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8/19/2019 Marxismo y Cristianismo - Girardi http://slidepdf.com/reader/full/marxismo-y-cristianismo-girardi 1/20 Marxismo y cristianismo Giulio Girardi INTRODUCCIÓN: CONTRADICCIONES Y CONVERGENCIAS En la muchedumbre de previsiones que por parte de periodistas, políticos, intelectuales, etc. se formularon sobre la visita del Papa a Cuba, dos puntos de vista merecían, a mi juicio, particular atencin! el que anunciaba un nuevo episodio de la "uerra fría, parecido al de Polonia o de #icara"ua$ y el que esperaba ver en la visita del Papa a Cuba la expresin de un viraje pastoral y político, marcado por el fin de la "uerra fría, por el nuevo orden mundial unipolar y por un nuevo clima de di%lo"o y colaboracin entre la i"lesia catlica y la revolucin. Estas dos opuestas previsiones anunciaban dos tipos de relaciones entre el marxismo y el cristianismo en el umbral del tercer milenio. &os hechos fueron al mismo tiempo, el desmentido y la verificacin de ambas previsiones y de las hiptesis interpretativas que las sustentaban. Porque en un an%lisis adecuado del acontecimiento, fue necesario distin"uir netamente dos niveles! por un lado, el encuentro entre el Papa y el pueblo cubano con su car"a emotiva$ por el otro, los contenidos intelectuales, políticos y teol"icos, de los discursos papales. 'n encuentro ale"re, cordial, afectuoso, que se había convertido en una "ran fiesta popular$ y un conjunto de planteamientos fuertemente pol(micos. )idel Castro se refiri implícitamente a estos dos aspectos de la visita papal, cuando, concluyendo su mensaje de despedida, dijo! «Por el honor de su visita, por todas sus expresiones de afecto a los cubanos, por todas sus palabras, aún aquellas con las cuales pueda estar en desacuerdo, en nombre de todo el pueblo de Cuba, Santidad, le doy las gracias» . &a interpretacin de los hechos que quiero proponer intenta justamente articular los dos aspectos de la visita. Esta distincin de niveles permite adem%s percibir las diferencias y las semejan*as con la visita del Papa a #icara"ua y Centroam(rica. &a principal diferencia es que en #icara"ua esa distincin no se verific! a la condena política y teol"ica de la revolucin, le correspondi un tono decididamente a"resivo y un rostro constantemente enojado. Por lo tanto, la visita se caracteri*, al interior del país y a nivel internacional, como una confrontacin entre el Papa y la +evolucin andinista$ y la i"lesia catlica local hi*o de esa confrontacin un arma de su propia "uerra fría, tanto a nivel nacional como internacional, en contra de la revolucin. En cambio, en cuanto al contenido pol(mico de los discursos, hubo una continuidad fundamental entre las dos visitas, aunque en Centroam(rica la condena de la revolucin tuvo como blanco directo la i"lesia popular y la teolo"ía de la liberacin. Entonces los que como García M%rque*, habían previsto que se verificaría en Cuba un «choque de trenes» fueron desmentidos por el clima "eneral, amistoso y sereno, de la visita$ pero vieron sus previsiones confirmadas por el contenido de los discursos papales. &os que habían anunciando el inicio de una nueva fase de relaciones vieron sus previsiones confirmadas por el clima de la visita y al mismo tiempo desmentidas por el mensaje doctrinal del Papa. Por cierto, durante la visita, la atmsfera del país se caracteri* especialmente por su aspecto ale"re y festivo, qui*%s tambi(n porque la mayoría de la poblacin no percibía el alcance pol(mico de los discursos papales, pronunciados siempre con un tono pacato y con un len"uaje abstracto. &a "ente, pudimos constatar, qued impresionada sobre todo por esa fi"ura carism%tica, por esa persona anciana y enferma, pero al mismo tiempo viva* y comunicativa, que se había expuesto a un viaje lar"o y cansador para encontrar al pueblo de Cuba. El sentimiento prevaleciente con respecto al Papa fue de viva simpatía. lo para una minoría esta simpatía estaba asociada a un cuestionamiento de la revolucin. Por supuesto, había favorecido el sentimiento de simpatía tambi(n, la conviccin de que el Papa condenaría el bloqueo norteamericano, cosa que (l hi*o en su -ltimo discurso, con t(rminos inequívocos. Por lo tanto al final de la visita, la impresin dominante era que realmente en la actitud del Papa se había producido un cambio si"nificativo y que este encuentro no se podría considerar como un episodio de la "uerra fría. in embar"o parecía difícil, sobre la base de los discursos del Papa, vincular este nuevo clima a una evolucin doctrinal y a una nueva evaluacin de la revolucin marxista. l contrario, se podía prever que a lar"o pla*o los discursos pol(micos papales adquirirían un relieve prevaleciente! la i"lesia local los valoraría, aprovech%ndolos como bases de su catequesis y de su lucha por

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Marxismo y cristianismo

Giulio Girardi

INTRODUCCIÓN: CONTRADICCIONES Y CONVERGENCIAS

En la muchedumbre de previsiones que por parte de periodistas, políticos, intelectuales, etc. se formularon

sobre la visita del Papa a Cuba, dos puntos de vista merecían, a mi juicio, particular atencin! el queanunciaba un nuevo episodio de la "uerra fría, parecido al de Polonia o de #icara"ua$ y el que esperaba veren la visita del Papa a Cuba la expresin de un viraje pastoral y político, marcado por el fin de la "uerra fría,por el nuevo orden mundial unipolar y por un nuevo clima de di%lo"o y colaboracin entre la i"lesia catlicay la revolucin. Estas dos opuestas previsiones anunciaban dos tipos de relaciones entre el marxismo y elcristianismo en el umbral del tercer milenio.

&os hechos fueron al mismo tiempo, el desmentido y la verificacin de ambas previsiones y de las hiptesisinterpretativas que las sustentaban. Porque en un an%lisis adecuado del acontecimiento, fue necesariodistin"uir netamente dos niveles! por un lado, el encuentro entre el Papa y el pueblo cubano con su car"aemotiva$ por el otro, los contenidos intelectuales, políticos y teol"icos, de los discursos papales. 'nencuentro ale"re, cordial, afectuoso, que se había convertido en una "ran fiesta popular$ y un conjunto deplanteamientos fuertemente pol(micos. )idel Castro se refiri implícitamente a estos dos aspectos de lavisita papal, cuando, concluyendo su mensaje de despedida, dijo! «Por el honor de su visita, por todas susexpresiones de afecto a los cubanos, por todas sus palabras, aún aquellas con las cuales pueda estar endesacuerdo, en nombre de todo el pueblo de Cuba, Santidad, le doy las gracias». &a interpretacin de loshechos que quiero proponer intenta justamente articular los dos aspectos de la visita.

Esta distincin de niveles permite adem%s percibir las diferencias y las semejan*as con la visita del Papa a#icara"ua y Centroam(rica. &a principal diferencia es que en #icara"ua esa distincin no se verific! a lacondena política y teol"ica de la revolucin, le correspondi un tono decididamente a"resivo y un rostroconstantemente enojado. Por lo tanto, la visita se caracteri*, al interior del país y a nivel internacional,como una confrontacin entre el Papa y la +evolucin andinista$ y la i"lesia catlica local hi*o de esa

confrontacin un arma de su propia "uerra fría, tanto a nivel nacional como internacional, en contra de larevolucin. En cambio, en cuanto al contenido pol(mico de los discursos, hubo una continuidadfundamental entre las dos visitas, aunque en Centroam(rica la condena de la revolucin tuvo como blancodirecto la i"lesia popular y la teolo"ía de la liberacin.

Entonces los que como García M%rque*, habían previsto que se verificaría en Cuba un «choque de trenes»fueron desmentidos por el clima "eneral, amistoso y sereno, de la visita$ pero vieron sus previsionesconfirmadas por el contenido de los discursos papales. &os que habían anunciando el inicio de una nuevafase de relaciones vieron sus previsiones confirmadas por el clima de la visita y al mismo tiempodesmentidas por el mensaje doctrinal del Papa.

Por cierto, durante la visita, la atmsfera del país se caracteri* especialmente por su aspecto ale"re y

festivo, qui*%s tambi(n porque la mayoría de la poblacin no percibía el alcance pol(mico de los discursospapales, pronunciados siempre con un tono pacato y con un len"uaje abstracto. &a "ente, pudimosconstatar, qued impresionada sobre todo por esa fi"ura carism%tica, por esa persona anciana y enferma,pero al mismo tiempo viva* y comunicativa, que se había expuesto a un viaje lar"o y cansador paraencontrar al pueblo de Cuba. El sentimiento prevaleciente con respecto al Papa fue de viva simpatía. lopara una minoría esta simpatía estaba asociada a un cuestionamiento de la revolucin. Por supuesto, habíafavorecido el sentimiento de simpatía tambi(n, la conviccin de que el Papa condenaría el bloqueonorteamericano, cosa que (l hi*o en su -ltimo discurso, con t(rminos inequívocos.

Por lo tanto al final de la visita, la impresin dominante era que realmente en la actitud del Papa se habíaproducido un cambio si"nificativo y que este encuentro no se podría considerar como un episodio de la"uerra fría. in embar"o parecía difícil, sobre la base de los discursos del Papa, vincular este nuevo clima a

una evolucin doctrinal y a una nueva evaluacin de la revolucin marxista.

l contrario, se podía prever que a lar"o pla*o los discursos pol(micos papales adquirirían un relieveprevaleciente! la i"lesia local los valoraría, aprovech%ndolos como bases de su catequesis y de su lucha por

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la he"emonía. Esta previsin pareci confirmada por la declaracin que el Papa, una ve* re"resado a +oma,hi*o el /0 de Enero, hablando a un "rupo de pere"rinos polacos! «Mi peregrinacin a Cuba me hac!a pensar en mi primera peregrinacin a Polonia en "#$#% &es deseo a nuestros hermanos y hermanas que viven enaquella bella isla que esta peregrinacin produ'ca frutos parecidos»  . 1 L’Osservatore Romano, /2 de Enerode 32204

5ue el derrumbe del comunismo fuera el objetivo a lar"o pla*o de su visita a Cuba, como de todo su

pontificado, era evidente desde un principio para los que conocemos su pensamiento. Pero con esadeclaracin, el Papa revelaba adem%s sus objetivos a mediano pla*o, brindando una nueva clave de lecturatanto de la visita en su conjunto como de cada uno de sus discursos. Para (l no se trataba solamente defortalecer la i"lesia local, sino de contribuir directamente a la 6evolucin7 del r("imen! por supuesto 8sinmeterse en política9 sí, la declaracin romana nos permitía entender mejor el si"nificado de la6esperan*a7 a la que hacía referencia la i"lesia al anunciar la lle"ada del Papa como «mensa(ero de verdad y esperan'a».

El inter(s de un an%lisis m%s profundo del conflicto político cultural que ha marcado la visita papal procede justamente de la importancia que muy probablemente (l tendr% en la propia Cuba en la lucha ideol"ica delos prximos meses y a:os! por las iniciativas pastorales de la i"lesia catlica y tambi(n por los interro"antesque la visita ha abierto en la sicolo"ía de muchos cubanos, creyentes y no creyentes. Pero procede tambi(n,a mi juicio, de la importancia que, a nivel universal, en la transicin al tercer milenio, asume este conflictoentre dos culturas y dos proyectos de sociedad, que han marcado el si"lo ;; y que pretenden orientar elsi"lo ;;<.

in embar"o, la profundidad de la contradiccin no puede hacer olvidar la autenticidad de las conver"enciasentre la cultura de la revolucin y aspectos si"nificativos del ma"isterio pontificio, especialmente las nuevasacentuaciones que lo marcaron despu(s del derrumbe del comunismo europeo y frente al nuevo ordenmundial unipolar! conver"encias que )idel supo descubrir, valorar y presentar al pueblo, dando así un nuevopaso en la profundi*acin de las relaciones entre la revolucin cubana y el cristianismo.

=e aquí la necesidad, en el an%lisis de la visita papal, de valorar al mismo tiempo la contradiccin, lasconver"encias y la articulacin dial(ctica entre estos dos aspectos. <ntentaremos hacerlo, abordando los

puntos si"uientes! 34 Clave de lectura del conflicto político>cultural! dos opuestas evaluaciones de laconquista>evan"eli*acin. /4&a +evolucin Cubana frente a la i"lesia catlica! contradiccin y conver"encias.?4 &a teolo"ía de la cristiandad frente a la revolucin socialista.

 

I- CLAVE DE LECTURA DEL CONFLICTO: DOS OPUESTAS EVALUACIONES DE LA CONUISTA-EVANGELI!ACIÓN

&a contradiccin entre las dos culturas que )idel Castro y @uan Pablo << representaban, estall desde elprimer momento de la visita, en los discursos con los cuales ellos abrieron su histrico encuentro. &ohicieron formulando dos juicios radicalmente opuestos sobre la conquista>evan"eli*acin.

 

E" #$nto %e #art&%a %e F&%e" Castro: "a 'on($&sta) e*term&n&o + es'"av&,a'&n.

)idel Castro empe* diciendo! 6&a tierra que usted acaba de besar se honra con su presencia. #oencontrar% aquí aquellos pacíficos y bondadosos habitantes naturales que la poblaban cuando los primeroseuropeos lle"aron a esta isla. &os hombres fueron exterminados casi todos por la explotacin y el trabajoesclavo que no pudieron resistir$ las mujeres convertidas en objeto de placer o esclavas dom(sticas. Aubotambi(n los que murieron bajo el filo de espadas homicidas o víctimas de enfermedades desconocidas queimportaron los conquistadores...

