en 1990, de acuerdo con losingresos registrados en las encuestas de hogares). Los altos niveles

de desigualdad persistan a mediados de los aos noventa, inclusocuando Brasil haba alcanzado la estabilidad monetaria y la categorade pas de ingreso mediano. En esa poca, el 50% ms pobre de lapoblacin representaba la misma proporcin de los ingresos totalesque el 1% ms rico (alrededor del 13%).

En los ltimos 15 aos, la desigualdad de ingresos en Brasilse ha reducido junto con la pobreza y en 2009 el pas alcanzun coeficiente de Gini de 0,537. Aunque sigue siendo alta, ladesigualdad que existe en el pas se aproxima cada vez ms alpromedio de la regin (0,501). Asimismo, en Brasil la desigualdadse redujo ms rpidamente que en otros pases latinoamericanos:despus de 1997, disminuy un 0,8% al ao; a partir de 2001, la tasade disminucin se aceler al 1,07% al ao, muy por encima del 0,63%registrado a nivel regional.

La reduccin de la desigualdad es importante en s misma cuandolas personas aspiran a vivir en una sociedad ms justa. Pero tambin

genera beneficios muy concretos: puedefomentar el crecimiento y ciertamentecontribuye a que este beneficie en mayormedida a los pobres. Si uno analiza loscambios observados en la pobreza entre2001 y 2009 a fin de identificar la impor-tancia relativa del crecimiento respectode los cambios en la distribucin de losingresos, resulta claro que la disminucinde la desigualdad se ha convertido enun factor crucial de la reduccin de lapobreza, puesto que determina la mitaddel cambio total (se toma como base

una lnea de pobreza de US$4 al da). Elresultado es an ms contundente enel caso de pobreza extrema (aproxima-damente el 52% si se utiliza una lnea depobreza de US$2,5 al da). De ese modo,independientemente del umbral depobreza elegido, alrededor de la mitaddel cambio total en la pobreza se debe auna distribucin menos desigual de losingresos (grfico 2).

Una herramienta comnmenteutilizada para ilustrar en qu medidael crecimiento favorece a los pobres

La disminucin de la desigualdad de ingresos

en Brasil: El orgullo de ser atpico

0,5880,583

0,5760,566

0,5640,559

0,5480,542

0,537

0,40

0,42

0,44

0,46

0,48

0,50

0,52

0,54

0,56

0,58

0,60

2001 2002 2003 2004 2005 2006 2007 2008 2009

Brasil Amrica Latina (17 pases)

Grfico 1. Coeficiente de Gini en Brasil y Amrica Latina (17 pases)

Fuente: Clculos del autor basados en datos extrados de la Base de Datos Socioeconmicos paraAmrica Latina y El Caribe (Centro de Estudios Distributivos, Laborales y Sociales [CEDLAS] y BancoMundial).


6/12


es la llamada curva de incidencia delcrecimiento, que muestra el cambioque registran los ingresos en trminos

reales, por grupo de ingresos. Almostrar la tasa de crecimiento delos ingresos entre dos puntos en eltiempo dentro de cada percentil de ladistribucin, el patrn descendentede dicha curva indica que los gruposms pobres se beneficiaron msdel crecimiento que los ms ricos(grfico 3). Entre 2001 y 2009, losingresos del 10% ms pobre de lapoblacin crecieron casi un 12%,mientras que los del 10% ms ricocrecieron menos del 2%. El crecimientopromedio de los ingresos fue del 5,91%.

Las curvas refuerzan los indiciosproporcionados por un coeficientede Gini decreciente: el crecimientoeconmico ha tenido un impactodecisivamente progresivo en Brasildurante los ltimos 10 aos o ms.

Qu sabemos acerca de las causas de la reduccinde la desigualdad?

La expansin de la educacin, sobre todo la elemental y lasecundaria, parece haber modificado el perfil escolar de la fuerzade trabajo y las brechas de ingresos entre los distintos niveleseducativos. De un modo que resulta significativo, se ha reducidoel nmero de personas con menos estudios y ha disminuido ladiferencia salarial entre quienes tienen un alto nivel educativoy quienes han recibido menos formacin. Existe tambin ungran efecto proveniente de la demanda de trabajo, que se haincrementado significativamente debido a la expansin econmica.Estos efectos combinados han generado una tendencia a laigualacin de los ingresos laborales en Brasil. Adems, la polticasocial ha mejorado, ya que se ha vuelto ms eficaz para atendera los pobres, sobre todo aunque no exclusivamente a travsde programas de transferencias monetarias, como Bolsa Famlia(transferencia condicionada para motivar la inversin en laeducacin y la salud de los nios) y el Benefcio de PrestaoContinuada [beneficio de prestacin continua] (pensiones nocontributivas). La mayor incidencia del gasto social en favor de lospobres tambin ha contribuido a la reduccin de la desigualdad.

