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CAPITULO I Los esclavos de Yucatán. En este capitulo el periodista expresa lo que piensa acerca de México, y lo expresa como: un país sin libertad política, sin libertad de palabra, sin prensa libre, sin elecciones libres, sin sistema judicial, sin partidos políticos, sin ninguna garantía individual y sin libertad para conseguir felicidad. Y lo dice mas que nada por que en mas de una generación no ha habido elecciones electorales para que ocupen la presidencia. También habla sobre las experiencias que este gran periodista tuvo en México y fueron la forma en que los magnates del henequén, que es la planta que cultiva la región desde hace ya varios siglos. Hacían trabajar a indios mayas y yanquis (que por cierto el gobierno mandó llevarlos hasta ahí desde el norte del país donde vivían muy tranquilos)en las grandes haciendas donde vivían encerrados en jaulas para que no se escaparan. Narra también la forma en como los ricos hacendados hacen alarde de la esclavitud en complicidad con el gobierno. El principal entre los reyes del henequén de Yucatán es Olegario Molina, ex gobernador del Estado y secretario de Fomento de México. Sus propiedades, tanto en Yucatán como en Quintana Roo, abarcan 6 millones de Has.: un pequeño reino. La población del estado es de alrededor de 300 mil habitantes, 250 de los cuales forman el grupo de los esclavistas; pero la mayor extensión y la mayoría de los esclavos se concentra en la manos de 50 reyes del henequén y en cuanto a los esclavos son mas de 100 mil. Los hacendados no llaman esclavos a sus trabajadores; se refieren a ellos como “gente” u “obreros”, especialmente cuando hablan con forasteros. Esclavitud quiere decir propiedad sobre el cuerpo de un hombre, tan absoluta que este puede ser transferido a otro; propiedad que da al poseedor derecho

México Bárbaro de John kenneth Turner (Resumen por capitulos)

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México Bárbaro de John kenneth Turner (Resumen por capítulos),un recorrido por la esclavitud en México

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CAPITULO I

Los esclavos de Yucatán.

En este capitulo el periodista expresa lo que piensa acerca de México, y lo

expresa como: un país sin libertad política, sin libertad de palabra, sin prensa

libre, sin elecciones libres, sin sistema judicial, sin partidos políticos, sin

ninguna garantía individual y sin libertad para conseguir felicidad. Y lo dice mas

que nada por que en mas de una generación no ha habido elecciones

electorales para que ocupen la presidencia.

También habla sobre las experiencias que este gran periodista tuvo en México

y fueron la forma en que los magnates del henequén, que es la planta que

cultiva la región desde hace ya varios siglos. Hacían trabajar a indios mayas y

yanquis (que por cierto el gobierno mandó llevarlos hasta ahí desde el norte del

país donde vivían muy tranquilos)en las grandes haciendas donde vivían

encerrados en jaulas para que no se escaparan. Narra también la forma en

como los ricos hacendados hacen alarde de la esclavitud en complicidad con el

gobierno.

El principal entre los reyes del henequén de Yucatán es Olegario Molina, ex

gobernador del Estado y secretario de Fomento de México. Sus propiedades,

tanto en Yucatán como en Quintana Roo, abarcan 6 millones de Has.: un

pequeño reino.

La población del estado es de alrededor de 300 mil habitantes, 250 de los

cuales forman el grupo de los esclavistas; pero la mayor extensión y la mayoría

de los esclavos se concentra en la manos de 50 reyes del henequén y en

cuanto a los esclavos son mas de 100 mil.

Los hacendados no llaman esclavos a sus trabajadores; se refieren a ellos

como “gente” u “obreros”, especialmente cuando hablan con forasteros.

Esclavitud quiere decir propiedad sobre el cuerpo de un hombre, tan absoluta

que este puede ser transferido a otro; propiedad que da al poseedor derecho

de aprovechar lo que produzca ese cuerpo, matarlo de hambre, castigado a

voluntad, asesinarlo impunemente.

CAPITULO II.

El exterminio de los yanquis.

En este capitulo narra sus investigaciones sobre el origen de los conflictos de

los indios yanquis del norte de México con el gobierno, a tal grado que para

poderlos exterminar se les enviaba hasta la península de Yucatán, al sur del

-1-

país, para que sirvieran como esclavos en las haciendas henequén era, donde

morían a los seis meses por los malos tratos y el clima diferente.

Con esto trata de transmitir la manera en que vivían los indios yanquis de

Sonora.

También habla y describe detalladamente, las principales razones que tuvieron

los yanquis para su “rebelión”, de la manera en cómo confiscaban sus tierras,

de los medios en que el ejército se basaba para todos sus castigos y maltratos.

