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La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas Memorias de la cuarta mesa redonda SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIÓN TRIBUNAL ELECTORAL

La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

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  • La Justicia Constitucionalen las Entidades FederativasMemorias de la cuarta mesa redonda

    Diseo: Coordinacin de Informacin, Documentacin y Transparencia

    SUPREMA CORTE DE JUSTICIA DE LA NACIN

    TRIBUNAL ELECTORALLa

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  • La Justicia Constitucionalen las Entidades FederativasMemorias de la cuarta mesa redonda

  • Edicin 2008

    D.R. Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federacin.Carlota Armero No. 5000, colonia CTM Culhuacn,Delegacin Coyoacn, Mxico, D.F., C.P. 04480,Tels. 5728-2300 y 5728-2400.

    Coordinador de la Informacin: Magistrado Manuel Gonzlez Oropeza, Tribunal Electoral delPoder Judicial de la Federacin.

    Edicin: Coordinacin de Informacin, Documentacin y Transparencia.

    ISBN 978-970-671-274-5

    Impreso en Mxico

    Memorias de la cuarta mesa redonda sobre Justicia Constitucionalen las entidades federativas (4: 2007: 14-16 noviembre: Chiapas,Mx.)

    La justicia constitucional en las entidades federativas:memorias de la cuarta mesa redonda / Suprema Corte de Justiciade la Nacin: Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federacin.-- Mxico: Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federacin,2008.

    XXVII, 164 p.

    ISBN 978-970-671-274-5

    1. Justicia Constitucional- Entidades Federativas. 2. JusticiaElectoral- Mxico. 3. Derechos Polticos. 4. PrincipiosConstitucionales- Entidades Federativas. I. Suprema Corte deJusticia de la Nacin. II. Tribunal Electoral del Poder Judicial de laFederacin. III. Penagos Lpez, Pedro Esteban. IV. GonzlezOropeza, Manuel.

    342.014J888c

  • Tribunal Electoral del Poder Judicialde la Federacin

    Magistrada Mara del Carmen Alanis Figueroa

    Presidenta

    Magistrado Constancio Carrasco Daza

    Magistrado Flavio Galvn Rivera

    Magistrado Manuel Gonzlez Oropeza

    Magistrado Jos Alejandro Luna Ramos

    Magistrado Salvador Olimpo Nava Gomar

    Magistrado Pedro Esteban Penagos Lpez

    DIRECTORIO

    Suprema Corte de Justiciade la Nacin

    Ministro Guillermo I. Ortiz Mayagoitia

    Presidente

    Ministro Sergio Salvador Aguirre Anguiano

    Ministro Mariano Azuela Gitrn

    Ministro Jos Ramn Cosso Daz

    Ministro Jos Fernando Franco Gonzlez Salas

    Ministro Genaro David Gngora Pimentel

    Ministro Jos de Jess Gudio Pelayo

    Ministra Margarita Beatriz Luna Ramos

    Ministra Olga Mara del Carmen Snchez Cordero

    de Garca Villegas

    Ministro Juan N. Silva Meza

    Ministro Sergio Armando Valls Hernndez

  • VII

    CONTENIDO

    PRESENTACIN . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . IX

    PALABRAS DE BIENVENIDAMagistrada Sonia Simn Morales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . XIMagistrado Jos Alejandro Luna Ramos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . XVMaestro Csar de Jess Molina Surez . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . XXI

    MESA 1Justicia constitucional en los estados de la Unin mexicana . . . . . . . . . . . . 3

    Rafael Estrada Michel

    MESA 2Los principios constitucionales de la justicia electoral estatal . . . . . . . . . . 17

    Pedro Esteban Penagos Lpez

    MESA 3La codificacin de la justicia constitucional estatal . . . . . . . . . . . . . . . . . . 37

    Carlos Emilio Arenas Btiz

    MESA 4El desempeo de la justicia constitucional en las entidadesfederativas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 55

    Csar Ivn Astudillo Reyes

    MESA 5Los derechos polticos y su proteccin en las Constitucionesde las entidades federativas de Mxico . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93

    Manuel Gonzlez Oropeza

  • VIII Contenido

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    PANELLa justicia constitucional local . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 121

    Csar Camacho Quiroz

    CONFERENCIA MAGISTRALLa regularidad del orden constitucional de la Repblica federal.La funcin asignada a la justicia constitucional local . . . . . . . . . . . . . . . . 133

    Sergio A. Valls Hernndez

    Presentacin de conclusiones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 143Csar de Jess Molina Surez

  • IX

    PRESENTACIN

    En un esfuerzo conjunto de la Suprema Corte de Justicia de la Naciny del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federacin, la edicin dela presente obra refleja las memorias de la cuarta mesa redonda sobreLa Justicia Constitucional en las Entidades Federativas, que tuvoverificativo en el Estado de Chiapas del 14 al 16 de noviembre de 2007.

    Dicho evento sigue la ruta de anlisis y reflexin iniciada el 12 denoviembre de 2004 en el Estado de Oaxaca en donde se inauguraron lostrabajos sobre La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas,trabajos que continuaron en Tlaxcala en 2005 y en Monterrey en 2006.

    La justicia constitucional en las entidades federativas se ha conver-tido en una de las ramas fundamentales de estudio del derecho proce-sal constitucional, pues concentra su atencin en el anlisis de losmecanismos de control tendientes a salvaguardar la supremaca, dentrode cada una de las partes integrantes de la federacin de la respectivaConstitucin estatal.

    As las cosas, en San Cristbal de las Casas, destacados juristasexpertos en la materia ofrecieron diversas reflexiones en torno a temastan relevantes como son la justicia constitucional en los estados de laUnin mexicana; los principios constitucionales de la justicia electoralestatal; la codificacin de la justicia constitucional estatal; el desempeode la justicia constitucional en las entidades federativas; los derechospolticos y su proteccin en las constituciones de las entidades federativasde Mxico; y sobre la regularidad del orden constitucional de la Rep-blica Federal la funcin asignada a la justicia constitucional local.

    Como podr apreciar el lector, esta coedicin contiene las diversasponencias sustentadas en el evento de referencia, en donde adems seabordaron aspectos relacionados con la justicia constitucional electoral,los instrumentos de proteccin de otros derechos fundamentales di-

  • X Presentacin

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    versos a los de naturaleza poltica-electoral, as como aquellos que seencuentran estrechamente vinculados con la organizacin y competen-cias de los poderes de las entidades federativas.

    Este compendio es un testimonio del irrenunciable compromisointerinstitucional del Poder Judicial de la Federacin con la sociedadpara mantenerse a la vanguardia del debate sobre los temas de mayortrascendencia en el mbito jurdico.

    Lo anterior es as, pues el redimensionamiento de diversos con-ceptos tales como constitucional y Constitucin que hasta hace po-cos aos hacan referencia nicamente a la Ley Suprema de la Unin,en las ltimas dos dcadas han cobrado un nuevo significado, ya queson trminos que pueden emplearse vlidamente para aludir a los tex-tos fundamentales de las entidades federativas, as como a los instru-mentos que garantizan su estricta observancia.

    Uno de los objetivos de esta obra es proporcionar una herramien-ta que responda al inters del lector de formar parte y mantenerseactualizado de dicho proceso evolutivo de esta disciplina jurdica, res-pecto de la cual, sin duda, existen campos inexplorados y que darnlugar a futuras investigaciones, sobre las que el Poder Judicial de laFederacin seguir promoviendo su anlisis, debate y difusin.

    Tribunal Electoral del Poder Judicial de la FederacinMayo de 2008

  • XI

    PALABRAS DE BIENVENIDADE LA MAGISTRADA SONIASIMN MORALES

    Seor licenciado Alejandro Luna Ramos, magistrado de la SalaSuperior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federacin;

    C. licenciada Consuelo Ruiz Snchez, encargada de la Direccinde la Facultad de Derecho de la Universidad Autnoma de Chiapas;

    Profesora Victoria Olvera Rojas, presidenta municipal de SanCristbal de las Casas;

    Seores doctores, licenciados, diputados y magistrados participantesde esta Cuarta Mesa Redonda de la Justicia Constitucional en lasEntidades Federativas;

    Seoras y seores; Amigos todos:

    Es para m muy honrosa y memorable la encomienda de inauguraren nombre del Poder Judicial del Estado de Chiapas, los trabajos deesta Cuarta Mesa Redonda sobre Justicia Constitucional en las EntidadesFederativas.

    Agradezco al Comit de Educacin y Difusin de la Suprema Cor-te de Justicia de la Nacin, presidida por el ministro don Guillermo I.Ortiz Mayagoitia, y los seores ministros Margarita Beatriz Luna Ra-mos y Mariano Azuela Gitrn, el honor de haber seleccionado a SanCristbal de las Casas, para celebrar esta Cuarta Mesa Redonda, y quetiene lugar en este nuestro hermoso Chiapas, los das del 14 al 16 deeste mes de noviembre de 2007.

    Chiapas, estado prdigo en gestas y hechos que han trascendido ytrascienden a la patria toda y nica, hoy se manifiesta, una vez ms,

  • XII Palabras de bienvenida

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    consecuente con su espritu federalista, constructivo, nacionalista, entodas las inquietudes de la vida del pas. Est presente, con cabal con-ciencia de su misin, en actos como el que hoy nos congrega y evocan algran constitucionalista chiapaneco, don Emilio Rabasa Estebanell,consumador del amparo, opositor de que la Suprema Corte de Justi-cia de la Nacin funcionara como tribunal de casacin.

    Las disertaciones de don Manuel Herrera y Lasso, Jorge Gaxiola,Felipe Tena Ramrez, Antonio Martnez Bez y Alfonso Noriega, resul-tan suficientes para precisar que la influencia de Rabasa en el constitu-yente de 1917 se tradujo en la adopcin de un ideario constitucional, enlas reformas que propuso en sus obras, y que fueron adoptadas, yen aquellas otras que continuaron siendo una constante interroga-cin en el devenir de nuestras instituciones.

    Hoy se nos exige a todos poner atencin especial en nuestras ins-tituciones, como pilar consistente del futuro de los mexicanos, some-tidos a severas pruebas.

    Ideas aviesas y teoras infundadas que desconocen por completolas bases de la civilizacin, tratan de eliminar los atributos de nuestrasociedad sustentada en el valor y dignidad del individuo, en el respetode los derechos fundamentales.

    Claro est que el Estado demcrata constitucional moderno nece-sita renovarse, identificarse con la vida misma, ya que no puede aceptarreducir a la sociedad a una representacin disgregada, en la que cadahombre sea un ente autnomo, ante la cual el Estado slo intervendrapor la comisin de un delito, una falta o la contienda individual nacidade un contrato, porque ello sera cerrar los ojos a la realidad. En talrepresentacin, la libertad sera una libertad romntica que slo existi-ra para quienes no la necesitan, una libertad exclusiva de los fuerteseconmicamente, a la par que la esclavitud a los dbiles.

