LAS CONSECUENCIAS DEL AMOR

Un cristianoSin preocupación intensa del amor,

Es como un agricultorDespreocupado de la tierra,

Un marinero desinteresado del mar,Un músico que no cuida de la armonía.

¡Si el cristianismo es la religión del amor!Como decía un poeta:

si hasta en su fondo mejorla religión es amor

que trasciende a lo divino

Cristo se ha hecho nuestro prójimo,o mejor, nuestro prójimo es Cristo

que se presenta en nosotrosbajo tal o cual forma,

paciente de los enfermos,necesitados en los menesterosos,

prisionero en los encarcelados,triste en los que lloran.

Si no lo vemos es porque nuestra fe es tibia.Pero separar el prójimo de Cristo

es separar la luz de la luz.El que ama a Cristo

está obligado a amar al prójimocon todo su corazón,con toda su mente,

con todas sus fuerzas.En cristo todos somos uno,

En el ya no debe haberni pobres ni ricos,

ni judíos ni gentiles.

Que se acaben en la familia cristianalos odios, prejuicios y luchas,

y que suceda un inmenso amorfundado en la gran virtud de la justicia,

de la justicia primero,de la justicia enseguida,luego aún de la justicia,

y superadas las asperezas del derechopor una inmensa efusión de caridad.

ORACIÓN CON PADRE HURTADO

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El día 15 de Agosto, Festividad de la Asunción de la Virgen, desde 1996, la Vicaría de la Esperanza Joven convoca a los jóvenes a nivel arquidiocesano a vivir una experiencia solidaria en diferentes lugares, que sintetiza las experiencias solidarias que viven en lo cotidiano los jóvenes a lo largo del año. A partir del 2000 convoca a organizar grupos a través de la zona o decanato, parroquias, colegios o comunidades- y destinar ese día a una acción en bien de otros, sintonizando con el mes de la solidaridad y el mensaje de Alberto Hurtado. “El espíritu de esta actividad es promover el vivir personalmente experiencias de solidaridad, que son una muy buena escuela y un aprendizaje de vida.” P. Galo Fernández. Cuando se hacía de manera arquidiocesana, muchos jóvenes se reunían desde muy temprano por la mañana en una liturgia de adoración al Santísimo en la Iglesia San Ignacio, para desde allí ser enviados por toda la ciudad a realizar gestos concretos de solidaridad. Se trata de una actividad solidaria general, pero que se realiza en el ámbito local multiplicado por el número de grupos de jóvenes que concurren.

Ese día el joven de 24 años, Alberto Hurtado, luego de una formación de dos años como novicio de los jesuitas, pronuncia sus votos perpetuos en 1925. La Caminata se realiza el primer sábado posterior al aniversario de la muerte de San Alberto Hurtado, en que los jóvenes de la arquidiócesis se reúnen junto al puente Mapocho, lugar dónde el P. Hurtado desarrolló una gran actividad solidaria, para desde ahí, testimoniar su experiencia solidaria y su voluntad de decir sí al Padre de la Misericordia, peregrinando hasta su tumba en el Santuario en General Velásquez.

Al coincidir litúrgicamente con la festividad de la asunción de la Virgen María, los textos de la Biblia que se comparten ese día son:

Primera lectura: Lectura del libro del Apocalipsis (11,19a;12,1.3-6a.10ab)Salmo: Sal 44,10bc.11-12ab.16Segunda lectura: Lectura de la primera carta del apóstol san Pablo a los Corintios (15,20-27a)Evangelio: Lectura del Santo Evangelio según san Lucas (1,39-56)

Este año el lema de nuestra Caminata es “Jesús con-fía en ti” y desde los gestos solidarios cotidianos per-sonales, comunitarios, queremos ayudar a recons-truir la confianza en Jesús y su Iglesia desde nuestro testimonio, que está llamado a ser más coherente y consecuente cada vez.

¿QUÉ ESEL DÍA DEL JOVENSOLIDARIO?

SIGNO DE TU ACCIÓN SOLIDARIAPara la caminata del Padre Hurtado te pedimos que lleves una FOTO (puede ser impresa en papel en colores o blanco y negro) de tu comunidad juvenil, del ser-vicio que realizas o realizan juntos, que represente lo que viviste el día del joven solidario en tu comunidad, en tu familia o personalmente y lo ofrezcas en la tum-ba del Padre Hurtado.

Mostrando mi solidaridad hago posible que crezca la confianza en la Iglesia y en Jesús.

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La invitación es: VIVIR EL DIA DEL JOVEN SOLIDARIO con un espíritu renovado, con compromiso personal por Cristo y la Misión… Somos discípulos misioneros llamados a transformar desde dentro las estructuras rígidas de la sociedad y para eso aportan incluso los pequeños gestos de gratuidad y de generosidad que a simple vista pueden parecer insignificantes…

Sigamos gozosos los pasos de San Alberto que siempre luchó por sacar a sus queridos “patroncitos” de la pobreza y de la marginalidad, regalando lo mejor que habita en nuestro corazón. Algunos gestos concretos pueden ser:

ALGUNAS PROPUESTAS CONCRETAS

¡¡¡ESO TAMBIÉN es signo de SOLIDARIDAD!!!