Existen tcnicas que permiten descomponer por fuente los

cambios en los ingresos para explicar los cambios en la distribucin.Este tipo de ejercicio resulta til para dar cuenta de las fuentesde ingresos asociadas a las tendencias observadas. Si se tienen encuenta las dos principales fuentes de ingreso, es decir, los ingresosprovenientes de la actividad laboral y los provenientes de lastransferencias, los primeros dan cuenta de la mayor proporcin decambios ocurridos entre 1997 y 2009, y representan, segn algunasestimaciones, ms de dos tercios de la reduccin de la desigualdadde ingresos. Por otra parte, aunque los ingresos derivados defuentes no laborales representan una proporcin relativamentemodesta de los ingresos familiares per cpita, han tenido un impactoconsiderable en la reduccin de la desigualdad de ingresos: dancuenta de ms del 20% de dicha reduccin.

Se ha suscitado un debate acerca del papel que han desempeadolas activas polticas de salario mnimo. Entre 1997 y 2009, elvalor real del salario mnimo se increment un 70%. Esto parecehaber influido en la reduccin de la brecha de ingresos entre lostrabajadores con mayor nivel de educacin y los menos formados.Adems de su impacto redistributivo como ndice para losprogramas de seguridad social, los aumentos de salario mnimohan constituido una seal para las renegociaciones en el extremo

inferior de la escala de ingresos. Si bien no se ha realizado unanlisis convincente del impacto de las polticas de salario mnimoen los niveles de desempleo ni de la funcin de los mercadoslaborales en general, dichas polticas al parecer tienen un impactopositivo general en la distribucin de ingresos. El anlisis dedescomposicin mencionado ha mostrado que el aumento de lastasas de crecimiento de los ingresos en los percentiles de ingresosms bajos que ha permitido la convergencia constante de losingresos laborales en todos los grupos de ingresos ha guardadouna estrecha relacin con las mejoras educativas. Para realizarun anlisis exhaustivo de la incidencia de las polticas de salariomnimo, sera necesario establecer parmetros comparativosrespecto del funcionamiento del mercado laboral sin dichasintervenciones.

Las inversiones en educacin parecen haber dado frutos en Brasilal menos en lo que respecta a la reduccin de la desigualdad deingresos. La histrica desigualdad de ingresos laborales en Brasilprovena, en gran medida, de la desigualdad en la educacin. Losesfuerzos concertados en materia de polticas que comenzarona mediados de los aos noventa modificaron el estado de cosasy generaron mejoras educativas que contribuyeron en granmedida a una distribucin de ingresos ms equitativa. A modode ejemplo, en 1993 el hijo de un padre sin educacin formalcompletaba, en promedio, cuatro aos de educacin escolar.Actualmente, los estudiantes brasileos completan entre 9 y 11 aos,independientemente del nivel educativo de sus padres. En efecto, elperfil escolar de la fuerza de trabajo se ha modificado drsticamente;

US US$4

Contribucin

Umbrales de pobreza

Redistribucin

Crecimiento

US$2,5

120,00%

100,00%

80,00%

60,00%

40,00%

20,00%

0,00%

Grfico 2. Contribucin del crecimiento y la disminucinde la desigualdad a la reduccin de la pobreza en Brasil, 200109

Fuente: Base de Datos Socioeconmicos para Amrica Latina y El Caribe (CEDLAS y Banco Mundial).


7/12


as, hoy el trabajo relativamente no calificado es ms escaso, lo queha reducido las primas salariales que ganan los trabajadores con msformacin.

Otros factores relacionados con la aplicacin de polticasadecuadas incluyen los cambios macroeconmicos e institucionalesque generaron un entorno macroeconmico estable queno solo permite el crecimiento, sino que tambin elimina elimpuesto inflacionario que perjudica a los pobres. La estabilidad

macroeconmica que sigui a la introduccin del Plan Real de 1994ha propiciado un entorno que permite reducir la desigualdad enBrasil. Los pobres no suelen tener acceso a instrumentos financierosque los protejan de la inflacin y se ven afectados en formadesproporcionada por la volatilidad de los ingresos. De ese modo,la gestin macroeconmica responsable tambin los beneficia.