    Pero, no. El Estado moderno constitucional debe ser el cauce delequilibrio social a travs de sus instituciones; pero con instituciones convalor vital, que correspondan a la necesidad de que la vida comn, la justiciay los problemas de organizacin colectiva se estructuren en formas racio-nales y limpias, en que la revelacin sea la del deber por cumplir frente al

  • XIIISonia Simn Morales

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    dolor humano, frente a la injusticia social, frente al hombre carente de lonecesario, oprimido, vejado; el hombre de los caminos cerrados y de losdolores sin esperanza; deber de existir como deber personal, como debersocial, como deber de la ciudadana y como deber del Estado dentro delmarco de la legalidad constitucional.

    Que esta Cuarta Mesa Redonda sea fructfera para la justicia consti-tucional local; que se hagan realidad las iniciativas de creacin de nuevostribunales constitucionales en los estados. Que se establezcan principiosconstitucionales de la justicia electoral estatal; que se codifique la justiciaconstitucional de los estados; que esta Cuarta Mesa Redonda que se ce-lebra en esta ciudad refuerce a las ya celebradas, y que con la influencia delas Constituciones pioneras del constitucionalismo local de Veracruz,Coahuila y Tlaxcala, con las reformas de 2002 y 2007 en Chiapas, estasltimas propuestas por iniciativas del gobernador del estado, licenciadoJuan Sabines Guerrero, se retroalimenten las Constituciones de otrasentidades federativas, con las cuatro figuras de control constitucional: lacontroversia constitucional, accin de inconstitucionalidad, accin por omi-sin legislativa y cuestiones de inconstitucionalidad.

    Las reformas constitucionales de Veracruz del ao 2000, de Coahuilay Tlaxcala en el 2001, y de Chiapas en los aos 2002 y 2007, debenestudiarse con nfasis exclusivo en la institucionalizacin de la justiciaconstitucional local. Las reformas constitucionales de Chiapas mues-tran bsicamente las peculiaridades del rgano al que se confan atribu-ciones de constitucionalidad a efecto de saber de qu tipo de control setrata; se delimitan las garantas judiciales de los encargados de aplicarjudicialmente la Constitucin a fin de tener una nocin sobre su inde-pendencia; se enlistan los instrumentos procesales creados para teneruna idea de la extensin del control; se observen los actos o disposicio-nes que puedan impugnarse para tener una nocin del objeto de con-trol; se especifican los entes legitimados para activar la justiciaconstitucional a fin de conocer la apertura con que se concibe el siste-ma, y relaten los efectos de las sentencias para intentar tener algunasnociones sobre su alcance.

  • XIV Palabras de bienvenida

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    Estas decisiones jurdico-polticas fundamentales dirigen sus es-fuerzos a la modernizacin del sistema constitucional chiapaneco, quese encuentra en franco desarrollo.

    Por ltimo, para esta Cuarta Mesa Redonda de la Justicia Constitu-cional de las Entidades Federativas, deseo un xito completo; que seamuy positiva para el mejoramiento de la justicia constitucional local; quetenga como caracterstica la permanente inconformidad que para pro-gresar debemos tener, y debemos mantener en todas las actividades ten-dientes al mejoramiento del Estado de derecho constitucional local.

    Es muy grato, hoy, a las 16 horas con 10 minutos del 14 de no-viembre de 2007, declarar solemnemente inaugurada la Cuarta MesaRedonda de Justicia Constitucional en las Entidades Federativas, quetiene lugar en esta colonial ciudad de San Cristbal de las Casas, asientode la centenaria Facultad de Derecho de la Universidad Autnoma deChiapas.

    Muchas gracias

  • XV

    PALABRAS DE BIENVENIDADEL MAGISTRADO JOS ALEJANDROLUNA RAMOS

    Saludo respetuosamente a las personalidades que nos acompaanen este acto de inauguracin:

    Magistrada Sonia Simn Morales,presidenta del Tribunal Constitucional del Estado de Chiapas;

    Mara Victoria Olvera Rojas,presidenta municipal de San Cristbal de las Casas;

    Elvira Vzquez Lpez,directora de la Facultad de Derecho de la Universidad Autnomade Chiapas;

    Seoras y seores:

    Me permito externarles un sincero saludo a nombre de la magistradaMara del Carmen Alanis Figueroa, presidenta del Tribunal Electoral delPoder Judicial de la Federacin, quien por motivos de carga excesiva detrabajo no pudo acompaarnos en esta ocasin; sin embargo, es un ho-nor para m traer su representacin personal a este importante acto, dentrode las actividades que enmarcan la Cuarta Mesa Redonda sobre Justicia Cons-titucional en las Entidades Federativas.

    Adems, debo reconocer el privilegio que tengo al dirigirme a us-tedes, lo que implica no slo un orgullo, sino tambin una enormeresponsabilidad, pues adems de que hago uso de la voz ante una selec-ta audiencia, estoy en casa, porque Chiapas es el estado del que soyoriginario, y esta tierra representa para m, como dijera Enoch CancinoCasahonda en su clebre Canto a Chiapas: sangre, beso, voz y leyenda.

  • XVI Palabras de bienvenida

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    Adems, porque me form en las instituciones educativas de estaciudad, el Colegio la Enseanza, la clebre preparatoria y la Escuela deDerecho de Chiapas, que fue el embrin donde surgi la actual Univer-sidad Autnoma de Chiapas, cuna de profesionistas crticos y propositivosquienes, sobre todo, como reza su lema, tienen imbuida en la concienciala necesidad de servir.

    Asimismo, porque me siento orgulloso de mi origen, de haber na-cido y crecido recorriendo las angostas calles de esta vieja pero hermosaciudad colonial, que con el transcurso del tiempo y superadas una seriede vicisitudes, ha logrado constituirse como una de las ms importantesciudades del estado cuya fama ha traspasado los lmites del pas, lo que hadado lugar a que en muchas ocasiones se le haya elegido para desarrollareventos de gran envergadura, como el que nos sirve de razn para re-unirnos el da de hoy, con la finalidad de hablar acerca de la justicia cons-titucional electoral con una visin, desde y para las entidades federativas.

    Como se sabe, el rgimen electoral vigente en Mxico es productode la reforma constitucional de agosto de 1996, la cual fue aprobada me-diante el consenso de todas las fuerzas polticas, con representacin delas cmaras legislativas en beneficio de los derechos fundamentales pol-tico-electorales de los ciudadanos y de los principios de constitucionalidady legalidad a los que deben sujetarse invariablemente las leyes. La referi-da reforma constitucional se caracteriz por el establecimiento de unsistema de justicia electoral plenamente judicial en cuya cspide se en-cuentra la Suprema Corte de Justicia de la Nacin, y en el que el TribunalElectoral resulta la mxima autoridad jurisdiccional en la materia. Al res-pecto, se crearon diversos instrumentos procesales para el control judi-cial de la constitucionalidad de leyes y actos o resoluciones electoralesfederales y locales; es decir, se incorporaron autnticas garantas consti-tucionales electorales.

    Por lo que se refiere al Tribunal Electoral del Poder Judicial de laFederacin, la Constitucin, en trminos de lo dispuesto en su artculo41, prrafo segundo, fraccin cuarta, tutela el sistema federal de me-dios de impugnacin en materia electoral, cuya finalidad es garantizarque todos los actos y resoluciones electorales se ajusten a principios de

  • XVIIJos Alejandro Luna Ramos

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    constitucionalidad y legalidad, as como asegurar la proteccin de losderechos fundamentales poltico-electorales de los ciudadanos de vo-tar y de ser votados.

    Considero que el tema propuesto, as como los tpicos que hansido asignados a las distintas mesas de trabajo, paneles y conferenciasmagistrales en los que ha sido dividido el evento, nos permitirn arribara conclusiones que aportarn nuevos elementos para fortalecer un temaincipiente, pero prioritario para la consolidacin y legitimacin del Esta-do constitucional y democrtico de derecho en las entidades federativas.

    En efecto, la legalidad ha sido reforzada y, en parte, reemplazadapor la idea de constitucionalidad, con lo que se ha superado la concepcintradicional de que la Constitucin es meramente una norma organizativa,para situarla como una norma directamente eficaz tanto en sus mandatosinstitucionales como en aquellos de naturaleza material y sustantiva, y, enconcreto, de cuestiones de ndole electoral que contienen bsicamentelos tpicos de sufragio, participacin ciudadana, derechos y deberes po-lticos, modalidades para la designacin de los titulares de los cargos elec-tivos, partidos polticos y financiamiento.

    Esta tendencia se ha seguido tambin en los estados de la Repbli-ca, en relacin con sus textos constitucionales, y se ha convertido enuno de los mayores desafos de la justicia constitucional electoral local,fomentado por un debate que no admite la configuracin del derechocomo algo inmutable.

    Para alcanzar tal objetivo, se ha puesto especial atencin en la con-veniencia de que la Constitucin federal prevea y regule la exigencia deque los estados establezcan medios de control de la constitucionalidady legalidad, que permitan la sujecin de actos y normas de una autori-dad electoral estatal, al cumplimiento de los ordenamientos constitu-cionales de las entidades federativas, situacin cuya regulacin, de origen,qued al arbitrio de la voluntad estatal.

    Esto es as, porque dentro del federalismo imperante en nuestropas es fundamental fortalecer la justicia electoral, que tiene como ob-jetivo la defensa del texto fundamental dentro del mbito de autono-ma propio de las entidades federativas, de forma tal que los asuntos

  • XVIII Palabras de bienvenida

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    vinculados con la legalidad y constitucionalidad de los estados quedenen su mbito competencial, sujetos a los principios de cercana e inme-diatez y a mecanismos de tutela ms accesibles, que propicien la des-centralizacin y fortalezcan la seguridad jurdica.

    Si bien hay estados como Veracruz, Coahuila, Tlaxcala, Quertaroy Chiapas, que han avanzado en el establecimiento y desarrollo de lajusticia constitucional electoral local, lo cierto es que este tema conti-na ocupando un espacio importante dentro de los debates de los dis-tintos foros que se desarrollan en relacin con la reforma del Estado.

    Esto se explica fcilmente si se atiende a que en un Estado federalcomo Mxico, cada entidad que lo compone cuenta con un orden nor-mativo distinto, aunque ntimamente relacionado con el federal.

    Cada orden jurdico estatal se define con base en una norma dejerarqua superior a nivel local: su Constitucin, de la cual derivan lalegislacin secundaria, as como la existencia y competencias de las di-ferentes autoridades estatales, por lo que ni una ni las otras puedenexcederla o contradecirla.