Comunica también las partes del estado que estaban en desacuerdo de esto,

pero que sin embargo vivían del sistema, y de la radical orden que dio el

presidente Porfirio Díaz para neutralizar completamente a los yanquis, para

más tarde deportarlos todos a Yucatán.

Todas las personas que eran recogidas para ser enviadas al exilio,

embarcaban en el puerto de Veracruz para más tarde ser trasladados a fincas

bajo los maltratos de los ricos, prepotentes y déspotas dueños en Yucatán.

Río Blanco es una localidad que por su ubicación, a parte de tener buen clima y

bonitos paisajes tiene buena localización sobretodo para la energía hidráulica..

es la fabrica de textiles más grande y moderna que había en el mundo, y con

mayores utilidades en comparación de su inversión. Ahí sólo hay trabajadores

mexicanos, hombres, mujeres y niños que laboran 13 horas diarias. Esa fábrica

lleva 16 años ahí, pero el pueblo se divide de antes y después de la huelga.

Debido a que en México no habían leyes que protegieran a los trabajadores, ni

sus garantías, ni que regularan las normas con las que las empresas

trabajaran, los trabajadores de Río Blanco, no sólo con no estar conformes con

respecto a sus jornadas ni a sus salarios, tenían que pagar renta de un cuarto

que les alquilaban, y recibir los maltratos de sus jefes.

Los obreros crean el “Círculo de obreros”, pero cuando es descubierto, se crea

una orden general para prohibir visitas y encarcelan inmediatamente a

principales sospechosos. Los trabajadores de Puebla se ponen también en

huelga y piden ayuda, así varias fábricas suspendieron sus actividades. Los

trabajadores de Río Blanco, crean la ofensiva, y se ponen 2 meses en huelga

con el simple alimento de las montañas, hasta que hartos de eso, recurren a

Porfirio Díaz, pidiéndole ayuda y prometiendo aceptar cualquier decisión suya.

Díaz manda hacer una falsa investigación y dice que reanuden las actividades.

Los obreros aceptan porque fue algo en que quedaron con Díaz, pero

necesitan provisiones para agarrar las fuerzas perdidas, así que van a la tienda

por maíz y frijoles y éstos les son negados, así que toman por la fuerza las

provisiones y queman la tienda, enseguida los soldados empiezan a disparar a

quemarropa. No hay cifras oficiales de los muertos, pero no cabe duda de que

si hubiera serían falsas.

-2-

El gobierno realizó varios esfuerzos para ocultar la matanza, pero llegó a oídos

de toda la nación, fue una masacre total.

Lo único que los obreros ganaron fue que Díaz quitó las tiendas, y ya ellos

podían comprar lo que quisieran en donde quisieran.

Pero eso no borra lo que los testigos vieron y sobrevivientes experimentaron, y

desde ese entonces Río Blanco no podrá volver a ser como antes.

Porfirio Díaz, tras derrocar a Lerdo, se reeligió en múltiples ocasiones hasta

poder contarse 34 años en el poder.

Empezó su carrera como estadista y es cierto que fue un soldado muy

destacado, pero eso no justifica que haya llegado al poder a perturbar la “paz”

en la que vivía nuestro país.

CAPITULO III.

En la ruta del exil io.

Con un ameno estilo el escritor relata sus experiencias al acompañar en su

viaje por tren a los indios yanquis desterrados a Yucatán. Ahí es testigo de la

forma en que familias enteras son desmembradas cruelmente y como al llegar

a su destino los hacendados casaban a las mujeres con extraños para crear

nuevas familias que produjeran más mano de obra.

Los Yanquis se dirigen a Yucatán, al llegar a puerto Guayas, abordan en un

barco de guerra del Gobierno hasta el puerto de San Blas. Después de casi

cuatro o cinco días de travesía, desembarcan y son conducidos a pie a través

de una de las sierras mas abruptas de México, desde San Blas a Tepic y desde

Tepic a San Marcos.

Los yanquis son enviados a las fincas henequeras como esclavos. Se les

contrata como muebles; son comprados y vendidos, no reciben jornales; pero

los alimentan con frijoles, tortillas y pascado podrido.

Los yanquis son “indios”, no son blancos; pero cuando se conversa con ellos

en un lenguaje mutuamente comprensible, queda uno impresionado por la

similitud de los procesos mentales del blanco y el moreno.

El Gobierno mexicano prohíbe el divorcio y, por lo tanto, volverse a casar; pero

para el hacendado yucateco todo es posible. Para una mujer yaqui, un hombre

asiático no es menos repugnante que para una mujer norteamericana; sin

embargo, una de las primeras barbaries que el henequero impone a la esclava

-3-

Yaqui que acaba de ser privada de su marido legal a quien ama, y obligarla a

casarse con un chino y vivir con el.

