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Misión de la Familia en la
Sociedad
Origen de la vocación misionera de la familia
«Íntima comunidad de VIDA y de AMOR» (Gaudium et Spes, 48).
No hay lugar mejor donde la vida y el amor sean el motor y al mismo tiempo el fruto.
Comunidad de santificación
En la familia se aprenden las virtudes específicas del Evangelio como son:
Justicia
Mansedumbre
Paz
Castidad
Misericordia
Pureza del
corazón
¿De dónde salen las vocaciones sino de las familias auténticamente cristianas?
Preparar, cultivar y defender las vocaciones que Dios pueda suscitar en el seno de la familia.
La familia debe enriquecerse con valores espirituales y morales, tales como:
• Una religiosidad convencida y profunda.• Una conciencia apostólica y eclesial.• Un exacto conocimiento de la vocación.
La familia y la vocación
Iglesia Doméstica
Los padres se convierten en verdaderos testigos de evangelización cuando son ellos los primeros que viven e invitan a vivir a sus hijos la fe.
«… los padres deben afrontar con valentía y gran serenidad de espíritu las dificultades que haya a veces en los mismos hijos su ministerio de evangelización» (Familiaris Consortio, 53).
¿Cómo queremos sociedades comprensivas, si no hay comprensión entre los esposos y los hijos en el hogar?
¿Cómo queremos sociedades solidarias si dentro de la casa cada uno se busca nada más a sí mismo?
Reflexión
La familia cristiana está llamada a poner al servicio de la
sociedad su propio ser y obrar.
La familia es Iglesia Doméstica, al servicio de la Iglesia y el
mundo.
La familia en su diario vivir debe construir no sólo en su hogar sino también en la sociedad.
«Vayan por todo el mundo y proclamen el evangelio a toda creatura…» (Mc 16.16)
Conclusión
«Señor, que hagamos de nuestra familia, una comunidad de personas al servicio de la vida, comprometida en el desarrollo de la sociedad y partícipe en la vida y misión de la Iglesia, mediante la fe, la oración y la caridad. Que nuestra Madre Santísima de Guadalupe nos acompañe siempre, en el empeño de hacer de nuestra familia, lo que Tú quieres y nosotros deseamos».
Oración