21
EL TSÁCHILA QUE SE CONVIRTIO EN SOL Cuentan los antiguos en Tásichla, Santo Domingo, que hace muchos, muchos, muchos años, los abuelos de los abuelos podían conversar con los pájaros, en el Cielo donde vivía un enorme tigre de enorme boca, de ojos como los rayos, con garras poderosas y un pelaje muy resplandeciente, pero vivía en la Obscuridad. Un día, el Tigre de la Obscuridad andaba furioso y hambriento y de un solo bocado se comió el Sol y en la Tierra cayeron las tinieblas Los Tsáchilas (Santo Domingo) vivieron así, en esa larga noche. Se tropezaban unos con otros y se la pasaban todos golpeados y adoloridos, así que decidieron encerrarse en sus hogares y no salir. No podían hacer nada que incluso la comida se escaseaba. Más de una ocasión se escuchaba gritos desesperados de los que eran atacados por las fieras de la selva. La luna se hallaba confundida por la desaparición del sol, tampoco salía y eso era más grave porque ya no se podia enamorarse con su luz nocturna. Los pájaros morían y los ríos empezaron a secarse porque confundida la lluvia sin la guía de los astros celestes, tampoco caía. Angustiados los Tsáchilas decidieron hacer su propia luz e intentaron hacer fogatas con ramas y alumbrarse con su fuego, pero fue inutil. Pero ellos, los más débiles morían rapido. Mientras el Tigre de la Oscuridad con sus fauces abiertas se acercaba cada vez más a los atemorizados Tsáchilas para devorarlos uno a uno. Sus pasos se escuchaban muy cerca de sus casas. Viendo el desastre inminente a los sabios ancianos se les ocurrió crear su propio sol. Los Chamanes (brujos) se reunieron y pensaron en convertir a un joven Tsáchila en el poderoso astro. Así pasaron tres días tristes y sombríos. Al cuarto día su sorpresa fue total, apenas si podían abrir los ojos, una luz incandescente los quemaba y era casi imposible de resistir verlo. Ahí estaba el sol de nuevo, reinando en lo más alto, alcanzando con sus rayos a todos los Tsáchilas.

Leyendas

Embed Size (px)

DESCRIPTION

LEYENDAS DE ECUADOR

Citation preview

EL TSCHILA QUE SE CONVIRTIO EN SOL

Cuentan los antiguos en Tsichla, Santo Domingo, que hace muchos, muchos, muchos aos, los abuelos de los abuelos podan conversar con los pjaros, en el Cielo donde viva un enorme tigre de enorme boca, de ojos como los rayos, con garraspoderosasy un pelaje muy resplandeciente, pero viva en la Obscuridad. Un da, el Tigre de la Obscuridad andaba furioso y hambriento y de un solo bocadose comi el Sol y en la Tierra cayeron las tinieblas

LosTschilas(Santo Domingo) vivieron as, en esa larga noche. Se tropezaban unos con otros y se la pasaban todos golpeados y adoloridos, as que decidieron encerrarse en sus hogares y no salir. Nopodan hacer nada que incluso la comida se escaseaba. Ms de una ocasin se escuchaba gritos desesperados de los que eran atacados por las fieras de la selva.La luna se hallaba confundida por la desaparicin del sol, tampoco sala y eso era ms grave porque ya no se podia enamorarse con su luz nocturna. Los pjaros moran y los ros empezaron a secarse porque confundida la lluvia sin la gua de los astros celestes, tampoco caa.

Angustiados losTschilasdecidieron hacer su propia luz e intentaron hacer fogatas con ramas y alumbrarse con su fuego, pero fue inutil. Pero ellos, los ms dbiles moran rapido. Mientras el Tigre de la Oscuridad con sus fauces abiertas se acercaba cada vez ms a los atemorizadosTschilas para devorarlos uno a uno.

Sus pasos se escuchaban muy cerca de sus casas.Viendo el desastre inminente a los sabios ancianos se les ocurri crear su propio sol. Los Chamanes (brujos) se reunieron y pensaron en convertir a un jovenTschilaen el poderoso astro.