En lo que se refiere a intervenciones ms especficas en materia depolticas sociales, resulta evidente que los programas brasileos deseguridad y asistencia sociales han contribuido en forma crecientea reducir la desigualdad de ingresos. Si bien las fuentes no laboralesan representan una proporcin relativamente baja de los ingresostotales de los hogares, las reformas de las polticas sociales realizadasdesde 1988 han ampliado la cobertura e incrementado el valor de lasprestaciones de la seguridad social y las transferencias monetarias.

De acuerdo con algunas estimaciones, gracias al aumento de lastransferencias contributivas y no contributivas del Gobierno, elcoeficiente de Gini se ha reducido en alrededor de 30% entre 2001y 2009.

Sin embargo, el poder redistributivo potencial de lastransferencias debe analizarse teniendo en cuenta su alcancey sus efectos beneficiosos para los pobres. Debido a su ampliacobertura en dicho segmento, Bolsa Famlia tuvo una incidenciamucho mayor en la reduccin del coeficiente de Gini de Brasilentre 1997 y 2009 que el beneficio de prestacin continuada, a pesarde sus montos considerablemente menores. Las transferenciasespecficas y ms cuantiosas indexadas segn el salario mnimo,como dicho beneficio, han mostrado efectos redistributivos

Ingresos per cpita de los hogares, por decil

Promedio de las tasas de crecimiento de los ingresos per cpita

tasadecrecimientoanualen%

decil

11,78

8,30

7,456,69

6,065,63

4,79 5,91

1,61

2,89

3,86

Grfico 3. Curvas de incidencia del crecimiento en Brasil, 200109

Fuente: Base de Datos Socioeconmicos para Amrica Latina y El Caribe (CEDLAS y Banco Mundial).

positivos, aunque ms sutiles.Por otra parte, los programasde seguridad social generosos

relacionados con el sector formal,incluido el sistema de pensionesde los empleados pblicos, hanresultado ser sumamente regresivos.La cobertura, la sostenibilidad fiscal ylas posibles desigualdades del sistemade transferencias pblicas generalesson, comprensiblemente, objeto deun debate de polticas. Segn losdatos disponibles, Bolsa Famlia, querepresenta menos del 1% del PIB, hasido el instrumento ms eficaz enfuncin de los costos para llegar a lospobres y reducir la desigualdad.

De cara al futuroSostener la reduccin tanto de la

pobreza como de la desigualdad sincomprometer el crecimiento repre-senta un desafo clave para Brasil enlos prximos aos. Si bien el pas ha

logrado avances significativos en la reduccin de la desigualdad deingresos en los ltimos 15 aos, el ritmo de la transformacin podraverse comprometido por la aparicin de nuevas dimensiones delproblema. As pues, para que se mantenga esta tendencia positiva,adems de consolidar el entorno de estabilidad macroeconmica yseguir mejorando la eficacia de los programas sociales, es necesariotener muy en cuenta los desafos de polticas clave.

En materia de educacin, los esfuerzos realizados hasta la

fecha se han centrado en la cantidad, es decir, se ha tratado delograr que un mayor nmero de alumnos asistan a la escuela ycontinen los estudios durante ms tiempo. Igualar la calidad de losservicios educativos en todos los grupos de ingresos sigue siendoun importante desafo. Es preciso emprender nuevas reformasdel sistema educativo para garantizar que los ingresos laboralessigan evolucionando progresivamente. La reciente creacin de unsistema nacional de evaluacin y el establecimiento de objetivosespecficos que debern cumplirse, as como la distribucin derecursos a escuelas basada en la necesidad y el esfuerzo, son pasosimportantes en la direccin correcta. Las innovaciones para mejorarla calidad en el extremo inferior de la escala socioeconmica, comolas bonificaciones por desempeo para los docentes y la extensinde la jornada escolar, que actualmente se estn llevando a la prcticaa modo experimental en algunos estados brasileos, deberanevaluarse cuidadosamente y ampliarse en el caso de que resulteneficaces.

Abordar la sostenibilidad fiscal y la equidad de las polticasde transferencias tambin constituye un desafo clave. La fuertetendencia de Brasil a la aplicacin de impuestos indirectosrepresenta una carga desproporcionada para los pobres, en tantoque el actual marco del impuesto sobre la renta personal no parecetener ningn tipo de impacto en la desigualdad de ingresos.Asimismo, desvincular las transferencias sociales del salario mnimopuede ayudar a minimizar las posibles distorsiones y liberar recursospara invertir en mecanismos ms eficaces de ayuda a los pobres, conlo que se fortaleceran estrategias ms ambiciosas, como el programaBrasil sem misria.