El amor de los yanquis por quien los ha criado es grande y varias de las

mujeres más jóvenes contaban los detalles de la separación de sus madres.

Hablaron otra vez de sus maridos.

CAPITULO IV.

Los esclavos contratados de Valle Nacional.

Un relato interesante de uno de los lugares más temidos del México de

principios del siglo XX, la región tabacalera de Valle Nacional en el estado

sureño de Oaxaca. Los esclavos que trabajaban en las haciendas tabacaleras

eran gente que era traída desde todos los puntos de la república ya fuera por

medio de contratos falsos, por arresto policíaco o bien por secuestro

descarado. Las condiciones de trabajo, iguales para hombres, mujeres y niños,

hacían que cualquier trabajador solo aguantara de tres a cinco meses; tiempo

después, cuando el agotamiento, el hambre y las palizas minaban su salud, los

patrones se deshacían de ellos arrojándolos a los pantanos, donde eran

devorados por los cocodrilos sin importar que estuvieran muertos o

agonizantes.

En Yucatán, los esclavos mayas mueren mas rápidamente de lo que nacen, y

dos tercios de los esclavos yanquis mueren rápidamente el primer año después

de su llegada a la región; pero en Valle Nacional todos los esclavos, con

excepción de muy pocos a caso 5% rinden tributo ala tierra en un lapso de

siete u ocho meses.

Valle Nacional se encuentra a tres horas de viaje de Córdoba y dos de El

Huele. Los viajeros perdidos llegan a veces hasta Tuxtepec, la ciudad principal

del distrito político; pero nadie va a Valle Nacional si no tiene algún negocio.

El jefe político es un funcionario público que rige un distrito político,

correspondiente a lo que se llama “condado” en los Estados Unidos. A su vez

se suele nombrar a los alcaldes de los pueblos de menor categoría que están

bajo su autoridad, así como a los funcionarios de importancia. No tiene ante

quien rendir cuentas excepto su gobernador, y a menos que el presidente de la

republica resuelva intervenir.

La quinta parte de los esclavos de Valle Nacional son mujeres y la tercera parte

niños menores de 15 años. Estos trabajan en los campos con los hombres.

-4-

CAPITULO V.

En el valle de la muerte.

“Notábamos en la gente mayor horror por la región. Ninguno había estado allí,

pero todos habían tenido rumores; algunos habían visto a los supervivientes y

la vista de esos cadáveres vivientes había confirmado tales rumores. Al bajar

del tren en Córdoba vimos que cruzaba el anden una procesión de 14 hombres;

dos adelante y dos detrás de la fila, con rifles, y los diez restantes con brazos

amarrados a la espalda y las cabezas bajas”.

Debido a su gran belleza, el Valle Nacional fue llamado Valle Real por los

primeros españoles; pero después de la independencia, el nombre fue

cambiado por el de Valle Nacional. Treinta y cinco años antes esas tierras

pertenecían a los indios chinantecos, tribu pacífica, entre quienes las dividió el

Presidente Juárez. Cuando Díaz subió al poder olvidó dictar medidas para

proteger a los nativos contra algunos hábiles españoles que azotan a sus

esclavos, de modo que en pocos años los indios se habían quedado sin sus

tierras.

Antonio Pla, probablemente el monstruo humano principal del Valle es el

gerente general de Balsa Hermanos y por tanto vigila el movimiento de 12

grandes haciendas. El movimiento anual de esclavos era de 15 mil y Pla

aseguraba que aunque mataran a los trabajadores, las autoridades no

intervendrían.

Féliz Díaz, pariente del presidente Díaz y enganchador por excelencia, es el

claro ejemplo de que las autoridades están profundamente involucradas en el

manejo y venta de esclavos, la explotación y asesinato de una gran mayoría de

la población mexicana.

CAPITULO VI.

Los peones del campo y los pobres de la ciudad.

Si los trabajadores rurales del México porfiriano no eran nada afortunados, las

condiciones de vida en las ciudades mexicanas de principios del siglo XX no

eran nada envidiables. El autor nos cuenta sus visitas a los albergues para

gente de clase trabajadora, donde por tres centavos podían rentar un pedazo

de suelo en una habitación para pasar la noche, habitación que llegaba a alojar

hasta doscientos huéspedes sin distinción de sexo, situación que originaba

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condiciones de promiscuidad. También hace referencia a las condiciones

insalubres de los barrios pobres.