As pasaron tres das tristes y sombros. Al cuarto da su sorpresa fue total, apenas si podan abrir los ojos, una luz incandescente los quemaba y era casi imposible de resistir verlo. Ah estaba el sol de nuevo, reinando en lo ms alto, alcanzando con sus rayos a todos losTschilas. Con todo su esplendor, ah estaba de nuevo, pero no lograban soportarlo.Recordaron los ancianos, que el joven tsachila tena dos ojos y que seguramente estaba alumbrando con los dos. Por lo que sera necesario que alumbrara slo con uno. As que lanzando una gran piedra hacia el cielo y lograron su objetivo, pudieron por fin volver a disfrutar de las bondades del rey sol que ahora anda con un solo ojo.

EL INDIO CANTUA

Cantua tena una labor quehabasido asignada por los franciscanos que era construir una Iglesia en Quito. Este acepto y puso como plazo seis meses, a cambio el reciba una gran cantidad de dinero.

Aunqueparecauna hazaa imposible lograr terminarla en seis meses, el Indio Cantua puso su mayor esfuerzo y empeo en terminarla,reuniun equipo deindgenasy se propuso terminarla. Sin embargo laedificacinno avanzaba como l la esperaba. En esos momentos de angustia se present ante l, Lucifer y le dijo: Cantua! Aqu estoy para ayudarte. Conozco tu angustia. Te ayudar a construir el atrio incompleto antes que aparezca el nuevo da. A cambio, me pagars con tu alma.

Cantua acept el trato, solamente pidi una condicin, terminar la construccin lo ms rpido posible y que sean colocadas absolutamente todas las piedras.Cantua se vio desesperado debido a que vio que los diablillos avanzaban muy rpido, tal como lo ofreciera Lucifer, la obra se culmin antes de la media noche, fue entonces el momento indicado para cobrar el alto precio por la construccin, el "alma de Cantua".

El diablo al momento de ir ante Cantua a llevarse su alma, ste lo detuvo con una tmida voz, Un momento! - dijo Cantua. El trato ha sido incumplido! Me ofreciste colocar hasta la ltima piedra de la construccin y no fue as. Falta una piedra. Cantua haba sacado una roca de la construccin y la haba escondido muy sigilosamente antes de que los demonios comenzaran su obra.Lucifer, asombrado, vio como un simple mortal lo haba engaado de la manera ms simple. As Cantua salv su alma, y el diablo sintindose burlado, se refugi en los infiernos sin llevarse su paga.

LA LUTONA

De lo que ms se ha hablado en mi pueblo desde hace tiempo es de un ser fantasmal conocido como La Lutona. Para entonces la ciudad no contaba con el alumbrado elctrico, las calles luego de las diez de la noche presentaban total ausencia de gente, no as los lugares de expendio de licores asediados por trasnochadores bohemios.

Quin era LA LUTONA?, los que la vieron que no fueron pocos dijeron que era una mujer esbelta con batona negra, melena larga, de rostro variable, que sala a sus recorridos despus de las 12 de la noche, hasta las tres de la madrugada. Se dijo una ocasin, que en un baile muy animado una persona invito a bailar a una dama, que no acepto y que se retiraba avergonzado, pero otra dama accedi y danzaron animosamente, que no vio en ella nada raro, sino hasta cuando le dijo, Dnde la dejo?, a lo que ella respondi, hacia all, as lo hizo, luego volvi la mirada al lugar, solo una sombra pareca delatar a la mujer con quien bailo: LA LUTONA.