8/12


Francisco H. G. Ferreira

S

i bien hoy en da es comn leer informes del BancoMundial acerca de la desigualdad de oportunidades,esto no siempre fue as. Incluso a principios de los aosnoventa, cuando la bibliografa predominante del Bancodej de centrarse en el ajuste estructural y la correccin

de los precios y comenz a surgir un inters a ms largo plazoen la reduccin de la pobreza, la desigualdad no era una cuestinimportante. Se haca especial hincapi en ayudar a los pases alograr y mantener el desarrollo econmico, el principal motor de lareduccin de la pobreza a largo plazo.

No fue sino hasta fines de los aos noventa y principios de ladcada de 2000 que la desigualdad comenz a aparecer con unpoco ms de frecuencia en el lxico del Banco Mundial. Es posibleque esto reflejara, al menos en parte, la creciente percepcinentre los economistas de que la calidad de las instituciones, lanaturaleza de la gestin de gobierno y, por lo tanto, el ritmo decrecimiento econmico se vean afectados por los flagrantesniveles de desigualdad. En la dcada de 1990, tuvo lugar en loscrculos acadmicos un proceso por el cual se rescat del fro a

la distribucin de los ingresos1

. Se redactaron modelos en losque se sugera que los altos niveles de desigualdad podan llevara que se perdieran oportunidades de inversin. Los historiadoreseconmicos sostenan que las grandes disparidades iniciales enla distribucin de la tierra y de la riqueza eran, en parte, la causade que en Amrica del Sur se desarrollaran instituciones menosdemocrticas e inclusivas que en Amrica del Norte, y que ello sereflejaba, a su vez, en el desempeo econmico inferior a largo plazoque la primera regin haba mostrado en los dos siglos anteriores.Los resultados iniciales de un anlisis economtrico de la relacinentre la desigualdad y el crecimiento en varios pases sugirieronque exista una relacin entre la elevada desigualdad inicial y laposterior reduccin del crecimiento econmico.

La desigualdad de oportunidades en el mundo:Qu sabemos hasta el momento?

En esa poca, se estaba desarrollando otra corriente intelectual delos aos noventa, completamente alejada de la bsqueda de datosempricos destinados a probar el nexo causal entre la desigualdady el crecimiento econmico. Dicha corriente influira ms tardeen la concepcin del Banco Mundial y otras instituciones dedesarrollo. Bajo la conduccin de personas como John Roemer, de laUniversidad de Yale, y Dirk van de Gaer, que actualmente trabaja enel Universidad de Ghent, algunos economistas comenzaron a pensaren el concepto nebuloso y bastante intangible de la desigualdad deoportunidades2.

Los filsofos morales y polticos haban estado utilizando eltrmino desde haca tiempo. Tras la publicacin de Teora de la

justiciade John Rawls en 1971, se escribi mucho sobre el lugarque deba ocupar la igualdad. Entre quienes se mostrabaninteresados en las cuestiones normativas lo que poda constituiruna sociedad justa o equitativa, haba un deseo generalizadode dejar atrs la tica economicista del utilitarismo, que durantemucho tiempo haba sido el programa predeterminado en quese sustentaba la economa del bienestar3. Se quera atribuir unvalor moral a la igualdad; ahora bien, la pregunta era: igualdad dequ?4. Probablemente no de ingresos ni de otro tipo de resultados

deseables que reflejen un alto grado de esfuerzo personal.Despus de Rawls, comenz a generalizarse la concepcin deque la responsabilidad personal conllevaba una funcin tica.Las decisiones sensatas y la dedicacin al trabajo merecan serrecompensadas. Sin embargo, en una sociedad justa, la desigualdadde resultados (por ejemplo, la desigualdad de ingresos, en ladistribucin de la riqueza o incluso en los logros educativos) debidaa las diferencias de esfuerzos o de responsabilidad sera aceptabledesde el punto de vista ticonicamente cuandolas personas habantenido un punto de partida bsico en comn, esto es, determinadascondiciones equitativas. Lo que constitua este punto de partidaen comn recibi diferentes nombres: materia prima, recursos yfinalmente, oportunidades.

En lo que respecta a los programas sociales, una orientacin eficazhacia los grupos ms vulnerables podra contribuir a una prestacinequitativa de los servicios bsicos, lo que generara un crculo

virtuoso entre una mayor igualdad de ingresos y de oportunidades.La promocin de condiciones destinadas a fomentar el trabajoaltamente calificado en los sectores con gran valor agregado tambinayudar a que siga disminuyendo la desigualdad.