La deuda real o imaginaria, es el nexo que ata al peón con su amo. Las

deudas son transmitidas de generación a generación aunque la Constitución no

reconoce el derecho del acreedor para apoderarse y retener al deudor

físicamente. Probablemente 5 millones de personas, o sea un tercio de la

población, viven en estado de peonaje. No menos del 80% de todos los

trabajadores de las haciendas y plantaciones en México, o son esclavos o

están sujetos a la tierra como peones. El otro 20% lo integran los considerados

trabajadores libres, quienes viven una existencia precaria en su esfuerzo por

esquivar la red de enganchadores. Los 750 mil esclavos y los 5 millones de

peones no monopolizan la miseria económica de México. Esta se extiende a

toda clase de personas que trabajan. Hay 150 mil trabajadores de minas y

fundiciones, hay 30 mil operadores de fábricas de algodón, hay 250 mil

sirvientes domésticos, hay 40 mil soldados de línea y 2 mil de policías en la

Ciudad de México, todos ellos reciben un sueldo miserable por sus jornales.

Por lo que refiere al vestido y la habitación, el mexicano ordinario vive en tales

condiciones de vida que no se ven en ninguna ciudad que merezca el nombre

de civilizada. Por lo menos 25 mil personas pasan las noches en mesones o

albergues tan miserables que sólo son peores las cárceles-dormitorios de los

esclavos y los dormitorios de prisiones. Más de 200 mil personas de la capital

duerme sobre piedras.

México tiene dos millones de km2 Es un país rico en recursos y no está

sobrepoblado. No hay razón natural ni geográfica para que su pueblo sea

próspero y feliz, pero es un pueblo muerto de hambre; una nación postrada en

la miseria.

CAPITULO VII.

El sistema de Diaz

La esclavitud y el peonaje de México, la pobreza y la ignorancia y la postración

general del pueblo se deben, en mi humilde opinión, a la organización

financiera y política que en la actualidad regle en ser país. El sistema del

general Díaz. El general Díaz instituyo un sistema propio, en el que su propia

persona es la figura central y dominante; En la que su capricho es la

constitución y la ley, es el sostén principal de la esclavitud, y los interese

Norteamérica con constituyen la fuerza determinante para que continué la

esclavitud . En todo el mundo se habla de México como de una republica..

Juárez fue reconocido en México y fuera de México como uno de los más

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hábiles y generosos patriotas. Pero Díaz durante 9 años se porto como un

rebelde ordinario, con el apoyo de bandidos, criminales y soldados.

En contrae de la voluntad de la mayoría del pueblo, el general Díaz tomo la

dirección del gobierno hace 34 años en otras palabras el general Díaz con una

habilidad que nadie puede negar, que se apropió de todos los poderes que

había en el país excepto la nación misma. Por una parte ejercía una dictadura

militar y por la otro disponía de una camarilla financiera. Tan inevitable como la

oscuridad de la noche desmoralización general, depravación. El botín más

grande que enriqueció a Díaz fue durante mucho tiempo la confiscación de

tierras del pueblo, uno de de los principales métodos para despojar de sus

tierras en general a sido la expedición de la ley del registro de la propiedad

patrocinada por Díaz, otro m medio favorito para confiscar pequeñas

propiedades consiste en señalar arbitrariamente los impuestos estatales.

La historia mexicana de la ultima generación esta plagada de matanzas

causadas por este proceder de Papantla, varios regimientos de soldados de

línea que mataron a unos 400 campesinos antes de que pudiera desalojarlos

de las tierras de Temosa chic los muertos fueron entre 800 y 2000.

El soborno es una institución establecida en las oficinas publicas mexicanas y

reconocida como un derecho que corresponde al funcionario que ocupa el

puesto, nunca se aplica la acción publica para mejorar las condiciones de vida

del pueblo humilde; es opción solo tiene la mira de asegurar cada vez mas la

posición del gobierno. Díaz estima el capital extranjero porque este significa el

apoyo de los gobiernos extranjeros.

En este capitulo se intento ofrecer al lector uno de los medios que el general

Díaz implementa para obtener apoyo para su gobierno, en resumen por medio

de los cuidados repartos de los puestos públicos, de los contratos y privilegios

especiales de diversa índole.

Gradualmente el país ha caído en manos de sus funcionarios, de sus amigos, y

de los extranjeros, el pueblo ha pagado, con el peonaje y la esclavitud, a

partido la libertad, la democracia y la bendición del progresa.

CAPITULO VIII.

Elementos represivos del régimen de Díaz.