6&a conquista y coloni*acin de todo el hemisferio se estima que cost la vida de B millones de indios y laesclavi*acin de 3/ millones de africanos. )ue mucha la san"re derramada y muchas las injusticiascometidas, "ran parte de las cuales, bajo otras formas de dominacin y explotacin, despu(s de si"los desacrificios y de luchas a-n perduran.7

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sí )idel, asumiendo el punto de vista de los indí"enas y africanos rebeldes, denunciaba la conquista y lacoloni*acin no slo en sí mismas, sino como el crimen fundador de la modernidad. Evidenciaba pues noslo la atrocidad del "enocidio sino su prolon"acin en la historia de Cuba, cuando los colonialistasintentaron aho"ar en san"re los anhelos de independencia del pueblo. Evidenciaba sobre todo lacontinuidad entre el presente y aquel pasado criminal! 6Aoy, antidad, de nuevo se intenta el "enocidio,pretendiendo rendir por hambre, enfermedad y asfixia econmica total a un pueblo que se nie"a a

someterse a los dictados y al imperio de la m%s poderosa potencia econmica, política y militar de lahistoria.7

i por un lado, en la perspectiva de )idel, las formas actuales de opresin prolon"an las de la conquista, porel otro el sur"imiento de la nacin cubana, su lucha por la independencia y por la soberanía representan unesfuer*o heroico para romper con la l"ica de la conquista e instaurar una l"ica alternativa. El proceso deliberacin del pueblo cubano se convierte así en el criterio fundamental de interpretacin y evaluacin de lahistoria.

Con($&sta + evan/e"&,a'&n

D, cmo eval-a el Comandante, a la lu* de este criterio, el papel del cristianismo en la historiaF Eraimportante, para que la relacin con el Papa se desarrollara en un clima de sinceridad, que esta pre"untarecibiera una respuesta clara. El Comandante, evitando refu"iarse en el len"uaje diplom%tico, no se sustraea esta exi"encia, y formula desde el primer momento, su visin dial(ctica del cristianismo. =ejando a unlado los esquemas interpretativos del marxismo do"m%tico que nunca había compartido, sobre la reli"incomo «opio del pueblo», (l percibe al interior del cristianismo dos polos antit(ticos, el que se identifica conlos poderes opresores y el que asume la causa de la liberacin de los pueblos. Percibe la encarnacin delprimer modelo en los cole"ios catlicos, que (l mismo ha conocido en su juventud, marcados por laintolerancia reli"iosa y el racismo! 6Me ense:aban entonces que ser protestante, judío, musulm%n, hind-,animista o partícipe de otra creencia reli"iosa, constituía una horrible falta, di"na de severo e implacablecasti"o. M%s de una ve* incluso, en al"una de aquellas escuelas para ricos y privile"iados entre los que yome encontraba, se me ocurri pre"untar por qu( no había allí ni:os ne"ros, sin que haya podido todavía

olvidar las respuestas nada persuasivas que recibía.7

)idel descubre las huellas del se"undo modelo de cristianismo en los 6testimonios des"arradores7 deal"unos sacerdotes que denunciaron los crímenes de los conquistadores 1en el discurso a la samblea#acional del Poder Popular cita explícitamente a artolom( de las Casas, defensor de los indios4, y valorasus desarrollos recientes en las aperturas del concilio Haticano << y en las preocupaciones sociales del propio@uan Pablo <<.

En su comparecencia televisiva del / de febrero, el Comandante siente la necesidad de profundi*ar estetema, para contestar al"una protesta, procedente especialmente de Espa:a. clara en primer lu"ar quedenunciar los crímines de los conquistadores, no si"nifica ne"ar los aportes de los espa:oles a laconstitucin de la nacin cubana, a su cultura, len"ua, ciencia, arte, le"islacin, reli"in etc. Iampoco

si"nifica olvidar que miles de espa:oles lucharon por la liberacin de Cuba.

Pero la aclaracin fundamental es la distincin entre condena del pueblo espa:ol y condena del sistema!«)osostros no culpamos a los espa*oles de aquella +poca siquiera a los de ahora, mucho menos% Culpamosy acusamos al sistema colonial culpamos y acusamos al sistema esclavista, del crimen horroroso dearrancar a millones de africanos y convertirlos aqu! en esclavos el renacer de la esclavitud, despu+s de laedad media, donde prevaleci la servidumbre del feudalismo, no la esclavitud el renacer de la esclavitud en-ccidente% Culpamos a sistemas, no culpamos a los pueblos denunciamos los cr!menes de las conquistas% .sun deber moral insoslayable%» 

Jtra aclaracin importante es que al hablar de conquistadores y coloni*adores, no nos referimos slo a losespa:oles sino a diversas potencias europeas y a los Estados 'nidos! 6caso estoy acusando a los

espa:oles o a Espa:a o al colonialismo espa:ol o a la conquista espa:ola de la muerte de estos B millonesde indios y de la esclavi*acin de estos 3/ millones de africanosF #o. Do hablo de todo el hemisferio, y en laconquista y coloni*acin de todo el hemisferio participaron diversas potencias europeas, en el #orte, en el

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Caribe, en el ur$ incluso el exterminio de los indios fue m%s cruel todavía en Estados 'nidos, donde fueronpr%cticamente exterminados por medio de las armas en un proceso de expansin y de conquista. Es decir,no estoy aludiendo a Espa:a, estoy hablando de lo que ocurri en todo el hemisferio con la participacin devarias potencias europeas.7

'n aspecto del tema, particularmente importante en el contexto de la visita papal, es el que se refiere a laevan"eli*acin. l respecto, el enfoque de )idel no es una ve* m%s monolítico, sino dial(ctico. Es decir que

no reconstruye la historia en blanco y ne"ro, sino evidenciando los aspectos positivos y los ne"ativos delproceso! aunque su identificacin con los pueblos oprimidos, indí"enas y africanos, le impone acentuarmucho m%s los aspectos ne"ativos! 6Es incuestionable que en el orden espiritual y cultural la evan"eli*acinfue un paso considerable de avance$ pero eso no justifica el derecho de conquista. En nin"-n lu"ar delEvan"elio aparece que se deba propa"ar con la punta de la espada y a trav(s del derecho de conquista,porque todavía hay naciones poderosas en el mundo, "randes naciones que tienen otras reli"iones, otropensamiento y me pre"unto si por ejemplo, al"uien tendría derecho, por poderoso que fuera, de invadir aChina para evan"eli*arla.7

6&a evan"eli*acin no puede ser justificacin de la conquista y de la coloni*acin, porque ima"inemos queen este mundo que estamos empe*ando a descubrir, en este mundo solar al cual pertenece la Iierra,hubiesen existido otros planetas habitados y civili*ados, m%s avan*ados tecnol"icamente que loshabitantes de la tierra, y que hubiesen desembarcado en Europa, donde se producían matan*as, "uerras ysacrificios humanos, no voy a decir canibalismo, pero torturas y sacrificios humanos de todo tipo por partede personas creyentes. Aabrían podido utili*ar el mismo ar"umento para conquistar la tierra e imponernossus creencias reli"iosas. Es decir que el ar"umento de la evan"eli*acin no justifica las "uerras de conquista,la conquista, la coloni*acin.7

)idel cuestiona entonces la 6primera evan"eli*acin7, por dos ra*ones. Primero, en nombre del derecho deautodeterminacin reli"iosa de todos los pueblos, que excluye la imposicin de una reli"in, sobre todo sies extranjera, 6con la punta de la espada7. e"undo, en el nombre del mismo evan"elio, que no justifica denin"-n modo una evan"eli*acin violenta y por lo tanto la descalifica como aut(ntica evan"eli*acin.

Este cuestionamiento de la evan"eli*acin conquistadora nos permite avan*ar en la definicin de la teoría

dial(ctica de la reli"in que )idel est% elaborando! donde asume un papel fundamental la distincin entreun modelo le"itimador de la violencia y uno inspirador del amor y del compromiso liberador$ distincin queilumina particularmente las contradicciones internas del cristianismo.

Esta misma visin dial(ctica le permite contestar las quejas de los jesuitas, quienes 6se han sentidolastimados7 por sus alusiones críticas a la intolerancia reli"iosa y al racismo de los cole"ios catlicos quehabía conocido en su juventud. Por un lado, su respuesta confirma los hechos de intolerancia reli"iosa ydiscriminacin racial que había denunciado y comenta! «es muy in(usta y muy indigna de existir una escueladonde no pueda haber un solo ni*o negro, porque no tuviera dinero para pagar esa escuela, y realmenteuno se rebela contra eso».

Con respecto a los jesuitas, )idel vuelve a aplicar la importante distincin entre las personas y el sistema

social! «Me rebelo contra la discriminacin y contra el sistema social que la practicaba, no contra aquellossacerdotes que estaban all! consagrados a la tarea de ense*ar, traba(adores% Conoc! a muchos y muy buenos de aquellos sacerdotes, hice amistad con ellos estimulaban mi gusto por los deportes, lasexcursiones , escalar monta*as%%% /yudaron a la formacin de mi car0cter, me ayudaron a adquirir el esp!ritude disciplina, capacidad de sacrificio, austeridad%» 

Particular importancia asume en la interpretacin dial(ctica del cristianismo, el testimonio de los jesuitasm%rtires de El alvador! «1engo presentes a los sacerdotes (esuitas que murieron en .l Salvador, cruelmenteasesinados con las armas que pagaba y suministraba .stados 2nidos, en horrendos cr!menes, genteestudiosa, muy apegada al pueblo, cuya actitud hacia el pueblo le cost la vida%» 

E" mar*&smo-"en&n&smo '$0ano) a"ternat&va a "a '$"t$ra %e "a 'on($&sta.

sumiendo desde el primer momento el punto de vista de los pueblos oprimidos rebeldes, el Comandante

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ubica la historia de la revolucin cubana y el sentido de la teoría marxista en la construccin de unaalternativa a la l"ica de la conquista, y por lo tanto de una l"ica liberadora. Es (ste el contenido de las«convicciones profundas» del pueblo cubano, de las ideas en las cuales (l tiene, a pesar de todo, «absolutaconfian'a», tanto que «preferir!a mil veces la muerte antes que renunciar a ellas».

Estas ideas, son las de un marxismo>leninismo humanista y crítico. =eclara el Comandante en sucomparecencia televisiva del 3K de Enero! «3o soy, o me considero, revolucionario y me interesa, por encima

de todo, la 4evolucin% .se es el punto de vista del cual siempre parto en mis an0lisis y en mis ideasanticapitalistas cada hora, cada minuto, cada segundo, me siento m0s antimperialista y m0s partidario del socialismo% Me considero, modestamente, un disc!pulo de Marx, de .ngels y de &enin, que tuvo, adem0s, el 

 privilegio de contar con un maestro como Mart!»% 

Estas ideas, )idel Castro las reafirma con or"ullo en contraposicin a la ideolo"ía neoliberal, que se haimpuesto a nivel mundial como pensamiento -nico. &as reafirma con firme*a despu(s del derrumbe delcomunismo europeo, reivindicando frente a (l la ori"inalidad del marxismo y del comunismo cubanos. &asreafirma con honrade* frente a un interlocutor, el Papa polaco, convencido de que el marxismo hafracasado definitivamente a nivel mundial, porque tenía que fracasar, y que por lo tanto fracasar%inevitablemente tambi(n en Cuba.

Entonces, el marxismo>leninismo al cual )idel se refiere es una teoría humanista, crítica y eurística,contrapuesta cada ve* m%s abiertamente a la teoría economicista y do"m%tica impuesta a los países deleste europeo$ es una teoría que ha sido sometida a la criba de la rectificacin y lo si"ue siendo,especialmente en el terreno reli"ioso$ una teoría en constante evolucin, y por lo tanto sensible al nuevocontexto internacional en el cual se establece la relacin con el cristianismo$ una teoría caracteri*ada poruna concepcin dial(ctica y no monolítica de la verdad, que le permite, en su relacin con el cristianismo,encontrar reales e importantes conver"encias en el terreno (tico y social, a pesar de las diferenciasfilosficas y reli"iosas.

Entre las convicciones profundas inspiradas por este marxismo>leninismo, creo fundamental se:alar laconfian*a en el pueblo cubano y en todos los pueblos oprimidos del mundo, en su capacidad de resistenciay alternativa, en su entre"a y "enerosidad, en su inteli"encia y creatividad$ por lo tanto en la posibilidad de

desatar con ellos, en alternativa a la "lobali*acin neoliberal, la "lobali*acin de la solidaridad.

Jtra conviccin profunda es que los derechos de Cuba y de todos los pueblos oprimidos, en primer lu"ar elderecho de autodeterminacin, slo se pueden defender con eficacia luchando contra el imperialismonorteamericano y la or"ani*acin imperial del mundo! que por lo tanto no hay aut(ntica opcin por losoprimidos que no implique una toma de partido a su lado en las luchas histricas, nacionales einternacionales.

 

E" #$nto %e #art&%a %e 1$an Pa0"o II: "a evan/e"&,a'&n) ra2, %e "a na'&n '$0ana.

El punto de partida del Papa es id(ntico y opuesto al de )idel! id(ntico, porque es el mismo acontecimiento

de la conquista>evan"eli*acin$ opuesto, porque el ma"isterio que (l propondr% a lo lar"o de su visita 1y detodo su pontificado4 encuentra sus raíces en aquel acontecimiento y se define por su continuidad con (l .«5oy gracias a 5ios, Se*or de la historia y de nuestro destino >son las primeras palabras pronunciadas por elpapa en Cuba> , que me ha pemitido venir hasta esta tierra, calificada por Cristbal Coln como 6la m0shermosa que o(os humanos han visto6»% Ll saluda «esta isla, donde fue plantada hace m0s de quinientosa*os la cru' de Cristo». Elo"ia a los creyentes cubanos «por su fidelidad a Cristo, a la 7glesia y al Papa as! como por el respeto demostrado hacia las tradiciones religiosas m0s genuinas, aprendidas de los mayores» .=efine como objetivo de su visita, el «dar un nuevo impulso a la labor evangeli'adora» y por lo tanto a larestauracin de la sociedad cristiana.