Brasil comparte las tendencias positivas en trminos decrecimiento y reduccin de la pobreza con los dems integrantes delgrupo BRICS y hoy se jacta de ser el caso atpico en un mundo cadavez ms desigual. Para mantener la tendencia, es necesario realizarnuevos esfuerzos. En las polticas recientes, como la nueva estrategiaBrasil sem misria, al parecer se reconocen los principales desafosy se los aborda con instrumentos especficos. Habr que seguiraprendiendo. El mundo, mientras tanto, observa.

Todos los montos expresados en dlares corresponden a dlares de

Estados Unidos, salvo indicacin en contrario. Luis F. Lpez-Calva eseconomista principal del Banco Mundial.

Bibliografa

Banco Mundial. 2011. Una ruptura histrica: Quince aos de reduccinde la desigualdad en Amrica Latina, Reporte de Pobreza y Trabajo

Amrica Latina y el Caribe. Washington, DC: Unidad de Pobreza,Equidad y Gnero, Amrica Latina y el Caribe, Banco Mundial.

Barros, Ricardo Paes de, M. de Carvalho, S. Franco y R. Mendoca.2010. Markets, The State, and The Dynamics of Inequality inBrazil. En Declining Inequality in Latin America: A Decade ofProgress?L.F.Lpez-Calva y N. Lustig, comps. Washington, DC:The Brookings Institution Press.

Ferreira, F.H.G., P. Leite y M. Ravallion. 2010. Poverty Reductionwithout Economic Growth? Explaining Brazils Poverty Dynamics,1985-2004. EnJournal of Development Economics, 93 (1): 20-36.

Lpez-Calva L.F. y S. Rocha. 2012. Exiting Belindia? Lessons from theRecent Decline in Income Inequality in Brazil. Washington, DC:

Unidad de Pobreza, Equidad y Gnero, Amrica Latina y el CaribeBanco Mundial.


9/12


Cmo se mide, entonces, la igualdadde oportunidades?

El elemento novedoso que aportaron Roemer y van de Gaer fueun marco que permiti medirla y evaluarla empricamente. La ideabsica era clasificar todos los posibles factores determinantes de unresultado especfico que inspirara inters por ejemplo, ingresoso logros educativos en dos categoras mutuamente exclusivas:aquellos sobre los cuales las personas ejercan cierto control(esfuerzos) y aquellos sobre los cuales no ejercan dicho control

(circunstancias). Mientras que los esfuerzos podan incluir cosascomo los aos de estudio u horas de trabajo, las circunstanciaspodan incluir la raza, el gnero y los antecedentes familiares (entreotras cosas). En esencia, la desigualdad debida a las diferenciasde esfuerzos se atribua a la responsabilidad individual y era,por lo tanto, aceptable desde el punto de vista tico, mientras quela desigualdad asociada a las circunstancias era consideradadesigualdad de oportunidades y, por ende, inaceptable.

Cmo nos ayuda esto a medir la desigualdad de oportunidadesen la prctica? Si pudiramos ponernos de acuerdo en un conjuntode circunstancias que se vean reflejadas en los datos por ejemplo,la raza, el gnero y algunos indicadores de los antecedentesfamiliares, como la educacin u ocupacin de los padres,

podramos dividir la poblacin en grupos que compartieranexactamente las mismas circunstancias: mujeres negras con padresque no hayan recibido educacin, por ejemplo, u hombres blancoscuyos padres hayan tenido educacin universitaria. Cada grupo,definido exclusivamente a partir de sus circunstancias, constituyelo que en la literatura sobre la materia se denomina tipo. Dadaesta divisin, una premisa clave es que las diferencias entre lospromedios de los grupos responden a las circunstancias, en tantoque las diferencias dentro de los grupos se deben al esfuerzo (o la

suerte u otras circunstancias que, de algn modo, no hemos podidoobservar ni medir).Por lo tanto, la decisin de asociar todas las diferencias

intergrupales a la desigualdad de oportunidades no es inocua.A fin de cuentas, es posible que todos los integrantes de un grupoespecfico por ejemplo, los hijos de padres que tienen un alto niveeducativo se esfuercen ms en la escuela y trabajen ms horas quelos miembros de otro grupo. Pero es probable que esas diferenciassistemticas relacionadas con el esfuerzo promedio que se registraen los grupos reflejen los efectos indirectos de las circunstancias.Por ejemplo, algunos grupos pueden desarrollar una tica de trabajoque transmiten a sus hijos, mientras que en otros entornos seheredan bajos niveles de autoestima y confianza en s mismo, la falta