Otra vez en una noche de absoluta oscuridad aconteci un caso que estremeci a todo un vecindario. En una cantina alumbrada por un mechero, varios ciudadanos libaban, hablaban de todo de machismo y de malas visiones, en eso de las 12 de la noche un sonido srdido se hizo sentir en la puerta de la entrada, Quin? Pregunto el cantinero. Nadie respondi, continuo la charla, nuevamente, la puerta, pero esta vez con mayor fuerza. Carajo, quien jode!, grito el dueo, la puerta se abri, un fuerte viento apago el mechero. Y se hizo la confusin, prendieron el mechero. Y el cantinero y clientes asustados tomaron una decisin, no ms trago, nos veremos maana dijo al despedirlos el cantinero.Los tres amigos era vecinos, se qued uno, los dos avanzaron unos pasos ms, quedo el otro, el ultimo an tena que cubrir unos metros ms, sigui el borrachito blasfemando, caray, que va, yo soy bien macho, miedo , viva yo carajo, repeta de repente sinti que una mano se pos en su hombro, es usted compadre?, sigue , sigue respondi una voz suave, el jumito volvi a preguntar, oye que te pasa, donde me llevas, quien eres t, y levanto la mirada, me conoces?. La Lutona, grita el borrachito, auxilio, auxilio, y cae a la va. Los vecinos escucharon los gritos y salieron a prestarle ayuda, all estaba inconsciente. Este hombre vive en la otra calle a dnde ira?, vamos a dejarlo a su casa y as lo hicieron. Cuando los familiares vieron al recin llegado, con el rostro de la muerte no saban a qu atinar, el hombre comenz a balbucear.LA LUTONA, LA LUTONALos vecinos se retiraron, y al pasar por el rbol de la esquina una sombra pareca esperar..LA LUTONA, merodeaba, ella la amiga inseparable de la noche, que causo ms de un susto a muchos noctmbulos de aquellos tiempos.

EL PADRE ALMEIDA

En esta historia se nos cuenta, la vida de un sacerdote o padre conocido en nuestra localidad, el cual no era precisamente el mejor de todos debido a su mala conducta.

La leyenda cuenta que este padrecito, todas las noches sala a tomar aguardiente (puro), pero para salir de la iglesia l tena que subir y lo hacia apoyndose en un brazo de la estatua de Cristo, pero cierta noche mientras intentaba salir se dio cuenta que la estatua lo regreso a ver y le dijo:Hasta cundo padre Almeida?y este le contesto sarcsticamente "Hasta la vuelta" y se march.

Una vez ya emborrachado, sali de la cantina y se encontraba paseando por las calles de antiguo Quito, hasta que pasaron 6 hombres de alta estatura y completamente vestidos de negro cargando un atad, aunque el padre Almeida pens que era un toro que haba salido de algn corral, con el cual choc y se desplomo, pero al levantarse regreso a ver en el interior del atad, y para su sorpresa era l, el padre Almeida dentro del atad, del asombro huyo del lugar.

Al llegar a la Iglesia se puso a pensar que eso era una seal y que si segua as poda morir de seguro como castigo, entonces desde ese da ya no ha vuelto a tomar y el padre observaba la cara de la estatua de Cristo ms sonriente.

LA CAJA RONCA

En Ibarra se dice de dos grandes amigos, Manuel y Carlos, a los cuales cierto da se les fue encomendado, por don Martn (papa de Carlos), un encargo el cual consista en que llegasen hasta cierto potrero, sacasen agua de la asequia, y regasen la sementera de papas de la familia, la cual estaba a punto de echarse a perder. Ya en la noche, muy noche, se les poda encontrar a los dos caminando entre los oscuros callejones, donde a medida que avanzaban, se escuchaba cada vez ms intensamente el escalofriante "tararn-tararn". Con los nervios de punta, decidieron ocultarse tras la pared de una casa abandonada, desde donde vivieron una escena que cambiara sus vidas para siempre...

Unos cuerpos flotantes encapuchados, con velas largas apagadas, cruzaron el lugar llevando una carroza montada por un ser temible de curvos cuernos, afilados dientes de lobo, y unos ojos de serpiente que inquietaban hasta el alma del ms valiente. Siguiendole, se lo poda ver a un individuo de blanco semblante, casi transparente, que tocaba una especie de tambor, del cual vena el escuchado "tararn-tararn".He aqui el horror, recordando ciertas historias contadas de boca de sus abulitos y abuelitas, reconocieron el tambor que llevaba aquel ser blanquecino, era nada ms ni nada menos que la legendaria caja ronca.