    As las cosas, es evidente la importancia de eventos como el que sedesarrollar desde hoy y hasta el prximo 16 de noviembre, pues conellos se genera un espacio plural que permite evaluar, de manera dete-nida y cuidadosa, los logros que se han conseguido hasta hoy en la ma-teria constitucional electoral, as como los fallos que se han cometidoen el camino, a efecto de generar nuevas propuestas y alternativas con-cretas para acceder a una justicia integral en la que la justicia constitucionalelectoral local se fortalezca y con ello ocupe el lugar que le corresponde en elmbito nacional.

    La tarea no es sencilla, y el camino an es largo, pero, ciertamente,con el trabajo serio y comprometido que desarrollarn conjuntamentelos participantes y asistentes a esta cuarta mesa redonda, se lograr darun paso firme en beneficio de la justicia constitucional electoral en lasentidades federativas. De parte de la magistrada presidenta del Tribu-nal Electoral del Poder Judicial de la Federacin, Mara del CarmenAlanis Figueroa, as como de cada uno de los magistrados que integran dichotribunal y la voz, deseamos a ustedes que la Cuarta Mesa Redonda

  • XIXJos Alejandro Luna Ramos

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    sobre Justicia Constitucional en las Entidades Federativas sea exitosa;que todos los participantes sientan que se ha contribuido para alcanzarel objetivo propuesto, pero que adems se lleven el calor intelectualque esta ciudad sabe brindar, la que como la calificara el gran orador,don Adolfo Lpez Mateos, ciudad que como nido de guilas se levantaen este valle rodeado por un hemiciclo de montaas.

    Feliz y provechosa estancia

  • XXI

    PALABRAS DE BIENVENIDADEL MAESTRO CSAR DE JESSMOLINA SUREZ

    La Suprema Corte de Justicia de la Nacin, tribunal constitucionalde Mxico, a travs de la Direccin General de Casas de la CulturaJurdica y Estudios Histricos a mi cargo, les da la ms cordial bienve-nida a esta Cuarta Mesa Redonda sobre Justicia Constitucional en las Enti-dades Federativas.

    En primer lugar quiero ofrecer a los ponentes, a los asistentes y atodo el equipo de logstica una sincera disculpa por los inconvenientesque seguramente les ocasionamos al cambiar la sede. Ello obedeci arazones ajenas al ms alto tribunal de justicia en Mxico, pues haceapenas unas horas la Facultad de Derecho de la Universidad Autnomade Chiapas nos avis sobre la imposibilidad de llevar a cabo este en-cuentro acadmico en sus instalaciones, como originalmente estaba pre-visto. Al mismo tiempo, agradezco la gentileza y amabilidad de losfuncionarios y autoridades municipales, encabezados por su presiden-ta, porque con apenas unos instantes de anticipacin nos permitieronel uso de este bellsimo auditorio para que pudiera llevarse a cabo esteevento, que rene a especialistas en la materia de todo el pas. As pues,gracias, seora presidenta, por la fineza de sus atenciones.

    Igualmente, debo resaltar la muy importante colaboracin que hamostrado la magistratura del estado de Chiapas a travs de su presidenta,la magistrada Sonia Simn Morales. No cabe duda que los lazosinstitucionales de ambos rganos jurisdiccionales se fortalecen a travs deeventos como este. As lo hemos hecho en las tres mesas anteriores enOaxaca, Tlaxcala y Nuevo Len, cuyos frutos han redundado en las diver-sas reformas legales y constitucionales en distintas entidades federativas.Estoy seguro que esta Cuarta Mesa dar tambin excelentes frutos.

  • XXII Palabras de bienvenida

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    Desde luego, debo subrayar la gran disposicin de los seoresministros del ms alto tribunal del pas para poder llevar a cabo esteevento.

    Por otro lado, me es grato estar el da de hoy con ustedes para reflexio-nar sobre un tema fundamental para la articulacin del constitucionalismodemocrtico de nuestros das: la justicia constitucional y el federalismo.Dicho binomio representa el referente inexcusable para la configuracin deun autntico Estado democrtico de derecho en nuestro pas.

    En esta ocasin haremos un anlisis sobre el desarrollo de la justiciaconstitucional desde el mbito local, es decir, la defensa judicial de las Cons-tituciones de las entidades federativas. Lo anterior plantea una serie deproblemas, de los cuales trataremos dar cuenta de una manera generaly sugerir algunos posibles derroteros que allanen el camino para alcan-zar consolidar aquel proceso que ha emprendido desde hace ya algunosaos la sociedad mexicana, es decir, la consolidacin de un autnticorgimen democrtico.

    La justicia constitucional como rasgodel constitucionalismo democrtico

    El rasgo ms distintivo del constitucionalismo de la segunda posguerraes la defensa de la Constitucin y de los derechos humanos en ella positivizados,llevada a cabo en sede jurisdiccional.

    Este repuntamiento de la judicatura, en el mbito europeo y latinoameri-cano, representa una conquista reciente en la esfera constitucional deaquellas latitudes, que ha repercutido en nuestra experiencia constitucio-nal latinoamericana de forma enriquecedora.

    A partir del posicionamiento de la funcin jurisdiccional en la segundamitad del siglo XIX se ha empezado a abandonar aquella influencia delconstitucionalismo decimonnico que pugnaba por la primicia de la ley,fuente del derecho por antonomasia. Para Rousseau, aqulla representa-ba la expresin de la voluntad general, y, por tanto, en donde resida lasoberana popular. En este sentido, el rgano por excelencia era el poderde crear leyes, es decir, la Asamblea Legislativa, que a travs del principio

  • XXIIICsar de Jess Molina Surez

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    de representacin era el depositario real de la soberana, el cual, salvo lospertinentes lmites de creacin del derecho, no se encontraba sujeto acontrol jurdico efectivo.

    De este modo, la ley se sobrepuso frente a la misma Constitu-cin, sus postulados y valores, que antes de ser concebidos vinculantesfrente a los poderes pblicos eran vistos, ms bien, como meros progra-mas polticos. Las Constituciones decimonnicas nicamente se encar-garon de organizar el poder de acuerdo con un sistema de competencias.

    En Estados Unidos de Amrica, desde las postrimeras de su vidaindependiente se sigui una ruta distinta a la que haba recorrido lagran mayora de Estados-nacin, pues tuvo el acierto de reconocer unorden de prelacin de las normas jurdicas en la articulacin de su or-denamiento jurdico encabezado por la Constitucin. Dicho en otraspalabras, la piedra angular de su sistema constitucional fue el principiode supremaca de la Constitucin, que dota a aquella norma jurdica deun estatuto superior al resto de las dems normas infraconstitucionales.

    As, en ella subyacen los valores ms altos que dotan la identidad alresto del ordenamiento jurdico.

    En los ltimos aos los dos grandes sistemas de control constitu-cional francs y estadounidense tienden a converger en la frmuladel Estado constitucional, que tiene como propsito la defensa de laConstitucin y de los derechos fundamentales en la arena judicial. Di-cho modelo de organizacin poltica viene a constituir la sntesis queaprovecha lo mejor de los dos sistemas de proteccin constitucional:Constituciones con un importante elenco de derechos fundamentalesy un rico conjunto de instrumentos de tutela de estos derechos.

    Es cierto que el trnsito del Estado legislativo de derecho al Estado cons-titucional de nuestro das, as como el fenmeno de la globalizacin eco-nmica, han menguado el principio de soberana, y hoy ya no es aquellapotestas legisbus solutus. Un sector importante de la doctrina lo ha cuestio-nado profundamente. Sin embargo, creemos que dicho principio es ne-cesario para la sobrevivencia del Estado; es el rasgo que lo caracteriza yprincipio fundamental del constitucionalismo. Dicha forma de organiza-cin poltica sigue siendo el referente cierto del que es el bien comn.

  • XXIV Palabras de bienvenida

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    Si la ley ha dejado de ser el referente de la soberana, creemos queahora reside en la Constitucin. En efecto, si algo podra calificarse comosoberano sera, en todo caso, la ley fundamental.

    La Constitucin democrtica es aquella que le corresponde al Es-tado constitucional, y tiene como vocacin proyectarse hacia el futuro,evitando su petrificacin; es ms, su esencia estriba en la apertura desus normas en forma de principios que la van actualizando y corres-pondiendo conforme a las nuevas circunstancias de la cultura jurdica.Aquellos principios estn sustrados de cualquier disposicin de lospoderes pblicos y privados.

    De lo anterior se puede atisbar que el juez constitucional tiene una natu-raleza contramayoritaria, pudiendo ir en contra de las preferencias inme-diatas del consenso social, que no por ser mayora significa que cuentecon la razn. Como dira Modugno: Las Cortes deberan ser la aristo-cracia del saber, llamadas a contener la tendencia de la democracia a dege-nerar en demagogia y a fijar un punto firme para el racional desarrollo dela sociedad actual, una isla de razn en el caso de las opiniones.

    Ahora bien, la importancia de la consolidacin de la justicia consti-tucional se ha evidenciado por la gran difusin que ha tenido en el me-dio acadmico, los diferentes congresos internacionales que renen alas cortes constitucionales y tribunales supremos de todo el mundo; enfin, se ha establecido un dilogo respecto a la mejor manera de perfec-cionamiento de la proteccin constitucional. Lo anterior hace posiblehablar de un desarrollo universal de los derechos humanos y de la jus-ticia constitucional.

    La mirada hacia el desarrollo de la justicia constitucional ha sidodirigida a los mbitos nacionales, regionales y supranacionales que sinlugar a dudas es un signo positivo; sin embargo, ha existido poca pre-ocupacin por los juristas por consolidar en la esfera de las entidadesfederativas esta jurisdiccin.

    Resulta paradjico en nuestro contexto nacional, que habiendo creadoa nivel local un importante instrumento de proteccin de los derechosfundamentales, como lo es el juicio de amparo, este mbito de tutelano se haya desarrollado con la misma fuerza que la justicia federal.

  • XXVCsar de Jess Molina Surez

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    Las Constituciones de los diferentes estados que forman parte dela Federacin, en general, se han encargado de reproducir fielmente lospostulados de la Constitucin federal; con ello, el desarrollo delconstitucionalismo local se ha limitado. En todo caso, se trata de unavisin empobrecida de la Constitucin, pues como dice Zagrebelsky:La Constitucin ya no es un centro del que partir sino un centro alcual alcanzar. Esto implica que los textos constitucionales deben tenerun margen considerable para el desarrollo de los postulados de la Cons-titucin, teniendo como nico lmite el de no contradiccin.

    La poca creatividad en materia constitucional local, y considerandoque el derecho procesal constitucional es una rama de reciente creacinen nuestro medio, entre otras circunstancias, son factores que han in-fluido para que la justicia constitucional local haya sido escasamentedesarrollada.

    La necesidad de un control constitucional local

    La justicia constitucional y el federalismo representan un binomionecesario cuya consagracin permite calificar a un Estado como demo-crtico de derecho. En cuanto el primero la justicia constitucional,representa la forma ms acabada de proteccin de los derechos funda-mentales, y por lo que respecta al otro el federalismo, constituyela mejor forma de gobierno que permite la unidad poltico-jurdica enmedio de la diversidad.

