Postulados Esenciales Roberto Garcia

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postulados teatrales

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  • POSTULADOS ESENCIALES PARA UNA COMPOSICIN

    DRAMATRGICA

    DE LA ACCIN Y LA PERFORMANCE

    Por Roberto Garca de Mesa

    El teatro breve no ha sido desconocido a lo largo de la historia, ms bien al

    contrario, ya que ha gozado de una enorme popularidad. Pero al igual que

    ha sucedido con las otras formas de construccin escnica, fue a lo largo del

    siglo XX cuando se realizaron nuevas aportaciones y se encontraron

    diversas maneras de investigar este subgnero. El teatro sinttico futurista

    dise un modelo breve y esencialista, comprimiendo en poco tiempo, en

    pocas palabras y en pocos gestos, innumerables situaciones, sensibilidades,

    ideas, sensaciones, hechos y smbolos. Las veladas dadastas, por su parte,

    aunaron diferentes acciones de vanguardia en un mismo espacio y perodo

    de tiempo. Incluso las nociones establecidas vivieron un dinamismo interno

    que provoc una tendencia hacia lo multirreferencial. Lo cmico estir su

    comicidad y se convirti en algo grotesco y rpidamente en el absurdo, para

    luego tender hacia la crtica de la conciencia humana y, as, a lo trgico. El

    ser humano explor, a travs de la vanguardia, en lo identitario, su propia

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  • subconciencia, desde los extremos que se transforman e intercambian sus

    papeles, entre las brumas de la tecnologa y lo nuevo.

    Las guerras mundiales mutilaron lo ms granado del pensamiento

    europeo. Pero la nueva vanguardia teatral retom el pulso de la escena

    desde el absurdo, desde lo grotesco y, tambin, desde los objetos

    encontrados y el automatismo. Porque la sociedad de consumo, en el fondo,

    tambin se iba definiendo de esta manera, a travs de las mscaras de lo

    til y del estado del bienestar. Pero en la nueva sociedad occidental, los

    jvenes buscaron algunas respuestas, investigaron expresiones diferentes,

    tal vez un resquicio de verdad entre tanta farsa blica, entre tanta

    desolacin pasada. Los ideales germinaron en esta poca, prosiguieron las

    luchas polticas, las revoluciones imaginarias, la necesidad de construir otro

    mundo y que era posible. El Living Theatre, las acciones de Cage y

    Cunningham, de Jodorowsky, del grupo Gutai, del movimiento Fluxus, de

    Beuys, del grupo ZAJ, de los artistas vieneses, etc., le dieron un nuevo color

    al teatro de vanguardia y a la tradicin de lo sinttico.

    Fue en la segunda mitad del siglo XX, tanto en Estados Unidos como

    en Europa, cuando nacen el accionismo y la performance, tal y como se

    conocen hoy. Estas modalidades de las artes escnicas postulan la

    esencialidad y la brevedad. El marco teatral, reducido a su mnima

    expresin (la accin), esquematiza el mundo visible, asla los actos

    habituales, la identidad comn, en unidades esenciales, como si fueran

    quarks que, juntos, crean protones o neutrones, es decir, performances, si

    se admite la comparacin. Puesto que una sucesin de acciones daran

    lugar a una performance, y, a su vez, una serie de performances resultaran

    un happening. De esta manera, este nuevo teatro sinttico adquiere la

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  • forma de una caja china que guarda en su interior una sucesin de modelos

    breves, a cual ms esencial.

    Estas formas nacen de una conciencia potica y no narrativa, de una

    visin simultanesta, donde todo posee un cierto grado de inmediatez,

    donde prima el concepto frente al recorrido. El inicio-desarrollo-final

    aristotlico en gran medida pierde inters y el acto se concentra en el

    concepto que se expone, en el conocimiento esencial que se representa. A

    travs de la accin se potencian el gesto unitario y sus velocidades; a

    travs de la performance se multiplican los conceptos, se diversifican los

    actos y todo adquiere mayor complejidad. Con lo cual, de alguna manera,

    se podra concebir una perspectiva de estudio, aplicable a estos modelos,

    orientada desde la ptica de los conceptos en movimiento, donde los gestos

    o los elementos humanos y objetuales significan algo, ya que constituyen

    una especie de memoria sensible del mundo, e interactan a travs del

    movimiento en escena. De esta forma, desde la accin unitaria, a travs de

    un solo concepto, hasta la accin mltiple, las diversas ideas de la historia

    de la humanidad confluyen en estos elementos y se proyectan al espectador

    que los reconoce como propios. Una dramaturgia de la accin y de la

    performance debe contemplar este planteamiento esencial para lograr un

    modelo comunicativo de buena factura. En cualquier caso, la emisin y la

    remisin tambin conviven en una experiencia de misterio potico que

    ayuda a generar patrones inquietantes, crticos con la sociedad y el mundo

    que la rodea. Esta ltima caracterstica, indispensable y habitual, ayuda a

    identificar este tipo de teatro con un modelo de corte potico.