Al ver este objeto tan nombrado por sus abuelos, los dos amigos, muertos de miedo, se desplomaron al instante. Minutos despues, llenos de horror, Carlos y Manuel despertaron, ms la pesadilla no haba llegado a su fin. Llevaban consigo, cogidos de la mano, una vela de aquellas que sostenan los seres encapuchados, solo que no eran simples velas, para que no se olvidasen de aquel sueo de horror, dichas velas eran huesos fros de muerto. Un llanto de desesperacin despert a los pocos vecinos del lugar. En aquel oscuro lugar, encontraron a los dos temblando de pies a cabeza murmurando ciertas palabras inentendibles, las que cesaron despus de que las familias Dominguez y Guanoluisa (los vecinos), hicieron todo intento por calmarlos.

Despus de ciertas discusiones entre dichas familias, los jvenes regresaron a casa de don Martn al que le contaron lo ocurrido. Por supuesto, Martn no les crey ni una palabra, tachndoles as de vagos.Despus del incidente, nunca se volvi a oir el "tararn-tararn" entre las calles de Ibarra, pero la marca de aquella noche de terror, nunca se borrara en Manuel ni en Carlos. Ojala as aprendan a no volver a rondar en la oscuridad a esas horas de la noche.

EL MISTERIO DE LA BOCANA DEL RIO MISAHUALLI. (ORIENTE)

En los albores de la colonizacin del Oriente ecuatoriano, aguas arriba de la bocana del ro Misahuall y en un fresco claro de la selva, se asent con su campamento un hombre de tez blanca, el cual que se dedicaba a la explotacin del rbol de caucho en la cuenca del ro Aguarico.As pasaron los meses y un nuevo colono lleg al lugar acompaado de su hermossima hija, la que inmediatamente caus estragos en el corazn del cauchero. La playa, las aves y las flores, propiciaron el florecimiento del amor, y el romance sonrea en las riveras orientales.Como vivan en plena selva y ante la ausencia de una autoridad que legalizara la relacin de la pareja, sta decidi unir sus cuerpos y sus destinos a la sombra de los frondosos y florecidos rboles de guaba. Pero como el amor no produce para vivir, el cauchero tuvo que viajar una vez ms al Aguarico (otro lugar en el Oriente ecuatoriano) para recoger la balata (fruto del de la planta de caucho) recolectada por sus trabajadores y llevarla a los mercados de Iquitos.La bella chica con el recuerdo de su amado en la hermosa sonrisa de sus labios, recorra la extensa playa solitaria cuando la baaba el suave sol de la maana, era sta una costumbre que le haba impuesto el amor. Ms el tiempo pasaba inmisericorde y al final de su paso el cauchero jams volvi.La bellsima mujer presa de una indescriptible pena, desapareci un aciago da como si se la hubiera tragado la tierra. Sus familiares y amigos la buscaron afanosamente por doquier, pero todo fue en vano; las lgrimas y el tiempo, fueron borrando el dolor de su ausencia.Los aos pasaron dndole espacio a la historia y una maana brumosa y fra, unos indgenas que pescaban por el sector, vieron a una hermossima mujer parada en la piedra grande de la margen izquierda del ro; se acercaron a ella y cuando le preguntaron donde viva solo seal el agua, y lanzndose al torrente sin salpicar una gota ni producir una onda en la superficie se sumergi.Los ancianos al escuchar lo ocurrido, aseguraron que la dama era el espritu de aquella mujer que desapareci sin dejar rastros.En esa enorme piedra rojiza de estructura volcnica asentada en el recodo del ro Misahuall, se escucha con frecuencia en las maanas, una dulce voz de mujer que canta a su amor perdido. Algunas veces ella se aparece a los que pescan en el ro, pero quien acude al lugar con intencin expresa de encontrarse con ella, nunca logran su objetivo.