¿Y EN TU COMUNIDAD, CÓMO VAN A VIVIR ESTE DÍA DEL JOVEN SOLIDARIO?

1. Acoger la vida y la historia del que

trabaja a mi lado

4. Acompañar a quien está enfermo

o en la cárcel

6. Revisar mi comunicación en

familia, con los que amo pero no soy

capaz de mostrarle mi cariño

8. Hacer una oración por el que sufre en el momento de la cena, o en la micro

5. Revisar mi closet y ver qué

tan generoso me muestro con el que

no tiene abrigo

7. DEJAR EL CELULAR PARA

MIRAR A LOS OJOS A LOS

QUE ESTÁN CONTIGO,

CONÉCTATE CON TU FAMILIA

2. Dar un abrazo a

quien se siente solo

3. Regalar una sonrisa a quien está triste

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COMPARTIR COMUNITARIO¿Conoces qué es Misión territorial? ¿Has participado; de qué manera? ¿Sientes que se puede hacer otra cosa; qué propones?

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“Una Nación, más que su tierra, sus cordilleras, sus mares, más que su lengua, o sus tradiciones, es una misión que cumplir. Y Dios ha confiado a Chile esa misión de esfuerzo generoso, su espíritu de empresa y de aventura, ese respeto

del hombre, de su dignidad, encarnado en nuestras leyes e instituciones democráticas.” 1

En este año 2015 en que seguimos en Misión Territorial, toman más sentido que nunca las palabras que nos dirige.

1  Homilía de San Alberto Hurtado TE DEUM de Chillán, 18 de septiembre 1948.

¿QUÉ NOS DICE SAN ALBERTO HURTADO HOY?

TRABAJO COMUNITARIO¿Qué acciones hacemos por nuestro país, barrio, institución de estudio? ¿Cómo nos involucramos para hacerlo un lugar de bien, de paz, de armonía? ¿Nos manifiestamos públicamente, en los lugares donde es-tudiamos, a rostro descubierto? ¿Participamos en los espacios del barrio como plazas, canchas deportivas, clubes?

“Es bueno no hacer el mal, pero es malo no hacer el bien”

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¿Qué falta para que nosotros podamos hacer lo mismo, acoger, considerar, servir a nuestros hermanos?

¿Por qué no somos confiables como cristianos? ¿Se puede esperar que seamos coherentes con los valores del Evangelio en lo cotidiano?

¿Por qué hemos perdido la confianza en la Iglesia? ¿Cómo podemos recuperarla?

JESÚS CONFÍA EN TÍ

TRABAJO PERSONAL

La confianza es la esperanza firme o seguridad en que una persona o grupo será capaz y deseará actuar de manera adecuada en una determinada situación y pensamientos. La confianza se verá más o menos reforzada en función de las acciones.

Dios confía y cree en nosotros, Él nos ama, nos conoce, nos llama, como Iglesia, sabe de nuestras fragilidades y sombras y nos acoge con todo lo que somos.

Queremos profundizar en nuestras fragilidades y omisiones para poder ofrecerlas a Jesús y nos de fortaleza para salir adelante, para construir confianza en Jesús y en nosotros como comunidad que es Iglesia.

Escribo estas respuestas en un post it y lo llevo a la caminata para ofrecerlo en la entrada al santuario, donde viviremos un:Gesto de reconciliación como pueblo de Dios desde nuestra fragilidad.

“La misión de Chile queremos cumplirla, nos sacrificaremos por ella. Nues-tros Padres nos dieron una Patria libre, a nosotros nos toca hacerla grande, bella, humana, fraternal. Si ellos fueron grandes en el campo de batalla, a nosotros nos toca serlo en el esfuerzo constructor. Pero esta misión ha deja-do de cumplirse porque las energías espirituales se han debilitado, porque las virtudes cristianas han decaído, porque la religión de Jesucristo, en que fuera bautizada nuestra Patria y cada uno de nosotros, no es conserva-da, porque la juventud, sumida en placeres, ya no tiene generosidad para abrazar la vida dura del sacerdocio, de la enseñanza y de la acción social. Es necesario, antes que nada, producir un reflotamiento de todas las ener-gías morales de la Nación: devolver a la Nación el sentido de responsabili-dad, de fraternidad, de sacrificio, que se debilitan en la medida en que se debilita su fe en Dios, en Cristo, en el espíritu del Evangelio.” 1

1  Homilía de San Alberto Hurtado TE DEUM de Chillán 18 de septiembre 1948

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