Un paseo por Nova EthicaPor: Marilia Bones Rodrguez

Es muy frecuente escuchar que cuando se habla de moral se refiere a algo tico. Muchas veces, tambin, vemos en los medios de comunicacin expresarse de que un tal fulano cometi un acto inmoral o un legislador obr de una manera anti tica. Ambas versiones nos conducen a pensar que lo moral y lo tico significan lo bueno. Lo cual ha creado que entendamos que estos trminos son sinnimos. Pero este libro de Andrs Rodrguez Rubio, Ethica Nova, nos lleva a descubrir con claridad qu significan estos trminos. Comienza presentando los significados y orgenes de la tica y la moral, porque necesitamos entender estos conceptos para poder comprender lo expuesto en su obra. Titula su obra de esa manera porque despus de leerla te percatas que la tica ha sufrido unas transformaciones a travs del tiempo, que la de ahora es moderna y distinta. Que hoy da se habla de tica: sexual, del trabajo, la social, etc. Para ello, nos lleva a un recuento en la lnea del tiempo de los exponentes mayores de la tica, los problemas de sta, como la libertad y en cmo sta se ha convertido nuevamente en una tica casi provisional como la de Descartes.La tica no busca ver cmo son los actos del ser humano, sino cmo deben ser y qu principios dirigen la conducta del hombre hacia una vida superior. Es la forma que deberamos vivir y hacer las cosas. Se pregunta si lo que la humanidad entiende por moral contribuye a la felicidad humana. Investiga la pertinencia, la validez y la crtica de la moral, definida como un elemento propio del ser humano. Se entiende como las buenas costumbres que todos deberamos mostrar. Esta obra nos remonta primero a Grecia, donde los hombres que hoy conocemos como los grandes filsofos, investigaron estos aspectos. El filsofo Protgoras, hizo famosa su expresin de que el hombre es la medida de todas las cosas. Idea muy controversial si recordamos que el mundo griego estaba regido por dioses, pero l opin que los dioses no guiaban sus vidas, sino que el hombre era lo suficiente capaz de explicarse sus cosas; de esta manera dndole poder. Esto demuestra que el hombre comienza a racionalizar y es ah donde empieza la esencia de la tica, al hombre ir tomando las riendas de su destino.Aristteles coloc la tica entre los saberes prcticos. Pens que el hombre poda controlar su manera de obrar. No consider que la moral sea impuesta ni natural, solo depende de cmo te conduzcas para tener una buena vida. El hombre es el que introduce la moral en el mundo, la naturaleza dio la facultad de tomar decisiones, de las cuales somos moralmente responsables. En la lectura vamos entendiendo que la tica tiene un papel fundamental en establecer un equilibrio entre el individuo y la sociedad para que ninguno de stos se interponga sobre el otro. Uno de los filsofos ms entregados al tema, lo fue Scrates. Su filosofa se enfoca en descubrir porque el hombre hace el mal. Descubre que lo hace por ignorancia porque una vez el hombre conoce la virtud, el hombre es bueno. El aret (excelencia moral) era la meta del hombre. La moralidad estaba ligada al valor heroico. Leyendo sobre el particular me parece que el hombre en este sentido era muy vanidoso y su motivo de vida estaba basado en la popularidad, lo cual me resulta insensato. Scrates pensaba que el saber y el hacer estaban unidos. Su moral se basa en que si conoces de virtud eres virtuoso. No percibe que no puedas hacer algo, si lo sabes.De igual forma, Platn pensaba que alcanzar una buena vida era por medio de una conducta excelente. Deca que la vida le pertenece al que tiene dominio de s mismo. El hombre debe apropiarse de las virtudes, que eran la salud y la belleza y alejarse del vicio que es la enfermedad. Aseguraba que el ser virtuoso no es algo natural, sino que se adquiere por voluntad propia. El hombre excelente al cual aspira la tica de Platn es aquel que es: prudente, fuerte, temperante y justo. La filosofa moral se atiene a la experiencia particular de los hombres para alcanzar unas tendencias universales. Parte creyendo que todo lo que el hombre desea es el bien, aunque los considera separados y particulares. Considera que la felicidad del hombre la puede hacer y es el resultado de la buena vida. Se separa de Scrates y Platn al plantear que no slo con saberse las cosas se es virtuoso, sino que es practicando lo que aprendemos se llega la excelencia. Su tica es flexible. El hombre quiere ser bueno pero tiene dos obstculos que son el placer y el temor. Esa es la batalla ms grande del hombre, porque la moral aristotlica no es de actos, sino de carcter. El hombre que obra rectamente conseguir la aret moral, que es su fin de vida.La doctrina estoica se rige por un Logos, por Dios. Dios es el fundamento del bien moral. La virtud es una sola que se manifiesta en prudencia, fortaleza, templanza y justicia. La felicidad acompaa la virtud. La tica estoica ve las pasiones como desordenes del alma que la esclaviza. Mientras que el vivir placenteramente y evitar los sufrimientos es el fin de la vida de los epicurestas. Epicuro mostr que en los placeres hay felicidad. Hay que evitar los miedos y el dolor porque no nos permiten sentir