LA BOA Y EL TIGRE. (ORIENTE)

Por el camino que lleva a Misahuall, a 6 Km. de Puerto Napo, en la comunidad de Latas viva una familia indgena dedicada a lavar oro en las orillas del ro Napo. Un da la madre lavaba ropa de la familia, mientras la hija ms pequea jugaba tranquilamente en la playa: tan concentrada estaba la seora en su duro trabajo, que no se percat que la nia se acercaba peligrosamente al agua, justo en el lugar donde el ro era ms profundo. Una sbita corazonada la oblig a levantar su cabeza, pero ya era demasiado tarde; la nia era arrastrada por la fuerte correntada y slo su cabecita apareca por momentos en las crestas de las agitadas aguas.La mujer transida de dolor y desesperacin, hincando sus rodillas en la arena implora a gritos... yaya Dios! .... yaya Dios! Te lo suplico salva a mi guagua, y Oh! sorpresa, la tierna nia retorna en la boca de una inmensa boa de casi 14 metros de largo, que la deposita sana y salva en la mismsima playa; la mujer abrazando a la nia llora y sonre agradecida. Desde aquel da la enorme boa se convirti en un miembro ms de la familia, a tal punto que cuando el matrimonio sala al trabajo cotidiano, el gigantesco reptil se encargaba del cuidado de los nios.

Pero un tormentoso da, cuando los padres fueron a la selva en busca de guatusas para la cena, la boa no lleg a vigilar a los nios como sola hacerlo todos los das. Este descuido fue aprovechado por un inmenso y hambriento tigre, que se hizo presente con intenciones malignas.

Los muchachos desesperados gritaron a todo pulmn !yacuman amarul! (boa del agua), el gigantesco reptil al or las voces de los nios sali del ro y deslizndose velozmente entr a la casa; se coloc junto a la puerta, para recibir al tigre que trataba de entrar sigilosamente en el hogar de sus amigos; la lucha que se desat fue a muerte; la boa se enrosc en el cuerpo de felino, pese a las dentelladas del sanguinario animal; los anillos constrictores del reptil se cerraron con fuerza, mientras el tigre la morda justo en la parte de la cabeza, al final se escuch un crujido de huesos rotos y ambos animales quedaron muertos en la entrada de la casa.Cuando regresaron los padres de los chicos, recogieron con dolor los restos de su boa amiga y ceremoniosamente la velaron durante dos das, para luego enterrarla con todos los honores y ritos que se acostumbraban utilizar para con los seres queridos.

LA DIOSA UMIA (ORIENTE)

Los Mantas fueron politestas. Cieza de Len atestigua una gran religiosidad. Hacan sacrificios humanos y quemaban incienso en sus templos. Tenan una diosa con poderes curativos, era una esmeralda del tamao de un huevo de avestruz a la que llamaban "Umia".

La Diosa Umia era dolo era una piedra de fina esmeralda, cuyo valor poda exceder a todos los tesoros juntos de muchos templos. Su adoracin se la realizaba en el templo construido en la isla de La Plata, hasta donde llegaban enfermos de todas partes. Luego que el gran sacerdote reciba la ofrenda (oro, plata y piedras preciosas) haca sus deprecaciones postrado en tierra, y despus de tomar con un pao blanco y limpio a la Umia, frotaba con el mismo pao la cabeza del enfermo. Muchos enfermos sanaron.

Tanta fama alcanz en la poca prehispnica que incluso desde Centroamrica llegaban enfermos en busaca de sanacin.

Pero con la llegada de los espaoles, que siempre buscaron la piedra para robarla, los indios la escondieron de manera que ese tesoro no se lo ha podido encontrar.