Un sistema monstruoso de opresión dictatorial no puede existir sin los

elementos necesarios de intimidación a la población. En este capítulo se hace

referencia a la importancia para el gobierno de Díaz de contar con un elevado

número de soldados, policías y rurales que se encargaban de "poner orden"

-7-

entre la aterrorizada población así como de secuestrar gente para enviarla a

trabajar a las haciendas de Valle Nacional y de eliminar a quienes se atrevían a

criticar ese sistema inhumano de vida. También se describe a las principales

prisiones del país en esa época.

En 1876 Díaz ocupó con sus fuerzas la capital mexicana y se declaró a sí

mismo Presidente provisional. Poco después convocó a una supuesta elección

y se declaró a sí mismo Presidente constitucional. Desde entonces, Díaz se ha

establecido más de ocho veces como presidente y nunca ha tenido opositores

en las urnas electorales.

El presidente, el gobernador y el jefe político son tres clases de funcionarios

que representan todo el poder; en México el único poder es el Ejecutivo. Los

otros dos poderes sólo figuran de nombre y no existen en el país las elecciones

populares.

Díaz mantiene el grueso del Ejército concentrado cerca de los grandes centros

de población para reprimir cualquier intento de levantarse en armas. Llama a

filas a los trabajadores que se atreven a declararse en huelga, a los periodistas

que critican al Gobierno, a los agricultores que se resisten a pagar impuestos

exorbitantes, y a cualesquiera otros ciudadanos que ofrezcan posibilidades de

poder pagar su libertad.

También existe una policía secreta muy numerosa encargada de espiar y

detectar los movimientos revolucionarios. La acordada es una organización

secreta de asesinos que suele eliminar silenciosamente y sin escándalo a los

enemigos personales del gobernador, a los políticos sospechosos, a los

bandidos y a otros de quienes se sospeche que han cometido algún delito.

La ley fuga es una forma de asesinar que tuvo su origen en un decreto del Gral.

Díaz que autorizó a la policía para disparar sobre cualquier prisionero que

tratase de escapar mientras estuviera bajo guardia. Se afirma con seguridad

que de este modo se han cortado millares de vidas durante los 34 años de

gobierno.

CAPITULO IX.

La destrucción de los partidos de oposición.

Cuenta con toda claridad la forma en que muchos mexicanos patriotas

murieron por tratar de sacar a su pueblo de la esclavitud.

El movimiento del Partido Liberal fue el único al que Díaz permitió progresar

mucho en materia de organización. Este partido nació en el otoño de 1900.

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Tras un discurso del obispo que dejaba ver el resurgimiento de la Iglesia

Católica, se conformaron 125 clubes liberales, se fundaron alrededor de 50

periódicos y se convocó a una convención que se efectuaría en San Luis

Potosí en enero de 1901.

El Partido Liberal intentó dos revoluciones que terminaron fracasando por

diversos factores: primero por la eficacia del Gobierno para colocar espías

entre los Revolucionarios, segundo por los severos métodos aplicados en la

represión y tercero por la participación efectiva del Gobierno de los Estados

Unidos, puesto que las revueltas tenían que ser dirigidas desde el lado

norteamericano.

La rebelión de junio de 1908 sacudió profundamente a México conocida como

la Rebelión de las Vacas. Los liberales dijeron tener 46 grupos militares listos

para levantarse en México, pero resultó que toda la lucha la hicieron los

refugiados mexicanos que cruzaron la frontera. El Gobierno mexicano conocía

sus planes y arrestó a los miembros del grupo antes de la hora fijada.

Para junio de 1910 ya habían encarcelado en Estados Unidos a todos los

dirigentes liberales o bien, estaban ocultos. No había mexicano que se

atreviera a apoyar abiertamente la causa del Partido Liberal por temor a ser

encarcelado bajo la acusación de estar relacionado en alguna de las

rebeliones.

CAPITULO X.

La octava elección de Díaz por “unanimidad”.

Díaz se había mantenido a la cabeza del gobierno por mas de una generación

desde 1876. En 1910 Díaz fue electo por octava vez. Seria bienvenido un

partido de oposición en la republica mexicana, dijo Díaz. La declaración de que

apoyaría un movimiento en este sentido parecía una paradoja demodé que

hombre inteligentes del elemento progresista se unieron para proyectar un

movimiento sin estar en oposición directa contra Díaz. El plan consistió en

recomendar al presidente retener el puesto y al mismo tiempo pedirle que

permitiera al país elegir con libertad un vicepresidente, en poco tiempo se

habían organizado no menos de 500 clubes que en 1909 celebraron una

convención en la capital. No paso mucho tiempo sin que resaltara el hecho de

que en caso de haber elección el candidato de los liberales ganaría.

Tan pronto este movimiento adquirió popularidad Díaz actuó para destruirlo a

pesar del orden que prevalecía en sus asambleas.

