Plan de clase

Colegio: San Antonio de Padua

Grado: 3º “B”

Tiempo: 6 horas cátedra

Área: Lengua

Contenidos: Eje: Lenguaje escrito

Conceptuales: Tipos de textos escritos de tendencia argumentativa personal: La carta. Procedimentales: Estrategias cognitivas de escritura: Planificación del proceso de escritura en función de los parámetros de la situación de escritura. Actitudinales: Aprecio por el lenguaje escrito como fuente de transmisión de valores, modos de pensar y de sentir de una comunidad y como un medio de comunicación universalmente aceptado.

Objetivos:

Comprender y aplicar la estructura de la carta.

Identificar los distintos tipos de cartas.

Actividades:

Actividades de motivación:

La docente leerá a los alumnos una adaptación del cuento:” Las cartas de Quica” de Maite Carranza, al mismo tiempo que pegará las siguientes imágenes del cuento en el pizarrón:

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Cuento. (Anexo)

Para finalizar, la docente presentará un buzón hecho de cartulina que contendrá una carta para cada alumno (con nombre y apellido), dentro de su sobre correspondiente, simulando que la protagonista del cuento los eligió a ellos para enviar sus cartas…La misma, será igual para todos los alumnos y es transcripta a continuación:

Carta. (Anexo)

Luego, algunos alumnos leerán dicha carta en voz alta y la docente hará preguntas tales como:

¿Saben cuándo se escribe una carta y por qué?¿Únicamente se escriben cartas en papel? ¿Conoces otro modo?

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¿Escribieron una alguna vez?¿Qué datos ven en los sobres?¿Alguien escuchó alguna vez que no se pueden abrir cartas que no son para nosotros? ¿Y cómo sabremos cuándo son para nosotros?

Actividades de desarrollo:

Agrupados de a dos chicos, se entregará a cada equipo una carta (anexo) Los distintos equipos recibirán diferentes tipos de cartas. Se pedirá que lean atentamente y que traten de identificar:

De qué modo se nombra al destinatario. Cuáles son los propósitos por los que esa carta fue escrita, es decir, que analicen el

mensaje de la carta. Quién la habrá escrito. Cómo fue escrita: a mano, en computadora, a máquina… Y alguna otra característica particular.

Una vez analizadas las cartas, se hará una puesta en común de lo observado, y entre todos se enumerará e irá escribiendo en el pizarrón:

Elementos imprescindibles de las cartas: fecha, destinatario, mensaje y firma (emisor).

Tipos de cartas o mensajes: carta formal, postales, correo electrónico, cartas de lectores.

Variedad de motivos para escribir cartas: amistad, amor, dar a conocer una opinión, etc.

Soportes y escrituras posibles: en papel, soporte “virtual”, escrita a mano o impresa.

Los alumnos recibirán una fotocopia para pegar en sus cuadernos:

La carta es el medio por el cual podemos comunicarnos en forma escrita con una persona que no está presente. Sea formal o informal, debe cumplir con una estructura

básica:

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El sobre es el portador de la carta: en él se escriben los datos domiciliarios del destinatario: Nombre, dirección y código postal. Y en el reverso se escriben los datos

del remitente para que la carta pueda retornar si no pudo ser entregada.

Actividades de cierre:

Se pide a los alumnos, que en forma individual, redacten una carta a un familiar cercano (puede ser la madre), entendiendo que el motivo de la misma es agradecer a dicha persona por todo lo que le brinda y decirle cuánto la quiere. Se les entregará papel y sobre para tal producción.

Recursos: imágenes, buzón de cartulina, sobres, fotocopias.

Evaluación: permanente y continua a lo largo del proceso.

Responsable: Florencia González ISPI 9026 –I. María Auxiliadora

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Anexo: Cuento:Las cartas de Quica