EL FAROL DE LA VIUDA (CUENCA)

La fmina viuda, realizaba, por decirlos as, una hazaa heroica, pues tena que vrselas, muchas veces, con riesgos donde poda hasta perder la vida, o por lo menos su farol, que era su escudo y su alfanje porque en ms de una ocasin tena que habrselas con los canes de los llanos de taita chabaco, ya que sus muecas adquiran rasgos caricaturales y jocosos, cuando a veces a la luz de la luna, la noche era alumbrada por sus amarillentos rayos que dejaba ver el rostro de la herona viuda, su faz demacrada. Y cuando ella apareci al tablado de sus andanzas, era una poca de transicin, entre la imaginacin primitiva, esto es, cuando la lgica no haba empezado a trabajar, y la poca en que ya entraba, o sea en la investigacin histrica y social, entr tambin la era de investigar y an crear leyendas propiamente dichas, de carcter histrico-literario. La viuda alegra, cuya compaa y hasta cierto punto custodia, era el farol que se adelantaba a ella iluminndole el camino fragoso por el que transitaba, hasta entrar en su aposento, que decan estaba ubicado en el barrio de el Vado.

LA DAMA TAPADASe dice que la Dama Tapada, es un ser de origen desconocido que se apareca en horas cercanas a la medianoche a las personas que frecuentaban callejones no muy concurridos. Segn lashistoriasrelatadas por muchas personas acerca de estos acontecimientos, una extraa joven se les apareca, vistiendo un elegante vestido de la poca, con sombrilla, pero algo muy particular en ella era que llevaba su rostro tapado con un velo, el cual no permita que las vctimas la reconocieran.Al estar cerca de la Dama, se dice que despeda a su entorno una fragancia agradable, y por ello, casi todos los que la vean quedaban impactados al verla y estar cerca de ella. Haca seales para que la siguiesen y, en trance, las vctimas accedan a la causa pero ella no permita que se les acercara lo suficiente. As, los alejaba del centro urbano y en lugares remotos empezaba a detenerse. Posteriormente cuando las vctimas se le acercaban a descubrirle el rostro un olor nauseabundo contaminaba el ambiente, y al ver su rostro apreciaban un cadver an en proceso de putrefaccin, la cual tena unos ojos que parecan destellantes bolas de fuego.La mayora de las vctimas moran, algunos por el susto y otros por la pestilente fragancia que emanaba el espectro al transformarse. Muy pocos sobrevivan y en la cultura popular los llamaban tunantes.Desde aquellos acontecimientos, hay quienes dicen que posteriormente aun transita por los callejones por las noches.

EL HUACAY SIQUILa referencia de este ser zoomorfo proveniente del norte de la provincia de Pichincha.Segn cuenta la historia, el huacay sinqui es un joven que tena una madre muy enferma. En la cuidaba todas las noches, sin embargo una de esas noches se retir de la compaa de su madre para comprar remedios, pero en el camino se top con una muchacha de quien estaba enamorado, que precisamente lo invito a un baile, l erradamente acept olvidando completamente a su moribunda madre, entonces durante la fiesta se le acercaron para avisarle que su madre haba fallecido, a lo que l respondi casi sin importancia "ya habr tiempo de llorar". As entonces como Tupa, el dios supremo, se enoj tanto con l, luego de ver su poco valor sentimental hacia su madre lo castigo convirtindole en un ave que llora durante las noches.Los campesinos mestizos e indgenas lo describen como un ave que sale de las quebradas a las seis de la tarde y emite un canto lgubre parecido al llanto humano. En sus recorridos ataca a las personas ocasionndoles accidentes, y cuando encuentra a su paso prendas y paales de nios que estn secndose fuera de las casas, los mira y los nios se vuelven llorones, segn dicen.Por esta razn se toman precauciones para que estas prendas no queden afuera de las casas despus de dicha hora. Adems se rumorea que el Chiflon es tan pequeito que especialmente cuando hace fro se vuelve presente, para poseer el cuerpo de aquel hombre o aquella mujer que sienta fro extremo para hacerle una que otra bromita. Por eso en Pichincha, por lo general es muy comn escuchar decir a las abuelitas recomendaciones como "abrigate bien hijito, para que no te agarre el Chiflon".