-9-

En julio, un comité relacionista de la ciudad de México efectuó un mitin en

Guadalajara con un auditorio compuesto por estudiantes demócratas los

muertos y heridos eran de 12 a 35 y mil detenidos.

Después siguió una larga lista de arresto de miembros del movimiento

demócrata. Muchos fueron fusilados.

Cuando había elecciones fuera de las casillas se colocaban tropas federales

que prohibían a los demócratas votar al mismo tiempo se implementaron otras

medias ridículas.

A pesar de todo las ambiciones democráticas del pueblo se habían elevado en

tal forma que no podían ser anuladas. Del atrevimiento de solo postular al

vicepresidente se paso a postular a un posible presidente, Francisco I Madero.

Pero todos los miembros de los clubes fueron encarcelados. El día de las

elecciones los candidatos del partido demócrata fueron secuestrados.

Posteriormente las elecciones se llevaron acabo en una farsa total. Por lo cual

supuestamente Díaz había sido reelegido por octava vez y por unanimidad.

CAPITULO XI.

Cuatro huelgas mexicanas.

Aunque hubo muchos acontecimientos que mancharon de sangre las manos de

Porfirio Díaz, las huelgas de Cananea (Sonora) y Río Blanco (Veracruz) son los

hechos más horribles de represión y de injusticia que se conozcan no solo en

México, sino en el mundo entero. El autor narra paso a paso los incidentes que

se fueron presentando en el transcurso de las huelgas y la forma cruel en que

el estado ordenó la masacre inmisericorde del pueblo trabajador que se atrevió

a pedir sus derechos.

Díaz simuló investigar y pronunció su fallo, pero los obreros volvieron a trabajar

en las mismas condiciones.

Los huelguistas habían pasado hambre y a su regreso demandaron provisiones

alimenticias que les fueron negadas. Fue entonces cuando Margarita Martínez

exhortó al pueblo a tomar por la fuerza las provisiones. La gente saqueó la

tienda, la incendió después y por último prendió fuego a la fábrica. Los

soldados aparecieron inmediatamente y descargaron sus fusiles contra la

multitud. Fue una verdadera masacre en donde se cree que murieron entre 200

y 800 personas.

-10-

En el gobierno de Díaz no hay leyes de trabajo en vigor que protejan a los

trabajadores; no hay reglamentos eficaces contra el trabajo de los menores; no

hay procedimientos mediante los cuales el obrero pueda cobrar

indemnizaciones por daños, por heridas o por muerte en las minas o en las

máquinas. Los trabajadores no tienen derechos que los patrones estén

obligados a respetar. Además existe la opresión gubernamental al servicio del

patrón para obligar a latigazos al trabajador a que acepte sus condiciones.

CAPITULO XII.

Crit icas y comprobaciones

El contenido de esta obra causó una ola de comentarios lo mismo en Estados

Unidos y México. A pesar de todas la pruebas mostradas los norteamericanos

defendieron al presidente mexicano.

Muchos de estos veían en el General Díaz a una persona bondadosa incapaz

de someter a un país entero al sufrimiento de la esclavitud y del peonaje.

La mayoría de los norteamericanos no conocían realmente las condiciones en

que estaba la población de México, ya que Vivian completamente engañados,

pues se les hacia creer que México era un país lleno de oportunidades para

todos en el que los trabajadores contaban con las mejores condiciones para

laborar.

Por lo contrario los inversionistas norteamericanos a pesar que conocían las

verdaderas condiciones, optaron por negarlo ya que este sistema favorecía sus

ganancias. Pues el contar con esclavos era muy importante ya que ahorraban

cada centavo en alimentación, vivienda, salud de los trabajadores sin que nadie

dijera nada.

Por esto nunca se supo la verdad a ciencia cierta pues el complot cegaba a

todos los que nunca habían estado en México, frente a la esclavitud, el hambre

y las condiciones de retraso educativo e industrial.

A pesar que las pruebas estaban ahí nos cerramos a creer el cuento de hadas

que nos dieron los inversionistas norteamericanos y el Gobierno de Porfirio

Díaz.

-11-

CAPITULO XIII.

El contubernio de Díaz con la prensa norteamericana

Si existe alguna combinación de interés en los Estados Unidos que ejerza una

influencia tan poderosa como la del presidente Díaz sobre la prensa

norteamericana.

Existe una extraña, hasta misteriosa resistencia en los poderosos periodistas

norteamericanos para publicar cualquier cosa que perjudique al gobernante

mexicano.

Díaz controla todas las fuentes de noticias y los medios de transmitirlas. Los

periódicos se suprimen o subsidian a capricho del gobierno.