0,0

10,0

20,0

30,0

40,0

50,0

Dinamarca

Alemania

Finlandia

Eslovaquia

Noruega

PasesBajos

Austria

Egipto

Rep.Checa

Letonia

Suecia

Francia

Eslovenia

ReinoUnido

Polonia

Grecia

Estonia

Ghana

Hungra

Italia

Blgica

Guinea

Espaa

CtedIvoire

Lituania

Irlanda

Zonasrurales

deIndia

Zonasurbanas

deIndia

Madagascar

Portugal

Colombia

Ecuador

Per

Panam

Brasil

Guatemala

Grfico 1. Desigualdad de oportunidades en el mundo

Proporcin de la desigualdad total que responde a la desigualdad de oportunidades

Fuentes:Cogneau y Mesple-Somps (2008), Ferreira y Gignoux (2011), Marrero y Rodrguez (2010a), Belhaj-Hassine (2011)y Singh (2012).

Nota: Para calcular la proporcin intergrupal de la desigualdad se utiliz la desviacin logartmica media (Theil-L), salvoindicacin en contrario. Las barras naranjas y verdes no corresponden a la distribucin de ingresos, sino a la del consumo.Las barras verdes se basan en el ndice de Theil-L y las naranjas, en el ndice de Theil-T.


10/12


de confianza en las instituciones e incluso escasas aspiracionesconstruidas socialmente5. En las mediciones de la desigualdad deoportunidades basada en las diferencias intergrupales se reconocen

estos efectos y se considera que dichas diferencias sistemticas deesfuerzos responden a diferencias de circunstancias. nicamentelas diferencias de esfuerzo relativo medidas en funcin del rangoque ocupa la persona en un grupo se consideran aceptables desdeel punto de vista tico.

Por lo tanto, un mtodo para calcular la desigualdad deoportunidades consiste en computar la proporcin de desigualdadgeneral que se asocia a estas diferencias intergrupales. Dado que losgrupos se definen forzosamente a partir de algunas circunstanciasobservadas, pero no todas, en los trabajos bibliogrficos se insiste enque estos resultados arrojan estimaciones a la baja de la desigualdadde oportunidades: al menosesta proporcin de desigualdad generales inaceptable desde el punto de vista tico. En el grfico 1 se resumeesta informacin respecto de un conjunto de pases que figuran en

cinco estudios de ese tipo6

.Si bien las barras del grfico 1 provienen de cinco estudiosdiferentes, los mtodos empleados en ellos son comparablesdentro de parmetros razonables7. Estas medidas de la desigualdadde oportunidades van desde el 2% del total de la desigualdad deingresos en Dinamarca y Alemania hasta ms del 30% en Panam,Brasil y Guatemala. Cuando la medida se computa para lasdistribuciones de gastos de consumo, y no de ingresos, alcanzahasta el 51% del total de la desigualdad (en Guatemala). Y estosson los lmites inferiores... Los pocos pases africanos y asiticosrespecto de los cuales se han computado dichas medidas ocupanuna posicin intermedia entre los extremos de Europa y AmricaLatina: Madagascar, las zonas rurales de India y las zonas urbanasde este pas alcanzan, individualmente, la marca del 20%. Egipto,el nico pas de la regin de Oriente Medio y el Norte de fricaincluido en el grfico 1, registra un puntaje sorprendentemente bajodel 5,4%, y se ubica entre Austria y la Repblica Checa.

Y entonces?

Y entonces?, uno podra preguntarse. Tal vez sea verdad quela igualdad de oportunidades es un objetivo social ms apropiadoy realista que la estricta igualdad de ingresos o el nivel deeducacin. Ahora bien, aporta algo concreto a las actividades delucha contra la pobreza que lleva adelante el Gobierno (o el Banco)?Agrega algo a nuestros conocimientos sobre la mejor manera decombatir la pobreza, o al dilogo sobre polticas y las operaciones?