ACCIDENTE EN UN ABISMOEn un lugar de la Sierra Ecuatoriana donde la carretera circula entre montaas y grandes abismos, un matrimonio con su hijo avanzaban con cautela en el coche. Era una noche con mucha niebla y el viaje era muy peligroso.Regresaban de un viaje en la montaa y se dirigan a su casa por una carretera, poco transitada. De pronto se les apareci una mujer en medio de la carretera con el cuello y la ropa llenos de sangre gritando para que parasen. La familia par y el marido se baj del coche. Entonces habl con la mujer que, muy alterada y llorando, le dijo que haban tenido un accidente y que se haban cado con el coche por el barranco. La mujer le rog que la ayudara, que tena un beb y se haba quedado atrapado entre los hierros del coche, que bajara y lo sacara de all.El hombre cogi su equipo de montaa y se puso a bajar por el barranco. Al rato subi muy nervioso con el beb en brazos y le pregunt a su esposa dnde estaba la mujer. Esta le respondi que se haba sentado en una piedra grande que haba all en la carretera, pero cuando miraron ya no estaba. Entonces el hombre se meti rpidamente en el coche con el beb y le dijo a su mujer que hiciera lo mismo. Arranc el coche y se fueron. Su mujer, muy enfadada, le pregunt que por qu se iba con el beb, que por qu no haban buscado a la mujer, el marido le dijo que se tranquilizara y que cuando llegaran a su casa le contara.Cuando llegaron, la mujer le pidi explicaciones a su marido. Este le contest que cuando baj y cogi al beb vio a la mujer muerta, el accidente haba sido brutal y su cuerpo estaba cubierto de sangre y el cinturn de seguridad enredado a su cuello.El espritu de la mujer era el que le haba pedido ayuda para que salvaran a su hijo.

MAMA GUADAEn esta Cuenca maravillosa, afortunada por su entorno y su gente, viva una mujer, propietaria de una cantina apartada, a quin llamaban Mama Guada. Sin duda representa nuestro motivo de orgullo y complacencia, debido a que de acuerdo a lo que cuentan nuestros abuelos, fue la nica persona que ha existido en este mundo que pudo engaar al diablo.Ante la incredulidad de las personas y segn la leyenda, el diablo siempre est detrs de cada persona. A nuestras espaldas, acechndonos, astuto y rpido para esconderse y desaparecer, cuando nos damos la vuelta; burlndose de esta manera de cada mortal.Este personaje siniestro, por doquier acuda a este mundo, para llevarse las almas de los pecadores.Mama Guada, que sospechaba de las habilidades del diablo y que conoca sus intenciones, un da se dio cuenta que el mismo se encontraba cerca de su cantina; en bsqueda del alma perdida de un hombre que ya beba aguardiente algunos das y que haba abandonado su casa.La mujer esper el momento oportuno y para sorpresa del diablo, sali de su escondite, sin darle tiempo a que reaccione.El diablo exhausto y asustado, interrog a la mujer, que cmo se llamaba?, que quin era?, contestando la misma Mam Guada!No poda salirse del asombro!, nadie antes haba conseguido engaarle y descubrirle.Mam Guada no contenta, aprovech la oportunidad para reprocharle, humillarle y hacerle ver lo mal que se haba portado y las maldades que cometa, para que reflexionara.El diablo agach la cabeza, se sent en una silleta, avergonzado y cabizbajo, estaba sudando y enrojecido. Se cubri el rostro con las manos, casi lloraba, hasta que implor para que Mam Guada, callara en sus acusaciones.Mam Guada, hbilmente le hizo prometer al diablo que desde ese instante tendra que ser ms benevolente, un poco ms comprensivo y que slo as poda irse y regresar al infierno con un poco de calma El diablo apenas pudo, sali a carreras.Desde ese entonces, cuentan que el diablo es menos malo y que no se le ha vuelto a ver ms rondando por las inmediaciones del pueblo.