    El sistema federal mexicano hunde sus races en la tercera dcadadel siglo XIX; sin embargo, no es hasta finales del siglo XIX cuandose ha empezado a tomar inters en su estudio. Esta exclusin se hadebido a que en la prctica poltica existe una fuerte conciencia porla concentracin del poder que ha obstaculizado el papel que debe-ran desempear las entidades federativas.

    El federalismo, como es conocido, consiste en la existencia de dostipos de autoridades con competencias determinadas constitucional-mente; esto es, las locales y las federales, en las que se reproducen latriloga de los poderes pblicos (Ejecutivo, Legislativo y Judicial). Nin-

  • XXVI Palabras de bienvenida

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    guna es ms importante que la otra, por lo que no existe una relacinde jerarqua o de subordinacin entre ellas, aunque la realidad ha dista-do mucho de la forma en que opera el rgimen, imponindose la Fede-racin sobre los estados.

    En el mbito judicial, el federalismo estriba en que los diferen-tes rganos jurisdiccionales de las entidades federativas, en el ejerci-cio de su funcin, se pronuncien en ltima instancia sobre los asuntosque la legislacin local les confiere. Se trata de que aqullos sean r-ganos terminales respecto de su esfera de competencia. Conforme ala legislacin vigente, los tribunales de la Federacin son los rganosfacultados para dirimir los asuntos respecto a los que se han pronun-ciado sus homlogos de los estados, generando una pesada carga detrabajo, y en el ltimo de los casos una deslegitimacin de los pode-res judiciales locales.

    Por otro lado, si es que cada una de las entidades federativas cuentacon una Constitucin, es necesario que sta sea susceptible de proteccinfrente a la posible ilegitimidad de la legislacin estatal que la contradiga.Como toda Constitucin posee un catlogo de derechos fundamentalesque generalmente no son susceptibles de accionabilidad judicial, en estaesfera se reproduce el constitucionalismo de fachada que caracteriz alEstado legislativo de derecho: simples proclamaciones retricas despro-vistas de tutela dejadas al desamparo frente a la autoridad local.

    A partir de la reforma constitucional de 1994, en la que, como essabido, la Suprema Corte de Justicia de la Nacin se constituye como unautntico tribunal constitucional, es decir, el mximo intrprete de la leyfundamental, se empieza a tomar conciencia del federalismo y se re-flexiona sobre la necesidad de que los estados cuenten con los instru-mentos procesales para la defensa de su texto constitucional frente a lalegislacin local ordinaria. Las acciones de inconstitucionalidad, las con-troversias constitucionales y el juicio de amparo, slo por citar los msdestacados, han empezado a regularse en las Constituciones de los esta-dos, conformndose as el paradigma de la justicia constitucional local.

    La consolidacin de un autntico federalismo en Mxico ya esten andas, pues se ha generado un importante dilogo entre las dos esfe-

  • XXVIICsar de Jess Molina Surez

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    ras de accin gubernativa. Asimismo, la principal virtud del federalismo,que es lograr la unidad, ah precisamente en la diversidad, ha empezadoa dar frutos, creando una armona entre la actividad de las instanciasgubernativas.

    Al parecer el futuro de la justicia constitucional local se torna favo-rable, aunque el camino no es llano. No dudamos en que muy prontola conciencia respecto a la consolidacin de un verdadero federalismose funde en la lealtad por parte de gobernantes y gobernados, echeraces para el desarrollo de la justicia constitucional local. se es el ob-jetivo toral de los eventos como este.

    Por ltimo, quisiera culminar mi intervencin con una bella fra-se del jurista Couture, que ilustra de manera profunda lo hasta ahorasealado:

    La Constitucin vive en cuanto se aplica por los jueces.

    Muchas gracias.

    Portadilla

    Legal

    Directorio

    Contenido

    Presentacin

    Palabras de bienvenida de la Magistrada Sonia Simn Morales

    Palabras de bienvenida del Magistrado Jos Alejandro Luna Ramos

    Palabras de bienvenida del Maestro Csar de Jess Molina Surez

    abanderaPreliminarespreliminares_cuarta_mesa.pdf

  • MESA 1

    JUSTICIA CONSTITUCIONALEN LOS ESTADOS DE LA UNINMEXICANA

  • 3

    JUSTICIA CONSTITUCIONAL EN LOSESTADOS DE LA UNIN MEXICANA

    Rafael Estrada Michel*

    I. De ordenamientos y controles

    En un sistema federal como el nuestro, es la justicia fundamentalestadual autntica justicia constitucional? Para contestar esta interro-gante, requerimos comenzar por contar con definiciones que nos satis-fagan. Con las palabras justicia constitucional se suele denominar ensentido amplio toda confrontacin, sea quien fuera quien la realice,entre normas constitucionales (o consideradas tales) y otras normasUn enfrentamiento que se acompaa del poder de expulsar del ordena-miento jurdico las normas contrarias a la Constitucin.1

    As las cosas, s parece serlo, pero hay que ir con tiento. Prime-ro, por cuanto admitir que el concepto implica aceptar una cierta no-cin de ordenamiento (ya Gaxiola sealaba dcadas atrs que la notacaracterstica del orden federal radica en la coexistencia deordenamientos constitucionales en un mismo territorio). Por otro,dado que en un Estado complejo la facultad de expulsar leyes incons-titucionales puede corresponder a numerosos rganos de control co-etneos y coterrneos, sobre todo cuando se cuenta con un tribunalgeneral de constitucionalidad. As, por ejemplo, si en ejercicio de lajusticia constitucional un tribunal estadual expulsa de su ordenamien-

    * Escuela Libre de Derecho.1 PEGORARO, L., Modelos de justicia constitucional: desarrollo y recepcin en las

    nuevas democracias, trad. R. GARCA y M. LEN, versin mecanuscrita, Cursosde Posgrado de Derecho Constitucional, Salamanca, Universidad de Salamanca,1999, p. 2. Cursivas nuestras.

  • 4 Justicia constitucional en los estados de la Unin mexicana

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    to a una norma cualquiera, tal expulsin sera tcnicamente revisablepor el Tribunal nacional (que no, en este caso, federal) y, por ende,podra ser reintegrada a un ordenamiento a travs de la accin de unagente que en principio parece extrao.

    Extrao slo en apariencia, si aceptamos que las Constitucionesde los estados forman parte de la Constitucin global o total del Estado o,si se prefiere con terminologa menos holstica, que se integran al blo-que de constitucionalidad, como lo hacen los estatutos autonmicos en elEstado espaol compuesto.2 En este sentido, el Tribunal nacional esta-ra llamado a controlar, como rgano integrante e integrador del ordenjurdico, la constitucionalidad estadual o federal de cualquier ley que seexpida en el territorio de la Repblica. Cabe agregar, empero, que elartculo 133 de la Constitucin mexicana no se refiere a las Constitu-ciones de los estados integrantes de la Federacin como componentesde la Ley Suprema de la Unin, porque en realidad lo que originaria-mente se pretenda con l, como en el modelo procedente de los Esta-dos Unidos, era obligar a la lealtad de los estados respecto del derechofederal, con la pretensin de que slo lo federal fuera propiamentenacional, compartido, comn y, por ende, constitucional.

    Satisfechos provisionalmente con las definiciones, podemos afir-mar que las recientes modificaciones y las iniciativas de reforma enmateria de constitucionalidad local no habran significado otra cosa queun cambio cultural radical en lo que respecta a la concepcin que de susConstituciones tuvieron los Estados durante los siglos XIX y XX. Enefecto, si como explica Manuel GONZLEZ OROPEZA,3 el ochocientoses la centuria de la beligerancia local en defensa de la plena normatividadde los ordenamientos estaduales fundamentales (y, por lo tanto, se hace

    2 Me he ocupado del tema, y no quisiera parecer repetitivo, en ESTRADA MICHEL, R.,Orden constitucional y sistema federal, Revista de Investigaciones Jurdicas,Mxico, nm. 31, 2007, en especial pp. 197-206.

    3 GONZLEZ OROPEZA, M., Desarrollo del control constitucional en las entidadesfederativas en GONZLEZ OROPEZA, M. y FERRER MAC-GREGOR, E. (coords.), Lajusticia constitucional en las entidades federativas, Mxico, Porra, 2006, pp.385 y 386.

  • 5Rafael Estrada Michel

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    acompaar de una serie de instrumentos locales de defensa constitu-cional, como es el prototpico caso del amparo yucateco en 1840 y elmenos conocido del amparo chiapaneco en 1826), el siglo XX ser tes-tigo de una notoria prdida de conciencia normativa local, subordinn-dose la materia constitucional provincial, en forma casi absoluta, a losdictados de las autoridades federales.

    Reconocer, en cambio, como se ha hecho ltimamente, que losestados de la Unin tienen derecho a controlar la regularidad constitu-cional dentro de sus ordenamientos locales (y siempre con respecto ala Constitucin estadual de que se trate), implica aceptar por un lado lacaracterstica normativa de sus textos constitucionales y, por el otro,la existencia de un orden propio y exclusivo en el que la Federacin encuanto tal no tiene por qu entrometerse. La Federacin no, pero y lanacin?

    Tomados en cuenta todos los reconocimientos del caso, puedeser realmente concentrado el control constitucional en un Estadocompuesto que podra llegar a contar con treinta y dos cortes cons-titucionales? Es as como funciona, por ejemplo, en ese Estado fe-deral por antonomasia que es Alemania? La Corte de Karlsruhemantiene delegaciones en las regiones alemanas, o son autnomaslas cortes constitucionales regionales? Los tribunales constituciona-les provinciales alemanes, reglamentados en 1951, coexisten con elTribunal Federal sin ser agencias de ste, lo que prueba que puedenconvivir armnicamente varios ordenamientos fundamentales, agre-gando desde luego los correspondientes instrumentos de control,si se cuenta con herramientas procesales adecuadas (pinsese en lacuestin de inconstitucionalidad, que en Alemania funciona tantoen materia federal como en materia provincial) y con criterios juris-diccionales prudentes.4

    4 Especialmente interesante ha resultado la inhibicin del Tribunal Federal para co-nocer de materias relacionadas con la constitucionalidad (federal o provincial) deleyes locales. Cfr. FIX ZAMUDIO, H., Los tribunales constitucionales y los derechoshumanos, Mxico, IIJ/UNAM, 1980, pp. 54-58.

  • 6 Justicia constitucional en los estados de la Unin mexicana

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    II. Problemtica real

    Bien por Alemania, pero Mxico enfrenta acusados problemas en eltema. Primero que nada y en un sentido relacionado con la justicia en suacepcin ms material, debe la justicia de la Unin permanecer impasibleante los potenciales abusos provenientes de los tribunales constituciona-les locales? Ya se nos olvid para qu fue instituida la justicia federal ycul ha sido la tensa relacin que ha mantenido con los cacicazgos?