Aunque probablemente sea demasiado pronto para lasafirmaciones grandilocuentes, existen pruebas de que la desigualdadde oportunidades puede estar asociada al crecimiento econmico,

por ejemplo. En dos estudios recientes se sugiri que una de lasrazones por las cuales los resultados del anlisis economtricoen que se haba intentado estimar el efecto causal de los nivelesde desigualdad en el crecimiento son tan inestables es que lasmedidas de la desigualdad de ingresos combinan dos aspectosbsicamente diferenciados de las diferencias sociales: la desigualdadde oportunidades y la desigualdad de esfuerzos. Del mismo modoque existe el colesterol bueno y el malo, puede haber dos tipos dedesigualdad, una de las cuales es mucho ms perjudicial para lasalud del pas que la otra. Por ejemplo, se ha llegado a la conclusinde que los estados de Estados Unidos que tienen los niveles mselevados de desigualdad de oportunidades (pero no de ingresos) conel tiempo registran un crecimiento econmico ms bajo8.

Se trata de tan solo uno de los estudios, de modo que seradesde luego prematuro extraer demasiadas conclusiones a partirde estos resultados preliminares. Pero si surgen ms evidencias

de que la desigualdad de oportunidades de ayer est asociada alpeor desempeo econmico de hoy, puede suceder que esas dostendencias de investigacin bien diferenciadas de los aos noventala que estudia el nexo causal entre la desigualdad y el crecimientoy la que procura definir y medir la desigualdad de oportunidadesfinalmente converjan, lo que generara interesantes implicacionespara las actividades de desarrollo.

Incluso cuando ese debate particular an est pendiente, sepuede sostener que el concepto de igualdad de oportunidadesya ha influido sobre nuestra labor en el Banco Mundial, a travsdel anlisis de polticas y el dilogo sobre estas. Luego de que enel Informe sobre el desarrollo mundial 2006el concepto de igualdadde oportunidades pas a ser el eje de la definicin de equidad, setrat de que dicho concepto fuera ms operativo y estuviese msvinculado a las polticas. Un resultado clave de esta labor es el ndicede oportunidades humanas, que mide una tasa de acceso a variasoportunidades bsicas ajustada segn los niveles de desigualdad.Las primeras aplicaciones del ndice se centraron en el acceso de losnios a un conjunto de oportunidades y servicios pblicos bsicos:asistencia escolar, posibilidad de completar a tiempo un gradoespecfico de la escuela, acceso a la electricidad, abastecimiento deagua y saneamiento, etctera. En lugar de computar simples tasas decobertura para cada uno de estos servicios, el instrumento se disepara determinar en qu medida dicha cobertura variaba segn losdistintos tipos: pueblos indgenas y de origen africano; padres conms y con menos instruccin, hogares ms pobres y ms ricos,etctera.

El ndice de oportunidades humanas debe sus orgenesintelectuales a Amartya Sen y John Roemer. Al centrarse en loque sus proponentes denominan oportunidades bsicas, quesuelen coincidir con determinados servicios pblicos, tambinenmarca la nocin de igualdad de oportunidades directamente enun contexto de polticas. En ese sentido, ha tenido un xito notable.Su popularidad ha trascendido sus orgenes en Amrica Latinay el Caribe, y actualmente se utiliza en frica, Oriente Medio ymuchos otros lugares. El ndice tambin ha llamado la atencinentre acadmicos de otras regiones y ha sido examinado en laliteratura profesional. Lo que es ms importante, el concepto deigualdad de oportunidades como un objetivo de polticas deseable ycuantificable parece haber encontrado eco entre muchos encargadosde la formulacin de polticas de pases en desarrollo, quienesconsideran que se condice con los deseos y aspiraciones de susciudadanos.

La promocin de la igualdad de oportunidades ciertamente secorresponde con la reduccin de la pobreza y contribuye de maneradecisiva en ese sentido, pero tambin puede ir ms all. Hoy enda, los esfuerzos por medirla y evaluarla empricamente, incluidoel extendido uso del ndice de oportunidades humanas, son unimportante componente del compromiso del Banco con muchos desus clientes. El tiempo y las evaluaciones bien diseadas dirnen qu medida resultan tiles.

Francisco H. G. Ferreira es economista principal del Banco Mundial

e investigador becario del Instituto para el Estudio del Trabajo.


11/12


Notas

1. La expresin entre comillas hace referencia al ttulo de un muybuen documento escrito por Anthony Atkinson (1997).

2. Son referencias clave Roemer (1998) y Van de Gaer (1993).

3. As figura en el captulo escrito por Sen (2000) del Handbook ofIncome Distribution(Manual de la distribucin del ingreso).

4. Equality of what?(Igualdad de qu?) es tambin el famosottulo de la conferencia dictada por Amartya Sen en el marco de lasConferencias de Tanner en 1979 (Sen, 1980).