En la homilía de antia"o de Cuba, vuelve la referencia explícita a la «evangeli'acin fundante»! «8ace m0sde quinientos a*os, cuando lleg la lu' de Cristo a esta isla y con ella su mensa(e salv!fico, comen' un

 proceso que, alimentado por la fe cristiana, ha ido for(ando los rasgos caracter!sticos de esta )acin» . D sese:alan «muchos hombres y mu(eres ilustres que, movidos por su inquebrantable fe en 5ios, eligieron la v!ade la libertad y la (usticia como bases de la dignidad de su pueblo».

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&a referencia explícita a la primera evan"eli*acin vuelve en el encuentro con la conferencia episcopalcubana! «8ace m0s de cinco siglos la cru' de Cristo fue plantada en estas bellas y fecundas tierras, de modoque su lu', que brilla en medio de las tinieblas, hi'o posible que la fe catlica y apostlica arraigara en ellas%.n efecto esta fe forma realmente parte de la identidad y cultura cubanas».

 

La teo"o/2a %e "a 'r&st&an%a%) 'ont&n$&%a% 'on "a teo"o/2a %e "a 'on($&sta.

Este punto de partida es decisivo para definir la lectura del cristianismo propia de @uan Pablo <<, en la líneade la teolo"ía de la cristiandad. 5uiero recordar aquí al"unos de los principios que caracteri*an estateolo"ía!

3. Existe una continuidad fundamental entre el modelo de cristianismo impuesto por los conquistadores y elque propone la i"lesia de hoy$ entre la 6evan"eli*acin fundante7 y la 6nueva evan"eli*acin7.

/. Cristo es la -nica solucin de los problemas de la vida y la sociedad, el -nico fundamento del valor de lapersona humana y de los aut(nticos valores morales y sociales, particularmente del amor, la solidaridad, lareconciliacin, la justicia, la libertad. En este sentido 6fuera de la i"lesia no hay salvacin7! es decir, fuera dela doctrina social de la i"lesia no hay solucin para los problemas de la sociedad.

?. e"-n la teolo"ía de la cristiandad, la afirmacin de =ios y su manifestacin en la historia coinciden con laafirmacin de la i"lesia 1catlica4. &a he"emonía de la i"lesia en la sociedad es el si"no fundamental de lapresencia y la he"emonía de =ios en el mundo.

. &as ideolo"ías que, como la marxista, prescinden de =ios, no pueden fundar ni el valor de la persona nilos valores morales y sociales. Ellas llevan necesariamente al enfrentamiento y la discriminacin. Por eso lossistemas sociales inspirados por ellas tienen que fracasar, y la historia reciente lo ha demostrado. Estaausencia de un fundamento transcendente es la verdadera causa del derrumbe del comunismo europeo.

N. El modelo de sociedad que la evan"eli*acin 1la nueva como la primera4 pretende instaurar o restaurar esel de una sociedad cristiana, ya no en el sentido confesional del t(rmino 1que recono*ca el cristianismocomo reli"in oficial4 sino en el sentido (tico! es decir una sociedad inspirada por los valores (ticos y

sociales del cristianismo y por lo tanto dispuesta a reconocer en este terreno la autoridad de la i"lesia.

K. El vínculo estrecho que existe entre cristianismo por un lado, valores morales y sociales por el otro,refleja una concepcin monolítica de la verdad, se"-n la cual las contraposiciones en el terreno filosfico yreli"ioso excluyen verdaderas conver"encias en el terreno moral y social.

Estos principios orientan de un modo o de otro todos los discursos del Papa 1y todo su ma"isterio4. sí en lahomilía de Cama"Oey se afirma «que el mundo y el hombre se asfixian si no se abren a 9esucristo» y se habladel desarrollo inte"ral de cada uno «lo cual no puede alcan'arse sin Cristo, al margen de Cristo y muchomenos en contra de Cristo». En el mensaje entre"ado a los jvenes, el Papa alaba «la fidelidad de muchosde ellos a la fe recibida de los mayores  1subrayado en el texto41l4, tantas veces transmitida en el rega'o delas madres y abuelas durante estas últimas d+cadas en la que la vo' de la iglesia parec!a sofocada» . En el

discurso al 6mundo de la cultura7, el Papa citando al Padre Harela, afirma! «.l bien de su patria siguenecesitando de la lu' sin ocaso, que es Cristo% Cristo es la v!a que gu!a al hombre a la plenitud de susdimensiones, el camino que conduce hacia una sociedad más justa, más libre y más solidaria % .l amor aCristo y a Cuba, que ilumin la vida del Padre :arela, est0 en la ra!' m0s honda de la cultura cubana%; Aablando, por fin, al 6mundo del dolor7 el Papa constata que «el dolor es un misterio, muchas vecesinescrutable para la ra'n% <orma parte del misterio de la persona humana, que slo se esclarece en

 9esucristo, que es quien revela al hombre su propia identidad% Slo desde =l podremos encontrar el sentidode todo lo humano».

El criterio que orienta a @uan Pablo << en la evaluacin tan positiva de la primera evan"eli*acin es el de lapresencia de la i"lesia, que ciertamente en ese entonces tuvo un fortalecimiento y una extensin sinprecedentes. =efiniendo, en su primer discurso, los objetivos de su viaje apostlico, (l ase"ura quepretende celebrar, con toda la familia cubana, 6el misterio del mor divino y hacerlo presente m%sprofundamente en la vida y en la historia de este noble pueblo, sediento de =ios y de valores espirituales,que la <"lesia, en estos cinco si"los de presencia en la isla, no ha dejado de dispensar7.

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El drama del eclesiocentrismo es que el punto de vista de la i"lesia institucional coincide objetivamente conel de los poderes políticos y econmicos con los cuales ella se alía a lo lar"o de la historia$ y cuando se trata,como en el caso de la conquista y la coloni*acin de poderes opresores y destructores, su punto de vista secontrapone al de los pueblos oprimidos rebeldes. Esta contraposicin estall claramente alrededor del 2/,cuando la i"lesia catlica institucional, orientada por el pensamiento de @uan Pablo <<, se sum a lascelebraciones del centenario promovidas por las potencias del #orte y recha*adas con indi"nacin por los

indí"enas m%s concienti*ados. Ellos pues no pueden admitir que, en estos cinco si"los de presencia en laisla y el continente, la i"lesia, aliada de los conquistadores, de los coloni*adores, de los esclavistas, de losdictadores, no haya dejado de dispensar valores espirituales y de hacer presente en la historia de Cuba elmisterio del mor divino.

 

II- LA REVOLUCIÓN CU3ANA FRENTE A LA IGLESIA CATÓLICA

&a preocupacin de )idel en esta profundi*acin de las relaciones entre revolucin y reli"in no es slo la dedisponer al pueblo cubano al encuentro con el Papa, sino tambi(n la de aclarar cada ve* m%s ante lospueblos latinoamericanos la postura de la revolucin cubana respecto a la reli"in. «.n la lucha contra el imperialismo, en la lucha por la independencia de nuestro pa!s, en esa heroica y grandiosa batalla y en la

lucha por los cambios en /m+rica &atina, por aquellos a*os de la invasin de >irn, las guerras suciascontra Cuba, el bloqueo, el aislamiento y todo lo dem0s, a nosotros nos interesaba mucho transmitir a los

 pueblos latinoamericanos nuestra posicin en relacin con las religiones y las creencias religiosas, es decir de respeto%» Evidentemente, la conciencia de la responsabilidad continental de la +evolucin Cubana si"ueinspirando la reflexin y las declaraciones del Comandante.

En dos amplias intervenciones, la del 3? de diciembre de 322B, ante la samblea #acional del PoderPopular y la del 3K de enero de 3220 en la televisin cubana, (l se ha dedicado a sensibili*ar al pueblo,particularmente a los no catlicos y no creyentes, para que aco"ieran calurosamente al Papa, como invitadono slo de los obispos catlicos, sino tambi(n del "obierno y de todo el país. Estas intervenciones fueron undesmentido contundente a las insinuaciones del le"islador estadounidense demcrata de #eQ @ersey+obert Men(nde*, que, se"-n un cable de la a"encia #otimex de #eQ DorR, del 3 de diciembre, «en una

charla con miembros de la Sociedad de las /m+ricas, indic que el >obierno del presidente <idel Castroutili'a la intimidacin a traba(adores y otros m+todos para desestimular muestras de apoyo al Papa %%%Según Men+nde' %%% el gobierno no ha publicitado lo suficiente la visita del Papa entre la poblacin y amena'a a algunos traba(adores con de(arlos sin traba(o si van a los eventos masivos».

)idel contest (stas y otras an%lo"as insinuaciones comprometi(ndose personalmente y comprometiendoal partido y a todas las or"ani*aciones de masas, para que la visita del Papa fuera un (xito popular$ y paraque este (xito fuera y apareciera como un (xito y no un cuestionamiento de la revolucin. Como diceexplícitamente en su discurso a la asamblea nacional! «el +xito de la visita del Papa debe ser un +xito del 

 pa!s y un +xito de la revolucin».

Para que la aco"ida popular al Papa por parte de los militantes comunistas fuera fruto de convicciones y no

de pura cortesía o de disciplina, era necesario que ellos no lo percibieran como un enemi"o, como el 6%n"elexterminador del comunismo7 sino como una persona di"na de respeto por sus calidades humanas y por subeli"erancia coherente$ a-n m%s, como un aliado de la revolucin en al"unas luchas importantes. Paraconse"uir este objetivo, el Comandante no se ha limitado a una presentacin muy positiva de lapersonalidad de Sarol Tojtyla sino que ha desarrollado tambi(n una reflexin terica y política sobre lasrelaciones entre revolucin y reli"in y sobre el contenido del ma"isterio reciente del Papa y de los obisposlatinoamericanos.

Entre revo"$'&n + re"&/&n no t&ene ($e 4a0er 'ontra%&''&n) s&no 'o"a0ora'&n.

Por cierto, la reflexin que el Comandante propone sobre las relaciones entre revolucin y reli"in no esnovedosa. Comien*a con la evocacin de un conjunto de encuentros internacionales de los -ltimos /B a:oscon creyentes 1Chile, @amaica, #icara"ua, El alvador, rasil, etc.4, que han marcado la historia de lasrelaciones entre marxistas y cristianos. En estos encuentros, )idel Castro había afirmado y fundamentado su

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conviccin de que entre fe cristiana y compromiso revolucionario no había contradiccin$ que, al contrarioera posible y necesaria entre revolucionarios creyentes y no creyentes una unidad estrat("ica.

Por lo que se refiere a la situacin cubana, el Comandante recuerda su lar"a entrevista a )rei etto, de lacual se editaron en el país un milln de ejemplares, despertando un enorme inter(s$ y recuerda enparticular que, comentando la frase de Marx sobre la reli"in como opio del pueblo, había expresado suvisin dial(ctica de la reli"in, se"-n la cual, desde el punto de vista revolucionario, la reli"in podía ser

muy positiva o muy ne"ativa. En el caso de Cuba, ase"ura )idel, los conflictos que sur"ieron con la i"lesia nonacían de un espíritu antirreli"ioso de la revolucin sino de diver"encias políticas.

in embar"o, el respeto de la +evolucin Cubana por las experiencias reli"iosas se manifest m%sabiertamente en el proceso de rectificacin, del cual el Comandante recuerda dos momentos cruciales! lareforma de la constitucin de 32BN, reali*ada en 322/, que marca la transicin de un estado materialistaateo a un estado laico$ y el <HU con"reso de 322, que les abre a los creyentes la puertas del partido.

)idel concluía este recorrido histrico con al"unas afirmaciones de car%cter "eneral! «.stamos contra todaslas discriminaciones, ?por qu+ vamos a discriminar a alguien por sus sentimientos religiosos@ .n ningúnlibro terico del socialismo est0 planteado eso, y nosotros, en nuestras leyes y en nuestra Constitucinhemos recogido ese principio de respeto» . Por lo que se refiere a la pr%ctica, el Comandante afirma

cate"ricamente! «la 4evolucin no tiene que reprocharse nada, ni lo m0s m!nimo %%% la 4evolucin harespetado de manera plena los sentimientos religiosos». Esta misma afirmacin vuelve en el discurso debienvenida al Papa! «Si alguna ve' Aen las relaciones con la iglesiaB han surgido dificultades, no ha sidonunca culpa de la 4evolucin».

Confieso que estas -ltimas declaraciones despiertan al"una perplejidad. obre todo porque contradicenafirmaciones autocríticas que el propio )idel había formulado anteriormente, por ejemplo en laconversacin con )rei etto cuando, hablando de la exclusin de los creyentes del partido, reconoce lanecesidad de «crear las condiciones para algunos avances en este terreno»   y declara! «1e digo que

 podemos autocriticarnos, tanto nosotros como las iglesias en Cuba, fundamentalmente la iglesia catlica,de no haber traba(ado en la direccin de crear esas condiciones para que desapare'can los vestigios, lasombra de lo que en el pasado nos oblig a este rigor en la seleccin de los militantes del Partido% /dem0s

 pienso que no puede ser modelo eso pienso, como pol!tico, como revolucionario, que lo que hemos hechono puede ser modelo y que en /m+rica &atina tendr0 que ser de otra forma» .