placer. Todo placer es un bien en la medida que concuerde con nuestra naturaleza, pero no todo placer debe desearse. El comer, dormir, descansar y la familia son necesidades naturales, pero el lujo, el poder, la fama y los excesos, no. Esta doctrina podra resultar muy materialista y hasta escandalosa pero a mi parecer le encuentro bastante sentido. Vivir bien pero con lo necesario, hacer todo lo que me proporcione felicidad y evitar el sufrir. En la filosofa escolstica se destaca Santo Toms de Aquino con su pensamiento de la ley eterna como la razn de la divina sabidura que dirige todos los actos. Nada sucede al azar. La creacin sale de Dios y mediante l todo est establecido. El bien y el mal resultan ser la obediencia o desobediencia. Hay que hacer el bien y evitar el mal. Si deseamos bienes es la naturaleza humana quien nos indica cules son esos bienes. La ley moral natural es la expresin de las inclinaciones de todos los hombres. La conciencia es la voz de Dios que testifica la rectitud o maldad del acto. Si todo lo que te mueve a obrar es bueno, el acto final es bueno, pero si algo de los intereses fue malo, automticamente el acto se convierte en malo. Aquino rechaza las riquezas, honores, fama, el poder y el placer. Acepta la felicidad objetiva que es Dios mismo que la produce.El autor sigue la lnea cronolgica hablndonos de la filosofa de Ren Descartes. Lo ms destacable es la moral provisional que ste se cre. A base de unas cuantas mximas, su primera regla fue obedecer las leyes y costumbres de su pas. Esa tica temporera fue un refugio mientras buscaba una base segura y permanente para el saber. Al final concluye, que la voluntad no se determina a seguir o huir de nada, sino en cuanto se entiende como buena o mala. Basta con juzgar lo mejor que se pueda para obrar tambin lo mejor que se pueda. Por otra parte, Baruch de Spinoza desarrolla su tica con la identificacin de Dios con la naturaleza. Todo lo que ocurre es designio de Dios. Es bueno aquel objeto del deseo que sabemos con certeza que es til y malo lo que sabemos que impida que logremos algn bien. La virtud, segn Spinoza, es idntica al uso que el hombre hace de sus propios poderes y el vicio es su fracaso. Para l la esencia de lo malo es la impotencia, es por las cosas que no tenemos poderes. Solamente cuando el hombre entiende lo que hace es guiado por la razn y obra conforme a la virtud. La virtud ms alta es conocer a Dios. De modo que obrar conforme a la razn es conforme a Dios.A partir de Kant la tica deja de tener como centro la felicidad y le da paso al deber. La felicidad es parte de la inclinacin natural del hombre. La ley moral esta como un mandato que obliga a la voluntad. Por ello, l pensaba que esa ley moral en vez de buscar mi felicidad debo renunciar a ella, si el deber lo impone. Pensaba que la ley moral es lo correcto, encierra el bien y est primero que cualquier cosa. Las acciones poseen valor moral si son realizadas por deber y no por inters. Cada hombre gobierna su accin. No obstante, el alemn Nietzsche, resalta que la tica es su inconsciente, su fuerza reprimida. Lo bueno se identifica con las caractersticas que desarrollan la aristocracia, la nobleza. Bueno y noble es lo viril y lo superior. El dominio sobre los dems hombres es la seal de la superioridad moral. Esta postura me parece totalmente descabellada y me recuerda en parte la ideologa de su compatriota Hitler. Ven los de clase alta como los buenos y los plebeyos como los malos. Consider todo lo instintivo, lo animal y lo terreno como inmoral. Trastoc los valores de la moral: el hombre debe superar al hombre. No cree en Dios, slo en el superhombre, que es lo primero y lo nico; no el hombre ni el prjimo.La corriente del utilitarismo sigue la doctrina de los epicurestas, slo con la diferencia de que esta corriente considera los sentimientos sociales como la simpata. Ya que sta ayuda a buscar la felicidad para los dems. La meta final es alcanzar la felicidad al mayor nmero de personas. Esto lo puede entender en el sentido de que una sociedad donde sus ciudadanos se sientan plenos y felices, permite que sea una sociedad mejor. Es menester que en esta obra se hablara de nuestro gran Eugenio Mara de Hostos, que nos dej en su Tratado Moral todo su espritu sabio. Para l no haba nada ms importante que la moral, que provoca la prctica del bien. La vida moral es cumplir con nuestra naturaleza y si no cumplimos somos inmorales. Al igual que Kant, piensa que somos libres y responsables de la forma en que actuamos. El hombre debe conservar la naturaleza, protegerla y progresar. El deber por excelencia es educarse y cumplir con el deber con la humanidad, la familia y la nacin.Por ltimo, el existencialismo de Sartre, parte de un fundamento la existencia precede a la esencia y es as su tica. Dios no existe y el hombre empieza por existir y no hay nada antes. El hombre es responsable de todo lo que hace. La conciencia es tu juez que vigila todo y la manera de apuntar a nuestros juicios y la conducta moral que les siguen son las excusas que nos damos para justificarnos.

Bibliografa

Rodrguez, A. Ethica Nova. San Juan, Publicaciones Puertorriqueas, 1999.