    Por lo dems, resulta curioso el modelo adoptado hasta el mo-mento por las entidades de la Unin mexicana que poseen institucio-nes de control de la constitucionalidad local: todas ellas se han alejadode la ortodoxia kelseniana, que exige tribunales constitucionales inde-pendientes de cualquiera de los tres departamentos en los que tradi-cionalmente se ha dividido el ejercicio del poder pblico para incardinara la justicia constitucional en el mbito del Poder Judicial estatal. Y dadoque se trata de una rama de un poder local, las decisiones de la justiciaconstitucional local son revisables por la va de la controversia constitu-cional en trminos del artculo 105 I h) de la Constitucin general de laRepblica.5 As sucede incluso en los casos de los tres estados en losque existen salas constitucionales (Veracruz, estado de Mxico yQuintana Roo), pues stas se hallan incardinadas en el Tribunal Supe-rior de Justicia de la entidad federativa, lo mismo que en Coahuila (quecuenta con control difuso de la constitucionalidad revisable por el ple-no del Tribunal Superior) y en Chiapas (que cuenta con un TribunalConstitucional no autnomo respecto de la Magistratura Superior delEstado). David CIENFUEGOS SALGADO y Jos GARZA GRIMALDO han

    5 Si el tribunal constitucional de un estado fuera un rgano autnomo, podra alegarsela improcedencia de la controversia constitucional en trminos de este inciso h),que habla de los pleitos entre dos poderes de un mismo Estado, sobre laconstitucionalidad de sus actos o disposiciones generales. Subsistira, sin em-bargo, la va (y por ende, la posibilidad de la expulsin exgena) en razn del incisoa), que previene la procedencia de la controversia constitucional cuando se pre-sente entre la Federacin y un estado, puesto que el Tribunal Constitucional, aun-que autnomo, sera parte sustancial del estado de la Unin.

  • 7Rafael Estrada Michel

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    propuesto, para Guerrero, el establecimiento de una Corte Constitu-cional como rgano constitucional autnomo y no como poder.6

    Noticias recientes hablan de que tal proyecto ha sido hecho suyo poralguna de las fracciones parlamentarias que operan en aquel estado delMedioda. Por el momento es necesario hacerse cargo de que todasnuestras entidades (ya cuenten o no con mecanismos para el control dela constitucionalidad local) se colocan en la heterodoxia respecto delcuasi secular modelo de Hans Kelsen, y cuentan, en el mejor de loscasos, con tribunales de legalidad, que en ocasiones se visten de juecesconstitucionales, con lo que los juicios de legalidad local que realizanno tienen ms control posible que el federal.

    Una de las cuestiones ms apremiantes cuando se observan losdiversos mecanismos e instrumentos procesales de control constitu-cional local resulta ser la de qu va a hacerse con el amparo de la Unin.Mientras sirva a la ciudadana, es claro que no va a desaparecer, por msque se alegue la autonoma de las entidades federativas. La Constitu-cin se hizo para el hombre y no el hombre para la Constitucin, y enrazn de la autoridad que con el paso de los aos ha adquirido el ampa-ro mexicano no se ve en el horizonte una sustitucin de l por losamparos estaduales sin que ello implique materialmente una potencialdenegacin de justicia. Material o sustancialmente, decimos, pues cree-mos que el escollo formal estara salvado con la sustitucin si com-prendemos a las justicias locales dentro del genrico trmino justiciaque emplea el segundo prrafo del artculo 17 constitucional. Una com-prensin que es indispensable para echar a andar la compleja red decontroles fundamentales en un Estado compuesto.

    No obstante, me parece que hay figuras que valdra la pena ana-lizar en el mbito nacional antes de establecer un laberntico sistemade constitucionalidad local. Me refiero a instrumentos que permitenun juego bastante completo entre las jurisdicciones propias de un

    6 CIENFUEGOS SALGADO, D., Nuevos medios de control constitucional en los Esta-dos, en GONZLEZ OROPEZA y FERRER MAC-GREGOR, La justicia constitucional,cit., p. 833.

  • 8 Justicia constitucional en los estados de la Unin mexicana

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    Estado compuesto, tales como la cuestin de constitucionalidad7 (quefunciona localmente en Chiapas, Veracruz y Coahuila) y el controldifuso al que se refiere el artculo 133 de la Constitucin mexicana.De otra forma, el reto parece bastante complicado: darle armona a lagran diversidad de interpretaciones que han de suscitarse entre tri-bunales prcticamente soberanos o, cuando menos, con pretensionesde soberana.

    III. Las reformas

    Observadas con detenimiento, las reformas en materia deconstitucionalidad local han pretendido, ante todo, extraer del mbitocompetencial de la Suprema Corte de Justicia de la Nacin la facultadde fungir como rbitro en los conflictos suscitados entre los poderesestaduales. De ah el nfasis que se pone en las controversias constitu-cionales (veinte Constituciones locales las contemplan) y la relativa re-legacin de las acciones de inconstitucionalidad (nicamente reguladasen nueve estados) y, desde luego, de los efectos generales de las sen-tencias de amparo local (slo existentes en tres estados). Parece primaren esto un principio poco jurdico que la sabidura popular resumemejor que cualquier Digesto: la ropa sucia se lava en casa.

    Ya hemos hablado de la continua inhibicin de la Corte constitucio-nal alemana. Debera autolimitarse la Suprema Corte mexicana y cono-cer solamente de la potencial inconstitucionalidad general de los preceptosconstitucionales locales? Debera evitar tambin que los tribunales fe-derales inferiores conozcan de la constitucionalidad de las leyes locales?Puede hacerlo sin incurrir en denegacin sustancial de justicia? Sonestas inhibiciones exigencias reales en un Estado compuesto? No, desde

    7 Junto con otros instrumentos procesales que saquen de la debilidad institucional a laSuprema Corte de Justicia de la Nacin, como el control previo de constitucionalidady la accin de inconstitucionalidad por omisin. Cfr. CRDENAS GRACIA, J., Diez tesissobre nuestro atraso jurdico en TORRES ESTRADA, P., (comp.), Neoconstitucionalismoy Estado de Derecho, (ITESM / Limusa, Mxico, 2006), p. 59.

  • 9Rafael Estrada Michel

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    luego, si tomamos en cuenta que pases compuestos como Espaa nocuentan ms que con un Tribunal constitucional para toda la Unin, unTribunal que tradicionalmente no se autocontiene, que entra en conflic-tos con los tribunales de legalidad y que pasa hoy una grave crisis queacaso debera movernos a la reflexin pausada.

    Un ltimo argumento, que es desconsolador, como desoladora esla Realpolitik: en Mxico, los tribunales superiores de justicia siguensiendo controlados, en muchos casos, por los Ejecutivos locales. Debela justicia de la Unin inhibirse ante tamaa realidad, renunciando a susresponsabilidades? Se trata, por supuesto, de un asunto de cultura cons-titucional, y mal haramos en creer que podemos crear un mundo per-fecto a golpe de leyes supuestamente avanzadas. Lo vanguardista no estan importante como lo sensato. Del otro lado, que es el de la falacianaturalista, debemos resignarnos a dejar la regulacin tal como esthasta en tanto no cambien las circunstancias de nuestro atraso poltico?Es el eterno problema del huevo y la gallina, y me temo que no hay msrespuesta que la de una paciente pedagoga constitucional, como la hallamado P. HBERLE.8

    Hay, con todo, avances muy perceptibles que marchan en la di-reccin correcta, que es la direccin en la que deben avanzar los gran-des experimentos suponiendo que la ingeniera constitucional sirvapara algo ms que para edificar castillos en el aire: de la periferia alcentro, de lo particular a lo general. El juicio de proteccin constitu-cional tlaxcalteca, por ejemplo, ha sabido trascender la frmula Ote-ro y posee ya efectos generales, que lo colocan como un genuinoinstrumento de justicia constitucional.9 Existen tambin avanceslocales en materia de proteccin de intereses difusos (artculo 3,

    8 HBERLE, P., El Estado constitucional, trad. e ndices de H. FIX-FIERRO, Mxico, IIJ/UNAM, 2001, p. 187.

    9 GARCA DOMNGUEZ, H., La proteccin integral de la Constitucin del Estado deTlaxcala, en GONZLEZ OROPEZA Y FERRER MAC-GREGOR, La justicia constitucio-nal, cit., p. 879. Hay que decir, sin embargo, que, desgraciadamente, el juicioprotector tlaxcalteca debe esperar a que se presenten tres precedentes para podertener efectos erga omnes.

  • 10 Justicia constitucional en los estados de la Unin mexicana

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    fraccin III, de la Constitucin de Tlaxcala) y en la regulacin deinstrumentos procesales para evitar la omisin legislativa.

    Este conjunto de avances hacen hoy ms atractivos, en algunoscasos, a los instrumentos locales de proteccin constitucional. Des-afortunadamente se limitan, en la mayor parte de los casos, a protegerlos derechos expresamente consagrados en las Constitucionesestaduales, dado que se carece de un concepto de Constitucin globalo de bloque de constitucionalidad.

    La gran pregunta, tras casi diez aos de reformas, sigue siendo lamisma: si un tribunal estadual declara inconstitucional una ley local, podrla Suprema Corte de Justicia de la Nacin revocar, en nombre de la nacin, taldeclaracin y revalidar la ley, reintegrndola al orden jurdico nacional? Esuna pregunta de fondo, de sustancia, y no caben frente a ella actitudesprocesales prudentes como las que esgrime la iniciativa de Ley Regla-mentaria del Artculo 95 de la Constitucin Poltica del Estado de NuevoLen, enviada recientemente a la Legislatura local por el gobernador deaquel estado septentrional. No estamos queriendo implicar que la pru-dencia sea mala en s misma (es, de hecho, la gran virtud del jurista), sinomanifestando que no cabe utilizarla como pretexto para abstenerse de es-tablecer definiciones inaplazables. La prudencia a la que se refiere la ini-ciativa10 implica reconocer que las diversas jurisdicciones constitucionalesson, en un Estado complejo, coexistentes, pero no concurrentes,11 perode ninguna manera puede servir para dejar sin respuesta la cuestin de losalcances y deberes de la ltima instancia fundamental.

    A nuestro entender, la falta de definicin se basa en un equvocoque aqueja en mayor o menor medida a todas las regulaciones estadualesmexicanas, y que consiste en apreciar a la Constitucin general de laRepblica como un ente desvinculado casi por completo de las Consti-tuciones locales. Se afirma en la iniciativa neoleonesa que la Constitu-cin federal y la estatal coexisten, y que el sistema de control de la

    10 Iniciativa de Ley Reglamentaria del artculo 95 de la Constitucin Poltica delEstado de Nuevo Len, 24 de septiembre de 2007, Exposicin de motivos, p. 3.