Quica Cacillo era una niña que desde muy chiquita, cuando no llegaba aún a la mesa, ya quería aprender a leer y escribir como las personas mayores.Cuando iba a jardín y jugaba con dados, ruedas y muñecos, todo el mundo le decía que aún no tenía edad para leer y escribir, y por eso, ella esperaba ilusionada el día de poder ir a la escuela.Un buen día, por fin, Quica llego a casa muy contenta. Le habían enseñado a escribir su nombre. Para celebrarlo, les pidió a sus padres que le compraran lápices y marcadores, y desde ese momento, empezó a escribirlo en letras bien grandotas por todas partes.Pero, como aún no tenía mucho conocimiento, escribía su nombre en cualquier sitio, a tontas y a locas: en las paredes de su cuarto, en las del pasillo y el comedor, en las sillas y hasta en la casa de las tías…Pero un día su padre ya se puso serio y le dijo: -Mira Quica, es estupendo que ya sepas escribir tu nombre, y todos estamos muy contentos; pero mamá y yo estamos empezando a aburrirnos de ver siempre lo mismo… ¡Así que no lo vuelvas a hacer! ¿Entendido?Quica se quedo pensativa, pero comprendió.Cuando al fin tuvo edad de aprender a leer y escribir, ya casi sabía hacerlo. No le costaba nada copiar los garabatos que hacía la maestra en el pizarrón, y siempre pedía aprender más y más…Si la señorita ponía pato, ella ponía pato con ciruelas, y si ponía pimiento, Quica añadía pimiento con cebolla.Claro que cometía errores… y a veces no sabía alguna letra; pero ponía tanto interés, que enseguida fue capaz de escribir cualquier palabra, por muy difícil que le pareciera.Quica hacia práctica de lectura a todas horas. Leía en voz alta los carteles que veía por la calle, leía los buzones de las casas, leía las etiquetas de las latas de sardinas en escabeche, y pronto pudo leer hasta libros. Pero estaba muy preocupada porque nunca escribía, y no sabía cómo arreglárselas para practicar más. Un día la señorita le dió una buena idea. Dijo:-Para saber escribir bien de verdad se debe practicar mucho, y lo mejor es un poco cada día.Una buena idea es escribir cartas y postales a tus tíos y abuelos…así aprenderás bastante.Quica volvió a casa felíz con la idea de su seño, y ni bien llego, dejó la mochila y corrió a preguntarle a su mamá:-¿Puedo escribirle una carta a los tíos?Su mamá se quedo muy sorprendida.-¿A qué tíos?- ¡Pues a mis tíos! Contestó ella.- Pero, Quica, ¿Para qué vas a mandarles una carta si viven en el piso de arriba y los vemos cada día?Pero Quica era muy cabezota y quería hacer lo que le había dicho su señorita.-¡Pues una postal!, ¿Les puedo mandar una postal?Su madre no quiso oir hablar más del asunto y siguió preparando la cena.Quica se quedó muy chinchuda. ¡Vaya mala suerte que sus tíos fueran vecinos! Pues ¿a quién podría escribir…?Y mientras se untaba dulce de mandarina en una tostada se puso a pensar profundamente…-Es una pena, tan decidida que estaba a escribir una carta, y ahora no sé a quién mandársela – pensaba mientras comía-. No se la puedo mandar a ningún niño de la clase porque no saben leer bien; tampoco a mis hermanos y primos porque se reirían de mí.De repente, le brillaron los ojos:- ¡Ya lo tengo! Voy a inventarme unos amigos y así les contaré todo lo que yo quiera…-¡A que Quica tuvo una gran idea…!Pues eso mismito pensó ella.Se fue volando a buscar un lápiz y papel rayado, para que no le salieran las letras torcidas, y también una goma por si acaso.Se encerró en su cuarto, y se puso a pensar…- Mi amigo será… será…Y con mucho cuidado empezó a escribir…y a escribir… y a escribir… y no fue una carta, ni dos ni tres, sino que fueron treinta y tres!... guardó cada una en su sobre, y luego de cenar las echó en el buzón.Claro que estaba muy cansada… pero no le importó porque estaba super feliz.Esa noche dio mil vueltas en su cama, sin poder dormir, imaginando si a sus nuevos amigos les habría gustado la sorpresa…y quizás, algún día, por qué no recibiría una respuesta. FIN

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Carta.

Madrid, 10 de septiembre de 2011

Querido/a amigo/a…………….:

Hola ……………….,soy Quica. Estoy muy contenta de ser tu amiga y espero te guste mi carta.Quería contarte que anoche se me cayó un diente y hoy cenaré croquetas de pollo, que me gustan mucho.¿Hace frío por allí? A mí me gusta mucho ir a la escuela… ¿A vos?Imagino que tienes muchos amigos en tu clase, y deseo que seas muy feliz.

Un beso muy grande. Quica

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