&a autocrítica se desarrolla lue"o en t(rminos m%s "enerales! 6Do, por principio, no puedo estar de acuerdocon nin"-n tipo de discriminacin. sí. Ie lo di"o francamente. i me pre"untan si existe cierta forma dediscriminacin sutil con los cristianos, te di"o que sí, honestamente ten"o que decirte que sí y que no esuna cosa superada todavía por nosotros. #o es intencionada, no es deliberada, no es pro"ramada. Existe ycreo que nosotros tenemos que superar esta fase! hay que crear las condiciones de confian*a en unacircunstancia en que todavía el imperialismo nos amena*a y en que todavía muchos de los que est%n all%son los anti"uos bur"ueses, los terratenientes y las clases privile"iadas que convirtieron la reli"in en unaideolo"ía contrarrevolucionaria ...7

En estas declaraciones, la autocrítica conlleva la exi"encia de rectificacin, entendida no como unacorreccin formal, sino como un proceso masivo de concienti*acin! «Para que estos problemas puedanresolverse no basta que tú lo pienses o que incluso yo lo piense%%% 8ace falta que lo piense y lo comprendanuestra militancia, nuestros cuadros y nuestro Comit+ Central que lo piense nuestro pueblo y lo piensentambi+n las iglesias cubanas». «3 creo que ustedes pueden ayudar mucho a +sto% 1ú puedes ayudar a +stocon las conferencias que est0s dando, muchos sacerdotes progresistas de nuestro hemisferio pueden ayudar a esto, la parte de la iglesia que se ha unido a los pobres en /m+rica &atina, con el e(emplo que ha estadodando %%% lo que hicieron en tu pa!s, lo que hicieron en )icaragua, lo que hicieron en .l Salvador y otros

 pa!ses% Creo que pueden ayudar a que las iglesias cubanas traba(en tambi+n en este sentido%»1/4

En cambio, recha*ando cualquier culpa de la revolucin en los conflictos con la i"lesia, se priva de objeto el

proceso de rectificacin, que supone el reconocimiento de 6errores y tendencias ne"ativas7. hora, larectificacin es indudablemente uno de los aspectos m%s si"nificativos del socialismo cubano y de suori"inalidad$ es una de las ra*ones que explican por qu(, en el desmoronamiento del campo socialista, elsocialismo cubano no se derrumba.

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dem%s, en la relacin entre la revolucin y la i"lesia catlica, la rectificacin representa una disposicin aldi%lo"o de parte de la revolucin, que podría estimular a la i"lesia a emprender su propia rectificacin. Encambio si la +evolucin excluye cualquier culpa de su parte, se fortalece en la i"lesia la tendencia aconsiderarse víctima inocente del ateísmo y la persecucin marxista>leninista.

=e todos modos, el n-cleo de esta reflexin es el esbo*o de una teoría revolucionaria en elaboracin, queafirma la plena coherencia y hasta la conver"encia entre el compromiso revolucionario y la fe cristiana.

Ieoría que encuentra un slido fundamento en el marxismo cubano, martiano, fidelista y "uevarista. inembar"o, cuando el Comandante recha*ando toda forma de discriminacin de los creyentes afirma «enningún libro terico del socialismo est0 planteado eso» , parece olvidar los manuales de marxismo>leninismoy el 6ateísmo científico7 que los sovi(ticos pretendieron imponer a "eneraciones de militantes comunistasde Cuba y de todo el mundo. #e"ando la presencia de una teoría marxista>leninista que descalifica lareli"in y por lo tanto discrimina a los creyentes, )idel subeval-a, me parece, el papel de la +evolucinCubana y su aporte personal a la correccin, en la teoría y la pr%ctica, de estos errores y tendenciasne"ativas.

 

5aro" 6o7t+"a) 89n/e" e*term&na%or %e" 'om$n&smo

in embar"o, la importancia de esta distincin entre el socialismo cubano y el de los países del esteeuropeo, especialmente de Polonia, es objeto de otro capítulo de la reflexin que )idel le dedica a SarolTojtyla. Para convencer a los cubanos, particularmente a los comunistas, de que el Papa tenía que seraco"ido como un ami"o del país, era necesario disipar su ima"en de 6%n"el exterminador del comunismo7$ima"en que inspiraba las previsiones de los que anunciaban una visita capa* de poner en crisis el socialismocubano, como lo había hecho con el socialismo polaco.

Con este objetivo, )idel propone un an%lisis penetrante de las causas del derrumbe! se"-n el cual ellas sedeben buscar en primer lu"ar al interior del campo socialista europeo, en los "raves errores cometidos porlos diri"entes comunistas, y especialmente por talin y Gorbachov. «.l Papa no era Secretario >eneral del Partido Comunista de la 2nin Sovi+tica, ni dirig!a la 2nin Sovi+tica, ni presid!a el C/M., ni dirigi el 

campo socialista%» Por lo que se refiere al comunismo sovi(tico, el Comandante le achaca especialmente tres "raves errores! elpacto Molotov>+ibbentrop, la invasin de Polonia y la invasin de )inlandia. Graves errores no slo en elterreno político, sino tambi(n porque implicaban un divorcio entre política y (tica. Graves errores, adem%s,porque obli"aban a los partidos comunistas del mundo a justificarlos y por eso mismo a separarse de lasmasas. «/quello le cost muy caro al movimiento comunista internacional, a los comunistas de todas partesdel mundo, tan disciplinados y tan fieles a la 2nin Sovi+tica y a la 7nternacional Comunista, que cuandodec!a hay que hacer +stoD, era +sto% .ntonces todos los partidos comunistas del mundo explicando y 

 (ustificando el pacto MolotovE 4ibbentrop se aislaban de las masas y tuvieron que pagar un precio pol!ticoalt!simo por aquello%» 

En sus an%lisis de los errores del socialismo, )idel se concentra especialmente sobre el caso de Polonia, elcontexto donde el Papa se form y donde madur sus convicciones anticomunistas. )idel trata de explicarpor qu( una persona del nivel intelectual, espiritual y moral de Sarol Tojtyla, se sinti obli"ada a combatirel comunismo. Para entenderlo, dijo, tenemos que partir de la verdad histrica. 5u( era el comunismo enPoloniaF Era un sistema impuesto por las tropas sovi(ticas de ocupacin, hacia las cuales, tambi(n por lasatrocidades que habían cometido, los polacos tenían fuertes ra*ones de resentimiento$ un sistemaimpuesto por el extranjero a un pueblo profundamente nacionalista y antirruso$ a un pueblo catlico en un2?V, en el cual la i"lesia y la nacin nacieron juntas$ a un pueblo en el cual las condiciones objetivas ysujetivas para construir el socialismo no existían, y por tanto el estado socialista fue instaurado sobre labase de un marxismo>leninismo do"m%tico. &a rebelin popular a este tipo de socialismo, parecía decir)idel, era le"ítima y debida.

nali*ando y criticando el comunismo polaco, )idel explica las ra*ones por las cuales la accin del Papa y ladel imperialismo fueron tan eficaces! en otras palabras, (l vincula la eficacia de dichas intervenciones a lafra"ilidad de esos sistemas socialistas que no contaban con un consenso popular. Iambi(n quiere explicar

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por qu(, cuando tom la decisin de invitar al Papa y de correr este ries"o, se sentía se"uro de que su visitaa Cuba no produciría efectos an%lo"os a los producidos en Polonia.

)idel pensaba adem%s que las mismas intenciones del Papa en su visita a Cuba no podían ser de cuestionarsu sistema político. «3o estoy absolutamente seguro de las buenas intenciones y el esp!ritu de amistad conque el Papa reali'a la visita a nuestro pa!s y por lo que cono'co de sus ideas, busca ob(etivos quetrascienden y los busca porque considera que ese es su deber, que esa es su misin evangeli'adora de

acuerdo con sus convicciones religiosas%» in embar"o, las expresiones 6buenas intenciones7 y 6espíritu deamistad7 no tienen el mismo sentido para )idel Castro y para @uan Pablo <<! si el marxismo>leninismo es unerror "rave y nefasto, como piensa el Papa, es una buena intencin y una expresin de amistadcomprometerse para derrocarlo y liberar al pueblo de su influjo.

&a dificultad de comunicacin viene de que Sarol Tojtyla le aplica a Cuba esquemas de interpretacinformados en Polonia, apoyado en esta perspectiva por las informaciones que le proporcionaron los obisposcubanos y sin tener en cuenta ni la diversidad ni la evolucin del comunismo cubano, en el proceso derectificacin. &a comparacin que el Papa hi*o en +oma entre su viaje a Cuba y su viaje a Polonia confirmaque (l no percibi las diferencias entre las dos situaciones.

&a contraposicin entre el socialismo polaco y el cubano, entre el marxismo do"m%tico y el marxismo crítico

tiene en el pensamiento de )idel una importancia que rebasa el acontecimiento de la visita del Papa ybrinda una clave de interpretacin de la historia de los comunismos y de los marxismos. yuda tambi(n aaclarar el sentido de la rectificacin cubana, como cuestionamiento no slo de al"unos 6errores ytendencias ne"ativas7 sino tambi(n de un modelo de socialismo y de marxismo copiados del exterior.

 

E" Pa#a) ;$no %e "os m9s /ran%es %o"ores %e 'a0e,a %e" &m#er&a"&smo<.

&a ima"en del Papa 6%n"el exterminador del comunismo7 estaba vinculada a la de su alian*a histrica conel imperialismo$ vínculo que la ortodoxia marxista consideraba como estructural y por lo tanto definitivo.'na ve* m%s )idel Castro, pensando a partir de la praxis revolucionaria y del nuevo contexto histrico, abrenuevas pistas a la reflexin terica sobre la reli"in.

u punto de partida es el hecho mismo de la visita del Papa, considerada y valorada como testimonioevidente de su independencia con respecto al imperialismo! «.l Papa no es un hombre que se puedamane(ar, no es un hombre al que se le puedan dar rdenes% )o ocurrir0 (am0s con este Papa lo que ocurrecon muchos l!deres pol!ticos en este mundo, que han querido venir a Cuba, que han hablado de venir aCuba, y cuando los yanFis se han enterado se lo han prohibido de manera total, y no han venido% .lloshabr!an querido prohibirle la visita al Papa, si pudieran%»  

Pero se"-n el an%lisis de )idel, el Papa manifiesta su autonomía, a-n m%s su hostilidad hacia elimperialismo, con toda la nueva orientacin de su ma"isterio, despu(s del desmoronamiento delcomunismo europeo! «.ste Papa, finali'ada la guerra fr!a y conciente del desastre que ha provocado entodos los pa!ses el capitalismo, los problemas de corrupcin, despilfarro, caos econmico y otros muchos

que conocemos, a partir de lo que observa sobre las realidades que vinieron despu+s, ha centrado susesfuer'os en otra direccin% Partiendo de las ideas del Concilio Vaticano II  , ha estado reali'ando las cr!ticasm0s duras que en los últimos a*os se han hecho sobre los problemas sociales y econmicos»%  «2na ve' quese acab la guerra fr!a y una ve' que aquel proceso histrico y aquellas circunstancias de(aron de existir,este Papa es posiblemente uno de los m0s grandes dolores de cabe'a que tenga hoy el imperialismo%»  

Para fundamentar esta interpretacin de la nueva orientacin de la i"lesia catlica, )idel se:ala una serie detemas muy importantes sobre los cuales se verifica hoy una impresionante conver"encia entre laspreocupaciones de la revolucin y las del ma"isterio pontificio y episcopal latinoamericano en el terrenosocial.

 

Conver/en'&as entre e" #ensam&ento revo"$'&onar&o + e" ma/&ster&o so'&a" %e" Pa#a + %e "os o0&s#os"at&noamer&'anos.

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&a interpretacin dial(ctica del fenmeno reli"ioso le había permitido a )idel Castro afirmarconstantemente ciertas conver"encias entre comunistas y cristianos. Esta conviccin, la manifest desde losprimeros a:os despu(s del triunfo, como recuerda (l mismo en el discurso a la asamblea nacional!«4ecuerdo que cuando surgieron los primeros conflictos de clases en nuestra sociedad, plante+ quetraicionar a la 4evolucin era traicionar a Cristo%» 

in embar"o, estas afirmaciones no se referían a las instituciones eclesi%sticas en "eneral, sino a

determinadas cate"orías de cristianos. e referían a los cristianos de los primeros si"los, condenados a laclandestinidad, perse"uidos y martiri*ados como lo ser%n los militantes comunistas de nuestros días$ no sereferían a las jerarquías eclesi%sticas que se aliaron con el imperio romano y que de perse"uidas seconvirtieron en perse"uidoras! «Como aquellos cristianos atro'mente calumniados para (ustificar loscr!menes, nosotros, tan calumniados como ellos, preferiremos mil veces la muerte antes que renunciar anuestras convicciones% 7gual que la 7glesia, la revolucin tiene tambi+n muchos m0rtires»% 1=iscurso debienvenida4% En la (poca de las conquistas y coloni*aciones, se refiere a los sacerdotes que, como artolom(de &as Casas, tomaron la defensa de los indí"enas y no a la institucin que le"itim su sometimiento yexterminio. Aablando del si"lo ;;, y de la posibilidad de colaboracin revolucionaria entre marxistas ycristianos se refiere a los cristianos que en varios países de m(rica &atina 1 Chile, rasil, #icara"ua, Elalvador, @amaica, etc.4 se inspiran en la teolo"ía de la liberacin y no a la jerarquía que los desautori*a.

hora, la novedad de la reflexin que la visita papal le inspira al Comandante es la que concierne elma"isterio del propio +omano Pontífice! concierne, paradjicamente al mismo ma"isterio que condenacate"ricamente el marxismo y la teolo"ía de la liberacin. =e lo que se trata evidentemente aquí es deconver"encias parciales, consideradas compatibles con una diver"encia "lobal en el marco de unaconcepcin dial(ctica de la verdad! «Como hay muchas cosas de orden social, entre las que el Papa plantea,que son coincidentes con nuestros puntos de vista como revolucionarios, no nos incumben los puntos devista religiosos o filosficos de donde partan sus ideas». simismo en su discurso de bienvenida, )idel le dir%al Papa! «Santidad, pensamos igual que 2sted en muchas importantes cuestiones del mundo de hoy y ellonos satisface grandemente en otras nuestras opiniones difieren, pero rendimos culto respetuoso a laconviccin profunda con que usted defiende sus ideas».