    11 Idem.

  • 11Rafael Estrada Michel

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    constitucionalidad local es complementario del sistema de control dela constitucionalidad general a cargo de la Suprema Corte de Justiciade la Nacin,12 debindose procurar que la vigencia de la Constitu-cin estatal se defienda no slo en las instancias judiciales federales.Como puede apreciarse, el concepto de Constitucin total o bloquede constitucionalidad no ha hallado entre nosotros una recepcin cabaly operativa, lo que provoca, por ejemplo, que al da de hoy no sepamosqu suceder cuando se impugnen ante la Suprema Corte nacional vio-laciones indirectas a la Constitucin de la Repblica que a su vez resul-ten ser violaciones directas a la Constitucin de Nuevo Len. La iniciativase cuida de no invadir las facultades privativas que corresponden a laSuprema Corte,13 pero ante casos como el anteriormente expuestonos tendremos que ir acostumbrando al seguimiento paralelo de jui-cios con idntica litis ante tribunales de constitucionalidad coexistentespero independientes entre s? Tendr alguna importancia el hecho deque las resoluciones puedan llegar a ser contradictorias? Se trata de unproblema especficamente reconocido por el gobierno de Nuevo Lenen su iniciativa, pero tambin expresamente dejado sin respuesta en elmismo instrumento, ms all de la dilacin discrecional en el dictadode la sentencia local que prev el artculo 39 del proyecto de ley.

    Puede apreciarse que la justicia constitucional neoleonesa resultarpoco atractiva para el usuario final de los servicios de control constitucio-nal, primero porque no prev un instrumento de acceso ciudadano a unaefectiva proteccin de derechos, y tambin porque los efectos generalesde las sentencias en los casos de acciones de inconstitucionalidad y con-troversias requieren para existir de un qurum muy dificultado: nuevevotos de entre los trece magistrados integrantes del pleno del Tribunal.Queda reconocido, adems, que la controversia de inconstitucionalidades ms que un medio de control de constitucionalidad local, un juicioordinario para resolver disputas entre autoridades pblicas14 locales,

    12 Idem.13 Ibdem, p. 9.14 Ibdem, p. 7.

  • 12 Justicia constitucional en los estados de la Unin mexicana

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    por supuesto. Y no se prev, encima, una tutela frente a la omisin legis-lativa. No es previsible que ante tantas deficiencias pueda la justicia de laUnin inhibirse y desentenderse de las cuestiones constitucionales quese susciten en Nuevo Len, dado que son cuestiones que competen alinters general de la Repblica.

    Ante el complicado panorama que hemos procurado describir, cabeechar a andar la imaginacin para encontrar esquemas que permitan laarmonizacin de los diversos mecanismos de justicia constitucional queexisten y que a buen seguro continuarn surgiendo en el pas. Unaopcin es el control preventivo de la constitucionalidad a nivel local,que tendra la ventaja de evitar llegar al amparo de la Unin siempre ypor todo. En un primer momento las decisiones preventivas estadualesdifcilmente seran revisables por los tribunales federales, puesto queno estaramos hablando todava de normas en sentido estricto, aun-que desde luego subsistira la controversia constitucional para impug-nar ante la nacin la decisin de la Corte estadual.15 Y adems, una vezque vieran la luz normativa, los productos de las Legislaturas localesseguiran siendo revisables por la instancia central suprema. Pese a todolo anterior, me parece que estamos ante un ejemplo de las vas quepodemos y debemos explorar.

    Mientras exploramos sta y otras posibilidades, los retos para lajusticia constitucional en nuestro complejo Estado siguen siendo losmismos que se han venido sealando desde el ao 2000: i) la articula-cin entre los mecanismos nacionales y los locales de control constitu-cional; ii) la definitividad de las resoluciones de la justicia constitucionallocal, que podra traducirse en la limitacin de la procedencia del ampa-ro directo para hacerlo operativo slo en casos excepcionales (sin quequede claro si tal solucin implicara o no denegacin sustancial de jus-ticia); iii) la posible inhibicin de la Suprema Corte nacional en lo to-

    15 Salvando por supuesto la cuestin de si un tribunal constitucional local sera o noun poder para efectos de la fraccin h) del artculo 105 de la Constitucin gene-ral, cuestin a la que ya nos hemos referido.

  • 13Rafael Estrada Michel

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    16 Cfr. ROMBOLI, R., La crisi della legge nellevoluzione del rapporto tra dirittopolitico e diritto culturale. Lattivit creativa di diritto della Corte costituzionalee dei giudici comuni, La crisis de la ley, Mxico, Escuela Libre de Derecho /Universidad de Pisa, 2007, pp. 340 y 341.

    17 Un juego pluralista e integrador que no requiere necesariamente de cortes consti-tucionales en cada una de las localidades, sino ms bien de acceso equitativo porparte de la Unin y de las provincias a la justicia constitucional general, comoprueban los casos del Estado autonmico espaol y del Estado regional italiano.Para las importantes y recientes reformas constitucionales en Italia, cfr. PIGNATELLI,N., Lo stato regionale italiano: la crisi della legge statale en cit., La crisis, pp.460 y 461.

    cante a controversias constitucionales referidas a cuestiones puramen-te estatales, que implicara un alejamiento an mayor respecto del sis-tema concentrado de control constitucional propio de la Europa de laposguerra16 y que no dara respuesta satisfactoria a la interrogante in-teresa o no a la Repblica controlar el actuar legislativo de sus partesintegrantes?; iv) la simultaneidad en la tramitacin de acciones deinconstitucionalidad locales y nacionales; v) la confianza de la ciudada-na en las magistraturas constitucionales locales, para lo que requierenplena autonoma en un ambiente de auctoritas y de cultura constitucionalque parta, ante todo, de una comprensin menos reduccionista de losconceptos de Constitucin y de constitucionalidad que lleve a in-terpretaciones que a todos los niveles permitan integrar la pluralidadpropia de un Estado constitucional y complejo como el que aspira a serel nuestro.17

  • MESA 2

    LOS PRINCIPIOSCONSTITUCIONALESDE LA JUSTICIA ELECTORALESTATAL

  • 17

    LOS PRINCIPIOS CONSTITUCIONALESDE LA JUSTICIA ELECTORAL ESTATAL

    Pedro Esteban Penagos Lpez*

    En la ltima dcada nuestro pas ha experimentado trascendentalesreformas en materia electoral y ha mejorado notablemente las expecta-tivas ciudadanas de la participacin poltica, lo cual ha contribuido deci-sivamente en el desarrollo de nuestra democracia.

    En la actualidad nadie discute que la jurisdiccin electoral es unapieza clave en el funcionamiento de los modernos Estados democrti-cos de derecho.

    A esta caracterstica hay que sumarle la necesidad de especializacinde los rganos jurisdiccionales, pues la variedad de fuentes del derecho ysu crecimiento desbordado hacen necesarios conocimientos especiales.

    Por otro lado, la excesiva carga de trabajo lleva a distribuir las com-petencias en diversos rganos jurisdiccionales para resolver los mlti-ples casos que va demandando una ciudadana cada vez ms informaday exigente en la calidad de sus instituciones democrticas.

    En este contexto, el papel de los tribunales electorales (federal yestatales), es decisivo para consolidar nuestro sistema poltico someti-do a normas jurdicas.

    La funcin jurisdiccional en materia electoral es garante de las pro-mesas democrticas establecidas en la Constitucin federal, y, por tan-to, resulta de suma importancia el estudio y aplicacin de los valores yprincipios constitucionales rectores de esta labor.

    * Magistrado de la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de laFederacin.

  • 18 Los principios constitucionales de la justicia electoral estatal

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    En adelante me ocupar de algunos de los principios constitucio-nales ms importantes relacionados con la funcin jurisdiccional enmateria electoral local, muchos de los cuales han sido materia de pronun-ciamiento por la Suprema Corte de Justicia de la Nacin y la Sala Superiordel Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federacin.

    A manera de prefacio, conviene recordar cules son las funciones bsicasde los principios jurdicos.

    Norberto Bobbio dice que los principios jurdicos son el fundamen-to de los ordenamientos jurdicos.

    Segn dicho autor, los principios realizan distintas funciones,como las siguientes:

    a) Aportan al esclarecimiento del sentido de otras normas.b) Orientan la actividad de los juristas al momento de crear una norma.c) Proporcionan criterios conforme a los cuales resolver un problema

    jurdico que no tiene regulacin normativa.d) Ponen los cauces dentro de los cuales se puede ejercer cierta competencia.e) Legitiman o reconocen la validez de las fuentes del derecho.f) Posibilitan la estructuracin u ordenamiento del material jurdico.Respecto del derecho electoral local, existen diversos principios es-

    tablecidos en la Constitucin Poltica de los Estados Unidos Mexicanos,que son rectores de los actos emitidos por las autoridades en la materia ysirven como directrices para ajustar sus actos a la norma suprema.

    Para el anlisis de las leyes relativas a la materia electoral, incluyendolas que organizan y establecen el sistema judicial local especializado enesta materia, es necesario acudir a los principios rectores y valores de-mocrticos previstos en la Constitucin.

    Lo anterior, tal y como lo sostuvo el pleno de la Suprema Cortede Justicia de la Nacin, al resolver la accin de inconstitucionalidad 30/2005, del rubro

    MATERIA ELECTORAL. PARA EL ANLISIS DE LAS LEYESRELATIVAS ES PERTINENTE ACUDIR A LOS PRINCIPIOSRECTORES Y VALORES DEMOCRTICOS PREVISTOS ENLOS ARTCULOS 41 Y 116, FRACCIN IV, DE LA CONSTITU-CIN POLTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICANOS.

  • 19Pedro Esteban Penagos Lpez

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    Entre los principios ms importantes destacan, entre otros, los deindependencia, autonoma, legalidad, imparcialidad, objetividad, certe-za, definitividad de las etapas electorales, equidad en la contienda yacceso a la tutela judicial efectiva.

    Estos principios estn establecidos en los artculos 41, 56, 116, frac-cin IV, y 99, de la Constitucin Poltica de los Estados Unidos Mexica-nos, aunque cabe la posibilidad de aplicar principios previstos en otrasdisposiciones.

    Por ejemplo, el artculo 17 constitucional prev el principio deacceso a la jurisdiccin o tutela judicial efectiva y el 5 ha sido interpre-tado para asegurar la irreductibilidad del sueldo de funcionarios judi-ciales electorales.1

    Adems, debe tomarse en cuenta que hay otros principios que noson de rango constitucional, pero que forman parte de las normas supre-mas, como son los principios de interpretacin in dubio pro homine o prolibertate, reconocidos en diversos tratados internacionales suscritos por elEstado mexicano y aplicados en diversas ocasiones para resolver juicios,por ejemplo, por la Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judi-cial de la Federacin.