LA LLORONAEn las altas horas de la noche, cuando todo parece dormido y slo se escuchan los gritos rudos con que los boyeros avivan la marcha lenta de sus animales, dicen los campesinos que all, por el ro, alejndose y acercndose con intervalos, detenindose en los frescos remansos que sirven de aguada a los bueyes y caballos de las cercanas, una voz lastimera llama la atencin de los viajeros.Es una voz de mujer que solloza, que vaga por las mrgenes del ro buscando algo, algo que ha perdido y que no hallar jams. Atemoriza a los chicuelos que han odo, contada por los labios marchitos de la abuela, la historia enternecedora de aquella mujer que vive en los potreros, interrumpiendo el silencio de la noche con su gemido eterno.Era una pobre campesina cuya adolescencia se haba deslizado en medio de la tranquilidad escuchando con agrado los pajarillos que se columpiaban alegres en las ramas de los higuerones. Abandonaba su lecho cuando el canto del gallo anunciaba la aurora, y se diriga hacia el ro a traer agua con sus tinajas de barro, despertando, al pasar, a las vacas que descansaban en el camino.Era feliz amando la naturaleza; pero una vez que lleg a la hacienda de la familia del patrn en la poca de verano, la hermosa campesina pudo observar el lujo y la coquetera de las seoritas que venan de San Jos. Hizo la comparacin entre los encantos de aquellas mujeres y los suyos; vio que su cuerpo era tan cimbreante como el de ellas, que posean una bonita cara, una sonrisa trastornadora, y se dedic a imitaras.Como era hacendosa, la patrona la tom a su servicio y la trajo a la capital donde, al poco tiempo, fue corrompida por sus compaeras y los grandes vicios que se tienen en las capitales, y el grado de libertinaje en el que son absorbidas por las metrpolis. Fue seducida por un jovencito de esos que en los salones se dan tono con su cultura y que, con frecuencia, amanecen completamente ebrios en las casas de tolerancia. Cuando sinti que iba a ser madre, se retir de la capital y volvi a la casa paterna. A escondidas de su familia dio a luz a una preciosa niita que arroj enseguida al sitio en donde el ro era mas profundo, en un momento de incapacidad y temor a enfrentar a un padre o una sociedad que actu de esa forma. Despus se volvi loca y, segn los campesinos, el arrepentimiento la hace vagar ahora por las orillas de los riachuelos buscando siempre el cadver de su hija que no volver a encontrar.Esta triste leyenda que, da a da la vemos con ms frecuencia que ayer, debido al crecimiento de la sociedad, de que ya no son los ros, sino las letrinas y tanques spticos donde el respeto por la vida ha pasado a otro plano, nos lleva a pensar que estamos obligados a educar ms a nuestros hijos e hijas, para evitar lamentarnos y ser ms consecuentes con lo que nos rodea. De entonces ac, oye el viajero a la orilla de los ros, cuando en callada noche atraviesa el bosque, aves quejumbrosos, desgarradores y terribles que paralizan la sangre. Es la Llorona que busca a su hijaLA VIUDA DEL TAMARINDO GUAYAQUILEra un tamarindo antiguo que exista donde era la quinta Pareja. La quinta Pareja quedaba donde es ahora la Clnica Guayaquil. Las calles exactamente creo que son: Toms Martnez y General Crdova, en esa rea. En esa poca era una finca. No era una quinta. Se llamaba quinta y era un lugar abandonado y los tunantes, o sea las personas que andaban tras del trago, iban solos, y en camino a casa, miraban una mujer vestida de negro que pareca muy bella. En ese tiempo no haba pues mayor alumbrado. Entonces el tunante, pues, ste que estaba, segua no? segua, persegua a la viuda sta, a la aparicin sta, y sta lo llevaba siempre a un tamarindo aoso lo llevaba all. Cuando l iba pues, cuando l llegaba ya casi al pie del tamarindo y luego se volteaba y la viuda haba sido una calavera de la muerte! Una calavera, de decir: tremenda! El tunante caa echando espuma por la boca.