Para fundamentar estas afirmaciones, el Comandante multiplica los ejemplos concretos, recabados delar"as y atentas lecturas de los documentos eclesi%sticos. «.s muy dif!cil, afirma, encontrar algún problemasocial de los que est0n a'otando a /m+rica &atina, al Gfrica y a los pa!ses del 1ercer Mundo, que no hayasido abordado por el Papa% .l Papa se ha constitu!do en permanente cr!tico de la globali'acin neoliberal eimplacable adversario del neoliberalismo en este momento%»  El Papa denuncia concretamente la"lobali*acin neoliberal por en"endrar miseria, desempleo, hambre, desnutricin, enfermedad,analfabetismo$ por excavar un abismo entre una minoría excesivamente rica y multitudes miserables.Condena la carrera armamentista, las "uerras de a"resin, las armas nucleares, la deuda externa. «?Cu0lesson >pre"unta el Comandante> los estadistas europeos que est0n diciendo esto@ ?.n <rancia, en /lemania,en 7nglaterra, en .stados 2nidos, dnde@»%  obre muchos de estos temas las -nicas voces críticas que selevantan hoy son las del Papa y la de Cuba, como se pudo apreciar, por ejemplo en la conferencia cumbre

sobre alimentacin, or"ani*ada por la )J en +oma, donde «casi se podr!a decir que los dos discursos m0s parecidos %%% fueron el del Papa y el m!o».

El Comandante concluye su rese:a valorando fuertemente el ínodo episcopal de las m(ricas, celebradoen +oma del 3K de noviembre al 3/ de diciembre de 322B, a propsito del cual lle"a a decir. «.n realidad,las banderas de la teolog!a de la liberacin, que surgen como consecuencia del Concilio Vaticano II y en

 parte influ!das por la 4evolucin Cubana, son pr0cticamente las mismas que est0 enarbolando este s!nodo%»D saca otra conclusin bastante sorpresiva! «de modo que el 0ngel exterminador no apunta hacia Cuba%

 /punta hacia el imperialismo, que es lo que debe realmente preocuparles».

inceramente, creo que sin dejar de admirar este intento de di%lo"o reali*ado por )idel, no ser%n muchoslos telo"os de la liberacin dispuestos a compartir conclusiones tan optimistas. Cmo explicar que el Papa

y el sínodo episcopal enarbolen la bandera de la teolo"ía de la liberacin, y al mismo tiempo si"anmar"inando y condenando a los telo"os de la liberacinF Cmo pensar que el ma"isterio papal yepiscopal no apunte hoy contra Cuba, sino contra el imperialismo, cuando las críticas del capitalismo se

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refieren a sus excesos y las del marxismo a su misma esencia F Cuando el marxismo, por ser ateo, si"uesiendo considerado intrínsecamente perverso y el capitalismo se considera perverso slo en susdesviacionesF Cmo explica el Comandante que a sus nobles esfuer*os para valorar las conver"enciasentre el pensamiento revolucionario y el ma"isterio eclesi%stico no corresponda, de parte del Papa, nin"-nreconocimiento de tales conver"enciasF

Por lo que se refiere en particular al ínodo de las m(ricas, el Comandante valora pronunciamientos de

al"unos participantes, que son indudablemente si"nos de una nueva conciencia. in embar"o, para evaluarla orientacin del ínodo como tal , hay que esperar el documento final, que est% siendo elaborado por unacomisin romana y que ser% proclamado por el propio Papa en su prxima visita a m(rica &atina. Porahora, el instrumento de traba(o que prepar el ínodo no autori*a previsiones muy optimistas sobre lasconclusiones que lo"rar%n superar la censura romana. Esta precisin no le quita valide* al m(todopracticado por )idel, cuando esco"e, al interior de una experiencia contradictoria, los si"nos de liberacin$pero qui*%s le pon"a ciertos límites al alcance de sus conclusiones.

=e todos modos, es con la afirmacin de esta conver"encia en una visin utpica del futuro, con la que elComandante se despide del Papa y saca la conclusin de la visita! «Me conmueve el esfuer'o que SuSantitad reali'a por un mundo m0s (usto% &os estados desaparecer0n, los pueblos llegar0n a constituir unasola familia humana% Si la globali'acin de la solidaridad que usted proclama se extiende por toda la tierra y los abundantes bienes que el hombre puede producir con su talento y su traba(o se repartenequitativamente entre todos los seres humanos que hoy habitan el planeta, podr!a crearse realmente unmundo para ellos, sin hambre ni pobre'a sin opresin ni explotacin sin humillaciones ni desprecios, sinin(usticias ni desigualdades, donde vivir con plena dignidad moral y material, en verdadera libertad, Heseser!a el mundo m0s (ustoI» =ifícil no ver un nexo entre entre esta despedida y las palabras de bienvenida!«?Ju+ podemos ofrecerle en Cuba, Santitad@ 2n pueblo con menos desigualdades, menos ciudadanos sinamparo alguno, menos ni*os sin escuelas, menos enfermos sin hospitales, m0s maestros y m0s m+dicos por habitante que cualquier otro pa!s del mundo que Su Santidad haya visitado %%% )o habr0 ningún pa!s me(or 

 preparado para comprender su feli' idea, tal como nosotros la entendemos y tan parecida a la que nosotros predicamos, de que la distribucin equitativa de las rique'as y la solidaridad entre los hombres y los pueblosdeben ser globali'adas». En otras palabras! el ideal que el Papa persi"ue a nivel mundial, en Cuba, m%s queen cualquier otro país del mundo, se est% empe*ando fati"osamente a reali*ar. Por qu( es tan difícilreconocerloF #o ser% que a los cristianos nos cuesta reconocer que en nombre de una ideolo"ía laica yatea se han alcan*ado objetivos que sociedades oficialmente cristianas fueron incapaces de alcan*ar y hastade perse"uirF

 

III- LA TEOLOG=A DE LA CRISTIANDAD FRENTE A LA REVOLUCIÓN CU3ANA.

En su mensaje al pueblo cubano, el Papa no se limita a afirmar la centralidad de Cristo y de la <"lesia, sinoque subraya en cada discurso la contraposicin entre este anuncio y 6la ideolo"ía7, que es el eufemismocon el cual (l desi"na la teoría marxista>leninista. Entonces el mensaje fundamental de su viaje es que el

cristianismo y no la 6ideolo"ía7 tiene que ser considerado prota"onista de la historia de Cuba! de supasado, de su futuro y de su cultura$ tiene que ser reconocido como la solucin aut(ntica de todos losproblemas que an"ustian al pueblo. Esta es la 6verdad7 y la 6esperan*a7 de la cual el pontífice romano seconsidera mensajero$ (l mismo lo anuncia sint(ticamente en el avin, cuando, hablando con los periodistas,le contrapone a la revolucin de Marx, de &enin y de Castro, que implica odio, ven"an*a, víctimas, larevolucin de Cristo, inspirada por el amor.

 

Contra#os&'&n entre >e e ;&%eo"o/2a< ?mar*&sta@

En la homilía pronunciada en anta Clara sobre el tema de la familia, despu(s de se:alar al"unos problemasque ella atraviesa, el Papa proclama! «.l camino para vencer estos males no es otro que 9esucristo, su

doctrina y su e(emplo de amor total que nos salva% )inguna ideolog!a puede sustituir su infinita sabidur!a y  poder% Por eso es necesario recuperar los valores religiosos en el 0mbito familiar y social, fomentando la pr0ctica de las virtudes que conformaron los or!genes de la )acin cubana».

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&a contraposicin entre la ideolo"ía y los valores reli"iosos conlleva una ideali*acin del pasado cristianoque se pretende rescatar, respecto al presente, marcado por el abandono de aquellos valores! «&ainstitucin familiar en Cuba es depositaria del rico patrimonio de virtudes que distinguieron a las familiascriollas de tiempos pasados, cuyos miembros se empe*aron tanto en los diversos campos de la vida social y 

 for(aron el pa!s sin reparar en sacrificios y adversidades% /quellas familias, fundadas slidamente en los principios cristianos, as! como en su sentido de solidaridad familiar y respeto por la vida, fueron verdaderas

comunidades de cari*o mutuo, de go'o y fiesta, de confian'a y seguridad, de serena reconciliacin».El motivo vuelve en el mensaje a los jvenes, pronunciado durante la misa en Cama"Oey. 6 ?Cmo podr0 el 

 (oven llevar una vida limpia@ H:iviendo de acuerdo con tu palabraI; 1 al. 332,24. El almo nos da larespuesta al interro"ante que todo joven se ha de plantear si desea llevar una existencia di"na y decorosa,propia de su condicin. 6Para ello, e" n&'o 'am&no es 1ess.W. 65u( es llevar una vida limpiaF Es vivir lapropia existencia se"-n las normas morales del evan"elio, propuestas por la <"lesia... El mundo y el hombrese asfixian si no se abren a @esucristo... &os jvenes son el futuro de la i"lesia y de la patria! 'n futuro quecomien*a ya en el presente y que ser% "o*oso si est% basado en el desarrollo inte"ral de cada uno, lo cual nopuede alcan*arse sin Cristo, al mar"en de Cristo y mucho menos en contra de Cristo.7

Iodavía m%s explícita es la contraposicin en la homilía de antia"o de Cuba! «&a historia ense*a que sin fedesaparece la virtud, los valores morales se oscurecen, no resplandece la verdad, la vida pierde su sentidotrascendente y aún el servicio a la nacin puede de(ar de ser alentado por las motivaciones m0s profundas%

 / este respecto /ntonio Maceo, el gran patriota oriental dec!aK 6Juien no ama a 5ios, no ama a la patria6» .

En el encuentro con sacerdotes, reli"iosos y laicos comprometidos, el Papa así concluye! «JueridoshermanosK el pueblo cubano los necesita porque necesita a 5ios, que es la ra'n fundamental de sus vidas%<ormando parte de este pueblo, manifi+stenle que slo Cristo es el Camino, la :erdad y la :ida, que slo =l tiene palabras de vida eterna».

=urante la misa celebrada en la pla*a de la +evolucin, el Papa despu(s de proclamar «el mensa(e de amor y solidaridad que 9esucristo ofrece a los hombres de todos   los tiempos», lo contrapone a los sistemasideol"icos, econmicos y políticos! «&os sistemas ideolgicos y econmicos que se han ido sucediendo enlos dos últimos siglos con frecuencia han potenciado el enfrentamiento como m+todo, ya que conten!an en

sus programas los g+rmenes de la oposicin y de la desunin%%% /lgunos de esos sistemas han pretendidotambi+n reducir la religin a la esfera meramente individual, despo(0ndola de todo influ(o o relevanciasocial% .n este sentido, cabe recordar que un Estado moderno no puede hacer del ateísmo o de la religiónuno de sus ordenamientos políticos%» 1ubrayado en el texto4.

El Papa fundamenta esta contraposicin tambi(n en la autoridad de @os( Martí ! «Pura, desinteresada, perseguida, martiri'ada, po+tica y sencilla, la religin del )a'areno sedu(o a todos los hombres honrados%%%odo pueblo necesita ser religioso ?S$0ra+a%o en e" te*to@. No s"o "o es esen'&a"mente) s&no ($e #or s$#ro#&a $t&"&%a% %e0e ser"o...Un #$e0"o &rre"&/&oso mor&r9) #or($e na%a en B" /arant&,a "a v&rt$%.

 

E" 'r&st&an&smo) #rota/on&sta %e "a 4&stor&a %e C$0a: %e s$ #asa%o + %e s$ >$t$ro.En "a #ers#e't&va %e 1$an Pa0"o II) e" 'r&st&an&smo no #ertene'e s"o a "as ra2'es %e "a na'&n '$0ana) s&no($e e7er'e $n #a#e" #rota/n&'o en s$ 4&stor&a) en s$ 're'&m&ento + #art&'$"armente en s$ #ro'eso %e"&0era'&n. Este en>o($e %e" #asa%o >$n%amenta "as #ers#e't&vas %e >$t$ro) ($e e" Pa#a a$s#&'&a #araC$0a: e" res'ate %e "os va"ores ($e 'on>ormaron "os or2/enes %e "a na'&n + #or tanto "a resta$ra'&n %e "aso'&e%a% 'r&st&ana.

Esta re"a'&n entre e" #asa%o + e" >$t$ro se e*#resa m$+ '"aramente en "a 4om&"2a %e Santa C"ara) ($e +a4emos '&ta%o) %e%&'a%a a" tema %e "a >am&"&a: «!a institución familiar en Cuba es depositaria del rico

 patrimonio de "irtudes que distinguieron a las familias criollas de tiempos pasados, cuyos miembros seempe#aron tanto en los di"ersos campos de la "ida social y forjaron el país sin reparar en sacrificios y ad"ersidades$ %quellas familias, fundadas sólidamente en los principios cristianos, así como en su sentidode solidaridad familiar y respeto por la "ida, fueron "erdaderas comunidades de cari#o mutuo, de go&o y 

 fiesta, de confian&a y seguridad, de serena reconciliación$ 'e caracteri&aron tambi(n )como muchoshogares de hoy) por la unidad, el profundo respeto a los mayores, el alto sentido de responsabilidad, el 

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acatamiento sincero de la autoridad paterna y materna, la alegría y el optimismo, tanto en la pobre&acomo en la rique&a, los deseos de luchar por un mundo mejor y, por encima de todo, por la gran fe y confian&a en *ios$+ En "a a$sen'&a %e %o'$mentos ($e 'om#r$e0en $na &ma/en tan &%ea" %e "os t&em#os#asa%os) es >$erte "a tenta'&n %e #ensar ($e e""a sea e" >r$to %e $n ra,onam&ento &%eo"/&'o ?'on'&ente o&n'on'&ente@: era $na so'&e%a% 'r&st&ana) enton'es s$ n&ve" mora" era s$#er&or.

S&/$e $na eva"$a'&n m$'4o m9s ne/at&va %e "a >am&"&a a't$a") $na %es'r&#'&n %e "a 'r&s&s ($e atrav&esa +

$na or&enta'&n #ara s$#erar"a: ;E" 'am&no #ara ven'er estos ma"es no es otro ($e 1es$'r&sto) s$ %o'tr&na+ s$ e7em#"o %e amor tota" ($e nos sa"va. N&n/$na &%eo"o/2a #$e%e s$st&t$&r s$ &n>&n&ta sa0&%$r2a + #o%er.Por eso es ne'esar&o re'$#erar "os va"ores re"&/&osos en e" 9m0&to >am&"&ar + so'&a") >omentan%o "a #r9't&'a%e "as v&rt$%es ($e 'on>ormaron "os or2/enes %e "a Na'&n '$0ana.<

En "a #"a,a I/na'&o A/ramonte %e Cama/e+) 4a0"an%o %e "os 7venes) e" Pa#a o0serva: ;Este "$/ar) ($e""eva e" nom0re %e I/na'&o A/ramonte) E" 3a+ar%o nos re'$er%a a $n 4Broe ($er&%o #or to%os) e" '$a")mov&%o #or s$ >e 'r&st&ana) en'arn "os 4om0res + m$7eres %e 0&en: "a 4onra%e,) "a vera'&%a%) "a >&%e"&%a%)e" amor a "a 7$st&'&a. " >$e 0$en es#oso + #a%re %e >am&"&a) 0$en am&/o) %e>ensor %e "a %&/n&%a% 4$mana>rente a "a es'"av&t$%.<

En Sant&a/o %e C$0a) "a 4om&"2a %e%&'a%a a" tema %e "a #atr&a se a0re 'on $na e*a"ta'&n %e" #a#e" %e"

'r&st&an&smo en "a 4&stor&a %e C$0a: ;a'e m9s %e ($&n&entos aHos) '$an%o ""e/ "a 'r$, %e Cr&sto a esta&s"a + 'on e""a s$ mensa7e sa"v2>&'o) 'omen, $n #ro'eso ($e) a"&menta%o #or "a >e 'r&st&ana) 4a &%o>or7an%o "os ras/os 'ara'ter2st&'os %e esta Na'&n. En "a ser&e %e s$s 4om0res &"$stres est9n: a($e" so"%a%o($e >$e e" #r&mer 'ate($&sta + m&s&onero %e a'a'aJ tam0&Bn e" #r&mer maestro '$0ano ($e >$e e" Pa%re&/$e" %e Ve"9,($e,J e" sa'er%ote Este0an Sa"as) #a%re %e "a ms&'a '$0anaJ e" &ns&/ne 0a+amBs Car"osan$e" %e CBs#e%es) Pa%re %e "a Patr&a) e" '$a") #ostra%o a "os #&es %e "a V&r/en %e "a Car&%a%) &n&'& s$"$'4a #or "a "&0erta% + "a &n%e#en%en'&a %e C$0aJ Anton&o %e "a Car&%a% a'eo + Gra7a"es) '$+a estat$a#res&%e "a #"a,a ($e 4o+ a'o/e n$estra 'e"e0ra'&n) a" '$a" s$ ma%re #&%& %e"ante %e" 'r$'&>&7o ($e seentre/ara 4asta e" e*tremo #or "a "&0erta% %e C$0a. A%em9s %e Bstos) 4a+ m$'4os 4om0res + m$7eres&"$stres) ($e) mov&%os #or s$ &n($e0ranta0"e >e en D&os) e"&/&eron "a v2a %e "a "&0erta% + "a 7$st&'&a 'omo0ase %e "a %&/n&%a% %e s$ #$e0"o.<

9s a%e"ante) e" Pa#a se re>&ere a "a V&r/en %e "a Car&%a% %e" Co0re) ($e &0a a #ro'"amar Re&na %e "aRe#0"&'a C$0ana) + a>&rma: ;La 4&stor&a '$0ana est9 7a"ona%a %e marav&""osas m$estras %e amor a s$#atrona) a '$+os #&es "as >&/$ras %e "os 4$m&"%es nat&vos) %os &n%&os + $n moreno) s&m0o"&,an "a r&'a#"$ra"&%a% %e este #$e0"o. E" Co0re) %on%e est9 s$ sant$ar&o) >$e e" #r&mer "$/ar %e C$0a %on%e se'on($&st "a "&0erta% #ara "os es'"avos... Con e" %ose" %e" a"tar >am&"&ar) CBs#e%es 'on>e''&on "a 0an%era'$0ana + >$e a #ostrarse a "os #&es %e "a V&r/en antes %e &n&'&ar "a "$'4a #or "a "&0erta%. Los va"&entesso"%a%os '$0anos) "os mam0&ses) ""eva0an so0re s$ #e'4o "a me%a""a + "a ;me%&%a< %e s$ 0en%&ta&ma/en. E" #r&mer a'to %e C$0a "&0re t$vo "$/ar '$an%o en KM "as tro#as %e" /enera" Ca"&*to Gar'2a se#ostraron a "os #&es %e "a V&r/en %e "a Car&%a% en $na so"emne m&sa #ara "a ;De'"ara'&n mam0&sa %e "aIn%e#en%en'&a %e" #$e0"o '$0ano.<

Esta re'onstr$''&n 'r&st&ano'Bntr&'a %e" #asa%o re#resenta) en "a #ers#e't&va %e" Pa#a) "a #rem&sa %e $n#ro+e'to #ara e" >$t$ro. S& e" 'r&st&an&smo es e" n&'o >$n%amento s"&%o %e "os va"ores mora"es + so'&a"es)'omo "o %em$estran a" m&smo t&em#o "a teo"o/2a + "a 4&stor&a) $na '&v&"&,a'&n %e" amor + %e "a 7$st&'&a)s"o ser9 #os&0"e so0re este >$n%amento) es %e'&r resta$ran%o "a so'&e%a% 'r&st&ana.

Con'"$+en%o en Cama/e+ s$ 4om&"2a %&r&/&%a es#e'&a"mente a "os 7venes) e" Pa#a 4a0"a %e «un futuroque comien&a ya en el presente y que será go&oso si está basado en el desarrollo integral de cada uno, locual no puede alcan&arse sin Cristo, al margen de Cristo, o mucho menos en contra de Cristo+.

En "a 4om&"2a #ron$n'&a%a e" "t&mo %2a) en "a P"a,a %e "a Revo"$'&n) e" Pa#a 'on'"$+e 'on esta v&s&n:«Esta es la hora de emprender los nue"os caminos que eigen los tiempos de reno"ación que "i"imos, al acercarse el tercer milenio de la era cristiana-+  Des#$Bs %e &n%&'ar e" /ran o07et&vo) "a '&v&"&,a'&n %e"

amor + "a 7$st&'&a) &n%&'a e" n&'o 'am&no #ara 'onse/$&r"o: ;$&ero re#et&r m& ""ama%o a %e7arse &"$m&nar#or 1es$'r&sto) a a'e#tar s&n reservas e" es#"en%or %e s$ ver%a%) #ara ($e to%os #$e%an em#ren%er e"'am&no %e "a $n&%a% #or me%&o %e" amor + "a so"&%ar&%a%) ev&tan%o "a e*'"$s&n e" a&s"am&ento) e"en>rentam&ento) ($e son 'ontrar&os a "a vo"$nta% %e" D&os-Amor.<

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E" 'r&st&an&smo) #rota/on&sta %e "a '$"t$ra '$0ana.

Uno %e "os a#ortes >$n%amenta"es %e" 'r&st&an&smo a "a 4&stor&a %e "a na'&n '$0ana) 4a+ ($e 0$s'ar"o)ase/$ra e" Pa#a) en e" terreno %e "a '$"t$ra. Para eva"$ar este a#orte) B" as$me 'omo 'r&ter&o "a %e>&n&'&nre"&/&osa + 'r&st&ana %e "a '$"t$ra ($e +a 4emos re'or%a%o. Este 'r&ter&o "o ""eva a va"orar a "as#ersona"&%a%es 'r&st&anas %e "a '$"t$ra '$0ana + a %es'$&%ar 'om#"etamente "as otras. ;Es %e 7$st&'&are'or%ar "a &n>"$en'&a ($e e" Sem&nar&o %e San Car"os 4a ten&%o en e" %esarro""o %e "a '$"t$ra na'&ona" 0a7oe" &n>"$7o %e >&/$ras 'omo 1osB A/$st2n Ca0a""ero) ""ama%o #or art2 #a%re %e "os #o0res + %e n$estra>&"oso>2a) + e" sa'er%ote FB"&* Vare"a) ver%a%ero #a%re %e "a '$"t$ra '$0ana... 'ons&%era%o #or m$'4os'omo #&e%ra >$n%a'&ona" %e "a na'&n '$0ana<.

;E" 0&en %e s$ Patr&a s&/$e ne'es&tan%o %e "a "$, s&n o'aso ($e es Cr&sto. Cr&sto es "a v2a ($e /$2a a"4om0re a "a #"en&t$% %e s$s %&mens&ones) e" 'am&no ($e 'on%$'e 4a'&a $na so'&e%a% m9s 7$sta) m9s "&0re)m9s 4$mana + m9s so"&%ar&a. E" amor a Cr&sto + a C$0a) ($e &"$m&n "a v&%a %e" #a%re Vare"a) est9 en "ara2, m9s 4on%a %e "a '$"t$ra '$0ana.<

Otro &m#ortante test&/o %e "a #resen'&a %eterm&nante %e" 'r&st&an&smo en "a '$"t$ra '$0ana es 1osB art2:;La antor'4a ($e) en'en%&%a #or e" Pa%re Vare"a) 4a02a %e &"$m&nar "a 4&stor&a %e" #$e0"o '$0ano >$ere'o/&%a) #o'o %es#$Bs %e s$ m$erte) #or esa #ersona"&%a% re"evante %e "a na'&n ($e es 1osB art2... ">$e) so0re to%o) $n 4om0re %e "$,) 'o4erente 'on s$s va"ores Bt&'os + an&ma%o #or $na es#&r&t$a"&%a% %era2, em&nentemente 'r&st&ana. Es 'ons&%era%o 'omo $n 'ont&n$a%or %e" #a%re Vare"a) a ($&en ""am e"santo '$0ano<.

La %e>&n&'&n 'r&st&ano'Bntr&'a %e "a '$"t$ra 'on""eva $na %es'a"&>&'a'&n e*#"2'&ta o &m#"2'&ta %e"#ensam&ento ant&'"er&'a") "a&'o + ateo. Des'a"&>&'a'&n >orm$"a%a en tBrm&nos /enera"es 'on $nae*4orta'&n %e" Pa%re Vare"a a s$s %&s'2#$"os: «*íles que ellos, los jó"enes, son la dulce esperan&a de la.atria, y que no hay .atria sin "irtud ni "irtud con impiedad$+  9s e*#"2'&to to%av2a e" 7$&'&o so0re e";ant&'"er&'a"&smo< %e "a B#o'a %e Vare"a: ;La s$#er>&'&a"&%a% o e" ant&'"er&'a"&smo %e a"/$nos se'tores ena($e""a B#o'a no son ver%a%eramente re#resentat&vos %e "o ($e 4a s&%o "a ver%a%era &%&os&n'ras&a %e

este #$e0"o) ($e en s$ 4&stor&a 4a v&sto "a >e 'at"&'a 'omo >$ente %e "os r&'os va"ores %e "a '$0an2a ($e) 7$nto a "as e*#res&ones t2#&'as) 'an'&ones #o#$"ares) 'ontrovers&as 'am#es&nas + re>ranero #o#$"ar) t&ene$na 4on%a matr&, 'r&st&ana) "o '$a" es 4o+ $na r&($e,a + $na rea"&%a% 'onst&t$t&va %e "a Na'&n.<

La #ers#e't&va 'r&st&ano'Bntr&'a 'on""eva tam0&Bn $na s$0eva"$a'&n %e" a#orte '$"t$ra" + re"&/&oso %e>r&'a. Entre "as &n>"$en'&as ($e &nterv&n&eron en "a >orma'&n %e "a na'&n) e" Pa#a '&ta) a%em9s %e «lahispánica, que trajo el catolicismo+) "a a>r&'ana «cuya religiosidad fue permeada por el cristianismo+. Conesta >orm$"a'&n) se va"ora e" a#orte a>r&'ano no tanto #or s$ es#e'&>&'&%a% '$anto #or e" 'r&st&an&smo ($e"o #erme: n&n/$na a"$s&n se 4a'e n& a($2 n& en otro momento a" 'ar9'ter v&o"ento %e a($e""a#enetra'&n 'r&st&ana.

Part&'$"armente %$ro es e" 7$&'&o ($e e" Pa#a >orm$"a so0re "as re"&/&ones %e or&/en a>r&'ano) '$an%o)

4a0"an%o a "a Con>eren'&a E#&s'o#a") a>&rma: «%lgunas concepciones reduccionistas intentan situar a laIglesia católica al mismo ni"el de ciertas manifestaciones culturales de religiosidad, al modo de los cultossincretistas que, aunque merecedores de respeto, no pueden ser consideradas como una religión

 propiamente dicha sino como un conjunto de tradiciones y creencias+. Ser2a &nteresante sa0er 0a7o ($B'on%&'&ones $na e*#res&n %e re"&/&os&%a% #$e%e) en "a #ers#e't&va %e" Pa#a) ser 'ons&%era%a 'omo «unareligión propiamente dicha+: es #ro0a0"e ($e sea %eterm&nante #ara B" "a re>eren'&a a $na &nst&t$'&n o a$n tem#"o. Cr&ter&o >&"os>&'a + teo"/&'amente m$+ %&s'$t&0"e) &n'"$s&ve a "a "$, %e "a #a"a0ra %e 1ess a "asamar&tana: «Cr(eme, mujer, que llega la hora en que, ni en este monte /0ari&im1 ni en 2erusal(madorar(is al .adre$$$ !lega la hora, ya estamos en ella, en que los adoradores "erdaderos adorarán al .adre en espíritu y en "erdad$+ ?1$an ) K-Q@. A%em9s) 'on este 'r&ter&o se e*'"$+e #os&0"emente %e $na;re"&/&n #ro#&amente %&'4a< a "a ma+or2a %e "os 're+entes '$0anos) ($e) se/n en'$estas >&%e%&/nas) no

se re'ono'en en n&n/$na &nst&t$'&n. Se #$e%e a%em9s #re/$ntarse) s& Bsta no es "a a't&t$% %e "a ma+or2a%e "os 're+entes %e" m$n%o.

A%em9s %e estas %es'a"&>&'a'&ones e*#"2'&tas) e" 'r&ter&o 'r&st&ano'Bntr&'o en/en%ra $nas %es'a"&>&'a'&ones

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&m#"2'&tas) ($e 'ons&sten en e" s&"en'&o: s&"en'&o ($e en'$0re "os "t&mos '$arenta aHos %e '$"t$ra '$0ana)mar'a%os #or var&as 'orr&entes %e #ensam&ento mar*&sta) ($e e7er'&eron + e7er'en $n #a#e" %eterm&nanteen "a "&0era'&n %e" #a2s.

En "a 'on'"$s&n %e este %&s'$rso e" Pa#a #are'e a0r&r a"/$na #ers#e't&va n$eva) '$an%o e*4orta a to%os"os '$0anos) + #art&'$"armente a "a &/"es&a) a" %&9"o/o. ;En C$0a se #$e%e 4a0"ar %e $n %&9"o/o '$"t$ra">e'$n%o) ($e es /arant2a %e $n 're'&m&ento m9s armn&'o + %e $n &n'remento %e &n&'&at&vas + %e

'reat&v&%a% en "a so'&e%a% '&v&". En este #a2s) "a ma+or #arte %e "os art2>&'es %e "a '$"t$ra -'at"&'os + no'at"&'os) 're+entes + no 're+entes- son 4om0res %e %&9"o/o) 'a#a'es %e #ro#oner + %e es'$'4ar. Losan&mo a #rose/$&r en s$s es>$er,os #or en'ontrar $na s2ntes&s 'on "a ($e to%os "os '$0anos #$e%an&%ent&>&'arseJ a 0$s'ar e" mo%o %e 'onso"&%ar $na &%ent&%a% '$0ana armn&'a ($e #$e%a &nte/rar en s$seno s$s m"t&#"es tra%&'&ones na'&ona"es.<

Este #ro+e'to ser2a %e e*traor%&nar&o &nterBs #ara e" >$t$ro %e C$0a) s& "a &/"es&a + "a revo"$'&n se'om#romet&eran a 'rear s$s 'on%&'&ones) ($e son e" re'ono'&m&ento m$t$o %e va"ores >$n%amenta"es + "a'a#a'&%a% %e a$to'r2t&'a. La Revo"$'&n C$0ana) 'on s$ #ro'eso %e re't&>&'a'&n + 'on e" es>$er,o '$"t$ra"+ #e%a//&'o rea"&,a%o #or F&%e" Castro en "a #re#ara'&n %e "a v&s&ta #a#a") 'am&na) entre m$'4as'ontra%&''&ones) en esta %&re''&n. 8 Se #$e%e %e'&r "o m&smo %e "a &/"es&a %e 1$an Pa0"o II S$ %e>&n&'&n'r&st&ano'Bntr&'a %e "a '$"t$ra) 8no e*'"$+e e" re'ono'&m&ento %e '$"t$ras "a&'as) ateas) ant&'"er&'a"esC$an%o e" Pa#a #ro'"ama «que la cultura cubana, si está abierta a la Verdad  -?'on ma+s'$"a@- , afian&arásu identidad nacional y la hará crecer en humanidad+  no s$/&ere ($e e" %&9"o/o a$s#&'&a%o #or B" ten/a($e rea"&,arse entre "a Ver%a% + e" error 8A'aso no s$/&ere esta %e>&n&'&n %e" %&9"o/o "a '&ta %e FB"&*Vare"a ($e 'on'"$+e e" %&s'$rso «*íles que ellos ?"os 7venes@ son "a %$"'e es#eran,a %e "a #atr&a + ($e no4a+ #atr&a s&n v&rt$% n& v&rt$% 'on &m#&e%a%<.

Esta &nter#reta'&n %e "a 4&stor&a %e C$0a %o'$menta 'omo 1$an Pa0"o II) 'onven'&%o "$'4a%or 'ontrato%as "as &%eo"o/2as en e" nom0re %e "a >e) se m$eve en rea"&%a% B" m&smo a "a "$,) o me7or %&'4o a "asom0ra) %e $na &%eo"o/2a) e" 'r&st&ano'entr&smo) ($e o'$"ta + ter/&versa as#e'tos &m#ortantes %e "area"&%a%.

 

8V&ra7e en e" ma/&ster&o %e 1$an Pa0"o II

Tenemos a4ora "os e"ementos #ara 'ontestar "a #re/$nta ($e nos #"anteamos %es%e $n #r&n'&#&o. 8Es#os&0"e) a #esar %e esta 'ontra#os&'&n '$"t$ra") #er'&0&r en e" v&a7e a C$0a $n v&ra7e en e" ma/&ster&o %e1$an Pa0"o II) #rovo'a%o #or e" n$evo 'onte*to &nterna'&ona" 8Se #$e%e ver en este v&a7e $na seHa" %e($e) %es%e e" #$nto %e v&sta %e" Vat&'ano) "a /$erra >r2a se 4a a'a0a%o + "a 'r2t&'a %e" neo"&0era"&smo 4aas$m&%o $n #a#e" 'entra" Es Bsta) 'omo a'a0amos %e ver) "a &nter#reta'&n #ro#$esta #or F&%e" Castro)($e 4a or&enta%o s$ #re#ara'&n %e "a v&s&ta) + ($e B" #$e%e 'ons&%erar 'on>&rma%a) %e a"/$na manera)#or e" B*&to %e s$ estrate/&a.

Ya 4emos re'ono'&%o + va"ora%o e" n$evo '"&ma a>e't&vo) %e ev&%ente s&m#at2a) en e" '$a" se 4a

%esarro""a%o e" en'$entro %e" Pa#a 'on e" #$e0"o '$0ano +) en #art&'$"ar) 'on e" #ro#&o F&%e" Castro.emos re'ono'&%o + va"ora%o a%em9s e" tono #a'ato 'on e" '$a" e" Pa#a 4a #ron$n'&a%o to%os s$s%&s'$rsos) &n'"$s&ve "os #asos ($e ten2an $n 'onten&%o >$ertemente #o"Bm&'o. emos seHa"a%o "as&nv&ta'&ones a" %&9"o/o ($e mar'aron "a v&s&ta) #art&'$"armente e" en'$entro 'on e" m$n%o %e "a '$"t$ra.8A ($B se %e0e este 'am0&o %e a't&t$%) 'on res#e'to) #or e7em#"o) a "a v&s&ta a N&'ara/$a

Contr&0$+ &n%$%a0"emente a #ro#&'&ar"o "a a$sen'&a en C$0a %e $na %&s&%en'&a 'at"&'a) re#resenta%a#or $na ;&/"es&a #o#$"ar<) e &ns#&ra%a #or "a teo"o/2a %e "a "&0era'&n) ($e 4a02a s&%o e" 0"an'o #r&n'&#a"%e "os ata($es en "a v&s&ta a N&'ara/$a + CentroamBr&'a. Contr&0$+ tam0&Bn e" 'om#rom&so %e F&%e"Castro en "a #re#ara'&n %e" #$e0"o '$0ano a" en'$entro 'on e" Pa#a + #art&'$"armente s$ &nv&ta'&n aes'$'4ar"o res#et$osamente) &n'"$s&ve s& 4$0&era %&'4o 'osas %esa/ra%a0"es.

Pero "a #re/$nta ($e nos #"anteamos a4ora es "a s&/$&ente: 8en ($B me%&%a e" 'am0&o %e '"&ma + %e tonore>"e7a $na evo"$'&n %o'tr&na") #rovo'a%a #or e" n$evo or%en m$n%&a" $n&#o"ar) es %e'&r $n a0an%ono %e"ant&'om$n&smo + $na toma %e #art&%o ant&"&0era" Para 'ontestar este &nterro/ante) tenemos ($eana"&,ar: K. E" re'ono'&m&ento) s& es ($e "o 4a+) %e #arte %e" Pa#a) %e "os va"ores %e "a Revo"$'&n C$0ana)

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+ a $n n&ve" m9s /enera") %e "a teor2a mar*&staJ + #or tanto %e 'onver/en'&as entre Bsta + "a %o'tr&na so'&a"'r&st&anaJ . E" sent&%o %e s$ 'r2t&'a %e" neo"&0era"&smo.

A4ora) son m$+ #o'as + m$+ t2m&%as "as e*#res&ones ($e en "a v&s&ta %e" Pa#a se #$e%en 'ons&%erarre'ono'&m&entos %e "a Revo"$'&n C$0ana + %e s$s 'on($&stas. a0"an%o a" ;m$n%o %e" %o"or< a>&rma:«Cono&co los grandes esfuer&os que se hacen en Cuba en el campo de la salud, a pesar de las limitacioneseconómicas que sufre el país+J re'ono'e enton'es "os es>$er,os) no "os res$"ta%os) ($e #erm&t&r2an 4a0"ar

%e «conquistas de la re"olución+.

Por "o ($e se re>&ere a "a e%$'a'&n) en e" mensa7e entre/a%o a "os 7venes) e" Pa#a) %es#$Bs %e seHa"ar "a«escalofriante crisis de "alores+ 'omenta: «3rente a ello, las estructuras p4blicas para la educación, lacreación artística, literaria y humanística y la in"estigación científica y tecnológica, así como la

 proliferación de escuelas y maestros, han tratado de contribuir a despertar una notable preocupación por buscar la "erdad, por defender la belle&a y por sal"ar la bondad5 pero han suscitado tambi(n las

 preguntas de muchos de 6stedes7 8.or qu( la abundancia de medios e instituciones no llega acorresponder plenamente con el fin deseado9 !a respuesta no hay que buscarla solamente en lasestructuras, en los medios e instituciones, en el sistema político o en los embargos económicos, que sonsiempre condenables por lesionar a los más necesitados$ Estas causas son sólo parte de la respuesta, perono tocan el fondo del problema+. Esta #resenta'&n %e "as 'on($&stas %e "a revo"$'&n en e" 'am#o %e "ae%$'a'&n #are'e m9s #reo'$#a%a #or seHa"ar s$s "2m&tes ($e #or va"orar "os avan'es ($e re#resenta. La&ns&sten'&a so0re "os "2m&tes + "os #ro0"emas ($e ($e%an a0&ertos #re#ara e" 'am&no a" o>re'&m&ento %e "aso"$'&n re#resenta%a #or «la fuer&a de Cristo :esucitado+: «;%fronten con fortale&a y templan&a, con

 justicia y prudencia los grandes desafíos del momento presente5 "uel"an a las raíces cubanas y cristianas$$$para construir un futuro cada "e& más digno y más libre-+ 'on'&entes %e ($e «lle"an consigouna tradición rica y grande cuyos orígenes están en el cristianismo+.