5. Existe una fascinante bibliografa especfica sobre estos efectos.En Appadurai (2004) y Hoff y Pandey (2006), se incluyen dos ejemplosque se asemejan a la labor del Banco Mundial.

6. Todas las estimaciones que aparecen en el grfico 1 son ejemplosde lo que se conoce como enfoque ex ante, empleado para medirla desigualdad de oportunidades. Un mtodo alternativo, que secentra en la desigualdad que existe entre personas que ejercen el

mismo grado de esfuerzo relativo, se denomina enfoque ex post.Vanse Checchi y Peragine (2010) y Fleurbaey y Peragine (de prximaaparicin).

7. Las dos cuestiones principales de comparabilidad se plantean conrespecto a los estudios africanos, en que se utiliza el ndice de Theil-T,y no el de Theil-L, para medir la desigualdad, y el hecho de que ensiete casos tambin contamos con estimaciones del consumo.

8. Marrero y Rodrguez (2010b).

Bibliografa

Appadurai, Arjun. 2004. The Capacity to Aspire: Culture and theTerms of Recognition. En Culture and Public Action,V. Rao y M.Walton, comps. , captulo 3. Stanford: Stanford University Press.

Atkinson, Anthony. 1997. Bringing Income Distribution in from theCold. Economic Journal107 (441): 297-321.

Belhaj Hassine, Nadia. 2011. Inequality of Opportunity in Egypt.World Bank Economic Review,http://wber.oxfordjournals.org/content/early/2011/10/27/wber.lhr046.short?rss=1.

Checchi, Daniele y Vito Peragine. 2010. Inequality of Opportunity inItaly.Journal of Economic Inequality 8 (4): 429-450.

Cogneau, Denis y Sandrine Mesple-Somps. 2008. Inequality ofOpportunity for Income in Five Countries of Africa. DIALDiscussion Paper 2008-04, Pars.

Ferreira, Francisco y Jrmie Gignoux. 2011. The Measurement ofInequality of Opportunity: Theory and an Application to LatinAmerica. Review of Income and Wealth57 (4): 622-657.

Fleurbaey, Marc y Vito Peragine. De prxima aparicin. Ex AnteVersus Ex Post Equality of Opportunity. Economica.

Hoff, Karla y Priyanka Pandey. 2006. Discrimination, SocialIdentities and Durable Inequalities. American Economic Review96(2): 206-211.

Marrero, Gustavo y Juan G. Rodrguez. 2010a. Inequality ofOpportunity in Europe: Economic and Policy Facts. ECINEQ

Working Paper 2010-172.Marrero, Gustavo y Juan G. Rodrguez. 2010b. Inequality of

Opportunity and Growth. ECINEQ Working Paper 2010-154.

Roemer, John. 1998. Equality of Opportunity. Cambridge, MA: HarvardUniversity Press.

Sen, Amartya. 1980. Equality of What?. En Tanner Lectures onHuman Values, S. McMurrin, comp. Cambridge, MA: CambridgeUniversity Press.

Sen, Amartya. 2000. Social Justice and the Distribution of Income.Handbook of Income Distribution, A.B. Atkinson y F. Bourguignon,comps., captulo 1. Amsterdam: Holanda septentrional.

Singh, Ashish. 2012. Inequality of Opportunity in Earnings andConsumption Expenditure: The Case of Indian Men. Review ofIncome and Wealth58 (1):79-106.

Van de Gaer, Dirk. 1993. Equality of Opportunity and Investment inHuman Capital. Disertacin doctoral, Universidad Catlica deLouvain.


12/12

La serie La desigualdad bajo la lupatiene como objetivo orientar el debate pblicosobre equidad, desigualdad de oportunidades y movilidad socioeconmica.Incluye artculos escritos por personal del Banco Mundial, as como investigadoresy encargados de la formulacin de polticas provenientes de la comunidad del

desarrollo en su conjunto. Las opiniones e interpretaciones expresadas en losartculos son las de sus autores y no reflejan necesariamente la opinin del BancoMundial, de sus Directores Ejecutivos ni de los pases que representa.

La serie La desigualdad bajo la lupano est protegida por derechos de propiedadintelectual y podr reproducirse, siempre y cuando se haga debida mencin dela fuente.

Comit Editorial:Pedro Olinto (editor en jefe), Jaime Saavedra, Francisco Ferreira,Luis-Felipe Lpez-Calva, John Newman y Gabriel Demombynes

Compiladora: Mary Anne Mulligan

Produccin: Anna Reva

Documents

La Desigualdad Bajo La Lupa - Banco Mundial