Por el deseo de obtener sórdidas utilidades, se han dejado a un lado los

principios de decencia y humanidad que en el consenso universal se admiten

como los mejores para el progreso del mundo.

Todos los directores de periódicos que se atrevían a dar a conocer algún

articulo que pudiera afectar al General Porfirio Díaz son perseguidos, multados,

censurados y saqueados e incluso se les da el exilio.

Pues afectan los intereses de los inversionistas norteamericanos.

También hay periódicos que favorecen el sistema Díaz ya que los directores de

estos tienen negocios en México y muchos de ellos siguen manteniendo a los

esclavos sin ningún remordimiento.

CAPITULO XIV.

Los socios norteamericanos de Díaz

Los Estados unidos son socios en la esclavitud que existe en México, son

responsables, en parte, del predominio del sistema de esclavitud en México,

me refiero al poder organizado de manera oficial representa al país en el

interior y en el extranjero. Me refiero al gobierno federal de los Estados Unidos

y los intereses que los controla.

Confieso que hay muchos norteamericanos dispuestos a probar que la

esclavitud es provechosa en México. Los Estados Unidos ha mantenido a Díaz

en el poder cuando debiera haber caído.

-12-

Ya que ellos obtienen utilidades de la esclavitud mexicana y se esfuerzan para

mantenerla.

También los norteamericanos trabajan con esclavos, los compran los explotan,

los encierran durante la noche, los azotan, los matan, exactamente igual que

otros empresarios en México

En caso de una revolución grave, los Estados Unidos intervendrán con el

pretexto, de proteger el capital norteamericano y la intervención destruiría la

ultima esperanza de México para obtener una existencia nacional

independiente.

Porfirio Díaz a vendido prácticamente al país, Ya que todas las ganancias que

debería obtener el pueblo mexicano son llevadas al extranjeros principalmente

a Estados Unidos, pues ellos invierten un capital ridículo en petróleo,

ferrocarriles, haciendas, hectáreas de cultivo, y reciben grandes utilidades.

CAPITULO XV.

La persecución norteamericana de los enemigos de Díaz

Los Estados Unidos, cuna de la libertad, se han dado las manos con Porfirio

Díaz, el déspota más devastador que gobierna una nación.

Han constituido una fuerza final y determinante de la continuación del sistema

de la esclavitud, han hecho aun lado sus principios respetados pro

generaciones, han violado, penalmente algunas leyes, han permitido, alentado

y protegido este sistema a pesar de ser injusto.

Se ha negado a los ciudadanos mexicanos el derecho de asilo y la ordinaria

protección de las leyes norteamericanas. Durante los últimos cinco años han

dado encarcelados en los Estados Unidos centenares de refugiados mexicanos

y han ocurrido muchos intentos de devolver a estos al otro lado de la frontera

para que el Gobierno de Díaz les aplicara sus propios métodos sumarios.

El plan de deportar a los refugiados políticos por medio del departamento de

migración fue más efectivo. Por lo contrario el refugiado tiene derecho a que se

le presten de modo especial solícitos cuidados por esa misma razón.

Otros tantos han sido secuestrados ya que no hay manera de deportarlos, y

han aparecido en alguna Cárcel mexicana si les va bien.

-13-

Los exiliados consideran este incidente como parte de una conspiración para

crearles dificultades.

El gobierno mexicano ha pedido también que no se admitan fianzas de los

reos, lo cual les fue concedido.

La existencia, dentro del gobierno de los Estados unidos, de un deseo

incontenido de servir a Díaz, es demostrada por los casos, que a pesar de que

la prueba de violación de las leyes de neutralidad es 10 veces más clara.

Quizás haya mas persecuciones. También puede no haberlas. De cualquier

modo, la justicia no quedara satisfecha.

CAPITULO XVI.

La personalidad de Porfir io Díaz

La estimación común de los norteamericanos sobre la personalidad de Porfirio

Díaz, por lo menos en los últimos dos años en realidad ha establecido que ese

presidente es una muy buena persona. Pero los hechos hablan por si solos sin

que importe cuan oscuro sea el hombre que los saca a la luz.

Al juzgar la vida de un hombre, es especial si es un hombre que ha decidido la

suerte de millares, que ha salvado una nación o la ha desecho. El poder

deslumbra a los fuertes y a los débiles y el poder de Díaz ha deslumbrado a los

hombres y a ha acobardado hasta el punto de que no tiene valor de mirar con

fijeza y tiempo suficiente lo que brilla para advertir los huesos y la carroña que

hay detrás.

Díaz ha hecho a México moderno, ha traído la tranquilidad a México como una

especie de príncipe de la paz y es un modelo de virtudes en su vida privada.