Pero ($&,9s e" re'ono'&m&ento m9s e*#"2'&to + s&/n&>&'at&vo %e" mar*&smo se en'$entre en otro v&a7e) en e"%&s'$rso entre/a%o a" Re'tor %e "a Un&vers&%a% %e R&/a) L&t$an&a) %$rante e" en'$entro 'on e" m$n%oa'a%Bm&'o + %e "a '$"t$ra) e" M %e se#t&em0re %e KMMQ: «!as eigencias a las cuales el sistema de poder socialista había pretendido históricamente contestar eran reales y gra"es$ !a situación de eplotación a la

que un capitalismo inhumano había sometido al proletariado desde el principio de la sociedad industrial representaba realmente una iniquidad que tambi(n la doctrina social de la Iglesia condenabaabiertamente$ <ste era, en 4ltimo t(rmino, el alma de "erdad del marismo, gracias a la cual ha podido

 presentarse como atracti"o en las mismas sociedades occidentales$ 'in embargo, la solución que (l  proponía tenía que fracasar$ Cuando a la persona se le quita la referencia trascendente, ella llega a ser casi una gota en un oc(ano y su dignidad, a pesar de que se la recono&ca y proclame sinceramente,

 pierde su garantía más sólida$ .or eso pudo ocurrir que, en nombre de la «clase+ o de un supuesto biende la sociedad, las personas indi"iduales fueran oprimidas y hasta suprimidas$$$ !a negación de *ios pri"aa la persona humana de sus raíces, y por consiguiente, lle"a a reorgani&ar el orden social prescindiendode la dignidad y la responsabilidad de la persona humana ?Centes&m$s ann$s) KQ@+

Este documento, que por un lado reconoce el «alma de "erdad+ del marismo, denuncia por el otro lado

su límite fundamental, la negación de *ios, que pri"a de fundamento, y por lo tanto de solide&, los"alores que (l pretende afirmar y condena ine"itablemente el sistema al fracaso$ 'e entiende así por qu(le es tan difícil al .apa reconocer positi"amente las conquistas de la :e"olución Cubana5 y sobre todoadmitir alguna con"ergencia entre ellas y las eigencias e"ang(licas$ 'e entiende entonces por qu(, bajoeste punto de "ista, no se puede hablar de una e"olución doctrinal de su parte$

'in embargo, un signo de e"olución podría ser la actitud abiertamente crítica asumida frente al liberalismo y al capitalismo y su postura «equidistante+ entre el socialismo y el capitalismo$ % esterespecto, el .apa declara en su 4ltima homilía cubana7 «:esurge en "arios lugares una forma deneoliberalismo capitalista que subordina la persona humana y condiciona el desarrollo de los pueblos alas fuer&as ciegas del mercado gra"ando desde sus centros de poder a los países menos fa"orecidos con

cargas insoportables$ %sí en ocasiones se impone como condiciones para recibir nue"as ayudas, programas económicos insostenibles$ *e este modo se asiste en el concierto de las naciones al enriquecimiento eagerado de unos pocos a costa del empobrecimiento de muchos, de forma que los

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ricos son cada "e& más ricos y los pobres cada "e& más pobres$+

Con esta declaración, el .apa completa su crítica de los «sistemas ideológicos y políticos que se han idosucediendo en los dos 4ltimos siglos+, distanciándose a la "e& del liberalismo y del marismo, para

 presentar como alternati"a la «cultura del amor y de la "ida+, propuesta por la iglesia como «maestra enhumanidad+ y asegurando «(ste es el gran cambio que la sociedad necesita y espera+$

8Es legítimo pensar entonces que despu(s del desmoronamiento del campo socialista, el análisis de losestragos del neoliberalismo en el mundo est( lle"ando al magisterio pontificio a cuestionar el capitalismocon la misma se"eridad con la que cuestionó y cuestiona el socialismo marista9 El documento cla"e paracontestar la pregunta es la encíclica Centesimus annus, promulgada en =>>=, en la cual el .apa polacorefleiona sobre el sentido de los acontecimientos de los cuales fue protagonista, y tra&a las líneas para laconstrucción de un nue"o orden mundial$ %hora, es notoria la clara diferencia de actitudes que, en estenue"o conteto, (l mantiene frente al comunismo por un lado y al capitalismo por el otro7 confirma puesla condena radical del marismo y propugna una fundamentación católica del capitalismo$

.or lo que concierne al marismo, el fundamento ateo del sistema eplica por qu(, en la óptica del .apa,se tenga que considerarlo intrínsecamente per"erso y por qu( su fracaso histórico era /y es1 ine"itable$Con respecto al capitalismo, la actitud es mucho más mati&ada$ El .apa plantea al respecto una pregunta

crucial7 «8'e puede decir qui&ás que, despu(s del fracaso del comunismo, el sistema "encedor sea el capitalismo y que hacia (l est(n dirigidos los esfuer&os de los países que tratan de reconstruir sueconomía y su sociedad9 8Es qui&ás (ste el modelo que es necesario proponer a los países del ercer ?undo, que buscan la "ía del "erdadero progreso económico y ci"il9+$ «!a respuesta )contesta el .apa)es compleja$ 'i por «capitalismo+ se entiende un sistema económico que reconoce el papel fundamental y 

 positi"o de la empresa, del mercado, de la propiedad pri"ada y de la consiguiente responsabilidad paracon los medios de producción, de la libre creati"idad humana en el sector de la economía, la respuestaciertamente es positi"a$$$ .ero si por «capitalismo+ se entiende un sistema en el cual la libertad, en el ámbito económico, no está encuadrada en un sólido conteto jurídico que la ponga al ser"icio de lalibertad humana integral y la considere como una particular dimensión de la misma, cuyo centro es (ticoy religioso, entonces la respuesta es absolutamente negati"a+$

!as críticas que hace la encíclica al sistema capitalista son numerosas y gra"es, pero no tocan al sistemacomo tal, su lógica, su estructuras, sino algunas de sus reali&aciones, que deben y pueden corregirse$ Elladistingue un capitalismo regulado, justo, democrático, igualitario, eficiente, de uno sal"aje, injusto,totalitario, ecluyente, ineficiente$ *istingue el capitalismo en cuanto a instrumento t(cnico del sistema(tico)cultural en el que se inspiran sus reali&aciones particulares$ Entonces, el modelo de sociedad 

 propuesto por el .apa como alternati"a al marismo es el de una democracia occidental que reconoce susraíces cristianas y, por consiguiente, el "alor normati"o del cristianismo y de su doctrina social5 es enotras palabras, el de un capitalismo con rostro humano y cristiano$

En conclusión, en el magisterio del .apa se puede indudablemente hablar, despu(s del derrumbe del comunismo europeo, de un despla&amiento de la atención hacia el impacto del liberalismo sobre la "ida

de los pue)blos5 despla&amiento que, sin embargo, no implica una e"olución doctrinal ni en el sentido deuna ree"aluación del marismo ni de la condena del liberalismo como tal$ !a guerra fría contra el comunismo ha dejado de estar en el centro de las preocupaciones, pero no se ha concluido, sino que siguecon m(todos distintos$ 'u prolongación más significati"a está en la represión de la teología de laliberación, considerada por el magisterio como una "ersión disfra&ada del marismo$

 

C@AC!6'IBA7 ?%:I'?@ D C:I'I%AI'?@ EA E! 6?:%! *E! E:CE: ?I!EAI@$

Es una eperiencia bastante dramática para un creyente, al final de esta comparación entre el  pensamiento del laico 3idel Castro y del católico Farol Gojtyla, constatar que se reconoce a menudo más profundamente en el primero que en el segundo$ Eperiencia dramática y cargada de interrogantes, que

atra"iesan e inquietan nuestra "ida, estimulan nuestra b4squeda y marcan nuestro compromiso5interrogantes que conciernen el sentido mismo del ser cristiano, en el umbral del tercer milenio$

Con Farol Gojtyla pensamos que la noticia del %mor de *ios, anunciada al mundo por 2es4s de Aa&areth,

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encarnada en su testimonio y en su mensaje liberador, puede y tiene que inspirar los procesos deliberación integral de los hombres y los pueblos5 que puede animar un proyecto de nue"a ci"ili&ación y alumbrar el tercer milenio$

.ero nos negamos, como los indígenas concienti&ados y como 3idel Castro, a reconocer la buena noticiade la liberación en la que Farol Gojtyla llama «primera e"angeli&ación+7 (sta pues no fue un llamado delos pueblos originarios a la mo"ili&ación y la rebelión, como el del <odo, sino a la resignación y al 

sometimiento$ Como los indígenas y como 3idel Castro, tenemos que condenar, mo"idos por nuestra fe en 2es4s de Aa&areth, el genocidio perpetrado por los conquistadores de ayer y de hoy5 tenemos quedenunciar la complicidad del cristianismo con ellos5 tenemos que cuestionar radicalmente la continuidad entre la cru& plantada por los capellanes del imperio y la cru& sobre la cual murió, condenado por el imperio romano, el sub"ersi"o de Aa&areth$

Como 3idel Castro, sentimos que las aspiraciones profundas de la re"olución cubana con"ergen con las dela comunidad cristiana primiti"a5 que eiste una fuerte afinidad entre los mártires cristianos y losmártires comunistas5 que por lo tanto es cierto que «quien condena la re"olución condena a Cristo+$ El drama del cristianismo, es que muchas "eces en su historia, es Cristo el que condena a Cristo$

'i, en la perspecti"a de 2uan .ablo II, el derrumbe del comunismo europeo fue, como afirma la

Centesimus annus un triunfo de *ios, la "isita a Cuba pretendía completar ese derrumbe y ese triunfo,creando así las condiciones para la plena afirmación en el tercer milenio de la hegemonía de *ios y de laiglesia que lo representa$

Con esta interpretación de la re"olución de Cristo, el .apa prolongaba la celebración del VH centenario dela primera e"angeli&ación y caracteri&aba el jubileo del a#o JJJ$ 'in embargo, el centenario de lae"angeli&ación coincide con el de la conquista5 celebrarlo es entonces, asumir conciente oinconcientemente el punto de "ista de los conquistadores de ayer y de hoy$

Esta "isita fue entonces para 2uan .ablo II una etraordinaria oportunidad para proponer a Cuba y al mundo el rescate de los "alores cristianos como 4nica respuesta "álida a los problemas que plantea latransición al tercer milenio5 para proponer este proyecto de ci"ili&ación como alternati"a radical al 

secularismo y al ateísmo de la ci"ili&ación occidental$ 'in embargo, su ideología cristianoc(ntrica no le permitió apro"echar plenamente esta oportunidad, lle"ándolo a presentar ese proyecto comorestauración del cristianismo introducido a Cuba y a todo el continente por los europeos5 en otras

 palabras como restauración de la sociedad cristiana

3idel Castro, asumiendo desde el primer momento el punto de "ista de los pueblos oprimidos rebeldes, particularmente de los indígenas y los africanos escla"i&ados, cuestionaba no sólo la conquista, sinotambi(n la e"angeli&ación que pretendió legitimarla$ .aradójicamente, un re"olucionario laicocuestionaba la e"angeli&ación en nombre del propio e"angelio de 2es4s5 y presentaba el procesore"olucionario cubano como un intento más aut(ntico que esa e"angeli&ación, de encarnar en la historialos "alores originarios del cristianismo$

8Cómo se ubica entonces la "isita del .apa a Cuba en la historia del enfrentamiento entre marismo y cristianismo que ha marcado el siglo 9 El cristianismo que se opuso y se opone frontalmente al marismo y al socialismo no es en realidad el mensaje originario de 2es4s, sino una doctrina y unainstitución transformadas y deformadas por su alian&a con el imperio romano y posteriormente con losimperios de Europa y Aorteam(rica$ .or el otro lado, la alian&a con el imperio so"i(tico y el camposocialista ha jugado en relación con el socialismo un papel análogo, de transformación y deformación, al que jugó, con respecto al cristianismo de los orígenes, la alian&a con el imperio romano$

El sentido del proceso de rectificación desatado por 3idel Castro, está, si lo entiendo bien, en la ruptura deaquella alian&a y en el rescate del marismo originario, martiano, fidelista y gue"arista$ Criticando la(poca demasiado larga de la «copiadera+, 3idel ha reconocido esa dependencia y su impacto deformantesobre el proyecto socialista originario$ 'u crítica del socialismo europeo y del marismo dogmático en la

 preparación de la "isita papal es una importante profundi&ación de aquel proceso$ D no es casual que el  proceso de rectificación coincida con un redescubrimiento del Che 0ue"ara como pensador re"olucionario, crítico se"ero del marismo dogmático y defensor riguroso del proyecto cubano en su

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originalidad$ .or el otro lado, los cristianos comprometidos en el rescate de la inspiración originaria del e"angelio y que epresan su b4squeda en la teología de la liberación, sienten la necesidad de romper definiti"amente las alian&as del cristianismo con los imperios de ayer y de hoy$

Entonces, las afinidades entre la historia del marismo y la del cristianismo no coinciernen sólo a sudeformación por la alian&a que establecieron con los imperios, sino tambien a su reno"ación en el esfuer&o de quebrar esos "ínculos, liberándose de aquellas dependencias y rescatando sus proyectos

originarios$ En el cora&ón de estos proyectos está, para el marismo como para el cristianismo, laidentificación con los oprimidos y la toma de partido militante a su lado$ :escatar su inspiraciónoriginaria significa entonces, para el marismo como para el cristianismo, abatir el muro que los haseparado históricamente, descubrir su con"ergencia fundamental y comprometerse juntos, al lado de los

 pueblos oprimidos de todo el mundo, en la construcción de la nue"a historia$

A@%'

=$ Estas refleiones se fundan en los discursos pronunciados por 2uan .ablo II y por 3idel Castro durante la"isita del papa$ 'e fundan tambi(n en las tres largas inter"enciones que el Comandante le ha dedicado a

la "isita, antes y despu(s de su desarrollo7 I ) !a inter"ención del día =K de diciembre de =>>L, en laclausura de la %samblea Aacional del .oder .opular5 II) !a comparecencia ante la tele"isión cubana y lasondas internacionales de radio Mabana Cuba, el día =N de Enero de =>>O5 III ) !a comparecencia ante latele"isión cubana, la cadena nacional de radio :ebelde y las ondas internacionales de radio MabanaCuba, el día de febrero de =>>O$ ?is citas se refieren para el discurso I al teto policopiado difundido

 por la embajada de Cuba ante la 'anta 'ede5 para el IIH al teto publicado por rabajadores el => deEnero de =>>O5 para el IIIH al teto publicado por 0ranma el P de 3ebrero de =>>O$

$ 3idel y la religión$ Con"ersaciones con 3rei etto, !a Mabana, Editorial .ueblo y Educación, =>ON, pp$QO)PJ

0iulio 0irardi es teólogo de la liberación5 italiano$