    De todos los sealados, en adelante me referir a algunos princi-pios que destacan por su desarrollo jurisprudencial, y que estimo su-mamente interesantes para todos los involucrados en la actividadjurisdiccional en la materia.

    Para tal efecto dividir la charla en dos temas: 1. La conformacinde los rganos jurisdiccionales locales en materia electoral, y 2. La fun-cin jurisdiccional en materia electoral local.

    1 Vase la tesis de jurisprudencia 1. XXXVIII/2001, del rubro: MAGISTRADOSDEL TRIBUNAL DE JUSTICIA ELECTORAL DEL ESTADO DE BAJACALIFORNIA. LOS ARTCULOS 57, LTIMO PRRAFO, DE LA CONSTITU-CIN POLTICA, Y 256 DE LA LEY ORGNICA DEL PODER JUDICIAL, AM-BOS DE DICHA ENTIDAD, QUE PERMITEN LA DISMINUCIN DE SUREMUNERACIN DURANTE LOS AOS NO ELECTORALES, VIOLAN ELARTCULO 5. CONSTITUCIONAL. Consultable en la pgina 241 del SemanarioJudicial de la Federacin y su Gaceta, tomo XIII, junio de 2001.

  • 20 Los principios constitucionales de la justicia electoral estatal

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    1. rganos jurisdiccionales locales en materiaelectoral

    En relacin con este tema, destacan los principios de autonoma eindependencia, de donde se derivan interesantes interpretaciones queprotegen la estabilidad en el empleo de los magistrados electorales lo-cales, la posibilidad de ser ratificados, la proteccin a su remuneracindurante el perodo de su encargo y la irreductibilidad del presupuesto.

    Tal vez los principios de autonoma e independencia sean los msdesarrollados en la jurisprudencia nacional.

    En general, constituyen una caracterstica primordial de las autori-dades electorales, pues aseguran que la justicia y la organizacin de laselecciones no estarn supeditadas a influencias, injerencias o presionesextraas de los poderes jurdicos y fcticos.

    Debido a estos principios las autoridades electorales estn dotadasde libertad para emitir actos o resoluciones atendiendo al dictado de lajusticia y de la ley conforme a la recta razn, sin depender de ningnpoder externo a su conciencia y buen juicio.

    Este principio busca que todas las autoridades electorales velenpermanentemente por el inters de la sociedad y por los valores funda-mentales de la democracia, supeditando a ellos, de manera irrestricta,cualquier inters personal o preferencia poltica.

    Este principio cobra plena aplicacin tratndose de la integracinde los rganos jurisdiccionales locales, pues tiende a asegurar las condi-ciones mnimas para que su actuacin est libre de injerencias indebi-das y presiones externas. Algunos ejemplos destacados de la aplicacinde este principio son los siguientes.

    Inamovilidad de los jueces electorales locales

    y la posibilidad de ser ratificados

    En ese tenor se pronunci el pleno de la Suprema Corte de Justiciade la Nacin, al resolver la accin de inconstitucionalidad que dio lugar alas tesis P./J. 7/2002 y P./J. 9/2002 de los rubros

  • 21Pedro Esteban Penagos Lpez

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    TRIBUNALES ELECTORALES DE LOS ESTADOS. SI STOSFORMAN PARTE DEL PODER JUDICIAL DE LA ENTIDAD,DEBE DETERMINARSE EN LA CONSTITUCIN LOCAL LAPOSIBILIDAD DE LA RATIFICACIN DE LOS MAGISTRA-DOS QUE LOS INTEGRAN e INDEPENDENCIA JUDICIAL.LOS ARTCULOS 69 DE LA CONSTITUCIN Y 78 DE LA LEYRGANICA DEL PODER JUDICIAL, AMBOS DEL ESTADODE JALISCO, TRANSGREDEN AQUELLA GARANTA, ENCUANTO PREVN UN SISTEMA QUE NO ESTABLECE LAPOSIBILIDAD DE REELECCIN DE LOS MAGISTRADOSDEL TRIBUNAL ELECTORAL DE ESA ENTIDAD (Decreto pu-blicado en el Peridico Oficial de la entidad de 17 de julio de 2001).Estos principios constitucionales de independencia y autonoma

    han adquirido notoria relevancia por la constante intervencin de lospoderes jurisdiccionales locales en la materia electoral y la consolida-cin de un sistema integral de medios de impugnacin respecto detodos los actos relacionados con los comicios locales.

    Facultad de los tribunales locales para presentar

    propuestas de ley en materia electoral

    Los principios de autonoma e independencia no son ilimitados,sino que estn dirigidos al desarrollo de sus funciones y no a la intro-misin en las facultades soberanas de otros poderes.

    As lo determin la Suprema Corte de Justicia de la Nacin en latesis P./J. 14/2001, al considerar que ningn precepto de la Constitucinlocal ni del Cdigo Electoral Estatal de Chiapas prev que dentro delproceso legislativo las propuestas de modificacin de leyes presentadaspor el Tribunal Electoral local deban ser consideradas forzosa y necesa-riamente por el Congreso del estado, pues solamente tienen el carcterde propuestas, y no de iniciativas de ley.

    La tesis atinente dice:CONSEJO Y TRIBUNAL ELECTORALES DEL ESTADO DECHIAPAS. EL HECHO DE QUE SE HAYAN MODIFICADO VA-

  • 22 Los principios constitucionales de la justicia electoral estatal

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    RIOS ARTCULOS DE LA CONSTITUCIN POLTICA DELESTADO, SIN TOMAR EN CUENTA SUS PROPUESTAS, NOES VIOLATORIO DE LOS PRINCIPIOS DE AUTONOMA E IN-DEPENDENCIA DE DICHOS RGANOS ELECTORALES. Lacircunstancia de que la Sexagsima Legislatura del Congreso del Estadode Chiapas, para emitir el Decreto Nmero 216, modificando los artculos10, 16, 19, 27, 29, 42, 69, 71, 72 y 79 de la Constitucin Poltica Estatal, nohaya tomado en consideracin las propuestas formuladas por el ConsejoElectoral y el Tribunal Electoral de esa entidad federativa, no transgredelos principios de autonoma e independencia previstos por el artculo 116,fraccin IV, inciso c), de la Constitucin Federal. Ello es as, porque si bienes cierto que, por un lado, los artculos 113, fraccin XXII y 310, fraccinVIII, del Cdigo Electoral del Estado de Chiapas facultan a los citadosrganos tcnicos para proponer un pliego de observaciones y propuestasde modificacin a la legislacin electoral con base en las experiencias obte-nidas; y que, por el otro, el mencionado precepto constitucional estableceque las Constituciones y las leyes de los Estados garantizarn que las auto-ridades electorales gocen de autonoma en su funcionamiento e indepen-dencia en sus decisiones, tambin lo es que esa autonoma e independenciase refieren a las actividades ordinarias que les fueron encomendadas adichos organismos, como son, entre otras, la preparacin, organizacin,desarrollo y vigilancia de los procesos electorales; lo que no significa quetengan facultad de iniciativa de leyes o decretos, pues ningn precepto dela Constitucin Local ni del Cdigo Electoral Estatal prev que dentro delproceso legislativo las indicadas propuestas de modificacin deban ser con-sideradas forzosa y necesariamente por el Congreso del Estado, al revestirslo el carcter de propuestas y no de iniciativas de ley .

    2. La funcin jurisdiccional en materia electorallocal

    En cuanto a la funcin jurisdiccional, destacan los principiosde legalidad, acceso a la tutela judicial efectiva y de interpretacin

  • 23Pedro Esteban Penagos Lpez

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    constitucional. En relacin con este tema, destacar algunas cues-tiones que considero interesantes.

    El control de constitucionalidad por los tribunales

    electorales locales

    Ante todo, debe recordarse que los tribunales estatales electoralesno tienen atribuciones para ejercer facultades de control constitucio-nal, salvo que revisen cuestiones de legalidad, consistentes en lafundamentacin y motivacin de actos.

    Es evidente que los tribunales locales electorales aplican el artcu-lo 16 constitucional cuando verifican que los actos impugnados materiade su conocimiento estn fundados y motivados; sin embargo, esta ac-tuacin debe entenderse en estricta aplicacin al principio de legalidad,sin que ello implique que puedan aplicar e interpretar el resto de lospreceptos de la Constitucin federal.

    Slo las autoridades previstas expresamente en la Constitucin fe-deral con el carcter de rganos de control constitucional tienen faculta-des para verificar la constitucionalidad de leyes y actos en la materia.

    Es decir, solamente la Suprema Corte y el Tribunal Electoral delPoder Judicial de la Federacin, en el mbito de sus competencias, pue-den interpretar la Constitucin federal y declarar la inconstitucionalidadde leyes y actos emitidos por el resto de las autoridades o partidosemisores de dichas actuaciones.

    Los tribunales locales en materia electoral no ejercen facultadesde control de la Constitucin federal, pues en nuestro sistema jurdicono se prev el control difuso, tal y como lo ha sustentado la SupremaCorte de Justicia de la Nacin.2

    Al respecto, no se desconoce la tendente proliferacin de la inclu-sin del modelo de control constitucional en las entidades federativas

    2 Vase la tesis de jurisprudencia P./J. 74/99, que dice: CONTROL DIFUSO DELA CONSTITUCIONALIDAD DE NORMAS GENERALES. NO LO AUTORIZAEL ARTCULO 133 DE LA CONSTITUCIN. El texto expreso del artculo 133 dela Constitucin Federal previene que Los Jueces de cada Estado se arreglarn a

  • 24 Los principios constitucionales de la justicia electoral estatal

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    para defender su propia soberana estatal, aunque hay que aclarar quelas atribuciones de estos rganos est supeditada al control de la Cons-titucin estatal, y no a la federal.

    Por ejemplo, la legislacin de Chiapas prev en su sistema de jus-ticia la facultad de controlar a la Constitucin local.

    En el artculo 56 de la Constitucin Poltica del Estado Libre ySoberano de Chiapas se prev que sus atribuciones consisten en diri-mir de manera definitiva e inatacable los conflictos constitucionales quesurjan dentro del mbito interior del estado, con excepcin de aquelloscuya materia sea la electoral.

    De esta forma, el control de constitucionalidad que ejerce el mxi-mo tribunal en esta entidad se encuentra vedado para aplicarlo respectode cuestiones de ndole electoral.

    En el estado de Tlaxcala acontece una situacin similar, pues la Leyde Control Constitucional, en su artculo 50, fraccin VIII, estableceque estos medios sern improcedentes contra las resoluciones o decla-raciones de los organismos y autoridades en materia electoral.

    En diversas entidades federales se excluye la materia electoral delcontrol de constitucionalidad de leyes locales.