Solo palabras.

Durante 20 años Díaz lucho del lado de México y del patriotismo. Pero también

sin pretexto valido encendió una rebelión tras de otro con el propósito de

conquistar el poder supremo de la nación. Ha iniciado varias revoluciones en

contra del gobierno tales como: La Ciudadela, Plan de la Noria, Plan de

Tuxtepec, Plan de Palo Blanco.

Como jefe militar, el dictador fue notable por su crueldad y su sed de venganza

y la nación ha sufrido amargamente por esa causa.

-14-

CAPITULO XVII.

El pueblo mexicano

Cada defensa de Díaz es un ataque al pueblo mexicano.

Según la estimación de los norteamericanos, los mexicanos somos unos

perezosos que no nos gusta trabajar, y que tenemos un fanatismo terrible con

nuestra religión.

El señor esperaba que cada bracero hiciera el mismo trabajo que un

norteamericano sano y que además viviera del aire.

Se la acusa también al mexicano de ser un ladrón ya enterado.

Por si fuera poco el país se halla terriblemente retrasado en el uso de

maquinaria moderna, y por eso se acusa al mexicano de no ser progresista.

Se acusa al pueblo mexicano de ser ignorante, como si esto fuera un crimen,

cuando no hay las oportunidades necesarias para hacerlo, cuando las escuelas

son cerradas y el dinero destinado para ella es usado para enriquecer al

gobierno.

La masa del pueblo es iletrada pero no estúpida es muy capaz y en igual

circunstancias trabaja mejor que cualquier norteamericano.

Además se piensa que los mexicanos son tan felices siendo esclavos que seria

un crimen dejarlos en libertad y darles un gobierno democrático.

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INDICE.

Introducción……………………………………………………

I.- Los esclavos de Yucatán………………………………………. 1

II.-El exterminio de los Yanquis…………………………………… 1

III.-En la ruta del exil io…………………………………………….. 3

IV.-Los esclavos contratados de Valle Nacional……………… 4

V.-En el Valle de la Muerte…………………………………………. 5

VI.-Los peones del campo y los pobres de la Ciudad……….. 5

VII.-El sistema de Díaz……………………………………………… 6

VIII.-Elementos represivos del régimen de Díaz……………. 7

IX.-La destrucción de los partidos de oposición……………… 8

X.-La octava elección de Díaz por “unanimidad”…………….. 9

XI.-Cuatro huelgas mexicanas……………………………………. 10

XII.-Crit icas y comprobaciones…………………………………… 11

XIII.-El contubernio de Díaz con la prensa norteamericana. 12

XIV.-Los socios norteamericanos de Díaz……………………… 12

XV.-La persecución norteamericana de los enemigos de Díaz 13

XVI.-La personalidad de Porfirio Díaz…………………………… 14

XVII.-El pueblo mexicano………………………………………….. 15

INTRODUCCIÓN

Es un amplio reportaje sobre la situación polít ica y social de

México durante el ocaso de la larga dictadura de Porfirio Díaz. A

través de sus viajes por la República Mexicana, sus entrevistas,

sus investigaciones, y haciéndose pasar de incógnito por un

empresario norteamericano y millonario, John Kenneth Turner

expone el estado esclavista que sometió a la mayoría de la

población indígena y mestiza del país en pleno siglo XX: los

“trabajadores-esclavos” debían someterse a los maltratos físicos,

las largas jornadas de trabajo sin descanso, a condiciones de

vivienda y al imentación precaria que generalmente los conducían a

la muerte a corto plazo, a los engaños para ser “contratados-

secuestrados” y a los abusos de poder por parte del mismo

gobierno para robarles sus tierras de tradición milenaria.

El relato se sitúa entre 1908 y poco antes de la Revolución.

El objetivo de éste libro, fue en su momento, tratar de comunicar a

las personas de la situación que vivía México en esa época, todas

las redacciones, vivencias, textos y entrevistas de John Kenneth,

son plasmadas de una forma ya tangible que muestra a quien lea

éste texto, lo que México estaba viviendo y para personas como

nosotros, o sea que lo estamos leyendo años después de que

sucedió, nos da a entender, y más que nada valorar, el sentido que

tiene en la actualidad de l ibertad, se hace mucho más entendible

el hecho de que la “esclavitud” estuvo en algún momento, y que de

hecho existió, y el l ibro está narrado de una manera que te puedes

dar cuenta de que las “luchas” son algo más que simple historias

de texto tr i l ladas, sino más bien un acontecimiento, súbito, real, y

más que nada verídico.

El l ibro se divide en los siguientes capítulos: