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C.E.I.P. MIGUEL DE UNAMUNO PEÑARANDA DE BRACAMONTE 75º ANIVERSARIO MIGUEL DE UNAMUNO

Presentación unamuno

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C.E.I.P. MIGUEL DE UNAMUNOPEÑARANDA DE BRACAMONTE

75º ANIVERSARIO

MIGUEL DE UNAMUNO

AGRANDA LA PUERTA

Agranda la puerta, padre,porque no puedo pasar.

La hiciste para los niños,yo he crecido a mi pesar.

Si no me agrandas la puerta,achícame, por piedad,

vuélveme a la edad aquellaen que vivir es soñar.

iguel de Unamunonació en Bilbao en 1864, hijo de un comerciante.

M

Estudia en Madrid Filosofía y Letras.Después trabaja en la Universidad de Salamanca como profesor de griego.

Pocos años más tarde será nombrado Rector de esta universidad.

ATARDECER DE ESTÍO EN SALAMANCADel color de la espiga trigueraya madurason las piedras que tu alma revisten,Salamanca,y en las tardes doradas de juniosemejan tus torresdel sol a la puestagigantescas columnas de miesesorgullo del campoque ciñe tu solío.Desde lo alto derrama su sangre,lluvia de oro,sobre ti el regio sol de Castilla,pelícano ardiente,y en tus piedras anidan palomasque arrullan en ellaseternos amoresal acorde de bronces sagradosque lanzan al aireseculares quejasde los siglos.

Fue desterrado por cuestiones políticas a Fuerteventura (Islas Canarias).

¡DIME QUÉ DICES, MAR!

¡Dime qué dices, mar, qué dices, dime! Pero no me lo digas; tus cantares

son, con el coro de tus varios mares, una voz sola que cantando gime.

Ese mero gemido nos redime de la letra fatal, y sus pesares,

bajo el oleaje de nuestros azares, el secreto secreto nos oprime.

La sinrazón de nuestra suerte abona, calla la culpa y danos el castigo;

la vida al que nació no le perdona;

de esta enorme injusticia sé testigo, que así mi canto con tu canto entona,

y no me digas lo que no te digo.

DE VUELTA A CASA

Desde mi cielo a despedirme llegas fino orvallo que lentamente bañas los robledos que visten las montañas de mi tierra, y los maíces de sus vegas.

Compadeciendo mi secura, riegas montes y valles, los de mis entrañas, y con tu bruma el horizonte empañas de mi sino, y así en la fe me anegas.

Madre Vizcaya, voy desde tus brazos verdes, jugosos, a Castilla enjuta, donde fieles me aguardan los abrazos

de costumbre, que el hombre no disfruta de libertad si no es preso en los lazos de amor, compañero de la ruta.

D e allí huyó a Francia. Después de unos años volvió a su tierra.

e nuevo ocupa el cargo de RECTOR en la Universidad de Salamanca

D CASTILLA

Tú me levantas, tierra de Castilla, en la rugosa palma de tu mano,

al cielo que te enciende y te refresca, al cielo, tu amo,

Tierra nervuda, enjuta, despejada, madre de corazones y de brazos,

toma el presente en ti viejos colores del noble antaño.

Con la pradera cóncava del cielo lindan en torno tus desnudos campos, tiene en ti cuna el sol y en ti sepulcro

y en ti santuario.

Es todo cima tu extensión redonda y en ti me siento al cielo levantado, aire de cumbre es el que se respira

aquí, en tus páramos.

¡Ara gigante, tierra castellana, a ese tu aire soltaré mis cantos,

si te son dignos bajarán al mundo desde lo alto!

F alleció en Salamanca, el 31 de diciembre de 1936, sufriendo un arresto domiciliario, por su ideología.

DORMIRSE EN EL OLVIDO DEL RECUERDO...

¡Dormirse en el olvido del recuerdo, en el recuerdo del olvido,

y que en el claustro maternal me pierdo y que en él desnazco perdido!

¡Tú, mi bendito porvenir pasado, mañana eterno en el ayer;

tú, todo lo que fue ya eternizado, mi madre, mi hija, mi mujer!