    El teatro de renovacin, tanto moderno como contemporneo, se fue

    convirtiendo paulatinamente en un acercamiento a la poesa de la tradicin

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  • vanguardista. Este es el concepto que se ha ido imponiendo. Una obra

    perfilada a travs de los impactos, de las emociones, de la libertad,

    expuesta a todas las posibilidades e interpretaciones, pero tambin desde

    una perspectiva integrada, multidisciplinar. Esta idea de poesa escnica

    tambin se desarrolla en la poca contempornea a travs de la accin y la

    performance. En estos modelos, como se ha sealado, se busca la

    esencialidad, un conocimiento trascendente que se expone desde diferentes

    tcnicas y a travs de las diversas formas de concebir el tiempo, el espacio

    y el movimiento.

    El tiempo potico de la vanguardia es el no tiempo, es decir: el

    concepto encuentra su reflejo en su propia negacin. Aunque no es menos

    cierto que esta idea constituye una especie de simulacin. Lo que se

    pretende con ello es propiciar un cuestionamiento de la construccin

    aristotlica del tiempo (inicio-desarrollo-final). De esta manera, tanto en la

    accin como en la performance se suelen aplicar abstracciones del mismo,

    se suele experimentar con l, se pretende demostrar que hay tantos como

    obras, como seres humanos, como representaciones, y que cada gesto

    escnico posee un tiempo especial que se niega a s mismo de una manera

    absoluta. En realidad, estos dos modelos indagan en los conceptos de la

    relatividad de Einstein, frente a la idea newtoniana del tiempo absoluto, que

    tal vez estuviera ms prxima al modelo aristotlico y al de sus

    continuadores.

    La concepcin del espacio en la que orbitan estas dos formas

    escnicas se halla vinculada a lo abstracto, a la interaccin entre los

    elementos que transitan por el vaco, en ocasiones aparentemente

    desconectados entre s. Con frecuencia, esa nocin de vaco responde a una

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  • idea ms oriental que occidental, puesto que los accionistas juegan con el

    espacio como si fuera una materia ms y no una desazn existencial, por

    ello suelen tambin estar muy vinculados a la danza. El espacio concebido,

    entonces, como una de las principales metforas de la vida moderna, es el

    que se suele mostrar en este tipo de representaciones.

    Finalmente, el movimiento aqu definido comprende una nocin

    potica muy profunda donde los conceptos adquieren carcter, toman forma

    cuando se relacionan con otros. De esta manera, el personaje, tal y como

    se concibe en los modelos ms convencionales, se diluye y se convierte en

    una abstraccin de la realidad, en un concepto en movimiento que

    interacta con otros, como se ha sealado. Sin esta idea de presencia

    escnica, aunque el dinamismo de los actores sea interno, sin energa

    humana, sea activa o pasiva, probablemente el espectador se encontrara

    ante una instalacin u otra obra plstica. Con lo cual, la poeticidad se

    hallara en la nocin de movimiento empleada. Con l, los misterios y las

    ideas se muestran y cambian el sentido de las apariencias, se desvelan, se

    recrean nuevas maneras de concebir lo visible. Por esta razn, cuando el

    espectador ve una accin o una performance siempre tendr la sensacin

    de que la idea del mundo es reinventada una y otra vez. Y, probablemente,

    por eso, tal vez, tanto una como otra se puedan identificar con un modelo

    de poesa pura aplicado al teatro, muy prximo a la danza o a las artes

    cinticas que utilizan el cuerpo humano como objeto creativo.

    As que una construccin dramatrgica de la accin y de la

    performance debe integrar estos planteamientos para conseguir un

    resultado ptimo. El cuadro de mandos necesario para lograr un basamento

    dramatrgico, terico-prctico del hecho representativo multidisciplinar, as

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  • como la consiguiente conversin de todo ello en una recepcin crtica,

    honesta y rigurosa, que pueda descifrar las claves utilizadas, queda

    dibujado gracias a la combinacin de los diversos postulados que se han

    expuesto. La transformacin de la idea de personaje por la de concepto

    esencial y una tendencia a la sntesis desde una perspectiva multidisciplinar,

    as como las nociones de tiempo, espacio y movimiento con las

    caractersticas que se han esbozado, adems de la notable vinculacin con

    un modelo abierto, en gran medida libre, de poesa pura escnica y cintica

    creado al efecto, conforman los fundamentos bsicos que suelen contener

    este tipo de formas teatrales. El conflicto artstico en estos modelos surge

    cuando ambos extremos no se respetan, es decir, cuando la dramaturgia no

    se define suficientemente, no se desarrolla, no se experimenta con ella y la

    crtica se niega a concebir la posibilidad de la existencia de nociones slidas

    con las que disear este tipo de representacin. Con lo cual, en la accin y

    en la performance, la dramaturgia debe aplicarse con el mismo rigor que en

    otro tipo de montajes escnicos, pero la crtica especializada tambin debe

    entender estos procesos con la misma voluntad de conocimiento. Tanto al

    responsable de la dramaturgia, como al crtico-espectador les une un mismo

    inters, la bsqueda de dicho conocimiento, ambos saben que deben

    experimentar con sus percepciones para llegar hasta l. Por lo tanto, sin ese

    modelo de entrega mutua, el proceso de la comunicacin, lo que define las

    bases de todo encuentro, no llegar a consumarse.

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    Por Roberto Garca de Mesa