    Lo anterior, con independencia de que la Suprema Corte de Justiciade la Nacin y el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federacin,en sus mbitos de competencia, son los nicos encargados de controlarlos actos de autoridades estatales frente a la Constitucin federal.

    dicha Constitucin, leyes y tratados a pesar de las disposiciones en contrario quepueda haber en las Constituciones o leyes de los Estados.. En dicho sentidoliteral lleg a pronunciarse la Suprema Corte de Justicia; sin embargo, la posturasustentada con posterioridad por este Alto Tribunal, de manera predominante, hasido en otro sentido, tomando en cuenta una interpretacin sistemtica del precep-to y los principios que conforman nuestra Constitucin. En efecto, esta SupremaCorte de Justicia de la Nacin considera que el artculo 133 constitucional, no esfuente de facultades de control constitucional para las autoridades que ejercenfunciones materialmente jurisdiccionales, respecto de actos ajenos, como son lasleyes emanadas del propio Congreso, ni de sus propias actuaciones, que les per-mitan desconocer unos y otros, pues dicho precepto debe ser interpretado a la luzdel rgimen previsto por la propia Carta Magna para ese efecto.

  • 25Pedro Esteban Penagos Lpez

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    La administracin de justicia pronta y expedita

    Este principio, establecido en el artculo 17 constitucional, consti-tuye una aspiracin legtima del constituyente, relativa al deber de losjueces de resolver en el mnimo de tiempo posible los asuntos someti-dos a su conocimiento.

    En especial, el derecho electoral est regido por los principios deconcentracin procesal y de procesos sumarios, dados los estrechosplazos que existen en los procesos electorales.

    La Sala Superior del Tribunal Electoral del Poder Judicial de laFederacin ha interpretado este principio de manera amplia, pues alrespecto ha dicho que el artculo 17 de la Constitucin Poltica de losEstados Unidos Mexicanos reconoce el derecho fundamental de todoindividuo a que se le administre justicia por los tribunales que debenestar expeditos para impartirla en los plazos y trminos fijados por lasleyes, mediante la emisin de resoluciones que revistan las caractersti-cas de prontas, completas e imparciales.

    Esta garanta individual constituye un derecho pblico subjetivo, deri-vado de la prohibicin constitucional a la autotutela contenida en el mismoprecepto (Ninguna persona podr hacerse justicia por s misma, ni ejercerviolencia para defender su derecho), para acudir a los tribunales (judicialeso materialmente jurisdiccionales a fin de que stos se pronuncien respectode alguna situacin jurdica o de hecho anmala o contraria al ordenamientoque inhiba, dificulte o impida el ejercicio de algn derecho o su reconoci-miento, mediante el dictado de una resolucin que respete las formalidadesesenciales del procedimiento y se adecue a las leyes vigentes con anteriori-dad al hecho generador de la controversia o de la situacin que motiveincertidumbre respecto de la existencia de un derecho, en consonancia conla diversa garanta reconocida en el artculo 14 constitucional.

    Esta norma constitucional exige que los tribunales, que conocenrespecto de lo solicitado por las partes, estn expeditos para impartirjusticia en los trminos y plazos fijados en las leyes.

    Sin embargo, los tribunales del Poder Judicial de la Federacinhan sostenido de manera uniforme que la reserva de la ley para fijar los

  • 26 Los principios constitucionales de la justicia electoral estatal

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    trminos y plazos para la imparticin de la justicia no permite allegislador cualquier clase de regulacin, sino que las condiciones ymodalidades que establezcan deben ser objetivas, razonables y pro-porcionales para la salvaguarda de algn otro derecho o bien reco-nocido igualmente por la carta magna.

    El acceso expedito a la administracin de justicia se traduce en elimperativo constitucional de que la posibilidad de acceso de los gober-nados a los tribunales sea efectiva y se produzca sin intermediaciones uobstculos indebidos o innecesarios, por lo cual todos y cada uno de lospoderes pblicos deben abstenerse de prever o exigir requisitos o pre-supuestos que inhiban, dificulten o retarden injustificadamente la apti-tud de excitar la actuacin de la jurisdiccin estatal.

    En relacin con la prontitud en el dictado de las resoluciones, seha sostenido que este requisito consiste en la exigencia de que las leyesreguladoras del procedimiento correspondiente prevean plazos gene-rales que sean aplicables a los mismos sujetos que se ubiquen comoparte en un proceso y comunes a los mismos procedimientos, que ta-les plazos comprendan lapsos o perodos prudentes para la realizacinde los actos necesarios por parte de la autoridad y para la adecuadadefensa de las partes, adems de ser objetivos o delimitados explcita-mente en la norma para que no estn a disposicin de la autoridad ni ala voluntad de las partes.3

    3 Es interesante al respecto la tesis P./J. 52/2006, del pleno de la Suprema Corte deJusticia de la Nacin, que dice: INSTANCIAS IMPUGNATIVAS EN MATERIAELECTORAL. EL PLAZO DE UN MES PARA AGOTARLAS QUE ESTABLECE ELARTCULO 25, SEGUNDO PRRAFO, DEL CDIGO ELECTORAL DEL ESTA-DO DE COLIMA, CONTRAVIENE EL ARTCULO 116, FRACCIN IV, INCISOE), DE LA CONSTITUCIN POLTICA DE LOS ESTADOS UNIDOS MEXICA-NOS. El citado precepto legal que, con la finalidad mencionada, establece el plazode un mes contado a partir de la expedicin de la convocatoria a la eleccinextraordinaria de gobernador, contraviene el artculo 116, fraccin IV, inciso e), dela Constitucin Poltica de los Estados Unidos Mexicanos, pues en ese lapso esimposible agotar las impugnaciones que, en su caso, formulen los partidos encontra de los actos preparatorios de esos comicios, ya que aun cuando se ajusta-ran los plazos administrativos previstos en dicha ley, as como los de ndole juris-diccional que establece la Ley Estatal del Sistema de Medios de Impugnacin en

  • 27Pedro Esteban Penagos Lpez

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    Esta garanta de justicia pronta y expedita debe ser plenamenteobservada por los tribunales electorales locales en el ejercicio de susfacultades, pues los retardos injustificados en el dictado de sus resolu-ciones contraviene el principio constitucional de referencia.

    Principio de legalidad

    Este principio es una garanta formal, en tanto pretende asegurarque los ciudadanos, las asociaciones, las agrupaciones y los partidospolticos, as como las autoridades, acten conforme a las leyes.

    En especial, al ejercer sus funciones, las autoridades electoralesestn constreidas a observar las normas preestablecidas por el legisla-dor, eliminando as la arbitrariedad y la emisin de actuaciones capri-chosas, al margen de las disposiciones legales.

    Este principio debe observarse por los juzgadores locales en ma-teria electoral, cuyas funciones estn delimitadas por la legislacin.

    En observancia a dicho principio, las autoridades jurisdiccionaleslocales deben fundar en ley y motivar con hechos todos sus actos, a finde que los ciudadanos, partidos y agrupaciones polticos, as como au-toridades administrativas electorales, conozcan las razones y los pre-ceptos jurdicos en los cuales se funda la sentencia respectiva.

    La infraccin a este deber se puede subsanar a travs de algnmedio de impugnacin de control constitucional en materia electoral,como es el juicio para la proteccin de los derechos poltico-electoralesdel ciudadano o el juicio de revisin constitucional electoral.

    La facultad jurisdiccional de la Sala Superior del Tribunal Electoraldel Poder Judicial de la Federacin, para revisar la constitucionalidad de

    Materia Electoral, conforme a la facultad que su artculo 6o. concede al Pleno delTribunal Electoral del Estado de Colima para acortar los perodos de impugnaciny sustanciacin de los recursos procedentes, el tiempo sera insuficiente para queel Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federacin tramitara y resolviera,oportunamente, las instancias que en su caso se promovieran contra las resolucio-nes de carcter local pronunciadas a propsito de los trabajos preparatorios parala emisin del sufragio respectivo.

  • 28 Los principios constitucionales de la justicia electoral estatal

    La Justicia Constitucional en las Entidades Federativas

    las sentencias dictadas por los tribunales electorales locales, viene a ase-gurar la supremaca de los principios constitucionales en las controver-sias derivadas de los comicios celebrados en las entidades federativas.

    Principio de imparcialidad

    La importancia de este principio consiste en evitar desviaciones opor-tunistas, inclinaciones perjudiciales a alguna de las partes o proclividadpartidista al resolver los juicios.

    A travs de este principio se busca que la actuacin de las autorida-des electorales sea eficaz y creble, aunque no entrar en detalle, pues setrata de una exigencia comn a todos los funcionarios judiciales en elejercicio de sus atribuciones.

    Principio de objetividad

    Las autoridades electorales deben interpretar los hechos por en-cima de visiones y opiniones parciales o unilaterales, mxime si staspueden alterar la expresin o consecuencia del quehacer institucional.La autoridad legislativa, por ejemplo, contribuye al cumplimiento deeste principio, al disear mecanismos electorales que eviten, en lamayor medida posible, conflictos en cualquiera de las etapas del pro-ceso electoral.

    Este principio est ntimamente relacionado con el de legali-dad, y en comunin, imponen la obligacin, a las autoridades judi-ciales electorales locales, de juzgar libres de prejuicios o apreciacionessubjetivas, por lo cual deben ceirse a los hechos probados en juicioy a las normas aplicables al caso.

    La interpretacin constitucional

    Los principios constitucionales influyen decisivamente en laforma en que deben interpretarse las normas jurdicas que regu-lan los comicios locales.

  • 29Pedro Esteban Penagos Lpez

    Memorias de la cuarta mesa redonda

    La Suprema Corte de Justicia de la Nacin y el Tribunal Electoraldel Poder Judicial de la Federacin han establecido que los principios yvalores constitucionales tienen determinados contenidos que debenobservarse al aplicar las leyes electorales.

    Los tribunales locales no estn al margen de esos contenidos, y,por tanto, es recomendable que los magistrados electorales de las enti-dades federativas estn conscientes de los mtodos de interpretacinimplementados por los rganos de control constitucional, por lo cualdeben saber extraer principios y valores constitucionales y aplicarlos almomento de interpretar las normas locales para resolver los asuntosde su competencia.

    Algunos de esos principios son los siguientes:

    El principio in dubio pro libertate o pro homine

    Esta directriz de interpretacin conduce a favorecer a la libertaden caso de duda cuando hay ms de dos interpretaciones posibles deuna norma; debe preferirse aquella que maximice o potencialice la li-bertad reconocida en las leyes.

    Lo anterior supone considerar a la libertad como uno de los valo-res de la mayor importancia en un Estado de derecho, si se tiene encuenta que los principios son las piezas ms importantes del sistemajurdico, puesto que representa el poder en el campo de accin delindividuo, necesario para su desarrollo y autorrealizacin, lo cual re-dunda en beneficio de la sociedad, y co